El concreto de uso común, o convencional, se produce mediante la mezcla de tres componentes
esenciales, cemento, agua y agregados, a los cuales eventualmente se incorpora un cuarto
componente que genéricamente se designa como aditivo. Las principales características y propiedades del concreto que pueden ser influidas y modificadas por los diferentes tipos y clases de cemento, son las siguientes: