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UNIVERSIDAD NACIONAL

AUTÓNOMA DE MÉXICO
FACULTAD DE DERECHO

DERECHO INTERNACIONAL PÚBLICO

“CONTEXTO DEL DERECHO INTERNACIONAL PÚBLICO”

UNIDAD 1

INTEGRANTES:

● Balmaceda Vilchis Aaron David


● López Fuentes Paulett Monserrat
● Mejia Zavala Daniela Alejandra
● Rivas González Rocio Karina
● Salgado Aranzueta Carlos Damian
● Velázquez Chávez Paola Geisel
● Flores Rosete Diego M.
1) Explica la teoría Ptolomeica aplicada al origen del derecho
internacional.- Claudio Tolomeo siglo II d.c. entre 100 - 170 d.c y
su teoría Geocéntrica, inspirad en Hiparco

Claudio Ptolomeo fue un astrónomo, geógrafo,matemático y astrólogo griego nacido


en Egipto en la Antigüedad Clásica. Es conocido por su propuesta del modelo
geocéntrico del universo, conocido como sistema ptolemaico, que repercutió
notoriamente entre los intelectuales cristianos y musulmanes de la Edad Media y
parte del Renacimiento. También se le atribuye haber creado los primeros mapas
con coordenadas de los principales lugares del planeta en términos de latitud y
longitud.

Durante toda su vida vivió y trabajó en Egipto, y se dice que fue uno de los grandes
pensadores que trabajaban en la Biblioteca de Alejandría, rivalizando con históricos
genios como Hiparco de Nicea. Fue gracias a su trabajo en la biblioteca que realizó
enormes hazañas en ámbitos tan importantes como la astronomía o la geografía,
algunas de las cuales son las siguientes:

Construyó una enorme cantidad de relojes de sol.

Creó los primeros horóscopos de la sociedad romana y egipcia, aunque se cree que
ya habían existido versiones más primitivas en sociedades como la sumeria o la
china.

Creó una serie de mapas del mundo con gran exactitud de la parte mediterránea, ya
que se basó en los mapas militares romanos para dibujar estas zonas, siendo
ayudado por lo tanto por la enorme expansión romana. Por otra parte las zonas más
alejadas como podían ser los países asiáticos que negociaban con Roma, y que
nunca habían combatido con ellos, eran inventados, ya que Ptolomeo no tenía
forma de demostrar su forma y superficie.

Recopiló gran parte del conocimiento científico en unos grandes volúmenes,


resumiendo todo lo que se sabía de la astronomía griega, lo cual sirvió durante años
a los científicos de toda Europa.

Era empirista, buscando la información ya existente sobre los temas para crear
grandes modelos basados en la comparación entre todos estos textos.
Realizó numerosos estudios sobre las propiedades que la luz tenía sobre la óptica.

Sus ideas y teorías de geografía y astronomía fueron muy importantes hasta el siglo
XVI, época en la que Copérnico formuló su teoría de que los planetas giraban
alrededor del Sol, incluida la Tierra, idea que hasta ese momento era justo la
contraria. La obra de Ptolomeo está fuertemente influida por Hiparco de Nicea, un
astrónomo griego que vivió varios siglos antes que él.

En el 47 a. C. la biblioteca de Alejandría se incendió, privando al mundo de


preciosos documentos y tratados sobre ciencia y literatura.

Este terrible suceso habría impedido conocer el progreso de la astronomía antigua


de no ser porque, tres siglos después de la muerte de Hiparco, Claudio Tolomeo
compendió y completó los descubrimientos de sus predecesores

Una de las cosas más destacables de la labor de Claudio Ptolomeo era que llevaba
a cabo sus estudios haciendo énfasis en el empirismo. Aplicó este enfoque a todos
sus trabajos, que lo diferenció de otros científicos de la época.

Muchas de las descripciones que hizo Ptolomeo no buscaban ser replicaciones


reales y exactas de los fenómenos que estudiaba, sino que trataba de comprender y
justificar por qué ocurrían a partir de lo que observaba.

Los modelos geocéntricos anteriores a Ptolomeo

La teoría de Ptolomeo también es conocida como teoría geocéntrica, pero antes de


hablar sobre la teoría de Ptolomeo debemos comentar algunos de los modelos
anteriores, los cuales influenciaron en gran medida a un empirista como era
Ptolomeo. Algunos de los primeros modelos geocéntricos son los siguientes.

Teoría presocrática

El modelo geocéntrico comenzó a usarse desde el principio de la filosofía griega


presocrática, es decir, el periodo desde la aparición de Tales de Mileto hasta la
llegada de la filosofía de Socrates. De esta época podemos sacar dos importantes
versiones del modelo geocéntrico, la de Anaximandro que habla de una Tierra en
forma de cilindro con el resto de cuerpos celestes flotando a su alrededor, y otra
versión de los pitagóricos que habla sobre una Tierra que no era el centro del
universo, y que giraba alrededor de una especie de fuego que era imposible de ver.

Teoría de Platón

Platón pensaba que la Tierra era una esfera que se encontraba en el centro de todo
el universo, el resto de planetas y estrellas giraban alrededor de nuestro planeta,
estando situados en distintos círculos celestiales, siendo en orden los siguientes:
Luna, Sol, Venus, Mercurio, Marte, Júpiter, Saturno y las estrellas inmóviles.

Teoría de Aristóteles

Aristóteles era el aprendiz de Platón, y uno de los mayores pensadores de la


historia, y como todo gran filósofo griego también tenia una teoría sobre este tipo de
modelo. Según Aristóteles la Tierra era una esfera en el centro del universo, y el
resto de cuerpos celestes estaban unidos entre sí, por una serie de esferas
transparentes. Su teoría iba muy unida a los 4 elementos clásicos y al éter, siendo
este el elemento del que estaban hechos los cuerpos celestes.

Uno de los principales problemas que tienen las teorías que hemos mencionado
anteriormente es que no daban razones por las que los distintos cuerpos celestes se
podían ver más o menos claros dependiendo de la distancia a la que se
encontraban. Por ello Ptolomeo basándose en las teorías de los pensadores
anteriores creó un nuevo modelo, algo más certero. La importancia de este modelo
fue tal que durante mil años fue aceptado como el modelo cosmológico más
correcto, tanto por lo estudiosos del cielo europeos como musulmanes.

Según la teoría de Ptolomeo, la Tierra era el centro del universo, y a su alrededor


giraban el resto de cuerpos celestes. Los planetas giraban alrededor de una especie
de esferas, las cuales a su vez giran alrededor de nuestro planeta, causando que
todos los cuerpos celestes realizaran una serie de giros perfectos alrededor de la
Tierra. Por lo tanto podemos decir que cada cuerpo celeste giraba alrededor de un
pequeño círculo llamado epiciclo, y este a su vez giraba sobre otro círculo mayor
llamado deferente, el cual estaba centrado en la Tierra.

La gran importancia de esta teoría es debida a que se mantuvo como la principal


durante más de mil años, hasta que el nuevo sistema copernicano demostró ser
mucho más real que el de Ptolomeo.

2) Explica la Guerra de los 30 años (23 de mayo de 1618 al 15


de mayo de 1648) Y los Tratados de Paz de Westfalia de 1648
(Fueron hechos los tratados de Osnabrück y Münster de
1648) y tienen como consecuencia el fin de la Dinastía o de la
casa de los Habsburgo, principalmente en lo que era el
imperio romano germanico y el inicio de la casa de borgoña.

La guerra de los 30 años: es una de las cruzadas de la Edad Moderna en Europa,


un enfrentamiento bélico que se extendió hasta el año 1648, culminando con la paz
de Westfalia.

ANTECEDENTES
En historia no se puede concluir que un hecho ocurrido haya sido motivado por una
única razón. En el caso de la Guerra de los 30 Años existe el extendido consenso
de que la causa fundamental fue (al menos en sus comienzos) la religión.

Cien años antes, a principios del siglo XV, los escándalos económicos y morales,
además de la opulencia de la que hacía gala la Iglesia Católica, motivaron a que un
agustino llamado Martin Lutero clavara literalmente sus 95 estipulaciones para la
reforma de la iglesia en las puertas de la catedral de Witterberg, dando así origen al
protestantismo y al nacimiento de una serie de religiones que si algo tenían en
común era el intento de quitar el protagonismo a la iglesia Católica y por tanto ser
anti-papistas, con esto me refiero a que había enfrentamientos frontalmente a la
religión católica representada en el papa de Roma (que hasta esos momentos y
desde hacía varios siglos había regido los destinos del mundo, no solo en el plano
religioso, sino también político). Los luteranos, calvinistas y anglicanos, y en menor
medida, ortodoxos, planearon sin tapujos su rechazo frontal a las teorías
fundamentales del catolicismo.
En 1545, el papa Paulo III convocó el concilio de Trento, que se prolongó a lo largo
de 18 años, pero sentó las bases para la renovación del cristianismo católico y dio
origen a lo que llamaron la Contrarreforma. Así mismo la religión dejo de ser objeto
de controversia entre personas y estados hasta nuestros días.

Pero siendo un elemento básico el trasfondo religioso, otros aspectos fueron


cultivando un propicio estallido de la contienda. A mediados del siglo XVI, el
emperador Carlos V de Alemania, Carlos I de España y los príncipes alemanes,
alrededor de 360, habían firmado en 1555 la frágil paz de Augsburgo, acuerdo en el
que se establecía que los príncipes podían elegir libremente la religión, luteranismo
o catolicismo, en sus territorios de acuerdo con su consciencia. Era el principio
conocido como “cuius regio eius regio”. Por otro lado, los luteranos que viven en un
estado eclesiástico, bajo el control del obispo, podían continuar siendo luteranos y
mantener el territorio que había tomado la iglesia católica, mientras que los obispos
de la iglesia católica, que se convirtiesen al luteranismo tenían que entregar su
diócesis

Esta situación religiosa ponía a prueba la paz conseguida en Augsburgo en cada


sucesión de un principal eclesiástico: por ejemplo durante las guerras de Aquisgrán
(1593-1598), de Colonia (1600) y de Eestrasburgo (1592-1604) enfrentaron a
católicos y protestantes.
En muchos lugares de Alemania se destruyeron iglesias protestantes y se
impusieron limitaciones a la tan duramente negociada libertad de culto. El resultado
fue la formación de la Unión Evangélica o Liga Protestante, en 1608, que era una
alianza defensiva de los príncipes y ciudades protestantes, dirigida por el elector
palatino, el calvinista Federico V que cuenta con la ayuda de Francia, Inglaterra y
Provincias Unidas.

La respuesta no hizo esperar con la formación de la Santa Liga Alemana (en 1609)
en la que los católicos se unen bajo la iniciativa de Maximiliano de Baviera. Así
siendo el enfrentamiento entre ambas formaciones, inevitable.

A principios del año 1618, Alemania atravesaba por una situación de división
religiosa entre catolicismo, luteranismo y calvinismo, y otra situación de debilidad
política debida a la fragmentación en un conglomerado de pequeños electorados,
ducados, obispos y ciudades libres semiintependientes que si bien eran sometidas
al control del Emperador, al menos de forma teórica, ya que contaban con gran
independencia en sus respectivos gobiernos. El máximo teórico dirigente, quien era
el Sacro Emperador Romano era elegido por siete electores, siendo estos: Bohemia,
Sajonia, Brandeburgo, Palatinado y los arzobispos de Mainz, Trier y Colonia. Siendo
que los numerosos príncipes del Sacro Imperio Romano Germánico estaban
reclamando más poder y libertad al haberse reducido con la autoridad del
Emperador, vieron su alianza con los protestantes como una buena base de apoyo
para plantar cara y reivindicar mayores cuotas de autonomía.
DETONANTE

En Bohemia, la actual Chequia, se disfrutaba de una relativa tolerancia a los


avances del protestantismo cuando Fernando II de Habsburgo, pariente del rey de
España, antiguo alumno de los jesuitas y con firmes convicciones católicas, se
enfrentó a los luteranos checos declarando la intolerancia a otras religiones.

El arzobispo de Praga realizo acciones contra los protestantes, como ordenar el


cierre de dos iglesias e impedir la construcción de otra. Ultrajados por la agresividad
de la jerarquía católica, los protestantes que eran la mayoría dentro de la población
del reino, recurrieron primero ante los funcionarios y en último término ante el
Emperador.
Al no ceder los representantes católicos durante las negociaciones, fueron arrojados
por la ventana del castillo de Hradcany, lo que supuso una tumba afrenta al
emperador a pesar de no resultar muertos al ser amortiguada la caída por árboles y
arbustos.

Este hecho especifico conocido como la “defenestración de Praga”, desencadenó la


contienda. Se depuso a Fernando II como rey de Baviera y se subió al trono en su
lugar a Federico V.

No contentos con ello, formaron un ejército para atacar a Fernando II que fue
repuesto en cargo por sus decisiones. Y en alianza con España se preconcebirá
recuperar Baviera y restaurar el control imperial de toda Alemania, así como arrollar
la reforma protestante y restaurar el catolicismo como única religión posible.

FASE BOHEMIA
Fernando II llamó en su ayuda a los príncipes de la Santa Liga y contó con el apoyo
del Papa y de Felipe III, rey de España y primo suyo, para lanzar sus tropas contra
los sublevados, comandadas por Jean T’Serclaes., conde deTilly. Obtuvo una
aplastante victoria enWiesserberg, cerca de Praga, en la batalla conocida como la
Batalla de la Montaña Blanca.

Siendo el 8 de noviembre de 1620, los protestantes checos se vieron forzado, al


menos de momento, a abrazar el catolicismo por la fuerza. También presentándose
la situación donde Turn, un investigador de revuelta, y otros 27 cabecillas fueran
decapitados.

Aunque la Unión Evangélica se disolvió, Federico y algunos de sus aliados


continuaron con la lucha en Palatinado consiguiendo derrotar al ejercito de Tilly en
Wiesloch, en abril de 1622, pero a partir de entonces sufrieron una serie de
sucesivos desastres.

A pesar de disponer de una victoria completa y aplastante, Fernando II


desaprovecho la ocasión de pacificar el imperio al intentar imponer la sucesión
hereditaria y anular las secularizaciones de bienes eclesiásticos realizados con
anterioridad. Esto provocó la ira de los príncipes alemanes y prolongo el conflicto.

FASE DANESA
Debilitados por las victorias del emperador, los protestantes alemanes, pidieron
ayuda al rey de Dinamarca, Cristian IV, un luterano convencido, que no tenía
motivos religiosos para entrar en la lucha, pero sí otros de orden geopolíticos, como
la supremacía sobre Suecia, el control del Báltico y acabar con el dominio de los
Habsburgo sobre el cuidado danés de Holstein.

Armand.-Jean du Plessis, conocido como Richelieu, cardenal católico y artífice de la


política francesa desde 1624, animo financieramente las aspiraciones del rey de
Dinamarca, que adema contó también con apoyo monetario de las Provincias
Unidad e Inglaterra. Las tropas iban comandadas por el mismo Christian IV, por
Ernst de Mansfeld y Christian de Brunwich.

Fernando II decidió contrarrestar el ataque con la formación de un formidable


ejército imperial, nuevamente bajo el mando de Tilly, para lo que contó con la ayuda
del noble bohemio Albrecht Von Wellestein, duque de Friedland, que reunió unas
decenas de millas de mercenarios y derrotó al ejercito danés en la batalla del puente
de Dessau, mientras que el general Tally hizo lo propio en la batalla de Lutter, en
1626.

Wallestein mantenía el ejército a sus expensas gracias al pillaje y a los continuos


saqueos, aplicando hasta los últimos extremos su teoría: “la guerra se sostiene
gracias a la guerra”.

Christian IV se vio forzado a firmar la paz en Lübeck el 22 de mayo de 1629 con la


devolución de los bienes a la iglesia que se habían incautado de los protestantes y
sirviendo esto como un paso más en la decisión firme de Fernando II de imponer su
autoridad, hacer hereditaria la corona de los Habsburgo e implantar la religión
católica en Alemania y Bohemia.

