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CLASE 12 Las Politicas Publicas - Meny y Thoening
CLASE 12 Las Politicas Publicas - Meny y Thoening
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• ARlEL CIENCIA pOLtncA
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JOSEP M. I
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EL MARCO CONCEPTUAL
'P- [ Desde ~l punto de vista del :milisis. una política se presenta bajo la forma
lO<: de ~n conjunto de pr:kticJ.s \"¿~normas que emanm d~ uno o de n.r:ios :lct?-
- ~~- res.público5'.'. . .' .
En un momento dado. c::nun contexto dado. un:l autoridad adopta pr.ícri~
C:l5 de determinado 2¿nero. aC:Ú:l o no :leNa, Estas prácticas se pueden señ:l~
lar concreumence: t'(.lrmas ¿~intervención. reglamem::lción. provisión de
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• 90 LAS poLtncAs PL"13LICAS
so de trabajo y de acción.
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ide~tidad y ~ontenida se trata. precisainenEe: .de recon'stl"tü-ir p.o'r igre. que las autoridades públi-=:l.5juzgan necesario proteger frente 3. amenazas (el
:.J- ( \ gacI6n suceSIva. de aproximaci6n en aproximación. J partir de elemen- entorno natural. la paz civil) o transformar en un estado más satisfactorio
L:/.~,. t~s empíricos dispersos en los textos. en los presupuestos. en los orga- (empl~o. educación). El ~:<teriorde la organ~zación pública la arrastra hacia
I ,<.".. :: :'. \mgramas.
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'95
94
, -' EL ANÁLISIS
.la acción, De ahí una doble función de producció~ que la autoridad pública que no son los efectos esperados al comienzo: efectos disfuncionales. efee.
debe asumir: los produc[Qs se ofrecen PJ.r.lprovocar efectos o impactos. tos perjudiciales o. más simplemente. inducidos, ya que el impacto no es el
. _ Esta segunda función de producción es, precisamente el meollo de que se esperaba sino atto. o acaba siendo. incluso, contrario al deseado.
la eYestión de las políticas públicas. Se trata de transformar productos en Las realizaciones efectuadas se muestran inoperantes:
.•.La limpieza"de arcenes que sirve para riieJorar la segUn-
efe~tos O_lIl.lpactQs
-éfaa~~arretera. La visita a los «poJ?.Le~~..9~.urt.~j~!e.Qte~~ite a~
.~~'-C.~~ - porque no eran adecuadas.
finalidad de a1ivw'ae"l'isáéSla,iaJdades sociales. La distribución de-becas - porqu~ eran insuficientes,
"pára la enSeñania'-supeño;"'s'e jús.tificaj:xj"r-raáemOeratización de la socie- _ porque el comportamiento de los afectados o los ejecutores de la po-
dad. En resumen: e u ne a intervención pública concreta engen- lítica no era el adecuado para al éxito del impacto que se pretendía.
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dra una a [eració~ del esta,do natural de las cosas en la saCIe a 'i pue~e _ o porque las circunstancias del momento no era las previs"tas.
[ urnrse
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a uno O vanos -'---
efectos o impactos .
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Adviértase, de paso, dos observaciones metodológicas importantes.
lA acción pública como juncionts d~producción (según Gibert) La primera se refiere a los efectos relacionados enrre políticas públicas.
Una política pública A genera impactos de diveros órdenes, enrre los cuales
MEDIOS PRODUCTOS EFECTOS algunos pueden tener consecuencias sobre otras políticas públicas B o C.
REAlIZACICNES IMPACTOS
RECURSOS
Función de Función de ,
producción 1 producción 2 "~. • IMPACTOS 1
(gestión in tema) (gestión de las POLiTICA PÚBLICA IMPACTOS 2
políticas públicas) A
• IMPACTOS 3
~---
A menudo son enunciados de manera cuilitativa y normativa, en ténninos Electo ligado
generales y abstractos, tales como la seguridad en una colecti~~da~. • IMPACTOS 1
Emergen con un retraso más o menos acus?-do en relación a la fecha en que POLiTlCA PÚBLICA IMPACTOS 2
interviene la prestación pública (por ejemplo: los efectos de un programa de B
construcción de carreteras sobre el desarrollo económico de una región). • lMPACTOS3
turado para que esta polínca se vuelva prioritaria para ellas o. al contrario, !
... directamen:e ,.. sobre el enlomo i
para que sea una más entre otras igualmente importantes? sobre el componamiento del comportamienlo ¡
¡
Esta teona implfcita del cambio social puede fonnularse como un mo- de Jos alecla~cs de los afectados
!
delo de la sociedad y de sus problemas. modelo que se traduce en un recorte ¡
y una reconstrucción que toman una amplitud globaL Estas repre~otacio. ¡
nes normativas son analizables como un cuerpo de reglas que ordec.m, seg- .¡j
... indirecta,
lejana
PoJilicas
distributivas
Politicas
conslitulivas
¡
menmn y clasifican las situaciones, los sujetos y las realizaciones Füblicas. 'e •• !
iv) Los tipas de pallticas públicas, ¿De qué clase de polftic:!5 públi-
8~ ¡
~~ ..• directa, Politicas Políticas
e", dispone una autoridad publica? Establecer el inventario do las :nod:Ui- inmediata reglamentat:as redistribulivas !
dades de acción gubernamental ha sido una preocupación originari> de los ¡
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'1-
.... .. ".•"...m'~ .•._•., ......... .,.. ..••"•.•.....- •.•..._,
po litólogos y los sociólogos. La observación muestro que. en la ~dctica, 'U'-'-,.~' • '
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t:2). _ Una p~ti~~ dis~uti~a es una acción mediante lacual el pode: pú- comport~ento de los actores en el curso de un proceso difuso en el tiempo
y el espacto.
blico concede Uñ'a'aihórizaeíOh a casos paruculares especialmente deslgna-
... dos. El ejemplo tipo son los permisos par:! construir. Está prohibido edificar Una tipología posible se 'construye en tomo a'la manera como los sujetos
. sin permiso (políúCíl regl:.unenfaria)! Luego. para construir, hace falta un per- reccionan, perciben, anticipan la sustancia de una acción gubernamental. En
miso. un derecho, que la autoridad pública otorga caso por caso (política dis- efecto, una poütica pública conlleva costos, obligaciones o inconvenientes.
'. tributiva). Aquí, el sujeto se siente beneficiario de una acción pública que le pero también beneficios, es decir, ventajas O privilegios. ¿De qué modo con-
. ," concede un favor, un privilegio (una renta inmobiliaria e hipotecaria. un pte- sideran una p~lítica pública los subordinados: ¿Como portadora de costos o
cin de terreno en alza), etc., que acompaña al acto administrativo asignado. , "como fuence. de ventajas? La experiencia indica que el afectado considera
El afectado se beneficia con una excepción a la regla. gracias a un favor uni- más importantes los costos y los beneficios que le atañen de manera perso-
.~ternl del Estado o porque satisface cierto número de condiciones. nal, individualizada y a corto plazo, es decir. en forma concentrada. Al con-
:B . - Una Eolítica redistribtitiva consiste en que d poder'público dicta ¿ri- trario, los percibe más débilmente cuando le afectan colectivamence y a me-
. que d~
enas .
an acceso a ventajas, y este acceso no se otorga a C:lSOS o sUJetos. diano plazo, es decir, en forma difusa. Para decirlo crudamente. un. reforma
, designados especialmente, sino a clases de casos o de sujetos. El ejemplo tí- del IRPF sensibiliza más a los contribuyentes por la repercusión inmediata
, pico es el de la seguridad social. El Estado dicta las condiciones (edad, sirua- que tiene sobre su hoja de impuestos que por las consecuencias a medio pla-
ción económica, etc.) para que las personas se puedan beneficiar de una ca. zo que tendrá, o se supone que tendrá. sobre el estado de la nación.
bertUra social. Pero corresponde a quienes cumplen estas condiciones el
derecho a utilizar o no esta posibilidad si 16 desean. El Estado manipula los Estrocrura de las utilLJaties de ~polüica p¡ib/ica para los afurados
criterios generales; no designa individualmente a los beneficiarios o a
IOS peIjudicados.
",'. - '-1 _ Una~o!.ili..ca~ns~a se tradt'::': :::n'que la ~cción pÚ=~~~:l
Gefine
•.Costes •• ce una poií1i<'t' ~t1:;}ljca ~
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~ las re.las sobre 11lS normas o-acerca del poder; por ejemplo: reVISando la
Concentrados, fc.:ertes Difusos, débi.es
Constitución de un país. introduciendo refonnas institucionales o adminisrra-
.tivas. En este caso, la coerción afecta. al sujeto de manera débil e indirecta.
Por ejemplo, la creación por el gobierno de un Ministerio de Deportes les pa-
rece a los deportistas una decisión muy abstracta, que no les afecta dIrecta-
..g.'",
~Q.
Concentrados,
fuertes
mente en su vida diaria. y, sin embargo. para la autoridad pública, esta crea- );jg
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ción representa una manera de intervenir en los asuntos deportivos.
~8.
Hay que destacar, de paso, Unil confusión relativa al uso de los instru- Difusos,
mentos jurídicos. Leyes. decretos y órdenes no significan ipso facto políticas
:
,
~
débiles
ca para actuar: puede gravar. edificar. hablar. subv~nclOnar. negociar. etc. En materia de política pública. y salvo excepciones. es preferibk para el
(Para situar el uso del derecho como instrumento de la acción gubernamen- analista partir de la hipóte5is de que el sujeto es uulaansta y eg(X~ntnco.
tal. vease en particular Daintith, 1988, en lo relativo. a las políticas eco~ómi. Esto se tr.lduce de tres maneras en las percep:~ones y los comp;runuenws
cas.) Por otra parte. una tipoloÚa no da una soluclOn sólida par;¡ Identlficar del público.
auromáticamente todas las caractenstlcas de una política pública. Más mo-
destamente. permite al analista nombrar e identificar ciertos par~etros ..~u i) Los costos (lenden :.1 imponerse sobre :ús beneficios. A ie:uJ.! e:rado
uso más estimulante es de orden comparativo. a través de la controntaclOn de concentraCión y dtfusl0n. los arec(ados ~\'.mmucHo mas s;n~IOTes al
entre muchas políticas diferentes v en tomo II una o diversas variables. precIo que pa2:aran que a !J-S venra¡as que r~'::Otd'n. Ca perdida ,~cuIra d
No es casual que la mayor parte de las tipologías que se han e!ab?rado benefiCIO.
traten de la relación que un' política pública establece entre el poder publico ii) ~l:OrtO plazo imF'='r:ramás que el rr:~iio plazo. En 03r~~2J.~~~~.
y sus re,lizacinnes. por un' p,rte. y los administrados Y los i~pacto~. por los efectos tnmedlatos mo\":ltzan más que las ~'0nsecuencias difer...:.J.s en el
tiempo. --.-------- •.•.. '. - - - ...-
otra. Se trata del cambio social y. por consiguiente. de la anuclpaclOn del
102 LAS POUnCAS PÚBLICAS EL ANÁLISIS
.. iii) Los co~tos v beneficios que afectan a pequeños QfYpos se impQnen po?er legal ~ legitimo) la organiz:lción (la' disposici6n de personal, ma-
. a los costos y beneficios Que afectan a vastas poblaciones. La repercusión in- te:~:lles. e~ulpos) •. a «no alOa tel Estado se sicúa en el centro de Un
l
dividualizada moviliza mucho más que J3 repercusión col~criva y anónima. tejIdo socIal o de mtormaclon). La combinación de estos dos mecanis-
mos ~ d:: estos cuatro recursos genera los tipos específicos de las políti-
Esta escala de utilidades, compl~tada por los tres comportamientos des- cas pubhcas.
critos. perTIÚteclasificar d estilo de acción adoptado por una autoridad pú-
blica (padioleau, 1982). Así, en Francia, las políticas de reformas fiscales
se caracterizan por la multiplicación de medidas del tipo «costos difusos» 4. El sistema de acción
(alza de la fiscalidad indirecta) y por una actitud conservadora de las exen-
ciones particulares del tipo «beneficios concentrados» (desgravaciones por Una d~ las reglas de. oro ~el. análisis es considerar una polinca pública
categorías en materia de IRPF. etc.). De ahí. la siguiente paradoja: los con- como un SIstema de aCCIónpubhca. Desde esta perspectiva, se subravan la
tribuyentes afectados rechazan más la supresión de un favor marginal (por forma de operar de una autoridad gubernamental (o varias, llegado el 'caso),
ejemplo, el privilegio de cosechero destilador, que concierne a un pequeño l~ forma de abordar y tratar una SUStanCIao un contenido específico. Se nece-
número de contribuyentes) que una presión fiscal fuerte (por ejemplo. el al- SItan tres conc~p~os para realizar correctamente esta tarea: el sistema de acto-
za del impuesto sobre carburantes. cuantiosa sangría que afecta a varios res. el de la actlvtcad v. por último. el del proc~o.
millones de ellos). Por esto se pueden caracterizar las políticas públicas se.
gún su grado de unfversalidad o, al contrario, de particularismo: ¿las políti- - L.a auto~dad gubernarn~n~al :c.sel actor central de una política públi-
cas multiplican las situaciones particulares de los interesados. O introducen ~a. Al mIsmo tl.empo. no es el wuco JU2'adoractivo. puesto que se mueve en
principios de tratamiento de situaciones generales? mte.r~ependen~Ia con otros actores: organismos encargados de ejecutar sus
Dispo:'!.e.~,~sde numerosos tr2b~¡f)s que ofrecen criterios de clasificación dec.ls10nes, sUjetos que reaCClonílIla las realizacion~s así producidas ml
de las políticas públicas. Cabe menc{onar especialmente: de Intereses u otra".....•-
:"..:t'"'cl'on's
••••. ' •.. que e'Jer•..
