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por la libertad
ANTOLOGÍA DE LA HISTORIA
POLÍTICA DE BOLIVIA
(1825-2020)
Lupe Cajías
Iván Omar Velásquez-Castellanos
(Coordinadores)
Un amor desenfrenado
por la libertad
ANTOLOGÍA DE LA HISTORIA
POLÍTICA DE BOLIVIA
(1825-2020)
Tomo I
1825-1952
Prefacio Autores de los capítulos
Dr. Georg Dufner Erick D. Langer
Representante en Bolivia Víctor Peralta Ruiz
Fundación Konrad Adenauer (kas) Andrea Urcullo Pereira
Clara López Beltrán
Iván Omar Velásque-Castellanos, Ph.D. Nigel Caspa
Coordinador del Programa de la kas en Bolivia Brooke Larson
Marta Irurozqui Victoriano
Presentación Andrés Leonardo Guzmán Escobari
Lupe Cajías de la Vega Gustavo Rodríguez Ostria
Coordinadora Académica León E. Bieber
Anna Guiteras Mombiola
Iván Omar Velásquez-Castellanos, Ph.D. Lorena Córdoba
Coordinador del Programa de la kas en Bolivia Isabelle Combès
Luis Bértola
Farit Limbert Rojas Tudela
Konrad-Adenauer-Stiftung e.V. Huascar Rodríguez García
Klingelhöferstraße 23 Iván Omar Velásquez-Castellanos
10785 Berlin Alfredo Seoane Flores
Tel: +49 30 26996-0 José A. Peres-Cajías
Fax: +49 30 26996-3217 Reina Jeanet Gonzáles Apaza
E-Mail: zentrale@kas.de
ISBN (Obra completa) 978-9917-9933-2-2 Esta publicación se distribuye sin fines de lucro, en el
ISBN Tomo I: 978-9917-9933-4-6 marco de la cooperación internacional de la Fundación
Konrad Adenauer (kas). Los textos que se publican a
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toda vez que el propósito de su inclusión es simplemente
ilustrativa. Pedimos disculpas en el caso de que alguna
explicación o aclaración se haya consignado de forma in-
correcta o imprecisa.
El título de la obra reproduce la frase de Simón José Antonio
de la Santísima Trinidad Bolívar Palacios Ponte y Blanco.
Cuando le preguntaron “¿qué es Bolivia?”, él respondió:
“Un amor desenfrenado por la libertad”.
COMITÉ EDITORIAL
TOMO I
PRIMER PERIODO
Bajo la Constitución de 1826 que organiza y constituye la nación boliviana
(1825-1880)
SEGUNDO PERIODO
Bajo la Constitución de 1880 que marca el periodo liberal
(1880-1938)
TERCER PERIODO
Bajo el debate constitucional de 1938 que incorpora el régimen social
(1938-1952)
TOMO II
CUARTO PERIODO
Bajo los cambios de la Revolución Nacionalista
(1952-1964)
QUINTO PERIODO
Bajo la consolidación de los cambios y la Constitución Política del Estado de 1967
y el periodo militar
(1964-1982)
SEXTO PERIODO
Transición de la Constitución Política del Estado de 1967.
Avances de mayores garantías constitucionales
(1982-2000)
SÉPTIMO PERIODO
Transición de las reformas de 1994 hacia la Nueva Constitución Política
del Estado Plurinacional de Bolivia
(2000-2020)
Índice
Tomo I
Prefacio......................................................................................................................................... 15
Presentación................................................................................................................................. 19
PRIMER PERIODO
Bajo la Constitución de 1826 que organiza y constituye la nación boliviana
(1825-1880)
SEGUNDO PERIODO
Bajo la Constitución de 1880 que marca el periodo liberal
(1880-1938)
L
ibertad, justicia y solidaridad son los intercambio y la relación entre las personas
principios hacia los que se orienta el que asumen su responsabilidad social, desa-
trabajo de la Fundación Konrad Ade- rrollamos redes activas en los ámbitos de la
nauer (KAS). La KAS es una fundación políti- política, la economía y la sociedad. Nuestra
ca allegada a la Unión Demócrata Cristiana gestión sobre el conocimiento político mejora
(CDU). Como cofundador de la CDU y pri- la perspectiva de configurar una globalización 15
mer canciller federal alemán Konrad Ade- socialmente justa, ecológicamente sostenible y
nauer (1876-1967) vinculó las tradiciones económicamente eficiente.
social-cristiana, conservadora y liberal. Su Prefacio
N
o hay mejor aventura que aquella El mundo estaba silenciado; era el peor momen-
que se emprende cuando el mar está to de la pandemia provocada por el virus cono-
embravecido y la tormenta amenaza cido como COVID 19. Europa salía demolida de
cada momento con provocar el naufragio. Es un invierno asolado por los miles de contagios y
tan intenso vencer una y otra vez el oleaje y, al las muertes inesperadas en urbes, campos y hos-
final, llegar a puerto, con el ulular de la sirena, pitales. Pronto también en América Latina se
la sonrisa ancha y los abrazos confundidos. ordenó la cuarentena rígida en la mayoría de los 19
países y el cierre de escuelas, universidades, tea-
El año gemelo 20 20, será especialmente re- tros, museos, bibliotecas, playas, parques volvió
cordado por la Humanidad en cualquier lugar a las ciudades en fantasmas de cemento. Presentación
Sin embargo, el escenario de pandemia repre- Desde este enfoque múltiple se construyó una
Un amor
sentó una oportunidad para la investigación al colmena donde cada casilla se combina con la
desenfrenado inicio, debido a que aparentemente era más otra para completarse entre sí: la política, la
por la libertad
sencillo contactar a los investigadores a nivel economía, la sociedad, la cultura; los actores
Antología de la
historia política nacional e internacional, los cuales se encontra- dentro y fuera del estado; las repercusiones de
de Bolivia
(1825-2020)
ban trabajando en casa, alejados de los congre- corta, mediana o larga duración.
sos y compromisos académicos internacionales,
20 pero también era una amenaza; no teníamos la Las crisis y la inestabilidad en varios momen-
seguridad ante el cierre de bibliotecas, heme- tos del ciclo político era un común denomina-
rotecas y centros de documentación de poder dor que debía explicarse con luces y sombras,
Tomo I cumplir con los términos y plazos. para entender el entramado escenario que re-
1825-1952
presento por muchos momentos el rezago en
El primer paso fue tener un objetivo claro: “Te- el que se desenvolvió nuestro país.
ner una visión de largo alcance para compren-
der mejor la construcción del Estado de Dere- Fue muy importante elegir a los autores con
cho, la Democracia y la Gobernanza en Bolivia base un perfil previo y no por cercanías, amis-
del 2020 y sus perspectivas para el futuro”. tades o complicidades. Fueron invitados es-
pecialistas en cada una de las materias, que
El segundo paso fue escoger una metodología ya tuviesen publicaciones sobre ese asunto.
apropiada: “Recuperar la memoria colectiva a Al mismo tiempo se procuró combinar la re-
través de la visión interdisciplinaria de auto- presentación de género, de generaciones, de
res especializados en los asuntos identificados distintas procedencias académicas, regionales,
como las líneas transversales de la historia bo- bolivianos o extranjeros interesados en el país.
liviana desde su Independencia en 1825 hasta
2020”. Desde el inicio se optó por priorizar la calidad
y no la cantidad. No intentar contener todo y
La meta no fue exclusivamente una revisión de todo, sino aquello que permitiera una visión
histórica; sino una revisión del pasado en tan- de proceso, de conjunto. Por eso esta obra es
to ayude a comprender mejor el presente. Para una “Antología de la historia política boliviana
alcanzar esa propuesta, los textos no se limi- (1825-2020)” y como toda antología seleccio-
tan a referir fechas, nombres, hechos, sino que na aquello que conjuga con la idea central. Se
dejaron otros hechos, otros personajes, mu- compromiso adquirido. Una cita virtual reu-
chas fechas, con plena consciencia que siempre nió a coordinadores y autores el 31 de agosto
quedará la sensación de que “algo falta”. de 2020, desde diferentes ciudades en varios
países: en un lugar amanecía, en otro termi-
Desde una visión propositiva esta Antología naba la jornada. ¡Hermosa experiencia! Queda
pretende dar paso a futuras investigaciones y pendiente la cita presencial, planificada para la
desde una perspectiva amplia a futuros deba- presentación oficial de estos dos tomos, para
tes sobre el desarrollo político, económico y compartir ideas y lo más importante debatir
social de Bolivia. Mirar al país en retrospec- sobre el futuro de Bolivia.
tiva permite visualizarlo a futuro con mejores
argumentos de análisis que permitan evitar el El contenido temático se dividió en siete pe-
estar condenados a repetir los mismos errores riodos enmarcados en sendas constituciones
que la entramparon en el subdesarrollo. del Estado, que al menos en teoría marcaban
las avenidas centrales por donde transcurría el
El primero en aceptar la propuesta fue Gustavo devenir nacional y reflejaban los momentos
Rodríguez Ostria (Keynes), quien lastimosa- históricos, lo constante y lo que cambiaba. Así,
mente murió poco después de entregar su texto, el cambio constitucional representó el punto
el cual escribió incluso en el hospital, Gustavo de inflexión del ciclo político en el cual los au-
tuvo también el suficiente tiempo y la motiva- tores enfocarían su trabajo.
ción para comentar y apoyar las investigaciones
de otros autores. Este libro es un homenaje a su En cada subcapítulo hay un resumen que ex-
disciplina y a su entusiasta participación a pesar plica el marco constitucional de cada una de
de la enfermedad que le aquejaba. esas etapas. Los autores de esta materia nos
permiten seguir desde la primera constitución 21
Tuvimos a dos colegas que también por las y sus dificultades para construir un solo esta-
nuevas condiciones creadas por la pandemia do, hasta la última aprobada en referéndum
no pudieron concluir con su deseo de parti- popular (1826-2009). Presentación
22 Como una columna permanente, aunque me- Andrea Urcullo Pereira, evalúa la institucio-
nos visible, el rol de las mujeres resistiendo nalidad a inicios de la república e indaga el
a gobiernos autoritarios y abriendo paso a la proceso de construcción del Estado en los pri-
Tomo I democracia. Hay textos que dialogan entre sí meros 32 años de vida republicana en Bolivia.
1825-1952
con base en la construcción de la participación A partir del análisis del diseño del poder Judi-
popular y el empoderamiento de la mujer, los cial desde las leyes y sus matices, descubre la
nuevos partidos y los movimientos sociales. forma en que dichas leyes pudieron ser real-
mente implementadas o los obstáculos a los
No es posible reconocer a la Bolivia actual sin que enfrentaron en la práctica, analiza además
recorrer las características de su población en las formas de administrar justicia, buscando
forma de montonera, de insurrecta y de bús- hallar las continuidades y su conjugación con
queda de mayores espacios de libertad, de par- importantes cambios que se gestaron en esta
ticipación política y de poder tomar directa- materia en la primera mitad del siglo XIX.
mente las decisiones en asuntos que le afectan.
Hilvanando el territorio de Bolivia en sus iti-
Hay apuntes para entender los esfuerzos por nerarios geopolíticos (1825-1880) es el título
educar a la población, los intentos y los fra- que Clara López Beltrán le da a su investiga-
casos, las ideas y las reformas en búsqueda de ción. López considera que la colectividad po-
mejorar la educación de los bolivianos. lítica de Bolivia tuvo que construir su Estado
sobre un escenario geográfico y poblacional
Finalmente, un texto desde la prospectiva, ¿qué que necesitaba ser integrado para consolidar su
lecciones nos da la Historia de Bolivia? Las mi- afiliación nacional. Considera que al igual que
radas sin duda son diferentes y enriquecedoras, otras Repúblicas latinoamericanas recién crea-
como las que se detallan a continuación: das, Bolivia surgió de una forzada amalgama
jurisdiccional cuya estructura, creada bajo el hasta la Guerra del Chaco. Su objetivo es sub-
dominio español, funcionó de manera estable rayar las dimensiones instituyente e institu-
al edificarse sobre un espacio económico esti- cionalizadora de los partidos, su capacidad de
mulado por la minería de plata. politización social a través de las elecciones y
la centralidad adquirida por el acto electoral
Nigel Caspa analiza la trayectoria económica como elemento generador de discusión, nego-
boliviana desde 1825 hasta 1872, desde la mi- ciación y consenso político.
rada de la política fiscal, monetaria, la minería
y la población. Caspa evalúa el endeudamiento Andrés Leonardo Guzmán Escobari indaga la
interno del Estado entre 1827 y 1846. Repa- historia de la formación territorial de Bolivia,
sa las interpretaciones existentes en torno a la presenta un análisis de las derrotas militares y
acuñación de moneda adulterada o moneda diplomáticas que obligaron a ceder parte de lo
feble. Rastrea los consensos y desacuerdos de que eran nuestras máximas aspiraciones terri-
la historia de la minería durante las primeras toriales, pero también destaca aquellas victo-
décadas republicanas, donde el periodo 1825- rias y logros que dieron forma al actual terri-
50 gira entorno a políticas mercantilistas ha- torio de Bolivia; con el objetivo fundamental
cia otras que privilegiaron el libre comercio. de refutar la equivocada y perjudicial narrativa
Finalmente, investiga información sobre la derrotista que pretende mostrar que Bolivia
población boliviana en el siglo XIX y las inter- habría perdido la mitad de su territorio.
pretaciones en torno a la sobrevivencia y pros-
peridad de las comunidades indígenas. Estado, nación y región en Cochabamba y
Santa Cruz desde 1826 al 2006 son analizados
Brooke Larson analiza los conflictos agrarios, por Gustavo Rodríguez Ostria. Concluye que
pactos peligrosos, e indios insurgentes entre la conformación y recomposición de las regio- 23
1860 al 1900. Identifica la larga, desigual y nes al vaivén de los mercados en el proceso de
violenta transición de los “pactos tributarios” construcción de la nación y del Estado fue un
neocoloniales de principios y mediados del si- proceso más complejo del que da a entender Presentación
glo XIX a la era de las reformas agrarias libe- la historiografía tradicional. Rodríguez de-
rales (1860 y 1870). Larson examina una serie muestra que Cochabamba y Santa Cruz ilus-
de reformas del gobierno que echaron por tie- tran la lucha de sus elites para sobrellevar los
rra la legalidad de la comunidad de ayllu, que desafíos y limitaciones impuestas por el acceso
culminó en la Ley de Ex-vinculación de 1874. a medios de comunicación e infraestructura.
Investiga la represión violenta, las moviliza- Identifica que la pugna entre las regiones y el
ciones, rebeliones para revertir o mitigar los poder central también es un tema permanente
efectos de los pactos rotos. Evalúa el deterioro en la historia nacional y lo analiza desde una
de las relaciones entre los indios y el Estado perspectiva económica, donde la lucha por el
a finales del siglo XIX que dio lugar a una so- mercado interior matiza la pugna entre libre-
ciedad neocolonial bifurcada racialmente que cambio y proteccionismo.
carecía de la capacidad institucional e ideoló-
gica para forjar un estado-nación moderno a León E. Bieber investiga los aspectos de las
principios del siglo XX. relaciones germano-bolivianas desde el siglo
XIX, identificando que el rasgo distintivo des-
La contienda electoral entre dos guerras, los de un inicio ha sido el carácter marcadamente
partidos políticos y politización social a través mercantil, debido a la significativa presencia
de las urnas entre 1881 y 1925 son las temáti- de inmigrantes alemanes. Bieber identifica la
cas abordadas por Marta Irurozqui en el perio- fuerte presencia militar germana entre 1911 e
do que transcurre desde la Guerra del Pacífico inicios de los años 30 del siglo XX; su impacto
en el comercio. Muestra la decadencia de la in- independiente son analizadas por Luis Bér-
fluencia económica, política y militar de Ale- tola. Aborda los resultados de las décadas si-
mania en favor de los Estados Unidos, par- guientes y las formas en que hicieron frente
ticularmente a partir de la Segunda Guerra a la crisis global de los años de 1930. Bértola
Mundial. Establece que Alemania ha logrado identifica rasgos comunes de los países lati-
conservar importante presencia en la instruc- noamericanos, pero el énfasis de su investiga-
ción educativa de Bolivia, tanto a nivel escolar, ción está puesto en identificar la diversidad de
como a través de sus institutos de la enseñanza las trayectorias regionales.
de la lengua alemana.
Desde la primera Constitución boliviana la
Anna Guiteras Mombiola y Lorena Córdoba definición sobre cuáles son las normas fun-
investigan a los indígenas de tierras bajas, de- damentales en Bolivia ha sido una constan-
muestran que el auge de la goma elástica recon- te. Farit L. Rojas Tudela revisa la historia
figuró la Amazonía boliviana desde un punto de constitucional boliviana de 1825 a 2009, las
vista geográfico; social; económico; así como reformas, inclusiones e inferencias respecto a
político. Según las autoras todas estas transfor- la norma fundamental boliviana, así como las
maciones afectaron de diversas maneras a las continuidades y rupturas constitucionales en
Un amor
diferentes sociedades indígenas que habitaban dos siglos de vida republicana.
desenfrenado la región amazónica. Enfocando la atención
por la libertad
sobre el problema puntual de la mano de obra Huascar Rodríguez García, presenta un pano-
Antología de la
historia política nativa requerida por la industria gomera, ex- rama general de los movimientos indígenas an-
de Bolivia
(1825-2020)
ploran y analizan las múltiples maneras en que dinos entre 1900 y 1952 mediante un conjunto
cada una de las poblaciones indígenas de los de crónicas contextualizadas que, en conjunto,
24 Llanos de Mojos hasta el norte amazónico se trazan un itinerario temático, tanto de tópicos
relacionó con el frente colonizador, como tam- clásicos como de otros menos conocidos. A
bién la gama diversa de adaptaciones, prácticas partir de una narrativa que tiene por ejes prin-
Tomo I y estrategias que implementaron para insertar- cipales a los caciques apoderados, a las escuelas
1825-1952
se en la sociedad nacional o bien articularse de rurales y a los sindicatos campesinos, el artículo
la mejor forma posible con ella. muestra cómo se fue actualizando una cultura
política indígena proveniente de la época colo-
Ciudadanía, indigeneidad y nacionalidad las nial, que estaba basada en el uso de la ley, en
tierras bajas de Bolivia son las temáticas que el recurso a las alianzas y eventualmente en el
Isabelle Combès analiza a lo largo del siglo ejercicio de la fuerza. El argumento desarro-
XIX y parte del XX, con énfasis en el caso gua- llado por Rodríguez se basa en los objetivos
raní (chiriguano) y chaqueño. Considera que comunes a todos los movimientos abordados y
los requisitos impuestos por las constituciones que pueden resumirse en que el control de la
bolivianas para acceder a la ciudadanía ex- tierra y acceso a la educación, subyacía un pro-
cluyeron en la práctica a los indígenas de las yecto de modernidad alternativa.
tierras bajas. Combès muestra que en muchos
casos se les negó hasta la nacionalidad, con- Iván Velásquez-Castellanos hace un recuento
siderándolos como “no civilizados”, también de 140 años de rebeliones y normativa indíge-
identifica de qué manera los indígenas busca- na, organizados en cuatro periodos entre 1825
ron, y a menudo encontraron, intersticios le- y 1965, desde la creación de la República hasta
gales para ejercer algunos derechos civiles. la implementación de la reforma agraria. Evi-
dencia que la lucha del movimiento indígena
Las diferentes trayectorias de las economías pasó por dos etapas organizativas en particu-
latinoamericanas durante un siglo de vida lar: la primera entre 1825 hasta la Guerra del
Chaco (1932-1935), periodo en el cual se die- final del artículo se ensaya un análisis de las
ron levantamientos caracterizados por: violen- perspectivas de la industria boliviana bajo las
cia, desorganización e improvisación. El segun- condiciones actuales.
do momento está asociado a la post guerra del
chaco hasta la revolución del 52, que mostró Para José A. Peres-Cajías el actual espacio eco-
un movimiento, más organizado e institucio- nómico boliviano ha estado vinculado con la
nalizado (sindicatos, consejos, movimientos de economía mundial desde principios del período
base, entre otros) que estaban asociados y gene- colonial, cuando Potosí adquirió fama mundial
raban sinergias con otros grupos y movimien- gracias a su preponderancia como productor
tos sociales, como obreros, mineros y partidos de plata. Según Peres-Cajías dicha importancia
políticos. Finalmente, el artículo muestra que la está muy presente en el sentido común de los
Revolución de 1952 representó la visibilización bolivianos. Éste, sin embargo, se alimenta mu-
de sus derechos políticos, la inclusión del indio chas veces de prejuicios o ideas refutadas por
como ciudadano a través del voto universal y el la historiografía. Bajo este contexto, el objetivo
mejoramiento de su desarrollo humano a par- de su investigación es analizar cómo cambió la
tir de la reforma educativa. Empero, identificó importancia económica de Potosí y de la mine-
que el Decreto Ley 3464 de Reforma Agraria, ría en general desde las últimas décadas del pe-
contrariamente a lo que se pensaba, restauró ríodo colonial hasta 1950. Peres-Cajías analiza
jurídicamente la propiedad feudal, amparó la la capacidad que tuvo el sector de consolidarse
usurpación de las comunidades y se convirtió como motor de crecimiento y desarrollo de la
en una reforma regresiva para estructura de la economía boliviana en su conjunto, identifican-
propiedad rural indígena. do aquellos ámbitos en los cuales hubo cambios
positivos y aquellos en los que no. Estos ele-
Alfredo Seoane analiza el periodo de moder- mentos son analizados bajo la lupa de diferen- 25
nidad y transformación en Bolivia, a través de tes hipótesis explicativas surgidas en la historio-
la historización del sector industrial, conside- grafía latinoamericana en los últimos años.
rando las etapas características, que se divi- Presentación
den por periodos de tiempo, pero que relatan Finalmente, “Antología de la historia política
transformaciones profundas que produjo el boliviana (1825-2020)” intenta realizar una
siglo 20. A grandes rasgos pueden clasificarse evaluación prioritariamente política de la rea-
más genéricamente como: de la acumulación lidad nacional y su vínculo con el ámbito eco-
originaria derivada del excedente minero y la nómico y social de lo sucedido en más de 195
extensión de la relación salarial y empresarial años de acontecimientos que marcaron la his-
1900-1920. De la revolución industrial boli- toria de nuestro país. Las diferentes miradas
viana 1920-1941. De el desarrollismo, diver- arriba descritas reflejan el lento y complicado
sificador con ayuda internacional 1942-1980. avance que le toco vivir a Bolivia, pero tam-
La época de las exportaciones no tradicio- bién su fortaleza y sus momentos fundamen-
nales. La época de rentismo extractivista. Al tales que hicieron al país como lo conocemos.
E
l artículo hace un recuento de 54 años histórico institucional. Se busca determinar el La Konrad-
Adenauer-Stiftung
de historia institucional de la Konrad impacto global de la KAS en nuestro país, en re- en Bolivia
Una historia
Adenauer Stiftung (KAS) en Bolivia, lación a sus objetivos institucionales, a través de Cooperación
y Solidaridad
de la identificación de temas, programas y ac-
1 Obtuvo su Licenciatura en Ciencias Políticas y tores de la sociedad civil y política a los cuales
Gestión Pública, como también es Licenciada en ha apoyado a lo largo del tiempo.345
Historia de la Universidad Mayor de San Andrés
(UMSA) posee una Maestría en Historia de Bolivia y
América Latina de la UMSA. Investigadora Senior, 3 Agradezco el tiempo, los datos y las entrevistas rea-
trabajo en Centro de Investigaciones Sociales (CIS) lizadas a los Ex Representantes de la KAS en Bolivia
dependiente de la Vicepresidencia del Estado Plu- Sr. Jürgen Heins y Sra. Susanne Käss, también la
rinacional. Realizó un internship en la Fundación entrevista al Lic. Alfonso Ferrufino primer Director
de Apoyo al Parlamento y a la Participación Ciuda- Ejecutivo de la Fundación de Apoyo al Parlamento
dana (FUNDAPPAC) e interactuó con actividades de y a la Participación Ciudadana (FUNDAPPAC) y la
la oficina Bolivia de la KAS. entrevista al Lic. Napoleón Pacheco Torrico Ex Di-
2 Obtuvo su doctorado en Alemania gracias a la beca rector Ejecutivo de la Fundación Milenio.
de estudios doctorales, obtenida en el marco del Pro- 4 Se agradece a Karen Möhring quien elaboró un
grama de Fomento y Becas de la KAS. Desde junio punteo y un documento sobre la historia de la KAS
del 2007 es Coordinador del Programa de la KAS en Bolivia que sirvió de insumo para este trabajo, el
Bolivia. A su regreso de Alemania recibió una distin- mismo en versión preliminar fue presentado en
ción del Presidente de la Norbert Lammert Stiftung marzo del 2002.
que financió su retorno y estadía de investigación 5 Adenauer, Konrad el 28/7/1946 en Osnabrück,
entre junio y diciembre del 2007. Norbert Lamert en: Poppinga, Anneliese (ed.): Konrad Adenauer:
fue Presidente del Parlamento Alemán y es el actual Seid wach für die kommenden Jahre, KAS, Ber-
Presidente de la Konrad Adenauer Stiftung (KAS). gisch-Gladbach 1997, pág. 33.
Palabras Clave: Alemania, Bolivia, Konrad - latinoamericanas, debemos realizar nuestro
Adenauer Stiftung, ciclo político y económi- aporte para que puedan ir subsanándose las
co, programas y proyectos. falencias que aún existen en las jóvenes de-
mocracias latinoamericanas, Pöttering (2011)
y Beaugrand (2003).
Introducción
32 Fuente: Bundesarchiv B 145 Bild-F004214-0033, Konrad Adenauer y Ludwig Erhard, en el cumpleaños de Adenauer: 5 de enero de 1956.
Fotógrafo desconocido.
Tomo I Los derechos humanos, la democracia y la jus- que debieron sortear en algunos casos condi-
1825-1952
ticia social no figuraban en la agenda de los ciones difíciles y poco habituales. Otro de los
dirigentes militares (Thesing 2011). Todo lo problemas que se enfrentó al inicio en América
contrario: los partidos y los sindicatos que Latina fue la falta y ausencia de instituciona-
abogaban por estos objetivos pronto fueron lidad. Los contactos iniciales con la Confede-
sospechados de formar parte de la infiltración ración Latinoamericana de Sindicalistas Cris-
marxista. En estas circunstancias llega la Fun- tianos (CLASC), creada en 1954 en Santiago de
dación Konrad Adenauer a América Latina y Chile ayudaron en el trabajo inicial.
toma primeramente contacto con los parti-
dos demócrata-cristianos en Venezuela como Thesing (2011) resalta que la República Fede-
el Comité de Organización Política Electo- ral de Alemania fue el primer país en crear una
ral Independiente (COPEI) y en Chile con el cartera específica para política de desarrollo,
Partido Demócrata Cristiano (PDC). En otros lo que destaca así su importancia y visión so-
países establecería vínculos con otras fuerzas bre la ayuda para el desarrollo. De esta forma,
políticas, sindicatos, organizaciones políticas, el Ministerio para la Cooperación Económica
cooperativas e inclusive unidades productivas, y Desarrollo: Bundesministerium für wirts-
como lo fue en el caso de Bolivia. chaftliche Zusammenarbeit und Entwicklung17
(BMZ) inicia sus actividades tras la designación
En la década de 1960, muchos partidos demó-
crata-cristianos, sobre todo en América Cen-
17 Ministerio para la Cooperación Económica y el
tral, estaban en proceso de gestación, por lo Desarrollo.
de Walter Scheel al frente del área el 14 de febrero de 1962 que se llevó a cabo en Rhön-
noviembre de 1961. El BMZ18 tenía por objeto dorf en la casa de Adenauer, en esa reunión el
centralizar en una sola cartera la política para canciller alemán comprometió a Caldera ayuda
el desarrollo practicada hasta ese momento en para el instituto de formación sindical: Instituto
diferentes ministerios, Beaugrand (2003). Nacional de Estudios Sociales (INES) con sede
en Caracas. Ello dio paso a que posteriormen-
Asimismo, a nivel partidario la CDU debía de- te en Venezuela (Caracas) se abriría la primera
cidir en otoño de 1961 qué actitud adoptar oficina de la KAS para América Latina, la se-
respecto de la política para el desarrollo. El gunda y por el acercamiento al PDC chileno,
director de la Oficina Federal del partido, el fue en Santiago.
Dr. Konrad Kraske, decide encomendar al Dr.
Peter Molt, miembro de la delegación alemana Con el objetivo de iniciar el apoyo a Améri-
que participa en el XV Congreso de los “Nue- ca Latina y en el mundo nace el Instituto de
vos Equipos Internacionales (NEI)” que se ce- Solidaridad Internacional (IIS) fue creado
lebra del 12 al 14 de septiembre de 1961 en el 8 de febrero de 1962 en la casa del Land
Lucerna, analizar junto con los representantes Schleswig-Holstein en Bonn. El estatuto de
de los partidos demócrata-cristianos de Améri- la Academia Política Eichholz sirvió de marco
ca Latina las posibilidades de una cooperación. jurídico.20 El nombre del IIS simbolizaba todo
Los NEI conformaban una unión de partidos un programa y en los primeros años contribu-
demócrata cristianos. El Congreso reunido en yó a la credibilidad intelectual y política de la
Lucerna aprueba una declaración que contie- institución. IIS y la abreviatura española ISI se
ne un llamamiento concreto a la solidaridad. convirtieron en siglas conocidas de la coope-
En los dos congresos anteriores celebrados en ración política para el desarrollo.
Friburgo en 1959 y en París en 1960 se había 33
constatado la necesidad de prestar ayuda para El IIS comenzó su labor el 1 de julio de 1962.
el desarrollo. La declaración de Lucerna ex- Con un presupuesto ajustado y un equipamien-
presaba la solidaridad de los NEI con los parti- to muy humilde, se organizaron en Alemania La Konrad-
Adenauer-Stiftung
dos demócrata cristianos en América Latina y cursos de capacitación para dirigentes de países en Bolivia
Una historia
la voluntad de cooperar con ellos Beaugrand en desarrollo y seminarios para estudiantes ex- de Cooperación
(2003), (Thesing y Pöttering, 2011). tranjeros y se encararon los primeros programas
y Solidaridad
35
la Fundación. No se trataba sólo de brindar 4.500.000 de marcos, Beaugrand (2003),
capacitación, sino de ofrecer además ase- Thesing (2011).
soramiento y crédito. En el período 1962- 5. Le siguieron otros programas en el área La Konrad-
1974, la KAS fomentó proyectos en Bolivia, de los medios masivos de comunicación, Adenauer-Stiftung
en Bolivia
Chile, Colombia, en la región andina y en con un proyecto sobre la creación de una Una historia
de Cooperación
Paraguay. Durante todo ese período se in- televisión educativa en Brasil y un progra- y Solidaridad
virtió en este trabajo la suma de 4.400.000 ma de formación para periodistas con sede
de marcos alemanes, Beaugrand (2003), en Lima. Entre 1962 y 1974 se invirtieron
Thesing (2011). en esta área 8.900.000 marcos, Beaugrand
4. La cooperación con empresas cristianas or- (2003), Thesing (2011).
ganizadas en la Unión Internacional de las 6. En este mismo período se erogaron
Asociaciones Patronales Católicas (UNIA- 2.900.000 marcos para solventar proyec-
PAC) fue otro sector que la Fundación no tos nacionales de investigación y ciencias
quería dejar de incorporar a sus proyectos. en Chile, Argentina, Paraguay, Brasil y
Parecía razonable iniciar una cooperación Venezuela. El trabajo social, la adminis-
con empresas inspiradas en la imagen cris- tración pública y el trabajo con jóvenes
tiana del hombre y que comulgaban con fueron apoyados financieramente con
los principios de la Economía Social de 7.200.000 marcos, Beaugrand (2003),
Mercado y la justicia social. El interés de la Thesing (2011).
KAS estaba dirigido a fomentar el diálogo 7. En esta primera etapa, la KAS organizaba
entre sindicatos y empresarios. Los recur- programas de capacitación en Alemania. Se
sos financieros invertidos en estos proyec- invitaba a cooperativistas agropecuarios, de
tos sumaron entre 1962 y 1974 un total de vivienda, asistentes sociales y periodistas a
de ser, pero pronto quedó demostrado que,
al tener en cuenta las necesidades directas de
los sectores postergados de la población, los
proyectos realizados por las obras eclesiásticas
y las fundaciones políticas bajo su propia res-
ponsabilidad y en cooperación con contrapar-
tes locales eran más exitosos.
1983
1967 1972 1977 Bruno Maurach
Bernard Lüken Winfried Bach Jürgen Heins von Harpe
37
en Bolivia
La Konrad-
Una historia
y Solidaridad
de Cooperación
Adenauer-Stiftung
Santiago a través del IIS, aunque en Bolivia
no se contaban con oficinas propias, desde
Santiago de Chile se efectuaban proyectos en
nuestro país. En la primera fase de trabajo de
la KAS22 (1962-1974) Bolivia ya estaba incluida
en el presupuesto para la ejecución de progra-
mas y proyectos.
En los hechos, entre 1974, 1975 y 1976 debi- Además de seguir trabajando en la promoción
do a la peligrosa situación política de la admi- de programas del sistema cooperativo rural, el
nistración de Banzer, la KAS realizó un trabajo principal objetivo de la KAS en ese momen-
Un amor
intermitente y momentáneamente se pararon to ya era la recuperación de la democracia en
desenfrenado algunas actividades. En el marco del trabajo Bolivia. Según la experiencia de Bach, los pro-
por la libertad
emprendido en el área rural, muchos grandes yectos en el área rural tuvieron éxito; en tanto
Antología de la
historia política hacendados en particular fueron hostiles al que la democracia todavía se haría esperar. En
de Bolivia
(1825-2020)
proyecto cooperativo COOPAS y se opusieron 1973 Winfried Bach incorporó a su sucesor, el
a su implementación. Sin embargo, hubo una austriaco Alois Anfang, en ambos proyectos.
40 cooperación muy estrecha entre la Fundación
Konrad Adenauer y sus socios cooperativistas. Tras el largo periodo de siete años del régimen
Se planificaron actividades en conjunto, se banzerista, entre 1978 y 1980, Bolivia sufrió
Tomo I realizaron viajes a cursos de formación coope- cuatro golpes militares.33 Los gobiernos de
1825-1952
rativa y se emprendió la fundación de nume- dictadura duraron meses e incluso días como
rosas cooperativas. el del Gral. Alberto Natusch Busch dejando
En 1977 el Sr. Jürgen Heins en calidad de sex- En 1980 se inició la dictadura del Gral. Luis
to representante en el país inició su trabajo García Meza con un sombrío inicio, asalto a la
en Bolivia reabriendo la oficina, debido a un Central Obrera Boliviana (COB), asesinato y
corto tiempo de inactividad por la constante desaparición del líder socialista Marcelo Qui-
inestabilidad política. La coyuntura, en ese roga Santa Cruz y otros líderes políticos; Heins
momento obligaba solo a implementar pro- no contaba con las condiciones necesarias de
yectos de estructura social. Incluso la obser- seguridad para realizar su trabajo como repre-
vación política solo fue posible hasta cierto sentante por lo que fue trasladado a Ecuador
punto, toda vez que el país en varios momen- por la Fundación Konrad Adenauer. Claus-Ru-
tos del periodo de dictadura vivía en estado de dolf Spranger, también se encontraba en ese
sitio. En el ámbito de los programas COOPAS país, quien posteriormente seria representante
culminó su ciclo; luego Heins experto en la en Bolivia a la finalización de la misión de Jür-
temática cooperativas, organizó el proyecto gen Heins. Durante la dictadura del Gral. Gar-
con la Federación Nacional de Cooperativas cía Meza, en un par de oportunidades ingresa-
Agropecuarias de Bolivia (FENACOAB)34 que ron a Bolivia para evaluar el contexto político
implicaba el apoyo al trabajo cooperativo.35 del país, y conocer la situación de algunos di-
rigentes políticos en especial, verificar la situa- 41
ción de los del PDC, en ese periodo la mayoría
34 En ese momento, fue creada para promover la in-
tegración y el desarrollo del movimiento coopera-
de dirigentes de partidos políticos o dirigentes
tivo agropecuario boliviano a nivel nacional. Tenía sindicales eran exilados o asesinados. La Konrad-
Adenauer-Stiftung
el objetivo de defender los intereses de sus orga- en Bolivia
nizaciones miembros y cooperativas en general. Una historia
Desde 1981 hasta agosto del año siguiente, de Cooperación
Buscaba mantener relaciones cooperativas con las y Solidaridad
organizaciones internacionales. Pretendía admi-
Spranger fue representante en Bolivia, se hizo
nistra recursos financieros, préstamos nacionales cargo del proyecto FENACOAB; y el proyecto
e internacionales y donaciones en beneficio de sus INADEC, que fue un programa de educación y
afiliados. formación del PDC. El programa constaba de
35 Para Heins (1990), la cooperativa, en primer lugar,
debe ser una empresa privada sin fines de lucro,
3 pilares: Primero, capacitación en democracia;
lo cual no quiere decir que no debe producir uti-
lidades; lo que no se tiene que hacer es maximizar
los beneficios como en una sociedad anónima; esa el mismo que casi no existe, excepto el otorgado
es la única diferencia. Una cooperativa no es una por algunas ONG. Todo esto requiere de una po-
institución social o de beneficencia. Por otra par- lítica y estrategia claras del gobierno. En: ILDIS.
te, el cooperativismo no es una solución para to- INIS. (1990). Perspectivas del Cooperativismo en
dos los problemas de una sociedad, es, cuando más, Bolivia. Comentarios de la viabilidad del coopera-
una de las opciones para mejorar la situación socio tivismo en Bolivia. Heins Jürgen. Sistematización
económica de grupos marginados, de aquellos que del seminario realizado en la ciudad de La Paz, los
poseen poca tecnología; busca integrarlos a una so- días 24 y 25 de julio. Carlos Toranzo Editor.
ciedad que los expele. Las cooperativas requieren, 36 Sin embargo, este proyecto se topó con dos pro-
por lo menos en su fase inicial, un fuerte apoyo del blemas: Primero, el escenario político dificultaba la
Estado, por ejemplo, en líneas de crédito con con- canalización de fondos y segundo, era complicado
diciones blandas, la eliminación de trámites buro- hacer seguimiento al mismo, por lo que había la
cráticos, el otorgamiento de tierras propias a cam- probabilidad de que esos fondos pudiesen ser mal-
pesinos, el asesoramiento técnico y administrativo, versados o utilizados no para el fin que fue creado.
segundo, temas constitucionales y tercero, de- generada por el despilfarro, la corrupción, el
rechos humanos, principios y valores democrá- narcotráfico, etc. Ante esto, el 5 de octubre
ticos. El programa a la finalización del trabajo el parlamento eligió por mayoría absoluta de
de Spranger fue apoyado por Bruno Maurach 113 votos de 146 a Hernán Siles Suazo como
desde el Uruguay hasta 1987; prioritariamen- presidente y a Jaime Paz Zamora con 118 vo-
te el financiamiento del proyecto buscaba tras tos como Vicepresidente. El Gral. Vildoso
el largo periodo de dictadura apoyar más los entregó el poder, el 10 de octubre de 1982, a
principios y valores democráticos y en menor quienes habían ganado legítimamente las elec-
medida la educación política en sí. ciones generales de 1980, con lo que se inicia
el ciclo democrático de 38 años caracterizado
Al régimen de Luis García Meza,37 al que se por reformas económicas y ajuste estructural y
obligó a dimitir por la presión nacional e in- periodos de intensa conflictividad.
ternacional38 le siguieron los gobiernos de los
generales: Celso Torrelio Villa y Guido Vildo- La KAS en Bolivia basaba su presencia insti-
so Calderón. Al breve gobierno, de este último, tucional a partir de la normativa de la época,
le toco cerrar el ciclo de dictaduras iniciado en históricamente la constitución de asociaciones
1964. Aunque trato de convocar a elecciones e y fundaciones ha estado regulada por el Códi-
Un amor
intentar salvar la crisis a partir de un paquete de go Civil boliviano, aprobado y puesto en vi-
desenfrenado medidas económicas estas no pudieron aplicarse gencia mediante Decreto Ley No. 12760 de
por la libertad
debido a la falta de consenso nacional. A esas 06.08.1976 que establecía la normativa básica
Antología de la
historia política alturas las Fuerzas Armadas, habían llegado a un en materia de personas colectivas privadas y
de Bolivia
(1825-2020)
grado de desprestigio institucional muy grande no lucrativas. Posteriormente, Bruno Mau-
que ya hacia insostenible cualquier gobierno, rach von Harpe gestionó con el gobierno de
42 por otra parte, aires democráticos habían logra- Bolivia y la Fundación Konrad Adenauer un
do ingresar en la vida institucional, lo que per- “Convenio Básico de Cooperación” que bási-
mitió tomar la decisión de cerrar el ciclo. camente tenía el objetivo de cooperación téc-
Tomo I nica a través del Internationales Institut (Ins-
1825-1952
Al país le afectaba una grave crisis económi- tituto Internacional) de la Fundación Konrad
ca que los militares no podrían resolver, crisis Adenauer, el cual fue firmado el 23 de abril de
1985.
37 En la nueva etapa de vida institucional democráti-
ca del país, se abrió un proceso de recolección de Posteriormente, ya en democracia la KAS es-
pruebas, análisis profundos y pedidos de no dejar tableció un convenio de cooperación suscrito
impune los oscuros hechos del pasado inmediato.
El resultado de este proceso fue que el 25 de fe-
con el gobierno de Bolivia y se compromete a
brero de 1986, “el Honorable Congreso Nacional otorgar a Bolivia cooperación no reembolsa-
pronunció una resolución acusatoria ante la Excma. ble en el campo de la educación, investigación
Corte Suprema de Justicia de la Nación contra el y cultura de conformidad con los programas y
ex presidente Luis García Meza Tejada, la junta de
Comandantes, los miembros del Gabinete Ministe- requerimientos prioritarios del desarrollo. El
rial de 1980, de las Fuerzas Armadas, de la Policía convenio también establecía que la KAS acuer-
Nacional y personal civil por conductas descritas en da constituir una oficina de coordinación en
más de cinco delitos relacionados a la vulneración La Paz a su costo. El gobierno de Bolivia se
de los Derechos Humanos y actos lesivos contra la
Constitución y el Estado. comprometía a otorgar a la fundación un sta-
38 No se debe dejar de lado, la presión internacional tus comparable a los organismos internaciona-
tenía que ver fundamente con la nueva política de les, dicho convenio se firmó el 5 de septiembre
Estado en Estados Unidos, política iniciada por el
de 1990 y de esa forma la KAS Bolivia realizó
gobierno de Jimmy Carter que promocionaba el
retorno a la democracia y el respeto a los Derechos sus actividades con contrapartes nacionales de
Humanos. manera ininterrumpida en nuestro país.
Posteriormente, la KAS fue adecuando su vendría a conocer bajo la figura de la “De-
trabajo a la nueva normativa, en el 2007 (DS mocracia Pactada”.40
29308 del 10.10.2007) se aprueba un decreto
que determinaba las nuevas políticas de la coo- En la esfera económica el país se encontraba
peración internacional, en el 2008 la KAS jun- devastado: hiperinflación, desequilibrios ma-
to con las otras fundaciones políticas alemanas croeconómicos, desempleo, deuda externa y
(FES y HSS) realizó gestiones con el gobierno déficit fiscal, eran producto de un mal manejo
de Bolivia para la continuidad de su trabajo y económico en 18 años de dictaduras militares.
el apoyo al desarrollo. Con la Nueva Consti- Por ello, la situación financiera del país no era
tución Política del Estado (NCPE, 2009) y las de las mejores, requería la adopción de nuevas
posteriores leyes (Ley 351 del 19.03.2013 y el soluciones de política económica para enfrentar
DS 1597 del 05.06.2013) la KAS nuevamente los problemas en las raíces mismas de la crisis
actualizó su estatus legal en Bolivia con el go- que se vivía, la cual adquirió en esa coyuntura
bierno boliviano a partir de un nuevo conve- características de verdadero colapso nacional,
nio de cooperación, reafirmado su compromi- generó una pérdida de confianza, inestabilidad
so por el desarrollo del país. e incertidumbre. Además, los factores hiper-
inflacionarios, combinados con una profunda
recesión económica, debilitaron en forma peli-
3. La KAS en el periodo inicial grosa el aparato productivo y provocaron en la
democrático de Bolivia39 estructura económica nacional una grave crisis
(1982-2005)
40 Luego del periodo de dictadura, los partidos polí-
La recuperación democrática el 10 de octu- ticos estaban fragmentados, su estructura era débil,
bre de 1982 representó un punto de inflexión su liderazgo caudillista y se vieron ante la necesidad 43
para el país, se iniciaba una nueva etapa, en de generar pactos (acuerdos políticos), ello debido a
la imposibilidad de que algún partido político logre
la esfera política representaba una oportuni- obtener, un caudal electoral mayoritario que per-
dad para el trabajo de la KAS en las áreas de mitiese, sin ayuda de acuerdos partidarios, asumir La Konrad-
Adenauer-Stiftung
Democracia, Estado de Derecho, Libertad el gobierno con la suficiente legitimidad del voto en Bolivia
ciudadano. En las elecciones, de los 80 ninguno Una historia
de Expresión y Economía Social de Mercado de Cooperación
pudo superar o alcanzar la mayoría absoluta. Así, y Solidaridad
(ESM) en Bolivia. En lo político, una vez res- ese periodo, lo inició el Movimiento Nacionalista
taurada la democracia producto de una larga Revolucionario (MNR), con Víctor Paz Estenssoro,
y violenta lucha popular contra los gobiernos que hizo un acuerdo con Acción Democrática Na-
de dictadura, el sistema político se reinventa cionalista (ADN) de Hugo Banzer Suárez para lle-
gar poder ser de esta forma presidente en la gestión
en búsqueda de su estabilidad y permanencia (1985-1989), acuerdo que se llamó “Pacto por la
en el tiempo. A nivel de la estructura parti- democracia”. Posteriormente, se generaron nuevos
daria, esta se encontraba fragmentada entre acuerdos como el del “Acuerdo Patriótico” (1989-
partidos de izquierda y derecha, ello a nivel 1993), con Jaime Paz Zamora, del Movimiento de
Izquierda Revolucionaria (MIR), que celebró un
electoral requerirá de acuerdos, compro- acuerdo con la ADN; el “Pacto por la gobernabili-
misos y tolerancia, posteriormente ello se dad y el cambio” (1993-1997), con Gonzalo Sánchez
de Lozada (MNR), que se alió con Unidad Cívica
Solidaridad (UCS) y el Movimiento Bolivia Libre
39 Como corresponde y tratándose de relaciones de (MBL); el “Compromiso por Bolivia” (1997-2002),
cooperación entre países, desde su inicio la relación con Hugo Banzer Suárez (ADN), que pactó con UCS,
fue sustentada por Convenios y/o tratados de coo- MIR y CONDEPA (Conciencia de Patria) de Carlos
peración binacionales. A partir del Decreto Supre- Palenque, y el “Plan Bolivia” (2002-2007), acuerdo
mo 22225/9 de fecha 13 de junio de 1989 la Fun- que se interrumpió en el 2003, con Gonzalo Sánchez
dación recibe el status de organismos internacional. de Lozada (MNR), que se unió con el MIR y UCS,
Y se firma el primer acuerdo con la Cancillería de cuyo pacto incluyó después a la Nueva Fuerza Re-
Bolivia. publicana (NFR) de Manfred Reyes Villa.
44
Tomo I
Un amor
de Bolivia
1825-1952
(1825-2020)
Antología de la
desenfrenado
historia política
por la libertad
Segundo periodo
(1986-2000)
1998
1985 Av. 20 de octubre
Av Mariscal Santa 2683, esq. c.
Cruz Edificio La Campos, Tel.:
Primera Piso 11 (591 2) 43 00 51
Bloque A oficina No / 43 19 49, Fax:
1. Zona Central – El (591 2) 43 33 23.
Prado tel.: (591 2) E-Mail: kaslp@
374467, tel Fax.: 1994 ceibo.entelnet.bo,
(591 2) 391283, 1988 1993 Dr. Stefan Jost y homepage: 2000
casilla 5849 Renate Ehmer Cordelia Rotzoll Cordelia Rotzoll www.kas.de Annette Schwarzbauer
de ajuste estructural fue lo social: la pobreza, continuó el trabajo en Bolivia con contrapar-
la desigualdad y lenta movilidad social fueron tes nacionales, pero durante casi un año sin
los problemas que las medidas de política pú- representante oficial.
blica del D.S. 21060, no pudieron resolver.
Durante este tiempo Herbert Hirche se ocupó
En lo que respecta al trabajo de la KAS en Bo- de Bolivia desde el Paraguay. Venía de Asun-
livia, Claus Rudolf Spranger abandonó el país ción dos veces al mes y bajo sus auspicios, se
y terminó su representación, posteriormente incorporó en abril de 1988 al Instituto de In-
Bruno Maurach von Harpe, en ese momen- vestigación y Desarrollo Municipal (INIDEM),
to representante en el Uruguay, se hizo cargo instituto en el cual se desarrolló una labor edu-
temporalmente de los proyectos bolivianos de cativa y de asesoramiento, se realizaron investi-
marzo a septiembre de 1983,41 en ese mes llegó gaciones y se hicieron varias publicaciones. El
a Bolivia y permaneció hasta finales de 1987.
41 Entre 1984 y 1985 se produjo la reestructuración y 42 La KAS compró un inmueble para que INASET
replanteo de los objetivos y del trabajo de la KAS en pudiera llevar adelante sus proyectos. El inmueble
Bolivia, acorde al nuevo momento político y eco- está ubicado en la Calle Pedro Salazar No. 634, esq.
nómico que vivía la región. Andrés Muñoz, en la zona de Sopocachi.
vacío que se había generado, con ella se inició
una nueva iniciativa: el Centro de Desarrollo y
Fomento a la Autoayuda (CEDEFOA), que ha-
bía sido concebido bajo la gestión de Maurach
pero implementado y puesto en marcha por
Ehmer, los objetivos que perseguía era en el
ámbito de las medidas sociales de reforma es-
tructural, siguiendo la política gubernamental
y los Programas de Ajuste Estructural que se
venían implementando.
45 De esta forma se inicia el trabajo a temáticas verdes, 47 Abogado de profesión obtuvo su doctorado en
en pro del Medio Ambiente pero además a un nivel Ciencia Política área en la cual también se Habilitó.
subnacional, lo que refleja la diversificación de las 48 Jost, Stefan. (2003). Bolivien: Politisches System
temáticas y del trabajo de la KAS en Bolivia. und Reformprozess 1993-1997. (Bolivia: Sistema
46 Con LIDEMA también se estableció una línea de Político y Proceso de Reforma 1993-1997). Sprin-
cooperación enfocada a la temática medioambiental. ger VS. ISBN 978-3-663-09437-1.
muchos desafíos en la esfera política y econó-
mica y en especial para el trabajo parlamenta-
rio. Por ello, en coordinación con FUNDAPPAC
se realizaba conversatorios, seminarios y talle-
res sobre temas constitucionales y parlamenta-
rios, uno de los espacios de debate y discusión
importantes en ese marco fue las “Noches Par-
lamentarias”, en donde se presentaban temáti-
cas relevantes de la coyuntura política, proyec-
tos de ley, técnica legislativa, entre otros, por lo
que este espacio se constituyó en un importan-
te insumo para el debate plural y propositivo,
Fuente: Archivo fotográfico de la KAS. La Dra. Hildegard Krüger re-
complementario al trabajo parlamentario. cibe un reconocimiento del Parlamento de Bolivia a cargo de Hugo
Carvajal Donoso, el 2 de agosto de 2000.
junio de 1997 tuvo lugar en el Vaticano una vieron un panorama general de las dificultades
Conferencia sobre el tema: “Modernización e injusticias sociales existentes en América La-
económica, democratización y justicia social”. tina. Ambas partes convinieron en continuar
Los organizadores fueron el Concilio Pon- el diálogo en el mutuo convencimiento de su
tificio de Justicia y Paz, el CELAM, el Ban- utilidad. Fue así que el 21 y 22 de abril de 1998
co Mundial, el FMI y la KAS. En la ocasión, se celebró una segunda conferencia en Was-
el cardenal Roger Etchegaray representó al hington con el mismo círculo de participantes.
En esta oportunidad, el tema elegido fue “The
struggle against poverty towards the turn of
49 FUDEP hoy en día es una institución privada, sin the Millenium”. Los participantes arribaron a
fines de lucro que nace en el año 1971 como Fun- la conclusión de que era necesario considerar
dación San Gabriel. Actualmente su objetivo está más el impacto social de los proyectos ava-
orientado a posicionar en el escenario municipal y
lados por las tres organizaciones financieras
comunitario, espacios alternativos de protección,
en América Latina. Efectivamente, el Banco
promoción, desarrollo y actoría social de niños, ni-
ñas, adolescentes y mujeres en el ejercicio de sus
Mundial y el Fondo Monetario Internacional
derechos. El Área Socioeducativa de FUDEP, desde contrataron por iniciativa de la KAS nuevos
un enfoque de resiliencia y de derechos, trabaja en colaboradores, cuya función era analizar las
la promoción de formas de vida libres de violencia consecuencias sociales de la política financiera
para niñas, niños, adolescentes y jóvenes, así como aplicada”. Josef Thesing (2011)
en la promoción, defensa y restitución de derechos.
Fuente: Archivo fotográfico de la KAS. Ana María Romero de Cam-
pero y Annette Schwarzbauer en el Foro Mujeres en la Política.
El tema de la democracia interna de las organizaciones políticas fue un tema neurálgico, también el
de la transparencia, rendición de cuentas y financiamiento. Pero, además el contenido programático
de las organizaciones políticas eran aspectos centrales del trabajo. Desde la sociedad civil había una
percepción que las alianzas de los partidos políticos, eran producto de la negociación personal de los
líderes de los partidos, por lo que introdujo una mayor solidez y consistencia a las organizaciones po-
líticas de manera de superar un proceso de deterioro de la confianza ciudadana en las organizaciones
políticas. Después del 82, se restableció la democracia, todo el mundo estaba entusiasmado con un
gobierno democrático pero las organizaciones políticas no asumieron el desafío que representaba ese
retorno a la democracia luego de un largo periodo de regímenes dictatoriales.
En esa materia la contribución de la KAS a través del Dr. Stefan Jost fue fundamental porque no so-
lamente la KAS apoyó financieramente los eventos a nivel parlamentario, hubo un involucramiento
personal de Stefan en todos los seminarios y actividades que se elaboraban, toda vez, que como experto
en temas constitucionales asesoró y coadyuvó en el debate propositivo sobre dichas temáticas. Así, se
hicieron una serie de eventos para la socialización del proyecto de Ley de las organizaciones políticas.
Y ese es el dato de inicio fundamental del trabajo parlamentario de la KAS Bolivia y de FUNDAPPAC.
El objetivo principal fue la modernización del congreso de esa época.
A partir de esa experiencia, hubo una participación activa de la KAS en la formulación, análisis y
55
debate de la normativa legislativa. Tomé la decisión personal de no postularme al congreso, tras 17
años de trabajo continuo como diputado y renuncie a mi organización política el Movimiento Bolivia
Libre (MBL). Con el Dr. Ossio tenía una relación antigua desde la democracia cristiana yo fui parte
La Konrad-
de la juventud de la democracia cristiana y entonces tras mi renuncia el Dr. Ossio me invito a formar Adenauer-Stiftung
parte de FUNDAPPAC que legalmente ya existía, pero no funcionaba institucionalmente y se formó en Bolivia
Una historia
en el periodo 1993-1997. Entonces me ofrecieron la dirección de FUNDAPPAC, fui el primer director de Cooperación
ejecutivo de esa institución. En ese sentido, tuve la oportunidad de trabajar en las temáticas que había y Solidaridad
promovido como parlamentario. El inicio del trabajo con la KAS, se da partir de una anécdota, un día
recibo la llamada de Stefan Jost desde Alemania para elaborar un proyecto de trabajo parlamentario
y ese proyecto marco el inicio real de la relación de la Fundación Konrad Adenauer y FUNDAPPAC,
a partir de un trabajo más estructurado y de relacionamiento efectivo con el parlamento nacional. De
manera logística llegamos a compartir oficinas en la calle campos junto con la KAS para una mejor
coordinación del trabajo parlamentario. Desde 1997 hasta el 2005 estuve en FUNDAPPAC posterior-
mente asumió la dirección Armando de la Parra, en la gestión de Peter-Alberto Behrens y pasé a ser
miembro del directorio de FUNDAPPAC.
La Ley de Partidos Políticos fue uno de los hitos más interesantes e importantes en el trabajo de
FUNDAPPAC, la Ley intentaba democratizar e institucionalizar a las organizaciones políticas. En una
noche parlamentaria en la administración de Hugo Banzer Suárez y con la presencia del Presidente de
la República en dicho evento, se presentó y debatió dicha Ley y el Gral. Banzer dio un discurso sobre
la oportunidad y alcances de la ley. Posteriormente fue aprobada en 1998. La ley pretendía evitar el
manejo discrecional de los recursos de las organizaciones políticas y el tema del sistema de partidos
y que esta funcione con calidad era un tema neurálgico para el trabajo de FUNDAPPAC. Sr. Alfonso
Ferrufino, entrevista realizada en la primavera boliviana del 2021.
Un amor
desenfrenado
por la libertad
Antología de la
historia política
de Bolivia
(1825-2020)
59
a partir de instrumentos efectivos en el campo una cooperación planificada a largo plazo con
de ayudar a las personas a ayudarse a sí mismas el Instituto del Pensamiento Democrático
La Konrad-
en Bolivia ha sido una prioridad para la KAS. (IPD), que busco promover la comprensión de Adenauer-Stiftung
Finalmente, en este periodo hubo un lento la democracia, estas actividades se ejecutaron en Bolivia
Una historia
avance en políticas de reducción de la pobreza. bajo medidas propias. Además, se dieron even- de Cooperación
y Solidaridad
En la esfera municipal la Ley de Participación tos más o menos regulares en cooperación con
Popular tuvo una lenta implementación, por el programa de Estado de Derecho para Amé-
lo que se hacía más pertinente el trabajo de la rica Latina, con sede en Uruguay, así como
KAS en ese contexto. seminarios individuales con diferentes socios
en donde se realizaban actividades puntuales.
En septiembre de 2000, culminó su misión en
Bolivia y entregó el trabajo a la nueva repre-
“Me es muy grato expresar a la Fundación
sentante en Bolivia la Sra. Annette Schwarz-
Konrad Adenauer que usted representa, en
bauer, desde entonces, los cuatro proyectos nombre del municipio y del Ejecutivo Muni-
FUDEP, LIDEMA, MILENIO y FUNDAPPAC53 cipal de la ciudad de La Paz, mi especial agra-
fueron financiados a partir de un contrato de decimiento por haber hecho posible la publi-
socios; la Cátedra Konrad Adenauer, así como cación de la Guía de Trámites Municipales,
mediante su invalorable aporte, cumpliendo
de esta forma un genuino objetivo común,
53 FUNDAPPAC con el tiempo desde su creación fue
que es el de brindar a nuestra ciudadanía un
trabajando no solo actores políticos sino también
servicio más ágil y eficiente”.
con actores de la sociedad civil como mujeres y
jóvenes ayudándoles en el empoderamiento de sus Dr. Juan del Granado, Alcalde de La Paz, cita del 13 de agosto
liderazgos. También aporto de manera decida con del 2001.
el trabajo en el área constitucional.
Por otro lado, con la fundación MILENIO que
cubre el área de trabajo económico se diversi-
ficaron los temas y su agenda de investigación:
recursos naturales, hidrocarburos, comercio
exterior, desarrollo sostenible y su informe
MILENIO sobre los acontecimientos políticos
en Bolivia, etc.
Literatura (1993-1999)
Un amor A continuación, algunos títulos selectos que contribuyeron al entendimiento de la coyuntura econó-
desenfrenado mica y política del país, producto del trabajo de algunos Representantes de la KAS Bolivia y su conoci-
por la libertad
miento del país y otros de contrapartes e investigadores:
Antología de la
historia política
de Bolivia • Ehmer, Renate / Jürgen Heins 1993: Die politische und wirtschaftliche Situation Boliviens, in:
(1825-2020) KAS-Auslandsinformationen 2, S. 21-41.
• Ferrufino, Alfonso / José Ortiz M. / Juan C. Urioste 1995: Parlamentarismo o presidencialismo.
60 Propuestas para el debate. La Paz: Fundación Milenio. KAS.
• Hofmeister, Wilhelm 1985: Wahlen und Regierungswechsel in Bolivien. Ein Schritt zur Festigung
der Demokratie? Universität Mainz / Institut für Politikwissenschaft, Dokumente und Materialien
Tomo I Nr. 6.
1825-1952 • Hofmeister, Wilhelm 1987: Staat und soziale Bewegungen in Bolivien, in: Zeitschrift für Politik
34, 2, S. 171-188.
• Hofmeister, Wilhelm 1993: Bolivien. In: Dieter Nohlen (Hrsg.): Handbuch der Wahldaten Latei-
namerikas und der Karibik. Opladen, S. 101-126.
• Hofmeister, Wilhelm 1996: Bolivien: Die Reform der Revolution, in: Der Wandel politischer
Systeme in Lateinamerika Hofmeister, Wilhelm / Josef Thesing (Hrsg.). S. 81-141.
• Informes de Milenio sobre la Economía, Nº 6, marzo 1999, Ed. Fundación Milenio, La Paz.
• Informe de Milenio sobre la Economía, Nº 7, Setiembre 1999, Ed. Fundación Milenio, La Paz.
• Informe de Milenio sobre el Desarrollo Sostenible en Bolivia, 1999: Nº 1, Ed. Fundación Milenio,
La Paz.
• Informe de Milenio sobre el Desarrollo Político de Bolivia (1997-1999) 1999: Nº 1, Fundación
Milenio, La Paz.
• Jost, Stefan 1994: Verfassungsänderung in Bolivien, in: KAS-Auslandsinformationen 12, S. 78 - 98.
• Jost, Stefan 1995: Das Verhältnis von Präsidentialismus und Parlamentarismus in Bolivien - Zum
Beginn einer Diskussion, in: KAS-Auslandsinformationen 5, S. 57-79.
• Jost, Stefan 1995: Eine Halbzeitbilanz der Reformen in Bolivien, in: KAS-Auslandsinformationen
1, S. 54-87.
• La Paz hacia el siglo XXI, 1999: Ed. Fundación La Paz, La Paz,
• Las Reformas Estructurales en Bolivia, 1998: Ed. Fundación Milenio, KAS, La Paz.
• Los Medios de Comunicación en Bolivia 1999, Ed. Universidad Católica Boliviana, La Paz.
• Mansilla, H.C.F. 1993: La identidad social y el rol político del sindicalismo boliviano. La Paz: CEBEM.
• Mansilla, H.C.F. 1994: La empresa privada boliviana y el proceso de democratización. La Paz:
Fundación Milenio. KAS.
Algo importante de resaltar es que, en conso-
nancia con una apertura de partidos indígenas
en el sistema de partidos boliviano, el Progra-
ma Regional de Participación Política Indígena
(PPI) inició actividades el año 2006 (concebido
a finales del 2005) y trabaja en todos los paí-
ses de América Latina con presencia indígena
significativa, desde el año 2011 su sede se en-
cuentra la ciudad de La Paz-Bolivia. A través de
eventos de formación política, publicaciones,
video documentales y cooperación interinsti-
tucional, está orientado a sensibilizar a actores
políticos tradicionales para que incluyan en sus
estructuras a las poblaciones y temáticas indí-
genas. Facilitar mesas de dialogo entre indíge-
nas y no indígenas para tratar temas que son de
suma importancia para los pueblos indígenas.
2002 2004
Oficina en Bolivia: Edificio Dallas 2008
Tel.: (591 / 2) 2 41 piso 9 Av Walter Guevara
73 68, Fax: (591 Av. Ecuador 8037, Calacoto, (Ex.
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E-Mail: kasbol@ E-Mail: kasbol@ correo 9284, Email: 2014 2018 2022
acelerate.com acelerate.com info.bolivia@kas.de Maximilian Hedrich Dr. Georg Dufner Dra. Christina Stolte
63
en Bolivia
La Konrad-
Una historia
y Solidaridad
de Cooperación
Adenauer-Stiftung
Un amor
desenfrenado
por la libertad
Antología de la
historia política
de Bolivia
(1825-2020)
Fuente: Archivo fotográfico de la KAS. Casa del ex Presidente de la República Walter Guevara y donde fueron las oficinas de la KAS en la Zona Sur.
64
del Programa de la KAS en Bolivia. Desde Se realizaron también seminarios, talleres y
el 2007 y por 14 años hasta el día de hoy, publicaciones que giraban en torno a la Au-
Tomo I la producción intelectual, la investigación y tonomía Electoral, participación de mujeres,
1825-1952
la publicación de literatura en las áreas so- autonomías departamentales, Constitución
cial, económica y política se convirtió en una Política del Estado. Una publicación muy im-
marca registrada de la oficina Bolivia de la portante que se socializó y realizo la KAS en el
KAS, expertos, investigadores y profesores área económica fue el Diccionario de la Eco-
universitarios cada año fueron invitados a nomía Social del Mercado, hecho que marco
formar parte en la agenda de investigaciones la continuidad en temas de desarrollo econó-
de la KAS Bolivia. El primer título de dicha mico. En un nivel más interno durante esta
agenda de investigación fue el referido a la representación se trabajó en la organización
temática indígena: Justicia Ordinaria y Justi- de la biblioteca y el archivo institucional, vital
cia Consuetudinaria ¿Un matrimonio impo- para la memoria e historia de la institución.
sible? Sistematización de propuestas de com-
plementación en Sudamérica, Bolivia en el En la gestión de Behrens la KAS se traslada a la
marco de la Asamblea Constituyente (2007). zona sur de la ciudad de La Paz y las oficinas
La cual fue presentada a nivel nacional y co- se encuentran ubicadas en la casa del ex Pre-
mentada por el Dr. Luis Ossio Sanjinés Pre- sidente de Bolivia Walter Guevara Arce. El
sidente de FUNDAPPAC y ex Vicepresidente ex embajador de Alemania en Bolivia Philipp
de la República de Bolivia. El libro trata con Schauer, visitó la casa patrimonial y la incluyó
especial énfasis, en el marco de la temática en uno de sus libros como patrimonio histó-
indígena, la participación política indígena y rico de La Paz. Para el 2008, Peter Alberto
la justicia originaria e indígena. Behrens se trasladó a las oficinas de la KAS en
Buenos Aires como Representante del Progra-
ma Regional de Medios de Comunicación y
Democracia, por ello a finales del 2008 Mi-
chael Lingenthal representante de la KAS en
Perú, por un corto tiempo administra también
la oficina Bolivia.
La KAS, en el marco de su "Programa para Bolivia", realiza por un lado sus propias actividades (semi-
narios, estudios, asesoramientos e investigaciones) y por el otro coopera con contrapartes bolivianas.
Las contrapartes son por lo general instituciones y organizaciones políticas o sociales. Este principio
representa la garantía para la transformación estructural.
El fomento a organizaciones políticas, económicas, sociales y culturales conduce a la conformación de
instituciones y a la ampliación de espacios de libertad y participación de grupos de interés social. Por
lo general, desde el punto de vista jurídico, las contrapartes son las entidades gestoras de los proyectos
a los que se les brinda apoyo.
65
Además de la cooperación institucional con contrapartes, desde hace algunos años y cada vez con mayor
intensidad, la Fundación Konrad Adenauer lleva a cabo actividades conjuntamente con co - organizado-
res locales en el marco de su propia atribución y responsabilidad.
La Konrad-
La KAS Bolivia en el marco de sus propias medidas trata los siguientes temas centrales: Adenauer-Stiftung
en Bolivia
Una historia
• Fortalecimiento del Estado de Derecho y la democracia. de Cooperación
• Formación cívica-política de operadores políticos, jóvenes líderes e interesados en general. y Solidaridad
• Formación y capacitación de líderes indígenas.
• Empoderamiento de la mujer.
• Fomento al diálogo intercultural y plural sobre temáticas para el futuro.
• Discusión sobre políticas públicas y desarrollo, en especial la política económica y la Economía
Social de Mercado (ESM).
• Responsabilidad Social Empresarial (RSE) y Medio Ambiente.
• Fomento a la cultura democrática y política.
• Trabajo con estudiantes y perfeccionamiento para periodistas con miras a fortalecer la libertad de
expresión y los derechos humanos.
• Reformas políticas.
• Proceso de descentralización y autonomías.
A objeto de cumplir las mencionadas metas finales se llevaron a cabo entre el 2005 y 2021, diferentes
eventos, tales como:
• Seminarios, talleres, estudios, publicaciones y asesoramiento, entre otros, para fortalecer la partici-
pación de la sociedad civil en el proceso democrático, enfocando este trabajo sobretodo en mujeres,
población indígena y jóvenes líderes.
• Otra meta de estas medidas fue el apoyo al parlamento y después a la Asamblea Legislativa Pluri-
nacional.
• Investigaciones y estudios para la formulación de políticas públicas.
Un amor
desenfrenado
por la libertad
Antología de la
historia política
de Bolivia
(1825-2020)
66 Fuente: Archivo fotográfico de la KAS. Susanne Käss la segunda de la izquierda y la su lado la Dra. Silvia Salame en Sucre.
La Fundación Konrad Adenauer (KAS) contribuye a este desarrollo a través de un programa regional:
a finales del 2005 pero de manera formal desde el 2006 - en el marco de sus actividades de política de
desarrollo en América Latina - dio inicio al Programa Regional “Participación Política Indígena en
América Latina” (PPI) (Meentzen, Angela, 2007). El nuevo programa comprendía a Bolivia, Ecuador,
Guatemala, México y Perú países multiétnicos y con población indígena importante.
En todos estos países resulta de gran importancia el conducir a las agrupaciones políticas indígenas
hacia una democratización constructiva (Rosenberger, Markus y Weig Berthold , 2007). El Sr. Mar-
kus Rosenberger fue el primer Director del Programa Regional desde Lima y posteriomente el Dr.
Berthold Weig se hizo cargo a partir del 01 de septiembre en el 2007 en el Ecuador ambos también
eran representantes en Perú y Ecuador respectivamente. Sin embargo, el trabajo con comunidades
indígenas es antiguo a finales de los 70 y en los años 80 y 90, se llevaron a cabo en Ecuador, Perú - y
sobre todo en Bolivia - una serie de intervenciones en el marco de los programas de ayuda estructural
de tipo social de aquella época (Meentzen, Angela, 2007, Velásquez Iván, 2007).
Por ejemplo, en Bolivia el proyecto COOPAS en los 70 en el marco de sus objetivos de ayuda social y
trabajo cooperativo se apoyó al área rural. Posteriormente, en los 80 y se dio apoyo a medidas genera-
doras de ingresos para las mujeres de comunidades indígenas en las áreas rurales bolivianas (pequeña
producción artesanal, agricultura, trabajo social), y a un proyecto conjunto con las fuerzas armadas
bolivianas para obras de infraestructura en el altiplano entre La Paz y el Lago Titicaca. También en
los 90 en el área rural en Bolivia con la conformación de cooperativas rurales. La KAS también apo-
yaba proyectos de desarrollo rural integral en el oriente boliviano, por ejemplo, en la zona de San
Germán en Yapacani se apoyaba proyectos de riego y pozos de agua para los campesinos y el ganado
la responsable del proyecto era la Sra. Renate Ehmer. También un proyecto de desarrollo rural en el 67
Altiplano era otro importante pilar de ayuda a la temática indígena y era desarrollado en coordinación
con CEDEFOA. Mientras que el CIEC centró su trabajo en la promoción integral de la mejora de las
condiciones de vida de pequeños agricultores y minorías étnicas en las tierras bajas del este de Bolivia.
La Konrad-
Con la Fundación San Gabriel y posteriormente FUDEP a mujeres indígenas. Esto demuestra que la Adenauer-Stiftung
temática indígena no es nueva para la Fundación Konrad Adenauer. en Bolivia
Una historia
de Cooperación
Sin embargo, ni en la KAS ni en la Cooperación Alemana para el desarrollo existía en ese entonces una y Solidaridad
estrategia coordinada transnacional. A nivel país, los grupos destinatarios indígenas formaban parte de
las medidas de desarrollo implementadas, pero todavía no se contaba con una línea de acción específi-
ca para la participación de los grupos indígenas de la población en el desarrollo político, económico y
social. Por ello, la KAS creó el PPI y, como fundación política, definió cinco objetivos para trabajar en
esta área temática en Bolivia, Ecuador, Guatemala, México y Perú:
• Reforzamiento de la participación de los pueblos indígenas en los procesos políticos del país.
• Mayor representación política en forma de parlamentarios en el nivel comunal y nacional. Es decir,
más representantes políticos y mejor capacitados en los parlamentos locales, regionales y nacionales.
• Mayor cogestión en el desarrollo comunal.
• Capacitación de mandatarios indígenas en cuanto a instrumentos políticos y administrativos.
• Fortalecimiento de una red política entre asociaciones y partidos de raíces indígenas.
Para identificar las características de la población indígena y sus condiciones de vida en la región, se
realizaron investigaciones y análisis desde el punto de vista de la KAS e identificaron que:
• La proporción de las comunidades y población indígena con respecto a la población total de Boli-
via, Ecuador, Guatemala, México y Perú es bastante alta y su densidad demográfica es claramente
importante.
• Por ello, ya no se debe ver al pueblo indígena sólo como un potencial electoral pasivo, sino como
un homo politikus que es cada vez más fuerte y activo.
• Los acontecimientos de las últimas décadas en materia de inclusión y universalidad de derechos
demuestran, entre muchos aspectos, que la población indígena quiere formar parte de los procesos
políticos que le afectan, pero deben superar las barreras formales para lograr una adecuada repre-
sentación de intereses.
• En los medios de comunicación, se informa mucho sobre una radicalización en el pensamiento y
actuar de los indígenas. Sin embargo, ese comportamiento político extremo es característica sólo
de una minoría de los indígenas, que trata de jalar para su lado a la mayoría todavía pasiva y, sobre-
todo, pacífica.
Por ello, es de gran importancia insertar a las agrupaciones y partidos políticos a indígenas hacia una
democratización constructiva. En esa perspectiva la KAS aportó mucho. Con el nuevo programa re-
gional se dio, a diferencia de anteriores actividades país, un programa marcado con una orientación
política. Ello incluye, también y especialmente, la dimensión política de la lucha contra la pobreza. Las
etnias indígenas son, debido a la exclusión practicada por el sector político y económico durante siglos,
parte de la población que ha sido y es afectada en más del promedio por la pobreza y extrema pobreza.
La pobreza en América Latina indudablemente tiene un rostro indígena.
Un amor
desenfrenado
por la libertad
Antología de la
historia política
de Bolivia
(1825-2020)
68
Tomo I
1825-1952
Antología de la
historia política 3. ¿Cómo evalúa ese proceso de debate discusión e implementación de la NCPE?
de Bolivia
(1825-2020)
Intentamos discutir los temas importantes para Bolivia desde los diferentes puntos de vista, tanto
técnicos como políticos. Producto de ello elaboramos una investigación junto con el Dr. Iván Velás-
70
quez-Castellanos e invitamos a expertos constitucionalistas, expertos en derecho, profesores univer-
sitarios e investigadores para reflexionar sobre el texto constitucional. El resultado fue el libro: Re-
flexión Crítica a la Nueva Constitución Política del Estado. Fue un estudio muy importante para dar
Tomo I un lugar especial en el debate que se estaba llevando a cabo en torno del cuerpo constitucional. Ello
1825-1952
marco un compás y definió una ruta crítica para la agenda de investigación de la oficina Bolivia de la
KAS. Para los años siguientes cada año escogimos un tema de investigación específico por ejemplo, con
la promulgación de la Ley Marco de Autonomías “Andrés Ibañez” en el 2010 publicamos el estudio:
Bolivia en la senda de la implementación de la Ley Marco de Autonomías y descentralización (LMAD).
Evaluación, análisis crítico y perspectivas futuras. En dicha publicación analizamos el proceso de las
autonomías, dimos un enfoque sobre descentralización fiscal y lo que importaba era entrar en un dia-
logo a nivel regional y central, con diferentes actores de la sociedad, con políticos en el debate que no
se escuchaban tanto pero también con actores de la sociedad civil periodistas y jóvenes.
Sin duda, que se alcanzó. Dentro de los espacios posibles ofrecer posibilidades de debate democrático
ese objetivo era parte de mi trabajo. Lo que se debe destacar es que Bolivia es un país que apasiona y es
muy agradable trabajar con los bolivianos y recibieron mis ideas y nuestras ideas (Iván), con los brazos
abiertos lo cual es altamente destacable y sentí que se podía tener un alto impacto. Pero, también sentí
que el trabajo de la Fundación hizo sentido y en todo lo que se hacía fue importante para el trabajo de
la fundación en Bolivia.
En la presentación pública de la Reflexión Critica a la NCPE, se pensó en hacer una presentación pública
grande y estimamos distribuir 300 libros entre el público presente, el salón se llenó completamente a
pesar que era el salón más grande en el Prado Paceño
,se mandó a recoger más libros, al final se distribuyó
más 800 publicaciones, lo cual no estaba contempla-
do ni previsto, fue un éxito total. Una autoridad alta
de Estado con la que me topé en el salón, se llevaba
más de 4 publicaciones para su equipo de asesores
y le pregunté: que si deseaba más libros que con
gusto se los enviaríamos. Y esa es una anécdota que
demuestra el aprecio al trabajo de la KAS y muchas
personas estimaban nuestro trabajo, el alto nivel de
análisis y el objetivo fue contribuir al debate y la dis-
cusión sana. Considero que el debate constructivo
fortalece la democracia y de ese ámbito pueden salir Fuente: Archivo fotográfico de la KAS. Susanne Käss y Michael
Lingenthal en las oficinas de la Av. Walter Guevara.
buenas ideas para mejorar el desarrollo de Bolivia.
Considero que hay mucho trabajo que hacer, en el marco de la cooperación internacional, mucho más
aún en esta coyuntura de la pandemia. La covid-19 ha desnudado las debilidades no solo de Bolivia
sino del mundo entero en la esfera de la salud, económica y social. Por lo que se requerirán ante este
nuevo escenario de políticas públicas y de sistemas de protección social que ayuden a los sectores vul-
nerables de la población.
71
Con la Fundación ARU se inició el ciclo de
investigaciones con evidencia, sobre: Creci-
miento y Desarrollo, Pobreza y Desigualdad, La Konrad-
Adenauer-Stiftung
Mercado Laboral y Empleo y Cohesión Social en Bolivia
Una historia
en el marco del objetivo fomentar la sociali- de Cooperación
y Solidaridad
zación del modelo de la Economía Social de
Mercado (ESM). El objetivo de los encuentros
estuvo orientado a establecer el estado de si-
tuación y análisis de las temáticas mencio-
nadas, como también identificar las políticas
públicas y perspectivas de los problemas es-
tructurales identificados para Bolivia.
Asimismo, es importante de destacar, que un
Con el Ilustre Colegio de Abogados de Co- objetivo importante de la KAS Bolivia fue la
chabamba se apoyó una especialización en difusión y socialización de la NCPE. A partir de
descentralización y autonomías, Derechos la solicitud del Ministerio de la Presidencia se
Humanos y el Derecho Internacional. En las realizó un trabajo pionero de traducción y pu-
temáticas de género, con la Fundación Nues- blicación de la nueva constitución en idiomas
tra Esperanza se llevó cabo un programa de indígenas. Con el Ministerio de la Presidencia
capacitación a jóvenes, el cual enfatizaba el rol - Viceministerio de Coordinación y Gestión
de la mujer y su empoderamiento en la socie- Gubernamental se coordinó la socialización
dad actual. Y se hizo entrevistas a mujeres lí- del texto constitucional a idiomas nativos pri-
deres que influyeron en la política. mero al quechua, aymara y posteriormente al
guaraní. La KAS en principio tomo la decisión de una empresa de audio para la grabación
de traducir el texto constitucional al quechua y elaboración de un CD de audio en idioma
y posteriormente como apoyo a la publicación quechua. Un experto en idioma nativo que-
se elaboró audios realizados por periodistas de chua para la corrección y re lectura de la pu-
radios comunitarias que leían en quechua cada blicación. La elaboración de libro de la CPE
uno de los artículos del texto constitucional. digital y un CD de audio de apoyo, adjunto a
Posteriormente se tradujo en aymara y final- la publicación. La impresión y publicación de
mente en guaraní. la CPE en español y quechua. La presentación
de dicha publicación en la Vicepresidencia del
La KAS Bolivia, apoyó este proyecto por con- Estado y en el Ilustre Colegio de Abogados de
siderar de suma importancia para las naciones Sucre. Posteriormente en coordinación con el
y pueblos indígenas de habla quechua para el Viceministerio de Descolonización se coordi-
conocimiento y empoderamiento de sus dere- nó y financió la versión de la CPE en aymara.
chos y de los preceptos constitucionales. En
este sentido la KAS financió: la contratación Con FUNDAPPAC se continuó las Noches Par-
lamentarias y el asesoramiento parlamentario.
En el marco de la Asamblea Constituyente se
Un amor
apoyó a través de estudios en determinados te-
desenfrenado mas por ejemplo con la Facultad de Derecho
por la libertad
y Ciencia Política de la UCB se reflexionó en
Antología de la
historia política torno a temas constitucionales relacionados a
de Bolivia
(1825-2020)
la Asamblea Constituyente como pluralismo
jurídico, Estado plurinacional comunitario,
72 pluralismo jurídico colonial poscolonial, des-
linde jurisdiccional, etc.
Un amor
Iván Velásquez-Castellanos.
desenfrenado
por la libertad
El año 2011 se continuó con el apoyo y tra-
Antología de la
historia política bajo a la APLP y la ABCP, también se trabajó se apoyó con otro número del informe de la
de Bolivia
(1825-2020)
en temas de adaptación al cambio climático, calidad de la democracia. Con la Fundación
sensibilización sobre el programa del cambio Aru apoyaron estudios acerca de crecimiento
74 climático con instituciones que trabajan la te- de la economía, de la educación de la salud y
mática. El 2012 se apoyó con una cartilla so- con la Carrera de Comunicación Social de la
bre la Ley Marco de Autonomías y Descen- UCB empezaron a hacer el Journal en Comu-
Tomo I tralización para entender en sencillo el tema, nicación Social. En el marco de la realización
1825-1952
destinado al trabajo con Alcaldías. También del Censo del 2012 se apoyó con un análisis
de datos del Censo. Con LABOR se trabajó en
análisis del empleo en Bolivia y con MILE-
NIO continuo el apoyo con el Informe, pero
esta vez ya solo una vez por gestión ya que los
datos oficiales como gastos, ingresos y presu-
puestos ya eran menos accesibles a partir de
este año. La Sra. Käss es representante hasta
el 2014.
el diplomado sobre “Periodismo Político” que temáticas que han ayudado a ampliar sus ex-
estuvo dirigido a profesionales del área perio- pectativas y conocimientos sobre el mundo
dística. Los participantes fueron trabajadores de político. Es de destacar en la gestión del Sr.
los diferentes medios de comunicación (prensa Hedrich el apoyo a los jóvenes a través de se- 77
escrita, medios visuales, digitales, etc.).58 minarios y cursos de capacitación y empode-
ramiento. Este programa fue una continua-
La KAS Akademie: fue un programa realizado ción del programa desarrollado en el 2015 La Konrad-
Adenauer-Stiftung
por la KAS, que buscaba potencializar a jóve- con “Agora” una institución que trabajó con en Bolivia
Una historia
nes líderes (hombres y mujeres) de diferen- jóvenes en edad de votar y la creación de una de Cooperación
y Solidaridad
tes corrientes y pensamientos políticos, así plataforma de jóvenes para fomentar el voto
como aquellos que no pueden o no cuentan informado y el desarrollo de sus capacidades
con un apoyo o estructura partidaria. Para el en la sociedad boliviana.
año 2016 se realizaron 3 encuentros (La Paz,
Sucre y Santa Cruz) en los cuales, los parti- Desde el retorno a la democracia en más de
cipantes seleccionados (20) recibieron capa- 3 décadas la conflictividad en Bolivia fue una
citación teórica y práctica sobre diferentes constante el origen siempre descansa en los
problemas estructurales de pobreza y des-
58 El curso contó con diez módulos. El programa
igualdad en el que los bolivianos se ven inmer-
tuvo una duración de diez semanas, en las que se sos. Con el objetivo de identificar los rasgos
desarrollaron temas como: El pensamiento político característicos de la conflictividad, pero ade-
de la actualidad; el debate y la entrevista política; más de promover una cultura de paz se elabo-
comunicación política, análisis del discurso; las
normas jurídicas y la Nueva Constitución Política
ró el estudio sobre la “Paz y la conflictividad
del Estado y, por último, los participantes conta- en Bolivia” Phil Gittins e Iván Velásquez Cas-
ron con un taller internacional a cargo de Sergio tellanos elaboraron este estudio para abordar
Ocampo, destacado periodista colombiano, quien la problemática de manera integral. La pu-
tuvo la labor de despertar la creatividad de los par-
ticipantes para tratar desde otros puntos de vista las
blicación también contó con la participación
noticias políticas. de María Soledad Quiroga directora de la
económica y social para fomentar seminarios
de liderazgo político.
Algo que se debe resaltar en el trabajo de la nacional de desarrollo, energía: desarrollo sos-
Konrad es la contribución a la socialización, tenible e inserción en la economía internacio- La Konrad-
Adenauer-Stiftung
análisis, debate y reflexión de los distintos te- nal entre muchos otros. en Bolivia
Una historia
mas que fueron parte de su abanico de trabajo de Cooperación
y Solidaridad
a través de la publicación de manera asociada En el área política se publicó textos referidos
y en su mayoría institucional de un número de a la democracia y conflicto social en Bolivia,
textos que contemplan diversos temas, en el dilemas, percepciones y perspectivas políticas,
área económica por ejemplo, que es el uno de democracia y Fuerzas Armadas, política y polí-
los que más apoyo recibió: Informe Milenio ticos en Bolivia; actitudes, conductas y prácticas
sobre la economía boliviana, Responsabilidad en el sistema de partidos, principios y valores
Social Empresarial, Economía Social de Mer- de la democracia, cultura democrática y guía
cado, Finanzas Públicas, Pacto Fiscal, Análisis parlamentaria entre otros. Muy relacionado a
y Perspectivas del Censo Nacional de Pobla- la inclusión y participación de nuevos actores
ción y Vivienda 2012, propuestas de Ley, la en la política y en consonancia con el contexto
inversión en Bolivia, modelos económicos y político e histórico se trabajó publicando textos
la Economía Social de Mercado, Reflexiones que promovían poner el tema en agenda como
Teóricas para Bolivia, crisis mundial, imple- los referidos a los pueblos indígenas, aquí se
mentación de la Ley Marco de Autonomías y trabajaron temas como: líderes y partidos indí-
Descentralización, aspectos económicos del genas, participación política indígena, justicia
proyecto de Nueva Constitución, pensiones y de los pueblos indígenas y originarios, derechos
jubilación en Bolivia, diccionario de economía de los pueblos indígenas, entre otros. Las muje-
social de mercado, política económica, plan res y los jóvenes también recibieron su atención
en cuanto al fortalecimiento de sus capacidades utilizar el poder existente para realizar ideas,
a través de la publicación de guías de liderazgo, conceptos y objetivos. Cualquier descripción
seminarios para la participación política de las de los proyectos de la KAS en América Latina
mujeres en el ámbito local y formación y capa- debe tener presente este concepto rector.
citación de jóvenes en valores democráticos en
escenarios electorales. El área jurídica, comu- No todos los años se contaba con los mismos
nicacional, medio ambiental e incluso histórica recursos financieros de Alemania, había gestio-
también fue motivo de publicaciones que sirvie- nes en que ese financiamiento se reducía, aun-
ron de sobremanera en su momento al público que Bolivia comparativamente hablando con
especializado, investigadores, pero sobretodo a los otros países de la región recibía modesto
la sociedad boliviana en general. El Dr. Georg presupuesto, este siempre era inteligentemen-
Dufner culmina su gestión a finales del 2021 y te bien ejecutado en los diferentes programas y
a partir del 2022 la Dra. Christina Stolte será la proyectos que siempre tenían un alto impacto.
nueva Representante en Bolivia.
El desarrollo institucional de la Konrad Ade-
nauer Stiftung (KAS) en Bolivia atraviesa tres
5. Comentarios finales procesos históricos: periodo dictatorial, recu-
Un amor
peración democrática y construcción del Esta-
desenfrenado La KAS siempre tuvo en claro que sólo podía do Plurinacional. La KAS con medidas propias
por la libertad
realizar un aporte modesto y parcial al desarro- y con financiamiento a contrapartes y socios
Antología de la
historia política llo sobre la base de una cooperación igualitaria apoyó las reformas y modernización del Esta-
de Bolivia
(1825-2020)
(Thesing, 2011). Su objetivo era aportar ideas, do boliviano.
ayudar a sus contrapartes a crear las condicio-
88 nes necesarias para impulsar el cambio estruc- En cuanto a las áreas de trabajo estas se agru-
tural y político en sus países. La KAS se define pan en tres grandes áreas: económica, social
como socio de estos proyectos y busca ayudar y política, a través del financiamiento a pro-
Tomo I solidariamente con recursos económicos, ase- yectos y programas. Sin embargo, temáticas
1825-1952
soramiento y experiencia. Los objetivos y pro- transversales como el trabajo rural y coope-
gramas se elaboran en forma conjunta. Sin em- rativo desde 1969, género y empoderamiento
bargo, la última palabra sobre el contenido y la de las mujeres, se apoyaban desde 1989, medio
orientación de los proyectos la tiene siempre ambiente en 1990. A partir del 2005 se redu-
el socio local, quien es el que debe asumir la ce el trabajo en el área social y se mantiene el
responsabilidad política. El trabajo conjunto se trabajo en el área económica, política, medio
realiza a través del diálogo con el representante ambiental, hasta el día de hoy.
de la KAS, sin que necesariamente deba existir
siempre plena coincidencia de opiniones. En el área social los proyectos y/o programas
abarcaban una multiplicidad de sectores, en
El objetivo fundamental de la KAS era desarro- tanto que en el área política hay un paso de
llar actividades políticas con el compromiso de trabajo con partidos políticos PDC-MNR hacia
organizar la convivencia humana y solucionar el apoyo a instituciones como el Parlamento.
conflictos existentes. La Fundación siempre En el área económica la ayuda y financiamien-
basó su trabajo en un concepto de política am- to se orienta al desarrollo.
plio. Si bien la política no lo es todo, está pre-
sente en todos los órdenes. En todo elemento Aunque el apoyo a proyectos y/o programas
cultural, económico y social hay siempre un fue variando de acuerdo al nivel de finan-
ingrediente político. Actuar en política im- ciamiento que recibía, a lo largo del tiempo,
plica querer cambiar algo, ejercer influencia, excepto en tiempos peligrosos de dictadura,
mantuvo un trabajo constante y compartido Bibliografía
con socios nacionales, subnacionales y locales;
púbicos y/o privados. Adenauer, Konrad el 28/7/1946 en Osna-
brück, en: Poppinga, Anneliese (ed.):
Existe una expansión territorial en el trabajo, Konrad Adenauer: Seid wach für die
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oriente y luego a tierras altas nuevamente. Hoy bach 1997, pág. 33.
en día el trabajo de centraliza en zonas urbanas Barnadas, Josep. 1999. Historia Contemporá-
a nivel nacional, aunque temáticas como la in- nea Siglo XX. La Paz: Librería editorial
dígena se las trabaja en el área rural de Bolivia. Juventud.
Beaugrand, Günter (2003). Die Konrad Ade-
Entre los actores de la sociedad civil beneficia- nauer Stiftung. Eine Chronik in Berich-
dos están: mujeres, jóvenes e indígenas. Su im- ten und Interviews mit Zeitzeugen. Sankt
pacto es multidimensional e interdisciplinario. Agustin. DCM-Druckcenter, Mecken-
heim. ISBN 3-927535-15-X
La contribución de la KAS en Bolivia no solo se Diakonisches Werk der Evangelischen Kirche
reduce a la realización de eventos (seminarios, in Deutschland: Den Armen Gerechti-
talleres y foros entre otros) de análisis en dife- gkeit - 50 Jahre Brot für die Welt, Stutt-
rentes temáticas, sino también al fortalecimiento gart, 2008.
de capacidades, empoderamiento, asesoramien- Dumke, Horst (1997). Anfänge der staatlichen
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América en los Siglos XIX y XX. Buenos
La Fundación Konrad Adenauer desde su pre- Aires: Grupo Editor Aique. 89
sencia en Bolivia trabajó de acuerdo a objetivos Jost, Stefan. (2003). Bolivien: Politisches
de la Democracia Cristiana, la Democracia, System und Reformprozess 1993-1997.
el Estado de Derecho y los Derechos Huma- (Bolivia: Sistema Político y Proceso de La Konrad-
Adenauer-Stiftung
nos. También respondió a los cambios del ci- Reforma 1993-1997). Springer VS. ISBN en Bolivia
Una historia
clo político y económico que se fueron dando 978-3-663-09437-1. de Cooperación
y Solidaridad
en el tiempo según los procesos históricos que Klein, Herbert. 2011. Historia de Bolivia. De los
le toco vivir. El último periodo de tiempo fue orígenes al 2010. 4ta edición aumentada y
complicado para el trabajo de la KAS, ya que en corregida. La Paz: Editorial G.U.M.
el marco de la correlación de fuerzas políticas, Konrad Adenauer Stiftung. 2002. In der Welt
tuvo que resolver de manera inteligente el siclo und für die Welt. 40 Jahre internatio-
político de la administración gubernamental nale Zusammenarbeit. Persönliche Er-
del proceso de cambio. A diferencia del pasado, fahrungsberichte. Herausgegeben von Jo-
cambio también la visión desde el gobierno res- sef Thesing. Seite 321. Hildegard Krüger.
pecto a la presencia y trabajo de las institucio- Bolivien. 1996 bis 2000. Druckerei Paffen-
nes de la cooperación internacional en general. holz – Bornheim. ISBN 3-933714-77-X.
Konrad Adenauer Stiftung - Bolivia. S.f. Car-
En perspectiva, el trabajo de la KAS en Bolivia tilla Programa Regional de Participación
aportó y seguirá aportando al desarrollo en un Política Indígena. La Paz: KAS.
complejo y siempre interesante país como lo Konrad Adenauer Stiftung. S.f. Registro de
es Bolivia. En la evaluación de estos 54 años, Publicaciones KAS. La Paz: inédito.
sin duda fueron una historia de cooperación Konrad Adenauer Stiftung. S.f. Registro de
entre la República Federal de Alemania y el Publicaciones FUNDAPPAC. La Paz: in-
Estado Plurinacional de Bolivia. édito.
Movimiento de Mujeres Libertad. 2013. Li- _____ (ed.). 2002. Zukunft demokratisch gestal-
bres! Testimonio de mujeres víctimas de las ten – Demokratie, Rechtsstaatlichkeit, Sozia-
dictaduras. La Paz: Fondo Editorial Muni- le Gerechtigkeit, KAS, Berlín.
cipal Pensamiento Paceño. Tripp en, Norbert (2005). Josef Kardinal
Molt, Peter (2010). „Christliche Demokratie Frings (1887-1978) Band II, Paderborn.
und internationale Solidarität mit Latei- Velásquez – Castellanos. Iván. 2007. La his-
namerika“, en KAS, Entwicklungszusamme- toria de la Fundación Konrad Adenauer en
narbeit und internationale Solidarität. Sym- Bolivia. La Paz: inédito.
posium anlässlich des 80. Geburtstages von Viezzer, Moema. 2018. “Si me permiten ha-
Volkmar Köhler, Berlin 2010. blar…” Testimonio de Domitila, una mujer
Pierre Lavaud, Jean. 2003. La Dictadura mi- de las minas de Bolivia. La Paz: Centro de
nada. La Huelga de hambre de las mujeres Investigaciones Sociales.
mineras Bolivia 1977-1978. La Paz: CESU/ Unger, Mark. (2009). Sesenta años de la Ley
IFEA, Plural Editores. Fundamental Alemana - De un proviso-
Procacci, Giuliano. 2015. Historia general del rio con una larga vida. Estudios consti-
Siglo XX. Barcelona: Editorial Crítica. tucionales, 7(2), 301-316. https://dx.doi.
Pöttering Hans-Gert. 2011. Dialogo Político.
org/10.4067/S0718-52002009000200012
Un amor
La Fundación Konrad Adenauer en Amé-
desenfrenado rica Latina. La cooperación con América
por la libertad
Latina en el Bicentenario. Publicación
Antología de la Anexo I
historia política Trimestral. Imprenta Minigraf, Provincia.
de Bolivia
de Buenos Aires. ISSN 1667-314.
(1825-2020) 1. Fuentes y tipos de financiación
Sanjinés, Ricardo. 2010. Revolución, Dictadura
90 y democracia 1952-1992. La Paz: Cámara
Las fundaciones políticas se financian en
Nacional de Comercio.
gran medida con fondos federales y estatales.
Tellez, Yolanda. 2016. 1980 Operación Blitz.
La Konrad Adenauer Stiftung (KAS) se finan-
Tomo I Conspiración Golpista en Bolivia. La Paz:
1825-1952 cia en un 99% con subvenciones públicas,
Didáskalos Editores SRL.
un 0,8% en cuotas de participación y otros
Thesing Josef. 2011. Dialogo Político. La
Fundación Konrad Adenauer en América ingresos. Además, hay ingresos privados (in-
Latina. La Fundación Konrad Adenauer gresos de fondos y donaciones) del 0,2% (a
en América Latina: historia de una larga partir del presupuesto del 2017 de la Konrad
cooperación. Publicación Trimestral. Im- Adenauer Stiftung).
prenta Minigraf, Provincia. de Buenos Ai-
res. ISSN 1667-314. La mayoría de las subvenciones públicas son
_____ 2011. Dialogo Político. Seguridad Na- para la financiación de proyectos. En la Kon-
cional en América Latina. La Fundación rad Adenauer Stiftung, las subvenciones rela-
Konrad Adenauer en América Latina: his- cionadas con proyectos representan el 78% de
toria de una larga cooperación. Segunda los ingresos totales. En particular, los siguien-
parte. Publicación Trimestral. Primera tes están financiados por proyectos:
Clase Impresores, Buenos Aires. ISSN
1667-314. – Medidas de cooperación internacional;
_____ 1996. Demokratie und soziale Gerech- – Promoción de estudiantes y graduados ale-
tigkeit - Leitlinien der entwicklungspoli- manes;
tischen Arbeit der KAS in Zentralamerika, – Promoción de estudiantes extranjeros;
en Brockmann, Andreas u.a. (eds.), Mitte- – Elaboración de importantes documentos
lamerika und Deutschland, Frankfurt-Main. de archivo.
Además del financiamiento de proyectos, las Fundación Friedrich-Ebert recibe el 30,29%,
fundaciones políticas reciben financiamiento la Fundación Konrad-Adenauer el 29,57%, la
institucional. En el presupuesto de la Konrad Fundación Friedrich-Naumann el 10,21% y la
Adenauer Stiftung, esto asciende al 21,7%. El Fundación Heinrich-Böll cada una el 10,51%,
financiamiento institucional constituye la base la Fundación Hanns-Seidel el 9,71%. La Fun-
del financiamiento de las fundaciones políti- dación Rosa Luxemburg recibe el 9,71% del
cas, sin las cuales no sería posible la planifica- presupuesto federal de subvenciones globales.
ción continua del personal y las finanzas. En Esta clave, que se propone al comité de pre-
la Konrad Adenauer Stiftung, por ejemplo, los supuesto por consenso entre las fundaciones
“fondos globales” se utilizan para financiar: políticas, se aplica tanto a las subvenciones
globales como, con algunas excepciones, a las
– Congresos, reuniones y seminarios de edu- subvenciones relacionadas con proyectos.
cación política;
– Investigación, asesoramiento y documen- Con la aprobación de la Ley de Presupues-
tación, en particular el movimiento demo- to, los títulos de financiamiento se asignan a
cristiano y los fundamentos de la actividad los departamentos para otorgar la subvención
política; a las fundaciones políticas. Las subvencio-
– Publicaciones y exposiciones; nes se otorgan a fundaciones políticas sobre
– Gastos de personal, gastos administrativos la base de las Secciones 23 y 44 del Código
materiales, gastos de inversión. de Presupuesto Federal o Estatal y numero-
sos reglamentos administrativos adicionales,
En tiempos de disminución de la financiación las disposiciones auxiliares generales para las
pública, la financiación privada complementa- subvenciones para la financiación institucio-
ria es cada vez más importante. La fundación nal y las disposiciones auxiliares generales 91
tiene tres fondos de herencia: El Fondo Else para las subvenciones para la financiación de
Heiliger puede utilizarse para financiar apoyo proyectos, así como para el área del Ministerio
cultural y artístico dentro del marco descri- Federal del Interior / Oficina Federal de Ad- La Konrad-
Adenauer-Stiftung
to en el testamento. La fundación utiliza los ministración (subvenciones globales) otorgó en Bolivia
Una historia
ingresos del Fondo Theodor y Elisa Weimar los principios de gestión de las subvenciones de Cooperación
y Solidaridad
para financiar medidas relacionadas con el es- federales para la labor educativa sociopolítica
tudio para promover a los superdotados. Los y democrática.
ingresos del Fondo Werner Hintzler se utili-
zan para la educación política regional. La constitucionalidad de la financiación esta-
tal de las fundaciones políticas no encuentra
2. Marco legal para la financiación pública reservas fundamentales. Para el financiamien-
to institucional de las fundaciones políticas
El comité de presupuesto del Bundestag ale- con cargo al presupuesto federal (subvencio-
mán determina las contribuciones anuales a las nes globales), la Corte Constitucional Fede-
fundaciones políticas de los departamentos fe- ral lo resolvió en su sentencia de 14 de julio
derales. Tanto las subvenciones globales como de 1986 (2 BVE 5/83). El requisito previo es
la financiación del proyecto, se aprueban con que las bases políticas cumplan con el mode-
la Ley sobre el establecimiento del presupues- lo constitucional y sean instituciones legal y
to federal. La distribución de los fondos totales efectivamente independientes que asuman
entre las fundaciones se basa en una clave que su tarea de manera autónoma y con apertu-
tiene en cuenta adecuadamente las corrientes ra intelectual. En la práctica, también deben
políticas significativas y duraderas de la Re- mantener la distancia necesaria con las partes
pública Federal de Alemania. Actualmente la respectivas (BVerfG, principio rector).
Tras una decisión del Tribunal Constitucional Además, se llevan a cabo auditorías por par-
Federal sobre financiación de partidos en 1992, te de la oficina de impuestos. La oficina de
el presidente federal Richard von Weizsäcker impuestos verifica si las fundaciones políticas
creó una comisión de expertos independientes han utilizado sus fondos públicos y privados
sobre financiación de partidos. Además de las de acuerdo con las disposiciones benéficas
cuestiones de financiación de los partidos, la del código tributario. El punto de referencia
comisión también se ocupó ampliamente de la es si las fundaciones han utilizado sus fondos
financiación pública de las fundaciones políti- para el cumplimiento de sus funciones esta-
cas. El informe de la comisión del 17 de febre- tutarias con base en la sentencia fundacional
ro de 1993 confirma que los cimientos políticos antes mencionada de la Corte Constitucional
son una parte importante de la cultura política Federal de 14 de julio de 1986. En particular,
de la República Federal de Alemania y que ha- la legislación fiscal sin fines de lucro excluye
cen un trabajo útil para la comunidad. a las fundaciones políticas de utilizar sus fon-
dos para financiar otras organizaciones que
Sin esperar una posible regulación legal, las no pueden ser reconocidas como sin fines de
fundaciones políticas han retomado las reco- lucro a efectos fiscales (por ejemplo, partidos
mendaciones del informe de la comisión, han políticos, grupos parlamentarios) o que no
Un amor
formulado su propia imagen y determinado están reconocidas. La consecuencia de un in-
desenfrenado su ubicación. Esto se hizo en la Declaración cumplimiento sería la inhabilitación retroacti-
por la libertad
Conjunta, que es un compromiso voluntario y
Antología de la va con consecuencias fiscales de gran alcance.
sirve para informar al público. La declaración
historia política
de Bolivia
El trabajo de Konrad Adenauer Stiftung ha
conjunta fue firmada en noviembre de 1998
(1825-2020) sido reconocido como caritativo a efectos fis-
por los directorios de la Fundación Konrad
cales desde su fundación.
92 Adenauer, la Fundación Friedrich Ebert, la
Fundación Friedrich Naumann, la Fundación
También hay auditorías. El auditor verifica si
Hanns Seidel y la Fundación Heinrich Böll.
Tomo I
las fundaciones han utilizado los fondos pú-
1825-1952 blicos de manera adecuada, económica y con
3. Control y rendición de cuentas pública
moderación. Esto es requerido por las con-
diciones de financiación de los dos mayores
Las fundaciones políticas están sujetas a contro-
proveedores de financiación, el Ministerio
les intensivos por parte de auditores externos
Federal del Interior / Oficina Federal de Ad-
como casi ninguna otra organización. Las audi-
ministración y el Ministerio Federal de Coo-
torías son realizadas por los donantes, la oficina
de auditoría federal, las oficinas de auditoría es- peración y Desarrollo Económicos. El auditor
tatales, la oficina de impuestos y los auditores. prepara informes de prueba y certificaciones
separados sobre estas auditorías adicionales,
Los donantes, la Oficina Federal de Auditoría y que las fundaciones envían al donante respec-
las Oficinas de Auditoría Estatales monitorean tivo con un informe de hechos.
de manera continua y actualizada el cumpli-
miento de las disposiciones de la ley de subven- Además, los estatutos de las fundaciones esti-
ciones y el uso apropiado de las subvenciones. pulan que un auditor debe examinar los esta-
Además, se lleva a cabo un control de éxito dos financieros anuales de las fundaciones. El
acompañante. Los donantes, en particular el tipo y alcance de las auditorías corresponden a
Ministerio Federal del Interior / Oficina Fede- una auditoría legal con información adicional
ral de Administración (subvenciones globales) sobre el número de puestos de personal y la
y la Oficina Federal de Auditoría, han intensifi- dotación de personal de los órganos estatuta-
cado sus auditorías en los últimos años. rios (Declaración conjunta 6. Párrafo 2).
Además, la Konrad Adenauer Stiftung ha esta- público pero que no pueden ser percibidos por
do comprobando la eficacia de, por ejemplo, sus el propio Estado. Las actividades de las funda-
proyectos y medidas de desarrollo durante mu- ciones políticas tienen su base constitucional en
chos años de acuerdo con procedimientos gene- el artículo 9, párrafo 1 de la Ley Fundamental,
ralmente reconocidos acordados con el donante. en lo que se refiere a su organización bajo la ley
de asociaciones, y en el artículo 12, párrafo 1
La principal preocupación de las fundacio- de la Ley Fundamental, relativo a su función,
nes políticas es informar al público de manera la labor educativa profesional, sociopolítica y
regular y completa sobre su trabajo y hacer democrática a largo plazo.
transparente el uso de sus fondos (declaración
conjunta). Por esta razón, ya han divulgado Las actividades de las fundaciones políticas no
su uso de fondos durante años, incluso sin un tienen su base constitucional en el artículo 21
requisito de divulgación legal. Los estados fi- de la Ley Fundamental. Los partidos políticos
nancieros anuales auditados por el auditor de allí nombrados participan en la formación de
conformidad con el artículo 264 del Código la voluntad política, principalmente a través y
de Comercio alemán en forma de balance y con miras a participar en las elecciones. Reco-
cuenta de ingresos / gastos se publican con in- gen las opiniones, los intereses y las aspiracio-
formación adicional en el Boletín Federal y en nes dirigidas al poder político y su ejercicio,
el informe anual de las fundaciones políticas. las equilibran en sí mismas y las configuran en
La publicación también contiene información alternativas de elección ciudadana. Influyen
adicional sobre el número de puestos de per- en la formación de la voluntad del Estado al
sonal en comparación con el año anterior y influir en el sistema de instituciones y oficinas
sobre la dotación de personal de los órganos estatales, en particular al influir en las resolu-
estatutarios de acuerdo con las recomenda- ciones y medidas del parlamento y el gobierno 93
ciones del informe de la comisión. La Konrad (BVerfG 2 BvE 5/83; BVerfGE 52, 63-82 ff).
Adenauer Stiftung también publica su plani-
ficación económica por adelantado como una Los objetivos y actividades de las fundaciones La Konrad-
Adenauer-Stiftung
descripción general en los informes anuales. políticas se destacan claramente de esta com- en Bolivia
Una historia
petencia entre los partidos, que tiene como de Cooperación
y Solidaridad
4. La legitimación de la financiación pública objetivo la conquista del poder político y su
ejercicio. Su trabajo de educación política
Los fundamentos políticos son una parte im- debe estimular la preocupación de los ciuda-
portante de la cultura política de la República danos por los problemas políticos y propor-
Federal de Alemania. Realizan un trabajo útil cionar el marco para una discusión de cues-
para la comunidad (informe de la comisión), tiones políticas que sea accesible a todos los
por lo que la financiación estatal es de interés ciudadanos (BVerfG 2 BvE 5/83).
público (BVerfG 2 BvE 5/83).
b) La labor educativa sociopolítica de las fun-
La legitimación de los fundamentos políticos daciones políticas en el país y en el exterior es
se hace evidente cuando se delimita sus tareas de interés público, pero no es una tarea públi-
de las funciones de los partidos políticos y del ca. Esto resulta del principio de subsidiarie-
mandato educativo del Estado. dad, que caracteriza el mandato educativo en
la comunidad libre y de manera especial:
a) Las fundaciones políticas son organizaciones
constituidas de derecho privado, que de ma- La comunidad constitucional, que se basa en la
nera independiente, autónoma y con apertura libertad del ciudadano y el pluralismo de fuer-
intelectual brindan servicios que son de interés zas sociales, vive del hecho de que la libertad
se ejerce de manera justa para el bien común. derechos fundamentales. No debe suprimir la
Aparte de unas pocas reglas de juego éticas y labor educativa privada con sus propias medi-
constitucionales, lo que es común al bien co- das (cf. BVerGE 44, 125-138 ss). Las institu-
mún no es seguro desde el principio, pero está ciones estatales no pueden asumir tareas que
sujeto a disposición política y es tema de de- pueden y pueden ser cumplidas igualmente
bate democrático. Las discusiones políticas y por los titulares de derechos fundamentales
las decisiones políticas requieren información (BVerGE 38, 281-302). Por tanto, el trabajo
y una orientación ético-política. El ejercicio de educación política está constitucionalmen-
responsable de la libertad no es posible sin te limitado por el principio de subsidiariedad.
educación para la libertad. La educación po-
lítica es, por tanto, la contraparte necesaria de El mandato educativo que el Estado puede
la libertad política. realizar por sí mismo se limita, por tanto, al
consenso social básico, general, cuyo núcleo
De ello se desprende que el Estado libre tiene está constituido por los valores básicos de
un mandato educativo político a través de la la constitución. Sin embargo, vive de la cul-
constitución. Sin embargo, su jurisdicción no tura política, cuyas raíces sociales y políticas
es exclusiva ni integral. El Estado libre no es escapan a su violencia. La educación política
Un amor
una dictadura educativa; sólo tiene una com- asegura la existencia continuada de una comu-
desenfrenado petencia educativa subsidiaria en relación con nidad plural y libre. El Estado no viola su de-
por la libertad
los titulares de los derechos fundamentales, ber de neutralidad si apoya económicamente
Antología de la
historia política quienes se forman en libre autodeterminación la labor educativa de los titulares de derechos
de Bolivia
(1825-2020)
y comunicación abierta entre sí. El Estado fundamentales. El Estado puede apoyar finan-
debe respetar la autonomía de los ciudadanos cieramente lo que no se le permite hacer por
94 y las fuerzas sociales, que está protegida por sí mismo y estimular lo que no puede forzar.
Tomo I
1825-1952
Anexo II
Índice de Abreviaturas y Acrónimos
Cuando nacen las sociedades, los jefes Se dio continuidad, por conveniencia y por co-
de un Estado son los que dan a éste su carácter Primer periodo
modidad, a la estructura colonial en varios ám-
especial. Después, este carácter especial Bajo la
es el que forma a los jefes de Estado. bitos: en materia de tributos, organización sub- Constitución de
Montesquieu1 nacional (alcaldías y corregimientos), minería y 1826 que organiza
y constituye la
la estructura agraria entre otros. En la nueva nación boliviana
(1825-1880)
República de Bolivia tres pilares fundamentales
E
l primer periodo de la “Antología de cimentaban su organización:3 Primero el “Acta 99
la Historia Política de Bolivia” abarca de la Independencia” firmada el 6 de agosto de
desde la fundación de la República de 1825; segundo, la “Ley Constitucional de Di-
Bolivia (Bolívar) el 6 de agosto de 1825 has- visión de Poderes” del 13 de agosto del mismo La organización
de la nación
ta las nuevas corrientes ideológicas, políticas año; y tercero, la “Ley de Organización Provi- boliviana bajo
la Constitución
y económicas plasmadas en el proceso cons- sional del Poder Ejecutivo” del 19 de junio de de 1826
titucional entre 1878 y 1880. Cada aporte de 1826, los cuales constituyen el primer cuerpo (1825-1880)
los autores en este capítulo tiene como marcó normativo constitucional en Bolivia.
principal las líneas básicas firmadas en 1826,
hace casi dos siglos.
