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Ano 2\Numero3 DIRECTORIO Dr, Luis Videgaray Caso Seeretaio de Hacienda y Créito Pabiico Dr, Femando Aportela Rodriguez ‘Subeccratrie de Hacienda y Grito Pablco Dr. Miguel Messmacher Linartas Subsectetario de ingresos Ue. Femando Galindo Favela, ‘Subseeratario de Egresoe Uc. Maria Femanda Casanueva de Diego ‘fill Mayor Dr, Oswaldo Santin Quiroz Coordinedor de Asesores Lc, Pola Strauss Seidler “Thule dels Unidad de Comunicacion Socal 1 Vocera BANCO MEXICO Dr. Agustin Garstens Garstens Dr, Manuel Ramos Francia ‘Subgobeenador Uc. Roberto Del Custo Legaspi ‘Subgobernador ic, Manuel Sénchez Gonzalez ‘Subgobernader Lic Alejandro Alegre Rabiela ‘Director General de Emision Mira, Isabel Morales Pasantes Diectore do Programacién yDleiibusion ‘de Efectos Staff Editorial CECA Octavio César M.G. Dirccion Ector oO M Ing. Luis Gonzaga Sanchez Espinosa Director Corprative ce Aerinistacién y ‘Reuntoe Joriicos Ing. Juan Manuel Shiguetomi Villegas Diretor Corportive de Operacones. CP, Juana Garcia Anaya Dirgetora Corporativa de Finanzas Ing. Gilberto Ruiz Durdn Noguera Diraetor Coporatva de Deesrrlioy Enlace Uc. Radl Montalvo Ferréez Director de Acervo Numismatcey Documental CP. Katya Castillo de la Petia ‘Subdireceidn Eltril LA Yozadira Barn Garcia ‘Ma. Esther Aguayo Salazar Martha Patricia Martin Pérez Ma. Teresa Quiroz Ramirez Erka de Jesis Zérate Arista Gestion Ing. Abigail Sanchez Rodriguez Planeaclon Estratégiea D.G. Norma Verdnica Banda Reyes .G. Julio César Bravo Hemandez ‘ise Edoria Miro, Sergio Benitez LCC Pedro Rodriguez Miro. Felipe Zapata SHCP/Cuitura MIDE/BANXICO Fotograia 9 Pica 1 era as (Sa wF é astO® ie Ara Es una publicacin timestal de Casa de Moneda cae ee a et) nome ears eee aa aa tees Cee Se es Cee eee al Thule en Derechot de Autor: En trémite rn eee eee ener a Sed ag de Cerezo 101-A, Las Flores, San Luis Potos, SLP. 7 Ehcontenido de los artieulos es responsabilidad exdusiva de los autores. Todos los derechos reservados, prohibida le reproduccién parcial 0 Noe en aur eae) Ce ees ern ay Ce ea pe eee eee re nee rete a ee ee et eee eee ene eee sce Peotone pen eee eee earned ue significa México; siendo esta la marca que eee aetna eee feerrt teeta hae NAVEGACION DEL TIEMPO LUIS GONZAGA SANCHEZ ESPINOSA Difundir la cultura numismatica y dar a conocer el prestigio y ta tradicion de la primera y mas antigua Casa de Moneda de América, es, 1 objetivo principal de nuestra Revista institucional CECA: un producto nnovisimo, pero leno de la historia, ja memoria y la tradicién acufiadas {lo largo de 478 aos, desde aquel dia de 1535 en que Don Antonio de Mendoza, Primer Virrey de la Nueva Espatia, puso pie en tierras, americanas para convertrel oro la plata en monedas. Actualmente, la Ceca de Casa de Moneda de México es, sin duda alguna, una do las mas apreciadas, respotadas y reconocidas del mundo, ¥ la CECA que hoy esta on manos de su lector, ariba a buen puerto a su tercer niimero; como aquella Nao de China que eruzabe Pacifico de Acapulco a Manila para trasladar, anvalmente y durante trescientos afos, un millon de pesos de plata mexicanos para | mercado asitico. Entre los tesores contenidos en este cofre de papel, se cuentan las historias asombrosas y las crénicas imaginarias donde las monedas y los billetes. se convierten en los personajes principales cuya navegacién del tiempo Incrementaré nuestra curiosidad e interés por la numismatica, a la vez que nos permiten conocer el valor del arte ‘como dinero y del dinero como arte. Todo bafo el suave golpe de las ‘las que provoca cada vuelta de pagina. 