FASE SUECA
El cardenal Richeliu, primer ministro de Luis XIII de Francia, mantenía sus
sentimientos contrarios al poder de los Habsburgo pero se encontraba ocupado en
asuntos internos con el movimiento hugonote francés.
Aun así seguía en la sombra sin participar directa y activamente en la contienda,
pero con poderosas razones para intervenir en ella al encontrar u territorio en una
pinza geográfica de dinastías de los Habsburgo en España y Alemania.

En 1630, obsesionado por conseguir la hegemonía francesa en Europa, Richelieu


pone en juego la poderosa economía francesa al ofrecer una ingente (muy grande)
cantidad de dinero al Rey Gustavo Adolfo II de Suecia e inducirle a ponerse al lado
de los príncipes alemanes derrotados.

Sin una motivación estrictamente religiosa, pero si con la intención de tomar el


control de las riberas del Báltico por encima de la vecina Dinamarca, entro de lleno
en la contienda obteniendo una serie de importantes victorias sobre las tropas del
emperador, devastando a su paso aldeas y destruyendo iglesias en Alemania. Los
suecos aportaron una serie de innovaciones tácticas como los usos rápidos en
orden abierto, artillería móvil y poco pesada fabricada en cobre, armamento ligero
como las pistolas de tuerca y los mosquetes cortos de carga por cartucho, que les
permitieron obtener la victoria en las batallas de Breienfield en 1631 y Lech en 1632,
donde Tilly es herido de muerte.

A pesar de la victoria protestante en la batalla de Lützen en 1632, Gustavo Adolfo


encuentra la muerte en combate si ver cumplidas plenamente sus aspiraciones. En
1634 Wallenstein es asesinado por orden imperial director, acusado de querer
ofrecer los servicios de sus mercenarios al enemigo francés.

En 1634 tiene lugar la crucial batalla de Nördlinger, donde las tropas imperiales
comandadas por el español Fernando de Austria derrotan a Bernardo de Sajonia, lo
que fuerza la firma del nuevo tratado de paz en Praga, en 1635, que pone fin a esta
tercera fase de la guerra.

FASE FRANCESA
La lucha entre las grandes potencias por la supremacía política en Europa no está
concluida, amen al permanente conflicto entre los españoles y holandeses
(provincias unidas).
Fernando III de Habsburgo quiere pacificar Alemania de una vez por todas y lograr
el consenso definitivo entre los principales y establece contactos con Suecia y
Francia en Münster sin un resultado claro.

La situación favorable obtenida en la casa de Habsburgo tras la paz de Praga


impelió a Richelieu a pasar al enfrentamiento directo, ya sin un trasfondo
propiamente religioso. Luis XIII, monarca católico que había expulsado a los
protestantes de Francia, sigue insuflando dinero a los comandantes protestantes
que forman una confederación con todos los enemigos de los Habsburgo, donde ya
se incorporaron activamente las provincias unidad y algunos príncipes italianos.
Continúan las hostilidades franco-españolas al favorecerse desde Francia
levantamientos de Catalunya y Portugal con el objetivo de distraer y mermar la
capacidad de reacción de España.

En 1636 fueron rechazadas varias invasiones españolas en territorio francés y en


1637 fallece Fernando II de Baviera subiendo al trono como su sucesor Fernando III.

La situación de los Habsburgo en Alemania empeoro nuevamente con la derrota


asestada por el duque Bernardo en Rheinfelden, el 2 de marzo de 1638.

Francia conquista Alsaca, Brisach es tomada en 1639 y Suecia vence en Alemania


a imperiales y barvaros.

Al iniciarse la década de los 1640 el número de muertos y la devastación causada


por la guerra alcanza cotas insostenibles. En Francia muere Richelieu en 1642 y es
reemplazado por Mazarino, quien es otro cardenal, como regente de un joven Luis
XIV, que continua con la misma política de su antecesor, intensificada aun más.

Entre 1642 y 1645 el general sueco Lennart Torstensson logro diversas victorias
invadiendo Dinamarca, que se había aliado con el imperio, y asolando gran parte de
Austria y el oeste de Alemania. Si bien al principio sufrieron algunas amargas
derrotas, las tropas francesas al mande de Conde obtuvo una victoria aplastante
sobre los tercios españoles en la batalla de Rocroi, en 1643.

Los francese sufrieron una gran derrota en Tuttlingen, Alemania, pero fue la última
victoria de los Habsburgo en la guerra. Los ejércitos combinados de Conde y Turena
vapulearon a un ejército bárbaro en Friburgo de Brigosvia, Alemania, en agosto de
1644 y el 3 de agosto de 1645 hicieron lo propio con un ejército formado por
austriacos y barbaros en la batalla de Nördlingen,

En los años siguientes se sucedieron las victorias francesas y suecas sobre el


ejército imperial, causando su hundimiento, a pesar de lo cual Fernando III se
resistía a claudicar hasta que fue definitivamente derrotado en la batalla de Lens en
1948, no encontrando otra salida que capitular y negociar su rendición.

FIN DE LA GUERRA
Reunidos todos los contendientes en Westfalia, menos España, llegaron a un
acuerdo para sellar la paz. En realidad, se firmaron dos tratados en 1648: el 15 de
mayo en Osnabruck y el del 24 de octubre en Munster, que supuso el fin de la
guerra, una solución importante y duradera al problema de religiones y la
consecuencia de la idea de un equilibrio internacional. Los estados alemanes
habían triunfado contra el intento absolutista y centralizador del emperador, aunque,
se consagro una Alemania parcelada y desunida, con una atomización
absolutamente inoperante.

Por los acuerdos firmados, los ciudadanos de las respectivas naciones debían
atenerse a las leyes y designios de sus respectivos gobiernos en lugar de a las
leyes y designios de los poderes vecinos, ya fuesen religiosos o seculares. Esta
certidumbre contrastaba mucho con los tiempos precedentes, en los que el
solapamiento de lealtades políticas y religiosas era un acontecimiento común. Y con
ello se establece la secularización política.

TRATADOS
TRATADOS INCLUÍDOS EN LA PAZ DE WESTFALIA
TRATADO DE OSNABRUCK: ✓ Firmado el 15 de mayo de 1648. ✓ Puso fin a la
guerra de los Treinta años en Alemania y la Guerra de los Ochenta años entre
España y los países bajos.
TRATADO DE MUNSTER: ✓Fue un tratado firmado entre las Provincias Unidas y
España en 1648. ✓Se reconoce la independencia de Holanda.

CONSECUENCIAS
La guerra de los 30 años supuso una profunda reestructuración política y territorial
de Europa. En el terreno religioso marca el fin de las contiendas por esta causa
hasta nuestros días, la religión ´pasa de ser un asunto privado, alejado de la moral y
sobre todo de la política. El papado resulto grandemente perjudicado, perdiendo su
poder de intromisión en los asuntos políticos de los gobiernos.

En los aspectos sociales, la guerra produjo una devastación de territorios enteros


que fueron esquilmados y reducidos a cenizas por los ejércitos necesitados de
suministros, utilizando una brutalidad sin precedentes con la sociedad civil. Los
continuos episodios de hambrinas y enfermedades, como la peste, diezmaron a la
población, perdiéndose muchísimas vidas humanas de forma que, como en el caso
de Alemania, su población quedo reducida a la tercera parte.

Los que lograron sobrevivir quedaron marcados con una huella indeleble. En el
terreno económico, todas las potencias implicadas llegaron a la bancarrota en
mayor o menor medida tras el enorme esfuerzo de sus economías en costear los
ejércitos, no olvidemos que compuestos por mercenarios aumentaba el coste, y sus
necesidades.

En lo que pudiera dominarse Derecho Internacional, el acuerdo supuso profundas


modificaciones en sus bases, con cambios importantes tendentes a lograr un
equilibro europeo que impidiera a unos estados imponerse a otros por la fuerza. Se
aceptaba el principio de soberanía territorial, el principio de no injerencia en asuntos
internos y el trato de igualdad entre los Estados independientemente de su tamaño
territorial o fuerza.
El tratado debilito gravemente el sacro imperio y a los Habsburgo y retraso la
unificación política de los estados alemanes, que continuaron su fragmentación y
falta de unidad. La actividad económica decayó en todos los estados alemanes, la
incertidumbre, el miedo, el caos y la brutalidad marcaron su vida diaria y
permanecieron en la memoria colectiva de la misma Alemania durante siglos.

Los príncipes alemanes crecieron en autonomía y poder acabando con los sueños
imperiales de Fernando III y de los Habsburgo de Alemania.

Las aspiraciones hegemónicas del emperador quedaron abortadas y con ellas la


preponderancia española en Europa, cediendo la hegemonía a Francia, verdadera y
real ganadora en esta confrontación, que vio coronada su participación con diversos
territorios y la consolidación de sus aspiraciones de romper el cerco de los
Habsburgo, amén de convertirse en el árbitro de las políticas europeas.

Suiza y las provincias unidas, además de países bajos, obtuvieron su independencia


y Suecia a su vez obtuvo reconocimiento internacional y algunos territorios de igual
manera.

A pesar del tratado España y Francia continuaron con conflictos, al principio tropas
españolas invadieron Francia y obtuvieron algunas victorias, pero los franceses, con
ayuda inglesa, lograron rechazar la invasión derrotando definitivamente al ejército
español en 1658.

Finalmente, el 7 de noviembre de 1659, once años después de acabada


oficialmente la guerra de los 30 años, se firma la paz de los pirineos, en la que
España cedió a Francia el Rosellon, la Cerdaña, Artois y algunas plazas flamencas,
además de aceptar la presencia francesa en Alsacia. Con todo ello queda
establecido un cierto orden que perdurara durante años, hasta las conocidas
guerras napoleónicas del siglo XIX.

3) Explica la Teoría Copernicana aplicada al origen del


Derecho Internacional. -Niclas Copernico y su teoría
Heliocéntrica (1473 - 1583*inspirado en Aristarco de Samos y
en Arquimides y su Teoría Heliocéntrica.

En los siglos XVI y XVII, vemos una revolución científica que buscaba responder las
preguntas del universo. Hablamos de una época donde se ve la influencia del
aprendizaje y descubrimiento de nuevos modelos, que se creaban para explicar el
funcionamiento de un planeta con respecto al universo completo.

Gracias a la física, matemática, biología, química y astronomía, entre otras ciencias,


podemos conocer tanto acerca del universo. Vamos a hacer referencia a la
astronomía y a un científico destacado, el cual es Nicolas Copérnico, quien es
creador de la teoría heliocéntrica. Esta la hace con base en observaciones en curso
de los movimientos de los planetas.

Nicolas Copérnico es uno de los fundadores de la astronomía moderna, su obra


maestra se denomina “De Revoluntionibus Orbium Caelestium” que es dedicada al
papa Pablo III. Copérnico se adhiere y populariza la teoría heliocéntrica, donde el
sol ocupa el centro del universo, el centro del sistema solar, y donde alrededor giran
todos los planetas, incluida la tierra.

En esta teoría “la tierra se traslada alrededor del sol en el plano de la elíptica al
mismo tiempo que cada día daba una vuelta alrededor de su eje, dirigido este,
continuamente hacia los polos de la esfera celeste.

Copérnico elabora un modelo que explica el funcionamiento del universo. Propone


que el movimiento de los planetas y estrellas seguía un recorrido a modo de patrón
sobre una estrella mayor fija. El sol. Mientras que el modelo geocéntrico se basa en
que la tierra es el centro del universo y que se rodea por el sol y todos los planetas.
La teoría heliocéntrica sostiene que la tierra y los demás planetas giran alrededor
del sol. Se tiene conocimiento de que Aristarco propone que la tierra giraba
alrededor del sol y no al revés.

La teoría heliocéntrica se basa en algunos principios para explicar todo el


funcionamiento. Esos principios son:

1. Los cuerpos celestes no giran en torno a un solo punto.

2. El centro de la Tierra es el centro de la esfera lunar (la órbita de la luna


alrededor de la Tierra)

3. Todas las esferas giran alrededor del Sol, el cual está cerca del centro
del universo.

4. La distancia entre la Tierra y el Sol es una fracción insignificante de la


distancia de la Tierra y el Sol a las estrellas, por lo que no se observa
paralaje en las estrellas.

5. Las estrellas son inamovibles, su movimiento diario aparente es


causado por la rotación diaria de la Tierra.
6. La Tierra se mueve en una esfera alrededor del Sol, causando la
aparente migración anual del Sol. La Tierra tiene más de un movimiento.

7. El movimiento orbital de la Tierra alrededor del Sol causa el aparente


retroceso en la dirección de los movimientos de los planetas.

La diferencia entre heliocentrismo y geocentrismo radica en que si bien, estas son


dos teorías que explican la situación de la Tierra con respecto al universo, pero de
forma totalmente opuestas. El geocentrismo, es la más antigua de todas y está
vinculada con la religión, y afirma que la tierra es un planeta inmóvil situado en el
centro del universo y que el sol, y el resto de los planetas, giran a su alrededor. El
heliocentrismo se desarrolla a partir del siglo XVI, con Copérnico, si bien es cierto
que ya Aristarco, que muere hacia el año 230 a.C, ya afirmaba que la tierra, igual
que los demás planetas, se movía alrededor del sol.

Se es negada la existencia del derecho internacional público en la antigüedad,


debido a que el Estado tal como lo conocemos actualmente no se encuentra
presente en ese momento, pues es resultado del renacimiento, por lo tanto, al no
existir en la antigüedad el Estado, se dice que no podemos hablar de la existencia
del derecho internacional público.

Con el propósito de dar elementos suficientes para no aceptar el argumento de que


el D.I es producto del Estado moderno por ser una concepción ideológica limitada,
observamos la teoría geocéntrica de Ptolomeo y la teoría heliocéntrica de
Copérnico, etc.

El enfoque tolomeico da por hecho que el Estado tal y como es conocido en la


actualidad es el termino definitivo de la evolución del grupo social, esta posición
desconoce (Cristian Lous Lange) que el Estado no es mas que una de las formas
bajo las cuales se revela el instinto social del hombre.

Siguiendo al profesor Antonio Truyol y Serra encontramos que con el sistema de


Estados modernos surge no el derecho internacional público, sino una de sus
formas históricas, menciona una forma específicamente moderna.

Quedamos ante el enfoque Copérnico del derecho internacional, analizamos la


historia del derecho internacional desde la más remota antigüedad. Se deben
examinar las circunstancias de su desarrollo dentro de la etapa histórica para tener
una visión integral del mismo. El profesor Truyol señala que no debemos ver sólo la
perspectiva europea, sino situar el derecho internacional europeo en una
perspectiva universal.

4)Explica la batalla de Kadesh (Qadesh) de 1296 a.c y el


Tratado de Paz y fraternidad entre egipcios e Hititas (del año
21 del reinado de ramsés II) Este Tratado fue celebrado entre
Ramses II de Egipto y Hattusili III Rey de los Hititas y fue de
1272 o 1284 a.c (no se sabe bien)

La batalla de Qadesh tuvo lugar entre las fuerzas del Imperio Nuevo de Egipto,
gobernado por Ramsés II, y el Imperio hitita, gobernado por Hattusili III, en la ciudad
de Qadesh, sur de la moderna Siria

La batalla está datada generalmente hacia el año 1274 a. C. por la cronología


egipcia

Es la primera batalla de la que se conservan registros históricos detallados de las


formaciones y de las tácticas. incluso Se cree que fue la mayor batalla de carros
jamás librada, habiendo participado entre 5000 y 6000 carros.

¿Quiénes fueron los hititas que lucharon en la batalla de Qadesh?

Mucho podemos conocer al imperio egipcio gracias a sus papiros, ciudades


antiguas, las pirámides y sus grandes templos. Pero, por otro lado, la civilización
hitita quedó en el olvido luego de su confrontación con los Asirios por el año 1200
a.c.

Los Hititas se establecieron en la región de Anatolia, en lo que hoy se conoce como


la actual Turquía.

Alrededor del siglo 18 a. C., fundaron un reino con capital en Hattusa, que, con el
tiempo, llegó a convertirse en una de las grandes potencias de Oriente Próximo,
junto a Babilonia, Mitani, Egipto y Asiria.