_...., . so bre la aCCIÓn
eu UtuUenCla :... pro-
pos
yectada o ~n ~urso. Los sUjetos no pennanecen pasivos, aunque puedan pare-
- Los métodos de conducción política (Offe. )975). La clasiñcación ~erlo a pn.0n. Su fonna de respuesta los convierte en algo más que bl3I1cOS
.!- distingue: l) (as prohibiciones y los estimulas: 21 la provisión de bienes y me~es (Hirsch~an. 1972). EsCJ.Srelaciones de interdependencia esU1lcrurao
ti un \ ~rdad~ro SIstema que el analista debe identificar y cuyo camino ha d
servicios: v 3) los rocedimientos: Esta clasificación ha sido revisada
segu~ e
c arp , 1976) distinguiendo de mane'" más detallada los intrumentos de
influencia del Estado en: 1) prohibiciones: 2) estímulos; 3) bienes y servicios . S~n embargo. el repano d~ los actores tiene muchas posibilidades de
provistos por el Estado: 4') consecuencias provocadas por las infraestt\Jcturas cambiar de. una pOlítica a otra. Incluso para una política detenninada. su en-
públicas; y 5) procedimientos. ¿La acción pública es puntual o global en su trada y salida de .escen~ debe 5er seguida meticulosamente. Ciertos acrores
realización? ¿Se dirige a las nuevas situaciones que se van a genera.r o se pueden aparecer tnterrrutencemenre, para después desaparecer, y reaparecer
orienta hacia el tratamiento de 'las causas de disfunción social? ¿Se trata de lmerpretan?~ otro papel. El si~[ema de actores es elástico: las variaciones en
erradicar problemas e:dstences o de evit.1r que aparezcan nuevos prot-lemas'? su composlc16~ p~eden deson~:J.tar a un analista que se Comeme con obser-
.,
- Los instrumentos de gestión administrativa (Mavntz. 1978). S~.pue- var los aconce.clnuentos a través de la lupa de las instituciones políticas fa _
den dividir en: 1) normas de prohibición v de requerimiento: "2) aut(lriznc~o- ~ales ..La aCCIónpública no se limita a los actores formales: políticos \' fu~~
"0 ( nes de acti~idades privadas; 3) transferencias financieras: 4) estímulos tinan-
~subvenci9.~S.!.~:lj ..Y..2tprpvi.s.i.9.n...d_e
..ltCeQes"'y"
s.e(Y.icios. .
clonano~. Incorp~r.a a oo:os actores que, en principio, no tienen nada q~e ver
con ~l ({JuegopolItICO,":pero cuyo comportamiento y presencia cuentan en la
. - La función de conducción social del Estado rHucke. 1980). Se des- medld~ en ~ue las re~JZac.iones pú.blicas se transforman en impactos socia-
( pliega en los sillUientes ámbitos: (a re~~~ión juridi£ua..E.£!i!ls'!. so.:ial. la le~. El analista ha de Identificar la mfluencia social que una política pública
\,conducción económica. las orestaciones simbólicas. . t:Je en to~o a ella y est~diar ¿~qué modo los actores. manejando sus reIa-
'. . _ Los instrumentos de .obierno [Hood. [(83). La autoridad oública . . ctone.s.de ~~ter4~pendencla denl:'o de un sistema que esta política estrucru í1
dispone de dos mecanismos d~ control sobre la SOCIedad:los detecto.r..~s(ins. contnbuyen al curso de los acon:~cimientos. r .
trumentos para recoger información) v los realizad9E.e~.Sherramient:.s para -, ~ib¡e~ I~ actividad de 10sactores y su impacto sobre el contenido de
~ac[Qs sobre 1.:1sociedad). Tiene a su disposición cuatro re.:ursos: la polmca p~bhca forman la b 'e empincade la observaclOn. el an'iii'SIa
1
...el ({tesoro)~{el dinero y arras recursoS fungibleS)\..~li.1 poSe5tOnde- debe. no obstante. mOStrarse r::IV orudente. Cierrameilte. 5e debe prestar
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.atención a los actos, comportamientos y di~cursos visibles, que se 'puedan como una secuencia de actividades. desde el inicio hast:! el final. desde un
describir. Sin embargo, existen acti~idades invisibl~s cargadas de sentido. problema hasta los resu!t.1dos. Cinco fases principales componen esre pro-
¡Una política ública, recordémoslo, es un con unto de actos. de no ac- ceso:
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Padioleau (J.), 1982. L'Etat au eoncret, Pans, PUF. .
se debe liberar de los reflejos que 1,<. impiden abordar Correctamente los he-
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nes potenciales:
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M~.;;.:Iéiln.
Seharpf (F, W.), 1976, Tbeories der PoUtikverflechtung, in Sebarpf (F. W.) et - La descripción /lana. Consiste en bosquejar el decorado histórico o
autres, Politikvupjlechtung: Theone und Empme d~ kooperanven FOtluralLs- conte:uual en que se desarrollará la intervención gubernamental con la ayuda
Kronberg.
mus in der Bundesrepublik., . ..' . . de una lista mis o menos inconexa de informaciones generales. ¿Cuándo
Wade (L. L) , Curry (R, L. 1r),.1970, A Lagle o[ Pub/le PO/ley: AspeelS o[ OCurren los acontecimientos. quiénes son los protagonistas. en qué zona del
Politica/ Economy. Belmoot, Wadswortb. cambio se producen? EstilS señales dan una nota ambientaL ponen en escena
Wildavsky (A.), 1964, The Polities o[ the Budgelary Process, Bostoo. Little los problemas y los actores, pero no bastan p:lril explicar la génesis de la ac-
Brown. ción publica. el porqué de los acontecimientos.
Wildavsky (A,), 1979, Speaking Truth to Power. The Arl and Craft oj Policy
Analysis, Bastan, Lictle Brown. - La fascinación por la decisión. En este caso. se presta a la toma de
decisión una atención c:lSi exclusiva. ¿Cuál es la psicología de quien decide.
qué ncontencimienros se desarrollan en el momenco en que se tijan (as opcio-
nes. qué razonami~nros se escuchan en el escenario'? El riesgo de error con~
siste en valoriz:lI'la decisión como único momento clave de una política pú~
blica y, en consecuencia. ocultar los acomecimientos anteriores a ella. espe~
cialmente las condiciones en que naee el problema. La decisión. ¿es una
reacción a los neontecirnientos. a las necesid.:1des? Por otra porre. ¿codos los
gruPO$"perciben el problem.:1 de la misma manera?
po/itica La necesidad
otro. de una decisión se ha impuesto.finalmente. Se planea sobre la generalt- condiciona la orerta
dad, se impregna de sobredetenninismo. Por ejemplo: la aparición de la polí-
tica de carreteras en Francia se explieará por el costo creciente. para la colee.
Autoridades
publicas i
tividad, de los accidentes y de sus víctim:lS. Por lo tanto, queda por demos.
trar por qué surge en 1970 y no antes, o por qué privilegia la lucha contra el
,
Representación
Intermediarios
exceso de velocidad en detrimento del control del alcoholismo al volante. De
una manera totalmente distinta, en los trabajos de Easton ballamos un enfo- .
consensy
,.-"";~..•.
Población Expresión .
que cercano. a través de la dualidad inp",-o"'pllt (Easton, 1973). Las deman- Tiempo
das (diferenciación social, competencia entre partidos. etc.) provocan la .
formulación de respuestas (políticas sociales. políticas económicas. etc.).
El sistema de acción pública funciona. en efecto. como una caja negra transparente. Las nec~~U.i~d~t..!~utoridad pública está a la
cuya influencia sobre la polaridad necesidades-respuestas sería desdeñable escucha. "
(Mitchell, Michell. 1969).
.. _--- - ------_._--------
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.:- .
112 LASPOLtnC~S P:íBUCAS
a ANÁLISIS 113
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Jerarquia
poririca
Politica publica A
"'/
. Autoridades
públicas ""~ <
~.;'~~
Población
La oferta
condiciona la necesidad
~ .
Politica publica e
Tiempo
------------------_Tiempo
Los conceptos de oferta y demanda son metamorfosis más o menos fruc-
tíferas para el análisis. Saber cuál de las dos. oferta o demanda, precede a la
la-otra, supone que cada témúno del juego politico y social está separado y de los «grupos de presión» ha desvelado y desencantado. de forma muy
. c1ara.ment~ definido. Sin embargo. no es ése el caso. Más en concreto, la oponuna la visión «idealista» del trab.ajo político, en especial, en las fases
oferta y la demanda se detemúnan cada una a través del poder político, de de deliberación y decisión. Bajo la tapadera del interés general y del go-
sus mecanismos con-cretas y su simbología. bierno democrático. hormiguean ros intereses sectoriales y los jugadores
utilitaristas. No obstante. las IimÜaciones de este enfoque explican en Par:E~
sU decadencia después de algunos _~ Por una parte, según .éste. la ley
- '1.3: LA ILUSIÓN NATALISTA del grupo más fuerte es lo que modela esencialmente el surgimiento de las
pclfti'::1:;. Por otra parte, se ponen en entredicho los procedimientos del tra-
" .Decir ~~~a polí~ca Eública nace es, a la .ve~.corr~c.to.V pel.igros.o. El bajo político y el contenido de los problemas, ya sea porque no influyan el
nacimlcnto puede significar que exist~n aconte~mllentos lnlcl.ales. Jde~[ifica. curso de la lucha en la jungla de los intereses, ya porque quedan simple-
.bles en el tiempo v en el espacio. que Impulsaran una secuenCIa de aCCIOnese mente reducidos a variables dependientes, productos del «verdadero») jue-
interacciooes n! término de la cual surgjr4 UDa oo!ítiq pública, En cambio.
go político. .
. nacimiento no si£I1ific3 necesariamente que una poütica pública nazca en el Recientemente, aunque de manera tímida, los politólogos han tratndo de
.vacío, por el simple efecto de las demandas y las ofertas, de necesidades ~o- comprender cómo emergen las políticas públicas. Para ello, se han planteado
ciales y de respuestas públicas. Son posibles otros (:scenarios. Una acción dos exigencias suplementarias:
pública puede nacer porgue una política públic~ ya .~xistente. en ~l cu~o de
su fase de ejecución o aun después de su £emunaClOn. plantea ~lficul:ad:s. - Tender un puente entre el estudio de lo que ,sucede en el seno del «sis-
encuentra obstáculos, modifica siruaciones que llevan a la amondad pubhca tema político) •. y el estudio de lo que ocurre en de la {(opinión pública», en
a intervenir nuevamente en otro aspecto. de otra manera. a través de fenóme- semi do amplio. Esto significa especialmente que ya no se tomará como ver-
nos de efectos ligados. En otras palabras. 1:15 políticas públicas se alimentan dad e\"angélica que hay, por un lado, fenómenos puramente cognoscitivas y
en buena parte de sí mismas. No hay necesidnd alguoa de que se generen de culrurues en una población posi"a y marginodo. y por otro lado. agentes acti-
\"05 que hacen política en una arena especializada, en el centro.
manera casi espontánea. las unas al margen de las otrJS. por el único yexclu-
. "'SIVO estímuio inicial de la oferta y la demanda. . - Admitir, a título de hipótesis que debe verificarse. que en la socie~
- - El interés manifestado por la fase «monte» de los procesos de deCI- dad e.üsce una pluralidad de situaciones. de actores y de problemas.
sión no es recienre. Ha sido, incluso. un terna clásico. en particular en el Corresponderá al analista constatar hasta qué punto esta plurolidod est.i efec-
enfoque llamado de los «grupos de presión" (~leynaud, 1960.). Según tivamente presente, si existen muchos escenarios políticos. muchas jer.uquías
.~ste, la escena política es un lugar de enfrentamientos y negociaciones ~n- de problemas. Si no es el coso. la pluralidad se esfuma, el_eneade_n.amiento
tre "grupos de inrereses. partidos, sindicatos. órganos econón:ic?s. a~octa- entre los acrores y los problemas se vuelve t:1I1 fuerte que se llega a Una es-
dones. etc. Fundamentalmente, cada grupo persigu~ su propio Interes. re- truC[Ur:J,manolirica y jerárquica donde los más fuertes son siempre los más
fuertes.
nejado en sus demandas. declaraciones. olianzas. En síntesis. el enfoque
T~...11bi¿npued~ formularse otra versión dl: esta exigencia metodo!15gica.
C\.\..C\. . ,- :::>;, \,.... ' - I
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. 114 LAS POLtn'CAS PÚBLICAS .. " . ' :
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La confusión y el malentendido son algo corriente en el surgimiento de las recurrente. De todas formas, ¡os proc~dimientos establecidos por la norma o
políticas publicas. La población si~n.te una nec~sidad A, que la autoridad pu- po~ la ~rJdición codific;m el contenido y la programación de los problemas.
blica interpreta como un problema dé tipo B, al que se le dará una solución el amblto «n.atural» o consensual de la intervención pública..
conveniente en una situación también distinta. la de tipo C. Por lo demás, el El otro tIpO de agenda es la coyuntural O sistémica. Está constituida por
poder no es necesariamente reduciblé a un juego de suma cero en el que lo p:oblemas que, al contrario del primero, no pertenecen a la competencia ~<ba-
que' uno gane lo pierde el orra. El juego puede ser de suma positiva -todos bttual» o «na:uraj» de la autoridad pública. El ejemplo más puro es el dere-
'.los jugadores ganan, algunos más que otros- O negativa; todos los jugadores cho J. dar la vIda, al menos en un país como Francia acrualmente. A priori se
. pierden en el juego. trata de: ~na libertad importante de los individuos y -con pocas e.'{cepcio-
nes- urucamente de ellos, quedando excluida la interv<nción de toda autori.
dad en la procreación. Ahora bien, \:on los recientes de:scubrimienros de la
2. Un aparato conceptual •. biología, son posibles nuevas fOnTIJ.j de procreación: bebés probeta.. madres
de :tIquiler o manipulaciones genéti..:as. El hecho es que hoy el Estado se
. La construcción de un lenguaje conceptual original ha constituido un preocupa .po.rsaber si debe O no acruJ.f en la materia, dictar las reglas de jue-
paso adelante decisivo para el surgimiento de las políticas públicas. En este go para llrIlltar los comportamientos que la aplicación de estas técnicas ha
asp~cto es (jestacable el trabajo propuesto por Cobb y Elder (Cobb. Elder, hecho posible.
1977). ¿Qué impulsa pues a acruar a las autoridades públicas?
lJñ'j5rtmet concepto es el de a~enda. .-\mbos tipos de agenda represen~ los idenJes.tipo. En realidad. la fren.
, La agenda se puede definir como (celconjunto de los problemas que ape- tera que los ~:para resulta mucho m~nos clara. También es fluctuante. Lo
lan a un debate púbhco. incluso a la intervención (activa) de las autoridades .'que. en definitIva, caracteriza la agenda es el grado de. consenso o, al co~
RúbEoas legítimas' (Padioleau, 1982, p. 2ó). En otras palabras: una autorinerl _@.t9.~_cºnfii@_q_~e~ $u.s,C:I~.~
..~1problema consideracfc>."-----. -,.~.~ ....__ •
pública administra una agenda, 'más o menos llena según las circunstancias. Casi. siernpr~, el consenso no 'es o
rotal ill;:mime,y ~r conflicto no es !le.
Hay que cuidarse de no confundir dicha asz:endacon una orden del dí:l o un nerJl o IrreductIble. En realidad. nadie discute vcrdader::unente el principio
programa. Una orden del día es un momen;o institucionalizado que establece de ~ p.resupuesto. En el polo opue~to. durante largos mas la guerra enrre
una lista de tratamiento de problemas. Un programa ~ una plataforma de in- parudanos de la escuela laica, monopolio del Estado, v defensores de la ~s-
tenciones destinada a llamar la atención de un público (electoral, parlamenr.a- cue:kJ.privad:l,.hacía irreconciliables las posiciones ant~gónicas. No obsrante,
rio):l-~g~~, en cambio, designa un conjunto de problemas objeto d~ Con. e~ 1:1 mayor pane de los casos un importante elemento lie controversia sub-
.. troversia~p:ÚbliCas.-nlcnos problemas. cuya enumeracton vana con el aempo Siste en CU<Intoa la oportunidad para que la autoridad pública in[erv~nsz:ao no
-la agenda deberá tenerlo en cuenta-, eXIe:enla imervenclon de la .luton- en 1:1cuestión y cómo ha de hacerlo. ~
:aaapúólica.~'! !~.~iZ~! fic~..q~e . ~9~.~S
..fo?_p~~oIe~as, P,?;i1bleriro-s~hallan El analista también se esfuerza en mostrar que la incorporación a la i12en-
'..c:on~enid?s ~ rrusmo tiempo en la aget1..d.~ .!!eJ~.misma aU[Qnda'd:~gu.cos'tF"" dil ~s un momento pri\'ilegiado del d¿óate, ya sea éste e\;dente -identiflc:l-
_gt!l~_~~~ñ Nos'
.~e~~~)~~~'f~o.- halloíriós, pues. fTCúite'aüri"áiec:iñis-mo'~~re¿tr: . bIe :l través d~.las i.ntervenc~o~es. ~;mifesL1ciones, wml:i de posición públi-
~ue ta:IOcua¡
aeja pasar o no proolema.To qüOlospólítícoslfiünaitOOiier' cas. e(c.- o :silenCIOSO --dlstlOgUlbl~ por el hecho de ~ue los actores o los
en laCigéñaa o inscribir. en la agenda. aparece como un mecanismo esencial g~Fos sociales no comparten, por keología. por inter6;. por tradición, los
en una sociedad política. mlSrilOS•.•. alores en. cUJ.nto ~ ~es~ab~~ ..~n~~[\.enci0n pública-. El de-
Existen d,os tipos principales de agendas. bate. la ~omrove:s~a.' tr:lducen lils di\'ergenclas de opinióü. normas:mtereses.
p:~c~p:lO,nes y JUICIOScognoscitivos. Estas divergenci~ atraviesan la opi-
Una es la agenda instiruciona/. Reúne los problemas que depende:! fun- nlon pubhc::l o, cuanto menos. los grJpos y actores individuales que: operan
Cionalmente o por consenso de la competencia de la autoridad pública .:onsi- dU£:lnreel proceso de incorporación a 1:1Jsz:enda.
derada, Así, la constitución de un Estado o los estaUltOsde una entidad local. Se llama desafio a todo problema en t~rno al cual se Jroduce un deba[~ o
enumeran los problemas. institucionalizan su modo de emergencia. el :alen- un? ,:ontro~ver:ia qu~ ~s.qpjeto. ge v2oraciones cOD[ras~Jas. Un desafío no
dacio y la orden del día de los órganos poUacos y administriltivos com:-eten- e~,(ls:;:en SI mJsmo 5100 en relación c-:'n los aClare:; espe •.,'ticos que. la ma\'o-
res. El ejemplo clásico es el presupuesto. Es anual, automático. eStan6nz3- na L.~las veces, son portadores de pr.Jridades diferemes. La incorporació'n :J.
do. Otros problemas pueden tener una narurJ.1eza distinra. porque su ~mer- I.~J~~n.d~se presenta ..~ntonces. come un proceso de cor..:urrencia entre des;J.-
gencia puede no estar institucionalmel~te cetlnida o no inrcrvenir en ~0rmJ. tlO5- ::lultlplcs )' entre Jerarquías de pr....
'ridades heterogér.~J.s.
:-' •.•..... ':"'.1'..••••.
...
,
Ha LAS POúnCAS PúBLICAS ELANÁUSIS 117
.'
'El conflicto puede expresarse en térntinos de'intereses materiales, de pri-
vilegios sociales, de influencia política. pero se manifiesta también en clave
normativa y cognoscitiva. Las repre~entacionesde los fenómenos, el sentido
y el significado que se da a los «hechos», varían de un medio a otro, e inclu-
so-'en el tiempo. El ejemplo evident~ es el del sentido dado a las estadísticas
sobre desempleo: ¿cuándo el número de parndos es considerado insostenible
y-exige una intervención pública? ¿A partir de 2 millones. de 2,5 millones o
de ~ millones? Lo «demasiado es demasiado» representa un umbralo un in-
tenIÚtente cuyo sentido varía según los medios sociales y las coyunruras.
Cada uno Juzga según su propia vara si una cuesti6n es o no un problema;
'Frente a un conflicto. nadie es igual a los demás. A este respecto, Cobb y
Elder proponen diferenciar los grupos en términos de capacidad para movili-
zarse en tomo a los problemas. Se pueden distinguir así, en materia de inear.
po.ración a la agenda:
río que- actúa sobre el mercado económico. los indi\"iduos. grupos. mo\'i-
.
El concepto de actor puede llevarse más adelante. Se llega a hablar inclu-
so de ta existencia de una polilica empresarial. A la manera de un empresa~ ¡l El reajuste. Un medio particular siente. en un momento dado. que
su 5iruación. )us intereses. son tr:uados de manera desequilibrJda. insJtisf.l":-
118 LAS poLtrtC\S P(.llJUCAS
EL A:-.IÁUSIS '119
ton;], par:l él. Ante eno. decide constituirse en e~~res~o políúca. S~ obje(~- En su anáUsis de los «problemas sociales», Becker demuestra que la
vo consistirá en conseguir que su si~ación sea corregida por la autondJd pu- existencia de un problema social procede d< dos fuent<s posibles:
blica. El empresario actúa para sí nusmo.
- las carencias objetivas de una sociedad;
. ii) La explotación. El erripresário político act~a para otros. Cristaliza, - pero, ante todo, la decisión subjetiva de los que, en nombre de ¿sta.
enuncia., amplifica un problema sentido de manera más o m~nos manifiesta califican dicho fenómeno de problema social (Becker, 1964).
por otro medio que no es el suyo. Lo toma a su cargo, lo convierte en su pro-
blema y se identifica con él. Su objetivo. en este cC:S0' es S~Cilf provecho para En efecto, el origen de una demanda social y de las necesidades que. su-
sí mismo en tanto que empresario político. por ~Jemplo.Incorporando a su puestamente. expresa esta demanda. se sima en la esfera política: esto signi-
propio proyec[Q el reconocimiento de sus «defendidos». fica que las necesidades no se definen ni se enuncian con toda claridad. La
visión de las necesidades-es selectiva.
üi) La mejora. El empresario político no saCJ ningún beneficio "p~rs?- ¿Existen necesidades en materia de acción pública?
nal del problema del cual se apodera. ni indirectamente (como ben~.t1ClanO Para una empresa privada. el criterio de la realidad de una necesidad en
eventual), ni individualmente (como portav~z o abog.ado). Inter .••. !e~e en el mercado económico puede fonnularse así: es necesidad todo lo aansfor-
nombre del interés público. Su objetivo conSIste en eVita!. deseqUllibnos .Y mable en demmda sol vente.
amenazas perjudiciales para toda la colectividad, o hacer tnunfar una umpla Un servicio público puede guiarse por este criterio. Se le pueden aplicar
por altruismo o por ideología. muchos sustitutos: ::.
iv) La reacción circunsrancial. Este caso se cara.cteriz~ por la ausen- - La necesidad nannativa. La defin~n así terceras personas texpenos.
cia d~ empresario poHtico activo. En ci.~rta ~anera, I~InclUSIón en la age~- políticos), de acuerdo con sus propios vilÍores (profesionales o éticos), po-
da de un «desafío" se impone por sí rruSma, por «accldent:". Los .acontecI- niéndose en .:~:•.•05:::': del consumidor.
mientos exteriores ejercen una presión tal, que el «desaÍlo): se IUcorpor.a - La necesidad sentida. Su expresión es indirecta: la población traduce
«automátic:unente)~ a la agenda. Una ilustración de lo. antenor e~ ~l accI- su existencia mediante sus deseos y moti\':lciones; corresponde a los espe.
dente automovilístico ocurrido en Beaune ene 198:.1. (cIncuenta nUlos que- cialistas ex.plicitar el aspecto latente de la necesidad.
mados vivos), que llevó a los poderes públicos a' inscribir. con'cmcter de '-- La necesidad expresada: actos concretOs traducen su existencia (ac.
urgencia, en el orden del día ei problema de la seguridad en los transportes [Osde consumo. etc.).
p~blicos de pasajeros. - La necesidad comparativa: se gen.:ra cuando se compara "acre eUas
dos o varias siruaciones sociales o geogr.iricas, en ténninos de nh'el de ser-
vicio. y se utiliza una como indicador de los comportamientos rJruros de
3. La formulación de los problemas los consumidores en las otras.
. Cómo se 2eneran los problemas que: originan la intervención publica? El concepto de necesidad es delicado ~.hasta peligroso si ésta 5e conci-
Es cLonvenie:nte"distinguir dos estudios en el rrabajo político: be como una exigencia en sí. Puede utiliz.1rSeteniendo presente que [as ne-
cesidades de dpo nonnauvo son. en gener:J.1.las más frecuentes. Los caos u-
_ uno concierne a la fase de definición de un problema. la fonnu1ación mA.9.oreso el público habLan.E0co; en cambio. muchos otros actore-5sociales
de las dem.mdas: . lo b.cen en su nombre: el empresario poLiaco. el abogado de una causa. el
_ el orro se refiere a bs estrJtegias de respuesta desplegadas trente a promotor de un interés social. y la mJsma ':lU~ondaa pubhc::l arectac.l.
las demandas. Del mismo modo que no dispone de necesidades claramente e:'l:t!resad..:1s.
una :J.ucoridadpública tampoco tiene crire:ios claros para determir.u objeti-
Esta distinción en dos fases no signilic3 de f0r:!Ua n.ec~saria qu~ l~ _~~~ vos. Mientras que la empresa privnda pu~de g.efinir las escalas y ¡os par:i-
mera preced::I cronológic::Imente ::1...1.:1
sepndJ. .(10que hemos Ha,mad? ~.l feh~ merros de forma relativamente simple y uJ.Ívoca (cifra de ne£ocio5. mar2en
aro de la «robinsanad.::l.),democratlcal. En efecto. es muy pOSIble Ima:-war de utilidades. imagen de marca, etc.J. P2..""J la autoridad pública ~5:ldefini-
que preexiste una respuesta. seguida d: una fase de fom1Ubción de la de- ción es mucho más compleja. De ahí la b~squeda de sUStitUtosque :;ermitan
manda. definir estados oriem::Iti\'os; por ejel7lplo. ~¡
movimiento de los (,ir..:ic:ldor~s
--------------_ .