1. Acta de la Independencia
La institucionalidad en la nueva América Latina
después de las guerras contra España se cons- El Decreto de convocatoria a Asamblea De-
truyó en torno a las actas de la Independencia.2 liberante de las Provincias Altoperuanas fue
emitido el 9 de febrero de 1825 y tenía por ob-
jetivo definir el futuro de las cinco provincias
1 Charles Louis de Secondat, Señor de la Brède y Ba-
rón de Montesquieu.
2 Que redactaban los letrados: Doctores en Leyes bisagra importante para la formación de la institu-
(Derecho Civil) y en Cánones (Derecho Eclesiás- cionalidad y la construcción de la nueva normativa.
tico) que egresaron de las universidades virreinales 3 Colección oficial de leyes (1826). “Colección oficial
como la Universidad de San Marcos en Lima o la de leyes, decretos, órdenes, de la República Boli-
Universidad San Francisco Xavier en Chuquisaca. viana. Años 1825 y 1826, que se han expedido para
La abogacía entonces era una pieza clave en la so- el régimen de la República boliviana: Volumen 1”.
ciedad colonial y se constituía importante para la La Paz. Imprenta del Colegio de Artes. Enero de
nueva estructura normativa republicana, en una 1826. Consultado el 10.01.2021, de la: Harvard
América Latina mayoritariamente iletrada, eran la Law School Library.
que la componían la antigua Audiencia de – Unirse a las Provincias Unidas de La Plata,
Charcas (Charcas o La Plata, La Paz, Santa antiguo virreinato de La Plata (Argentina).
Cruz, Potosí y Cochabamba). – Crear un nuevo Estado independiente y au-
tónomo.
La Asamblea Deliberante se inauguró el 10 de
julio de 1825 en la Capilla jesuita de la Universi- El “Acta de Independencia de las provincias Al-
dad Mayor de San Francisco Xavier de la ciudad toperuanas”4 fue sancionada el 6 de agosto de
de Charcas, donde se aprobaron las credenciales 1825 y fue redactada por el presidente del Con-
de 39 representantes (que habían llegado de La greso, representante por Charcas José Mariano
Paz, Cochabamba y Potosí y se encontraban au- Serrano. Se constituye en el documento de crea-
sentes los representantes de la provincia Santa ción de la República de Bolivia y fue adoptada
Cruz) y el Reglamento de Debates. En las sesio- en la sesión del 6 de agosto de 1825 por la Asam-
nes de Asamblea General deliberante se debatió blea Deliberante del Alto Perú. La creación de
sobre los siguientes proyectos: la nueva República, nombrada inicialmente “de
Bolívar” contradecía los deseos iniciales del Li-
– Mantener la anexión a Perú, antiguo virrei- bertador Simón Bolívar, pero fue una decisión
nato de Lima. respetada por Lima y por Buenos Aires.
Un amor
desenfrenado
por la libertad
Acta de Independencia de las provincias altoperuanas
Antología de la
historia política
de Bolivia Lanzándose furioso el León de Iberia desde las columnas de Hércules hasta los imperios de Moctezu-
(1825-2020)
ma, y de Atahuallpa, es por muchas centurias que ha despedazado el desgraciado cuerpo de América y
nutridosé con su sustancia. Todos los Estados del continente pueden mostrar al mundo sus profundas
100
heridas para comprobar el dilaceramiento que sufrieron; pero el Alto-Perú aun las tiene más enormes,
y la sangre que vierten hasta el día, es el monumento más auténtico de la ferocidad de aquel monstruo.
Tomo I Después de diez y seis años que la América ha sido un campo de batalla, y que en toda su estensión los
1825-1952 gritos de libertad, repetidos por sus hijos, se han encontrado los de los unos con los de los otros, sin
quedar un ángulo en toda la tierra, donde este sagrado nombre no hubiese sido el encanto del ame-
ricano, y la rabia del español; después que en tan dilatada lucha las naciones del mundo han recibido
diferentes informaciones de la justicia y legalidad con que las rejiones todas de América han apelado,
para salvarse, á la santa insurrección; cuando los genios de Junín y de Ayacucho han purgado la tierra
de la raza de los déspotas; cuando en fin grandes naciones han reconocido ya la Independencia de Mé-
jico, Colombia y Buenos Aires, cuyas quejas y agravios no han sido superiores á las del Alto Perú; sería
superfluo; presentar un nuevo manifiesto justificativo de la resolución que tomamos.
El mundo sabe que el Alto-Perú ha sido, en el continente de América, el ara adonde se vertió la prime-
ra sangre de los libres, y la tierra donde ecsiste la tumba del último de los tiranos: que Charcas, Potosí,
Cochabamba, La Paz y Santa Cruz, han hecho constantes esfuerzos para sacudir el yugo peninsular;
y que la irretractibilidad de sus votos contra el dominio español, su heroica oposición, han detenido
mil veces las impetuosas marchas del enemigo sobre rejiones que, sin esto, habrían sido encadenadas,
o salvándose sólo con el último, y mas prodigioso de los esfuerzos.
El mundo sabe también, que colocados en el corazón del continente, destituidos de armas, y de toda
clase de elementos de guerra, sin las proporciones que los otros estados para obtenerlos en las naciones
de ultramar, los altoperuanos han abatido el estandarte de los déspotas de Aroma y la Florida, en Chi-
quitos, Tarabuco, Cinti, Tumusla en los valles de Sicasica y Ay paye, y en otros puntos diferentes: que
el incendio bárbaro de mas de cien pueblos, el saqueo de las ciudades, cadalsos por cien os levantados
Cuando, pues, nos llega la vez de declarar nuestra Independencia de España, y decretar nuestro futuro
destino y un modo decoroso, legal y solemne, creemos llenar nuestro deber de respeto á las naciones
estranjeras, y de información consiguiente de las razones poderosas y justos principios impulsores de
nuestro conductor; reproduciendo cuando han publicado los manifiestos de los otros estados de Amé-
rica con respecto a la crueldad, injusticia, opresión y ninguna protección con que han sido tratados
por el gobierno español; pero si esto, y la seguridad con que protestamos á presencia del gran padre
del Universo, que ninguna región del continente de Colón ha sido tan tiranizada como el Alto Perú,
no bastase á persuadir nuestra justicia, apelaremos á la publicidad con que las legiones españolas, y sus
jefes más principales, han profanado los altares, atacado el dogma, han insultado el culto, al mismo
tiempo que el gabinete de Madrid ha fomentado, desde la conquista, la mas hórrida y destructora
superstición:
Les mostraremos un territorio con mas de trescientas leguas de extensión de norte A sur, y casi
otras tantas de este a oeste, con ríos navegables, con terrenos feraces, con todos los tesoros del reino
vegetal en las inmensas montañas de Yungas, Apolobamba, Yuracaré, Mojos y Chiquitos, poblado
Primer periodo
de los animales los mas preciosos y útiles para el sustento, recreo e industria del hombre, situado
donde existe el gran manantial de los metales que hacen la dicha del orbe, y le llenan de opulencia, Bajo la
Constitución de
con una población, en fin, superior a las que tienen las Repúblicas Argentina, y la de Chile; todo 1826 que organiza
esto les mostraríamos y les diríamos; ved que donde ha podido, existir un floreciente imperio, solo y constituye la
nación boliviana
aparece, bajo la torpe y desecante, mano de Iberia, el símbolo de la ignorancia, del fanatismo, de (1825-1880)
la esclavitud e ignominia, venid y ved, en una educación bárbara calculada para romper todos los
resortes del alma, en una agricultura agonizante guiada por sola rutina, en el monopolio escandaloso 101
del comercio, en el desplome e inutilización de nuestras más poderosas minas, por la barbarie del
poder español, en el cuidado con que en el siglo 19 se ha tratado de perpetuar entre nosotros solo
los conocimientos, artes y ciencias del siglo 18; La organización
de la nación
Venid, en fin, y si cuando contempláis a nuestros hermanos los indígenas hijos de del grande Manco boliviana bajo
la Constitución
Capac, no se cubren vuestros ojos de torrentes de lágrimas, viendo en ellos hombres los más desgracia- de 1826
dos, esclavos tan humillados, seres sacrificados a tantas clases de tormentos, ultrajes y penurias, diréis, (1825-1880)
que respecto de ellos parecerían los Ilotas ciudadanos de Esparta y hombres muy dichosos los Níjeros
Ojandalams del Indostan concluyendo con nosotros, que nada es tan justo como romper los inicuos
vínculos con que fuimos uncidos a la cruel España.
Nosotros habríamos también presentado al mundo una necesaria y grande manifestación de los só-
lidos principios con que después de las más graves, prolijas y detenidas meditaciones, hemos creído
interesar a nuestra dicha, no asociarnos ni a la República del Bajo Perú ni a la del Río de La Plata,
si los respetables congresos de una y otra, presididos de la sabiduría, desinterés y prudencia, no nos
hubiesen dejado en plena libertad para disponer de nuestra suerte. Pero cuando la ley del 9 de mayo
del uno, y el decreto de 23 de febrero del otro, muestran notoriamente un generoso y laudable des-
prendimiento, relativamente a nuestro futuro destino, y colocan en nuestras propias manos la libre y
espontánea decisión de lo que mejor conduzca a nuestra felicidad y gobierno; protestando a uno y otro
Estado eterno reconocimiento, junto con nuestra justa consideración, y ardientes votos de amistad,
paz y buena correspondencia hemos venido por unanimidad de sufragios en fijar la siguiente:
Declaración
La representación Soberana de las Provincias del alto Perú, profundamente penetrada del grandor
e inmenso peso de su responsabilidad pa con el Cielo, y la tierra, en el acto de pronunciar la suerte
futura de sus Comitentes, despojándose en las aras de la Justicia todo espíritu de parcialidad, interés
y miras privadas; habiendo implorado, llena de sumisión y respetuoso ardor, la paternal asistencia del
Hacedor Santo del orbe, y tranquila en lo íntimo de su conciencia por la buena fe, detención, mode-
ración, justicia y profundas meditaciones que presiden a la presente resolución, declara solemnemente
a nombre y absoluto poder de sus dignos representados: Que ha llegado el venturoso día en que los
inalterables y ardientes votos del Alto Perú, por emanciparse del poder injusto, opresor y miserable
del Rey Fernando VII, mil veces corroborados con la sangre de sus Hijos, consten con la solemnidad
y autenticidad que al presente, y que cese para con esta privilegiada región la condición degradante
de colonia de la España, junto con toda dependencia, tanto de ella, como de su actual y posteriores
monarcas: que en consecuencia, y siendo al mismo tiempo interesante a su dicha, no asociarse a nin-
guna de las Repúblicas vecinas, se erige en un Estado Soberano e Independiente de todas las naciones,
tanto del viejo como del nuevo mundo y los departamentos del Alto-Perú, firmes y unánimes en esta
tan justa y magnánima resolución, protestan a la faz de la tierra entera, que su voluntad, irrevocable
es gobernarse por sí mismas, y ser regidos por la constitución, leyes y autoridades que ellos propios se
diesen, y creyesen más conducentes a su futura felicidad en clase de nación.
Y el sostén inalterable de su santa religión católica, y de los sacrosantos derechos de honor, vida, liber-
tad, igualdad, propiedad y seguridad.
Y para la invariabilidad y firmeza de esta resolución, se ligan, vinculan y comprometen, por medio de
Un amor esta representación soberana, a sostenerla tan firme, constante y heroicamente, que en caso necesaria
desenfrenado
por la libertad sean consagrados con placer a su cumplimiento, defensa e inalterabilidad, la vida misma con los habe-
res, y cuanta hay caro para los hombres.
Antología de la
historia política
de Bolivia Imprimase comuníquese a quien corresponda para su publicación y circulación.
(1825-2020)
Dada en la Sala de sesiones en 6 de agosto de 1825, firmada de nuestra mano, y refrendada por nues-
102 tros diputados secretarios.
Tomo I
Diputación Diputación Diputación Diputación Diputación
1825-1952 por Charcas por Santa Cruz por La Paz por Potosí por Cochabamba
1. José Mariano Serrano, 8. Antonio Vicente 10. Eusebio Gutiérrez 22. Isidoro Trujillo 36. Dionisio de la Borda
Presidente Seoane
2. Ambrosio Mariano 9. Vicente Caballero 11. Fermín Eyzaguírre 23. José Antonio Pallares 37. Francisco Vidal
Hidalgo
3. Ángel Mariano Moscoso 12. Francisco Maria 24. José Eustaquio Gareca 38. José Manuel Pérez
Pinedo
4. Casimiro Olañeta 13. José Ballivián 25. José Ignacio Sanjinés, 39. José Manuel Tames
Secretario
5. Francisco Palazuelos 14. José Ignacio 26. José Mariano Enríquez 40. Manuel Caballo
Calderón y Sanjinés
6. José Maria Dalence 15. José María de Asín 27. Juan Manuel Montoya 41. Manuel Mariano
Centeno
7. Manuel María Urcullo 16. José Maria 28. Manuel Anselmo Tapia 42. Marcos Escudero
Mendizábal,
Vice-Presidente
17. José Miguel Lanza 29. Manuel Antonio Arellano 43. Mariano Mendes
18. Juan Manuel Velarde 30. Manuel Argote 44. Melchor Paz
19. Martín Cardón 31. Manuel José Calderón 45. Miguel José
Cabrera
20. Miguel Casimiro 32. Manuel Maria García 46. Miguel Vargas
Aparicio
21. Rafael Monje 33. Manuel Martín Cruz 47. Nicolás de Cabrera
34. Martiniano Vargas 48. Pedro Terrazas
35. Melchor Daza
Fuente: Facsimil tomado del original del Archivo y Biblioteca Nacionales de Bolivia.
2. Primera ley constitucional: División Antonio José de Sucre promulgó la “Ley de
de poderes del 13 de agosto de 1825 Organización provisional del Poder Ejecuti-
vo” en Chuquisaca el 19 de junio de 1826. Esta
A siete días de declarada el “Acta de la Indepen- norma consta de 25 artículos: la inviolabilidad
dencia” de la nueva República urgió la necesidad del Presidente de la Nación; sus atribuciones;
de establecer un marco constitucional que esta- la potestad reglamentaria; el derecho a oponer
blezca la forma de gobierno, su división político veto; la conducción de las relaciones interesta-
administrativa y la identificación de la división tales, su salario anual.
de poderes que darían pie a su inicial estructura
institucional. Para ello, José María Mendizábal, También legisla el mando del Ejército; la de-
Eusebio Gutiérrez y Manuel María Urcullo ela- fensa de la integridad territorial estatal; nom-
boraron un Proyecto de Constitución con siete bramiento de funcionarios civiles y militares,
artículos de los que se aprobaron tres: el prime- como también el nombramiento de los ma-
ro, decretaba tener un gobierno representativo gistrados; sus relaciones con la iglesia, cum-
republicano, segundo, un gobierno unitario y plimiento de los fallos judiciales, jurisdicción
tercero, un gobierno dividido en tres poderes: y competencia; separación de ministros del
legislativo, ejecutivo y judicial. Poder Ejecutivo.
Primer periodo
El poder Ejecutivo por primera vez se organi-
Bajo la
3. Ley de Organización provisional zó a partir de tres ministros del despacho de Constitución de
1826 que organiza
del Poder Ejecutivo la presidencia para el servicio de los diferentes y constituye la
nación boliviana
ramos de la administración: uno del interior, (1825-1880)
Después de crearse los tres poderes (Legisla- a cuyo cargo estarían también las relaciones
tivo, Ejecutivo, y Judiciario) de la nueva Re- exteriores: otro de hacienda, y finalmente de 103
pública, la administración gubernamental de guerra.
La organización
de la nación
boliviana bajo
Primera ley constitucional: División de poderes del 13 de agosto de 1825 la Constitución
de 1826
(1825-1880)
La Asamblea General de la República de Bolívar después del solemne pronunciamiento del 6 del
presente, que erige el Alto Perú en un Estado Libre e Independiente, ha creido interesante decretar,
y decreta lo que sigue:
Fuente: Repositorio de la Biblioteca de la Universidad Mayor de San Andrés (UMSA), sección Folletería.
Bolivia: Ley de 19 de junio de 1826
El congreso Constituyente de la República de Bolivia, deseando fijar los límites de la potestad Ejecu-
tiva, que por ley de 26 de mayo último, ha confiado al Gran Mariscal de Ayacucho, Antonio José de
Sucre, y determinar con toda individualidad las facultades que ha de ejercer en su desempeño, decreta
lo siguiente:
Artículo 1°.- La persona que ejerce el poder Ejecutivo, tendrá la denominación de Presidente de la
República; su tratamiento será el de Excelencia.
Artículo 3°.- Como jefe supremo encargado de la administración jeneral de la República, está au-
torizado para tomar por sí todas las medidas conducentes á la conservación del órden público en lo
interior, y á la seguridad en lo esterior.
Artículo 4°.- Hará ejecutar las leyes del congreso constituyente, y sus decretos, sirviéndose de esta
fórmula: ejecútese.
Artículo 5°.- Para la ejecución de las leyes, podrá espedir los decretos, reglamentos é instrucciones
Un amor que crea convenientes.
desenfrenado
por la libertad Artículo 6°.- Las leyes que á su juicio presenten inconvenientes en su ejecución, las devolverá al
Antología de la
congreso, dentro de diez días, con sus observaciones y reparos; pero si discutidas segunda vez se san-
historia política cionaren, les dará el pase, según la fórmula prevenida en el artículo 4°.
de Bolivia
(1825-2020)
Artículo 7°.- Podrá presentar los proyectos de ley que crea necesarios al bien y prosperidad de la nación.
104 Artículo 8°.- Celebrará los tratados de paz, alianza, amistad, treguas, neutralidad, comercio y cuales-
quier otros, con todos los gobiernos estranjeros; pero no prestará la ratificación sino después que el
congreso los haya aprobado.
Tomo I
1825-1952 Artículo 9°.- Podrá hacer la guerra en caso de pronta invasión, dando después cuenta documentada al
congreso; y en este caso está facultado á tomar, por sí solo, todas las medidas estraordinarias que estén
fuera de la naturaleza de su poder; pero no la declarará por parte de la República, sin previo consenti-
miento de la representación nacional.
Artículo 10°.- o 11° Tendrá el mando supremo de las fuerzas permanentes de la República, y de la
milicia nacional: es esclusivamente encargado de la dirección de todas.
Artículo 12°.- Será de su atribución nombrar los jenerales de los ejércitos, y proveer los demás des-
tinos militares.
Artículo 13°.- Cuidará de que la justicia se administre pronta y ecsactamente por todos los tribunales
de la República, y que sus sentencias se cumplan y ejecuten.
Artículo 14°.- No podrá conocer en negocio alguno judicial, avocarse causas pendientes, ni mandar
abrir juicios fenecidos contra lo prevenido por las leyes.
Artículo 15°.- Nombrará por sí los majistrados de todos los tribunales, y demás jueces inferiores.
Artículo 16°.- Presentará los arzobispos y obispos, y proveerá los empleos de la lista civil y eclesiás-
tica, por solo su autoridad.
Artículo 17°.- Podrá remover á cualquier empleado de la nación, por ineptitud ó delito en razón de su
oficio; más á los majistrados y jueces sólo podrá suspenderlos con causa bastante, pasando la sumaria
respectiva al tribunal competente, dentro del último término de tres meses.
Artículo 18°.- El Presidente de la República no puede privar á ningún individuo de su libertad, ni
imponerle pena alguna: si la seguridad y tranquilidad de la República ecsigieren el arresto de alguna
persona, espedirá órdenes al efecto, con tal que ponga al reo, con la sumaria que se haya formado, á
disposición del juez respectivo, en el término de tres días.
Artículo 19°.- No podrá tomar la propiedad de ningún individuo, ni turbarle en la posesión y uso de
ella; más si fuese necesaria para un objeto de conocida ventaja común, podrá hacerlo indemnizando su
valor á justa tasación.
Artículo 20°.- Tendrá tres ministros del despacho para el servicio de los diferentes ramos de la admi-
nistración: uno del interior, á cuyo cargo estarán también las relaciones esteriores: otro de hacienda, y
otro de la guerra. Las atribuciones de los ministros, y la organización de sus oficinas, serán detalladas
por una ley especial.
Artículo 21°.- El Presidente de la República puede á su árbitro, nombrar y separar libremente á los
ministros del despacho.
Artículo 22°.- En caso de ausencia ó enfermedad del Presidente de la República, el gobierno recaerá
en los ministros, formando un consejo presidido por el más antiguo: lo mismo sucederá en caso de
muerte, mientras el congreso constituyente nombre un sucesor.
Primer periodo
Artículo 23°.- Los ministros son únicamente responsables de los procedimientos del gobierno, sea
que le sirvan como tales; ó que formen el consejo prevenido en los casos del artículo anterior. Bajo la
Constitución de
1826 que organiza
Artículo 24°.- El Presidente de la República gozará el sueldo al respecto de treinta mil pesos anuales y constituye la
nación boliviana
sobre los fondos del Estado. (1825-1880)
Artículo 25°.- Este sueldo empezará á correr desde 1° de enero del presente año.
105
Comuníquese al Presidente de la República, para su cumplimiento y publicación. Dada en la sala de
sesiones de Chuquisaca á 17 de junio de 1826.-
La organización
Casimiro Olañeta, presidente.- José Ignacio de Sanjinés, diputado secretario.- Manuel Molina, de la nación
diputado secretario.- boliviana bajo
la Constitución
de 1826
Chuquisaca á 19 de junio de 1826.- 16° Ejecútese.- (1825-1880)
Fuente: Legislación Boliviana - Compendio de leyes de 1825-2007, CD elaborado por la biblioteca y el archivo histórico del Honorable
Congreso Nacional.
4. Congreso General Constituyente pedida a Bolívar y que había sido remitida por
de 1826 éste, con la misma fecha en que se inauguró
la Asamblea (Ordoñez López y Crespo 1912).
De acuerdo a lo acordado en la Asamblea De-
liberante, Simón Bolívar convocó a Congre- El mencionado proyecto fue sometido a la
so (Constituyente) por Decreto de 26 de no- Comisión de Constitución, el cual obtuvo un
viembre de 1825, reuniéndose el 25 de mayo dictamen favorable, y después de ser suficien-
de 1826 bajo la presidencia del Dr. Casimiro temente discutido el 6 de noviembre de 1826,
Olañeta, en Chuquisaca. Así se reunió la se- la asamblea firmó la primera constitución de la
gunda Asamblea Nacional que tenía el objetivo República, que fue promulgada por el general
de deliberar sobre el proyecto de constitución Sucre el 19 del mismo mes.
Las principales disposiciones de aquella ley Sin embargo, si bien la constitución de 1826
fundamental eran las siguientes. Proclamación encerraba disposiciones democráticas, llevaba
de la República unitaria; división de los pode- en si tendencias a la monarquía, por la designa-
res del Estado en electoral, legislativo, ejecu- ción con carácter vitalicio del presidente; dichos
tivo y judicial; subdivisiones del legislativo en principios eran opuestos al espíritu republicano
cámara de tribunos, de senadores y de censo- de la época y que debía ser la causa de su pronta
res; la presidencia del poder Ejecutivo se cons- destrucción. Durante sus sesiones, el congreso
tituía con carácter vitalicio, inviolable y con un nombró presidente de Bolivia al General Sucre,
derecho a que el encargado del mando elija a quien admitió el mando solo por dos años.
su sucesor y un Vicepresidente designado por
el Presidente. Tres ministros encargados de
la administración pública y del poder Judicial Bibliografía
organizados en torno a la corte suprema, las
cortes superiores y los juzgados de letras. Colección oficial de leyes (1826). “Colección
oficial de leyes, decretos, órdenes, de la Repú-
Para ser ciudadano se requería ser boliviano, blica Boliviana. Años 1825 y 1826, que se han
ser casado o mayor de 21 años, saber leer y expedido para el régimen de la República boli-
Un amor
escribir, tener algún empleo o industria o pro- viana: Volumen 1”. La Paz. Imprenta del Co-
desenfrenado fesar alguna ciencia o arte, sin sujeción a otro legio de Artes. Enero de 1826. Consultado el
por la libertad
en clase de sirviente doméstico. Esta última 10.01.2021, de la: Harvard Law School Library.
Antología de la
historia política previsión, significó la exclusión de la mayoría
de Bolivia
(1825-2020)
de la población indígena. Legislación Boliviana - Compendio de leyes
de 1825-2007, CD elaborado por la Biblioteca
106 Además, como Bolívar había omitido consig- y el Archivo Histórico del Honorable Con-
nar en su proyecto de constitución lo relativo greso Nacional.
al culto oficial, la Asamblea, creyendo encon-
Tomo I trar una deficiencia, impuso como precepto Ordoñez López, Manuel, y Luis Crespo. Bos-
1825-1952
principal de la nueva carta el reconocimien- quejo de la Historia de Bolivia. La Paz: Impren-
to de la religión católica, apostólica y romana ta y Litografía Boliviana - Hugo Heitmann,
con exclusión de todo otro culto público. 1912.
Gráfico 1
Temas y fechas importantes
Mediante Decreto,
Simón Bolívar llega se disuelve la
La Asamblea
a Chuquisaca e Asamblea General
Deliberante decide
20.08.1825 solicitar a Simón 03.09.1825 inicia el Proyecto 06.10.1825 Deliberante y se
convoca a una
Bolívar una de la Constitución
Asamblea
Constitución Constituyente
para 1826
El Presidente
La Asamblea Antonio José de
Constituyente Sucre promulga
06.11.1826 sanciona la 06.11.1826 la primera
Constitución Constitución
boliviana
La Comisión
de Negocios
Constitucionales
presenta su
Desde Lima, informe y la
El Proyecto de la
Bolívar envía el Asamblea
25.05.1826 Proyecto de la 14.06.1826 Constitución llega a 12.07.1826
la nueva República Constituyente
Constitución reunida en
Chuquisaca inicia
la discusión del
Proyecto de la
Constitución
Tabla 1
Las Constituciones entre 1826 y 1880
Primer periodo
Resumen jurisdicción de la Audiencia de Charcas, hu-
Bajo la
biera sido separado de un virreinato y luego de Constitución de
B
1826 que organiza
olivia obtuvo su Independencia en 1825, otro en cuestión de medio siglo (1776-1825). y constituye la
nación boliviana
en un año que muchos otros países en Sus elites estaban relativamente unificadas en (1825-1880)
el hemisferio ya habían conseguido des- este empeño y de ahí que el apoyo del co-
hacerse de la dominación europea. ¿Cuál era mandante militar de las fuerzas patriotas, An- 109
la situación de Bolivia en comparación de los tonio José de Sucre y la victoria abrumadora
otros países recién liberados? El ensayo com- de su máximo líder, Simón Bolívar, llevaron a
para la situación económica, social y política la creación de la República de Bolívar. El país La fundación de
Bolivia
entre Bolivia y los otros Estados, enfocándose mismo estaba en ruinas después de 16 largos en el contexto
latinoamericano,
en las naciones vecinas a Bolivia, pero pasan- años de guerras por la Independencia, pero 1825-1830
do también por las unidades políticas de todo en poco tiempo pudo reactivar su economía.
el hemisferio. Concluye que, a pesar de algu- Alentada por sus primeros administradores
nos problemas estructurales, Bolivia estaba en competentes, Bolivia, a pesar de sus orígenes
una posición privilegiada en los primeros años inestables, podía presumir de ser uno de los
después de la Independencia por sus recursos países económicamente más exitosos y pode-
naturales y humanos y el manejo competente rosos dentro del contexto latinoamericano.
de la mayoría de sus primeros líderes.
Para comprender la situación de Bolivia en un
Palabras clave: Independencia, relaciones in- marco internacional, este ensayo examinará
ternacionales, Perú, Brasil, Provincias Unidas, primero brevemente las fortalezas y debilida-
Chile, Colombia, México, economía, ciudada- des del propio país. En la segunda parte, com-
nía, indígenas. pararé a Bolivia con las nuevas naciones que
la rodearon. La siguiente sección examinará
el marco más amplio de América del Sur en
Introducción su conjunto, con énfasis en la Gran Colombia,
los Estados Unidos de México y los Estados
Bolivia nació casi accidentalmente, después Unidos de América. La última sección discu-
de que su territorio, enmarcado dentro de la tirá el papel de Gran Bretaña y comparará a
Bolivia con el resto de las nuevas naciones que estaba relativamente bien distribuida en sus
surgieron como resultado de la descoloniza- regiones centrales, que eran los valles de la
ción del Hemisferio Occidental. sierra andina, como en Chuquisaca y Cocha-
bamba, al este.
Además, grandes regiones de la Amazonía fue- jeron la producción. Sin embargo, gran parte
ra de las misiones jesuíticas que en los mapas de esto, especialmente la escasez de azogue, se
formaban parte de la Audiencia de Charcas resolvió poco después. Los propietarios de las
pero que nunca habían formado parte del im- minas resolvieron la falta de capital y la esca-
perio español, quedaron fuera del alcance de sez de mano de obra esencialmente mediante
las nuevas autoridades nacionales. Las fronte- la coparticipación de la producción minera,
ras orientales de Bolivia eran, por mucho, las dejando que los trabajadores se quedaran con
más imaginarias en el sentido de que no repre- la mitad del mineral que recuperaban de las
sentaban el control estatal.
3 Ver J. Valerie Fifer Bolivia: Land, Location, and Poli-
De hecho, el vacío de poder creado a través tics Since 1825 (Cambridge: Cambridge University
Press, 1972.); para el contexto más allá de Bolivia,
de las guerras de Independencia se sintió más
ver Erick D. Langer, “La frontera oriental de los
agudamente en el este, aunque esto era co- Andes y las fronteras en América Latina. Un análi-
mún en todas las nuevas naciones de América sis comparativo. Siglos XIX y xx,” Las fronteras his-
del Sur; el centro del continente permaneció panocriollas del mundo indígena latinoamericano en los
siglos XVIII-XIX: Un estudio comparativo, comps. Raúl
firmemente en manos de sus pueblos indíge-
J. Mandrini and Carlos Paz (Neuquén: Universidad
nas que no reconocían ningún control estatal Nacional del Comahue, 2003), 33-62.
y, en la mayoría de los casos, estos pueblos 4 Pentland, Informe.
minas.5 Por lo tanto, la minería se revitalizó, para obtener los productos que necesitaban.
aunque no al nivel del período colonial tardío. Muchas de estas comunidades también esta-
ban conectadas a redes comerciales, en parte
El gobierno de Antonio José de Sucre estaba debido a la continuación de los pagos de tri-
ansioso por firmar contratos con los inversio- butos que hicieron necesaria la monetización
nistas británicos, pero la falta de organización de una parte de sus productos para pagar el
de las empresas mineras y la dificultad para impuesto por cabeza. En muchos sectores del
determinar la propiedad de las minas obstacu- país, los miembros de la comunidad también
lizaron a estas empresas. La caída de la Bol- fueron los principales transportistas de mer-
sa de Londres de 1825, causada en gran parte cancías con llamas, como en la región del lago
por demasiada inversión especulativa con poco Poopó de Oruro. Los miembros de las comu-
respaldo de capital en los países hispanoameri- nidades indígenas proporcionaron alimentos
canos recién independizados, cortó definitiva- a las ciudades y los campamentos mineros.
mente las inversiones británicas. Sin embargo, Trabajaban y eran dueños de minas de plata.
la minería continuó, pero sin inversión extran- Aunque la mayoría de los pueblos indígenas
jera.6 Esto ocurrió a pesar de que la mita, el andinos se enfocaban en el trabajo de cultivos,
sistema de trabajo forzoso en el que las comu- su larga conexión con la minería y el Estado
Un amor
nidades indígenas andinas tenían que partici- los había conectado de manera segura a redes
desenfrenado par para proporcionar mineros a Potosí, fue comerciales donde participaban activamente
por la libertad
abolida con el advenimiento de la República. de la economía en general.7
Antología de la
historia política
de Bolivia
(1825-2020)
La agricultura, aunque devastada en parte por Las comunidades indígenas andinas propor-
las guerras de Independencia, regresó con re- cionaron la base fiscal del Estado a través del
112 lativa rapidez. La cruel guerra civil, por lo que pago de tributos. Aunque Simón Bolívar abo-
sabemos, no destruyó la organización social lió las comunidades indígenas mientras estaba
en el campo, facilitando que la gran mayoría en el Bajo Perú en 1824 en la cúspide del pro-
Tomo I de la población rural recuperara sus medios de ceso de la Independencia, este decreto nunca
1825-1952
vida. Como se dijo anteriormente, las comu- se implementó por completo en el Alto Perú.
nidades campesinas indígenas dominaban el Las necesidades financieras del Estado eran
campo. En muchos casos controlaban muchos simplemente demasiado grandes. Un intento
niveles ecológicos diferentes que les permitían de gravar a casi todos los ciudadanos, indíge-
producir una dieta variada o tenían relaciones nas o no, fracasó en 1825. Para 1826, el go-
de trueque con parientes o parientes ficticios bierno patriota recibió nuevamente pagos de
tributos de manera temporal y el presidente
5 Tristan Platt, “Caccheo y minería mediana en las Antonio José de Sucre en 1827 firmó una ley
Provincias de Potosí: Lípez y Porco (1830-1850). que mantenía los pagos de tributos en su lu-
Estudios Atacameños (2014) 48: 85-118.
gar. Esto proporcionó una fuente de ingresos
6 Pentland, 65-97; Guillermo Ovando Sanz, “Bri-
tish Interests in Potosí,”, Hispanic American Histo-
rical Review 45:1 (February, 1965), 64-87; Claudio
Veliz, “Egaña, Lambert, and the Chilean Mining 7 Erick D. Langer, “From Prosperity to Poverty:
Associations of 1825.” Hispanic American Historical Andeans in the Nineteenth Century,” Hemispheric
Review 55, no. 4 (1975): 637-63; Antonio Mitre, Sovereignties: Native Identity and Agency in the An-
Los patriarcas de la plata: estructura socioeconómica de des, Mesoamerica, and Canada, Miléna Santoro and
la minería boliviana en el siglo XIX (Lima: Instituto Erick D. Langer, eds. (Lincoln: University of Ne-
de Estudios Peruanos, 1981), 78-85. Otro viajero braska Press, 2018), 151-181; y del mismo autor,
inglés fue Edmond Temple, que también dejó un “Bringing the Economic Back In: Andean Indians
escrito muy valioso, Travels in Various Parts of Peru: and the Construction of the Nation-State in Nine-
Including a Year’s Residence in Potosi (London: Col- teenth-Century Bolivia,” Journal of Latin American
burn and Bentley, 1830). Studies, 41 (August 2009): 527-551.
significativa y, aún más importante, estable el consumo en toda la Cordillera de los An-
para el Estado durante gran parte del siglo des. También había regiones de producción
XIX.8 Aunque claramente discriminatorio, de coca más pequeñas en Cochabamba, en la
este legado colonial hizo posible una peque- región de Totora.10 A pesar de esta especializa-
ña burocracia estatal y la continuidad incluso ción en productos comerciales, la gran mayo-
frente a los trastornos políticos. Las comuni- ría de la agricultura en las zonas centrales de
dades indígenas pudieron continuar con sus Bolivia era una mezcla de producción campe-
actividades y muchas pudieron prosperar a sina y comercial. El paisaje rural incluía tanto
pesar del tributo.9 la producción para el mercado como la sub-
sistencia en una combinación funcional que se
Este fue también el caso de los habitantes ru- había perfeccionado durante el auge minero
rales no indígenas, que vivían principalmente del período colonial.
en los valles al este de las altas montañas. Al-
gunos eran arrieros, transportando mercan- El comercio reflejaba la herencia minera de la
cías con sus burros o mulas. En el valle de Co- región y estaba bien articulado, desde los prin-
chabamba, densamente poblado, cultivaban cipales mercados y sistemas de distribución.
maíz y competían con éxito con las grandes Los dos principales ejes comerciales de la re-
haciendas para abastecer los mercados urba- gión fueron La Paz al norte y Potosí al sur. La Primer periodo
nos. Es probable que estas personas, ya fueran Paz mantuvo una posición privilegiada por-
Bajo la
productores de maíz y ají en la provincia de que era el centro urbano más grande del país Constitución de
1826 que organiza
Tomina o productores de maíz en Cochabam- y estaba rodeada de comunidades indígenas y constituye la
nación boliviana
ba, tuvieran un pie en los mercados y cubrie- en el próspero altiplano y alrededor del lago (1825-1880)
ran sus necesidades de subsistencia a través de Titicaca. También estaba cerca de la frontera
la producción de sus propios alimentos. peruana, así como de la costa del Pacífico, con 113
el puerto de Arica (en manos peruanas) a solo
Existían focos de regiones agrícolas en su ma- unos días en mula.
yoría comerciales como el Valle de Cinti, que La fundación de
Bolivia
había abastecido a la ciudad de Potosí con sin- El otro gran núcleo comercial fue Potosí. Aun- en el contexto
latinoamericano,
gani y vino desde la apertura del centro mine- que solo una sombra de su antigua gloria, Poto- 1825-1830
ro bajo los españoles. Otros lugares como ese sí se convirtió en la residencia de las principales
existían cerca de la mayoría de las ciudades, firmas comerciales extranjeras. La infraestruc-
como las haciendas a lo largo del río Cachi- tura vial construida para abastecer al gran cen-
mayo cerca de Sucre, o los valles cuesta abajo tro minero se mantuvo intacta tras la guerra y
desde La Paz, a lo largo del río Choqueyapu.
La otra región que se comercializó bien fue el 10 Ver Esther Aillón Soria y María A. Kirigin. San Pe-
área de Yungas en La Paz, donde las haciendas dro: Testigo de los tiempos: Por la ruta del singani en
Bolivia, siglos XVI-XXI (Sucre: Archivo y Biblioteca
y comunidades producían hoja de coca para
Nacionales, 2013); Pedro Ramírez del Aguila, Noti-
cias políticas de Indias y relación descriptiva de la Ciudad
de La Plata Metropoli de las Provincias de las Charcas,
8 Nicolás Sánchez-Albornoz, Indios y tributos en el tr. Jaime Urioste Arana (Sucre: Imprenta Universi-
Alto Perú (Lima: Instituto de Estudios Peruanos, taria, 1978), 19; Alcide D’Orbigny. Viaje a la Améri-
1978), 192; también ver Jorge Ovando, Sanz, El ca meridional, t. 3 (La Paz, Bolivia: Ambassade de
tributo indígena en las finanzas bolivianas del siglo XIX France en Bolivie, 2002), 1092-1093; Herbert S.
(La Paz: Comité Ejecutivo de la Univ. Boliviana, Klein, Haciendas and Ayllus: Rural Society in the Bo-
1985) y Marta Irurozqui, A bala, piedra y palo: La livian Andes in the Eighteenth and Nineteenth Centu-
construcción de la ciudadanía política en Bolivia, 1826- ries (Stanford: Stanford Univ. Press, 1993); Waldo
1952 (Sevilla: Diputación Provincial de Sevilla, Soria Galvarro y Andrés Novillo Villarroel, Totora:
2000). Rasgos históricos sobre la Provincia de Totora (Cocha-
9 Langer, “From Prosperity to Poverty”. bamba: M & C Editores, 1998).
la relativa cercanía de Potosí al nuevo puerto También se extendieron algunas produccio-
de Lamar o Cobija, que Antonio José de Su- nes del período colonial. Las más importan-
cre y su sucesor, Andrés de Santa Cruz habían tes fueron las fábricas textiles de Cochabam-
promovido cuando los peruanos se negaron a ba. Como señaló Joseph Pentland, el algodón
canjear Arica por otras provincias bolivianas, provenía de los valles costeros de Tacna en
también significó que para las empresas mer- Perú, de donde era llevado a Paria, en Oruro.
cantiles éste era el lugar más estratégico cerca Allí, comerciantes y dueños de fábricas textiles
de los distritos mineros de plata del país. de Cochabamba compraban la fibra y la lleva-
ban a su región para su manufactura.13 Lo que
Más allá de eso existían las ciudades de Cocha- Pentland no expuso fue que los miembros de
bamba, Sucre, Oruro y pueblos como Tupiza y las comunidades indígena de la región de Oru-
Tarija en el sur hasta ciudades aún más peque- ro fueron quienes compraban y transportaban
ñas y en el campo que se abastecían a través de el algodón a Paria, formando así una parte
una densa red de comercio. Además, la espe- esencial de este circuito. Luego, los comer-
cialización regional en productos fue bastante ciantes vendían la tela en Bolivia y también
marcada. Así, la producción de coca de Yungas en Perú. Otros centros de manufactura, más
terminó en los tambos de La Paz, donde los pequeños y rústicos, existían en otros lugares,
Un amor
comerciantes indígenas de Challapata distri- como en Vitichi, al sur de Potosí, donde los
desenfrenado buían las hojas secas de coca en Oruro, Potosí, establecimientos producían botas de cuero,
por la libertad
Sucre, e incluso en el extremo sur, en Tupiza. morrales y otros productos para el ejército y
Antología de la
historia política Esta especialización regional se extendió más bienes similares, aprovechando la gran canti-
de Bolivia
(1825-2020)
allá de las nuevas fronteras y abarcó partes del dad de cabras de la zona.14
sur de Perú y el norte de Argentina también.11
114 Un área en la que Bolivia sufrió, al igual que
En otras palabras, el sistema comercial que los otros países nacientes de Hispanoamérica,
había sido heredado del período colonial to- fue la deuda. Sin embargo, se trataba solo de
Tomo I davía funcionaba relativamente bien, aunque deuda interna, dividida en tres categorías. Una
1825-1952
la presencia de comerciantes de países distin- fue debido al dinero que la legislatura entre-
tos a España, como Francia, Gran Bretaña y el gó a las tropas colombianas que habían traído
norte de Argentina, con un puñado de bolivia- Bolívar y Sucre. La legislatura aprobó una ley,
nos, ahora dominaba el mercado mayorista y entregando un millón de pesos a los líderes y
comercios minoristas.12 sus tropas en agradecimiento por su servicio
en la liberación del país. Además, el Estado
11 Erick D. Langer, “Género y comercio a mediados
reconoció la deuda a pagar a las víctimas de
del siglo XIX en Bolivia: El caso de Antonia Lojo, guerra y la deuda de la época española, prin-
una acaudalada mujer indígena en Challapata,” Ar- cipalmente por censos eclesiásticos. El Esta-
chivo y Biblioteca Nacionales de Bolivia Anuario 2002
do entregó certificados que podían canjearse
(Sucre: Talleres Gráficos “La Gaviota”, 2002),
107-127; 1865:73 Archivo Notarial de Tupiza No- por tierras estatales. Algunas elites (y oficia-
taria No. 1, Gunnar Valda, Notario, fs. 290v-304. les del ejército colombiano) compraron estos
Para la especialización más allá de las fronteras,
ver Antonio Mitre, El monedero de los Andes: Región
económica y moneda boliviana en el siglo XIX (La Paz: 13 Pentland, 103-104.
Hisbol, 1986) y Erick D. Langer, “Espacios colo- 14 Para información sobre la participación en el trajín
niales y economías nacionales: Bolivia y el norte del algodón, ver los Libros Mayores de la Aduana
argentino 1810-1930,” Historia y Cultura, 17 (abril Nacional de Oruro archivados en la Biblioteca Mu-
1990): 69-94. nicipal de Oruro. Para Vitichi, ver José Manl Piza-
12 Mucha de esta información proviene de una inves- rro al Prefecto de Potosí, Cotagaita, 10 mayo 1842,
tigación mía en curso sobre el desarrollo económi- Prefectura Departamental No. 397, “Subprefectu-
co de los Andes centromeridionales. ra de Nor Chichas”, Archivo Histórico de Potosí.
instrumentos de deuda con descuentos y lue- luego de numerosas expediciones, de modo
go compraron haciendas del Estado a su valor que después de 1815, los realistas dominaban
nominal. Sin embargo, dado que Bolivia no se el Alto Perú y los patriotas de las Provincias
había endeudado con bancos extranjeros, se Unidas del Río de la Plata lograron controlar
mantuvo en una mejor posición financiera que la región desde Salta hacia el sur. Los realis-
la mayoría de los países vecinos.15 tas gobernaron desde la nueva capital virreinal
del Cuzco después de que el general argenti-
Las bases sociales y económicas de Bolivia no José de San Martín se apoderara de Lima
eran relativamente sólidas. El país tenía mu- desde el mar, luego de haber liberado Chile. A
chas minas que se reactivaron poco después de partir de entonces, las Provincias Unidas no
los estragos de las guerras de Independencia. hicieron ningún intento por conquistar ese te-
También tenía un sistema agrario estable que rritorio más que disputar la tierra de nadie de
producía lo suficiente para alimentar a su po- Jujuy y Tarija, donde las fuerzas patriotas en
blación, con una estructura comercial desarro- ocasiones pudieron penetrar y hostigar a las
llada en gran parte alrededor de las minas. La fuerzas realistas.16
manufactura era primitiva, pero el país era en
gran parte autosuficiente, especialmente con Sea como fuere, luego de que las fuerzas re-
los textiles. El Estado tenía un ingreso estable, alistas de Pedro Antonio Olañeta fueron de- Primer periodo
en gran medida independiente de la política o rrotadas en 1825 en la Batalla de Tumusla,
Bajo la
los caprichos económicos, proveniente princi- Sucre, a instancias de las elites del Alto Perú, Constitución de
1826 que organiza
palmente del tributo indígena. apoyó una declaración de Independencia. y constituye la
nación boliviana
Aunque Simón Bolívar en un principio se (1825-1880)
Lo que distinguió a Bolivia en sus primeros opuso a la creación de un nuevo Estado por-
años fue tener la suerte de poseer líderes polí- que prefería grandes unidades que pudieran 115
ticos reformistas y competentes que intentaron hacer frente a otros países como Estados Uni-
organizar la sociedad de manera que la hicieran dos y países de Europa Occidental, al final
dinámica y próspera. Los dos grandes perso- apoyó la “República de Bolívar” y redactó su La fundación de
Bolivia
najes de la primera década de existencia de la primera constitución.17 en el contexto
latinoamericano,
República fueron Antonio José de Sucre (1825- 1825-1830
mostrar ocupaciones que no fueran conside- algunos de los funcionarios nombrados por
radas como servidumbre y tenían que tener Sucre. Pero Sucre reconoció estos problemas y
cierto nivel de ingresos. Los grandes teóricos los solucionó cuando pudo. Él tendía a depen-
políticos de la época pensaban que sólo las der más de militares y extranjeros. De ellos,
personas que tuvieran suficiente conocimien- no todos eran tan competentes en la labor ad-
to e independencia financiera y de otros tipos ministrativa como lo habían sido en el ejérci-
pudieran votar, para poder discernir buenos to.22 Sea como fuere, en cualquier país nuevo
líderes y no dejarse engañar por tipos desagra- crear un nuevo gobierno y encontrar personas
dables que arruinarían el país. Dado el Esta- competentes era una tarea sumamente difícil,
do de la educación y las restricciones para los especialmente en uno donde los funcionarios
indios, la gran mayoría de la población, ello
significaba que solo una pequeña minoría te-
21 La historiadora que más ha escrito sobre este tema
nía derechos ciudadanos y de voto. Como en referido al periodo temprano ha sido Rossana Ba-
otros países, las reglas para que las personas rragán. Ver Indios, mujeres y ciudadanos: Legislación
fueran consideradas ciudadanos y voten se y ejercicio de la ciudadanía en Bolivia (Siglo XIX) (La
Paz: Editorial Diálogo, 1999). También ver Iruroz-
endurecieron durante el siglo XIX, aunque a
qui, A bala, piedra y palo y Erick D. Langer, “Brin-
partir de la década de 1850 esto comenzó a ser ging the Economic Back In”.
en gran parte irrelevante debido a los golpes 22 Lofstrom, La presidencia de Sucre, 87-114.
españoles, los únicos que tenían la experien- Una amenaza más grave provino del norte, en
cia, habían huido. Esto fue una experiencia co- 1828. Agustín Gamarra, el comandante de las
mún que sufrieron todas las nuevas Repúblicas fuerzas del sur del Bajo Perú, invadió Bolivia
hispanoamericanas. después de que un intento de asesinato contra
Sucre casi le quita la vida al presidente. Gama-
En 1825 Bolivia era una potencia militar a te- rra, un cuzqueño que había sido compañero
ner en cuenta, tanto por su liderazgo como de Sucre, aprovechó el resentimiento contra
por la amalgama de fuerzas del Alto Perú y las tropas colombianas que se había acumu-
de Colombia, endurecidas en batalla, que lado por muchas razones en los territorios
permanecieron en el país. Al principio esto liberados, para justificar su invasión. Varios
fue una ventaja porque Sucre usó ese poder importantes comandantes bolivianos dieron
para consolidar los reclamos territoriales del su apoyo a Gamarra, lo que obligó a Sucre a
país. En 1826 envió tropas colombianas co- renunciar a la presidencia y abandonar el país.
mandadas por uno de sus hombres de mayor Luego de que Gamarra y los bolivianos firma-
confianza, el irlandés Francis Burdett O’Con- ran el tratado de Tratado de Piquiza, que es-
nor, al territorio de Tarija para reforzar allí tipulaba la expulsión de las tropas extranjeras,
los reclamos de Bolivia contra las Provincias Sucre salió del país para nunca volver.24
Un amor
Unidas del Río de la Plata. Tarija había sido
desenfrenado tierra de nadie durante gran parte de las gue- Después de la invasión de 1828, Bolivia, al
por la libertad
rras de Independencia, donde patriotas y rea- menos en tierra, pudo defenderse y, en la dé-
Antología de la
historia política listas se habían turnado para ocupar la ciudad. cada de 1830 bajo el presidente Andrés de
de Bolivia
(1825-2020)
Cuando se aseguró la Independencia, Tarija Santa Cruz, pudo hacer retroceder avances
estaba dividida en facciones que apoyaban a argentinos y chilenos. Los recursos que le ha-
118 los porteños o a los altoperuanos. Si bien Ta- bían permitido a Bolivia expandirse durante la
rija suministraba gran parte de sus productos presidencia de Santa Cruz sirvieron eventual-
a la región minera de Chichas en el Alto Perú, mente en 1836 para abarcar también al Perú
Tomo I también estaba vinculada por parentesco y en la Confederación Perú-Boliviana. El viejo
1825-1952
comercio con Salta, en las Provincias Unidas. sueño de unir el Bajo Perú con el Alto Perú
Tarija envió un representante a la asamblea (un sueño que compartía Gamarra) extendió
constitucional de Buenos Aires. Pero la pre- demasiado la mano de Bolivia y creó fuerzas
sencia de las tropas del Alto Perú y el astuto que derrocaron a la Confederación y al go-
manejo de O’Connor de la situación, junto bierno de Santa Cruz en 1839.25 Sin embar-
con la facción proboliviana decidieron el caso
en favor de Bolivia. Parecía una decisión ra- la Independencia y los primeros años de la República de
cional. Bolivia estaba mucho más consolidada Bolivia (La Paz: Coma, I Editores), 209-215.
y parecía tener un futuro más prometedor que 24 Lofstrom, La presidencia de Sucre, 458-469; Horacio
Villanueva Urteaga. Gamarra y la iniciación republi-
los mal organizados argentinos, cuya capital
cana en el Cuzco (Lima: Fondo del Libro del Banco
de todos modos estaba tan lejos. Al final los de los Andes, 1981).
rioplatenses no pudieron hacer mucho más 25 Sobrevilla Perea, The Caudillo of the Andes: Andrés de
que protestar, en vano.23 Santa Cruz; Philip Parkerson, Andrés de Santa Cruz y
la Confederación Perú-Boliviana, 1835-1839 (La Paz,
Bolivia: Editorial Juventud, 1984); Robert N. Burr,
23 Ver Trigo, Tarija en la independencia. Los prime- By Reason or Force: Chile and the Balancing of Power
ros cuatro tomos de Historia de Tarija: Corpus do- in South America, 1830-1905 (Berkeley: Universi-
cumental, ed. Cristina Minutolo de Orsi (Tarija: ty of California Press, 1967). También ver Sarah
Universidad Juan Manuel Saracho, 1986-1987) es- Chambers, “From One Patria to Two Nations in
tán dedicados a mostrar los vínculos de Tarija con the Andean Heartland,” New Countries: Capitalism,
Buenos Aires. Para el rol de O’Connor, ver Fran- Revolutions, and nations in the Americas, 1750-1870,
cisco Burdett O’Connor, Recuerdos de la Guerra de ed. John Tutino (Durham: Duke University Press,
go, el hecho de que Bolivia pudiera extenderse política. Sin embargo, sucedió todo lo contra-
tanto habla de la gestión competente del país y rio. Mientras que Bolivia durante los primeros
de su recuperación social y económica. El que 15 años (principalmente debido a la adminis-
ese Estado boliviano hubiera sido parcialmen- tración de Santa Cruz) fue capaz de crear una
te construido sobre estructuras sociales del base de estabilidad política, en los otros países,
antiguo régimen como las comunidades indí- con la excepción nuevamente de Paraguay y
genas (y el tributo que recibió el Estado) hace en menor medida Brasil, el caos se disparó a
que este vigor sea aún más impresionante. medida que múltiples facciones con diferentes
ideologías sobre cómo se debían administrar
sus países, lucharon para dominar a las demás
2. El vecindario facciones. Por lo tanto, en lugar de traer esta-
bilidad, la mayoría de los países latinoamerica-
Comparado con la mayor parte del vecindario nos cayó en luchas internas e incluso sufrieron
en el que Bolivia se encontraba en el centro guerras civiles continuas de baja intensidad
de Sudamérica, el país estaba relativamente durante la década de 1820 y posteriores.
bien; al menos después de que se recuperó de
las brutales guerras de Independencia. Este Examinemos cada país por separado, centrán-
no fue el caso en el resto de los países que la donos en sus recursos, pero principalmente en Primer periodo
rodean, con la excepción de Brasil. A las an- su política. El ensayo seguirá un esquema si-
Bajo la
tiguas colonias españolas les sucedieron go- milar al de Bolivia para que las comparaciones Constitución de
1826 que organiza
biernos caóticos que mantuvieron a estos paí- se puedan hacer más fácilmente. y constituye la
nación boliviana
ses débiles. Ninguno de los otros países, con (1825-1880)
la excepción de Perú, tenía el tipo de recursos 2.1. Argentina: un país sin centro
que tenía Bolivia. Donde existió cierta esta- 119
bilidad política fue en Paraguay, donde hubo La ciudad de Buenos Aires experimentó su
muy poca vida política durante la dictadura primera Independencia cuando su milicia
de José Gaspar Rodríguez de Francia. Bra- aplastó a los infantes de marina británicos La fundación de
Bolivia
sil, que había pasado por una independencia que habían invadido la ciudad en 1806 y 1807. en el contexto
latinoamericano,
menos traumática, todavía sufría las rebelio- El Virrey de La Plata huyó hasta Córdoba 1825-1830
nes regionales y el gran peso de la esclavitud y poco después los porteños instalaron a su
africana. propio virrey. Cuando Napoleón invadió Es-
paña en 1808, los líderes de Buenos Aires de-
Todos los otros países habían logrado la In- pusieron a su virrey y nombraron en su lugar
dependencia antes de Bolivia y, por lo tanto, una junta tuitiva. Así, a pesar de que estaban
tuvieron tiempo de reorganizarse como Repú- a favor a Fernando VII, Buenos Aires se hizo
blicas, o como en el caso de México (tempo- independiente de España a partir de 1810. El
ralmente) y Brasil (durante la mayor parte del gobierno de Buenos Aires envió ejércitos para
siglo XIX) habían logrado permanecer como poner bajo su control las distintas partes del
monarquías. Es de suponer que estos experi- Virreinato del Río de la Plata, pero fracasó
mentos políticos les proporcionó algunos años en las regiones de Paraguay, Montevideo y el
de ventaja para que pudieran descubrir qué Alto Perú.26 Después de 1812, las Provincias
funcionaba mejor en términos de organización
26 Hay un sinfín de trabajos sobre el proceso de la In-
dependencia de Buenos Aires, que es mucho más
2016), especialmente 328-339; Christine Hünefel- complicado de lo expuesto arriba. Para un resumen
dt, Crafting Borders: From Tordesillas and Q’osqo to clásico, ver, José Carlos Chiaramonte, Ciudades,
Andean Nation-States, 1500-1900 (Middletown: Yo- provincias, Estados: Orígenes de la Nación Argentina,
landa Carlessi, 2018), 75-90. (1800-1846) (Buenos Aires: Emecé, 2007).
Unidas del Río de la Plata, rebautizadas en
1826 como República Argentina, eran mucho
más pequeñas de lo que son hoy. Controla-
ba el área que hoy tiene la Argentina actual,
pero sin gran parte de la pampa occidental, el
Gran Chaco o la Patagonia.
comunidades de la época colonial, como era dieron forma a toda la década. Era un hombre
el caso en Bolivia. Otros grupos indígenas que imbuido del liberalismo, aprendido mientras
vivían a lo largo del Chaco, en Misiones, y a visitaba Inglaterra en la década de 1810, cuan-
lo largo de la pampa, en asentamientos, eran do conoció a Jeremy Bentham y Benjamin
“indios amigos”, intermediarios entre los crio- Constant. Esas lecciones las puso en práctica
llos y de grupos indígenas independientes.30 una década después.33
29 Horacio C. E. Giberti, Historia económica de la ga- 31 Gustavo L. Paz, Resistencia y rebelión campesina en
nadería argentina (Buenos Aires: Solar/Hachette, la Puna de Jujuy: 1850-1875 (Buenos Aires: CE-
1970). DES,1989); George Reid Andrews, Afro-Latinoamé-
30 Mucho se ha escrito sobre la población indígena rica, 1800-2000 (Madrid: Iberoamericana Vervuert,
en Argentina. Los trabajos generales incluyen Raúl 2007), 75.
J. Mandrini, La Argentina aborigen: De los primeros 32 El relato clásico es de Tulio Halperín Donghi,
pobladores a 1910 (Buenos Aires: Siglo XXI, 2012); Revolución y guerra: Formación de una elite dirigente
María Isabel Hernández, González Los indios de en la Argentina criolla, 3. Ed. (Buenos Aires: Siglo
Argentina (Madrid: Ed. MAPFRE, 1992); en el caso Veintiuno Argentina, 2014).
del Marquesado de Tojo ver Guillermo B. Madra- 33 Para una visión general, vea Marcela Ternavasio,
zo, Hacienda y encomienda en los Andes: La puna ar- “Las reformas rivadavianas en Buenos Aires y el
gentina bajo El Marquesado de Tojo, siglos XVII a XIX Congreso General Constituyente (1820-1827),”
(Buenos Aires: Fondo Editorial, 1990). Nueva Historia Argentina: Tomo 3, Noemí Goldman,
El período rivadaviano, que abarcó el momen- Otras reformas fueron menos efectivas. En
to en que Bolivia obtuvo la Independencia, 1827, Rivadavia se prestó un millón de li-
fue sólo parcialmente exitoso. Bajo Bernardi- bras esterlinas de uno de los mayores bancos
no Rivadavia se estableció la Universidad de de Londres, Baring Brothers, en condiciones
Buenos Aires, al igual que el Archivo Gene- desfavorables. Al final, sólo unas 570.000 li-
ral de la Nación. Como Sucre, Rivadavia era bras esterlinas llegaron a Buenos Aires e in-
anticlerical en el sentido de que pensaba que cluso gran parte de eso terminó en manos de
la Iglesia Católica tenía demasiado poder. los comerciantes y no en pro del desarrollo de
Secularizó muchos privilegios de la Iglesia la provincia.
y abolió todas las órdenes religiosas excepto
las más importantes. A diferencia de Bolivia, Quizás más importantes fueron sus políticas
los católicos se rebelaron en 1823, aunque agrarias. Si bien el préstamo de Baring Bro-
fueron reprimidos y juzgados en secreto. En thers utilizó como garantía las tierras públicas
Buenos Aires, si no en todas las provincias, de Buenos Aires y, por lo tanto, no se podía
la Iglesia Católica permaneció bajo el control vender, Rivadavia intentó abrir el mercado de
del gobierno. tierras al permitir que las personas arrendaran
tierras del gobierno a través del proceso de
Un amor
Rivadavia aprobó una Ley de Votación en cesión. Aunque esta política estaba destinada
desenfrenado 1821 que exigía el sufragio de todos los hom- a promover la pequeña propiedad, en reali-
por la libertad
bres mayores de 20 años. Sin embargo, como dad el hecho de que el gobierno no pusiera
Antología de la
historia política sucedió en otros lugares, en 1826 esta ley un límite superior a las solicitudes de tierras
de Bolivia
(1825-2020)
igualitaria se volvió rápidamente más res- significó que las familias adineradas accedie-
tringida, ya que cualquier hombre que de- ran a grandes extensiones de tierra, creando
122 pendiera de otros, así como los analfabetos, una clase de terratenientes que administraban
delincuentes y otros, fueron excluidos de la grandes propiedades. Posteriormente, estos
votación. Además, muchas provincias man- terratenientes se convirtieron en propietarios
Tomo I tuvieron un voto más restrictivo que incluía, efectivos de estas tierras.
1825-1952
como en Bolivia, si una persona era depen-
diente de otras y por lo tanto no podía vo- En 1826 Rivadavia fue elegido presidente de
tar.34 Por lo tanto, Argentina comenzó con Argentina. Tenía tendencias centralistas, que
leyes de votación más liberales que Bolivia, luego se cristalizaron en el Partido Unitario.
pero rápidamente avanzó hacia la idea de que Los unitarios creían que Buenos Aires, como
solo los hombres de ciertas cualidades debe- capital y ciudad portuaria más importan-
rían poder votar. Cabe mencionar que nunca te,35 debía administrar al resto del país. Con
impuso barreras raciales explícitas ni dividió
a la población según la etnia.
35 La provincia, por supuesto, era mucho más peque-
ña que hoy. La mayor parte de la provincia estaba
en manos de la población indígena que no reco-
nocía la autoridad de Buenos Aires. Esto solo co-
ed., 159-197; para el contexto político de Buenos menzó a cambiar entre 1833 y 1834, cuando Juan
Aires, ver de la misma autora La revolución del voto: Manuel de Rosas invadió territorios indígenas que
Política y elecciones en Buenos Aires, 1810-1852 (Bue- aumentaron la jurisdicción del gobierno en apro-
nos Aires: Siglo Veintiuno Editores Argentina, ximadamente un tercio. Incluso entonces, fue solo
2002). después de la Guerra del Desierto (1879-1885) que
34 Noemí Goldman, “Constitución y representación: la provincia de Buenos Aires ganó el control de toda
el enigma del poder constituyente en el Río de la la tierra que reclama hoy. Ver Walter Mario Delrio,
Plata, 1808-1830,” El laboratorio constitucional ibe- Memorias de expropiación: sometimiento e incorporación
roamericano: 1807/1808-1830 (Madrid: Iberoameri- indígena en la Patagonia, 1872-1943 (Buenos Aires:
cana Vervuert, 2012), 209-210. Universidad Nacional de Quilmes, 2010).
recursos relativamente grandes –principal- Independencia, pero también tuvo una vena
mente agrícolas– de la provincia de Buenos populista con Martín Manuel de Güemes,
Aires, la ciudad y la provincia formaban una quien había organizado a los gauchos del norte
combinación poderosa en comparación con el para luchar contra los realistas en el Alto Perú
resto de las provincias, algunas de las cuales y quien había prometido una reforma agraria
eran ciudades pequeñas que reclamaba tierras para compensar a sus tropas por su servicio a
que apenas controlaban. Sin embargo, el res- la causa.37
to del interior, incluidas ciudades poderosas
como Córdoba y gran parte del Litoral, se Tras la muerte prematura de Güemes en 1821,
sintió excluido de las reformas de Rivadavia. el líder que asumió la causa del interior, bajo
La mayoría de las reformas habían favorecido la bandera del federalismo y clericalismo in-
solo a Buenos Aires, incluida la idea de que terior, fue el dirigente riojano, Facundo Qui-
todos los ingresos fiscales del comercio serían roga. Asimismo, desde el litoral, Estanislao
administrados por la ciudad de Buenos Aires López, gobernador de Corrientes, se opuso al
y la ciudad se quedaría con la parte del león. gobierno de Rivadavia en Buenos Aires.38 Por
lo tanto, a pesar de las muchas reformas en
Sin el contrapeso del sector altoperuano, mu- Buenos Aires similares a las de Sucre, el go-
cho más próspero económicamente, era difí- bierno dirigido por Rivadavia durante la dé- Primer periodo
cil luchar contra la centralización a expensas cada de 1820 nunca pudo afirmar el control
Bajo la
del resto del país. En 1827, el país entró en sobre gran parte del territorio que decía re- Constitución de
1826 que organiza
una guerra civil sobre si debía ser centralista presentar. y constituye la
nación boliviana
(como Bolivia) o federalista. Al final, el federa- (1825-1880)
lismo ganó cuando Juan Manuel de Rosas asu- Por si fuera poco, la administración de Riva-
mió la gobernación de Buenos Aires en 1829.36 davia tuvo que ocuparse más del flanco orien- 123
tal argentino, la disputa por la Banda Oriental
Según Juan Carlos Chiaramonte, la idea de o, como la llamaron los brasileños, la Provin-
Argentina había sido la de una alianza regio- cia Cisplatina. Tras la derrota en 1820 de José La fundación de
Bolivia
nal entre estas provincias del interior –o, me- Gervasio Artigas, que había sido abandonado en el contexto
latinoamericano,
jor dicho, las elites dentro de sus capitales y por Buenos Aires, los brasileños invadieron el 1825-1830
2.2. Chile: un país pobre luchando Aunque la estructura social del país era princi- Primer periodo
por existir palmente agraria, con una clase mercantil cla-
Bajo la
ve a lo largo de la costa que, sin embargo, no Constitución de
1826 que organiza
Como fue el caso de Argentina, Chile declaró se mezclaba mucho en política. Chile durante y constituye la
nación boliviana
su Independencia definitiva ocho años antes el período colonial había sido un proveedor de (1825-1880)
que Bolivia, aunque las luchas contra los re- trigo para el mercado costero peruano desde
alistas no terminaron hasta mucho después. el siglo XVII, cuando un terremoto había de- 125
En la década de 1820, el futuro de Chile no jado improductivos gran parte de los campos
parecía brillante. Chile siguió siendo en gran de trigo de la costa peruana. La separación de
medida una sociedad fronteriza con muy po- Chile del Perú y la agitación continua en este La fundación de
Bolivia
cos recursos. La política era inestable, los último país, significó que el sector agrario chi- en el contexto
latinoamericano,
partidos políticos aún estaban por definirse leno cayó en una depresión en la década de 1825-1830
ción en 1828 cambió nuevamente las regulacio- cada vez más poderoso y desvió recursos del
nes de votación, prohibiendo votar a sacerdotes, Estado para contenerlos. Entre ellos había un
soldados y suboficiales, o peones gañanes.46 Con grupo de ganaderos criollos, liderados por el
el elemento básico de quién era elegible para clan Pincheira, que tenían propiedades en el
participar directamente en la vida política cam- sur y que estaban descontentos con el gobier-
biando de año en año, incluso cuando el mismo no de Santiago.
partido permanecía en el poder, mostraba la in-
capacidad de las elites políticas para crear reglas Los Pincheira trabajaron con el grupo indíge-
consistentes necesarias para gobernar. na Pehuenche que controlaba una parte signi-
ficativa de las estribaciones andinas y los pasos
a la Patagonia. Los objetivos de esta alianza
45 Ver por ejemplo Gabriel Salazar, Construcción de Es- determinaron los remanentes de las fuerzas
tado en Chile (Santiago de Chile: Ed. Sudamericana,
españolas que habían encontrado refugio en el
2005) and Alfredo Jocelyn-Holt Letelier, La inde-
pendencia de Chile: Tradición, modernizacioón y mito, sur, en territorio indígena y buscaban derrocar
3.ed.. (Santiago: Planeta/Ariel, 2001). al gobierno en Santiago. Dado el caos político
46 James A. Wood, The Society of Equality: Popular en el Valle Central y la falta de recursos que
Republicanism and Democracy in Santiago de Chi-
enfrentaba Chile, como todas las nuevas Re-
le, 1818-1851 (Albuquerque: University of New
Mexico Press, 2011), 29-38. públicas hispanoamericanas, esta combinación
de enemigos era una amenaza aún mayor que En resumen, la década de 1820 fue para Chi-
la que tuvo que enfrentar el gobierno de Bue- le un período de caos y pobreza generalizada.
nos Aires en la pampa. Los hermanos Pinchei- Las elites políticas, dominadas por los libera-
ra y sus aliados españoles e indígenas asaltaron les pipiolos en la década de 1820, no pudieron
pequeños pueblos, como Parral. Las fuerzas decidir cuál era la mejor forma de organizar
chilenas no pudieron contener estas fuerzas su gobierno. Los recursos con que contaba el
hasta después de 1830.47 país se limitaban principalmente a la agricul-
tura en el Valle Central, que, sin embargo, solo
Un aspecto positivo fue el comercio con Gran beneficiaba a un pequeño número de hacenda-
Bretaña. A diferencia de muchos otros países dos. La minería era incipiente en el extremo
que habían esperado que intervinieran países norte, por Copiapó. Una alianza de pueblos
como Gran Bretaña, una vez que con la Inde- indígenas con funcionarios españoles y terra-
pendencia se rompiera el monopolio comer- tenientes locales amenazaba al gobierno desde
cial español, aunque no habían visto entrar el sur. El punto más brillante era el potencial
muchos ingresos de las relaciones comerciales comercial, ya que el puerto de Valparaíso ini-
con el resto de Europa Occidental, el puerto ció su ascenso como el puerto más importante
de Valparaíso se benefició. Esto se debió a que del lado Pacífico de América del Sur, con la
Un amor
el puerto chileno satisfacía tres necesidades ayuda de los comerciantes británicos y la Ar-
desenfrenado diferentes, especialmente para Gran Bretaña. mada británica.
por la libertad
Antología de la
historia política Primero, era un excelente puerto con la ca- 2.3. Perú: Caos político y oportunidades
de Bolivia
(1825-2020)
pacidad de abastecer al mercado chileno, que perdidas
estaba concentrado en el compacto Valle Cen-
128 tral, alrededor de Santiago. Pero lo que es más Perú no estaba mucho mejor que Argentina
importante, Valparaíso sirvió como punto de en la década de 1820. Como en el caso de
distribución de productos británicos a Perú, Bolivia, la Independencia llegó tarde y por
Tomo I Ecuador y Bolivia. De hecho, Valparaíso fue la invasión extranjera. Quizás la mayor parte
1825-1952
primera parada de los productos que se trans- de todas las nuevas unidades políticas crea-
bordaban a Guayaquil, Callao, Arica y Cobija. das después de la Independencia, Perú sufrió
Por último, el puerto chileno fue el primer el truncamiento de su antiguo virreinato y su
punto de parada de los barcos británicos que posición como el principal centro económi-
pasaban por el Estrecho de Magallanes rum- co y político de la América del Sur española.
bo a Nueva Zelanda y Australia, así como al Este era un proceso que había comenzado
resto del Pacífico. Una variedad de buques de con el desmembramiento de su Virreinato,
la Armada Británica y buques mercantes se que antes de finales del siglo XVIII se extendía
reabastecían en Valparaíso, con lo que tam- por todo el continente. Sin embargo, tenía
bién estimulaban la creación de un sistema una especie de poder de veto, que ejerció en
bancario, necesario para las complejidades del 1828, cuando restringió el poder de los “gran
financiamiento mercantil.48 colombianos” después de expulsar a Anto-
nio José de Sucre, nacido en Venezuela, de
la presidencia en Bolivia y ganar una guerra
47 Pilar M. Herr, Contested Nation: The Mapuche, Ban-
dits, and State Formation in Nineteenth-Century Chile
contra la Gran Colombia.
(Albuquerque: University of New Mexico Press,
2019). Ver también Ana M. Contador, Los Pin-
cheira: Un caso de bandidaje social, Chile, 1817-1832 económica (Santiago: Ed. Universitaria, 1999) y Ma-
(Santiago: Bravo y Allende Editores, 1998). nuel Llorca-Jaña, The British Textile Trade in Sou-
48 Eduardo Cavieres Figueroa, Comercio chileno y co- th America in the Nineteenth Century (Cambridge:
merciantes ingleses: 1820-1880: Un ciclo de historia Cambridge University Press, 2014).
Sin embargo, el país todavía era poderoso en y también comenzaron a identificarse como
el momento de la Independencia. Las minas tales en los Andes del norte.
de las tierras altas centrales continuaron pro-
duciendo plata y otros metales. Tenía una po- Perú había comenzado la Independencia tan
blación de aproximadamente un millón y me- solo un año antes que Bolivia. El proceso ha-
dio de habitantes, de los cuales la mayoría eran bía comenzado antes, al igual que en Bolivia.
indígenas y vivían en la zona andina (Perú en Las guerrillas patriotas aparecieron después
ese momento no controlaba gran parte de los de 1811 y Mateo Pumacahua, uno de los je-
territorios selváticos del este). fes descendientes de los incas, se rebeló contra
el régimen español en 1814, pero los realistas
Las comunidades indígenas eran más co- reprimieron rápidamente este movimiento.
munes en el centro y el sur de los Andes, La invasión de los argentinos desde Chile en
mientras que en el norte muchos pueblos in- 1821, bajo el liderazgo de José de San Martín,
dígenas habían comenzado a convertirse en fracasó cuando sus tropas no lograron desalojar
pequeños propietarios campesinos sin afilia- al virrey José de la Serna, quien se había insta-
ción comunitaria. La región costera también lado en las tierras altas del Cuzco. San Martín
estaba relativamente bien poblada, agrupada tuvo que lidiar con el caos político, con dife-
en pueblos y ciudades donde los ríos fluían rentes fuerzas peruanas luchando entre sí y sin Primer periodo
desde los Andes en un paisaje por lo demás poder tomar la parte andina del sur del Perú.
Bajo la
árido. La población de las zonas costeras era Lima incluso cayó brevemente en manos de las Constitución de
1826 que organiza
menos indígena que la del altiplano; además, fuerzas realistas nuevamente en 1823. Fueron y constituye la
nación boliviana
en ciertas regiones, como en las haciendas del necesarias las tropas de Bolívar que descendían (1825-1880)
norte alrededor de Trujillo donde se cultiva- del norte, bajo el liderazgo primero de Bolívar
ba la caña de azúcar, y en el sur, donde los te- y luego de Antonio José de Sucre, para apaci- 129
rratenientes cultivaban uvas, dominaban los guar a las tropas realistas y finalmente liberar
afrodescendientes. Esto se debía a que la Co- al Perú de los españoles. El Congreso de Lima
rona había prohibido el uso de mano de obra nombró a Bolívar dictador del Perú en 1823, La fundación de
Bolivia
indígena para productos a partir de los cua- cargo que ocupó Bolívar hasta que dejó el Perú en el contexto
latinoamericano,
les se pudieran elaborar bebidas alcohólicas, definitivamente en 1826.50 1825-1830
la Independencia como lo hicieron partes de comercio, lo que podría haber generado más
La Gran Colombia o Bolivia, la actividad gue- ingresos para el Estado. La oposición al libre
rrillera que sí existió fue en la sierra central de comercio por parte del gremio proteccionista
Perú, precisamente donde se encuentran las de comerciantes y otras fuerzas en Lima no
minas de plata más productivas de Cerro de ayudó en absoluto.
Pasco. Así, en 1825, la producción se redujo
a sólo alrededor de 57.000 marcos de ocho
onzas, aproximadamente una quinta parte de 56 Para las guerrillas ver, por ejemplo, Ezequiel Bel-
trán Gallardo, Las guerrillas de Yauyos en la emanci-
lo que había sido en 1820, antes de la inva- pación del Perú, 1820-1824 (Lima: Editorial Técni-
sión argentina. Aumentó durante la última cos Asociados, 1977). Para la producción de plata,
mitad de la década de 1820, con un prome- ver José R. Deustua, The Bewitchment of Silver: The
Social Economy of Mining in Nineteenth-Century Peru
dio de alrededor de 150.000 marcos, todavía
(Athens, Ohio: Ohio Univ. Center for Internatio-
nal Studies, 2000), 23. No hay datos para los años
55 Cecilia Méndez, La República Plebeya: Huanta y la 1821-1824.
formación del Estado peruano, 1820-1850 (Lima: Ins- 57 Víctor Peralta Ruiz, En pos del tributo: Burocracia es-
tituto de Estudios Peruanos, 2014). También ver tatal, elite regional y comunidades indígenas en el Cusco
Patrick Husson, De la guerra a la rebelión: Huanta, rural, 1826-1854 (Cusco: Centro de Estudios Re-
Siglo XIX (Lima: Instituto Franceés de Estudios An- gionales Andinos “Bartolomé de Las Casas,” 1991),
dinos, 1992). 36-43.
A pesar del prestigio inicial de Bolívar como Li- estancó, firmaron un tratado de paz que man-
bertador, su dictadura no pudo controlar la agi- tuvo los límites terrestres iguales que antes,
tación política que lo rodeaba. De hecho, dado con disputas que se resolverán más adelante.
que Bolívar era un extranjero y no tenía una base La guerra de 1828 al final ayudó a Perú más
política natural en Perú, fracasó repetidamen- que a los bolivarianos, ya que eliminó la in-
te y no pudo encontrar muchos partidarios en fluencia colombiana en Bolivia y destruyó el
Lima. Sus aliados naturales, las elites de Arequi- sueño de Bolívar de una vasta República que
pa, estaban demasiado lejos y también tenían se- habría abarcado gran parte de la cordillera
rias diferencias pragmáticas con él: estaban más central y norte de los Andes.59
interesados en comerciar con Bolivia que en
rendir homenaje al comercio británico. Irónica- Al final, Perú resultó ser una receta para el
mente, a pesar de ser el dictador del país, Bolívar desastre. La Independencia desarticuló los pa-
era extremadamente débil. Tenía pocos aliados trones centenarios de gobierno y economía en
en Lima fuera de sus propias tropas (extranjeras) el antiguo virreinato. La vieja elite mercantil
y varios liberales internacionalistas que estaban quería mantener el poder y fue bastante eficaz
dispuestos a seguir sus directivas. Esta era una en negárselo a cualquier otra persona. Bolívar
receta para el caos, y así fue para Bolívar.58 era un liberal, que quería cambiar fundamen-
Un amor
talmente la relación entre los habitantes y su
desenfrenado Lo único que podía hacer Perú es echar a pique gobierno. Propuso soluciones liberales, como
por la libertad
los planes bolivarianos de una nueva unidad el libre comercio con los británicos y, quizá
Antología de la
historia política política global hispanoamericana en América más importante, postuló una nueva relación
de Bolivia
(1825-2020)
del Sur. Una vez que Bolívar fue derrocado de entre la mayoría de la población indígena en
su presunta presidencia vitalicia en Perú, una los Andes y el Estado, al igual que su predece-
132 coalición anti bolivariana asumió el gobierno, sor patriota, José de San Martín.
con José de La Mar como presidente del país.
Esta idea revolucionaria –de convertir a miem-
Tomo I Bolívar, de regreso en Colombia y enojado bros de la comunidad indígena andina de las
1825-1952
por su derrocamiento y la expulsión descortés tierras altas en ciudadanos plenos del Estado
de Sucre de Bolivia, declaró la guerra a Perú y eliminar la tenencia de tierras comunales–
en 1828. Pero este no fue el único motivo del era simplemente inaceptable para muchos
conflicto. También había serias disputas terri- miembros de las elites políticas y comerciales
toriales entre Perú y Gran Colombia, princi- peruanas. Es probable, aunque no lo sabemos,
palmente por las tierras bajas del Amazonas en que también fuera inaceptable para muchos
la frontera de ambos países, además de deman- miembros de la comunidad indígena, porque
das de los colombianos de que Perú les pague apreciaban las protecciones que la legislación
por sus acciones para derrocar a los realistas. colonial brindaba para mantener sus tierras.
A pesar de la victoria de Sucre en tierra, los Así, la reforma más importante de Bolívar, de
peruanos tomaron la delantera en los mares y convertir a todos los componentes del cuerpo
pudieron sitiar y ocupar la importante ciudad político peruano en miembros plenos, nunca
portuaria de Guayaquil, en el departamento
ecuatoriano de la Gran Colombia. Tanto la 59 Carlos A. Vivanco, “Participación del departa-
Gran Colombia como el Perú estaban econó- mento del Ecuador en la guerra de la Gran Co-
micamente agotados todavía por las guerras de lombia con el Perú. Años 1828-1829,” Boletín de
la Academia Nacional de Historia, 19 (1940): 29-67;
Independencia y, después de que la guerra se
Basadre, La iniciación de la República; David Bushne-
ll, The Santander Regime in Gran Colombia (Newark:
58 Gootenberg, Between Silver and Guano, 18-33. University of Delaware Press 1954).
llegó a implementarse. Esto creó otros proble- Brasil también disfrutó desde 1808 del libre
mas, porque excluir a la mayoría de la pobla- comercio con Gran Bretaña, un objetivo con
ción de la ciudadanía plena hizo que el resto el que todas las Repúblicas hispanoamericanas,
de la política se volviera inestable. Hizo po- al menos inicialmente, habían soñado. Esto no
sible que el Estado peruano fuera derrocado quiere decir que no hubo muchos contratiem-
por grupos pequeños pero decididos dentro de pos y problemas que surgieron después de su
elites insatisfechas, que es exactamente lo que Independencia. Estos problemas se pueden
sucedió. La salida de Bolívar en 1827 no alivió clasificar en tres tipos: uno fue el intento de
este problema, sino que lo exacerbó. porciones significativas de las colonias portu-
guesas en América del Sur de lograr su propia
El caudillismo, la pesadilla para la continuidad Independencia (la idea de Brasil como una co-
institucional que es necesaria para el éxito de un lonia unitaria solo se hizo realidad después de
Estado, asomó su fea cabeza e hizo inestable la 1808), pero que quedó solo en revueltas regio-
política peruana durante muchos años. Esto fue nales porque no tuvieron éxito.
a pesar de la aparente riqueza del Perú en recur-
sos naturales y su capacidad para mantener una En segundo lugar, el imperio brasileño tuvo
mínima, aunque relativamente baja, produc- que delimitar sus fronteras, especialmente al
ción de plata o de la ventaja de tener una fuente sur, lo que provocó violencia y conflicto con Primer periodo
de ingresos relativamente estable en tributos las Provincias Unidas del Río de la Plata y con
Bajo la
indígenas de las comunidades de las tierras al- líderes de la región como José Gervasio Arti- Constitución de
1826 que organiza
tas. Perú era un desastre y lo siguió siendo al gas. Por último, Brasil tenía profundas grietas y constituye la
nación boliviana
menos hasta el auge del guano que comenzó en estructurales. La más importante era que el (1825-1880)
la década de 1840. La bonanza económica del gobierno imperial apoyaba la esclavitud afri-
boom del guano en las décadas posteriores, sin cana, lo que trajo prosperidad para unos po- 133
embargo, también simplemente ocultó muchos cos, pero también una gran debilidad social.
de los problemas con la gobernabilidad y la ple-
na integración de la mayoría de la población en La creación del imperio brasileño fue un evento La fundación de
Bolivia
el cuerpo político, algo que perseguiría a Perú único en el Nuevo Mundo. Las guerras napo- en el contexto
latinoamericano,
durante la Guerra del Pacífico (1879-1884). leónicas trajeron a la familia real de Braganza, 1825-1830
reste, organizaron una revuelta. Establecieron consolidado como Brasil no podía vencer al
un gobierno independiente e intentaron im- posiblemente más disfuncional, las Provincias
plementar políticas liberales antes de ser aplas- Unidas.64
tados por las fuerzas reales después de solo dos
meses. En 1824 estalló otro movimiento inde- La política en su conjunto era diferente a la
pendentista en la misma región, liderado por de Hispanoamérica. Un sistema monárquico
algunos de los líderes indultados de la revuelta era más estable, al menos a nivel nacional, que
de 1817. Estos eran republicanos que se opo- las Repúblicas hispanoamericanas. Brasil no
nían a una monarquía y liberales, que estaban cambió mucho los sistemas políticos. Aunque
en contra de las políticas conservadoras de Pe- Pedro I luchó con una serie de revueltas regio-
dro I. De nuevo, las tropas imperiales rápida- nales durante la Guerra Cisplatina, que fue en
mente vencieron al movimiento y la grandiosa parte la razón por la que aceptó la interferencia
Confederación del Ecuador se derrumbó en
unos meses.63
64 Brian Vale, A War Betwixt Englishmen: Brazil against
Argentina on the River Plate, 1825-1830 (London:
63 Evaldo Cabral de Mello. A outra independência: O Tauris, 2000); Alfredo R. Castellanos, La Cisplatina,
federalismo pernambucano de 1817 a 1824 (São Pau- la independencia y la República caudillesca (Montevi-
lo: Editora 34, 2004). deo: Ed. de la Banca Oriental, 1982).
británica, nunca hubo duda de que su gobier-
no podía controlar las principales ciudades,
siendo las rebeliones rápidamente reprimidas
las únicas excepciones.
la década de 1820 Brasil tenía una frontera ventaja fue la continuidad administrativa que
enorme e inestable no muy lejos de los terri- obtuvo de un proceso de Independencia rela-
torios centrales en la costa atlántica. Sin duda, tivamente libre de problemas. La monarquía
había asentamientos a lo largo de los anchos permaneció y la mayoría de la gente no vio
ríos dentro de la cuenca del Amazonas que mucha diferencia con la administración colo-
habían existido desde principios del período nial. Este fue especialmente el caso de la ma-
colonial, colonizados por caboclos y otros yoría esclava, que continuó trabajando en las
mestizos. De hecho, la región amazónica tenía mismas condiciones que antes.
su propio virreinato, llamado Grão-Pará, pero
se adhirió al imperio después del llamado de 66 Mark Harris, Rebellion on the Amazon: The Cabana-
Pedro a la Independencia. gem, Race, and Popular Culture in the North of Bra-
zil, 1798-1840 (New York: Cambridge University
Press, 2010).
Sin embargo, el dominio sobre el territorio, 67 Ver por ejemplo Hal Langfur, The Forbidden Lands:
especialmente al interior de la selva del Ama- Colonial Identity, Frontier Violence, and the Persisten-
zonas, lejos de los ríos principales, era tenue. ce of Brazil’s Eastern Indians, 1750-1830 (Stanford:
Stanford University Press, 2009) y Yuko Miki,
Grupos indígenas autónomos, esclavos fugiti-
Frontiers of Citizenship: A Black and Indigenous His-
vos y otros, poblaron esta región. Gran parte tory of Postcolonial Brazil (Cambridge: Cambridge
de esta área fue ignorada por el nuevo imperio, University Press, 2019).
Brasil estaba estrechamente relacionado con importante población afrodescendiente, al
la dinámica economía británica, pero solo igual que en el resto de la región del Río del
como productor de productos tropicales. Plata, que rondaba la tercera parte de la po-
Una Constitución en la que el emperador te- blación. El resto eran personas de ascendencia
nía gran influencia cambió un poco la cultura mestiza, con solo un puñado de descendientes
política, pero prevalecieron en gran medida de europeos.68
las ideas de jerarquía y aristocracia del anti-
guo régimen. La esclavitud de origen africa- En la década de 1820, Francia ya llevaba bas-
no fue el gran motor económico de Brasil, tante tiempo en el poder. En ese momento
ya que pudo explotar sin pagar mucho a una había consolidado el control absoluto sobre el
fuerza de trabajo coaccionada. Pero también país. Dos años después de haber sido declara-
fue el talón de Aquiles de Brasil, porque la es- do dictador, fue declarado dictador vitalicio y
clavitud limitó el ejercicio de la ciudadanía a así fue. Francia había sido profundamente in-
una minoría del país y también promovió un fluenciado por Jean-Jacques Rousseau y otros
sistema político arcaico que se mantuvo por filósofos de la Ilustración. Después de una
el miedo que engendraba una gran población conspiración de las elites en 1820 para asesi-
cautiva. narlo, aplastó la rebelión y ejecutó a más de
Un amor
60 hombres de las familias más importantes
desenfrenado 2.5. La dictadura autónoma de Paraguay de Paraguay que se enorgullecían de ser de as-
por la libertad
cendencia europea. Destruyó la base de poder
Antología de la
historia política Paraguay fue un caso excepcional, en com- de la elite y esta elite política prácticamente
de Bolivia
(1825-2020)
paración con todas las demás naciones nue- desapareció durante su larga administración.
vas de las Américas que querían ampliar sus Aunque estudió en el seminario de Córdoba,
138 contactos con naciones más poderosas o que fue un vigoroso anticlerical. Francia cerró to-
consideraban avanzadas, como Gran Breta- dos los monasterios del país y distribuyó los
ña. A diferencia del resto de los nuevos paí- religiosos secularizados a las parroquias del
Tomo I ses, Paraguay se aisló del resto del mundo. El interior. Francia tampoco pensaba que la edu-
1825-1952
Dr. José Gaspar Rodríguez de Francia, quien cación superior fuera necesaria para su pue-
había consolidado su poder como dictador de blo; cerró el seminario religioso, la única ins-
por vida del país poco después de la Indepen- titución de educación superior de este tipo en
dencia, pensó que aislarse del resto del mundo el país. Hizo que la educación primaria fuera
era la mejor política. Paraguay había formado obligatoria para todos los hombres y presumi-
parte del Virreinato de La Plata, pero a par- blemente el analfabetismo disminuyó signifi-
tir de 1811 se independizó efectivamente tras cativamente.69
vencer a un ejército porteño enviado en su
contra. En 1814, Francia se declaró dictador y Paraguay se convirtió en una sociedad más
lo siguió siendo por el resto de su vida. El pri- igualitaria en la década de 1820. En 1825, Fran-
mer líder del país, el Dr. Francia, permaneció cia decretó que todos los terratenientes debían
en el poder y afectó la vida de sus habitantes traerle sus títulos de propiedad. La mayoría no
como ningún otro y a diferencia del resto de pudo presentar ningún documento. Toda la
los países latinoamericanos. propiedad sin título fue declarada patrimonio
Paraguay era un país que no estaba densamen- 68 Comunicación personal, Thomas Whigham, 15 de
te poblado. Tenía entre 120.000 y 125.000 ha- septiembre, 2020.
69 John H. Williams, The Rise and Fall of the Paragua-
bitantes, muchos de los cuales eran hablantes
yan Republic, 1800-1870 (Austin: Institute of Latin
monolingües de guaraní (especialmente en el American Studies, University of Texas at Austin,
campo). En los pueblos y ciudades existía una 1979).
Primer periodo
Bajo la
Constitución de
1826 que organiza
y constituye la
nación boliviana
(1825-1880)
139
Mapa 1: Carta de la Antigua Colombia dividida en los departamentos de Cundinamarca, Venezuela y Quito Campañas de la guerra de Indepen-
dencia años 1821 a 1823.
La fundación de
Fuente: Imagen extraída del libro “Atlas geográfico e histórico de la República de Colombia”. Dominio Público, disponible en Wikimedia
Bolivia
Commons. en el contexto
latinoamericano,
1825-1830
del Estado y arrendada a sus residentes o distri- inagotable conflicto en la región del Río de
buida a familias sin tierra.70 Esta fue la reforma la Plata. Tuvo un gran éxito, aunque tuvo que
agraria más progresista que se puso en marcha defenderse de las Provincias Unidas y las fuer-
en América Latina y muchos de los paraguayos, zas de José Gervasio Artigas. Sin embargo,
especialmente los de las clases bajas, lo idola- cuando el caudillo Francisco Ramírez, gober-
traron. Sin embargo, el Dictador vitalicio no nador de la provincia de Entre Ríos, depuso a
permitió ninguna autodeterminación y mucho Artigas, Francia le permitió exiliarse en Para-
menos elecciones. Por lo tanto, promovió la guay y lo protegió de sus enemigos.71
igualdad económica prácticamente sin dere-
chos políticos. Paraguay se mantuvo al margen de las luchas
de la región porque Francia dejó que el co-
El Dr. Francia cortó la mayoría de las cone- mercio de yerba mate, la exportación paragua-
xiones con el mundo exterior, no queriendo ya más importante, cayera a niveles bajos. El
involucrarse en el incesante y aparentemente dictador desconfiaba de los comerciantes de
yerba que tenían conexiones financieras con
70 Nidia R. Areces, Estado y frontera en el Paraguay:
Concepción durante el gobierno del Dr. Francia (Asun-
ción: Universidad Católica, 2007). 71 Williams, The Rise and Fall, 51-52.
Buenos Aires, un grupo potencial que podría Colón. Los historiadores han utilizado el tér-
oponerse a él. Francia estaba más interesado mino “Gran Colombia” para distinguir ese
en mantener el poder que en ganar riquezas; país del último, un remanente del Estado
entregó la mayor parte del comercio de expor- mucho más grande y que no volvió a usar ese
tación al Ejército paraguayo para poder con- nombre hasta 1863. Cuando la Gran Colom-
trolarlo él mismo.72 bia declaró su Independencia apenas cuatro
años antes que Bolivia en 1821, contenía una
El virtual abandono de los yerbales salvajes gran población de aproximadamente dos mi-
en el norte del país provocó una disminución llones y medio de habitantes y era el segundo
de la población mestiza. Los grupos indígenas Estado más grande de América del Sur des-
que habían luchado contra los paraguayos re- pués de Brasil.
cuperaron gran parte de su territorio e incluso
organizaron redadas en Concepción, un asen- Era un país diverso, tanto geográfica como
tamiento importante en el norte a lo largo del socialmente. La Gran Colombia se extendía
río Paraguay. Como en muchos otros países, por el cuadrante norte de América del Sur,
la década de 1820 fue un período en el que conteniendo llanuras tropicales, picos de los
los grupos indígenas fronterizos pudieron re- Andes cubiertos de glaciares y costas a lo
Un amor
cuperar algunas de sus tierras y Paraguay no largo de los océanos Pacífico y Atlántico. Al
desenfrenado fue la excepción. Esto también significó que, igual que Brasil, tenía una gran población de
por la libertad
efectivamente, Paraguay no tenía una cone- ascendencia africana, especialmente a lo lar-
Antología de la
historia política xión real con Bolivia, aunque ambos reclama- go de la costa caribeña, aunque el porcentaje
de Bolivia
(1825-2020)
ban fronteras contiguas. Paraguay no se vol- de las personas que decían ser de ascendencia
vería importante para Bolivia hasta que Daniel mestiza eran más grandes y vivían a lo largo
140 Campos organizó una expedición a través del del corredor más densamente poblado de los
territorio indígena en el Chaco para llegar a Andes del norte, donde el clima era más tem-
Asunción en 1883. plado. La región que la Gran Colombia había
Tomo I afincado (aunque sólo parcialmente controla-
1825-1952
En resumen, podría decirse que Paraguay fue da) tenía una población indígena significati-
el país más estable de América del Sur durante va, en las montañas, a lo largo de la costa de
la década de 1820. Sin embargo, su estabilidad la Guajira y en las tierras bajas tropicales del
devino de una dictadura feroz cuyo gobernan- interior.
te supremo no permitió ninguna oposición. Su
estabilidad también residía en su relativa autar- El país emergió de una larga y prolongada gue-
quía y su falta de conexión con el resto del mun- rra civil que duró desde 1810 hasta 1823, muy
do. Por supuesto, tenía una sociedad relativa- parecida en duración a la de Bolivia. La Gran
mente igualitaria, pero una que se basaba en el Colombia nació de la visión de Simón Bolívar,
poco dinamismo económico y un sistema polí- su primer presidente en 1821. Más o menos
tico que hacía a todos iguales excepto a su líder. siguió las fronteras del Virreinato de Nueva
Granada, muchas de las cuales aún no habían
2.6. La Gran Colombia: Un país sin futuro sido arrebatadas a los españoles. La Capitanía
de Caracas y la Audiencia de Quito lograron
El nombre oficial cuando se formó el país, su Independencia y se incorporaron al país un
destinado a dividirse en Colombia, Venezuela, poco más tarde. Bogotá fue su capital.
Ecuador y Panamá, era simplemente Colom-
bia, en honor al explorador italiano Cristóbal Otras antiguas colonias españolas intentaron
formar parte de la Gran Colombia, pero solo
72 Whigham, The Politics of River Trade, 117-120. Panamá, que pagó a los funcionarios españoles
para que se independizara, pudo hacerlo. Las Otro tema fue que Bolívar tuvo que depender
otras regiones, incluida la parte de habla hispa- de la Gran Colombia para obtener recursos y
na de la isla de Santo Domingo (ahora Repúbli- hombres para su conquista del sur. Francisco de
ca Dominicana) intentaron hacerlo por temor Paula Santander quien, como vicepresidente de
a los poderosos haitianos de habla francesa, al la Gran Colombia, intentó enviar a su superior
igual que Cuba y Puerto Rico, todavía colonias el material, chocó con el Congreso colombiano,
de España. Sin embargo, la oposición de Esta- que no estaba de acuerdo con la sangría conti-
dos Unidos hizo fracasar estos intentos.73 nua de recursos de un país devastado por años
de guerra para aumentar la gloria de Bolívar.
La Gran Colombia parecía tener un gran fu- Esto creó animosidad entre De Paula y Bolívar:
turo, con una población grande y diversa, sus Bolívar siguió solicitando más hombres y dinero
vastos recursos naturales y su posición estraté- mientras De Paula no podía satisfacer la solici-
gica. Sin embargo, las luchas internas entre las tud de su jefe (y probablemente también sintió
diferentes unidades pronto crearon problemas la necesidad de estos recursos para gobernar).75
que llevaron a su disolución en tres unidades
diferentes en 1830 (Panamá siguió siendo par- Con el paso de los años, De Paula y Bolívar
te de Colombia hasta 1903). se fueron distanciando ideológicamente. De
Paula, que tenía que gobernar la diversa re- Primer periodo
El primer problema fue que Bolívar y sus se- gión que constituía la Gran Colombia, sintió
Bajo la
guidores no estaban de acuerdo entre ellos. que el federalismo, dejando que cada una de Constitución de
1826 que organiza
Como se mencionó anteriormente, Bolívar en las diversas regiones decidiera por sí misma la y constituye la
nación boliviana
1822 se reunió en Guayaquil con José de San forma en que sus líderes y políticas, sería lo (1825-1880)
Martín, quien había arrebatado la costa del mejor para mantener unido al país. A su vez,
Perú a los españoles. Cuando San Martín dejó Bolívar, cada vez más cínico sobre la capaci- 141
el camino libre a Bolívar y sus “gran colom- dad de la población de Hispanoamérica para
bianos” para conquistar el resto del Perú, el gobernarse a sí misma, prefirió el centralismo
venezolano requirió prodigiosos recursos de bajo el gobierno de líderes ilustrados que pu- La fundación de
Bolivia
la Gran Colombia para continuar su campaña dieran guiar al pueblo ignorante. Para él, la en el contexto
latinoamericano,
en los Andes. Bolívar avanzó rápidamente ha- Constitución boliviana que él mismo había re- 1825-1830
cia Ecuador, Perú y luego Bolivia, dejando a dactado y legado en 1826 al país que lleva su
su vicepresidente, Francisco de Paula Santan- nombre, era ideal, con un presidente vitalicio
der, gobernando el país. Bolívar no regresó y el gobierno en manos de una elite educada.
hasta 1826, momento en el que también había
sido declarado dictador de Perú y de Bolivia. Bolívar se veía a sí mismo como uno de los
Esto no le cayó bien al congreso de la Gran pocos hombres que podía gobernar esos paí-
Colombia y el congreso despojó a Bolívar de ses y se había declarado gobernante, dictador
la presidencia en 1825. Sin embargo, tras su o presidente de por vida donde quiera que fue-
regreso triunfal, fue nombrado presidente vi- ra. A la postre, esto obstaculizó el desarrollo
talicio en 1827.74 político de todos esos países. Su manera alta-
mente personalista de gobernar simplemente
no funcionó en el complejo contexto social,
73 Germán de la Reza, “El intento de integración de
Santo Domingo a la Gran Colombia (1821-1822),” económico y político de las Repúblicas recién
Secuencia 65 (2015): 65-82. independizadas; finalmente, Bolívar se vio
74 Gerhard Masur, Simón Bolívar (Albuquerque: Uni- obligado a renunciar a todos los puestos de
versity of New Mexico Press, 1984). Ver también
Marie Arana, Bolívar: American Liberator (New
York: Simon and Schuster, 2013) para una versión 75 David Bushnell, The Santander Regime in Gran Co-
menos académica. lombia (Westport: Greenwood Press, 1970).
Por su incumplimiento de las órdenes, el Con-
greso de Bogotá ordenó a Páez ir a Bogotá. Sin
embargo, Páez se negó a ir. ¿Cómo? Los ve-
nezolanos ya estaban dolidos porque Bogotá,
y no Caracas, fuera la capital, además de que
alguien de Cundinamarca, en lugar de Vene-
zuela, liderara la Gran Colombia. Finalmente,
la falta de apoyo de Bogotá para combatir las
continuas incursiones de los realistas en la cos-
ta de Venezuela, hacen que el resentimiento
venezolano sea fácil de comprender. Cuando
Páez se declaró en rebelión, Bolívar, que había
estado en el Perú, se apresuró a regresar a Co-
lombia para evitar que su país se desmoronara.
Persuadió a De Paula que perdonara a Páez,
fortaleciendo así el sentimiento regional. Esto
contradecía los propios deseos de Bolívar, que
Retrato de Vicente Guerrero, pintor Anacleto Escutia.
Un amor Fuente: Museo Nacional de Historia. Dominio Público, disponible eran centralistas.76
desenfrenado en: Wikimedia Commons.
por la libertad
Al final, las tensiones en la incómoda unidad de
Antología de la
historia política liderazgo que había logrado después de haber la Gran Colombia llegaron a un punto crítico
de Bolivia
(1825-2020) luchado por la Independencia en tantos países. cuando Bolívar intentó revisar la Constitución
Por último, el estrés de hacer malabarismos original de Cúcuta (1821) en la Convención
142 con diferentes subalternos de voluntad fuerte de Ocaña en 1829. Mientras Bolívar impulsa-
y capaces, que sentían la necesidad de repre- ba una agenda centralista, con un presidente
sentar a sus regiones, separó a la Gran Colom- vitalicio y la posibilidad de nombrar a su suce-
Tomo I
bia. Como De Paula había querido, convertir sor, tanto De Paula como Páez se le opusieron.
1825-1952
a la Gran Colombia en una confederación laxa Al final, Bolívar logró imponer su voluntad en
habría disminuido estas tensiones, pero Bolí- la convención, con desastrosas consecuencias.
var pensó todo lo contrario. El regionalismo Una asamblea en Caracas se negó a reconocer
llegó a un punto crítico en La Cosiata, un en- a Bolívar como Jefe de Estado, lo que llevó a
frentamiento entre De Paula, que era del de- que Bolívar dejara la presidencia. Poco des-
partamento de Cundinamarca (ahora Colom- pués, Venezuela se declaró independiente, y
bia), y José Antonio Páez, que gobernaba el Ecuador siguió su ejemplo. Para 1830 la Gran
departamento de Venezuela. Colombia ya no existía.77
En 1824 el gobierno de Bogotá había decreta- Si bien la Gran Colombia era muy promete-
do que la Gran Colombia necesitaba movili- dora, el país no pudo mantenerse unido. Esto
zarse contra los intentos de España y la Santa era típico del problema de las nuevas naciones,
Alianza de reconquistar su antigua colonia. en las que era necesaria la experimentación en
Parte de este decreto requería que Venezue-
la presentara 50.000 hombres a ser enviadas 76 Ver Javier Ocampo López, ed., Santander y los su-
como tropas para defender el territorio. Páez cesos políticos de Venezuela, 1826. (Bogotá: Biblio-
pensó que ese decreto no era prudente y no lo teca de la Presidencia de la República, 1988);
Bushnell, The Santander Regime.
publicó durante un año. Finalmente, cuando
77 José Joaquín Guerra, La Convención de Ocaña (Cali,
se vio obligado a hacerlo, solo pudo reclutar a Colombia: Banco Popular, 1978); Bushnell, The
unos 800 hombres. Santander Regime.
la forma en que se organizaba el gobierno y se vasta región desde la templada California has-
gobernaban sus pueblos. En algunos casos, la ta las selvas tropicales de Costa Rica. México,
propuesta original funcionó y en otros no. en el momento de la Independencia, también
era una monarquía; en este caso, el Imperio
Además de una serie de otras cuestiones, por Mexicano, dirigido por Agustín Iturbide, un
ejemplo, el papel de la raza nunca se abordó ade- oficial realista que había hecho un trato con
cuadamente durante este período;78 el regiona- los guerrilleros patriotas remanentes que ha-
lismo abarcó una multitud de otras cuestiones bían coronado a Agustín I.
urgentes, como el papel del libre comercio, la
inversión en infraestructura y la representación Sin embargo, poco después, partes de lo que
política, solo para mencionar algunos. había sido el virreinato español más próspe-
ro –la Nueva España– se derrumbó. El impe-
La inflexibilidad de Bolívar no ayudó en nada, rio solo duró año y medio. En 1823 la región
mucho menos su idea de que sólo él podía re- centroamericana declaró su Independencia de
solver todos los problemas si le daban el poder México, separando a la Audiencia de Guate-
suficiente. Durante gran parte del período de mala del antiguo virreinato. En 1824 una nue-
existencia de la Gran Colombia, el país perma- va constitución liberal (federalista) trajo consi-
neció en conflicto, ya fuere con las guerrillas go una nueva organización del territorio y, en Primer periodo
realistas o, en la primera mitad de su existen- 1829, un nuevo presidente, Vicente Guerrero.
Bajo la
cia, enviando hombres y material a regiones Guerrero fue el primer jefe de Estado afrodes- Constitución de
1826 que organiza
al sur hasta fuera del dominio español. Esto cendiente en las Américas fuera de Haití. y constituye la
nación boliviana
tampoco ayudó, ya que le dio al país un tono (1825-1880)
militarista que no pudo costear por completo Inicialmente parecía que México podría le-
a largo plazo. vantarse y convertirse en un nuevo centro 143
de poder en la región, superando a las anti-
Al final, el Departamento de Cundinamarca, guas colonias inglesas al este de México. Al
destinado a llamarse nuevamente Colombia a final del período colonial, la Nueva España La fundación de
Bolivia
partir de 1863, siguió sacudido por la pugna era la colonia más próspera de la metrópoli, en el contexto
latinoamericano,
entre federalistas y conservadores, mientras reemplazando al Virreinato del Perú, que en 1825-1830
que Venezuela, al menos por algunas décadas, el siglo XVII había sido la región más vibran-
quedó en manos del presidente Páez. Ecuador te del Imperio español. La minería de plata
también fue un poco más estable, con el gene- superó a la de la región andina, produciendo
ral venezolano Juan José Flores al frente del al menos un 15 por ciento más para la Co-
país hasta 1845. rona en 1810.79 La economía estaba bastante
diversificada; mientras que la minería de pla-
2.7. México: De imperio a República pobre ta importaba en el centro y cerca del norte
del país, otras regiones producían produc-
México, después de la Independencia en 1821, tos importantes. El norte del país tenía una
ocupaba uno de los territorios más grandes de gran economía ganadera basada en enormes
América. Era más grande que Estados Unidos, haciendas, que sobrevivieron a las guerras de
que habían adquirido recientemente el terri- Independencia. La región de Oaxaca produ-
torio de Luisiana, y se extendía desde Oregón cía cochinilla, principalmente de miembros
hasta la frontera con Panamá, abarcando una
144
Mapa 2: “Mapa de los Estados Unidos Mexicanos: según lo organizado y definido por las diversas leyes del Congreso de esa República”.
Fuente: Library of Congress Geography and Map Division Washington, D.C. http://hdl.loc.gov/loc.gmd/g4410.fi000007
Tomo I
1825-1952
de comunidades indígenas. La región de Ve- lenguas indígenas la lengua materna de la ma-
racruz a lo largo del Golfo de México cul- yoría de las personas. Allí, la región montañosa
tivaba vainilla, también principalmente, por estaba densamente poblada por comunidades
pequeños agricultores.80 indígenas que habían existido durante milenios.
Hacia el norte, más personas reclamaban el esta-
México también era la colonia más poblada, tus de mestizo o europeo, pero la población era
con alrededor de cinco millones y medio a seis mucho más escasa. Las áreas en gran parte bajo
millones y medio de habitantes, sin contar Cen- el control del gobierno mexicano incluían los
troamérica. La mayoría de la población era in- centros mineros de plata alrededor de Zacatecas
dígena, especialmente hacia el centro y sur del y un poco más al norte. A partir de ahí, una gran
país, siendo el náhuatl, el maya y muchas otras brecha de haciendas principalmente ganaderas
donde grupos indígenas como los apache, los
tarahumaras y otros vivían en pequeñas aldeas.
80 Ver, por ejemplo, John Tutino, The Mexican Heart-
land: How Communities Shaped Capitalism, a Nation,
and World History, 1500-2000 (Princeton: Princeton Más al norte había islas de control mexicano,
University Press, 2018); Emilio Kourí, A Pueblo Di- como en Nuevo México, donde los colonos
vided: Business, Property, and Community in Papantla, cultivaban los valles y compartían su espacio
Mexico (Stanford, California: Stanford University
con los Pueblo, que se habían integrado parcial-
Press, 2004) y Charles H. Harris, A Mexican Family
Empire, the Latifundio of the Sánchez Navarros, 1765- mente en el cuerpo político mexicano. Más al
1867. (Austin: University of Texas Press, 1975). oeste, las misiones en California y las ciudades
que surgieron junto a ellas y los fuertes también Ciudad de México y experimentando la mise-
contenían una población escasa que se contaba ria del campo mientras intentaba sobrevivir a
solo en cientos o unos pocos miles. Al menos las fuerzas anti insurgentes. Una vez que ter-
un tercio, si no más, del territorio reclamado minó el experimento imperial con el exilio y
por México estaba en manos de pueblos indí- luego de la muerte de Iturbide, una junta mi-
genas que no aceptaban la hegemonía del Esta- litar de exlíderes guerrilleros se apoderó del
do mexicano. Esta zona, más allá de Santa Fe, país. Al final, esto resultó en la Constitución
Nuevo México o Tucson, Arizona, estaba do- de 1824, un documento completamente fe-
minada militarmente por los pueblos coman- deralista que utilizó la Constitución de Esta-
ches, que estaban en proceso de desplazar a los dos Unidos de 1789 como modelo. Pero los
apaches, que anteriormente habían dominado centralistas estaban dispuestos a luchar por su
la región. También hubo un puñado de perso- modelo y, como resultado, hubo un enfrenta-
nas de ascendencia africana, la mayoría agrupa- miento entre ambos bandos.82
das a lo largo de la costa del Caribe.81
El segundo fue la frontera y los intentos fallidos
México enfrentó tres problemas importantes de intentar mantener a su población a salvo. Los
después de sus largas guerras de Independen- comanches, que habían sido una potencia en
cia. El primero fue ideológico. La razón de la ascenso en el centro-sur de América del Nor- Primer periodo
inesperada alianza entre el realista Iturbide y te, amenazaron la vasta frontera norte, inclui-
Bajo la
los restos de la guerrilla patriota fue que gente dos Nuevo México y Texas. Como un medio Constitución de
1826 que organiza
como Iturbide trabajaba con los patriotas por- para fortalecer la frontera texana escasamente y constituye la
nación boliviana
que los realistas se habían enterado de que un poblada, México permitió la inmigración ilimi- (1825-1880)
ejército revolucionario había impuesto a Fer- tada a la región, incluidos los agricultores y ga-
nando VII la Constitución de 1812, un docu- naderos de algodón a los Estados contiguos. En 145
mento liberal. 1822, el líder de estos inmigrantes, Stephen F.
Austin, se instaló con muchos más a lo largo del
Los realistas, profundamente conservadores río Brazos. Al final, esto provocaría la secesión La fundación de
Bolivia
y oriundos de un lugar que había sido el cen- de Texas en 1836. De hecho, la frontera norte en el contexto
latinoamericano,
tro del poder colonial durante siglos, sintie- era un problema constante para los mexicanos. 1825-1830
ron que era mejor conspirar con las débiles Las redadas de los comanches (y el comercio
fuerzas patriotas y declarar la Independencia, con otros), así como las de los apaches, desesta-
que aceptar la constitución progresista y per- bilizaban las comunidades fronterizas y las obli-
der sus privilegios. Aunque el primer imperio gaban a buscar ayuda del gobierno de la Ciudad
mexicano duró solo año y medio, demostró de México.83
que los conservadores, que tendían a ser cen-
tralistas y partidarios de mantener el poder
centrado en la antigua capital virreinal, eran 82 Timothy E. Anna, The Mexican Empire of Iturbi-
de (Lincoln: University of Nebraska, 1990); Josefina
poderosos. Zoraida Vázquez, ed., El establecimiento del federa-
lismo en México, 1821-1827 (México: Centro de Es-
La fracción patriota tendió a ser federalista, tudios Históricos, Colegio de México, 2003).
83 Pekka Hämälaïnen, The Comanche Empire (New
recordando muy bien el poder coercitivo de la
Haven: Yale University Press, 2009); Brian De-
Lay, War of a Thousand Deserts: Indian Raids and the
U.S.-Mexican War (New Haven, Conn: Yale Uni-
81 Robert McCaa, “The Peopling of Mexico from versity Press, 2010); William B. Griffen, Utmost
Origins to Revolution,” Richard Steckel y Michael Good Faith: Patterns of Apache-Mexican Hostilities
Haines eds., The Population History of North America in Northern Chihuahua Border Warfare, 1821-1848
(Cambridge: Cambridge University Press, 1987), (Albuquerque: University of New Mexico Press,
241-304. 1989).
Un amor
desenfrenado
por la libertad
Antología de la
historia política
de Bolivia
(1825-2020)
146
El tercer problema era que la Ciudad de Mé- Una parte de este problema fue que las gue-
xico tenía poco que dar para promover el rras de Independencia habían causado estra-
desarrollo de una estabilidad uniforme. El gos económicos en gran parte de las partes
gobierno estaba perpetuamente escaso de más productivas de México. La mayoría de las
dinero y tenía que obtener recursos de pres- famosas minas de plata se habían paralizado
tamistas, llamados agiotistas, a tasas a menu- y ya no producían. Asimismo, muchos de los
do usureras. Los impuestos que esperaba re- latifundios que habían producido gran parte
caudar simplemente no aparecían; habiendo de las abundantes cosechas en lugares como
asumido el Estado la gran deuda del régimen el Bajío, el granero de México y una impor-
colonial, estuvo en el hoyo financiero desde tante zona minera, ahora eran manejados por
el principio.84 Ésta, la colonia más rica del los campesinos que no estaban dispuestos a so-
imperio español, se convirtió así en el país meterse nuevamente a la hegemonía terrate-
más endeudado ni bien salió de las guerras de niente. Como resultado, la oferta a los centros
Independencia. urbanos y mineros cayó, lo que aumentó los
precios. También significaba que los terrate-
nientes no tenían el control como lo habían
84 Barbara A. Tenenbaum, The Politics of Penury: Debt
and Taxes in Mexico, 1821-1856 (Albuquerque: Uni-
detentado en el período colonial. La década
versity of New Mexico, 1986). de 1820, en ciertas regiones de México, había
experimentado en la práctica una reforma Francisco de Miranda, quien había iniciado la
agraria efectiva, aunque no sancionada por el idea de la Independencia hispanoamericana,
débil Estado mexicano.85 había viajado por el país justo después de la
Independencia a principios de la década de
En resumen, en la década de 1820 México era 1780 y había conocido a muchos de los líde-
un país en crisis. Se batió entre dos (o quizás res de la nueva República, tomó muchas ideas
más) visiones políticas radicalmente diferen- de Estados Unidos. Del mismo modo, Bolí-
tes, con el breve período imperial superado var había comparado, en varios discursos, el
por un gobierno federalista débil. Las riquezas sistema de gobierno de Estados Unidos con
por las que la Nueva España había sido famosa los tipos de gobierno que quería ver en los te-
habían desaparecido en gran medida duran- rritorios que había liberado.86 Su dinamismo
te las crueles guerras de Independencia que, económico fue también un modelo para los
como en los Andes, se habían convertido prin- nuevos países emergentes en el hemisferio. La
cipalmente en un conflicto de baja intensidad mayoría de los países al sur de EEUU también
que se parecía más a una guerra civil destruc- esperaban invadir sus propios territorios in-
tiva que a un conflicto convencional con una dígenas y así “civilizar” su espacio según las
serie de batallas fijas. líneas que reclamaron cuando los imperios es-
pañol y portugués colapsaron. Su federalismo Primer periodo
El débil gobierno no tenía la capacidad para fue una de las estrellas guía de los liberales,
Bajo la
recaudar suficientes impuestos y por lo tanto que veían el federalismo como un antídoto Constitución de
1826 que organiza
se hizo dependiente de préstamos usureros contra la abrumadora herencia colonial, que y constituye la
nación boliviana
que mermaron aún más el Tesoro. Este Esta- había favorecido el control centralista de las (1825-1880)
do miserable también era incapaz de proteger capitales virreinales.
a sus ciudadanos, como en las fronteras del 147
norte. No es de extrañar que durante este pe- Existían poderosas razones para el dinamismo
ríodo la antigua Nueva España perdiera sus de Estados Unidos, aunque también mani-
territorios meridionales de la Audiencia de festaba debilidades subyacentes. En la década La fundación de
Bolivia
Guatemala después del colapso del imperio. de 1820, EEUU había superado la humillante en el contexto
latinoamericano,
Pasarían muchos años antes de que un Méxi- guerra de 1812 cuando las tropas británicas sa- 1825-1830
En 1823 la mayor parte de América Latina ya En resumen, Estados Unidos era un país di-
había eliminado el dominio español y portu- námico en la década de 1820 que comenzaba
gués, con algunos remanentes como el Virrei- a emerger como una potencia regional. La
nato del Perú aún en Cuzco (y Alto Perú). Las inmigración todavía no era un factor impor-
Repúblicas recién constituidas en el hemisferio tante en su crecimiento demográfico, que fue
acogieron con agrado esta declaración, ya que rápido. El crecimiento económico fue consi-
indicaba que EEUU apoyaría a los países re- derable y lo hizo a través del libre comercio de
cientemente descolonizados contra cualquier productos agrícolas, en su mayoría de algodón Primer periodo
reconquista europea. La aparente defensa del del Sur, y políticas arancelarias que protegían
Bajo la
republicanismo hemisférico fue especialmen- su creciente industria textil, ubicada en Massa- Constitución de
1826 que organiza
te importante debido al resurgimiento de la chusetts y otros estados del noreste. También y constituye la
nación boliviana
monarquía en Europa en la década de 1820, tenía problemas subyacentes. Uno fue su po- (1825-1880)
con la Santa Alianza (Austria-Hungría, Prusia lítica cruel hacia los pueblos indígenas dentro
y Rusia) conspirando activamente para que la de sus fronteras. Aún más importante, el auge 149
monarquía borbónica en España intentara re- del algodón se basó en la esclavitud africana,
cuperar sus colonias. que continuó extendiéndose hacia el oeste. Sin
embargo, en la década de 1820, los colonos La fundación de
Bolivia
Sin embargo, durante varias décadas la Doc- occidentales se habían enfrentado a socieda- en el contexto
latinoamericano,
trina Monroe fue, en el mejor de los casos, un des indígenas nómadas basadas en caballos, a 1825-1830
gesto simbólico, ya que EEUU no tenía el po- las que fueron incapaces de conquistar, lo que
der de hacer cumplir esta doctrina mucho más impidió que se expandiera en las fértiles llanu-
allá de sus propias fronteras. En la década de ras del centro de América del Norte.
1820, la única expansión de Estados Unidos
a expensas de otra potencia fue la compra de
Florida a España en 1821, antes de la decla- 3. Bolivia y Latinoamérica
ración de la doctrina por parte del presidente en el espectro del mundo
Monroe en su discurso sobre el estado de la
Unión de 1823. ¿Cómo les fue a Bolivia y América Latina en
comparación con el resto del mundo? Por
En la década de 1820, EEUU no tenía ni una supuesto, es imposible en este breve espacio
armada ni un ejército que pudieran proyectar- hablar de todos los países del mundo. Pero es
se más allá de sus fronteras, aunque quisieran. bueno situar a la región, así como a Bolivia, en
90 Se ha escrito mucho sobre la Doctrina Monroe. 91 Don M, Coerver and Linda B. Hall, Tangled Desti-
Ver, por ejemplo, Peter H. Smith, Talons of the Ea- nies: Latin America and the United States (Albuquer-
gle: Latin America, the United States, and the World que: The University of New Mexico Press, 1999),
(New York: Oxford University Press, 2013) 10-15.
el contexto más amplio en el que tuvieron que antiguas entidades coloniales pudo ponerse de
maniobrar y comparar sus niveles de desarro- acuerdo en una ecuación política que garan-
llo social, económico y político. Esto también tizara una buena gobernabilidad. En cambio,
puede servir para proporcionar una visión ge- casi inmediatamente surgieron facciones po-
neral final, para mostrar cómo era vivir en el líticas, y luego partidos, que tenían puntos de
mundo de la década de 1820 en una perspecti- vista diametralmente diferentes sobre cómo
va comparativa. debía constituirse el gobierno o quién debía
gobernar. La división entre federalistas y cen-
La cuestión obvia, pero crucial, a tener en tralistas, o liberales y conservadores rápida-
cuenta es que las décadas de 1810 y 1820 vie- mente empañó el consenso político después
ron el surgimiento de todo un continente y de que desapareció el primer vértigo tras la
medio del dominio colonial. Los problemas Independencia.
que todos los países discutieron anteriormente
eran similares en que todos eran naciones nue- Inicialmente ganó la versión liberal o fede-
vas, países que estaban en formación y donde ralista, ya que la mayoría de los líderes mili-
los ciudadanos habían descubierto cómo que- tares patriotas prefirieron un sistema que era
rían ser gobernados. Los gobernantes recien- antitético al régimen colonial. Sin embargo,
Un amor
temente triunfantes, a menudo los militares su incompetencia o quizás la insuficiencia de
desenfrenado que habían luchado en las guerras, también su visión política para las realidades sociales y
por la libertad
tenían poca idea (con algunas excepciones) y económicas de las nuevas Repúblicas provocó
Antología de la
historia política nunca antes habían gobernado un país. Dada una reversión a un gobierno más conservador
de Bolivia
(1825-2020)
la falta de recursos y el rechazo del pasado in- después de la década de 1820. Sólo en Brasil,
mediato, esta resultó ser una tarea enorme y con su continuidad con el antiguo régimen, y
150 que la mayoría no estaba a la altura. Paraguay, con su extraño híbrido de ideas li-
berales con dictadura centralista, escaparon a
El ejemplo de Simón Bolívar, revoloteando de estas dinámicas.
Tomo I país en país y siendo declarado dictador vita-
1825-1952
licio antes de tener que huir, es emblemático Es posible una comparación con Haití, que
de este problema. Indagar nuevas reglas, utili- había logrado la Independencia antes, aunque
zar instituciones como los tribunales, la Igle- pronto sirvió como contraejemplo para mu-
sia Católica, las tesorerías y otras que habían chos países latinoamericanos. En el caso de
sobrevivido a las guerras civiles, no fue fácil y Haití, que se había liberado efectivamente de
mucho menos porque el caos gubernamental Francia en 1804, sus orígenes en una revuel-
que se produjo durante la transición hizo que ta de esclavos dificultaban la comparación. Su
hubiera pocos recursos para implementar po- toma de posesión de la parte española de la
líticas. Esto se vio exacerbado por el hecho de isla Hispaniola y su sometimiento de la pobla-
que los militares absorbieron gran parte de los ción allí después de 1822 bajo la presidencia
presupuestos, dejando aún menos para otras de Jean-Pierre Boyer, fue aún menos atracti-
funciones gubernamentales. El problema de la va.92 Después de todo, las fuerzas patriotas, en
falta de experiencia política era común en to-
dos los países, excepto en cierta medida Brasil,
92 Para Haiti, ver Carolyn E. Fick, The Making of
Paraguay y Buenos Aires, donde la transición Haiti: The Saint Domingue Revolution from Below
de colonia a Estado independiente había sido (Knoxville: University of Tennessee Press, 1990);
relativamente suave. Ada Ferrer, Freedom’s Mirror: Cuba and Haiti in the
Age of Revolution (Cambridge: Cambridge Universi-
ty Press, 2014); Johnhenry Gonzalez, Maroon Na-
Otro tema fue que, con la excepción de Para- tion: A History of Revolutionary Haiti (New Haven:
guay y, en cierta medida Brasil, ninguna de las Yale University Press, 2019); y Pons F. Moya, La
su mayoría de las elites criollas, habían evitado en Honduras Británica, e incluso en América
cuidadosamente una revolución social cuando del Sur, en Guyana, donde disputaba territorio
lucharon contra los españoles. con la Gran Colombia en su límite oriental.
Gran Bretaña en la década de 1820 parecía te-
En Brasil, la razón por la que continuó la mo- ner una posición admirable para aprovechar su
narquía de Braganza fue en gran parte como situación como amiga del movimiento inde-
medio para evitar las guerras civiles de las co- pendentista, pero desperdició la mayor parte
lonias españolas y permitir la continuación de de esa buena voluntad durante la misma dé-
la esclavitud. En muchos sentidos, Brasil fue el cada. Había apoyado a los patriotas insurgen-
contraejemplo de Haití. tes, ansiosos por conseguir un punto de apoyo
comercial en una región que había estado en
También lo fueron Cuba y Puerto Rico, las gran parte cerrada al comercio británico ex-
únicas posesiones importantes que permane- cepto a través del contrabando.
cieron en manos de España en las Américas.
La esclavitud siguió siendo una parte impor- Durante esta década, varios de los comandan-
tante de la razón por la que siguieron siendo tes de las fuerzas navales de la región, como
colonias. Ambos, y especialmente Cuba, eran en Chile y Brasil, eran británicos, y oficiales
prósperas economías de plantaciones de azú- militares como Francis Burdett O’Connor Primer periodo
car que dependían en gran medida del trabajo mantuvieron importantes puestos no solo en
Bajo la
esclavo. De hecho, después de la agitación que las fuerzas de Bolívar, sino más tarde, bajo los Constitución de
1826 que organiza
provocó la liberación de la economía azuca- presidentes de Bolivia Antonio José de Sucre y constituye la
nación boliviana
rera más próspera de Saint Domingue (ahora y Andrés de Santa Cruz. Los líderes patriotas, (1825-1880)
Haití), Cuba se había convertido en el pro- como parte de su programa de liberación, pro-
ductor de azúcar más importante y productivo metieron liberarse del yugo de la dominación 151
del mundo. Los hacendados no querían que comercial española. Esto significaba en térmi-
el caos de la Independencia causara su caída, nos prácticos el libre comercio con todas las
por lo que Cuba siguió siendo “la isla siempre naciones europeas, pero sobre todo con Gran La fundación de
Bolivia
fiel” a España. Durante la década de 1820 los Bretaña, que tenía la economía más dinámica en el contexto
latinoamericano,
españoles pensaron en usar la isla para volver a y cuya marina y buques mercantiles domina- 1825-1830
invadir el continente, aunque al final la agita- ban los mares. Invocando la declaración de
ción política en la propia España impidió que Estados Unidos del presidente Monroe, Gran
eso sucediera.93 Bretaña se convirtió en el defensor de la Inde-
pendencia latinoamericana.
El país más importante que afectó a todas las
antiguas colonias más allá del hemisferio fue El problema fue que Gran Bretaña no pudo
Gran Bretaña. En primer lugar, mantuvo vas- aprovechar su posición debido a una serie de
tas colonias en el hemisferio. El más grande factores. El más importante fue que el gran
era Canadá, que estaba prosperando, en parte auge económico que tanto Bolívar, Rivada-
debido a los leales que habían encontrado re- via y otros habían predicho, nunca se mate-
fugio después de ser expulsados de los rebel- rializó. Esto se debió a una serie de factores,
des Estados Unidos. Pero también mantuvo algunos de los cuales se mencionan anterior-
colonias en el Caribe, de las cuales Jamaica era mente. Las industrias británicas habían segui-
la más grande, a lo largo de la costa caribeña do produciendo textiles durante las guerras
napoleónicas y, una vez terminadas, les resultó
difícil vender todos sus productos a una Euro-
dominación haitiana 1822-1844 (Santo Domingo:
Librería La Trinitaria, 2013). pa que había sido postrada económicamente
93 Ferrer, Freedom’s Mirror. por los vastos ejércitos que habían atravesado
el continente, provocando estragos y destruc- para comenzar a trabajar en las minas de los
ción a su paso. Andes y México. Sin embargo, la mayoría de
las empresas eran especulativas y estaban des-
Los comerciantes británicos pensaron que los capitalizadas, vendiendo acciones en lugar de
territorios recién abiertos de Hispanoaméri- encontrar capital de inversión.
ca serían lugares ideales para vender sus ex-
cedentes. Sin embargo, con la excepción de Una vez que quedó claro que las famosas mi-
Brasil y, en cierta medida, la región del Río nas de Hispanoamérica necesitaban mucho
de la Plata, las propias nuevas Repúblicas más capital del que las empresas británicas
también se vieron devastadas y empobrecidas habían planeado utilizar debido al deterioro
por las guerras de Independencia. Entonces, durante la brutal guerra, estas empresas colap-
cuando la tela llegaba a su destino en las an- saron, llevándose consigo en 1825 la bolsa de
tiguas colonias, a menudo languidecía en los valores de Londres. Después de esta experien-
puertos, donde pocos podían comprar estos cia, el capital británico se secó. Los inversores
bienes. Como resultado, los precios de los británicos seguían asustados por la caída de
textiles se desplomaron, lo que dificultó la la bolsa y no empezaron a invertir en Hispa-
obtención de ganancias. Los precios de liqui- noamérica sino hasta la década de 1850. Otros
Un amor
dación de los textiles británicos compitieron países, como Francia, tampoco intervinieron,
desenfrenado con la industria textil local, arrasando gran en parte porque los británicos se lo pusieron
por la libertad
parte de ella, excepto en lugares de difícil difícil, pero también porque otros países ase-
Antología de la
historia política acceso como las alturas andinas del Cuzco o guraban que era una locura invertir en Améri-
de Bolivia
(1825-2020)
en Cochabamba. Los artesanos locales y los ca Latina en ese momento.95
fabricantes de textiles a menudo se quedaron
152 sin trabajo y se convirtieron en enemigos del El tercer problema fue financiero. Los bancos
régimen de libre comercio.94 británicos hicieron grandes préstamos a los go-
biernos hispanoamericanos, descontando enor-
Tomo I Otro tema importante fue la inversión en mes comisiones del crédito y proporcionando
1825-1952
minas y otras industrias similares. Los inver- solo una pequeña parte del dinero a los regí-
sionistas británicos pensaron que serían ellos menes en apuros. Este fue, por ejemplo, el caso
los que cosecharían los beneficios de las ricas de México, donde en 1824 el gobierno imperial
minas y otros recursos de América Latina des- mexicano obtuvo un préstamo de los bancos
pués de la Independencia. Enviaron agentes Goldsmitt y Barclay con sede en Londres por
a las antiguas colonias para explorar las posi- 32 millones de pesos. Después de las deduc-
bilidades y formaron muchas empresas, que ciones, el gobierno solo recibió 10 millones de
cotizaron en la bolsa de valores de Londres, pesos, pero fue responsable de pagar el mon-
to total. Asimismo, como hemos visto, en las
Provincias Unidas de La Plata, el gobierno de
94 Manuel Llorca Jaña. The British Textile Trade in
South America in the Nineteenth Century (Cambrid- Rivadavia recibió 570.000 libras esterlinas en
ge: Cambridge University Press, 2014); Tulio Hal- 1824 del Banco Barings, aunque tuvo que de-
perín Donghi, The Aftermath of Revolution in Latin volver un millón de libras esterlinas con intere-
America (New York: Harper & Row, 1973); del mis-
ses. Ninguno de estos préstamos se devolvió en
mo autor, “Economy and Society in Post-Indepen-
dence Spanish America,” The Cambridge History of el tiempo y empobreció a los gobiernos porque
Latin America, v. 3, Leslie Bethell, ed. (Cambridge:
Cambridge University Press, 1985), 299-345; Un
Aldeano, Bosquejo del estado en que se halla la riqueza 95 Guillermo Ovando Sanz, “British Interests in Po-
nacional de Bolivia presentado al examen de la Nación tosí,” HAHR, 45 (February, 1965): 64-87; D.C.M.
por un Aldeano hijo de ella. Año de 1830 (La Paz: Plu- Platt, Latin America and British Trade, 1806-1914
ral, 1994). (London: A and C Black, 1972).
tuvieron que dedicar una parte importante de luchas por la Independencia. El hemisferio
sus ingresos a cancelar la deuda.96 Este tipo de occidental se convirtió durante la década de
acuerdos financieros de los bancos británicos 1820 en una región principalmente de Repú-
en la década de 1820 era común entre la mayo- blicas, con algunas excepciones, la más rele-
ría de los países recientemente independizados vante para Bolivia, Brasil, ya que el efímero
del hemisferio; la excepción fue Bolivia.97 imperio mexicano ya había dejado de existir.
En el hemisferio subsistían todavía varias co-
A pesar de la incapacidad de Gran Bretaña lonias importantes; la mayoría estaban ubica-
para aprovechar al máximo su posición como la das en el Caribe (como Cuba y Jamaica) y en
principal potencia externa, siguió siendo el país el extremo norte Canadá seguía siendo una
con el que todos los países latinoamericanos colonia británica. Las tres colonias europeas
tuvieron que lidiar en la década de 1820. Esto que dominaban las Guyanas no eran relevan-
fue lamentable, ya que Gran Bretaña en la dé- tes para Bolivia, como tampoco lo eran las
cada de 1820 miró hacia otra parte, hacia India otras.
y China, donde parecía más fácil ganar dinero.
El único lugar donde los intereses británicos se Los países que más le importaban a Bolivia
mantuvieron fuertes y estables fue Brasil, don- eran sus vecinos inmediatos; sobre todo Perú,
de continuaron disfrutando de un tratado co- Chile y Argentina, en ese orden. De hecho, a Primer periodo
mercial favorable.98 Sea como fuere, Bolivia no pesar de la debilidad de Perú en general, su
Bajo la
tenía una relación fuerte con Gran Bretaña en disputa con Bolivia por la presencia de fuer- Constitución de
1826 que organiza
gran parte debido a su inestable acceso al mar. zas colombianas (y un presidente venezolano) y constituye la
nación boliviana
El puerto de Cobija, establecido en 1826, no condujo a la única intervención militar duran- (1825-1880)
tenía una casa de comerciantes británica antes te la década de 1820 cuando Perú pudo im-
de 1830 e incluso después de eso, los británicos poner su voluntad. Chile parecía aún lejano, 153
estuvieron notablemente ausentes.99 separado por el desierto más seco del mundo
y con un gobierno caótico, aunque la destre-
za naval de Chile tendría la capacidad de blo- La fundación de
Bolivia
4. Conclusión quear el acceso de Bolivia al mar. Como sabe- en el contexto
latinoamericano,
mos, este resultó ser trágicamente el caso en la 1825-1830
Bolivia nació en una región donde ya existían década de 1830 y nuevamente en la Guerra del
todos los estados circundantes, aunque mu- Pacífico (1879-1884).
chos habían emergido recientemente de las
Argentina en la década de 1820 estaba de-
96 Para México, ver Jan Bazant, “Mexico from Inde- masiado desorganizada para importar mucho
pendence to 1867,” The Cambridge History of Latin y Bolivia pudo obtener Tarija a pesar de las
America, 3: 429-430; para Argentina, ver H.S. Fer- protestas de Buenos Aires. Brasil, aunque dis-
ns, Britain and Argentina in the Nineteenth Century
putaba los territorios que Bolivia reclamaba
(Oxford: Clarendon Press, 1960).
97 Ver Reinhard Liehr, América Latina en la época de también, estaba en su mayor parte demasiado
Simón Bolívar: La formación de las economías nacio- lejos para ser motivo de gran preocupación.
nales y los intereses económicos europeos, 1800-1850 Dada la vasta región del Chaco que ninguno
(Berlin: Colloquium Verlag, 1989); Carlos Mari-
de los dos países podía penetrar, en la década
chal, Historia de la deuda externa de América Latina
(Madrid: Alianza, 1992). de 1820 Paraguay parecía estar casi en otro
98 Richard Graham, Britain and the Onset of Mo- continente.
dernization in Brazil, 1850-1914 (Cambridge:
Cambridge University Press, 1972).
A diferencia de otros países de la región, el
99 Fernando Cajías, La Provincia de Atacama, 1825-
1842 (La Paz: Instituto Boliviano de Cultura, Reino Unido no le importaba mucho a Boli-
1975), 279-282. via. No tuvo presencia diplomática formal en
el país hasta 1837. Por lo tanto, no estaba tan sociedades tenían pocos derechos y no podían
en deuda como sus vecinos con esa potencia desarrollar su potencial, ni siquiera en teoría.
imperial. Asimismo, la prometedora potencia Eso frenó a esas sociedades a mediano plazo.
hemisférica, Estados Unidos, no estableció re-
laciones con Bolivia hasta 1849. Más impor- Bolivia exhibió inestabilidad política, como
tante aún, Bolivia había sido prudente en no todas las demás antiguas colonias de América,
endeudarse con potencias externas y, como inmediatamente después de la Independencia.
resultado, era mucho menos susceptible a las Sin embargo, a diferencia de prácticamente
presiones externas de las grandes potencias cualquier otro país nuevo, en Bolivia no hubo
que sus vecinos. la bifurcación en dos facciones políticas cla-
ramente delineadas con ideologías opuestas.
En términos de composición interna, Bolivia Luego del liberalismo sin complejos de los ve-
era bastante similar a muchas otras nuevas Re- nezolanos inmediatamente después de la In-
públicas. Los descendientes de europeos eran dependencia, la administración de Santa Cruz
relativamente escasos en todo el hemisferio, presentó un modelo híbrido que mantuvo mu-
con la excepción de EEUU, y estaban agru- chas de las mejores reformas de la era de Su-
pados en gran parte en los centros urbanos. cre, pero revertió a medidas de la era colonial
Un amor
Lo mismo sucedía en Bolivia, aunque en las como la restitución del tributo indígena. Esto
desenfrenado ciudades había incluso menos que en otras mantuvo al país relativamente estable durante
por la libertad
partes. Tenía una población indígena mayori- una década, proporcionando al gobierno su-
Antología de la
historia política taria, como era el caso de México, la Confe- ficientes ingresos para fortalecerse. Ningún
de Bolivia
(1825-2020)
deración Centroamericana, Perú y Paraguay. otro país, excepto Brasil (por otras razones de
La presencia indígena fue una fortaleza para continuidad dinástica) pudo manejar esta es-
154 Bolivia, así como en otros lugares, ya que las tabilidad durante tanto tiempo durante este
comunidades fueron la fuente del dinamismo período tumultuoso.
económico una vez que disminuyeron la ma-
Tomo I yoría de las demandas de la era colonial sobre No se ha escrito lo suficiente sobre la eco-
1825-1952
sus recursos.100 nomía de la década de 1820 para la región,
principalmente porque faltan fuentes debido
Bolivia tuvo la suerte de que durante el perío- a un Estado débil o porque las fuentes están
do colonial sus habitantes españoles no habían demasiado dispersas. El comercio volvió rá-
participado mucho en la trata de esclavos afri- pidamente, aunque en toda la región el peso
canos. Significaba que la esclavitud, fuera de económico pasó al campo, ya que los centros
los Yungas, había sido poco común y prácti- urbanos no crecieron mucho durante este pe-
camente inexistente desde el comienzo de la ríodo. Las actividades de exportación en toda
República. La esclavitud se abolió en 1826 y la región hispanoamericana disminuyeron, en
esta decisión se ratificó varias veces a partir de parte debido a la agitación política del perío-
entonces. Tanto Argentina como Chile pro- do. La actividad económica interna (algo mu-
mulgaron leyes similares. Otros estados, como cho más difícil de medir) se volvió más impor-
Perú y Colombia, abolieron la esclavitud en la tante, pero pocos historiadores económicos
década de 1850, mientras que Brasil lo hizo han trabajado intensamente en esta época.101
tres décadas después. Estos últimos tres esta-
dos perjudicaron así sus propias economías, 101 Una de las pocas excepciones es Viviana Conti. Ver
ya que los seres humanos esclavizados en esas por ejemplo “La frontera argentino-boliviana”.
También ver Erick D. Langer, “Indian Trade and
Ethnic Economies in the Andes, 1780-1880,” Estu-
100 Ver, por ejemplo, Langer, “From Prosperity to dios Interdisciplinarios de América Latina y el Caribe,
Poverty”. 15 (2004): 9-33.
La década de 1820 fue un período de recons- Bibliografía
trucción, facilitado en algunos lugares por la
calma política (o muy poca interacción entre Aillón Soria, Esther y María A. Kirigin.
la política y la economía) o difícil por las fi- 2013. San Pedro: Testigo de los tiempos: Por
losofías económicas diametralmente opuestas la ruta del singani en Bolivia, siglos XVI-XXI.
del liberalismo de libre comercio y el protec- Sucre: Archivo y Biblioteca Nacionales.
cionismo conservador. En la mayoría de los Andrews, Joseph. 1827. Journey from Buenos
casos, como se discutió anteriormente, nin- Ayres, Through the Provinces of Cordova, Tu-
guna de las ideologías funcionó bien a nivel cuman, and Salta, to Potosi, Thence by the De-
de políticas, tanto por la debilidad del Estado serts of Caranja to Arica, and Subsequently, to
como por la incapacidad de Gran Bretaña u Santiago de Chili and Coquimbo, Undertaken
otros países externos para hacer que las políti- on Behalf of the Chilian and Peruvian Mining
cas de libre comercio valgan la pena. También Association, in the Years 1825-26. by Captain
en este caso, Brasil fue la excepción, aunque Andrews. London: John Murray.
el crecimiento económico durante la década Anna, Timothy E. 1990. The Mexican Empire of
de 1820 se estancó.102 La ausencia de deuda Iturbide. Lincoln: University of Nebraska.
externa de Bolivia significaba que no tenía el Arana, Marie. 2013. Boliívar: American Libera-
tipo de problemas de balanza comercial que tor. New York: Simon and Schuster. Primer periodo
tenían otros países. Areces, Nidia R. 2007. Estado y frontera en el Pa-
Bajo la
raguay: Concepción durante el gobierno del Dr. Constitución de
1826 que organiza
En resumen, a pesar de sus orígenes tardíos, Francia. Asunción: Universidad Católica. y constituye la
nación boliviana
Bolivia nació privilegiada en comparación con Barickman, B. J. 1998. A Bahian Counterpoint: (1825-1880)
la mayoría de las antiguas colonias del he- Sugar, Tobacco, Cassava, and Slavery in the
misferio occidental. Las guerras de Indepen- Recôncavo, 1780-1860. Stanford: Stanford 155
dencia habían causado un gran daño, pero la University Press.
capacidad del país, especialmente debido a su Barragán, Rossana. 1999. Indios, mujeres y ciu-
población indígena, sus grandes recursos y su dadanos: Legislación y ejercicio de la ciudada- La fundación de
Bolivia
liderazgo competente en la cima, hizo que se nía en Bolivia (Siglo XIX). La Paz: Editorial en el contexto
latinoamericano,
convirtiese en uno de los países más podero- Diálogo. 1825-1830
sos y exitosos durante la siguiente década. Si Barrán, José P. y Benjamín Nahum. 1989. Ba-
bien hubo luchas políticas internas dentro de ses económicas de la revolución artiguista.
Bolivia y conflictos con Perú y las Provincias Montevideo: Temas Universitarios.
Unidas, Bolivia aumentó de tamaño con la ad- Basadre, Jorge. 2002. La iniciación de la Repú-
quisición de Tarija. Sus vecinos circundantes blica: Contribución al estudio de la evolución
estaban en una posición relativamente más política y social del Perú. Lima: Universidad
débil, con la excepción de Brasil, de poca re- Nacional Mayor de San Marcos.
levancia para la Bolivia en la década de 1820. Bauer, Arnold J. 2008. Chilean Rural Society
Fue un buen comienzo para un país que había from the Spanish Conquest to 1930. Cam-
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Charcas/Bolivia en la órbita de las Independencias
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Víctor Peralta Ruiz
GEA-CCSH-CSIC, Madrid
Primer periodo
Resumen 1825, cuando se transformó en la República
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E
1826 que organiza
n este trabajo se demuestra la impor- y constituye la
nación boliviana
tancia estratégica de la Audiencia de Las más recientes investigaciones han proble- (1825-1880)
Charcas en el proceso que condujo a matizado y esclarecido la extrema inestabilidad
la consumación de las Independencias hispa- vivida por la sociedad charquina en un contex- 163
noamericanas. Como resultado del estallido to signado por la permanente ocupación mili-
de la revolución de mayo rioplatense, su ane- tar de su territorio; su inmersión en una gue-
xión al virreinato del Perú desde 1810 hasta rra civil originada por la confrontación bélica Charcas/Bolivia
en la órbita de las
1824, conllevó que el comportamiento de los entre los ejércitos expedicionarios peruano y Independencias
hispanoamericanas
actores sociales charqueños fuese clave en el rioplatense; la contradictoria oscilación de sus
desarrollo tanto de la revolución como de la provincias por la autonomía y por la Indepen-
contrarrevolución en el continente. A lo lar- dencia respecto a España, Perú y Río de la
go del trabajo se resalta la importancia de los Plata; y, por último, pero no por ello menos
escenarios políticos suscitados en España, Río importante, la terca apuesta de los charquinos,
de la Plata, Perú, Chile y Nueva Granada para a través de guerrillas o republiquetas, por pre-
comprender la centralidad política de la Au- servar su identidad territorial, política y jurídi-
diencia de Charcas. ca al margen de las aspiraciones hegemónicas
de los centros de poder situados en Madrid,
Palabras clave: Independencias; Hispanoamé Lima y Buenos Aires.1
rica; Charcas; revolución; contrarrevolución.
Bajo la
Constitución de
El aplastante triunfo en julio de 1807 de los Fernando VII de España, c. 1814, Pintor Vicente López. 1826 que organiza
y constituye la
defensores de Buenos Aires, liderados por Fuente: Museo del Prado. Dominio Público, disponible en: Wikime-
nación boliviana
dia Commons.
Martín de Alzaga, sobre las tropas de ocu- (1825-1880)
Bajo la
Constitución de
1826 que organiza
y constituye la
nación boliviana
(1825-1880)
171
Primeras páginas de la Constitución de Cádiz, 1812, España.
Fuente: generaldavila.files.wordpress.com/2016/07/pepa2.jpg
Charcas/Bolivia
en la órbita de las
Las negociaciones emprendidas por Buenos respecto de sus capitales (tales los casos de Independencias
hispanoamericanas
Aires para incorporar a los representantes de Santa Cruz de la Sierra y de Jujuy) ni evitar los
las ciudades del interior dieron como resulta- conflictos nacidos de los procesos electorales
do que la junta de gobierno original se am- en otras (tales los casos de Tucumán y Santia-
pliara a una Junta Grande conformada el 18 go del Estero)”.10
de diciembre de 1810. El camino era muy si-
milar al seguido por la Junta Central española La fallida estrategia de negociación bonaeren-
en su proceso de constitución inicial. Lo fue se con sus periferias tampoco fue suficiente
más cuando la Junta Grande el 10 de febrero para evitar la ruptura e independencia de la
de 1811 decretó la creación en todo el territo- gobernación del Paraguay en 1811, la per-
rio de juntas provinciales y subalternas, estas manente rebeldía de la plaza de Montevideo
últimas aludiendo a las ciudades y villas con y, por último, la pérdida definitiva de la Au-
representación, en un propósito de delegar diencia de Charcas como resultado de la gue-
poderes y de paso legitimar a Buenos Aires rra civil que la enfrentó con el ejército realista
como espacio de consenso. peruano entre 1811 y 1815. En este último
caso, conforme la vía militar para combatir al
Pero el problema estuvo en que las atribu-
ciones limitadas concedidas a sus cuerpos
10 Marcela Ternavasio, Gobernar la revolución. Poderes
colegiados “no pudieron frenar los reclamos en disputa en el Río de la Plata, 1810-1816, Buenos
de autonomía de jurisdicciones subalternas Aires, Siglo Veintiuno Editores, 2007.
ejército de Abascal en el Alto Perú iba de fra- y Túpac Katari (Julián Apaza) en La Paz en
caso en fracaso, se incrementó la decepción y 1781.12 El segundo antecedente se correspon-
el desafecto de las autoridades charqueñas con dió con la imitación de las tácticas guerrilleras
las autoridades de Buenos Aires. y fomento de juntas de gobierno que eclosio-
naron en España inmediatamente después de
Después de la derrota de las tropas de Gon- producirse la invasión francesa.13
zález Balcarce ante Goyeneche, vino una
Segunda Expedición Auxiliadora bajo la con- Al estallido de revueltas indígenas en Oruro
ducción de Manuel Belgrano (1812 a 1814), entre 1810 y 1811 siguió el asentamiento de
la misma que tras sucumbir ante el ejército zonas controladas por las guerrillas, también
de Pezuela dio paso a la Tercera Expedición llamadas “republiquetas”, entre las que desta-
Auxiliadora de José Rondeau (1814 a 1816). caron la cochabambina de Ayopaya, liderada
Pese a efímeros éxitos como el de alentar por José Miguel Lanza, y la paceña de Lare-
nuevas insurrecciones anti peruanas de las caja, comandada por los esposos Manuel As-
intendencias charquinas o de apoyar logísti- cencio Padilla y Juana Azurduy.14 Esta fue la
camente a las guerrillas indígenas, los ejérci- opción predilecta en que fue afianzándose una
tos auxiliares ni lograron la misión de recu- modalidad de autonomía popular de facto de
Un amor
perar Charcas ni contagiaron el espíritu de la Charcas frente a Lima y Buenos Aires, ade-
desenfrenado revolución rioplatense. Por el contrario, sus lantándose la misma como fórmula política a
por la libertad
derrotas además de la deserción generaron el la que años más tarde harían suya los llamados
Antología de la
historia política pánico a la revolución.11 “doctores de Chuquisaca”.
de Bolivia
(1825-2020)
Los combates bélicos que se produjeron entre Fue en medio de una contienda bélica inter-
172 los ejércitos peruano y rioplatense tuvieron un mitente y “a tres bandas” que se produjo la
tercer actor que fueron las guerrillas locales. aplicación del liberalismo hispánico en Char-
Sobre esto último, la población altoperuana cas. Sin embargo, el acatamiento de este nuevo
Tomo I que optó por la separación, en Cochabamba, experimento político trasladado desde España
1825-1952
Oruro, Santa Cruz y La Paz, en su confronta- quedó supeditado al grado en que la presencia
ción con las tropas peruanas adopto el sistema militar peruana garantizara la seguridad de las
de la lucha guerrillera. autoridades locales. Es decir, el orden inter-
no supeditó el limitado avance del liberalismo
Esta experiencia inédita en el marco de la In- político.
dependencia hispanoamericana tuvo dos an-
tecedentes. El primero fue la reedición de la Por orden de Abascal de 25 de enero de 1812
experiencia de lucha revolucionaria indígena se celebró el 13 de mayo en la sala capitular del
de carácter anticolonial en los Andes que ini- ayuntamiento de La Plata la elección del dipu-
ció Túpac Amaru II (José Gabriel Condorcan- tado de Charcas a las Cortes de Cádiz que re-
qui) en el Cuzco en 1780 y que prosiguieron sultó ser el prebendado Mariano Rodríguez de
Tomás Katari en Chayanta ese mismo año
12 Sergio Serulnikov, Revolución en los Andes. La era de
Túpac Amaru (Buenos Aires: Editorial Sudamerica-
na, 2010).
11 Alejandro M. Rabinovich, Anatomía del pánico. La 13 Jaime E. Rodríguez O., La independencia de la Amé-
batalla de Huaqui o la derrota de la revolución (1811) rica española (México: Fondo de Cultura Económi-
(Buenos Aires: Sudamericana, 2017); Alejandro ca, 1996).
Morea, “Las deserciones en el Ejército Auxiliar del 14 Marie-Danielle Demélas, Nacimiento de la guerra de
Perú durante la guerra de independencia en el Río guerrilla. El diario de José Santos Vargas (1814-1825)
de la Plata, 1810-1820”, Americanía. Revista de Es- (La Paz: Instituto Francés de Estudios Andinos y
tudios Latinoamericanos (2015): 159-197. Plural editores, 2007).
Olmedo por once votos.15 La orden para aplicar El hecho de estar reglamentada la elección de
la constitución llegó a la Audiencia en la época representantes a Cortes por un sistema de vo-
en que los generales Goyeneche y Tristán des- tación indirecto y popular en tres grados, indi-
pués de acabar con la primera expedición riopla- ca que en la misma, “estuvieron involucrados
tense creyeron erróneamente que podían asaltar todos los sectores de la población, demostrán-
Tucumán. La jura de la constitución gaditana se dose a partir de las realizadas en los pueblos
produjo en la capital charqueña el 5 de enero con mayoría de población indígena” que estos
de 1813 y el acto fue presidido por el general participaron en su calidad de ciudadanos que
Juan Ramírez en su condición de jefe político y les otorgaba su condición previa de vecinos.20
presidente de la Audiencia. Ese día en los feste-
jos destacó la colocación en el frontispicio de la
Casa constitucional de un dosel con “el augusto 2. El ciclo de 1814 a 1819
retrato de del señor don Fernando Séptimo”.16
1814 fue un año clave en la abrupta recolo-
En Potosí la carta política gaditana fue jurada cación de los escenarios externos que impac-
por las autoridades, corporaciones y vecinda- taron en el destino político de la Audiencia
rio el 8 de enero de 181317 y por esa fecha tam- de Charcas. Para comenzar, el experimento
bién debió entrar en vigor en las ciudades de liberal promovido por las Cortes de Cádiz fue Primer periodo
La Paz y Cochabamba que estaban bajo con- suprimido en España y las Indias por orden de
Bajo la
trol de los realistas. Ya en la época en que el Fernando VII apenas este recuperó la corona Constitución de
1826 que organiza
mando superior del ejército lo tuvo Pezuela, española. Fue el virrey Abascal el encarga- y constituye la
nación boliviana
se efectuaron elecciones a Cortes en Potosí el do de restaurar el absolutismo tanto en Perú (1825-1880)
19 de julio de 1814 y resultaron elegidos como como en Charcas, hecho que significó el re-
primer y segundo diputado, respectivamente, torno a las antiguas instituciones.21 173
el abogado José María de Lara y el cura Lucas
de Villarpando, resultando suplente el aboga- Las Audiencias de Lima, Cuzco y Charcas re-
do José de Oliveros.18 cuperaron su poder como máximas instancias Charcas/Bolivia
en la órbita de las
de justicia y los ayuntamientos perdieron su Independencias
hispanoamericanas
A esta misma junta reunida en Potosí le co- carácter representativo. Sin embargo, el retor-
rrespondió la elección como diputado por no de la monarquía española al statu quo previo
Charcas de Juan José Vargas. Por último, la a 1808, casi coincidió con el estallido de la re-
junta electoral de La Paz el 14 de julio de 1814 volución del 3 de agosto de 1814 liderada por
eligió como representantes a Cortes al canó- José Angulo en el Cuzco.
nigo Mariano Ruiz de Nabamuel, el abogado
José María de Asín y el alférez Mariano Mar-
cos Campos y como suplente el abogado José 20 Marta Irurozqui, “De cómo el vecino hizo al ciuda-
María Eyzaguirre.19 dano en Charcas y de cómo el ciudadano conservó
al vecino en Bolivia, 1809-1830,” en Revolución, in-
dependencia y las nuevas naciones de América, coord.
15 Archivo del Congreso de los Diputados, Madrid, Jaime E. Rodríguez (Madrid: Fundación MAPFRE
Documentación Electoral Exp. 1/010337 “Ciudad Tavera, 2005), 464-466; Marta Irurozqui, “Huellas,
de la Plata”. testigos y testimonios constitucionales. De Charcas
16 María Luisa Soux, El complejo proceso hacia la inde- a Bolivia 1810-1830”, en El laboratorio constitucional
pendencia de Charcas, 137. iberoamericano: 1807/1808-1830, coords. Antonio
17 Marie Danielle Demèlas, La invención política. Bo- Annino y Marcela Ternavasio (Madrid: AHILA-Ibe-
livia, Ecuador, Perú en el siglo XIX (Lima: IFEA-IEP, roamericana_Vervuert, 2012), 166-167.
2003), 180. 21 Víctor Peralta Ruiz, En defensa de la autoridad. Po-
18 AGI (Archivo General de Indias), Lima 804 “Elec- lítica y cultura bajo el gobierno del virrey Abascal. Perú
ciones Potosí y Charcas”. 1806-1816 (Madrid: Consejo Superior de Investi-
19 AGI, Lima, 804 “Elecciones La Paz 1814”. gaciones Científicas, 2002).
El autonomismo cuzqueño puede ser conside- El liderazgo militar de la expedición a La
rado la prolongación final de los juntismos his- Paz fue confiado por Angulo a los curas Juan
panoamericanos que eclosionaron desde 1809. Manuel Pinelo de Ica e Ildefonso de las Mu-
Este movimiento impactaría directamente en ñecas de Tucumán. Después de ocupar mili-
el complicado escenario bélico charqueño al tarmente Puno, Pinelo y Muñecas sitiaron y
promover Angulo tres expediciones militares tomaron La Paz el 24 de septiembre de 1814,
cuyo destino final fue la ocupación de La Paz, suscitándose cuatro días después, con motivo
Arequipa y Huamanga. Esta estrategia se ase- de la explosión de un polvorín en un cuartel
mejó a las utilizadas antes por juntas como la en el que murieron varios soldados cuzque-
bonaerense, bogotana, caraqueña o chilena, ños, la ejecución del gobernador intendente
que por este medio apuntaron a crear jun- marqués de Valdehoyos y de varias decenas
tas subalternas o provinciales que acatasen el de vecinos paceños de origen peninsular y
mando de una entidad central y suprema, en criollo.
este caso con la matriz rebelde establecida en
el Cuzco. Seguidamente, los cuzqueños conformaron
una junta de gobierno presidida por José As-
La revolución cuzqueña fue saludada por Ma- tete e integrada por Eugenio Medina y José
Un amor
nuel Belgrano cuando éste ya no comandaba Agustín Arze. Pero esta junta se disolvió cuan-
desenfrenado el Segundo Ejército Auxiliar. Desde Buenos do las tropas realistas al mando del general
por la libertad
Aires, Belgrano escribió a Angulo el 30 de Juan Ramírez recuperaron La Paz tras triunfar
Antología de la
historia política octubre de 1814 y le manifestó su júbilo por en la batalla de Achocalla el 2 de noviembre.
de Bolivia
(1825-2020)
el trascendental paso dado por la población Las fuerzas supervivientes de Pinelo y Muñe-
del Cuzco para liberarse de la opresión pe- cas se replegaron a Puno, en donde se unieron
174 ninsular. al ejército expedicionario del cacique indio
Mateo Pumacahua que había formado una
El pasaje más importante de la misiva de Bel- junta de gobierno en Arequipa.
Tomo I grano se resume en su deseo de que Cuzco y
1825-1952
Buenos Aires actuaran aliados para empren- Tras la derrota definitiva de los autonomistas
der una expedición militar a Lima con el fin cuzqueños en la batalla de Umachiri, el cura
de aplastar el despotismo español: “Nos es- Muñecas con las fuerzas que le quedaban fugó
trecharemos recíprocamente, para que nues- a Charcas y se estableció en el partido pace-
tras banderas tan admirablemente colocadas ño de Larecaja, en donde a mediados de 1815
en Montevideo, sean conducidas por mis conformó una republiqueta, la misma que
tropas y las respetables del Cuzco a tremo- apoyó al ejército rioplatense de Rondeau. La
lar sobre las baterías del Callao, para que de republiqueta de Muñecas fue exterminada por
oriente a occidente, y por los ángulos del uni- el ejército realista en febrero de 1816 y el sa-
verso aplaudan los nombres del alto y bajo cerdote tucumano fue asesinado cinco meses
Perú”.22 Por entonces, el Tercer Ejército Au- después cuando era trasladado como prisione-
xiliador del Perú bajo el mando de José Ron- ro al Cuzco.
deau combatía en varias regiones de Charcas
al ejército realista del brigadier Joaquín de la Por último, la derrota de los autonomistas chi-
Pezuela. lenos en la batalla de Rancagua el 2 de octubre
de 1814 frente al ejército realista peruano de
Abascal, no sólo supuso el fin del experimen-
22 Juan José Alcón, Diario de la expedición del mariscal
to de la Patria Vieja chilena sino que impactó
de campo D. Juan Ramírez sobre las provincias inte-
riores de La Paz, Puno, Arequipa y Cuzco (Lima, im- negativamente en la estrategia rioplatense de
prenta de don Bernardino Ruiz, 1815). recuperar Charcas por la vía de las armas.
El virreinato peruano, al conjurar el peligro la-
tente que representaba en el sur de su fronte-
ra la díscola actuación de la junta de gobierno
chilena, quedó sólo con la asignatura pendien-
te de derrotar a los autonomistas rioplatenses
y en ello concentró todos sus esfuerzos. La vi-
tal victoria realista de Pezuela sobre el Ejérci-
to Auxiliar de Rondeau en la batalla de Viluma
el 29 de noviembre de 1815, supuso la estoca-
da final al empeño rioplatense de reconquistar
militarmente la Audiencia de Charcas.
23 Sara Mata de López, Los gauchos de Güemes. Gue- 24 Guillermo Lohmann Villena, comp., Colección Do-
rras de independencia y conflicto social (Buenos Aires: cumental de la Independencia del Perú, Documentación
Editorial Sudamericana, 2008). oficial española, vol. XXII, t. II (1972), 44.
inoperante Asamblea General Constituyente El Congreso de Tucumán confirmó la separa-
de 1813 que le había sostenido. ción definitiva del Río de la Plata de España
al proclamarse el acta de Independencia de
En Buenos Aires, el Cabildo recuperó su pro- las Provincias Unidas de Sud-América el 9 de
tagonismo de 1810 y designó a las nuevas julio de 1816. A esta decisión soberana que
autoridades políticas y militares de todo el llevó a la constitución de una nueva nación,
territorio rioplatense. También correspondió simultáneamente, se iba a sumar un arriesgado
al Cabildo la creación de una Junta de Obser- cambio en la estrategia militar de lucha contra
vación con funciones legislativas. El 5 de mayo el gobierno virreinal peruano.
de 1815 la Junta sancionó un Estatuto provi-
sional para la dirección y administración del El general San Martín en su cuartel general
Estado en cuyo artículo XXX dispuso la con- de Cuyo contrarió el deseo de los diputados
vocatoria para la elección de diputados a un charquinos en Tucumán de que se enviará a la
Congreso constituyente que debía reunirse en Audiencia un Cuarto Ejército Auxiliador del
Tucumán.25 Perú. Contrariamente, respaldado por miem-
bros de la Logia Lautaro, San Martín ideó un
El 24 de marzo de 1816, bajo el breve inte- Plan Continental de lanzar una ofensiva mili-
Un amor
rinato como Director de Antonio Gonzá- tar contra el Perú ya no por el Alto Perú sino
desenfrenado lez Balcarce, se iniciaron las sesiones de una desde Chile previamente liberado del régimen
por la libertad
asamblea caracterizada por un trato más igua- absolutista.
Antología de la
historia política litario entre Buenos Aires y las provincias del
de Bolivia
(1825-2020)
interior. Los 36 diputados electos por vota- Este ataque final debía contener un carácter
ción popular indirecta procedían de todas las naval. En ese cometido fue secundado por
176 provincias rioplatenses a las que su sumó una los emigrados chilenos liderados por O’Hig-
nutrida representación de Charcas. gins. San Martín tuvo serias dificultades para
convencer a los políticos de Buenos Aires de
Tomo I En efecto, se otorgó representación a Chi- la viabilidad de su proyecto, pero finalmente
1825-1952
chas, Mizque, Cochabamba y Charcas, cuyos convenció al Director Juan Martín Pueyrre-
siete representantes fueron electos en Bue- dón. El 1 de julio de 1816 este nombró a San
nos Aires entre los emigrados altoperuanos. Martín comandante general del Ejército de los
Los diputados por Charcas durante el desa- Andes, integrado por rioplatenses y chilenos,
rrollo del Congreso “fueron artífices de sus que fue financiado por las Provincias Unidas
textos fundamentales, actuaron como diputa- y llegó a sumar en su máximo apogeo más de
dos presidentes/diputados secretarios desde cinco mil efectivos.
1816 a 1818, formaron parte de comisiones
asesoras del director supremo [Juan Martín] Simultáneamente, San Martín diseñó una
Pueyrredón y trabajaron en contra de la op- guerra de zapa contra el gobierno realista de
ción monárquica incaica, del traslado de la Marcó del Pont que consistió en forjar una
convención a Buenos Aires o de la renuncia red de espionaje encargada de obtener in-
a seguir enviando al Ejército del Norte a formación “sobre el estado de opinión y la
recuperar Charcas”.26 fuerza militar tras los Andes, y hacían circular
Bajo la
Constitución de
1826 que organiza
y constituye la
nación boliviana
(1825-1880)
177
Charcas/Bolivia
en la órbita de las
Independencias
hispanoamericanas
Mientras en las provincias del Litoral se forta- Los espías sanmartinianos también propor-
lecían los anarquistas o federalistas enemigos cionaron información sobre las discrepancias
del centralismo bonaerense, en las provincias dentro del gobierno virreinal de Pezuela y
del norte la unidad de acción se fragmentó al el malestar de la opinión pública. O’Higgins
quedar enfrentado Güemes con la disidencia aprovechó esta circunstancia favorable para
del tucumano Bernabé Aráoz contra el gobier- iniciar la primera fase de la ofensiva naval
no central.28 contra el Perú. A principios de 1819 el gobier-
no chileno financió el envío a las costas pe-
ruanas de una expedición naval bajo el mando
27 Beatriz Bragoni, San Martín. Una biografía políti- del almirante británico Lord Cochrane. Este
ca del Libertador (Buenos Aires: Ediciones Edhasa,
emprendió un primer bloqueo naval del Cal-
2019), 84.
28 Beatriz Bragoni, San Martín, 139. lao entre enero y junio de 1819 y un segundo
Primer periodo
Bajo la
Constitución de
1826 que organiza
y constituye la
nación boliviana
(1825-1880)
San Martín y O’Higgins pasando los Andes, 1909, Pintor Julio Vila y Paredes. 179
Fuente: http://www.elorejiverde.com/el-cuadro-originario/4425-san-martin-y-o-higgins-pasando-los-andes-autor-julio-vila-y-prades
bloqueo entre septiembre y diciembre de además de dos exilios. Un cambio de parecer Charcas/Bolivia
en la órbita de las
1819, provocando zozobra entre la población se fue produciendo en el pensamiento doctri- Independencias
hispanoamericanas
limeña que, por primera vez, percibió como nario de Bolívar cuando en la Carta de Jamaica
una traumática posibilidad la caída del régi- de 1815 escribió que:
men español.
es una idea grandiosa pretender formar de
Mientras el Ejército Libertador preparaba la todo el mundo nuevo una sola nación con
expedición naval que debía asestar el golpe un solo vínculo que ligue sus partes entre sí
definitivo al Perú realista, en el otro extremo y con el todo. Ya que tiene un origen, una
del hemisferio sur iba a reaparecer en el esce- lengua, unas costumbres y una religión, de-
nario independentista una personalidad cuyo bería por consiguiente tener un solo gobier-
proyecto político iba a ser a la larga determi- no que confederase los diferentes Estados
nante en el destino de Perú y Charcas: Simón que hayan de formarse; más no es posible,
Bolívar. porque climas remotos, situaciones diversas,
intereses opuestos, caracteres desemejantes,
En sus campañas militares anteriores al Con- dividen a la América.29
greso de Angostura, Bolívar se puso como ob-
jetivo exclusivo proclamar la Independencia
de Venezuela. Ello le significó dos fracasos
29 Simón Bolívar, Doctrina del Libertador (Caracas: Bi-
con la desaparición de la Primera Repúbli- blioteca Ayacucho y Banco Central de Venezuela,
ca en 1812 y la Segunda República en 1814, 2009), 84.
Un amor Bolívar en el Congreso de Angostura”, 1819, Pintor Tito Salas.
desenfrenado Fuente: Archivo Museo Nacional de Arte Venezuela en: https://contrapunto.com/cultura/tito-salas-la-historia-vista-desde-el-arte/
por la libertad
Antología de la
historia política
de Bolivia En este documento también planteó por pri- de febrero de 1819, Bolívar estuvo en condi-
(1825-2020)
mera vez la unión de Nueva Granada y Ve- ciones de llevar a la práctica la fase inicial de su
180 nezuela en una única República. Todo indica, sueño confederador.
como ha recordado John V. Lombardi, que
“gradualmente por la experiencia de ver la El Congreso de Angostura fue el instrumento
Tomo I guerra desde el Caribe, desde Colombia y des- legal por el que Bolívar pudo someter a Nueva
1825-1952
de diversas partes de Venezuela, Bolívar llegó Granada y Venezuela a la Ley Fundamental
a comprender que se trataba de una empresa que el 17 de diciembre de 1819 creó la Re-
continental; que el imperio español, siendo pública de Colombia. El Congreso de Cúcuta
una entidad continental, sólo podría ser re- de 1821 promulgó la constitución de la Gran
emplazado con un esfuerzo de todo el con- Colombia que unió a Cundinamarca con Ve-
tinente”.30 Este ideario a la vez separatista y nezuela, liberada tras la batalla de Carabobo
supranacionalista, sería puesto en práctica por del 29 de junio de 1821, y con Quito, aún en
Bolívar a partir de 1819 en un escenario ajeno manos españolas. Se iniciaba el camino hacia
a su Venezuela natal. la constitución del primer coloso republicano
de la América del Sur.31
Tras una nueva triunfal incursión militar del
Libertador en Nueva Granada que se inició 31 María José Afanador-Llach, “Una República co-
con la victoria de Boyacá el 7 de agosto de losal: la unión de Colombia, el acceso al Pacífi-
1819 y culminó con la huida del virrey Sáma- co y la utopía del comercio global, 1819-1830”,
Anuario Colombiano de Historia Social y de la Cul-
no y la ocupación de Santa Fe de Bogotá, el 15
tura 45 (2018), 35-63; Daniel Gutiérrez Ardila,
“La creación de la República de Colombia: de
30 John V. Lombardi, Simón Bolívar y el sueño de una la práctica gubernativa al diseño constitucional
América Unida (1819-1821)”, en Política y constitución en tiempos de
(https://redined.mecd.gob.es/xmlui/bitstream/ las independencias, coord. María Teresa Calderón
handle/11162/76720/00820093002641.pdf?se- (Bogotá: Universidad Externado de Colombia,
quence=1), 40. 2017), 203-228.
Al comenzar 1821 Bolívar envió al general que en España se hubiera restablecido la
Antonio José de Sucre a Guayaquil a comba- constitución, pero a la vez consideró que el
tir a las fuerzas realistas del general Melchor virrey estaba actuando más por instinto de
Aymerich con el objetivo de liberar a Quito supervivencia política que como partidario
de España y someterlo a la Gran Colombia.32 sincero de los principios liberales. No obs-
tante, San Martín accedió a reunirse con Pe-
zuela. A través de sus respectivos edecanes,
3. El ciclo de 1820 a 1826 ambos se reunieron en Miraflores entre el 30
de septiembre y el 1 de octubre de 1820, sin
El 10 de marzo de 1820 en España triunfó el llegar a ningún acuerdo al rechazar San Mar-
pronunciamiento liberal del general Rafael de tín las mezquinas condiciones de paz oferta-
Riego que obligó a Fernando VII a poner fin das por el virrey.
al absolutismo, jurar la Constitución de 1812
y convertirse en monarca constitucional. El La estrategia defensiva a ultranza por la que
restablecimiento del liberalismo hispánico fue optó Pezuela para hacer frente tanto al cerco
acatado por las autoridades de las posesiones de Lima emprendido por el Ejército Liber-
hispanoamericanas que seguían bajo el con- tador, como al bloqueo naval del Callao, dis-
trol de la Corona (Nueva España, La Habana, gustó a los oficiales realistas liderados por el Primer periodo
Puerto Rico, Quito, Perú y Charcas). jefe militar del Alto Perú, el general José de
Bajo la
la Serna, a quien el virrey mantenía retenido Constitución de
1826 que organiza
En Lima el virrey Pezuela ordenó el “entero en Lima. El 29 de enero de 1821, La Serna y constituye la
nación boliviana
cumplimiento” de la carta política gaditana apoyado por la Junta de Generales depuso a (1825-1880)
el 4 septiembre de 1820. Inmediatamente, se Pezuela y asumió el máximo cargo virreinal.
procedió a abolir definitivamente la Inquisi- Con esta nueva autoridad virreinal prosiguió 181
ción y se dispuso el restablecimiento de los la aplicación de las medidas liberales gaditanas
ayuntamientos constitucionales y las diputa- entre las que destacó el restablecimiento de la
ciones provinciales tal como ellos estuvieron libertad de imprenta. Charcas/Bolivia
en la órbita de las
constituidos en 1814. La entrada en vigor del Independencias
hispanoamericanas
segundo liberalismo hispánico coincidió, pa- La Serna pretendió valerse del momento li-
radójicamente, con el desembarco de la Expe- beral hispano para hallar una salida pacífica al
dición Libertadora del general San Martín en conflicto con el ejército de San Martín, pero
la bahía de Pisco el 8 de septiembre de 1820. el armisticio celebrado en Punchauca el 2 de
Pezuela al tomar conocimiento de este hecho, junio de 1821 fracasó.34 Sin embargo, la grave
en su condición de Jefe Político Superior de- crisis económica que atravesaba el virreinato
cidió remitir un pliego petitorio a San Martín por el desgaste de una prolongada guerra em-
en el que le propuso el cese de hostilidades y prendida fuera y dentro de sus fronteras, que
“tratar un acomodamiento haciéndole saber el se remontaba a 1810, le impidió la obtención
restablecimiento de la Constitución de la Mo- de los recursos económicos para financiar
narquía Española”.33 una ofensiva militar contra el ejército de San
Martín.35
San Martín al conocer el contenido del docu-
mento respondió que consideraba saludable 34 Ascensión Martínez Riaza, “Para reintegrar la Na-
ción. El Perú en la política negociadora del Trienio
Liberal con los disidentes americanos, 1820-1824”,
32 John Lynch, Simón Bolívar (Barcelona: Editorial Revista de Indias LXXI (2011), 647-692.
Crítica, 2006), 293. 35 Timothy Anna, La caída del gobierno español en el
33 Víctor Peralta Ruiz, La independencia y la cultura po- Perú. El dilema de la independencia (Lima: Instituto
lítica peruana, 287. de Estudios Peruanos, 2003).
El 5 de julio de 1821, al llegar a la conclusión nombramiento y añadía: han dado UU el único
de que la defensa de Lima era tácticamente in- paso que podía salvarnos”.36
útil, el virrey abandonó la capital y estableció su
cuartel general en Huancayo, en la sierra cen- Una de las primeras medidas del nuevo virrey
tral, donde reorganizó su ejército para comba- fue la remodelación del mando en el ejército
tir a los patriotas bajo una estrategia ofensiva. altoperuano. Los generales José de Canterac
y Gerónimo Valdés fueron promovidos, res-
La Independencia del Perú fue proclamada pectivamente, a mariscales de campo y co-
por el general San Martín en Lima el 28 de mandantes generales del ejército del norte y
julio de 1821, sin dejar de recordar que varias del sur. Olañeta, como subordinado de Valdés,
ciudades y poblados ocupados previamen- mantuvo su puesto de comandante general.
te por el Ejército Libertador optaron por su De este modo, Olañeta prosiguió su campa-
separación de España. Esta nueva situación ña militar contra el líder salteño Miguel de
derivó en la fragmentación del antiguo virrei- Güemes, cuyo poder se había afianzado desde
nato en dos territorios. El primer territorio se 1816 gracias a su alianza con la guerrilla de
correspondió con el Perú independizado y lo Ayopaya comandada por José Miguel Lanza.
integraron Lima y las provincias norperuanas
Un amor
de Piura, Lambayeque, Cajamarca, Chacha- En junio de 1821 Olañeta obtuvo un triunfo
desenfrenado poyas, Trujillo. significativo sobre esta coalición al causar una
por la libertad
partida suya la muerte de Güemes. La nueva
Antología de la
historia política El segundo territorio se mantuvo bajo control elite militar salteña celebró un armisticio con
de Bolivia
(1825-2020)
de la monarquía española con las intendencias Olañeta por el que, a cambio de la no inter-
de Tarma, Huancavelica, Huamanga, Cuzco, vención de aquellos en el Alto Perú, él se com-
182 Arequipa Puno y Charcas. Era el Perú gadita- prometía a no invadir Salta y Jujuy.37 Durante
no. Es en este contexto cuando Charcas iba a la coyuntura bélica entre 1821 y 1823, Char-
adquirir un inesperado protagonismo tanto en cas bajo la autoridad suprema de La Serna y la
Tomo I el marco de la contienda separatista peruana jefatura local de Olañeta experimentó la apli-
1825-1952
como en la consumación de la Independencia cación de las medidas liberales dispuestas por
en el área andina. la monarquía constitucional española. Se con-
formaron Diputaciones Provinciales en cada
Al conocerse la noticia del pronunciamiento una de sus intendencias (La Plata, Cochabam-
de Aznapuquio en el Alto Perú, los oficiales ba, La Paz, Potosí, Oruro y Santa Cruz).38
realistas reconocieron a La Serna y al jefe
máximo nombrado por este virrey: Pedro An- El desarrollo de los acontecimientos en el Perú
tonio de Olañeta. Si bien este lamentó que el independizado entre 1822 y 1823 iba a remo-
pronunciamiento de Aznapuquio provocara la delar definitivamente el escenario externo de
destitución de su antiguo jefe y amigo, encon- cara al desenlace definitivo de las contiendas
tró justificable el motivo del cambio de estra-
tegia para enfrentar a los patriotas dado por 36 José de La Serna, Manifestación que, de la criminal
los golpistas. conducta del general Olañeta hace a S. M. el virei (sic) del
Perú. Reimpresa a petición del brigadier D. Andrés Gar-
cía Camba (Manila, Imprenta de Sampaloc, 1825).
Al respecto, La Serna relató en su Manifesta- 37 Sara Emilia Mata, “Salta y la guerra de indepen-
ción que “el mismo Olañeta después de reco- dencia en los Andes Meridionales”, Jahrbuch für
nocerme, y prestarme obediencia como a la Geschichte Lateinamerikas 41: 223-246.
38 Núria Sala i Vila, “Derecho, poder y libertad’ a
primera autoridad de este territorio, escribió
propósito de las batallas por la autonomía juris-
confidencialmente al general Valdés felici- diccional entre las Audiencias del Cusco y Charcas
tándolo por la parte que había tenido en mi (1820-1825)”, Revista de Indias 266 (2016): 53.
bélicas entre realistas y patriotas en el área posibilidad de materializarse con el alejamien-
andina. El proyecto político del general San to definitivo del Libertador argentino.
Martín una vez establecido el Protectorado
fue el de establecer una monarquía constitu- Lo único discutido por Bolívar y San Mar-
cional regida en el mejor de los casos por una tín en la entrevista de Guayaquil fue la con-
nueva dinastía nobiliaria de origen europeo. veniencia de promover un príncipe europeo
Esta opción de gobierno se situó en un cami- como gobernante del Perú. Al mismo tiempo
no intermedio entre el inadmisible liberalismo que la rechazó, Bolívar preguntó a San Mar-
hispánico y el más temido gobierno liberal y tín acerca de la posibilidad de que Chile y las
democrático. Provincias Unidas apoyasen una confedera-
ción de los Estados Americanos como muro
El objetivo sanmartiniano era consolidar una de contención frente las ambiciones de una re-
forma de gobierno en el que quedaran res- conquista por parte de España. San Martín le
guardados los privilegios sociales y económi- indicó que quizás Chile pudiera apoyarla más
cos de la elite nobiliaria limeña. Pero algo dis- no las Provincias Unidas por sus insolubles
tinto fue el pensamiento político del segundo problemas internos.41
político con más poder del Protectorado: Ber-
nardo Monteagudo. Este inició una política de Tras la conclusión de la entrevista, San Martín Primer periodo
acoso y destrucción de la elite, especialmente decidió alejarse del Perú al comprobar su de-
Bajo la
la de origen peninsular, con el propósito de bilidad política. Como resultado de ello, Bolí- Constitución de
1826 que organiza
conformar en el poder una sociedad plena- var tuvo plena libertad para consumar la Inde- y constituye la
nación boliviana
mente identificada con el antihispanismo39. pendencia peruana en cuanto fuera convocado (1825-1880)
Pero aprovechando la ausencia de San Mar- por los gobernantes peruanos. Entre tanto, el
tín, quien había viajado a Guayaquil para en- Libertador caraqueño consumó el ideario de 183
trevistarse con Bolívar, se produjo el motín de Angostura y dispuso la anexión de Guayaquil a
Lima de julio de 1822. El mismo tuvo como la Gran Colombia el 31 de julio de 1822. Cabe
motivación la lucha contra el “despotismo” de recordar que Guayaquil, entre 1820 y 1822, Charcas/Bolivia
en la órbita de las
Monteagudo y fue liderado por el cabildo de se había constituido como un Estado inde- Independencias
hispanoamericanas
la capital y el presidente del departamento de pendiente pero también eran significativos los
Lima, José de la Riva Agüero.40 El desenlace partidarios de su incorporación al Perú y a la
fue la destitución y exilio de Monteagudo a Gran Colombia. El conflicto fue resuelto por
Guayaquil. Bolívar de modo desfavorable para los intere-
ses peruanos.
Dicho suceso, junto con el fracaso de la en-
trevista en Guayaquil, aceleró la renuncia de El período transcurrido entre 1822 y 1823 en
San Martín como Protector una vez que este el Perú independizado puede calificarse de de-
retornó al país. Paradójicamente, el proyec- sastroso. El primer Congreso Constituyente
to monárquico constitucional que potencial- establecido en Lima el 20 de septiembre de
mente convenía a la elite limeña perdió toda 1822 estuvo dominado por liberales y pro re-
publicanos. Este congreso encargó el mandato
ejecutivo a una junta gubernativa provisional
39 Gustavo Montoya, La independencia del Perú y el fan-
tasma de la revolución (Lima: Instituto de Estudios compuesta por tres diputados y presidida por
Peruanos e Instituto Francés de Estudios Andinos, el general José de la Mar. Pero el fracaso de
2002).
40 Carmen Mc Evoy, “El motín de las palabras: la caí-
da de Bernardo Monteagudo y la forja de la cultura 41 Armando Martínez Garnica, “La entrevista de
política limeña (1821-1822)”, Boletín del Instituto Guayaquil: Introducción y transcripción”, Procesos.
Riva Agüero 23 (1996): 89-139. Revista Ecuatoriana de Historia 37 (2013): 127-145.
la llamada “primera expedición militar a puer- autoridad y facultades otorgadas al Libertador
tos intermedios” en la cual el ejército patriota venezolano.
peruano con apoyo chileno fue derrotado por
los realistas, provocó la caída de esta efímera La operación política de Bolívar para desha-
junta. cerse de los dos “godos” peruanos, Tagle y Riva
Agüero, comenzó con la denuncia de la nego-
En efecto, como resultado del motín militar ciación secreta entablada entre este último y el
de Balconcillo del 28 de febrero de 1823 el virrey La Serna, que supuso el derrocamiento
congreso fue presionado por la elite limeña y exilio de Riva Agüero a fines de noviembre
para nombrar como presidente a José de la de 1823. Unos meses después, se produjo la
Riva Agüero. Sin embargo, el problema de caída de Tagle por su ineficaz actuación en
la ingobernabilidad siguió profundizándose. el motín del ejército chileno-argentino en El
Al producirse la reocupación de la capital por Callao, la misma que supuso la ocupación de
parte del ejército realista al mando del general la fortaleza por las fuerzas realistas del gene-
Canterac el congreso se refugió en El Callao. ral Rodil. Como resultado, el 10 de febrero de
1824 el Congreso Constituyente se declaró en
Este decretó la destitución de Riva Agüero receso indefinido, suspendió la presidencia de
Un amor
como responsable del fracaso de la “segunda Tagle y entregó la suprema autoridad política
desenfrenado expedición militar a puertos intermedios” y y militar de la República a Bolívar en calidad
por la libertad
nombró a José Bernardo de Tagle, marqués de Dictador.
Antología de la
historia política de Torre Tagle, como nuevo presidente. Riva
de Bolivia
(1825-2020)
Agüero desacató su relevo y no sólo trasladó Mientras la crisis se resolvía dramáticamen-
su gobierno a Trujillo generando una bicefalia te en el Perú independizado con el estable-
184 en el poder, sino que el 19 de julio de 1823 or- cimiento de una dictadura presidida por un
denó la disolución del congreso y su reempla- general venezolano, una grave alteración co-
zo por un senado que a su vez debía funcionar menzó a suscitarse en el Perú gaditano al esta-
Tomo I como consejo de Estado. llar el conflicto político, teñido de una instru-
1825-1952
mentalización ideológica, entre las máximas
El 8 de agosto tanto el Congreso Constituyen- autoridades del gobierno virreinal del Cuzco
te y el presidente Tagle calificaron la maniobra y Charcas.42
de Riva Agüero como la obra de un “déspota
absoluto” y por ello le declararon reo de alta El momento de la ruptura entre La Serna y Ola-
traición. No quedó otra alternativa a los legis- ñeta tuvo lugar a fines de 1823. El detonante de
ladores peruanos que convocar a Bolívar para esta ruptura fue el enfrentamiento entre Pedro
resolver la crisis gubernamental y evitar la avi- Antonio y el brigadier Rafael Maroto. En 1818
zorada caída del Perú independizado frente al éste había asumido el cargo de presidente de
militarmente fortalecido Perú gaditano. la Audiencia de Charcas y por jerarquía con-
sideraba que Olañeta debía estar sometido a su
El 10 de septiembre de 1823 el Congreso mandato. Pero Olañeta entendía lo contrario,
Constituyente otorgó los poderes dictatoria- que Maroto debía estar a sus órdenes.43
les exigidos por Bolívar para combatir al ejér-
cito realista. Por eso fue necesario que, una 42 Víctor Peralta y Marta Irurozqui, “Locos adora-
vez promulgada la Constitución, el presidente dores de Fernando. Pedro Antonio de Olañeta y
Tagle, resignado al cercenamiento de su po- el liberalismo hispánico en Charcas (1821-1825)”,
Anuario de Estudios Bolivianos, Archivísticos y Biblio-
der, publicase un decreto el 14 de noviembre
gráficos 20 (2014): 555-582.
que suspendió el cumplimiento de los artí- 43 Conde Torata, Documentos para la historia de la gue-
culos constitucionales incompatibles con la rra separatista del Perú. T. I. Exposición que dirige al
El 27 de diciembre de 1823 solicitó a La Ser- mandato absoluto y fiel abanderado del cato-
na la destitución del presidente y comandante licismo; de otro, afirmó que La Serna se em-
general de Charcas por su genio díscolo e in- pecinaba en resguardar el liberalismo gaditano
sociable y, al no conseguirlo, se rebeló contra por ambiciones personales que amenazaban la
Maroto.44 Las tropas de Olañeta partieron de supervivencia de la monarquía.
Oruro con dirección a Potosí y el 14 de ene-
ro de 1824 se encontraron con la negativa del La reacción de los militares realistas leales a
presidente y comandante de esa provincia, el La Serna fue la descalificación de Olañeta.
brigadier José Santos de la Hera, de poner a su Maroto advirtió a los pueblos que Olañeta,
disposición tanto las tropas de su guarnición “en combinación con las provincias de Jujuy y
como el numerario de la Casa de la Moneda. Salta”, procuraba del mismo modo envolver-
Olañeta calificó a La Hera de traidor al con- los en su ruina “bajo la apariencia de la Reli-
siderar que se había confabulado con Maroto gión y el Rey”.45 Esta afirmación obedecía a la
para arrebatarle su autoridad y por ello ordenó creencia de que Olañeta actuaba de modo en-
a sus tropas atacar la guarnición. Ésta no tardó cubierto como un agente subversivo a las ór-
en rendirse. El 5 de febrero de 1824, La Hera denes de las elites políticas de Salta. Por ello,
abandonó su refugio en la Casa de la Moneda, Maroto no dio credibilidad alguna a las pala-
capituló, fue apartado del mando político por bras de Olañeta de que Fernando VII hubiese Primer periodo
Olañeta y partió a Oruro. abolido el liberalismo constitucional.
Bajo la
Constitución de
1826 que organiza
Una vez sometido Potosí, Olañeta se dirigió La rebelión de Olañeta marcó la irreversible y constituye la
nación boliviana
con su ejército a ocupar La Plata. No solo pérdida de autoridad del virrey del Perú en (1825-1880)
pretendía deponer al gobernador que había Charcas, un dominio que se había afianzado
cuestionado su autoridad, sino también a los militarmente tras la dura represión de la época 185
diputados provinciales y alcaldes de la capital. de las juntas de gobierno de 1809.46 En vano
Ocupada el 10 de febrero de 1824 y abando- La Serna quiso restablecer el orden al dispo-
nada dos días antes por Maroto, fue escenario ner la comparecencia de Olañeta en el Cuzco. Charcas/Bolivia
en la órbita de las
también de la proclama del 4 de febrero a tra- Este hizo caso omiso a la requisitoria del vi- Independencias
hispanoamericanas
vés de la que volvía a anunciar que el “funes- rrey al mismo tiempo que también desconoció
to” segundo liberalismo hispánico había lle- la autoridad del general Valdés como jefe del
gado a su fin por deseo de Dios y del monarca Ejército del Sur.
español. A esto añadía que el único obstáculo
para alcanzar tal objetivo era el virrey “libe- Pero el descalabro fue a peor. Ensoberbeci-
ral” del Perú. do, Olañeta remitió a La Serna el bando de
Fernando VII en el que abolía la constitución
En efecto, con el objetivo de convencer a po- de Cádiz, ponía fin al Trienio liberal y pro-
tosinos y charquinos de que la monarquía es- clamaba la restauración absolutista. Al com-
pañola estaba de su parte, Olañeta asumió las probar la veracidad del documento, el 11 de
banderas del absolutismo. De un lado, trans- marzo de 1824 el virrey procedió a suprimir
mitió a los pueblos el propósito de Fernan- el régimen liberal en todas las intendencias de
do VII de volver a ser un gobernante con un Perú y Charcas. El Perú gaditano había dejado
rey don Fernando VII el mariscal de campo don Jeróni- 45 Conde de Torata, Documentos para la historia de la
mo Valdés sobre las causas que motivaron la pérdida del guerra separatista del Perú. T. I. 156.
Perú desde Vitoria, a 12 de julio de 1827, la publica su 46 Marta Irurozqui, “Soberanía y castigo en Charcas.
hijo (Madrid: Imprenta de la Viuda de M. Minuesa La represión militar y judicial de las Juntas de La
de los Ríos, 1894), 136. Plata y La Paz, 1808-1810”, Revista Complutense de
44 Roca, Ni con Lima ni con Buenos Aires, 588. América 37: 49-72.
de existir y como resultado de ello todas las de competencia institucional y de ejercicio de
instituciones absolutistas, con excepción de la la autoridad.48
Inquisición, fueron restablecidas.
La derrota de los realistas en la batalla de Aya-
No obstante, el proceder del virrey, Olañeta cucho el 9 de diciembre de 1824 y la capitula-
mantuvo su desobediencia. Para justificar la ción de La Serna consolidó la Independencia
persistencia de su rebeldía insistió en que en del Perú de España. El sueño bolivariano de
realidad La Serna repudiaba la vuelta del abso- una federación andina estaba en proceso de
lutismo en España. Olañeta estaba convencido concretarse. Pero para ello quedaba por resol-
de que el virrey seguía siendo “liberal” y que te- ver la cuestión de Charcas. Bolívar optó por
nía el propósito oculto de establecer “un impe- la negociación con Olañeta. El intercambio
rio desde Tupiza a Tumbes”, convirtiéndose en epistolar entre ambos personajes muestra la
monarca de ese territorio. La tirante situación disponibilidad de ambos de negociar una sa-
condujo a lo que la historiografía boliviana bau- lida política.
tizó como el estallido de “la guerra doméstica”
entre los bandos realistas en Charcas.47 Bolívar buscó ganarse el favor de Olañeta al
elogiar su comportamiento patriótico frente al
Un amor
Entre julio y agosto de 1824 se escenificaron despotismo del virrey. El 2 de octubre Olañeta,
desenfrenado varios conflictos bélicos entre el Ejército del fiel a su discurso absolutista, le respondía que
por la libertad
Sur de Valdés y el Ejército de Olañeta. Esta re- “si algo tenía de bueno la constitución del año
Antología de la
historia política friega concluyó cuando Valdés recibió la noticia 12, jamás se observó en el Perú, y sólo se cum-
de Bolivia
(1825-2020)
de la derrota del ejército realista en la batalla plieron aquellos decretos de Cortes que holla-
de Junín. Ante este revés, La Serna conminó a ban la religión”.49 Por ese motivo, le plantea-
186 Valdés que de modo perentorio se dirigiera con ba a Bolívar su deseo de uniformar con él sus
sus tropas al Cuzco para ayudar a contener la sentimientos para imponer un “sistema sólido”
ofensiva del ejército grancolombiano. A pesar que evitara los vicios del gobierno popular.
Tomo I de que Valdés comunicó la noticia a Olañeta,
1825-1952
este se negó a proporcionar sus hombres para Ese incognito sistema político anunciado por
combatir unidos al ejército de Bolívar. Olañeta a Bolívar fue suficiente para que con-
tinuara el intercambio epistolar. En su segun-
Olañeta interpretó la retirada de Valdés como da carta, Bolívar comunicó a Olañeta que “la
el resultado del imparable triunfo de sus armas victoria de Ayacucho no nos hará olvidar ja-
y así lo publicitó en su discurso anti-consti- más lo que debemos a V.S.”. Esa felicitación
tucional. Aunque la oposición de una mayoría iba acompañada del anuncio de que el general
de charquinos a la hegemonía de La Serna se Antonio José de Sucre tenía orden expresa de
articuló a través del mismo, no todos los apo- negociar con él una salida pacífica en Charcas.
yos, militares y civiles, suscribían el absolu-
tismo. Detrás del mismo y de la división de Era deseo de Olañeta negociar con Sucre el
los realistas subyacía un fuerte cansancio por establecimiento de un “sistema político” de
la conversión de Charcas en un permanente
campo de batalla hegemonizado desde Lima
48 Marta Irurozqui, “Huellas, testigos y testimo-
y Cuzco, en el que la militarización territorial nios constitucionales. De Charcas a Bolivia 1810-
había reducido la capacidad jurisdiccional de 1830”, en El laboratorio constitucional iberoamericano,
la Audiencia y generado múltiples conflictos 1807/08-1830, eds. Marcela Ternavasio y Antonio
Annino (Madrid-Hamburgo: Iberoamericana-Ver-
vuet), 157-178.
47 Miguel Ramallo, Guerra doméstica (Sucre: La Boti- 49 Conde de Torata, Documentos para la historia de la
ca Boliviana, 1916). guerra separatista del Perú. T. I, p. 226.
mutua convivencia. Pero fue en esas circuns- a no cruzar el Desaguadero mientras que el
tancias cuando sobresalió el protagonismo de mando supremo era conservado por él en las
otro personaje que hasta ese momento había cuatro provincias charquinas, además de la re-
actuado en la sombra, su sobrino y consejero gión costera de Tarapacá.
Casimiro Olañeta. Secretamente, este escribió
una carta a Bolívar en la que resumía su papel Olañeta había logrado un acuerdo que le reco-
en el comportamiento político de su tío desde nocía como único gobernante de Charcas, tal
febrero de 1824: como tácitamente se lo había concedido Val-
dés cuando puso fin a la “guerra doméstica”. Al
Tan luego como el general Olañeta hizo una finalizar el armisticio debía quedar confirma-
señal a los pueblos para substraerse de la do- da su colaboración con Bolívar luego de con-
minación del injusto poder aristócrata de La sultar “con quien él debía (sic) hacerlo”.52 Sin
Serna, fui el primero en seguir la causa del embargo, Sucre rechazó en Puno los términos
Rey absoluto; era necesario que el germen del armisticio y la ruptura del general colom-
de la discordia se hiciese reproductivo. La biano con Olañeta se hizo irreversible. Auto-
Patria debía recoger grandes frutos, y no me rizado por Bolívar, Sucre movilizó sus tropas
negué a servirla bajo cualquiera apariencia.50 para proceder a la ocupación de Charcas y
arrebatar el poder a los últimos partidarios del Primer periodo
En otras palabras, confirmaba que el discur- Altar y el Trono. Fue en esas circunstancias
Bajo la
so absolutista había sido el medio idóneo para cuando Casimiro Olañeta abandonó su com- Constitución de
1826 que organiza
lograr la liberación de Charcas de la tutela promiso con el sostenimiento del absolutismo y constituye la
nación boliviana
virreinal peruana. Casimiro Olañeta no solo y optó por defender la integridad charquina (1825-1880)
reaparecía como un verdadero patriota que convirtiéndose en febrero de 1825 en auditor
había ocultado sus verdaderos sentimientos en y consejero del general Sucre. 187
una farsa absolutista, sino que en tono despec-
tivo calificaba a los realistas de Charcas como Tras la ruptura con Sucre, Olañeta constató
“locos adoradores de Fernando, [que] sin pen- cómo la fidelidad y fortaleza de su ejército Charcas/Bolivia
en la órbita de las
sarlo ni quererlo, van a sellar con V. E. la suer- comenzó a desmoronase sin poder revertir la Independencias
hispanoamericanas
te del país”.51 El sobrino proporcionó así el situación. Primero se sublevaron en Cocha-
justificante para que el general Sucre pusiera bamba los comandantes Arraya y Sánchez,
fin al absolutismo de su tío. quienes en coordinación con el guerrillero
Lanza, apresaron al gobernador. Los tres de-
El 12 de enero de 1825 en La Paz, Pedro An- cidieron apoyar al Ejército Unido Libertador
tonio de Olañeta firmó con el coronel Antonio y desde Salta partió en apoyo de esta rebelión
Elizalde, comisionado de Sucre, un convenio el general Álvarez de Arenales con sus tropas.
pendiente de ratificación por el que el primero A continuación, se rebeló el escuadrón del co-
mantendría el control de Chuquisaca y Potosí mandante López en Chuquisaca y lo propio
y el Ejército Libertador controlaría La Paz y hizo el general Aguilera con su división acan-
Oruro hasta que los pueblos decidieran su des- tonada en La Laguna y Vallegrande. Simultá-
tino. En esa misma reunión Elizalde concedió neamente, se perdió el control de las provin-
a Olañeta un “armisticio” de cuatro meses por cias de Potosí y Tarija “que siguen el ejemplo
el cual el Ejército Libertador se comprometía de Charcas”.
Primer periodo
Bajo la
Constitución de
1826 que organiza
1
Desde que los españoles regularizaron su Resumen y constituye la
dominación en estas hermosas rejiones, no hemos nación boliviana
P
tenido otro sistema de enjuiciar que el de la (1825-1880)
de mala fé, de malos escribanos, de los jueces injustos lisis del diseño del poder Judicial desde las le-
y de esa ominosa falange de sanguijuelas que se yes, y los matices que hallamos en la forma en
mantienen chupando la sangre de los desgraciados
que dichas leyes pudieron ser realmente im-
que caen en sus manos. […]
plementadas o los obstáculos a los que enfren-
Asi es que había pleitos que duraban 40 años, y
taron en la práctica, buscamos aproximarnos
otros en que las costas importaban 40 veces más que
la cosa litigada. Se pronunciaban mil sentencias a la forma en que se fueron delineando, desde
interlocutorias y todas fundadas en alguna lei ó sus meros inicios, las instancias y las formas de
doctrina, y el pueblo jemia bajo el despotismo judicial administrar justicia, buscando hallar las con-
sin remedio […].2
tinuidades y su conjugación con importantes
cambios que se gestaron en esta materia en la
primera mitad del siglo XIX (que suele verse
como un período de continuidad del antiguo
1 La investigación en la que está basada este texto
corresponde a la tesis doctoral que me encuentro
régimen).
preparando en el marco del Doctorado en Historia
y Estudios Humanísticos de la Universidad Pablo Palabras clave: Poder Judicial; administra-
de Olavide, Sevilla (España), bajo la dirección de la ción de justicia; construcción del Estado repu-
Dra. Rossana Barragán.
2 “Código de Procederes”, El Boliviano 7 (marzo de
blicano; jueces legos y jueces letrados; codifi-
1833): 3. cación; siglo XIX.
Introducción encabezaron los procesos de construcción es-
tatal identificaban en las leyes coloniales y en
Un pueblo que “jemia bajo el despotismo judi- sus instituciones judiciales a uno de los mayores
cial sin remedio” … La cita no podría ser más símbolos de opresión y arbitrariedad del sistema
actual. Este concepto de “despotismo judicial” antiguo y, en consecuencia, reformar este ramo
viene acompañado, ineludiblemente, por otro se presentaba como una tarea urgente.
que hoy leemos a diario en la prensa también:
el de “reforma judicial”. Resulta inevitable Varios eran los males que la opinión general
hacer este paralelismo para aproximarnos al percibía en la justicia colonial y que requerían
tema de este trabajo empatizando, de algún un remedio inmediato. La larga cita que in-
modo, con el momento que se vivía en 1825. troduce este trabajo describe con mucho de-
talle los males de la justicia que aquejaban a
Hoy a diario hablamos de la retardación de jus- la población de la época: la arbitrariedad de
ticia, de la falta de independencia del poder Ju- los tribunales, vinculada al hecho de que sus
dicial con respecto al poder político, o discuti- fallos nacían de leyes desordenadas y oscuras
mos si los jueces (algunos de ellos) deben seguir y de doctrinas (glosas) que hacían prevalecer
siendo elegidos por voto popular. Estos mismos la interpretación judicial por encima de las
Un amor debates circularon intensamente a partir de la múltiples y yuxtapuestas normas del derecho
desenfrenado fundación de la República de Bolivia, aunque antiguo; la intriga y los fraudes a los que se
por la libertad
con una diferencia fundamental: lo que hoy vi- sometían los pleiteantes frente a jueces (que
Antología de la
historia política vimos es una suerte de debacle de los principios se veían como “injustos”) que hacían preva-
de Bolivia
(1825-2020) y modelos de organización y funcionamiento lecer su interpretación y sus arbitrio; juicios
de la justicia que fueron imaginados, debatidos, interminables divididos en instancias intermi-
192 elegidos, adoptados y adaptados, moldeados y nables también; juicios sumamente onerosos
remodelados a lo largo de (al menos) el periodo para la población; una justicia, en fin, a la que
del que se ocupa la presente investigación, es se veía sumida en un despotismo judicial que
Tomo I decir entre 1825 y 1857. alimentaban el clamor de una reforma urgen-
1825-1952
te. Cada uno de estos males suponía la nece-
Aunque los males de la justicia en ese entonces sidad de un cambio desde distintas entradas
eran muy parecidos a los que podemos esgrimir que tenían que ver con el ramo judicial, y cada
hoy, en 1825, lejos de una simple reforma judi- uno de estos cambios implicaba, a su vez, la
cial, se planteó el reto de crear nuevos cimientos toma de alguna decisión y la respuesta a múl-
y organizar algo que hasta entonces no existía y tiples dilemas que se planteaban en forma si-
que tuvo que construirse sobre los cimientos de multánea.
un sistema judicial (el colonial) muy distinto: el
poder Judicial. Este artículo aborda la historia Las reformas que fueron implementando las
de la construcción de ese poder, resaltando las Repúblicas latinoamericanas frente a este con-
vicisitudes, y también las oportunidades, frente texto, se fueron desplegando bajo distintas
a las que se vieron los legisladores, las autorida- modalidades y ritmos. Casi todas ellas apos-
des de gobierno, las flamantes autoridades judi- taron por emprender reformas paulatinas y –
ciales que iban siendo nombradas y los usuarios por practicidad y en tanto no estaban dadas las
de la justicia en este contexto. condiciones para hacerlo de otro modo– sin
tomar en un principio demasiada distancia de
Este reto de construcción y organización del po- la estructura judicial anterior. Bolivia, desde
der Judicial fue asumido con ímpetu por todas luego, no fue ajena a esta situación y se empe-
las Repúblicas latinoamericanas que nacieron en ñó, desde muy temprano, en dotarse así mis-
el siglo XIX. Los discursos políticos de quienes ma de un sistema de leyes propias y un sistema
Primer periodo
Bajo la
Antonio José de Sucre y la madre patria 1841-1869, Melchor María Mercado. Constitución de
Fuente: Archivo y Biblioteca Nacionales de Bolivia. 1826 que organiza
y constituye la
nación boliviana
(1825-1880)
judicial distinto con tintes más modernos. Si la justicia (desde las normas, pero también im-
algo destaca en la experiencia boliviana es la plementando de manera efectiva muchos de 193
obstinación con la que, desde el plano nor- esos cambios esbozados desde el papel) poco
mativo fundamentalmente, se buscó hacer un después de la declaración de la Independencia,
Dualidades
quiebre brusco y sumamente temprano con el sino que además fue Bolivia una de las prime- legales y dilemas
institucionales
sistema legal colonial y su aparato judicial. ras4 Repúblicas latinoamericanas en adoptar desde los inicios
el modelo de codificación francés, en algún de la República
Desde la óptica de la historia tradicional del caso, y con notas más cercanas al liberalismo
derecho, que entiende que la ley tiene la capa- español inaugurado en Cádiz, en otros casos,
cidad de modificar, por sí sola, el orden social,3 a partir de los cuales se procuró dar el salto de
se evidencia que las rupturas implementadas una “justicia de jueces”, que caracterizaba al
por la República boliviana fueron, primero, modelo de antiguo régimen, a una “justicia de
sumamente tempranas, y segundo, radicales leyes”,5 más garantista, más ajena a la persona
en algunos de sus contenidos, aunque con per-
sistencias muy notorias del sistema antiguo en 4 Valentín Abecia (1976) y Andrés de Santa Cruz
muchos aspectos también. Como veremos a lo Schuhkrafft (1976) llamaron la atención sobre el
largo del texto, no sólo se buscó profesionalizar hecho de que fue la boliviana la primera experien-
cia de codificación en Hispanoamérica (Andrea Ur-
cullo, “Siguiendo los Pasos de Cádiz: las primeras
3 Para una breve reseña sobre este tema: Pauline Bilot normas procedimentales en materia de justicia en la
y Pablo Whipple, “Los desafíos de la justicia repu- República de Bolivia (1825-1832)”, Revista Andina
blicana. Profesionalización e independencia de la 52 [2012]: 93).
judicatura en Chile y Perú durante el siglo XIX”, en 5 Lorente, Marta, “Crisis y regeneración de la Mo-
Entre Mediterráneo y Atlántico. Circulaciones, conexio- narquía Católica. Reflexiones sobre el primer cons-
nes y miradas, 1756-1867, coords. Antonini De Fran- titucionalismo hispánico”, en Historia y Derecho.
cesco, Luigi Mascilli Migliorini y Raffaele Nocera El Derecho constitucional frente a la historia, Tomo I,
(Chile: Fondo de Cultura Económica, 2014), 478. coords. Juan Vicente Ugarte, Raúl Chanamé, José
del juez y del todo vinculada a un concepto referencia otras zonas de Bolivia, en muchos
formal de ley. casos nos veremos obligados a mantenernos
centrados en la visión que nos provee la nor-
Los resultados de estos intentos republicanos de mativa, en tanto una proyección de la política
reforma judicial proyectados desde las normas judicial que se fue construyendo en la época.
fueron variopintos. Cuando nos aproximamos
al fenómeno del proceso de construcción de las Las preguntas que se nos plantean en este con-
instituciones judiciales desde otras fuentes alter- texto son múltiples: ¿Cuáles fueron las bases
nativas a las leyes, como por ejemplo los expe- legales y normativas que se aplicaron en este
dientes judiciales y correspondencia de la época, proceso de construcción de un poder Judi-
y bajo los conceptos y objetivos de la historia de cial separado de los otros poderes públicos?
la justicia, los fragmentos de realidad que somos ¿Cómo y desde cuándo se procuró expandir el
capaces de apreciar revelan muchos matices y modelo de una justicia profesional (letrada) en
ganan densidad. Como ha señalado Darío Ba- la República y hasta qué punto fue posible ha-
rriera,6 acercarnos a estas experiencias desde la cerlo? ¿Qué problemas y obstáculos se presen-
historia de la justicia puede considerarse como taron en este intento? ¿Cómo se fue transfor-
una especie de corrección del punto de vista del que mando la figura del juez de antiguo régimen a
Un amor
parten la historia del derecho y la historia polí- la del juez republicano?
desenfrenado tica e institucional, pues permite descubrir cada
por la libertad
fenómeno judicial no sólo como debió ser, sino Planteamos que la institucionalización de la
Antología de la
historia política también tal cual fue (Barriera 2010). justicia desde inicios de la República de Bo-
de Bolivia
(1825-2020)
livia no fue un proceso lineal en el que se
Desde esta perspectiva, en este capítulo procu- fueron implementando cambios sucesivos,
194 raremos hacer una combinación de ambos en- subsecuentes y ordenados dirigidos a alcanzar
foques: partiremos de las reformas concebidas principios rígidos e inamovibles como la divi-
desde las normas y presentaremos también al- sión de poderes o la profesionalización del po-
Tomo I gunos de los problemas reales que fueron sur- der Judicial, sino que fue una secuencia en la
1825-1952
giendo a partir de lo que implicó, por ejemplo, que aparecen transformaciones importantes,
el proceso hacia la profesionalización de la jus- y a veces drásticas, implementadas desde las
ticia, o cómo se vivió la aplicación del principio normas, seguidas de retrocesos, reacomodos y
de división de podres en la construcción del ór- redireccionamientos continuos hacia alterna-
gano judicial boliviano en sus primeros 32 años tivas que iban surgiendo desde la experiencia y
de vida republicana. Este acercamiento a cómo desde múltiples mecanismos que aplicaron los
se vivieron y cuáles fueron las reacciones de la distintos actores de la justicia para moldear y
gente frente a algunas de las principales refor- ajustar las directrices legales que se iban im-
mas en la administración de justicia, se hará a poniendo.
partir de algunos expedientes judiciales sustan-
ciados en la Provincia Pacajes (Departamento Fue ésta la forma en que, a base de múltiples
de La Paz) y en la ciudad de La Paz durante el ensayos y de imposiciones moldeadas y remo-
período de estudio. Aun así, y ante la falta de deladas por las prácticas, de la conjunción en-
estudios sobre esta temática que tomen como tre normas y prácticas de vertientes tradicio-
nales, del liberalismo gaditano, del liberalismo
francés o de la propia costumbre local, y de los
Palomino y Alberto Rivera, (Lima: Universidad diferentes ritmos en los que los distintos usua-
Inca Garcilaso de la Vega, Lima, 2008).
rios de la justicia se fueron adaptando a los
6 Darío Barriera, Historia y justicia. Cultura, política y
sociedad en el Río de la Plata (Siglos XVI-XIX) (Bue- cambios, se fue gestando la particularidad del
nos Aires: Prometeo Libros, 2019), 33. proceso de construcción de la institucionalidad
judicial y del proceso de construcción del Es- ron las Repúblicas latinoamericanas del siglo
tado republicano boliviano a inicios del siglo XIX, en el que, aun teniendo un sello ideológi-
XIX. co común, cada una de ellas dio una respuesta
particular, única e inédita a los desafíos que
La temática que abordamos desde este trabajo implicaba construir los nuevos estados.
de investigación se inserta en el debate en tor-
no a las continuidades del periodo colonial y Paralelamente, y para matizar la temática
las rupturas que fueron introducidas en el pe- de las rupturas implementadas en esta etapa
riodo republicano.7 Alejándonos de las inter- (pues junto con esas importantes rupturas que
pretaciones historiográficas que entendían la mencionamos, coexistieron importantes y no-
primera mitad del siglo XIX como una especie torias continuidades también), nos interesa
de continuación del periodo colonial, plantea- mostrar que aunque el proyecto dominante,
mos que, desde los meros inicios de la etapa que no único, de republicanismo implicaba
republicana, se implementaron cambios muy instaurar y consolidar principios nuevos como
importantes en materia judicial y que tuvieron la división de poderes (y la consecuente in-
efectos permanentes y que presentarían varia- dependencia del órgano judicial) o el imperio
ciones mucho más acotadas a partir de la 1857, de la ley (por encima de las interpretaciones
es decir prácticamente a partir de la segunda judiciales, que eran la base del derecho de Primer periodo
mitad del siglo XIX. antiguo régimen).9 Dichos principios no te-
Bajo la
nían ningún tipo de arraigo o aceptación ni Constitución de
1826 que organiza
Esto quiere decir que la justicia y las formas en los usuarios y destinatarios de la justicia y constituye la
nación boliviana
de participación ciudadana (en un sentido am- y las leyes, ni tampoco en la mayoría de las (1825-1880)
plio) y popular en la construcción del Estado, autoridades que, desde mucho tiempo atrás,
abrieron brechas sumamente importantes y venían impartiendo justicia en los territorios 195
notorias desde la primera mitad del siglo XIX que pasaron, de un momento a otro, a for-
y que, combinadas con continuidades también mar parte de la República de Bolivia. Desde
muy patentes de la cultura jurídica de corte co- litigantes que desconocían la autoridad de los Dualidades
legales y dilemas
lonial, resultaron en lo que podemos esbozar nuevos funcionarios judiciales que designaba institucionales
desde los inicios
como el sistema judicial republicano tempra- el Estado, o autoridades locales que descono- de la República
no en Bolivia. Todo esto se enmarca también cían las nuevas normas y encomendaban el
en esa especie de laboratorio político8 que fue-
Bajo la
Constitución de
1826 que organiza
y constituye la
Palacio Legislativo de Sucre en el que se fundó la Corte Suprema. nación boliviana
Fuente: Colección Fotográfica Histórica-Archivo de La Paz. (1825-1880)
201
En el caso de las Cortes Superiores de Dis- como una institución novedosa para el dere-
trito, se dispuso que estarían formadas por cho castellano.28
siete miembros en total: cinco ministros, de Dualidades
entre los cuales se debía elegir a su presiden- Es importante señalar que la motivación que legales y dilemas
institucionales
te, y dos fiscales. Mientras la jurisdicción de se expresa en la norma de implementación de desde los inicios
de la República
la Corte de Chuquisaca alcanzaba a los de-
partamentos de Potosí, Santa Cruz y Chu-
28 El Reglamento de las Audiencias y juzgados de pri-
quisaca y las provincias de Misque y Tarija,26 mera instancia de 9 de octubre de 1812 facultó a
mientras que la Corte de La Paz abarcaba los los Jueces Letrados para conocer todos los asuntos
departamentos de Cochabamba y La Paz, así contenciosos de una cuantía mayor a 500 reales
de vellón en la Península y 100 pesos fuertes en
como las provincias de Oruro, Paria y Ca-
Ultramar (cap. II, art. IX, Decreto de 9 de octubre
rangas.27 de 1812), con excepción de aquellas causas que
correspondían a los fueros eclesiástico y militar
Muy temprano también se creó la figura de los (los únicos que se había mantenido bajo el cons-
titucionalismo gaditano). Otro cambio importan-
jueces de letras, a quienes se facultó para co-
te introducido en este campo fue que se designó
nocer los juicios en primera instancia. La im- a los Jueces Letrados como los únicos llamados
plementación de esta figura fue consecuencia a resolver juicios en primera instancia, proscri-
de vigencia provisional del Reglamento gadi- biendo las facultades que tenían las Audiencias
anteriormente de conocer causas en primera ins-
tano de 9 de octubre de 1812, que ya entonces
tancia, eliminando de igual manera las facultades
había previsto la incorporación de estos jueces antiguamente concedidas a los virreyes, capitanes
y comandantes generales de tomar conocimiento
de causas contenciosas, excepto en su respectivo
26 Art. 95, Ley de 8 de enero de 1827 fuero (Andrea Urcullo, “Siguiendo los pasos de
27 Art. 6, Decreto de 15 de diciembre de 1825 Cádiz…”, 95).
la figura de los jueces letrados, invoca expresa- Por ley de 21 de junio de 1826 se realizó este
mente la necesidad de eliminar las atribucio- importante cambio, que representaba un paso
nes en materia de administración de justicia adicional en la búsqueda del afianzamiento
que mantenían hasta entonces otros agentes del principio de división de poderes, aunque
de gobierno por ser “incompatible con los prin- éste no se consolidaría realmente durante la
cipios de un gobierno liberal”.29 Esta intención se primera mitad del siglo XIX por la necesidad
vería completada por la supresión de los ayun- que impulsó a mantener las facultades juris-
tamientos,30 disposición dirigida a eliminar a diccionales de autoridades como los alcaldes
los Alcaldes de Primer Voto, que habían sido en las “aldeas” o ayllus,33 encargándoles el
las autoridades sobre las que había recaído el cobro del tributo indígena y el conocimien-
conocimiento de las causas judiciales en pri- to de juicios verbales en ese ámbito territo-
mera instancia hasta entonces.31 rial, además de otras autoridades de gobierno
como los corregidores, quienes muchas veces
Los expedientes sustanciados entre 1826 y administraban justicia en los cantones ante la
1827, sin embargo, dan cuenta de que la eli- ausencia de un juez de letras, aun cuando no
minación de dichos Alcaldes y su sustitución estuviera mandado.34
por jueces letrados no fue, en todos los casos,
Un amor
inmediata.32 El propósito de la norma antes Esta estructura judicial temprana inspirada en
desenfrenado citada se completaría una vez dispuesta la su- Cádiz y complementada a partir de la creación
por la libertad
presión de los ayuntamientos, cuyas cabezas, de tribunales superiores y un tribunal supremo
Antología de la
historia política es decir los Alcaldes Ordinarios, eran los que (que, de algún modo, pueden asimilarse a las
de Bolivia
(1825-2020)
continuaban administrando justicia en prime- antiguas Audiencias americanas), fue refrendada
ra instancia. en la Ley de 8 de enero de 1827, que fue la pri-
202 mera norma procedimental de Bolivia y la que
rigió sobre su organización judicial también.
Tomo I
29 Considerando 1º, Decreto de 23 de enero de 1826 Esta norma revela dos aspectos: primero, que
1825-1952
30 Ley de 21 de junio de 1826 recogía casi por completo, aunque con algunas
31 Dado que los Alcaldes primer y segundo voto de adaptaciones, los lineamientos y la estructura
los Cabildos eran legos y no letrados, remitían las
causas de justicia (en primera instancia) a los Ase- judicial que fueron establecidos en el Regla-
sores del Cabildo (letrados), quienes eran los que mento de las Audiencias y juzgados de primera
realmente conocían y resolvían las causas, aunque, instancia de 9 de octubre de 1812 expedido por
de todos modos, los escritos presentados por las
las Cortes españolas y que ya habían sido im-
partes debían estar dirigidos a los Alcaldes, y no a
los Asesores. Los expedientes judiciales sustancia- plementados, a su vez, a partir de las normas su-
dos en primera instancia en la ciudad de La Paz, cesivas que se fueron dictando en la República
dan cuenta de que hasta 1826, fueron estas auto- entre 1825 y 1826, según pudimos ver antes. Y
ridades las que administraban justicia en primera
segundo, que el diseño del poder Judicial tem-
instancia (ALP/CSD, 1825, Caja 0, Documento 2
(sin título), en Andrea Urcullo, “Cambios y con- prano en Bolivia siguió la impronta del libera-
tinuidades en las prácticas de la justicia (Bolivia, lismo gaditano tanto para lo nuevo como para
1825-1840)” (Tesis de licenciatura en Derecho, el mantenimiento de antiguas lógicas judiciales
Universidad Católica Boliviana “San Pablo”, La
que las reformas gaditanas no habían logrado
Paz, 2010), 60).
32 A través de los expedientes sustanciados en la ciu-
dad de La Paz hasta finales de 1826, hemos podido 33 Decreto de 25 de septiembre de 1831.
evidenciar que los juicios civiles todavía se sustan- 34 Andrea Urcullo, “`Parecemos y decimos…´ Los in-
ciaban ante los Alcaldes de Primer Voto, observan- dígenas de la Provincia Pacajes frente a la justicia
do de lleno las normas y procedimientos del Dere- estatal republicana (Bolivia, 1825-1840)” (Tesis de
cho antiguo, tanto en el fondo como en las formas Maestría, Universidad Pablo de Olavide, Sevilla,
de proceder (Urcullo 2010). 2013).
(ni tampoco buscado) trastocar del todo.35 Y denominados Jueces de Paz,39 que llegan a ser
que, en consecuencia, que hicieron que en esta el equivalente de los Alcaldes Constituciona-
primera etapa la República continuara estando les de los Pueblos correspondientes al sistema
regida, en gran medida aunque, por la lógica español incorporado a partir del Reglamento
del derecho de antiguo régimen.36 Nada de esto de las Audiencias de 1812.40
nos puede resultar extraño: al fin y al cabo, esta-
mos refiriéndonos apenas al segundo año pos- En las causas de conciliación el juez de paz no
terior a la fundación de la República. actuaba solo, sino que debía conocer los pleitos
junto con dos “colegas”, nombrados uno por
Bajo la Ley de 8 de enero de 1827 se imple- cada parte, quienes participaban del procedi-
mentó una nueva figura que, hasta ese momen- miento y que, al ser de confianza de las partes,
to había sido exiguamente esbozada: la de los le dotaban de una mayor legitimidad. El re-
juicios de conciliación y los jueces de paz. Los sultado de las conciliaciones dependía del ave-
juicios de conciliación fueron una de las más nimiento o no de las partes lo que, al final de
notorias novedades introducidas por el Decre- cuentas, se dejaban anotado en un libro de con-
to gaditano de 9 de octubre de 1812 y que se ciliaciones. La participación de los “colegas”
había extraído del modelo liberal francés.37 en este procedimiento denota una forma de
participación ciudadana en la resolución de los Primer periodo
Su particularidad consistió en que se convirtió conflictos menores, igual que pasaba en el caso
Bajo la
en una barrera de entrada obligatoria para ac- de los conjueces (que eran una suerte de peritos Constitución de
1826 que organiza
ceder a los niveles propiamente judiciales (nos y constituye la
nación boliviana
referimos a las instancias judiciales adminis- 1827). Tampoco admitían conciliación “[…] las cau- (1825-1880)
tradas por jueces letras, es decir funcionarios sas, que habiendo comenzado por injurias, terminen con
del poder Judicial republicano), al establecer- alguno de los delitos que turban la tranquilidad pública, 203
se como fase previa obligatoria para entablar ó la seguridad personal; pues las injurias de que habla el
artículo 117 de la Constitución, son aquellas en que se
cualquier demanda civil o criminal por inju- repara la ofensa con sola la condonación de la parte, sin
rias,38 pero su conocimiento se atribuyó a los detrimento de la justicia, ni menoscabo de la vindicta Dualidades
legales y dilemas
pública (art. 10, Ley de 8 de enero de 1827). institucionales
39 La figura del Juez de Paz fue tomada de la primera desde los inicios
de la República
35 Así lo reconocía la comisión a la que se encargó experiencia constitucional francesa (1790), aunque
el proyecto de Constitución de 1812, la cual con- fue introducida en en Bolivia y en Hispanoamérica
fesaba: “Encargada por V.M. de arreglar un proyecto por la vía de la norma procedimental doceañista,
de Constitución para restablecer y mejorar la antigua que aunque recurriendo a la figura de los “Alcaldes
ley fundamental de la Monarquía, se ha abstenido [la constitucionales de los pueblos”, fue la que intro-
Comisión] de introducir una alteración sustancial en el dujo la conciliación como requisito previo para las
modo de administrar la justicia, convencida de que refor- demandas fundamentalmente civiles ante los jueces
mas de esta trascendencia han de ser el fruto de la medi- de primera instancia. Sobre la naturaleza y el origen
tación, del examen más prolijo y detenido, único medio de de los jueces de paz y la conciliación, véase: Miguel
preparar la opinión pública para que reciba sin violencia Ángel Morales, “Percepciones de la justicia en Es-
las grandes innovaciones” (Cit. por Federica Morelli, paña a comienzos del siglo XX: los ecos de la Cons-
“Entre confianza y armas. La justicia local en Ecua- titución de 1812”, Revista de Historia Constitucional
dor del Antiguo Régimen al liberalismo”, Revista 17 (2016): 244; Juan Montero, “Bosquejo histórico
Complutense de Historia de América 37 (2011): 33). de la conciliación hasta la Ley de enjuiciamiento
36 Andrea Urcullo, “Siguiendo los pasos de Cádiz…”, civil de 1855”, Revista de Derecho Procesal Iberoame-
99-102. ricana 4 (1971): 857-907; y Carmen Muñoz, “La
37 Marta Lorente y Carlos Garriga, “El juez y la justicia no letrada en el primer constitucionalismo
ley…”. español”, en Il modello costituzionale inglese e la sua
38 Se exceptuaban del requisito previo de la concilia- recezione nell’area mediterranea tra la fine del 700 e la
ción las acciones fiscales, las que interesaban a los prima metà dell’800. Atti del Seminario internazionale
establecimientos públicos, las relativas a menores o di studi in memoria di Francisco Tomás y Valiente, ed.
a los privados de la administración de sus bienes, y Andrea Romano (Milano: Giuffrè, 1998), 285-324.
a las herencias vacantes (art. 9, Ley de 8 de enero de 40 Tít. I, cap. I, Ley de 8 de enero de 1827.
o especialistas en la materia a la que es estuvie- sus funciones.45 De esto se desprende que se
ra referida un juicio) en las causas contenciosas excluyó a esta figura del requisito de profe-
sustanciadas, en segunda y tercera instancia, sionalización que se había impuesto para el
ante las Cortes Superiores de Distrito.41 poder Judicial. Este aspecto es sumamente
llamativo pues, aun cuando no se trataba de
Adicionalmente, los jueces de paz estaban fa- autoridades letradas, se les dio el apelativo de
cultados para conocer, en sus respectivos pue- “jueces”, ratificando la intención de mantener
blos, y también en forma conjunta con dos el conocimiento de las causas conciliatorias y
“colegas” nombrados por las partes, “[…] de judiciales separadas de las autoridades guber-
las demandas civiles que no pasen de cincuenta nativas, aunque más adelante se retrocedería
pesos, y de los negocios criminales sobre inju- en parte en esta intención y también en este
rias y faltas livianas que no merezcan otra pena apelativo, cuando las dificultades de su nom-
que una y otros precisamente en juicio verbal, y bramiento y las de llevar a cabo las preten-
pudiendo arrestar por vía de corrección de dos siones de profesionalizar la justicia incluso a
á seis días”.42 Esta figura de los juicios verbales nivel de los cantones y pueblos, se hicieron
en cuestiones de mínima cuantía fue reasigna- patentes.
da, posteriormente, en 1831, como atribución
Un amor
de los alcaldes de aldea o ayllu,43 sobre los cua- Realmente, los jueces de paz eran una especie
desenfrenado les nos referiremos más adelante. Las senten- de hibridación entre una autoridad local y una
por la libertad
cias emitidas en las causas resultas por la vía autoridad judicial, puesto que su existencia es-
Antología de la
historia política verbal, requería, para su validez del consenso taba prevista en el capítulo correspondiente al
de Bolivia
(1825-2020)
de al menos uno de los “colegas” nombrados Régimen Interior de la República (junto con
por las partes (cuyo criterio se expresaba en los prefectos, gobernadores y las autoridades
204 un dictamen) y del juez de paz, y no admitían provinciales) y, al mismo tiempo, eran auto-
apelación ni recurso ulterior alguno antes los ridades legas que no recibían ninguna renta
jueces y tribunales de la República. por parte del Estado (como explicamos en el
Tomo I apartado anterior), pero sus funciones estaban
1825-1952
Para ser nombrado juez de paz, se requería reguladas como parte de la administración de
tener 25 años cumplidos, ser ciudadano en justicia, y sus funciones estaban previstas en
ejercicio y saber leer y escribir (que era una las leyes de procedimientos (en la Ley de 8 de
cuestión inherente a la condición de ciudada- enero de 1827 y también en el Código de Pro-
nía). Se trataba de un cargo concejil, es decir de cedimientos de 1832).
un servicio obligatorio y gratuito que estaban
obligados a cumplir los ciudadanos que reu- Un peldaño más arriba que los jueces de paz en
nieran los requisitos establecidos para ejercer la escala judicial que sentó la Ley de 8 de enero
el cargo.44 Inicialmente se dispuso que, hasta de 1827 (ratificando la estructura proyectada
que se realizara el nombramiento de los jue- a partir de 1825), se encontraban los jueces de
ces de paz, serían los comisarios de policía en letras. Debía nombrarse uno para cada capital
las capitales de departamento y los alcaldes de departamento y de provincia, hasta que se
pedáneos en los cantones, quienes ejercerían hiciera la división del territorio en partidos.
