Un hábitat es un conjunto de factores apropiados para que un individuo o
comunidad de una especie viva en términos generales como la vivienda o su reproducción, en la tierra tenemos diferentes hábitats desde un charco hasta un hábitat extremo, los habitad extremos pueden generarse por condiciones de temperatura, de pH, de salinidad, de presión, de desecación, etc., los microorganismos son muy variados, algunos han evolucionado para vivir en estos hábitats tan extremos. Los microorganismos en las formaciones geológicas del subsuelo pueden intervenir en la distribución y el movimiento de los desechos. El muestreo microbiológico en las formaciones profundas es costoso y muy tedioso ya que por exploraciones de extracción de materiales pueden alterar los resultados; pero en los hallazgos encontraron en una profundidad entre 3900-4200m. unas bacterias fermentativas termófilas. El suelo de la tundra los líquenes y otros microorganismos se adaptaron a crecer a un ritmo lento para sobrevivir, ya conociendo diferentes estrategias de los microorganismos en sobrevivir en diferentes condiciones de los hábitats del planeta tierra esto quiere decir que los seres vivos son una “cajita de adaptación” que también interactúan entre si y con organismos multicelulares como plantas, animales, entre otros. Cada organismo es una parte fundamental del ciclo de la vida como los microorganismos en diferentes amientes que pueden llegar a alimentar a plantas si es necesario y seguir con la cadena alimenticia y esto conlleva a que la vida y los ecosistemas sobrevivan, nosotros como seres humanos como seres razonables que, aun teniendo esta información, la ignoramos y pensamos que no está hay esas formas de vida.