:;., '~:.~.:/ ....: , ' _.
.... __ .
EL .~'lÁUSIS 121
: 120 LAS POLtncAs púE LICAS
',ociales» que fija indicadores de estados norm~tivos (Cazes, 1970). Sin em. so observable es, por tanto, el de la decisión de ¿quién debe asumir la res-
ponsabilidad?
bargo, dichos indicadores son muy abstractos, ya que su traducción concre-
~~es, a la vez, técnicamente difícÍI y delicada. desde ~l punto de vista nor- "La eStrUcrurade los problemas públicos (...) es un escenario de conflic-
tos en el que un conjunto de grupos y de instituciones. que incluyen a me.
mativo. ¿Cómo medir el nivel educativo de una población? ¿Por medio del
nudo los organismos públicos. compiten y luchan por la apropiación y la
. analfabetismo? No basta. ¿Con el número de diplomas de enseñanza secun-
'qaria? Tampoco es evidente. En resumen. ningún indicador social suscita el desapropiaci6n. la aceptaci6n de teonas causales y la fijación de la respon-
r sabilidad. Aquí conocimiento y política esrán en contacto el uno con la
consenso necesario. Nadie ve los mismos hechos, porque cada cual tiene in.
otra>' (Gusfield, 1981, p. 15). La definición de un problema es un ámbito de
tereses divergentes. La experiencia muestra que. en la. práctica. existen po- I ..cq'!tr9.".:~rsia.Si
cos indicadores de estados que sean descriptivamente válidos.... . - . _.. I! . hay controversia
. es porque:
_.. . ~. .
". Otra perspectiva, más antropol6gica. consiste ~n privilegiar el con_o
- Tal formulación concreta implica consecuencias juzgadas inacepta-
cepto de "problema público» .como palanca para la formulación de las
bles para una o varias de las panes implicadas: pueden verse recortadas
agendas. Las acciones públicas son formas' culturales, con su retórica y
ciertas ventajas. se imponen obligaciones.
sus ritos.
. ~ Desde este punto de vista, un problema público ej una construcción so- . . - .La~ ~artes se sienten afectadas ante un problema que pone en cues-
tIón pnnC¡plOS fundamentales, valores absolutos; una especie de combate
cial, un !techo cultural que obedece a una estructura cognoscitiva y moral
maniqueo entre el bien y el mal sin compromiso posible. Las posiciones
(Gusfield, 1981). Por una parte, en una sociedad existen creencias sobre las
son irreductibles, por lo que la formulación adopta un tono de auerra de
situaciones y los acontecimientos que dan nacinúenm a un problema. Por
relie:ión. ';. o
otra. el aspecto moral se traduce en juicios que definen el acontecimiento
~ Hay refuerzos exteriores qué: pueden movilizarse si uno o varios ac-
como insoportable e inmoral y. por consiguiente, debe conducir a una ac-
tores públicos solicitan su apoyo. De ahí una función preventiva del conflic~
Ción de cam}:\io. Conocimiento y juicio moral se combinan p:lIa que un fe-
too utilizada por los :;('wre'. y los públicos que no están dispuestos a aceptar
nómeno se trarÍsforme en problema y en desafío.
la llegada de esos refuerzos.
Un problema público es socialmente asumido: se genera un proceso de
responsabilización por parte de tal o cual segmento ce la sociedad. Un gru-
En general. es raro que la definición inicial de un problema pennanezca
po detennioado decide que un problema es acreedor J. una inte~ención pú-
estable e invariable. Tiene todas las posibilidades de cambiar sobre la mar-
blica porque dicho grupo tiene capacidad. autoridad para promoverlo como
cha. de reajustarse, de modificar su contenido y sus términos. porque esta
tal. Puede exigir una acción pública para «que se bJ.ga algo al respecto».
definición es en sí misma un desafío político mayor. ¿Cómo se redefinen
Gusfield toma como ejemplo a este respecto el prob(~ma de la homosexua.
los problemas en el curso del proceso?
lidad en Estados Unidos. Los psiquiatras han sido :iUS«propietarios», es
Algunos actores recurren a estrategi:J5 de redefinición. El beneficio que
decir. la autoridad a la que recurr1J1l los otros grupos para obtener una defi-
esperan obtener puede consistir en ensanchar la base de los públicos afecta-
nición y soluciones. con lo que la homosexualidad se ha visto «psiquiauiza-
dos. 'obtener e:t sostén y la movilización de oue'vos grupos. Refonnular el
da) como problema público. Puede ocurrir. no ob$t~te. que un grupo pier-
pro?lema y la.demanda de acción públic'permite igualmente al empresario
da su estatuto de propiedad a favor de otras instirjciones o medios. El
pohuco modlt\car el repnno SOCIal.camblando las discrepancias tradiciona-
problema público tiene todas las posibilidades de ver:i~ redefinido en su es-
les que separan a los públicos imeresados. O potencialmente favorables. de
trucrura cognoscitiva y moral. De esta manera, la homosexualidad se coo-
los públicos no interesados o perjudicado,. Ampliar los actores y los públi-
, ,::irtió en una iniciativa cívica en manos de grupos que luchaban por la
cos oJectados constituye la estrategia de base. Por ello, tan a menudo. las
-igualdadoe derechos para las «minonas».
fuerzas inicialmente presentes no úenen mucho que ver con las que se en-
.. Queda por comprender el contenido de la descri?Ción y de la solución
cuentran en la llegada. Mientras tanto, los jugadores han cambiado O am-
que se da al problema. El concepto de responsabilid.1d abarca dos sentido,.
pliado sus filas. Paralelameme, el problema ha cambiado también caraán-
Uno es casual: ¿el acontecimiento :\ es responsdable d~1acontecimiento B7
dose mis o menos de controversias. • ::>
¿Cómo es posible el hecho B? Se ,itúa en el univer;o de la creencia v del
~.En qué condiciones un problema :lfecta a un público m;ís e:'<tenso'?
conocimiento. El otro sentido responde a la pr~gunl1 L.qU¿ 'h~¿e.r respecto a
Cobb y Elder ~numeran cinco par.im~tro:i que aumentan eStJ probabilidad:
B? Entramos en el :imbito de la responsabilidad pc:itica y moral: alguien
debe h:J.cer:lIgo para que esto cambie. para que B r:0 seJ ya lo que era. El
- La ambigüedad de la definición del problema. Debe ser ambiguo.
proceso entonces observable es re~otver (qui¿n debe mcarg:.lrseb. El proce~
U.S POlmeAS PÚBLICAS '.
- .
•...EL ANÁUSIS
-~
1""
CAPinlLo V
LA DECISIÓN PÚBLICA
.~--_.-----._----*._ ...
Il.
~c Cl '-O QLl .'<-1.: '. U.'-',é~
130 LAS POlmeAS PúBUCAS
.- '...:_U_
Y';j.~.'_;_
EL ANÁLISIS
r3l
Ll. UN REVElADOR CONlROVERTIDO
forma directa: ¿ocurre algo pertinente en materia de política pública en el
momento de la decisión? El decisor ¿es un actor que cuenra?
La decisión ¿es reveladora de .la es~crura del pode: político '! soci~ o,
al contrario, enturbia y confunde la realidad de las relacIOnes de tuerza: De
la interrogación metodológica uno se des tiza" si no e~t:á.~uy alerta. ,hacIa la
1.2. UNA REALIDAD MÜLTlPLE
controversia idenlógica. El célebre debate nacIdo a pnnclptos de la decada de
1960 entre los politólogos Dahl y Hunter, en Estados Unidos, da buena cuen-
ta de ello. En el centro de sus preocupacione.s se encuentrJ una pregunta co- Existe una abundance liceratura en maceria de decisión .. Las ciencias so-
o mún: ¿cómo se distribuye el poder en las ciudades? . . ciales han pnvueglado el esrudlO de lo (granq~.Y...QQ~na cª-S!:Lajidad:a
Dahlestudia el caso de New Haven (DahI. 1961). Examina. espectal- .~~~~~o~~ eX~:'p¿ro~~:~:..~:-~.:.~ 2.~~Iffiñ{es. PQ!....~.~mplo.!..-t!~._~_0!A~!l.~º-_
mente, la manera como se toman importantes decisiones municipales (urba- d~.~atlc.o~Qmo J~.£f1~t.s_º~JQs.IDlsiles.de-Guba,'que en.ocwbre.d.0.J.962 ell~
nismo. etc.). A este respecto, observa que múltiples actores intervienen a lo frc,n.\6a Estados Unidos y a la UniÓn Sovi.~l£.a>ll~yán<;l.9Je~.aLborde..de..la_
largo de procesos diluidos en el tiempo. Sin duda, el alcalde dispone de un pa. gu~~slf~r.1l\!liS?ií::-.:r~?.fJ; O 'blen'la'r'unción de presidente da Estados
pel importante. Sin embargo, dentro o fuera d.el rnurnClptO, entran en Juego Unidos (Neustadt, 1960; Johnson, 1974). Procediendo así, las ciencias socia-
otros individuos o grupos cuyos deseos y negauvas debe tener en cuenta el al- les contribuyen a alimentar el fenómeno de la valoración de la decisión. En
calde. La persona que decide no está sola ni i Olente; le'os de ello. En_ efecto. se enciende. implícitamente. que una decisión única es una (erran» ae::
su SustancIa, e o er se repane entre numerosos jugadore.s. cuyo p~o varia cisión. un momento único de elección que marca una discontinuidad en el
según las apuestas que es atanen. ay u~ Juego en la .s~ledad POÜt1C~. y el tiempo v en el espacio v que viene de arriba. Esta decisión tiene. Dues. una
decisor formal no es libre. ~¡ás aún, los hilos de la deClSton no los rnatupulan his[Qria. En esto se opone a la «pequeña» deci!!.QnL..!'ll~~nismode rutina. re-
los mismos jugadores. El poder es difuso y el juego, plurali"a. L1 decisión petitivo. cuvo aporte es marginal y emana del medio Q de la base 11 peqJTe-
pública es un comF(".lws,-:' entre muttlptes :=•.:::-c~tnteroeoendlenres. ñ~decisión es automática. sin historia.. y ,por lo tanto sin intereso 4
'. ..•. Así, el30 de diciembre de 1958, el gobierilO dictó una ordenanza que re- ii) Una p~rsonalidad re/amadora. EstJ.Scondiciones llevan a recurrir
'formaba los estudios médicos y las estructuras hospitalarias (Jamous, 1969). a una personalIdad responsable de preparar la decisión. Robert Debré, médi-
~sta decisión represemaba una rupturaespectacular en el medio s:lllüario:in- co ~e re~om~~e r;tundial,tiene la confianza del gobierno y posee carisma. au-
troducción de la dedicación a tiempo completo para los residentes de los hos- tondad y legttmudad en el medio facultativo. La refonna no afecta a sus inte-
.pitales universitarios; institución ,de un concurso oposición para el ingreso, reses personales. Suscribe resueltnmente la solución propuesta por los jóve-
nacional y an6nimo, de médicos internos; e introducción de la biología en los nes reformadores.
estudios de medicina. Había un antes: en adelante habrá un después. Entre
ambos, se imponen cambios revolucionarios a los hospitales y médicos de ~) Un estilo de decisi.ón.. La decisión se toma según un estilo muy
p~cu~ar: es global y autontana y bace referencia a valores politicos y so~
.. .l0sh9spitales uniyersJ~?~:_ ...
clales (Igualdad en el acceso a las prestaciones públicas).
Iarnous caracteriza esta decisión con los rasgos siguientes:
. A polític~s. públicas difere?tes. decisiones diferentes. Esto es lo que su-
- Es global. En efecto, afecta al funcionamiento cotidiano del hospital. .glere un anáhsls sobre las medidas tomadas por el gobierno con vistas a crear
a las ramificaciones de la enseñanza de la medicina, a la investigación médi- escalafones regionales (Grémion, 1979).