Este eran el pueblo de Asia Menor que habitó la tierra de Hatti en la meseta central
de Anatolia, hablaban una lengua indoeuropea. Invadieron o se originaron en la
región, que comenzó a ser conocida como Hatti, hacia el año 1900 a.C. e
impusieron su idioma, cultura y dominio sobre los habitantes originales

Contexto historico

Durante mucho tiempo hubo una fuerte tensión entre ambos imperios en sus
fronteras.

Estas relaciones tensas pero sin conflictos se terminaron 50 años antes de la batalla
de Qadesh, ya que los hititas atacaron varias ciudades pertenecientes a Egipto en
las zonas cercanas a Siria, lo que provocaría que en año 1.274 a.C. se desarrollara
la batalla de Kadesh

Fue el último gran acontecimiento militar de la Edad del Bronce.


La Edad del Bronce es el período de la historia en el que se desarrolló la metalurgia
de este metal, resultado de la aleación de cobre con estaño que transcurrió entre el
año 3000 a.C. y el año 1200 a.C.

Los hititas atacaron primero y estuvieron a punto de derrotar a los egipcios, aunque
gracias al mando de Ramsés II los egipcios lograron contrarrestar el ataque y la
batalla acabó en un empate. Tras esto, Ramsés II y Hattusili III firmaron el primer
tratado de paz de la historia

Ramsés II (El Grande, 1279-1213 a.C.) gobernó Egipto durante 67 años. Hasta la
fecha, el panorama egipcio todavía mantiene testimonios de la prosperidad de su
reinado en los templos y monumentos que construyó en honor a sus conquistas y
logros. No hay ningún sitio antiguo en Egipto que no mencione el nombre de
Ramsés II y su relato legendario de la Batalla de Kadesh de 1274 a.C. Sin embargo,
entre sus mejores hazañas como faraón no se encuentra un acto de guerra sino de
paz: la firma del primer tratado de paz de la historia.

enfrentamiento.

El faraón Ramsés II salió de su capital, Pi Ramsés, rumbo a la ciudad de Kadesh,


acompañado de cuatro divisiones que poseían nombres de dioses egipcios: Amón,
Ra, Ptha y Seth, siendo liderados por el propio Ramsés II, que estaba al frente de la
división Amón.

Durante un mes estuvieron marchando hasta llegar a la ciudad de Kadesh, donde se


produciría la batalla entre ambos imperios.

Por otro lado El rey de los hititas había estado realizando incursiones regulares en
territorio egipcio durante algún tiempo y, después de haber fortificado Kadesh, se
había convertido más en una amenaza que en una molestia para Ramsés II.

Una vez iniciada la marcha por el faraón a la ciudad de Kadesh, mientras se


encontraba en su campamento esperando sus otras divisiones, los hititas atacaron a
los egipcios con sus carros de guerra, lo que produce casi una derrota a las fuerzas
de Ramsés II.

Motivo

Sin embargo, gracias a su liderazgo, logró que sus hombres dispersaran a los
hititas, además del apoyo oportuno por parte de las tropas de ramses que llegaría
ayudar en el momento oportuno

El motivo de este enfrentamiento fue por La región conocida hoy como Siria, era un
lugar muy importante para ambos reinos si querían consolidar lo que era su poder.
En esta región pasaban las caravanas comerciales más importantes y sus grandes
e importantes recursos le hacían un territorio deseado por ambas potencias.
Tal fue la importancia de esta región que antes de Ramsés II, el faraón Seti I unos
años antes, ya había incursionado militarmente en estas tierras, e incluso había
estado en la ciudad de Qadesh

La fuerza de ambos bandos produciría un empate entre ambos ejércitos, sin


embargo, a pesar de que Kadesh podía haber quedado en poder de Egipto, también
era cierto que el faraón no podía resguardarla, lo que produciría que los hititas la
tomaran de nuevo.

La Batalla de Kadesh, hoy considerada como un empate por los dos bandos, fue el
principio del fin de las hostilidades entre las dos naciones en las que,
eventualmente, los dos reyes llegaron a darse cuenta de que ninguno podía sacar
una ventaja sustancial del otro y que el mejor camino a elegir era el camino de la
paz. Luego de esto los hititas y los egipcios entablaron una nueva relación entre
ellos en la que compartieron sus conocimientos y experiencias, en lugar de
intercambiar golpes en el campo de batalla.

Si bien existe un tratado anterior conocido como Tratado de Mesilim, entre las
ciudades mesopotámicas de Umma y Lagash, fechado en 2550 a.C., se rechaza a
este como un verdadero tratado de paz y lo define como un Tratado de Delimitación
(es decir, un tratado que establece fronteras y límites). Además, como el Tratado de
Mesilim es en realidad un acuerdo escrito entre los dioses de Umma y Lagash y no
entre los gobernantes de la ciudad o los representantes de esos gobernantes, no
puede considerarse como un tratado de paz real. El Tratado de Kadesh de 1258
a.C., entonces, tiene la distinción de ser el primer tratado de paz del mundo.

Tratado de paz

El documento que formalizó la tregua entre Egipto y el Imperio hitita, conocido como
Tratado de Qadesh, es el primer texto de la historia que documenta un tratado de
paz.

Los hititas eran expertos en metalurgia y enseñaron a los egipcios a cómo fabricar
armas y herramientas superiores, mientras que los egipcios, maestros de la
agricultura, compartieron sus conocimientos con los hititas. Las dos naciones
continuarían una relación de beneficio mutuo hasta la caída del Imperio Hitita en
1200 a.C. a través de los ataques combinados de los Pueblos del Mar, los Asirios y
la tribu conocida como Kaska. Sin embargo, la relación pacífica y productiva entre
las dos naciones permitió a ambos mejorar la vida de sus pueblos y las economías
de las naciones en lugar de desperdiciar sus recursos en la guerra.
5) Explica la distinción entre el ius gentium romano como lo
define el jurista Gayo en las institutas o en las instituciones y
el ius gentium moderno como sinónimo del DIP y los
precursores del DIP y los creadores del DIP (se encuentra en
el libro de Sara vazquez)

HISTORIA:
El origen del derecho de gentes se produce en el siglo III a. C. por dos
circunstancias: la internacionalización de Roma por la expansión política y
económica y, la creación de la estructura unipersonal de la pretura

El ius gentium rellenó el vacío jurídico existente frente a los extranjeros


(llamados peregrinos), ya que los tratados con las ciudades extranjeras no otorgaba
una protección a las mismas, de este modo, los extranjeros no eran regulados por el
ius civile (derecho civil). El praetor peregrino fue el encargado jurídico de los
extranjeros cuando el flujo de éstos se hizo más asiduo y de los tratados con los
mismos

Se añadieron los conceptos que el ius gentium puede ser ius civile, pero no
todo derecho civil será derecho de gentes. Gayo distinguirá del derecho de gentes
como ius commune (derecho común) de todos los pueblos, contrapuesto al ius civile
exclusivo de los ciudadanos romanos.6​

En épocas postclásicas, el ius gentium se referirá al derecho público (ius


publicum), sobre todo en los casos de guerras las cuales eran la causa principal de
la esclavitud en esos momentos. Así, adquirirá la forma de "derecho de la guerra y
de la paz" que a partir del siglo XIX comenzará a denominarse "Derecho
Internacional Público".

A lo largo de los siglos se ha desviado el significado del ius gentium como


originalmente se concibió. Entre los clásicos podemos encontrar que Justiniano en
sus «Institutas» lo concebía como dentro del derecho privado, junto al derecho civil y
al derecho natural; Cicerón lo denominó quasi-civile ius y, al igual que Gayo (que
hablaremos de él más adelante) lo equipararía con el ius naturale
Por su parte, Ulpiano en las «Institutas» distinguiría entre los derechos de los
hombres y los derechos de los animales, dando la diferenciación entre el ius gentium
y el natural. Santo Tomás de Aquino en «Suma Teológica» distinguirá entre el
derecho de los seres animados, del hombre, del género humano, los derechos entre
naciones y como el derecho de gentes.

ius gentium como lo define Gayo en las institutas


Para Gayo el jus gentium,era (traduciendo literalmente) «el que la razón natural
estableció entre todos los hombres»
El ius gentium que definió Gayo, decía, si el derecho de gentes es aquel
orden jurídico constituido por la común razón humana, su estudio implica,
sencillamente, la corona de toa formación jurídica que se atreva a retar al siempre
contingente dogmatismo del primer positivismo jurídico.

Gayo se refiere a un derecho común a los hombres y que Vitoria convierte en


“lo que la razón natural estableció entre todas las gentes” es decir, los pueblos o las
naciones.

En un sentido amplio, el derecho de gentes trata de reglas básicas para el


entendimiento aplicables a todas las colonias y provincias romanas, designando la
parte del derecho público referida a las relaciones de Roma con estas (los tratados
de paz o de alianza y las normas de la guerra), es decir, el equivalente al "derecho
internacional", aunque no se puede hablar propiamente de tal, toda vez que en
Roma no se había acuñado el concepto de nación.

Aunque en algunos aspectos el derecho de gentes pueda coincidir con el


derecho natural, se trata de dos conceptos diferentes, ya que instituciones del
derecho de gentes, aceptadas en la antigüedad y algunas otras épocas históricas,
como la esclavitud, no se compadecen con el derecho natural, el cual a su vez
reconoce derechos a la persona humana que el derecho de gentes no contempla.

A partir de Grocio se entiende por derecho de gentes la norma no escrita


que regula las relaciones entre los Estados o las relaciones entre los ciudadanos de
diferentes Estados, o sea, el derecho natural internacional.

MODERNO:
Ius gentium o jus gentium, el derecho de gentes, en un sentido restringido
comprende las instituciones del derecho romano de las que pueden participar los
extranjeros (peregrini) que tenían tratos con Roma y sus ciudadanos (cives), por lo
que supone una complementación del ius civile, para aplicarlo con individuos que no
ostentan la ciudadanía romana. En sentido propiamente moderno, el ius gentium es
sobre todo una elaboración de la Escuela de Salamanca.

El desarrollo moderno del "derecho de gentes" es principalmente creación


española: tras el precedente de Isidoro de Sevilla, arranca sobre todo de Alonso de
Madrigal y culmina en Francisco de Vitoria, corriente de pensamiento que afrontó
con genialidad el curso inicial de la problemática moral, política y económica de los
tiempos de la primera globalización, suscitada por el descubrimiento del Nuevo
Mundo.
Derecho de gentes. Era la denominación que daba el derecho romano a
aquella parte del derecho público aplicable a sus relaciones con otros pueblos, y que
ha terminado aplicándose en el mundo jurídico como sinónimo de derecho
internacional, aunque los romanos nunca usaron el concepto de estado ni de nación.
En sentido estricto, el ius gentium era aquella parte del derecho romano aplicable a
quienes no eran ciudadanos romanos.

¿Cuál es, entonces, la verdadera diferencia que surge entre el Jus Gentimn
primitivo y el derecho internacional contemporáneo? Es una simple diferencia de
interpretación y de forma, creada forzosamente por la evaluación y la consolidación
de las nacionalidades.

Si examinamos esas definiciones, se observa que se distancian externamente


en un término: en el predominio o suplantación del Estado sobre el individuo.
Antiguamente eran leyes y disposiciones orientadas a proporcionar ciertos
beneficios y definir la situación del individuo por excelencia. y ratos eran los
convenios entre potencias, a no ser las estipulaciones de guerra en que interviene el
Jus Feciale, hoy, el mismo concepto ha evolucionado dejando de lado al individuo en
su especificación para considerar directamente los intereses de los estados.

PRECURSORES

San Agustín (354-420 d.C)

(Tagaste, 13 de noviembre del 354-Hipona, 28 de agosto del 430),2​fue un escritor,


teólogo y filósofo cristiano. Después de su conversión, fue obispo de Hipona, al norte
de África y dirigió una serie de luchas contra las herejías de los maniqueos, los
donatistas y el pelagianismo.

Es considerado el «Doctor de la Gracia», fue el máximo pensador del


cristianismo del primer milenio y, según Antonio Livi, uno de los más grandes genios
de la humanidad.3​ Autor prolífico,4​ dedicó gran parte de su vida a escribir sobre
filosofía y teología, siendo Confesiones y La ciudad de Dios sus obras más
destacadas

A los 19 años, la lectura de Hortensius de Cicerón despertó en la mente de


Agustín el espíritu de especulación y así se dedicó de lleno al estudio de la filosofía,
ciencia en la que sobresalió.

Dedico y escribió incansablemente, polemizó con aquellos que iban en contra


de la ortodoxia de la doctrina cristiana de aquel entonces, presidió concilios
(es una reunión o asamblea de autoridades religiosas (obispos, sobreveedores y
otros eclesiásticos, los nombres dependen de cada institución religiosa efectuada en
la Iglesia católica, en la Iglesia ortodoxa y en algunas iglesias protestantes
evangélicas, para deliberar o decidir sobre las materias doctrinales y de disciplina.) y
resolvió los problemas más diversos que le presentaban sus fieles.

Ya como obispo, escribió libros que lo posicionan como uno de los cuatro
principales Padres de la Iglesia latinos. La vida de Agustín fue un claro ejemplo del
cambio que logró con la adopción de un conjunto de creencias y valores.

San Agustín comprende la relación que se presenta en la actualidad


entre el Estado, el Derecho y la Justicia y algunas ideas de carácter religiosos
como es la voluntad de Dios y su influencia en la determinación de la justicia o
injusticia del Derecho vigente

Como bibliografía básica se utilizan las obras de San Agustín relacionadas


con el Derecho, como son La ciudad de Dios (escrita entre los años 412-426, d.c.)
donde expone la mayor parte de su pensamiento relacionado con el Derecho, y sus
Confesiones (escrita en los años 397-398 d.c.) que constituye una autobiografía; y
finalmente su libro De libero arbitrio- escrito entre los años 388-395.

El libro De libero arbitrio representa en San Agustín su tendencia


iusnaturalista, entendida como tal aquella según la cual existen unas leyes o unos
derechos que tienen su origen en la naturaleza, ya se física o racional, del ser
humano, y respecto de los cuales deben ser valoradas las leyes creadas por los
hombres, es decir, las leyes del Estado. Siendo así, para que la ley humana sea
justa debe acomodarse a la naturaleza, de lo contrario no debería ser considerada
una ley. En palabras de San Agustín: “Pues a mí me parece que no es ley la que no
es justa” (Agustín, 1947, pág. 212).

San Agustín establece en su obra más importante, La Ciudad de Dios, varias


distinciones que son de sumo interés para la Filosofía del Derecho, entre ellas la
primera y principal entre la ciudad terrenal, identificada con la organización política y
personificada en el Estado, y la ciudad de Dios entendida como una entidad
trascendente que se opone a la primera y que debe servirle para su crítica y
corrección.

En esa contraposición, la idea central del San Agustín es que:


“La historia humana entera es una lucha entre dos reinos, el de Dios y el del Mundo,
entre la civitas Dei y la civitas terrena. El Estado, que tiene sus raíces en principios
profundos de la naturaleza humana, está encargado de velar por las cosas
temporales, el bienestar, la paz y la justicia” (Marías, 1980, pág. 115). En las propias
palabras de San Agustín, la ciudad de Dios es “la Santa Iglesia en toda la tierra”
(Agustín, 1985, pág. 311).
Ocupa un lugar destacado en la Filosofía del Derecho, por la distinción que
realiza entre dos ciudades como formas de organización política contrapuestas, la
una regida por la ley de Dios y la otra por la de los hombres, una corrupta y la otra
perfecta: cualquiera de las dos debía estar regida por un Estado y sus leyes, y lo
importante es que en la ciudad terrena la legitimidad del Estado y la justicia de las
leyes estaba subordinada a su correspondencia con la voluntad de Dios interpretada
por sus representantes en la ciudad terrenal.

Otro de sus méritos fue reducir a una fuente de origen único las leyes de
la naturaleza que tanta discusión tuvieron entre los griegos, sin llegar a un acuerdo
entonces, reconduciéndolas a la voluntad de Dios. Esa tesis de la voluntad divina
como fuente del derecho natural tiene una consecuencia muy importante, y es que el
Derecho es cuestión de voluntad y no de razón, lo importante es dónde viene el
Derecho o los postulados que justifican la organización política y a quienes ejercen
el poder, y no su contenido que puede ser cualquiera, siempre que se pueda
identificar con la voluntad de Dios o lo que Dios quiere.