41 Art. 113, 1º, Constitución de 19 de noviembre de Esta norma facultó a dichos jueces para cono-
1826. cer todos los asuntos contenciosos dentro de su
42 Art. 18, Ley de 8 de enero de 1827. jurisdicción, con excepción de los juicios que
43 Decreto de 28 de septiembre de 1831.
44 “El destino de juez de paz es concejil; y ningún ciuda-
dano, sin justa causa, podrá eximirse de desempeñarlo”
(art., Constitución de 19 de noviembre de 1826). 45 Tít. I, cap. II, art. 24, Ley de 8 de enero de 1827.
tuvieran una cuantía menor o igual a 50 pe- sujetaba el conocimiento de las causas de mí-
sos,46 que debían ser sometidas a conocimiento nima cuantía a autoridades no necesariamente
en juicio verbal por los jueces de paz. Las cau- letradas (hablamos de los jueces de paz especí-
sas de más de 50 pesos y que no excedieran de ficamente), de alguna manera denota aún una
100 pesos, debían ser oídas y resueltas por los continuidad en la descentralización de la justi-
jueces de letras en juicio verbal, sin apelación ni cia menor o que podríamos suponer más coti-
otro recurso ulterior.47 Sobre este particular, es diana.48 El fenómeno de multiplicación de los
especialmente llamativa la figura de los juicios jueces de paz al promediar el siglo XIX,49 su-
verbales a cargo de los jueces de letras, pues pa- giere que este fenómeno parece haberse man-
recía apuntar, igual que la de los juicios conci- tenido inclusive después de todas las rupturas
liatorios, a aminorar la carga judicial en las cau- que se implantaron a partir de la codificación
sas civiles de menor cuantía (uno de los grandes de Andrés de Santa Cruz.
desafíos de la justicia entonces y también hoy).
Paralela y contrariamente, a partir de la con-
Haciendo un balance de la estructura judicial figuración que se hizo de las instancias judi-
que se implementó, podemos destacar dos ciales superiores y de la justicia de primera
elementos de suma importancia. Primero, instancia (reservadas sólo al conocimiento de
que hubo una cierta tendencia a la desjudicia- jueces letrados), se produjo un fenómeno de Primer periodo
lización de las causas de mínima y de menor multiplicación territorial de las instancias ju-
Bajo la
cuantía, así como de las causas criminales por diciales superiores y de la justicia de primera Constitución de
1826 que organiza
injurias o faltas leves, cuyo tratamiento debía instancia, que parece haber respondido a la y constituye la
nación boliviana
hacerse por la vía verbal (por los jueces de paz intención de ampliar la presencia de la justi- (1825-1880)
y jueces de letras), sin posibilidades de ser co- cia estatal en las causas de mayor relevancia.
nocidos en ninguna otra instancia judicial y sin Este fenómeno se haría aún más patente con 205
posibilidades de apelar. la creación de los partidos judiciales a partir de
1857, como veremos más adelante.
Esta tendencia a la desjudicialización de los Dualidades
legales y dilemas
conflictos menores se observa también en la Como última anotación referida a la arquitec- institucionales
desde los inicios
obligación que se impuso de que toda causa tura judicial que se diseñó durante los primeros de la República
contenciosa procurase ser resuelta por la vía años de la República, es importante referirnos
de la conciliación, dejando abierta la posibili- al número y composición de los tribunales de
dad de que dichas causas fueran conocidas en
alguna instancia judicial sólo si no se hubiera
48 Según Rossana Barragán “La incapacidad del Estado
concretado el avenimiento de las partes. De de tener control y supervisión de las autoridades en el
esta manera, se buscaba descargar las tareas de nivel cantonal hace suponer que el ejercicio de la justicia
los juzgados y tribunales y también evitar que fuera asumido con un carácter más autónomo respecto de
la estructura estatal” (Rossana Barragán y José Peres
las partes tuvieran que erogar muchos recur-
Cajías, “El armazón estatal y sus imaginarios”, en
sos y dedicar mucho tiempo a asuntos meno- El Estado del Estado en Bolivia. Informe Nacional sobre
res que no requerían ser tratados bajo toda la Desarrollo Humano, PNUD (La Paz: PNUD, 2007),
parafernalia judicial. 213). Esta hipótesis parece muy probable, más si
consideramos que los jueces de paz eran legos y no
letrados y cuando se conoce que, en muchos casos,
Otra nota distintiva sobre la que queremos fungían como tales personas que no sabían leer y
llamar la atención es el hecho de que, bajo el escribir y que, en consecuencia, no eran realmente
diseño judicial de la República temprana, que ciudadanos (Rossana Barragán, “L´État pactant…”,
327).
49 Según Pantaleón Dalence, había 228 jueces de paz
46 Arts. 25, 26 y 31, Ley de 8 de enero de 1827. hacia 1846 (cit. por Rossana Barragán y José Peres
47 Art. 37, Ley de 8 de enero de 1827. Cajías, “El armazón estatal…”, 213).
justicia. El que esta justicia asignara, las cau- Este fenómeno se aprecia también en el caso
sas de segunda y tercera instancia a tribunales de los jueces de paz pues, como mencionamos
colegiados, mientras que en la primera ins- antes, para fallar en juicio verbal se requería del
tancia correspondiera a juzgados unipersona- dictamen favorable de al menos uno de los “co-
les, fue una cuestión sujeta a sendos debates a legas” con los que el dicho juez estaba llamado
lo largo del siglo XIX,50 pues se entendía que a conocer las causas, y del voto conforme del
los tribunales unipersonales eran “verdaderos referido juez de paz. Se trata de la misma lógica
gérmenes de despotismo y arbitrariedad”51 y de garantizar la imparcialidad de una senten-
además un resabio del derecho antiguo. Pero cia a través la toma de una decisión colegiada y
esta noción también parecía encajar, en buena conjunta, a través de una coincidencia de pare-
medida, con el concepto de la justicia que, en ceres entre los administradores de justicia y, por
cierta medida, aún se mantenía en esta etapa: tanto, era una manera de compensar el hecho
la justicia, y la garantía de ésta, seguían siendo de que la judicatura de paz fuera un tribunal
una “cuestión de cantidad: tanta justicia tienes unipersonal y no uno colegiado.
como votos recibe tu causa”.52
1.2. El camino hacia profesionalización
Dado que la justicia se concebía como el resul- de la justicia: jueces legos vs jueces
Un amor
tado de un consenso entre un número deter- letrados
desenfrenado minado de jueces o por un cierto número de
por la libertad […] és necesario presentar á los Jueces
instancias (según la gravedad del caso), y con-
Antología de la bajo su verdadero y esencial concepto, que és el
historia política siderando que aún no se había implementado
de saber. Nada mas ridículo que en el momento
de Bolivia
(1825-2020)
una noción formal de ley y una instancia de de- y en el acto augusto de ser el orden de la Ley, el
fensa de la misma frente a la actuación de los que sus ministros y sentencien por juicio ageno, que
206 tribunales (la corte de casación), se mantuvo en és el de los Asesores, pues de hecho se confiesa la
ineptitud para ser Juez. Cree pues la Corte que és
la República el antiguo sistema de tres instan-
impracticable el medio de la incorporación de
cias judiciales, y, en algún caso, se establecieron las judicaturas á los Gobiernos de Provincia.54
Tomo I previsiones sobre el número mínimo de jueces
1825-1952
que debían conocer de ciertas causas.53 Desde un principio, la República apostó por
un poder Judicial letrado, es decir conforma-
do principalmente (aunque no exclusivamente
50 Rossana Barragán, “L´État pactant…”. como veremos más adelante) por profesiona-
51 Carta fechada en 1833 de Mora al presidente An- les en el ámbito jurídico, quienes debían acre-
drés de Santa Cruz, cit. por Andrés de Santa Cruz
Schuhkrafft, “Génesis de la primera codificación
ditar tener un título de licenciados en leyes o
hispanoamericana”, La vida y obra del Mariscal An- de abogados,55 y debían ser nombrados por el
drés de Santa Cruz, tomo II, Honorable Munici-
palidad de La Paz (La Paz: Casa Municipal de la
Cultura “Franz Tamayo”), 49. 54 Carta del presidente de la Corte de Distrito de La
52 Marta Lorente y Carlos Garriga, “El juez y la Paz, Baltazar Alquiza, al Ministerio de Interior, fe-
ley…”, 109. Sobre este tema véase también Car- chada en 2 de julio de 1829. En ABNB/MI/T. 23/
los Garriga, “Aritmética judicial. Las operaciones No. 4/1829/Corte Superior de La Paz, fs. 2 y 2 vta.
de la justicia española (siglo XVIII)”, en História El énfasis es nuestro.
das Justiças 1750-1850. Do Reformismo Ilustrado ao 55 Joaquín Escriche define al Juez Letrado como “el
Liberalismo Constitucional, eds. José Reinaldo de juez que tiene título de licenciado en leyes ó de abogado, y
Lima y Andréa Slemian, (São Paulo: Alameda, administra justicia por sí mismo sin necesidad de asesor.
2018), 109-202. Son jueces letrados los jueces de primera instancia de los
53 A manera de ejemplo, se dispuso que “las causas partidos, los magistrados de las audiencias y del tribunal
criminales en que pueda recaer pena corporal, no se supremo de justicia […]. Aunque la ley 6, tit. 1, lib. 11,
verán en segunda ó tercera instancia, por menos de Nov. Rec., exija la edad de veinte y seis años en los jueces
cinco jueces” (art. 109, Ley de 8 de enero de 1827) letrados, basta ahora la de veinte y cinco según la real cé-
de las cortes superiores de distrito. dula de 27 de enero de 1833 y el art. 251 de la Const. de
gobierno supremo.56 La justificación de esta dicha norma previó expresamente que quienes
intención se puede apreciar a través de las pa- ocuparan una posición como magistrado de
labras del presidente de la Corte de Distrito algún alto tribunal de la República, lo mismo
de La Paz, Baltazar Alquiza, quien en 1829 re- que quienes administrasen justicia en primera
saltaba la importancia de que quienes aplica- instancia, debían ser abogados.57
sen la ley, es decir los jueces, fueran capaces de
decidir por su propio juicio y con fundamento Los jueces debían acreditar, ante todo, su sa-
en el conocimiento de la ley. ber. Ése era el principal cambio por el que ha-
bía apostado la nueva República en materia
En este contexto, y bajo el ideal de justicia judicial: una justicia letrada (incluso en sus es-
que iba tomando forma en el período que feras intermedias, que no las más bajas, como
analizamos, eso que Alquiza llama el “sa- veremos más adelante, que se mantuvieron
ber”, es decir el conocimiento de las leyes, a cargo de autoridades legas), y separada del
se presentaba como una forma de garantía ejercicio de otros poderes públicos, como ele-
de cumplimiento cabal de las leyes, noción mentos notoriamente distintivos con respecto
que cobraría aún más importancia tras la a la justicia de antiguo régimen.
promulgación de los Códigos Santa Cruz.
Este binomio de leyes claras, ordenadas y El tema de la profesionalización de la justi- Primer periodo
con rango de ley (es decir emanadas del po- cia fue uno de los aspectos más problemáti-
Bajo la
der Legislativo, que bajo el esquema repu- cos en el proceso de institucionalización de Constitución de
1826 que organiza
blicano era el único órgano que podía emitir la justicia y construcción del poder Judicial y constituye la
nación boliviana
normas con rango de ley por ser el deposi- en las Repúblicas hispanoamericanas. Aun- (1825-1880)
tario director de la representación popular) que se trata de un objetivo al que, de inicio,
que se vería cristalizado con la promulgación apuntaron varios estados republicanos (como 207
de los Códigos Santa Cruz (1831-1832), y la el Perú, Chile y el Estado de Buenos Aires58
cualidad letrada de quienes estaban llamados por ejemplo), su implementación se vio fre-
a aplicar esas leyes (es decir los jueces), se cuentemente obstaculizada en la mayoría de Dualidades
legales y dilemas
presenta en este esquema como uno de los las experiencias decimonónicas a causa de di- institucionales
desde los inicios
mecanismos nomofilácticos o de protección versos factores. de la República
Fuente: Elaboración propia en base a datos extraídos de los expedientes judiciales sustanciados entre 1825 y 1840 que forman parte del fondo Bajo la
documental “Juzgado de Pacajes” del Archivo de La Paz, así como la correspondencia intercambiada entre la Corte Superior de Distrito de La Paz Constitución de
1826 que organiza
y el Ministerio del Interior (Archivo y Biblioteca Nacionales de Bolivia) en el mismo período.
y constituye la
nación boliviana
(1825-1880)
Solamente en algunos casos (específicamente Sica Sica fechada en 26 de julio de 1827, él
el de Gavino Estrada y Juan Manuel Merca- expresaba que no había sido posible encontrar 211
do), hemos constatado que su alejamiento un reemplazo para la plaza que dejaba vacante
del cargo no fue voluntario, sino producto de “[…] por los ningunos, ó ecsiguos emolumen-
Dualidades
unos juicios por capítulos69 que fueron inter- tos que puede producir y la estremada rijidez legales y dilemas
puestos en contra suya. En los demás casos, del temperamento de Sica Sica”.70 A este pro- institucionales
desde los inicios
lo más probable es que se tratase de un ale- blema del bajo o nulo salario que aquejaba al de la República
jamiento voluntario del cargo. Una carta de juez Arduz, se añadían problemas personales y
Feliz Arduz, quien fue Juez de Letras de Pa- familiares:
cajes durante varios años, apunta algunas otras
causas que podrían haberse invocado en estas […] yo ya hé provado en mi salud las conse-
renuncias voluntarias. En su carta de renuncia quencias de haber residido en Sica Sica; de
al cargo de Juez de Letras de la provincia de manera que el bien de ésta, mi conservacion,
y el deseo de proporcionar una congrua
competente á alimentar mi numerosa fami-
69 Los juicios por capítulos apuntaban a la responsa-
bilidad personal de los jueces en el ejercicio de sus lia, me obligan (á pesar mio) á dimitir como
funciones. Se trata de un figura que estuvo normada lo hago en toda forma el empleo de Juez de
en el Derecho indiano, y cuya aplicación había sido 1ª Instancia de la Provincia Sica Sica.71
extendida a la República de Bolivia en virtud del
artículo 281 de la Ley de 8 de enero de 1827, que
disponía: “[…] por esta ley deberán reglarse los procedi- 70 Memorial del Juez de Letras de la Provincia de Sica
mientos de los tribunales, así civiles como eclesiásticos de Sica, adjunto a una Carta de Baltazar Alquiza, Presi-
la República, y en su defecto por la antigua lejislacion dente de la Corte de Distrito de La Paz, al Ministerio
española, en cuanto no contradiga à la Constitucion, de Interior, fechada en 26 de julio de 1827. En ABNB/
y leyes dadas durante el gobierno de la independencia; MI/T. 15/ No. 4/1827/Corte Superior de La Paz.
derogándose por consiguiente, en esta parte, el decreto de 71 Memorial del Juez de Letras de la Provincia de
21 de diciembre de 1825”. Sica Sica, adjunto a una Carta de Baltazar Alquiza,
Insiste el juez Arduz en el problema del bajo Para 1829, el salario de los jueces de primera
salario. Aunque éste es un tema que aún re- instancia en las provincias había sido obje-
quiere mucha atención y estudios más pro- to de un nuevo incremento: pasó de 600 a
fundos, contamos con algunos datos que 1000 pesos, aunque aun así se mantenía la
confirman que la cuestión de los salarios po- percepción de que se trataba de un salario
día ser, en efecto, un obstáculo para que los bajo. Así lo denuncia una carta de 1829 del
jueces de letras se mantuvieran en sus cargos, Presidente de la Corte Distrito de La Paz,
sobre todo en las Provincias (y probablemen- quien señalaba:
te con más razón en aquéllas que estuvieran
más alejadas de las capitales de departamen- Tambien debe espresar francamente á V.G.
to). Sabemos que el salario de los jueces de que ningún Abogado de concepto puede re-
letras fue asumido, desde un principio, por signarse por mucho tiempo á servir dichas
el tesoro público, es decir por el gobierno judicaturas [las de primera instancia] que no
central.72 tienen mas de mil pesos de dotación con todas
las privaciones que son consiguientes á la vida
Inicialmente, el Decreto de 23 de enero de de campo y sin el ausilio de libros y personas
1826 dispuso un salario uniforme de 600 pesos que consultar proporciona una capital de
Un amor
anuales para todos los jueces de letras. Un par departamento.75
desenfrenado de meses después se duplicó el salario de los
por la libertad
jueces de letras que atendieran causas en las Aún a pesar de estas quejas, al menos hasta
Antología de la
historia política capitales de Departamento, en mérito a la so- finales de 1834 se puede observar que en los
de Bolivia
(1825-2020)
brecarga de trabajo que éstos tenían, mediante presupuestos estatales se mantuvo la asigna-
la Orden de 15 de marzo de 1826. Esta misma ción anual de los jueces letrados en 1.000 pe-
212 norma dispuso, además, que dicho salario y el sos en las provincias y en 1.200 pesos en las
incremento se pagaría “[…] sin que los fondos capitales de departamento.76
municipales queden gravados en cosa alguna
Tomo I por este empleo”.73 Los problemas que acarreaban los bajos sala-
1825-1952
rios asignados a los jueces letrados no se limi-
Con esto se ratifica que el salario que perci- taban a la aparente dificultad que hubo para
bían los jueces de letras de las provincias, fuera llenar las plazas en las provincias, o al menos
de las capitales de departamento, se mantuvo a las dificultades que para retener a estas au-
en 600 pesos anuales. Dado este bajo salario, toridades en su destino de manera prolonga-
el mismo Decreto de 23 de enero de 1826 da. Los jueces de letras procedieron a realizar
dispuso que, en forma adicional, los jueces de cobros extraordinarios para, de alguna forma,
letras podrían cobrar un estipendio conforme compensar sus cortas asignaciones. Pero la
al arancel, aunque estos cobros habían sido re- contrapartida de esta práctica, fueron los al-
ducidos a la mitad de los que se podría exigir tos costes que debía erogar la población para
en el período colonial.74 acceder a la justicia de primera instancia (que
sólo podía y sólo debía sustanciarse a través de
los jueces de letras).
hecho contra muchos de los jueces de letras de solo juez de letras para atender a una provin-
este departamento, consistiendo el principal cia, máxime si se tiene en cuenta que los nive-
en el abuso con que varios de ellos enjuician y les inferiores de justicia se habían atribuido a
fomentan por escrito, demandas sobre mate- otras autoridades distintas, como los jueces de
rias y cantidades que prohiben las leyes […]”.77 paz, cuyo número era bastante mayor80 que el
de los jueces letrados.
Esta situación se presentaba aún más grave y
más onerosa para la población indígena, a la Pero no debemos ignorar que había causas
cual desde las normas se había buscado prote- que, por su cuantía o gravedad, necesaria-
ger especialmente, eximiéndoles del pago de mente tenían que someterse al conocimiento
cualquier coste en materia de justicia. No obs- del juez de letras de la provincia, con sede en
tante, esto tampoco fue cumplido.78 algún lugar (cambiante)81 de ésta y hastael
Siendo que el Corregidor y el Alcalde no ha- 87 “Indígenas del ayllu Sullca Hilata contra los del ay-
bían podido evitar una nueva (y violenta) in- llu Condo, del Cantón de Callapa, por posesión de
tromisión de los del ayllu Condo a las tierras terrenos”, ALP/PJJ/1827/Caja 18, fs. 1 vta.
88 “Expediente seguido por Lorenso Tola del Ayllu
de los Sullca Hilata, éstos decidieron acudir, Sullca Ylata con Manuel Trujillano del Ayllu Con-
en un segundo intento y esta vez conforme a do en el Cantón Callapa”, ALP/PJJ/1827-1829/Caja
18, fs. 1.
89 “Expediente seguido por Lorenso Tola del Ayllu
86 “Indígenas del ayllu Sullca Hilata contra los del ay- Sullca Ylata con Manuel Trujillano del Ayllu Con-
llu Condo, del Cantón de Callapa, por posesión de do en el Cantón Callapa”, ALP/PJJ/1827-1829/Caja
terrenos”, ALP/PJJ/1827/Caja 18, fs. 1. 18, fs. 1 vta.
decir que él no tenía por qué “[…] obedecer contra el Corregidor Antonio Ríos por abusos
orden ninguna y que el conocía por jues solo al Co- cometidos en el ejercicio de sus funciones. Aun
rregidor del Canton, y que si este le mandase que antes de que este juez pudiera dictar sentencia,
comparesca lo haría y sino no”.90 Sin embar- y convencidos de que finalmente de decidiría
go, como vimos al principio de este ejemplo, mantener al Corregidor Ríos en su cargo, los
la primera autoridad a la que habían acudido demandantes presentaron, en medio de la sus-
los demandantes había sido el Corregidor del tanciación de la causa, una nueva demanda al
Cantón, cuya decisión tampoco respetaron ni Presidente de la República (Andrés de Santa
acataron los del ayllu Condo a pesar de lo que Cruz) “como al primero y fundamental eje
señalaba Manuel Rojas Cochi. de esta felis República y al que efectivamente
puede remediar nuestros padecimientos”.92 A
Este caso nos muestra mucho más que una esta solicitud, el Presidente respondió:
mera infracción a las normas por no saber a
qué autoridad estaba mandada acudir formal- Resultando del sumario levantado justifica-
mente para resolver una causa criminal como das las estafas del Corregidor de San Andres
un despojo de tierras: nos está hablando de de Machaca Antonio Rios, vuelva al Juez de
una especie de juego propiciado en un con- Letras de la Provincia para que siga y fenesca la
texto de transición, en el que se aprovechaban causa conforme á derecho, dando parte al Gober- Primer periodo
las confusiones entre las propias autoridades nador de la misma á fin de que provea aquel Can-
Bajo la
de gobierno y de justicia, para buscar la alter- ton de nuevo Correjidor […].93 Constitución de
1826 que organiza
nativa más conveniente a los intereses de cada y constituye la
nación boliviana
parte. No era una cuestión de desconocimien- Estamos ante un caso en el que, nuevamente, (1825-1880)
to, de mero rechazo o de falta legitimidad so- vemos a las partes acudir a una autoridad de go-
lamente, sino que, a través del sometimiento bierno (y esta vez a la máxima autoridad de la 217
de la causa a múltiples y distintas autoridades República) en un contexto de clara desconfian-
y de gobierno y de justicia,91 se había abierto za del juez de primera instancia de la Provin-
una posibilidad de poder obtener resoluciones cia y frente a la posición que se asumía (porque Dualidades
legales y dilemas
distintas y contradictorias que favorecieran a era sólo una suposición) de que éste fallaría en institucionales
desde los inicios
una y otra parte y que, al fin y al cabo, hacían contra de sus intereses. Asimismo, este ejem- de la República
imposible aplicarlas todas al mismo tiempo. plo nos muestra que el Presidente de alguna
manera dictó sentencia –aun cuando no tenía
En otro caso suscitado a fines del año 1829, atribuciones para hacerlo por ser una autoridad
siete indígenas principales de los ayllus del del poder Ejecutivo– al haber dispuesto no sólo
Cantón de San Andrés de Machaca presenta- que la causa volviese a conocimiento del juez
ron al juez de letras de Pacajes una demanda (que era lo que estaba mandado por ley), sino
también la remoción del cargo al Corregidor
que había sido acusado, anticipándose del todo
90 “Indígenas del ayllu Sullca Hilata contra los del ay-
llu Condo, del Cantón de Callapa, por posesión de al proceso y al fallo del juez de la causa.
terrenos”, ALP/PJJ/1827/Caja 18, fs. 10. El énfasis
es nuestro.
91 El principio “Non bis in ídem” que rige actualmen- 92 “Expediente criminal de capítulos seguido por
te, bajo el cual no se puede tratar una misma causa los indígenas del Cantón San Andrés de Machaca
dos veces cuando existe identidad de causa, objeto contra su Corregidor el Ciudadano Antonio Rios”,
y sujetos, no había sido recogido por ninguna de las ALP/PJJ/1830-1832/Caja 19, fs. 1.
normas procedimentales republicanas hasta 1840. 93 “Expediente criminal de capítulos seguido por
En realidad, era bastante frecuente en la época que los indígenas del Cantón San Andrés de Machaca
los mismos juicios (por las mimas causas y con los contra su Corregidor el Ciudadano Antonio Rios”,
mismos actores) fueran conocidos varias veces por ALP/PJJ/1830-1832/Caja 19, fs. 9 vta. El énfasis es
diferentes autoridades e incluso por la justicia letrada. nuestro.
Más allá de la tradición, que en parte explica las Repúblicas hispanoamericanas y la versión
esta lógica de elevar las demandas a autoridades particular de liberalismo que cada una de ellas
superiores, si nos situamos en el contexto repu- fue moldeando.
blicano, es decir un contexto en el que, desde
las normas, se estaba tratando de cambiar los Los rechazos a los jueces de letras continuaron
principios y la estructura de la administración aún después de 1829 y fueron muy frecuen-
de justicia, nos parece clave analizar el porqué tes hasta la entrada de los códigos Santa Cruz
de esta desconfianza en los jueces de letras. (1831-1832). Eran comunes las quejas que se
presentaban ante el gobierno contra los jueces
Es importante aproximarnos a estas razones de primera instancia y contra los jueces de paz,
desde la óptica de las muchas repercusiones ambos acusados de fomentar y promover el
sociales que fueron desencadenadas en virtud inicio de causas para, de ese modo, poder ha-
de los nuevos principios y normas que se iban cer cobros indebidos (como señalamos antes
implementando, y también desde la óptica de en este trabajo). En una Vista Fiscal del mis-
la forma en que la gente vivía y concebía la mo año, emitida por el Fiscal de la Corte de
justicia y sus principios realmente (es decir las Distrito de La Paz, también se hacía alusión a
tensiones entre norma y realidad), y la forma las quejas que recibía el Gobierno sobre cobros
Un amor
en que se vivió y se aplicó el principio de sepa- indebidos realizados por los jueces de letras a
desenfrenado ración de poderes en la República. los indígenas (quienes no debían pagar ningún
por la libertad
arancel por la administración de justicia y a
Antología de la
historia política Nos interesa resaltar que los principios jurídi- quienes además se tenía permitido usar del pa-
de Bolivia
(1825-2020)
cos y políticos, como el de separación de po- pel de sello sexto).94 Al respecto, decía el Fiscal:
deres, en apariencia muy teóricos y abstractos,
218 tuvieron efectos y repercusiones reales que iban
94 La República y el principio de igualdad rompieron,
mucho más allá de la estructura estatal e insti-
según el discurso legal, con el fuero especial que te-
tucional; y eran efectos que llegaban a incidir nían los indígenas en el período colonial: ya no tenían
Tomo I en la vida y en el día a día de la gente; y también un tratamiento particular en los principales cuerpos
1825-1952
a la inversa: la gente, sus concepciones, sus cos- legales; en otras palabras, la novedad de la República
“radicó en la inexistencia de un estatus y un fuero especial
tumbres y sus prácticas podían influir en buena
otorgado a los indígenas” (Rossana Barragán, Indios, mu-
medida sobre la manera en que se moldeaba o jeres y ciudadanos. Legislación y ejercicio de la ciudadanía
vivía un principio jurídico de esta naturaleza, o en Bolivia (siglo XIX) (La Paz: Fundación DIALOGO,
rechazarlo a tal punto que incluso podían ha- 1999), 53). No obstante, como bien ha observado la
misma autora, las normas de carácter más “coyuntu-
cer dudar a las autoridades de gobierno sobre
ral”, como leyes, decretos y resoluciones, “muestran
la conveniencia de continuar aplicándolo o no. abundantes disposiciones específicas a los indígenas nom-
brándoseles como tales” (Rossana Barragán, Indios, mu-
En otras palabras, las normas, que son la ex- jeres y ciudadanos…, 53). Un ejemplo de ello, aplicado
específicamente al ámbito judicial, es el “privilegio”
presión concreta de principios más abstrac-
que se concedió a los indígenas al disponer, mediante
tos (a los que la gente reacciona de múltiples una ley, que ellos pudieran presentar sus escritos ante
maneras: resistiéndose, quejándose, adaptán- la justicia en un papel sellado de menor valor que
dose, etc.) no sólo se adaptan a una realidad el resto de los bolivianos, es decir en un papel que
tenía un valor de medio real (sellos sexto), y no de
específica, sino que, en otras situaciones como
dos reales (sello quinto), como pasaba con el resto de
las que presentaremos ahora, ejercen pre- la población. Así, la ley de 14 de diciembre de 1826
sión para modificar, de a poco, una realidad mandó, en su artículo primero, que: “Los bolivianos,
social. Como se señaló en la Introducción de antes llamados indios, usaran el papel de sello sexto, que
declara á los pobres, de solemnidad el artículo 10 de la ley
este trabajo, uno de los planteamientos de esta
de 11 de julio último”. Como señalaba dicha ley, el pri-
investigación es, justamente, que a partir de vilegio concedido a los indígenas era el mismo que se
tensiones de este tipo se fueron construyendo había concedido por una ley anterior, de 11 de julio
Los indigenas de las Provincias de este Dis-
trito, muy pocas veces tienen demandas
sobre dinero efectivo, y si al principio pro-
curaron los Jueces de Letras sostener ques-
tiones de intereses de poco momento, fueron
reprehendidos, y desde aquella epoca, parese
que se sugetan a los artículos de la Ley de
Prosedimientos que hablan sobre la materia,
detallando hasta que cantidad deben conocer
verbalmente y por quienes, principalmente
teniendo a la vista el Arancel ultimamente
publicado, el que previene que los indigenas
particulares no paguen derecho alguno.95
Tomo I
1825-1952 Si el mayor legado de la codificación santacru- Código de Procedimientos sería la introducción
cina fue incorporar en la República boliviana de mecanismos nomofilácticos (o de protección
y en su sistema jurídico el concepto formal de de la ley) y que permitirían una vinculación más
ley (en tanto expresión de la voluntad general cierta y objetiva de los jueces a la ley. Nos refe-
y que sólo podía pronunciarse por las cámaras rimos concretamente a las disposiciones sobre
legislativas) ordenada, general y sistemática, la motivación de las sentencias (herencia de la
que dejaba atrás las compilaciones de normas Francia revolucionaria) y al recurso de nulidad
(desordenadas, oscuras, contradictorias entre sí como precedente (de corte más bien gaditano,
y esparcidas en mil volúmenes, como se las des- que había retomado del derecho castellano an-
cribía en la época),106 el aporte más notable del tiguo) de la figura de la casación.107
justicia castellana, era doble: por un lado, se de Nulidad, que ya había sido introducido a
buscaba proteger la imagen recta e impar- través de la Ley de 8 de enero de 1827 (por
cial de la sentencia (o más bien de quien la haber sido una figura jurídica retomada por el
Decreto gaditano de 9 de octubre de 1812),
108 Art. 1.389 del Código de Procederes de 1832. El
énfasis es nuestro.
109 Art. 377, Código de Procederes de 1832. 111 Al respecto, Garriga y Lorente señalan: “Cualquie-
110 Aunque esta regla habría comenzado a implantarse ra que esté mínimamente familiarizado con el Derecho
en 1498, Garriga y Lorente explican que fue Carlos jurisprudencial del Antiguo Régimen convendrá en que
III quien hizo extensiva esta prohibición en el marco la incerteza jurídica, como una de sus principales notas
de consolidación del proceso de expansión del De- distintivas, dificultaba enormemente motivar las senten-
recho Castellano. Este monarca prohibió expresa- cias (al modo como hoy lo entendemos)” (Marta Lorente
mente a la Audiencia y demás jueces de Mallorca la y Carlos Garriga, “El juez y la ley…”, 104).
motivación de las sentencias, como hasta entonces 112 “Es verdad que la obligación de motivar sentencias se reco-
se acostumbraba en aquellos lugares, mediante una gió en algunas constituciones del área (Hispanoamérica) y
Real Cédula de 1768 en la que se argumentaba que comenzó en ciertas partes a ser legalmente impuesta, pero,
dicha práctica daba “[…] lugar a cavilaciones de los li- como muestran las experiencias mexicana y brasileña, en
tigantes, consumiendo mucho tiempo en la extensión de un contexto de derecho no codificado podía servir a lo sumo
las sentencias, que vienen a ser un resumen del proceso, para legitimar discursivamente la decisión de juez, no
y las costas que á las partes se siguen”. (cit. por Marta para hacer efectiva su vinculación a la ley” (Slemian y
Lorente y Carlos Garriga, “El juez y la ley…”, 104). Garriga, “Justicia popular…”, 38-39).
fuera aplicado como una especie de recurso continuidad de la lógica del derecho antiguo115
de casación, que era el segundo mecanismo por la que todavía se priorizaba el mayor nú-
nomofiláctico que se había aplicado bajo el mero de instancias posibles y sin sentar una
modelo liberal francés, pero que en Bolivia no separación clara entre ellas.
llegaría a cuajar del todo hasta 1861.
A esto se suma, que conforme a las previsiones
Gráfico 1 del Código de Procederes Santa Cruz, el Re-
Estructura primaria del poder Judicial
(mostrando sólo a las autoridades que tenían curso de nulidad, destinado a dejar sin efecto
facultades para administrar justicia) las sentencias que iban contra derecho o en
en la República de Bolivia hasta 1857 quebrantamiento de los procedimientos ju-
diciales, fue mantenido como una atribución
Corte tanto de las cortes superiores (la de Chuquisa-
Suprema
ca, la de La Paz y la de Cochabamba de nueva
Cortes Superiores
de Distrito creación) como de la Corte Suprema.
Corte Superior
de Distrito
(6 vocales, 1 fiscal cada una)
– Sucre – Oruro
– Potosí – Cochabamba
– La Paz
– Tupiza – Cliza
– Sorata
– Tarija – Santa Cruz
– Distrito Litoral – Beni
Fuente: Elaboración propia con base en la Ley de Organización Judicial de 30 de diciembre de 1857. Primer periodo
Bajo la
Constitución de
El cambio más notorio implementado por la 1826 que organiza
norma que nos ocupa fue la división del te- y constituye la
nación boliviana
rritorio en partidos judiciales (doce en total), (1825-1880)
– Oruro – Larecaja
– Cercado – Omasuyos – Tarija
– Paria – Chichas – Muñecas – Cobija – Cercado
– Carangas – Cinti – Caupolicán – Atacama – Salinas
228
La división del territorio en partidos judiciales tribunal de partido. Estos jueces de naturaleza
para los cuales fueron creados tribunales de pri- letrada,124 tenían a su cargo la etapa del sumario
Tomo I mera instancia, así como el reforzamiento de la o instrucción dentro de las causas criminales
1825-1952
presencia judicial con jueces letrados (funcio- que fueran iniciadas dentro de su jurisdicción,
narios del poder Judicial) en las provincias (a mientras que el plenario debía ser de conoci-
través de la creación de la figura de los jueces miento de los tribunales de partido. También
de instrucción), son muestras de un fenómeno se les facultó para conocer las causas civiles
de multiplicación de los juzgados de primera de menor cuantía, aun cuando éstas estuvie-
instancia y de menor cuantía en la República. ran sometidas a la jurisdicción de los alcaldes
Es justamente este fenómeno el que explica parroquiales.125 Este aspecto resulta sumamente
también, el amplio crecimiento del número de llamativo, pues implica atribuir el conocimien-
jueces que se vivió en la República, cuya etapa to de las causas de mínima cuantía a jueces le-
de mayor crecimiento ocurrió justamente entre trados, ampliando, de ese modo, el alcance de
1850 a 1860, cuando, según Pantaleón Dalen- la justicia profesional sobre los asuntos consi-
ce, se pasó de 77 jueces a 121.123 derados “menores” y que, hasta entonces, eran
sometidos al conocimiento de jueces legos (es-
Cada provincia que estuviera comprendida en pecíficamente los jueces de paz).
cada uno de los doce partidos judiciales que
habían sido delimitados, estaría a cargo de un 124 “Los jueces de instrucción serán abogados que, inmedia-
juez de instrucción. También debía haber uno tamente antes de su nombramiento, hayan ejercido su
de estos jueces en la capital donde residiese un profesión por al menos dos años” (art. 49, Ley de Orga-
nización Judicial de 30 de diciembre de 1857).
125 Arts. 49 y siguientes, Ley de Organización Judicial
123 Rossana Barragán, “L´État pactant…”, 314). de 30 de diciembre de 1857.
Esto no significó, empero, que se llegase a aunque propias del poder Judicial, eran nom-
prescindir de las autoridades no judiciales para bradas por el gobierno central.129
conocer las causas de mínima cuantía, por
cuanto éstas permitían ampliar el alcance de En la Ley de Organización Judicial de 1857,
la justicia administrada desde el Estado y sus salta a la vista la desaparición de la figura de los
procedimientos, aun cuando fuera por autori- procedimientos conciliatorios como requisito
dades de gobierno. Este escalón de la justicia previo obligatorio para acceder a la justicia de
de mínima cuantía en materia civil se asignó a primera instancia y que, bajo la normativa an-
los alcaldes parroquiales, que pasaban a reem- terior, eran sustanciados por los jueces de paz
plazar a los alcaldes de aldea o ayllu. Los alcal- junto a los colegas nombrados por cada parte.
des parroquiales eran legos y pertenecían a las En su lugar, se dispuso que “todos los habitantes
Municipalidades (no propiamente al poder Ju- de la República podrán terminar sus diferencias
dicial), bajo cuyas normas se regía su elección. en negocios civiles, o en los de injurias que no
produzcan acción criminal, por medio de jue-
Estas autoridades debían ser nombradas en ces árbitro o amigables componedores”.130
razón de uno por cada cantón, dentro de una
parroquia, que estuviere poblado por más de Aunque permaneció la posibilidad resolver
500 habitantes.126 En la mayor parte de los ciertas causas en arbitraje, las conciliaciones se Primer periodo
casos, las causas que podían ser sometidas a eliminaron de los procedimientos judiciales y
Bajo la
conocimiento de los alcaldes parroquiales no volvieron a ser incorporadas (como una for- Constitución de
1826 que organiza
no podían ser objeto de apelación posterior, ma extraordinaria de conclusión de los proce- y constituye la
nación boliviana
como por ejemplo las causas hasta la cuantía sos en materia civil (siempre que estuvieran en (1825-1880)
de 16 pesos.127 juego derechos susceptibles de disposición por
parte del titular de los mismos que pudieran ser 229
Aunque la reforma judicial de 1857 traduce el transigibles) y, también, como una vía de des-
esfuerzo del Estado por insertar jueces letra- carga de las labores judiciales) hasta el Código
dos en la esfera de la justicia de menor cuantía Procesal Civil boliviano del año 2013.131 Dualidades
legales y dilemas
–esfera por cierto compartida con funciona- institucionales
desde los inicios
rios municipales que tenían ciertas atribucio- Ya dijimos que las reformas en la estructura de la República
nes judiciales (los alcaldes parroquiales)–, el judicial introducidas a través de la Ley de Or-
hecho de que se tratase de jueces nombrados ganización Judicial de 1857 fueron de suma
directamente por el gobierno, es decir por importancia en términos de la ampliación del
el poder Ejecutivo, y que la duración de sus alcance de la justicia estatal profesional y letra-
funciones fuera, además, coincidente con el da a más puntos del territorio de la República,
período constitucional del Gobierno que hu- y que, además, esta multiplicación territorial de
biera realizado su designación,128 nos obliga la justicia significó un crecimiento importante
a cuestionar la independencia que guardaban del ramo judicial estatal, que es un aspecto cla-
estas autoridades con respecto al poder Eje- ve para entender cómo este crecimiento seguía
cutivo. Al fin y al cabo, las causas de mínima siendo una de las prioridades dentro del proce-
cuantía seguían resolviéndose por autorida- so decimonónico de construcción estatal.
des de gobierno local o por autoridades que,
129 Hacen falta estudios sobre estas interferencias en el
126 Arts. 54 y siguientes, Ley de Organización Judicial remo judicial en la segunda mitad del siglo XIX en
de 30 de diciembre de 1857. Bolivia.
127 Art. 57, Ley de Organización Judicial de 30 de di- 130 Art. 1, Ley de Organización Judicial de 30 de di-
ciembre de 1857. ciembre de 1857.
128 Art. 51, Ley de Organización Judicial de 30 de di- 131 Arts. 234-238, Ley Nº 439 de 19 de noviembre de
ciembre de 1857. 2013 (que entró en vigor en el año 2016).
Pero al margen de estos cambios, queremos se incorporó en las normas procedimentales
hacer también algunas referencias a lo que bolivianas desde 1827, el hecho de que fuera
consideramos que fue el cambio más signi- una figura de las tantas que estaba llamada a
ficativo que introdujo la norma en cuestión conocer la Corte Suprema (entre ellas la ter-
y que consolidaría el paso de las lógicas del cera instancia como recurso ordinario), hacía
derecho antiguo a un derecho moderno re- mantener en la naturaleza de este tribunal to-
sultado de la experiencia de los cambios en davía algunos resabios de la antiguas Audien-
materia de justicia adoptados en la República cias del Derecho indiano.
boliviana desde sus meros inicios. Nos refe-
rimos, concretamente, a la adopción de un Fue, entonces, el paso al sistema de la doble ins-
sistema judicial de doble instancia, y la ca- tancia, el que permitió que la Corte Suprema, sin
racterización de la Corte Suprema de Justicia llegar a ser un tribunal de casación bajo el mo-
como una instancia de revisión de legalidad y delo de la Francia revolucionaria de 1790, sí pa-
del seguimiento correcto de los procedimien- sase a ser un tribunal cuyas atribuciones estaban
tos y las formas procesales en los juicios y en reservadas sobre todo a revisar que los tribunales
las sentencias que pudieran ser conocidos en inferiores hubieran aplicado correctamente las
segunda instancia o apelación (a través del re- leyes. Más adelante, esta situación se ratificaría
Un amor
curso de nulidad). con el cambio de nombre que realizaría de la
desenfrenado Corte Suprema a “Corte de Casación”.133
por la libertad
La lógica bajo la cual las causas debían cono-
Antología de la
historia política cerse, a modo de garantía de justicia, en tres
de Bolivia
(1825-2020)
instancias distintas (básicamente: primera ins- 4. Conclusiones
tancia, réplica y súplica o suplicación), cada
230 una de las cuales implicaba un nuevo conoci- A lo largo de este trabajo, hemos procura-
miento de las causas en sus aspectos de hecho do esbozar cómo se desarrolló el proceso de
y de derecho, terminó con la Ley de Organi- construcción del poder Judicial durante los
Tomo I zación Judicial de 1857. Ésta mantuvo sola- primeros 32 años de la República de Bolivia,
1825-1952
mente dos instancias para los juicios, y dejó a enfocando nuestra atención en los principales
la Corte Suprema no ya una tercera instancia, desafíos y dilemas institucionales que se plan-
sino una instancia de revisión solamente de tearon en este ámbito.
los aspectos de derecho y de apego a la nor-
ma procesal de las sentencias de las Cortes Se trata de un proceso que emprendieron to-
Superiores de Justicia que causaren ejecutoria, das las Repúblicas hispanoamericanas en for-
es decir fundamentalmente de las sentencias ma prácticamente simultánea y bajo los mis-
emitidas por dicha corte en apelación.132 mos designios, entre ellos:
Visto esto así, y si nos atenemos a la naturale- a) establecer un poder Judicial separado del
za del recurso de casación (por ejemplo, bajo resto de los poderes estatales; imponer la
la forma en que éste fue implementado bajo primacía constitucional y la consecuente
la Ley de Enjuiciamiento Civil española de noción formal de ley en tanto expresión de
1855), vemos que se trata de figuras análogas. la voluntad general, únicamente supeditada
Aunque el recurso de nulidad es una figura que a los mandatos constitucionales;
las normas procedimentales doceañistas ha-
bían retomado de las Siete Partidas, y aunque
133 Arts. 62 y 63 de la Constitución de 1861, ratifica-
dos posteriormente por el art. 79 de Constitución
132 Art. 7, Ley de Organización Judicial de 30 de di- Política de 9 de octubre de 1871. Cit. por Rossana
ciembre de 1857. Barragán, “L´État pactant…”, 341.
b) el paso hacia un sistema caracterizado por de Cádiz de 1812 y la normativa de las Cortes
el imperio de la ley y el centralismo jurí- en materia de justicia (que no habían llegado
dico (el derecho es solamente estatal) y el a ser aplicadas en la mayor parte de Hispa-
ordenamiento de las leyes del Estado y có- noamérica a raíz del inicio de los procesos de
digos, es decir normas únicas, ordenadas y Independencia), y se las introdujo a través de
avocadas a una sola materia (poniendo fin a una serie de normas del nuevo Estado. Para
las múltiples y contradictorias compilacio- la República boliviana, no cabe duda de que
nes de normas del derecho antiguo); y reformar la justicia era una cuestión prioritaria
c) la intención de vincular la actividad judicial y por ello se hicieron grandes esfuerzos en ese
a las leyes, para garantizar su cumplimiento sentido.
por encima de los criterios de quienes esta-
ban llamados a aplicarlas (es decir los jue- La etapa comprendida entre 1825 y 1832, estu-
ces), a través de mecanismos como la profe- vo marcada por una predominancia de los prin-
sionalización de justicia (entendiendo que cipios recogidos de las normas gaditanas, los
sólo podía hacer una aplicación cabal de la cuales habían introducido algunos importantes
ley quien las hubiera estudiado y las com- cambios con respecto al derecho de antiguo ré-
prendiera) y otras formas de protección de gimen, aunque sin llegar a romper realmente
la norma jurídica como el establecimiento muchos de los fundamentos de la justicia anti- Primer periodo
de un tribunal de casación que pudiera ve- gua. Aun así, esta etapa fue determinante para
Bajo la
lar por la legalidad de los fallos judiciales. empezar a armar la estructura del poder Judi- Constitución de
1826 que organiza
cial, a la cabeza de la Corte Suprema de Justicia, y constituye la
nación boliviana
Pero esta suerte de programa de corte liberal dos Cortes Superiores de Justicia (en Chuqui- (1825-1880)
que se habían propuesto seguir todas las nue- saca y La Paz) y jueces de letras para conocer las
vas Repúblicas, se vio pronto confrontado con causas en primera instancia (en las provincias y 231
la realidad de cada una de ellas, forzando a que capitales de departamento).
estos nuevos estados adecuaran y, en algún
caso, incluso reformularan las proyecciones Todas estas autoridades tenían asignada una Dualidades
legales y dilemas
que se habían propuesto seguir y que procu- renta que asumía el Estado y cuya intención institucionales
desde los inicios
raron plasmar en sus normas de forma muy era lograr una justicia gratuita en beneficio de de la República
Finalmente, no se optó por esta vía, pero sí A partir del estudio de los principales di-
se vio por conveniente habilitar a autorida- lemas que se presentaron en la estructura-
des de gobierno local (desde 1831 y, si cam- ción e institucionalización del poder Judicial
bios, en el Código de Procederes de 1832), en la primera mitad del siglo XIX, podemos
adentrarnos también en el tema de los cam- imaginarios. En: El Estado del Estado en
bios y continuidades que caracterizaron a los Bolivia. Informe Nacional sobre Desarrollo
procesos de construcción de los estados repu- Humano, PNUD, 127-218. La Paz: PNUD.
blicanos. En este ámbito, y en el caso específi- Barragán, Rossana; Lema, Ana María y Men-
co de Bolivia, vimos cómo desde un principio, dieta Pilar (Coords.), 2015. Bolivia su his-
la estructura judicial y los procedimientos en toria, Tomo IV: Los primeros cien años de la
materia de justicia se articularon a partir de República, 1825-1925. La Paz: Coordina-
normas e instituciones de distinta proceden- dora de Historia/La Razón
cia y raigambre. Barriera, Darío. 2019. Historia y justicia. Cul-
tura, política y sociedad en el Río de la Plata
Muchas de ellas provenían del derecho anti- (Siglos XVI-XIX). Buenos Aires: Prometeo
guo y de sus lógicas; otras se pueden rastrear Libros.
hasta su introducción por la normativa gadi- Carbasse, Jean-Marie. 2009. Manuel d´intro-
tana y su versión de liberalismo jurídico; otras duction historique au droit. Paris: Presses
fueron tomadas del modelo liberal francés; y Universitaires de France.
otras tantas respondieron a las especificidades Bilot, Pauline y Whipple, Pablo. 2014. Los
de la República boliviana. Esta convivencia de desafíos de la justicia republicana. Pro-
cambios y continuidades, de continuidades en fesionalización e independencia de la ju- Primer periodo
los cambios que se fueron logrando hasta 1857 dicatura en Chile y Perú durante el siglo
Bajo la
y de las contradicciones que dichas continui- XIX. En Entre Mediterráneo y Atlántico. Constitución de
1826 que organiza
dades son capaces de reflejar, son también un Circulaciones, conexiones y miradas, 1756- y constituye la
nación boliviana
rasgo característico de los procesos de cons- 1867, coords. Antonini De Francesco, (1825-1880)
trucción del Estado republicano, en el cual, Luigi Mascilli Migliorini y Raffaele No-
según hemos buscado mostrar, la formaliza- cera, 477-500. Chile: Fondo de Cultura 233
ción de la judicatura y la idea de que se estaba Económica.
cambiando radicalmente la justicia y sus en- Candioti, Magdalena. 2017. Un maldito De-
granajes (aunque sabemos que no fue del todo recho. Leyes, jueces y revolución en la Buenos Dualidades
legales y dilemas
así) fueron fundamentales en el intento de do- Aires republicana, 1810-1830. Buenos Ai- institucionales
desde los inicios
tar de una identidad jurídica propia a la joven res: Didot. de la República
República, sobre todo si tenemos en cuenta la Cervantes virtual. Ver Decreto CCI de 9 de oc-
importancia que tenía dicha intención en los tubre de 1812. En Cortes de Cádiz, Co-
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(1825-2020) f=false) (consultado el 4 de septiembre de
Slemian, Andréa y Garriga, Carlos. 2018. Jus-
2020).
236 ticia popular. Sobre la dimensión judicial
del primer constitucionalismo iberoame-
Expedientes judiciales y fuentes de archivo
ricano. Jahrbuch für Geschichte Lateiname-
Tomo I rikas Anuario de Historia de América Latina
1825-1952 ALP: Archivo de La Paz.
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ABNB: Archivo y Biblioteca Nacionales de Bo-
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rica: la construcción de las Repúblicas en livia.
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el siglo XIX. http://biblioteca-digital.ucsh.
cl/greenstone/collect/libros_respaldofull/ tulo).
index/assoc/HASH01d2.dir/La%20reac- “Indígenas del ayllu Sullca Hilata contra los
cion.pdf (consultado el 10 de septiembre del ayllu Condo, del Cantón de Callapa,
de 2020). por posesión de terrenos”, ALP/PJJ/1827/
Urcullo, Andrea. 2010. Cambios y continui- Caja 18.
dades en las prácticas de la justicia (Boli- Memorial del Juez de Letras de la Provincia
via, 1825-1840). Tesis de licenciatura en de Sica Sica, adjunto a una Carta de Bal-
Derecho, Universidad Católica Boliviana tazar Alquiza, Presidente de la Corte de
“San Pablo”, La Paz. Distrito de La Paz, al Ministerio de In-
_____. 2012. Siguiendo los Pasos de Cádiz: las terior, fechada en 26 de julio de 1827. En
primeras normas procedimentales en ma- ABNB/MI/T. 15/ No. 4/1827/Corte Supe-
teria de justicia en la República de Bolivia rior de La Paz.
(1825-1832). Revista Andina 52: 91-112. “Expediente seguido por Lorenso Tola del
_____. 2013. Parecemos y decimos… Los in- Ayllu Sullca Ylata con Manuel Trujillano
dígenas de la Provincia Pacajes frente del Ayllu Condo en el Cantón Callapa”,
a la justicia estatal republicana (Bolivia, ALP/PJJ/1827-1829/Caja 18.
Carta de Miguel José Cabrera al Ministro de “Expediente criminal de capítulos seguido por
Interior, en ABNB/MI/T.20/No.6/1828. los indígenas del Cantón San Andrés de
Carta de Eusebio Gutiérrez al Ministro de In- Machaca contra su Corregidor el Ciuda-
terior, de fecha 18 de mayo de 1829, en dano Antonio Rios”, ALP/PJJ/1830-1832/
ABNB/MI/T.23/No. 4/1829. Caja 19.
Vista Fiscal de fecha 23 de junio de 1829, emiti- Expediente criminal por injurias iniciado por
da por el Fiscal de la Corte Superior de Dis- el Alcalde del Cantón de Achocalla, Pas-
trito de La Paz. En ABNB/MI/T. 23/ No. 4/ cual Ayala, contra Matías Mamani, ALP/
1829/ Corte Superior de Distrito La Paz. PJJ/1830-1832/Caja 19.
Carta del presidente de la Corte de Distrito de “Expediente criminal de capítulos seguido por
La Paz, Baltazar Alquiza, al Ministerio de los indígenas del Cantón San Andrés de
Interior, fechada en 2 de julio de 1829. En Machaca contra su Corregidor el Ciuda-
ABNB/MI/T. 23/No. 4/1829/Corte Supe- dano Antonio Rios”, ALP/PJJ/1830-1832/
rior de La Paz. Caja 19.
Primer periodo
Bajo la
Constitución de
1826 que organiza
y constituye la
nación boliviana
(1825-1880)
237
Dualidades
legales y dilemas
institucionales
desde los inicios
de la República
Hilvanando el territorio de Bolivia en sus itinerarios
geopolíticos (1825-1880)
Clara López Beltrán
Instituto de Investigación de Humanismo y Tradición Clásica
Universidad de León - España
Primer periodo
Nos ha cabido pues, un territorio que, aunque más bien, por la geografía, la integración vial y
Bajo la
carece de buena costa, en compensación es inmenso,
los intereses regionales. Me basaré en dos tipos Constitución de
variado, fecundo y bañado de innumerables ríos. 1826 que organiza
Somos, en una palabra, dueños del amenísimo de fuentes como cimientos de la investigación: y constituye la
nación boliviana
centro de Sud América, en que la naturaleza la cartografía y la red de vías de comunicación. (1825-1880)
convida a mano llena, cuánto hay de útil, grande
y precioso en las zonas tórrida y templada. Estas Palabras clave: Bolivia; Audiencia de Charcas; 239
circunstancias nos indican claramente que nuestro
Territorio; Mapas de Bolivia; Vías de comunica-
bien estar debemos buscarlo en la agricultura,
industria fabril y comercio interior. ción; Geopolítica.
[Dalence, 1851]1 Hilvanando el
territorio de Bolivia
en sus itinerarios
geopolíticos
Resumen Introducción (1825-1880)
L
a colectividad política de Bolivia tuvo Bolivia y su espacio geográfico nacieron como
que construir su Estado sobre un esce- República el 6 de agosto de 1825. Sin embar-
nario geográfico y poblacional que nece- go, no todo lo anterior se canceló ni todos los
sitaba ser integrado para consolidar su afiliación buenos deseos de los patriotas vencedores em-
nacional. Igual que otras Repúblicas latinoa- pezaron a germinar. La construcción del Es-
mericanas recién creadas, Bolivia surgió de una tado fue un proceso extendido en el tiempo,
forzada amalgama jurisdiccional cuya estructura, respetando el ritmo del proceso histórico. En
creada bajo el dominio español, funcionó de ma- el actual pensamiento geopolítico sobre Suda-
nera estable al edificarse sobre un espacio eco- mérica, concluye Matheus H. Pfrimer, coexis-
nómico estimulado por la minería de plata. Las ten en los manuales por lo menos tres visiones
preguntas a responder son: ¿Cómo y cuándo se sobre Bolivia: la primera, que es un absurdo
va conociendo el territorio boliviano? ¿Se logró geopolítico; la segunda representa a Bolivia
confeccionar un retrato en el cual el Estado y la como un cortafuego estratégico entre Argen-
población se reconozcan? La pesquisa se inclina, tina y Brasil (la menos aceptada); y una ter-
cera vertiente afirma a Bolivia como un área
significativa para la integración sudamericana,
1 José María Dalence, Bosquejo Estadístico de Bolivia
(Chuquisaca: Imprenta de Sucre, 1851), 61-62. visión esta última sostenida por su situación
geográfica en el corazón de la América del responder son: ¿Cómo y cuándo se va cono-
Sur.2 Desde la historia, parece desatinada la ciendo el territorio boliviano durante el siglo
primera visión aunque algunos investigadores XIX? ¿Se logró confeccionar un retrato en el
sostienen que un espacio geográfico con ca- cual el Estado y la población se reconozcan?
racterísticas fisiográficas tan dispares junto a Son la estadística, el censo y algunos mapas los
una orografía variada, impidió la integración que impulsaron ese reconocimiento.
entre diferentes regiones del territorio boli-
viano inviabilizando su propia existencia en Este análisis nos acerca a aquellos impulsos
cuanto país.3 colectivos por reconocer la unidad del nudo
central del espacio geográfico y los anhelos
Bolivia fue creada sobre la base de la unidad por expandirlo. Pone en relieve el ordena-
jurisdiccional de la Audiencia de Charcas en miento territorial comprometido por la actual
uso de la herramienta jurídica del principio le- Bolivia, hilvanado a lo largo de su historia por
gal del Uti posseditis iuris, enunciada por Simón corredores de circulación útiles para el con-
Bolívar después de las guerras de la Indepen- tacto entre individuos, así como para el inter-
dencia. Sin embargo, debido a la imprecisión e cambio de objetos, mercaderías y saberes; al
inconsistencia de tales límites sobre el terreno, mismo tiempo dichos corredores constituyen
Un amor
especialmente en la Amazonía y el Chaco, cu- un elemento estrechamente relacionado con
desenfrenado yos espacios quedaron fuera del control estatal el poblamiento y por tanto con la articulación
por la libertad
y con muy baja densidad poblacional, la con- social del territorio. Esta ruta hace parte de
Antología de la
historia política solidación del Estado naciente se hizo sobre una red más amplia de travesías de intercam-
de Bolivia
(1825-2020)
territorios estructurados y articulados por el bio con ramificaciones laterales. Ha funciona-
gobierno español en América. do como engranaje de transmisión para im-
240 pulsar las corrientes de integración territorial,
En algún momento la historiografía ha señala- involucrando pueblos ancestralmente unidos
do que los embrionarios estados latinoameri- por lazos históricos y culturales. A lo largo de
Tomo I canos surgieron de una forzada amalgama ju- la historia, la ruta troncal de Charcas, después
1825-1952
risdiccional, empero, la República de Bolivia Bolivia, ha encontrado dificultades en el pro-
apuntaló su espacio geográfico en una estruc- ceso de integración internacional que trunca-
tura organizada y constituida por la Corona ron o dificultaron el flujo rotatorio, debido a
española. Funcionó de manera estable desde factores gubernativos y a la carencia de políti-
finales del siglo XVI, al cimentar un complejo cas públicas de largo aliento.
económico estimulado por la minería argen-
tífera de Potosí cuyo trayecto rector lo cons-
tituyen las montañas de los Andes que sirven 1. El territorio de Bolivia en la América
de vaso comunicante con ramificaciones a oc- de 1825
cidente y a oriente. Este estudio se ha fijado
el objetivo de mostrar y explicar la influencia Las fronteras y el control efectivo del territo-
del orden establecido durante la administra- rio estaban lejos de ser una realidad para las
ción virreinal en el espacio geográfico del na- nuevas Repúblicas americanas. Los límites in-
ciente Estado boliviano. Las preguntas para ternacionales elegidos bajo el principio del Uti
Posseditis Iuris eran declaraciones abstractas
que avivaban las aspiraciones de los patriotas
2 Matheus H. Pfrimer, “Heartland Sul-americano? independentistas. Lo cierto es que algunos de
Dos discursos geopolíticos à territorializaçâo de los recién creados Estados, como Brasil, Chile
um novo triângulo estratégico boliviano” GEOUSP
Espaço e Tempo 29 (2010): 131-144.
o Argentina controlaban con mayor énfasis sus
3 Pfrimer, GEOUSP Espaço e Tempo, 133. regiones costeras, mientras que México, Perú
y Bolivia, entre otros, imponían su vigilancia dimensiones del territorio a administrar. En
en las regiones interiores donde se concentra- un espacio casi desconocido para la adminis-
ba la población de mayoría indígena. tración estatal, sin control administrativo y es-
casamente poblado, las vías de comunicación
La creación de Bolivia estuvo sometida a ten- actuaron ciertamente como arterias que inte-
siones e intereses regionales de grupos de graron las regiones y sus actividades extracti-
poder. En medio de rivalidades emergió una vas, la pequeña producción agropecuaria, el
nueva estructura política nacida a base de una mercado interno, así como y las redes de co-
Constitución, y así, el 6 de agosto la Asam- mercio nacional e internacional. Poco intere-
blea Constituyente se reunió en la ciudad de só a los primeros gobiernos republicanos un
Chuquisaca (hoy Sucre) donde “…hubo opi- acercamiento al aún impreciso conocimiento
niones encontradas, pero al final los doctores cartográfico del mundo científico, por lo que,
y clérigos liberales, teóricos discípulos de la a excepción del corredor andino cuyo espacio
revolución francesa inmersos en las cortes ga- geográfico era bien conocido y utilizado por
ditanas y la Convención, resolvieron por gran los habitantes, las regiones de tierras bajas
mayoría constituir la República de Bolívar.” eran casi totalmente ignotas, pero aun así fue-
La nueva clase dirigente lucharía no sólo para ron incorporadas al imaginario nacional.
cambiar en el mando al poder realista, sino Primer periodo
que lucharía también, desafiando al libertador La división territorial político administrativa
Bajo la
Simón Bolívar, por lograr un Estado indepen- se ordenaba por departamentos, provincias y Constitución de
1826 que organiza
diente libre cuyos cimientos empezaron a cua- cantones que reemplazaron a las Intenden- y constituye la
nación boliviana
jar con la creación de la Audiencia de Charcas cias, a los Partidos o Subdelegaciones y a las (1825-1880)
en 1561. Hacia 1776, la jurisdicción charqui- Parroquias respectivamente.6 Sin embargo,
na se incorporó al recientemente creado vi- fue el afamado Informe sobre Bolivia elaborado 241
rreinato del Río de la Plata con su capital en por el irlandés Joseph B. Pentland el que ex-
Buenos Aires, incluyendo las llamadas, desde puso que en 1827 la mayoría de la población
entonces, provincias altoperuanas o Alto Perú: estaba concentrada en los departamentos de Hilvanando el
territorio de Bolivia
Potosí, La Paz, Cochabamba y Charcas. En- La Paz (34 por ciento), Potosí (22 por cien- en sus itinerarios
geopolíticos
tonces, las independientes Provincias Unidas to) y Chuquisaca (13 por ciento) igual que en (1825-1880)
del Río de la Plata pretendían la incorpora- Cochabamba (14 por ciento), mientras que
ción de las ya mencionadas cuatro provincias, Oruro únicamente albergaba un 10 por cien-
mientras que el Perú reivindicaba los derechos to. El Informe destacaba la vocación minera de
históricos sobre Charcas.4 Ni con Lima ni con Potosí e imaginaba al departamento de Santa
Buenos Aires fue la frase que resume acertada y Cruz, con un siete por ciento de la población,
taxativamente la posición de los fundadores de cual un lejano proveedor agropecuario. El
la bolivianidad, tema cuidadosamente estudia- país nació con una evidente orientación rural.
do por el historiador José Luis Roca.5 Las ciudades, de modesto tamaño, adquirie-
ron una expectable relevancia ya que se com-
Una vez reconocida Bolivia como Estado in- portaron como enclaves donde se asentaba el
dependiente, el país tuvo que imaginar las poder político: La Paz con 40.000 habitantes
concentraba el 11 por ciento de la población
4 Valentín Abecia Baldivieso, Las relaciones internacio-
nales en la historia de Bolivia (La Paz, Los Amigos del 6 Rossana Barragán, Pilar Mendieta, Andrea Urcu-
Libro/Academia Nacional de Ciencias de Bolivia, llu y Roger Mamani, “Organizando la República
1979), 275. naciente”, en Bolivia. Su historia, tomo IV, coords.
5 José Luis Roca, Ni con Lima ni con Buenos Aires. La Rossana Barragán, Ana María Lema, Pilar Mendie-
formación de un Estado nacional en Charcas (La Paz, ta (La Paz: Coordinadora de Historia/La Razón,
Plural/IFEA, 2007). 2015), 73.
del departamento; Potosí, con 9.000 habitan- tradicional salida marítima de Charcas, aun-
tes tenía el cuatro por ciento, y Chuquisaca, que en ese momento de dudosa soberanía por
con 12.000 habitantes, el ocho por ciento; en las fracasadas conversaciones con Perú; no
la zona de valles se hallaba Cochabamba, con obstante, se mantuvo activo para prestar servi-
30.000 habitantes lo que significaba el 20 por cios a Bolivia. Fue entonces que, apenas crea-
ciento del total departamental.7 da la República de Bolivia, se puso gran énfasis
en buscar una alternativa, y a sugerencia del
No obstante, a partir del ordenamiento legado coronel Francisco Burnett O’Connor,8 se de-
por la administración española, el nuevo Esta- claró por decreto del 28 de diciembre de 1825
do estableció su centro de actividades en el co- al puerto de Cobija como la salida principal al
rredor andino que comprendía desde el norte litoral pacífico, asignándole en 1828 el nom-
del lago Titicaca hasta las regiones mineras bre de Puerto La Mar, en homenaje al maris-
de Lípez y Chichas. Simultáneamente, les co- cal José de La Mar, vencedor en la batalla de
rrespondió a las vías de comunicación ya co- Ayacucho, o Lamar a secas, tal cual consta en
nocidas, prolongar su influencia por medio del algunos protocolos oficiales.
intercambio comercial e integración poblacio-
nal comunicando dicho corredor terrestre con Cobija había sido un lugar de pescadores na-
Un amor
Lima, y además vía Arica con el Océano Pací- tivos pertenecientes a la etnia de los changos
desenfrenado fico; y, al otro extremo, vía Buenos Aires con cuya relación con tierras andinas era ancestral.
por la libertad
el Océano Atlántico. Desde el siglo XVII enviaba remesas de pesca-
Antología de la
historia política do seco a los vastos mercados de Charcas, y en
de Bolivia
(1825-2020)
Resultante de ello fue que se convirtió en un virtud a ello fue llamada la Ruta del Pescado.9
territorio entre océanos, pero lejos de la costa Habilitar el puerto La Mar, alojado en un flan-
242 marítima. Y fue precisamente por esa lejanía co inclemente del desierto de Atacama como
que interesaba establecer y estimular un ca- principal puerto de la naciente República, su-
mino de contacto con la actividad comercial puso un desafío y duelo desigual con la natura-
Tomo I marítima. No constituyó una preocupación leza. En su momento inicial fue un arquetipo
1825-1952
menor la habilitación de un puerto marítimo de improvisación política.10
a fin de relacionarse con espacios políticos y
económicos mayores, mientras que el acceso Si bien llegó a ser el desembarcadero más im-
al Pacífico estaba consolidado con el uso pluri portante de Bolivia en sus primeras décadas, no
centenario de la arteria caminera hacia Arica, prosperó; su fracaso lo causaron los variados
mientras que el ingreso al Atlántico por Bue- escollos que dificultaban el ingreso de los bar-
nos Aires era dificultoso por la distancia, sin cos hasta el litoral, fuere por mar o por tierra.
embargo, tal camino era socorrido porque se Se sucedieron en ese litoral catástrofes como
mantuvieron activas las precedentes postas de la epidemia de malaria de 1869, un destructivo
abastecimiento del virreinato en el territorio
de las Provincias Unidas del Río de la Plata. 8 Francisco Burdett O’Connor (1791-1871). Mi-
litar irlandés que en América luchó por la causa
Como se ha señalado, el acceso al Pacífi- independentista. Desde 1920 estuvo a órdenes de
Simón Bolívar. Fue comisionado para recorrer la
co estaba protegido por el puerto de Arica,
costa y referir el lugar idóneo.
9 Clara López Beltrán, La Ruta de la Plata: de Potosí al
Pacífico. Caminos, comercio y caravanas en los siglos XVI
7 Joseph B. Pentland (1797-1873). Informe sobre Boli- al XIX (La Paz: Plural, 2016), 83-105.
via [1827] Bosquejo del estado en que se halla la riqueza 10 Eduardo Téllez Lugano y Osvaldo Silva Galdames,
nacional de Bolivia. Estudio introductorio de Ana “Noticias sobe los inicios históricos de La Mar
María Lema. (La Paz: Biblioteca del Bicentenario (Cobija), primer puerto de Bolivia en el Pacífico
de Bolivia, 2017). (1828)”, Cuadernos de Historia 37 (2012): 241-248.
terremoto en 1868 y un maremoto en 1877, a ellas, se agrupó a la población nativa en es-
que terminó por destruirlo. Ante la nueva cir- tructuras urbanas llamadas reducciones, desde
cunstancia, la importación y el comercio no donde se evangelizaría y ejercería control fis-
encontraron incentivos y tampoco hubo inte- cal de los tributos. Las ciudades del virreina-
rés por impulsar su crecimiento. Su actividad to eran centros urbanos con una intensa vida
se trasladó a Antofagasta, mientras que Cobija social, política y religiosa que se localizaban a
se despobló, firmando su defunción y ruina. lo largo y ancho del continente conquistado y
En 1907 fue clausurado oficialmente.11 constituyó la estructura portante del sistema
administrativo, cultural y económico.
Durante sus primeras décadas de vida, la Re-
pública de Bolivia adoleció de escasas modifi- 1.2 La Audiencia de la Plata en Charcas
caciones en el ordenamiento territorial y po-
blacional, que mantuvo como espina dorsal el Merced al descubrimiento de las ricas minas
macizo andino, cuyo mecanismo estructurante de plata de Potosí en 1545 y su progresiva
había sido establecido por la jurisdicción de importancia económica, la región potosina se
la Audiencia de Charcas lo mismo que por la tornaría en el eje principal del virreinato del
producción minera de del territorio potosino. Perú comprendiendo una gran diversidad de
ambientes geográficos y de pueblos. Dada la Primer periodo
1.1 Charcas como unidad geo-histórica distancia con la capital, Lima –sede del poder
Bajo la
virreinal–, surgió entonces la necesidad de Constitución de
1826 que organiza
Durante la Colonia, a la Audiencia de Char- concebir un nuevo centro administrativo re- y constituye la
nación boliviana
cas le concernió ejercer jurisdicción sobre gional desde donde se pudiera controlar con (1825-1880)
una vasta extensión del territorio de la actual el debido esmero y atención la zona de mayor
Bolivia como también de los distritos de Tu- producción argentífera. 243
cumán, Paraguay, Buenos Aires, la región de
Atacama y la parte sur del Perú, incluido el Así, en 1561 se creó la Audiencia de Charcas,
distrito de Puno. Tal demarcación, hecha casi instalada en la ciudad de La Plata (actual Su- Hilvanando el
territorio de Bolivia
sobre la misma área de la provincia incaica del cre). La denominación de Charcas fue ideada en sus itinerarios
geopolíticos
Collasuyo, determinará en el siglo XIX el te- por los españoles en honor del pueblo indí- (1825-1880)
rritorio sobre el que se fundaría la República gena Charca cuya auxilio y alianza fue funda-
de Bolivia. mental durante las entradas de conquista en
el sur andino y después. Esta Audiencia nació
Finalizando el siglo XVI la colonización espa- como tribunal de justicia, pero en razón a los
ñola había cristalizado sus instituciones y con- requerimientos de la vida cotidiana, amplió
solidado el sistema imperial, desarrollando su igualmente sus funciones a la administración
etapa de madurez en el siglo XVII. La era de la económica y de gobierno.
exploración y de conquista cedía paso al asen-
tamiento efectivo con proyecciones de perma- Su jurisdicción, en principio, fue demarcada
nencia. Este proceso de colonización, derivado en los documentos oficiales de manera vaga a
en gran medida de la experiencia de la recon- cien leguas a la redonda de la ciudad de La
quista ibérica, halló su sustento en la creación Plata. En la práctica, durante el siglo XVII el
de una red de ciudades, fundadas y concebidas espacio charquino quedaba delimitado del
bajo el modelo europeo mediterráneo y, junto modo siguiente: al norte a la altura del pue-
blo prehispánico de Ayaviri, mientras que al
sur englobaban aquellos territorios incorpora-
11 Clara López Beltrán, La Ruta de la Plata: de Potosí al
Pacífico. Caminos, comercio y caravanas en los siglos XVI
dos al control virreinal, es decir, la región del
al XIX (La Paz: Plural, 2016), 110 y 112. actual noroeste argentino –Jujuy, Tucumán,
Salta– llegando hasta Buenos Aires; por el Pa- del mineral y de las vetas, lo que determinó
cífico, desde Tacna hasta Antofagasta, mientras un implacable descenso de la producción a lo
que al noreste y al oriente los límites eran im- largo del siglo XVII y en el primer tercio del si-
precisos por tratarse de territorios de frontera. glo XVIII. A mediados de la década de 1730 se
Hubo que aguardar casi hasta el 1700 para que definió una tendencia al alza que se prolongó
estas regiones fueran incorporadas a la admi- hasta la década de 1790.
nistración española con el establecimiento de
las Misiones Jesuíticas de Mojos y Chiquitos, Lejos llegó la plata potosina en su época de
actuales departamentos bolivianos de Beni y gloria. Las minas del Perú convirtieron al
Santa Cruz respectivamente. Con las reformas metal blanco en una mercadería abundante y
administrativas hechas por la casa reinante de de amplio consumo que, bajo diversas formas,
los Borbones, en 1776, esta Audiencia fue in- se intercambiaba constantemente. Gozó de
corporada al recién creado Virreinato del Río gran aceptación en el continente americano
de la Plata, con capital en Buenos Aires. y mucho más en Europa, donde se esparció
pasando por la garganta peninsular para lue-
La jurisdicción de la Audiencia fue desarro- go continuar viaje hacia el Medio y el Extre-
llada como un conjunto geoeconómico esti- mo Oriente. Nada se transportaba con más
Un amor
mulado por la minería de la plata. Esa activi- facilidad y menos pérdida que el argentífero
desenfrenado dad, aparte de activar una creciente demanda metal: monedas acuñadas y también plata no
por la libertad
de mano de obra proporcionada inicialmente troquelada en lingotes y barras se veían cir-
Antología de la
historia política por la mita minera, requirió de inversiones en cular frecuentemente por mares y mercados
de Bolivia
(1825-2020)
infraestructura y bienes de consumo llegados europeos. Junto a ellas circulaba la plata “no
del mercado internacional. Simultáneamente, quintada”, es decir, que no habían pagado el
244 la producción agropecuaria local y regional Quinto Real o impuesto del veinte por cien-
destinada a su subsistencia se mantuvo acti- to, descontado por la Corona. No obstante,
va casi siempre en manos de las comunidades la moneda fue todavía más ágil ya que ante
Tomo I indígenas. Sin embargo, los integrantes de las ella no hubo fronteras ni barreras que se re-
1825-1952
citadas comunidades también se incorporaron sistieran; era buena en todos los mercados,
a un intercambio mercantil al mayoreo (hojas comprendida en todos los idiomas y aprecia-
de coca, vino, ganado, mulas, cueros, etc.) ge- da por casi todas las culturas.
nerándose un mercado monetizado de bienes,
trabajo y capital que fue denominado “merca- A consecuencia de esta dinámica regional,
do interno colonial”.12 Charcas con su centro Potosí se desempe-
ñó como un conjunto ordenado y armonioso
El imaginario colectivo convirtió al Cerro ejerciendo un papel económicamente domi-
Rico de Potosí en un sinónimo de riqueza des- nante en el virreinato del Perú. En tanto pro-
de el momento de su descubrimiento en 1545. ductor de plata, puso al conjunto regional en
Su curiosa geología de fácil acceso determinó contacto con el mercado mundial. Regresando
una vertiginosa y barata explotación inicial la atención al interior continental, se devela
que culminó con el gran auge de las postri- que sus diferentes zonas –ya fueren éstas ca-
merías del siglo XVI, aproximadamente entre talogadas por sus características geográficas o
1570 a 1620. A este auge le sucedió un len- por sus influencias en la estructura productiva
to pero constante agotamiento de la calidad y social– se imbricaron en una dinámica uni-
taria transformando la región en un conjunto
bastante autosuficiente en virtud a la variedad
12 Carlos Simpa Assadourian, El sistema de la economía
colonial. Mercado interno, regiones y espacio económico de productos y a la disponibilidad de fuer-
(Lima: Instituto de Estudios Peruanos, 1982). za de trabajo sustentada en grupos humanos
organizados en torno a una cultura tradicional incorporar sus territorios indianos a los de la
definida y ya arraigada.13 Península.14 Ya en la segunda mitad del siglo
XVI, la corona y su gobierno idearon un ar-
mazón legal y de reglamentos encaminado a
2. Vías de comunicación y la ruta consolidar el ordenamiento del suelo recién
diagonal sudamericana incorporado al imperio español. Este gran
proyecto gubernativo se afincó en un gigan-
La Corona española supo a su llegada a tierras tesco proceso de urbanización acompañado
americanas que era urgente controlar los te- por el establecimiento de vías troncales de
rritorios densamente poblados y socialmente tránsito, es decir, rutas privilegiadas promo-
estructurados, siendo el caso del imperio del cionadas por la administración real o virreinal
Tahuantinsuyo. Con gran eficacia sentó sobe- elevadas al rango de Camino Real.15
ranía en los espacios de sur del Collasuyo, di-
cho de otro modo, en los tradicionales territo- La red de caminos virreinales utilizó las cal-
rios del pueblo aimara aglutinados alrededor zadas empleadas por los pobladores origina-
del Altiplano andino y, por otro lado, frenando rios. En el Virreinato del Perú se usó la red de
las incursiones de los grupos rebeldes instala- caminos troncales de la conocida red de ca-
dos en las tierras bajas. minos incaicos, actualmente visibilizada como Primer periodo
Qhapaq Ñan,16 cuyo trazado y construcción
Bajo la
Tanto el traslado de poblaciones (engrosado Constitución de
1826 que organiza
por los mitayos) y las mercancías en Charcas y constituye la
14 La historiografía de la segunda mitad del siglo XX nación boliviana
se efectuaba utilizando una red caminera cuyo ha demostrado cómo los territorios de gran parte (1825-1880)
nudo central era la Villa Imperial de Potosí. de Sudamérica (a excepción de las zonas amazó-
La región potosina había establecido fluidos nicas) estuvieron ágilmente conectados de costa a 245
costa. Este encadenamiento de trayectorias permi-
canales de contacto con los otros centros ad-
tió la construcción de políticas encaminadas a esta-
ministrativos coloniales y con la Metrópoli a blecer un ordenamiento estructural que contribu-
través del mar. yera en el manejo de los intercambios económicos Hilvanando el
territorio de Bolivia
y al relacionamiento de grupos sociales y nacionales en sus itinerarios
15 Camino Real es aquel que tiene interés especial para geopolíticos
En líneas generales, los españoles aprovecha- (1825-1880)
la Corona y está construido a expensas del Estado.
ron la red caminera construida por los incas Las tempranas leyes castellanas de las Partidas de
durante su dominación imperial. Sólo en algu- Alfonso X el Sabio dicen, “Otrosí debe mandar la-
nos tramos las necesidades prácticas del nuevo brar los puentes y las calzadas, y allanar los pasos
malos porque los hombres pueden andar y llevar
gobierno y sus intereses económicos hicieron
sus bestias y sus cosas desembargadamente de un
desviar las rutas para comunicar las ciudades lugar a otro, de manera que no las pierdan en el
por ellos fundadas y, también, creando vere- pasaje de los ríos, ni en los otros lugares por donde
das funcionales al intercambio comercial, por fueren.” Partida 2, tit. 11, ley 1 de las Siete Partidas
de Alfonso X el Sabio.
ejemplo, la Ruta de la Plata que unía la Villa
Las Siete Partidas fueron redactadas en Castilla con
Imperial de Potosí con el puerto de Arica; para la intención de crear un código jurídico unificado.
ello se sirvieron de trayectos rurales tradicio- Algunas de sus leyes fueron usadas y ejecutadas en
nalmente utilizados por la población autóctona. Hispanoamérica hasta el siglo XIX.
16 Qhapaq Ñan: Era la extensa red de caminos incaicos
o preincaicos, de caminos de construcción formal,
Tales rutas fueron delineadas conforme a exi- consolidado en el siglo XV por los incas que tuvo
gencias de dominio espacial y de gobierno de como objetivo articular los diversos pueblos del Ta-
la Corona española para asentar su poder e huantinsuyo para una eficiente administración de
los recursos
En junio de 2014 este conjunto caminero fue decla-
13 Clara López Beltrán, Estructura económica de una rado Patrimonio Mundial de la Humanidad por la
sociedad colonial (La Paz: Ceres, 1988). UNESCO.
se inició en la etapa preincaica para después Con el surgimiento del Virreinato del Río de
consolidarse con la organización imperial del La Plata en 1776, el Camino Real del Alto Perú
Tahuantinsuyo. acrecentó su importancia y con ello el flujo ca-
minero cuyo movimiento se desplazaba desde
Fueron éstas las arterias de comunicación em- el centro del continente hacia la zona costera
pleadas para la conquista terrestre española del Atlántico
en Sudamérica, las cuales en los siglos suce-
sivos funcionaron como derroteros de circui- 2.1 El eslabón andino central:
tos mercantiles y de abastecimiento durante el El Camino Real de Charcas
período indiano y republicano. Con ello mar-
caron la estructura del orden territorial de las La historiografía de la segunda mitad del si-
jóvenes Repúblicas sudamericanas por lo me- glo XX ha demostrado cómo los vastos territo-
nos durante su primer siglo de vida; esta afir- rios sudamericanos (a excepción de las zonas
mación resulta válida para la Bolivia de hoy. amazónicas) estuvieron ágilmente vinculados
de costa a costa. Este encadenamiento de tra-
La vía de comunicación medular que facilitó yectorias establecidas por la administración
el desarrollo de la República de Bolivia fue, virreinal impulsó la construcción de políticas
Un amor
desde su creación, el Camino Real de Charcas, encaminadas a establecer un ordenamiento es-
desenfrenado mismo que encadenaba por sus extremos con tructural que contribuyera en el manejo de los
por la libertad
calzadas que se extendían hacia las costas del intercambios económicos, así como en el rela-
Antología de la
historia política Pacífico y del Atlántico, estableciendo como cionamiento de grupos sociales y nacionales.17
de Bolivia
(1825-2020)
polo estratégico de circulación la Villa Impe-
rial de Potosí. La red extendida de caminos en Hispanoamé-
246 rica recogió la aspiración tradicional de la
Por mandatos administrativos, estos trayectos Monarquía española (después también de Re-
fueron adquiriendo nominativos lugareños. públicas independientes), por consolidar el
Tomo I Por ejemplo, el recorrido desde el norte del control del suelo, la población e imponer un
1825-1952
lago Titicaca hasta Lima recibió el denomina- modelo económico monetizado, para lograr
tivo de Camino Real del Cuzco. A su vez el que su integración y desarrollo. Los Caminos Rea-
va desde la región jujeña hasta Buenos Aires, les americanos posibilitaron exitosamente la
en el siglo XVIII, se llamó Camino Real del Alto vinculación de estas tierras y sus moradores
Perú; ambos enlazaban con el Camino Real de consolidados por la fuerza del organismo legal
Charcas. Sin embargo, este corredor de con- virreinal.
tacto interoceánico es una vía sin solución de
continuidad, aunque su uso y notoriedad va El Camino Real de Charcas, impulsado por la
transmutando en el tiempo. Corona, fue una consecuencia evidente de la
creación de la Real Audiencia de La Plata en
En los siglos XVI y XVII, Lima, con su puerto Charcas. La vereda que lo recorre tuvo como
El Callao sobre el Pacífico, constituyeron el punto de arranque el pueblo de Ayaviri (inicio
centro administrativo, comercial y social del convencional), frontera norte del territorio ai-
virreinato peruano, siendo relevante su vín- mara prehispánico.
culo con la ciudad del Cuzco. Esta última fue
convertida por la administración indiana en El trazado se divide en dos de tal modo que
un pujante emporio comercial de distribución, llega a abrazar el lago Titicaca incorporando
conservando al mismo tiempo su profundo
significado simbólico en calidad de antigua 17 Julio Díaz Palacios et. al., Historia ambiental del
capital del imperio del Tahuantinsuyo. Perú. Siglos XVIII y XIX (Lima: MINAM, 2016), 84.
ambas orillas a la dinámica caminera. En Via- atravesaba un territorio árido, la presencia de
cha se unen ambos ramales y continúa por vertientes, ojos de agua y bofedales sostenían
los terrenos llanos del Altiplano a lo largo de la base vital de mulas, llamas y trajineros, sien-
cuatrocientos kilómetros hollando los pueblos do el sector más arduo la bajada al litoral que
de Calamarca, Caracollo, Challapata, Coroma transcurría por terrenos desérticos, auxiliado de
y otros más hasta la Villa Imperial de Potosí, tanto en tanto por algunas corrientes subterrá-
centro neurálgico de la actividad minera. neas y superficiales de agua dulce.18
Un último tramo discurre por tierras más Informes de los primeros españoles ya señala-
amables alcanzando la ciudad de La Plata. ban como puntos de referencia de la ruta los
Esta vía de comunicación privilegiada atra- conocidos tambos o mesones de abastecimien-
vesaba de norte a sur el territorio de la Au- to para viajeros y bestias de carga, situados a
diencia de Charcas, incorporando dentro de la vera del camino. Algunos de estos tambos,
las corrientes de intercambio generadas por la con el transcurrir del tiempo, se transmuta-
nueva economía mercantil a pueblos aimaras ron en pueblos de indios o puntos habitacio-
dedicados a la agricultura y la ganadería, vo- nales para la población indígena. Estos tambos
cación que se ha mantenido hasta el presen- fueron destacados en las Ordenanzas de Vaca
te con eventuales innovaciones tecnológicas. de Castro [1543] y luego indicados de modo Primer periodo
(Ver mapa 1). referencial en la Crónica del Perú de Cieza de
Bajo la
León y un elenco poco ordenado en la Nueva Constitución de
1826 que organiza
Un segundo camino real integraba la jurisdic- Crónica y Buen Gobierno de Guamán Poma de y constituye la
nación boliviana
ción de la Audiencia de Charcas y fue La Ruta Ayala [1615]. (1825-1880)
de la Plata, vía que enlazaba la Villa Imperial
de Potosí con el puerto de Arica en la costa Por lo tanto, el Camino Real de Charcas como la 247
pacífica. Esta vereda fue impulsada por la ad- Ruta de la Plata fueron el conducto y correa de
ministración indiana con el fin de canalizar el transmisión de la actividad mercantil, agríco-
comercio de exportación (de minerales) y de la y manufacturera. Estos dos caminos fueron Hilvanando el
territorio de Bolivia
importación; también para trasladar con pre- parte de una red caminera mayor que, a partir en sus itinerarios
geopolíticos
cisión el Tesoro Real o el veinte por ciento de de la Villa Imperial de Potosí conectaba con el (1825-1880)
impuestos (Quinto Real) de los minerales ex- Pacífico en Lima vía Arica, y con el Atlántico
traídos de los varios asientos mineros. mediante Buenos Aires. (Ver mapa 2).
Esta vía fue delineada a finales del siglo XVI, La Corona española comprendió a su arribo a
con la intención de resolver las demandas de tierras peruanas que era urgente controlar este
infraestructura que enfrentó la excepcional territorio densamente poblado y socialmente
producción de las minas de plata del distrito estructurado sentando soberanía en los tradi-
de Potosí; bonanza que duró varias décadas y cionales territorios del Tahuantinsuyo, y al sur
a la que se sumó la riqueza de otros centros los del pueblo aimara aglutinados en torno al
mineros como el de Oruro, Salinas de Garci Altiplano andino. Sin embargo, le cupo a la
Mendoza y los dispersos asientos y socavones Villa Imperial de Potosí, debido a su ingente
de la región de los Lípez y de los Chichas. riqueza argentífera, ejercer de centro motor
del sistema de gubernativo fomentado por el
Recorría esta vereda el territorio que estuvo ha- virrey Francisco de Toledo.
bitado vitalmente por grupos aimaras. La pre-
sencia de sus tributarios y de mano de obra mi-
18 Clara López Beltrán, La Ruta de la plata: de Potosí al
nera los familiarizó con la actividad extractiva Pacífico. Caminos, comercio y caravanas en los siglos XVI
minera y su entorno mercantil. Si bien esta ruta al XIX (La Paz: Plural, 2016).
Un amor
desenfrenado
por la libertad
Antología de la
historia política
de Bolivia
(1825-2020)
248
Tomo I
1825-1952
Bajo la
Constitución de
1826 que organiza
y constituye la
nación boliviana
(1825-1880)
249
Hilvanando el
territorio de Bolivia
en sus itinerarios
geopolíticos
(1825-1880)
época, tanto de hispanoamericanos como de ex- imprimieron guías nacionales en 1835, 1836
tranjeros por igual, estaban llenos de entusiastas y 183724 aunque dos años previos y de mane-
informes sobre las perspectivas nacionales. ra experimental se compuso un folleto de 32
páginas dedicado solamente al departamento
Para presentar esta novata República a sí mis- de La Paz con el título Almanaque y Guía de
ma y al mundo, el gobierno del momento re-
curre a delinear un retrato del país, a modo
23 Las guías fueron un mecanismo idóneo para pre-
de carta de presentación, donde Bolivia se
sentar y difundir la estructura administrativa a
lectores locales y extranjeros, entre quienes se
contaban los mismos funcionarios, comerciantes,
21 El Aldeano, Bosquejo del estado en que se halla la ri- legisladores y todos aquellos que requirieran orien-
queza nacional de Bolivia con sus resultados presentados tación en el complejo sistema administrativo. Lina
al examen de la Nación por un Aldeano, hijo de ella Cuéllar Wills, “Hacia una definición y caracteriza-
[1830] (La Paz: Plural/Coordinadora de Historia/ ción de las guías de forasteros en América hispana,
UMSA, 1994), 262-264 y 302-305. 1761-1893” Anuario Colombiano de Historia Social y
22 El Aldeano, Bosquejo del estado en que se halla la ri- de la Cultura 46/1 (2019): 85-122, 9
queza nacional de Bolivia con sus resultados presentados 24 Los años de publicación de la Guía de Forasteros de
al examen de la Nación por un Aldeano, hijo de ella Bolivia han sido citados por Cuellar p.92, sin em-
[1830] (La Paz: Plural/Coordinadora de Historia/ bargo, todavía no se ha logrado encontrar la publi-
UMSA, 1994), 261. cación impresa de la guía de 1836 y la de 1837.
forasteros del Departamento de la Paz de Ayacu-
cho para el año 1833.25 El breve folleto aporta
el santoral, noticias sobre el clima, la división
provincial y sus autoridades. No consigna no-
ticias sobre la geografía ni las características de
la administración del departamento, en cambio
el Calendario y Guía de forasteros de la República
Boliviana para el año de 1835 informa sobre las
estructuras institucionales del país que sirven
para hacer conocer a los lectores la configura-
ción del sistema administrativo boliviano.26
Terminado el gobierno de Andrés de Santa Estado con la primordial tarea de ordenar sus
Cruz y con la disolución de la Confederación instituciones. Después de 1840, igual que en
Perú-Boliviana después de la batalla de Yungay los otros países vecinos, se requería disponer de
en 1839, comenzaba un corto período abruma- información sistemática de su territorio y para
do por las luchas entre una variedad de caudillos ello el equipo de Dalence concretó su obra con
que pugnaban por la Presidencia de la República. la publicación del Bosquejo Estadístico. Allí se cal-
Tomó cuerpo la figura del militar José Ballivián, culaba que el país albergaba una población de
quien había colaborado con el mariscal Andrés 1.373.896 habitantes29 de diversa cultura e idio-
de Santa Cruz después de vencer a contrincantes
internos, como Mariano Enrique Calvo (presi- 28 José María Dalence, Bosquejo Estadístico de Bolivia
dente de Bolivia durante escasos siete meses) y (Chuquisaca: Imprenta de Sucre, 1851), 64.
29 Dalence, Bosquejo Estadístico de Bolivia 196. Dice el
adversarios externos como el peruano Agustín
Bosquejo que hubo un incremento notable en la po-
Gamarra, quien aún era una amenaza para la in- blación pese a la tos y la viruela que en las punas ata-
tegridad e independencia del Estado boliviano y ca a muchos niños. Es la primera vez que se usaron
afianzó su liderazgo militar y político. los registros de nacimiento, matrimonios y defun-
ción para contar la población. Tarija casi había do-
blado su población en esos últimos 15 años, “en San-
27 Cuellar, Anuario Colombiano de Historia Social y de la ta Cruz y Beni ha sido también grande el desarrollo;
Cultura 29. lo mismo que en las provincias de Cinti y Tomina
sincrasia; además se elaboró una descripción de unen las ciudades de La Paz, Oruro, Potosí
las condiciones de vida y vivienda. y Chuquisaca. La comunicación con Cocha-
bamba se reforzó para proseguir hasta la ciu-
Señaló dos falencias que deberían ser conside- dad de Santa Cruz de la Sierra.
radas con prioridad: promocionar y construir
un puerto marítimo para desarrollar contactos En el ámbito de la vinculación internacional era
internacionales, pero, sobre todo, hace hinca- decisivo mantener activas las rutas troncales: el
pié en severas falencias tales como el desco- tramo de La Paz hacia el Desaguadero rumbo
nocimiento parcial y en ciertos casos absoluto al Perú; el de Potosí a La Quiaca, pasando por
de la geografía del país, en particular aquella la provincia de Tarija, que era el camino a la
relativa a las amplias regiones del oriente bo- Argentina, y, por último, la privilegiada ruta de
liviano colindantes con Brasil y Argentina, Potosí y de Oruro hacia el puerto de Cobija.
naciones que tampoco controlaban aquellos Este último recorrido, de 164 leguas (790 km)
espacios periféricos llamados por la historio- era complejo y desértico aunque había sido re-
grafía “zonas de frontera”. Era apremiante mozado en aquel momento para alentar el espí-
proceder a indagar y recorrer los parajes aleja- ritu de empresa y dar a los desplazamientos una
dos y excluidos del control estatal. admisible comodidad y seguridad en el traslado
Un amor
a más de servicios de hospedaje donde “todas
desenfrenado las postas del Puerto con dirección a Oruro y
por la libertad
4. Transporte y territorio Potosí se hallan las necesarias provisiones de
Antología de la
historia política agua, víveres y forraje”.31 En resumen, la es-
de Bolivia La Bolivia que encontró el presidente José tructura del conjunto de los accesos comunica-
(1825-2020)
Ballivián tenía un potencial poblacional apro- cionales, en su trazado, en sus funciones y en las
254 ximado, hacia 1835, de 1.250.000 habitantes corrientes de tránsito, eran semejantes a las de
(123.000 menos que la cifra de Dalence), dis- los dos siglos precedentes.
tribuidos de manera desequilibrada entre oc-
Tomo I cidente y oriente.30 Además, la red de caminos Poco después de 1840, sabiendo que no se
1825-1952
se hallaba en estado deplorable e intransitable, contemplaba la anexión con ningún país veci-
no sólo debido a la intrincada orografía, sino no, surgió la necesidad de vigilar la unidad del
por la falta de mantenimiento. territorio que estaba fragmentado. En 1843
la Convención Nacional había hecho notar
El occidente del país, densamente poblado y como un problema estructural la ausencia de
mejor organizado socialmente concentraba su control del territorio ligado a la carencia de
movilidad en el eje andino con los principales arterias de comunicación. A fin de favorecer la
itinerarios ya frecuentados y establecidos que
31 Almanaque y Guía de forasteros del Departamento de
La Paz de Ayacucho para el año 1835 (Paz de Ayacu-
de Chuquisaca…” y poco en Oruro por la poca fe- cho: Imprenta del Colejio de Artes, 1835) 253 a 263.
cundidad humana en los temperamentos fríos. Esta En cada una de las rutas se anotan los pueblos por
comparación estadística se basa en rápidos recuentos los que pasa el camino y la distancia entre cada uno
de 1831 “con notable negligencia de los funcionarios de ellos. Por ejemplo, de La Paz al Desaguadero se
públicos…” por lo que parecería que ese importante recorre 22 leguas (106,22 km) y se pasa por Laja a
incremento en regiones orientales fue debido a que seis (29 km) leguas de La Paz, a Tiahuanaco otras
hubo un sub-registro en tales zonas, medianamente ocho (39 km) leguas a Guaqui cuatro leguas (22 km)
remediado en torno a 1846, quedando, sin embar- y Desaguadero otras 4 (22 km). Total 22 leguas.
go, grandes espacios territoriales no incorporados al Parece que la asistencia en la travesía desde Bolivia
control estatal y ni a la soberanía nacional. hacia Cobija o puerto La Mar no concretó las bue-
30 Almanaque y Guía de forasteros del Departamento de la nas intenciones de proveer asistencia básica, puesto
Paz de Ayacucho para el año 1835 (Paz de Ayacucho: que esa vía de comunicación nunca despegó hasta el
Imprenta del Colejio de Artes, 1835). nivel esperado.
integración regional se impulsó con el concur- de asegurar las reparaciones que se practican y
so de los municipios y provincias, la limpieza las nuevas vías que se abren…”.34 Esta cuestión
de los caminos y la refacción de las postas, para acuciante puso en evidencia que era hora de re-
con ello avivar la actividad mercantil y generar flexionar sobre un programa integral de recu-
recursos propios que contribuyan a financiar peración de las calzadas, aunque no se había ni
proyectos camineros. siquiera pensado en levantar un plan de un ade-
cuado sistema de caminos públicos para irlos
La preocupación por impulsar la economía y ejecutando de acuerdo a los imperativos de las
sus políticas orientadas a fortalecer el Estado dinámicas económicas y sociales del país. Sin
se adueñó de algunos ciudadanos bolivianos embargo, aquella antigua ruta andina de nor-
no activos en el círculo político de la adminis- te-sur –dice el Bosquejo– o sea, el Camino Real
tración estatal. Expresaron sus reflexiones en de Charcas es todavía el eje central y allí “no se
escritos –aparentemente de poca distribución necesitan sino lijeras reparaciones para formar
y éxito– con personales radiografías del país, una buena carretera…” de 150 leguas (725 km).
recomendando medidas proteccionistas con
un fuerte apoyo al mercado interno.32 Por tradición histórica y para fines de control
territorial soberano se procede a iniciar la recu-
Uno de ellos es el escrito anónimo de 1842, peración de la vereda en el trazado mencionado Primer periodo
impreso con formato de folleto, con el título en Guaycho (Puerto Acosta), primer pueblo
Bajo la
de Reseña del estado ruinoso de Bolivia. Allí se boliviano localizado después de la frontera con Constitución de
1826 que organiza
propone modernizar la agricultura y la manu- Perú en el Lago Titicaca.35 Esta misma ruta y constituye la
nación boliviana
factura utilizando la gran variedad de recursos remataba en las regiones mineras de Potosí y (1825-1880)
naturales de las diferentes regiones bolivianas Lípez. Sin embargo, para mediados del siglo
cuyo potencial no se aprovechaba por falta de XIX y debido a la coyuntura económica expor- 255
“instrucción”. Para conseguir esta meta el im- tadora e importadora de Bolivia, el punto final
preso sostiene que es imprescindible formali- de aquel camino presentaba un viraje: el grue-
zar una política estatal para la reparación de so del transporte no llegaba a Potosí, sino que Hilvanando el
territorio de Bolivia
la red caminera, con el fin de incrementar la se desplazaba a occidente en Agua de Castilla en sus itinerarios
geopolíticos
integración territorial y la calidad de la comu- (pueblo y posta en la región de Uyuni) hacia el (1825-1880)
nicación, ya sea en la región andina, así como estratégico pueblo de Alota, en Lípez, sobre la
hacia las tierras bajas. Esto último fue una de ruta al puerto de Cobija o puerto La Mar.
las aspiraciones del gobierno boliviano bajo la
presidencia de José Ballivián.33 Igual que en los siglos pretéritos se elucubró
que una vez establecida la carretera princi-
A mediados del siglo XIX se confirmó que el pal, no sería difícil ir allanando los caminos
asunto caminero había sido ignorado prolonga- transversales que van a los pueblos de este a
damente al punto de que colectivamente “igno- oeste, aunque las ásperas cuestas y profundas
ramos el arte de construirlos, y hasta los medios quebradas añadidas a la presencia de oro en
los torrentes y ríos, entorpecían la tarea. De
Fueron insuficientes y precarias las vías de Los ríos fueron los inveterados caminos de la
comunicación hacia los llanos orientales de población indígena, pero a mediados del si-
Bolivia debido a los inconvenientes que re- glo XIX el Estado alentó exploraciones hacia
presenta su mantenimiento en esos inmensos los confines de la República y se interesó en
territorios parcamente poblados y con una na- agilizar la comunicación y el tráfico valién-
turaleza agreste de bosques espesos, pantanos dose de aquellos ríos de mayor extensión y
Un amor
y fauna exótica y peligrosa. Ello torna penosa profundidad para navegar hasta las aguas del
desenfrenado la comunicación de un caserío con otro, ex- Atlántico por la vía del río Pilcomayo al sur
por la libertad
cepto para los nativos quienes dominan las y por el río Mamoré al norte. La distancia, el
Antología de la
historia política técnicas de supervivencia y de orientación. despoblamiento y la limitada envergadura del
de Bolivia
(1825-2020)
Sus habitantes son muy diestros para “abrir producto a trasportar mantuvieron esos reco-
senda”, pero ésta, sin un uso constante, rápi- rridos en un bajo perfil; también aquellos obs-
256 damente se disipa cubierta por la exuberante táculos que dificultaron la navegación, o sea,
vegetación. Eso ha sucedido con varias rutas la exigua profundidad, la excesiva velocidad de
ya abiertas en las incursiones de los jesuitas a la corriente o los rápidos, los saltos y los des-
Tomo I inicios del siglo XVIII, valga de ejemplo la des- niveles o cachuelas. Técnicamente estos obs-
1825-1952
aparecida ruta del río Parapetí hacia Chiquitos táculos podrían haberse superado con grandes
de la que únicamente se preservan referencias inversiones de lenta o nula recuperación en
en las crónicas. razón al reducido potencial volumen de trán-
sito y transporte. El verdadero problema para
También subyace el recuerdo de la trocha incentivar la navegación fluvial era el desco-
que unía Cochabamba con Trinidad, abierta nocimiento de la red hidrográfica y la capaci-
y allanada en 1843 por el ciudadano Tudela. dad de los ríos para aceptar medios de trans-
El Chaco tampoco pudo mantener expedita su porte de mayor o menor envergadura. Además
vereda que, saliendo de Caiza, debería llegar a la tecnología de los barcos y dimensiones de
Asunción del Paraguay. Así se podrían añadir los buques a vapor u otros, que dependían
otros esfuerzos que se han ido haciendo hasta de la profundidad del curso de las corrientes
finales de siglo y más adelante. Algunos pro- de agua, impidieron aumentar el potencial
yectos camineros fueron realizados merced a de los medios fluviales de transporte, motivo
la ayuda del ejército y que se concretaron gra- que indujo a emplear, hasta entrado el siglo
cias a la férrea voluntad personal involucrada
Bajo la
Constitución de
1826 que organiza
y constituye la
nación boliviana
(1825-1880)
Puente de Totora, río Desaguadero, 1877, Ephraim G. Squier.
Fuente: Peru Incidents of Travel and exploration in the Land of Incas.
257
XX, el transporte en balsas y canoas, mucho más se hizo durante el siglo XIX y sentar so-
más funcionales pero de reducida capacidad; beranía sobre todos estos espacios geográfi- Hilvanando el
territorio de Bolivia
de hecho, todos los exploradores y expedicio- cos fue una afanosa y ardua tarea que todavía en sus itinerarios
narios utilizaron estos medios rústicos con la queda por concluir. geopolíticos
(1825-1880)
asistencia de expertos remeros autóctonos, en
particular los de la etnia cayubaba. 4.1. Exploraciones de reconocimiento
por las tierras bajas
A partir del siglo XVIII merodeaban la zona
de Mojos algunos pioneros, aventureros y Dada la dificultad de acceso, este espacio ama-
mercaderes. Oficialmente se intentó estable- zónico permaneció casi intransitado. Nin-
cer soberanía ya sea por el lado español fun- guno de estos viajes fue fácil ni común, sino
dando misiones jesuíticas sobre las cabeceras todo lo contrario. Los exploradores que por
de los ríos Beni, Mamoré y el Iténez o Gua- allí se aventuraron se habían fijado la misión
poré o, por el lado portugués, sobre el río de informar sobre la geografía, la naturaleza,
Madeira y otros. En estos lugares se constru- las condiciones climáticas, la población y los
yeron fuertes defensivos que protegieran a las medios de transporte. Emulando a intrépidos
poblaciones estables de mamelucos paulistas naturalistas como Antonio Raimondi, Tadeo
dedicados al comercio, a la cría de ganado y Haenke o Alcide D’Orbigny, se internaron en
a la persecución de nativos.38 Con todo, poco la región entre 1845 y 1900 por lo menos diez
38 Daniel J. Santamaría, “La puerta amazónica. Los en la segunda mitad del siglo XVIII” Memoria Ameri-
circuitos mercantiles de los ríos Madeira y Guaporé cana. Cuadernos de Etnohistoria 2 (1993): 51-61.
misiones de exploración, que han dejado no- para conseguir el progreso, la civilización y la
vedosos escritos sobre sus experiencias.39 prosperidad en estos parajes extraños y pobla-
dos de etnias seminómadas y nómadas mira-
La cuenca amazónica estuvo descuidada por el dos como bárbaros y salvajes. Había entonces
mundo hasta bien entrado el siglo XIX cuando, que abrir las rutas fluviales para comunicar el
por efecto del interés en la flora y fauna, la interior del continente con el Atlántico me-
hidrografía y las líneas fronterizas entre Esta- diante el río Amazonas.
dos, ciudadanos sudamericanos y extranjeros
se internaron en sus florestas, llanos y panta- Ajustándose al orden cronológico en que se
nos. Ellos se sorprendieron por lo extraño del realizaron, las misiones de exploración fueron
paisaje y su exótica belleza, se interesaron en las siguientes. En 1845, el gobierno boliviano
la cultura y costumbres de los pueblos nativos delegó a José Agustín Palacios –entonces pre-
y trataron de asimilarlos a su propia dinámica. fecto del recién creado departamento del Be-
ni–40 la exploración y el reconocimiento de los
La penetración a la Amazonía fue impulsada terrenos al norte de las misiones jesuíticas de
decididamente por un ambiente de auge co- Mojos. Palacios instaló su base de acción en
mercial de productos alimenticios tendientes Exaltación, una ex misión jesuítica, y exploró el
Un amor
a la exportación como el café, banana, cacao, lago Rogo-Aguado desplazándose por amplios
desenfrenado tabaco, castaña, cueros. A estos productos hay espacios pantanosos inundados e inundables
por la libertad
que sumar materias primas como la quina y llamados curichis.41 Hacia 1846 –en un periplo
Antología de la
historia política en particular la goma elástica o caucho, cuya de dos meses– atravesó de ida y vuelta los ca-
de Bolivia
(1825-2020)
demanda en el mercado internacional creció nales de los rápidos del río Mamoré y del río
de manera sorprendente al inicio del siglo XX. Madeira. Sus diarios de viaje fueron publicados
258 en 1852.42 Los estudios de Palacios fueron per-
Dentro de esta carrera, Bolivia quiso ampliar feccionados en 1851 por los tenientes de navío
su contacto con el mundo exterior buscando Hardoy y Gibbon, enviados por el gobierno de
Tomo I una salida hacia el Atlántico mediante el río Estados Unidos para realizar un exhaustivo es-
1825-1952
Amazonas, aunque ya estaban operando dos tudio de la región.43
puertos en el Pacífico: Arica y La Mar (Co-
bija). En este entendido, se delinearon rutas Entre 1850 y 1860, en las expediciones del
fluviales que trataban de resolver problemas coronel peruano Maldonado y del inglés Sir
relacionados con la exploración, el conoci-
miento geográfico y la navegación fluvial, así
40 El departamento del Beni fue creado por el presi-
como con la colonización e inmigración.
dente José Ballivián el 18 de noviembre de 1842.
El objetivo común era señalar el derrotero 41 Curichi es el término usado en la región amazóni-
ca y bañado en la región chaqueña para designar a
un humedal o pantano, o sea, un área transicional
39 Los viajes de exploración realizados en la región entre terrestre y acuático con cambios estacionales
norte y noroeste de Bolivia y que han dejado no- anuales o cíclicos. Su inundación o sequía están su-
ticia y algún testimonio escrito son, por orden bordinados por los fenómenos climáticos.
cronológico: José Agustín Palacios (explorador, 42 Véase Exploraciones de don José Agustín Palacios rea-
Bolivia, 1844-45); José y Francisco Keller (inge- lizadas en los ríos Beni, Mamoré y Madera, y en el lago
nieros, Brasil, 1868-69); Jesualdo Macchetti (mi- Rogo-Aguado, durante los años 1845 al 47. Descripción
sionero, italiano, 1869); James Orthon (medico, de la Provincia de Mojos (La Paz: Imprenta El Co-
norteamericano, 1880-81); Fray Nicolás Armentia mercio, 1893).
(misionero, español, 1881-82); Antonio Vaca Diez 43 Lewis Herndon y Lardner Gibbon, Exploration
(empresario, Bolivia, 1881); Antonio Labré y Víc- of the valley of the Amazon. Made under direction of
tor Mercier (militar, Brasil y empresario, Bolivia, the Navy Department by ---lieutenants. United States
1887); Luigi Balzan (científico, Italia, 1890-92); Navy (Washington: O.A.P. Nicholson, Public Prin-
José Manuel Pando (militar, Bolivia, 1893-94). ter, 1853-1854).
