La discriminación en el mercado laboral se presenta como una situación cuando una
persona ofrece sus servicios, en términos físicos o mentales. Sin embargo, pueden ser tratados de manera diferente e injusta, por ejemplo, con menores salarios o una menor propensión a ser contratada; este tratamiento diferente se relaciona a una característica observable, como la raza, la etnia o el sexo. Por ende, estos tratos discriminatorios pueden afectar en forma significativa e incide en la eficiencia y productividad de los empleados. Según (Galarza, F. y Yamada, G., 2013), “en cuanto al mercado laboral, nuestra Constitución indica que en el inciso primero de su artículo 23 que “En la relación laboral se respeta el principio de igualdad de oportunidades sin discriminación”. Por ello, si analizamos el contenido de nuestra ley de leyes, la sociedad peruana tendría el marco jurídico suficiente para evitar una discriminación laboral significativa en los centros de trabajo. Sin embargo, en comparación a otros países, en el Perú se ha hecho muy poco para velar por el cumplimiento de los principios constitucionales antidiscriminatorios en el mercado laboral” (p.32) De acuerdo a lo que señalan los autores, en la relación laboral se debe respetar el principio de igualdad de oportunidades sin discriminación, porque tenemos un marco jurídico como la Constitución Política del Perú, que nos protege de los actos discriminatorios. Además, es importante que se potencie la capacidad de fiscalización y sanción para los casos denunciados y comprobados de discriminación, asi se podría disminuir los casos de discriminación. Galarza F. & Yamada G. (2013). Discriminación laboral en Lima: el rol de la belleza, la raza y el sexo. Informe final preparado para el Consorcio de Investigación Económica y Social (CIES). Lima.