San Isidoro de Sevilla (570-636)

Fue un eclesiástico católico hispano de la época visigoda. Fue arzobispo de Sevilla


durante más de tres décadas (599-636). Es venerado como santo por la Iglesia
católica También es uno de los Cuatro Santos de Cartagena.

En una época de desintegración de la cultura clásica, de violencia e


ignorancia entre las clases dominantes, Isidoro impulsó la asimilación de los
visigodos, que ya llevaban dos siglos en Hispania, a fin de conseguir un mayor
bienestar, tanto político como espiritual, del reino. Para ello, ayudó a su hermano
en la conversión de la casa real visigoda (arrianos) al catolicismo e impulsó el
proceso de conversión de los visigodos tras la muerte de su hermano (599).

A edad avanzada, también presidió el IV Concilio de Toledo (633), que


requirió que todos los obispos establecieron seminarios y escuelas catedralicias.
Siguiendo las directrices establecidas por Isidoro en Sevilla fue prescrito el estudio
del griego y el hebreo, y se alentó el interés por el estudio del Derecho y la Medicina.

También marcó la unificación litúrgica de la España visigoda,e impulsó la


formación cultural del clero. El concilio fue probablemente un reflejo de las ideas de
Isidoro. Pero el concilio no solo produjo conclusiones de carácter religioso o
eclesiástico, sino también político. El lugar ocupado por el rey y la deferencia a él
debida en el concilio es también destacable: la Iglesia es libre e independiente, pero
ligada mediante una solemne lealtad al rey. Para muchos autores fue uno de los
primeros pensadores en formular la teoría del origen divino del poder regio: «Dios
concedió la preeminencia a los príncipes para el gobierno de los pueblos»

Fue un escritor prolífico y un compilador y recopilador. Compuso numerosos


trabajos históricos y litúrgicos, tratados de astronomía y geografía, diálogos,
enciclopedias, biografías de personas ilustres, textos teológicos y
eclesiásticos, ensayos valorativos sobre el Antiguo y Nuevo Testamento, y un
diccionario de sinónimos, así como Laus Spaniae (Alabanza de España).

Su obra más conocida son las Etimologías (hacia 634), monumental


enciclopedia que refleja la evolución del conocimiento desde la antigüedad pagana y
cristiana hasta el siglo 7. una extensa compilación en la que almacena, sistematiza y
condensa todo el conocimiento de la época. · Arzobispo de Sevilla en sus
etimología trata el ius sensiu como del derecho de guerra ·

Una de las cuestiones que se abordan en este libro es definir el concepto de


Historia y diferenciar los tipos de historia que pueda haber. Isidoro de Sevilla explica
que los antiguos dividieron la Filosofía en tres partes.

● División de la Física: Geometría/Aritmética/Música,


● División de la Lógica: Gramática/Dialéctica/Retórica,
● División de la Ética: Justicia/Prudencia/Fortaleza/Templanza.

Luego, este autor habla de la utilidad de la Historia, que es para la enseñanza
del momento presente. isidoro de sevilla y esta obra serán muy influyentes durante
toda la Edad Media.

En su obra De fide catholica contra Iudaeos amplía las ideas de San Agustín
sobre la presencia judía en la sociedad cristiana. para él era necesario promover la
conversión al cristianismo por la fuerza. Isidoro prefirió convencer a obligar, pero
tampoco fue enérgico en rechazar la violencia que sobre los judíos se ejercía en
este periodo

Las Sentencias de San Isidoro La publicación parece creada en un primer


momento para la formación del clero. Fue elaborada entre los años 612 y 615 en
apogeo de su capacidad intelectual y pastoral.

Santo Tomas de Aquino (1225-1274)


Fraile, teólogo y filósofo católico perteneciente a la Orden de Predicadores, es
considerado el principal representante de la enseñanza escolástica y una de las
mayores figuras de la teología sistemática.

Tomás de Aquino, es el pensador a través del cual la filosofía cristiana en


general, y la escolástica en particular, llega a su forma más acabada. Es Tomás
un filósofo cuya originalidad no reposa en descubrimientos revolucionarios sino en
su notable capacidad para elaborar sistemáticamente una construcción que logra
una síntesis imponente valiéndose de todo el saber conocido en su época.

Máximo representante de la filosofía escolástica medieval, abordó


brillantemente una profunda y perdurable reformulación de la teología cristiana, que
apenas había recibido aportaciones relevantes desde los tiempos de San Agustín de
Hipona

Santo Tomás de Aquino un filósofo grande y el creador de una de las


escuelas de mayor trascendencia en el pensamiento filosófico del mundo.

Fue popular por su aceptación y comentarios sobre las obras de


Aristóteles, señalando en qué eran compatibles con la fe católica. Asimismo, recibió
influencias del platonismo de Agustín de Hipona, y aristotelismo de Averroes y de
Maimónides, a quienes tomaba como autoridades

A Tomás se le debe el rescate y reinterpretación de la metafísica y una obra


de teología monumental así como una teoría del Derecho

Las cuestiones fundamentales que Tomás pretenderá abordar a lo largo de su


Summa Teológica serán:

1. La solución al problema entre las relaciones entre la razón y la fe,


solución que representa un modelo de equilibrio y es la actitud dominante de
la filosofía cristiana y en general en toda la filosofía que pretenda marchar de
la mano con las preocupaciones religiosas.
2. Las demostraciones a las cuales puede llegarse mediante la razón a
conocer la existencia de Dios, y que son modelo de rigor en la argumentación
filosófica.
3. La naturaleza o los atributos de Dios y su modo de conocerlos

La armonía entre la razón y la fe

Si bien reconoce que la fe y el conocimiento racional son diferentes, postulará que


no son opuestos sino perfectamente armónicos. Para su doctrina, la filosofía y la
teología tienen un mismo objeto: Dios. Dios será la causa primera de todo ente y
estudiado mediante la luz natural (la razón) y será también el fin al que se orienta la
salvación del hombre y conocido mediante la luz sobrenatural de la revelación.
Sin lugar a dudas, el conocimiento racional es más claro que el de la fe y por
ello, hasta donde lo racional llegue hay que preferir tal camino. Pero si por su
modo de conocimiento la razón es superior, la fe excede puesto que su objeto es
infinito: Dios, que supera todo cuanto la razón puede alcanzar.

Para Santo Tomás no hay conflicto entre razón y fe, sino armonía. Esta
armonía se muestra en el hecho de que hay verdades que son a la vez de razón y
de fe (por ejemplo la inmortalidad del alma, la existencia de Dios), es decir, estas
dos son dos caminos para llegar a la misma verdad. Supongamos que hay
contradicción entre fe y razón. En este caso según Santo Tomás podemos estar
seguros que la fe siempre tiene la verdad y que es el filósofo que usa la razón el que
se ha equivocado en sus argumentos.

Dice que la fe es una norma o criterio para la razón. Pero la razón también
ayuda a la fe, porque ayuda a ordenar racionalmente las afirmaciones de la fe en la
teología. La existencia de contenidos comunes a la fe y a la razón permite que el
filósofo llegue a establecer argumentos racionales sobre Dios, el hombre, la ética, y
que esos argumentos coincidan con lo que afirma la fe y la moral cristianas.

Así pues, podemos resumir la postura de Tomás respecto del problema de razón y fe
en los siguientes términos:

A) Hay una clara distinción entre razón y fe. Filosofía y teología son
ciencias distintas, y se distinguen, entre otras cosas, por su modo de acceder
a los contenidos de los que trata.
B) No hay contradicción entre razón y fe. Si encontramos una
contradicción, tenemos que revisar nuestros razonamientos, porque nos
hemos tenido que equivocar en algún sitio.
C) Hay una zona de confluencia entre ambas. En efecto, hay 3 tipos de
verdades:

1.-Aquéllas a las que sólo puede accederse a través de la fe (artículos de fe).


2.-Aquéllas a las que sólo puede accederse a través de la razón (las que tratan del
mundo natural).
3.-Aquéllas a las que puede accederse a través de ambas (este tipo de verdades
son los llamados preámbulos de la fe, y son verdades tales que Dios existe y es
uno, que es creador del mundo, etc.)
Si pese a todo, aún se produjese un verdadero conflicto entre saber natural y
sobrenatural, ello no podría significar sino una sola cosa: que la razón es víctima
del error y que debe corregirse, porque la verdad es solo una.
Sto. Tomás tuvo un plus: la fe como buen teólogo. Al tratar de ubicarlo en el
terreno de la Filosofía del derecho, uno se da cuenta que manejó conceptos
políticos y jurídicos, como son: la ley y el derecho natural, la ley en general, el bien
común, la justicia, con tal precisión y claridad, que su contribución a la Filosofía del
derecho es invaluable e innegable
Puede decirse, por tanto, que el sistema filosófico de Santo Tomás constituye una
síntesis entre Aristóteles y San Agustín. Dicha síntesis tiene mucho que ver en lo
que se refiere a la Filosofía del derecho,

¿Qué cree y expresa Santo Tomás de Aquino? Cree que el ius (derecho)
es "la misma cosa justa”. Por lo tanto las leyes son sólo instrumentos para el bien
común, y solo válidas cuando se adecuan a lo justo. Pero la ley es un precepto de la
razón en vista del bien común.

El dato importante en la filosofía de Santo Tomás de Aquino es que este


había ya descubierto que la Ley no era el Derecho en sí, sino que era parte del
Derecho." La ley es una constitución escrita; y de ahí que la ley no sea el derecho
mismo propiamente hablando, sino cierta razón del derecho". Tomás de Aquino
pensaba que todo, al final, tenía como destino a Dios, pero había que tenerse en
cuenta que "La ley no es más que un ordenamiento de la razón, en orden al bien
común, promulgado por aquel”

Santo Tomás cree en la conformidad entre ley natural y ley humana,


como fundamento de todo derecho. Y advierte que en el caso de no ser posible esta
conformidad, se debe optar por los preceptos derivados de Dios, es decir propone la
hegemonía del Derecho divino sobre el terrenal.

El sistema de Santo Tomás se desenvuelve según la idea de una perfecta


conformidad de la ley humana (derecho positivo)con la ley natural; la obediencia a la
autoridad pública es un deber primordial, pues, “entre la autoridad y el bien común
hay connaturalidad esencial”. No obstante, si las leyes son injustas, no se está
obligado a inclinarse, “a menos que la resistencia no deba ocasionar el escándalo o
el desorden (...); si ellas van hasta violar los mandamientos de Dios se las debe
desobedecer...”

Es decir que las normas jurídicas, tiene validez sólo en relación a su calidad
de exigencias de justicia en primer lugar. "Las normas jurídicas valen principalmente
porque formulan exigencias de Justicia que brotan del orden objetivo metafísico de
los seres y sólo en segundo lugar por la autoridad de quien las promulga. Es decir, el
Derecho se buscaba primeramente en las facultades y exigencias morales que tenía
una persona sobre otra u otras, o sobre una cosa; sólo después se consideraba lo
que decía la Autoridad sobre el caso.
Para este filósofo: "Dios se distingue de la ley, que es su mandato y que
plasma el orden del mundo, pero sin identificarse con ese mismo orden."

El Derecho, en Santo Tomás de Aquino es estudiado como la idea de la


participación de la justicia, y la creación del estado aparece como expresión libre
de la actividad humana y su convivencia con el resto de miembros de la sociedad.
“El Estado surge por una actividad libre del hombre. Declara lícito el derecho de
resistencia activa del pueblo ante el usurpador o invasor que se apodera
violentamente del gobierno”.

Para Santo Tomás el Derecho es algo inherente a la realidad natural y social,


algo que está dado de acuerdo a su función orientada por el orden natural y divino.
Las relaciones sociales están determinadas de tal forma que cumplan las funciones
asignadas por un orden divino.

Para Santo Tomás, el Derecho es la expresión de ciertas estructuras


inherentes en la realidad natural y social. (...) las formas de organización social son
reales sólo en la medida que cumplan ciertas funciones que le han sido
encomendadas por un Derecho Superior, el divino.

CREADORES

Francisco de Vitoria: 1492 1546

Recibe su nombre del dominico español Fray Francisco de Vitoria. Fue un fraile
dominico español, escritor, gran teólogo, filósofo y jurista del siglo 16, que fue
profesor en las universidades de París, Valladolid y Salamanca.

Quien destacó por sus ideas y contribuciones al derecho internacional y la


economía moral basados en el pensamiento humanista del realismo
aristotélico-tomista.

Teorizó abundantemente sobre la economía desde un punto de vista moral.

Francisco de Vitoria analizó las fuentes y los límites de los poderes civil y
eclesiástico. Rechazó ideas medievales: las jerarquías feudales, la supremacía
universal del emperador o del papa. Así, el poder civil está sujeto a la autoridad
espiritual del papado, pero no a su poder temporal

Se preocupó por los derechos de los indígenas de América

Su obra De indis recoge las relecciones en las que expresó su postura ante
el conocimiento de diversos excesos cometidos en las tierras conquistadas en
América. En ella afirma que los indios no son seres inferiores, sino que poseen los
mismos derechos que cualquier ser humano y son dueños de sus tierras y bienes.
Este fue el inicio del Ius gentium (derecho de gentes)

Sus ideas y las de fray Bartolomé de las Casas fueron escuchadas en las
Cortes. Gracias a estos dos religiosos, en 1542 se promulgaron las Leyes de Indias,
que afirmaron que los indios eran seres humanos libres y los ponía bajo la
protección directa de la Corona

Vitoria fue uno de los principales teóricos del concepto de guerra justa. En De
iure belli analizó los límites del uso de la fuerza para dirimir las disputas entre
pueblos.

“Por tanto no es lícita la guerra simplemente por diferencias de religión o para


aumentar el territorio.”

Estableció, en De potestate civili, las bases teóricas del derecho


internacional moderno, del cual es considerado el fundador junto con Hugo Grocio.
Fue uno de los primeros en proponer la idea de una comunidad de todos los pueblos
fundada en el derecho natural, y no basar las relaciones internacionales
simplemente en el uso de la fuerza.

Las ideas de la ley natural y derechos de las personas de Vitoria estaban


ligadas a su teoría de la guerra justa durante la conquista del Nuevo Mundo se
discutían con pasión las justificaciones morales y religiosas de la guerra. Vitoria no
aceptaba que la religión justificase la guerra por el hecho de que los oponentes
fueran no creyentes o porque rechazasen la conversión. No se puede forzar las
creencias: son una acto de libre albedrío y este nos lo da Dios.

Vitoria no solo separó de la religión los problemas de justicia y


moralidad, sino que plantó los cimientos de los futuros estudios sobre leyes
internacionales y los derechos humanos. La doctrina de que los estados
guerreros tienen responsabilidades y los no combatientes tienen derechos
-consagrada por las Convenciones de La Haya y de Ginebra- se origina en las
enseñanzas de este erudito

Fernando Vázquez de Menchaca 1512-1569

(Valladolid, 15121​- Sevilla, 1569) Fue un jurista y humanista español, miembro de la


Escuela de Salamanca.
Vázquez es uno de los primeros autores en considerar que es posible derivar
conclusiones prácticas, reales, del derecho natural

-Menchaca se acercó más a la tradición romanística que a la reflexión de


los filósofos salmantinos sobre el ius naturae, al aceptar las ideas de Ulpiano sobre
un derecho por naturaleza común a hombres y animales

Menchaca, que apoya su teoría jurídica en el principio de la omnipotencia


absoluta de la voluntad divina, admite que Dios habría podido establecer unos
principios ius naturales diversos si así lo hubiese querido

En la visión de este autor, el derecho natural "no es otra cosa que la razón ingénita
en el hombre, que no lleva consigo ningún apremio irresistible, fuerza o violencia"

El derecho de gentes

Además del derecho natural que, según observa Fernando Vázquez, es común a
todos los animales, y del derecho civil, que es el ordenamiento jurídico propio de
un Estado o nación

Esta clase de derecho, "de gentes" o "internacional"

Este derecho es un ordenamiento de justicia estrictamente humano que,


según Vázquez, tiene su origen en la generalización del derecho legal o positivo. La
atribución de tal origen al derecho internacional es una contradicción con el resto
de la doctrina del jurista español, porque, como indica, desde el punto de vista
histórico el derecho de gentes secundario surgió después del derecho natural y
antes que el derecho civil

Como tal, el derecho de gentes o internacional no es un derecho innato,


aunque se acomoda a la perfección a la naturaleza del ser humano.