1 mundo cambia de rostro a cada instante y aquello que hoy nos parece novedeso, mariana doja de serlo; pero la moneda, ya sea en ‘papel o en metal, mantiene esa misteriosa cualidad eterna que le da lun valor superior. Por ello vale la pena retratar, en documentos como ‘sta Revista institucional CECA, aquelio que nos parece esencial para mantener vivo y activo el valor de la cultura numismatica, tanto de México como del mundo. Navegando en aguas productivas hacia su quinto siglo de vida inspirada por sus grandes logros, Casa de Moneda de México se prepara para los retos de los nuevos tiempos, y con fimeza se abre paso hacia el vasto horizonte de la modemidad, sin perder de vista la ‘carga cultural que le significa ser una de las més antiguas instituciones {dol siempre Nuevo Mundo. Por elo invito al lector a que despleguemos, Juntos, las velas de este tercer numero de CECA.& LA CAJA DE URIAS ALBERTO CHIMAL —2Sefiot Nava? —Encantado. Qué bueno que vino. Le explico, seftor Kustos: siempre uo hablo de esto pienso en Jorge Acevedo, aquel que escribio eso testimonio tan famoso. .Cual? {Nolo conoce? Seguro que sf. Seguramente recuerda aquella frase de que *E! dinero en verdad vuelve loca a la gente”. —Suena a libro de autoayuda. —iQué dice! El testimonio del sefior Acevedo gira alrededor de una moneda que literalmente vuelve loco al que la ve. gRealmente no lo ha leido? —{EI autor se llama Acevedo? —iSi, claro! zn lo concce? —{No se llama asi uno que escrive novelas de narcos? (Pausa muy incémoda.) —No, no tiene nada que ver. Mire.... en resumen: Acevedo vio la moneda fatal una sola vez: diez segundos escasos. Y eso bast6. Pobre hombre. En menos de un afio murié. Y estaba en un hospital Psiquiatrico. Yano comia. No hablaba. Era como un vegetal —Conozco casos asi Pero éste se debe, se debe ospeciticamente, a a moneda! Eso es !0 ue lo hace especial. Una moneda... magica, digamos, que acasiona eso. La fjacion total y la locura. En su escrito, Acevedo cuenta como poco a poco le va siendo mas dificil pensar en nada que no sea la moneda. Se come la. mente de quien la ha visto, dice. —Es0 suena como un cuento de Lovecraft —Bueno, mire, vamos al grano. Nava se levanta. Todos en el café voltean a mirarlo. Se sonroja y vuelve a sentarse, ‘Agradece, en silencio, que Kustos no esté sonriendo. —Lo interesante de mi coleccién, que se llama la Caja de Urias, que ‘me encantaria que usted conociese..., e8 que contiene 34 monedas: mégicas, todas distintas entre si. 134 monedas! Lo que sucede entonces es (0 asi lo piensa el sefior Nava) es un rmilagro: La cara de Horacio Kustos deja de ser una de duda y se convierte en otra, de asombro. De maravilla —Y todas diferentes a la moneda que destuyé a Acevedo. Est la moneda de un centavo de dolar canadionse que colorea de azul la piel de quien fa toca, por ejemplo. El efecto es temporal... pero también esta la moneda de una lira italiana que da lepra. iLepral —Y la moneda de diez pesos mexicanos que cambia de sexo @ quien {a oye tintinear. La de un euro que hace avanzer exactamente un afio a quien la gasta —éUn afo en el tiempo? —Quien la gasta desaparece durante un affo entero y reaparece tentonces exactamente en el mismo sitio, sin conciencia alguna del tiempo transcurrido. Y asi sucesivamente, por monedas que moditican la materia, las cconvicciones, los arboles genealdgicos; que provocan reldmpagos y emanaciones fétidas; que cosquillean en lugares recénditos del ‘cuerpo; que cantan