El flujo circular, es un modelo económico que refleja el funcionamiento de la actividad económica dentro de una economía de

mercado, suponiendo que la economía es cerrada, es decir, que los consumidores gastan todo su ingreso, no existe el Estado y no
hay comercio internacional. El flujo circular es un modelo económico que pretende explicar cómo se relacionan dos tipos de agentes
económicos. Por un lado se encuentran los hogares o familias (consumidores), y por otro lado las empresas (productores). El flujo
circular de la economía moderna funciona de la siguiente manera:
El Estado o sector público, en primer lugar está rodeado de
agentes económicos que intervienen en la toma de decisiones,
con la intención de optimizar su bienestar. Entre ellos mantienen
relaciones circulares que aseguran que el dinero fluya
continuamente; entre la economías domésticas o familias y las
empresas, se ubica el mercado de productos y el mercado de
factores; mediante el mercado de productos los agentes
económicos intercambian cualquier tipo de bienes y servicios a
cambio de capital y mediante el mercado de factores, se
intercambian los factores de producción (tierra, trabajo y capital).
En segundo lugar, a través del mercado de productos, las
familias adquieren bienes y servicios para satisfacer sus
necesidades, mientras que las empresas producen estos bienes
y servicios que demanda la sociedad. Las empresas lo ofertan en
el mercado de productos y las familias lo adquieren mediante un
capital, que la empresa recibirá como ingresos.
En tercer lugar, las familias requieren de una renta familiar que
obtienen ofreciendo los factores de producción en el mercado de
factores, con la intención de adquirir bienes y servicios; a su vez,
las empresas necesitan mano de obra, materia prima y
maquinaria para la producción de estos bienes y servicios, de
modo que lo intercambiaran con las familias a cambio de
salarios, alquileres, intereses y beneficios.
Por último, las empresas y la economía doméstica, pagan impuestos al Estado o sector público y estos a su vez, proporcionan a
ambos agentes ayudas sociales, obras e infraestructuras públicas.
Esta corriente continua e infinita de intercambio de dinero es la base de la economía moderna.