.ca en todos los hospitales clínicos del país y lo hace de manera uniforme. El 14 de marzo ,de 1964. d ~oumol offideL publica tres decretos que co-
_ Es política. En un sector doode dominaban el corporativismo, el rr~spanden a la palluca conSUilluva. Se reorganizan los servicios territoriales
nepotismo y la rE?ferenciaa la profesión liberal, la decisión inyecta nuevos del Estado. El prefecto de departamento es investido de una función de coor-
valores. tales como la condición de funcionario y la igualdad de oportuni- dinación de.l:onj~ntode.o.rganismó.s."
estacales que. sobre el terreno.represen-
tan a l?~nurn~tenos pansmos. Percrt:sobre todo, se crea una circunscripción
dades.
_ Es autoritaria. El gobierno confió a un gran pediatra, Rob<:rt Debré, de acclon r~g~onal.~e nombra un prefecto de región y se ponen en marcha
padre del primer ministro de la época. la preparación de las opciones. Se nu~:os se.rvIclosIre~lOnalcs del Esta~o. Su misión es gestionar el rep2.r!C de
apoyó en una pequeña red personal de especialistas y de jóvenes médicos. La las mverslOnespublIcas estatales entre los departamentos. A su lado se cons-
consulta se redujo al mínimo. La prep:lI'aciónse llevó a cabo con toda dlscre- tiruye la CODE~ (Commission de Développement Économique Régional).
ción, sin negociar con los intereses establecidos. . as:unbleade caracter consultivo. Reúne personalidades del mundo socioeco-
~ótnico ~egional nombradas por el Estado para dar su opinión sobre las poli-
Existía desde hacía algunos años un retraso acumulado por el s~ctor mé- tlC::tS
de mterés general. La regionalización y la desconcentración de la oes-
dico y hospitalario universitario francés. Las necesidades de reforma eran tión de los asuntos públicos en Francia se han puesto efectivament; en
evidentes. pero no se avanzaba en la o.dopci6n de medido.s concreto..S.Pasar marcha.
de la necesidad y del problema a un acto público que detennin= las solu- Estas medidas. lo.rgamente esperadas, tienen amplia repercusión.
ciones y las ratificara oficialmente no constituía un paso evidente,! necesa- Form~l,:,ente, llevan la marca del primer ministro Pompidou y, sobre todo,
rio. Faltaba aún la cristalización de dicha necesidad. Jamous distingue tres del ministro delegado para la ordenación territorial, Guichard. Catherine
grupos de factores que, ligándose los unos con los Otros, pro\"ccarían la Gr¿mion muestra que, de hecho. el d~cisor público no es monolítico. Las
md~d.as.fueron elaboradas a través de un proceso largo y complicado que
reforma:
mOVilizonumerosos actores. No ha una decisión ni un decisar. sino una
i) Condiciones sociohistóricas. Por ejemplo. se toma concit:ncia de .¿erit: de estrategias v de compromi?~~~!:.~os pune.Q' ~...YJS1ª, entre 2ru~
"undesfase creciente entre las disfunciones del sistema m¿dico y hcspitalario po~que 110campanen la misma solución. En síntesis. la voluntad del esca-
~.IonpoTi1iCOSif~rñPüTsO;-S¡ñ'emoarg-o:-}a':déc"isl(fn-;;= li~'~"~~;cabo--
universitario y las posibilidades teóricas de rendimiento de que es capaz la
medicina. Una categoría socioprofesional nueva dentro del medio (jóvenes ":.se::I~13Jmentepor un sec't'oordealtos' fljncionanos. Miembros de dife;~nte~
médicos formados en ouevas técnicas\ se adueña de soluciones de recambio mí:llstert-os.-p'rCfettO~'miembro,dérConseJó"a'e Estado e ingenieros de
técnicamente coherentes y las propone. Est3.s soluciones se pres~:tJllde tal C:l::llnOS, .p::slguen objetivos heterogéneos. propios de sus funciones y
manera que parecen responder a dem:mdas sociales generalizadas. más fácil" de ;u pOSlc~onde~lro del aparato del Estado. La acción política interviene
acceso a los hospitales. etc.). Encuentran una \"oluntadpolítica cC:lvergente de ?anera mter,rrutente.para señalar el objetivo genero.l y. después. para
en contra de las principales admin¡~traciones afectadas que bl.:-queanel ar(o:~rarlas medIdas de detalle. La batuta pasa rápidamente a manos de los
cambio. g:l~:netes ministeriales. los directores de gabinete, los grandes ('uerpos y
-.
13+ LAS POLillCAS PÚBLICAS El ..•.•
'lÁUSIS 135 '
otras inspecciones generales. De esta forma, ~l objetivo general (des~en- v.a:. las n.ecesidades de equipamiemo colectivo de una sociedad cuya expre-
tralizar v movilizar nuevos notables) queda ahogado en provecho de aJus- slon es, Sin embargo. del orden de la :lcción política.
res ..concretos, cuyo criterio de aceptación se enmarca en los intereses see- De ahí a ver desaparecer completamente el momento de la decisión y el
'_ teriales. representados por los altos funcionarios. ': su roa.nera, la gran demor, no h~y más que un paso. Este paso se da cuando la política pública
idea da a luz un ratón. La. decisión, como innm'aclón. es Inversamente compromete, Incluso, el destino mismo de la colectividad.
proporcional a la distancia de los n!tos funcion.~os e:'C.pertos ~ue partic~~ Esto es lo que sugiere la observación de la política nuclear (Simonnot.
pan en el proceso con respecto al Sistema a~ffi1mstratlvo. proplamen~e dI- 1978). Durante más de 30 años, desde finales de los cuarenta hasta comien.
cho. Tener ambos pies en el sistema, en télmmos de funciones ocupadas y zas de los ochenta. un pequeño grupo cerrado de industriales, de altos .fun.
de carrera individual. vuelve miope ante el cambio y conservador en las cionarios técnicos (ingenieros de minas) y de dirigen'tes de empresas públicas
proposiciones. .' . . (EDE C~A) agrupa~os en la c~misión PEON (comisión consultiva para la
Los trubajos de lernous y Grémion ilustran propOSIcIones m~sgenerales producclOn de electncldad de ongen nuclear) elaboró las opciones y decidió
tales como: las medIdas de Estado para la actividad nuclear civil v militar. Lo hizo al
abrigo de toda verdadera interferencia gubernamemal.y sin runaún debate
_ El decisor político. sirve de detonador para la elaboración de nuevas público. Así, se puede preguntar cuándo se decidió la fabricación de la bom-
políticas púl>licas. .., . ba nuclear por Francia. Los hechos muestran. ame la estupefacci6n aeneral
_ A"unque sea él quien firma y resuelve en uluI1;íl ~nstancla, se ap~y~ en que j",:,ás runguna autoridad pública lo ha sabido. No hay fechas ru ~espon:
soluciones concret<lS cuya formulación detallada. teCUlcamente consutluda, sables ldenuficables. La bomba atómica francesa no se decidió. Se hizo poco
no es obra suya. a poco hasta que, un día, Francia s""e despertó con un arsenal nuclear incipien-
_ Terceros grupos proveen estas soluciones. elaboran las opciones y te a su disposición. ..
aseguran su legitimidad operacional. . Este tipo de comprobaciones pueden afectar a la sensibilidad cívica o éü-
_ En definitiva. las medidas adoptadas no son necesanamente re'~r~'t::l4 :0. '-a respon~abilidad política y el debate público aparecen ocultos. y los go.
tas obli2íltorias íl las exigencias generales de la sociedad y de sus represen- ble~o~ son V.IC.[¡~asdel engaño de la tecnocracia. abdicando de su papel. Sin
tantes políticos, sino el p~oducto de actividades intermediarias de expertos y ernc:JIgo. el JUlCIO moral no es suficiente. Además. puede hacer fracasar el
de consejeros. ,ime::lCode comprensión de las condiciones necesarias para el acto decisional.
T~::ez el problema, si lo hay, reside en parte en la usurpación de la decisión
Por último, se puede preg~-nt~;. razonablerne.n~~, si quien. decide en lo pul:uca por terceros, expertos o tecnócratas. Otra pregunta merece ser fonnu4
formal decide de verdad. y también si hay una declSlon reconocIble y adopta- lad.1..no .moral ~icívica sino intelectualmente: iY si la forma en que razona.
da en un momento dado. mo; hablrualmente sobre la decisión política no fuera la adecuada?
ros. constituyen arras tantas alternativas g~ner.ldase? el curso d~ este pr~c~- dad de hacer v deshacer.
so. La revalorización de opciones alternativas penmte la expreSIón de W:Ctl- o---Eñrapciética. lo último ocurre raramente, A veces, «quien decide» r:trifi-
C<1Stan variadas como el recurso a (os valores. la propaganda, la comuruca. ca pura y simplemente la actividad de selección. O bien modifica sólo un de-
ción o el chantaje. La promoción política acompaña escrechamente la selec- talle de la opción que ha sido preparada. ¿Quiere decir esto que es prisiooero
ción de una alternativa. del proceso anterior? Sí y no.
La mayor parte de los autores están de acuerdo en reconocer que. en la Quien decide no tiene tiempo para hacerlo todo. Le falta innuencia
fase de fonnulación, la sustancia y el proceso están estrechamente entremez- para des[I1J.¡rlos compromisos que neutralizan o movilizan. hoyo maña-
clados. Ni los objeth'os están definidos desde el principio. ni los m,dios se na, a otros actores que cuentan, Le f:l!tan el conocimiento y la informa-
catalogan después. de fOml:!' deducciv:l. Al contrario, 1::1c:xplicita~ióo d,e los ción sobre. la tecnicidad de las iniciotivas y de las opciones posibles .. -\1
objetivos y 1:J.exploración de.los mt:dios' progresan a la par, por'¡t:rJCl_ones mismo tiempo. en sentido inverso, puede eStar convencido de que sus
sucesivas. Las autoridades públicas se mueven mucho. r<::ro.al comll:nzo. no cons~jeros o colaboradores han anticipado sus intereses. sus valores. sus
siempre soben lo que hacen. cuál es el probl,ma que se plantea. A ",enudo, preferencias.
deberán esperor el tin,1 del troyec[o por, sab" lo que buscan re,lm,ote. La L:l legitirnJción no es un aero protocolario. Jun cuando el decisor se ("00-
138 L\S POLtnCAS PL'BUCAS
.' 139
tema con ratificar el trabajo elaborado anteriormente. Posee su valor agrega-
do. que es política y simbólicamen~~ decisivo: por su voto, por su. finna" re- Insisten así en el uso de la coerción y en ~I recurso al golpe ée fuerza. En
viste de legitimidad la opción y la hace oticial. ponadora de autondad e me- efect~. la realidad m~estra un abanico muy ~~lenso y sutil de escr.ttegias que
versible. El trabajo de legitimación ~onsiste. pues. en aportar una. SolucIón de permiten a una autondad pública enterrar unJ. iniciativa o negar la necesidad
de un tratamiento adecuado.
acuerdo con un criterio de elección que la haga aceptable a los oJos de terce-
ros. Se trata de conformar la solución a las nonnas que comparten los subor-
dinados. los Uderes políticos o el público. En lo sucesivo, si alguien puede
dis'cutir la opción, deberá exponerse a transgr.edir !as normas co~pa:nd~ co-
I Por ejemplo, ante el aumento de los problemas ligados a la nacionaliza_
ción de los inmigrantes, el gobierno optará por confiar su examen a una co-
misi6n de expertos que trabajen en sesiones públicas televisad.1s (comisi6n
Long en 1987). Un~ forma para ganar tiem",'. para demostrar a los panida-
lectivamente, pagando un costo muy alto. dlscunendo la co~sutuclOnahdad
del sistema político. la legalidad de los procedimientos, recumendo a la ame- I nos y a los adversanos que el problema no es ;imple, y esperar el olvido o. al
menos. el mantenimiento del sraru quo.
naza (la calle, la huelga, la guerra civil), etc.
El sistema político francés ofrece, a este respecto, oportunidades muy
el3boradas. Los terceros pueden recurrir a las instituciones de apelaci6n
3. La racionalidad del decisor
(Consejo constitucional, tribunales administrativos. C?nsejo d~ Estado). El
declsor mi$mo dispone de la facullad de tomar la decISIón en pnnClplO -pu-
blicación de leves en el Joumaí afficieí por ejemplo-, retrasando, no obs- La decisión genera comportamientos, acti'~dades de uno o varios aClOres
tante. las modaiidades concretas de aplicación por los servicios administrati- que, enfrentados a los problemas. ~e encuen(r>..:¡en situación de e!~gir. Dicho
I vos -no publicación de los decretos de il licación-. La historia está llena) proceso desemboca en un resultaao~ que llarnmJ.os solución. ESL1definición
1 de principios que esperan siempr su o eratividad instrurnt: ,e~ un~ se- ge~~ral se aplica a todo tipo de sinJciones coc:Jianas: actos de compra. la re.
