Está en la página 1de 1

Hola hijo bello!

No soy tu mamá, pero que orgullosa me siento cuando me llamas madre. Sé que lo haces por ese
gran cariño y respeto que me tienes, pero sin duda eres ese hermano que hubiera querido para Isa
quien también te quiere muchísimo. No podemos describir el orgullo que sentimos al ver el ser
humano que eres, el hombre honesto, leal, cariñoso, inteligente, generoso y noble que siempre
has sido y al que le pido a Dios no cambie por mucho que las circunstancias lo pongan a prueba.

Cuando te insistí que cambiaras tu plan “A” por este, que, aunque la exigencia era más alta yo
estaba convencida que lo lograrías con éxito. Recuerda “Estás hecho para grandes cosas” y si algún
día ya no estoy, sé que eres el ejemplo que Isa podrá seguir y el apoyo incondicional que necesita
para enfrentar el mundo, porque ese gran corazón que tienes es de “ORO PURO”.

Te amo muchísimo hijo mío.

Atentamente,

Tu siempre orgullosa tía, madrina y madre que te ama…

También podría gustarte