Libertad de los mares y prescripción adquisitiva

La libertad de los mares constituye uno de los principios fundamentales


del llamado derecho internacional del mar, ya desde el inicio de la Edad
Moderna. Tal fue la importancia de este problema en los años del Renacimiento, que
llegó a ser uno de los temas esenciales de la doctrina moral y política de los autores
de la escolástica salmantina

Define que los hombres son libres por naturaleza, motivo suficiente para
considerar que cualquier tipo de sometimiento es un mal. Esta libertad absoluta, sin
embargo, no puede ir en contra de los preceptos naturales; y así, no puede
contravenir el mandato ius natural que prohíbe la apropiación del mar. En estas
materias, Vázquez asume las enseñanzas romanas sobre la prescripción adquisitiva,
a la que define como "la adición al dominio [...] por la continuación de la posesión
durante el tiempo señalado por la ley"

Menchaca se dedica a desarrollar el problema de la libertad de los mares es


imposible que el mar se convierta en dominio de algún particular. La razón de
esto es que muchos bienes permanecen comunes por derecho natural, cuyo dominio
no puede ser dividido por el derecho positivo, a saber: el aire, el agua, las costas, los
puertos, los peces, las fieras, las aves, etcétera.

El mar, que forma parte de aquellos bienes que son comunes por derecho
divino, no puede ser prescrito. Una ley humana que dispusiera que los mares
pueden ser objeto de dominio particular sería manifiestamente injusta, porque es de
derecho natural inmutable que los bienes comunes a todos los hombres no sufran la
repartición de la propiedad privada

Tanto el derecho natural como el derecho de gentes primario ordenan que la


tierra y los mares sean cosas de uso común. Por consiguiente, la apropiación del
mar está contra ius naturale.

Francisco Suarez Jesuita 1548-1617:


(Granada, 5 de enero de 1548-Lisboa, 25 de septiembre de 1617), fue un teólogo,
filósofo y jurista jesuita español. Una de las principales figuras del movimiento de la
Escuela de Salamanca, fue considerado uno de los mejores escolásticos

Aquí la principal importancia de Suárez proviene probablemente de su trabajo


en la ley natural, y de sus argumentos sobre el derecho positivo y el status de un
monarca.

El pensamiento político de Suárez y su teoría legal se desarrolla


principalmente en dos obras: De legibus ac Deo legislatore (1612) y Defensio
Fidei Catholicae (1613),

Su noción de ley es un precepto común, justo y estable, suficientemente


promulgado. Suárez se ocupará de la sociedad en la que esa ley debe cumplirse
“…frente a la familia como sociedad embrionaria e imperfecta, hay que estudiar la
sociedad civil o política como sociedad perfecta.

Una sociedad que no tiene como fin formar hombre buenos, sino convertir a
los hombres en buenos ciudadanos en la vida temporal, persiguiendo de consuno el
bien común en justicia y en paz… para que esta sociedad se pueda desarrollar y
cumplir sus fines, se hace preciso contar con la autoridad legítima con capacidad
para legislar y de hacer cumplir la ley…¿quién es el depositario de la
autoridad?...esa autoridad ha sido dada por Dios al pueblo o a la sociedad como su
depositaria primigenia

Desarrolla los conceptos de ley natural, ius gentium (ley de las naciones) y la
ley civil, cada una de ellas da lugar a un derecho propio.

1.- La ley natural, no divina, participa de su universalidad y su eternidad.


2.- La ley de las naciones no es divina ni natural, es positiva y humana y posee la
universalidad que les dan las costumbres.
3.-La ley civil es humana y positiva, posee una cierta universalidad pero está
encaminada al bien común de cada comunidad, idea similar a la del “contrato social”.

Desarrolla la cuestión del origen y legitimidad del poder civil. El monarca


detenta el poder no de modo absoluto y arbitrario, sino por delegación basada en el
consentimiento, justifica la revuelta cuando el monarca abusa del poder que
legalmente detenta y se convierte en un tirano usando su poder para su propio fin y
no para el bien común.

Alberico Gentili 1552-1608

(San Ginesio, 14 de enero de 1552-Londres, 19 de junio de 1608) fue un abogado y


jurista italiano. Se desempeñó como abogado defensor de la Embajada de España
en Londres y como profesor Regius de derecho civil en la Universidad de Oxford.

Reconocido como el fundador de la ciencia del derecho internacional,Gentili


es quizás una de las personas más influyentes en la educación legal que haya
vivido. Es uno de los tres hombres llamados “el Padre del derecho
internacional”. Gentili fue el primer escritor en derecho internacional público y la
primera persona en dividir el secularismo del derecho canónico y la teología católica.

Escribió varios libros que se reconocen entre los más importantes para las
doctrinas jurídicas internacionales,pero que también incluyen temas teológicos y
literarios.

Los juristas dicen que Gentili fue la primera persona que intentó
proporcionar al mundo un sistema regular de la jurisprudencia natural, y su
tratado, sobre leyes de la guerra y de la paz

El primer libro de Gentili sobre cuestiones de derecho internacional fue De


Legationibus Libri Tres, publicado en 1585. Una edición mejorada apareció bajo el
título De Jure Belli Libri Tres. Este es considerado su trabajo principal y un clásico
del derecho internacional público. El libro no sólo es elogiado por su modernidad y
su hábil uso de los conceptos de derecho civil, sino también por su cercanía a la
práctica real del derecho internacional.

HUGO GROCIO

Hugo Grocio o Hugo van Groot nació en la población de Delft, Países Bajos el 17 de
abril de 1583 y murió en Rostock, Alemania el 28 de agosto de 1645. jurista,
doctrinante, teólogo, filósofo y escritor holandés cuya influencia en la formación del
derecho internacional contemporáneo es innegable.

Era un fervoroso estudioso de la religión, inspirado en el catolicismo, y un hábil


expositor que sabía decir las cosas con seguridad pero con respeto, lo que explica
que a pesar de haber estudiado y escrito en el marco de los grandes conflictos
religiosos que sacudían a Europa en esa época, en la mayor parte de los casos, sus
obras no fueron consideradas ofensivas ni por católicos ni por protestantes. Aunque
varios autores señalan, que habiendo sido propósito dominante de su vida y de
parte de sus escritos, la conciliación entre protestantes y católicos, atrajo en alguna
época la ira y las persecuciones del protestantismo.

Comenzó sus estudios de derecho a los once años, en Leiden, Holanda en 1594 y
se graduó cuatro años más tarde en Orleans, Francia, en Jurisprudencia y Filosofía.

Con escasos quince años es nombrado integrante de una misión diplomática


enviada a Francia, a fin de confirmar la alianza holandesa con Enrique IV, en medio
de la pugna por la independencia de las provincias unidas de Países Bajos,
1568-1648.

Dicha misión tenía como objetivo tratar de disuadir al rey de Francia, de hacer una
paz separada con España. A pesar del fracaso parcial de la misión, Hugo Grocio es
presentado al rey Enrique IV quien lo introduce en la corte francesa como el milagro
de Holanda.

En 1609, publicó de forma anónima la obra Mare Liberum, breve tratado jurídico
acerca del mar en el cual afirmaba, contra españoles, portugueses e ingleses, que
el mar no era propiedad de nadie, de ninguna persona ni nación, sino territorio
internacional que todas las naciones eran libres de aprovechar, tesis a la que se
opuso el inglés Jhon Selden en otra obra trascendental para la época, titulada Mare
clausum.

El libro Mare liberum es parte de un estudio en mayor extensión, denominado De


iure praedae, inédito hasta el año 1868 cuando finalmente salió a la luz pública.

Al igual que Francisco Suárez, Hugo Grocio afirma que el derecho internacional
proviene del derecho natural y del derecho de gentes. El derecho internacional es
independiente de la teología o de la existencia de Dios, lo que implica que en las
relaciones internacionales no se puede diferenciar entre naciones cristianas e
infieles. Para Hugo Grocio el Derecho de Gentes es el dictado de la recta razón y
existiría aunque Dios no existiese.

Su obra más famosa De iure belli ac pacis o Del derecho de la guerra y de la paz
(1625) es un alegato contra la esclavitud y un intento de prevenir y reglamentar las
guerras y constituyó uno de los primeros códigos de derecho internacional público.

Grocio está considerado como uno de los padres del derecho internacional y como
el creador de la escuela racionalista del derecho natural que definió como uniforme
y universal derivado del carácter racional del hombre.

Y hay otra obra, finalmente, que merece comentario, De iure prade comentarius
–Del derecho de presa- descubierta en 1864 y publicada en 1868. Es una obra de
juventud escrita entre 1604-1605 cuando Hugo Grocio contaba apenas con veintiún
años de edad. El derecho de presa, una obra eminentemente práctica y política de
uno de los más importantes autores del derecho en la historia reciente de los
pueblos.

RICHARD ZOUCH

Este inglés nacido en 1590, fue el sucesor de Gentili en Oxford. Posteriormente fue
Juez.

También consultado en un caso de índole diplomático, el jurista Zouch al igual que


su maestro, mostró sus dotes para el Derecho internacional.

El caso implicaba un asesinato cometido por Pantaleón Sa, hermano del embajador
portugués en Inglaterra. Su opinión en este caso fue que la protección diplomática
no puede abarcar a personas distintas del propio embajador y el asesino fue
juzgado y condenado a muerte.

En 1657, Zouch publicó una obra sobre un embajador delincuente

Entre sus ideas más importantes tenemos:

a) Se refiere a un Jus feciale, en lugar de Jus Gentium. Incluso como segundo título
prefiere la denominación Jus inter gentes, como equivalente a Derecho
internacional.

b) Aunque no atendió propiamente el Derecho de los tratados, fue el primer teórico


que realizó un trabajo sistemático sobre todas las materias del Derecho
internacional.

c) Coordinó el Derecho de guerra con el de la paz. Consideró a la guerra, como un


simple incidente entre los pueblos. Colocó así mismo el Derecho a la paz, por
encima del Derecho de la guerra.

d) Define el Derecho internacional como un derecho que ha sido aceptado por la


costumbre, conforme a la razón, entre la mayoría de los pueblos o sobre el que se
han puesto de acuerdo algunas naciones en particular.

e) Zouch también distinguió entre el jus formado de reglas jurídicas de vigencia


indiscutible del juditium, que son las cuestiones de solución dudosa.

f) Zouch aplica al Derecho internacional una división tomada del Derecho privado
estableciendo: 1. Status o derechos personales; 2. Debitum u obligaciones, y 3.
Delictum o responsabilidad.

g) Toma sus pruebas y documentos de las relaciones prácticas entre los pueblos.

Cornelius Van Bynkershoek.

Fue un jurista holandés, nacido en 1673 y cuyos conocimientos jurídicos se


enfocaron principalmente al estudio del Derecho internacional.

Por su brillante capacidad, en 1707 fue designado miembro del Tribunal Supremo de
Holanda, Zelanda y Francia, con sede en La Haya y en 1724, funge como
presidente de ese tribunal.

Si bien es cierto, que sus primeras obras fueron sobre Derecho privado, sus obras
de Derecho internacional fueron las sobresalientes.

Un ejemplo de ello, es su obra “Jurisdicción sobre los embajadores” de 1721, así


como sus “Cuestiones de Derecho público” de 1737.

En la última obra citada, hace precisiones importantes, al identificar al Jus Gentium


con el Derecho internacional y despojar al estudio de la disciplina de toda cuestión
teológica, al no emplear ningún argumento religioso.

Así mismo, Bynkershoek es un jurista que se preocupa del origen de las normas
internacionales y por lo tanto, abandona el Jus naturalismo, apartándose de Grocio,
que sí lo utiliza.

De este modo, Bynkershoek ubica como el punto inicial de las normas


internacionales, el sentido común de los pueblos, pues de él se desprende su forma
de actuar.

En este tenor, este jurista holandés dio una importancia superlativa a los
precedentes de las actuaciones internacionales, principalmente los más recientes,
pues reflejan la situación del Derecho internacional en aquel momento histórico.

Por otra parte, también se considera que Bynkershoek renovó la tradición jurídica de
Holanda, colaborando para abrir nuevos derroteros el Derecho internacional.

Para otros autores, Bynkershoek tiene la cualidad de usar la razón como sentido
común para encontrar en cada caso que estudió, la mejor y más equitativa solución.

Su apoyo para el p0ensamiento racional, es con base en los tratados y en los


precedentes generalmente establecidos. Precisamente por eso muestra predilección
por documentarse con material holandés y es un precursor de la escuela
nacionalista del Derecho internacional público.

Y es precisamente en su búsqueda de imparcialidad y justicia, que considera que


los tratados holandeses, aunque obligan a las partes firmantes, no tienen fuerza
para cambiar las reglas del Derecho marítimo general.

Es precisamente en esa materia, donde Bynkershoek desarrolla su potencial


internacional, con base en otra de sus importantes obras “Di Dominio Maris
Disertatio” o “Disertación sobre el dominio del mar”.

En dicha obra, este jurista holandés, admite el control del mar por el soberano de la
costa, pero limitado ese dominio a una faja marítima que tenga de anchura el
alcance de las armas, lo cual se traducía en el cañón más potente de la época.

En otras palabras, tenemos que el dominio que debe tener el soberano debe
limitarse a la fuerza de las armas. Siendo lo más avanzado en ese momento como
armamento, un cañón. Entonces la medida se traducía en el alcance de un disparo
de un arma de estas características, es decir tres millas marinas o o que es lo
mismo, una legua. Esta teoría fue respaldada por la mayoría de las potencias
marítimas.

Así las cosas, en el ámbito marítimo, Bynkershoek estudió el derecho de presa y


determinó el momento preciso en que la propiedad del barco y de las mercancías,
pasan al capturador.

En cuanto a los tratados internacionales, Bynkershoek rechaza las opiniones que


vuelven precaria la obligatoriedad de los mismos, pues en esa época así convenía a
un país de amplio comercio marítimo, pero además débil, como lo era Holanda en
esos momentos.

Al respecto, rechaza que haya una cláusula tácita, como la rebus sic stantibus, pero
admite que el soberano queda libre de cumplir un tratado internacional, cuando lo
prometido es imposible de guardar.
Emerich de Vattel.

Nació en Neuchatel, hoy Suiza, durante el tiempo en que existió una unión personal
de esa zona con Prusia.

Inició carrera diplomática en Sajonia, en el año de 1746. Para el año de 1758, es


consejero privado en asuntos exteriores de Dresde y en ese mismo año, escribe su
obra “El Derecho de Gentes o Principios de la Ley Natural aplicados a la conducta
de los negocios de las naciones y de los soberanos”.

La obra de este autor busca reinterpretar la doctrina de Wolff, pero expone sus
propias opiniones sobre temas de Derecho internacional y constitucional.

En opinión de Miaja de la Muela, de Vattel tiene como propósito presentar un


sistema de Derecho internacional de manera grata a los gobernantes y diplomáticos.

Pero en opinión del jurista español, la doctrina del Suizo es en esencia, la misma de
Wolff, pero es demás fácil lectura y con un estilo menos cansado para el lector.

En otra opinión, de Vattel admite que el Derecho internacional puede ser natural o
positivo y en este último caso, se divide en convencional, consuetudinario y
voluntario.

Para Seara Vázquez, de Vattel al ser diplomático muestra una perspectiva del
Derecho internacional más práctico, por su experiencia como plenipotenciario y
consejero.

Así las cosas, este autor lo coloca como uno de los clásicos del Derecho
internacional, aunque muy influido por su maestro Cristian Wolff, pero con enfoques
propios. Un ejemplo de ello es que la “civitas máxima” de Wolff, se transforma por
de Vattel en la sociedad de naciones.