\. cuencia. ma..,",("í\ó~"por dos tiempos decisorim- I ereo e ::'Jnque uno ImplIque
I
l~clon. de mando en una organización, la cor.;:'ucción de un llutcmóvi!, etc.
.necesanarnenre el otro.' , SIrve Igualmente, al mer.cS.:n una primera ~::.:;:~;::J.racalificar las decisiones
..• En última instancia. conviene interrogarse sobre el estatuto mismo de la ~n el c::unpo de las políticas públicas. Falta c.:'carla de una buenJ teona. de
decisi6n pública. Una visión positivista de 1:15cosas.es no cons~derar :o~o mstrumentos conq:pruales y anaifticos que exr:iquen el porqué v d cómo de
los comportamienros decisorios. . .
decisión pertinente más que la actividad que conduce a una i1utondad publIca
a legitimar una opción: Cuando el"proceso llega a su.término, se vue}~'eobj:-
te de atenci6n y de significación para el comportamIento de la~ pohtlc~s pu- 3.1. LA RACrONALlDAD ABSOLL,,,
blicas. Una visión así es manifiestamente errónea. La no deCISIón e:uste, y
traduce una actividad al menos igualmente significativa de la actividad públi-
ca (Bachrach. 8ara,z. 1963). El desafío inscrito en la agenda no se ha tradu- .Casi espontáneamente. se impone un m~o aclaratorio: el .:~I decisor
raCIOnal.
cido ciertamente en una opción, pero ha sido tratado.
Una no decisión encubre un conjunto de actividades que sirven para sos- La secuencia de activid.Jdes que abarca es:l. ~uy estructurada.. De entra~
tener la movilizaci6n de valores. procedimientos. ritos y actores, con el fin da. ~ay un actor que, enfrencado a un problem1.. se encuentra en si:U.:lciónd~
de le~dtimar la no acción de unil autoridad pública. Todo sucede como si ésta elegIr. EIi2'e sus referencias. se oro ane ob'ec'''os. ITa sus valores. seleccio-
decidiera no decidir, o más concretamente. como si decidiera enterrar el pro- na sus ventajas. Lu~go bU$~alas ~Jtemacivas .:isponibles para re-:.""Jonder el
blema/Su poder. en efecto, no se manifiesta sólo ea.el ~echo de resolver los roblema. Hace un tnvent.1no e.'tbaustivo de e:as e identifica sus ~fectos v
" problemas ~ medio de la acción positiva. Adopta.. Igualmente, la acarnd de ~u~ méritos es ecíficos. Se2:uidamente adopta ::J criterio de elección can ob-
esqulvar e carof:X:.10. Jeuvo como s~a posibl~: es dect:. que permiu .:erenninar la rJ]ri~~wiQn
---1 entre las ventaJas v los JnConveruente~9.:U~ . Lemativa. La canc.i.:J.dde al-
:Bachrach y B 3tZ identific:m cuatro tipos de esrrategias de no decisi6n:
ternativas disponibles será e.',,:olor2.datinalmenr: in la Flvuda de e,'''' crir .•..
rio
y_de allí saldrá la solución. .
- el uso de la fuerza por la autoridad pública; . _
- las amenazas de sanción p::tralos partidarios d~ una reforma; Po; ejemplo, debo comprar un kilo de aze,,,, blánco en poIlC~~Decido
la propaganda. la difusión de nuevas normas jociales y políttcJ.5: J.dqumr1o al precIO más bmro en un radío de ~ :1) metros. Locillizc ~od<l.5 las
d cambio en los procedimientos dd tr:lbajo gubernamental. rl.:ndas que venden este tipo de producro. an('l:..:..:ldoel precio y 1::.i.isc~nci.:J.
~t:~~ráti~a. Tomo el c~terio.del precio y 1:1disr..:..:~iaComo pumos .:~ cor:-:pJ-
raCIOnoFlnulmente. eliJOla t:~ndJ. más bara(ll y =.5.sc;:rcan::J..
.. ... , . ELA.~ÁUSlS 141
140 LAS POLtrlCAS PÚBLICAS
- .
[aclos 'ciertos administrados. Existen motivos' suficientes para que se desesta-
bilicen los egos bajo el peso de las responsabilidades. El presidente Lyndon Problema
EL "\S,i,USIS
ConteX"to
lohnson, un político más bien experto. lno se levantaba por las noches, abru-
mado por la angustia. para pasearse ante los rett"atos de sus predecesores? La
capacidad del decisor para sopor;tar psicológíc,amente la elec~i6n varía de
forma considerable de una persona a Otra. Por ejemplo, tal polItleo no sopor-
L Preferencias
del decisor
Obligadone,
del decisor .
-.J
ta que la indecisión se prolongue, y pondrá lo más. r~pidamente posible un
punto final a la incertidumbre. Exagernndo. toda deCISIón es buena. CualqUIe- L Búsqueda d. una variedad ~
rastringida de a!'l:emativas
ra que sea, con tal que se acaben las dudas.
•
La dualidad racionalidad de sustancia/raCionalidad de proceso debe com-
EL A.'IÁUSIS
145
.pietarse con otra polaridad en el caso del decisor público: la formada por la ÚInOS.el decisor desaparece como actor privil.egiado: en realidad, el que deci-
racionalidad de sustancia y la racionalidad política. En efecto, el actor públi- de es el contexto; el sislema se impone sobre el responsable de la decisión.
co se sitúa igualmente en un escenario politico donde el éxito (o el fracaso),
juzgado por terceros, se evalúa a plazo, con un desfase temporal.
4.1. EL COMPROMISO DEL PAPEL ..
La racionalidad de sustancia se caracteriza porque los actores empeñan
ex ante SU posición. su responsabilidad, su nombre. en una de las opciones.
en el contenido o el encadenamienro metas-soluciones--efectos que ésta po- . Un papel está compuesto por las expectativas y los valores con los que
un medio presiona sobre una jerarquía, una función pública, un mandato
see, Frente a terceros. en el mismo momento o al cabo de cierto tiempo. 105
electivo:. el jefe, el alcalde, el ministro. La presión social expresa su existen-
actores se muestran o mostrarán partidarios de esa opción. Cuando sus
cia. El iodi viduo que ocupa esta posición, esta función, este mandato, tiene
efectos 'se
manifiesten, los terceros la considerarán :lcertada si siguen el
que adaptarse necesariamente -y carece de libertad para no hacerlo- a las
sentido marcado. y errónea si son contrarios. Los actores se comportan
esperanzas y a los \.alores de esa presión, salvo que se arriesgue a perder su
«ideológicamente»: su verdad compromete su seguridad o su imagen públi-
C:l o política. estatuto. su credibilidad o incluso su situación. La presión social espera del
ministro que se adaple a los hábitOs, que se comporte de acuerdo coa la ima-
. ' La racionalidad política es diferente. Los aC[Qres DO se atan de manera
gen que la clase política y la opinión pública tienen de lo que es un ministro .
unívoca,a una opci6n con preferencia a otra. Evitan tomar abiertamente pani.
El mecanismo induce efectos conservadores y compromete poderosamente la
do sobte el fondo y 00 se comprometen de manera ÍITe,'ersible. Al contrario, elección de las alternativas. ..
mantienen muchas opciones abiertas, con el fin de recuperar los efectos a
Esto se demuesrra en los cuiares dirigentes de las grandes empresas
plazo, cualesquiera sean estos efectos y la opción elegida.. Porque su estrate-
(:Vüntzberg, 1980). Ea leoría, es el 'hombre situado en lo allo de la jerarquía
gia para el éxito se desarrolla a un nivel distinto del contenido de la decisión.
?;:ir<léstos se trat:! o." rp:"nttnerse en su papel hoy y siempre y. si es posible,
(el. .director general y sus colaboradores directos) quien toma las a!rraI1desde-
clSlonr.s~ la estrategia de la ec?re:;~;).medio plazo. su presupuesto anual, etc.
capitalizar Jos beneficios e.r post que encuentren en el tondo del problema.
Pao, aun en las empresas muy bien conducidas, la (eoría del cuadro diri!Zen-
Las decisiones pasan. los actos quedan: el pragmatismo y el maquiavelismo
te planificador de lo esencial no corresponde a la realidad de su comp';rta-
penniten volver sobre sus pasos al responsable de la decisión.
nuento. Al contrario. el cuadro dirigente dedica muy poco tiempo a tomar
El paradigma elaborado por Simon ofrece la clave para comprender por
decisiones, y menos aún sobre asuntos esenciales para la empresa. Su activi-
qué un decisor público se comporta como lo hace. Queda por aclar.tr el pro-
dJd se parece a un frenético script de cine hecho de flashes incoherentes eo-
ceso mismo de la decisión: cómo progresa la iteración y conduce a optar por tre ellos, porque se compone de lareas:
la soludón.
. Según Mitzberg, si los cuadros dirigentes adoptan un comportamiento ción de los servicios municipales al otro lado del canal de la Mancha. y
hecho de pedazos y de fragmentos .dispersos. extravertido y no analítico. es su mayor debilidad en el continente, tienen un peso esencial en las deci-
porque se deben ajustar 11 papeles concretos. Sus colegas y colaboradores es- siones.
peran de ellos que se adapten a este comportamiento. Si el director general
quiere aprovechar las oportunidadeS. comunicarse con terceros. empeñarse Esta tiranía d~ los procedimientos sugiere que. a fin de cuentas, como
en la acción, debe fundirse en su papel. Ésta es la parte del conjunto que per- fruto de la activid;¡d de quien decide, la decisión es producto de los procedi-
mite al gran decisor actuar sobre y a través de los otros. Un ministro pasa el mientos que el decisor afronta (March, Simon, 1964).
15 % de su tiempo inaugurando monumentos y disnibuyendo medallas por-
que son actos decisivos; El papel protocolario legitima su acción ante la opi-
nión pública. . 4.3. LA DINMUC.\ DE LOS JUEGOS DE PODER
Al igual que las empresas y los p::trtidos, 105 servicios públicos funcionan
4.2. LA TIRANíA DE LOS PROCEDIMIENtOS como conjuntos de organizaciones plurales o pluralistas. Los distintos
elementos. oficinas. grupos y profesiones que los componen no obedecen en
Los prpcedimientos imponen condicionamientos. cuando no exigencias. sus componamieDws cotidianos a objetivos unívocos comunes que se im~
al procesarle decisión. Más concretamente. en materia de políticas públicas pondrían a todos de la misma manera. Cada uno persigue sus intereses secto-
se observan cr-...stipos de procedimientos: riales, manifiesta su propia visión q.e lo que es eficaz y racional. No hay ra-
cionalidad colectiva única. Cro2Íer,~en sus anilisis de los servicios de che-
_ Las reglas. El ejemplo que se nos ocurre .espontáneamente es el de la ques postales y de la manufactura de tabacos (Crozier, 1964), da una muestra
Constitución de un país o de la carta municipal. Esta fija el dereoho a decidir, espectacular de est.:ldiferenciación inrraorganiucional.
cuándo. sobre qué y de qué manera. Estipula los plazo.i, i03 modos de con- Los ajustes entre actores se practican en t~.ülO a las relacio-ncs -tic poder
sulta. los otros actores que deberán dar su opinión, las formas de transmisión, que se tejen entre eUos. Los actores que controlan poderosas incertidumbres
los modos de control relativos al respeto de las normas. de las que dependen terceros, si DO toda la orgmizaci6n, hacen que estos ter-
- Los circuitos de comunicación. Se conoce la ib.fluencia qu~ pued~ te .. caos y la organización dependan de la negcx."¡aciónde su buena voluntad.
ner sobre un alcalde o sobre un primer 'ministro el intermediario con que Imponen su propia racionalidad. sus propias reglas de juego. Sin embargo, a
cuenta para recoger ínfonnación sobre un problema. Así, a pesar de su buena menudo, el poder no está en manos de los escalones más altos de la jerarquía..
voluntad y su aparente tecnicismo, el consejero del decisor influye en el resu- sino en los niveles de base o en la periferia. Quienes deciden formalmente DO
men de la información que presenta. El gabinete de un ministro :1ctúa a veces tienen información y actúan de manera abs~.:ta, por principios generales.
como una pantall:1 entre el decisor al que está obligado a servir y la n:J.1idad Los que ejecutan 1:15decisiones adaptan a las C=••"'CunsGlIlciaslocales los prin-
que lo rodea. En efecto, la información no circula libremente, como una mer- cipios decididos por la cúspide y poseen inform.:lcióa que ocultan celosamen-
cadería neutra. Por otm parte, cada actor percibe el mundo en función de te en la manga. Porque, en definitiva. nadie tie:::.einterés en comunicarse con
perspectivas que le son propias. El mensaje hace el mensaje. se ha dicho a el otro; cada uno S~ reserva un margen de auto;:ornía frente a los demás y se:
propósito de los medios de comunicación. El circuito de co"municación brin- protege Contra las ~onsecuencias de su forma d~ actuar. De ahí un CÍrculo \;_
da la solución. se dirá refiriéndose a la decisión. cioso de desajustes que se refuerzan muruameo~. quedando la decisión c3m
- La división de tareas. Dividir las tareas entre servicios no es un vez más separada de la ejecuci6n, centralizada ~Dla cúspide, mientras el de-
. :':;iegspiel anodino del organigrama. Significa también prejuzgar una teoria cisor recurre, cada vez más. ~ criterios reglarm:::l.tariospara actuar sobre los
del problema que se ha de tratar. Así, confiar el conjunto de informes agrí- problemas en la b3.:5e.La Administración franct::ia es un ejemplo caractensti-
colas. a un ministro encargado especfficamente de la agricultura. induce una co de organizaciones que estallan en mil raci~aa1idades sectoriales yuxta-
política bastante más atent:¡, II los agricultores que el tr:ltarniento de dichos puestas, que eclosionan entre ellas y que la :~rarquí::J. no puede in"te!!rar
informe:s por ymos ministros (agricultura, pero ..tam~ién"fin~":z:1..s,.~s.untq~ (Dupuy, Thcenig. 1985). . _ -
europeos. etc.). Igualmente, se dan políticas públicas municipales total. Frente il universos tan plurales y explosivos:J iteración de la decisión de.