y tiemblan y cuentan historias. —La sltima de todas es la mas rara de todas. Otra de esas que no coeben ser vistas... Pero escuche, escuche, sefior Kustos: su valor {85 un ntimero imaginario, y el nombre de su divisa no puede ser pronunciado por bocas humanas. Lovecratt otra vez —iNo, nol Escuche. Su facultad es que a quien la mira se le cumple un deseo: el texto de Urias, el duefio original de la coleccién, dice ‘al anhelo mas profundo de su corazén"... Pero no esta caro como ‘sucede. De hecho, lo mas probable, segin se dice, es que ese deseo ‘se cumple sélo en la mente, sélo de modo ;subjetivo, digamos? Es algo similar a lo que le pasé a Acevedo, El que la mira se hunde fen un suefio: cree que el suefio se cumplié. Pero en realidad estd Cconvertido en un vegetal en su casa, en una calle, en un hospital Kustos lo mira, ahora, con inquietud. —Tiane que escribir de esto, sefior Kustos. Tiene que preservar la historia de estas monedas. Las he cuidado durante tanto tiempo... ¥ realmente el conocerlo a usted es un suefio hecho..., hecho. ‘Ahora los dos se miran con inquietud: con gran inquietud, mientras la {gente a su alrededor toma café, y re, y pasa un rato tan agradable ‘que no parece posible. 4 = ial’ I alee zi cot ja tl WI bis ACTUAL DELA FABRICA DDE BINLETESY CAJERO PRINCIPAL DEL BANCO DE MEXICO 2005-2011 P [/ z \ ‘Raiil Valdés, ena E o CG ee 6! LA FABRICACION DE LOS BILLE 10S & La FaeRicncin DE Ls DBITLETES LEXICAUOS RAUL VALDES GBatecedentes La historia de fos billetes mexicanos inicia en 1823, con la emisién ue hiciera Agustin de lturbide de los “haré buenos", que fueron Techazados por la poblacién en general. En la segunda mitad del siglo XIX (1865-1930), comenzaron a emitise los billetes do ‘banco, los tinicos con presencia nacional, emitides por el Banco Nacional de México y ei Banco de Londres y México e impresos, ‘en su mayoria, por la American Bank Note Co. de Nueva York, ‘que lograron una buena aceptacién. Durante la Revolucion, se ‘emitieron un sinlin de billetes que rpidamente perdian su valor, por no contar con respaldo alguno y por su facil falsificacién al sor impresos por cualquier medio y sin mayor disefio. En 1916, se intenta dar orden al mercado, con la emisién de los, “infaisticables’, impresos en la Oficina de Impresion de Hacienda de México, con impresiones de seguridad. Estos biletes tuvieron respaldo en oro pero fracasaron al limitarse su canje por metal Y porque no resultaron tan ‘infaisficables”. En la Constitucién de 1917 ya se contemplaba la “..emisién de billetes por medio de Un solo Banco, que controlaré el Gobierno Federal..”. El proyecto del banco tinico de emision se logré coneretar hasta 1925, con la fundacién del Banco de México, Los biletes mexicanos emitides ppor el Banco de México se mandaron hacer a la American Bank Note Co. de Nueva York, probablemente por la mala experiencia ‘con los “infasiicables", con elementos de seguridad acordes a la €poca. Estos billetes fueron primero, de aceptacién voluntaria y finalmente, partir de 1936 con poder Hiberatorio iimitado y ‘acoptacién forzosa. Hasta 1924, los billetos se recibian do la casa impresora sin sellos, series, claves y firmas imprimiéndose los, ‘ellos en los Talleres de Impresién de Estampillas y Valores (TIEV) de la Secretaria de Hacienda y el resto de las caracteristicas en la Seccion de imprenta de! Departamento de Emisién del Banco ‘de México, primer antecedente de la Fabrica de Billetes. A partir de ese afio, los billetes se comenzaron a adquirir totalmente terminados y se