Posición similar asume Von Liszt, pues presenta a de Vattel como expositor de
Wolff, pero con un lenguaje corriente y adoptado a las necesidades diplomáticas.

Entre otras ideas, de Vattel asume en sus posiciones:

1. En cuanto a ocupación de territorios, de Vattel le niega procedencia a la


adjudicación papal, dándole primacía al requisito previo de la ocupación real, lo cual
precede a la ocupación jurídica eficaz.

2. En cuanto a los tratados, toca el problema de la interpretación de los mismos, los


idiomas que deben emplearse en la celebración de ellos, así como la
interdependencia que existe entre las diversas disposiciones que tiene un tratado.

3. En otras opiniones, también comenta sobre la obligatoriedad de los tratados, la


cual debe cumplirse y así mismo, admite la cláusula “rebus sic stantibus”, si las
condiciones cambian real y sustancialmente.

Cristian Wolff.

Nacido en Alemania en 1676, este jurista fue profesor de la Universidad de Halle.

Aunque estudió Derecho, su preparación incluye también filosofía, matemáticas,


física, medicina, sicología, botánica y economía.

Posteriormente se traslada a la Ciudad de Hesse y fue profesor de la Universidad de


Marburgo.

Su libro más importante es “El Derecho natural estudiado según el método


científico” en 3 volumenes, escrito cuando Wolff tenía 60 años. De esta obra hay un
suplemento llamado “El Derecho de gentes estudiado según el método científico”,
con nociones de nuestra materia.

Así mismo, más tarde escribe un compendio con nueve volúmenes denominado:
“Instituciones de Derecho natural y de gentes”.

Wolff sustenta la creencia de que la fuente de todo derecho está en la naturaleza


humana y el Derecho positivo deviene del Derecho natural.

Como admirador de Grocio, lo cita frecuentemente y adopta una posición


iusnaturalista.

Al respecto, Wolff divide al Derecho de gentes positivo en 3 partes: a) Jus peticium o


Derecho de los tratados; b) Jus consuetudinarium o Derecho de la costumbre y, c)
Jus voluntarium o Derecho obligatorio para la comunidad de todos los pueblos que
se ha impuesto a sí misma, por su unión o agrupación en una civitas o máxima
gentium, en la cual deben asociarse todos los Estados, cuyas decisiones por
mayoría todos deben acatar.

Es muy importante recalcar que las naciones están organizadas en una asociación
que denomina “civitas máxima” para distinguirla de las “civitates” particulares o
Estados que son asociaciones de individuos.

Al respecto la “civitas máxima” reposa sobre un pacto o cuasi pacto de varias


naciones y su finalidad, es la promoción del bien común de los Estados, mediante
su cooperación bajo normas emanadas de la “civitas máxima”.

En este sentido, la “civitas máxima” define sus normas por el recto uso de la razón y
esto es a lo que llama el “jus voluntarium” para distinguirlo del “jus necesarium” que
emana del propio estado inalterable de la naturaleza.
En cuanto a los embajadores, Wolff establece que no disfrutan de
extraterritorialidad, ni gozan de exención alguna frente a la jurisdicción del país que
los recibe, pues sólo tienen derecho a un respeto particular y a un mayor grado de
seguridad.

Sobre la apropiación de los mares, Wolff estudia los argumentos en pro y en contra
de dicho tema y llega a la conclusión de que sí es posible someter el dominio
nacional sobre el mar, pero sólo en una faja como mar territorial, justificando su
posición en la costumbre internacional.

Jean Jacob Moser.

Este autor fue originario de Stuttgart, hoy Alemania en 1701.

Desempeñó diversos cargos oficiales y fungió como profesor en varias


universidades alemanas. Fue escritor prolífico, independiente y libre sobre
cuestiones políticas.

Durante su vida, fundó una escuela en la que enseñaba el arte de la política y la


diplomacia.

Su primera obra la escribió a los 18 años y a los 19 ya era profesor en la


Universidad de Tabinga.

En un aspecto oscuro de su vida, estuvo encarcelado 5 años en la fortaleza de


Hohentwiel como miembro de los Estados Generales de Würtemberg, por su lucha
contra el duque de esa región.

Respecto a sus estudios de Derecho internacional, Moser tiene varios con diversos
títulos, entre los cuales se ubican: “Ensayo sobre el Derecho de gentes europeo
más reciente, respecto a la guerra y la paz, principalmente en aquellos actos
públicos de las potencias europeas y en otros acontecimientos, que han sucedido
desde la muerte del Emperador Carlos IV en 1740”, compuesto de 12 volúmenes y
después de dos series de trabajos complementarios, publicó otras obras intituladas:
“Contribuciones al Derecho de gentes europeo más reciente en tiempo de paz” y
“Contribuciones al Derecho de gentes europeo más reciente en tiempo de guerra”.

Entre sus ideas más importantes, tenemos que:

a) Los diplomáticos invocan en sus documentos oficiales al Derecho natural pero, en


tal caso, la parte contraria puede responder de la misma manera a fin de neutralizar
la situación.

b) El Derecho de gentes consiste en tratados y costumbres, lo cual puede fundar


cualquier derecho en estas fuentes o en la experiencia.

c) Los principios no pueden probarse con ejemplos, sino que los casos deben
aprobarse en principios.

d) A diferencia de sus antecesores, Moser reproduce tratados, declaraciones, cartas


diplomáticas, informes públicos y privados. Su carácter de recopilador de datos
jurídicos prevaleció a su análisis jurídico y a su sistematización científica, por lo que
fuera de estos aspectos, su obra fue más bien, poco doctrinal, por lo que se
considera como fundador de la corriente positivista del Derecho internacional.

Su obra fue inspiradora de otros juristas, como fue el caso de Von Martens.

Georg Friedrich Martens (1756 - 1821)

Georg Friedrich von Martens[1] (22 de febrero de 1756 en Hamburgo, Alemania - 21


de febrero de 1821 en Frankfurt, Alemania) era un alemán jurista y diplomático.
Educado en las universidades de Göttingen, Ratisbona y Viena, se convirtió en
profesor de jurisprudencia a Göttingen en 1783 y fue ennoblecido en 1789. Fue
nombrado consejero de Estado por la Rey de Westfalia en 1808, y en 1810 fue
presidente de la sección financiera del consejo de estado de la reino de westfalia.
En 1814 fue nombrado consejero de gabinete privado (Geheimer Kabinettsrat) por el
rey de Hannover, y en 1816 fue como representante del rey a la dieta de lo nuevo
Confederación Alemana a Frankfort.

De sus obras la más importante es la gran colección de tratados Recueil des traites,
desde 1761 en adelante. De esto, los primeros siete volúmenes se publicaron en
Göttingen (1791-1801), seguidos de cuatro volúmenes suplementarios parcialmente
editados por su sobrino. Karl von Martens (vea abajo).

Estos fueron seguidos por:

Nouveau recueil, de tratados posteriores a 1808, en 16 vols. (Göttingen,


1817-1842), de los cuales G. F. von Martens editó los primeros cuatro, siendo el
quinto obra de K. von Martens, los otros (6-9) de F. Saalfeld y (10-16) F. Murhard. A
Suplemento NouveauMurhard (Göttingen, 1839-1842) también publicó, en 3 vols.,
para llenar los vacíos de la colección anterior.

Nouveau recueil ... continuación del grand recueil de Martens, en 20 vols.


(Göttingen, 1843–1875), editado a su vez por F. Murhard, C. Murhard, J. Pinhas, C.
Samwer y J. Hopf, con un índice general de tratados de 1494 a 1874 (1876).

Nouveau recueil, ser. 2 (Gotinga, 1876–1896; vols. Xxii-xxxv, Leipzig, 1897–1908).


Del vol. xi de esta serie fue editado por Cigüeña felix, profesor de derecho público
en Greifswald. En 1909 apareció el vol. yo de otro Continuación (serie troisieme)
bajo la dirección del profesor Heinrich Triepel (1868-1946) de Universidad de Kiel.

De las otras obras de Martens las más importantes son:

● Precis du droit des gens modernes de l'Europe (1789; 3ª ed., Gotinga, 1821;
nueva edición, G.S. Pinheiro-Ferreira, 2 vols., 1858, 1864);
● Erzählungen merkwürdiger Falk des neueren europäischen Volkerrechts, 2
vols. (Gotinga, 1800–1802);
● Cours diplomatique ou tableau des Relations des puissances de l'Europe, 3
vols. (Berlín, 1801);
● Grundriss einer diplomatischen Gesch. der europ. Staatshandel u.
Friedensschlusse seit dem Ende des 15. Jahrhunderts (ibíd. 1807).

Su sobrino Karl von Martens (1790-1863), (quien a su muerte era ministro residente
de la gran duque de Weimar en Dresde), publicado:

● la Manuel diplomatique (Leipzig, 1823), un valioso libro de texto de las reglas


y costumbres de la diplomático servicio - reeditado como Guía diplomatique
en dos vols. en 1832 (5ª ed. de Geffcken, 1866);
● Causes célèbres du droit des gens (2 vols., Ibid., 1827) y Nouvelles cause
célèbres (2 vols., Ibid., 1843), ambos reeditados, en 5 vols. (1858-1861); y
Recueil manuel et pratique de traités (7 vols., Ibid., 1846–1857); Continuado
por Geffcken en 3 vols., 1885-1888).

6) ¿Quién fue Francisco de Vitoria (1485-1546) y sus


aportaciones al Derecho Internacional Público.

Fray Francisco de Vitoria fue un teólogo, filósofo y jurista del siglo XVI que nació en
Burgos España en 1485 y murió en Salamanca el 12 de agosto de 1546. Vitoria
puede ser considerado el primer intelectual público de la era moderna.
Fue profesor en las universidades de París, Valladolid y Salamanca. Con 20 años
ingresó en el noviciado de la Orden de Predicadores, donde inició sus estudios
humanísticos.
En París recibió los grados de Licenciado y Doctor. En 1522, se trasladó al Colegio
de San Gregorio de la Universidad de Valladolid donde explicó la Suma de Teología
de Santo Tomás de Aquino. Así mismo recibió el último grado que la Orden
Dominica otorgaba a sus profesores: el Magíster en Sagrada Teología.

Hechos importantes
● En 1526 ganó la Cátedra Prima de Teología de la Universidad de
Salamanca,
● Restauró la enseñanza de la Teología en España, a la que dio una
orientación tomista al sustituir el texto anteriormente oficial en Salamanca (las
Sentencias de Pedro Lombardo) por la Suma teológica de Santo Tomás,
● Estableció el sistema de tomar apuntes como el más adecuado para lograr
una mayor comprensión y conexión entre el profesor y sus alumnos. Sus
enseñanzas y métodos pedagógicos dieron su fruto en forma de numerosos
teólogos, juristas y universitarios a los que bien enseñó directamente o bien
se vieron influidos por sus teorías como Melchor Cano, Domingo Báñez,
Domingo de Soto, Francisco Suárez, entre otros, formando la llamada
Escuela de Salamanca.
● Tienen especial interés para el derecho sus relecciones De potestate civili, De
iure belli y De indis, en la que se establecen principios de gran importancia,
porque hay que mencionar que propiamente Vitoria no redacta sus obras,
sino que son redactadas por sus alumnos y sucesores.
● Francisco de Vitoria analizó las fuentes y los límites de los poderes civil y
eclesiástico.
● Rechazó ideas medievales: las jerarquías feudales, la supremacía universal
del emperador o del papa. Así, el poder civil está sujeto a la autoridad
espiritual del papado, pero no a su poder temporal.
● Se preocupó por los derechos de los indígenas de América, reflejado en su
obra ‘Relectio de indis', reconoció el derecho de los indios.
● Estableció, en De potestate civili, las bases teóricas del derecho internacional
moderno y
● Fue uno de los principales teóricos del concepto de Guerra Justa

GUERRA JUSTA
La guerra justa se daría ante la violación de algún título jurídi colegítimo “por los
cuales los bárbaros del nuevo mundo pudieron apoderarse de los españoles”. Así, la
guerra justa constituía el medio indirecto para la ocupación legítima o más que nada
legal, de España en América.
Guerra justa o guerra legítima es un concepto teológico-político desarrollado
fundamentalmente por teólogos y juristas católicos y cuya definición ha constituido
un esfuerzo serio para regular el derecho a la guerra, en la guerra y después de la
guerra. Se trata de una teoría propensa a las críticas, ya que algunos la interpretan
como un incentivo para legitimar guerras.Sin embargo este concepto era falaz.
Cuando esta teoría aparece, ya había guerras (más que ahora, aunque menos
cruentas), así que sus principales aportaciones establecen condiciones para que las
guerras sean justificables (de hecho, muchas no pasarían el filtro). Así, la Teoría de
la Guerra Justa se ubica en un punto intermedio entre el realismo (que rechaza la
valoración moral de las guerras, aceptándose todas, de facto) y el pacifismo (que no
concibe la justificación moral de ninguna).
Estableció, en De potestate civili, las bases teóricas del derecho internacional
moderno, del cual es considerado el fundador junto con Hugo Grocio. Fue uno de
los primeros en proponer la idea de una comunidad de todos los pueblos fundada en
el derecho natural, y no basar las relaciones internacionales simplemente en el uso
de la fuerza. Mientras que Nicolás Maquiavelo consideraba al Estado como un
conjunto moralmente autónomo (y que, por tanto, no podía ser juzgado según
normas externas), en Vitoria la actuación en el mundo tiene límites morales.

Su obra De indis recoge las reelecciones en las que expresó su postura ante el
conocimiento de diversos excesos cometidos en las tierras conquistadas en
América. En ella afirma que los indios no son seres inferiores, sino que poseen los
mismos derechos que cualquier ser humano y son dueños de sus tierras y bienes.
● Este fue una aportación al Ius gentium (derecho de gentes).
● Vitoria es muy respetado por su valía intelectual, fue consultado por el rey
Carlos I, así como sus ideas y las de fray Bartolomé de las Casas fueron
escuchadas en las Cortes. Gracias a estos dos religiosos, en 1542 se
promulgaron las Leyes de Indias, que afirmaron que los indios eran seres
humanos libres y los ponía bajo la protección directa de la Corona.
● Después de la muerte de Vitoria, el propio las Casas y varios de sus
discípulos (Cano, Soto, Carranza) protagonizaron la Junta de Valladolid
(1550) donde se utilizaron contra Juan Ginés de Sepúlveda los argumentos
de Vitoria sobre cuáles eran Justos Títulos para la conquista de América y
cuáles injustos, esto en la llamada polémica de los naturales.

Concepción Vitoriana

Vitoria no fundó, naturalmente, el Ius Gentium clásico-medieval, sino el Derecho


Internacional de la era moderna. El pensamiento de Vitoria radica en su concepción
del Derecho Internacional como un conjunto de normas jurídicas en interés de la
Humanidad, y no, como hasta entonces se entendía, en interés de los Estados que
las adoptan . En su primera Relección sobre los Indios Vitoria declara que el objeto
del sistema jurídico internacional que estaba configurando era ‘el bien común de
todos

El problema era identificar un poder legislativo internacional con autoridad para


promulgar normas jurídicas en interés de la Humanidad.
La solución visionaria que encontró Vitoria fue inventarse la sociedad
internacional, algo que no existía hasta entonces, y que incluía a todos los Estados
del mundo.
● Las normas jurídicas en interés de la Humanidad se adoptarían ya que se
tiene el acuerdo general de los Estados miembros de la sociedad
internacional, o, como lo diría Vitoria, por ‘el consenso de la mayor parte de
todo el orbe’ .
● El hecho de que fuera posible adoptar decisiones de este modo reflejaba una
concepción del conjunto de las naciones como una entidad política, ya que
nadie entendería que una multitud desagregada adoptará decisiones por
mayoría.

Inicios de la teoría

Finalmente, existía una relación, en la cual, las normas que efectivamente se


aprobaron por consenso de la sociedad internacional tenían que ser aplicadas por
cada uno de los Estados que la componen, respetando la autoridad política
reconocida a la sociedad internacional
● Obviamente dirigidas al bien común de la humanidad, para poder generar su
propósito. Esas normas no eran acuerdos aplicados a quienes lo hubieran
consentido, sino que eran verdaderas leyes de aplicación general, lo que
tendría ‘fuerza de ley, aun con la oposición de los demás’
● Así es como Vitoria confirió universalidad al Derecho Internacional.