!TIente distintas en las ciudades francesas y en las brüinicas. L:1ausencia en pe~d~ del manejo ¿el poder. La cuestión es si::~r quién tiene el poder par..1
[nglaterrJ.. o la presencia en Francia, de un órgano político integrador pode- :.\Otlclparel procesu. San embargo. ::1poder, :n:.:que esté repanido desigu:!.l.
roso. como el alcalde. el alto grado de espeo::ialización y de profesionJliza~
._----_._---------_._-----------
, .148 LAS POLhlCAS PúBLICAS EL A:-IÁl,ISIS 149 ~
mente entre los actores. nunca es acaparado por un solo grupo o actor. Los tadas en múltiples puntos. La decisión, en este caso, no consiste en conseguir
otros se reservan sus bazas. que aun siendo débiles no son menos re:l..!es. por- la curación, sino en alejar el mal: hacer menos mal que antes. descartar lo
que el actor más poderoso no puede hacerlo todo solo y necesita de la coope- peor o lo insoportable.
ración ajena. A partir de ahí. s~ desarrollan procesos de intercambio y nego-
ciación que se traducen en comprorrlisos tácitos.
En un universo plurn!. la decisión depende del orden de los compromi- 4.4. LA ANARQUÍA ORGANIZADA
sos. El decisor no tendrá verdaderamente margen de acción sobre ella si, ade-
más. no ocupa una posición de poder frente a aquellos cuya adhesión y ayuda Las decisiones se toman sin que nadie se dé verdaderamente cuenta.
moviliza. Si no es el caso. y esto sucede a menudo, no pasará de mero ratifi- Después se percibe que se ha hecho algo parecido a una opción: No es eviden-
cador pasivo de los compromisos tolerables para la organización y que, de te ni identificable quién. cuándo. cómo y por qué. La observación muestra
cierta manera, le impone la relación de fuerzas. El contexto está primero, no que. :l veces, las organizaciones se campollan de una manera desconcertante.
el problema de cuya decisión se trata. ' Buscan poner en marcha soluciones de rutina, más que solucionar problemas
. Esta imagen de la decisión como RealpoLitik de la influencia y del poder. nuevos. Establecen una mala relación entre los problemas por resolver y las
es pesimista. Se opone :l una ~strategia de acción que aquí llamaremos sinóp- soluciones disponibles. Y, cuando consideran los problemas y las soluciones,
tica. Esta última postula que. de entrada. hay que poner los problemas sobre no los evalúan en términos de sus respectivas preferencias comparadas sobre
el tapete con toda transparencia y en todas sus dimensiones (preferencias. al- una escala graduada, sino que las evalúan en relación a juicios y af1IIIlaciones
ternativas, efectos): El decisor debe afrontar la elección con las cart:lS en la extremas: algo está bien o mal en sí: lÍo un poco mejor o un poco peor que al-
mano, y la norma de elección debe ser aspirar a la perfección, al ideal. Ahora guna otra cosa. Entre el éxito y el error,.no hay lugar para mances.
bien. frente a un universo plur:l1, dicha estrategia es irrealista y está condena- Este tipo de situación se encuentra en las anarquías organizadas (March,
da al fracaso. De ahí otra estrategia, denominada incrementalismo disjunto 1988), Es el caso de organizaciones muy informales: ciertas asociaciones o
(Lindblom. 1959 y 1968: Braybrooke, Lindblom. 1970). colel.:tivic.iades religiosas. Inversamente, es también el caso de conjuntos bien
, Lo posible es la referencia para la acción. Un universo plural se ~resenta, estrucrurados: el ejército en tiempos de paz. las grandes universidades. Así.
en efecto, como una caja negro. en la que no existe ningún consenso posible: advertimos que la construcción del metro regional parisino (RER), en el cur-
ni sobre el problema.. ni sobre las preferencias. las atternativas y los •.-nterios so de la década de 1960 no se puede referir a un acto de decisión preciso, 10-
de elección. Por tanto, el cambio -o 1:1decisión- s610 pliede ser induCido calizable en el tiempo, atribuible a un responsable y consti,tuavo del RER en
al margen. de forma indirecta. Para el decisor, un proceso incremenw disjun- cuanto tal (Sfez, 1981). ¿Sería necesario. por ejemplo, remontarse hasta la
to se caracteriza por la :ldopción de comportamientos tales como: apertura de una vía e:<:perimental de ferrocJIril subterráneo, en el curso de los
años veinte? ¿O bien la idea nació un dfa de verano de 1960 en la c.i1beza de
_ no insistir sobre el contenido, no identificarse o ence~e e:J el pro- un ministro de Obras Públicas que se dirigía en bicicleUi a su despacho?
blema o en una alternativa (so pena de parecer que se toma partido y. por lo La ambigüedad y la confusión constituyen las propiedades colectivas del
tanto. de que uno se erige en portavoz de un punto de vista partÍi:ular no funcionam..iento real de estos conjumos. No hay casi consenso: la opacidad ~s
aceptado por las demás partes interesadas): granee y el equívoco está generalizado. Est:1s propiedades af~tan:
_ neNar cada vez que se pueda y que se presente una ocasión (por lo
- A los fines y las preferencias: se formulan de una forma abstracta
tanto, no forzar la decisión):
_ aceptar el tratamiento de problemas «anodinos.>. aun parcial e lejana- y normalizada. Coexisten competitivamente.
mente relacionados can el problema cenrra! (un paso cada "ez); - A las actividades y a las tareas: se caracteriz::l.I1 por la ambigüedad y
_ estar dispuesto a interc:llTlbiar concesion~s con los jugadores :an los la vaguedad.
cuales se trata de actuar (dos psos adelante, un paso atrás): - A los procedimientos y las maneras de hacer: son intercambiables
_ multiplicar las coaliciones con numerosos jugadores sobre r..'.iltiples y equivocas.
puntos (no crear diver2encias radicales entre dos campos opuestos); '. - A los panicipantes y a_los actores: su disponibilidad y su participa-
- gesdonnr el tie'ffipo como u'o recurso' defjuego~'-~ .. ClOn 50n flUidas. Agunos no es[J.l1 presentes cuando debenJ.l1 estJ.flo; otros
intef':~nen sin invitación o mandato.
Se trata de una ve:rdaderJ homeopatí;¡, d~lc::unbio: un ~isrema c:-:nplejo.
atravesado. por fenómenos de poder. se: rransforma en pequeñas do~:~ inyec- P~J. que se desarrolle un proceso de elección. es necesario que se esta.
150 lAS POLmeAS PúBLICAS
EL AX.\L1SIS "
• o"
. blezca un encadenamiento entre estos cuatro elementos. Más concretamente, Buscan el apoyo de tal ministro o de tales partidos (A). Y crean un aconteci-
el proceso pone en relación: miento para reforzar su demanda: huelga. manifestación. amenazas de yoto
de castigo, etc. (P). -
- Un problema (P). Un problema troduce un objetivo o una preferencia. Por otra pane. y esta puede ser aún más importante para comprender las
Un objetivo o una preferencia se traducen en que el individuo les concede políticas públicas, el encadenamiento es diferente según los actores afectados
una atención especia!. se preocupa por ellos. por el ITÚsmo proceso de elección. Lo que es una solución para uno, constiru-
~ La ocasión d-. una elección (O). Es un caso particular de procedi- ye un problerD1 para otro. La política relativa a! transporte de mercancías por
. miento o ge forma de hacer: por ejemplo, el establecimienw de un presu- carretera es una muestra de ello. El fraude que practican los camioneros (in-
puesto o..el encuentro de dos personas en un ascensor. Es un momento en cumplimiento de la duración má.~ima del tiempo de conducción. exceso de la
cuyo transcurso un conjunto produce un comportamiento llamado decisión. velocidad autorizada en carretera, etc.) es un problema para el núnisrro de
- Una solución (5). TIene el aspecto de una actividad o de una tarea. Transportes, porque provoca accidentes que pueden crispar la opinión públic1L
Alguien hace algo que toma la forma de una decisión a los ojos de tal o cual Al contrario, es una solución para los fletadores porque les permite ofrecer
actor en la organización. mejor precio a los cargadores en una situación de fuerte competencia. Otro
- Los actores CA). Un actor es un individuo o un grupo cuya atención caso clásico: las controversias sobre si una decisión ha sido o no tomada en un
hacia un. problema. o el apego que tiene por una solución. lo decirlen a parti~ momento dado. En una negociación social. el Estado patrón considera que se
cípar en el proceso decisorio. Dedica su tiempo a estar presente y pesar en las ha alcanzado el acuerdo cuando los r~presentantes sindicales han aceptado un
decisiones. compromiso en la mesa de negociación. pero estos últimos estiman que el
acuerdo será deftnitivo cuando los trab'ajadares desconvoquen la huelga.
A pn'ori se puede esperar que el encadenamiento se produzca así: En una anarquía organizada. el encadenamiento se produce entre solucio-
nes. problemas. actores y ocasiones de elecci6n, gracias a do:; cc::.cicior.:s: el
P -----~ 0------- A-------5 tiempo y el malentendido. Dicho de otra fama: el proceso de reencuentro v
de confluencia entre estos cuatro factores muestra una lógica casi alearoriéi.
Una anarquía organizada se. parece. en efectO, en muchos aspectos, a un cubo
Una observación más atenta muestra que esta conflu~ncia no es sino una de basura. En un cubo de basura. ciertamente, se amontonan desordenada~
entre orras posibles. Así se ~nc6ntrarán encadenamientos del tipo: mente toda clase de detrito.s_heterogéneos. sin relación entre sÍ. Lo mismo su-
cede en un conjunco social complejo, donde se acumula un inventario consi-
5 ------0 ------- P------ A derable de soluciones potenciales, de problemas latentes, de actores rituales.
de ocasiones posibles de selección. Una decisión es, entonces. el encadena-
miento de algunos de estos elementos enrre ellos a través de la duración \' del
o ------A ------- 5-------,p malentendido. Es una construcción cuyo devenir no es fatal o necesarlo"sino
una configuración enrre muchas otras posibles.
A ------5 ------. P------0 Una decisión sólo existe porque ciertos actOres o terceros la perciben
como tal. En una anarquía organizada. corno lo demuestra on-an número de
Etcétera. estudios empíricos, realizados a partir del modelo elaborado por March y
Olseo. tienen lugar tres procesos princip:J..1es de encadenamiento decisional:
No faltan ejemplos de confluencios distintas.
Un ministro comprueba lo necesidad de actuar de manero visible en la es- - La elección ftnal realizoda responde a un problema. ya sea el conside-
cena politicJ pública (A). Busca una idea nuev::!. y la encuentra (5). ~o recibe' rado al comienzo u arra que lo haya sustiruido sobre la marcha. Líl obser.;a-
apoyo para llevarla :l cabo. Bruscamente. se produce un acontecimiento cuyo ción de los hechos sugiere que este proceso, estadísticamente. es un caso que
impacto ~xplotará-(P). Pres~n[:l su solución al problema Jme el Cunsejo d~ se da con escasa frecuencia. En ocros términos. pocas decisiones públicas
Ministros. que la adopta (O '. pueden ser conecradas a problemas claram~nte identificables.
La ~l:lboración de un p~supuesto es una circunstancia favorabk para las - Lo opción no responde, o ya 30 responde a un problema. El problema
elc:cciones (O). Hay una participación activa entre cierto:) grupos ..:~ presión se ha perdido de vista a lo largo del c:unino O nadie lo ha eroc:ldo nunc:!. L.!
para ob[ener ventíljas del ~obiemo: subvenciones o desgr:lV:lcivnes (S). elección se realizó grJcias al d~sc:u-;:e de todo problema. en una especie de
.. •.._- . EL A.i.'iÁLISIS 153
152 LAS POUnCAS PÚBLICAS
•
La sustancia de las decisiones depende, por la estrategia de los decisores
. fuga hacia delante. Ésta es una siruación mucho más frecuente que la prime-
ra. La ausencia de problema hace posible la elección de un acto. que intervienen. de la naturaleza de los problemas. Depe';,de también, eStre-
- El problema ha sido descanado y no tuvO lugar una elección final. El chamente, del contexto instirucional. organizativo y sociopolítico en el que
se mueven quienes deciden. Por ello:
proceso se ba detenido por aband~no.
