Explora Libros electrónicos
Categorías
Explora Audiolibros
Categorías
Explora Revistas
Categorías
Explora Documentos
Categorías
F. RICHARD BESSIERE
Sinopsis
EL ENIGMA DEL PLANETOIDE
PRÓLOGO
Capítulo primero
Capítulo 2
Capítulo 3
Capitulo 4
Capitulo 5
Capitulo 6
Capitulo 7
Capitulo 8
CapItulo 9
Capitulo X
Capitulo 11
Capitulo 12
Capitulo 13
Capitulo 14
Capitulo 15
CapItulo 16
Capitulo 17
F. RICHARD
BESSIERE
¿Fue la destrucción de
Sodoma y Gomorra, tal como
se cree en la Tierra?
¿Fue el productro de la
rivalidad entre las
civilizaciones guerreras de
Altair y el Cisno?
¿Quién era la muñeca
Dios encontrada en el
planetoide Bart, por Scott
O'Brady, el contrabandista del
espacio?
Esto es lo que averiguaron
Scott O'Brady y sus camaradas
después de mil peligros, en los
que arriesgaron finalmente la
vida.
Sin duda, ésta es una gran
obra dentro de su género,
narrada con ingenio,
inteligencia y fantasía.
Al amanecer
De madrugada
Los visitantes
En Altair
En el sistema de Próxima
En la Tierra
Epílogo
Para la buena comprensión del
relato, el autor traduce en lenguaje
corriente los diálogos que van a
continuación, siempre dentro del espíritu
de los personajes y de las situaciones que
animan lo que llamaremos el epílogo.
En otro cielo
Decorado: una vasta estancia, muy larga y
muy alta, con muros espesos irradiados
con una luminosidad centelleante,
uniforme, sedante. Alrededor, extraños
dispositivos a los que ningún nombre
puede ser aplicado. Y en el fondo, un gran
ventanal circular, en cuyo interior se
refleja un largo rastro blancuzco,
curiosamente deformado, replegándose
sobre sí mismo. La estructura de un
Universo. Tal vez la Vía Láctea...
En el centro, una mesa de trabajo
donde hay colocados diversos objetos de
formas extrañas y, a cada lado, frente a
frente, dos seres, de dedos múltiples
retorcidos y encorvados, los dos
personajes que los terráqueos han tenido
ocasión de ver, por intermedio de la
cabina interdimensional.
Personaje primero: Bueno, querido,
¿qué piensas? Creo que ya es hora de
suspender la experiencia. Y sin embargo,
estaba a punto de lograr la victoria.
Personaje segundo: Error. Ibas a
una derrota. Consulta el diagrama y date
cuenta de ello. Pero, ¡bah!, qué importa el
vencedor o el vencido... Sólo los
resultados tienen valor. De ahora en
adelante debemos saber sacar el mayor
provecho de estas nuevas tácticas.
Nuestro campo experimental ha
funcionado a maravilla y los
convertidores temporales nos traen
importantes revelaciones sobre este arte
que denominan guerra. Somos una raza
demasiado vieja y apoltronada, querido...
Sí, sí... Nuestras técnicas están
anticuadas, y no se hallan en relación con
las exigencias del mundo moderno. Desde
ahora, todo será distinto. ¿Qué te pasa,
querido?
Personaje primero: Pienso en los
seres que hemos creado... En el fondo, han
vivido y han sufrido.
Personaje segundo: Ridícula
consideración. En realidad, no eran más
que marionetas de cuyos hilos tirábamos
nosotros. Nosotros también estamos en
guerra, no lo olvides. Somos los
responsables del porvenir de ciento
cincuenta mil millones de seres. (Se
agacha y recoge un objeto que hay en el
suelo; luego lo entrega a su colega). Es
curioso que haya vuelto con el aparato del
que habíamos perdido el rastro. Ingenioso
como pretexto, ¿verdad? Y tan sencillo...
Toma, querido, cógela y devuélvela a tu
hija. ¡Que seque sus lágrimas!
FIN