Introducción

El uso de unidades de mampostería como sistema

estructural es uno de los métodos constructivos
más antiguos que aún se utilizan en las
infraestructuras modernas debido a que son fáciles
de transportar y están disponibles en una amplia
gama de tamaños y formas [1-4]. Existen
diferentes materiales con los que se fabrican las
unidades de mampostería como la tierra [5] o la
piedra [6]. Sin embargo, hoy en día los más
utilizados son los producidos mediante procesos
industriales como los ladrillos de arcilla cocida y
los bloques de hormigón por su facilidad de
producción, alta resistencia a la compresión y
menor variabilidad dimensional. Las propiedades
mecánicas de las unidades de mampostería, la
capa de mortero para juntas y la interfase entre
ellas controlan el comportamiento de los sistemas
de mampostería bajo cargas estáticas y dinámicas.
Los ensayos de compresión uniaxial en prismas y
los ensayos de cortante diagonal en carteras son
uno de los ensayos mecánicos más utilizados para
investigar la resistencia de los sistemas de
mampostería bajo cargas estáticas. La resistencia
a la compresión de los prismas de mampostería y
la resistencia al corte de las carteras de
mampostería se utilizan en el diseño de
estructuras de mampostería. Estudios previos
informaron que la resistencia típica a la
compresión de los prims y la resistencia al corte
en las carpetas hechas con ladrillos de arcilla
cocida está en el rango de 2,90 a 8,70 MPa [7, 8]
y 0,22 a 0,63 MPa [2, 9], respectivamente. En el
caso de prismas y carteras compuestos por
bloques de concreto, la literatura disponible
reportó una resistencia a la compresión de
10,00 a 16,90 MPa [10-12] y una resistencia al
corte de 0,41 a 1,13 MPa [13, 14]. Sin embargo, la
fabricación industrial de estas piezas de
albañilería requiere altas temperaturas que
generan enormes emisiones contaminantes y una
alta demanda de consumo energético [1, 15, 16].
La activación alcalina permite el uso de residuos,
subproductos industriales y minerales no
metálicos para la producción de materiales
alternativos con menor huella de carbono [17].
Además, investigaciones recientes muestran que
los materiales cementosos activados con álcalis
(también conocidos como geopolímeros)
presentan propiedades mecánicas similares a las
observadas en los materiales tradicionales y
también exhiben un buen comportamiento ante el
fuego, las altas temperaturas y la erosión hídrica
[1, 18, 19]. Además, al igual que el hormigón
celular autoclavado o los bloques de hormigón
celular, la adición de un agente espumante como
el peróxido de hidrógeno en matrices o morteros
activados alcalinamente da la posibilidad de
generar un material poroso de baja densidad [18].
En cuanto a peso ligero
sistema de mampostería de hormigón, Deyazada
et al. [20] informaron una resistencia a la
compresión uniaxial de 2,23 MPa y Markulak et
al. [21] determinaron una resistencia al corte de
0,34 MPa, respectivamente. Sin embargo, no se
han encontrado en la literatura estudios
relacionados con la investigación de los sistemas
de mampostería construidos con unidades de
mampostería de geopolímero liviano. En
consecuencia, la presente investigación se enfoca
en realizar la caracterización mecánica de un
nuevo sistema estructural compuesto por bloques
ligeros de geopolímeros a base de puzolana
reforzados con fibra natural que se unen con
mortero de cemento/cal. Las propiedades
mecánicas clave del nuevo sistema de
mampostería, como la resistencia a la compresión,
el módulo de elasticidad, la resistencia al corte y
el módulo de rigidez, se determinaron mediante
una extensa campaña experimental.

Campaña Experimental

El sistema de albañilería está compuesto por

bloques de puzolana alcalina activada y mortero a
base de cal/cemento. El bloque (ver Fig. 1a) se
produjo utilizando puzolana natural como material
de origen; También se incluyeron peróxido de
hidrógeno como agente espumante, arena de
cuarzo como agregado fino y fibras de yute como
refuerzo natural. Estos bloques tenían unas
dimensiones de 300 x 100 x 200 mm (largo x
ancho x alto) y presentaban una resistencia a la
compresión de área neta a los 28 días de 8,10
MPa, una densidad de 1,27 gr/cm3, una porosidad
aparente de 24,3% y absorción de agua. del
19,13% (ver detalles en [18]). El mortero utilizado
para la albañilería estaba compuesto por arena de
cuarzo como árido fino, cal y cemento Portland
como materiales cementicios. Se utilizaron
relaciones en peso de agregado fino a material
cementicio de 3 y agua a materiales cementicios
de 0.58 siguiendo las recomendaciones de EN459
[22]. Se utilizó una relación en peso de cemento a
cal de 1 para producir mortero con una resistencia
a la compresión mínima de 7,2 MPa a los 28 días
de edad. El límite de contenido de cal en el
mortero fue controlado por la resistencia a la
compresión resultante.

(a)
(antes de Cristo)
Fig. 1 Sistema de mampostería: (a) Bloque de
geopolímero liviano a base de puzolana reforzado
con fibra
y (b) Albañilería de bloques de mampostería.