Frente a un contexto decisional que funciona siguiendo el modelo del - el modelo de incrementalismo disyunto, elaborado por Lindblom, se
. cubo de basura. t~a racionalidad prescriptiva es. en última instancia, inútil. adapta a los escenarios de acción fragmentados y pluralistlS;
Faltan, en efecto, dos condiciones necesarias: . - el modelo de la tiranía de los procedimientos muestra el comporta-
miento de quienes deciden haciendo frente a medios burocráticos cenrraliza~
. - [os actores, en la escena decisional, modifican sin cesar sus percep- dos, estratificados y sumergidos en el formalismo de las estructuras;
- el proceso casi aleatorio, hecho de malentendidos, ambigüedades y
cIOnes de los problemas para justificar su acción, sus soluciones, su defini-
ción del momento de elección, su forma de considerar las panes interesadas «embustes) (de comportamientos de cramposos), muestra un universo en el
que las reglas sobre las reglas no lOg:rJI1un mínimo de cohesión colectiva ni
que se incluirán en el proceso ..
- Existen pocas reglas, nonnas u obligaciones que se impongan a todos de consenso;
y que eS]I'Ucturen el proceso conducente a la torna de decisión. - la presión de la conformidad con el papel se encuentra en contextos
cuyas normas adscriptivas (estatuto, p:utidos, etc.) desplazan las con.sidera-
ciones adquisitivas, y los criterios de-eticÍencia y de eficacia, como es el caso
Entonces. ¿qué puede hacer quien dirige un cubo de basura? ¿Pueden ac-
tuar los jefes de anarquías organizadas? En cualquier caso. no les sirve de en medios muy integrados y socialm¿~te protegidos.
. nada tomar. ellos mismos y autoritariamente, las decisiones ni intervenir de
'.. una manera táctica (por incrementali5mo disjunto) o aun recurrir a instru- El cajón de las herramientas anaJiticas contiene múltiples clavos para
aclarar la complejidad de situaciones y activid3.c,:s ':1ue conducen a l1~a 'Jp-
: mentas cuantificados. El resto del cubo percibiría sus decisiones como par-
ción legítima. Una demostración espectacular desde -el punto de vista peda-
ciales, retorcidas. Las coaliciones serian muy débiles y muy frágiles. Los ar-
gógico se encuentra en la crisis que. en octubre de 1962, opuso a Estados
gumentos técnicos, las cifras y los datos no serian creíbles. Al contrario. si
los dirigentes quieren mantener un margen de jueg'o. harían mejor en distan- Unidos y la Unión Soviética a propósito de la instalación. por esta última, de
ciarse y mantener las manos libres para las cosas esenciales. Delegan: creen misiles nucleares en la isla de Cuba. Esta crisis se tradujo en una e:'ttrema
. en las virtUdes de la competencia interna y de los conflictos (que gane el me- tensión que estuvo a punto de conducir a la guerra mundial. En efecto. el go-
bierno norteamericano se da cuenta, durante el verano, de que los so\i¿ticos
jor) y tienen confianza en la capacidad del cubo de basura. Para actuar bay,
arman a su aliado con misiles ofensh'os que pueden atac:lI' el territorio esta-
sin embargo, dos áreas que sólo ellos controlan: la elección de los dirigentes
dounidense. El presidente Kennedy e:cige su retirada poniendo a Krusche.v
intennedios. que convierten en un tema privativo. mediante la cual crean la-
ante una prueba de fuerza diplomática y psicológica. y ~stableciendo luego
zos de lealtad personal; y la redefinición periódica de las estructuras formales
~nbloqueo naval a la isla a fin de impedir que los barcos soviéticos sigan
(organigr:una. elc.). por la cual pueden remover de tanto ~n tanto el cubo,
lnstalando las armas. Kruschev termina por ceder y retira los cob«es de
como el bast6n en el hormiguero, y hacer pesar la amenaza y la incertidum-
Cuba. Esta crisis ha sido estudiada por .'-llison (Allison, 1971). Examinando
bre sobre las autononúas fragmentadas.
esencialmente la conducta del gobierno norteamericano. repasa los hechos
utilizando sucesivamente tres enfoques decisorios diferentes:
5. El eStilo decisorio
- Un enfoque en ténninos raciooJles. A primera "ista. esta crisis ha
sido conducida por las autoridades nQrt~americanas según los principios d~
La teOrla de la decisión aplicada a las políticas públicas tiene por objeto
la respuesta gradual, es decir, aplicando un esquema de rJcionalidad ,bsoiu-
explicar si bay correspondencias, correlaciones, cuando no relaciones de cau-
ta: formulación de soluciones variadas. comparación de sus cOStos y '.encajas
. s?-_a_efe.c!o. eorre las acrividades que abarcJ.. las características contextuales
respectivas con la ayuda de técnicos y de expertos de alto nivel: recolección
que identiíica y el contenido de' las orientaciones hacia la acción que 'eCpro-
de un má.'(imo de infonnación. elecdl~n tina! efectuada se!!ún un cri(~rio de:
ceso p:oduce. La tarea de las ciencias sociales y políricas. ~n este aspectO.
optimación (mayores ventajas al me~orcosto) y aplic:!ción inmedL:.[a. El
"o' está 1.eJos~e haber terminado. Sin emb:lI"go. algunJs certezas parciales ya es-
tán dtsporubles. Pueden resumirse de la siguiente manera. bloqueo naval. la solución elegida. pe:mite ulcanzar el reiultado. Alli;"n de-
.- ...••~.."~-------
•
muestra 'que, en realidJ.d. este sistema racional no fue el que se siguió verda- considera insoportables desde su punto de vista y que estas opciones aca-
deramente. De hecho, la informnci6n utilizada a menudo era precaria y a ve- rrean. Para el presidente Kennedy es el riesgo de conflicto armado con
. ces escasa: los cohetes ¿eran realmente ofensivos? La aplicación del bloqueo l:1 URSS; para el ejército de tierra norteamericano, la influencia de la
naval no fue tan estricta. ya que la. marina estadounidense operó a 200 millas aviación en el tratamiento militar del conflicto; para la diplomacia del
. de las costas de Cuba y no a 80 como exigía Kennedy. Departamento de Estado, el canje de la retirada de los misiles por el
_ Un enfoque en términos de sociología de las organizaciones. Allison «abandono» de BerlíD Oeste por los aliados (Anderson. 1983).
interpreta una parte de los «fallos» del esquema racional con la ayuda de Resumiendo: abundan modelos de interpretación que permiten explicar el
conceptos desarrollados por el modelo de la racionalidad limitada. l.as solu- ... resultado de un proc~sode decisión. pero tambi¿n su estilo. Las ciencias so~
ciones elegidas para responder a los so\iéticos lo fueron porque estaban de- ciales ban tratado de establecer si hay un nexo ~nfre el estilo del proceso y
terminadas. no por la calidad intelectual de quienes decidieron (Kennedy y las propias decisiones en la materia adoptadas en tomo a la mesa. Dos pará-
su estado mayor), sino por las características de las organizaciones a las cua- metros dejan más precisamente su huella en el proceso decisional:
les pertenecían. El gobierno norteamericano es un armazón heterogéneo de
ministerios que recelan los unOSde los otrOS y que tienen sus propias rutinas: - El grado de acuerdo o desacuerdo existente entre los que participan
el Departamento de Estado, la CIA, la Casa Blanca, el PeDt:1gono, etc. La cri- en la decisión acerC:lde los objetivos y los valores ligados al problema que
sis se convierte en un desafío que cada uno intenta utilizar en su provecho, se considera. ¿Hay consenso o. al conrrnrio,diver:::encia?
algunos contra los soviéticos. pero también para lograr una ventaja sobre el - El grado de c~rtezao incertidl.:lmbreque p~valece entre los actores en
vecino: los aviadores norteamericanos quieren desquitarse del ejército de tie- cuanto a los medios que deben utilizarse, al conocimiento de los hechos y a
la eficiencia de las ;oluciones. Los hééhos y los métodos para tratarlas ¿son
rra. la CIA de los diplom:1ticos, etc.
claros y eVIdentes o bien nos hallamos en una süuación de vaguedad, de co-
En ~tl:ii1tüa las formas de ¡';-.:i.i;),. están condicionadas por la habilidad de nocimiento débil, de inc::rti¿umbre?
cada servicio. El bloqueo se realiza a 200 millas -lo que deja menos tiempo
a Kruschev para reaccionar sin perder prestigio y acre.cientael riesgo de en-
frentamiento militar entre ambas marinas- porque.la US Navy dispone. des-
Gn:.tio de acuudo sobre los objuillos .~.(os valores
de hace mucho tiempo. de un plan de bloqueo a 200 millas que saca de sus
cajones para esta ocasión. . .
Grado de acuerdo so:re los objetivos y las valares
_ Un enfoque en términos de mercado político. Allison muestr:Lfinal.
mente, que otros comportamientos norteamericanos se explican porque, al Alto Débil
ITÚsmotiempo que se enfrenta a una crisis internacional que opone a su país
a la URSS, Kennedy es UDoper.ldor político que se mueve en un mercado
Proceso prcgramado Proceso negociado
político y electoral interior, en su propio país. Las elecciones están a la vista..
en otoño, para renovar una parte del Congreso. Hay que tranquilizary tener Rutinas: automatismos: Deba!es ideológicos;
en cuenta a la opinión pública, tanto más cuanto que Kennedy debe borrarla ,~Ilo no acontecimientos. recurso a la experiencia
Tecnificación, ya la ltadición.
mala imagen producida por el fracaso do Bahía de los Cochinos. tentativa de burocratización Controversias oficiales
invasión. militar de la isla de Cuba orquestada por la ClA a principios Grado de certeza y planificación, y compromisos ocullos.
de 1961, en el momento en que Kc:nnedyasuIlÚala presidencia. sobre fos medios.
los hechos y I
Se ha sugerido una cuarta perspecriya. basada en un enfoque decisional el conocimiento
Procesa pragmafico Proceso caótico i,
por objeciones. para explicar esta crisis y su gestión por Estados Unidos. En ,
otras palabras. la decisión es una securncia de interaccione~ cuya dinámica :lébil
. Recurso a los •.expertos"':.
empirismo (10mejor
Prevención;
de!!centralización.
.1,
proviene de las objeciones que los múltiples actores expresan por turnoa las que se pueda), bÚSCluec; recurso a la autoridad !
opciones y a las soluciones que se proponen. P:lralos actores, lo racional no 1 de variantes estratégica.:_ o al hombre providencial. i
;
es resolver el problema de la presencia de misiles ofensivos en manos de los
so ....iéticos y en suelo cubano. sino de 501ucionar los errores que c::!.daUGO
I ,~""'''''''''' ':>k."w .. ••,~.w;.,',~. ;.;,u •••.•.x
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;
• 156 LAS POLÍfICAS PÚBUCAS
EL A.'1ÁUSIS 157
El cruce de ambos parámetros da como resultado un proceso decisorio Jobert (B.). Muller (P.), 1987, L'£w '" acáon. Policiques publiqúes e!
muy diferente desde el punto de "ista de sus características. corporatisme, Pans, PUF.
Jones (C.), 1970, An Inlroducrion to the Study of Publu: Poliey, Belmont,
. El estilo de decisión ¿está unido 01 contenido de las políticas públicas?
DuxbufY Press. '
.La imaginación sociológica no busca sino apoderarse de tales hipótesis. Así,
Johnson (R.), 1974, Managing che White House, New York, Harper and Row.
"en Francia. las políticas constitutivas estarían dirigidas de un modo autanta.
l.asswell (H.), 1970, A Pre-View of Polie¡ Sci.ncos, New York, Elsevier .
rio, mientras que las medidas reglamentarias serían más bien el resultado de Lindblom (C.), 1959, TIle Seience oí « Muddling Tbrough >, Pub/ic AdminisCTa-
. 'compromisos negociados. El comienzo de la V República marcana el apogeo
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de un estilo decisorio que mezcla el autoritarismo político con la tecnocracia Linblom (C.), 1968, Th. Policy Maldng Process, EogJewood Oiffs, Prentice Hall.
de los expertos. desembocando en medidas globales. Sin embargo. conside- March (J.), 1988, D.cisions and Organiza/Íons, Oxford, Basil Blackwell.
rar que las épocas posteriores siguieron el estilo inverso parece una síntesis March (1.), Simon (H.), 1964, Les organisarion.r,Paris, Dunod.
peligrosa. Después de todo, quizá haya que aceptar que la compkjidad y la Neustadt (R.), 1960, Presidencial Power. The Polin'es o/ Leadership, New York,
negociación constituyen. hoy como ayer. un dato del que ninguna autoridad John Wiley.
pública nacional puede hacer abstracción, aun cuando el gobierno parece ae. Padioleau (J.), 1981, Quand la Franee s'<nferre. La poliriqu< sidérurgiqu< de la
tuar por decreto. France depuis 1945,'Paris, PUF.
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