Está en la página 1de 4

A continuación, se presentará un análisis, comparación y tabulación de los datos

recolectados de la INE y el OIT con el objetivo de conocer la evolución que han presentado los
indicadores principales de la Fuerza Laboral en Venezuela, entre el año 2015 hasta la presente
fecha. Asimismo, permitirá saber la importancia que posee el Trabajo como factor de producción
en la Economía.

El período 2015—2016 se puede clasificar como uno de los más difíciles en cuanto a
economía se refiere. Venezuela, fue un país autosuficiente décadas atrás, a partir de sus recursos
naturales, sin embargo, por errores en la conducción económica y social, falta de planificación y
administración de las principales fuentes de riqueza del país, produjo una crisis económica que
trae consigo una caída en los precios del petróleo y un constante aumento de la inflación. Este
colapso se puede reflejar comúnmente en la calidad de vida de los ciudadanos que integran la
fuerza laboral venezolana, provocando que su salario mínimo sea inservible, afectando su poder
adquisitivo para cubrir sus necesidades y la disminución de ofertas de empleo con un salario que
cubra la cesta básica. Por consiguiente, en este periodo se puede ver múltiples protestas y
demandas por los derechos laborales.

Tomando en cuenta lo facilitado por el Centro de Documentación y Análisis para los


Trabajadores/CENDA (2015), el salario más Bono Alimentación era de 24.852.81 bolívares,
permitiéndole al trabajador adquirir solo un 28% de la canasta alimentaria. Siendo muy poco
dinero para intentar cubrir todas las necesidades alimentarias

Ahora bien, antes de analizar o abarcar los datos recolectados, es necesario conocer los
aspectos conceptuales de los sectores formales e informales. El Sector Formal, son aquellas
empresas que contienen más de 5 trabajadores, encargados de producir bienes y servicios;
usualmente en este grupo, se hallan las personas que son profesionales. Y el Sector Informal es
aquel que contiene menos de 5 personas, como los vendedores ambulantes, empleados
domésticos, entre otros.

La Fuerza Laboral en el periodo 2015—2016, estaba compuesta por aproximadamente 22


millones de personas, que se subdividen en aquellas personas que son Activas y aquellas que son
Inactivas.

Al analizar las tablas y las gráficas presentadas, se puede notar que, para el primer
semestre del 2015 había 14.167.281 activos (64,1%), en las que el 92,6%, estaban ocupadas y el
7,4% restante eran desempleadas, ya sea porque son cesantes o porque están en búsqueda de
trabajo. A finales del 2015, de las aproximadamente 14.136.349 personas activas, un 93,3% se
encontraban trabajando. Ahora, para el primer semestre del 2016 había 14.115.055 individuos
activos, lo que equivale a 62,7%. Dentro de dicho porcentaje un 92,5% estaba ocupado. Y, para el
segundo semestre del 2016, el 92,9% poseía trabajo.

Entonces, a partir de lo resaltado anteriormente se puede afirmar que, existe una


estabilidad laboral en dicho período. No obstante, cabe destacar que, en el 2015 había más
personas ocupadas, con una diferencia del casi 2% con respecto al 2016.

Según INE y OIT, a finales del 2015, el Sector Formal contenía un 58,8% de personas y el
Sector Informal un 41,2%. Cotejando estos datos con los recolectados a finales del 2016, en el cual
el sector formal estaba compuesto por un 61,4% y el sector informal un 38,6%, se puede observar
un aumento mínimo pero considerable de 2,3% en el sector formal.

Comparando la información presentada en los gráficos del periodo inicialmente analizado,


con el grafico del año 2020, se puede notar una disminución en la cantidad de personas activas,
con una baja de casi 2% con respecto a los años 2015 y 2016, presentándose de esta forma un
aumento en las personas inactivas. Asimismo, se generó un incremento importante de
aproximadamente 5%, de personas laborando en el sector informal. Esto se debe a la creciente
inflación, y a la búsqueda de mejores ingresos.