C. Markham, la atención se centró en la ex- Allanada la ruta del río Beni por el Dr. Heath y
ploración del río Madre de Dios desde sus comprobada la existencia de profusa población
nacientes. Ese río, llamado tradicionalmente indígena en las cuencas del río Madre de Dios
Amaru-mayu o río de la serpiente debido a su y del río Orthon, los empresarios de la indus-
ondeante curso, constituía un camino crucial tria gomera se adentraron hacia la región del
para integrar la amazonia peruana a la red flu- Acre. Por ejemplo, Antonio Vaca Díez, uno de
vial del entorno. los más prósperos, se instaló en ambas orillas
del río Orthon, llamándolo “su río” y en 1887
Hacia 1868 llegaron desde el Brasil remontan- ya tenía 300 hombres trabajando en la extrac-
do el río Amazonas y el río Mamoré los in- ción de la goma. Víctor Mercier, otro empre-
genieros Keller, comisionados por el gobierno sario del río Madre de Dios, se unió al coronel
brasilero.44 La siguiente misión científica, esta brasilero Labre sirviéndole de contacto en el
vez en 1876, fue acometida por el profesor esfuerzo de despejar el camino hacia el norte,
estadounidense James Orthon, quien se de- desde el río Orthon al río Purus que es un im-
dicó a penetrar en el curso ignorado del río portante afluente navegable del Amazonas. La
Beni. Con gran dificultad, atravesó el rápido, ruta agilizaría el transporte de la goma elástica
después llamado Cachuela Esperanza, que en- de la zona del alto Madre de Dios y del Acre.47
torpecía la comunicación del río Beni con el Sólo terminando de siglo –en 1891– visitó la Primer periodo
Mamoré e impedía el vínculo con toda su red región el naturalista italiano Luigi Balzan en-
Bajo la
fluvial. Luego, su continuador Edwin Heath, viado por la Societá Geográfica Italiana para es- Constitución de
1826 que organiza
a la cabeza de una expedición muy pequeña, tudiar la flora y fauna. Lamentablemente sus y constituye la
nación boliviana
embarcándose en la misión de Reyes navegó colecciones se perdieron al atravesar el río Tu- (1825-1880)
por el río Beni para desembocar en el río Ma- cavaca en su viaje de retorno.48
moré y proseguir por este último a contraco- 259
rriente hasta llegar nuevamente a Reyes por el Concluyendo el siglo, y poco antes de que la
río Yacuma. Esta hazaña brindó la enorme po- región entrara en conflicto de soberanía entre
sibilidad de llegar desde Mojos al río Madeira, Bolivia y Brasil en la llamada Guerra del Acre Hilvanando el
territorio de Bolivia
ya fuere por el río Mamoré o por el río Beni. (1900-1903), el gobierno boliviano promovió en sus itinerarios
geopolíticos
en 1892 una expedición de reconocimiento (1825-1880)
Un año después, el misionero español Armen- al mando de quien después sería presidente
tia –más tarde nombrado obispo de La Paz– se de Bolivia, el coronel José Manuel Pando. El
adentraba por el río Beni con sentido evange- programa de la expedición, conformada por
lizador y antropológico. Él quería visitar los 40 personas, consistía en cruzar por tierra,
territorios de los bárbaros Araonas y Pacagua- desde la vera del río Beni hasta el río Inam-
ras “con el objeto de… ver si podría llevarse barí, y proseguir en barco a vapor rumbo al
a cabo su conquista”.45 Mientras, fue confec-
cionando diccionarios de las leguas con que se
aunque] “Solo dejaron en un baulcito mis papeles,
encontraba a su paso.46 entre ellos los vocabularios Tacana, Araona y Cavi-
neño”. Las copias de esos manuscritos no se conocen
y actualmente se los considera desaparecidos o per-
44 José y Francisco Keller, Memoria de la Exploración didos. Nunca fueron publicados.
del río Madera de la parte comprendida entre Cachue- 47 Antonio Rodríguez Pereira Labre y Víctor Mer-
la San Antonio y la embocadura del Mamoré (La Paz: cier, Exploraciones y noticias hidrográficas de los ríos del
Imprenta de la Unión Americana, 1870). norte de Bolivia (La Paz: El Comercio, 1890).
45 Nicolás Armentia, Diario de sus viajes (1881-82) (La 48 La obra completa de Luigi Balzan fue publicada en
Paz: Instituto Boliviano de Cultura, 1976), 18. castellano en: A carretón y canoa. La obra del natu-
46 Armentia, Diario de sus viajes (1881-1882), 79 [cuan- ralista Luigi Balzan (1885-1893). Edición, estudio,
do sus guías nativos lo perdieron de vista, retorna- notas y traducción del italiano Clara López Bel-
ron a su lugar de origen llevándose sus pertenencias, trán. (La Paz: IFEA/Plural, 2008), 419.
punto de unión con el río Madre de Dios pri- fotográfico del sacerdote franciscano Doroteo
mero y después con el río Beni.49 Fue un viaje Giannecchini de 1898.52
azaroso sin grandes resultados.
diagonal andina, dejando los espacios amazó- adicionando los cambios aportados por las so-
nicos despejados. La hidrografía es equívoca, ciedades científicas, pero también usando una
aunque corresponde al conocimiento de la libre interpretación de los lugares aún por in-
época.54 (Ver mapa 3). corporar al conocimiento geofísico.
Poco tiempo después, Estados Unidos, pione- En 1840, la institución londinense para la pro-
ro en la causa independentista, colaboró infor- moción y difusión del conocimiento –Socie-
mando desde la cartografía la consolidación de ty for the Diffusion and Useful Knowledge
(SDUK)56– imprimió un muy acertado mapa
53 Puede considerarse la primera referencia cartográ-
fica de Bolivia el mapa político sudamericano en el
Atlas Histórico, Genealógico, Cronológico, Geográfico 55 El mapa de Perú y Bolivia de 1835 fue elaborado
de Lasage publicado en París en 1826. Los límites por David Burr (1830-1875); grabado e impreso
están muy deformados y apenas se puede recono- por Illman and Pilbrow y publicado en el New Uni-
cer las nuevas Repúblicas. Lo mismo ocurre con el versal Atlas en New York en 1835.
mapa de 1839 de D’Orbigny, quien quiso reflejar la 56 La Society for the Diffusion and Useful Knowledge
orografía con base en sus trabajos de campo, aun- (SDUK), fue el proyecto filantrópico educativo más
que hay imprecisión en el uso de las distancias. ambicioso del siglo XIX. Operó en Londres entre
54 Die Rep. Bolivia, Atlas von Amerika (Leipzig: 1828 y 1848. Publicó volúmenes información edu-
Georg Joachim Göschen, 1830) cativa dirigida a personas sin educación formal.
Un amor
desenfrenado
por la libertad
Antología de la
historia política
de Bolivia
(1825-2020)
Tomo I
1825-1952
del país: Bolivia and Perú and part of Brazil. que se creó la Mesa Topográfica bajo la res-
Dado su detalle y dibujo inteligible, además ponsabilidad del Estado Mayor del Ejército;
de una estética atractiva, parece que sus líneas la misma que posteriormente continuó con el
limítrofes internacionales son adecuadas, así denominativo de Comisión Topográfica. Parale-
como la composición del conocimiento geo- lamente se creó una Comisión Estadística cuyo
gráfico. En el dibujo predomina el eje andino resultado es el Bosquejo Estadístico, la notable
con una concentración de unidades urbanas, obra de José María Dalence.
mientras que en las tierras bajas orientales pri-
vilegia la hidrografía. (Ver mapa 4). Aquí la información geográfica y estadística se
hermanan para producir un retrato acertado
El gobierno de José Ballivián (1841-1847) de Bolivia. El primer producto consistió en
impulsó políticas para conquistar y ocupar las un mapa corográfico58 que será complementa-
tierras bajas con el fin de incorporarlas a la ad- do por misiones topográficas durante más de
ministración estatal pero también se impuso
la tarea de confeccionar un mapa geográfico Estado para conocer el territorio (1842-1859)” (Tesis
nacional esmerado y exacto. La remarcable in- de Licenciatura, Carrera de Historia, UMSA, 2018).
vestigación de Víctor Hugo Machaca57 explica 58 Corografía: Rama de la geografía que trata la
descripción de un país o de una región; estudia
la toponimia, los limites y extensión, los rasgos
57 Véase Víctor Hugo Machaca Mamani, “El proceso climáticos y finalmente la población. La Comisión
de elaboración de los primeros mapas oficiales de Corográfica creada en Bolivia estuvo dirigida por
Bolivia como parte fundamental de la política del Felipe Bertrés.
Primer periodo
Bajo la
Constitución de
1826 que organiza
y constituye la
nación boliviana
(1825-1880)
263
Mapa 4: Bolivia and Perú, 1840, SDUK.
Fuente: antiquemapsandglobes.com/Map/Antique/South-America-Sheet-Vi.-Bolivia-and-Peru-With-Part-of-Brazil?M=5562
Hilvanando el
territorio de Bolivia
una década. El teniente coronel Juan Ondarza impresión del primer mapa oficial de la Re- en sus itinerarios
geopolíticos
(quien trabajó en el proyecto desde sus inicios pública de Bolivia bajo el patrocinio del pre- (1825-1880)
en 1843) y el comandante Juan Mariano Mu- sidente José María Linares, aunque haya sido
jía, ambos ingenieros, acopiaron los datos ne- obra del gobierno de José Ballivián.60
cesarios recorriendo y mensurando el territo-
rio boliviano. Este mapa se presentó después El mapa estuvo impreso en 1859 y aunque
de una acuciosa y larga elaboración por parte fue el primero en elaborarse con el susten-
de la Comisión Topográfica gracias al tesón de to de datos del gobierno boliviano, tuvo una
Ondarza y Mujía.
Bajo la
Constitución de
1826 que organiza
y constituye la
nación boliviana
(1825-1880)
265
Hilvanando el
territorio de Bolivia
en sus itinerarios
geopolíticos
(1825-1880)
Chile. La región del Chaco, con territorios mantenía el límite sobre el río Yavarí, retro-
inexplorados y extraños para los funcionarios cedía el punto de referencia del río Madeira a
públicos, avanzaba el límite internacional que la convergencia del río Beni con el Mamoré,
corría paralelo al curso del río Paraguay hasta quedando un amplio triángulo entre Brasil y
la ciudad de Asunción, punto no contemplado Perú llamado Apolobamba, lugar fronterizo
en ningún otro mapa anterior. En el noreste que todavía estaba por consolidarse.
Este mapa se hizo muy popular y perduró zonas de colonización. (Ver mapa 6) Mapa ele-
en el curso de los años para uso didáctico. mental de Bolivia, 1894
Con similar fin didáctico el mismo Idíaquez,
reivindicando las posesiones reclamadas en Ese mismo año surgió un elaborado retrato
el momento de la Independencia, proyectó del país de la pluma y cámara fotográfica de
el Mapa de las posesiones territoriales del Alto la escritora y viajera estadounidense Marie
y Bajo Perú en 1810 con los atribuidos de- Robinson Wright. Ella corrobora que el terri-
rechos territoriales de Bolivia cuando era torio boliviano, por su posición geográfica y
Alto Perú en 1810; allí muestra la división su función integradora es el camino central de
administrativa de las intendencias, según la Sudamérica. Bajo los auspicios del presidente
normativa de las reformas borbónicas, y que Montes cumplió un insólito periplo a lomo de
sería el fundamento para la aplicación y ex- mula por todo el territorio boliviano en torno
plicación del principio del Uti Possidetis Iure. a 1905. Su recorrido por Bolivia y el estudio de
Este mapa fue promocionado y editado en su historia, la viajera concluyó que Bolivia era
litografía por el Ministerio de Relaciones el camino central de Sudamérica y una tierra
Exteriores de Bolivia.64 de ricos recursos y de variado interés. Bajo ese
concepto tituló su elaborado y hermoso libro,
Un amor
Mientras el Mapa Elemental de Bolivia (1894) donde despliega temas de historia, etnografía,
desenfrenado se imprimía, Bolivia experimenta la llamada geografía, economía y sociedad de cada uno
por la libertad
Guerra Federal con el triunfo de los liberales. de los departamentos. Su libro constituye una
Antología de la
historia política Con la instalación de la sede de gobierno en verdadera guía ilustrada e ilustrativa del país.65
de Bolivia
(1825-2020)
La Paz, al norte se creó en la zona septentrio-
nal del país el Territorio Nacional de Colonias Los proyectos avanzados en el siglo XIX hacia
266 sobre el fundamento otorgado por la Delega- la integración nacional tardarán en germinar.
ción Nacional del Madre de Dios y Purus. En Las cuestiones de reconocimiento del terri-
1904 se estableció en el sur del país la Delega- torio nacional quedarán, al cambiar el siglo,
Tomo I ción Nacional del Chaco con sede en la misión en manos de una nueva y pujante generación
1825-1952
franciscana San Francisco Solano, llamada de estudiosos como Manuel Vicente Ballivián,
desde ese momento Villa Montes, en home- Luis S. Crespo y José Manuel Pando, entre
naje al presidente Ismael Montes; además, otros quienes introdujeron la estadística y la
por Decreto Supremo de 1905 se delinean las geografía como las nuevas herramientas de
análisis para un más elaborado conocimiento
de la sociedad boliviana.
64 La Leyenda sobre el Mapa de las posesiones territoria-
les del Alto y Bajo Perú en 1810 dice:
Las Naciones Sud Americanas han convenido fijar
en 1810 el principio del Uti Possedetis Iure, en vir- 6. Reflexiones finales
tud del cual toda jurisdicción colonial, que hubiese
formado un todo territorial, administrativo y polí-
tico bajo el régimen español, como los Virreinatos,
Este análisis apenas esbozado pretende ser una
Audiencias y Capitanías Generales, se consideraría apreciación panorámica de la temática de inte-
como la nacionalidad de un estado. gración territorial de Bolivia entre sus regio-
El Alto Perú o Audiencia de Charcas comprendía nes y sus contactos internacionales. El terri-
el territorio de sus Intendencias de: La Paz, Potosí
y La Plata con las gobernaciones militares de Chi- torio cobró cada día mayor importancia, tanto
quitos, Mojos y Apolobamba.
El Bajo Perú o Virreinato del Perú, comprendía el
territorio de sus Intendencias de: Trujillo, Tarma, 65 Marie Robinson Wright. Bolivia, el camino central de
Lima, Huancavelica, Arequipa, Cuzco, Puno, y la sur-américa. Una tierra de ricos recursos y de variado
Comandancia General de Mainas que se le anexó interés (Filadelfia: George Barrie & Sons editores
únicamente en 1802. 1907).
Primer periodo
Bajo la
Constitución de
1826 que organiza
y constituye la
nación boliviana
(1825-1880)
267
Hilvanando el
territorio de Bolivia
en sus itinerarios
geopolíticos
(1825-1880)
Segunda etapa: El altiplano andino Los pueblos de esta etapa del camino, Cala-
marca, Ayo Ayo y Sicasica, se desarrollaron
Continuaba la ruta por superficies ondula- con solidez y además han mantenido su orden
das para hacer etapa en el pueblo de Viacha; urbanístico hasta bien entrado en siglo XX.
dicha región presumió de tener un cacicaz- Una localidad de obligado paso fue Caracollo
go poderoso que se proyectó durante varias convertido en pueblo de indios, aunque nunca
perdió su tradicional vocación de tambo (lu- la Plata, otro camino real une la Villa Imperial
gar de descanso y abastecimiento a la vera del de Potosí y el puerto de Arica. El tramo Río
camino), actividad por la cual fue reconocido Mulatos/Villa Imperial de Potosí era, en la
y calificado por casi todos los cronistas que época del auge argentífero del siglo XVII, alta-
por allí pasaron. Con el orden español, igual mente transitado por concentrar la circulación
que en el incaico, el lugar fue la bifurcación y compartir la trocha de dos caminos reales.
donde la gran vereda del camino real entron-
caba con trochas trasversales que alcanzaban La travesía desde la Villa Imperial hasta la
los valles de Cochabamba. Esta vía siguió ciudad de La Plata recorría una distancia de
funcionando durante el período republicano quince leguas (83,5 km) o “veintitantas…”
y actualmente es una importante parada en el para otros, con un sendero irregular entre
camino carretero de La Paz a Potosí o de La cabeceras de valle y quebradas. Las jornadas
Paz a Cochabamba. hasta la sede de la Audiencia de La Plata no
tuvieron la actividad pujante de los tramos
A pocos kilómetros está Paria, es un pueblo centrales del Camino Real de Charcas, por lo
que creció moderadamente a pesar de haber que la calzada era descuidada y desatendida,
sido la primera fundación española en la re- aunque bordeada de riachuelos y fértiles cam-
gión el año 1535, en cambio, fue un punto de pos. La producción agrícola de esos terrenos Primer periodo
reunión conocido desde tiempos preincaicos. agrícolas abastecía a los asientos mineros; de
Bajo la
Se ha descrito al tambo de Paria como un consecuencia, pronto se convirtió en zona de Constitución de
1826 que organiza
asiento inca de gran jerarquía, aunque los res- haciendas de propiedad de españoles, razón y constituye la
nación boliviana
tos arqueológicos conocidos se hallan a pocos por la cual no desarrolló pueblos de indios de (1825-1880)
kilómetros del pueblo; son de modesta enver- envergadura. Los puntos de descanso y hos-
gadura, pero mejor estudiados que los otros pedaje son agradables como Chaqui, un bal- 271
sitios de la región. neario de aguas termales, Betanzos con gran
producción de productos de huerta, Siporo y
Avanzando hacia el sur y bordeando la ribera Yotala a 18 km de la ciudad de La Plata; todos Hilvanando el
territorio de Bolivia
oriental del Lago Poopó, se concentraban los ellos fueron lugares de descanso para las ca- en sus itinerarios
geopolíticos
pueblos habitados por el grupo étnico de los ravanas, con un clima amable respecto al alti- (1825-1880)
soras. Los centros urbanizados más robustos plano. El interés viajero por llegar a la ciudad
fueron: Poopó, Pazña, Challapata, Santiago de La Plata era burocrático y de gobierno por
de Huari, Sevaruyo y Coroma, cuyas iglesias lo que las mulas circulaban más bien cargadas
son de mediana importancia. Actualmente de papeles, casi todos concernientes a causas
esos activos municipios quedan ubicados muy judiciales a resolverse en la Audiencia de La
cerca de la actual carretera de Oruro a Potosí. Plata, acompañados por abogados. Llevaban
La región estuvo dedicada, de preferencia, a la también herramientas, abastecimientos y ob-
ganadería de camélidos –en particular llamas– jetos suntuarios.
además de ocuparse de la tradicional agricul-
tura y tener contacto con zonas mineras oru- Colocar el punto final del Camino Real de
reñas. Charcas en la ciudad de La Plata, sede de la
Audiencia, responde a la importancia que la
Tercera atapa: la zona minera y valles altos administración de la corona le dio a la ciudad,
pero también al hecho que ese enclave fue
La siguiente etapa deja atrás las planicies del considerado como la punta de lanza del con-
altiplano e inicia la travesía por terrenos ac- trol territorial por el sur y la base operativa de
cidentados sobre los 5.000 msnm. En el sitio las expediciones de reconocimiento del terre-
llamado Río Mulatos entronca con la Ruta de no y su posterior inclusión en el virreinato.
La lenta inserción de Bolivia a la economía mundial
(1825-1872): Política fiscal y monetaria, minería y población1
Nigel Caspa
Universidad Mayor de San Andrés
Primer periodo
Resumen1 la sobrevivencia y la prosperidad de las comu-
Bajo la
nidades indígenas. Debates que deben comen- Constitución de
E
1826 que organiza
ste artículo es un estudio de la len- zar a considerar las fluctuaciones demográficas y constituye la
nación boliviana
ta inserción de Bolivia a la economía ocasionadas por los efectos ambientales de la (1825-1880)
mundial desde la Independencia hasta guerra y la minería, y los efectos de las condi-
el inicio de la primera era exportadora (1825- ciones de la salud y las epidemias. 273
1872). Analiza el endeudamiento interno del
Estado a través de la emisión de vales y billetes Palabras clave: Historia económica de Boli-
en los años 1827 y 1846, un proceso que deter- via, siglo XIX, historia fiscal, historia moneta- La lenta inserción
de Bolivia a la
minó los contenidos de la pizarra fiscal del siglo ria, moneda feble, historia minera, población, economía mundial
(1825-1872):
XIX. Repasa las interpretaciones en torno a la salud, epidemias. Política fiscal y
monetaria, minería
moneda feble y las relaciones entre feble-mine- y población
ría y feble-tributo indígena, que dieron forma
a ciclos de acuñación monetaria. Examina los de- Introducción
bates de la historia minera entre 1825 y 1850,
un periodo que se disputa entre ser entendido Los estudios tradicionales sobre el desempeño
como una antesala del auge minero del último económico de la República boliviana durante
tercio del siglo, o ser considerada como par- el siglo XIX han dado forma a dos concepcio-
te (y generadora) de aquel proceso. Revisita nes de esta historia: una pesimista y otra opti-
la información sobre la población en el siglo mista. Hace algunos años se ha postulado que
XIX, incluyendo los debates que hablan sobre el asunto ya no redunda en aquel binarismo
y se ha remarcado la heterogeneidad de las
experiencias económicas (Coordinadora de
1 Agradezco el eficaz apoyo de investigación de Fa-
bián Zalles, que me permitió acceder a una porción Historia 2014, V:25). Llegar a este punto de
de las fuentes primarias y secundarias utilizadas posible consenso ha sido un largo proceso y
en esta investigación durante de la crisis sanitaria puede ser útil al menos en dos aspectos. Pri-
mundial. Los comentarios y sugerencias de Iván
mero, permite cambiar el status periférico del
Velásquez-Castellanos me han motivado a mejorar
una versión anterior de este documento. Los erro- caso boliviano en los debates de la historia
res que persisten son de mi responsabilidad. económica. Segundo, promueve la creación de
una masa crítica de investigadores sobre un pe- destrucción del andamiaje colonial incluyó la
riodo histórico que conocemos aún muy poco. unidad aduanera y el aparato burocrático. Asi-
mismo, la creación de los estados-nación en
La historia económica de la post-Independen- América Latina estuvo acompañada por la for-
cia en América Latina nos ha hablado de las mación de barreras comerciales. Así, el canal
“décadas perdidas” entre 1820 y 1870, trasmi- comercial internacional tradicional a través
tiéndonos la imagen de un periodo determina- del puerto de Arica fue limitado por el Perú.
do por la inestabilidad política, los conflictos La alternativa portuaria de Cobija (denomina-
violentos y el estancamiento económico (Ba- da La Mar) nunca compensó Arica. Incluso en
tes, Coatsworth, y Williamson 2007). Tal ge- su apogeo, solo una tercera parte del comercio
neralización provocó una ola de reacción revi- exterior transitó por la bahía de Cobija (Klein
sionista y se ha demostrado que el crecimiento 2015, 139). Esta incapacidad de llevar a cabo
logrado en varios países latinoamericanos fue una territorialización del espacio costero pro-
en ciertos casos notable, en algunos modesto vocó “el encierro del espacio nacional bolivia-
y en otros efectivamente de estancamiento no”, aceptado y formalizado en 1866 (Vargas
(Llopis y Marichal 2009). De este modo, las Mansilla 2018, 115). El transporte terrestre
generalizaciones han sido puestas en cuestión. dependía sobre todo de la red de arrieros o
Un amor
En suma, las diferencias en las experiencias “trajinantes”, agentes comerciales que transi-
desenfrenado regionales y nacionales ya no pueden ser ig- taban con sus mulas o llamas sobre caminos
por la libertad
noradas. que no tenían presupuesto fijo de manteni-
Antología de la
historia política miento ni postas coordinadas, afectando sen-
de Bolivia
(1825-2020)
Se pude decir que la economía de Bolivia du- siblemente los cronogramas de los viajeros y la
rante sus primeros cincuenta años se disputa comunicación.
274 entre ser confirmada como una economía es-
tancada con “décadas perdidas”, o ser carac- Joseph Barclay Pentland, un científico irlan-
terizada como una economía de crecimiento dés con ambiciones diplomáticas que visitó
Tomo I lento. En este artículo reunimos evidencias Bolivia en 1826 por orden del Foreign Office
1825-1952
que nos inclinan por la segunda opción. Para británico, estimaba que el país estaba habitado
ingresar al tema, hay que preguntarnos sobre por 1.100.000 de personas (Lema Garret 2018,
cuáles fueron las condiciones en que los boli- 23). En aquella cuenta no se incluía a las po-
vianos iniciaron su vida republicana.2 blaciones nómadas del Norte y el Oriente. La
distribución aproximada fue de 800.000 cam-
Casto Rojas, haciendo balance del impacto pesinos indígenas, 200.000 criollos, 100.00
del proceso de Independencia, concluía que cholos y mestizos, y 7.000 afrodescendiente
“la libertad no tiene precio” (1977[1916], 57). (Pentland 2018, 90-91). Las ciudades fundadas
Estamos de acuerdo, pero hay que considerar en el periodo colonial fueron progresivamen-
que la libertad tuvo costos. Quizá, el costo te abandonadas durante la guerra y el efecto
más alto fue a nivel institucional. A través de persistió durante el siglo XIX. La economía
una guerra de 15 años, y por la voluntad de la boliviana arrancó su marcha dominada por lo
gente que habitaba la Audiencia de Charcas, rural y más orientada a la subsistencia que en
se creó la República independiente de Bolivia cualquier momento pasado (Klein 2015, 138).
en el año 1825. El conflicto bélico de largo
aliento dejó una población desgastada. La La economía de la plata de Potosí duran-
te el periodo colonial imprimió en el imagi-
nario mundial la imagen de Bolivia con una
2 Para más información sobre el contexto inicial re-
publicano, ver el artículo de Erick Langer en este
población ocupada en asuntos mineros. No
libro. obstante, el despoblamiento de las ciudades
repercutió sensiblemente en la disminución reforma fiscal de 1826 y los serios problemas
de las operaciones de explotación. En 1803 se para llevar las cuentas. “Nosotros –afirmaba–
calculaba la existencia de 40 ingenios y cientos estamos repartidos entre un mil de negocios y
de minas en operación en Potosí. Para el año contratos que deben evacuarse en un tiempo
de 1825 ya solo había 15 ingenios y unas 50 que no sabemos: ignoramos por lo mismo a
minas en funcionamiento. La industria minera cuánto asciende la suma neta de nuestros bie-
estaba en caída libre. Los 350.000 marcos de nes y ganancias”. Esta incertidumbre se exten-
plata anuales en promedio producidos en las día al mismo Estado que se encontraba en la
últimas décadas del siglo XVIII se redujeron a larga tarea de saneamiento fiscal.
300.000 durante primera década del siglo XIX.
En 1810 se alcanzó los 200.000 marcos y la dé- Con una estructura institucional en crisis, una
cada de 1820 conoció los promedios más ba- burocracia limitada para llevar cuentas claras,
jos con 150.000 marcos anuales (Klein 2015, un comercio internacional cercado por nuevas
140). El periodo de Independencia no hizo barreras nacionales imaginarias, un proceso
más que agravar esta tendencia, sobre todo de ruralización dinámico y una producción
cuando el Estado suspendió dos subvenciones de plata en caída libre, el gobierno boliviano
estratégicas: la mita que consistía en mano de no generó ingresos suficientes para sustentar
obra forzada y el mercurio que era utilizado en el diseño de un proyecto económico nacional. Primer periodo
el procesamiento del mineral. Desde entonces y por casi medio siglo, el tri-
Bajo la
buto indígena de antiguo régimen fue el sos- Constitución de
1826 que organiza
Pentland resumía las desventajas e inconve- tén principal que aportaba un promedio anual y constituye la
nación boliviana
nientes de la minería boliviana de 1826 de del 53 al 55 % del ingreso público ordinario (1825-1880)
la siguiente manera: “falta de capital, escasez (Huber Abendroth et al. 2015, 356). Aquel
de trabajadores, irregularidad en el abasteci- porcentaje fue similar al costo de manteni- 275
miento de azogue, falta de conocimiento entre miento de las fuerzas militares, agravado por
aquellos embarcados en operaciones mineras la permanencia del ejército colombiano en el
y los elevados impuestos exigidos por el Go- territorio. Los bolivianos en 1825 se habían La lenta inserción
de Bolivia a la
bierno sobre el producto de las minas” (2018, quedado con el “caparazón del estado” (Klein economía mundial
(1825-1872):
156). Las condiciones de la minería de 1825 2015, 145) y una economía en incertidumbre. Política fiscal y
monetaria, minería
estaban lejos de ser esperanzadoras y solo un Comenzaba así la historia de Bolivia como Es- y población
cuarto de siglo después se equipararían las ci- tado-nación, una “fórmula no poco artificial y
fras de los primeros años del siglo XIX. polémica” (Revilla Orias 2017, 24).
1826-33
1835-40
1841-44
1845-46
1847
1848
1851-58
1860-64
1869-72
desacuerdos para caracterizar este periodo. La
tercera parte revisita la información sobre la
población boliviana en el siglo XIX y sugiere la Gasto militar Administración Servicio de deuda Otros
necesidad de tomar en cuenta el impacto am- Fuente: (Huber Abendroth 2001, 33).
biental y el de la salud. La cuarta parte expresa
Un amor
las conclusiones. La búsqueda de una reforma fiscal en Bolivia
desenfrenado fue temprana, con un aura radical y éxito re-
por la libertad
lativo. Durante el gobierno de Antonio José
Antología de la
historia política 1. Política fiscal y política monetaria de Sucre (1827), bajo el influjo del pensa-
de Bolivia
(1825-2020) miento liberal, se buscó la imposición por de-
Como dice María Alejandra Irigoin (2010), creto de, la contribución personal de 3 pesos
276 “el imperio español fue la unión monetaria y anuales para todo hombre entre 18-60 años
fiscal más grande jamás conocida” y, en con- de edad, la contribución por la propiedad ur-
secuencia, su destrucción debió plantear un bana y rural, la contribución sobre las rentas
Tomo I reto inédito que se distribuyó entre los nuevos anuales de toda industria. La iniciativa no fue
1825-1952
estados. La descompresión fiscal de la post In- bien recibida. Esto se explica parcialmente
dependencia llevó inevitablemente a una con- porque la corriente proteccionista estaba lo
tracción de la producción medible dentro de suficientemente organizada y arraigada como
la contabilidad nacional (C. Contreras 2011, para articular un bloque de rechazo a las ini-
131). Por su magnitud, la Independencia fue ciativas de ajuste fiscal. Así, la presión políti-
el acontecimiento más importante de la histo- ca de todos los afectados (criollos, mestizos e
ria latinoamericana del siglo XIX (Prados de la indígenas) frustró la reforma tributaria (Ba-
Escosura 2009). rragán et al. 2014).
Para responder a los efectos del periodo de El óbice de la reforma fue el tributo individual
Independencias, Bolivia inauguró un intenso sobre la propiedad de la tierra que encontró
periodo de ensayos de políticas fiscales y mo- oposición tanto en propietarios criollos de las
netarias para construir y “alimentar” al nuevo haciendas como los miembros originarios de
Estado (Ver Gráfico 1). El intento de reforma las comunidades. Los criollos veían mal ser
fiscal de 1827, la emisión de bonos y crédito igualados con quienes consideraban inferiores.
público entre 1826-1827 y la emisión de mo- Y los originarios vieron que un inminente ca-
neda feble desde 1929, son los primeros y más tastro pondría en evidencia arreglos internos
conocidos experimentos. Y, como veremos que existían dentro de las comunidades, signi-
más adelante, las consecuencias de estas prue- ficando una intromisión del Estado en asuntos
bas fueron significativas. internos de la comunidad (Soux 2019).
Hay tres consecuencias relevantes de este autoridades. Los vales fueron la recompensa
proceso fallido de reforma fiscal. La primera para el Ejército Unido que participó en la li-
surge de la presión por recaudar ingresos y el beración del Alto Perú (Huber Abendroth
incremento de necesidades del nuevo Esta- 2001).
do republicano, que provocó un retorno casi
automático al tributo que las comunidades La emisión de billetes y vales consolidó la
pagaban al Estado colonial denominado con- deuda interna que estuvo respaldada con tie-
tribución indigenal, que representó por más de rra y bienes que el Estado había confiscado
cuarenta años al menos el 40% de los ingre- a la iglesia. Con el tiempo se redundó en la
sos fiscales bolivianos (Barragán et al. 2014; creación de deuda flotante, que se trata de
Lofstrom 2019). Esta medida fue regresiva y deuda que el Estado no logró pagar; pero el
zanjó posibilidades para resolver la crisis de proceso permitió pagar una buena parte de la
Hacienda por décadas. En segundo lugar, se deuda en beneficio de particulares y del Es-
descartó el proyecto de crear una “base tribu- tado (Aillón Soria 2015, 173–75). Se puede
taria más amplia y equitativa, con relación a decir que los beneficiarios directos y por de-
la que había sido heredada de la colonia, con cantación de esta política fueron capitalistas,
el agravante de que la República tuvo que ha- comerciantes, terratenientes y políticos. En
cer frente a un presupuesto mayor de gastos” primer lugar, porque aprovecharon la rebaja Primer periodo
(Prado Robles 1997, 307). En tercer lugar, se de impuestos y la abolición de alcabalas entre
Bajo la
suscribió el antecedente de la histórica de- 1825 y 1826 para sobrevivir el shock post-In- Constitución de
1826 que organiza
bilidad del Estado boliviano. Como lo hace dependencia. En segundo lugar, porque ad- y constituye la
nación boliviana
notar Centeno (1997), la guerra independen- quirieron los vales (bonos) que los militares (1825-1880)
tista no creó Estados en América Latina, y vendían a precios ínfimos y los utilizaron
se puede decir que Bolivia quedó temprana- para pagar obligaciones pasadas y adquirir 277
mente atrapada en un equilibrio inercial, don- propiedades agrícolas y asegurar su sobrevi-
de ninguna clase social era lo suficientemente vencia futura. Se trataba de una transferencia
poderosa para imponer su dominio y el Esta- de bienes raíces de manos de la iglesia a ma- La lenta inserción
de Bolivia a la
do era insuficientemente fuerte para imponer nos de la elite civil del país (Bieber 1989). En economía mundial
(1825-1872):
su control. Esto es, como dice Peres-Cajías palabras de Lofstrom (2019) el sistema de bo- Política fiscal y
monetaria, minería
(2011b), la historia de la construcción de las nos y crédito público ayudó a pagar las viejas y población
instituciones bolivianas como una permanen- deudas oficiales que de otro modo hubieran
te lucha de débiles. sido incobrables y así se borró el pasado en la
“pizarra fiscal republicana”.
No obstante, Estado débil y elites débiles no
redujeron su interés en experimentar reformas Desde el punto de vista de Huber Abendro-
a las políticas fiscales. Entonces, en respues- th (2001), el endeudamiento interno fue un
ta al desastre fiscal y para enfrentar las obli- recurso del Estado para el financiamiento de
gaciones por la presencia del Ejército Unido su gasto corriente y extraordinario. De hecho,
Libertador en Bolivia e indemnizaciones, se la fórmula de este experimento fue tan eficaz
recurrió a ensayar la emisión de bonos y no- que se repitió décadas después. El mismo au-
tas de crédito público (Lofstrom 2019, 405). tor calcula que en 1843 se emitieron otros 3
En 1827 se emitieron 3 millones de pesos en millones de pesos en vales de crédito público
billetes de crédito público y 1 millón en va- y, en 1946, vales de crédito público por el va-
les de empréstito. Los billetes fueron utiliza- lor de 600.00 pesos. Todo esto con el fin de
dos para resarcir a los afectados por la guerra, consolidar su deuda interna e indemnizar a
cancelar obligaciones documentada de la Co- militares que participaron en la campaña con-
rona española o reclamos contra las antiguas tra el Perú. Sin embargo, en comparación al
primer ensayo de este tipo en 1827, sabemos Antes de 1825, los requerimientos de moneda
aún muy poco de las consecuencias de esta se- respondían principalmente a las necesidades
gunda etapa de endeudamiento interno. Un de la metrópoli; aunque, se conoce que una
ciudadano boliviano en 1847 veía que con este parte importante de metálico amonedado cir-
tipo de medidas “muchos pobres enriquecie- culó en el denominado espacio económico peruano
ron con lo ajeno y desaparecieron los ricos” colonial (Assadourian 1982). Durante el proce-
(Sánchez de Velasco 2020, 89). Entonces, las so de Independencia y los primeros años repu-
primeras impresiones sobre 1846 nos indican blicanos se elevó la demanda de moneda para
que el benefició recayó sobre los mismos sec- solventar los gastos de la guerra, la dinamiza-
tores sociales de 1827, pero su efecto principal ción del mercado interno y la construcción del
ya no fue borrar el pasado de la “pizarra fiscal Estado. En general, siguiendo a Irigoin (2010)
republicana” sino graficar o consolidar las ba- la desaparición de la moneda de la circulación
ses de una nueva pizarra fiscal. y la utilización de monedas “extranjeras” para
el pago de impuestos luego de 1810 son indica-
El tercer y más importante ensayo de este pe- dores de la llamada ley de Gresham en los terri-
riodo temprano, por su magnitud y duración, torios del antiguo imperio español.
fue la acuñación de moneda feble. Entonces,
Un amor
no sorprende que este es el tema que más de- Según la ley de Gresham, si dos monedas de
desenfrenado bates ha suscitado. Recapitulemos, con el de- diversa calidad están en circulación a la vez,
por la libertad
creto de emisión de la moneda feble de 1829 la variación del valor nominal respecto de la
Antología de la
historia política el Estado permitió la emisión de moneda con cantidad relativa de metal puro hará que la
de Bolivia
(1825-2020)
un contenido metálico equivalente a 73,84 % moneda “buena o fuerte” salga de circulación
de la denominada moneda fuerte. Se trataba para ser fundida o más comúnmente atesora-
278 de la inyección al mercado de moneda de plata da. Además, estas distorsiones afectarían los
con contenido variable de cobre y cuyo valor precios relativos, alentando presiones especu-
metálico no correspondía con su valor nomi- lativas, perjudicando la creación de mercados
Tomo I nal. Aunque se suponía que esta medida sería de capitales y la dependencia de las tesorerías
1825-1952
temporal, se aplicó por casi cuatro décadas y republicanas de los impuestos al comercio, la
sus efectos traspasaron el siglo XIX. circulación y el consumo. En consecuencia, el
Moneda de 4 soles, año facial 1830, acuñada en la Casa Nacional de Moneda de Potosí.
Fuente: Colección privada.
mercado y los circuitos mercantiles se frag- cualquier caso, la delicada situación de la mi-
mentarían. Además, políticamente, la coexis- nería durante las primeras décadas republica-
tencia de diversas monedas metálicas y papel nas pone en cuestión una relación causa-efec-
moneda inconvertible fomentarían conflictos to inmediata que pudo tener la moneda feble
regionales. ¿Se aplico la Ley de Greshman en el como creadora de prosperidad en la economía
caso boliviano? Las investigaciones sugieren interna y economías vecinas (Prado Robles
que no (Platt 1986; Prado Robles 1997). 1997, 316). El problema con la feble, apun-
tado por el mismo Prado, es que fue constitu-
Los historiadores coinciden en que el objetivo yéndose en obstáculo para el crecimiento de la
inicial de la medida de acuñación de feble fue economía propiamente nacional (ver Gráfico
para paliar la desmonetización en la post-inte- 2). Además, la feble fue utilizada progresiva-
pendencia, pues así estaba decretado. Pero los mente para pagar las importaciones y otras
acuerdos de interpretación se rompen apenas cuentas, incumpliendo su propósito original
se comienzan a evaluar los efectos de la mone- en el sistema monetario paralelo que consistía
da feble en el desarrollo económico boliviano en moneda fuerte para el comercio exterior y
del siglo XIX. Siguiendo a Gustavo A. Prado moneda feble para el mercado interno.
(1997) existen al menos tres corrientes que han
debatido este asunto. La corriente tradicional Hans Huber Abendroth refuerza la posición Primer periodo
que hace énfasis sobre los efectos negativos de de Prado insistiendo en la necesidad de revisar
Bajo la
la manipulación monetaria. En esta línea se los efectos de la tasa de cambios. Entonces, se Constitución de
1826 que organiza
deben contar a José María Dalence, el orureño sugiere que la feble perdió su capacidad pro- y constituye la
nación boliviana
confeccionista del censo de 1851, pasando por teccionista por las inconsistencias de la políti- (1825-1880)
Casto Rojas (1916), Luis Paz (1927) y otros, ca cambiaria. “Lo más probable es entonces,
hasta llegar a la más extendida propuesta de que la devaluación del tipo de cambio simple- 279
lectura de historia económica de Luis Peñalo- mente no fue los suficientemente drástica para
za Cordero (1954). La segunda corriente re- neutralizar la ventaja del precio de los respec-
visionista ha postulado que la feble alentó el tivos productos europeos sobre los naciona- La lenta inserción
de Bolivia a la
crecimiento económico tanto en Bolivia como les”, y en el caso de que los aranceles fueran economía mundial
(1825-1872):
en las regiones de frontera, funcionando a la elevados “eran simple y llanamente eludidos Política fiscal y
monetaria, minería
vez como una medida proteccionista con efec- por el contrabando” (Huber Abendroth 1997, y población
tividad relativa (Langer y Conti 1991; Mitre 341–42, 361).
1986; Platt 1986).
Por otro lado, Prado (1997) también argu-
La tercera corriente está signada por el propio menta que la moneda feble pasó de ser un re-
Prado (1997) y pone en duda la imagen que curso para paliar la desmonetización del país
algunos formaron a través de la propuesta de durante los primeros años republicanos, a
Mitre: otorgar a la moneda feble un rol gravi- consolidarse como la herramienta para incre-
tante dentro y fuera de Bolivia durante el siglo mentar los ingresos fiscales del Estado. Esto
XIX. Creo que se debe revisar si aquella fue la se entiende cuando recordamos el monopolio
real intención de Mitre en el Monedero de los estatal sobre la plata, un privilegio heredado
Andes (1986), o si es más bien la idea que algu- del régimen colonial, que obligaba a los mi-
nos de sus lectores crearon sin tomar en cuen- neros a entregar las pastas al banco de resca-
ta los matices y las limitaciones de la explica- te a precios menores que en el mercado libre.
ción admitidas por el propio autor. No ocurre Cuando el Estado empezó a retribuir con
lo mismo con el estudio de caso en el norte feble la plata recolectada por los mineros, se
de Potosí que hace Platt (1986), cuya defensa imponía un impuesto oculto. Lo peor del caso
de la importancia de la feble es más clara. En es que los mineros recibieron cada vez menos
pesos fuertes y vieron elevada la presión fiscal Hasta donde sabemos, es probable que la fe-
e incertidumbre tributaria sobre su sector que, ble funcionara como indica Platt para algunos
de hecho, ya enfrentaba serias dificultades res- mineros. Pero el balance de la presión fiscal
pecto a ausencia de capitales, falta de mano de entre 1830 y 1859 realizado por Peres-Cajías
obra y precios altos de insumos. Además, la (2011b) muestra una oscilación del 18 % y 33
tendencia muestra un incremento más o me- %, muy diferente al 10 % del periodo colo-
nos constante de acuñación de moneda feble, nial. Resulta difícil ignorar estas diferencias y
con un pico importante durante la década de el mismo autor nos sugiere que el escenario
1850 en detrimento de la moneda fuerte (Ver de dependencia de tributo indígena y estanca-
Gráfica 2). En esta óptica, la política fiscal su- miento fiscal explica que la minería boliviana
bordinó a la política monetaria (Loza Tellería cayese en una trampa fiscal.
2015).
Como lo indicábamos al principio, lo hete-
No obstante, donde Prado ve un impuesto rogéneo parece más relevante que definir el
oculto otros ven subvención, sobre todo en- rol positivo o negativo de la moneda feble.
tre 1830 y 1850. Platt (1997) parte de lo que En esa línea de análisis, no parece convenien-
él llama sistema monetario paralelo, un esque- te aquí decidir cuál de las tres corrientes que
Un amor
ma donde la feble circula dinámicamente en repasamos está equivocada o más acertada.
desenfrenado el mercado interno y regional, donde los mi- Ocurre que las tres son parte de un diálogo
por la libertad
neros utilizaban la feble para pagar jornales aún abierto. Lo que sí es necesario, es reto-
Antología de la
historia política e insumos (inclusive azogue). Entretanto el mar la tarea de estudios de caso del tipo reali-
de Bolivia
(1825-2020)
peso fuerte estaba reservado para el comercio zados por Platt y Langer, un campo que ellos
con extranjeros donde los mineros recibían han abierto hace más de 30 años. También es
280 premio del 12 a 13% en la transacción. Este necesario repasar los efectos de las tasas de
sistema monetario, además, descartaría la po- cambio, tal y como apuntaba Huber Aben-
sibilidad de la denominada Ley de Greshman. droth hace más de dos décadas.
Tomo I
1825-1952
Gráfico 2
Monedas de plata acuñadas en la Casa de la Moneda, Potosí 1825-1871
100%
90%
80%
70%
60%
50%
40%
30%
20%
10%
0%
1825
1826
1827
1828
1829
1830
1831
1832
1833
1834
1835
1836
1837
1838
1839
1840
1841
1842
1843
1844
1845
1846
1847
1848
1849
1850
1851
1852
1853
1854
1855
1856
1857
1858
1859
1860
1861
1862
1863
1864
1865
1866
1867
1868
1869
1870
1871
Fuerte Feble
3.500.000
3.000.000
2.500.000
2.000.000
1.500.000
1.000.000
500.000
–
1830
1831
1832
1833
1835
1836
1839
1841
1842
1843
1844
1845
1846
1847
1848
1849
1852
1853
1854
1855
1856
1857
1860
1862
1863
1864
1866
1867
1868
1869
1870
1871
1871
Fuente: (Economía y Finanzas 1931), (Prado 1997), (Bolivia, Ministerio de Hacienda, 1831-72).
2. Minería una brizna de hierba, que sin embargo tenía
atractivos suficientes para hacer que se cons-
En la primera parte de este documento subra- truyera una ciudad en su base”, atrajo la aten-
yamos que el Estado boliviano tras la Inde- ción del auge especulativo de capitales entre
pendencia ingresó en un periodo de ensayo 1824 y 1826 (Temple 1830a, 1:283). La mine-
en materia fiscal y monetaria con efectos en el ría de Oruro había heredado una crisis crónica
ritmo de desarrollo económico del siglo XIX. desde el periodo colonial. Josep B. Pentland
Asimismo, conocimos las maneras en que se informaba en 1827 que “en ningún lugar hay
ha interpretado los efectos de la acuñación de menos capital que en Oruro” y se preveía que
moneda feble de 1829, sobre todo en la activi- permaneciera así por mucho tiempo (2018,
dad minera. Ahora corresponde analizar algu- 145). A un Aldeano de 1930 le “causaba do-
nas de las condiciones de la minería boliviana lor siquiera bosquejar” la situación de Oruro,
de 1825 a 1872 y las maneras en que los his- antes rica y donde solo un empresario espa-
toriadores han interpretado este proceso. En ñol trataba de reanimar la minería (Anónimo
esta sección se percibirá el dominio de enfo- 2018, 303–4).
ques concentrados en la situación de la mine-
ría potosina, esto se explica por su gravitación La excepción a la crisis minera del siglo XIX fue
Un amor en la política y porque la minería de la plata Corocoro con el cobre, que cubrió la demanda
desenfrenado fue la que conectaba la economía boliviana interna de la Casa de la Moneda, de los artesa-
por la libertad
con el mercado de exportación. nos y de los azogueros. Estuvo bajo el control
Antología de la
historia política de pequeños mineros y para la década de 1860
de Bolivia
(1825-2020) La fama del distrito minero potosino fue glo- pasó a manos extranjeras. Su importancia, no
bal. La montaña roja, “incapaz de producir ni obstante, fue regional y el boom del cobre fue
282
Tomo I
1825-1952
Tomo I
1825-1952
La lenta inserción
de Bolivia a la
economía mundial
(1825-1872):
Política fiscal y
monetaria, minería
y población
Huanchaca.
Fuente: Bolivia Sept annees d’explorations, de voyages et de sejours dans l’Amerique Australe, 1886, Andre Bresson.
para favorecer a representantes políticos afi- y sus eslabonamientos? ¿qué rol tuvo la emi-
nes a sus intereses. El apoyo a la dictadura sión de billetes de crédito y vales por el Esta-
de José María Linares (1857-1861) conllevó do en la década de 1840? Aún no conocemos
modificaciones sustanciales en la dirección de los pormenores de la creación de capitales y
la política económica del país: se rebajaron el efecto de la fuga de otros. A saber, el estu-
los aranceles para los artículos importados; el dio de “la acumulación originaria de capital en
monopolio sobre la quina fue suprimido, se Bolivia” de Gustavo Rodríguez Ostria (2021)
liberalizó la exportación de minerales con ex- es el único que se ha acercado a comprender
cepción de las pastas de plata. Con Melgarejo este proceso. Asimismo, existe un desbalan-
se otorgaron concesiones especiales para que ce en el conocimiento porque sabemos más
empresas como la Huanchaca exporten direc- de los primeros 25 años de la historia minera
tamente su producción de plata. Fue también republicana, que sobre lo sucedió entre 1850
el periodo donde acontece el primer ciclo de y 1872. Por otro lado, no parece equivoca-
endeudamiento externo (Huber Abendroth do cuestionar la narrativa predominante que
2001). nos habla de un puñado de jóvenes mineros
bolivianos visionarios. La importancia de la
En este mismo periodo se descubrieron las acumulación de experiencias en las riberas po-
Un amor reservas de nitratos y guano en la costa Li- tosinas con los hermanos argentinos Ortiz y
desenfrenado
por la libertad toral de Bolivia, un espacio ajeno a los mi- otros mineros extranjeros y locales parecen lo
Antología de la neros bolivianos. El efecto del boom minero suficientemente relevantes para buscar otros
historia política
de Bolivia
de la costa terminó generando créditos con- casos y empezar a cambiar la forma y los con-
(1825-2020) venientes a la nueva generación de empresa- tenidos de las interpretaciones. Finalmente,
rios mineros, pero los recursos descubiertos deberían considerarse los efectos de los ciclos
288
acabaron en manos de capitalistas chilenos de acuñación de moneda. En suma, estos asun-
e ingleses. Como ya lo mencionamos líneas tos deberían comenzar a ocupar el interés de
Tomo I
arriba, la década de 1870 fue un punto de los investigadores.
1825-1952 quiebre en la historia minera boliviana. La li-
bre exportación de minerales a cambio de un Hasta aquí hemos visto que la minería fue
impuesto fijo y el fin del monopolio estatal un sector relevante de la economía boliviana
sobre la plata atrajo capitales extranjeros, con orientada a la exportación del siglo XIX, pero
los cuales las minas de Potosí continuaron su no deberíamos creer que fue el único sector
modernización y producción sobrepasando activo, ni su éxito lo más importante en su
los niveles existentes antes de las guerras de tiempo. A propósito, podemos coincidir en
Independencia. que no había una alternativa viable diferente a
las exportaciones como motor de crecimiento
¿Cuáles son los problemas de este consenso (Peres-Cajías y Carreras-Marín 2017). El auge
historiográfico? A mi criterio, las explicacio- de la actividad minera, sin embargo, se alcanzó
nes parecen ser demasiado lineales. Por tanto, cuando los precios en el mercado estaban en
el periodo 1825-1871 se mantiene como una caída y duro menos de 25 años. Entretanto,
antesala o “larga espera” cuando las eviden- las economías regionales no siempre se orien-
cias nos hablan de un proceso de acumulación taron a las exportaciones, y cuando lo hicieron
de experiencias que incluso generaron un ci- sus vinculaciones generaron crecimiento que
clo minero republicano entre 1830 y 1850 no se proyectó solo en algunas regiones. Enton-
desconectado del repunte minero posterior a ces, una llave de interpretación de la economía
1850. Las preguntas surgen: ¿provienen los boliviana del siglo XIX se encuentra en la acti-
nuevos capitales exclusivamente del comercio vidad agrícola.
Como algunos ya lo han anticipado, la activi- La fuente elemental para el estudio de la po-
dad agrícola ha podido ser la generadora de blación es el censo y cualquier variante utiliza-
más valor durante aquel siglo (Mitre 1981). da por el Estado para contar las personas que
Sin embargo, nuestros intentos de la com- habitan un territorio; sin embargo, el análisis
prensión del desarrollo agrícola chocarán de histórico de una población no puede limitarse
frente con la ausencia de series de datos de a un simple conteo y plantea una serie de retos
producción. Y resulta que la economía mo- acompañados de debates. Como dice Goo-
netaria agrícola fue muy específica: coca de tenberg (1991) para el caso peruano, hay que
La Paz, trigo y maíz de Cochabamba y Sucre, partir admitiendo que todas las cifras sobre
azúcar de Santa Cruz (Barragán et al. 2014). la composición de población republicana del
Hay dos maneras de enfrentar este problema. siglo XIX están equivocadas. Y lo mejor que
Primero, estudiar las economías regionales.4 pueden hacer los historiadores es desenredar
Segundo, analizar las condiciones del desarro- algunas confusiones y aportar nuevas pruebas
llo poblacional como indicio de la situación de que demuestren sus fortalezas y debilidades.
la propiedad de la tierra y, por ende, conocer Esta reflexión es aplicable al caso boliviano,
la situación de la agricultura, el comercio y la porque los censos y estimaciones realizados en
industria. Por ahora, nosotros tomaremos la Bolivia durante el siglo XIX utilizaron diferen-
segunda opción. tes e inconsistentes metodologías. Primer periodo
Bajo la
Pentland en 1826 apreciaba que la gran masa Constitución de
1826 que organiza
3. Población de los habitantes de Bolivia se componía de y constituye la
nación boliviana
“indios aborígenes”, diversos y distintos, que (1825-1880)
Un logro económico nada depreciable en el conformaban tres cuartas partes de la pobla-
siglo XIX en América Latina fue el aumento ción total (2018, 91). Esta observación no ha 289
de población, que hasta cierto punto es una variado mucho en el tiempo y aún hoy se con-
expresión de bienestar económico y nos habla sidera que Bolivia es “la más indígena de las
de la capacidad de un territorio de atraer, ali- Repúblicas americanas” (Klein 2015, 9). De tal La lenta inserción
de Bolivia a la
mentar y reproducir gente. La población en modo, no sorprende que la población indíge- economía mundial
(1825-1872):
América Latina creció a un ritmo de 1.3 % na se haya convertido en el centro de diversos Política fiscal y
monetaria, minería
anual entre 1820 y 1870, con un crecimien- tipos de análisis que confrontan una serie de y población
to mayor en el periodo 1820-1850 que en el dificultades de interpretación. El asunto no es
periodo 1850-1870. En comparación, la tasa menor pues, como apuntan Barragán y Lema,
de crecimiento poblacional de Bolivia se ubi- ocurre que “el recuento de la población indí-
có en torno al 0,6 % promedio anual (Bértola gena y los debates bolivianos contemporáneos
y Ocampo 2013, 75) ¿Cómo interpretamos muestran que no hay cuestión más política y
esto? Puede procederse al menos de dos mo- social que la de enfrentarnos a la descripción y
dos. Primero, tomando en cuenta que el cre- numeración de los ‘indígenas’ (2019, 2).
cimiento poblacional boliviano es menor a la
mitad del promedio regional, concluir que el Para ingresar en el tema, resumimos la infor-
asunto no puede considerarse determinante. mación cuantitativa que tenemos disponible a
Segundo, analizar en qué consistió este proce- continuación. (Ver cuadro 1).
so de crecimiento. En esta sección del artículo
analizamos las interpretaciones de quienes op- Proponemos tres procedimientos para inten-
taron por el segundo modo. tar ajustar esta información. Primero, conci-
liaremos las dos estimaciones del año 1825.
4 Sobre el mercado regional del siglo XIX, ver el artí- Segundo, retiremos la información censal para
culo de Gustavo Rodríguez Ostria en este libro. el año 1835 realizada por el Estado, que nos
dice más de las dificultades estatales para reali- Se puede decir que Bolivia inició su vida re-
zar un censo en el tiempo posterior a la guerra publicana con poco más de un millón de habi-
con el Perú que difícilmente puede haber cos- tantes y que fue un país eminentemente rural
tado decenas de miles de muertes, y lo suplan- durante el resto del siglo XIX. Las ciudades
tamos por la estimación del Calendario y guía se contrajeron: Potosí, en su etapa de polo de
de forasteros de la República Boliviana para el año crecimiento colonial, pasó de tener 45.000 ha-
1835. Finalmente, admitimos las correcciones bitantes en 1800 a 20.000 habitantes a finales
del INE para el año 1854. De tal modo, se pue- del siglo XIX (Peres-Cajías 2011a). La escasez
de observar que el crecimiento poblacional es- de capital y mano de obra en relación a la tie-
taba prácticamente estancado hasta la década rra impulsaron la ruralización de la economía
de 1930 seguidos de décadas de crecimiento que privilegió la utilización de los factores
modesto pero sostenido (Ver Cuadro 2). abundantes frente a los escasos (Korol y Tan-
deter 1999, 61). El espacio económico peruano se
Cuadro 1 fragmentó y su dinamismo se dispersó en el
Información de la población en Bolivia, 1825-1900
espacio rural. Gran parte de la población vivía
Año Población Tipo Fuente o periodo de la actividad agrícola y la cría de ganado, ya
de realización sea trabajando la propia tierra o empleándose
1825 978.926 Estimada Dalence (1851) con otros dueños.
Un amor
desenfrenado
1825 1.100.000 Estimada Pentland (1826)
por la libertad 1831 1.088.768 Censo Presidencia Andrés de
Santa Cruz Esta idea que se tiene del desarrollo pobla-
Antología de la
historia política 1835 1.060.777 Censo Presidencia Andrés de cional no varió mucho en el tiempo y en su
de Bolivia Santa Cruz momento fue utilizada como parte del argu-
(1825-2020)
1835 1.250.000 Estimada Calendario y guía de mento que nos hablaba del continuo proceso
forasteros de la República
290 Boliviana (1835) de ampliación de la hacienda en desmedro de
1846 1.373.896 Censo Dalence (1851) la propiedad de la comunidad indígena. Como
1854 2.326.126 Censo Presidencia de Belzu resultado, una parte del debate de la historia
Tomo I 1854 1.666.126 Censo Presidencia de Belzu económica puso en el centro a las comunida-
1825-1952 (Corregido por el INE,
por sobrestimación de des indígenas, la posesión de la tierra y la par-
población de tierras ticipación en el mercado, alentando diálogos
bajas)
que a la fecha permanecen abiertos.
1865 1.813.233
1882 1.172.156 Censo Presidencia Narciso
Campero Un buen punto de inicio para hablar sobre el
1900 1.766.451 Censo Presidencia José Manuel estudio de la población y la propiedad de la
Pando tierra y las comunidades indígenas en el siglo
Fuente: (Barragán et al. 2014; Bolivia 1835; Henriques 2016). XIX se halla en la investigación de Grieshaber
(1980). Este autor, basado en los padrones
Cuadro 2
La población en Bolivia, 1825-1900 realizados en La Paz entre 1838 y 1877, con-
cluye que las comunidades indígenas andinas
Año Población Variación % no solo perduraron, sino que crecieron y las
1825 1.039.463 haciendas disminuyeron. La importancia de
1831 1.088.768 4,7%
esta investigación reside en desmontar la hi-
1835 1.250.000 14,8%
pótesis del avance de la hacienda a lo largo
1846 1.373.896 9,9%
1854 1.666.126 21,3%
del siglo XIX.
1865 1.813.233 8,8%
1882 1.172.156 -35,4% Pero los acuerdos entre los historiadores sue-
1900 1.766.451 50,7% len durar poco. Ocurre que Grieshaber inter-
Fuente: Elaboración propia. pretó que todo esto ocurrió así por una menor
presión del Estado y a través de un periodo de
relativa tranquilidad. Bonilla (1980) advertía
que la estabilidad de la comunidad indígena
no significaba que en diversos momentos los
gobiernos no intentaran suprimir su existencia
corporativa y establecer una República de pe-
queños propietarios. Rodríguez Ostria (1983)
también descartó aquella minimización del
conflicto entre hacienda y comunidad indíge-
na. Y él propuso que el ataque de la hacienda
fue constante y la clave de la pervivencia y cre-
cimiento fue la resistencia.
Primer periodo
Bajo la
Constitución de
1826 que organiza
y constituye la
nación boliviana
(1825-1880)
295
La lenta inserción
de Bolivia a la
economía mundial
(1825-1872):
Política fiscal y
monetaria, minería
y población
Provincias Provincias
(Chayanta, (Chayanta,
Año Azogueros Cacchas Total Año Azogueros Cacchas Total
Chichas y Chichas y
Porco) Porco)
1831 69.545 26.158 75.598 171.301 1841 65.156 13.976 130.579 209.711
1832 1842 65.128 15.949 132.311 213.388
1833 70.657 15.438 85.520 171.615 1843 64.334 14.676 107.004 186.014
1834 68.090 13.941 98.458 180.489 1844 68.414 15.951 99.193 183.558
1835 72.090 14.976 87.704 174.770 1845 60.470 15.772 100.726 176.968
1836 65.595 18.908 92.820 177.323 1846 59.409 16.242 87.076 162.727
1837 65.490 18.959 112.363 196.812 1847 53.591 22.987 82.944 159.522
1838 57.606 20.691 112.459 190.756 1848 49.987 13.821 70.221 134.029
1839 76.481 16.473 127.699 220.653 1849 41.578 16.950 80.288 138.816
1840 67.770 19.336 161.941 249.047 1850 51.935 19.154 101.457 172.546
Fuente: (Platt 1986).
Primer periodo
Resumen Palabras clave: Campesinos indígenas; pac-
Bajo la
tos tributarios; tierras comunales; reformas Constitución de
E
1826 que organiza
ste capítulo traza la larga, desigual y agrarias liberales; Melgarejo; Zárate Willka; y constituye la
nación boliviana
violenta transición de los “pactos tri- oligarquía liberal; raza y racismo. (1825-1880)
butarios” neocoloniales de principios
y mediados del siglo XIX a la era de las refor- 303
mas agrarias liberales, que comenzaron en los Introducción
decenios de 1860 y 1870. Examina una serie
de reformas del gobierno que echaron por Entre las décadas de 1860 y 1890, Bolivia Conflictos agrarios,
pactos peligrosos,
tierra la legalidad de la comunidad de ayllu, siguió un riesgoso camino hacia “el orden y e indios
insurgentes,
que culminó finalmente en la famosa Ley de el progreso” (la utopía del positivismo). Los 1860-1900
Bajo la
Constitución de
Indios y mestizos de la nación quechua, de Chuquisaca y sus alrededores, c. 1833. 1826 que organiza
Fuente: Viaje a la América meridional … realizado de 1826, Alcides D’Orbigny. y constituye la
nación boliviana
(1825-1880)
En las décadas de 1830 y 1840, los empadro- llegó a mediados del siglo XIX sin haber esta 305
nadores de los censos y los viajeros europeos blecido una cabeza de puente institucional o
inventariaron las diversas zonas ecológicas, ideológica de liberalismo, desde la cual lan-
regiones y razas bolivianas que parecían ser zar un asalto frontal sobre las comunidades Conflictos agrarios,
pactos peligrosos,
inmunes a las fuerzas modernizantes externas. indígenas. e indios
insurgentes,
Alcide D’Orbigny fue tal vez el viajero más 1860-1900
influyente que representó a la Bolivia postco- La violencia política de finales de ese siglo
lonial como una mezcla de tipos lingüísticos, también se debió a la ambivalencia de larga
raciales y regionales. (Fig.1) data que la sociedad provincial criolla sentía
con respecto a sus súbditos indígenas. Los
De las cuatro naciones andinas, fue en esta incipientes valores burgueses no podían re-
incipiente República que el pasado colo- emplazar fácilmente a los hábitos coloniales.
nial se insinuaba con mayor profundidad en Acostumbrados a vivir del trabajo indígena
su vida cultural e institucional. Así, Bolivia servil, los criollos no estuvieron particular-
mente ansiosos por abrir el país a los bienes o
inversiones extranjeras sino hasta las décadas
pequeño ligado a las haciendas (entre 375.000 y de 1860 y 1870.
400.000). El Censo nacional de 1900 revela po-
cos cambios en estos equilibrios étnicos. Veáse
José María Dalence, Bosquejo estadístico de Bolivia
Este choque entre el colonialismo y la moder-
1846 (La Paz, 1975), y Herbert S. Klein, Bolivia: nidad reverberó por toda la República, pues el
The Evolution of a Multiethnic Society (Nueva York, pasado colonial no estaba tan profundamen-
1982), 166. También, Erwin Grieshaber, “Survi- te arraigado en ninguna otra parte, tanto en
val of Indian communities in nineteenth century
Bolivia: A regional comparison”, Journal of Latin
la ideología como en la práctica. Bolivia fue
American Studies 12:2 (1980): 223 y 236. la última de las naciones andinas en abolir el
tributo indigenal, en 1874. Las castas siguie- derechos tradicionales y coloniales al territo-
ron estructurando y legitimando las formas rio, siguieron basando sus luchas por la tierra,
cotidianas de explotación hasta mediados del la autonomía y la identidad en un pasado his-
siglo XX. Las autoridades provinciales –desde tórico moral.
el ínfimo cura doctrinero hasta el prefecto–
deseaban conservar las costumbres coloniales Las culturas orales, memorias colectivas, ge-
del servilismo y la subordinación, y siguieron nealogías, archivos comunales y celebraciones
dependiendo de los jilacatas (funcionarios co- rituales se combinaron todas en la configura-
munales tradicionales, similares a los varayuq ción de las interpretaciones históricas nativas,
peruanos) y otras autoridades indígenas para las cuales a su vez reafirmaron la identidad y la
que despacharan trabajadores temporales para militancia étnica.
obras públicas y privadas.
Pero las costumbres nativas del pasado no
La perdurable dependencia republicana de la constriñeron su capacidad para adaptarse o
mediación étnica fue evidente incluso después alterar sus estrategias políticas y retóricas,
de la abolición formal del tributo. Burocracias a medida que los equilibrios de poder y las
provinciales íntegras en el norte de Potosí y en circunstancias históricas iban cambiando. La
Un amor
otros lugares siguieron funcionando en base construcción o la ruptura de alianzas multi-ét-
desenfrenado al tributo indigenal y el trabajo forzado hasta nicas, la participación en la política partidaria,
por la libertad
bien entrado el siglo XX. Y cuando el Estado la forja de pactos de patronazgo, y el tejido
Antología de la
historia política buscó reglamentar estas últimas para la cons- de redes de solidaridad entre las autoridades
de Bolivia
(1825-2020)
trucción de carreteras en 1889, se topó con e intermediarios (los caciques y apoderados,
problemas en cuanto intentó evitar las redes respectivamente) de los ayllus y comunida-
306 de mediación étnicas tradicionales. des, todo esto formó parte de los repertorios y
convenciones compartidas que caracterizaron
En el siglo XIX, la persistencia de un pacto tri- a la política indígena del siglo XIX.
Tomo I butario implícito, bajo una República ambiva-
1825-1952
lente, resultó ser algo peligroso. Al igual que Una vez que el viejo pacto tributario comen-
en el Perú, los constructores de la nación bo- zó a derrumbarse, cuando los indios ya no
liviana hicieron un fútil intento por alcanzar pudieron usar las ambigüedades culturales
un consenso en torno a un proyecto maestro y semánticas de la “República” en provecho
“civilizador”. Aún más importante fue que los propio, las comunidades alteraron sus tácticas
disputados significados del republicanismo- si y se realinearon siguiendo líneas partidarias o
éste legitimaba los derechos étnicos de tipo coaliciones popular-comunales. Asimismo, in-
colonial, o si exigía un reformismo anti indí- tensificaron su búsqueda de legitimidades co-
gena- jugaban a favor de grupos étnicos fuer- loniales. Como quedará en evidencia, el sur-
tes, largo tiempo acostumbrados a negociar y gimiento de nuevos pactos y alianzas políticas
resistir las exacciones estatales. entre las comunidades aimaras militantes y el
Partido Liberal a finales de siglo, resultó ser
No importa cuán ambiguas o disputadas fue- explosiva.
ran, las persistentes relaciones tributarias
mantuvieron la base de la militancia étnica a
lo largo de todo el siglo XIX. Las tensiones 1. Entre la conquista y la reconquista:
tributarias que durante largo tiempo habían la cuestión de las tierras comunales
estado en ebullición estallaron con la cuestión
de las tierras comunales. En la medida que los La recuperación de la minería de la plata, en-
indios seguían enfrentando al Estado por sus tre las décadas de 1860 y 1870, endureció la
voluntad de un pequeño grupo de reformistas confiar en escuelas rurales para los indios, un
liberales para comenzar a mejorar la econo- sistema judicial moderno o en agentes guber-
mía política boliviana. Un nuevo tipo de mi- namentales que asimilaran las masas indígenas
neros de la plata modernizantes apareció en a la vida civilizada.
la escena política, promoviendo sus ideas li-
brecambistas. Estimulados por la enfebrecida Por lo tanto, el advenimiento del tributo y las
actividad comercial en el guano, los nitratos reformas agrarias fue impuesto a un campe-
y la plata, esta pequeña oligarquía elogió los sinado resentido, bajo condiciones políticas
beneficios de la desregulación gubernamental en extremo precarias. Para comienzos de la
de la minería y la acuñación, el final del pro- década de 1870, los reformistas liberales eran
teccionismo y la promoción de la construcción dolorosamente conscientes de eso. Desde en-
de ferrocarriles que permitiera a los mineros tonces discutieron interminablemente entre
un acceso más barato al mercado mundial. sí sobre la forma menos peligrosa de proce-
der. No fue una sorpresa que introdujeran una
El creciente espíritu del liberalismo econó- serie de “reformas y contrareformas” tibias y
mico asimismo desató un renacimiento de los contradictorias, que buscaban librar una gue-
ideales bolivarianos. Y por primera vez desde rra económica y cultural contra los estilos de
la década de 1820, eso colocó el “problema in- vida indígenas, al mismo tiempo que intenta- Primer periodo
dígena” en el centro mismo de los debates po- ban contener la amenaza de una insurrección
Bajo la
líticos de la elite. Para comienzos de la década violenta. Estos intentos habrían de resultar Constitución de
1826 que organiza
de 1860, los reformistas liberales iban armando impracticables. y constituye la
nación boliviana
un consenso entre ellos, según el cual las bases (1825-1880)
jurídicas de las comunidades indígenas debían La década de 1860 vio, entonces, el fracaso
ser destruidas de una vez y para siempre. de dos importantes intentos de reforma agra- 307
ria indígena: el abortado decreto de 1863 del
Sus argumentos eran tanto filosóficos (la in- presidente José María de Achá, y las funda-
compatibilidad ideológica entre casta y ciu- mentales reformas de la tierra de 1866 y1868, Conflictos agrarios,
pactos peligrosos,
dadanía, comunitarismo y propiedad privada, implementadas por el presidente Mariano e indios
insurgentes,
etc.) como pragmáticos (la necesidad de des- Melgarejo. Si bien ambas fracasaron de distin- 1860-1900
plazar la base fiscal del tributo indígena al im- ta manera (el decreto de 1863 nació muerto y
puesto universal sobre la propiedad de elevar los de Melgarejo fueron eventualmente dero-
la renta inmediata procedente de la venta de gados), son interesantes por sus utópicas visio-
títulos de tierras, y de promover la agricultura nes rivales de la Bolivia rural y del destino de
comercial en los campos recién privatizadas, su campesinado en una nación modernizante.
etc.). Pero como veremos en breve, las pro-
puestas ingenuas y temerarias para la reforma La propuesta de 1863 revivió los ideales bo-
de las tierras indígenas de esa década no espe- livarianos de la pequeña propiedad indígena.
raron encontrar una respuesta violenta. Al igual que en las más tempranas reformas
agrarias de Ecuador y Perú, Achá propugna-
Para comienzos de los años 70, los reformistas ba la subdivisión de las tierras comunales y su
liberales se vieron cara a cara con la atemo- redistribución entre las unidades domésticas
rizante realidad de la insurgencia campesi- indígenas. Según su plan, los indios compra-
na: vivir bajo un gobierno débil, coercitivo e rían o venderían las tierras a voluntad. Mo-
inestable, incapaz en general de disciplinar a tivados por los incentivos del mercado, ellos
una indiada cada vez más díscola. Bolivia aún mejorarían la producción agrícola y eventual-
no contaba con una policía rural o unas fuer- mente pasarían a ser prósperos agricultores y
zas armadas profesionales, ni tampoco podía artesanos.
Entretanto, el Estado les obligaría a adoptar reformas liberales fueron inmediatamente he-
una forma de vida civilizada: multándoles con chas de lado por el imponente caudillo-presi-
10 pesos si, por ejemplo, no construían “ca- dente, el general Mariano Melgarejo. Después
sas cómodas, espaciosas y ventiladas” en sus de tomar el poder a finales de 1864, inició un
tierras en el plazo de un año, o si no erigían paquete de reformas que desmantelaron todo
escuelas para sus hijos. Sin embargo y al igual el edificio de aranceles protectores, moderni-
que en la mayor parte de las anteriores refor- zó el sistema monetario, vendió grandes par-
mas agrarias de los países vecinos, el Estado tes del territorio boliviano y lanzó el primer
tenía un interés financiero en la venta de vas- ataque sostenido contra el derecho indígena a
tos acres de “tierras baldías” a la puja más alta. la propiedad comunal desde la era de la Inde-
pendencia.
Para los políticos, su venta parecía ser un re-
medio fácil: pondría a producir los baldíos, al Según los términos de los decretos confiscato-
mismo tiempo que elevaba la renta estatal in- rios de 1866, Melgarejo declaró que el Estado
mediata. Estas propuestas mostraban una ig- era el dueño de todas las propiedades comu-
norancia abismal de los patrones andinos de nales. Y todo indio que residiera en tierras es-
rotación de la tierra (los campos con cultivos tatales estaba ahora obligado a adquirir títulos
Un amor
de gran altura deben barbecharse durante va- individuales por sumas que fluctuaban entre
desenfrenado rios años), así como poco conocimiento de los dos y 100 pesos, en un plazo de 60 días. Los
por la libertad
efectos duraderos de la epidemia de 1856. En títulos les permitirían tener la tierra por cinco
Antología de la
historia política todo caso, si bien el decreto de 1863 fue abro- años, luego de lo cual tendrían que volver a
de Bolivia
(1825-2020)
gado ese mismo año, éste cristalizó la visión comprarlos. En realidad, estarían adelantando
“campesinista” de los reformadores liberales.2 un censo (ground rent) por cinco años, en tanto
308 que los derechos de propiedad absoluta segui-
Sin embargo, quienes promovían la solución rían en manos del Estado.
de las pequeñas propiedades rurales en modo
Tomo I alguno eran demócratas jeffersonianos;3 eran, Los campos de aquellos que no lograsen ad-
1825-1952
más bien, pragmáticos nada sentimentales quirirlos en los términos estipulados serían
imbuidos de las nociones positivistas del atra- confiscados y subastados al postor más alto. El
so racial. De este modo, sus propuestas para decreto de 1868 puso la sal en la herida in-
redistribuir las tierras entre las familias indí- fringida por la ley anterior: permitía que co-
genas formaban parte de un proyecto mucho munidades enteras fueran subastadas como
más ambicioso de reforma cultural, que busca- unidades agrarias y se les impuso el tributo,
ba la “civilización” forzada de los indios. quedando así los indios sujetos a dos veces la
tasa estándar.
Prefigurando la famosa ley de reforma agra-
ria de 1874, estas ambiciosas e incipientes Varias características de la reforma agraria de
Melgarejo atendían de palabra al objetivo li-
beral de convertir a los indios en propietarios,
2 Erick Langer, “El liberalismo y la abolición de una vez adquiriesen los títulos de tierras. Pero
la comunidad indígena en el siglo XIX” Historia y
los términos notoriamente duros que impuso
cultura 14 (1988); Tristan Platt, Estado tributario y
librecambismo en Potosí (siglo XIX) (Lima, 1982); Víc- prepararon el escenario para una expoliación a
tor Peralta Ruiz y Marta Irurozqui, “Los bolivianos gran escala, en particular debido a que su edic-
y el indio. Patrimonialismo y modernización en to de 1868 legitimaba la venta de comunidades
Bolivia, siglo XIX,” en Modernidad y tradición en
enteras a un solo hacendado. De esta forma
los Andes, ed. H. Urbano (Cuzco, 1992), 163-190.
3 El “yeoeman farmer” ocupó el imaginario jefferso- Melgarejo se alineó con la facción prolatifun-
niano. dista de la oligarquía.
Para comienzos de la década de 1860, el punto A pesar de ello, los decretos de Melgarejo hi-
de vista señorial era expresado como el resulta- cieron trizas la paz agraria en las densamen-
do preferible a largo plazo, y el más probable, te pobladas provincias aimaras de Sica Sica,
de las reformas agrarias liberales. Los propie- Omasuyos y Pacajes, donde se concentraron
tarios tradicionales de tierras, así como los co- los despojos. De la noche a la mañana, los pue-
merciantes y empresarios mineros, comenza- blos indígenas incapaces de demostrar su po-
ron a argumentar que el secreto de la liberación sesión de los campos con títulos coloniales, o
de Bolivia del atraso rural yacía en la promo- demasiado empobrecidos como para comprar
ción del latifundismo. Algunos propugnaban la su titulación, vieron cómo sus tierras y pasti-
expansión de las haciendas con argumentos pa- zales comunes pasaban a manos privadas con
ternalistas: los hacendados privados asumirían las pujas de los especuladores acaudalados.
el papel del protector de indios, recientemente
abandonado por el Estado modernizante.4 Los beneficiarios fueron clientes políticos de
Melgarejo, hacendados tradicionales que ex-
Aquí tenemos, entonces, una contraparte bo- pandían sus fronteras en territorio indígena,
liviana de la “solución blanqueadora” popular medianos mineros y comerciantes, e indios
de Colombia con la cual justificar la polémica prósperos (a menudo de los linajes de los caci-
prolatifundista, o lo que sus críticos llamaron ques). Los indios privilegiados frecuentemen- Primer periodo
la postura “refeudalizadora” de los codiciosos te privatizaron las antiguas tierras cacicales,
Bajo la
terratenientes. Aunque Melgarejo jamás defi- que alguna vez habían cubierto los gastos ri- Constitución de
1826 que organiza
nió su posición en esos términos, sus políticas tuales y tributarios de la comunidad. Cierta- y constituye la
nación boliviana
en la práctica suscribieron la posición señorial. mente vemos en las provincias del altiplano (1825-1880)
alrededor de La Paz, cómo los contornos de
Si bien los historiadores no coinciden en lo una oligarquía regional diversificada comen- 309
que respecta a los efectos globales y regionales zaban a consolidar el poder en este periodo de
que las reformas de Melgarejo tuvieron so- transición. Sin embargo, sus propiedades fá-
bre el desposeimiento indígena de la tierra, la cilmente ganadas pronto se vieron en peligro Conflictos agrarios,
pactos peligrosos,
mayoría sí está de acuerdo en que el gobierno por la creciente oleada de resistencia y rebe- e indios
insurgentes,
quedó muy lejos de alcanzar sus objetivos fis- liones indígenas. 1860-1900
estos incidentes es la masiva campaña de papel didas proteccionistas”. Por el contrario, varias
que los indios comenzaron a librar en la dé- personas escribieron prolíficamente acerca de
cada de 1880, para que se les restituyeran sus los desastrosos efectos que las reformas agra-
derechos comunales. Toda la confusa gama de rias habían tenido sobre los pueblos indíge-
legislación referida a las reformas fiscales y de nas. Uno de los más prominentes autores a
la tierra, así como la corrupción e ineficiencia
de los funcionarios, eran formas perversas de
estimular (e impedir) los cuestionamientos le- 6 Silvia Rivera Cusicanqui, “Oprimidos, pero no venci-
dos”. Luchas del campesinado aymara y quechuas, 1900-
gales por parte de los indios agraviados. Bajo 1980 (La Paz, 1986); Rivera, “Pedimos la revisión
la presión de las protestas indígenas, el gobier- de límites. Un episodio en la incomunicación de
no diluyó la ley de 1874 en dos formas funda- castas en el movimiento de caciques-apoderados en
los Andes Bolivianos, 1919-1921,” en Reproducción y
mentales.
transformación de las sociedades andinas, siglos XVI-XX,
eds. S. Moreno y F. Salomon (Quito, 1991), 603-
5 Tristan Platt, 307-309; Erwin Grieshaber, “Indian 652; Carlos Mamani Condori, Tarqui, 1866-1935
reactions to the acquisition of communal land: La (La Paz, 1991); Taller de la Historia Oral Andina
Paz, 1881-1920” (ponencia inédita presentada en la (THOA), El indo Santos Marka T’ula (La Paz, 1986);
Conferencia FLACSO sobre “Las comunidades in- y Thomas Abercrombie, Pathways of Memory and
dígenas de los Andes en el siglo XIX”, Quito, 27-30 Power. Ethnography and History among an Andean
de marzo de 1989). People 304-314.
comienzos del siglo XX fue Rigoberto Pare- Sin embargo, no en todos lados ni tampoco
des, un intelectual, abogado y latifundista. En del todo. La Paz fue el lugar donde se libra-
su libro Tiahuanaco, Paredes comentó el triste ron las guerras territoriales. Las fronteras la-
estado de las comunidades del altiplano: tifundistas avanzaron rápidamente en aquellos
distritos de Omasuyos y Pacajes, que contaban
La abolición legal de las comunidades ha con un fácil acceso al creciente mercado urba-
causado un gran daño al indio. Acostumbra- no de La Paz y la red ferroviaria. El valor de
do a las formas colectivos de cultivo, vivía la tierra se disparó a medida que el auge en
perfectamente en paz y lejos del alcance de minas, rieles y mercados abría oportunidades
los codiciosos usurpadores de tierras. Pero comerciales para la agricultura y ganadería se-
tan pronto fue transformado en propietario, rrana por todo el norte.
se convirtió en su víctima. Analfabeto, no
enterado del valor de su parcela y sin garan- Los latifundistas tendieron a ser hacendados
tías de ningún tipo, fue privado de sus tie- ausentes y miembros prominentes de la oli-
rras, usualmente a través del despojo violen- garquía, jugando a la política en Sucre o La
to. Y así se formaron las grandes haciendas y Paz. A su sombra, una nueva capa de interme-
el indio fue reducido a la servidumbre y vive diaros comerciales articuló los intercambios
con la esperanza de algún día reclamar su rurales y urbanos. En tanto, burócratas me-
Un amor
desenfrenado legítima herencia ancestral.7 nores, abogados, comerciantes y prestamistas
por la libertad
provinciales, estos intermediarios rurales mes-
Antología de la
historia política
Recientes estudios históricos han intentado me- tizos aparecieron en las grietas institucionales
de Bolivia dir la extensión del despojo de tierras indígenas abiertas por el colapso de las comunidades de
(1825-2020)
a finales del siglo XIX y comienzos del XX. Por indios y sus autoridades locales.10
312 ejemplo, Erwin Grieshaber estima que de los
7.616 contratos de ventas de tierra registrados De modo que la experiencia de la servidumbre
en el vasto departamento de La Paz entre 1881 indígena no fue universal en toda la Bolivia
Tomo I y 1920, apenas dos docenas fueron anulados y rural. El tira y afloja de las presiones estatales
1825-1952
los campos indígenas devueltos.8 Remontándo- y del mercado, así como las formas, fuerzas y
nos a un lapso de 40 o 50 años de vigorosas ven- consecuencias de la respuesta indígena, ope-
tas de bienes inmuebles, no cabe duda alguna de raron de distintas formas de un lugar al otro
la masiva alienación de las tierras de indígenas y de región a región. Aquí sólo necesitamos
en todo el país. Herbert Klein lo resume así: señalar las divergentes respuestas campesinas
a las reformas agrarias liberales en los depar-
Poseedoras de la mitad de las tierras y alrede- tamentos contiguos de Cochabamba y el norte
dor de la mitad de la población rural aún en de Potosí, a fines del siglo XIX.
1880, para 1930 las comunidades se habían
reducido a menos de un tercio en ambos ca- En los valles maiceros al este de Cochabam-
sos. El poder de estas comunidades de indios ba –una región con un mosaico de haciendas
libres estaba definitivamente quebrado9 y pequeñas propiedades campesinas profunda-
mente integradas en los mercados regionales
7 Rigoberto Paredes, Tiahuanaco y la Provincia de de productos–, las políticas agrarias liberales
Ingavi (La Paz, 1965), 31.
8 Grieshaber, “Indian reactions to the acquisition of
dieron a muchos campesinos la oportunidad
communal land: La Paz, 1881-1920” (ponencia in-
édita presentada en la Conferencia FLACSO sobre
“Las comunidades indígenas de los Andes en el si- 10 Silvia Rivera, “La expansión del latifundio en el
glo XIX”, Quito, 27-30 de marzo de 1989). Altiplano boliviano. Elementos para la caracteriza-
9 Klein, Herbert S. Bolivia: The Evolution of a Mul- ción de una oligarquía regional,” en Avances 2 (La
tiethnic Society (Nueva York, 1982), 152. Paz, 1978), 95-118.
de comprar pequeñas parcelas de las hacien- El colapso del proteccionismo les asestó el pri-
das que alguna vez habían cultivado mediante mer golpe. Las políticas librecambistas de las
arreglos de aparcería o arrendamiento. Mu- décadas de 1870 y 1880 desalojaron a los ayllus
chas haciendas asimismo presionaron los lin- de Chayanta de su posición privilegiada como
deros de las comunidades vecinas. proveedores de trigo a los mercados regionales
y urbanos, al abrirse Bolivia a la barata harina
Esta larga historia de parcelación agraria, con- de trigo chilena y peruana. El segundo golpe
juntamente con una fuerte tradición campe- vino con las leyes de reforma agraria en los años
sina mercantil en las márgenes de los pueblos 80, cuando la región se convirtió en un enclave
y haciendas del valle, crearon el contexto re- de las protestas y rebeliones de los ayllus.
gional para una acelerada “campesinización”,
en particular a comienzos del siglo XX, a me- Sin embargo, estos operaban en un campo de
dida que la economía de la unidad domésti- fuerzas regionales sumamente distinto que las
ca campesina giraba cada vez más en torno al asediadas comunidades aimaras del altiplano
complejo maíz-chicha. La región también co- norte, o que los campesinos-artesanos y peque-
menzó a perder a algunos de sus campesinos ños propietarios de Cochabamba. Su creciente
“excedentes”- los que no podían vivir con sus aislamiento económico, la diminuta proporción
disminuidas parcelas– que se fueron a buscar de tierras en manos de las haciendas, los inte- Primer periodo
la vida en las lejanas minas de plata, nitratos reses creados de los burócratas provinciales en
Bajo la
y estaño.11 conservar el tributo indigenal (ya que este se- Constitución de
1826 que organiza
guía financiando al gobierno local) y el legado y constituye la
nación boliviana
El norte de Potosí se encuentra al otro lado histórico de las luchas e insurrecciones indíge- (1825-1880)
de las montañas y valles al sudoeste de Cocha- nas en la zona (el escenario de una masiva rebe-
bamba. Allí, los ayllus históricamente resis- lión india en 1780 y 1781), conspiraron todos 313
tentes de Chayanta (una provincia del norte en contra del asalto del liberalismo y el latifun-
de Potosí) presentaron una fuerte oposición dismo aplicado en el norte potosino. Si sirvió
a los ciclos iniciales de las reformas liberales para algo, fue para que los pequeños propieta- Conflictos agrarios,
pactos peligrosos,
y constantemente lucharon a lo largo del pe- rios mestizos ocuparan más tierras y dieran la e indios
insurgentes,
riodo republicano para que se restauraran las espalda políticamente a los indios de los ayllus. 1860-1900
parte de los indios, para la defensa legal de sus los pueblos aimaras comenzaron a diseñar
tierras. Se hizo algo común que las autorida- múltiples formas de luchar, dentro y fuera de
des indígenas viajaran a los archivos colonia- los límites de la ley criolla. La nerviosa elite
les de Sucre, Lima y Buenos Aires, en busca de La Paz a menudo advertía que los incipien-
de documentos coloniales que legitimaran tes movimientos aimaras podían intensificarse
sus antiguos derechos. Las comunidades más en cualquier momento, enviando “guerreros
afortunadas tenían repositorios secretos de salvajes” a través del norte del altiplano hasta
documentos coloniales guardados en sus ca- las orillas del polvoriento tazón que alberga la
jas fuertes, que sirvieron como una fuente de ciudad de La Paz. Eso finalmente sucedió en
memoria étnica y defensa comunal hasta bien 1899, irónicamente por invitación del Partido
entrado el siglo XX. Liberal.
Esta búsqueda de títulos de propiedad an- Ya para finales de la década de 1880, las con-
tiguos revitalizó las historias orales y dio un diciones políticas y sociales animaron a algu-
nuevo significado a su lucha por las jurisdic- nos de los liberales a enrolar a los indios en
ciones locales y las tierras en disputa. Asimis- su pugna por el poder. En 1888, año de elec-
mo, aguzó los usos populares de los discursos ciones presidenciales, hubo una oleada de pro-
postcoloniales, invocando un mítico pacto testas indígenas contra las reformas fiscales y
agrarias que el Partido Conservador había del precio de la plata en el mercado mundial
estado implementando durante unos ochos erosionó la base económica de los conservado-
años. res. Las minas de estaño de Bolivia pronto ca-
tapultarían a La Paz a su posición como el eje
En Sacaca, Macha y otros lugares del altipla- económico y político del país, y de hecho como
no sur, campesinos armados incendiaron los su ciudad capital rival. Pero por el momento,
edificios municipales y rechazaron a las auto- el Partido Conservador intentó aferrarse a su
ridades gubernamentales que intentaban ins- monopolio político contra el partido opositor,
peccionar las propiedades y cobrar los dere- operando desde La Paz. La política partidaria
chos de los títulos de propiedad de la tierra. de la elite manifestaba cada vez más cismas re-
Estas zonas resultaron ser un terreno fértil gionales y económicos (el ascenso económico
para unas alianzas estratégicas entre los ayllus y político del norte y la caída del sur), pero
de la resistencia antigubernamental, y los li- los partidos diferían poco en sus posturas pro
berales disidentes y anti conservadores. Para modernizadoras.
los ayllus rebeldes de Chayanta y Charcas, el
pueblo minero de Colquechaca se convirtió en Y, sin embargo, el Partido Liberal sólo lo-
terreno fértil para el liberalismo a finales de la graría defender el orden y el progreso, el ca-
Un amor
década de 1880. pitalismo y la civilización, después de tomar
desenfrenado el poder en 1900. En las décadas de 1880 y
por la libertad
Los liberales buscaron abiertamente el respal- 1890 éste definió sus objetivos en términos
Antología de la
historia política do indígena. La propaganda y los eslóganes políticos restringidos: compartir el poder en
de Bolivia
(1825-2020)
del partido circulaban a través de intrincadas la cima y reestructurar la burocracia siguiendo
redes de comunicación rural entre los tran- líneas federalistas. Por encima de todo querían
316 seúntes indios que viajaban en gran número elecciones limpias. Para movilizar a los indios
de sus ayllus a las minas, mercados y santua- contra sus enemigos conservadores estaban
rios de Colquechaca. Estas alianzas transito- dispuestos a forjar alianzas infames y a defen-
Tomo I rias con los pobladores urbanos, mestizos y der las causas proindígenas (por ejemplo, la
1825-1952
liberales, probablemente animó a los indios restitución de las tierras comunales, la deroga-
a oponerse abiertamente a las políticas de re- toria de las reformas agrarias, etc.).
forma agraria de los conservadores. En todo
caso, las protestas indígenas y mestizas contra Como ya vimos, a finales de la década de 1880
los nuevos comisionados agrarios de la región los liberales ya habían establecido enclaves
se intensificaron a finales de la década de 1880 locales de clientelismo indígena en el norte
y comienzos de la siguiente, y los primeros si- potosino. Pero en el año electoral de 1896,
guieron presentando solicitudes a legisladores surgió una nueva oportunidad política para
simpatizantes con ayuda de abogados y agita- que los liberales paceños ampliaran su base de
dores liberales disidentes.15 respaldo indígena en el norte, enganchándose
con una vasta red preexistente de comunida-
Para mediados de la década de 1890, la oligar- des indias insurgentes, esparcidas por los dis-
quía conservadora vio cómo sus fortunas polí- tritos rurales de Oruro y La Paz.
ticas y económicas se desvanecían. El colapso
La nueva y poderosa coalición liberal indíge-
15 Tristan Platt, “The Andean Experience of Bolivian na fue construida por dos personas: el coronel
Liberalism, 1825-1900: the Roots of Rebellion in José Manual Pando y Pablo Zárate Willka.
Nineteenth-Century Chayanta (Potosí),” en Re-
Ellos se convirtieron en aliados (y posterior-
sistance, Rebellion, and Consciousness in the Andean
Peasant World, 18th to20th Centuries, ed. S. Stern mente enemigos) históricos en la Revolución
(Madison, 1987), 311-312. Federal de 1899, que finalmente quebró el
Primer periodo
Bajo la
Constitución de
1826 que organiza
El general Willka Condori y sus tropas en Arque, 1899. y constituye la
Fuente: Colección Fotográfica Histórica-Archivo de La Paz. nación boliviana
(1825-1880)
monopolio político de los conservadores. Am- de los comunarios agraviados, e hilando redes 317
bos eran los jefes supremos políticos y milita- políticas y de parentesco por todo el altiplano.
res que convirtieron a sus propios seguidores y (Fig. 2) Esta figura no era un héroe accidental,
agendas en un frágil frente popular-partidario. creado por la guerra. Era un poderoso caudillo Conflictos agrarios,
pactos peligrosos,
Para Pando, el enemigo era simplemente el indígena que participó en guerras y rebeliones e indios
insurgentes,
partido opositor que había mantenido a los a nivel nacional, que llevó a esta alianza polí- 1860-1900
liberales fuera del poder desde el inicio del tica el respaldo rural de los indígenas agravia-
gobierno civil oligárquico en 1880. Para las dos. Movilizados y uncidos a la causa liberal,
comunidades indígenas, asediadas por más de ellos podían aterrorizar a los conservadores y
dos décadas, el enemigo trascendía la estrecha hacer que se sometiesen. Al menos eso pensa-
política de los partidos e implicaba a todo el ba Pando.
orden social y moral. En el mejor de los casos,
su base ideológica común era frágil. Para la década de 1890, Pablo Zárate Willka
gozaba de una extensa influencia política.16
Con todo, las primeras señales de una coali-
ción política entre Pando y Zárate fueron es- 16 Poco se sabe de los años formativos de Pablo Zárate
peranzadoras. En vísperas de la elección de Willka, y su persona sigue rodeada de leyendas riva-
les rosa y negra. En su juicio sostuvo que Sica Sica
1896, se aproximaron mutuamente con una
fue su lugar de nacimiento, aunque probablemente
necesidad y respeto mutuos. Zárate Willka ya nació en la pequeña aldea de Imilla-Imilla, en las
se había establecido a sí mismo como un jefe montañas orientales de esa provincia, en el depar-
aimara alfabeto, ampliamente respetado y que tamento de La Paz. Extendida entre las montañas y
el altiplano, la provincia se halla a mitad de camino
había viajado mucho, al mediar en los conflic-
entre las ciudades de Oruro y La Paz. En 1899 fue
tos por la tierra en distintas comunidades, pre- un campo de batalla entre los ejércitos norteños y
sentando peticiones a los políticos a nombre sureños trenzados en una guerra civil. Pero mucho
En una carta a Pando en vísperas de la elec- que Zárate ofreció entregar provisionalmen-
ción de 1896 aludió a la amplia base campesi- te al Partido Liberal. Y a medida que éste se
na con la cual contaba. La misiva, fechada el volvía a las acciones armadas (luego de otra
27 de junio de 1896, fue escrita en el pueblo derrota electoral en 1896), solicitó a Zárate
de Taraco, a orillas del lago Titicaca. Zárate Willka que movilizara un ejército indígena
Willka había estado ocupado en arreglar dis- con el cual luchar contra los conservadores
putas por tierras entre los hacendados locales (ahora denominados constitucionalistas). Fue
y los miembros de la comunidad, en forma un pacto político de interés, inevitablemente
tal que ambos se beneficiaran mutuamente precario y peligroso.
(él así lo sostuvo). La carta asimismo relata-
ba sus viajes entre otros distritos lacustres y Desde el principio, Pando en realidad jamás lo-
se ofrecía a transmitir los saludos de Pando gró poner al jefe indio bajo su mando directo,
a los demás caciques. Uno de sus siguientes aunque la talla de Zárate Willka fue realzada
destinos era el santuario de Copacabana, cru- por su larga vinculación política con los libera-
zando el lago desde Taraco, en donde rogaría les criollos, no era en modo alguno un simple
a la Virgen que bendijera a Pando. Por últi- cliente. Su lealtad y su base de poder primaria
mo, le pedía un favor: que le diera noticias se arraigaban en las comunidades aimaras del
Un amor
desde Sucre de las deliberaciones del Con- norte, en donde pasó largos años creando re-
desenfrenado greso acerca de las peticiones que él y otros des, mediando y luchando por ellas. (Fig. 3) A
por la libertad
indios habían enviado. La carta revela el tipo medida que la política se iba militarizando en
Antología de la
historia política de relaciones recíprocas que ya se habían es- 1899, Zárate Willka estaba decidido a entrar
de Bolivia
(1825-2020)
tablecido entre ellos incluso antes de que se en la guerra como aliado e igual de Pando. Se
iniciaran las acciones armadas. confirió a sí mismo el título militar combinado
318 de “General de una División en el Ejército Fe-
Entonces, aquí tenemos un vistazo de un hom- deral” y “Comandante en Jefe del Ejército In-
bre aimara alfabeto y bilingüe que había culti- dígena”. Esto refleja su doble identidad: como
Tomo I vado vínculos políticos y de parentesco en los aliado militar de Pando de igual rango, y como
1825-1952
pueblos lacustres del altiplano andino, lejos de jefe supremo de los soldados indios (y, por ex-
su propio hogar. También se había estableci- tensión, de todas las comunidades indígenas).
do a sí mismo como un caudillo e interlocutor Los incipientes ideales de igualdad social y
político en el pueblo de Taraco, entonces a la pluralismo cultural estaban enraizados en estos
defensiva contra el latifundismo rampante. Sus títulos formales. Zárate Willka posteriormente
viajes, sus conexiones políticas y su diplomacia se expresaría en forma más abierta, a través de
habían sentado las bases para el surgimiento sus palabras y sus actos.
de un amplio movimiento político indígena,
Pero si Pando no logró subordinar a Zárate
Willka a su propio mando militar, éste a su vez
antes de eso, Sica Sica ya era legendaria por sus be-
licosas comunidades indígenas: fue la cuna de rebel- tuvo dificultades para contener la violencia
des indígenas y de sucesivos levantamientos en 1781, campesina en medio del caos y la brutalidad
1811 y más recientemente con Melgarejo, en 1871. de la guerra civil. A medida que los ejércitos
Las sensibilidades políticas de Zárate Willka induda-
conservador–constitucionalista y liberal-fede-
blemente fueron influidas por las tradiciones orales
locales sobre el pasado insurgente de Sica Sica. En ral pasaban por las aldeas de Sica Sica y otras
el análisis que sigue de Zárate Willka y la rebelión provincias, cometiendo todo tipo de atroci-
y la rebelión de 1899 estoy en deuda con Ramiro dades, la política partidaria se desvanecía rá-
Condarco Morales por su estudio pionero, Zárate,
pidamente ante la lógica brutal de la guerra
el “temible” Willka, Historia de una rebelión indígena de
1899, 2° ed. (La Paz, 1982). Sin embargo, la síntesis y la supervivencia étnica y de clase. Los des-
interpretativa es mía. plazamientos de las tropas sacrificaban a los
campesinos, sin importar su lealtad política:
“Cada marcha de un ejército lleva (a los cam-
pesinos) el mismo daño y terror que el más
furioso terremoto”, comentaba un reportero
simpatizante en 1895.17
gritaban “¡Viva Pando!”. Pasado cierto punto, cura parroquial: “estamos perdidos padre. Los
la guerra civil quedó sumergida en una rebe- campesinos se han levantado. La guerra no
lión indígena, como la cual Bolivia no había es entre facciones sino entre razas. Vivamos
visto en más de un siglo. a Pando y la Federación, y nos respondieron
“¡Viva Willka!”.18
El punto de quiebre llegó en febrero de 1899,
en el pueblo de Mohoza. Un escuadrón de ca- Hay cierta controversia con respecto al papel
ballería federal bien armado encontró el cami- de Zárate Willka en estos eventos, aunque el
no bloqueado por campesinos hostiles, que les tribunal posteriormente le acusó de haber or-
tomó como rehenes. A lo largo de esa terrible denado la masacre. En las siguientes semanas,
noche, los soldados blancos fueron llevados al él ciertamente siguió profesando su lealtad a la
atrio y al cementerio de la parroquia, donde se causa liberal y efectuó operativos militares en
les ejecutó uno por uno. Varios pobladores de muchos lugares. Pero como se diera cuenta el
los dos lados de la divisoria partidaria también condenado oficial de caballería, los eventos de
Mohoza reflejaban la transformación radical
Bajo la
Constitución de
1826 que organiza
y constituye la
nación boliviana
(1825-1880)
323
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Primer periodo
Bajo la
Constitución de
1826 que organiza
y constituye la
nación boliviana
(1825-1880)
325
Conflictos agrarios,
pactos peligrosos,
e indios
insurgentes,
1860-1900
SEGUNDO PERIODO
La Constitución no es un instrumento para que el facto, que en muchos casos tomaron de forma Segundo periodo
gobierno controle al pueblo, es un instrumento para
violenta el poder, finalmente para 1880 una Bajo la
que el pueblo controle al gobierno - para que no Constitución de
venga a dominar nuestras vidas e intereses. administración constitucional. Claramente la 1880 que marca
el periodo liberal
Patrick Henry, 1736-1799 crisis política, los golpes de Estado y la cons- (1880-1938)
tante rotación de mandatarios de gobierno
eran el común denominador de un país que 329
E
n la nueva República de Bolivia en- no terminaba de configurarse como nación y
tre 1826 y 1880 se promulgaron once estado; y sus problemas en lo institucional, de
textos constitucionales, en cincuenta y gestión y en lo económico lo hacían cada vez El periodo liberal
y la Constitución
cinco años de vida independiente. Por tanto, ser merecedor al apelativo de la economía más de 1880
(1880-1938)
cada constitución tenía un promedio de im- precaria de Latinoamérica en el siglo XIX.
plementación de casi cinco años; esto impli-
caba que cada administración gubernamental Por otro lado, los mecanismos de la aproba-
redactaba su propia constitución política y ello ción constitucional también fueron diversos
atentaba en contra de la estabilidad institucio- en 1826 un congreso General Constituyente1
nal y fomentaba la promulgación de un sin
número de normativa adicional (leyes, decre-
tos, resoluciones, entre otros) que no tenían el 1 El Congreso Constituyente es conocido también
tiempo suficiente de aplicación e implemen- jurídicamente como: Congreso General Constitu-
yente o Convención Constituyente en la termino-
tación, por lo que era muy difícil apreciar los
logía constitucional y es un mecanismo y organismo
beneficios y desventajas de la Carta Magna y de representantes elegidos y nombrados por el pue-
sus disposiciones conexas. blo, cuya función es redactar una nueva Constitu-
ción Política del Estado. Consta de plenos poderes
o poder constituyente al que deben someterse todas
Ello también derivaba de la constante ines-
las instituciones públicas. Bajo este mecanismo, la
tabilidad política durante el siglo XIX en la Constitución, una vez redactada, puede reformarse.
República de Bolivia. Entre 1826 y 1834 se Para ello es necesario una ley del Congreso dictada
instalaron tres administraciones constitucio- por una mayoría especial que declara que es nece-
sario reformar la Constitución y qué partes se van
nales (Tabla 1), luego y por un largo período
a modificar. Una nueva Convención Constituyente
entre 1839 y 1878 siete administraciones de es convocada para hacer la reforma.
Tabla 1
Las Constituciones entre 1826 y 1880
sanciona la primera Constitución Política del se aprueban las constituciones de 1831, 1861,
Estado (CPE), posteriormente mediante el me- 1868, 1871 y 1878. Dos congresos constitu-
canismo de la asamblea general constituyente2 yentes en 1834 y 1839 aprueban la tercera y
cuarta CPE, finalmente para el siglo XIX tres
convenciones nacionales3 sancionan las cons-
2 La Asamblea Constituyente o constitucional es una
tituciones de 1843, 1851 y 1880.
reunión a nivel nacional de representantes popu-
lares elegidos (en algunos casos por voto popular),
que asumen el único objetivo de acordar reglas que
regirán, en el futuro, la relación entre gobernantes y Estado, que modificarán los prototipos ya existen-
gobernados, así como el funcionamiento, distribu- tes”. En este entendido, la Asamblea Constituyente
ción del poder y fundamento de su sistema político se constituye en un mecanismo popular y demo-
y social. Tiene como función redactar una nueva crático, para la configuración de un nuevo modelo
constitución, otorgando para ello a la asamblea de de legislación constitucional y de organización del
plenos poderes o poder constituyente al que deben Estado.
someterse todas las instituciones públicas.La cien- 3 Convención Nacional, fue el nombre con el que se
cia política la define como la “reunión de personas, dio a la Asamblea Legislativa del 21 de septiembre
que simbolizan el pueblo ejerciendo su autoridad de 1792 al 26 de octubre de 1795, durante la Re-
de mandatario, que tienen a su cargo ejercer la fa- volución Francesa. En francés, “Convention Na-
cultad de legislar, para editar una nueva ley funda- tionale” se constituyó en la institución principal
mental y las nuevas líneas de la organización de un de la Primera República Francesa. En realidad, la
La segunda y tercera Constitución republicana: primero: desapareció el carácter
de 1831 y 1834 vitalicio del presidente; segundo: se determinó
tres poderes del estado; el Legislativo (ejerci-
La historia de los cambios constitucionales en do por dos cámaras), Ejecutivo (ejercido por
Bolivia está correlacionada con la actitud del un presidente y ministros de Estado) y Judicial
mandatario de Estado por elaborar una cons- (ejercido por las cortes y jueces); tercero: se
titución a la medida de sus intereses. Ordoñez creó un Consejo de Estado. Previo a promul-
y Crespo (1912) mencionaban que Andrés de garse la CPE, la Asamblea nombró presidente
Santa Cruz4 se había investido de un poder provisorio a Santa Cruz el 15 de julio de 18317.
omnímodo5 y se atribuyó la facultad de modi- Bajo la modalidad de Congreso Constituyente
ficar las leyes y crear otras nuevas acorde a sus en Sucre el 16 de octubre 1834 se reunieron
necesidades. Para Ordoñez y Crespo (1912) la los representantes con el objetivo de sancionar
medida más radical en este orden fue la abro- la tercera constitución la cual fue promulga-
gación completa de la Constitución Política da el 20 de octubre. Ordoñez y Crespo (1912)
del Estado de 1826, la cual fue sustituida por consideraban que la constitución del 34 dife-
un “Estatuto Provisorio”. Santa Cruz no podía ría muy poco de la del año de 1831; lo más
seguir por más tiempo al mando de la repú- sustantivo estuvo referido a las modificaciones
blica amparado por una dictadura provisional, de las carteras de Estado y organización de la
por lo que convocó en 1831 a una asamblea6 administración pública. Segundo periodo
La Convención Nacional
Un amor
y la Constitución de 1843 La Convención Nacional
desenfrenado y la sexta Constitución Política
por la libertad
Esta Constitución se sancionó en la adminis- del Estado (1851)
Antología de la
historia política tración del General José Ballivián9, quien el 27
de Bolivia
(1825-2020)
de septiembre de 1841 en Tiahuanaco declaró: Desde la Independencia de Bolivia, ésta era la
“insubsistente, sin valor ni fuerza” a las cons- sexta Constitución, la cual fue sancionada por
332 tituciones de 1834 y 1839 en conformidad al la Convención Nacional el 20 de septiembre
acuerdo de los comicios populares que las ha- y promulgada por Manuel Isidoro Belzu el 21
bían abrogado. El 18 de abril de 1842 emitió de septiembre de 1851. Este texto constitucio-
Tomo I un decreto de convocatoria a la Convención nal era muy similar a la Constitución de 1843;
1825-1952
Nacional que debía reunirse en abril 1843 y se aumentó la autoridad del Poder Ejecutivo
cuyo mandato consistía en revisar y reformar sobre los demás poderes; se abolió de manera
las constituciones anteriores, establecer las definitiva la esclavitud en Bolivia; se eliminó
carteras de estado, evaluar los actos del go- las municipalidades; se otorgó facultades al
bierno y nombrar al jefe del poder Ejecutivo, senado para nombrar a los magistrados de la
entre otras disposiciones normativas. Corte Suprema. El 4 de octubre se clausura-
ron las sesiones de la Convención Nacional de
Reunida la Convención Nacional el 23 de 1851.
abril, ratificó las elecciones populares y nom-
bró presidente de la República al General
José Ballivián. La Constitución de 1843 fue La Asamblea Nacional Constituyente
la quinta que se promulgó en tan solo 17 y la Constitución de 1861
años, desde 1826. Entre sus disposiciones
La séptima Constitución Política del Esta-
había sido nombrado por la Asamblea del Alto Perú
do fue sancionada por la Asamblea Nacio-
como Protector. Por su parte, Santa Cruz fue un- nal Constituyente del 29 de julio de 1861 y
gido como Supremo Protector de los Estados Sur promulgada por José María de Achá el 5 de
y Nor peruanos en 1836, antes de ser proclamado agosto del mismo año. En el ámbito legisla-
formalmente como Protector de la Confederación
Perú-boliviana en 1837.
tivo estableció el sistema unicameral y resta-
9 Presidente de Bolivia entre 1841-1848. bleció el Consejo de Estado. La Constitución
permitió que el congreso apruebe tratados y menos gobierno” y como primera medida
internacionales de paz y amistad con Espa- devolvió las tierras de comunidad a los indí-
ña, Estados Unidos y el Reino de Bélgica; se genas, reglamentó las elecciones, sustituyó la
dictó una ley de imprenta; se estableció una moneda “Melgarejo” por la del peso bolivia-
estructura de impuestos que sustituyó el im- no, estableció un gabinete parlamentario que
puesto catastral a los diezmos y primicias; en anuló los actos de la administración de Mel-
el ámbito político estableció una amnistía garejo y luego de discutirse tres proyectos de
para que los refugiados políticos regresen al constitución Agustín Morales el 18 de octubre
país. La Asamblea clausuró sesiones el 15 de de 1871 aprobó la novena Constitución de la
agosto de 1861. República de Bolivia que introduce la idea del
sistema federal, pero la Constitución adoptó
la forma unitaria como sistema administrati-
La octava Constitución de 1868 vo. Sin embargo, se mantuvo en sus artículos
a partir de la Asamblea Nacional el espíritu de la organización de la adminis-
Constituyente tración pública (Hacienda, Justicia y Culto,
Instrucción e Industria, Guerra, Gobierno y
Cuando el presidente Mariano Melgarejo Relaciones Exteriores) de las anteriores cons-
(1864-1871) se proclamó presidente de la Re- tituciones.
pública echó por tierra las instituciones legales Segundo periodo
E
Constitución de
ste artículo aborda dos temas interre- las dimensiones instituyente e institucionali- 1880 que marca
el periodo liberal
lacionados y complementarios en el zadora de los partidos, su capacidad de politi- (1880-1938)
periodo que transcurre desde la Gue- zación social a través de las elecciones y la cen-
rra del Pacífico hasta la Guerra del Chaco: las tralidad adquirida por el acto electoral como 335
dinámicas del sistema de partidos políticos y elemento generador de discusión, negociación
y consenso políticos. Consta de tres acápites.
1 Este artículo se inscribe en el proyecto de investi- Mientras en el primero se realizan precisiones La contienda
electoral entre dos
gación HAR2016-77609-P. Está confeccionado sin conceptuales historizadas sobre liberalismo, guerras
notas ya que sintetiza parte de lo planteado y citado
democracia, ciudadanía y voto censitario, en
en: Marta Irurozqui, La armonía de las desigualdades.
Elites y conflictos de poder en Bolivia, 1880-1920 (Cus- el segundo se caracterizan a los partidos con-
co: Coedición CSIC-CBC (Centro Bartolomé de Las tenientes en las elecciones presidenciales, y en
Casas, 1994); Marta Irurozqui, “A bala, piedra y palo”. el tercero se relatan dos actuaciones partida-
La construcción de la ciudadanía política en Bolivia, 1826-
rias: los acuerdos/alianzas entre agrupaciones
1952 (La Paz: Biblioteca del Bicentenario de Bolivia/
Vicepresidencia del Estado-presidencia de la asam- políticas; y las narrativas electorales en torno
blea Legislativa Plurinacional, 2019); a los malos candidatos y a los malos electores.
Marta Irurozqui, La ciudadanía en debate en América
Latina. Discusiones historiográficas y una propuesta teó-
Palabras clave: Elecciones, partidos políticos,
rica sobre el valor público de la infracción electoral (Lima:
IEP, 2005);
politización, narrativas partidarias.
Marta Irurozqui, La alquimia democrática en Bolivia,
1825-1879. Ciudadanos y procedimientos representativos.