Vitoria percibió con claridad que si el cometido del Derecho Internacional era
promover el bien común de la Humanidad, no podía dejar sin regulación una
cuestión de impacto sobre ese bien común, lo que lo llevó a dedicar una de sus
relecciones específicamente al llamado Derecho de Guerra, basado en la doctrina
cristiana de la Guerra Justa. Es algo que tendría una especial trascendencia
en el desarrollo del Derecho Internacional como disciplina científica, ya que a partir
de entonces todos los grandes internacionalistas (Suárez, Grocio, Pufendorf o Kant)
dedicarían a esta cuestión un tratado más detallado sobre un aspecto concreto y
particular. Lo que hizo Vitoria fue, en esencia, fundir la doctrina cristiana de la
Guerra Justa con la doctrina clásica del Ius Gentium, obteniendo como resultado lo
que sería el núcleo fundacional del Derecho Internacional moderno.
Fue el fundador de una escuela de importantes teólogos, principalmente dominicos,
que tuvieron una importancia decisiva en el Concilio de Trento.

Con la incorporación de la doctrina de la Guerra Justa, el Derecho Internacional


moderno adquirió una cierta amplitud en la regulación de las relaciones
internacionales, pero Vitoria incorporaría importantes elementos adicionales, como
● el reconocimiento de derechos humanos universales, a los que se refería
como ‘derechos naturales’ de la persona;
● el principio jurídico de cooperación internacional entre los Estados, al que se
refería como principio de ‘amistad y sociedad humana’;
● El principio de paz y seguridad internacionales, al que se refería en estos
mismos términos.
● Finalmente, el Derecho Internacional adquirió integridad en la obra de Vitoria
como resultado de un ensamblaje racional de las normas y principios
jurídicos existentes, con el fin de servir lo mejor posible a la Humanidad. Esto
implicaba integrar normas y principios jurídicos de diferente origen (Derecho
Convencional y Consuetudinario, por ejemplo) así como normas y principios
jurídicos que pudieran ser contradictorios. Si, por ejemplo, varios Estados
tuvieran un tratado para la defensa común, el tratado entraría a formar parte
del Derecho Internacional, ya que sus fines serían acordes al principio de paz
y seguridad internacionales, y, por tanto, al interés general de la Humanidad.
Pero si el tratado tuviera como fin la agresión a otros países, carecería por
completo de validez jurídica al contravenir el principio de paz y seguridad
internacionales, esencial al interés general de la Humanidad. Una vez
realizada esta triple transformación (en términos de universalidad,
generalidad e integridad) el derecho de gentes dejaría de ser una agregación
de normas transfronterizas, relativamente marginales, y adoptadas en interés
de los Estados, para convertirse en lo que hoy se conoce como Derecho
Internacional; hasta ese momento nadie había planteado nada semejante.
Lo que hizo Vitoria fue, básicamente, fundir la doctrina cristiana de la Guerra Justa
con la doctrina clásica del Ius Gentium, obteniendo como resultado lo que sería el
núcleo fundacional del Derecho Internacional Moderno

7)¿Quién fue Hugo Grocio? (1645) aportaciones al derecho


Internacional Público y su polémica con el jurista inglés Jhon
Selden

¿Quién fue Hugo Grocio?:

Hugo Grocio o también conocido como Hugo van Groot nació en la población de
Delft, Países Bajos y murió en Rostock, Alemania el 28 de agosto de 1645. (52 años
falleció)

Cuando cumplió 11 años, comenzó los estudios de derecho en la Universidad de


Leiden. Inicialmente trabajó como abogado, pero después se orientó hacia la
política, al punto de verse envuelto en una querella de carácter político religioso, que
le dio cadena perpetua en 1619, hasta que pudo escapar de la cárcel dos años
después, gracias a la ayuda de su esposa.

Hugo Grocio se considera un importantísimo jurista, doctrinante, teólogo, filósofo y


escritor holandés cuya influencia tiene en la formación del derecho internacional.
Grocio abordó temas de la más diversa índole y sus trabajos van de la historia a la
literatura, la cual está relacionada con su pensamiento jurídico y sus aportaciones al
Derecho. Inaugura una nueva corriente sobre el Derecho natural y se le va a
considerar como: El gran sistematizador del Derecho Internacional.

Entre sus obras importantes podemos destacar:

● ‘De iure belli ac pacis’ o Del derecho de la Guerra y de la Paz (1625)


● ‘Mare Liberum’ (1609): Fue uno de los capítulos extraída de su obra
conocida como “De iure Praedae”
● ‘De Iure Praedae Commentarius’ o Derecho de Presa (1868)

Pensamiento de Hugo Grocio:

Para él, el hombre es social por naturaleza, por lo que las normas de convivencia
que hay en la sociedad son naturales e inherentes al ser humano De igual manera,
menciona que la sociedad es la asociación perfecta de hombres libres para proteger
sus derechos y que las normas, por el hecho de ser naturales, ni se pueden
cambiar, ni se pueden discutir. Además de hablar de los mares libres.

Dentro de sus: APORTACIONES DEL DERECHO INTERNACIONAL PÚBLICO

● En términos de principio, Grocio adoptará todos los postulados fundacionales


de Vitoria, reconociendo el Derecho Internacional como la ‘Ley de la
Sociedad Humana’
● Va a desarrollar importantes aspectos del Derecho Humanitario de Guerra
para la protección de los derechos naturales de combatientes y civiles
● Hugo Grocio, realizó aportes significativos a la estructura conceptual de esa
disciplina que hoy llamamos Derecho Internacional sinónimo de aquí debía
derivar del Derecho natural, el cual habría de proporcionar el marco filosófico
general para las diferentes ramas del Derecho.
● Define al Derecho Internacional como “aquel que por la voluntad de
todos los pueblos ha recibido su fuerza obligatoria’’
● Alimentó tanto al Derecho Internacional como al Derecho interno de los
Estados.
● Fue uno de los primeros de intento moderno en el que se trató al Derecho
desde una perspectiva racional y sistemática, al ocuparse del “Derecho de
gentes”, como un intento de abordar una problemática internacional en la cual
la guerra tuviese el carácter de “una excepción” y no el de ser una constante
naturalmente admitida.
● Acogió de Vitoria del Derecho Internacional como el sistema normativo
general de la sociedad internacional, diseñado para el bien común de la
Humanidad.
● Se le atribuye como un gran sistematizador del Derecho Internacional
Público, porque se encargó de reconocer su conocimiento enciclopédico de la
materia, así como de la disciplina.
● Y sobre todo él se va a distinguir por su adopción del principio de sociedad y
comunicación natural propugnado por Vitoria como base de la cooperación
internacional.
● Al igual hizo suyos los principios generales de ese nuevo sistema normativo,
como la protección de los derechos naturales de las personas, el deber de
cooperación entre los Estados, o la defensa de la paz y seguridad
internacional.

Dentro de sus obras, Hugo Grocio da pie a las primeras nociones del Derecho
Internacional Público, obras como: “Mare Liberum’’ y “De iure belli ac pacis” que son
textos fundamentales los cuales mencioné en un inició.

Mare Liberum remarca las primeras nociones del Derecho Internacional Público
para defender la libertad de navegación y de comercio. Desarrolló su teoría
distinguiendo entre el mar próximo que le da ciertos derechos al Estado y el mar
oceánico, que es totalmente libre. Sostiene que debe haber libre comunicación y
navegación, puesto que el mar no es propiedad de nadie.

Dentro del contexto, entre los siglos XV y XVII son el momento de rápida expansión
del comercio de ultramar, generó, una disputa por la pertenencia de las Indias
Orientales que habían sido recientemente “redescubiertas” por los portugueses. En
ese sentido, tanto España, Portugal, Inglaterra y Venecia alegaban, cada una por
separado, su dominio sobre grandes extensiones del mar, incluyendo también el
monopolio de la navegación y la pesca y así es como Grocio formulará una serie de
argumentos en favor de la libertad marítima, entendida ésta como libertad de
navegación, de pesca y de comercio, no sólo para Holanda sino para todas las
naciones en general. Destaca que las rutas de navegación o el propio mar, no
puede ser ocupado porque tiene ciertas características naturales que hacen
justamente imposible su ocupación y posesión reales.

De iure belli ac pacis: el cual propone el pasaje de un derecho metafísico, a uno


racional. Deja de lado el concepto de guerra justa e introduce uno nuevo, el no
discriminatorio de guerras «con independencia de la justicia de la causa. Sostiene
que, en el derecho internacional, no existen ni buenos ni malos, que son todos
iguales.

Este libro es tradicionalmente visto como el que destaca de manera sistemática los
principios del ‘ius gentium’ con el fin de tener un lugar preponderante en los asuntos
diplomáticos de la época

CONCLUSIÓN
Sus obras de Grocio muestran, en general, una adhesión entusiasta a los principios
universalistas del Derecho Internacional. Las cuales han conservado su influencia a
través del tiempo gracias a sus significativos aportes a la teoría del Derecho y, más
específicamente, al Derecho Internacional.

Entre los puntos que podemos destacar es que dará la introducción de:

● Un conjunto de concepciones propiamente modernas relativas a las formas


legítimas de adquisición del territorio por los Estados
● Al reconocimiento del mar como un bien radicalmente libre
● A la igualdad jurídica de los Estados soberanos
● Y que realmente Grocio buscó crear un sistema lógico de convivencia social
a través del derecho, basado en el Derecho Natural

POLÉMICA CON JOHN SELDEN

¿Quién fue? Nació el 16 abril de 1584 y falleció el 30 de noviembre de 1654.Es un


jurista inglé, un estudioso de las leyes y de las constituciones antiguas, considerado
como un estudioso de la ley judía y es considerado como ‘el jefe de los eruditos
reputados en esta tierra’atribuído por John Milton. Fue un contemporáneo de Hugo
Grocio

¿A qué se debe esta polémica? Hugo Grocio defendía el Mar Libre o Mare
Liberum y John Selden defendía el Mar cerrado o Mare Clausum.

Hugo Grocio era holandés por lo tanto representa a los países bajos el cual
defendía el mar libre, es decir, que el Estado no podía apropiarse del mar y
justamente lo señala en su libro ‘Mare Liberum’ y en respuesta a Grocio, el jurista
inglés John Selden que representa al Imperio Inglés que en ese entonces era una
marina poderosa, y a partir de ello argumentaba que el mar era tan capaz de
apropiarse por poderes soberanos como el territorio terrestre porque afirmaba que
no había una base histórica para que el mar fuera tratado de manera diferente a la
tierra, ni había nada inherente en la naturaleza del mar que impidiera que los
estados ejercieron dominio sobre partes de él.

Detrás de las ideas de Grocio y Selden se manifiesta un interés de sus países de


origen, John Selden representa al imperio Británico que no quería que las otras
naciones tuvieran un mar propio y un mar territorial propio, en cambio Hugo Grocio
se defendía a través del Derecho, diciendo que los ingleses no se podrían apropiar
del mar porque era propiedad de todos los Estado y es de aquí donde nace la idea
de una parte del mar del territorio del Estado lo más que se podía era de un alcance
de cañón de 3 millas, por eso se manifestó en el derecho marítimo del mar territorial
que el mar forma parte del territorio de un Estado por 3 millas, duró hasta 1958
donde se amplió a 6 millas y las Tercera Convención sobre el derecho del mar de
Jamaica de Kingston en donde se amplía a 12 millas de mar territorial.
Las ideas del mar libre y mar cerrado, reflejan la posición política de los Estados e n
función de sus recursos tanto marítimos como naturales.

A partir de esta polémica, se originó la batalla de los libros porque muchos autores
tomaron partida por las ideas de Hugo Grocio sobre el mar libre y otros por John
Selden sobre el mar cerrado y cada uno tenía sus u otra argumentos del porqué lo
consideraban como una , y es así como se escribieron muchos libros defendiendo el
mar libre y el mar cerrado.

8.Explica el fundamento obligatorio del derecho


internacional de acuerdo con el positivismo o voluntarismo y
de acuerdo con el objetivismo.

El positivismo o voluntarismo: Trata de la voluntad del individuo lo que le da esa


fuerza jurídica y obliga a los individuos en el ámbito interno a cumplir con el
derecho y en el ámbito internacional al Derecho Internacional. El fundamento
obligatoria del derecho internacional de acuerdo al positivismo es la voluntad
de los estados, su lado básico expresa que la suprema voluntad de estos es la que
les da contenido jurídico a las normas internacionales, y dentro de ellas podemos
ubicar a la teoría de autolimitación, voluntad común y la unión soviética.

En el ámbito interno las normas jurídicas son producto de la voluntad humana y que
existen por la voluntad humana y para esta voluntad, eso lo defendió Jean Jacques
Rousseau cuando dijo que la ‘Ley era la expresión de la voluntad general, es decir,
de la voluntad general de todo el pueblo, se manifiesta la voluntad en el ámbito
interno del individuo y es el legislador el que va por voluntad de legislador va a
establecer las leyes que van a obligar o las constituciones que van a obligar.

Base de la voluntad de Estado y fuera del voluntarismo o positivismo no existe


ningún otro derecho, desconoce el derecho Natural. El positivismo o voluntarismo se
basa en las teorías:

● TEORÍA DE LA AUTOLIMITACIÓN: Es de Georg Jellinek (1851- 1911). En


esta época el Estado era el único sujeto del Derecho Internacional por lo
tanto aplicada estas ideas que se originan en la Teoría General de Estado
desde el punto de vista interno y la filosofía del derecho, son aplicados al
Derecho Internacional. Jellinek partiendo de que en el ámbito interno la
voluntad es la que le da la fuerza obligatoria a la norma jurídica, dice que en
el ámbito Internacional es la voluntad soberana del estado, que se manifiesta
en dos principios, la autodeterminación y autolimitación. Dice que el Estado
se puede obligar en el derecho por una voluntad pero que al mismo tiempo
por otra voluntad se puede obligar a ese derecho por no haber otra voluntad
superior al Estado por su soberanía absoluta no tiene la obligación de seguir
otras normas. Esta Teoría nos lleva a un desorden del Derecho Internacional
porque si un Estado soberano se obligaba por una norma jurídica pero por
esa misma voluntad no cumple con esa norma jurídica más que por
autolimitación entonces será la negación del orden jurídico.

El positivismo o voluntarismo, únicamente reconoce a las fuentes del derecho


Internacional al tratado y a la costumbre.

● TEORÍA DE LA VOLUNTAD COLECTIVA: Que es la voluntad común,


desarrollada por Heinrich Triepel (1868- 1946) y por Dionisio Anzilotti (1857-
1950) Al no haber una autoridad supranacional a los Estados, es la voluntad
común de los Estados la que es esa fusión de las voluntades individuales de
los Estados en una voluntad general (vereinbarung) Es la que entre todos los
estados de manera expresa se convierte en Tratado y de manera tácita se
convierte en costumbre. Esa es la obligatoriedad, la voluntad común del
Estado.

Ejemplo: En una sentencia de un Tribunal colegiado se manifiesta a través de


la voluntad de los magistrados mayoritaria y unánime en un acto común que
es lo que le da la fuerza obligatoria a la norma jurídica.

● LA DOCTRINA SOVIÉTICA: Habla de una coordinación de voluntades, sería


lo mismo de una voluntad común que se va a manifestar coordinando
voluntades y esto es el fundamento obligatorio del Derecho Internacional.

El objetivismo: El subjetivismo dice que: la obligatoriedad del Derecho surge de un


elemento ajeno a la voluntad del Estado, pero no se ponen de acuerdo cuál es ese
elemento ajeno que es independiente de la voluntad del Estado que le da el
fundamento obligatorio al Derecho. Busca el fundamento obligatorio de la norma
jurídica fuera de la voluntad del Estado

ELEMENTOS OBJETIVOS → Para lo teólogos españoles y para los precursores del


Derecho Internacional, hablan de un derecho natural divino, para ellos Dios es la
fuente obligatoria del Derecho de un derecho natural, otros dicen que es la sociedad
puede ser ese elemento ajeno que la misma sociedad no depende de la voluntad
del individuo que se manifiesta en el aforismo que dice ‘ubi societas ibi ius’ depende
de que se viva en sociedad, otros que es la historia que es una sucesión de hechos
que no dependen de la voluntad del individuo, ni del Estado y es lo que le da el
carácter objetivista la obligatoriedad.