Primero se realizó un ensayo de compresión

uniaxial sobre prismas para la caracterización
mecánica del sistema de mampostería. Para ello se
colocó capping en las superficies inferior y
superior para permitir una adecuada transferencia
de carga, como se indica en [23]. Se empleó una
máquina de ensayo universal servohidráulica
MTS controlada por desplazamiento. El ensayo de
compresión uniaxial sobre prismas consistió en la
aplicación de una carga vertical a una velocidad
de 0,5 mm/min sobre la superficie superior de los
prismas (ver Fig. 2a). Esta prueba fue
realizado siguiendo las directrices de [24]. Cuatro
prismas formados por dos bloques con junta de
mortero de 10 mm de espesor (Fig. 2a). Las
dimensiones de los prismas fueron de 300 x 100 x
410 mm (largo x ancho x alto), obteniendo un
valor de esbeltez de aproximadamente 4. Todos
los prismas fueron instrumentados con
Transformadores Diferenciales de Variable Lineal
(LVDTs) para medir las deformaciones locales
durante los ensayos (Fig. 2b).
(a) (b)

Fig. 2 Ensayo de compresión uniaxial en prismas:

(a) Diagrama esquemático del prisma
(dimensiones en mm)
y (b) Instrumentación de prisma.

Los resultados de las pruebas se procesaron

utilizando las fórmulas dadas en [24] para
encontrar la máxima resistencia a la compresión y
el módulo de elasticidad equivalente. La
resistencia a la compresión ƒm se obtuvo
mediante la Ec. 1, donde n es el factor de
corrección (en función de la esbeltez), F es la
fuerza uniaxial y An es el área neta. El módulo de
elasticidad E se obtiene mediante la ecuación. 2
como la relación entre la diferencia entre el 33% y
el 5% de la resistencia máxima a la compresión y
la diferencia de sus respectivas deformaciones.

′ = ×

(1)

= ′ 0 .33 − ′ 0 .05
0.33 − ε0.05

(2)
Luego se realizaron pruebas de compresión
diagonal en carteras. Al igual que en las pruebas
de compresión de prismas, se ejecutó un proceso
de tapado en las esquinas de las carteras para
nivelar las superficies, como se indica en [23]. De
nuevo, para realizar esta prueba se utilizó una
máquina de ensayo universal servohidráulica
MTS controlada por desplazamiento (0,5
mm/min). El ensayo consistió en la aplicación de
una carga vertical sobre la diagonal de una cartera
fabricada con bloques de geopolímero ligero a
base de puzolana reforzados con fibra (Fig. 3a).
Se siguió la norma ASTM E519 [25] para realizar
los ensayos de compresión diagonal. Con estas
condiciones se ensayaron tres carteras cuadradas
de 600 mm de lado formadas por seis bloques de
geopolímero liviano (Fig. 3a). Al igual que en el
caso de los prismas, también se emplearon LVDT
en la cartera cuadrada para obtener las
deformaciones verticales y horizontales (ver Fig.
3b).
Los resultados de los ensayos de compresión
diagonal en carteras indicaron una resistencia
máxima al corte igual a 0,38 MPa y un módulo de
rigidez de 286 MPa. Un análisis de los modos de
falla indica que todas las muestras mostraron una
falla por adherencia de juntas que es característica
de los sistemas de mampostería (Fig. 5a). Este
tipo de falla ocurre porque el esfuerzo cortante
aplicado excede la capacidad de adherencia entre
el mortero de fraguado y el bloque. Por otro lado,
el esfuerzo cortante vs deformación (Fig. 5b)
indica una respuesta diferente a los ensayos bajo
cargas de compresión en los prismas: las carteras
alcanzaron su esfuerzo máximo en mayor tiempo
y luego perdieron resistencia a una velocidad
similar, a excepción de M3 muestra que
rápidamente perdió fuerza.

432

M1 M2 M3
1

0 0,001 0,002 0,003

Deformación (mm/mm)

(a) (b)

Fig. 5 Resultados del ensayo de compresión

diagonal: (a) modo de falla y (b) curvas de
esfuerzo cortante vs deformación.

Conclusiones

Se realizó la evaluación del comportamiento de un

nuevo sistema de mampostería estructural a base
de bloques de geopolímeros ligeros a base de
puzolana fibroreforzados mediante ensayos de
compresión uniaxial en prismas y de compresión
diagonal en carteras. Los ensayos de compresión
uniaxial sobre prismas evidenciaron la
importancia de la adición de fibras en el sistema
de mampostería (específicamente en la etapa de
producción de bloques); En todos los casos se
observó un comportamiento dúctil del sistema.
Las pruebas de compresión diagonal en las
carpetas mostraron un comportamiento similar a
los sistemas típicos de mampostería donde la junta
de mortero falló por adhesión. Los resultados
obtenidos en la caracterización mecánica de los
prismas y carteras pueden ser

116 Materiales Avanzados y Aplicación III

considerado representativo y confirmó que el

nuevo sistema de mampostería se puede utilizar
eficazmente para fines de construcción.
Expresiones de gratitud

Este trabajo fue apoyado por CONCYTEC y

SENCICO PERU bajo el proyecto: “GeoBloque:
Desarrollo de bloques de construcción ultraligeros
con geopolímeros” (Contrato No. 105-207-
FONDECYT). Los autores agradecen a Compañía
Minera Agregados Calcáreos S.A (COMACSA)
por el suministro de materias primas. Guido Silva
quisiera agradecer el apoyo de CONCYTEC
(Contrato N° 10-2018-FONDECYT/BM) para su
Ph.D. financiación de becas.