Una reflexión conceptual sobre la democracia (Frankfurt:
Introducción
Editora Académica Española, 2011);
Marta Irurozqui, Ciudadanos armados de ley. A propósi-
to de la violencia en Bolivia, 1839-1875 (La Paz-Lima: Aunque la cuestión nacional y sus actores
IFEA-Plural, 2018); resultan omnipresentes en la historiografía
Marta Irurozqui (ed.), El tribunal de la soberanía. El po-
bolivianista, los temas sobre la ciudadanía,
der Legislativo en la conformación de los Estados: América
Latina, siglo XIX (Madrid, Marcial Pons-Universidad las elecciones y los conflictos anexos duran-
Michoacana de San Nicolás de Hidalgo, 2020). te el periodo de 1881-1925 no han tenido un
amplio desarrollo, pesando sobre ellos con- Este artículo aborda dos temas interrelacio-
ceptos totalizadores e ideológicos –que dan nados y complementarios en el periodo que
mucho por sentado y explican poco– como transcurre desde la Guerra del Pacífico (1879-
Estado oligárquico, articulación feudal-capi- 1883) hasta la Guerra del Chaco (1932-1935):
talista o colonialismo interno. Mediante ellos las dinámicas del sistema de partidos políticos
no solo se ha encorsetado de modo maniqueo y la naturaleza de la participación electoral de
y prejuicioso la acción de los actores sociales, la población boliviana. El objetivo es subrayar
sino que se ha descalificado su devenir nacio- las dimensiones instituyente e institucionali-
nal con nociones epistemológicas anacrónicas zadora de los partidos, su capacidad de politi-
poco sensibles a la historicidad de la sociedad zación social a través de las elecciones y la cen-
de la época. tralidad adquirida por el acto electoral como
elemento generador de discusión, negociación
Por fortuna, esa lectura ideológica y ahistórica y consenso políticos. Respecto al primer tema,
no ha impedido que a través de temas como se aborda el impacto de las claves negociadas
la participación política en clave de diversidad y armadas de la contienda partidaria en la re-
regional, la relación entre ciencia y elites, la organización de la vida pública boliviana y en
modernización y las políticas educativas, los la reestructuración institucionalizada de las
Un amor
proyectos nacionales y la creación literaria y rivalidades intra-elite(s). Respecto al segundo,
desenfrenado periodística, las celebraciones patrióticas, el a través de la imbricación de la sociedad en la
por la libertad
asociacionismo, la categoría mestizo/cholo, competencia entre partidos se insistirá en que
Antología de la
historia política el empoderamiento indio a través de rutinas esa experiencia política, tanto buscada como
de Bolivia
(1825-2020)
políticas y jurídicas, la inserción de Bolivia en sobrevenida, transfiguró la percepción pública
el mercado mundial o las experiencias políti- y la existencia social de segmentos de la pobla-
336 co-culturales asociadas a la crisis del libera- ción, en lo relativo a la disminución de des-
lismo, se haya discutido y discuta de manera igualdades de clase, etnia y género o al replan-
renovada la disputa por el ejercicio de poder teamiento de su papel en el proyecto nacional.
Tomo I en la nación boliviana y por el sentido étni- De la multiplicidad de dichos segmentos po-
1825-1952
co, regional o social de la misma, sus actores o blacionales se ha escogido al urbano mestizo/
el modelo de Estado.2 El resultado del debate cholo por representar un sector intermedio,
historiográfico ha sido un replanteamiento de activamente involucrado en la vida pública y
la política y lo político en la historia boliviana, que funge de artesano/obrero y de grupo co-
con la consiguiente asociación de esa dimen- mercial emergente, además de por problema-
sión pública a la cuestión social.3 tizar la oposición criollo-indígena.
2 Véanse como ejemplos los trabajos publicados des- (1880-1930) (La Paz, Carrera de Historia, UM-
de 2009 por: Rossana Barragán, Marten Brienen, SA-Instituto de Investigaciones Literarias, UMSA,
Robert Brockmann, Eugenia Bridikhina, Magdale- 2019), que recoge estudios recientes de Huascar
na Cajias, Roberto Choque, Isabelle Combés, Pilar Rodríguez, Santusa Marca, Fernando Hurtado,
García Jordán, Pilar Gamarra, Eduardo Godoy, Ivana Molina, Juan Anaya, José Orsag, Daniel H.
Laura Gotkowitz, Anna Guiteras, Gabrielle Kuen- Luján, Pilar Mendieta, Fernanda Carrasco, Freddy
zli, Ana María Lema, Françoise Martinez, Ivana R. Vargas y Pedro Brusiloff. Consúltese también
Margarucci, Pilar Mendieta, Giovana Ninachoque, Iván Velásquez-Castellanos y Napoleón Pache-
Paula Peña, Hernán Pruden, Luis Ríos, Huascar co Torrico (coord.), Un siglo de economía en Bolivia
Rodríguez, Nivardo Rodriguez, Beatriz Rossels, Jo- (1900-2015), Tópicos de historia económica. Tomo I
sefa Salmón, Andrey Schelchkov Ximena Soruco, (La Paz, Fundación Konrad Adenauer, 2017) o
Pablo Stefanoni, Fernando Unzueta, Gary Van Va- los textos de Carlos Schlink y Alexis Pérez en Iván
len o Matthew Gildner. Velásquez-Castellanos y Napoleón Pacheco Torri-
3 Remito al libro de Ximena Soruco, Kurmi Soto y co (coord.), Un siglo de economía en Bolivia (1900-
Cristina Machicado, coords., Vértigo liberal. Socie- 2015), Tópicos de historia económica. Tomo II (La Paz,
dad, economía y literatura en la Bolivia de entreguerras Fundación Konrad Adenauer, 2017).
Aunque la cronología de este artículo está muestran y caracterizan a los partidos con-
marcada por dos guerras, el escenario concre- tenientes en las elecciones presidenciales, en
to del mismo son las elecciones presidenciales el tercero se relatan someramente dos actua-
realizadas desde 1884 a 1925, ya que durante ciones partidarias para obtener el poder en las
este periodo la vida partidaria y los comicios urnas: los acuerdos/alianzas interpartidarios; y
lideraron el proceso de politización de la po- las narrativas electorales en torno a los malos
blación. Si bien continuó la movilización de candidatos y a los malos electores.
votantes para las elecciones presidenciales
(1931, 1940, 1947 y 1951), congresales y mu-
nicipales, fueron otros los medios que propi- 1. Algunas precisiones conceptuales
ciaron tanto el aprendizaje como el desmonta- sobre liberalismo, democracia,
je del sistema representativo. La temática de la ciudadanía y voto censitario
politización permite reflexionar, más allá del
caso boliviano, sobre cómo el conflicto polí- Como toda cronología, el periodo entre dos
tico generó cambio social y cómo el conflicto guerras internacionales, la Guerra del Pacífico
social produjo cambio político. Ambas diná- y la Guerra del Chaco, constituye un artificio
micas conexas dejan expuestos, de un lado, histórico basado en criterios contingentes y
los vínculos entre los procesos electorales y la circunstanciales ligados a un uso ideológico,
violencia política y, por tanto, la no oposición político e identitario del pasado tanto pre- Segundo periodo
entre el ciudadano en armas y el ciudadano térito como presente. En el caso trabajado, Bajo la
Constitución de
elector; y, de otro, la fuerza de los sectores no ambos episodios bélicos suelen interpretarse 1880 que marca
el periodo liberal
poderosos en la definición del orden políti- historiográficamente fundamentales para en- (1880-1938)
co, ya que la transformación de los regímenes tender el devenir nacional boliviano en claves
conservador y liberal no solo obedeció a los de ruptura y cambio. Sin embargo, aunque se 337
conflictos internos que lo atravesaban, sino respeta ese marco cronológico por razones de
también de la acción política que diversos ac- relato, es preciso matizar su impostada carga
tores desplegaron en múltiples espacios y me- de transformación radical evolutiva con lo La contienda
electoral entre dos
diante una variedad de actuaciones. Todo ello anterior y lo posterior, ya que esa percepción guerras
tuvo lugar en un contexto de sufragio restrin- rupturista impide una comprensión procesual
gido o censitario que, pese a sus limitaciones y relacionada de la historia boliviana.
legales en términos de participación, no pudo
impedirla debido a la infracción electoral o ac- La importancia e impacto nacionales de la
tividades irregulares, ilícitas o fraudulentas en Guerra del Pacífico en la reconfiguración
torno al voto. territorial de Bolivia ha creado una disconti-
nuidad ficticia con el periodo decimonónico
Para discutir el importante peso que adquirió anterior (1825-1879), en parte motivada por
la vía electoral en la comprensión del juego la necesidad historiográfica coetánea de dar
y la competencia de los partidos no solo de una explicación a la pérdida del litoral marí-
cara al funcionamiento de la vida política, sino timo y de subvertir mediante una narrativa
también en lo relativo a la visibilización públi- de modernización el impacto de ésta. Desde
ca de diversos sectores sociales, este texto se luego la guerra aceleró la sublimación, la ma-
divide en tres acápites. En el primero se desa- terialización y la consolidación de tendencias
rrollan un conjunto de precisiones conceptua- sociales y actuaciones políticas ya vigentes
les historizadas sobre liberalismo, democracia, y favoreció que éstas dieran lugar a nuevos
ciudadanía y voto censitario con el propósito modos dominantes de resolver políticamente
de matizar equívocos o absolutos epistemo- los conflictos sociales. Pero eso no debe leer-
lógicos. Mientras en el segundo apartado se se como una descalificación evolutiva de los
haceres y saberes políticos anteriores o como
un momento de superioridad y superación
históricas. Para explicar desde un perspectiva
relacional y procesual parte de las dinámicas
que se imponen temporalmente entre las dos
guerras mencionadas, este apartado contiene
un conjunto de precisiones conceptuales sobre
las nociones de liberalismo y democracia vi-
gentes desde la fundación republicana de Bo-
livia, así como una lectura de la ciudadanía en
relación al voto censitario.
Doctrinario, Radical, Republicano, Republi- desarrollo fueron objeto de un amplio y dura- Bajo la
Constitución de
cano Genuino o Nacionalista- compartieron dero debate parlamentario y público. 1880 que marca
el periodo liberal
para acceder al gobierno los postulados libe- (1880-1938)
rales mencionados con independencia de que En el caso boliviano desde la primera constitu-
solo el Partido Liberal llevase tal nombre. Y ción se sucedieron las denominaciones de go- 339
si antes de la Guerra del Pacífico coexistían bierno: “popular representativo” (1826, 1831,
diferentes maneras partidarias de ser liberal 1839, 1843, 1851), “republicano popular re-
relacionadas con la velocidad en que se espe- presentativo” (1834), “forma representativa” La contienda
electoral entre dos
raba que se concretase el cambio histórico y (1861), “popular, representativo y democrático” guerras
con la dirección que debía tomar el mismo, (1868), “República democrático representativa”
en el periodo post1880 el liberalismo siguió (1871, 1878, 1880, 1938, 1945, 1947). Durante
siendo una doctrina compartida, cuyos con- las primeras décadas republicanas, el concep-
tenidos consensuados a favor del progreso to de democracia o “gobierno del pueblo” se
material de la sociedad y la reducción de la comprendía como un sistema representativo en
brecha cultural poco tuvieron que ver con las el que la titularidad del poder y el ejercicio del
diferencias partidarias. Esa situación comen- mismo no se percibían divididos como hoy en
zó a cambiar con la crítica al mismo en clave día, aunque se admitiese que funcionarios elec-
nacionalista desde los credos socialistas y fas- tos a través de comicios periódicos asumieran
cistas, que cuestionaban la “democracia bur- la representación de los intereses y/u opiniones
guesa” y el sistema de partidos al entender la del pueblo en el marco del imperio de la ley. Es
técnica electoral una corruptora del principio decir, el pueblo se sentía titular originario de
político de la soberanía popular y el sistema la soberanía y por lo tanto autorizado en todo
parlamentario un falseador de la representa- momento a ejercerla reapropiándosela. Prima-
ción. Como solución, los partidos Republi- ba, así, una modalidad democrática que: prime-
cano y Nacionalista buscaron formas organi- ro, no se limitaba al voto; segundo, no cedía a
cistas e identitarias de representación en las los cargos electos/facciones/partidos una inter-
que el colectivo subsumiera y disciplinara el mediación y una representación plenas debido
egoísmo del individuo, y el Estado estuviese al ejercicio de los principios de deliberación y
vigilancia permanentes de los asuntos públicos El problemático equilibrio entre libertad y
y del derecho de petición ejecutado colectiva e orden público en el tema de la defensa de la
individualmente; y, tercero, reconocía el recur- patria presente en la práctica de la ciudada-
so del pueblo a la revolución en caso de abuso nía armada expresaba tanto la tensión entre el
de autoridad, violación o perversión del orden principio de soberanía popular y el principio
legal y/o del texto constitucional que lo soste- de autoridad (no autoritarismo), como la di-
nía, estando dicho recurso personificado en la fícil construcción de una ponderación entre
acción del ciudadano armado. ellos. La posterior hegemonía de la demo-
cracia pacífica sobre la democracia armada
Esa concepción explica que la democracia estuvo encaminada a lograrla. No tuvo una
quedase tipificada documentalmente de dos estricta traducción constitucional, pero sí se
modos: democracia pacífica y democracia ar- relacionó con una progresiva deslegitimiza-
mada. La primera estaba referida a las trans- ción de la violencia civil y militar a raíz de
formaciones del orden político por parte de la los problemas de inestabilidad e ingoberna-
sociedad a través de los comicios populares, las bilidad nacionales que el recurso revolucio-
asociaciones, la prensa o los escritos de peti- nario conllevaba. Los episodios de la Semana
ción. La segunda hacía mención al poder mar- Magna de Cochabamba (1874-1875) y de la
Un amor
cial desplegado por el pueblo cuando la ley, en revolución Federal de Andrés Ibáñez (1876-
desenfrenado tanto expresión de su voluntad soberana era 1877) generaron un amplio debate político y
por la libertad
vulnerada –por un acto de tiranía u abuso de público sobre el uso de la fuerza, sobre cómo
Antología de la
historia política poder por parte del gobierno, autoridades o se articulaba la conducta violenta con la cons-
de Bolivia
(1825-2020)
sujetos– y los mecanismos asociados a la de- trucción nacional y quiénes controlaban, re-
mocracia pacífica no lograban solventarlo. La gulaban o materializaban su ejercicio, que
340 violencia, expresada en revoluciones, rebelio- concluyó con la criminalización legal de los
nes, asonadas o golpes de Estado y encarnada sublevados a través de la aplicación del de-
en la ciudadanía armada, explicaba la conni- recho penal (y no del derecho de gentes); lo
Tomo I vencia de civiles y militares en tales momen- que a partir de 1884 se interpretó como una
1825-1952
tos, no siendo el empleo de las armas mono- “revolución del derecho”.
polio único del Ejército, sino también una
potestad constitucional de los civiles que los Los cambios en la percepción legal y judicial
llevó a promover, organizar y liderar pronun- del acto revolucionario, sumados al golpe de
ciamientos revolucionarios, a hacerse cargo de Estado de Hilarión Daza (1876-1879) y al
motines cuartelarios o a desarmar a los milita- fracaso de la iniciativa bélica de su gobierno,
res. Y esto sucedía porque la violencia revolu- ocasionaron una sublimación del principio de
cionaria respondía a la premisa constitucional autoridad sobre el de soberanía nacional. Ello
“de seguridad o asociación para la seguridad”, se expresó en una aceleración del proceso de
reconociéndose como un ejercicio del derecho desmilitarización de la sociedad y, por tanto,
o como un poder con fines jurídicos, destina- en un esfuerzo colectivo de resolución de la
do tanto a conservar la legalidad establecida competencia política a través de las eleccio-
tras la Independencia, como a crear una nue- nes. Y si en la década de 1880 ello condujo a
va. Y, si bien el código penal de 1834 legisla- la consolidación de un modelo de democracia
ba en materia de rebelión, sedición y motín, cuya legitimidad se asentaba en las urnas, en la
desde 1826 la norma constitucional sobre la década de 1920, desde una perspectiva antili-
seguridad de la nación estaba por encima de beral que insistía en los males de la democra-
lo legislado en materia de violencia, pues se la cia representativa y la inoperatividad social de
reconocía con un grado superior de legalidad los partidos, se cuestionó la efectividad de la
frente al resto de leyes. soberanía popular a través del voto.
El entendimiento de la democracia bajo la dua- del voto solo debían exigir el sufragio univer-
lidad de armada y pacífica incide en la idea de sal, no se produjeron tales peticiones hasta la
que desde la fundación republicana de Bolivia segunda década del siglo XX y de un modo ti-
la ciudadanía- además de ser a nivel sustantivo bio. En vez de reivindicar el sufragio univer-
compatible con prácticas comunitarias y exclu- sal, dieron por necesarios para garantizar el
yentes por estar atravesado su universalismo, libre sufragio los requisitos del régimen censi-
individualismo e igualdad por los valores y las tario, siendo su objetivo fundamental demos-
lecturas e interpretaciones contextuales- no se trar a través de la legislación que los cumplían
restringió al acto de votar, pudiendo ser social- o exigir a las autoridades que desarrollasen las
mente reconocido como ciudadano aquel suje- medidas necesarias para que pudieran hacerlo.
to que contribuyese al bienestar de lo público Este doble gesto tuvo dos consecuencias. Por
con impuestos, trabajo u armas. Sin embargo, un lado, al no pedir la ampliación del sufragio,
la hegemonía de la democracia pacífica o de- dieron por válida la existencia en la sociedad
mocracia electoral a partir de la década de 1880 de elementos diferenciadores y de ese modo
hizo que el sufragio masculino y censitario o reafirmaron una lógica de la distinción. Por
restringido, presente con leves variaciones des- otro, para combatir la discriminación de la
de la Constitución de 1826 hasta el Decreto que no querían ser objeto, modificar la inde-
del 21 de julio de 1952, opacase esa compren- terminación de su estatus y probar que podían
sión compleja de la ciudadanía y se asociase ser considerados ciudadanos, recurrieron a un Segundo periodo
unilateralmente la misma al acto de votar. conocimiento letrado de las leyes y códigos de Bajo la
Constitución de
la República y de los principios fundamentales 1880 que marca
el periodo liberal
La hegemonía de la modalidad democrática de la democracia, que combinaron con prác- (1880-1938)
electoral no debe interpretarse como la des- ticas clientelares, actos de rebelión, adhesio-
aparición del escenario público de una pobla- nes a los partidos políticos y proyectos educa- 341
ción acostumbrada a intervenir en la vida po- tivos. Tal diversidad de actuaciones redundó
lítica del país, ni tampoco deducirse que la(s) en mostrar que el proceso electoral, aparte de
elite(s) fueron las únicas y principales prota- no constituir una farsa, no se redujo al acto La contienda
electoral entre dos
gonistas del momento electoral y éste acotarse de votar, sino que estuvo referido a la cons- guerras
zas con los sectores chilenos, ya que muchos titucional de cuatro años que la elección del
de ellos poseían intereses comerciales con el presidente y de los dos vicepresidentes sería
sur peruano. Con excepciones, se trataba de responsabilidad de la misma. La Convención
un sector inmerso en la actividad extractiva eligió un gobierno de reconciliación nacional,
de manera más colateral y subsidiaria. En conformado por Campero, Aniceto Arce y
parte ello se debía a que su preeminencia so- Belisario Salinas, como presidente y vicepresi-
cial provenía de la gestión del poder político, dentes, respectivamente. Como por el princi-
con lo que podrían describirse en términos pio de alternabilidad no podían ser reelegidos
muy generales como grupos afines al gobier- en sus cargos, su posterior sustitución se rea-
no descabezado con la Guerra del Pacífico, a lizó en las elecciones de 1884 mediante sufra-
sectores beneficiados en términos de ascenso gio popular directo. Se trató de un régimen
y remodelación social por la dinámica po- de transición properuano y guerrista, pero
lítica de los años anteriores o al estamento carente de legitimidad pública para poner en
militar. Dado que la derrota señalaba de ma- práctica respuestas políticas no consensuadas
nera directa a éste, no es de extrañar que la con los opositores.
mayoría de sus miembros defendiesen la con-
tinuidad de la guerra como forma de volver Con el objetivo de favorecer dicho consenso
a legitimar su posición y utilizaran sus redes y lograr la estabilidad necesaria para reini-
familiares y posición social para rearticular y ciar una refundación republicana en clave de
democracia pacífica, Campero nombró un Tras la Guerra Federal de 1899, se inició el
gabinete multipartidista, manteniéndose el periodo de hegemonía del Partido Liberal. Al
tema de la guerra como fuente de conflictos contrario de lo sucedido durante la etapa ante-
políticos. Tras reajustes en el gabinete de go- rior, denominada conservadora, los enfrenta-
bierno, exilios, cambios en la portavocía de los mientos partidistas iniciados desde las eleccio-
partidos y divisiones en los mismos, la discu- nes de 1904 fueron resultado de escisiones en
sión se centró en la forma en que se debían el seno del partido gobernante, y no de la apa-
llevar a cabo las negociaciones de paz con rición de nuevos partidos con ideologías alter-
Chile. El resultado fue una tregua negociada nativas, a raíz de discusiones en torno a la de-
que no dejó satisfecha a ninguna de las partes, mocratización del poder dentro del partido, a
pero que permitió superar el tema de la guerra la práctica interna de ascensos y candidaturas,
como argumento partidario. a los acuerdos internacionales o a la política de
empréstitos extranjeros. De cara a esa primera
Como consecuencia del debilitamiento de la contienda electoral el Partido Liberal se divi-
oposición pacifista y guerrista, la vida parti- dió en dos facciones: la Doctrinaria, que apo-
daria se organizó a partir de nuevas divisiones yaba al coronel Ismael Montes; y la Puritana,
y denominaciones. De un lado, en los Con- a favor del primer vicepresidente Lucio Pérez
Un amor
gresos de 1882 y 1883 y de cara a las elec- Velasco. Esta última se convirtió en el Partido
desenfrenado ciones presidenciales de 1884, bajo el lema Liberal Puritano al que se afiliaron, junto a li-
por la libertad
de orden y progreso la fórmula pacifista se berales federalistas descontentos, los antiguos
Antología de la
historia política dividió en el Partido Demócrata, el Partido miembros del Partido Conservador. Con el
de Bolivia
(1825-2020)
Nacional y el Partido Constitucional, lidera- triunfo de Montes, los puritanos se retiraron
dos respectivamente por los propietarios mi- de la contienda, aunque en 1908 concedieron
344 neros, Gregorio Pacheco y Aniceto Arce, y su apoyo al liberal independiente Fernando
por un abogado de varias compañías mineras Eloy Guachalla. Su muerte en vísperas de la
y accionista de las mismas, Mariano Baptista, investidura oficial dejó atrás la posibilidad de
Tomo I aglutinándose los dos últimos en las eleccio- consenso entre partidos y dio paso a la presi-
1825-1952
nes de 1888 como Partido Constitucional y dencia de Eliodoro Villazón, representante de
en las 1892 como Partido Conservador, tras los montistas o liberales doctrinarios.
un acuerdo entre sus líderes para sucederse
en la jefatura del país. De otro, mientras Arce En 1914, los grupos conservador y liberal pu-
y Baptista habían mantenido vinculaciones ritano, junto con nuevas deserciones liberales,
gubernamentales con el Partido Rojo, Pache- se organizaron en la Unión Republicana, que
co había sido cercano al círculo de Casimiro se convertiría en el Partido Republicano en
Corral, explicando dichas filiaciones la natu- la Convención de Oruro de 1915. Sus líderes
raleza de sus adeptos y de sus apoyos electo- más representativos fueron Daniel Salamanca,
rales, además de muchos de los nombres de José María Escalier y Bautista Saavedra. Tras
los integrantes de los gabinetes ministeriales. los triunfos electorales de los montistas en
La fórmula guerrista había estado defendida 1914 y 1917, los republicanos dirigieron el 12
por el general Eliodoro Camacho, también de julio de 1920 una revuelta en La Paz que
cercano al Partido Rojo y uno de los respon- terminó con el gobierno de José Gutiérrez
sables de la caída de Daza tras la derrota de Guerra. Se formó una Junta Revolucionaria
Camarones. Dio lugar al Partido Liberal, de Gobierno, en cuyo seno los tres líderes se
cuyas bases fueron publicadas en Oruro en disputaron la presidencia, resultando ganador
1883, aunque el documento que sirvió como Saavedra, quien fue elegido presidente el 24
sustento del programa oficial del partido da- de enero de 1921. Salamanca y Escalier no
taría de 1885. aceptaron su elección y el 29 de octubre de
1921 fundaron, en una convención especial de un mismo grupo o compartidas por dife-
en Oruro, la Coalición Nacional o Partido rentes segmentos sociales. Los partidos ex-
Republicano Genuino, que aglutinó a repu- presaban fundamentalmente una ordenación
blicanos descontentos, liberales y antiguos de las voluntades populares y una dinámica de
conservadores. El resultado de las elecciones competencia entre elite(s),4 siendo esta última
de 1925 favoreció al candidato del gobierno, multiforme y estando abierta a un activo siste-
José Gabino Villanueva, cuyo nombramiento ma de cooptación social.
se anuló, siendo más tarde elegido presidente
Hernando Siles. En 1927, éste rompió con el Las distintas denominaciones partidarias
saavedrismo y fundó el Partido de la Unión tampoco respondían a un compromiso doc-
Nacional o Partido Nacionalista. trinario estricto, aunque cada partido tuviese
horizontes concretos de actuación programá-
Aunque la mayoría los partidos post1880 no tica. Más bien expresaban la búsqueda de un
llevaban el nombre de sus líderes, eso no sig- refrendo divisorio nominal que tuviese ca-
nificó que las anteriores formaciones políticas rácter y legitimidad universales y que hiciera
se hubiesen reducido a facciones personalistas referencia a valores patrióticos compartidos.
sin entramado organizativo y proyectos de Aunque los nuevos partidos hubiesen hereda-
gobierno o que los personalismos no estuvie- do de sus antecesores las discusiones en torno
ran presentes en las nuevas agrupaciones. Las al modelo de Estado, al régimen territorial y Segundo periodo
diferencias entre los partidos estuvieron suje- a la distribución social del poder, aquello que Bajo la
Constitución de
tas a una progresiva superación de las ideali- les separaba obedecía en muchas ocasiones a 1880 que marca
el periodo liberal
zaciones en que se fundaba el primer actuar cuestiones procedimentales y poseía la mayo- (1880-1938)
republicano, cuyo debate político en pos del ría de las veces una naturaleza coyuntural o de
bien común y sobre capacidad formativa de las oportunidad política. Esto no era contrario a 345
instituciones fue sustituido por el logro de la que las agrupaciones mostraran una tradición
oposición y la mutua articulación de intere- ideológica o apariencia de ésta a partir del ori-
ses siempre singulares, y por un esfuerzo de gen y tradición familiares de sus miembros, La contienda
electoral entre dos
perfeccionamiento de la sociedad mediante el de su devenir profesional o de las violencias guerras
intimidatorias del gobierno y la vuelta de las entre el gobierno y la oposición, además de Bajo la
Constitución de
proclamas liberales en favor de la revolución remitir a estratagemas para derrotar, al con- 1880 que marca
el periodo liberal
como “un hecho natural y sagrado de la pro- trario, reforzaron el proceso electoral como (1880-1938)
pia defensa” que opondría al “rifle mazorque- un escenario de debate sobre lo públicamen-
ro, la horca del pueblo”. te correcto y admisible. En las elecciones 349
de 1908, los partidos contendientes busca-
De cara a las elecciones de 1900 Fernández ron reavivar los esfuerzos de fraternidad de
Alonso insistió en que había sido artífice de un la Unión Liberal y los partidos Liberal y La contienda
electoral entre dos
programa de fusión y que, en caso de volver Constitucional se agruparon en una única guerras
a ganar en las urnas, solicitaría los servicios candidatura de consenso a favor del liberal
de miembros del Partido Liberal para ocu- Fernando Eloy Guachalla. Su muerte el 25
par secretarías de Estado, de manera que los de julio le impidió asumir la presidencia, lo
comicios estarían exentos de la intervención que reinició las hostilidades por la jefatura
oficial y no se emplearían “dineros públicos, del Estado entre constitucionales y liberales.
en grande ni pequeña cantidad, en favorecer El Partido Liberal declaró la necesidad de
el triunfo de candidato alguno”. Aunque el anular las elecciones, prorrogar el mandato
coronel Pando pretendió llegar a un acuer- del presidente Montes y convocar nuevos
do con el Presidente que asegurase “amplia comicios para 1909, mientras que el Parti-
libertad electoral” para generar “una política do Constitucional defendió que el primer
verdaderamente nacional”, la acumulación vicepresidente electo gobernara. El 17 de
de descontentos políticos, conflictos sociales, septiembre el Congreso dio la razón a los
demandas regionales y desgastes partidarios liberales, anuló las elecciones y sancionó la
condujeron a la Guerra Federal que enfrentó continuación de Montes como presidente,
al Partido Liberal con el gobierno con el mo- señalando su obligación de convocar eleccio-
tivo aparente de la Ley de Radicatoria. Si bien nes en 1909. El enfrentamiento entre ambos
los acercamientos partidarios del Fernández partidos impidió reeditar una candidatura de
Alonso no evitaron la guerra, terminada ésta, consenso, obteniendo el triunfo el candidato
el general Pando desarrolló un discurso de liberal, Eliodoro Villazón.
La ausencia de aspirantes del Partido Cons- Guerra protagonizaron un proceso de com-
titucional para la jefatura de la República en petencia que amplió la tradicional campaña
las elecciones de 1913 dio el triunfo de nue- electoral de un año a cuatro y obligó a ambos
vo a Montes. Con el argumento de que el partidos a movilizar un mayor número de par-
montismo reducía el programa liberal al “so- ticipantes y a proponer que el voto fuese obli-
metimiento incondicional a la voluntad del gatorio, además de implicar una remodelación
jefe”, las demandas de renovación partidaria de la estructura de la organización partidaria
crecieron dentro del partido, produciéndose mediante un aumento de clubes, mutuales,
una escisión en sus filas que en 1914 dio lu- reuniones, meetings y desfiles. La competen-
gar a la Unión Republicana. Aunque se debió cia entre liberales y republicanos acrecentó la
a Bautista Saavedra la iniciativa de crearla, incertidumbre sobre los resultados electorales,
fue Daniel Salamanca quien en abril de 1914 al tiempo que propició en el interior de cada
emitió un llamado a los dirigentes liberales partido el desarrollo de criterios organizati-
disidentes del montismo para organizar un vos más democráticos que, a su vez, forzaron
nuevo partido “de defensa nacional contra los a un rediseño del modo de obtener el voto y,
abusos del poder”. La rápida organización de en consecuencia, la dotación a los electores de
cédulas republicanas en todos los centros del nuevos medios para explicitar sus demandas.
Un amor
país y la colaboración de liberales puritanos
desenfrenado y de constitucionales implicó que, a fines de Pese al triunfo de Gutiérrez Guerra, el des-
por la libertad
1914, el nuevo partido contara con la suficien- contento político le obligó a una serie de pac-
Antología de la
historia política te organización y cohesión para convocar una tos partidarios para garantizar el libre sufragio
de Bolivia
(1825-2020)
convención en La Paz que lo ratificara como en las elecciones de diputados y senadores de
la principal fuerza política de oposición al go- 1918, siendo el poder Legislativo crucial para
350 bierno. La vuelta a un sistema bipartidista no solucionar el disenso y revalorar la normati-
fue del agrado de los montistas o Partido Li- va electoral. Aunque la amenaza de una nueva
beral Doctrinario que, el 7 de agosto de 1914, división en el partido, entre antezanistas y de
Tomo I víspera de dicha convención, respaldaron en vazquistas, debida al hartazgo de la suprema-
1825-1952
el Congreso la declaración del presidente del cía del montismo por la limitación de opor-
estado de sitio, el exilio de los principales diri- tunidades políticas, debilitó al Partido Libe-
gentes de la oposición y el cierre de trece pe- ral, sus discrepancias tampoco resolvieron las
riódicos afines al nuevo movimiento político. flaquezas del Partido Republicano. Como ni
solucionaba su liderazgo interno, ni acordaba
La amenaza representada por el Partido Re- una línea de acción consensuada que le permi-
publicano para la hegemonía del Partido Li- tiera ganar las elecciones municipales de 1919
beral Doctrinario llevó a Montes a realizar y las legislativas de 1920, su respuesta fue el
una convención que reestructurase su partido. golpe de Estado del 12 de julio de 1920.
Una de sus decisiones fue acordar que un Co-
mité Nacional realizase conferencias con el Durante el gobierno del Partido Republicano,
Partido Republicano a fin de sentar las bases la progresiva identificación del mismo con el
de una Convención General de Partidos para saavedrismo y los resentimientos asociados
presentar una candidatura única en las elec- al autoritarismo presidencial provocaron un
ciones de 1917. Bajo la convicción de que el constante transfuguismo de sus militantes a las
“ideal democrático” consistía en una unifica- filas de la oposición. En un contexto de fuerte
ción partidaria aceptaron reunirse, pero no agitación social en torno a la definición na-
se pusieron de acuerdo sobre cómo elegir al cional, esta situación planteó la necesidad de
presidente y vicepresidente. El republicano una convención de partidos. Las planteadas en
José María Escalier y el liberal José Gutiérrez 1923 y en 1924, tanto por el gobierno como
por la oposición, no se concretaron a causa de candidatos y los electores provocaron mayor
diversos actos subversivos. Fracasados tanto controversia por estar destinadas a jerarquizar
la vía revolucionaria como un acuerdo entre el acceso y el disfrute sociales de la autoridad.
partidos, la oposición inició los preparativos Mediante la reactualización coyuntural de
electorales e inculpó al gobierno de dificultar una pretérita morfología de la opinión basa-
su organización mediante todo tipo de abusos. da en la plebe ignorante, las elites ilustradas y
Esa acusación dio lugar a una corresponden- los corruptores de la opinión, los candidatos
cia entre ambas fuerzas, cuya temática central y sus electores fueron sometidos a escrutinio
versó sobre qué partido contaba con mayor mediante ponderaciones, descalificaciones y
apoyo de los trabajadores, sobre los recursos clasificaciones grupales, laborales, étnicas o de
a los que recurría cada facción para ganarse su género. Éstas, de un lado, reflejaban de modo
apoyo y sobre las razones que tenían estos para dinámico los prejuicios, miedos o valores de la
seguir a una u otra fuerza. sociedad; y, de otro, ofrecían un repertorio de
estimaciones sociales relativas a proyectos na-
El candidato oficial, José Gabino Villanueva, cionales en marcha o por venir. Más allá de las
ganó las elecciones, pero éstas se anularon por coyunturas internacionales y nacionales, sin-
iniciativa presidencial. La razón estuvo en la tetizaban ante todo un ejercicio del poder me-
no renuncia a su cargo en favor del vicepresi- diante el lenguaje, ya que al estar éste inmerso
dente, como estaba pactado, y los saavedristas en el mundo social, las retóricas discusivas no Segundo periodo
sospecharon que ello ocurría porque se había solo describían realidades respecto a la parti- Bajo la
Constitución de
producido una fusión partidaria contra ellos. cipación y representación electorales, sino que 1880 que marca
el periodo liberal
Aunque la elección se revocó, Saavedra no ob- también las creaban. (1880-1938)
tuvo la esperada prórroga presidencial por dos
años. Se nombró presidente provisional a Fe- 3.2.1. Los candidatos y la narrativa 351
lipe Guzmán y se organizaron nuevos comi- anticaudillismo/antimilitarismo
cios. La retirada de los republicanos genuinos
y la autoexclusión de los liberales redujeron la Durante la etapa de 1881-1899, el juego de La contienda
electoral entre dos
contienda a dos candidaturas gubernativas, las alianzas y rivalidades políticas revelaba que guerras
de Abdón Saavedra y Hernando Siles. Des- la necesidad fundamental del sistema político
pués de numerosas negociaciones en el seno vigente era obtener estabilidad política. Para
del partido, Siles fue nombrado presidente. ello era imprescindible lograr: primero, que
Tras un gobierno de conciliación nacional al existiera una competencia electoral; segundo,
que fueron llamados a participar los miem- que los partidos en pugna pudieran percibir
bros de todas las agrupaciones que quisieran el triunfo de los contrarios como legítimo; y,
prestarle colaboración burocrática y técnica, tercero, que todos respetasen los resultados de
fundó el Partido Nacionalista. En 1931 esta los comicios desechando el recurso de la vio-
agrupación fue sustituida por una alianza mul- lencia. ¿Qué narrativa histórica públicamente
tipartidista de la que Salamanca surgió como publicitada lo permitió?
candidato presidencial.
La resolución de la crisis de autoridad desen-
3.2. La retórica partidista cadenada con la guerra asentó un discurso de
refundación nacional que vinculaba la legiti-
Aunque en un espacio de circulación y discu- midad y la representatividad de los partidos en
sión de ideas, como era una contienda polí- que se autopercibieran y fuesen públicamen-
tica, las narrativas partidistas de exaltación te percibidos como restauradores del orden
o denostación de los contendientes fueron independentista. El caudillismo/militarismo
variadas, las centradas en las calidades de los (o faccionalismo armado) se erigió como su
contrario –lo antinacional–, siendo identifi-
cados los gobernantes como los responsables
de generar la corrupción del pueblo en forma
de anarquía popular y de tiranía militar. En
respuesta a esa lectura política, la historia de
Bolivia quedó dividida por los publicistas de
la época en dos etapas: una primera, pre-gue-
rra, marcada por el caos y el mal uso de la
soberanía popular y los principios republica-
nos; y una segunda, post-guerra, heredera de
las instituciones adoptadas en Bolivia desde su
Independencia, y en búsqueda, bajo el “impe-
rio de la ley”, de los principios de la doctrina
liberal aplicados a la conducción de las socie-
dades civilizadas del mundo bajo la batuta de
hombres de orden sujetos a un “verdadero”
régimen de partidos.
Un amor
desenfrenado Sin embargo, esa percepción historiográfica
por la libertad
no significó en la práctica que las fórmulas de
Antología de la
historia política violencia ligadas al pueblo en armas dejasen de
de Bolivia Propaganda de candidatos ‘Viva la libertad’, c. [1868], ¿Santa Cruz?
(1825-2020)
ser un recurso político de competencia parti- Fuente: https://curiosity.lib.harvard.edu/latin-american-pamphletd-
dista –como ejemplifican las rebeliones libera- igital-collection.
plimiento de la legalidad electoral. Con ello del gobierno de los resultados electorales. De
quedó en evidencia que lo básico en la con- hecho, la amenaza revolucionaria fue poco a
tienda partidista no eran los hechos sino su poco materializándose a juzgar por las diver-
instrumentalización política, provocando tal sas insurrecciones ocurridas a partir de 1889,
acción un progresivo endurecimiento de las de las que la encabezada en 1890 por Pando
tácticas de ambos contendientes y una ame- contra la empresa minera Colquechaca fue
naza a la solución negociada. la más notable. Aunque fracasó, dejó en evi-
dencia el éxito de las tareas proselitistas del
En 1888 el Partido Constitucional tuvo éxito partido en capitalizar el descontento social
en asentar una imagen de un Partido Libe- a su favor a través de proyectos fiscales y de
ral conspirador y organizado en un ejército asesoría administrativa y jurídica a las comu-
secreto que, con sus ansias de triunfo, retro- nidades indígenas.
traía a Bolivia a una época de caos e impedía
el progreso nacional. Pero si con ello logró La creciente simpatía de los liberales por la
socavar la confianza de la población en este solución armada conllevó por parte de es-
partido y en sus declaraciones instituciona- tos un desmontaje de su imagen como un
les, las calumnias y exageraciones abrieron “partido del caudillaje”. En las elecciones de
una fractura entre los contendientes políticos 1884, 1888 y 1892 ya habían acusado a Arce
y, en vez de alejar el fantasma de la rebelión, y a Pacheco de ejercer el cohecho electoral
por practicar la política del “cheque contra que sufragaran con ellas oficiales y soldados
el cheque” y de impedir su triunfo con dona- del ejército de línea o presos liberados de la
ciones al Estado boliviano, a la Iglesia para la cárcel, ocupar con gente armada las calles, o
reparación de templos, a las municipalidades, servirse del clero para que éste negara la ab-
a las prefecturas y a las cajas de ahorro “de la solución a los penitentes liberales o les exigie-
clase artesana”. La respuesta de los dos líde- ra un certificado de confesión. Ese repertorio
res había sido que el dinero utilizado no había de acusaciones mostraba que las elecciones
“comprado conciencias”, sino que, tal como no se reducían al momento de votación. Lo
exigía la refundación nacional, modernizaba acompañaba una sucesión de festejos, entre
la política boliviana por hacerse al capitalis- los que los desfiles actuaban como anuncio y
mo partícipe de “la constitución del Estado”. prueba de que lo que ocurriera en las urnas
A ello añadieron que todas sus actividades ya había sido refrendado públicamente por los
electorales (clubes electorales; periódicos de seguidores de cada agrupación. Un ejemplo de
distribución gratuita; agentes electorales; do- ello se dio en los comicios de 1892, donde las
naciones; propaganda por medio de volantes concentraciones y las procesiones patrióticas
y sueltos; estímulos pecuniarios para los elec- descritas en dos periódicos de la ciudad de La
tores con difícil acceso a las urnas; y agasajos Paz, El Comercio y El Nacional, fueron de
Un amor
u obsequios a posibles simpatizantes) habían dos tipos.
desenfrenado sido costeadas por sus fortunas personales,
por la libertad
mientras que las del Partido Liberal habían De una parte, estaba el formado por un nutri-
Antología de la
historia política contado con recursos oficiales facilitados do grupo de manifestantes respetables, distin-
de Bolivia
(1825-2020)
por Campero, ofreciendo como prueba que guidos caballeros y jóvenes de lo más selecto
el control de las municipalidades de las ins- de la sociedad y honrados y conocidos arte-
354 cripciones electorales había beneficiado a ese sanos, cuya procesión patriótica era vitoreada
partido en el Congreso. Esas afirmaciones desde los balcones por las señoritas de socie-
redundaban en que todos los partidos reali- dad, hasta que se disolvió en el mayor orden
Tomo I zaron campañas financiadas, lo que contri- mientras vitoreaban sólo a la causa liberal y
1825-1952
buyó a una competencia electoral contraria sin dar mueras a nadie. De otra, estaba el inte-
al irrespeto a los resultados de los comicios. grado por los “ultramontanos”, a los que “los
Pero si la virtud del dinero logró imponerse agentes de la secreta” habían estado recolec-
discursivamente al delito del militarismo, no tando por la fuerza para acuartelarlos hasta el
ocurrió lo mismo con las denuncias liberales momento en que salieran a manifestarse tras
sobre la corrupción electoral del gobierno, haberles pagado con dinero y alcohol para ese
que fue interpretada como la prueba del re- fin. A esta población se unían arrieros salidos
greso a la dictadura. ¿En qué consistía? de los tambos y “rondines disfrazados” para
participar en un “desfile de emponchados”
Además de las citadas imputaciones sobre la que recorrieron las calles dando vivas a Bap-
organización de juicios por conspiraciones fic- tista, y mueras a los opositores. De la polari-
ticias, de declarar sin necesidad el estado de zación anterior se deduce que los partidos no
sitio o de provocar disensos en el interior del sólo necesitaban demostrar públicamente que
Partido Liberal por cooptación, la prensa y contaban con el apoyo de la población, sino
la folletería de la época recogieron multitud con “lo mejor de ella” y en gran número.
de quejas de la oposición contra el gobierno.
Estaban referidas a impedir la inscripción y el En suma, como el cohecho era imputable a
sufragio de los votantes de la oposición, ata- todos los partidos, el relato exagerado que los
car sus clubes liberales, flagelar a los artesanos liberales hicieron de esas conductas infracto-
adeptos, comprar cartas de ciudadanía para ras y fraudulentas estaba orientado a justificar
también su abstención, la petición de nulidad
de las elecciones en caso de derrota y, si esta
no se producía, la creación de un clima de opi-
nión que justificase el recurso revolucionario.
Al enarbolar la necesidad nacional de la libe-
ración de la “dictadura del dinero”, a la que
se achacaba la corrupción de las conciencias
y la conversión del país en el patrimonio de
una facción, el Partido Liberal se disociaba
del vicio caudillista y asociaba al mismo a sus
contrarios, a quienes responsabilizaba de con-
travenir el libre sufragio a causa de la coacción
oficial.
sola persona conocida que pudiera responder descalificado mediante la denuncia de que lo
de cualquier atentado”, vinculando el acto de secundaba lo “peor de la población”, “artesa-
votar al de “ocupar algún puesto en la socie- nos descalificados de la peor especie”, que no
dad”. En las elecciones de 1917, el Partido tenían el menor reparo para exteriorizar sus
Liberal señalaba que la fórmula presidencial opiniones de forma violenta. En las manifesta-
Gutiérrez-Vázquez-Quinteros estaba secun- ciones ese pueblo suburbano desfilaba junto a
dada por adherentes de “guante blanco, lea- una compacta y abigarrada muchedumbre de
les y caballerescos”, responsables de organizar cholitas, ex comunarios de algunos ex ayllus
clubes y asociaciones en las que participaban y obreros “de la más baja capa social”, dando
fraternalmente otros dos sectores: la juventud mueras al gobierno, al Partido Liberal y a su
y los trabajadores. Dado que la primera esta- candidato, arrojando piedras y desoyendo in-
ba integrada por “todos los elementos jóvenes cluso las amonestaciones de sus dirigentes. Se
de prestigio y posición social, política, inte- comportaban así por ser un grupo de ebrios
lectual, comercial o industrial”, se establecía con “más indígenas que ciudadanos”, “obreros
una relación dependiente y jerárquica con los con vestiduras raídas y personas absolutamen-
segundos. Como miembros destacados de las te desconocidas”, sirvientes y peones “recolec-
guardias cívicas y de los clubes electorales y tados en los arrabales”. En Potosí, a ellos se
como responsables de organizar fiestas cam- unían el día de los comicios “caras siniestras
pestres o encuentros de fútbol, la juventud de mineros alcoholizados”, que trataban de
imponerse por el terror con armas, cartuchos actuasen en su contra. La explotación e instru-
y bombas de dinamita, y una indiada ansiosa mentalización que hicieron los partidos de las
de iniciar “una guerra de castas”. competencias laborales, salariales y de estatus
tuvo dos consecuencias contradictorias inme-
Junto a las descripciones de los participantes diatas.
y de sus acciones, aparecían también quejas
acerca de que “lo mejor de la sociedad estaba De un lado, se aceleró la concienciación po-
ausente” y dominaba “la canalla”, impidién- lítica y se amplió el espectro de los afectados
dose de este modo que el país tuviese repre- que se sabían necesarios en la parafernalia
sentantes adecuados para el correcto asenta- electoral; lo que les ayudó a combatir progre-
miento de la democracia. En las elecciones de sivamente su situación subordinada a través la
1908 y 1909 se calculó que el número de ciu- conquista individual y sindical de la represen-
dadanos inscritos en los comicios no corres- tación. Y, de otro, se reforzaron las tensiones
pondía con el número real de los que debe- jerárquicas internas, fortaleciéndose en el seno
rían inscribirse y se acusó de indiferentismo a popular y contra él los prejuicios de categori-
los sectores acomodados y a la juventud. A los zación que le afectaban. Sus miembros no po-
primeros se les censuraba porque no desem- dían evitar entenderse dentro del sistema que
Un amor
peñaban los cargos públicos pese a gozar de les conformaba y donde actuaban y tampoco
desenfrenado “una situación superior” por las ventajas de verse influidos por los valores del mismo. In-
por la libertad
la riqueza y el grado de instrucción y cultura. cluso cuando se oponían a los patronos, a los
Antología de la
historia política Eran calificados de “patriotas a la inversa” no líderes partidarios o al gobierno, su oposición
de Bolivia
(1825-2020)
sólo porque dejaban en manos del “popula- se expresaba en términos que sus oponentes
cho ignorante” la construcción de la nación podían comprender. Sus pensamientos, ideales
358 y no hacían nada para mejorar los niveles de y juicios nunca fueron una simple recapitula-
preparación de éste, sino también porque se ción a nivel inferior de los valores dominantes,
dedicaban a criticar los resultados electora- pero tampoco una negación de los mismos. El
Tomo I les sin responsabilizarse en su cambio. A la hecho, entonces, de que empleasen y secunda-
1825-1952
segunda se la reprobaba por renunciar a la ran el proyecto político civilizador no signifi-
lucha propia de su edad, ya que su abstención caba que lo interpretaran en todo momento en
en la contienda electoral dejaba “que las me- los términos y en las versiones dominantes. Lo
dianías” asaltasen los cargos públicos y ma- asimilaron y utilizaron porque necesitaban de-
learan la Administración. fender sus posibilidades de movilidad y ascen-
so sociales con las armas de la legalidad que
La retórica sobre la apatía de ambos grupos la sociedad imponía como correctas, luego
criticaba el empoderamiento público de los aprendieron a luchar en un mundo nuevo con
artesanos y obreros, porque debilitaba las po- sus instrumentos y reglas. Al hacerlo, interio-
líticas de jerarquización y subordinación par- rizaron la norma, pero también asumieron el
tidarias. La tarea de proselitismo a través de valor de ésta y la parte de la misma que podía
donaciones y prebendas no buscaba que esos ayudarles a romper papeles sociales predeter-
colectivos practicaran el libre sufragio, sino minados.
que votaran en interés de los partidos median-
te las dinámicas de la infracción electoral. Para El fantasma del triunfo de las “masas de obre-
lograrlo sin riesgos sociales no solo era preciso ros, campesinos y lugareños” guiados por
que estos electores fueran objeto de descrédito “los que obran por el imperio del odio, por
social por carecer de una “incólume reputa- el dinero y el engaño” se exacerbó durante la
ción”, sino también que los conflictos de estra- presidencia de Saavedra. Persistía la publi-
tificación presentes en el universo subalterno cidad partidaria del binomio tradicional de
Segundo periodo
Bajo la
Constitución de
1880 que marca
el periodo liberal
(1880-1938)
Elecciones en 1904.
359
Fuente: Bolivia en el siglo XX. La formación de la Bolivia contemporánea, Fernando Campero (Edit.).
La contienda
electoral entre dos
ciudadanos contra chusma, pero con el matiz “corregir los desmanes de ciertos elementos guerras
de que ahora la última sostenía al gobierno e perniciosos”, sino que también disponía y su-
iba a dar rienda suelta a su resentimiento po- pervisaba los almuerzos campestres, las fiestas
pular y étnico. Desde la segunda presidencia y desfiles patrióticos en los que participaba
de Montes, la cooptación de adeptos se ha- la “clase obrera”, actuando como directora y
bía ampliado a toda la presidencia. Una de disciplinadora de la misma, a la vez que de su
sus consecuencias había sido la modificación agente ideológico. Mediante la Liga de la Ju-
de los compromisos, derechos y prebendas ventud Independiente influía en la Liga de la
de los militantes, siendo el gobierno el que Juventud Obrera Independiente y expandía el
contaba con mayores ventajas para asumir las programa republicano destinado al progreso
exigencias de sus leales. Saavedra explotó esa de la nacionalidad para resolver las torpezas
situación y organizó a sus seguidores en “la ju- ocasionadas por la “aristocracia liberal”: la re-
ventud universitaria y el obrerismo conscien- integración de la región del Litoral, la sólida y
te”. La primera, además de formar parte del desinteresada protección del proletariado me-
grupo de parlamentarios, seguía el modelo de diante la elevación de su capacidad moral, el
la Guardia Blanca de Montes al participar en combate del regionalismo y la incorporación
los Regimientos de Unión y Defensa Republi- del indio a la civilización. Como respuesta al
cana encargados del orden público. Pero no lema de que “al obrero ya no se le hacía ca-
solo estaba autorizada para organizar la vio- ridad, sino justicia”, porque él era pueblo y
lencia contra el adversario con el objetivo de no chusma, los trabajadores debían aceptar la
tutela de la juventud universitaria y organizar- auspiciado desde el gobierno bajo el principio
se en distintas sociedades, sobre todo las de de una cooperación condicionada a la optimi-
La Paz, Oruro, Cochabamba y Santa Cruz y zación del ámbito de influencia presidencial.
de los centros mineros, con visible adhesión Por otro, su centralidad y el respaldo guber-
pública al Partido Republicano. A modo de re- namental les hizo acreedores del desconten-
fuerzo simbólico de la alianza entre gobierno to de la oposición, exacerbándose la narrati-
y proletariado, proliferaban en época de co- va étnica estigmatizadora que les culpaba de
micios los dramas alusivos a la indefensión de la irrealización nacional. Un ejemplo de esto
éste, siendo “La huelga de mineros” una de las último lo constituyó el caso del asesinato del
obras más representada en 1925. matrimonio Vilela en la localidad de Achaca-
chi (La Paz) la madrugada del 13 de julio de
La oposición, formada por el Partido Repu- 1920. A través de ese episodio de asociación de
blicano Genuino y el Partido Liberal, criticó la brutalidad india de 1899 con la mestiza, se
el protagonismo la juventud y los obreros. produjo una descalificación cualitativa de los
De la primera dijo lo ridículo y perjudicial adeptos saavedristas al quedar vinculadas las
que resultaba para la nación su inexperiencia especificidades étnicas mestizas con lo crimi-
en el Parlamento, mientras que de los segun- nal; lo que también ayudaría discursivamente
Un amor
dos lamentaba que se hubieran corrompido y al gobierno en sus decisiones y actuaciones re-
desenfrenado perdido su independencia política. Pero ello presivas contra la movilización popular en las
por la libertad
no les extrañaba por tratarse de “mestizos huelgas mineras y ferroviarias.
Antología de la
historia política infidentes”, cuyas características raciales les
de Bolivia
(1825-2020)
habían impelido hacia un éxito fácil, provo-
cando su envilecimiento y convirtiéndoles en 4. Conclusiones
360 sicarios y “hombrecillos inescrupulosos” dedi-
cados a arrebatar a la mayoría del pueblo sus Las elecciones presidenciales ocurridas entre
derechos y garantías y a crear un “gobierno de 1884 y 1925 se han tratado como una esceno-
Tomo I cholos”. Pero Saavedra no tuvo ningún inte- grafía pública dedicada a formar opinión po-
1825-1952
rés en desmentir la mala imagen de su partido lítica, modelar conductas partidarias y socia-
por la ascendencia de sus votantes ni en ofre- les y crear estatus; esto es, como un escenario
cer otra diferente de este colectivo. Al contra- donde se hacían visibles las virtudes y vicios
rio, el fomento de un “culturalismo mestizo” del régimen de partidos y de la sociedad y a
sintetizó la explotación política de la antipatía partir del que se generaban correctivos socia-
chola contra lo blanco y oligárquico, siendo la les que podían ser incorporados por los sujetos
Guardia Republicana –un cuerpo integrado como elementos sustantivos de su universo de
por milicias populares y por una fuerza poli- representaciones. Los comicios constituyeron
cial paramilitar, cuyo origen estaba en las ma- un momento crucial en el aprendizaje colec-
zorcas electorales destinadas a proteger a sus tivo de lo público en un contexto donde los
dirigentes y arremeter contra los contrarios– partidos competían entre sí para demostrar
la oficialización de la amenaza popular. cuánta población letrada y notable, cuántos
gremios, mutuales y federaciones obreras y
Esta aparente toma de poder popular tuvo cuántos comunarios indígenas y colonos de
dos consecuencias: autoritarismo y desauto- hacienda les apoyaban y podían ser moviliza-
rización pública. Por un lado, la promesa de dos para formar guardias juveniles, organizar
resarcimiento social y las medidas de bien- desfiles y fiestas, falsificar inscripciones, votar
estar social implícitas en el apoyo a Saavedra reiteradamente, amedrentar a los opositores,
hizo partícipes a sus seguidores de un redise- boicotear sus mítines y manifestaciones o se-
ñado sistema clientelar más amplio y flexible cuestrar las urnas. Operaron como un espacio
de integración social, de conocimiento de los cómo las relaciones de conflicto construyen,
nuevos hábitos políticos y de adquisición de sostienen y desbaratan creativamente sistemas
conciencia de las posibilidades políticas de ac- políticos y sociales y cómo en su desarrollo los
ción y, sobre todo, fueron generadoras de po- diferentes contendientes ven transformadas,
der y distribuidoras del mismo. vertical y horizontalmente, sus alianzas, esti-
mulados sus contradicciones y enfrentamien-
Esas capacidades tornaron las elecciones en un tos grupales, y alteradas las estructuras de po-
momento colectivo incluyente y, a la vez, se- der en las que se insertan. También posibilita
gregador. Lo primero estuvo en relación con considerar la acción de la sociedad como un
los márgenes de maniobrabilidad pública y la fenómeno dotado de autonomía y no un mero
ampliación del electorado que la competencia reflejo aditivo de los cambios en la organiza-
partidaria propició a través de la infracción en ción de la producción o de la estructura del
un contexto de sufragio censitario. Lo segun- Estado. Los aspectos normativos y procedi-
do tuvo que ver con el discurso de corrección mentales de la política quedan historizados al
política sobre el ciudadano-tipo que debía su- asumirse el proceso político como contexto de
fragar. Como éste no siempre correspondía movilización popular y al resaltarse la impor-
discursivamente al elector real, ese desfase in- tancia de la institucionalidad legal en la con-
fluyó en la percepción pública que los bolivia- versión del poder social en político.
nos tenían y desarrollaron sobre sí mismos y Segundo periodo
cracia desde las últimas décadas del siglo XIX Brienen, Marten. 2011. The Clamor for
se había ido asociando al momento electoral Schools. Indigenous Commiunities, The
por sobre otras actividades ligadas al ejercicio State, and the Development of Indige-
de la soberanía popular y ello había sido acep- nous Education in Bolivia, 1900-1952.
tado por todos los partidos, la consecuente Tesis Doctoral, Unversiteit van Amster-
democratización de la vida política y de la so- dam, 2011.
ciedad que implicaron los comicios no consti- Brockmann, Robert. 2009. El general y sus pre-
tuyó una meta necesariamente planificada por sidentes. Vida y obra del general Hans Kundt,
parte de los implicados en las contiendas. Se Ernest Röhm y siete presidentes de Bolivia,
trató de una “acción en proceso” en la que las 1911-1939. La Paz: Plural.
intenciones de los actores no fueron necesa- Cajías, Magdalena. 2013. El poder de la me-
riamente unitarias ni claras, ni siempre previas moria: la mina de Huanuni en las luchas
a la acción, ya que en un contexto nacional ba- sindicales y políticas del movimiento minero
sado en el principio de la soberanía popular boliviano: 1900-2010. La Paz: Plural-DIG-
ello sucedía al alcanzar sus fines sustantivos. BIS-IEB.
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Bajo la
L
Constitución de
a historia de la formación territorial El impresionante mapa oficial de la Repúbli- 1880 que marca
el periodo liberal
de Bolivia ha sido contada desde una ca de Bolivia, elaborado entre 1842 y 1859, (1880-1938)
perspectiva crítica que tiende menos- por Juan Ondarza, Mariano Mujía y Lucio
preciar las victorias y logros obtenidos por Camacho, que muestra las máximas aspira- 365
quienes estuvieron a cargo de representar a ciones territoriales de nuestro país en aque-
nuestro país cuando se negociaron y definie- lla época, alcanzando un total aproximado de
Conflictos,
ron nuestras fronteras, lo que, a su vez, ha 2,2 millones de kilómetros cuadrados, ha sido negociaciones
contribuido a consolidar esa narrativa derro- equivocadamente utilizado para construir una y tratados
de la formación
tista y plañidera que presenta a Bolivia como narrativa derrotista y plañidera, que presenta a territorial de
Bolivia (1880-1938)
un país que habría perdido la mitad de su te- Bolivia como un país que habría perdido más
rritorio. Teniendo eso en cuenta, este trabajo de la mitad de su territorio. No obstante, con-
presenta un análisis de esa parte de la historia, siderando que el Estado boliviano jamás ejer-
que sin desconocer las derrotas militares y di- ció soberanía efectiva sobre toda esa inmensa
plomáticas que nos obligaron a ceder parte de masa territorial, y que, en la mayoría de los
lo que eran nuestras máximas aspiraciones te- casos, los territorios perdidos eran espacios en
rritoriales, también destaca aquellas victorias y disputa con nuestros vecinos, en los que, tanto
logros que dieron forma al actual territorio de Bolivia como los países colindantes tenían tí-
Bolivia; con el objetivo fundamental de refutar tulos provenientes de la Corona española que
esa equivocada y perjudicial narrativa que pre- se sobreponían y contradecían; no es correcto
valece incluso en nuestra educación escolar y ni saludable para la autoestima de los bolivia-
desmentir asimismo, que se habría perdido la nos, creer y mantener en nuestra educación
mitad de nuestro territorio. escolar, que Bolivia perdió más de la mitad de
su territorio.
Palabras clave: Tratados, protocolos, acuer-
dos, arbitraje, límites, fronteras, territorios, Por tanto, el presente trabajo intenta demos-
guerra, armisticio, negociaciones, gestiones trar que pese a que la formación territorial
diplomáticas, paz. de Bolivia fue un proceso duro, dramático y
doloroso, también fue un tiempo en el que país en situaciones sumamente complejas y
obtuvimos importantes victorias diplomáticas desventajosas, obteniendo, como se ya ha di-
que nos permitieron preservar u obtener ex- cho, importantes victorias y logros para nues-
tensas y ricas regiones que eran pretendidas en tro país. Esto es importante, porque el predo-
esos momentos por nuestros vecinos; como el minio de la narrativa derrotista y plañidera ha
Partido de Tarija, que comprendía todo el sur hecho que varios de aquellos grandes defenso-
actual de Bolivia, incluyendo importantes por- res de nuestros intereses, hayan sido injusta-
ciones de los departamentos de Tarija, Potosí mente olvidados, o lo que es peor, colocados
y Chuquisaca; la zona petrolífera y gasífera del al mismo nivel de quienes sí deshonraron y
Chaco boreal; y prácticamente todo el depar- traicionaron a la patria.
tamento de Pando y el norte del de La Paz.
Por otra parte, sin desconocer que esta his-
Tomando eso en cuenta, a continuación se toria de la formación territorial de Bolivia ya
presenta un análisis de dicho proceso, que no fue contada y analizada con mucho más detalle
desconoce las derrotas militares y diplomáticas en las grandes obras de la historia diplomáti-
que nos obligaron a ceder parte de lo que eran ca de nuestro país, entre las que destacan las
nuestras máximas aspiraciones territoriales, publicaciones de Mercado Moreira, Abecia
Un amor
pero que también destaca las victorias mencio- Baldivieso, Querejazu Calvo y Escobari Cu-
desenfrenado nadas que dieron forma al actual territorio de sicanqui, entre las más renombradas; otro im-
por la libertad
Bolivia; un territorio vasto, rico y concurrente portante objetivo de este trabajo es aportar al
Antología de la
historia política a tres grandes cuencas hidrográficas de nues- debate de “las pérdidas territoriales” con un
de Bolivia
(1825-2020)
tra región, como son la cuenca Amazónica, la análisis que, de manera concisa y puntual, na-
del Planta y la Endorreica o Altiplánica. rre y comente la tergiversada historia de la de-
366 finición de nuestras fronteras.
En ese sentido, en estas páginas se analiza el
periodo transcurrido entre 1880 y 1938, que Por último, en cuanto a la estructura, este
Tomo I fue cuando se negociaron y suscribieron los trabajo está compuesto de esta introducción;
1825-1952
Tratados de límites que definieron el actual cinco segmentos de desarrollo referidos a la
mapa de Bolivia, considerando para tal propó- historia de nuestros límites con cada uno de
sito, los efectos de los conflictos armados que nuestros cinco vecinos, los que, a su vez, fue-
involucraron a nuestro país durante ese perio- ron subdivididos en acápites correspondientes
do; es decir la Guerra del Acre con el Brasil a los tratados y protocolos más relevantes; y
y la del Chaco con el Paraguay. Al respecto, finalmente las respectivas conclusiones.
cabe aclarar que la Guerra del Pacífico con
Chile no es abordada directamente, sino solo
a través de sus efectos en las negociaciones que 1. Con Argentina
se desarrollaron después de la contienda, debi-
do a que este trabajo se enfoca en el proceso 1.1. El Tratado Vaca Guzmán-Quirno
de negociación que llevó a la suscripción del Costa de 1889
Tratado de Límites boliviano-chileno, que se
desarrolló entre 1884 y 1904. Después de que las Provincias Unidas del Río
de la Plata y la República de Bolivia alcanza-
Por otra parte, un objetivo secundario, pero ran su Independencia en el primer cuarto del
no menos importante, es reivindicar y honrar siglo XIX, las negociaciones que sus gobiernos
la memoria de los grandes hombres de la di- emprendieron para definir sus límites giraron
plomacia boliviana que, con gran empeño y en torno al Partido de Tarija, que debía ser
dignidad, defendieron los intereses de nuestro argentino según el uti possidetis juris de 1810
182
SUP 5 - SU
.A P
CTU . 2’36
AL 4
1’0 .756 k Segundo periodo
98.
581 m 2 Bajo la
km 2 Constitución de
1880 que marca
el periodo liberal
(1880-1938)
233 km2
4000 km2
500 km2
95 km2
367
Conflictos,
negociaciones
y tratados
de la formación
territorial de
Bolivia (1880-1938)
la misma que derrotó al ejército regular del obstaculizar la consolidación del mencionado Bajo la
Constitución de
Brasil en la memorable batalla de Bahía (hoy sindicato anglo-estadounidense (Auad 2013, 1880 que marca
el periodo liberal
Cobija), el 11 de octubre de 1902 (Abastoflor 203 y Cunha 2009, 201). (1880-1938)
2019, 67).
La clausura del libre tránsito por el Amazonas, 375
Pero ni esa victoria ni otra que Bolivia obtu- decretada por el Brasil el 19 de julio de 1902,
vo después, cuando el contingente del coronel no sólo contradecía el Protocolo de 1899 que
Rosendo Rojas derrotó a las fuerzas de Castro estableció la obligación para las aduanas bra- Conflictos,
negociaciones
en Vuelta Empresa (hoy Río Branco), alcanza- sileras de aceptar los documentos expedidos y tratados
de la formación
ron para lograr la pacificación de la zona. Los por el Administrador de Puerto Alonso, “sin territorial de
Bolivia (1880-1938)
filibusteros, cada vez mejor armados y ahora necesidad de legislación consular”; sino tam-
apoyados desembozadamente por el ejército bién la propia Constitución brasilera que pro-
brasilero, que se había hecho presente con un hibía crear impuestos de tránsito a los produc-
fuerte contingente militar, recuperaron Vuelta tos extranjeros (artículo 11) y establecía que
Empresa el 15 de octubre de 1902 y Puerto los impuestos de exportación solo podían ser
Acre (antes Puerto Alonso) el 24 de enero de aplicados a los productos de su propio suelo
1903 (Abstoflor 2019, 68). (artículo 9).
Ante lo cual, el presidente Pando decidió des- Estos argumentos fueron incluidos en la nota
plazarse personalmente al teatro de operacio- que Pinilla dirigió a Carvalho el 2 de noviem-
nes, logrando derrotar a las fuerzas de Castro bre, solicitando reconsiderar la clausura y
el 26 de abril de 1903, en el poblado de Puerto demostrando, de manera incontestable, que
Rico sobre el río Orthon (Mesa 2003, 525). el Brasil no podía cortar el tránsito comer-
cial por el Amazonas. Dicha nota no fue res-
Pero esa hazaña no modificaba mucho las pondida por Carvalho que tuvo que dejar el
cosas, Bolivia debía escoger entre dos opcio- cargo en esos días, ni tampoco por su suce-
nes: 1) seguir peleando en desventaja por fal- sor, José María da Silva Paranhos Junior, más
ta de abastecimiento y hombres, y terminar conocido como el Barón de Río Branco, que,
contradiciendo a sus antecesores y a sí mismo,3 Brasil debe sustentar verdadera interpre-
declaró litigioso el Acre y planteó alternativa- tación tratado 67. Región O. Madeira está
mente la posibilidad de comprárselo a Bolivia en litigio con Brasil, Perú y Bolivia. Conse-
para entenderse después con el Sindicato, o cuencia marcha Pando, resolvió concentrar
que subrogarse los derechos y obligaciones de tropas Amazonas-Mattogrosso. Barón Río
éste, para entenderse luego con La Paz (Mer- Branco (Mercado 1930, 129).
cado 1930, 94 y 123).
A lo que el canciller Villazón respondió:
Como la oferta de compra fue rechazada por
Bolivia, el Barón propuso un canje de terri- Contrato Acre no es arrendamiento. Bolivia
torios, desproporcionalmente favorable a su conserva soberanía, encomendando solo re-
país, y un ferrocarril para Bolivia, entre el caudación de impuestos. Compañía carácter
Madera y el Mamoré, advirtiendo que su país industrial, hállese sujeta a leyes de la Repú-
intervendría para defender a sus compatriotas blica. No se asemeja concesiones África, que
“levantados contra la dominación extranjera” tienen por objeto organizar colonias. Boli-
(Auad 2013, 219). Además, Río Branco dijo via convino rescindir o modificar contrato,
que convendría que Pando suspenda su via- cambio seguridades demarcación frontera,
Un amor
je al Acre mientras dure la negociación, a lo posesión pacífica. Territorio no es litigioso.
desenfrenado que Pinilla contestó que eso podría suceder Derechos Bolivia fundase de tratado 1867,
por la libertad
siempre y cuando el Brasil se comprometa a protocolos sucesivos y demarcaciones por
Antología de la
historia política cooperar en la pacificación de la zona, pero comisiones mixtas. Brasil en 36 años, jamás
de Bolivia
(1825-2020)
el canciller calló y no quiso comprometerse a inició gestión interpretación cláusulas. Po-
nada (Botelho 1960, 133). blación Acre ha gozado amplias garantías
376 bajo administración Bolivia. Viaje presiden-
Casi al mismo tiempo, Pando salió de La Paz te Pando tiene objeto libertar guarnición
rumbo al Acre y el Barón expidió una circular Puerto Acre, mantener soberanía, defender
Tomo I telegráfica que a la letra señala: intereses bolivianos contra sublevaciones
1825-1952
insurrectos. Bolivia no busca conflicto, está
Hemos hecho sentir Bolivia que contrato dispuesta arreglar diferencias sobre bases
de arrendamiento es monstruoso, importa equitativas por acuerdo directo o arbitra-
enajenación soberanía a beneficio sociedad je en obsequio buenas relaciones. Villazón
extranjera sin personería internacional. Es (Mercado 1930, 130).
una concesión como en África, indigna de
nuestro continente. El gobierno boliviano Seguidamente, a finales de febrero, Brasil des-
dio poder para administrar región habitada plazó cerca de 8.000 hombres hacia el Acre y
solo por brasileros, para mantener fuerzas el Mato Grosso y su gobierno canceló 114.000
terrestres, fluviales y disponer soberana- libras esterlinas al sindicato angloestadouni-
mente navegación Acre. Concesión es nula dense, para subrogarse la concesión que Río
por haberse dispuesto territorio litigioso, Branco consideraba “monstruosa” y “africana”
(Abecia 1979, 331-333).
Bajo la
Constitución de
1880 que marca
el periodo liberal
(1880-1938)
377
Conflictos,
negociaciones
y tratados
de la formación
territorial de
Bolivia (1880-1938)
el primer antecedente de la negociación que los Tratados y uno de los protocolos fueron Bajo la
Constitución de
giró en torno a los Tratados de 1895 y que, a considerados por el congreso boliviano, salta- 1880 que marca
el periodo liberal
partir de allí, se desarrolló en Santiago, entre ron las desconfianzas y recelos, pues reinaba el (1880-1938)
el ministro boliviano, Heriberto Gutiérrez, convencimiento de que:
y el canciller chileno, Luis Barros Borgoño. 381
Efectivamente, el 18 de mayo de 1895, ambos Chile sólo hacía la promesa de dar lo que
representantes firmaron tres Tratados: uno de todavía no le pertenecía y que muy bien po-
Paz y Amistad, uno de Transferencia de Te- día no pertenecerle nunca. La caleta Vítor Conflictos,
negociaciones
rritorios y otro de Comercio. Por el primero estaba también dentro del territorio cuya y tratados
de la formación
quedaba “reconocida la soberanía chilena en propiedad iba a definir un plebiscito de du- territorial de
Bolivia (1880-1938)
los territorios que se extienden al sur del río dosa realización. En cambio, Bolivia cedía a
Loa, desde su desembocadura en el Pacífico perpetuidad su litoral, bien demarcado, sa-
hasta el paralelo 23º de latitud sur”; Chile se neado y reconocido (Querejazu 1979, 735).
comprometía a cancelar las deudas bolivianas
en ese territorio y a financiar la construcción Además, los parlamentarios de oposición ob-
de un ferrocarril entre Mejillones y Caracoles jetaron el hecho de que los Tratados se ha-
(Saavedra 1979, 14). bían suscrito separadamente y no en uno solo,
como podía haberse esperado. “Se temía que
Por el segundo Tratado, el de Transferencia de Chile los había concebido así para dar validez
Territorios, Chile se obligó a ceder, alternati- al uno y dejar sin efecto el otro, es decir, para
vamente: los territorios de Tacna y Arica, si es- obtener el título legal de propiedad sobre el
tos se quedaban en Chile luego del plebiscito litoral boliviano por el Tratado de Paz y Amis-
estipulado por el Tratado de Ancón de 1883; o tad y no cumplir el de la cesión de Tacna y
la caleta Vítor hasta la quebrada de Camaro- Arica” (Querejazu 1979, 732).
nes; y si la cesión de esta última tampoco fue-
se posible, Chile se comprometía a entregar Fue por ese motivo y el prevalecimiento de
una caleta análoga. Como indemnización por una corriente leal al Perú, que el Congre-
la primera alternativa, Bolivia debía abonar a so boliviano supeditó la aprobación de los
Tratados de 1895 a una serie de condiciones, el canciller chileno Adolfo Guerrero le dijo al
que se podrían resumir en que los Tratados ministro Gutiérrez que los Tratados queda-
de Paz y Transferencia de Territorios deben rían en nada si no se precisaba el Protocolo
ser un todo indivisible; que se debe dejar sin aclaratorio Cano-Matta (Barros 1970, 495).
efecto la cesión del Litoral boliviano si en el
plazo de dos años, Chile no entregara a Bolivia Atendiendo esa solicitud, el mismo 30 de abril
un puerto en el Pacífico; que Bolivia no re- se suscribió otro instrumento, el Protocolo
conocerá responsabilidades que provengan de Gutiérrez-Guerrero, que aclaraba el artículo
los territorios que pasan al dominio chileno; cuatro del anterior Protocolo, especificando
que Chile se debe comprometer a buscar los que la cesión que haría Chile, consistiría en un
territorios de Tacna y Arica, con el propósi- puerto con “fondeaderos para naves mercan-
to ineludible de entregarlos a Bolivia; y que si tes, terrenos donde pueda construirse muelles
no pudiese obtenerlos y llegase a transferir a y edificios fiscales, y con capacidad para es-
nuestro país la Caleta de Vítor u otra análo- tablecer una población, que mediante un fe-
ga, “no se dará por llenada dicha obligación rrocarril a Bolivia, responda al servicio fiscal
por parte de Chile, sino cuando entregue un y económico del país” (Querejazu 1979, 737);
puerto y zona que satisfagan ampliamente las Bolivia se comprometía a recabar la aproba-
Un amor
necesidades presentes y futuras del comercio e ción congresal del Protocolo de liquidación
desenfrenado industrias de Bolivia” (Crespo 1975, 51). de créditos y una vez aprobado ese acuerdo,
por la libertad
el congreso chileno consideraría el Protocolo
Antología de la
historia política Todos estos condicionamientos congresa- Cano-Matta; estableciéndose además que la
de Bolivia
(1825-2020)
les fueron formalizados en Sucre el 9 de di- no aprobación de alguno de los instrumentos
ciembre de 1895 mediante el Protocolo Ca- supondría la invalidación de todos (Crespo
382 no-Matta, que fue ratificado por el congreso 1975, 66).
boliviano ese mismo día junto a todos los
acuerdos mencionados, excepto el de liquida- En ese sentido, el congreso boliviano ratifi-
Tomo I ción de créditos, que no había sido sometido có los protocolos comprometidos el 7 de no-
1825-1952
a la consideración del congreso por parte del viembre de 1896 con una reserva, que declara-
canciller Cano. Asimismo, el congreso chile- ba que en caso de que Chile cediese a Bolivia
no, ratificó los cinco instrumentos el último una caleta análoga a la de Vítor, correspondía
día de 1895, pero no consideró el Protocolo al legislativo boliviano “pronunciarse sobre
aclaratorio Cano-Matta, debido al plazo que si el puerto y la zona que ofrezca Chile, en
éste imponía (Abecia 1979, 270) y a la ambi- sustitución del puerto y territorio de Arica y
güedad de su artículo cuarto sobre las necesi- Tacna, reúne o no las condiciones estableci-
dades presentes y futuras de Bolivia (Crespo das en las estipulaciones celebradas entre las
1975, 63). dos Repúblicas”; lo que fue inaceptable para
Santiago. El congreso chileno jamás aprobó
El 30 de abril de 1896, ambos países inter- los Protocolos aclaratorios Cano-Matta y Gu-
cambiaron las correspondientes ratificacio- tiérrez-Guerrero, y todos los demás acuerdos
nes, quedando pendiente el Protocolo de li- quedaron invalidados (Barros Borgoño, 1922:
quidación de créditos por parte de Bolivia y 139-144).
el Cano-Matta por parte de Chile. Ese mismo
día, por las suspicacias que generó en Chile 3.3. El Tratado de Paz y Amistad de 1904
el también ya comentado Protocolo bolivia-
no-argentino, Cano-Rocha, mediante el cual Los cambios políticos en ambos países y
Bolivia reconoció que no había cedido ni con- el acercamiento argentino-chileno de fi-
sentido la ocupación de la Puna de Atacama; nales del siglo XIX, propiciaron un nuevo
endurecimiento de la política exterior chilena Es un error muy esparcido y que se repite
hacia Bolivia, que se tradujo en el descarte de- diariamente en la prensa y en la calle, el afir-
finitivo de los Tratados de 1895 y en la im- mar que Bolivia tiene derecho de exigir un
plementación de nuevos métodos de presión puerto en compensación de su Litoral. No
que, sumados a los ya impuestos en el Pacto de hay tal cosa. Chile ha ocupado el Litoral y
Tregua y a la desventajosa situación de nuestro se ha apoderado de él con el mismo título
país en el contexto vecinal, lograron finalmen- con que Alemania anexó al imperio la Al-
te doblegar el espíritu de los diplomáticos bo- sacia y la Lorena, con el mismo título que
livianos que desde el fin de la guerra se habían los Estados Unidos de la América del Norte
resistido a firmar un Tratado de paz sin salida han tomado a Puerto Rico. Nuestros dere-
al mar. chos nacen de la victoria, la ley suprema de
las naciones. Que el Litoral es rico y que
En un principio, el gobierno chileno de Fede- vale muchos millones, eso ya lo sabíamos.
rico Errázuriz prosiguió “la política boliviana” Lo guardamos porque vale; que, si nada va-
de su antecesor, pero a partir de 1899, cuando liera, no habría interés en su conservación.
el presidente Julio Argentino Roca le aseguró Terminada la guerra, la nación vencedora
que no intervendría en los asuntos del Pacífi- impone sus condiciones y exige el pago de
co; “se decidió imprimir un nuevo derrotero los gastos ocasionados. Bolivia fue vencida,
a la política internacional chilena. A los pocos no tenía con qué pagar y entregó el Litoral. Segundo periodo
meses los vecinos del norte sentirían sus se- Esta entrega es indefinida, por tiempo in- Bajo la
Constitución de
cuelas” (Concha 2011, 114). definido; así lo dice el Pacto de Tregua: fue 1880 que marca
el periodo liberal
una entrega absoluta, incondicional, perpe- (1880-1938)
La ejecución de la nueva política internacional tua. En consecuencia, Chile no debe nada,
chilena, que básicamente consistía en cerrar no está obligado a nada, mucho menos a la 383
las cuestiones de límites con Bolivia y Perú, cesión de una zona de terreno y de un puer-
obteniendo la máxima extensión de territorios to (Becerra de la Roca 2004, 91-98).
posible, aun cuando eso suponga enclaustrar Conflictos,
negociaciones
a la primera, estuvo a cargo de los represen- Por su parte, Vicuña había iniciado contac- y tratados
de la formación
tantes de Chile en La Paz y Lima, Abraham tos con importantes personalidades del Perú, territorial de
Bolivia (1880-1938)
Köning y Ángel Custodio Vicuña, respectiva- como el expresidente Nicolás de Piérola, para
mente. sondear la posibilidad de establecer una alian-
za chileno-peruana con el objetivo de atacar
El primero, después de unos intercambios a Bolivia y arrebatarle sus territorios. El plan
con el canciller boliviano Eliodoro Villazón, era “polonizar” a Bolivia, incluyendo en la
en los que este último le planteó una solución repartija a Brasil, Argentina y posiblemente
con “al menos un puerto en el Pacífico para también al Paraguay (Escobari 2013, 144). Si
Bolivia”, presentó su célebre memorándum bien Vicuña solo recabó el más absoluto re-
de 13 de agosto de 1900, en el que explicaba: chazo de las autoridades peruanas a sus inno-
“en tiempo de guerra las fuerzas de Chile se bles propuestas (Eyzaguirre 1957, 342-344),
apoderarían del único puerto boliviano con fue tal el descaro con el que las presentó, que
la misma facilidad con que ocuparon todos parecía solo querer atemorizar a las autorida-
los puertos del litoral de Bolivia en 1879”, y des bolivianas y hacerles saber que perder el
“sabido es de todos los que conocen los re- Litoral era siempre mejor que perderlo todo.
cursos de mi país, que su poder ofensivo se
ha centuplicado en los últimos veinte años”. Así, entre amenazas y confabulaciones, el go-
Además, en uno de sus párrafos más sobresa- bierno boliviano aceptó las bases chilenas.
lientes señalaba: Era cuestión de vida o muerte, la mutilación
compelida por Köning o la repartija promo- 4. Con Perú (1890-1909)
vida por Vicuña, los bolivianos que goberna-
ban el país prefirieron la primera, era mejor el 4.1. Los antecedentes de la controversia
encierro a la inmolación. Era hasta más digno y el Tratado Villazón-Osma de 1902
soportar el enclaustramiento geográfico antes
que consentir en el suicidio asistido. En bue- El asunto limítrofe boliviano-peruano se
nas cuentas se trataba de un tema de supervi- complicó peligrosamente a partir de 1890,
vencia, el tren Arica-La Paz, las 300.000 libras cuando el Perú decidió avanzar hacia el este,
esterlinas y las facilidades de tránsito que Chi- estableciendo un puerto en el río Tambo-
le entregaba en cambio, eran compensaciones pata y adjudicando parcelas a particulares
simbólicas y hasta irrisorias frente al enorme en el margen derecho del río Inambarí y en
valor del litoral boliviano y todos lo sabían la región del Madre de Dios (Abecia 1979,
perfectamente. 362). Situación que se agudizó aún más cuan-
do Bolivia intentó establecer una aduana en
En ese sentido, el ministro de Bolivia en Gran la confluencia de los ríos Manu y Madre de
Bretaña, Félix Avelino Aramayo, pasó por Dios, mediante el decreto de 20 de octubre
Chile en una misión confidencial para propo- de 1896, en lo que hoy es territorio peruano
Un amor
ner a las autoridades de ese país, un tratado (Tudela 1909, 432).
desenfrenado de paz sin salida al mar para Bolivia (Gumucio
por la libertad
2013, 79). Era el principio del fin. En 1902, el Antes de eso, las controversias entre los dos
Antología de la
historia política gobierno chileno de Germán Riesco destacó a países, incluyendo los enfrentamientos que
de Bolivia
(1825-2020)
don Beltrán Mathieu en La Paz y el boliviano dieron lugar a la Confederación Perú-Boli-
de José Manuel Pando designó a don Alberto viana y la guerra librada entre 1841 y 1842,
384 Gutiérrez como ministro plenipotenciario en no habían versado sobre límites, los motivos
Santiago (Lagos 1981, 89-90 y Barros 1970, de discordia entre bolivianos y peruanos estu-
570-571). vieron relacionados al proyecto confederativo
Tomo I del Mariscal Santa Cruz y a las pretensiones
1825-1952
Después de las negociaciones que se desarro- expansionistas del gobierno peruano de Agus-
llaron durante 1903, el canciller boliviano, tín Gamarra, pero la definición de los lími-
Claudio Pinilla, que había estado en Brasil tes no había generado verdaderos problemas
para firmar el Tratado de Petrópolis, viajó entre ambos gobiernos sino hasta finales del
a Santiago para negociar con su homólogo siglo XIX.
chileno, Agustín Edwards, y con el ministro
Gutiérrez, las bases del acuerdo definitivo de Si bien se habían suscrito sendos acuerdos
paz. Fue así que el 24 de diciembre, los tres para demarcar los límites en 1831, 1839, 1847,
representantes suscribieron un Acta que sería 1848, 1863 y 1886 (Tudela 1909, 428), no se
el troquel fundamental del Tratado de 1904 lograron avances sino hasta 1902, cuando el
(Gumucio 2013, 82). En efecto, el 20 de oc- territorio en disputa, también compartido con
tubre de 1904, después de que Ismael Mon- el Brasil, se valorizó raudamente por el ya co-
tes asumiera la presidencia de la República mentado crecimiento de la demanda mundial
de Bolivia y que Emilio Bello Codesido fuera de goma elástica (López 2001, 574).
designado Ministro de Relaciones Exterio-
res de Chile; Gutiérrez ingresó al despacho En esas circunstancias, el gobierno perua-
de este último para suscribir, en base al Acta no envió a Sucre a don Carlos Rubén Polar,
mencionada, el Tratado de Paz y Amistad que con el propósito de negociar el asunto con
selló finalmente el enclaustramiento geográ- el canciller boliviano Manuel María Gómez.
fico de Bolivia. Así, ambos representantes celebraron once
Segundo periodo
Bajo la
Constitución de
1880 que marca
el periodo liberal
Mapa 4: Mapa de Perú. (1880-1938)
Fuente: Historia Internacional de Bolivia, Miguel Mercado Moreira.
385
conferencias entre el 8 de mayo y el 21 de ju- Por ese motivo, después de la guerra civil, las
nio de 1897, en las que acordaron aplazar la negociaciones boliviano-peruanas continua- Conflictos,
negociaciones
ejecución del citado decreto de 1896 y fijar un ron en La Paz, donde se llegó a suscribir tres y tratados
plazo de 60 días para resolver el problema, al tratados: uno general de arbitraje, el 21 de no- de la formación
territorial de
cabo de los cuales, si no se lograba una reso- viembre de 1901; uno sobre demarcación de Bolivia (1880-1938)
El canciller boliviano propuso además el es- Mediante el primero, suscrito entre el can-
tablecimiento de un modus vivendi que incluía ciller boliviano Federico Diez de Medina y
la definición de una frontera provisional, que el enviado peruano Felipe de Osma, ambos
luego se conoció como la línea Polar-Gómez. países se obligaron a someter al arbitraje to-
La cual no fue aceptada por el gobierno pe- das las controversias “que no hayan podido
ruano que a través de su canciller, José de la ser solucionadas por negociaciones directas”
Riva Agüero, presentó una contrapropuesta (artículo 1) y a celebrar un Convenio Espe-
más favorable a su país, que no llegó a ser con- cial para cada disputa que surgiese, el cual
siderada por el gobierno boliviano debido a la debía “determinar la materia de la controver-
guerra civil que en esos momentos estalló en sia, fijar los puntos que deben ser resueltos,
Bolivia y que no sólo supuso el cambio del go- la extensión de las facultades del árbitro y los
bierno boliviano, sino también de su sede, de procedimientos que habrían de observarse”
Sucre a La Paz. (artículo 2).
Además, el Tratado establecía que el árbitro pendiente ambas Repúblicas, a fin de obte-
tendría la obligación de fallar con estricta su- ner un fallo definitivo e inapelable, según el
jeción a las prescripciones del Derecho Inter- cual todo el territorio que en 1810 pertene-
nacional y al principio americano del uti possi- cía á la jurisdicción o distrito de la antigua
detis de 1810 en cuestiones de límites (artículo Audiencia de Charcas, dentro de los límites
8) y el deber de admitir el recurso de revisión del Virreinato de Buenos Aires, por actos
de su sentencia, “cuando la sentencia haya sido del antiguo soberano, sea de la República de
en todo o en parte la consecuencia de un error Bolivia; y todo el territorio que en esa mis-
de hecho que resulte de las actuaciones o do- ma fecha y por actos de igual procedencia
cumentos de la causa” (artículo 12). pertenecía al Virreinato de Lima, sea de la
República del Perú (Pers 1977, 165).
Pero antes de referirnos a la ejecución de estas
cláusulas, en el arbitraje argentino, cabe des- Ese mismo Tratado establecía que si los actos
tacar lo establecido en el Tratado sobre De- o disposiciones de la Corona española no de-
marcación de Fronteras Villazón - Osma de finiesen el “dominio de un territorio de ma-
1902, que delimitó la frontera “desde el punto nera clara”, el árbitro podrá resolver la cues-
de intersección de ésta y el límite de los te- tión equitativamente, pero aproximándose en
Un amor
rritorios ocupados por Chile, conforme a la lo posible al significado de dichas disposicio-
desenfrenado cláusula tercera del Tratado de Paz de 1883, nes y al espíritu que las hubiese informado
por la libertad
al Occidente, hasta los nevados de Palomani al (artículo 4). Asimismo, el tratado definía que
Antología de la
historia política Oriente” (artículo 1). “la posesión de un territorio, ejercida por una
de Bolivia
(1825-2020)
de las Altas Partes Contratantes, no podrá
En otras palabras, el Tratado Villazón-Osma oponerse ni prevalecer contra títulos o dispo-
386 definió el límite fronterizo sur, partiendo del siciones reales que establezcan lo contrario”
punto más septentrional de Chile, atravesando (artículo 5).
el Lago Titicaca, siguiendo por el río Suches y
Tomo I la laguna del mismo nombre en dirección norte Durante el proceso, el Perú protestó por
1825-1952
y hasta llegar a la Cordillera de Apolobamba, la firma del Tratado de Petrópolis de 1903,
a más de 5.000 metros sobre el nivel del mar, porque supuestamente Bolivia había cedido
en los picos de Palomani Tranca y Palomani al Brasil parte del territorio sometido al ar-
Cunca. Respecto a la otra parte de la frontera, bitraje argentino (Novak y Namihas 2013,
se acordó que su delimitación “se reserva para 117-118). No obstante, el artículo 8, introdu-
otra Convención especial” (artículo 1). cido justamente con el fin de evitar ese tipo
de susceptibilidades, aclaraba que Brasil ne-
4.2. El laudo argentino de 1909 gociaría directamente con Perú el territorio
comprendido entre la naciente del Yavarí y el
A finales de 1902, en el momento más dramá- paralelo 11°.
tico de la guerra del Acre, Villazón y Osma,
en nombre de Bolivia y Perú respectivamente, En cuanto al litigio, la defensa boliviana, di-
como ya habíamos dicho, suscribieron el Tra- rigida por Eliodoro Villazón y Bautista Saa-
tado de Arbitraje Juris que en su primer artí- vedra, en base a las cédulas reales de 1563 y
culo disponía: 1573 que dieron jurisdicción a la Audiencia de
Charcas sobre las provincias de Chunchos y
Las Altas partes contratantes someten al jui- Moxos, alegó que la frontera debía seguir el
cio y decisión del Gobierno de la República curso de los ríos Tambopata, Inambarí y Uca-
Argentina, en calidad de Arbitro, Juez de yali, hasta las vertientes del Yavarí (Diez de
derecho, la cuestión de límites que tienen Medina 1909, II).
Por su parte, la defensa peruana, liderada hallarse en posibilidad de definir claramente
por Víctor Maúrtua y Guillermo Riva Agüe- el derecho de las Partes; y si Bolivia solicitó
ro, ante la carencia de títulos específicos so- esa inspección fue precisamente porque in-
bre las tierras en disputa arguyó, en base a las formaciones oficiales le hicieron saber que
cédulas que habían creado las Audiencias de el árbitro no daría estricta y cabal interpre-
Puno y Cuzco, que dichas tierras no eran parte tación a los títulos que presentara al debate.
del Virreinato de Lima ni de la Audiencia de Esa inspección, favorable ó no para la nación
Charcas en 1810, pero si había que definir su que la reclamaba, no habría podido menos
jurisdicción, era claro que le correspondía a la que dar mayor firmeza y garantía al laudo
unidad de mayor rango o jerarquía (Lima) y indicado, probando la absoluta imparcialidad
no así a la de menor importancia (Charcas). del Juez y su propósito de buscar los mayores
En base a ese razonamiento, el Perú alegó que elementos de ilustración en la materia.
la línea fronteriza debía seguir el curso de los
ríos Madidi, Beni y Mamoré, hasta la boca del Así, el árbitro dio lectura a su decisión el 9 de
Iténez (Diez de Medina, 1909, II). julio de 1909 a las cuatro de la tarde, sin la
presencia del representante boliviano en Bue-
El árbitro, José Figueroa Alcorta, presidente nos Aires, José María Escalier, quien por ins-
de la nación Argentina, delegó el estudio y re- trucciones de su gobierno se había excusado
solución del caso a una comisión integrada por de asistir debido a que el contenido del laudo Segundo periodo
Valentín Virasoro, Antonio Bermejo, Leopol- ya era de conocimiento público, pues en horas Bajo la
Constitución de
do Basavilbaso, Manuel Augusto Montes de de la mañana había sido divulgado en todos 1880 que marca
Oca y Carlos Rodríguez Larraeta (Carrasco sus detalles por la prensa bonaerense y limeña el periodo liberal
(1880-1938)
1978, 95), quienes al no encontrar fundamen- (Mercado 1930, 556).
to suficiente en los documentos presentados 387
por las partes para definir la frontera, decidie- De esa manera, el laudo argentino, que se ha-
ron dirimir la controversia en equidad y no en bía elaborado sin considerar los títulos y las
derecho, lo cual si bien estaba previsto en el posesiones de las partes, definió la frontera Conflictos,
negociaciones
artículo 4 del pacto compromisario de 1902, entre Bolivia y Perú de la siguiente manera: y tratados
de la formación
era bajo la condición de que la decisión se partiendo de los nevados de Palomani Gran- territorial de
Bolivia (1880-1938)
aproxime lo más posible al significado de las de, seguirá el curso del río Tambopata hasta
disposiciones reales y al espíritu que las hu- la desembocadura del Lanza, de ahí una línea
biese informado, cosa que definitivamente no hasta el Heath y continuará por éste hasta en-
ocurrió. contrar el Madre de Dios, donde continuara
hasta la boca del Toromonas, en su afluente
De hecho, cuando las autoridades bolivianas del margen derecho, desde donde se trazará
se enteraron de que el árbitro resolvería el una línea recta hasta el punto de intersección
caso en equidad, sin considerar los títulos de con el río Tahuamanu en la longitud 69° al
las partes, solicitaron una inspección ocular en oeste de Greenwich, y siguiendo ese meridia-
el terreno, con el propósito de que se verifique no hacia el norte hasta encontrar el deslinde
la posesión de las partes. No obstante, esa so- de otra nación, que no es parte de esta con-
licitud fue denegada bajo el argumento de que troversia.
estaba “fuera del tiempo hábil”. Al respecto, el
insigne diplomático boliviano, Eduardo Diez Esa decisión significaba que, de los cerca de
de Medina (1909, 48) escribió: 150.000 kilómetros cuadrados de territorio so-
metido al arbitraje, el laudo adjudicó 78.000 al
Todo tiempo era hábil para ilustrar el criterio Perú (52 por ciento) y 72.000 a Bolivia (48 por
del Juez, quien abrigaba la convicción de no ciento). Pero aún más inequitativo resultaba el
hecho de que varias poblaciones bolivianas de los dos gobiernos se interrumpieron a partir
la zona, como la barraca San Lorenzo, el fortín del 20 de julio de 1909, cuando el canciller de
Abaroa, el Illampu, el Tambopata, Palma Real, la Argentina, Victorino de la Plaza, remitió
Chivé y otros, habrían tenido que pasar al Perú una nota al representante boliviano, José Ma-
si el laudo se ejecutaba. De todos esos lugares, ría Escalier, intimándole a salir del territorio
como decía el entonces presidente boliviano Is- argentino dentro del término de 24 horas y
mael Montes, “sería preciso retirar nuestras au- comunicándole que su gobierno entiende que
toridades, separar nuestras guarniciones, arriar “una vez dictado el fallo y comunicado a una y
nuestra bandera” (Mercado 1930, 555). otra parte, ha quedado definitivamente ejecu-
toriado” (Carrasco 1978, 99).
El deslinde que establece el fallo, no res-
ponde á una justa apreciación de los títulos Sumado a ello, la cancillería de Lima declaró
presentados al debate, ni menos á la equidad que la falta de aceptación al laudo sería consi-
que invoca el árbitro para justificar la mons- derada como una declaratoria de guerra (Mer-
truosidad que aquel entraña. Desde luego, cado 1930, 558), lo que llevó a un estado pre-
si como asevera el árbitro, no halló funda- bélico, “por la movilización de las fuerzas de
mento suficiente para considerar como línea ambos países a la frontera” (Pons 1980, 188).
Un amor
divisoria entre la Audiencia de Charcas y el
desenfrenado Virreinato de Lima, en el año 1810, ni una Ante esa situación, el recién asumido gobierno
por la libertad de Bolivia, presidido por Eliodoro Villazón,
ni otra de las demarcaciones sostenidas por
Antología de la
historia política las respectivas defensas de los Estados com- el mismo que como canciller había sellado
de Bolivia
prometidos, ¿por qué título, en qué conside- los límites del sur con el Perú, respondió con
(1825-2020)
ración se funda para entregar territorio, no reciprocidad a la Argentina, expulsando a su
388 solamente alegado sino poseído por Bolivia, a representante con igual plazo de 24 horas, y a
su contendiente? (Diez de Medina 1909, 10). través de una circular firmada por el canciller
Daniel Sánchez Bustamante y remitida a todos
Tomo I El gobierno de Bolivia, que no estaba dispues- los países del continente, manifestó:
1825-1952
to a entregar lo que ya poseía, rechazó el laudo
No hemos creído jamás que el hecho de
argentino desde que lo conoció, no por per-
formular observaciones y reservas, al frente
judicial sino por haberse dictado fuera de los
de una sentencia arbitral, importe una acti-
límites del pacto compromisario (ultra petita)
tud de guerra. Tal criterio, está en abierta
de 1902, que, si bien había previsto aplicar la
contradicción con los dogmas del Derecho
equidad en algunos casos, ésta tenía que darse
y con la eficacia misma del principio de
bajo ciertas condiciones que no se cumplieron.
arbitraje, que deja expedita la demanda de
Si el árbitro no encontró fundamento suficien-
nulidad en ciertos casos en que el juez, por
te en las disposiciones reales, entonces debió
respetable que fuese, hubiese sido víctima
haberlo buscado en el derecho posesorio de las
del error, de la precipitación o de la extrali-
partes, que no era excluyente en su aplicación
mitación de sus poderes.
de la equidad como después quisieron enten-
der argentinos y peruanos. No pensamos ni remotamente en provocar
al Perú, pero iremos al terreno de nuestra
4.3. El Tratado Sánchez defensa, en caso de que la agresión venga
Bustamante-Polo de 1909 de parte de él, e iremos con todo el impulso
que nos señala la conciencia de nuestro de-
El rechazo de Bolivia al laudo argentino ten- recho y de nuestras fuerzas, para rechazar
sionó los vínculos entre La Paz y Buenos Aires cualquier ataque a nuestra soberanía (Mer-
a tal punto que las relaciones diplomáticas de cado 1930, 558).
No obstante, pese al estado prebélico, a los la zona (al menos las más importantes) para
pocos días se reiniciaron las conversaciones asegurar una relación bilateral armónica y sos-
entre Sánchez Bustamante y el representante tenible, como efectivamente después sucedió;
peruano en La Paz, Solón Polo Vega, quien también es cierto que la dignidad y firmeza
había sido canciller de su país en dos ocasiones con la que actuaron los diplomáticos bolivia-
y volvería a serlo en otras dos ocasiones más. nos fueron determinantes a la hora de estable-
Conversaciones que finalmente darían fin de- cer los límites.
finitivo al asunto de límites boliviano-perua-
no mediante el Tratado de Rectificación de Tan justas y legítimas eran las reclamaciones
Fronteras Sánchez Bustamante-Polo, del 17 bolivianas que el gobierno peruano tuvo que
de septiembre de 1909, que modificó la línea aceptar la modificación de lo que ya había
trazada por el árbitro argentino de manera conseguido mediante un laudo arbitral que se
sustancial, “salvando así casi todas las posesio- suponía definitivo, inapelable y ejecutoriado.
nes de las que pudo despojarle ese fallo” (Diez En relación al laudo arbitral, Bolivia recupe-
de Medina 1919, 78). ró cerca de 7.000 kilómetros cuadrados de
territorio (Mercado 1930, 565). Las autori-
Aunque el nuevo trazo le daba al Perú mayor dades peruanas dijeron que si bien el Tratado
presencia en la zona situada entre los ríos Lan- Polo-Bustamante otorgaba mayores extensio-
za y Tambopata, Bolivia obtenía un espacio nes a Bolivia, resultaba ventajoso para el Perú Segundo periodo
aún más amplio al norte del Madre de Dios, porque conseguía acceso al río Lanza y mayor Bajo la
Constitución de
donde estaban las principales posesiones bo- presencia en la zona aurífera del Tambopata. 1880 que marca
el periodo liberal
livianas, vale decir las barracas Chivé, Illampu Además de que Bolivia recibía lo que ya poseía (1880-1938)
y Santa Elena. No obstante, las barracas Pal- (Belaunde 1967, 371).
ma Real, San Lorenzo, Abaroa y otras, queda- 389
ron dentro de la soberanía peruana (Mercado Un segundo motivo no menos importante fue
1930, 560). la intranquilidad que generó en Perú el posi-
ble apoyo de Chile a Bolivia, en caso de que Conflictos,
negociaciones
Así, el Tratado Sánchez Bustamante-Polo es- el asunto limítrofe no se resolviera pacífica- y tratados
de la formación
tableció: mente. Los gobernantes peruanos recibieron territorial de
Bolivia (1880-1938)
con inquietud las noticias que llegaban de La
A efecto de que los límites fijados por el Paz, respecto al apoyo en armas y dinero que
Árbitro, se amolden en lo posible a los ac- las autoridades chilenas le habían ofrecido al
cidentes naturales del terreno y respondían encargado de negocios de Bolivia en Santiago,
mejor a las conveniencias recíprocas de am- Luis Arce (Abecia 1979, 376-377).
bos países interesados, los Gobiernos de
Bolivia y del Perú han resuelto, mediante el Aunque las autoridades chilenas negaron todo,
presente Pacto efectuar las permutas y con- acusando a Arce de faltar a la verdad, después
cesiones de terreno que, de común acuerdo se supo que el gobierno de Chile había bus-
consideran necesarias al propósito que abri- cado comprometer a Bolivia en una alianza
gan de que las fronteras de uno y otro país contra el Perú, en la que también participa-
queden arregladas en una forma que consul- rían Ecuador y Brasil. No obstante, esas in-
ten su seguridad y eviten toda desinteligen- tenciones no prosperaron, según el canciller
cia posterior (artículo 1). chileno Edwards, porque no se cumplieron
ciertas condiciones: “se suponía un concierto
Si bien es cierto que el gobierno peruano de con Brasil, que no existe; se suponía una deci-
Augusto Leguía había comprendido que era sión firme de Bolivia, que no existe” (Köning
mejor reconocer las posesiones de Bolivia en 1927, 213).
De hecho, seguramente por esos motivos, el aceptó lo primero, el 16 de febrero de 1887
8 de septiembre de 1909, es decir a tan solo se suscribió el Tratado Tamayo-Aceval, que
nueve días de suscribirse el Tratado Polo-Sán- dividía el Chaco boreal en tres segmentos: el
chez Bustamante que puso fin a la controver- norte para Bolivia, el sur para el Paraguay y
sia limítrofe boliviano-peruana, el Perú firmó el centro, justamente la parte con acceso a la
con el Brasil el Tratado Río Branco-Velarde, fracción navegable del río Paraguay, entre el
que completó la demarcación de las fronteras río Apa y una legua al norte de Fuerte Olim-
entre esos dos países. po, quedaba sometida al fallo arbitral del Rey
Leopoldo II de Bélgica (artículo 2).
5. Con Paraguay (1879-1938) Ese tratado tampoco fue ratificado por el con-
greso del Paraguay y, muy por el contrario, el
5.1. Los principales antecedentes 13 de septiembre de 1888, las fuerzas militares
del conflicto de ese país ocuparon el destacamento bolivia-
no de Puerto Pacheco, un acto de guerra que
En 1879, tras conocerse el laudo Hayes, que ocurría además cuando aún estaba vigente el
había adjudicado al Paraguay una parte im- plazo para ratificar el Tratado de 1887. Tan
Un amor
portante del Chaco boreal que Bolivia consi- pronto la noticia llegó a Bolivia, el gobierno
desenfrenado deraba suya, comprendida entre el río Verde y decidió romper relaciones diplomáticas con
por la libertad
la desembocadura del Pilcomayo; la cancille- Asunción, aunque el ministro Pinilla, que ha-
Antología de la
historia política ría boliviana decidió designar a don Antonio bía quedado a cargo de la misión diplomática,
de Bolivia
(1825-2020)
Quijarro, como ministro plenipotenciario en ya se había retirado de esa capital, protestando
Asunción, con el fin de cerrar la cuestión de de la manera más solemne y respetuosa por la
390 límites pacíficamente, mientras aún se libraba ofensa inferida. Muy por el contrario, el con-
la guerra con Chile. greso de nuestro país, en lugar de sumarse al
repudio por semejante afrenta, decidió ratifi-
Tomo I Así, el 15 de octubre de 1879, se suscribió en car el Tratado Tamayo-Aceval, que reconocía
1825-1952
Asunción el Tratado Quijarro-Decoud, que la soberanía boliviana sobre Puerto Pacheco,
dividía el Chaco boreal sin considerar los tí- el 23 de noviembre de 1888 (Nieto 1928, 11).
tulos de las partes, mediante una línea parale- Si bien las relaciones diplomáticas fueron res-
la que partiendo de la desembocadura del río tablecidas rápidamente, por iniciativa del pre-
Apa (22°), llegaba al Pilcomayo. No obstante, sidente paraguayo Patricio Escobar; el con-
si bien ese Tratado respetaba el laudo Hayes greso de ese país no hizo más que postergar
y el Tratado argentino-paraguayo de 1876, el la consideración del Tratado y el gobierno de
Congreso del Paraguay no lo ratificó y des- Asunción lo declaró unilateralmente “caduco”
pués, cuando se supo que Bolivia había perdi- (Mercado 1929, 107-114).
do la guerra con Chile, a mediados de 1886,
el gobierno paraguayo decidió establecer una Ante esa situación, la cancillería boliviana de-
guarnición militar en Fuerte Olimpo (21°), en cidió enviar otra misión diplomática a cargo
un lugar que, según ese mismo tratado, era te- de don Telmo Ichaso, quien, junto al canci-
rritorio boliviano (Mercado 1929, 95). ller paraguayo, Gregorio Benítez, firmaron el
Protocolo de 1894 que declaró la caducidad
El gobierno boliviano acreditó entones a don de los dos anteriores tratados y encaminó las
Isaac Tamayo como ministro plenipotenciario negociaciones hacia una transacción definitiva
en Asunción, con las instrucciones de gestio- que, sin discusión ni examen de títulos, deslin-
nar la revisión del Tratado de 1879 o firmar de los derechos territoriales de ambas Repú-
uno nuevo; y como la cancillería paraguaya no blicas. De esa manera, tras fuertes discusiones
y la mediación del Uruguay, el 23 de noviem- Además, ese protocolo establecía un statu quo
bre de 1894 se suscribió el Tratado Ichaso-Be- que los negociadores paraguayos usarían des-
nítez, que estableció la frontera mediante una pués para justificar sus avances sobre el terri-
línea recta que, partiendo a tres leguas al norte torio disputado, arguyendo que dicho statu quo
de Fuerte Olimpo, en la margen derecha del rige únicamente en la zona litigiosa y no así en
río Paraguay, cruce todo el territorio disputa- toda la región del Chaco, como sostenía Boli-
do hasta encontrar el brazo principal del Pil- via (Nieto 1928, 66).
comayo, en el punto de intersección de los 61°
28’del meridiano de Greenwich (artículo 1). No obstante, debido a la muerte súbita del mi-
nistro boliviano Emeterio Cano, quien debía
Con este acuerdo, el Paraguay obtenía 458 le- negociar el pacto compromisario del arbitraje,
guas cuadradas más respecto al anterior Trata- y la renuncia del árbitro, el presidente Figue-
do, pero su congreso tampoco lo ratificó. En roa Alcorta, justamente por lo ocurrido en el
vista de ello, el gobierno de Bolivia decidió no caso de la controversia limítrofe boliviano-pe-
remitirlo al congreso y el Tratado Ichazo-Be- ruana; el 5 de abril de 1913 se suscribió en
nítez, así como los dos anteriores, jamás entra- Asunción el Protocolo Mujía-Ayala, mediante
ron en vigencia (Mercado 1929, 120). el cual se declaró la caducidad del Protocolo
Pinilla-Soler en la parte referida a los límites
Pasaron varios años en los que Paraguay si- y al arbitraje, pero no en relación al statu quo, Segundo periodo
guió avanzando sobre el territorio disputado que debía seguir en vigencia, “mientras se lle- Bajo la
Constitución de
y Bolivia continuó tratando de detener ese ve a cabo el arreglo directo o se pronuncie el 1880 que marca
el periodo liberal
avance diplomáticamente, cediendo cada vez fallo arbitral” (artículo 4). (1880-1938)
más. En ese sentido, el 12 de enero de 1907,
tras los fallidos intentos de las misiones So- Devino entonces un periodo en que ambos 391
ria Galvarro, Quijarro y Cano en Asunción; el países hicieron grandes esfuerzos por sentar
canciller boliviano y el ministro de hacienda soberanía en el Chaco, estableciendo fortines
paraguayo, reunidos en Buenos Aires bajo los militares en el territorio disputado. Argentina Conflictos,
negociaciones
auspicios del canciller argentino Estanislao ofreció nuevamente sus buenos oficios que, si y tratados
de la formación
Zeballos, suscribieron el Protocolo preliminar bien fueron aceptados por las partes en 1924, territorial de
Bolivia (1880-1938)
Pinilla-Soler que sometía al fallo arbitral del no se hicieron efectivos hasta 1927, después
presidente argentino: “la región comprendida de que fracasaran las misiones paraguayas de
entre el paralelo 20° 30’y la línea que en sus López y Guggiari en La Paz y se produjera
alegaciones sostenga al norte el Paraguay; y en el incidente de fortín Sorpresa, el 26 de fe-
el interior del territorio entre los meridianos brero de ese año. En efecto, el 22 de abril se
61° 30` y 62° oeste de Greenwich” (artículo 1). suscribió en la capital argentina el protocolo
Gutiérrez-Díaz de León, que reiteró la acep-
Dicho de otro modo, Bolivia retrocedía hasta tación de las partes al ofrecimiento argentino
el meridiano 62° y dejaba la parte más estraté- y propició la celebración de las Conferencias
gica del Chaco, es decir la fracción navegable de Buenos Aires, que se extendieron hasta me-
del río Paraguay, y otra más, al norte, que el diados de 1928, sin tampoco alcanzar ningún
Paraguay no había pretendido antes; a la de- acuerdo (Mercado 1930, 287).
cisión del presidente argentino Figueroa Al-
corta, que poco después emitió un fallo sobre Poco después, el 5 de diciembre de 1928,
la cuestión limítrofe boliviano-peruana que, un importante contingente militar paragua-
como hemos visto, le entregaba al Perú pobla- yo ocupó el fortín boliviano Vanguardia, en
ciones bolivianas enteras, en aplicación de una lo que incluso hoy es territorio boliviano,
equidad mal interpretada. y Bolivia respondió rompiendo relaciones
diplomáticas y capturando a su vez, los forti- ocupación que provocó el retiro del Paraguay
nes paraguayos Boquerón y Mariscal López. de la Comisión de Neutrales y el comienzo de
Ante lo cual, la Conferencia Americana de la guerra del Chaco (Abecia 1979, 532-540).