Seguidamente la situación de La Fuerza Laboral venezolana en el año 2017; año en el que


la inflación aumentó y el PIB se redujo. En las tablas se puede apreciar que a final de dicho año la
población activa estaba en 15.600.284. Pese a que la tasa de actividad tuvo un alza de 2,4 puntos
porcentuales entre los dos semestres de este año, la tasa de ocupación presentó un ligero
aumento de 0,3 puntos porcentuales.

AL final del 2017, de las personas ocupadas, 57,3% estaban empleadas en el sector
formal, mientras que 42,7% se dedicaban al comercio informal. Esta última cifra es bastante alta si
la comparamos con las cifras de otros países, y es que esto no es de extrañar. Venezuela tenía y
sigue teniendo una economía inestable, y los venezolanos, tratando de huir de un sueldo
empobrecido por las malas gestiones de unos pocos, han emigrado a la informalidad para
sobrevivir.
La tasa de desocupación en este año presentó una ligera caída de 0,3 puntos porcentuales
al comparar los dos semestres. Lo mismo ocurrió con la tasa de cesantía, que también se vio
disminuida, pasando de 6,1% en el primer semestre a 5,5% en el segundo. Por otro lado, la tasa de
BTPPV tuvo un alza de 0,3 puntos porcentuales, pasando de 1,2% a 1,5% en el transcurso del año.

Así mismo, reflejando la problemática país, la tasa de inactividad disminuyó 2,4 puntos,
teniéndose un total de 32,5% a finales del 2017. Esto podría deberse a diversos factores, entre los
que se incluyen que cientos de estudiantes, incapacitados, amas de casa, etc., se han visto
forzados a dejar sus universidades y el trabajo del hogar para buscar un empleo cuya
remuneración en la mayoría de los casos no alcanza para ni siquiera solventar las necesidades
básicas.

Ahora, recorriendo las cifras de los últimos años respecto a la Fuerza Laboral del país, nos
encontramos con el año 2018; uno en el que la estabilidad estuvo presente. La población activa a
finales de este año fue de 15.974.277, y la inactiva terminó con un total de 7.559.438. La tasa de
actividad se mantuvo estable en 67,9%, mientras que la de ocupación presento un alza de 0,2
puntos porcentuales (93,1% en el primer semestre y 93,3 en el segundo).

En consonancia con el 2017, en el 2018 la tasa de ocupación en el sector formal aumentó a


lo largo del año, estableciéndose al final con 58,4%, y la tasa de ocupación informal sufrió una
pequeña fluctuación hacia abajo, pasando de 42% a 41,6%.

De la misma manera, aunque no tanto como en el 2017, en el 2018 la tasa de desempleo


disminuyó hasta ubicarse en 6,7%. La tasa de cesantía bajo 0,2 puntos porcentuales, y la B.T.P.P.V.
se mantuvo estable en 1,6% a lo largo de todo el 2018. Esto último, según cifras del INE y la OTI,
también ocurrió con la tasa de inactividad, que se sedimentó a lo largo del año en 32,1%.

Es importante resaltar la resistencia del pueblo venezolano. Un país surge cuando se


trabaja y se educa, y estas cifras solo demuestran que los ciudadanos siguen despertando día a día
para ser útiles a la sociedad, a pesar del sistema implantado que nos quiere holgazanes e
ignorantes, empobrecidos y humillados. Unos laboran ya sea en el sector informal o el formal,
otros estudian y trabajan la vez. Las cifras de las Fuerzas Laborales venezolanas, atacadas sin
compasión por el ente que debería proteger sus derechos, son una clara muestra de rebeldía de
un pueblo enmudecido; uno que, siempre manteniendo su dignidad, puja y trabaja, tratando de
mantener a flote una economía decadente.
Cabe destacar la gran importancia que posee el Trabajo para la Economía, debido a que es
un esfuerzo físico e intelectual usado en las actividades productoras para conseguir un salario. Por
lo tanto, el trabajo en Venezuela es indispensable, a pesar de que los salarios que se obtienen a
partir de éste son inservibles, pues no garantiza una mejor calidad de vida al venezolano.

También podría gustarte