emitieron hasta 1978, aunque desde 1969 inicia ‘operaciones la Fabrica de Billetes del Banco de México, ésta ‘no contaba con las posibilidades para disefiar e Imprimir todos los billetes que hacian falta por lo que se realiz6 una susttucién ‘gradual del impresor, ya con disefios realizados por mexicanos e impresién también totalmente nacional Macimients de un Billete La idea de hacer un nuevo billete puede surgir por muchas razones, entre las que vale la pena mencionar el mantenerse pasos adelante de los falsficadores, cuando aparecen en ol mercado equipos 0 técnicas con los que se fecilta la comisién de dicho delito o cuando se realiza una falsificacién masiva de buena calidad. También cuando la inflacién hublere disminuido el poder adguisitvo de los billetes, para celebrar algun acontecimiento importante en la historia y finalmente, por cambios legales, tal ‘como ocurrié con ol cambio de nuestra unidad monotaria inciada al 1° de enero de 1993. Soret nc ara acs en) CMe my et eee fundamental sobre el motivo principal dol billte y algunas otras caractoristicas ‘generales tales como denominaciones a CS CeCe de reemplazar uno ya existente, las eee ae) ee cM) tun largo proceso de investigacién en ee ees Dee eee Rc ee cet) Ce en uc eee Coreen ea Ce ee ee eee ey Sroescceee Pe ce eee Ce ae) todo lo que ocurrié en tomo al motivo Cc Co cs See el ee erent ca ee re oe Ce eee) eee) bibliografica y visitan todos los sitios de ec nos eerie Ce a Cec eee ci Cece ne seguridad de vanguardia que dfcuten ee eS ee ee ne am a) pone ars tgs interesados en proteger sus biletes. La eet eae Coat) recopilar un catdlogo de elementos de Pete ee ‘que estudiar las falsificaciones que se hayan recibido y se hacen analisis de ieee Cr eee emacs Sem Cec ue ee eee eer eee Se ee el ee oa Eee nec ies eee aed Maa e hed ea) ee ee ce ae eee) ee ET ea) encuestas y grupos focales, entrevistas Ce rs eee ees SNC Lon eer ee eee valores y finalmente, con fabricantes de Ce ea mang recepcion de billetes. a ec a a aes Sacer s cee eC ey ee ae oe ee od ecm! Ce ee oe ce Ce ea Recta) eae Dee ees Coca ees See One es oe cmc ee oy Cee ree eed Banco de México para su aprobacién. eee ieee! Core Moreen CLs hay imitaciones Deere See res Por oto lado, hablando de los elementos de seguridad que se incorpocan en los Soetoro eT e ‘general y tenen la caracterstica de que so pueden observar y anaiizar sin 1 uso de ningun instrumento adicional mas que la vista y ol taco. El ee eee biltes require instrumentos o detectores para eee may Oe ee cee es Creel Creme eee co can vida, Ce Sore etd re ig Se ed eae eer ed ere ee nee eer eure ee Pe et Eee Ce ee es Bee eee ey Be ee are a ce ng tun lado, expliquen las caracteriscas do los billotes do manora ciara ect er et ene eee ence Finalmente, un buen sisiema de procurecisn de justcia para la persecucion del ee ee cone ere paso t ety Ce ed fina de disefio y creacién de todos los ee eee eee aero Perea) POE oe ee oe ee ues ei ce et ae a ‘mecénicos Cees Ce ee Cc or) repiten). Antiguamente, los primeros ee es Noe rs Poco ce tae es Coe ee ees ce ee ror) ee ccc ay eee en as et teed reas eee ee tee) eee a eas ‘Actualmente, para todo lo anterior, Ce ‘computadora con los que se desarrollan cee Cer aa eg eee ae oon EO oa a Ua SNe eae Pease eal buen retrato, puede tomar entre seis y eee Se ee ec) Bee ame mae ewe ee CeO TO Pre a ues Cee eee ae eee ted a impresion de los billotos es un Co uaa) Pe eat ee eC Nae Ta ecru et ke Cre eee a STC ai nC la eae ar cae Cte a wR ae Pee tea eee eee een ce kes ua Ce ee! ee ens