Kelsen: Hablaba de una norma hipotética fundamental que le daba el fundamento


obligatorio que no se podía demostrar y era independiente de la voluntad del
Estado.

● LA ESCUELA OBJETIVISTA NORMATIVISTA DEL DERECHO DE LA


ESCUELA AUSTRIACA: Representada por Hans Kelsen y Aldred Ross
donde nos habla de una norma hipotética fundamental que es indemostrable,
pero esta norma es la pacta sunt servanda, los tratados deben de cumplirse,
deben de observarse y de buena fé y de aquí deriva su sistema piramidal en
donde una va derivando de a otra su obligatoriedad pero no depende de
ninguna voluntad, depende de una hipótesis fundamental que es una norma
no demostrable.

● EL OBJETIVISMO REALISTA BIOPSICOLÓGICO DE LA ESCUELA


FRANCESA: El verdadero sujeto del Derecho Internacional es el individuo y
que el Estado es una afición y habla de un desdoblamiento funcional: El
individuo actúa como privado o como funcionario público. Es la sociedad la
que produce el propio derecho y es biosociología la sociedad al vivir los
Estados tienen que encontrar normas que las haga obligatorias para la buena
concurrencia, para la solidaridad que es la base de todo y la única fuente es
ese hecho social que surge de la sociedad y que se impone el hecho a los
individuos como a los Estados por la solidaridad. No hay ninguna voluntad
que intervenga, la única voluntad de la obligatoriedad del derecho es un
elemento ajeno a la voluntad del Estado.

CONCLUSIÓN

Entonces, podemos decir que el fundamento obligatorio del Derecho Internacional


de acuerdo con el objetivismo es que tratan de encontrar fuera de la voluntad de los
estados, no depende de la voluntad ni del Estado, ni del individuo, y por lo tanto se
funda en una norma fundamental a diferencia de la Voluntarista, que si se expresa la
suprema voluntad que es lo que le da contenido jurídico y que se concibe que el
Derecho Internacional se funda en el consentimiento de los Estados y en la voluntad
de los sujetos o bien algo independiente a la voluntad de Estado como la sociedad
‘ubi societas ubi ius’ que produce sus propias normas y que en el ámbito interno lo
único que hace es recoger la problemática que tiene la sociedad y la convierte en
ley, pero no crea el derecho.

9. Explica las relaciones entre el derecho interno y el derecho


internacional, según el positivismo que nos lleva a un
dualismo.

¿Qué es el Derecho Internacional?

El Derecho interno es el conjunto de normas que regulan las relaciones entre


individuos o instituciones o de estos con el Estado, se caracteriza porque sus
normas, con carácter general, emanan de instituciones determinadas y se imponen
a los destinatarios, siendo posible la aplicación coactiva. El término se usa en
contraposición al Derecho Internacional,

¿Qué es el derecho internacional?

Es el que regula las relaciones entre Estados u otros sujetos de derecho


internacional. Este surge de la coordinación y acuerdo entre los diversos sujetos y
no existe un mecanismo consolidado de aplicación coactiva del Derecho.

Relación

Cada Estado genera su orden jurídico interno y participa con los demás estados, en
una relación de igualdad jurídica y en la elaboración de normas internacionales. La
coexistencia de estos sistemas jurídicos genera problemas en sus relaciones, por
ejemplo ́¿El derecho internacional puede ser aplicado directamente en el ámbito
interno de los Estados o necesita ser aplicado directamente en el ámbito interno de
los Estados o si se necesita para eso una norma del derecho nacional que lo integre
a este sistema jurídico?́ o ‘Establecer su relación jerárquica con las demás normas
del derecho nacional o interno.’

Se han desarrollado dos teorías principales para resolver estos conceptos.

1. Teorías monistas
2. Teorías dualistas

TEORÍAS MONISTAS

Un objetivismo que nos lleva a un monismo.

La concepción monista parte de la base de la unidad del conjunto de normas


jurídicas. Se acepta el principio de subordinación, según el cual todas las normas
jurídicas se encuentran subordinadas las unas a las otras, en un orden
rigurosamente jerárquico. Existen dos corrientes doctrinarias conforme.

Las relaciones entre el derecho internacional y el derecho interno han sido


doctrinariamente enfocadas.

Monismo con primacía del Derecho Nacional:

Para este monismo, existe un único ordenamiento jurídico y en el cual el derecho


nacional es jerárquicamente superior al internacional. Éste está subordinado al
interno.

Esta solución considera, pues, que el derecho internacional depende del nacional
porque cada Estado fija libremente su política exterior, señala omnímodamente
cuáles son sus compromisos internacionales e, inclusive, en el orden de todo
Estado se determina cuáles son los organismos estatales encargados de obligar
jurídico internacionalmente al Estado y dentro de qué condiciones.

Las consecuencias del monismo con primacía del derecho nacional;

A. La norma interna violatoria del derecho internacional es válida.


B. El juez interno siempre debe aplicar la norma violatoria del derecho
internacional.
C. La norma del derecho de gentes necesita ser incorporada al derecho
nacional.

Monismo con primacía del Derecho Internacional: A esta corriente pertenecen


autores como Kelsen Kunz, Verdross y Lauterpacht, principalmente Kelsen. Los
doctrinantes de esta tendencia jurídica, piensan que el derecho internacional prima
sobre el derecho nacional, y por tanto, la validez

del ordenamiento jurídico general depende de aquel. Reviste dos matices, el radical
y el moderado.

Monismo radical, cuyos teóricos sostienen que toda norma de derecho interno
contraria al derecho internacional es nula “ab-initio” (desde el principio) Esta
concepción fue propugnada, en un primer momento, por la Escuela de Viena, en
particular por KELSEN, quien pensaba que el derecho nacional está subordinado al
internacional. Del segundo depende la validez del primero.

Monismo moderado o estructurado: cuyos teóricos estiman que el derecho


estatal o interno opuesto al derecho internacional no puede ser calificado de nulo
“ab initio”, sino que debe ser transformado por las autoridades del Estado porque de
lo contrario, de no ponerse en vigencia, extrañaría para el Estado que así
procediera, responsabilidad internacional. En este caso, lo que las mismas
autoridades deben hacer es adecuar el derecho interno a las nuevas circunstancias,
evitando así la ruptura de la unidad del sistema.

Para Valencia Restrepo, las consecuencias del monismo moderado o estructurado


son:

A. La norma interna violatoria del derecho internacional es válida


provisionalmente.
B. El juez interno debe aplicar la norma nacional contraria al derecho
internacional hasta que sea declarada anulada. Obviamente, tal aplicación
puede generar para un Estado responsabilidad internacional.
C. En la generalidad de los Estados, la norma de derecho internacional
convencional necesita ser incorporada al derecho nacional.

TEORÍAS DUALISTAS
El positivismo que nos lleva a un dualismo.

El positivismo hablara de dos órdenes jurídicos, interno e internacional, donde son


independientes uno de otros y no hay una norma obligatoria que emana de un orden
jurídico, hay un reenvío, del derecho interno al derecho internacional o al revés, en
cambio, el positivismo, objetivismo, nos lleva a un solo orden jurídico, existe una
interrelación en ellos, hay diferentes fuentes del derecho interno e internacional,
existen deferentes fuente sy dicen los positivistas que no no hay una norma que
obligue arriba de la consecuencia del estado, porque hay un reenvío, si es que hay
un conflicto y es el orden al cual se reenvía del que va a resolver

Esta teoría dualista es defendida por Triepel y Anzilotti, entre otros, pero siendo ellos
los más destacados, para quienes existen dos órdenes jurídicos totalmente
independientes, ya que el Derecho internacional y el interno tienen fuentes
diferentes y tratan de regular distintas realidades.

El dualismo como doctrina fue fundada por el jurista alemán Triepel, mencionada
posteriormente por el italiano Anzilotti, Triepel sosteniendo que las personas no
pueden nunca ser obligadas ni beneficiadas por las normas de derecho
internacional. Sólo el Estado puede ser obligado o favorecido por ellas, en sus
relaciones con los otros Estados. Para que las normas del derecho internacional
alcancen a los individuos deben ser transformadas en disposiciones de derecho
interno.

La teoría propone la coexistencia de dos órdenes jurídicos independientes, tanto el


derecho internacional como el derecho interno tienen su propio ámbito de validez y
su propio campo de acción. Esta tesis considera el derecho internacional y el
derecho interno como dos sistemas de derecho iguales, independientes y separados
que no se confunden y que, por tanto, no se puede decir que exista superioridad de
un ordenamiento sobre el otro.

Por tanto, como el Estado es soberano, la validez del orden constitucional es


independiente de su conformidad o no con el Derecho Internacional. La
consecuencia del incumplimiento de un tratado es hacer al Estado respectivo
responsable internacionalmente. Además, tratándose de dos sistemas autónomos,
entre los cuales no existe relación de dependencia o subordinación, la norma
internacional para recibir aplicación en el orden interno necesita ser transformada o
incorporada a éste, mediante acto de voluntad del legislador nacional.

Para Triepel “el derecho internacional y el derecho interno no sólo son partes
diferentes del Derecho, sino sistemas jurídicos diversos. Son dos círculos que están
en contacto íntimo, pero que no se superponen nunca La oposición por razones de
las fuentes y del contenido entre el derecho interno y el derecho internacional,
calificada como dualismo o pluralismo, hace convivir al derecho internacional con
tantos ordenamientos jurídicos como estados existan en las relaciones
internacionales.

Para el dualismo, las relaciones entre el Derecho Internacional y el derecho interno


se rigen por el principio de la coordinación, del cual pueden extraerse dos
consecuencias:

A. No puede existir, en ninguno de los dos sistemas, norma obligatoria alguna


que emane del otro.
B. No pueden suscitarse entre uno y otro sistema conflictos de ninguna
naturaleza sino únicamente reenvíos. El reenvío, retorno o remisión se
origina en el hecho de que un sistema legal no se limita a señalar las
condiciones en que es aplicable su propio derecho sino que reconoce la
autoridad de otro sistema respecto de la materia controvertida.

Como el Estado es soberano, la validez del orden constitucional es independiente


de su conformidad o no con el Derecho Internacional. Las relaciones entre el
Derecho Internacional y La posición dualista llevada a la práctica }

A. Una norma interna violatoria del derecho internacional es válida.


B. El juez interno siempre debe aplicar la norma violatoria del derecho
internacional. Pero como es una norma contraria a éste, que puede acarrear
responsabilidad jurídico-internacional, que se hace efectiva en el ámbito extra
estatal porque los Estados son llamados a hacer cumplir esa ley y, en el
derecho internacional convencional de la comunidad internacional
organizada, sería un organismo internacional o supranacional. Es ahí donde
se hace efectiva la norma. Luego, ambos órdenes son igualmente válidos o
vinculantes, aunque sean contradictorios.
C. La norma del derecho internacional necesita ser incorporada al derecho
interno. Los autores dualistas califican de recepción o reenvío a la
reproducción de las normas internacionales por el derecho interno (Valencia
Restreo, 2008:.139

El derecho internacional diferiría del derecho interno por:

1. Sus sujetos: El estado es el sujeto del derecho Internacional y los individuos


son sujetos del derecho interno.
2. Fuentes: El derecho internacional es la voluntad común de los Estados y el
derecho interno es la voluntad del estado.
3. Naturaleza distinta: cada uno tiene su propia esfera de competencia que les
sería propia .

De esta manera, para que una norma del derecho internacional pudiera ser
invocada y aplicada en el ordenamiento interno. Se realiza un proceso conocido
como la transformación o incorporación de la norma.
Según esta doctrina, un acto lícito para el derecho interno podría contravenir
obligaciones internacionales del Estado. La violación del derecho internacional por
una norma derecho interno daría lugar a la responsabilidad internacional del Estado,
pero no invalidaría la normar interna.

Las críticas a la teoría dualista se centran en el hecho de que ciertas normas


jurídicas internacionales penetrarían directamente en las legislaciones internas sin la
necesidad de aplicar un proceso de transformación del derecho internacional en
derecho interno. Por esto se expresa que no existe diversidad de sujetos, ni de
fuentes.

La existencia de normas válidas para un ordenamiento e inválidas para el otro


tampoco sería prueba definitiva de la dualidad de los sistemas jurídicos, pues en
ciertos órdenes internos existe también la posibilidad de que rijan normas contrarias
a la constitución en tanto no se declaren inválidas y tal declaración sólo produce
efectos para el caso que se juzga.

Podría concluirse que la teoría dualista no alcanza a dar una respuesta coherente
para la solución global de los problemas que plantean las relaciones del derecho
internacional e interno. Sin embargo, presta utilidad jurídica en cuanto encuadra
racionalmente las áreas normativas en conflicto.

Las relaciones en conjunto

Los Estados, al regular el método de integración de las normas del derecho


internacional en derecho interno, puede disponer directa integración de aquellas o
establecer que las normas internacionales deben ser incorporadas a través de
disposiciones de derecho interno que operen la transformación de las normas
internacionales en normas internas.

En cuanto a la jerarquía que las normas de derecho internacional se les asigna en


los ordenamientos jurídicos nacionales. si estos en general afirman la prevalencia
de los principios constitucionales con relación a las normas internacionales, difieren
las soluciones cuando se trata de determinar la prelación o jerarquía entre estas y
las leyes internas. Las constituciones más modernas tienden a asignar prioridad a
los tratados sobre las leyes internas, en tanto otros sistemas constitucionales, como
la nuestra, afirma la primacía de la constitución precisan la igual jerarquía de los
tratados y las leyes dictadas por el Congreso.

10. Define el derecho internacional público, según el Dr.


Modesto Seara Vázquez.
● Un rasgo distintivo de los estudios del doctor Seara, es su análisis
interdisciplinario que da un sello original, y casi podríamos decir,
revolucionario.

Por otro lado, el derecho internacional público se encuentra en una etapa


todavía primitiva y rudimentaria que carece de órganos centralizadores de la
creación de las normas jurídicas o de la aplicación de sanciones.
Los medios a través de los cuales son creadas las normas jurídicas en el derecho
internacional, o la forma en que operan las sanciones, son distintos a los medios
que conocemos en los ordenamientos internos.

En ausencia de un órgano centralizador capaz de aplicar sanciones por la dificultad


que revestirá aplicarlas a países con un gran potencial atómico, el doctor Seara
Vázquez concibe a la sanción social como la sanción dominante en el ámbito
jurídico internacional.
La sanción social es el desprestigio que sufre un Estado por violar el derecho
internacional, el aislacionismo en que cac, la disminución del comercio v las
inversiones en el país que comete la falta.
El doctor adopta una posición monista, es decir, interpreta al derecho internacional y
al derecho interno como departamentos de un mismo sistema, de un todo jurídico
compacto y homogéneo.

El individuo no ha sido sujeto del derecho internacional aun cuando no ha carecido


de ciertas figuras protectoras como los regimenes sobre minorías o la protección
diplomática.
El individuo como tal ha sido igualmente responsable de crímenes contra la
humanidad como la piratería,el genocidio, el espionaje, etcétera; sin embargo, él
jamás ha sido, por sí mismo, sujeto del derecho internacional.

El Derecho internacional se ha entendido como el conjunto de normas jurídicas que


regulan las relaciones entre los Estados y las Organizaciones internacionales.

El DIP, para el Doctor Seara Vázquez es:

“Aparece como algo confuso entre un conjunto normativo destinado a regular


relaciones entre los individuos, como miembros de la comunidad universal y un
conjunto normativo que debe reglamentar relaciones entre instituciones humanas.
Cuando el Estado como forma institucional de organización humana cobra
preeminencia, el DERECHO INTERNACIONAL desplaza a lo que podría llamarse,
según el Doctor Seara, el DERECHO UNIVERSAL”

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