Conciliación y Arbitraje, que se hallaba reu-
nida en Washington, ofreció sus buenos ofi- En efecto, a mediados de julio, las fuerzas pa-
cios que fueron aceptados por las partes el 3 raguayas retomaron el control de la laguna
de enero de 1929 mediante el protocolo Diez Chuquisaca y Salamanca, dejando de lado su
de Medina-Ramírez, que definió constituir cautela inicial, ordenó el contraataque que se
una comisión de investigación y conciliación materializó a finales de julio en la captura de
que estaría conformada por los delegados de los fortines paraguayos Corrales, Toledo y Bo-
las partes y de cinco países neutrales: Colom- querón (Abastoflor 2019, 71).
bia, Cuba, Estados Unidos, México y Uruguay
(Brockmann 2012, 315). Si bien Salamanca consiguió demostrar que
Bolivia pisaba fuerte en el Chaco, no era lo
La referida comisión, después de un estudio más aconsejable en esos momentos, porque
de la situación, estableció que “el empleo de el Paraguay podía movilizar a miles de hom-
medios coactivos por parte del Paraguay en bres sobre la zona en pocos días, mientras
Un amor
Vanguardia determinó la reacción de Boli- que nuestro país iba a necesitar varios meses.
desenfrenado via”; y que, por tanto, las cosas debían res- Ciertamente, al igual que había sucedido en el
por la libertad
tablecerse al pie que tenían antes del 5 de Acre y más temprano en el Litoral, las exten-
Antología de la
historia política diciembre, las relaciones diplomáticas tenían sas distancias y las enormes dificultades geo-
de Bolivia
(1825-2020)
que reanudarse, el Paraguay debía recons- gráficas que los soldados bolivianos tuvieron
truir el fortín Vanguardia y Bolivia abando- que sortear para llegar al teatro de operacio-
392 nar Boquerón (Brockmann 2012, 317). To- nes, representaron una gran desventaja frente
dos estos puntos se cumplieron y el peligro al enemigo que, además de encontrarse más
se alejó temporalmente, pero los dos países cerca de la zona de conflicto, gozaba de un ac-
Tomo I reforzaron sus posiciones en el Chaco y la ceso fluvial expedito al mismo, a través del río
1825-1952
guerra ya era inminente. Paraguay.
5.2. La Guerra del Chaco (1932-1935) Después de que el Paraguay retornara a la Co-
misión de Neutrales, ésta solicitó a las partes el
Desde el ataque paraguayo a Vanguardia hasta cese de las hostilidades y el envío de informes
el inicio de la guerra el 15 de junio de 1932, en relación a los hechos ocurridos. Bolivia se
la Comisión de Neutrales continuó trabajando negó a lo uno y a lo otro, y ante el pedido pa-
en Washington con el fin de evitar el conflicto raguayo de realizar una investigación, el Can-
y mientras aún se discutía en esa instancia el ciller boliviano, Julio Gutiérrez, respondió:
pacto de no agresión que había propuesto Bo-
livia, las fuerzas militares bolivianas ocuparon No nos interesan las investigaciones que
el fortín paraguayo Carlos Antonio López, no definan la cuestión fundamental. Bolivia
situado a orillas de la estratégica laguna Chu- desea la solución final del pleito. No quiere
quisaca, también conocida como “Pitiantuta”. estar perennemente de guardia en el Chaco
Lo que pasó fue que los jefes militares boli- conteniendo los avances del Paraguay. Es
vianos, con un criterio muy distinto al del por eso que el país ha reaccionado con todas
presidente Daniel Salamanca, que en esos mo- sus fuerzas, resuelto a liquidar por armas el
mentos quería evitar el casus belli y encauzar pleito en que defendemos un territorio que
el diferendo por la vía diplomática; desobe- consideramos nuestro históricamente (Díaz
decieron sus órdenes e instruyeron la referida 1954, 98).
Seguidamente, el 3 de agosto de 1932, la Co- porque sospechaba de la componenda argenti-
misión de Neutrales hizo una Declaración, no-chileno-paraguaya. A los pocos días, el go-
suscrita por 19 países americanos, mediante la bierno de Asunción levantó sus reservas y La
cual aseguraron que “no reconocerán arreglo Paz no sólo mantuvo su rechazo, sino que, a
territorial alguno de esta controversia que no través de su canciller, Demetrio Canelas, acu-
sea obtenido por medios pacíficos, ni la validez só a chilenos y argentinos de actuar desvincu-
de adquisiciones territoriales que sean obteni- lados de los otros miembros del grupo ABCP
das por ocupación o conquista por la fuerza y de la Comisión de Neutrales, y de ejercer
de las armas”. Ambos países asintieron, el can- presión diplomática sobre Bolivia al querer
ciller Gutiérrez aseguró que esa Declaración responsabilizarla del fracaso de sus gestiones y
interpretaba “con perfecta exactitud el pen- obligarla a aceptar un arbitraje sin límites, en
samiento boliviano que desde hace cincuenta el que el adversario decidiría qué territorios se
años viene protestando contra la guerra de pondrían en tela de juicio (Abecia 1979, 557).
conquista”, y el canciller paraguayo, Higinio
Arbo, señaló que “se honra en expresar su ad- Tras el fracaso de esas gestiones, Paraguay de-
hesión absoluta” (Díaz 1954, 100 y AG/ONU claró la guerra a Bolivia el 10 de mayo de 1933,
1977, XXXII). con el propósito de permitir que los países veci-
nos, especialmente Argentina y Chile, cortasen
No obstante, el 9 de septiembre, las fuerzas el paso de armamentos a través de sus respecti- Segundo periodo
paraguayas cercaron el fortín Boquerón que se vos territorios, en nombre de una “neutralidad” Bajo la
Constitución de
encontraba en posesión de Bolivia, en uno de que solo afectaba a Bolivia. Canelas denunció 1880 que marca
el periodo liberal
los episodios más memorables de la contienda la declaratoria de guerra paraguaya ante la Liga (1880-1938)
y de la historia militar, por el heroísmo que de las Naciones, de donde surgió una nueva
demostraron los soldados bolivianos que, al propuesta de tregua y arbitraje que fue acepta- 393
mando del coronel Manuel Marzana, y sin po- da inicialmente por las dos partes, pero cuando
der reabastecerse de vituallas ni municiones; se supo que el ejército boliviano había lanzado
resistieron durante 20 largos días el embate de una ofensiva sobre Nanawa, el Paraguay se re- Conflictos,
negociaciones
las fuerzas paraguayas, que, con un contingen- tractó (Ramallo 1938, 62). y tratados
de la formación
te diez veces más numeroso, lograron final- territorial de
Bolivia (1880-1938)
mente retomar Boquerón a un costo tan alto La Liga de las Naciones insistió en la bús-
que la prensa asuncena lo calificó como una queda de una solución a través de la comisión
“victoria pírrica” (Salazar 2013, 198). ABCP, pero tampoco tuvo éxito, las gestiones
que hizo el canciller brasilero Afranio de Me-
En el ámbito diplomático, después de que la llo Franco fracasaron, así como también fraca-
Comisión de Neutrales hiciera otras dos pro- só la incursión del general Hans Kundt sobre
puestas de solución que tampoco prosperaron, Nanawa, que derivó en una estrepitosa derro-
el canciller argentino, Carlos Saavedra Lamas, ta para Bolivia (Abstoflor 2019, 72).
decidió tomar la iniciativa y en el marco de
un grupo conformado por Argentina, Brasil, En esas circunstancias, la Liga conformó un
Chile y Perú (ABCP), presentó una fórmula de Comité integrado por cuatro europeos y un
tregua y arbitraje que, con la firma del canci- mexicano que, entre noviembre de 1933 y
ller chileno Miguel Cruchaga, se convirtió en febrero de 1934 visitaron Montevideo, Asun-
el Acta de Mendoza, acordada entre el 1 y 2 de ción, La Paz, Buenos Aires y el Chaco; para
febrero de 1933 (Zuccarino 2018, 8). sostener reuniones con todos los principales
protagonistas de la contienda incluido Saa-
Pero mientras el Paraguay aceptó el Acta con vedra Lamas. En eso, tras la decisiva victoria
algunas reservas, Bolivia la rechazó de plano paraguaya en Campo Vía y mientras aún se
desarrollaba la Séptima Conferencia Pana- Paraguay decidió abandonar la Liga y casi de
mericana en Montevideo, el presidente para- inmediato, Argentina y Chile, interesados en
guayo, Eusebio Ayala, solicitó un armisticio quedarse con los lauros de la resolución del con-
de diez días que cuando entró en vigor solo flicto, ofrecieron sus buenos oficios. Paraguay
se pudo ampliar cinco días más, debido a la aceptó en un solo trámite y Bolivia, después de
tenaz negativa de las autoridades paraguayas, un análisis en el que prevaleció lo político por
que no tardaron en darse cuenta de que la tre- sobre lo diplomático, también lo aceptó. En
gua estaba favoreciendo a la reorganización y efecto, en contraposición al canciller Alvéste-
formación del ejército boliviano (Querejazu gui y a la mayoría de los diplomáticos consulta-
1981, 230-232). dos, que eran partidarios de mantener el asunto
en el Consejo de Liga; el presidente José Luis
El Comité de la Liga dio por terminados sus Tejada Sorzano, que había reemplazado a Sala-
trabajos y tras la victoria boliviana de Cañada manca en diciembre de 1934; decidió continuar
Strongest, Saavedra Lamas creyó oportuno las negociaciones en Buenos Aires, aceptando
lanzar una nueva propuesta que había sido con- el ofrecimiento del enviado confidencial de
sensuada previamente con el Paraguay, pero Chile en La Paz, Félix Nieto del Río (Quere-
que tampoco fue aceptada por Bolivia. Así, las jazu 1981, 374-381 y Barrera 2011, 193).
Un amor
discusiones se trasladaron a Ginebra, donde
desenfrenado el Consejo de la Liga de las Naciones resolvió Al otro lado, en el Paraguay, muchos creían que
por la libertad
prohibir la venta de armas y municiones a las el costo de la guerra podría ser generosamente
Antología de la
historia política partes beligerantes (Borba 2016, 15) y la Asam- compensado con la zona petrolífera del Chaco,
de Bolivia
(1825-2020)
blea aprobó la aplicación integral de los proce- que se encuentra justamente al oeste del Para-
dimientos del Tratado de Versalles, tal como lo petí; según el ministro paraguayo en Santiago,
394 había solicitado el delegado boliviano, Adolfo Vicente Rivarola, el presidente Ayala había es-
Costa du Rels, con el propósito de mantener la crito que además de pagar las pérdidas de la
consideración del asunto del Chaco en el Con- guerra, el petróleo podría servir para “levantar
Tomo I sejo de la Liga (artículo XV), donde el Para- al país de la postración en que habrá de quedar”
1825-1952
guay y también la Argentina, eran vistos como (Querejazu 1981, 369). Pero en junio de 1935,
los principales responsables de la prolongación después de la victoria boliviana en Villamontes
de la guerra (Querejazu 1981, 313). y las dificultades logísticas que empezaron a en-
frentar las tropas paraguayas, por estar por pri-
Esa importante victoria diplomática, obteni- mera vez lejos de sus fuentes de abastecimiento,
da gracias a las gestiones del canciller David el gobierno de Asunción tuvo que moderar sus
Alvéstegui y del delegado Costa du Rels, se pretensiones y aceptar el armisticio.
consagró el 16 de enero de 1935, cuando el
Comité Consultivo de la Liga resolvió levan- 5.3. El Protocolo de 1935 y el Tratado
tar el embargo de armas a Bolivia y mantener- de 1938
lo contra el Paraguay, por el rechazo de este
último a una propuesta de solución, que había Atendiendo una invitación del grupo de me-
sido aprobada por más de 20 países (Korableva diadores, integrado por Argentina, Brasil, Chi-
2009, 40-44 y Borba 2016, 19). le, Estados Unidos, Perú y Uruguay,4 los go-
biernos de Bolivia y Paraguay enviaron a sus
En el campo de batalla, muy por el contrario, plenipotenciarios a Buenos Aires a finales de
solo se habían cosechado derrotas en el Car- mayo de 1935, con el fin de acordar la cesación
men, Ballivián y Picuiba, que obligaron al ejér-
cito boliviano a retroceder hasta Villamontes. 4 La invitación no fue suscrita por Chile (Abecia
Ante esa situación, el 23 de febrero de 1935, el 1979, 588).
definitiva de las hostilidades. La delegación de arbitraje en caso de que las negociaciones
boliviana, al mando del nuevo canciller Tomás directas no alcancen buen éxito, designando
Manuel Elío, se hizo presente con trece repre- como árbitro a la Corte Permanente de Justi-
sentantes, seis de ellos plenipotenciarios, entre cia Internacional de La Haya (I/3); promover
los que sobresalían el expresidente Bautista Saa- el canje y repatriación de los prisioneros (I/4);
vedra y el insigne diplomático Eduardo Diez de “La cesación definitiva de las hostilidades so-
Medina; mientras que la delegación paraguaya bre la base de las posiciones actuales de los dos
solo estaba compuesta por tres representantes, ejércitos beligerantes” (II); la desmovilización
a la cabeza del expresidente y canciller, Luis Al- de los ejércitos beligerantes (III/1); y mediante
berto Riart, que era además el único con plenos un protocolo adicional, el compromiso de ob-
poderes (Querejazu 1981, 384). tener la ratificación congresal correspondien-
te en el término de 10 días (Elío 2011, 75-78).
Bolivia buscaba que el armisticio se aplique
simultáneamente al arreglo de la cuestión de Ambos congresos cumplieron con ratificar el
fondo (definición de los límites) o se garanti- Protocolo dentro del plazo establecido y la
ce que esa cuestión sea resuelta mediante un Conferencia de Paz comenzó a trabajar en dos
arbitraje de derecho, sobre todo o casi todo comisiones, una para fijar las líneas interme-
el Chaco. El Paraguay, por su parte, buscaba dias entre las posiciones de los dos ejércitos
validar el avance de sus tropas hacia el Para- en el Chaco y la otra para diseñar y proponer Segundo periodo
petí y las cercanías de Villamontes, a través del fórmulas de solución a la cuestión de límites Bajo la
Constitución de
reconocimiento de las posiciones alcanzadas en Buenos Aires. No obstante, después de 1880 que marca
el periodo liberal
hasta ese entonces, la cesación inmediata de que ambas partes rechazaran una propuesta (1880-1938)
los fuegos y la desmovilización de los ejércitos. presentada por el comité de Buenos Aires a
En cuanto al arbitraje, según Saavedra, la re- mediados de octubre de 1935, no hubo más 395
presentación paraguaya intentaba dejarlo para avances en la cuestión de límites hasta febrero
después o para nunca (Elío 2011, 55). de 1938, cuando Saavedra Lamas fue relevado
en el cargo de canciller. Conflictos,
negociaciones
En las conversaciones, Saavedra Lamas ase- y tratados
de la formación
guró a Elío que Bolivia obtendría “una paz Lo que había ocurrido en ese tiempo fue que territorial de
Bolivia (1880-1938)
honrosa” y que no permitiría el escamoteo Saavedra Lamas, convencido de que el crédito
del arbitraje, que era justamente lo que más de la pacificación del Chaco debía llevárselo
inquietaba al gobierno boliviano. Con esas él mismo y no un grupo de países, aprovechó
promesas que no se formalizaron por escri- su condición de presidente de la Conferen-
to a pesar de las gestiones que realizó Elío, cia para entorpecer los avances de la misma,
el presidente Tejada Sorzano, con el acuerdo dilatando sus decisiones e impidiendo que se
unánime del Consejo de Ministros, autorizó la realicen reuniones sin su presencia. De hecho,
suscripción del Protocolo de armisticio que se según el jefe de la delegación boliviana, David
firmó finalmente en Buenos Aires el 12 de ju- Alvéstegui, el canciller argentino, engolfado
nio de 1935, entre los cancilleres Elío y Riart, en cuestiones diversas de la política interna-
en presencia de los delegados de los países me- cional, no pudo dedicarle siquiera un par de
diadores y del presidente argentino, Agustín horas diarias al asunto, que era lo mínimo in-
Justo (Corbacho et al 1999, 272). dispensable para poder empaparse del tema
(Querejazu 1981, 424).
El Protocolo Elío-Riart determinó convocar a
una Conferencia de Paz a través del grupo me- Así, cuando Saavedra Lamas dejó de presi-
diador y del presidente argentino para, entre dir la Conferencia, ésta recuperó su razón
otras cosas: resolver los diferendos por medio de ser y el comité, a instancias del delegado
estadounidense Spruille Braden, solicitó a los ex Fue así que se terminó aceptando una línea
beligerantes que definan sus pretensiones. De mucho más parecida a la que había propues-
esa manera, el Paraguay presentó por primera to Bolivia, aunque sin el puerto sobre el río
vez algo concreto, una línea que desde el punto Paraguay, al que la delegación paraguaya se
D’Orbigny sobre el Pilcomayo llegase hasta el opuso terminantemente, alegando que sería
Parapetí y de ahí hasta la frontera con el Bra- “una amenaza a su seguridad” (Abecia 1979,
sil, cerca a San Juan (19°). Pero esa propuesta 602). En ese sentido, el 21 de julio de 1938, los
era tan desmesurada que el comité la declaró cancilleres de los dos países, junto a sus dele-
absolutamente inaceptable y no la presentó a gados plenipotenciarios,5 y en presencia de los
la delegación boliviana. Muy por el contrario, representantes de la Conferencia de Paz; fir-
los delegados del comité propusieron una línea maron el Tratado de Paz, Amistad y Límites,
que, partiendo de Linares en el Pilcomayo, pase que restableció la paz entre las dos Repúblicas
por Ingavi y llegue a la confluencia de los ríos (artículo 1) y definió que la línea divisoria en el
Otuquis y Paraguay (20°10’). Bolivia, por su Chaco sería la que determinen los presidentes
parte, propuso una línea muy similar a esta úl- de Argentina, Brasil, Chile, Estados Unidos,
tima, pero con un puerto soberano sobre el río Perú y el canciller de Uruguay, en su carácter
Paraguay en Bahía Negra (20°5’). La delega- de “árbitros de equidad” (artículo 2).
Un amor
ción paraguaya, al mando de Gerónimo Zubi-
desenfrenado zarreta, que según Querejazu (1981, 426) era el Efectivamente, aunque el resultado de ese
por la libertad
más genuino representante de la intransigencia arbitraje político ya estaba definido por un
Antología de la
historia política de su país, rechazó de plano ambas propuestas acuerdo secreto, que los paraguayos habían so-
de Bolivia
(1825-2020)
y la delegación boliviana se enfocó en alejar al licitado para no aparecer ante su pueblo como
Paraguay del Parapetí y de la zona petrolífera. los responsables de la delimitación que final-
396 mente se estableció; el 10 de octubre de 1938
En eso, Bolivia y Brasil firmaron unos Trata- los árbitros designados emitieron su laudo que
dos sobre vinculación ferroviaria y aprovecha- “delimitó” la frontera a partir del punto tri-
Tomo I miento del petróleo boliviano que fortificaron partito Esmeralda (62°37’19”), sobre el Pilco-
1825-1952
la posición de nuestro país en la Conferencia, mayo, y de ahí mediante una línea que pasa
no sólo por la importancia estratégica y geopo- por 10 de octubre, Villazón, 27 de noviembre,
lítica de lo acordado, sino sobre todo porque Palmar de las Islas, coroneles Sánchez, Cho-
mediante unas notas complementarias, nego- voreca, cerrito Jara, 12 de junio y finalmente,
ciadas y suscritas por el ilustre diplomático bo- hasta a la confluencia entre los ríos Otuquis y
liviano Alberto Ostria Gutiérrez (1953, 170), el Paraguay (20°09’58”).
gobierno de Río de Janeiro se comprometió a
“garantizar la integridad territorial de Bolivia”. Con eso, Paraguay retuvo el 75 por ciento del
Además, como Argentina no quiso quedar- territorio disputado y Bolivia los campos pe-
se atrás, su gobierno también quiso gestionar trolíferos, aunque sin lograr acceso a la par-
unos acuerdos de similar alcance con el repre- te navegable del río Paraguay, solo una legua
sentante boliviano en Buenos Aires, Enrique de tierra que penetra hasta ese curso de agua,
Finot, que había reemplazado a Alvéstegui. Es- en la zona pantanosa de su afluente Otuquis
tos entendimientos alarmaron a Zubizarreta, (Querejazu 1981, 440).
que comunicó a su gobierno: “el petróleo le ha
servido a Bolivia de maravilla para ir creando 5 Por Bolivia firmaron el canciller, Eduardo Diez de
intereses en algunos países representados en la Medina, y el delegado ante la Conferencia, Enri-
que Finot; mientras que, por el Paraguay, firmaron
Conferencia y por ese camino se propone con-
el canciller, Cecilio Baez, y los representantes ante
quistar su voluntad en la cuestión del Chaco” la Conferencia de Paz, Félix Estigarribia, Luis A.
(Corbacho et al 1999, 234). Riart y Efraim Cardozo (Elio 2011, 198).
6. Conclusiones sudamericanas, las cuales buscaban apropiarse
de sus riquezas o expandirse para consolidar
Como se ha visto, la formación territorial de su espacio vital, como el caso del Paraguay. De
Bolivia fue un proceso con resultados cierta- hecho, si analizamos la situación actual de las
mente desfavorables para nuestro país en tér- zonas fronterizas, podemos evidenciar que las
minos cuantitativos (kilómetros cuadrados), mismas se encuentran bastante pobladas del
pero no así en términos cualitativos (calidad lado de nuestros vecinos y no tanto del lado
de los territorios conservados y/u obtenidos), boliviano, donde siguen existiendo grandes
porque pese a lo que efectivamente se per- zonas deshabitadas (Google Earth).
dió, cerca de 600.000 kilómetros cuadrados
(véase cuadro 1), es innegable que también En cuanto a los arreglos alcanzados con cada
se logró consolidar un territorio amplio, con uno de los cinco vecinos, cabe distinguir lo
tres pisos ecológicos; rico en recursos orgáni- que fueron, por un lado, los procesos de nego-
cos y minerales; megadiverso; y, como se ha ciación con Argentina, Perú y Paraguay, con
dicho en la introducción, concurrente a tres los que Bolivia mantuvo verdaderas disputas
importantes cuentas hidrográficas de nuestro territoriales por la ambigua e imprecisa deli-
continente. mitación que dejó la administración española;
de lo que fueron, por el otro lado, las nego-
En cuanto a la amplitud del macizo bolivia- ciaciones con Brasil y Chile, con los que no Segundo periodo
no, si consideramos el número de habitan- había ninguna disputa territorial, puesto que Bajo la
Constitución de
tes, Bolivia ostenta actualmente unas de las las fronteras habían sido claramente definidas, 1880 que marca
el periodo liberal
tasas de densidad demográfica más bajas del como hemos visto, en tratados de límites, sus- (1880-1938)
mundo, solo superada en todo el hemisferio critos en 1867 y en 1866 y 1874, respectiva-
occidental por Canadá, que, a diferencia de mente. 397
nuestro país, está conformada por grandes
extensiones de hielo. Al respecto, una de las Esta distinción es importante y necesaria para
razones más importantes por las que Bolivia entender cuáles eran los territorios en disputa Conflictos,
negociaciones
no pudo conservar todo lo que heredó de y cuáles fueron las verdaderas pérdidas territo- y tratados
de la formación
Charcas, fue justamente la escasa población riales de nuestro país, a partir de lo que ya se territorial de
Bolivia (1880-1938)
que tenía sobre todo ese vasto territorio que, había establecido como límite fronterizo. Es
por un lado, poseía y, por el otro, aspiraba; así que, en los casos de Argentina, Perú y Pa-
dejando algunos espacios abandonados en los raguay podemos hablar de territorios disputa-
confines de la patria, no sólo por las gran- dos, porque no había un límite fronterizo esta-
des distancias y dificultades geográficas que blecido; mientras que, en los casos de Brasil y
hemos comentado, sino también por la poca Chile, no había disputas territoriales sino solo
cantidad de habitantes disponibles para po- pretensiones de esos dos vecinos sobre territo-
blarlos y desarrollarlos. De hecho, durante el rios indiscutiblemente bolivianos.
periodo en que se definieron nuestras fron-
teras (1880-1938), la población de Bolivia no Dicho de otra manera, mientras los arreglos
llegó a sobrepasar ni siquiera los dos millo- alcanzados con los tres primeros países signi-
nes de habitantes (Instituto Nacional de Es- ficaron pérdidas territoriales relativas (Para-
tadística 2019). guay), ninguna pérdida (Perú) o incluso una
ganancia (Argentina); los ajustes con Brasil y
Otro factor que incidió en el resultado ob- Chile, en los que estos dos países se anexiona-
tenido fue la posición geográfica de Bolivia, ron los territorios del Acre y del Litoral, res-
emplazada en el centro del subcontinente, pectivamente; representaron pérdidas absolu-
que la dejaba a merced de las otras potencias tas para Bolivia (véase cuadro 1).
Cuadro 1
Bolivia: Territorio disputado, conservado/obtenido y cedido a los vecinos
N° País Territorio disputado Conservado u obtenido Cedido al otro país Saldo (km2)
(km2) por Bolivia (km2) (km2)
1 Argentina 353.874 183.116 170.758 12.358
2 Brasil 0 0 290.230 - 290.230
3 Chile 0 0 158.000 - 158.000
4 Perú 150.000 75.000 75.000 0
5 Paraguay 329.233 82.308 246.925 - 164.617
TOTAL 833.107 340.424 940.913 - 600.489
Nota: 1) los territorios disputados con Argentina, corresponden a 183.116 km2 del Partido de Tarija (Chichas, Lípez y parte del Gran Chaco)
y a 170.758 km2 que, a su vez, corresponden a 130.035 km2 del Chaco Central, 35.910 km2 de la Puna de Atacama y 4.814 km2 de la zona del
Porongal; 2) los 290.230 km2 cedidos al Brasil, corresponden a 102.400 km2 cedidos en 1867 y a 187.830 km2 cedidos en 1903; 3) los 158.000
km2 cedidos a Chile corresponden a 38.000 km2 cedidos en 1866 y a 120.000 km2 cedidos en 1904; 4) los 150.000 km2 (aproximado) disputados
con el Perú son los que se sometieron al arbitraje argentino, el árbitro le reconoció a Bolivia 72.000 km2, pero en 1909, Perú aceptó entregarle
3.000 km2 más; 5) los territorios disputados con el Paraguay corresponden a todo el Chaco Boreal, desde la confluencia entre el Pilcomayo y el
Paraguay hasta el río Parapetí.
Fuente: elaboración propia con datos de los libros consultados.
Sobre este punto cabe aclarar que entre las ra- Gutiérrez, Belisario Salinas, Belisario Boeto,
Un amor
desenfrenado zones que explican por qué los bolivianos no Bautista Saavedra, José María Escalier, De-
por la libertad
han aceptado la pérdida del Litoral, como sí lo metrio Canelas, Daniel Sánchez Bustamante,
Antología de la
historia política han hecho con otras mermas territoriales aún Eduardo Diez de Medina, Alberto Ostria Gu-
de Bolivia
más onerosas en términos cuantitativos, como tiérrez, Adolfo Costa du Rels, David Alvéste-
(1825-2020)
las del Acre y el Chaco Boreal; está el hecho gui, Tomás Manuel Elío y Enrique Finot.
398 de que, como hemos visto, el Tratado de 1904
no se supo construir sobre bases sólidas y
duraderas, sino que muy por el contrario, se Bibliografía
Tomo I quiso imponer y al final se impuso a través de
1825-1952
amenazas y presiones que naturalmente impi- Abastoflor Frey, Jorge. 2019. Guerras de Boli-
dieron desarrollar a partir de allí, unas rela- via. Manual piloto de historia bélica de Bo-
ciones de confianza, amigables y cooperativas. livia. La Paz: Editorial “Los Amigos del
Esa y otras razones vinculadas a la necesidad Libro”.
de acceder libremente a las corrientes del mar, Abecia Baldivieso, Valentín. 1979. Las rela-
como bien dijo Ostria Gutiérrez, han orienta- ciones internacionales en la Historia de Boli-
do la voluntad del pueblo boliviano hacia un via. La Paz-Cochabamba: Editorial “Los
ideal, “Y ese ideal, el ideal portuario, mientras Amigos del Libro”.
no sea alcanzado, vivirá lo que viva la nación AG/ONU (1977) Documentos Oficiales del Tri-
misma”. gésimo Segundo Periodo de Sesiones de la
Asamblea General de las Naciones Unidas.
Por último, a manera de recordar y honrar 52ª Sesión Plenaria. Nueva York-Estados
una vez más a los principales protagonistas de Unidos.
esta historia, que defendieron los intereses de Auad Sotomayor, Walter. 2013. Relaciones Bra-
Bolivia y contribuyeron a construir y formar sil Bolivia. La definición de las fronteras. La
el maravilloso país que tenemos, concluimos Paz: Plural Editores / CERES.
recordando sus nombres: Mariano Baptis- Barrera Aguilera, Óscar Javier. 2011. La Gue-
ta, Federico Diez de Medina, Santiago Vaca rra del Chaco como desafío al panamerica-
Guzmán, Antonio Quijarro, Temlo Ichaso, nismo: el sinuoso camino a la Conferencia de
Isaac Tamayo, Eliodoro Villazón, Heriberto Paz de Buenos Aires, 1934-1935. Anuario
colombiano de historia social y de la cultura Colás García, Pol. 2019. Auge y caída de Andrés
de la Universidad Nacional de Colombia 38 de Santa Cruz y su Confederación: “el impe-
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Constitución de
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el periodo liberal
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Conflictos,
negociaciones
y tratados
de la formación
territorial de
Bolivia (1880-1938)
Estado, Nación, Región
Cochabamba y Santa Cruz, 1826-2006
asignaban toda la gama de poderes regionales, que otros. De tal suerte, que mientras una Bajo la
Constitución de
étnicos y clasistas que, aunque de raíz colonial, amplia y sugerente producción nos muestra 1880 que marca
el periodo liberal
se habían desatado con brío durante el álgido convincentemente que el proyecto fundacio- (1880-1938)
período caudillista y patrimonialista –más co- nal de la modernización oligárquica negó la
nocido como de la “anarquía”– que sucedió a “otredad”5 cultural, excluyendo a los diferen- 405
la caída del sistema colonial y se extendió más tes grupos indígenas y populares en su defi-
o menos hasta la guerra que enfrentó a Bolivia nición de identidad societal; en otros campos
con Chile (1879-1882).4 el conocimiento continúa escaso, y los hechos, Estado, Nación,
Región
por consiguiente, oscuros. Sin embargo, no
Pese a que se ha dicho que el poder “suma cero” es abusivo preguntarse si fueron los sectores
es una ficción, indudablemente centralizar y subalternos –indígenas, mujeres o trabajado-
concentrar el poder –requisitos ineludibles de res– los únicos afectados por la racionalización
una constelación estatal–, debió implicar una oligárquica, como pretende una significativa
compleja sumatoria de ganadores/perdedores parte de la “nueva historia” boliviana. Con
toda seguridad que no. Sin embargo, estas
otras dimensiones no podrán ser descubiertas
3 Estatidad (stateness) implica un conjunto de pro- mientras subsista la tendencia historiográfica,
piedades que definen la existencia de un Estado ya
ya descartada en otros contextos nacionales, a
sea a) materiales, esto es, posibilidades reales de
controlar, extraer y asignar recursos dentro de un analizar global e indistintamente el contexto
territorio definido; b) simbólicas, es decir, capaci- social que dio pie a la sociedad oligárquica o
dad para evocar, crear o imponer valores colectivos aquella que se cristalizó a su derrumbe.
(Oszlak 1978, 11).
4 El caudillo no se hallaba vinculado a ningún poder
o territorio concreto. El mismo era la encarnación En un plano más concreto, digamos que todo
viva de un poder que portaba pegado a su propia Estado que aspira a ser tal, demanda una
persona. Por eso mismo, Manuel Isidoro Belzu po-
día decir, y no metafóricamente, que el gobierno
está donde está mi caballo (para una reevaluación 5 “Otros” la mirada y la imagen, aquellos que repre-
del caudillismo en Bolivia ver Dunkerley (1987), en sentan la negatividad; es decir, la plenitud y desplie-
especial el Capítulo I). gue de nuestra propia presencia.
manera específica de redificar y usar la mate- específica de encarar la cuestión regional, que
rialidad del espacio. Su forma moderna y capi- se dibuja sobre una herencia y un trasfondo de
talista, por lo menos en pensamiento, lo exige largo aliento. Junto a la historia lenta, estruc-
homogéneo, abstracto y unificado. Crea, por tural, de longue durée, hay que estar atento a las
consiguiente, en su devenir fronteras interio- llamadas explosivas de la coyuntura y el acon-
res y exteriores. Señala un entendido: tecimiento. Ya está suficientemente claro que
la disgregación regional nació a fines del siglo
El interior se integra y uniforma, y al mismo XIX del colapso de las redes de comercializa-
tiempo se deslinda el exterior. La existencia ción de origen colonial, lo que posibilitó que
de la nación en el interior presupone por lo el mercado interior boliviano quedara captu-
tanto la existencia de su negación en el ex- rado por mercancías extranjeras (Mitre 1982,
terior, es decir, la existencia de la no nación Langer 1989).
representada por las otras naciones (Már-
mora 1986, 104). Esta circunstancia, acompañada de varias
transformaciones en el sistema político, con-
Establecer cómo se desenvolvió objetivamen- dujo a una relación asimétrica entre un nudo
te este proceso en el caso boliviano entraña pivotal político y económico (La Paz) cada vez
Un amor
indagar por lo menos dos aspectos centrales. más poderoso y una periferia provincial (Co-
desenfrenado Por una parte, recoger la enseñanza de aque- chabamba, Tarija, Santa Cruz, Sucre) cada vez
por la libertad
llas experiencias historiográficas en el sentido más relegada, aislada y conflictuada entre sí.
Antología de la
historia política de que es en el nivel “micro” regional donde Sensiblemente no es ésta la imagen que los in-
de Bolivia
(1825-2020)
mejor se percibe los impactos de las políticas vestigadores conservan de aquellos años. “An-
nacionales; por otra parte, asumir en su totali- tes de 1952, dice uno de ellos versado en temas
406 dad compleja que existe un fuerte componente regionales, el Estado boliviano fue centralizado y
regional –visiblemente expresado en la con- unitario en el contexto constitucional. En la prác-
tienda entre unitarios/federalistas/descentra- tica permitió un amplio margen de descentraliza-
Tomo I listas– en la antesala misma de la constitución ción debido a las características de la organiza-
1825-1952
del Estado moderno en Bolivia. ción económica de la sociedad, sustentadas en
el enclave minero, que no requirió ni centrali-
En este punto preciso, Bolivia pertenece, al zar ni unificar el país” (Romero 1989, 10). La
parecer, a un campo de soluciones diametral- razón argüida para sostener este aserto estriba
mente opuestas. Aquí la consolidación estatal en la escasa voluntad de las elites oligárquicas
y la extensión del capitalismo minero a fin que, con una mentalidad típica de enclave, “se
du siécle en las regiones altiplánicas habrían aplicaron poco a la conformación de un mercado
agravado más bien las tensiones y contro- interno”.6
versias con y entre los sectores dominantes
regionales; no hubo, presumiblemente, ni la Resumiendo: no habría existido centralización
voluntad ni el fondo propicio para un com- en virtud de que el mercado interior mantu-
promiso permanente entre la fracción expor- vo su precariedad y fragmentación; en aisla-
tadora minera con las elites del “interior”, ni miento (presumiblemente) cada región podía
tampoco entre estas últimas Contra ese mis-
mo Estado, pues cada una se avino, a veces en 6 Igualmente, Herbert Klein aprecia mal la situación
pugna entre ellas, a intentar diseñar su propia cuando, evaluando la política ferrocarrilera del pri-
fisonomía. mer gobierno de Ismael Montes (1904-1908), seña-
la que “se dio fin al destructor aislamiento y regio-
nalismo de Bolivia con la apertura de sus mercados
Cada momento histórico, cada situación internos, como nunca había ocurrido antes” (1968,
concreta revela y resucita una modalidad 49).
Segundo periodo
Bajo la
Mujer cochabambina comerciante, c. 1854. Constitución de
Fuente: Exploration of the valley of the Amazon, Lewis Herndon and Lardner Gibbon. 1880 que marca
el periodo liberal
(1880-1938)
moverse a sus anchas con prístina libertad. Por ampliamente en los efectos multiplicadores 407
motivos que explicaremos luego no es lo que del “progreso” generado por el boom minero
pensamos nosotros. inicialmente argentífero (1880-1900) poste-
riormente estañífero (1900-1952), se vieron Estado, Nación,
Región
Poco se gana, por otro lado, atribuyendo el continuamente frustradas. La política eco-
regionalismo y los conflictos sociales que nómica liberalizante que aplicaba el Estado
giraron a su alrededor a la existencia de una central ocasionó una severa restricción de sus
heterogeneidad espacial de origen colonial, oportunidades mercantiles condenándolas a
luego heredada por el régimen independien- participar de un modo subsidiario en las es-
te (Urenda 1987, Finot 1990). Si bien es po- tructuras socioeconómicas en procesos de de-
sible admitir que geográfica o administrati- finición.
vamente hablando, las regiones pasaron de la
Colonia a la República con su misma nomen- Como contrafaz de unas regiones maltrechas,
clatura, esto no es óbice para ignorar que ya se generó un Estado que no gozaba de sólidas
en la República se transformó radicalmente bases nacionales de consenso y que se veía, por
su situación. ello mismo, sometido a la permanente descon-
fianza, regateo y asedio por parte de las elites
En efecto. Si la dispersión y fragmentación regionales, que se consideraban a sí mismas
política y económica constituían indudable- como “socios de segunda” dentro de la cons-
mente una pintura de antecedentes coloniales, telación del poder político y en el usufructo
el desarrollo del capitalismo en Bolivia no sólo de las ventajas de la economía de exportación.
que mantuvo, sino que en algunos casos agra- Y si bien rastrear las mutaciones en el sistema
vó estas distancias. Como resultado, las expec- jurídico/administrativo (leyes, decretos, regla-
tativas de las elites provinciales por participar mentaciones), puede contribuir a establecer
cómo se levantó este escenario, nos dará la- a posteriori y con una lectura anacrónica lo de-
mentablemente más información respecto a su cidamos así. Lo que importa en este punto no
forma que a su esencia o contenido. Los impues- es como leemos ese pasado, sino cómo ellos
tos, las rentas, los presupuestos, las autorida- vivían su presente.
des locales constituyeron factores de compulsa
entre poderes, pero nunca –ésta es nuestra hi-
pótesis básica– su tema medular en la disputa 2. Mercado interior y conflicto regional
entre elites regionales y el gobierno.
Lo que designamos como el mercado interior
No deseamos caer en el economicismo. Des- boliviano no lo era en el siglo XIX y, en propie-
de el marxismo, la unidad del mercado es el dad, hasta las radicales transformaciones ope-
sustento de la nación (y la región). Enfoque radas por la “Revolución Nacional” de 1952,
ciertamente economicista cuestionado por nada más que un “mercado nacional por mer-
corrientes que postulan que la nación es un cados adyacentes” fragmentados y escasamente
proceso cultural e imaginado liberado de tra- autoregulados. Desmembrada como estaba
diciones y pasados (Anderson, 1993). En un la estructura mercantil en múltiples y disper-
enfoque ecléctico señalemos que las defini- sos escenarios locales (muy pocos productos,
Un amor
ciones de región se nutren tanto de elementos como el azúcar, el trigo y la coca lograban una
desenfrenado materiales (mercados, economía, redes socia- dimensión nacional. Primaba en ella una débil
por la libertad
les y naturaleza) y como de aquellos subjetivos red de comercialización (se vendía en el mer-
Antología de la
historia política (el sentimiento de pertenencia a la región). cado, pero no se producía para el mercado) y
de Bolivia
(1825-2020)
Todo territorio es reapropiado simbólica y un intercambio desigual y episódico (por con-
afectivamente. Ambos productos del desarro- siguiente, las diferencias de precios entre mer-
408 llo histórico; ergo cambiantes y nunca fijos. cados incluso cercanos eran notables, como
Según algunos autores, las regiones se insti- también abruptas sus evaluaciones). En sínte-
tucionalizan en la medida en que hay agentes sis, una situación que bien podría tipificarse,
Tomo I y actores sociales que se identifican con ellas retornando una idea de Emilio Sereni expre-
1825-1952
(Buska s.f). sada para la Italia decimonónica, de “casual,
local y mutable singularidad” (1980, 24).
Empero, como trataremos de mostrar a lo lar-
go de estas páginas, los vaivenes del mercado Bajo esa dialéctica, en un contexto precapi-
interior, incluso escaso y disperso, constitu- talista, una región se diferenciaría de otra,
ye la pieza clave para entender los conflictos al contrario de lo que señala una abundante
regionales pre 1925 en Bolivia, en la medida reflexión sobre la regionalización en el capi-
que su cambiante luz, sus claroscuros, pro- talismo,8 menos por su homogeneidad inter-
dujo una reestructuración secuencial de las na o el carácter de las relaciones sociales que
relaciones entre las regiones y el Estado. En contiene dentro de sus márgenes, y mucho
otros términos, es el mercado en sus amplias más por el tipo de articulación comercial que
y complejas ramificaciones el lugar donde sus mantenía con el resto del país. No se trata de
protagonistas sintieron con toda su intensidad ser circulacionistas; pero son los cambios en
el poder del centralismo y la Centralización
Estatal.7 Que quede claro, no porque nosotros
y unificación económica”. Nos parece que, siendo
pertinente la distinción es demasiado “rígida para
describir procesos históricos que son mucho más
7 Ramiro Velasco (1984, 38) distingue entre cen- dinámicos y complejos.
tralismo, la “impotencia estatal” y “resabio antiguo” 8 Entre la abundante literatura sobre este tema, que-
para dotar a un país de una cohesión más estre- remos destacar únicamente el libro compilado por
cha, y la Centralización”resultado de la concentración J.L Coraggio (1990).
el sistema de mercado, como ya lo mostraron Pese a partir de presupuestos diametralmente
hace años las investigaciones de Alberto Flo- opuestos, las corrientes analíticas más tradi-
res Galindo (l976) y Nelson Manrique (1987) cionales y que tenían en la constitución del Es-
para el caso peruano, los que mejor definen tado-nación su eje analítico, obtenían idéntico
las variaciones en la regionalización y el ran- resultado: quedaban lejos de su preocupación
go que asume cada región geo-histórica den- aquellas regiones (aparentemente) localizadas
tro de la sociedad mayor. De ello se deduce fuera del alcance del locus primario-expor-
que las diferentes fluctuaciones –expansivas o tador. El precio que hubo que pagar por esa
recesivas– en los mercados podrían provocar doble omisión fue, sin embargo, muy alto: la
situaciones de avance o retroceso en las rela- comprensión de los espacios interiores quedó
ciones regionales y los respectivos proyectos virtualmente ignorada y consecuentemente la
nacionalizadores impulsados desde las elites historia “nacional” resultó amputada y redu-
(Van Young 1987). cida a analizar únicamente la vida y la razón
de ciudad-puerto o mina, la constitución de
Es claro que esta perspectiva analítica nos li- las clases sociales emergentes del nudo expor-
bra de considerar el problema regional en Bo- tador o, en fin, cualquier otra manifestación
livia como una herencia cultural o económica directamente vinculada al “enclave” en su re-
que permanente intacta desde el mismo perío- lación con la economía-mundo (Colmenares
do colonial (si no desde antes) y nos obliga a 1985). Segundo periodo
quedó convertida en zona de refugio de mi- Ahora bien, no existe lamentablemente un Bajo la
Constitución de
grantes forzados andinos. Situación que posi- estudio de larga duración referido al cultivo 1880 que marca
el periodo liberal
bilitó disponer de fuerza de trabajo con cierta y comercialización de los cereales en Cocha- (1880-1938)
facilidad a una emprendedora y ávida clase de bamba.10 En el caso del trigo afortunadamente
terratenientes españoles, la región se constitu- algunos datos, todavía aislados, nos permiten 411
yó en un importante abastecedor de cereales reconstruir su importancia gravitante en la
para aquel mercado, condición que conservará economía regional: historias, usos y merca-
en lo sucesivo, permitiéndole tender un firme dos diferentes. A su manera ambos cereales Estado, Nación,
Región
lazo hacia el Altiplano, y, en menor grado, ha- expresaban la tensión irresuelta entre la agri-
cia las tierras sureñas u orientales. cultura española y la andina, entre el consu-
mo restringido y el popular, entre el circuito
3.2. Dimensiones del pasado extra regional y el intra regional. En definiti-
va, entre el pan y la chicha. Desde que el In-
La personalidad económica de la región que- tendente Francisco de Viedma llamó en 1788
dó, desde entonces, definida. Su acto primi- la atención sobre la enorme cantidad de maíz
genio, diríamos constitutivo, fue servir y ser –200.000 fanegadas– usadas para elaborar
agrícola en función de otras regiones. En con- localmente el áureo licor, ningún otro dato
secuencia, Cochabamba, enclavada en el cora- posterior desmentirá la importancia del com-
zón geográfico y económico de la Audiencia plejo maíz-chicha en la economía regional. En
de Charcas, tenía poco comparable con el res-
to de las regiones altoperuanas. Fuertemente
9 Existían, además, bolsones de comunidades indíge-
mercantil y con la mirada atenta a las fluctua-
nas en las ricas tierras Valle Bajo (Sipe Sipe, Paso
ciones de precios y los cambios en la demanda y Tiquipaya) y además de las alturas serranas que
minera, Cochabamba asumió para sí la ima- circundaban a los valles, como Tapacarí y Arque.
gen, en ningún aspecto exagerada, de “gra- Estas últimas mucho más improductivas y de me-
nor gravitación en los circuitos mercantiles que las
nero del Alto Perú”, con la que la bautizara a
haciendas.
principios del siglo XVII el geógrafo español 10 Algunas pistas iniciales en Escobari (1990 y Jack-
Vásquez de Espinosa. son)
1836, por ejemplo, se calculó la producción de chicha. El 25 por ciento del mucku se “expor-
maíz en 109.626 fanegadas, mientras que la taba” con destino a Oruro, La Paz e incluso
de trigo habría alcanzado 71.000.11 José María la costa de Pacífico. En buenos términos, a
Dalence, en el primer recuento estadístico na- lo sumo un 21 por ciento de la producción
cional implementado en 1846, dio igualmen- global de maíz vencía las dificultades de los
te por sentado este predominio maicero. Tres pésimos caminos cordilleranos para venderse
décadas más tarde (1878) el balance fue nue- en otras regiones. ¿Qué sucedía con el trigo?
vamente favorable para el maíz, con 150.000 Siempre de acuerdo con Zamudio, por lo me-
fanegadas contra 75.000 de trigo.12 En 1896, nos un 48 por ciento de su producción salía
reiteradamente se confirmó esta diferencia.13 de la región transformada en harina hacia
Cálculos brutos, sin base estadística, pero irre- diversas plazas mercantiles, sustancial mente
futables, eso sí, en cuanto al mayor peso del las altiplánicas y las mineras.
maíz en la economía agrícola regional.14
Es posible que Zamudio, que obviamente
Para nuestros fines conviene precisar el uso tampoco contaba con estadísticas exactas,
y circulación de ambos cereales. Tomemos exagerara la cantidad de maíz convertido en
datos circa 1878, un año antes del conflicto chicha. Es presumible igualmente que una
Un amor
bélico con Chile. De acuerdo con Adolfo parte por determinar todavía del maíz, pero
desenfrenado Zamudio, cónsul peruano en Cochabamba, en ningún caso despreciable, no pasaba por
por la libertad
7/8 partes de la producción maicera, unas el tamiz del mercado y era consumido por los
Antología de la
historia política 131.000 fanegadas, se enrumbaban hacia los productores. No es el caso disputar un punto
de Bolivia
(1825-2020)
mercados de Cliza, Quillacollo y Sacaba, más o menos. Lo innegable es que mientras
donde eran adquiridas y transformadas pos- una buena parte del maíz ingresaba a los cir-
412 teriormente en mucku, materia prima de la cuitos de comercialización locales, un por-
centaje nada despreciable del trigo vivificaba
11 M.H. 1836. Cochabamba. Archivo Nacional de las redes externas.
Tomo I
Bolivia (ANB), Sucre.
1825-1952
12 El Heraldo (Cochabamba), 7 de junio de 1878. Hacia 1870 se calculó, por ejemplo, que la
13 El Heraldo (Cochabamba), 25 de marzo de 1896.
harina elaborada en Cochabamba, molida en
14 Otro circuito, de menor gravitación para el depar-
tamento, aunque muy significativo para la provin- los innumerables molinos hidráulicos estable-
cia de Totora era la coca. La hoja producida en los cidos en las quebradas que circundaban sus
Yungas de Vandiola, Chuquioma, etc., se vendía en valles principales, abastecían un 70 por ciento
el sur boliviano. Por sus propias características, la
del consumo de La Paz, Oruro y los centros
coca totoreña estaba libre de competencia externa,
aunque la acosaba la paceña/yungueña. Su historia, aledaños. El 20 por ciento provenía del norte
y la de la provincia de Totora es, por consiguiente, potosino y un escaso 10 por ciento restante era
diferente a la del resto. Esta reflexión, y seguramen- importado de Chile (Rodríguez Ostria 1990).
te la que extraeríamos de los ritmos, acumulación
y población de las provincias de Ayopaya, Arque,
Tapacarí, Mizque y Campero, nos llevaría a cues- Por esos mismos años, pese a que las exporta-
tionarnos la presunta homogeneidad de la región ciones regionales de tocuyos y bayetas que le
cochabambina. Sin embargo, en el siglo XIX y el dieron merecida fama a la Colonia habían casi
XX hasta 1952 (aunque ciertas tendencias subsisten
sucumbido en los albores de la vida republi-
todavía) la región de Cochabamba se confundiría
con la suerte de sus tres valles (Alto, Bajo y de Saca- cana frente a la competencia extranjera, Co-
ba). Con la ciudad capital en medio de su territorio, chabamba era todavía una importante zona ar-
cerealeros por excelencia, densamente poblados, tesanal-manufacturera, tal vez la única de esa
y fuertemente mercantilizados, poseían la llave de
magnitud en Bolivia. Sus jabones, cueros cur-
acceso al poder y la economía regionales. Para una
historia de la coca en Totora y Vandiola ver Meru- tidos y zapatos, notablemente estos últimos,
via (2000). se vendían por miles en las minas argentíferas
Segundo periodo
3.3. Primer liberalismo y crisis regional Por una parte, tenemos el recurrente debate
entre proteccionistas y librecambistas por la
Al finalizar la segunda mitad del siglo XIX orientación del mercado boliviano. Como se
los ámbitos de circulación mercantil de los sabe, los primeros, como casi en toda Amé-
productos regionales serán puestos en jaque rica Latina, defendieron el mercado interior
coincidiendo con la refundación de la mine- en contraposición a los segundos, que de-
ría argentífera lograda por una nueva elite positaron exclusivamente en manos de una
empresarial con pretensiones de liderazgo economía exportadora de materias primas
Un amor
nacional compuesta por Gregorio Pacheco, los afanes de progreso y modernización. En
desenfrenado José Avelino Aramayo y Aniceto Arce, mucho el caso boliviano, esta conflictiva relación
por la libertad
más dinámica y con mayor disponibilidad de que permeó las luchas políticas en el primer
Antología de la
historia política recursos financieros que su inmediatamente medio siglo de su existencia, se definieron
de Bolivia
(1825-2020)
predecesoras, que todavía pervivían envuelta en favor de los segundos. Desde 1871, tras
en el ropaje colonial.16 En un fenómeno in- el derrocamiento de Mariano Melgarejo, el
414 verso al que normalmente podría suponerse último gran caudillo militar, el liberalismo se
desde ciertas teorías del desarrollo, el auge ca- entronizó en la política y la economía (Mitre
pitalista de la plata no derivó ipso facto en una 1986, Platt 1986).
Tomo I ampliación de la demanda de los productos
1825-1952
locales y por el contrario angostó las posibili- En segundo término, se hallaba la nueva polí-
dades para que las economías regionales acce- tica monetaria que retiró de la circulación a la
dieran, como acontecía en el pasado colonial, moneda feble (francés: débil), cuya abundan-
ventajosamente al mercado andino. te acuñación entre 1830 y 1870, como lo ha
demostrado convincentemente Antonio Mitre
Consideramos que una explicación convin- (1986), había facilitado las transacciones in-
cente de este paradójico fenómeno no debería ternas y operado como un tácito mecanismo
centrarse meramente en constatar un declive devaluador que al encarecer los productos ex-
de la demanda efectiva por efecto de la reduc- tranjeros salvaguardaba a los nacionales de los
ción de la población o la disminución radical avatares de la competencia.
en su capacidad de compra. Para responder a
la interrogante hay que mirar más bien hacia Last but not least, el panorama desfavorable se
los resultados que brotan de la combinación completó con la construcción del Ferrocarril
poco afortunada para algunas regiones boli- Oruro-Antofagasta (1892) promovido por las
vianas entre una serie de las políticas estatales emprendedoras generaciones de propietarios
librecambistas, la modernización de la agri- mineros deseosos de suprimir los obstáculos
cultura y la industria en los países vecinos (y que la antigua manera de usar llamas o mu-
las para conectarse con el Pacífico traía para
16 Para un análisis detallado de este proceso, ver Mi- la exportación de su creciente producción
tre (1981). de plata y paliar igualmente la caída en los
Segundo periodo
Bajo la
Constitución de
Ferrocarril de viaje, c. 1920. 1880 que marca
el periodo liberal
Fuente: Fundación Torrico Zamudio.
(1880-1938)
precios internacionales del mineral argentí- parte, el libre cambio y la virtual ausencia de 415
fero (Mitre 1986, Langer 1987). El “ferro- medidas proteccionistas y de control arance-
carril conquistador”, al decir, de un crítico lario facilitaron una “revolución de los pre-
cochabambino,17 abarató costos, redujo el cios” fomentada por el abaratamiento del Estado, Nación,
Región
tiempo de transporte y lo hizo mucho más costo en el transporte. Al ser desplazadas las
seguro y regular. carretas y arrias de mulas por el humeante fe-
rrocarril, cedió el “mercado cautivo” susten-
Estos procesos “modernizadores”, ampa- tado en el proteccionismo de facto basado en
rados en la tecnología europea, provocaron las múltiples dificultades y excesivo valor de
notables y sentidas consecuencias para la es- trasladar mercancías desde el extranjero ha-
tructura económica boliviana y subsecuente- cia los mercados andinos. Igualmente, puso
mente alteraron el equilibrio entre las distin- al desnudo una tecnología obsoleta a fuerza
tas regiones y en particular Cochabamba y de mano y animal, incapaz de competir con el
Santa Cruz. Señalemos algunas razones. Ari- moderno capitalismo industrial que allende
ca, que había venido desempeñándose como las fronteras locales gozaba de una creciente
el puerto que acogía en tránsito al grueso de productividad.
las importaciones hacia Bolivia, fue sustitui-
do por Antofagasta, desplazándose adicional- Como corolario inevitable de la conjunción de
mente a este último puerto, parte substancial todos estos factores, productos extranjeros si-
del comercio que ingresaba por el norte ar- milares a los producidos localmente pudieron
gentino (Conti 1989; Mitre 198l). Por otra llegar por fin en abundancia y en condiciones
ventajosas a las plazas urbanas y mineras del
17 Lemoine, Joaquín, El Progreso (Cochabamba), 14 y centro de Bolivia. Como veremos más ade-
21 de septiembre de 1890. lante, en Santa Cruz los efectos de la nueva
coyuntura económica fueron especialmente 1885 –agregó posteriormente– “entregó a Bo-
negativos. En Cochabamba, sin duda, franca- livia maniatada a Chile”.19
mente desastrosos. Esta última región ya venía
confrontando una situación delicada ocasiona- Otros notables y liberales cochabambinos,
da por la derrota boliviana en la Guerra del como Ángel María Borda –un hacendado y
Pacífico con Chile. abogado local– luego de constatar los efectos
recesivos en la economía regional, se lanzaron
La ocupación chilena de la provincia peruana discursivamente contra los capitalistas mine-
de Tarapacá y la boliviana de Antofagasta, tra- ros y su política liberalizante.20 Fidel Araníbar,
dicionales mercados cochabambinos, implicó otro reconocido patriarca local y militante
una importante pérdida para los productores liberal, fue muchísimo más lejos. En 1892,
locales, sobre todo para los artesanos y las cuando ya era inminente la amenaza que re-
“maestranzas” que confeccionaban calzados presentaba el ferrocarril Antofagasta-Oru-
de “exportación” (Borda 1884, 4-5; Araníbar ro, que se volcaría ostensiblemente contra la
1891). Como si fuera poco, el vencedor im- economía de hacienda cochabambina, señaló
puso mediante el “Pacto de Tregua” de 1884 descarnadamente que “La ocupación de nues-
y el “Protocolo Complementario” de 1885 tro mercado (es) más grave que la cesión de
Un amor
franquicias aduaneras favorables para sus pro- nuestro litoral”.21
desenfrenado ductos. Como inevitable resultado, harinas,
por la libertad
zapatos y otras mercancías chilenas empeza- Y no se equivocaban para nada. Indiscutible-
Antología de la
historia política ron a socavar el dominio de los productos co- mente, el polémico ferrocarril que arribó a
de Bolivia
(1825-2020)
chabambinos en los mercados mineros y alti- Oruro en 1892 complicó definitivamente el
plánicos. panorama regional. En los vagones comenzó
416 a llevarse mineral de plata para refinarlo en
Lamentablemente no nos es posible estable- Antofagasta; a su retorno, los mismos carros,
cer, por la ausencia de registros estadísticos, regresaban cargados de mercancías adquiri-
Tomo I la magnitud exacta de las importaciones chile- das en el puerto por comerciantes o por las
1825-1952
nas y su impacto puntual sobre el comercio de propias empresas mineras. Oruro minero se
Cochabamba. Queda el tema para una futura dinamizó como plaza mercantil. Florecieron
agenda de investigación; pero es emblemático, casas comerciales de empresarios nacionales
sin embargo, que la elite regional en sus más y extranjeros, alemanes e ingleses. Entre los
reconocidos prohombres y comerciantes se productos que ingresaron, estaba la harina
mostrara francamente alarmada por la nueva chilena de mejor calidad y menor precio, que
situación que le tocaba enfrentar.
Por ejemplo, el alemán Herman von Holten, Holten en un artículo denominado “La cuestión
aduanera en su relación con el departamento de
presidente del “Círculo de Comercio”, domi-
Cochabamba” afirmó: “Los tales traslados de re-
nado por empresarios que tenían sus intere- ciprocidad impuesto por Chile y el Perú no nos
ses económicos en el volumen del tráfico de han dejado nada que llevar a La Paz, el primero,
productos locales hacia el mercado interior, arruinó el negocio de harina, y segundo concluyó
con el envío de azúcar arroz” El Heraldo (Cocha-
afirmó compungido: “La guerra la ha tenido
bamba). 25 de julio de 1889.
la nación y no Cochabamba y sin embargo es 19 Von Holten, Herman. “Tratados de Bolivia” en El
Cochabamba y no la nación la que ha sufri- Heraldo (Cochabamba) 5, 12 y 15 de octubre de
do las consecuencias”.18 “El célebre pacto del 1889.
20 Cfr. María Borda, Ángel “Consideraciones políti-
cas y económicas en la actualidad de Bolivia”. Co-
18 E1 Heraldo (Cochabamba) 27 de junio de 1889. chabamba: Imprenta: La Luz. 1884.
Poco más tarde, el 25 de junio de 1989, Von 21 El Comercio (Cochabamba) 15 febrero de 1892.
Segundo periodo
La otra alternativa para esta posibilidad fue el sión poblacional. Pese a que la migración de Bajo la
Constitución de
frente interno. La particularidad de Cocha- los cochabambinos había extendido el consu- 1880 que marca
el periodo liberal
bamba estribaba en la existencia de un intere- mo de la chicha hacia las zonas productoras (1880-1938)
sante mercado local que no dependía para su del estaño en Oruro y las minas aledañas e
realización de la demanda extra regional ni se incluso, a la costa del Pacífico, no era decidi- 419
hallaba sujeto a la amenaza devastadora de la damente suficiente para compensar la decli-
competencia externa. Gracias a esta ventajo- nación mercantil en otros productos, mucho
sa combinación el “complejo maíz-chicha” al menos para absorber el exceso de producción Estado, Nación,
Región
que aportaban hacendados, pequeños campe- agrícola en aquellas ocasiones en que la natu-
sinos, comerciantes, molineros y productores raleza era propicia con la región.
del “áureo licor”, coadyuvó a impedir que la
situación de la agricultura regional se tornara Pero lo que conspiraba decididamente contra
más álgida. las posibilidades maiceras era una mentalidad
señorial a todas luces infranqueable. Para la oli-
El maíz y la chicha poseían innegablemente un garquía regional, el maíz y la chicha eran pro-
carácter estratégico para Cochabamba. ¿No ductos de y para “indios y cholos”, encontrando
era cierto, acaso, como lo describió en 1906 difícil, si no repulsivo, (re) construir, a partir de
José Araníbar, Secretario de la Junta de Fo- ellos, su hegemonía mercantil. La contradic-
mento, que el eje chicha-maíz provocaba am- ción, nunca resuelta satisfactoriamente, por la
plios efectos multiplicadores?25 La importante elite local, fluctuaba entre la urgencia peren-
urdimbre mercantil se iniciaba con el cultivo toria de contar con el popular mercado de la
maicero, fundamentalmente en los campos del chicha y la necesidad de afirmar sus aires “mo-
valle Bajo y Alto. A continuación, entraban en dernizadores y civilizadores”, lo que les exigía
acción los molinos, básicamente los situados en rechazar y combatir la urdimbre plebeya.26
el Valle de Sacaba (Chimboco, Larati, Molino
Ya hemos constatado el saldo negativo que 27 Tocaremos con cierto detalle este punto cuando
para la región de Cochabamba produjo el analicemos el caso cruceño.
Segundo periodo
Bajo la
Constitución de
1880 que marca
el periodo liberal
(1880-1938)
proyectos y algunos nuevos, tan audaces como Al analizar el caso de Santa Cruz veremos las Estado, Nación,
Región
los otros. El plan parecía simple, aunque en peripecias de este efímero mercado que la de-
la praxis la ejecución era sumamente riesgosa: manda mundial del caucho y la goma llevaba
alcanzar uno de los ríos que se extienden en su hasta los productos de algunas regiones de
pie de monte, fundar un puerto (Santa Rosa o Bolivia.
Todos Santos según el período histórico), y de
allí navegar hasta Trinidad. 3.5. Hacia Oruro por ferrocarril
Cochabamba logró exportar cerveza, harina ¿Qué otras estrategias tejieron las elites co-
de trigo, papas, calzados, sal traída desde el chabambinas para enfrentar el impasse de su
Salar de Uyuni y productos extranjeros segu- economía? ¿En qué medida ellas resultaron
ramente ingresados por Antofagasta. Del Beni exitosas? Con celeridad una amplia gama de
adquirían cueros, suelas, alcohol, cacao, pane- ideas diversas ya veces contradictorias entre
la y algún otro producto tropical. Pese a que sí empezó a acosarlos. Pensaban seguramen-
daba vida a varios comerciantes y productores te en potenciales rebajas impositivas, en la
locales, el mercado de la goma fue marginal disminución de las tasas de interés, en nue-
para la dinámica del mercado de Cochabamba vas tecnologías agrícolas y en ampliar el sis-
basado en la producción de cereales. En 1912, tema de riegos. Devolver, por consiguiente,
en su punto más alto, por el puerto de Santa una cierta rentabilidad a una agricultura en
Rosa se enviaron 833.915 kilos por un valor declive. Todas ellas medidas urgentes y ne-
no establecido. cesarias, pero aún pequeñas para enfrentar
la verdadera envergadura de cerrojo que las hasta Oruro y de paso rompería el dominio que
aprisionaba. los pequeños comerciantes de origen indio/
mestizo ejercían en el comercio regional
Sabían que, en el campo de la política, un
vuelco definitivo y total en la conducta del En 1907, por ejemplo, un cálculo del Círculo
gobierno central en manos de los liberales, si de Comercio de Cochabamba estimó que un
no imposible por lo menos era francamente 75 por ciento del comercio con el altiplano se
difícil, pues demandaba tiempo y complica- hallaba en manos de un “extenso enjambre de
das negociaciones parlamentarias o cabildeos negociantes” compuesto por “gente de pueblo
intensos, que no siempre llegaban a buen y la campaña” (Azogue. etc. al. 1987, 36).
término. Y sin en general no confiaban, por
experiencia propia, en los beneficios de una Las elites cochabambinas habían demandado
irrestricta apertura al exterior de la economía y esperado la prolongación hasta sus lares del
boliviana y tampoco compartían las convic- ferrocarril Antofagasta-Oruro, prácticamen-
ciones liberalizantes de la burocracia estatal te desde el mismo día de su inauguración en
y las elites minero-comerciales, su demanda 1892. Por eso, cuando en noviembre de 1893
por medidas proteccionistas a su industria y la “Sociedad Sudamericana de Exploración y
Un amor
su agricultura no era lo suficientemente vi- Fomento y Colonización”, a la cual se había
desenfrenado gorosa y agresiva para ser tomada en cuenta concedido el derecho de construir “a sus ex-
por la libertad
por un poder central, muy poco afecto a con- pensas” un ferrocarril, denominado “Central”
Antología de la
historia política cesiones doctrinales. hubo alborozo en la región. La ruta de hierro
de Bolivia
(1825-2020)
arrancaría, en el este, desde la frontera de Bo-
Un tema afiebró persistentemente sus men- livia con el Paraguay para concluir en La Paz,
422 tes y en él depositaron casi toda su confianza pasando por Santa Cruz, Cochabamba, Oruro
positiva para salir de su retraimiento: recom- y, en el oeste, desde la frontera peruana hasta
poner las redes mercantiles maltrechas y, si Cochabamba.28 La operación se frustró y con
Tomo I fuera posible, ganar nuevos mercados. En el ella sus expectativas cochabambinas, con el
1825-1952
imaginario de las elites las paralelas de acero único resultado de avivar sus demandas. Así,
eran emisarias de civilización, unidad nacio- en su sesión del 6 de octubre de 1896, el Con-
nal y acceso preferente al mercado; tenerla a cejo Municipal de la ciudad de Cochabamba
su disposición constituía, por consiguiente, la expresó su determinación de lograr “obtener
única posibilidad de ingresar en él con paso un ferrocarril por todos los medios posibles
firme. Negárselas equivalía a excluirla de los y a la brevedad posible”.29 El 20 de octubre
fastos del progreso. de ese año en un giro diferente, varios diputa-
dos del opositor Partido Liberal demandaron
Temiendo más que nada el aislamiento, desde la expropiación del extenso latifundio que las
Cochabamba deseaban integrarse al amplio monjas de Santa Clara mantenían en la pro-
mercado generado por la minería del estaño y vincia de Cliza, a fin de contribuir al finan-
para conseguirlo confiaban en la fuerza de cen- ciamiento del ansiado ferrocarril.30 La idea
trífuga de las locomotoras. Por supuesto que
este anhelo contenía mucho más que figuras
28 El proyectado y ambicioso ferrocarril debía tender
e ilusiones simbólicas; había de por medio un además sus ramales hasta Sucre y Potosí. El Heraldo
problema más que banal del orden económico: (Cochabamba) 4 de enero de 1894.
los precios menores, rapidez y seguridad en el 29 El Heraldo (Cochabamba) 3 de mayo de 1900.
30 El Siglo XX (Cochabamba). 6 de noviembre, de 1898.
transporte. Actuaban con la seguridad, en gran
Sobre la importancia económica de la hacienda de
medida correcta, de que el ferrocarril abarata- Cliza, la más rica y extensa de 1a región, ver pardo
ría los costos de trasporte de productos locales (1988); Larson (1991), (Jackson; 1991).
sólo logró levantar una airada protesta de los quedó al descubierto que La Paz deseaba acapa-
sectores conservadores y pro clericales, sin rar el grueso de los ferrocarriles a fin de conec-
materializarse en nada efectivo. Un año más tarse fluidamente con el exterior del país, que-
tarde, el Concejo Municipal de la ciudad de dando Cochabamba y las regiones del oriente y
Cochabamba “en representación de los inte- sur boliviano, ligadas al mercado interior, rele-
reses locales” demandó a los parlamentarios gadas a un desesperante segundo plano.
del Departamento que exigieran ante el Con-
greso Nacional la prolongación del ferrocarril Esta decisión, apuntalada por el gobierno li-
hasta Cochabamba, pues lo consideraban un beral de Ismael Montes(1904-1909), ocasionó,
“elemento indispensable de vida y progreso”.31 no podía ser de otra manera, quejas frecuen-
El 31 de octubre de 1900, nuevamente a in- tes de las oligarquías regionales que se sentían
vitación del Concejo Municipal, se realizó en perjudicadas, las que carentes de recursos pro-
la Casa Consistorial de la Plaza de Armas un pios dependían de su relación con el gobierno
meeting de protesta.32 central y su disponibilidad para distribuir be-
neficios para satisfacer sus propios anhelos de
La ausencia de respuestas positivas permitía progreso.34 Para las elites cochabambinas con-
que las elites cochabambinas constatarán que tar con un ferrocarril significaría, pues, largas
como resultado de la “Revolución Federal” de y tensas jornadas de enfrentamiento con el
1899, La Paz obtuvo una innegable hegemonía poder central, que sólo concluyeron en junio Segundo periodo
en el panorama político boliviano, que puso de 1917, cuando la primera locomotora arribó Bajo la
Constitución de
nuevamente en alerta a los cochabambinos. desde Oruro. 1880 que marca
el periodo liberal
Hasta aquí las elites cochabambinas habían (1880-1938)
logrado apenas vagas promesas de atención La pugna se inició en septiembre de 1905,
estatal, pero ahora suponían que el liderazgo cuando una vez conocido que el ferrocarril 423
paceño se volcaría en su contra y traerían hasta Cochabamba-Oruro, llave de acceso a los
sus veras un ferrocarril antes que en ningún mercados mineros y altiplánicos, no formaba
otro lado. En la medida en que los recursos parte de las prioridades estatales, el Consejo Estado, Nación,
Región
financieros eran escasos eran conscientes que Municipal de la ciudad de Cochabamba acor-
vendrían disputas y ejercicios de presión para dó solicitar al Congreso Nacional se ordene
vencer el “regionalismo ferrocarrilero” de la su “construcción inmediata” dejando expresa
nueva sede de gobierno.33 constancia que:
A inicios del siglo XX el gobierno boliviano, Cochabamba y todas sus provincias sienten
contando con abundantes fondos provenien- crecer día a día su malestar económico, por
tes de las indemnizaciones otorgadas por Chile el aislamiento a que ha sido condenado con
y Brasil en compensación a la enajenación de el desvió de su comercio. Por habérsele qui-
sus territorios de la costa del Pacífico y el Acre tado muchos mercados, siendo los especial-
respectivamente, había decidido ejecutar una mente perjudicados con los pactos externos
ambiciosa política de construcción ferrocarrile- desde la guerra del Pacífico.35
ra (Contreras 2018). De principio, en el Plan
Sisson de 1905 y el contrato Speyer de 1906,
34 Varios años más tarde, en 1918, rememoraba El
Heraldo, que el “exclusivismo” de Montes “hizo ver a
31 El Heraldo (Cochabamba), 11 de octubre de 1899. tal este vecindario que se decretaba su absoluta segrega-
32 El Heraldo (Cochabamba) 5 de noviembre de 1900. ción del conjunto nacional (…) se imponía el aislamiento
33 El 7 y 11 de julio de 1906 el influyente periódico y tal vez la muerte de los pueblos que forman el distrito”
cochabambino. El Heraldo, editorializó con este 26 de Julio de 19l8.
término sus ediciones matutinas. 35 El Heraldo (Cochabamba), 8 de junio de 1906.
Un amor
desenfrenado
por la libertad
Antología de la
historia política
de Bolivia
(1825-2020)
424
Plaza 14 de septiembre, c. 1930.
Fuente: Colección fotográfica de Miguel Ángel Ramos Mendoza.
Tomo I
1825-1952
Lo que estaba en juego era el derecho de Co- trataba de una figura retórica, discursiva, elabo-
chabamba “a vivir como país y no como esclavos rada únicamente para lograr mayor auditorio.
tributarios de otras localidades”,36 unir Oruro Haciendo de la geografía un desideratum, las
con Cochabamba implicaba para ellos una ma- elites cochabambinas se hallaban convencidas
nera de empezar a “nacionalizar el Oriente y de de encarnar de un destino manifiesto: consti-
arrancar de su letargo las poblaciones sumidas tuirse en el centro articulador de Bolivia, y se
en forzosa inactividad por falta de facilidad de sentían, por consiguiente, llamadas a equilibrar
salidas”.37 El ferrocarril, durante la presidencia el fiel de la balanza cuando éste amenazaba con
del liberal Ismael Montes, fue presentado de romperse.
inicio no como un simple y egoísta deseo “loca-
lista” sino como el imperioso resultado de una El 7 de septiembre de 1905 el Concejo Mu-
aspiración mayor, colectiva y, por tanto, proba- nicipal, que en estas jornadas que habría de
blemente más elevada: unificar las regiones en jugar un rol verdaderamente determinante en
un solo cuerpo nacional. Y con seguridad no se representación del poder local, demandó al
gobierno central que “en el plan de trabajos
ferrocarrileros próximo a realizarse (…) se or-
36 El Heraldo (Cochabamba), 11 de septiembre de 1905. dene la inmediata construcción del ferrocarril
37 “Oficio de Antonio Moreno, presidente del Con-
de Oruro a Cochabamba”.38
cejo Municipal de Cochabamba, al Presidente de la
República Ismael Montes”. El Heraldo (Cochabam-
ba), 9 de junio de 1906. 38 El Heraldo (Cochabamba), 7 de septiembre de l905.
El 10 de septiembre los redactores de los El primer tramo se inició el 4 de julio de 1906,
principales diarios cochabambinos anuncia- sufrieron continuas (y desesperantes) paraliza-
ron “por unanimidad” que harían propagan- ciones obligando nuevamente a las elites lo-
da a su favor. Cuatro días más tarde, el 14 cales a movilizarse en demanda de su pronta
de septiembre, la fecha clásica de Cochabam- y definitiva materialización. En septiembre de
ba, se realizó un meeting con la concurren- l907, por ejemplo, corrió el rumor de que el
cia “desde la personalidad más encumbrada gobierno central había decidido dar prioridad
hasta el artesano más humilde” que exigió a las vías férreas de Oruro a Viacha (La Paz) y
la construcción del mentado ferrocarril por Tupiza-Potosí; a fin de conectarlas con el fe-
convenir a los intereses locales, pero al mis- rrocarril central argentino, que ya bordeaba la
mo tiempo ser “eminentemente nacional”.39 frontera de ese país con Bolivia.
Los cochabambinos no deseaban ser acusa-
dos de localistas; preferían pregonar que sus Para Cochabamba, de concretarse esta situa-
intereses eran a la vez aquellos del conjunto ción, un nuevo factor de competencia, los pro-
y la nación. ductos argentinos, se agregarían a los daños
que ya causaban a su producción los chilenos
Dos meses más tarde, el 15 de noviembre de y peruanos en los mercados altiplánicos. En
1905, en la medida en que la indefinición gu- sentidas y alarmadas palabras de un periódico
bernamental persistía, el Concejo Municipal local: Segundo periodo
como la “Ruta Sud” pasaba por las provincias adelante, en Santa Cruz. En cambio, desde el Bajo la
Constitución de
cochabambinas de Mizque, Totora, Campero plano eminentemente político, finalmente el 1880 que marca
el periodo liberal
y la cruceña Vallegrande, antes de arribar a la que primaba a la hora de tomar decisiones, la (1880-1938)
capital cruceña. La otra, la del “Centro”, sus- más solvente era la Ruta del Centro, la misma
tentada por el ingeniero alemán Hans Grether, que, como una solución de consenso, fue apro- 427
penetraba en la cuenca del río Mamoré por el bada por Ley de 3 de abril de 1922 y mientras
ramal del río Ichilo. Finalmente, la tercera, la que el Congreso Nacional dio su aprobación
del “Norte”, proponía un trazo radicalmente el 3 de abril de 1925. El quid de esta resolu- Estado, Nación,
Región
diferente, ya que postulaba la conexión entre ción nacía, por una parte, de que ella prome-
Cochabamba y Santa Cruz se realizaría por la tía salvaguardar aquellos intereses cruceños y
vía del Chapare y en conexión con las redes cochabambinos que tenían un antiguo, peso
pluviales de la cuenca Chapare/Sécure. Cons- específico en la conformación del poder local
tituía a ojos vista una reproducción en escala en ambos departamentos. Por otra, no esta-
y medios diferentes, del antiguo camino que ba exenta una visión totalizadora del Estado
desde las postrimerías coloniales se intentaba boliviano que deseaba, al adoptarla, un mayor
tender entre la ciudad de Cochabamba y los grado de integración territorial, así fuese a un
territorios de la Gobernación Militar de Mo- costo económico relativamente mayor.
xos (hoy Beni).
En 1927 se llamó por segunda vez –la primera
La dificultad para encontrar puntos de acuer- realizada en 1922 no había tenido mayor eco–
do entre todos los interesados en la materia- a propuesta internacional para el financia-
lización de la obra era mucho más política miento de los primeros 200 kilómetros, acep-
que técnica o financiera; lo que entorpecía el tándose en marzo de 1928 la presentada por la
consenso eran los intereses divergentes de las empresa norteamericana Kennedy y Carey.52
distintas elites, particularmente las de aquellas Una vez formalizado el contrato, la compañía
empezó tareas entregando a servicio el primer
51 El Republicano (Cochabamba), 24 de junio de 1921.
Regionalista significa aquí La Paz. 52 El Comercio (Cochabamba), l7 de marzo, de 1928.
tramo hasta el pueblo de Arani (valle alto co- en sus tres valles centrales, gozó de cierta es-
chabambino) el 17 de septiembre de 1929 y los tabilidad y bonanza. Gracias a esta favorable
128 kilómetros iniciales en 1932, justo antes combinación los problemas cochabambinos
del inicio del conflicto bélico boliviano-para- parecieron resolverse. Los productos fluían en
guayo, que duró hasta junio de 1935.53 Luego gran escala hacia la altiplanicie minera y los
se paralizaron, hasta hoy. precios del maíz, por efecto de la nueva de-
manda, sufrían una brusca elevación, tanto
3.7 Impactos ferrocarrileros que mirando su efecto benéfico un comenta-
rista de prensa se animó a comparar los efectos
Si miráramos la economía cochabambina en irradiadores del maíz con los que provocaba el
el período inmediatamente precedente a la estaño en las zonas mineras (Salamanca 1927).
Guerra del Chaco (1932-35), la hallaríamos
nuevamente sumida en una profunda crisis (Sa- La situación de bonanza maicera y el boom
lamanca 1927). Pongamos las cosas claras. El del maíz alcoholero hallaron, casi al finali-
ferrocarril procedente de Oruro arribó a la ciu- zar la década de 1920, su propio techo. Por
dad en junio de 1917 e inmediatamente empe- varios factores, principalmente contrabando
zó a prestar servicios. Los datos confirman que y competencia de maíz argentino, el promi-
Un amor
la economía regional aprovechó esta coyuntura sorio mercado empezó a derrumbarse pau-
desenfrenado y logró recuperar parcialmente sus mercados latinamente desde 1925, y en 1927 ya era
por la libertad
en el altiplano. Incluso pudo ampliar su espec- francamente irreversible. En este último año
Antología de la
historia política tro hacia algunos rubros, como las verduras, la prensa regional anunciaba alarmada que
de Bolivia
(1825-2020)
que anteriormente por su calidad perecedera mientras los precios declinaban unos 400.000
no podían soportar satisfactoriamente el largo quintales de la cosecha de 1926-1927, es decir,
428 tiempo de transporte hasta el altiplano. cerca al 40 por ciento de la producción estima-
da de maíz, se hallaba sin colocación.54
En 1918, el gobierno dictó una ley denomina-
Tomo I da de “Nacionalización del Alcohol”, median- Por segunda vez en menos de medio siglo la
1825-1952
te la cual prohibía expresamente la elaboración agricultura cochabambina ofrecía un cuadro
de alcohol con materias primas importadas. dramático. La crisis maicera produjo efectos
La medida afectaba a las alcoholeras paceñas notablemente similares a los observados a fi-
que trabajaban con bagazo peruano y, por lo nes de siglo XX cuando se derrumbó el mer-
menos formalmente, favorecía a las cruceñas cado del trigo: recesión, parálisis comercial,
que laboraban con materias primas locales. caída de la renta agrícola, imposibilidad del
Sin embargo, sucedió lo imprevisto. pago de créditos. En su trabajo “La crisis del
maíz en Cochabamba” la “Junta Agrícola De-
En remplazo de las materias primas prohibi- partamental” mencionó varias posibles causas
das, las alcoholeras empezaron a demandar para esta debacle. Por una parte, las sequías
maíz cochabambino en grandes cantidades, ya frecuentes y el escaso riego no permitían am-
que gracias al nuevo ferrocarril la operación pliar la producción ni elevar la productividad.
no resultaba morosa ni complicada. A raíz de Por otra, elevados fletes ferroviarios, fuertes
la nueva demanda los precios locales del maíz gravámenes a la propiedad agraria, altas tasas
subieron progresivamente y se incrementó a impositivas al maíz, contrabando de alcohol
la par el cultivo del centenario cereal. Entre peruano e importación de maíz argentino.55
1918 y 1925-1927 Cochabamba, por lo menos
Bajo la
Constitución de
1880 que marca
el periodo liberal
(1880-1938)
Camino de herradura por donde transita la diligencia de Cochabamba a Santa Cruz, c. 1920. 429
Fuente: Fundación Torrico Zamudio.
En similares términos recogiendo el sentir de cualquier punto de vista, incluso asumiendo Estado, Nación,
Región
la mayoría de los terratenientes cochabambi- la gravedad de la coyuntural crisis del maíz,
nos se pronunció el hacendado e influyente su situación económica y su disponibilidad
ensayista regional Octavio Salamanca (1927, para afrontar resultados adversos era aho-
11-14). ra mejor, más amplia y consistente. Esen-
cialmente la diferencia radicaba en que, a la
La era del maíz como producto de exportación hora de la celebración de Centenario y pese
no retornaría más con la misma intensidad, a todo, Cochabamba, merced a un sistema
aunque las elites se darían modos para expri- continuo de presión frente al poder central,
mir su jugo mediante impuestos destinados a contaba ahora con una red de transporte mu-
favorecer el desarrollo urbano de la capital del chísimo más tupida y ágil que en las postri-
departamento. A la complicada situación se merías del siglo XIX, la que le permitiría rápi-
sumaron poco después los efectos negativos de damente retomar su rol central de productor
la debacle del sector minero, emergentes del y distribuidor de mercancías, en condiciones
crack mundial de 1929. Pero aún con toda su más favorables. No debe tampoco pasarse
amplitud y secuelas negativas esta crisis tenía por alto, por sus efectos posteriores, el que
un contenido diferente a las que sacudieron en las elites se hallaran también en mejor dispo-
el pasado a la región. nibilidad de (re)evaluar su política de modifi-
car solamente las condiciones de circulación
Sería, pues, francamente errado decir que las de las mercancías, sin paralelamente mejorar
elites locales lucharon por bagatelas. Desde el proceso inmediato de producción o exigir
vigorosamente del Estado ciertas medidas de elites locales es su voluntad de superar, por sí
protección arancelaria.56 mismas si fuera posible, las adversas condicio-
nes a que se vieron enfrentadas desde que otro
Desde otro punto de vista, la política ferro- ferrocarril les complicó las cosas en 1892.
viaria gubernamental dejó un vacío impor-
tante, pues si bien el Ejecutivo autorizaba su Lamentablemente, para ella, estos esfuerzos
construcción, entregaba su ejecución a capi- no fueron suficientes para superar el adverso
talistas extranjeros. La privatización ocasio- contexto externo dibujado por las políticas de
nó, por consiguiente, una situación ambigua libre mercado predominantes en el país, desde
y contradictoria. Por un lado, amplió el radio fines del siglo XIX. Comprendiendo la viru-
de acción regional, aumentando su capacidad lencia de este impasse, como veremos a con-
de alcance del flujo de sus mercancías y de su tinuación, se lanzaron, aunque intermitente-
propio imaginario geográfico. mente, al campo de la política en búsqueda de
una reforma que les permitiera posicionarse
Oruro y La Paz, por ejemplo, dejaron de ser en mejores condiciones frente al Poder Cen-
alejadas e inaccesibles regiones. Por otro lado, tral, la llave de acceso a los recursos fiscales.
desgraciadamente, coloco la llave de acceso a
Un amor
todos estos beneficios en manos extranjeras.
desenfrenado Cochabamba tenía un ferrocarril, pero carecía 4. Santa Cruz: La frontera
por la libertad
de los medios para controlarlo e influir en sus marginalizada, 1876-1932
Antología de la
historia política decisiones. Ninguna entidad regional poseía
de Bolivia
(1825-2020)
tuición sobre su administración, los costos de 4.1. El mercado de Santa Cruz,
transporte, frecuencias de viaje, etc., perdien- en el vaivén de la crisis
430 do así un área de poder.
Salvo por su pertenencia al mismo circuito
En este campo el único espacio en el cual la mercantil, principalmente por la vía de la co-
Tomo I elite regional mantuvo firme control fue en el mercialización de azúcar, Santa Cruz tenía, al
1825-1952
ferrocarril que vinculaba la capital con las po- finalizar el siglo XIX, muy poco en común con
blaciones de Vinto (Quillacollo, Valle Alto) con la Cochabamba que describimos en el capítulo
Arani (Arani, Valle Bajo), pues los 78 kilóme- precedente. Casi en el mismo momento de la
tros con que contaba habían sido financiados fundación de la República, ambos habían se-
con aportes locales. La lógica de este ferroca- parado sus destinos, conformando desde 1826
rril solo es entendible en el marco del intenso departamentos separados y gobernados por un
tráfico mercantil que la región conservaba en Prefecto designado por el presidente de tur-
su interior a través del complejo maíz-chicha. no. Conocemos poco de la estructura social y
Las obras se iniciaron en 1912 y concluyeron económica de Santa Cruz en la primera media
el año siguiente, contribuyendo a fortalecer in- década post independentista, pero el plausi-
ternamente a la región y mejorar las rentas de ble suponer que no se alteró para nada su vida
los terratenientes, en una época en que la asola- cansina y monótona, inclinada a la vida coti-
ba una crisis mercantil de origen externo. Más diana y la escasa y estancada producción de
allá de sus éxitos económicos, lo que nos enseña alimentos y ganado volcada a la subsistencia,
este pequeño ferrocarril sobre la conducta de que le imponía su secular aislamiento.
4.2 El escenario
56 Esta parte se basa en un trabajo que realizamos
conjuntamente con Ricardo Azogue y Humberto
Solares entre 1985 y 1986, el mismo que fue publi- En rigor todo su paisaje geográfico, histórico
cado por el IESE-UMSS en 1987. y económico difería de Cochabamba, que, con
sus sólidas redes mercantiles y el frecuente o perpetuas intemperies”.57 Otra descripción
acceso de su elite a las más altas cumbres del similar se lee en el “Informe del Prefecto de
poder, no conformaba ni se sentía un borde o Santa Cruz”, Horacio Ríos, por la gestión de
una periferia del sistema colonial o su sucesor 1890, “el camino hacia Cochabamba y Santa
republicano. El Departamento de los Valles Cruz”, dice, “especialmente en la sección de-
tenía rasgos productivos fuertemente consoli- nominada la sierra es un conjunto de peligro-
dados; personas, tierras y productos mostra- sas pendientes, donde los arrieros y acémilas
ban allí roles perfectamente definidos. hacen prodigios de esfuerzo, para trepar y des-
cender por ásperos precipicios”.
Santa Cruz, en cambio, estaba situada geo-
gráficamente en el segmento oriental de Bo- Desde cualquier ángulo, Santa Cruz era, pues,
livia; lejos, por consiguiente, del radio de in- una región prescindible, un vasto y agreste
fluencia más inmediato del locus minero. Su territorio al que los gobiernos bolivianos y
agricultura tendía más hacia una producción que a lo sumo miraban retóricamente como
de sostenimiento que al mercado; las propias un edén en espera de ser descubierto58 o una
haciendas y establecimientos agrícolas busca- simple promesa de futuro promisorio, llamada
ban autoabastecerse. Santa Cruz no poseía, siempre a ser burlada por el gobierno central.
en consecuencia, un denso tráfico mercantil Salvo por pequeños detalles, Santa Cruz con-
interno, ni tampoco grandes plazas mercanti- tinuaba, al finalizar el siglo XIX, manteniendo Segundo periodo
les que se alimentaran de la producción local el espíritu y la forma material de una sociedad Bajo la
Constitución de
por sí mismas. de frontera, a la manera que había sido labrada 1880 que marca
el periodo liberal
(1880-1938)
Sus productos “exportables” no lograban, 57 Propuesta que hace al Supremo Gobierno para el
como el trigo cochabambino, constituirse en Establecimiento de una línea Postal y de Puente 431
entre la ciudad de Santa Cruz y Cochabamba Escrito
francamente relevantes para la alimentación
en Cochabamba el 21 de mayo de 1871 y publicado
colectiva. Sus cultivos de azúcar, circunscri- en El Boletín Oficial. La Paz, 13 de mayo de 1872
tos escasamente a las áreas más próximas a la Imp. La Ley Santa Cruz, 1890. El costo del trans- Estado, Nación,
Región
ciudad capital, languidecían en medio de una porte, sin contar los impuestos, duplicaba el precio
del azúcar cruceño en plazas relativamente cercanas
técnica rudimentaria sólo capaz de producir
como Sucre o Cochabamba. En 1864, por ejemplo,
escasos excedentes para su venta en unos mer- se informaba que una piara (117 arrobas aproxima-
cados, ubicados en los valles cochabambinos damente de azúcar costaban en Santa Cruz 140 pe-
y sucrenses o las plazas altiplánicas, a los que sos, pero su transporte hasta Cochabamba o Sucre
suponía erogar 160 pesos, sin contar el impuesto
debía arribar venciendo todas las contingen-
de 35 por cada piara. El independiente (Santa Cruz),
cias que le deparaban maltrechos y escabrosos 26 de agosto de 1864. En Julio de 1885 mientras
caminos que la unían con el resto del país y una carga de azúcar superior (10 arrobas) costaba en
el elevado costo del transporte por arrias de Santa Cruz 35 pesos, en Sucre llegaba a 70 pesos.
La Estrella del Oriente” (Santa Cruz) 19 de julio de
mulas.
1885. En 1904, la situación había cambiado poco.
Una arroba de azúcar valía en Santa Cruz 4 Bs. (3.2
En 1871, Miguel Suárez Arana describía el ca- pesos) y llevarla hasta Santa Cruz o Sucre, otros 4
mino entre Santa Cruz y Cochabamba como (Rojas 1905, 66). J. Croossley demostró que con el
mismo gasto que se hacía para transportar una to-
“sendas peligrosas interrumpidas de trecho
nelada de azúcar por mulas, se podría transportarla
en trecho por malos caminos de herradura”. por carretera unos 16.000 kilos. Citado en Koster
El comerciante o productor para llegar a su (1983, 20).
destino debía “cruzar ya formidables ríos, 58 Mariano Reyes Cardona, otro de los confinados,
escribió en 1861 “El Oriente es en Bolivia, la es-
resbalosas o pantanos, ya saltos, pendientes y
peranza del rico y del pobre y (…) el ensueño de
zanjas, ya desiertos lluviosos, la soledad y falta todos”. Exposición dirigida al Sr. Presidente de la
de alojamiento en climas de fiebre malignas República (Sucre: Imp. Beeche 1861.
en sus orígenes españoles a mediados del si- 273-278). En mucha menor escala, surtía,
glo XVII, cuando los colonizadores hispanos aunque en pequeña escala SACAR, a algunos
se asentaron en sus tierras, buscando el mítico pueblos fronterizos con el Brasil y también al
Paitití.59 norte argentino, antes de que el auge de los
ingenios azucareros instalados en Tucumán
Una “frontera agraria”, al decir de Rolando logró, hacia 1880, abastecerlo.61
Mellafe, se caracteriza por la estrechez de sus
mercados, la ausencia de formas de producción La elaboración de azúcar, la “industria ma-
precapitalista y latifundista y la falta de control dre” (Dalens Guarachi 1861) del departa-
estatal sobre la propiedad de las tierras. mento merece una atención particular. Desde
fines del Siglo XVII ella había constituido el
4.3 Redes mercantiles en jaque principal producto de exportación cruceño a
los mercados andinos y la garantía de que el
Ahora bien, la situación de incomunicación circuito brevemente descrito líneas arriba se
geográfica y de escasa atención estatal tornó cumpliera eficazmente. La excepción era la
ciertamente mucho más difícil la pervivencia caña de azúcar. En palabras del explorador y
de los vínculos económicos cruceños con el científico francés Alcide d’Orbigny,1832:
Un amor
resto de Bolivia, una vez que el orden repu-
desenfrenado blicano se hubo instalado. Pese a las adversas Se cultiva la caña de azúcar de la que se ex-
por la libertad
condiciones, la región se había dado modos trae a la vez azúcar y melaza para expedirla a
Antología de la
historia política para permanecer inmersa en la vieja ruta co- las ciudades del interior, la melaza en odres,
de Bolivia
(1825-2020)
lonial, preservando gran parte del siglo XIX su el azúcar en valijitas de cuero sin curtir, lla-
lugar en la división del trabajo en el ancestral madas petacas. Este comercio es tanto más
432 espacio peruano en tanto productora de pan considerable porque las ciudades de Chu-
de azúcar. Incluso desde aproximadamente quisaca Potosí y Cochabamba se aprovisio-
1840 había podido diversificar sus actividades nan únicamente de Santa Cruz. El aguar-
Tomo I y extenderlas a la producción de suelas y cue- diente extraído de la melaza se consume en
1825-1952
ros curtidos que enviaba hasta Cochabamba y la región. Se exporta además tabaco, pero en
La Paz.60 cantidades exiguas…” (1999, 107-108).
59 Sobre los orígenes de la colonización española del 61 Entre 1870 y 1878 el volumen máximo de exporta-
actual territorio cruceño, las imágenes míticas que ción de azúcar boliviana a la Argentina fue en 1876
acompañaron el proceso y el funcionamiento de la de 79.159 kilos, con un promedio anual de 13.141
economía de frontera en los siglos XVII y XVII, ver kilos (Colección Rück. Pieza 553. ANB). En cam-
el bien documentado libro de José María García bio, ese mismo año, se estimó la “exportación” de
Recio (1988). azúcar cruceña al mercado interior fue de 779.964
60 Las primeras curtiembres se establecieron hacia kilos. Conviene advertir, para efectos comparati-
1841. Con una trascendencia económica menor en- vos, que entre 1875 y 1880 el promedio anual ex-
viaba igualmente, suela y cueros hacia Cochabam- portado al mercado interior alcanzó 813.454 kilos.
ba, arroz, café y tabaco, hacia Sucre y Tarija (Rojas Véase Cabrera, Ladislao. “Memoria que presenta
l 904, 66). el Ministro de Hacienda” (Sucre 1880).
de ellas 109.242 arrobas, un dominante 85 por distinta procedencia de remolacha de Chile y
ciento, eran producidas en la Provincia Cer- Alemania y en cubos de Perú, cuya producti-
cado, la más próxima a la capital de las cinco vidad en el rubro había aumentado significa-
que tenía entonces el Departamento de Santa tivamente, contando además son un buen sis-
Cruz. tema de transporte ferroviario como soporte
de apoyo.
Las otras tres provincias, Cordillera, Velasco
y Chiquitos elaboraban el escaso porcentaje La sensación de aislamiento y abandono eran
restante, sólo para su autoconsumo.62 Valle- una constante de larga duración en el utillaje
grande, en cambio, no producía absolutamen- mental de los cruceños; pero en aquel momen-
te nada de azúcar. Las estimaciones realizadas to crítico se hizo seguramente más ominosa,
por el Director de Contribuciones departa- más aún para los espíritus impacientes. En
mental permiten establecer además que un 75 Santa Cruz, mucho más que en Cochabamba,
por ciento del azúcar blanco era exportada “al las crisis de mercado han sido siempre “mo-
interior de la República, así como a algunos mentos calientes”, coyunturas álgidas, donde
pueblos de la República SACAR Argentina las protestas regionales subían a un tono altí-
y del Brasil” (Zambrana 1882, 11). Queda- simo.
ba para el consumo local el 25 por ciento del
azúcar blanco y el 100 por ciento del “azúcar El 2 de enero de 1891, cuando la crisis del Segundo periodo
vaya” (azúcar amarilla).63 En resumidas cuen- mercado andino recién despuntaba, pero se la Bajo la
Constitución de
tas “se advierte que el departamento sólo da al veía venir implacable, se produjo una suerte 1880 que marca
el periodo liberal
comercio interior y exterior de la República, la de “golpe de Estado regional” que dio inicio (1880-1938)
mitad de azúcar que produce, quedando otra a las respuestas de los sectores más radicales
mitad para el consumo”.64 de la dirigencia cruceña –aunque no preci- 433
samente la elite tradicional de comerciantes
Pese a su pequeña cantidad, la comercializa- y hacendados– frente a la nueva y dramática
ción era importante para la monetización de situación que se anunciaba. La revuelta, cono- Estado, Nación,
Región
la región, pero no logró romper el aislamien- cida como de los “Domingos” en clara alusión
to de Santa Cruz, débilmente enlazada con el al nombre de sus dos jefes principales, los co-
resto del país y presa de un mayor atraso rela- roneles Domingo Ardaya y Domingo Ávila, y
tivo que el resto de las regiones. Al igual que que –casualmente– se inició un día domingo,
a Cochabamba el ferrocarril de Antofagasta organizó, luego de desconocer al “despótico
introdujo al mercado boliviano azúcares de gobierno dictatorial de Aniceto Arce”,65 una
“Junta Federal Gubernativa (…) con faculta-
des amplias para dirigir la administración pú-
62 “Ynmensa es la cantidad de azúcar que, de Santa blica”. Su proclama inicial refleja a cabalidad
Cruz, se saca, a casi todos los mercados de Boli- el ánimo de sus actores y los elementos causal
via, se cultiva mucho en 1a provincia del Cercado y
poco en la de Chiquitos y Cordillera, es la industria
es de una acción defensiva motivada por:
Jefe del país, su calidad es superior a la del Brazil”
(sic). Suárez Arana, Miguel (1858, 7). …(E)l ferrocarril andino que rompe la soli-
63 Una parte de este azúcar solía ser utilizada para ela- daridad de interés del interior de la Repúbli-
borar dulces, empanizados, alfeñiques etc., que “se
extrae(n) en gran cantidad” al mercado interior.
ca con el departamento de Santa Cruz y deja
64 Suárez 1858, 15. Para 1875, Victorino Rivero y a éste condenado a perecer en el aislamiento
Egüez hace un cálculo casi similar, considera que,
de la producción cruceña estimada en 1.272 tonela-
das, un 62,5 por ciento era “exportada” fuera de la 65 Arce, importante propietario minero, gobernó Bo-
ciudad, incluyendo a la provincia cruceña de Valle- livia entre el 15 de agosto de 1888 y el 11 de agosto
grande, que no produce azúcar (1978, 132). de 1892.
á virtud de la competencia que deben sufrir 4.4. Tiempo de goma, auge y crisis
sus ricos y variados productos.66
Una vez, como era previsible, derrotados los
Intentando revertir la situación, la Junta de- “Domingos”, los productores locales de azú-
finió como una de sus prioridades nodales car buscaron minimizar los efectos adversos,
“estimular la industria, fomentar su desarrollo modificando las características del proceso de
y protegerla”67 dentro de una línea proteccio- producción. Pero las innovaciones tecnológi-
nista que contrastaba con el liberalismo que cas que introdujeron resultaron francamente
practicaba el Estado central, conducido por el insuficientes para dar un significativo impulso
empresario minero Aniceto Arce. dinamizador a la alicaída producción azucare-
ra local y competir con las modernas agricul-
Adicionalmente la Junta, para enfrentar posi- turas e industrias de países vecinos. De modo
bles restricciones que derivaran de su determi- que no lograron hacerla competitiva frente a
nación “golpista”, creó su propio banco, deno- sus similares importados.
minado “Oriental”; éste empezó con presteza
a emitir moneda para financiar sus actividades En efecto, si bien se mejoró el rendimiento de
y monetizar la economía regional. Los bille- los trapiches de motores de vapor aligerando la
Un amor
tes, firmados por Ardaya y Gerónimo Otazo, fase molienda de caña; las “casas de paila” –en-
desenfrenado Secretario de la Junta, llevaban el lema de “Es- cargadas de la crucial fase de refinado– “con
por la libertad
tados Unidos de Bolivia”; un deseo y una fic- su gran consumo de leña, numeroso personal
Antología de la
historia política ción. Los “Domingos”, finalmente, buscaron e imperfectos medios de producción (con su)
de Bolivia
(1825-2020)
regular las relaciones entre los trabajadores sistema de hornos de barro y blanqueo por el
del caucho y los empresarios gomeros que los barro y secada por el sol y el encapachado en
434 “enganchaban”, muchas veces, con “malas ar- petaquillas de cuero”69 quedaron lamentable-
tes”.68 Su salida mermaba la fuerza de trabajo mente intactas. Se forjó así un infranqueable
disponible y asestaba un nuevo y duro golpe a cuello de botella para una actividad detenida
Tomo I la alicaída producción regional (Lema 2010). en la arena fangosa de la tradición y que moría
1825-1952
lentamente al ser confrontada con las exigen-
Por una parte, previsiblemente enfrentados al cias competitivas de una industria moderna
fantasma del “separatismo” del Estado Cen- forjada allende sus fronteras.
tral, y por otra, un tanto más sorprendente,
a las propias elites locales. La Junta fracasó, Otro factor que ayudó al desplazamiento del
no sólo porque no pudo extender su radio de azúcar cruceño de los mercados andinos fue el
acción más allá de la capital cruceña, sino que encarecimiento de los fletes, en virtud de que la
dentro de los límites urbanos no contó con el nueva ruta a Corumbá por Chiquitos para mer-
concurso franco y decidido de todos los secto- cancías de “ultramar”, mientras que la exporta-
res de la elite regional. ción de caucho demandó una cantidad inusitada
de mulas y arrieros. Para tener una idea de los
66 La Estrella del Oriente (Santa Cruz) 5 de enero de costos de transporte se debe tomar en cuenta
1891. Los paréntesis nos pertenecen que mientras el flete de Santa Cruz a Cocha-
67 El Heraldo (Cochabamba) 7 de febrero de 1891.
bamba costaba cuatro bolivianos la arroba, el
68 Carlos Valverde Barbery publicó en el periódico El
Mundo de Santa Cruz del 14 de agosto al 28 de oc- costo de una arroba de azúcar fluctuaba en la
tubre de 1985 varias entregas sobre la “Revolución capital oriental entre uno y 1,40 bolivianos.70
Federal de los Domingos”. Aunque el trabajo es a
veces confuso y quizá exagerado en el afán de su
autor, conocido por sus posiciones federalistas, por 69 El Heraldo (Cochabamba), 22 de marzo de 1904.
exaltarla, es un testimonio valioso de lo acaecido en Las cursivas nos pertenecen.
Santa Cruz en 1891. 70 EI Heraldo (Cochabamba), 22 de marzo de 1904.
Sólo la transformación de la caña de azúcar en grandemente para su colonización posterior,
abundantes latas de alcohol, luego trasladadas provocando el “súbito comienzo del auge del
para su venta al occidente, logró dar un respi- caucho boliviano” (Fifer l976, l77). La pro-
ro, aunque nunca el suficiente, para dinamizar ducción boliviana, alentada por los altos pre-
la agricultura y el comercio de Santa Cruz. cios en el mercado mundial, creció así rápida
La ventaja relativa del alcohol frente al azúcar y vigorosamente. En efecto, si la producción
derivaba no sólo en un mercado teóricamente de 1890 se estimaba en apenas 294 toneladas,
disponible y más competitivo, sino igualmen- ésta pasó a 3.465 toneladas en l900 y a 5.143
te de su mejor capacidad de resistir los costos en 1913 (Gamarra 2007).
abultados de transporte en razón de su mayor
valor agregado por unidad de peso. Santa Cruz, y menos aún Cochabamba, no fue
un emporio de producción de caucho capaz de
En octubre de 1900, en un acontecimiento competir con las estradas del Beni y el actual
celebrado, la firma alemana Zeller & Rosler Pando. Salvo en la provincia Velasco, a través
mandó hacia el altiplano, las minas y los valles de Puerto Suárez, no se explotaron grandes
“por primera vez” una “considerable cantidad plantaciones. Empero su economía se benefi-
de latas a competir con sus similares extran- ció del efecto multiplicador de la goma, pues
jeras”.71 Gradualmente la nueva actividad co- favoreció al negocio del transporte carretero y
menzó a tomar peso y para principios de este el pastaje de bueyes. Segundo periodo
76 El Heraldo (Cochabamba), 4 de junio de l9l7. 78 Julio A. Gutiérrez. “Crisis que Amenaza”, El País
77 El Ferrocarril, Cochabamba, 25 de julio de 1912. (Santa Cruz), 2 de abril de 1921.
caña de azúcar, que, como vimos, había alcanza- Similar situación acaecía con el ganado de Chi-
do importancia en la economía cruceña, sufría quitos enviado hasta el Brasil.81 Finalmente, el
la amenaza de su desplazamiento por el alcohol precario camino que por el Chapare conecta-
de maíz, de origen cochabambino. Las cifras ba a Cochabamba y el Beni, puesto en mejores
son elocuentes. En 1918 se produjo del prime- condiciones esos años, ayudó a la “interna-
ro 474.352 litros y del segundo 279.654 litros; ción” de ganado beniano a las plazas cocha-
pero en 1920, cuando ya estaban operando las bambinas, compitiendo con su similar cruceño
disposiciones concernientes al decreto del 23 de y mermando consiguientemente su demanda.82
enero de 1918 que “nacionalizó” la producción Como resultado de este asedio en la provincia
de alcoholes y aguardientes, el alcohol de caña de Cordillera, la principal productora de re-
había caído a 279.654 litros, mientras que el de ses, “rebalsaba el ganado en las estancias” y se
maíz trepaba a 1.117.360 litros.79 El estableci- acusaba una profunda escasez de dinero, signo
miento de Zeller & Mozer, de capital alemán, claro de una situación recesiva.83
ubicado en Las Barreras, cerca de la población
de Warnes, vio reducida su demanda. Los únicos mercados sustitutos, aquellos que
potencialmente podrían aliviar la penuria de
Last but not least, la exportación de ganado cru- Santa Cruz, eran los de Cochabamba; pero
Un amor
ceño, otra base importante y tradicional de la para alcanzarlos favorablemente la región
desenfrenado economía regional que habían cobrado como debía franquear la barrera de las montañas,
por la libertad
nunca un inusitado auge entre la primera y la que desde siempre había constituido un freno
Antología de la
historia política segunda década del siglo XX, sufría ataques por a sus aspiraciones. Los ganaderos ensayaron
de Bolivia
(1825-2020)
varios flancos, todos ellos con resultados des- infructuosamente construir un camino entre
favorables. Por una parte, aquellas “cabezas” la Provincia Cordillera y Vallegrande, para
438 que se enrumbaban a la Argentina, estimadas de allí llegar más fácilmente a la región de los
en 20.000 vacas anuales y de gran apogeo en- valles de Cochabamba. El intento no dio re-
tre los años 1914-1918 sufría un “descenso sultado y en 1927 la ganadería regional con-
Tomo I remarcado (…) merced a las medidas protec- tinuaba confrontando problemas de mercado
1825-1952
cionistas que aquella República había decidido (Gil 1927, 28).
implementar en defensa de su propia ganade-
ría”80 (y por el colapso de extracción salitrera Por donde se viera, el panorama era, pues,
en las costas del Pacífico hasta donde, por in- nuevamente francamente sombrío. El conjun-
termedio argentino, se trasladaba el ganadero to del comercio en la capital de Santa Cruz
del Chaco cruceño, sucrense y tarijeño). reinstalado tras la crisis de los mercados en las
zonas andinas había declinado en extremo.84
79 Julio A. Gutiérrez. “Un dato estadístico sobre alco-
holes”. El País (Santa Cruz), 7 de mayo de 1921.
80 Durante la Primera Guerra Mundial, y el auge de 81 El Republicano (Cochabamba), 8 de noviembre de
la goma, los vacunos macros que se vendían en el 1922 y 7 de junio de 1923.
Beni entre 25 y 30 bolivianos se vendieron a 60 y 82 El Oriente (Santa Cruz), 16 de diciembre de 1921.
70 “y este negocio se desarrolló en enormes pro- 83 Gmo. Reicher. Catastro de Cordillera, informe del
porciones”. Los ganados flacos se invernaban en Juez Revisitador. El Oriente (Santa Cruz), 18 de
Santa Cruz y luego pasaban a Embarcación (Ar- abril de 1922.
gentina) donde se cotizaba a 130 bolivianos por 84 “Las industrias madres de la región: agricultura y
cabeza (…) terminada la guerra volvió la industria ganadera, con sus derivados, sufren una notable
al penoso estado de abatimiento que actualmente depreciación, que a diario aumenta en proporcio-
perdura. (Gil; 1927, 75). La información pertenece nes” El Oriente (Santa Cruz) 20 de octubre de 1922.
a José Gil Saucedo, diputado por Ve1asco y Ñuflo Para una evaluación del comportamiento histórico
Chávez. Ver también “Referencias al Nuevo mapa de los mercados cruceños. Guillermo Velasco, ver
de Bolivia” por Guillermo Velasco. La Ley (Santa el “Nuevo Mapa Oriental de Bolivia”. La Ley (Santa
Cruz), 23 de abril de 1921. Cruz), 23 de abril de 192l.
Para colmo, además, quebraron los bancos re- desaparecerá totalmente el intercambio con
gionales, imposibilitados de cobrar a sus deu- los pueblos del Beni (…), No es posible des-
dores. Santa Cruz, que no contaba como Co- conocer la gravedad de la situación, ella no
chabamba merced al complejo chicha-maíz, tiene paliativos, el Beni está perdido comer-
con un fluido tráfico interior propio ingresó a cialmente”.87
“la más temible crisis que jamás haya soporta-
do” (la región).85 En 1928, la Cámara de Comercio cruceña
concluyó, en un tono reiterado de justificada
Un balance de Cástulo Chávez, destacado desazón, que:
y polémico dirigente regional, realizado en
1921 fue pesimista, aunque lamentablemente Antes de ahora, nuestros productos, azúcar,
preciso. Dijo entonces dramáticamente: arroz, chocolate, almidón y otros más fueron
desplazados de los mercados del interior.88
Hoy todo el departamento de Santa Cruz
no tiene más mercado que las provincias de Paradójicamente el desarrollo del capitalismo
Sara, Cercado i Warnes. Ñuflo Chávez y minero en su proceso de transnacionalización
Chiquitos se proveen del Brasil i Cordille- colocaba a Santa Cruz en una ubicación de
ra en gran parte de la Argentina, el azúcar desventaja, estancamiento y asilamiento mu-
peruana i el arroz de distintas procedencias cho mayor que en la era colonial. Esta situa- Segundo periodo
llegan hasta la provincia Vallegrande.86 ción crítica, que no hallará esta vez remedio Bajo la
Constitución de
pronto e insospechado, y se prolongará dra- 1880 que marca
Julio Aníbal Gutiérrez, prominente político se máticamente hasta 1952, cuando la región se el periodo liberal
(1880-1938)
expresó en ese mismo sentido: convierta en la locomotora de un proyecto
capitalista volcado al mercado interno y basa- 439
Decimos que la crisis económica tiende a do en la agroindustria (Roca 1980; Rodríguez
agravarse y es la realidad. Los últimos acon- Ostria 1989).
tecimientos producidos en el Beni por la Estado, Nación,
Región
baja de la goma y la inundación extraordi-
naria que ha puesto en peligro la existencia 5. Conclusión
de las poblaciones, son factores que actua-
rán de inmediato sobre el comercio y es- La conformación y recomposición de las re-
tado financiero cruceños. Debe observarse giones al vaivén de los mercados en el proceso
quo no obstante desde algunos años atrás, de construcción de la nación y el Estado fue un
siempre hemos conservado esa plaza como proceso más complejo del que da a entender la
lugar de consumo para nuestros principa- historiografía tradicional. Como se ha demos-
les productos: Azúcar, café, queso, etc. Hoy trado en este capítulo, el caso de Cochabamba
y Santa Cruz ilustran la lucha de sus elites para
85 La Ley (Santa Cruz), 23 de diciembre de 1922. El
sobrellevar los desafíos y limitaciones impues-
paréntesis nos pertenece. Un informe oficial rea- tas por el acceso a medios de comunicación.
lizado por el Administrador del Tesoro Departa- La llegada (o no) del tren tuvo consecuencias
mental de Santa Cruz corrobora esta situación. El que obligaron a reconfigurar las actividades
agro, señala, pasa por el “máximum de decadencia”,
mientras que la ganadería sufre una “depreciación
industriales y comerciales, con grandes limi-
considerable (pues) ya no es posible la exportación a la taciones ante las importaciones en gran parte
Argentina” El Oriente (Santa Cruz), 28 de abril de
1922.