tiempo de secado Ce er Finalmente, se tione la impresién eter eS eens) mae oer Pee ue ec) ieee cs A eee ca aed ete sect Pe aa Empague y Entrega La sitima etapa de ta fabricacién de Ln billete es esencialmente un filtro de calidad que se realiza en maquinas sapaces do procesar cuaronta billoos or segundo. segundo, se toma una fotografia digital a colores, se analiza por comparacién con el patrén “ideal” con tuna resolucion de 0.20 mm, se miden las propiedades magnéticas de los elementos correspondientes, se revisan la fluorescencia, las propiedades de infrarrojo y cualquier elemento “especial y s0 decide si ol billoto es adecuado ara. ser emitido; en caso contrario, se destruye. Los biletes que pasan la prueba, se empacan, etiquetando cada unidad de empaque (la menor cconteniendo mil piezas) con un c6digo de barras que servira para saber, de ahi en adelante hasta su entrega a un banco ‘comercial, por dénde pas6 y quién two ‘contacto con él Los mexicanos nos debemos sentir muy orgullosos de nuestros biletes, disefados y fabricados por mexicanos que ademas son, una obra de arte y muy Seguros”. EL SOLITARIO DE CARSON CITY OCTAVIO CESAR M. G. La ditima mariana de su vida, Walter S. revisé los obituarios de un periédico do 1992, presintiondo algo que hasta ese momento no se materializaba ‘como el temor inmrinente de morir. Ahi estaba el nombre de su madre, que yale parecia lejano, al igual que su mirada en a fotografia que pendia de un ‘lavo en la peque’ia sala de la casa que compartieron durante décadas. E! resto de su familia habia sembrado los campos de concentracién, durante la segunda guerra mundial, y florecido a las faldas de las montafias de Nevada, después del holocausto. Ignoraba sin embargo que atin tenfa un lazo sanguineo de segundo grado con Ariene M., quien hasta ese momento ‘se dedicaba a dar clases como eventual en una escuela de San Rafael, California, sin saber a su vez do la existencia de su primo hermano, quien doblé e| periédico para servr su itima taza de t6. EI timbre soné un par de veces, lo que le parecié extrafio, puss es0 no sucedia desde hacia meses, cuando los proveedores del servicio de gas fueron a notiicarie el corte del suministro. Afortunadamente, en aquella ‘ocasién contaba con un par de cientos de délares en su cartera para cubrir ‘21 adeudo, lo que le permitié pasar el invierno a salvo. El timbre zumbé de nuevo. Una vez hechos los célculos de sus adeudos, la Gtima mariana de su vida, Walter S. descubrié con felicidad que no le dobia nada a nadie, por lo que evitaria siquiera correr las cortinas para averiguar do quién co trataba, a posar do que el timbre se dojé escuchar fen tres ocasiones més. La insistencia fue derrotada por la paciencia. Su felicidad consistia en no tener que hablar con nadie. Se habia dado a s{ mismo el titulo nobilario de El Solitario de Carson City, No acostumbraba a salir de su casa mas alla de un par de cuadras, para ‘sacar un poco de dinero del banco @ ir a comprar algunos viveres, y sus propios vecinos mostraban poco interés en ese hombre viejo y hurai, tal ‘vez por su rostro un tanto cuanto desencajado, su mirada perdida o su voz lenta, baja y pausada, con la que apenas se cignaba a saludar. Eldesafecto de su entorna le parecia, sin embargo, agradablemeente saludable, pues de esa forma eludia las juntas vecinales, las jornadas electorales, las cconversaciones con los evangelistas, o las bromas pesadas de los chicos ‘en Halloween, ‘Cuando ol timbre dej6 de sonar y el silencio se apropié nuevamente de sus ppensamientos, Waltar S. dojé el periédico y su taza de té sobre la mesa, y ‘se dirigié hacia Ia cochera, cuya cortina plegadiza habia sido desvenciiada Por el Gxido del desuso y ia descomposicién de las hojas y las mariposas {de los muchos otofios y primaveras que pasé sin ser abierta. Ahi, en e ‘secreto de su soledad, removi6 con cuidado un centenar de cajas de municiones, para llevar a cabo el inventario que le habia instruido su madre, Minuciosamente, contaba y ordenaba las piezas de metal, sefialando en un cuadero las caracteristicas, denominaciones y origen de las mismas, ‘Cada una resplandecia con el evanescente espiritu de su propia magia. Esa ardua pero gozosa tarea le llevaba cuatro horas: tiempo suficiente para imaginar que su madre lo observaba como cuando le inculcé el placor de contar y ordenar. Al paso de los afios del ritual establecido a principios de los sesentas de! siglo veinte, el caudal del tesoro se increments lentamento, hasta convertise en una coleccién digna de un potentado, sin que nadie mas que él y su difunta madre lo supiera. Al concluir 6! inventario, suspiré satistecho al confirmar que la cifra final coincidia con la 412 EL SOLITARIO DE CARSON CITY & do la semana anterior: cionto cincuenta kilogramos de oro puro, divididos en ‘cinco mil Centenarios _mexicanos, Quiniontas Reina Elizabeth britanicas, ‘tes mil Francisco José austriacos y trescientas Aguilas de los Estados Unidos de América, entre otras series y ccolecciones, El foco de ochenta watts palidecta ante «1 brillo de todo ese oro acumullado, que volvié a la ceguera de su propio valor fen cuanto Walter S. salié de la cochera. Se sentia agotado, como si hubiera realizado un estuerzo sobrehumano. Su coraz6n le recordé el vuelo do los ccoliries, por lo que se cubrié con luna manta para descansar un par de minutos. EI rostro de su madre, en ‘quella fotografia que pendia do un ‘clavo en la pequefia sala de la casa ‘que compartieron durante décadas, paracié sonreirle. Ese amoroso gesto lo hizo sonreir a él a su vez, como en mil ovecientos sesenta y cuatro, cuando recibié su primera moneda dorada, Tenia sesenta y nueve afios, era suhora yy habia cumplido el deber encomendado ‘con lealiad y eficiencia, Tres semanas después, la cuadrilla de limpieza que habla llamado al timbre de su casa la dltima mafiana de su vida, regress para insisir:e! jardin estaba en sincero ‘abandono, la cochera rebosaba de hojas secas, matiposas musrtas y cadaveres de tordos, y era notoria la falta de energia eléctrica. Todo eso ameritaba luna severa reprimenda. Por si fuera poco, un olor a fletes descompuestos parecia fluir por debajo de las puertas para instalarse groseramente en las narices. Ofendidos, _preocupados, decididos a hacor justicia podtica con ‘escobas y limpiadores, llamaron a la policia. Asi debieron esperar un par de horas. Finalmente, entraron a la fuerza, EI Solitario de Carson City se volvis un fantasma famoso cuyo rostro desencajado de mirada perdida aparecié en las pantallas de televisién, primero de Nevada, luego de Los Estados Unidos de América y, después, de cada rincén del mundo; y no fal el vvecino que presumis haberlo saludado varias veces. Por su parte, Arlene M,, maestra sustituta en San Rafael, California, fue avisada sibitamente de tuna noticia que le provocé mas angustia ¥ dolores de cabeza que felicidad: ella ‘era la Gnica heredera de Walter S., un primo desconocido tan lejano coma las historias de la segunda guerra mundial y tan extrafio como los suburbios de Carson City. Cuando vio venir la turba de micréfonos y flashazos, cerré las cortinas de su casa y decidié hacer ‘caso omiso del teléfono y el timbre para siempre, Como un tigre de oro que incendia el mediodia, el tesoro de diez millones de délares que surgié de la sombra de una ‘cochera, reclamaba a su nueva ama.f “ibis mit tail j a M8] apy es Teo cnng teat CANADA: TRADICION Y MODERNIDAD NUMISMATICAS ALEX REEVES En servicio desde 1908, la Royal Canadian Mint (RCM) es una ‘empresa estatal comercial que se encarga, on representacién de! Gobierno de Canadé, de la fabricacion de todas las monedas de circulacién canadionses y de la gestion del sistema de distribucién de monedas. Hoy en dia es uno de los principales productores mundiales de monedas de circulacién, monedas numismiticas, medallas y productos de inversion. Asimismo, la RCM explola refinerias de oro y do plata y ofroce servicios de almacenamionto de alta soguridad para, metales preciosos, Combinando métodos de trabajo modemos con mas de un sigio de ‘experiencia en produccién de moneda, ja RCM atiendo a sus clientes dde Canada y del resto del mundo desde sus plantas establecidas en (Ottawa (Provincia de Ontario) y en Winnipeg (Provincia de Manitoba). Sey que so utliz6 por primera vez en 2000, de bajas denominaciones de Canada ‘Asimismo, graduando or de cada capa defimetal ‘comtn, la RCM crea undllma electromagnetic, dara Gada wienominacién de moneda Glave para combat el faude BelUimmanera quo, simpleri@fihosta fuera dal aleance de TemonedaBoccincrias ~~. Hoy en dia. més delBo,p aise cc Yede ©! mundo mantienen ‘eneulacién mas de 20 ioe de monedas fabicadas ‘con@sta teenologla d= accra. enchapaso multcapa y la FCM eentinda impulsande @ Iabiostskia,rumismética con ‘nova nes adjonales, ‘ en 2004, ‘euande fa ROM introdujo una moneda de 25 Ccefitavos especial en conmemoracién de ‘los veteranos ‘de guerra canadienses, se convirio en la primera ceca del ‘mundo en fabricar monedas de circulacion de cofores. Desdo ‘entonces, el perfeccionamiento de su tecnologia no ¢6lo le ha ppermitide mejorar la dureblidad de las aplicaciones de color, ssino también crear disefios de gran complejidad y de colores, Uuniformemente orientados, mediante una linea automatizada’ de pintado de gran velocidad que fue ereada en colaboracién, ‘con un socio fabricante canadiense. Actualmente, después ‘que la RCM fabricara la primera moneda de citculacién de colores para Fiji en 2008, més y més monedas que nartan ccautivantes historias en brilantes colores circulan no sélo en ‘Canada sino también en el resto del planeta, En 2012, la RCM concluyé la modemizacién de su sistema, de acufacién, cambiando la composicion de sus monedas de circulacién de 1 y de 2 délates por el acero enchiavado mmulticapa. Estas dos monedas de crculacion se conviieron ‘en una plataforma a partir de ta cual se crearon avanzadas ccaractersticas de seguridad que permitioron iustrar la ‘capacidad inigualada do la RCM para protogor la intecridad do gstas monodas de circulacién, que figuran entro las de ddofninaciones mas altas del mundo, Entre las caracteristicas ‘de seguridad de las monedas e@nadienses de 1 y de 2 dolares se destaca la incorporacion de un patton de pequeria hoa de arce (grabado en troqueles quo se estampan sobre reverso de las monedis) y que no puede ser replicado sin la ‘excusiva tecnologia de la RCM. La adicién de una imagen Virtual y de grabado sobre el canto de las monedas dumenta fa complejidad y la seguridad de las monedas canadienses

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