86 Gustavo Rodríguez Ostria, Poder central y proyecto 87 Ibid.
regional, Cochabamba y Santa Cruz en los siglos XIX y 88 José Luis Roca, Fisonomía del regionalismo boliviano
XX (La Paz: ILDIS, 1993), 88. (La Paz: Los Amigos del Libro, 1980), 196.
debido a las severas limitaciones impuesta por Dalens Guarachi, Genaro. 1861. Santa Cruz
la baja productividad de la producción nacio- de la Sierra; o, El oriente de Bolivia. La Paz:
nal. La pugna entre las regiones y el poder Imprenta Paceña.
central también es un tema permanente en la Dunkerley, James. 1987. Orígenes del poder mi-
historia nacional que este capítulo aborda des- litar en Bolivia. Historia del ejercito 1979-
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Aspectos de las relaciones germano-bolivianas
desde el siglo XIX
León E. Bieber1
R
Constitución de
asgo distintivo desde un inicio ha sido 1880 que marca
el periodo liberal
el carácter marcadamente mercantil. En el marco de las relaciones germano-boli- (1880-1938)
Ello debido a la significativa presencia vianas cabe, ante todo, una aclaración funda-
de inmigrantes alemanes. Fuerte presencia mi- mental. El Imperio Alemán y las Repúblicas 443
litar germana entre 1911 e inicios de los años alemanas que lo siguieron después de 1918
30 del siglo XX; su impacto en el comercio. nunca llegaron a tener peso notable en mate-
Aspectos de
Ascendiente en la aviación civil. Decadencia ria de inversiones de capital en el país andino. las relaciones
de la influencia económica, política y militar Por otro lado, entre éste y aquéllas el inter- germano-bolivianas
desde el siglo XIX
de Alemania en favor de los Estados Unidos, cambio comercial, exceptuando las fases de
particularmente a partir de la Segunda Gue- las dos guerras mundiales y en el correr del
rra Mundial. Hasta el presente aquel país ha siglo XXI, ha sido altamente significativo. En
logrado conservar importante presencia en la efecto, el rasgo distintivo sobresaliente de las
instrucción educativa de Bolivia, tanto a nivel vinculaciones entre Alemania y Bolivia desde
escolar, como a través de sus institutos de la un inicio ha sido su carácter marcadamente
enseñanza de la lengua alemana. mercantil.
Palabras clave: Relaciones Alemania-Bolivia, Entre el último cuarto del siglo XIX y la se-
comercio Alemania-Bolivia, enseñanza. gunda década del siglo XX, Bolivia conoció un
impetuoso desarrollo de la producción minera
(primero de la plata y luego sobre todo del es-
taño), así como un auge de la explotación de la
1 Agradezco el apoyo y los impulsos que he recibi-
do de mi esposa, la Dra. Eliana Castedo de Bieber, goma natural. La extracción de estas materias
sin los cuales probablemente no habría terminado primas constituyó el eje alrededor del cual giró
este trabajo; particularmente las modificaciones a la economía boliviana. También tuvieron una
las correcciones, las cuales –con el mayor respeto
cierta gravitación económica el cobre y el bis-
confieso, en buena parte desacertadas– quizás me
han tomado más tiempo que la redacción del pro- muto. Fue sobre el mencionado eje que, a par-
pio artículo. tir de aproximadamente 1880, el país empezó
a integrarse aceleradamente en el mercado de plantas medicinales, de maderas finas, de
mundial. Si todavía en la primera década del cultivos tropicales y subtropicales, de corteza
siglo XX su comercio exterior, aun en términos de quina, de coca y de lanas finas de alpaca,
de Suramérica, era insignificante mientras Ar- vicuña y oveja existentes en Bolivia; riquezas
gentina participaba con un 38,3 por ciento y el que “conforman el cuadro seductor de una
Brasil con un 30,6 por ciento, el de Bolivia es- de aquellas regiones altamente favorecidas, la
casamente ascendía al 2,2 por ciento. (Uzarski cual –debido al circuito cada vez más angos-
1911, 74), fue a consecuencia del repunte de to de los territorios todavía no o escasamente
la exportación de materias primas que entre colonizados– debería recibir mayor atención
1900 y 1920 llegó a quintuplicarse y a contar de nuestra parte”.2
con una balanza comercial altamente favora-
ble (Bieber 1984, 79-80). Con ello, el país ha- Enfrentado a su falta de recursos naturales, el
bría de afianzar su carácter como exportador Imperio Alemán ya a fines del siglo XIX im-
de materias primas e importador de productos portaba materia prima mineral de Bolivia. Ella
manufacturados. constituía el grueso absoluto de las compras
que realizaba de este país. En 1893, el 97,5 por
Por su parte, Alemania, después de su unifi- ciento de las exportaciones bolivianas destina-
Un amor
cación política en 1871, conoció un inusitado das a Alemania fueron minerales, en 1901 el
desenfrenado desarrollo industrial, primero en el sector de 73.48 por ciento.3 En el correr de la primera
por la libertad
la industria pesada, luego en el de la química década del siglo XX, entre un 80 y 85 por cien-
Antología de la
historia política y la electrónica. La red ferroviaria y la flota to del estaño que consumía Alemania provino
de Bolivia
(1825-2020)
mercantil se expandieron a ritmo acelerado. de las minas bolivianas. Por su parte, este país
Su dinámica económica convirtió al Imperio exportaba al suramericano sobre todo tejidos
444 Alemán en una potencia mundial con marca- de lana, algodón y seda, azúcar, herramientas
das ambiciones imperialistas. Este progreso y máquinas para las minas, así como artículos
fue acompañado por una dependencia cada luminosos (Uzarski 1911, 76 y 79).4
Tomo I vez mayor respecto al suministro de pro-
1825-1952
ductos minerales. Así, casi todo el bismuto, En todo caso, en términos comparativos del
estaño, tungsteno y petróleo, y todo el anti- subcontinente el intercambio comercial ger-
monio, mercurio, platino, cerio y torio (estos mano-boliviano era muy reducido; casi tres
últimos de vital importancia para la industria veces inferior al germano-argentino y tan
eléctrica) tuvieron que importarse. Elevado sólo superior al germano-colombiano (Sie-
era también el porcentaje de importación de vers 1903, 53-54). Si para el conjunto de las
salitre y bórax (Stappenbeck 1916, 2ss). A su relaciones comerciales del Imperio Alemán
vez, la nación quedó altamente interesada la permuta de productos con Bolivia era de
por encontrar mercados de exportación para
sus productos industriales y por realizar in-
2 Export del 23.11.1899, en: Admiralstab der Marine,
versiones de capital. RM 5/V, Militärarchiv, Freiburg i.B.
3 Cf. Export del 16.8.1906, en: Admiralstab der Ma-
Fue en ese trasfondo que a partir de la última rine, RM 5/V, Nr. 5396, Militärarchiv, Freiburg i.B.
y Sievers 1903, 85.
década del siglo XIX empezaron a extender
4 Respecto a la exportación de tejidos de lana y algo-
las relaciones comerciales bilaterales ger- dón a Bolivia un estudioso de los intereses alemanes
mano-bolivianas. En 1902 Export, el órgano en Suramérica anotó que si bien la ganadería boli-
portavoz de la idea que Alemania buscase es- viana cuenta con “miles de llamas y ovejas y permi-
feras de influencia allende los mares, llamó te la exportación de lana, pero como los campos de
pastoreo de la puna no se explotan suficientemente
la atención sobre las valiosas minas, las innu- esta posibilidad no es aprovechada seriamente; …”
merables existencias de gomeros, la cantidad (Sievers 1903, 45).
muy poca importancia, para este país, por el manera notoria en la explotación minera de
contrario, era altamente significativa. En- Bolivia.
tre fines del siglo XIX e inicios de la Primera
Guerra Mundial, Alemania fue casi cada año El peso del capital alemán en la minería de este
después de Gran Bretaña el consumidor más país fue muy reducida si se la compara con los
importante de productos bolivianos; además, intereses que Gran Bretaña y, en época poste-
el principal proveedor de mercaderías al país rior, Estados Unidos tuvieron en este sector.5
suramericano. En la tercera década del siglo XX, éstos llega-
ron a controlar aproximadamente dos terceras
A partir de 1880, grandes compañías de Boli- partes de la producción estañífera de Bolivia
via se establecieron en la región septentrional (Klein-Kloch 1978, 236), en tanto que el Im-
del país para explotar y comercializar goma. perio Alemán no llegó a controlar ninguna
Con montos modestos Francia, en escala más empresa de magnitud en el sector extractivo,
apreciable Gran Bretaña, pero sobre todo Es- como tampoco es conocida una participación
tados Unidos fueron los países que realizaron importante de capitales alemanes en compa-
inversiones en la explotación del producto. ñías mineras o caucheras erigidas por empre-
Mientras estos últimos dos movilizaron capi- sarios bolivianos.
tales para promover la colonización de la re-
gión del Acre, el Imperio Alemán, por evadir Sin lugar a dudas, el ascenso de Estados Uni- Segundo periodo
la competencia con el coloso del continente dos a potencia imperialista y su consiguiente Bajo la
Constitución de
americano, rehusó hacer lo propio, y no exis- expansión económica en América Latina fue 1880 que marca
el periodo liberal
te ningún indicio que capitales provenientes para Alemania un obstáculo insuperable para (1880-1938)
de Alemania hubiesen tenido mayor influen- materializar sus propios designios expansio-
cia en aquella explotación. En todo caso pa- nistas en esta región. Y tanto la industria ex- 445
rece razonable afirmar que la participación tractiva minera como la del caucho, no habrían
financiera germana respecto al caucho boli- de ser los únicos campos en los cuales preten-
viano fue limitada y quedó muy a la zaga de la siones del capital alemán se vieron restringidas Aspectos de
las relaciones
de empresas nacionales vinculadas al capital debido a la competencia de aquella nación. germano-bolivianas
desde el siglo XIX
británico o de empresas inglesas y norteame-
ricanas. Inversiones germanas en el país suramericano
no tuvieron su origen en empréstitos tomados
Mientras la goma empezó a perder cada vez en Alemania, sino provinieron fundamental-
más importancia con el inicio de su extracción mente de miembros de la colonia alemana
en plantaciones del Asia oriental después de residente en Bolivia. Pero aún éstas eran de
1910, el estaño continuó sustentando la econo- importancia marginal y en muchos casos pa-
mía hasta pasada la mitad del siglo XX. En aquel saron a formar parte de empresas controladas
entonces también hidrocarburos en el oriente por capital británico y norteamericano.6
del país empezaron a ganar significado.
A pesar de haberse convertido en una nación 5 A partir de inicios del siglo XX, capitales británicos
altamente dependiente de la importación de empezaron a ser desplazados por intereses nortea-
mericanos. En la historia de la minería boliviana la
minerales, a pesar de su afán por obtener esfe- transición de la época de la explotación de la plata
ras de influencia para asegurarse el aprovisio- a la época de la explotación del estaño fue acompa-
namiento con materias primas del subsuelo, ñada de un relevo de la influencia británica por la
estadounidense.
y a pesar de la importancia que para ella ha-
6 Ejemplos al respecto trae León Bieber, Las relacio-
bían llegado a adquirir mercancías bolivianas, nes económicas de Bolivia con Alemania. 1880-1920
la potencia europea no logró incursionar de (Berlín: Coloquium, 1984), 27-28.
Droguería E. Schilling.
Fuente: Revista Policía Boliviana, 1941.
La participación de alemanes en la mine- año con un solo kilómetro, para 1925 ella ya
ría boliviana estuvo sobre todo en el campo sumaba algo más de 2.000 km. (Aramayo-Ávi-
Un amor
desenfrenado comercial. Aparte de la comercialización de la 1959, 80).8
por la libertad minerales, también contribuyeron en la ex-
Antología de la ploración mineralógica y en innovaciones De este modo se habilitó un servicio de tre-
historia política
de Bolivia tecnológicas. Todo esto tuvo un efecto al- nes con la Argentina, Chile y Perú. La in-
(1825-2020)
tamente benéfico para las exportaciones del fraestructura fue financiada por tres fuentes:
446 Imperio Alemán; le permitió enviar al país del auge de las exportaciones nacionales, de
suramericano maquinaria pesada, vías ferro- las indemnizaciones que el Brasil y Chile, en
viarias para el interior de minas, concentra- cumplimiento de los tratados de paz firmados
Tomo I doras para el enriquecimiento del mineral, en 1903 y 1904 respectivamente, pagaron al
1825-1952
funiculares, materiales de construcción de gobierno de La Paz y de una serie de emprés-
caminos, camiones.7 titos foráneos (Bieber 1984, 46-47), entre los
cuales el más importante provino de Gran
La integración de Bolivia al mercado mundial Bretaña. Relevante también fue el aporte de
conllevó una importante modernización de capitales otorgados por el Estado boliviano.
su sistema de transportes y comunicaciones Comparativamente la participación de capi-
con la finalidad de facilitar el transporte de las tales franceses y estadounidenses fue de poca
materias primas tanto a nivel nacional como importancia.9
a países vecinos, así como con los centros in-
ternacionales del comercio. La vinculación se A pesar del interés que primero el Imperio
inició con el tendido de una red ferroviaria Alemán y seguidamente la República de Wei-
cuyo inicio data de 1889. No contando en ese mar mostraron por el desarrollo ferroviario
de Bolivia, Alemania no participó en él con
un solo empréstito. La atención ya se puso
7 El aporte de alemanes en materia de exploración en evidencia durante la penúltima década del
y de innovaciones tecnológicas en el campo de la
minería boliviana tratan Fritz Kübler, Deutsche in
Bolivien. (Stuttgart: Strecker und Schröder, 1936), 8 Incluye el precio de la construcción en libras ester-
32; y Antonio Mitre, “The economic and social lina.
structure of silver mining in XIX Century Bolivia” 9 Se puede ver detalladamente en León Bieber, Las
(tesis de doctorado, University Microfilm Interna- relaciones económicas de Bolivia con Alemania. 1880-
tional, 1981), 179-185. 1920 (Berlín: Coloquium, 1984), 54-56.
siglo XIX, vale decir cuando se planificaron probabilidades, o la de cualquier otra empre-
y empezaron a construir las primeras ferro- sa alemana, para obtener la concesión eran
vías de importancia en terreno boliviano; y mínimas. Ya con anterioridad el gobierno de
se avivó cuando el tendido de rieles cobraba Bolivia había contratado un empréstito de un
envergadura. millón de libras esterlinas con el Crédit Mobi-
lier Français para construir la ferrovía. El tex-
Prueba palmaria sobre el particular dan la to del contrato de préstamo descartaba toda
correspondencia diplomática y artículos de competencia para ejecutar la obra. El tramo
prensa alemanas. Ambos perseguían la finali- ferroviario se terminó de construir en 1925
dad de exponer las posibilidades que la mo- con el apoyo del empréstito francés y de un
dernización de las vías de comunicación de crédito otorgado posteriormente por Estados
Bolivia ofrecía a los intereses económicos de Unidos.11
Alemania.10
El caso de un proyecto abandonado hace re-
Un factor fundamental que explica por qué ferencia a la prolongación del tramo Cocha-
ninguno de los gobiernos alemanes logró in- bamba-Arani hasta Santa Cruz de la Sierra
cursionar en aquella esfera, a pesar de su in- discutido en la primera mitad de los años 20.
terés, se debió a que no tuvieron ni siquiera Al respecto el gobierno creó una comisión
la oportunidad de intervenir como solicitantes técnica presidida por el ingeniero alemán Dr. Segundo periodo
en las concesiones más importantes otorgadas Hans Grether, quien sugería que Alemania Bajo la
Constitución de
hasta comienzos de la década de 1920 (Ara- debería esforzarse por obtener la orden de 1880 que marca
el periodo liberal
mayo 1959, 67-74 y Klein-Kloch 1968, 48). Y, construcción debido a que ella ofrecía posibi- (1880-1938)
en las ocasiones en las cuales el capital alemán lidades de ventas seguras. El ministerio de Re-
tuvo la posibilidad de obtener una concesión, laciones Exteriores del Reich alemán notificó 447
su intervención terminó fracasando sea por a la Confederación de Industrias Alemanas y
propia indecisión del país, por el desinterés a dos bancos de primera importancia sobre
que mostró aquel capital, porque la concesión el proyecto.12 Hasta el 30 de junio de 1923, Aspectos de
las relaciones
fue otorgada a otro solicitante, o porque el última fecha para presentar solicitudes, el go- germano-bolivianas
desde el siglo XIX
proyecto fue abandonado. bierno de Bolivia no había recibido una sola
oferta. En 1925, Grether tampoco obtuvo un
Un caso nombrado en tercer término tuvo su resultado positivo al negociar un crédito en
inicio a mediados de 1913, cuando el gobierno Estados Unidos (Aramayo 1959, 171).
boliviano llamó a propuestas para construir la
línea ferroviaria Tupiza-Villazón. Inmediata- Si bien el Imperio Alemán, al igual que en
mente la representación diplomática alemana el caso de la minería, no jugó prácticamente
acreditada en La Paz informó sobre el particu-
lar a la cancillería en Berlín, la cual remitió el
11 Los siguientes documentos hacen referencia a
aviso a cuatro grandes instituciones bancarias la licitación nombrada y a la decisión tomada al
y a 15 empresas industriales. respecto: Informe K, Nr. 111 de la Legación del
Imperio Alemán en Bolivia, La Paz, 26.8. 1913 en:
Eisenbahnen in Bolivien, 1913-1919; Orenstein
La firma Orenstein & Koppel de Berlín se mos-
Koppel-Arthur Koppel Aktiengesellschaft, Berlín,
tró sumamente interesada en el proyecto. Sus 9.10.1913 e Informe K, Nr. 147 de la Legación del
Imperio Alemán en Bolivia, La Paz, 7.12.1913 en:
Eisenbahnen in Bolivien, 1913-1919.
10 Una extensa lista de ejemplos al respecto desde 12 Anexo al Informe G. Nr. 298/K. 28 de la Le-
1888 con base a documentos de archivos trae León gación del Imperio Alemán en Bolivia, La Paz,
Bieber, Las relaciones económicas de Bolivia con Alema- 29.3.1922 en: Eisenbahnen in Bolivien, 19.9.1920-
nia. 1880-1920 (Berlín: Coloquium, 1984), 57-58. 20.10.1926; Anexo a III A 2258, Berlín 9.10.1922.
ningún papel en cuanto al financiamiento de En el correr de poco menos de dos décadas,
la red ferroviaria, su construcción sí tuvo un entre 1895 y 1913, la participación del Impe-
impacto positivo para la industria alemana al rio Alemán en el comercio exterior de Bolivia
ofrecerle oportunidades de venta de material llegó más que a duplicarse. De este modo, Ale-
ferroviario y de accesorios necesarios para el mania pasó a ocupar el segundo lugar como
tendido de ferrovías. importador más importante de productos bo-
livianos; y, hasta la Primera Guerra Mundial,
Al respecto sorprende constatar que, a pesar durante muchos años figuró, a veces por un
de su nula participación en materia de inver- margen muy estrecho frente a Gran Bretaña,
siones, Alemania logró realizar importantes como primer exportador de mercaderías a la
suministros de material ferroviario. Las esta- República suramericana (Bieber 1984, 87).
dísticas sobre el comercio germano-boliviano
muestran que en diversos años este material El establecimiento de relaciones diplomáticas
constituyó un rubro importante de las expor- entre Bolivia y Alemania en 1902 fue conse-
taciones alemanas. cuencia directa de la importancia que tuvo
Alemania desde fines del siglo XIX en el co-
Así, en 1904, el país europeo vendió a Bolivia mercio exterior de Bolivia, particularmente en
Un amor
mercadería por valor de 2,1 millones de mar- el rubro de sus importaciones. Ciertamente
desenfrenado cos, de los cuales 324.000, vale decir casi el 16 no sorprende que no fue el gobierno de Ber-
por la libertad
por ciento, fueron obtenidas por concepto de lín quien tomó la iniciativa en este sentido; lo
Antología de la
historia política venta de locomotoras y locomóviles. fueron grupos de presión del Reich interesa-
de Bolivia
(1825-2020)
dos en fomentar la expansión comercial en ul-
En 1913, Bolivia importó de Alemania para el tramar.14 A diferencia de la actitud reservada
448 servicio ferroviario de Arica a El Alto locomo- del gobierno alemán, el boliviano ya en 1900
toras y vagones de tren, además artículos de expresó su claro deseo de establecer relaciones
ferretería, explosivos y maquinaria eléctrica. diplomáticas.
Tomo I Es muy probable que una parte substancial de
1825-1952
estas importaciones fueron destinadas a diver- Al respecto el embajador boliviano en el Bra-
sas obras ferroviarias. sil hizo una oferta al representante diplomáti-
co alemán en Rio de Janeiro, enviándole una
En 1924 y en 1925, Bolivia adquirió de Ale- nómina de casas comerciales establecidas por
mania material para construcción ferroviaria, súbditos alemanes en la nación andina, recal-
calderas, accesorios de máquinas, cuchillería y cando “que Alemania tiene en Bolivia consi-
otros productos de ferretería por valor de uno derables y crecientes intereses comerciales”.15
y dos millones de marcos respectivamente. Es-
tos productos constituyeron en 1924 –junto a
1924 y 1925 véase Anlage 3 der Denkschrift zum
la lana– el segundo rubro y en 1925, con am-
Entwurf eines Gesetzes über die Wiederinkraft-
plio margen de distancia, el más importante de setzung des Freundschsfts-und Handelsvertrages
las exportaciones que Alemania realizó a aquel zwischen Deutschland und Bolivien vom 22. Juli
país.13 1908, en: Verträge des Deutschen Reichs mit Boli-
vien, Hauptstaatsarchiv Stuttgart.
14 Sumamente ilustrativo al respecto es un artículo
13 Respecto al año 1904 véase Export del 16.8.1906, publicado el 23 de noviembre de 1899 en el perió-
en: Admiralstab der Marine, RM 5/V, Nr. 5396, dico Export y reproducido en: Admiralstab der Ma-
Militärarchiv. Respecto al año 1913 véase Deuts- rine, RM 5/V, Nr. 5396, Militärarchiv, Freiburg i.B.
cher Handel mit Bolivien, en: Abt. III, Handels- 15 Informe No. 168/J Kaiserlich Deutsche Gesands-
vertragsverhältnis zu Deutschland, 19220-1927, chaft in Brasilien, Petropolis, 26.6.1900, en: Abt
Nr. H. 13, Bd. 1, Bolivien, Politisches Archiv des IA, Die inneren Zustände und Verhältnisse Boli-
Auswärtigen Amtes, Bonn. Respecto a los años viens, 1.1.1899-31.7.1900, Vol. 3, Bolivien No. 1,
Segundo periodo
Bajo la
Constitución de
1880 que marca
el periodo liberal
(1880-1938)
En el cambio de actitud del gobierno alemán regulares con Bolivia. “Una decisión de esta
Aspectos de
tuvo importante influencia un informe de no- naturaleza sería necesaria, tanto para dar ma- las relaciones
germano-bolivianas
viembre de 1901 del Ministro Residente del yor respaldo a los súbditos alemanes en dicha desde el siglo XIX
Imperio Alemán en el Perú. En el mismo co- nación, como para contrabalancear los enérgi-
mienza destacando la inminente posición del cos esfuerzos de Estados Unidos por conquis-
comercio alemán en Bolivia. Más adelante re- tar con sus productos los mercados sudameri-
alza que a diferencia de la situación en el Perú, canos”.16
donde el comercio mayorista está en manos
británicas y norteamericanas y el comercio al En febrero del año siguiente, Berlín respondió
menudeo en el de inmigrantes italianos, las ca- que en vista “de la inminente posición que ha
sas comerciales más grandes en todos los cen- logrado adquirir el comercio alemán en Bo-
tros importantes de Bolivia están controladas livia” y en “condescendiente consideración
por alemanes. del deseo expresado en círculos comerciales
alemanes”, el emperador alemán ha decidido
Agregando otras consideraciones, así como una establecer las relaciones diplomáticas.17
apreciación positiva respecto a las perspectivas
comerciales que ofrecía este país, sugirió al can- 16 Informe No. 94, Kaiserlich Deutsche Gesandschaft
ciller alemán establecer relaciones diplomáticas in Lima, Lima, 1.11.1901, en: Abt IA, Die inneren
Zustände und Verhältnisse Boliviens, 1.8.1900-
21.6.1902, Vol. 4, Bolivien No. 1, Politisches
Politisches Archiv des Auswärtigen Amtes, Bonn. Archiv des Auswärtigen Amtes, Bonn.
Anexo al informe se encuentra la nómina de las ca- 17 Ministerio de Relaciones Exteriores en Ber-
sas comerciales alemanas. lín, 28.2.1902 al Ministro Residente del Imperio
La importancia que con anterioridad a la Pri- boliviano, ubicados en los departamentos de
mera Guerra Mundial llegó a tener el Imperio Oruro y Potosí, ya en la década de 1880, En-
Alemán en el comercio de Bolivia estuvo de- rique Rosenbluth obtuvo licencia para abrir
cisivamente condicionada por la posición he- un negocio de comercialización de la plata en
gemónica que llegaron a ocupar inmigrantes diferentes provincias de este departamento y
alemanes. En 1905, un artículo de la prensa Otto Richter una para aquellos dos.
alemana constató que “de las casas comercia-
les establecidas en Bolivia las alemanas son En la compra y venta de productos minerales
las más numerosas, luego vienen las inglesas, y a su vez en el financiamiento de pequeñas y
francesas e italianas, las peruanas, españolas medianas empresas mineras también destacó
y norteamericanas”.18 Por su parte, A. Mitre Germán Fricke & Co. en la ciudad de Oruro.
afirma que entre 1880 y 1914 se crearon, entre Sin enumerar a todos, en esta misma ciudad
casas matrices y sucursales, 69 establecimien- encontramos los negocios de J. M. Becker, de
tos germanos en la parte occidental y central Julio Martens, de Reinecke, así como la Th.
del país y 46 en diversos lugares del oriente Bickenbach & Co, y la A. Wisher & Co. En
(Mitre 1996,35). Cochabamba abrieron sus puertas la A. W.
Barber & Co. y la R. Krüger & Co. (Bieber
Un amor
Aquellos inmigrantes empezaron a afluir al 1984, 28, 92-93). En la ciudad de La Paz, en-
desenfrenado país en el transcurso del último cuarto del tre otros, Boehme, Zieriacks & Co. (a partir
por la libertad
siglo XIX, y en el correr de las tres décadas de 1934 Becker & Co.) estableció una casa
Antología de la
historia política siguientes se desplazaron hacia centros en los mercantil matriz que contó con sucursales en
de Bolivia
(1825-2020)
cuales el desarrollo de la minería y de la goma casi todos los departamentos; Brieger & Co;
promovió una intensa actividad económica. Fed. Gerder & Co. y E. W. Hardt & Cia. con
450 En ellos establecieron casas de importación sus sucursales en Sucre, Oruro y Cochabam-
y exportación, muchas de las cuales estaban ba (Gabriel Hollweg [1997], 511-512 y Bieber
íntimamente vinculadas con Hamburgo, o 1984, 92).20
Tomo I eran filiales de empresas comercializadoras
1825-1952
establecidas en esa ciudad. Fueron estas casas Entre las ciertamente no pocas de estas ca-
las que dieron un impulso decisivo al inter- sas que encontramos en el departamento de
cambio comercial germano-boliviano permi- Santa Cruz, destacaron sobre todo la Casa
tiendo al Reich alemán convertirse temprana- Zeller, Mozer & Cia. que habría de conver-
mente en el socio exportador más importante tirse en un complejo empresarial comercial e
para Bolivia.19 industrial, la Casa Providencia o Schweitzer
& Co., la Casa Juan Elsner & Co., la Giers
De la gran cantidad de aquellos estableci- & Cia., el complejo comercial-agroindustrial
mientos cabe destacar algunos. En los cen- de la Casa Hirtner & Cia. (Gabriel Hollweg
tros mineros más importantes del occidente [1997], 505-511).
Alemán en Lima, en: Politisches Archiv des Auswär- Tres factores permiten explicar la exitosa
tigen Amtes, Bonn. incursión de ciudadanos alemanes en la es-
18 En Export del 22.6.1905, en: Admiralstab der Mari- fera comercial boliviana: la ausencia de un
ne, RM 5/V, Nr. 5396, Militärarchiv, Freiburg i.B.
19 Nombres y detalles sobre las casas de importación
estrato social nacional lo suficientemente
y exportación germanas se encuentran en Fritz Kü-
bler, Deutsche in Bolivien. (Stuttgart: Strecker und
Schröder, 1936), 32; y Antonio Mitre, “The eco- 20 Los dos volúmenes sobre los alemanes en el oriente
nomic and social structure of silver mining in XIX boliviano de Gabriel Hollweg constituyen sin duda
Century Bolivia” (tesis de doctorado, University la obra más amplia, además de profusamente docu-
Microfilm International, 1981), 23-24. mentada, sobre el tema.
preparado para responder a las complejas abierta oposición contra el hecho de que in-
exigencias del comercio internacional; la fal- dividuos o grupos de instructores de su país
ta de otros grupos foráneos capaces de blo- presten servicio en el ejército boliviano; acti-
quear efectivamente el designio de aquellos tud que una década más tarde pasó a ser com-
ciudadanos y, last but not least, el hecho que partida por la colectividad alemana residente
el Imperio Alemán veía a sus súbditos, tanto en el país andino.
por razones idiomáticas como por motivos
de afinidad general, como los intermedia- Entre 1900 y 1935, las iniciativas para la coo-
rios idóneos para sus negocios, ofreciéndo- peración militar las tomó Bolivia. Fueron la
les consecuentemente fuerte respaldo.21 falta de personal nacional capacitado, las dis-
putas y los conflictos fronterizos, así como de
manera cada vez más acentuada la necesidad
2. Contrariedades en el campo de lograr estabilidad interna para garantizar
de la instrucción militar el funcionamiento de la creciente producción
y la aviación civil de materias primas lo que llevó a este país a
buscar el apoyo de instructores militares para
Entre los dos últimos decenios del siglo XIX organizar y modernizar su ejército.22 Con el
y la cuarta década del siglo XX, Bolivia (apar- respaldo de uniformados germanos se esperó
te de la Argentina y Chile) fue el país sura- poder crear cuadros nacionales que posterior- Segundo periodo
mericano que contó con el mayor número de mente pudiesen tomar a su cargo las tareas de- Bajo la
Constitución de
instructores militares alemanes. Los primeros legadas. Fue precisamente lo que no aconteció 1880 que marca
llegaron en 1901, y de 1910 hasta inicios de y lo que obligó a Bolivia, prácticamente hasta el periodo liberal
(1880-1938)
los años 30 la presencia de oficiales germanos finalizada la Guerra del Chaco en 1935, a so-
en el ejército boliviano fue contundente. Cabe licitar permanentemente la colaboración de 451
aclarar que documentos pertinentes a archivos oficiales foráneos.
del Imperio Alemán prueban que con el aval
del gobierno en Berlín sólo contó la misión Entre 1894 y 1909, Bolivia contó con ins- Aspectos de
las relaciones
militar que prestó servicios en Bolivia entre tructores militares privados prusianos y sobre germano-bolivianas
desde el siglo XIX
1911 y 1914. Ni antes ni después la política y todo franceses (Díaz-Arguedas 1906, 760 y
la diplomacia alemanas se mostraron proclives Dunkerley 1979, 127). A pedido del gobierno
a prestar efectiva cooperación militar a Boli- de La Paz y con el consentimiento del empe-
via, rechazando la mayor parte sus solicitudes rador alemán, en 1911 llegó a Bolivia lo que
(Bieber 1994). Más aún, después de la Primera debe denominarse como la primera misión
Guerra Mundial, debido a las estipulaciones militar extranjera. Contratada por tres años
del Tratado de Versalles, Alemania manifestó estaba compuesta por 17 oficiales bajo la di-
rección del mayor Hans Kundt. En 1913, éste
y otros nueve militares bajo su comando pro-
21 Lo que en este contexto llama la atención es la
escasa presencia de súbditos británicos. Ello fue longaron sus contratos. Inmediatamente des-
resultado que la gran mayoría de los ingleses que pués del inicio de la Primera Guerra Mundial
llegaron al país durante y en la fase inmediatamente los instructores regresaron a su patria y los
posterior a las guerras de la independencia lo aban-
contratos quedaron anulados.
donaron nuevamente en el correr de las tres déca-
das siguientes. Falta de oportunidades económicas
y un percance político que llevó a la ruptura de
relaciones diplomáticas por parte de Gran Bretaña 22 Todavía en 1900, el ejército boliviano no contaba
motivaron ese repliegue. Según un informe de la con planteles de enseñanza militar, y debido a la
penúltima década del siglo XIX, en aquel entonces falta de personal preparado no existía un Estado
no habría residido un solo súbdito británico en Bo- Mayor General. Memoria 1900, La Paz 1901 (Im-
livia (Kübler 1936, 30). prenta del Estado).
complacencia de muchos políticos y militares
responsables de uno u otro modo por el fraca-
so en el Chaco” (Bieber 1994).24
hayan tenido que ver con la información que gundo lugar, otorgar a esta empresa derechos Bajo la
Constitución de
recibió su Ministro en La Paz, el 10 de enero de vuelo para la ruta La Paz-Corumbá y una 1880 que marca
el periodo liberal
de 1941, conforme a la cual la “Lufthansa ha opción para servir el trayecto La Paz-Porto (1880-1938)
hecho una oferta al gobierno (boliviano, LEB) Velho; en tercero, traspasar la administración
para la reorganización del LAB, incluyendo la del Lloyd a personal norteamericano elegido 457
entrega de cuatro aviones nuevos […]”; hecho por la Panagra o a la Panagra misma.42
que también habría inducido al Presidente y
al Vicepresidente de la Pan American Grace Una vez logrado este acuerdo fue decretada Aspectos de
las relaciones
Airways a discutir “la posible participación de la nacionalización del Lloyd Aéreo Boliviano el germano-bolivianas
desde el siglo XIX
Panagra en la operación de servicios de trans- 6 de mayo de 1941. Su personal alemán fue
porte aéreo dentro de Bolivia”. Al respecto, despedido y la administración de la línea aé-
Hull comunicó a su Ministro que la Panagra rea entregada a Panagra. La decisión se con-
estaba dispuesta “a favorecer un plan el cual sumó el 26 de mayo de aquel año, cuando en
determinaría el reemplazo del LAB por una la reunión de los accionistas de la empresa, el
nueva empresa boliviana con la cual Panagra gobierno, ya en poder de la mayor parte de las
cooperaría […]”; centrándose el interés de esta acciones, rechazó ciertas objeciones presenta-
empresa en el trayecto de La Paz a la frontera das por la minoría de accionistas alemanes y
con el Brasil.41 declaró su reorganización.43
458 Avión bi plano despegando de la pista de El Alto, con la presencia de una multitud, 1921, Fotografía Julio Cordero Castillo.
Fuente: Archivo Fotográfico Ciudad de La Paz, Unidad de Museos Municipales GAMLP, La Paz.
Tomo I Tres meses más tarde, el gobierno otorgó a anteriores. Exceptuando la ruta La Paz-Co-
1825-1952
Panagra un contrato para la administración de rumbá, que fue entregada a la Pan American
la empresa. A su vez el ministro de Finanzas Grace,45 las restantes continuaron siendo servi-
impartió órdenes para comprar con dinero en das por el Lloyd. Mientras que todos los em-
efectivo las acciones en manos de alemanes.44 pleados alemanes fueron despedidos, la Ame-
De este modo, a comienzos de 1943 el gobier- rican Republics Aviation Division proporcionó al
no de Bolivia ya controlaba 65 por ciento de LAB tres Lockheed Lodestars y 600.000 dóla-
los intereses del LAB. El restante 35 por ciento res para mejorías de la infraestructura (Burden
estaba en poder de propietarios privados de la 1977, 74-75).46
empresa aérea brasilera Viação Aérea São Paulo
(VASP) (Burden 1977, 53-54 y 165). En agosto de 1941 la Legación de Alemania
en Bolivia informó a Berlín que “en con-
El gobierno boliviano justificó la estatización formidad con los nuevos decretos” ha sido
del LAB y sus medidas colaterales alegando su
servicio no satisfactorio y la serie de acciden-
45 La presencia de la PANAM en Bolivia se remonta
tes espectaculares en los años inmediatamente al año 1935 cuando inauguró su servicio a La Paz.
Dos años más tarde inició el servicio La Paz-Tucu-
mán-Buenos Aires.
44 Cf. The Minister in Bolivia to the Secretary of 46 Deutsche Gesandtschaft, J. Nr. 364/41, La Paz,
State, La Paz, August 2, 1941. Department of State 24.8.1941. Vertretungen deutscher Firmen im Aus-
Publication, Foreign Relations of the United States. land, Politisches. Archiv des Auswärtigen Amtes, R
Diplomatic Papers. 1941, VI: 410. 115130.
despedido todo el personal alemán que tra- Al respecto jugó un papel importante el es-
bajaba en el LAB. tablecimiento de la empresa norteamericana
W.R. Grace & Co. en Bolivia, precisamente en
el transcurso de aquella conflagración y su ul-
3. El declive de las relaciones terior expansión a los principales centros de
bilaterales actividad económica del país.
La columna fundamental que desde un inicio El bloqueo marítimo y las listas negras an-
otorgó un estatus privilegiado, y en ciertos gloamericanas48preparadas a consecuencia de
años hasta hegemónico, a Alemania en las re- la Primera Guerra Mundial ciertamente per-
laciones con Bolivia fue indudablemente su rol judicaron las hasta entonces florecientes rela-
como proveedor de mercaderías. ciones comerciales bilaterales. Sin embargo,
el revés no devino en la estatización o liqui-
En abril de 1917, el ministro residente de Es- dación de propiedades comerciales alemanas
tados Unidos en La Paz destacó que su país se en Bolivia, y este país no hizo uso del derecho
había convertido “en el principal proveedor de estipulado por el Tratado de Versalles de liqui-
las importaciones de Bolivia; …” (Rear 1917, dar propiedades alemanas.49
1). A su vez, se convirtieron en el segundo
más importante para las exportaciones boli- En realidad, ni la política de las listas negras, Segundo periodo
vianas. En efecto, durante el quinquenio 1917 como tampoco el establecimiento de la em- Bajo la
Constitución de
a 1921, la incidencia de Alemania en el total presa norteamericana W.R. Grace & Co. en 1880 que marca
el periodo liberal
del comercio internacional boliviano pasó a Bolivia durante esta conflagración, o la riva- (1880-1938)
ser insignificante en comparación con otras lidad de la sociedad mercantil británica Ma-
naciones occidentales altamente industrializa- deira-Mamore Trading Co. llegaron a afectar 459
dos, e incluso quedó muy por debajo de la que seriamente el poder de las casas comerciales
correspondió a países limítrofes como Argen- alemanas establecidas en Bolivia (Bieber 1984,
tina, Chile y Perú.47 98-99, Kübler 1936, 33 y Nielsen-Reyes 1937, Aspectos de
las relaciones
40). En un informe de mediados de 1927 so- germano-bolivianas
desde el siglo XIX
Este desmoronamiento fue producto de la bre su viaje por diversas ciudades bolivianas, el
Primera Guerra Mundial, que incluso devino Ministro Plenipotenciario de Alemania en Bo-
en una suspensión completa de las relaciones livia, Hans Gerald Marckwald, señaló que “en
comerciales bilaterales en las postrimerías de todas las ciudades que he visitado el elemento
aquel conflicto. Cuando en abril de 1917, el alemán juega un rol descollante en el comer-
gobierno de La Paz rompió las relaciones di- cio, como por ejemplo en La Paz; en algunas
plomáticas con Berlín, el otrora tan significa- de ellas, como en Sucre y sobre todo en Santa
tivo intercambio comercial entre los dos paí- Cruz, uno decisivo”.
ses era prácticamente exiguo.
La guerra mundial y el ascenso de Estados 48 Una lista completa de las casas comerciales alema-
Unidos a potencia hegemónica no permitie- nas radicadas en Bolivia incluidas en las listas ne-
ron a la República de Weimar recuperar la gras británica y estadounidense hasta fines de 1917
reproduce Gabriel 1995, 298-300.
posición comercial que el Imperio Alemán ha- 49 Bericht K. 182. Deutsche Gesandtschaft, La Paz
bía logrado adquirir en el período prebélico. 2.11.1922. Deutschtum in Bolivien, Politisches Ar-
chiv des Auswärtigen Amtes, R 78901 y Bericht
156, Deutsche Gesandtschaft in Bolivien, La Paz
47 Bolivia. Dirección General de Aduanas, Comercio 22.8.1927. Beschlagnahme deutschen Eigentums in
especial de Bolivia. Exportación-Importación-Bancos, Bolivien anläßlich des Weltkrieges, Politisches Archiv
La Paz 1922, 2, 107. des Auswärtigen Amtes, R 78908.
En Sucre el comercio habría estado controlado proceso que se dio de manera prácticamente
por tres o cuatro casas alemanas, mientras que paralela al desmoronamiento de la influencia
en Santa Cruz “está dominado casi exclusiva- de Alemania. En el bienio inmediatamente
mente por las pocas casas alemanas grandes. posterior al inicio de la guerra en Europa el
Contra ellas no puede competir ninguna na- otrora floreciente comercio entre ambos paí-
ción foránea, mucho menos los bolivianos”.50 ses se volvió absolutamente insignificante, en
De los 40 establecimientos alemanes bloquea- tanto que aquél con Estados Unidos repuntó
dos durante la primera conflagración mundial en forma significativa, particularmente el de
aproximadamente 32 continuaban operando las exportaciones de la República suramerica-
normalmente en 1928 y en “1939, diez firmas na a la norteamericana.
alemanas, seis de las cuales ya estaban antes de
1914, procesan cerca de dos tercios del comer- Iniciada aquella conflagración la producción
cio boliviano de importación” (Mitre 1996, de materia primas en Bolivia se incrementó
52, 53 y 59). notablemente. Así, la producción de estaño
se elevó de una media de 25.840 toneladas
Una razón fundamental explica este éxito. inglesas entre 1935 y 1939 a un promedio de
En la década posterior a la Primera Guerra 40.095 en el quinquenio siguiente.51 A su vez
Un amor
Mundial, la colonia alemana logró afianzar se incrementó la extracción de otras materias
desenfrenado su posición económica, social y cultural; con- primas consideradas estratégicas, como el an-
por la libertad
siguiendo así ampliar su influencia en la vida timonio, el cobre, el wolframio, pero también
Antología de la
historia política nacional. Ella constituía la colectividad ex- la de la goma y de la quinina.
de Bolivia
(1825-2020)
tranjera más importante y mejor cohesionada
del país. A pesar del ascendiente que llegó a te- A partir de 1940, un porcentaje cada vez más
460 ner Estados Unidos en la economía de Bolivia, elevado de estos productos, en ciertos casos
en ella nunca se llegó a conformar una colonia la totalidad de ellos, fue exportado a Estados
estadounidense de peso e influencia semejante Unidos. Con ello, en 1941 Estados Unidos se
Tomo I a la alemana. había convertido en el principal consumidor
1825-1952
de las exportaciones bolivianas, rebasando in-
A consecuencia de la Segunda Guerra Mun- cluso por amplio margen a Gran Bretaña, el
dial las relaciones comerciales germano-bo- hasta entonces tradicional receptor del grueso
livianas volvieron a sufrir un traspié. Entre de las ventas que Bolivia realizaba al exterior.
1940 y 1942, Estados Unidos pudo consolidar
su supremacía económica y política en Bolivia, Un contrato firmado en octubre de 1940 para
la venta de estaño marcó el punto de partida
de este desarrollo. En mayo del año siguien-
50 B. 115. Deutsche Gesandtschaft in Bolivien, La Paz te, los productores bolivianos de wolframio
29.6.1927, en: Deutsche diplomatische und konsularis-
acordaron que venderían toda su producción
che Vertretungen in Bolivien, Politische Abt. III, Po
10, Vol. 1, 25.5.1920-8.3.1935, Polarch. AA. Otro a la Metals Reserve Company por el lapso de
informe de la Legación de Alemania en La Paz re- tres años. Como constató la Legación de
dactado casi cinco años antes también enfatiza la Alemania en La Paz, a mediados de 1941 la
posición predominante de casas comerciales ale-
mitad de la producción de estaño y toda la
manas en todas las grandes ciudades bolivianas. Cf.
Bericht K. 182. Deutsche Gesandtschaft, La Paz
2.11.1922, en: Deutschtum in Bolivien, Polarch. AA
R 78901.B. 115. Deutsche Gesandtschaft, La Paz 51 Promedios calculados por LEB con base en el cua-
29.6.1927. Deutsche diplomatische und konsularische dro I.1 reproducido en León Bieber, León Enri-
Vertretungen in Bolivien, Politische Abt. III, Po 10, que, Pugna por influencia y hegemonía. La rivalidad
Vol. 1, 25.5.1920-8.3.1935, Politisches Archiv des germano-estadounidense en Bolivia. 1936-1946 (Boli-
Auswärtigen Amtes. via: El País, 2016), 30.
de wolframio boliviana se dirigía a Estados
Unidos. Consecuentemente, no sólo el Ter-
cer Reich sino también el Japón quedaron
prácticamente eliminados del mercado de
minerales bolivianos.52
sino reafirmar al Tercer Reich la posición que haciendo su país para la victoria de los pue- Bajo la
Constitución de
había asumido a mediados de enero de 1942 blos libres de todo el mundo; productos es- 1880 que marca
el periodo liberal
respecto a las razones que motivarían a paí- tratégicos minerales y la contribución de la (1880-1938)
ses latinoamericanos a romper sus relaciones agricultura de Bolivia son indispensables para
diplomáticas con Alemania. Ello sólo podía la victoria”.61 463
acontecer “a consecuencia de la inescrupulosa
instigación norteamericana y la desconsidera- Este reconocimiento y agradecimiento tenían
da presión política, financiera y militar de Es- buenas razones que los justificaban plenamen- Aspectos de
las relaciones
tados Unidos […]”.58 te: la suscripción del contrato de venta de es- germano-bolivianas
desde el siglo XIX
taño de octubre de 1940 y los contratos suce-
Además de la asistencia para fomentar el de- sivos para wolframio, antimonio y goma entre
sarrollo económico, Washington confirió mayo de 1941 y julio de 1942, la estatización
ayuda militar al gobierno boliviano. En julio del Lloyd Aéreo Boliviano y la expulsión del
de 1940, Estados Unidos ofreció a Bolivia la ministro alemán a mediados del año siguiente,
entrega de material bélico por valor de ocho así como la ruptura de relaciones diplomáticas
millones de dólares.59 Esta oferta fue el punto con los países del Eje en enero de 1942.
1942, V, 1962: 587-588. Politisches Archiv des of State Publication, Foreign Relations of the United
Auswärtigen Amtes, R 106109. Sobre el arreglo al States. Diplomatic Papers. 1941, VI: 422.
que llegó el gobierno de Bolivia con la Standard Oil 60 Cf. Lend-Lease Agreement Between the Uni-
Co. ver también Banzer Foianini, Misión Cumplida ted States and Bolivia, Washington, December 6,
(Bolivia, 1991), 246-247 y Sergio Almaraz Paz, Pe- 1941, en: Department of State Publication, Foreign
tróleo en Bolivia (La Paz: Juventud, 1958), 122-132 Relations of …, 1941, VI, op. cit., pp. 428-431 y The
y 141-142. Chargé in Bolivia to the Secretary of State, La Paz,
58 Tel. Nr. Multex 77. Diplogerma Paris. Aufgenom- April 30, 1942, en: Department of State Publica-
men am 18.1.1942, en: Botschaft Paris, Bd. 1, Betre- tion, Foreign Relations of …, 1942, V, op. cit., p. 532.
ff Spanien, Südamerika, Syrien, Thailand, Türkei, 61 The Ambassador in Bolivia to the Secretary of Sta-
Politisches Archiv des Auswärtigen Amtes. te, La Paz, April 11, 1943, en: Department of the
59 The Acting Secretary of State to the Minister of State Publication, Foreign Relations of …, 1943, V,
Bolivia, Washington, July 19, 1941, en: Department op. cit., p. 69.
16,05 por ciento, Argentina, 11, 61 por cien-
to y después del Perú los Estados Unidos con
6,35 por ciento. Alemania solo aportaba con
un 2.27 por ciento.62
bachilleres. El de Santa Cruz de la Sierra fue (ICBA) son instituciones autónomas que coor- Bajo la
Constitución de
clausurado en 1943 por razones políticas, re- dinan su trabajo con el Instituto Goethe de 1880 que marca
el periodo liberal
cién en 1955 la República Federal de Alemania La Paz, están en constante y directo contacto (1880-1938)
lo reconoció oficialmente como Colegio Ale- con la Embajada de la República Federal de
mán. En 1970, inauguró su moderno edificio. Alemania en Bolivia y, como se ha indicado, 465
perciben subvenciones financieras de Berlín.
En cuanto a los institutos de enseñanza, se tra-
ta del Goethe y de los institutos culturales bo- Al igual que el Instituto Goethe tienen por Aspectos de
las relaciones
liviano-alemanes establecidos en las ciudades objetivo la difusión de la lengua alemana, el germano-bolivianas
desde el siglo XIX
de La Paz, Santa Cruz de la Sierra y Sucre. El fomento del intercambio cultural y la transmi-
de Tarija también fue cerrado a fines del siglo sión de información sobre la cultura, historia,
XX por razones económicas. El Goethe-Insti- sociedad y política alemanas (Savelsberg et al.
tut La Paz, ciertamente el más importante, fue 2011, 104); o como lo expresara el ex director
fundado en 1954. En cuanto al Goethe-Zen- del ICBA Sucre el “objetivo principal del con-
trum Santa Cruz de la Sierra, si bien no exis- junto de sus actividades es promover y forta-
te una fecha cierta de su fundación, se puede lecer el entendimiento mutuo y la amistad en-
asumir que su historia, inicialmente bajo el tre el pueblo alemán y el pueblo boliviano en
nombre Instituto Cultural Boliviano-Alemán, particular, así como entre diferentes pueblos y
“se remonta a los años 50 del siglo XX”. El Ins- culturas en general” (Mielke 2011, 113-114).
tituto habría entrado “inequívocamente en es- En efecto, prestan mucha atención a incluir
cena” en los años 60” (Weber 2011, 127-128). consideraciones histórico-culturales en sus
programas. Los ICBA son reconocidos en cali-
dad de centros con derecho a tomar exámenes
63 Las autoras que han abordado el tema divergen res- en idioma alemán y otorgar títulos. Lamenta-
pecto al año de fundación del mencionado colegio. blemente no puede descartarse que por pre-
Mientras Kuruner sostiene que el Colegio Alemán muras financieras de la República Federal de
de La Paz habría sido fundado en 1923, Weber opi-
na que ello sólo habría acontecido en 1936 (Kuru-
Alemania otras de estas instituciones se vean
ner 2011, 179 y Weber 2011, 128). obligadas a cerrar sus puertas.
En el marco de sus programas culturales el vale decir la Fundación-Friedrich-Ebert (social-
Instituto Goethe, el Goethe-Zentrum y los demócrata), la Fundación-Konrad-Adenauer
ICBA desarrollan una admirable gama de even- (demócrata cristiana), la Fundación Hanns
tos que incluyen exposiciones, exhibición de Seidel, (socialcristiana) así como la Fundación
filmes alemanes y cintas documentales sobre Friedrich Naumann (liberal) están presentes en
Alemania, conferencias, conciertos, cursos de Bolivia.
baile y otras formas artísticas y culturales. En
los últimos años cada vez han ganado mayor En grado diverso, todas ellas ofrecen confe-
énfasis informaciones sobre temas eminente- rencias, exposiciones, paneles de discusión,
mente ecológicos (basura y reciclaje, cambio seminarios, cursillos; brindan asesoramiento
climático, biodiversidad, desarrollo sostenible, técnico y administrativo, tanto al gobierno
educación ambiental), así como la promoción nacional, como a gobiernos departamenta-
de eventos interculturales. les y municipales, trabajan con universidades
apoyando la investigación científica y a jóve-
La labor de las mencionadas instituciones tie- nes para formar el liderazgo. Sin excepción
ne en su haber un incuestionable éxito. Han alguna cuentan con contrapartes nacionales,
jugado un rol fundamental en el proceso de con publicaciones y ofrecen becas de estu-
Un amor
aproximación germano-boliviana; ello debido dio. Si bien ellas tienen una serie de rasgos
desenfrenado a que cuentan con una Biblioteca así como una comunes (adhieren al principio de la libertad
por la libertad
Medioteca que ofrecen la enumerada amplia y la democracia, al servicio de la paz y del
Antología de la
historia política gama de actividades culturales, a su ubicación desarrollo, propugnan el bienestar común, la
de Bolivia
(1825-2020)
en los centros de las ciudades, así como a los cultura democrática y plural, comulgan con
abordajes temáticos inter y multidisciplinarios la diversidad étnica y política), sus diferentes
466 que presentan. énfasis ciertamente contribuyen a enriquecer
el nivel de formación del elemento académi-
No sorprende que sean instituciones altamen- co e intelectual boliviano. Así, en tanto que
Tomo I te apreciadas por el público boliviano, parti- la Fundación Seidel acentúa el aspecto religio-
1825-1952
cularmente por estudiantes, universitarios y so-cristiano, la Fundación Naumann destaca
gente joven de diferentes capas sociales. Indu- los valores liberales y la Fundación Ebert enfa-
dablemente los colegios alemanes son consi- tiza la igualdad.
derados entre los mejores de Bolivia y su apor-
te a este país está fuera de toda cuestión. No Respecto a las becas otorgadas por Alemania
pocos de sus egresados llegaron a ser personas amerita mención especial las del Servicio Ale-
influyentes en la sociedad boliviana, algunos mán de Intercambio Académico (DAAD por las si-
hasta líderes con altos cargos. glas en alemán). Institución fundada en 1925,
es hoy una de las organizaciones más destaca-
Aparte de los colegios y los institutos men- das en el ámbito del intercambio internacio-
cionados, fundaciones alemanas desempeñan nal de estudiantes, posgraduados y científicos.
alrededor del mundo un rol importante en Desde su fundación ha ofrecido apoyo a casi 2
el ámbito educativo y particularmente en la millones de académicos dentro y fuera de Ale-
formación de excelencia de pre- y postgrado. mania; de entre ellos cientos de bolivianos se
Con excepción del partido Alternativa para han beneficiado.
Alemania, recién fundado en febrero de 2013
y de posiciones de derecha populista, todos los Para cerrar este acápite cabe resaltar que, al
partidos políticos alemanes cuentan con una igual que las representaciones diplomáticas
fundación. Exceptuando la del Partido verde alemanas, tanto los mencionados colegios,
y la del partido La Izquierda todas las demás, como los institutos y las fundaciones, después
de los 12 años del régimen nacionalsocialis- Department of State Publication, Foreign Re-
ta, han logrado transmitir con gran éxito una lations of the United States. Diplomatic Pa-
imagen muy positiva de Alemania. pers. 1941, 1942 y 1943.
Díaz Arguedas, Julio. 1906. Historia del Ejército
Más allá de la delineada presencia que Ale- de Bolivia. La Paz: s.d.
mania todavía conserva en la vida nacional Dirección General de Aduanas, Comercio
de Bolivia, existe otro factor que juega un rol especial de Bolivia. Exportación-Importa-
importantísimo en los vinculaciones germa- ción-Bancos, La Paz 1922.
no-bolivianas. Se trata del mutuo aprecio que Dirección General de Telégrafos. Informe del
existe entre ambas naciones desde las más altas Director Sr. Rosendo Villalobos, 1911-1912.
esferas políticas hasta el sentir de los pueblos. La Paz
Frente al indudable declive de los lazos eco- Dunkerley, James. 1979. The Politics of the
nómicos, aquella estima de carácter político, Bolivian Army: Institutional Develop-
pero sobre todo de índole afectiva ciertamente ment, 1879-1935. Ph.D. Dissertation,
juega un papel nada despreciable en las rela- University of Oxford.
ciones inter-naciones. Estado Mayor General (del Ejército de Boli-
via, LEB) Memoria 1900, La Paz 1901 (Im-
prenta del Estado).
Bibliografía Foianini Bánzer, [Dionisio]. 1991. Misión Segundo periodo
Segundo periodo
Bajo la
Constitución de
1880 que marca
el periodo liberal
(1880-1938)
469
Aspectos de
las relaciones
germano-bolivianas
desde el siglo XIX
“Sin indios no hay industria del caucho”:
los indígenas amazónicos frente a la colonización gomera1
Anna Guiteras Mombiola
Universitat Pompeu Fabra-GRIMSE/TEIAA
Lorena Córdoba
Investigadora del Consejo Nacional de Investigaciones
Científicas y Técnicas (CONICET) de Argentina
Bajo la
Constitución de
1880 que marca
el periodo liberal
(1880-1938)
473
“Sin indios
o hay industria
del caucho”:
los indígenas
amazónicos frente
a la colonización
gomera
cuales se desconocía prácticamente todo por maropas y tacanas, que en el pasado sí habían
no haber sido reducidos, pasando por el tamiz estado sujetos al régimen misional impuesto
de la socialización misional: tenemos, entre por la Compañía de Jesús en las misiones de
ellos, a los chacobos, pacaguaras, toromonas, Mojos, o bien por la Orden franciscana en las
cavineños o araonas. misiones de Apolobamba, al pie de las estri-
baciones andinas.2 La existencia entre estos
Otra parte de la población nativa la consti-
tuían aquellos grupos étnicos como los moje- 2 Sobre estos procesos misionales ver los trabajos
ños, cayubabas, baures, canichanas, movimas, de José Chávez Suárez, Historia de Mojos (Bolivia:
últimos de aquello que David Block (1997) Entre estas normas destaca el Decreto de 6 de
llamó “cultura reduccional” –ordenamien- agosto de 1842 que, de conformidad con los
to urbano, culto y praxis católica, actividades planteamientos modernizadores de la época,
agropecuarias, escritura, artes y oficios– pro- que consideraban “que las preciosas garan-
pició que se los considerara más próximos a tías de las diversas constituciones y leyes que
la “civilización” y, por ende, suficientemente se han dictado en la República en favor de los
preparados para unirse a la sociedad nacional. bolivianos no ha[bía]n sido extensivas a los
desgraciados moradores de aquellas vastas co-
El poder Ejecutivo boliviano se interesó espe- marcas”, establecía que:
cialmente por equiparar a estas últimas pobla-
ciones con el resto de los habitantes del país, e los habitantes de Mojos y los demás pueblos
integrarlas a la nueva constitucionalidad libe- comprendidos dentro de los antiguos límites
ral, al tiempo que procuraba propiciar el do- de la provincia se elevan a la clase de ciuda-
minio, la ocupación y la administración de los danos bolivianos y como tales capaces de los
territorios que esas parcialidades ocupaban. derechos de igualdad, libertad y propiedad,
En otras palabras, buscaba la incorporación que las leyes garantizan a los bolivianos.3
de la Amazonía al devenir republicano. No
De forma similar, “los habitantes naturales o fo-
Un amor
obstante, no fue hasta la presidencia de José
rasteros de dicha provincia” fueron declarados
desenfrenado Ballivián (1841-1847) que esa voluntad cobró
por la libertad “propietarios con pleno dominio” de los lotes
forma. Bajo su mandato se esbozó un proyecto
Antología de la urbanos que ocupaban y se repartieron asimis-
historia política orientalista que fijó algunas políticas de colo-
de Bolivia mo terrenos aptos para el cultivo y el pastoreo
(1825-2020)
nización de la región y que, de una u otra for-
entre todos aquellos que quisieran adquirirlos.
ma, serían recuperadas por sucesivos gobier-
Los hombres adultos quedaron sujetos al pago
474 nos bolivianos a lo largo del siglo XIX (García
de una contribución anual de dos pesos si re-
Jordán 2001, 260-281). Tras varios intentos
cibían terrenos, y de un peso para quienes re-
fallidos, distintas regulaciones sancionadas en
chazasen o no contasen con tal asignación. Este
Tomo I 1842 dieron lugar al advenimiento del depar-
1825-1952 pago sería satisfecho tanto por pobladores indí-
tamento del Beni que, sobre la base de las an-
genas como por criollos, pues el decreto tam-
tiguas misiones jesuitas de Mojos y sus áreas
bién fomentaba la llegada de “nuevos poblado-
adyacentes, se organizó alrededor del acceso,
res que quisieran establecer en cualquiera de los
la explotación y la comercialización de los re-
pueblos” de la región.4 Ello respondía al interés
cursos naturales amazónicos (Groff Greever
estatal por colonizar las fronteras y controlar
1987, 8-112; Guiteras Mombiola 2012a).
“las abundantes fuentes que pueden derramar la
prosperidad y la riqueza de aquella provincia”,
Editorial Don Bosco,1986); David Block, La cultu-
hecho que –tal como señalaría el mismo decre-
ra reduccional en los Llanos de Mojos (Bolivia: Historia to–, no podía conseguirse “sin propiedad, sin
Boliviana, 1997); Akira Saito, “Creation of Indian comercio y sin los demás géneros de industria”.5
republics in Spanish South America”, Bulletin of the Con el fin de evitar que esta medida quedara sin
National Museum of Ethnology 31 (2007): 443-477;
Hans Van den Berg, Clero cruceño misionero entre Yu-
racarés y Guarayos. Época colonial. (Bolivia: Instituto 3 Art. 2º del Decreto de 6 de agosto de 1842 en Ma-
de Misionología, 2009); Zulema Lehm, Sistemati- nuel Limpias Saucedo, Los Gobernadores de Mojos
zación de la Historia del Gobierno en la Región Taca- (Bolivia: Prefectura del Beni, 2005), 3-4.
na (Bolivia: CIPTA/WCS, 2016); María José Diez 4 Ver arts. 3º, 4º y 6º en Manuel Limpias Saucedo,
Gálvez, Las misiones de Mojos. Volumen I: Apuntes de Los Gobernadores de Mojos (Bolivia: Prefectura del
historia, geografía y economía (Bolivia: Instituto de Beni), 3-4.
Misionología/Itinerarios editorial, 2017); y Francis 5 Ver considerandos 3º y 5º en Manuel Limpias Sau-
Ferrié, Apolobamba indígena (Bolivia: Instituto de cedo, Los Gobernadores de Mojos (Bolivia: Prefectura
Misionología/Itinerarios editorial, 2018). del Beni), 3-4.
efecto, la nueva administración del departamen- Más ambiguo, en cambio, fue el impacto de
to fue reglamentada a través de las instrucciones esas disposiciones entre aquellas personas que
de 8 de agosto y de 21 de septiembre de ese mis- habían sido reducidas a la “civilidad cristia-
mo año, lo cual permitió una inicial repartición na” por parte de los religiosos franciscanos en
de predios rústicos entre sus habitantes y el es- la antigua provincia de Apolobamba. Si bien
tablecimiento de las bases para el desarrollo de los tacanas fueron sometidos al nuevo siste-
una economía de mercado.6 ma tributario y laboral instaurado en 1842
(Lehm 2016, 40-42), no hay evidencia de una
La aplicación de dichas disposiciones supuso distribución de tierras, ganado o cultivo entre
un cambio sustancial en las relaciones entre ellos.8 Quedaron excluidos de este estatus ju-
los criollos y los indígenas, antaño sometidos rídico las poblaciones que no estaban sujetas a
al sistema reduccional de la provincia de Mo- un régimen ni mantenían un contacto sosteni-
jos, al pasar estos últimos de ser tutelados a do con el frente colonizador.
constituir sujetos de pleno derecho. La natu-
raleza censitaria de la ciudadanía y el carácter Las normas de 1842 fomentaron la partici-
local de su reconocimiento7 favorecieron que, pación de una parte de la población indígena
ante el analfabetismo generalizado de la so- en la “vida social y comercial, basada en los
ciedad boliviana de entonces, se estimara a los principios de la propiedad y la industria libre”
mojeños, cayubabas, baures, canichanas, mo- (Limpias Saucedo 2005 [1942], 45). En efecto, Segundo periodo
vimas, itonamas y maropas como pobladores la nueva legislación para la Amazonía favore- Bajo la
Constitución de
capacitados para trabajar, tributar, entender la ció de manera especial el ingreso de los indíge- 1880 que marca
el periodo liberal
ley y actuar con independencia de juicio. nas al mercado laboral, pudiendo contratarse (1880-1938)
libremente y sin permiso previo de cualquier
Paralelamente, certificaba su condición de autoridad civil o religiosa –como ocurría has- 475
ciudadanos la adquisición de terrenos que ha- ta entonces– con empresarios y negociantes
rían producir por sí mismos, así como también criollos, pero también –como veremos– con
lo hacía el correspondiente pago de impuestos miembros de la elite nativa, en calidad de peo- “Sin indios
o hay industria
que al mismo tiempo acreditaba su calidad de nes, jornaleros o mozos. del caucho”:
los indígenas
propietarios. Además, el derecho concomitan- amazónicos frente
a la colonización
te de libertad, auspiciado por la constitución Sin embargo, la asimilación de estos ciudada- gomera
y regido por las leyes orgánicas del país, abría nos no implicaba necesariamente la igualación
las puertas a su intervención activa en la eco- social, sino en todo caso una traducción de las
nomía departamental. diferencias a otro nivel: aunque la norma no
establecía diferencias de naturaleza étnica en-
6 Instrucciones de 8 de agosto y 21 de septiembre en tre los bolivianos, las prácticas sociales siguie-
Anna Guiteras Mombiola, De los llanos de Mojos a las ron siendo netamente diferenciadoras (Barra-
cachuelas del Beni, 1842-1938 (Bolivia: ABNB/Insti-
gán 1999). El principal escollo a superar era la
tuto de Misionología/Itinerarios editorial, 2012a),
303-308. persistencia de ciertas prácticas coloniales de
7 Si el sufragio censitario o capacitado, establecido
por la Constitución de 1839 y vigente en Bolivia
hasta 1952, limitaba el ejercicio ciudadano a varo- 8 Es probable que esto responda a la restitución al
nes que supieran leer y escribir, pagaran impuestos departamento de La Paz de la antigua provincia de
y tuvieran una renta mínima proveniente de pro- Apolobamba –ahora denominada Caupolicán– en
piedades o de trabajo no ejercido en calidad de do- la década de 1850, desgajándola del departamen-
méstico, la vecindad como principio constituyente to del Beni al que había sido incorporada en 1842
de la ciudadanía favoreció su definición local en (ver las resoluciones al respecto en Manuel Limpias
base a acciones realizadas a favor del bien común Saucedo, Los Gobernadores de Mojos (Bolivia: Prefec-
y reconocidas por el resto de la sociedad local (Iru- tura del Beni, 2005), 13-14, 80-87, 104-106, 113-
rozqui 2004, 60-68; Herzog 2007). 115, 117-119).
tutelaje ejercidas por la sociedad criolla, como ha llegado a su pleno desarrollo, y evitar la
los servicios gratuitos prestados obligatoria- ruina de estos pueblos llamados por Dios a
mente al Estado por los indígenas, que impo- imprimir en su espléndida naturaleza el se-
nían la realización de ciertas tareas y la entre- llo de sus valientes iniciativas de industria y
ga de determinada cantidad de su producción de comercio (Oyola 1883, 3).
(Block 1997, 326-327).
En efecto, desde mediados de la década de
Aunque los mismos fueron inicialmente anu- 1870, el impulso estatal de las políticas de co-
lados por el Decreto del 6 de agosto, serían lonización de las fronteras orientales y el de-
restablecidos al poco tiempo por medio de un sarrollo de los frentes económicos extractivos
sistema laboral que incluía la refacción de edi- en el norte amazónico atrajeron a numerosos
ficios, la construcción de caminos, el acopio de agentes económicos, nacionales y extranjeros,
madera o el transporte de mercancías y correo quienes desarrollaron actividades que reque-
en beneficio del Estado.9 La coexistencia de rían de grandes extensiones de tierras, produc-
dos formas de uso de la mano de obra nativa tos y mano de obra (García Jordán 2001, 275-
–gratuita si era por mandato estatal y con com- 277, 300-302, 326-330; Stoian 2005, 60-69).
pensación económica si el empleador era un Como consecuencia, las exigencias laborales a
Un amor
particular– pronto generó una connivencia de las que se vieron sometidos los indígenas de
desenfrenado intereses públicos y privados que, a su vez, per- los Llanos de Mojos aumentaron exponen-
por la libertad
mitió su abuso y explotación, ignorando mu- cialmente. Con la voluntad de regularizar este
Antología de la
historia política chas veces sus derechos constitucionales. De proceso de ocupación del espacio amazónico
de Bolivia
(1825-2020)
ello dieron cuenta varias autoridades públicas, y de la explotación de sus recursos humanos y
al denunciar que muchas de esas contrataciones sus riquezas naturales y minerales, el Ejecuti-
476 eran “incompatible[s] con el sistema de libertad vo boliviano promulgó un nuevo ordenamien-
bajo el que se halla[ba] la provincia”.10 to jurídico exclusivo para el departamento del
Beni que establecía, al menos en parte, las ba-
Tomo I En las décadas siguientes, la aplicación errá- ses del marco de relaciones económicas y la-
1825-1952
tica de la legislación derivada de la continua borales que se mantendrían vigentes durante
anulación, modificación y reimplantación de el auge de la goma elástica.
normas de contratación dio lugar a un com-
plejo proceso en el que fueron constantes los En efecto, a través de la ley de 24 de noviembre
avances y retrocesos en el ejercicio de los de- de 1883 se estipularon medidas de protección a
rechos de los indígenas (Van Valen 2013, 34- los indígenas frente a las arbitrariedades de las
39, 54-69). De ahí que, a inicios de la década cuales habían sido víctimas con su ingreso al
de 1880, un prefecto beniano exclamara: mercado laboral, al tiempo que se reglamenta-
ba la industria gomera, por entonces principal
Es una necesidad urgente, un deber impe- motor económico departamental. Por un lado,
rioso, que el congreso dicte una ley especial con esta ley se ampliaba lo dispuesto en las dis-
para proteger la libertad del indio, que no posiciones de 1842. De este modo, “para hacer
práctica la garantía constitucional del trabajo y
de la industria”, fueron abolidos los tributos
9 “Nuevo reglamento”, 06.08.1844 y “Calendario
anual de trabajos”, 03.11.1844 en Archivo y Biblio-
impuestos “por costumbre al trabajo de los
teca Nacionales de Bolivia (en adelante ABNB), Mi- naturales del Beni”, incluyéndose la contribu-
nisterio del Interior (MI), Prefectura del Beni (PB), ción personal anual.11 Asimismo, se legitimó
101/23, ff. 107-107 y ff. 97-99, respectivamente.
10 “Notificación de la prefectura sobre la protec-
ción del trabajo de los naturales”, 31.07.1845 y 11 Esta medida respondió al interés estatal por implan-
30.08.1845 en ABNB, MI-PB, 107/33, ff. 129-133. tar un nuevo y único sistema tributario nacional
la posesión legal de los indígenas sobre la tie- todos los alimentos básicos, bebida y ropa eran
rra que por entonces ocupaban al declararlos vendidos a precios sobrevalorados en tiendas
“propietarios absolutos” de las mismas.12 Por de las propias barracas y en las cuales los peo-
otra parte, se procuraba compatibilizar los nes se abastecían. La imposibilidad del peón
derechos de aquéllos con el desarrollo econó- de amortizar la deuda propiciaba la dependen-
mico regional. La contratación de peones fue cia y sujeción al patrón, quien así se aseguraba
cuidadosamente codificada: la duración máxi- la mano de obra necesaria para la extracción
ma, el salario (y su forma de pago), el antici- de la goma elástica (Weinstein 1983; Gama-
po (“simple deuda y no como obligación de rra 2018 [2007], 120 y ss.; Córdoba 2018). Así
trabajo forzado”), la fianza, las cuotas y el re- describía un contemporáneo el enganche en-
gistro ante notario del contrato laboral fueron tre los indígenas del Beni:
detalladamente consignados. Contratos que –
dicho sea de paso, tal como se recordaba a los Llega algún extractor de goma trayendo
patrones– solo podrían celebrarse con “esos dinero, collares, pendientes, etc., princi-
naturales, si libre y espontáneamente lo qu[e- pia a contratarlos ofreciéndoles a 10 pesos
ría]n”. Además, la contratación y el traslado de mensuales de salario y la mesa puesta, y a
la mano de obra a los bosques septentriona- esa cuenta les da zarazas para sus tipois, co-
les “para la explotación de la goma elástica o llares, cintas y otras chucherías, pero todo
cualquier otro género de trabajos”, así como por un precio subido: el dinero, los indios Segundo periodo
su regreso tras la finalización de dicho acuerdo lo consumen en aguardiente muy pronto y Bajo la
Constitución de
laboral, debían seguir pautas escrupulosas ante no les queda más que los miserables vesti- 1880 que marca
el periodo liberal
distintas instancias públicas (fiscalía, notaria- dos que tomaron fiados, y para pagar con su (1880-1938)
do, municipalidad, prefectura), encargadas de trabajo. Llega el momento de marchar […]
evitar cualquier irregularidad.13 y como están adeudados en ochenta o cien 477
bolivianos ya no es posible que éstos paguen
En realidad, esta ley pretendía revertir una esas cantidades por ellos y tienen que mar-
práctica que se había extendido rápidamen- char por la fuerza a las regiones mortíferas “Sin indios
o hay industria
te con el avance de los frentes extractivos: el de las cachuelas de donde casi nunca regre- del caucho”:
los indígenas
llamado sistema de “enganche”. Se trataba san (Ministerio de Hacienda 1882, 11). amazónicos frente
a la colonización
de un sistema de sujeción de la mano de obra gomera
que consistía en ofrecer trabajo en los goma- En la práctica, la nueva legislación no tardó en
les mediante adelantos de dinero en efectivo acomodarse a los intereses de los comerciantes
y mercancías varias, llamados ‘habilito’, que y los empresarios de la región. La preponderan-
debían ser cancelados con la goma que los cia que adquirió en la década de 1890 la explo-
peones entregarían en el futuro. Sin embargo, tación gomera en el mercado internacional hizo
como en la mayoría de las barracas gomeras que la demanda de mano de obra fuera cada vez
sólo se llevaba a cabo la extracción de látex, más apremiante, perviviendo prácticas engaño-
sas, fraudulentas e incluso delictivas a la hora
aplicado sobre la extensión y las rentas anuales de de la contratación: intercambio no comunicado
cada propiedad, estuviera en manos indígenas o de peones entre patrones, empleo de menores,
criollas, reajustando la tasa impositiva a la produc-
traslado encubierto a horas intempestivas, falsi-
ción de cada predio, y estimándose su valor y renta
anuales (Platt 2010 [1982], 109-111). ficación documental, falta de constancia de un
12 Ver arts. 1º, 2º, 11º-16º en República de Bolivia, contrato legal y, por ende, de fianza en caso de
Anuario de Leyes y Supremas Disposiciones de 1883. (La accidente, robo o secuestro.14
Paz: Imprenta de El Comercio, 1884), 285-288.
13 Ver arts. 4º-10º en República de Bolivia, Anuario
de Leyes y Supremas Disposiciones de 1883. (La Paz: 14 Ver, a título de ejemplo, “Oficios de la prefectura”,
Imprenta de El Comercio, 1884), 285-288. 02.04.1895, 19.07.1895, 25.07.1895, 30.08.1895,
Un amor
desenfrenado
por la libertad
Antología de la
historia política
de Bolivia
(1825-2020)
478 Choza para ahumar goma de seringueiros en Barraca San Francisco, 1911, Eduard Seler.
Fuente: Fondo fotográfico Ernst Ulhe. Ibero-Amerikanisches Institut, Berlín.
Tomo I Por este motivo, primero se dictaron medidas de enganches retomó ideas ya expuestas en la
1825-1952
para “corregir [los] abusos que se cometen en legislación precedente, interesada en la con-
el enganche de mozos y criados” a nivel local ciliación del desarrollo departamental con los
y regional.15 Y posteriormente se promulgó, a principios modernizadores del pensamiento
nivel estatal, la que sería la principal norma de liberal. En su intención por evitar más abu-
contratación para el norte amazónico: la ley sos con la mano de obra, esta ley prohibía
enganche de peones de 16 de noviembre de expresamente el cambio de patrón sin previa
1896. Esta nueva medida sólo se aplicó en la consulta con los peones afectados y asimismo
región situada por encima del paralelo 14º, todo contrato para realizar trabajos fuera del
donde se encontraban los árboles de goma territorio nacional. Las obligaciones de los
elástica. Por otra parte, los peones contrata- patrones con los trabajadores fueron mejor
dos para trabajar al sur de este paralelo –es de- precisadas, exigiéndose una duración concreta
cir, en los Llanos de Mojos– seguían sujetos del contrato, un detalle “de los servicios alqui-
a la ley de 24 de noviembre de 1883. La ley lados” y asimismo del salario mensual o anual
a percibir, el informe diario de la situación
25.11.1895, 19.05.1896 en Archivo de la Casa de la
económica de cada peón, el suministro de ali-
Cultura (en adelante ACCB), Copiador de Oficios mento y atención médica. Además, se fijó en
1895-1896, sin signatura, ff. 17-18, 42-45, 49-50, un máximo de 400 bolivianos el anticipo y se
97-127, 195. duplicó la fianza depositada por el patrón por
15 “Oficio de la prefectura”, 25.11.1895 en ACCB,
Copiador de Oficios 1895-1896, sin signatura, f.
cada peón contratado (Limpias Saucedo 2005
98. [1942], 251-252).
A pesar de los propósitos “benéficos” de la fue finalmente derogada por el gobierno cen-
legislación, lo cierto es que persistieron los tral en 1915.16
problemas relativos al endeudamiento y al
enganche clandestino de peones. El descubri-
miento de nuevos y más ricos gomales supuso 2. La mano de obra nativa en la red
la proliferación de barracas a lo largo de las ri- fluvial del frente gomero
beras de los ríos Iténez, Beni, Madre de Dios,
Tahuamanú, Acre, Orton y Purús. Ávidos por Varias eran las actividades económicas desa-
enriquecerse, sus propietarios requirieron de rrolladas en los Llanos de Mojos y los bosques
un número cada vez mayor de trabajadores. tropicales adyacentes. En el área pampeana
De este modo, si en un inicio la mayoría de se producían carne de res, cacao, café, arroz,
ellos procedía de los pueblos de Mojos, a fi- maíz, aceite de copaiba y frutas tropicales, y
nes del siglo XIX la economía gomera absor- con el ganado carneado, la caña de azúcar y el
bió a indígenas y criollos empobrecidos del algodón, se elaboraban sebo y cuero, aguar-
norte de La Paz, el oriente cruceño y el área diente y gran diversidad de tejidos (Block
chaqueña (Lema 2009; Vallvé 2010; Córdoba 1997, 218-219). En las estribaciones andinas,
2015b), e involucró también a neófitos cedi- a orillas del río Beni, se recolectaba por otra
dos por los misioneros a los patrones gome- parte la quina o “cascarilla”, usada desde época
ros y a indígenas no sometidos, muchos de los colonial para controlar las fiebres altas, cuya Segundo periodo
cuales fueron capturados y obligados a traba- explotación se prolongó hasta la década de Bajo la
Constitución de
jar como mano de obra forzada. No sorpren- 1870 cuando su coste pronto pasó a ser de- 1880 que marca
el periodo liberal
den, entonces, las palabras del padre conver- masiado alto y no se pudo ya competir con los (1880-1938)
sor del Colegio de La Paz: países vecinos (Gänger 2015). Este producto
sería sustituido por la goma elástica, que des- 479
Hemos observado que el asunto de recla- plazaría por completo el eje económico regio-
mo de mozos y enganche es continuo, y el nal hacia el norte amazónico a partir de la dé-
Intendente necesita de mucha suspicacia cada de 1880 (Roux 2000, 166-170; Gamarra “Sin indios
o hay industria
para no dejarse envolver con los patrones, 2018 [2007]). El transporte de estos productos del caucho”:
los indígenas
que en este caso tienen leyes y códigos de se realizaba por las únicas vías de comunica- amazónicos frente
a la colonización
arrabal a su modo, y lo peor es que no hay ción de la región: los ríos, cuya navegación se gomera
patrón que no quiera tener razón y de ahí llevaba a cabo con embarcaciones de remo.
todos los días oíamos clamar contra la au-
toridad,de injusta e ilegal (Sanjinés 1895, El progresivo traspaso de agentes económi-
25). cos a la Amazonía, así como la presencia de
cada vez más empleados públicos en los cen-
La disconformidad con la medida de 1896 de tros urbanos de la región, supusieron enton-
los empresarios gomeros, por entonces prin- ces un incremento del tráfico fluvial tanto con
cipal grupo de poder de la región e incluso el interior como el exterior del país. Desde la
del país (Fifer 1970), resultó no solo en el década de 1840 fue en aumento el tráfico de
incumplimiento de aquella sino también en correspondencia oficial y privada, así como de
su organización en cámaras de comercio. A
través de estas entidades se opusieron a toda 16 La ley de16 de agosto de 1915 que derogaba la
regulación del “enganche” y contratación de ley de 14 de noviembre de 1896 fue publicada en
mano obra nativa, por ir en detrimento del “Congreso Nacional”, El Eco del Beni, núm. 200, 30
interés particular tanto comercial como in- de octubre de 1915. No obstante, según señala Ga-
marra (2018 [2007], 192), el enganche de peones se
dustrial. Tras casi dos décadas de obstrucción mantuvo hasta mucho tiempo después de la crisis
a la aplicación de dicha normativa, la misma de la economía gomera durante la década de 1920.
artículos de todo tipo y de pasajeros: autori- Cabe señalar que, por entonces, la norma re-
dades, vecinos, extranjeros autorizados por el guladora del transporte fluvial aludía a las res-
gobierno, etc. Por entonces, el transporte de ponsabilidades de los remeros en el transcurso
correo y mercancías era parte de los servicios de la navegación, siendo escasa cualquier re-
gratuitos a los que estaban obligados los in- ferencia a las obligaciones de los comercian-
dígenas por mandato estatal, pero pronto se tes para con sus trabajadores.20 Sí se indicaba,
estipuló la obligatoriedad de transportar per- no obstante, la exigencia de que los hombres
sonas y cargas a todo particular que fletara empleados estuvieran “pagados en libre con-
naves por su cuenta, “en obsequio del deber venio”,21 aunque su cuantía no fuese estipu-
que tiene cada ciudadano de servir al Estado lada. El resultado fue la contratación de tri-
cuando lo necesita”.17 No se hicieron esperar pulantes por un mísero salario que en muchas
las tretas y engaños con los salarios y los con- ocasiones no llegaban a recibir: por quedar en
tratos de trabajo de los tripulantes por parte manos de las autoridades criollas e indígenas
de los empresarios locales. Evidencia de ello que habían mediado en su reclutamiento, por
son las órdenes y circulares dictadas en las dé- serles canjeado por los dos pesos de la contri-
cadas de 1840 y 1850, que tenían por objeto bución personal, por ser cobrados en especie
conciliar el desarrollo económico regional con con artículos que no solo no necesitaban sino
Un amor
los derechos y libertades otorgados en 1842 a que muchas veces, incluso, habían sido manu-
desenfrenado los indígenas que tomaban parte del comercio facturados por los propios indígenas (Gibbon
por la libertad
fluvial.18 Así lo expresaba un prefecto beniano: 1993 [1852], 253-255, 288; Limpias Saucedo
Antología de la
historia política 2005 [1942], 35, 96, 111).
de Bolivia Las ventajas de la industria y del comercio son
(1825-2020)
absolutamente nulas sin el pleno ejercicio de Para neutralizar la connivencia entre los co-
480 la libertad. Está bien que el comerciante ven- merciantes y las autoridades de distinto ran-
da y compre, enganche tripulaciones para las go, la prefectura beniana redactó en 1858 el
canoas en que ha de extraer los productos de primer reglamento de navegación regional.
Tomo I su giro, alquile obreros para las manufactu- Esta medida eliminó la navegación de los ser-
1825-1952
ras que necesite y demás labores relativos a la vicios gratuitos exigidos por el Estado, estipu-
especulación, pero hágase esto como se hace ló la forma apropiada de celebrar el contrato
en todos los pueblos civilizados de la tierra.19 (ante la autoridad pertinente, días antes de la
partida, con constancia de la carga y pasapor-
17 Ver “Orden prefectural”, 17.02.1846 en ABNB, MI- te para cada tripulante), consignó el número
PB, 115/37, f. 38 y “Suprema orden del 20 de abril
de hombres para cada tipo de embarcación y
de 1847 puesta en vigencia el 12 de enero de 1848”
en Manuel Limpias Saucedo, Los Gobernadores de los sueldos a percibir en función del trayecto
Mojos (Bolivia: Prefectura del Beni, 2005), 43-46. a realizar, y detalló las facultades y obliga-
18 “Notificación de la prefectura sobre la protección ciones de los empresarios, los pasajeros, los
del trabajo de los naturales”, 31.07.1845 y “Circular
capitanes y los remeros.22 Sentadas las bases
sobre la conducción de correos hecha por los natu-
rales”, 30.08.1845 en ABNB, MI-PB, 107/33, ff. 129-
133 y 115/37, f. 141; “Circular denunciando las ma- 20 “Disposiciones que deberán regir en la salida y con-
las prácticas sobre la población nativa y ciudadana”, ducción de los correos ordinarios”, 27.11.1843 en
04.01.1855 en ACCB, Correspondencia varia, sin ABNB, MI-PB, 96/48, s/f.
signatura; “Transgresiones que comerciantes y pa- 21 “Orden de 26 de febrero de 1846”, 08.07.1846 en
sajeros cometen con las tripulaciones”, 11.09.1846 MHSC, PMC-MJ, 1/14-11, ff. 82-83.
en Museo de Historia de Santa Cruz (en adelante 22 “Primer reglamento de navegación para el distrito
MHSC), Provincias, Municipios y Cantones-serie del Beni de 1 de julio de 1858” en Manuel Limpias
Mojos (en adelante PMC-MJ), 1/14-11, ff. 89-90. Saucedo, Los Gobernadores de Mojos (Bolivia: Prefec-
19 “Circular reiterando la libertad indígena en el con- tura del Beni, 2005), 129-132. Este reglamento en-
trato”, 05.02.1846 en ACCB, Correspondencia va- tró en vigor a inicios de la década de 1860 (Limpias,
ria, sin signatura. 147-148).
de la participación indígena en el tránsito flu- República”.25 No era una afirmación baladí.
vial, en las décadas de 1860 y 1870 se aproba- La expansión comercial que vivía la Amazonía
ron nuevas regulaciones regionales que, sin en la segunda mitad del siglo XIX se vio ace-
dejar de promover el desarrollo comercial, lerada con el hallazgo de gomales vírgenes y
buscaban proteger las garantías civiles de los de gran calidad en los bosques septentrionales,
tripulantes ampliando la norma de 1858: su con el descubrimiento de la confluencia de los
salario aumentó progresivamente y se estipu- ríos Beni y Madre de Dios, con la navegación
ló que se percibiría en moneda; la duración de la cachuela más peligrosa que mediaba en-
de los contratos fue limitada; el cambio de tre aquellos y los ríos Madera y Amazonas y,
patrón sin consentimiento del trabajador fue en definitiva, con la conexión de la Amazonía
prohibido; la movilidad de la población sin boliviana con el océano Atlántico, Europa y el
licencia autorizada fue restringida; el número mundo (Weinstein 1983; Roca 2001; Gama-
y nombre de los hombres contratados pasó a rra 2018 [2007]; Córdoba 2015a). De ahí que
ser registrado; y el regreso a sus hogares fue empresarios particulares y sociedades comer-
asegurado con una fianza aportada por el co- ciales, como la famosa Casa Suárez, aludieran
merciante, cuya cuantía se incrementaría con a sus negocios en el “comercio de artefactos
los años.23 de jebe” en los expedientes de contratación de
tripulaciones, en los que afirmaban requerir la
Varios comerciantes intentaron eludir sin éxi- pericia de los “marinos benianos” para viajar al Segundo periodo
to el cumplimiento de estas regulaciones, en río Beni o bajar al Madera “llevando artículos Bajo la
Constitución de
particular el pago de dicho aval, aludiendo a de comercio y retorna[r] con mercaderías de 1880 que marca
el periodo liberal
los gastos intrínsecos del flete de embarca- ultramar”.26 (1880-1938)
ciones y la peligrosidad de los viajes, sujetos
a eventualidades que podían resultar funestas: La apertura del mercado beniano al comer- 481
naufragios, enfermedades, muertes.24 Y, en lo cio internacional y el auge de la economía
que aquí respecta, enfatizaban la “incontesta- gomera convirtieron a los indígenas en un
ble utilidad pública” de sus actividades eco- recurso valioso que debía ser necesariamen- “Sin indios
o hay industria
nómicas en Manaos y Belém do Pará “para el te preservado. Es en este contexto en el que del caucho”:
los indígenas
engrandecimiento industrial y comercial de la fue promulgada la Ley de 24 de noviembre amazónicos frente
a la colonización
de 1883. En lo que a la navegación respecta, gomera
esta norma ratificó regulaciones anteriores
23 Transcripción de la “Orden de 29 de febrero de (duración del contrato, sueldo, fianza, pasa-
1864” y mención a la Orden de 15 de agosto de porte, etc.) e incluso amplió ciertas garantías:
1869 en ACCB, Registro de Escrituras (en adelan-
te RE) 1870, ff. 57, 95-98, 102, 106-108, sin sig-
limitó a un solo viaje de ida y vuelta hasta
natura. Mención al reglamento del 5 de mayo de Brasil el comprometido en cada contrato, que
1871 en Manuel Limpias Saucedo, Los Gobernadores en ningún caso podía exceder de ocho me-
de Mojos (Bolivia: Prefectura del Beni, 2005), 173
ses, y obligó al registro de nombre y apellido,
y a la Circular de 2 de mayo de 1878 en Minis-
terio de Hacienda 1882, 21-22. Sobre el aumento
del salario ver también Edward Matthews, Up to
the Amazon and Madeira Rivers, through Bolivia and 25 “Fianza de Manuel Ugalde por tripulantes contra-
Peru (Londres: Sampson Low, Marston, Searle & tados”, 13.03.1872 en ACCB, RE, 1872-1876, ff. 25-
Rivington, 1879), 161. 26, sin signatura.
24 “Fianza de Miguel Antonio Suárez por tripulantes 26 Ídem. Ver también “Fianza de Pastor Oyola por tri-
contratados”, 15.12.1869 en Archivo de la Notaría pulantes contratados” 21.01.1885; “Fianza de Jesús
núm. 2 de Trinidad (en adelante ANT), Escrituras Becerra por tripulantes contratados”, 21.08.1895 y
notariales (en adelante EN), 1869, ff. 144-5, sin sig- “Fianza de la Casa Suárez Hermanos por tripulan-
natura; “Fianza de Nicolás Ferreira por tripulantes tes contratados”, 26.11.1894 en ACCB, RE, 1885,
contratados”, 13.06.1870, en ACCB, RE, 1870, f. 57, ff. 38-39; RE, 1894-1894, ff. 72-73, 112-114, sin
sin signatura. signatura.
edad, profesión y estado civil de los tripulan- sobre los otros, generalmente por ser aquél el
tes para comprobar su identidad tanto en su habitante del centro urbano en que se fletaba
marcha como en su regreso.27 De este modo, la embarcación.28
los tripulantes nativos se consolidaron como
un elemento primordial para el desarrollo re- El proceso de reclutamiento de la mano de
gional, ya fuera por sus habilidades náuticas, obra se iniciaba con la petición de los em-
o bien por la ineptitud de los criollos para tal presarios “interesados al intendente de poli-
desempeño: cía [de] canoas tripuladas […]; aquél da[ba] la
orden a los corregidores que las transmiten a
¡Quién, navegando hacia rumbos desconoci- los caciques y estos a los jefes de las parciali-
dos, hubiera impulsado el remo que llevó las dades, quienes no ve[ía[n en la orden sino un
naves cargadas con el precioso producto, a lo riguroso precepto que se ha[bía] de cumplir a
largo del río Beni, del Mamoré, el Madera y toda costa y nombra[ba]n por consiguiente a
el Amazonas; desafiando las cachuelas hasta los tripulantes”.29 El número de remeros enro-
tocar con los puertos donde se troca la goma lados variaba en función del destino de la car-
en el oro que dan los mercados ultramarinos! ga, el pasaje a transportar y las embarcaciones
(Limpias Saucedo 2005 [1942], 209). a utilizar (Villar 2020, 30-31). Lo más usual
era organizar una expedición con una decena
Un amor
desenfrenado La composición étnica de las tripulaciones o una veintena de personas encargadas de la
por la libertad
era heterogénea. La mayoría provenía de las tripulación de las embarcaciones fletadas por
Antología de la
historia política antiguas misiones jesuitas de Mojos: Trini- los patrones; en ciertas ocasiones, no obstante,
de Bolivia
dad, San Pedro, Santa Ana, Exaltación (Block la organización por parte de una misma casa
(1825-2020)
1997, 219, 228-229); menor fue la implicación comercial de distintas expediciones con escaso
482 de los habitantes de Tumupasa o Ixiamas, an- tiempo de diferencia y con destinos distintos
taño reducciones franciscanas de Apolobam- llevaba a la contratación en un mismo día de
ba (Vallvé 2010, 330-331). Así lo relatan los un número de tripulantes mayor al usual.30
Tomo I distintos viajeros que recorrieron la región: Todo indica, de esta forma, que la demanda
1825-1952
mojeños, cayubabas y canichanas fueron em- cada vez más intensa de la mano de obra in-
pleados por José Agustín Palacios, Jesualdo dígena supuso una fuerte desestructuración
Maccheti, George E. Church, los ingenieros
Keller y Edward D. Mathews; mientras que 28 “Fianza de Miguel Antonio Suárez por tripulantes
ixiameños y tumupaseños componían la tri- contratados”, 15.12.1869 y “Fianza de Nemesio
Ojopi por tripulantes contratados”, 20.10.1883
pulación de Percy Fawcett (Van Valen 2013,
en ANT, EN, 1869, ff. 144 y EN, sin fecha, s/f, sin
68; Villar 2020, 49). También lo confirman las signatura; “Fianza de José Manuel Suárez por tri-
matrículas de contratación presentadas por los pulantes contratados”, 03.09.1870 y “Fianza de
comerciantes locales ante la prefectura benia- Francisco Suárez por tripulantes contratados”,
04.09.1870 en ACCB, RE, 1870, ff. 90-91, 96-98,
na: la mayoría eran integradas por mojeños,
sin signatura.
canichanas, cayubabas y movimas, y muchas 29 “Carta del prefecto Carmelo María del Rivero”,
otras presentaban también baures e itonamas. 01.07.1855 en ABNB, Ministerio de Hacienda, Si-
La existencia de tripulaciones con personas de glo XIX. Prefectura, 141/28, s/f.
30 “Fianza de José Manuel Suárez por tripulantes con-
un único origen étnico fue claramente la ex-
tratados”, 03.09.1870; “Fianza de Francisco Suárez
cepción. A pesar de esta multiplicidad, sí exis- por tripulantes contratados”, 04.03.1872; “Fianza
tía el predominio numérico de un grupo por de Nicolás Suárez por tripulantes contratados”,
04.03.1886; “Fianza de la Casa Suárez Hermanos
por tripulantes y peones contratados”, 26.11.1894
27 Ver arts. 6º y 7º en República de Bolivia, Anuario en ACCB, RE, 1870, ff. 90-91, 96-98; RE, 1872-
de Leyes y Supremas Disposiciones de 1883. (La Paz: 1876, f. 27; RE, 1886-1888, f. 62; RE, 1894-1895, f.
Imprenta de El Comercio, 1884), 286. 113, sin signatura.
Un batelón, 1908-1911, Fotografía: Emil Bauler.
Fuente: Wolfgang Wiggers, colección privada. Segundo periodo
Bajo la
Constitución de
familiar y comunitaria cuando las tripulacio- abrasador, los segundos quedaban a cargo del 1880 que marca
el periodo liberal
nes permanecían mucho tiempo fuera de su gobierno de la tripulación: (1880-1938)
hogar (Roca 2001, 99-100).
La tripulación elige a sus propios capitanes; 483
La navegación a remo era una actividad fun- se elegía al hombre más activo, enérgico e
damentalmente masculina. Aunque el reclu- inteligente, sin importar su edad […]. Todos
tamiento de tripulantes incluía a todos los obedecen sus órdenes […] y generalmente “Sin indios
o hay industria
hombres adultos contribuyentes de la comu- alienta a los hombres a mantener buen rit- del caucho”:
los indígenas
nidad, el grueso de los individuos contratados mo con los remos pateando el piso en oca- amazónicos frente
a la colonización
de remeros tenía entre 25 y 35 años. Menos siones especiales, cuando la tripulación tra- gomera
relevante era la edad de los capitanes, hallán- baja extraordinariamente bien, desplegando
dose hombres en su veintena, pero también en toda su fuerza cuando él les habla (Gibbon
sus cincuenta.31 Si a los primeros se les exigía 1993 [1852], 265).
un enorme esfuerzo físico, consistente en re-
mar por diez y doce horas diarias sorteando Los capitanes eran responsables del arribo al
obstáculos diversos (corrientes, troncos a la puerto en la fecha convenida, quedando a su
deriva, plantas acuáticas, bancos de cieno), y juicio determinar cuándo y dónde encostar
arrastrando naves y bultos cuando no era posi- para comer, el tiempo de las pausas de descan-
ble navegar de forma segura, todo bajo un sol so, el ritmo de los golpes de remo, etc. Todo
se realizaba sin cartas hidrográficas, confian-
do en su instinto, su experiencia y su cono-
31 “Fianza de Francisco Suárez por tripulantes con-
tratados”, 04.09.1870; “Fianza de Félix Arteaga
cimiento de los ríos. En ellos recaía, además,
por tripulantes contratados”, 11.09.1870; “Fianza la atención de las necesidades y exigencias
de Francisco Suárez por tripulantes contratados”, del comerciante que los había contratado y la
04.03.1872 y “Fianza de Manuel Ugalde por tri- protección de la carga transportada, ya fuera
pulantes contratados”, 13.03.1872 en ACCB, RE,
1870, ff. 96-98, 103-106 y RE, 1872-1876, ff. 25,
de las inclemencias del tiempo, de incidentes
27, sin signatura. circunstanciales e incluso de accidentes más
graves. Las obligaciones de los capitanes no únicamente ellos podían prestar y que muchos
solo se circunscribían a la navegación, exten- habrían preferido no realizar.
diéndose a su regreso al puerto de origen. Su
cometido no era otro que la exposición ante En efecto, no pocos nativos se opusieron a
las autoridades locales de los pormenores del tomar parte del comercio fluvial. Durante las
viaje, incluyendo el trato recibido por parte de travesías los tripulantes debían soportar unas
los comerciantes, las eventualidades padecidas duras condiciones físicas y psíquicas: al ago-
y las circunstancias de los decesos acaecidos.32 tamiento por remar diez o doce horas al día y
El grado de responsabilidad asignado a los ca- la carga a hombros de mercancías, equipajes
pitanes respecto del patrón, la carga y la mis- y pasajeros hasta los puertos de embarque, se
ma tripulación quedaba reflejado en el sueldo solían sumar los castigos corporales, azotes y
que estos percibían, que era siempre superior falta de víveres; además de las enfermedades
al de los simples remeros (Limpias Saucedo (disentería, malaria) e incluso los ataques de
2005 [1942], 130). los llamados salvajes.34
El blindaje legal brindado a esta fuerza laboral, Del mismo modo, los trayectos fluviales toma-
con múltiples regulaciones y fianzas y sueldos ban un largo tiempo: si la ruta de los Llanos
Un amor
en un aumento constante paralelo al auge eco- de Mojos al río Madera suponía tres semanas
desenfrenado nómico regional, hizo que no hubiera duda río abajo y nueve para regresar; aquellos que
por la libertad
para sus coetáneos de que “los tripulantes de viajaban hasta Belem do Pará destinaban no
Antología de la
historia política las embarcaciones que llevan los comercian- menos de setenta días en llegar, y no menos de
de Bolivia
(1825-2020)
tes […] son bien pagados”, al contrario de los doscientos en su retorno río arriba (Van Valen
nativos dedicados a otro tipo de tareas (Minis- 2013, 69; Villar 2020, 32). A ello se agregan
484 terio de Hacienda 1882, 12). Sin embargo, no las pérdidas humanas a consecuencia de nau-
era esa la percepción nativa. Ningún indígena fragios y enfermedades: mientras algunos au-
mencionaba “tripulante” al indicar su profe- tores estiman aquéllas en un 5% del total de
Tomo I sión. Todos se identificaban como labradores, tripulaciones; otros calculan que se perdieron
1825-1952
vaqueros, herreros, carpinteros, sastres, sa- entre un 25% y un 50% de los remeros (Roux
cristanes o músicos; es decir, como protago- 2000, 185; Balzan 2008 [1885-1893]; Villar
nistas de las tareas agropecuarias, los oficios 2020, 44).
artesanales o de carácter litúrgico que habían
aprendido durante la fase misional.33 Así, la Si bien muchos testimonios de la época afir-
fluvial no era una actividad reconocida como man que los indígenas no osaban desobedecer
una “profesión”, sino más bien como un ser-
vicio que periódicamente les era asignado, que
34 Ver José Keller y Francisco Keller, Exploración del
Río Madera en la parte comprendida entre la cachuela
32 “Fianza de Miguel Antonio Suárez por tripulan- San Antonio y la desembocadura del Mamoré por los
tes contratados”, 01.08.1872 y “Fianza de Nicolás ingenieros brasileros José y Francisco Keller (Bolivia:
Suárez por tripulantes contratados”, 04.03.1886; Imprenta de la Unión Americana, 1870), 5; Lard-
“Fianza de Eloi Ávila por tripulantes contrata- ner Gibbon, Exploración del Valle del Amazonas, tomo
dos”, 12.03.1895 en ACCB, RE, 1872-1876, f. 67, II (Iquitos: CETA/Abya Yala, 1993), 288 y 296; Ma-
RE, 1886-1888, f. 63, RE, 1894-1895, f. 20, sin sig- nuel Limpias Saucedo, Los Gobernadores de Mojos
natura. (Bolivia: Prefectura del Beni, 2005), 35-36, 111 y
33 “Indagatoria para esclarecer abusos cometidos con 174; Gary Van Valen, Indigenous agency in the Ama-
tripulantes”, 01.09.1866-05.01.1867 en ACCB, zon. The Mojos in liberal and rubber-boom Bolivia,
Correspondencia varia, sin signatura; “Fianza de 1842-1932. (Tucson: The University of Arizona
Domingo Leigue por tripulantes contratados”, Press, 2013), 69-72; y Diego Villar, Bolivia a vapor.
14.08.1872 en ACCB, RE, 1872-1876, f. 25, sin sig- Antropología histórica del barco cauchero (1880-1920)
natura. (Santa Cruz de la Sierra: El País, 2020), 42-43.
las órdenes de los caciques y corregidores de 3. Ciudadanía, elite nativa y auge
turno, existen evidencias de individuos que se gomero en los Llanos de Mojos
negaron a embarcarse alegando la desatención
de sus cosechas, su inexperiencia para sortear Las medidas de 1842 no sólo posibilitaron
las cachuelas, la insalubridad de esas latitudes, la libre contratación de los indígenas antaño
o por manifestar simplemente que no era “su misionados, sino que también trastocaron el
voluntad”.35 Entre aquellos que efectivamen- orden socioeconómico y político nativo. El
te iniciaban la navegación, era frecuente el estatus de ciudadanos propició que muchos
abandono de la carga y el pasaje en una orilla mostraran interés por adquirir la propiedad
inhóspita, llegándose incluso al asesinato de de las tierras que trabajaban: los primeros en
patrones y comerciantes (Van Valen 2013, 72). obtener escrituras de propiedad fueron los
“indios principales”, miembros de la elite na-
En la última década del siglo XIX, el comer- tiva con medios económicos para sufragar los
cio fluvial en los principales ríos del norte trámites de la compra;37 luego se les unieron
amazónico se alteró dramáticamente con la otros indígenas que querían asegurar sus ho-
aparición de las primeras lanchas a vapor, gares frente la creciente demanda de los colo-
propiedad de empresarios regionales y luego nos criollos.
del propio Estado boliviano (Villar 2020, 60).
Sin embargo, las embarcaciones a remo no Paralelamente, la superioridad demográfica na- Segundo periodo
desaparecieron y de hecho continuaron sur- tiva38 y el cumplimiento de los requisitos legales Bajo la
Constitución de
cando los ríos regionales. Debe tenerse en para intervenir en la vida pública favorecieron 1880 que marca
el periodo liberal
cuenta que, por el escaso calado de los ríos, la la participación de los “indios principales” en (1880-1938)
estacionalidad de los mismos y las peligrosas la política local, actuando como munícipes y
cachuelas, muchos de los afluentes no fueron ocupando empleos públicos de rango menor, 485
nunca aptos para los barcos a vapor, que de- como el de corregidor (Guiteras Mombiola
bían combinarse en uno o más tramos con las
embarcaciones de remo. La demanda de tri- “Sin indios
o hay industria
pulantes siguió en alza y, por tanto, se man- 37 Desde época colonial, la elite nativa era gratificada del caucho”:
con una parte mayor de los productos repartidos los indígenas
tuvo la necesidad de salvaguardar la fuerza la- amazónicos frente
periódicamente por las autoridades: alimentos, a la colonización
boral nativa. Aprobado el nuevo reglamento plantas para el cultivo, herramientas, y bienes sun- gomera
de navegación de 1912, desde las Cámaras de tuarios y de importación que funcionaban como
Comercio se reconoció el papel de los indí- pago a su trabajo, de acuerdo con el tipo de acti-
vidad laboral y el rango social (Diez 2017, 109-113
genas en el sostenimiento del tráfico fluvial
y 125-127). Esto favoreció que los “indios princi-
y la necesidad de garantizar la seguridad, los pales” acumularan una cantidad de recursos nada
derechos y los deberes de los tripulantes para desdeñable.
afrontar las exigencias económicas del nue- 38 En la década de 1840, la población criolla apenas
alcanzaba el medio millar, mientras que el total de
vo siglo.36 No en vano Gabriel René Moreno
indígenas se situaba alrededor de los 27.000 indi-
(1973 [1888], 21) describió la región como viduos. Esta población se mantuvo estable hasta la
“un país de remadores”. década de 1870 cuando empezó a descender, re-
duciéndose a cerca de 14.000 en el año 1900; por
entonces la población criolla censada en el depar-
35 “Naturales desisten de emprender la navegación tamento del Beni había ascendido a poco más de
al Madera”, 19.11.1846 e “Indígenas se niegan a 9.000 individuos. Ver “Presupuesto para el reparto
ser contratados”, 9-10.06.1883 en ACCB, Corres- de carne que ha de hacerse en toda la provincia”,
pondencia varia, sin signatura; “Fianza de Pastor circa 1840 y “Estadísticas formadas de orden de la
Oyola por tripulantes contratados”, 21.01.1885 en prefectura”, 31.12.1844 en Archivo Histórico de
ACCB, RE, 1885, f. 39. La Paz (de aquí en adelante ALP), Sociedad Geo-
36 “Cámara de Comercio”, La Democracia 489 (25 de gráfica de La Paz (SGL), 3/40 y 3/41, y Bolivia 2012
enero de 1913). [1904], 173.
2012b). La mayoría era o había sido miembro mucho de ellos malvendieran sus derechos de
del cabildo indigenal, institución política por propiedad viéndose abocados a la pobreza y a
excelencia que se encargaba de velar por el or- una situación límite de supervivencia.40
den económico, social, moral y espiritual de la
comunidad. El liderazgo del cabildo recaía en Esta situación generó tal malestar que los mo-
el cacique que recibía órdenes del corregidor y jeños empezaran a abandonar la ciudad para
las transmitía al resto de cabildantes (Limpias establecerse al interior de los bosques. La in-
Saucedo 2005 [1942], 132-136). tensidad que cobró este alejamiento en 1886 y
1887 convenció al vecindario criollo de que se
El nuevo orden liberal tuvo un notable im- estaba gestando una insurrección general que,
pacto entre la elite nativa: abrió espacios de con el paso de los años, sería conocida como
acción individual, modificó las relaciones de “Guayochería”.41
poder en el seno de las respectivas sociedades
indígenas, e insertó a esos “indios principales” Los notables locales organizaron un comité de
en los entramados de dominación en manos guerra integrado, entre otros, por el prefecto y
de los grupos criollos de poder. En pleno auge los todopoderosos empresarios Rómulo y Ni-
de la economía gomera, los alcances de esta colás Suárez; la prefectura envió una expedición
Un amor
ciudadanía variaron según la idiosincrasia de punitiva a la zona que, a sangre y fuego, terminó
desenfrenado cada grupo étnico, el tipo de relación con los con el movimiento: algunos indígenas se refu-
por la libertad
colonos y el grado de intervención en el desa- giaron en el monte, otros fueron perseguidos,
Antología de la
historia política rrollo económico regional. y sus posesiones fueron saqueadas. Entre tanto
de Bolivia
(1825-2020)
crecieron los recelos hacia los nativos que per-
Los mojeños vieron su hogar, la antigua mi- manecían en la ciudad, creyéndose que existía
486 sión de Trinidad, convertirse en el centro cierto entendimiento entre éstos y los indígenas
político-administrativo del departamento del “huidos”. Se requisaron los hogares de los nati-
Beni, congregando autoridades de distinta ín- vos, se sitió la iglesia y se apresaron decenas de
Tomo I dole y diversos agentes económicos que situa- personas que fueron posteriormente azotadas
1825-1952
ron ahí la residencia de sus familias y la sede
de sus negocios. Desde mediados de la década
40 Los expedientes notariales de ANT y los registros
de 1870 las exigencias laborales para satisfa- de escrituras de ACCB evidencian el aumento sus-
cer la gran demanda de mano de obra para el tancial de ventas de solares urbanos y rústicos a po-
tráfico fluvial y la naciente industria gomera blación no-indígena a partir de la década de 1870.
41 El nombre deriva del apellido del anciano Andrés
comportaron un notable descenso de la po-
Guayocho, cuyas prédicas anunciando una próxi-
blación –un millar en menos de una década–, ma gran inundación que arrasaría Trinidad y pro-
así como también el aumento de los hombres metiendo la salvación a aquellos que se trasladasen
“ausentes” por trabajar fuera de la ciudad.39 hacia los bosques situados a orillas de los ríos Sé-
Al mismo tiempo, la presión criolla sobre las cure y Tijamuchi lo convirtieron, a ojos de la so-
ciedad criolla de la capital, en el líder espiritual de
casas y los chacos de los nativos provocó que esa supuesta insurrección. Sobre este personaje ver
los trabajos de Bernardo Gantier, Guayocho, un
Mesías Mojeño (Cuarto Intermedio 7, 1988) 44-58;
39 En 1867 se registraron 4.181 habitantes, número Jorge Cortés, JHS Misión de los PP Astraín, Man-
que en 1873 había disminuido a 3.402 individuos. sanedo y Arteche c.a. 1888 (Trinidad: CIDDEBENI,
De estos últimos, unos 300 hombres se hallaban 1989) 34-44; Zulema Lehm, Milenarismo y movi-
“ausentes”, cantidad que contrasta con los 66 ano- mientos sociales en la Amazonía boliviana (Santa Cruz
tados seis años atrás. “Padrón del repartimiento de de la Sierra: APCOB/CIDDEBENI/OXFAM América,
Trinidad”, 06.04.1867 y 25.05.1873 en ABNB, Tri- 1999) 55-63; y Gary Van Valen, Indigenous agency
bunal Nacional de Cuentas, Revistas (en adelante in the Amazon. The Mojos in liberal and rubber-boom
TNC-Rv), Cercado 5, 1867, ff. 1-64 y Cercado, Bolivia, 1842-1932 (Tucson: The University of Ari-
Magdalena y Sécure 6, 1874, ff. 1-45. zona Press, 2013), 111-120.
y sometidas a largos interrogatorios. Este su- sus antecesores, poseían casas, estancias y culti-
plicio resultó en la muerte de nueve hombres vos. El cacique poseía ganado y cultivos en dos
y una mujer, entre ellos importantes miembros propiedades distintas. También el corregidor
del cabildo: el corregidor y sacristán mayor, quien, además, era titular de varios lotes urba-
Manuel Prudencio Semo, el cacique Juan José nos; y más importante aún era su ascendencia
Noe, el “indio principal” Nicanor Cubene y su entre los nativos por haber sido cacique, toma-
esposa, Nicolasa Nosa (Lehm 1999, 55-63; Van do parte de la vida política local y ejerciendo
Valen 2013, 108-141). durante dos décadas como sacristán mayor, so-
bre quien recaía la conducción moral y espiri-
La criminalización de los “indios principales” tual de los indígenas de la ciudad.43
–y con ellos de la sociedad mojeña en gene-
ral– se conjugó con el interés de los criollos por El matrimonio de Nicanor Cubene y Nicolasa
mermar su crédito social y reducir su margen Nosa tal vez sea lo que mejor ejemplifica el
de acción. No hay que olvidar de que éstos, a papel que hasta entonces desempañaba la elite
pesar de su implicación en las redes de contra- nativa en la sociedad local, así como las repre-
tación de mano de obra, seguían ostentando la salias que a partir de la “rebelión” buscaban
respetabilidad que emanaba de su cargo y una socavarla. Según el testamento suscrito por
posición económica superior por su acceso Nicolasa, la pareja era propietaria de una es-
diferenciado a los recursos, elementos que re- tancia con ganado, una casa y dos solares cerca Segundo periodo
frendaban su ejercicio ciudadano. En este sen- de la plaza principal, además de poseer obje- Bajo la
Constitución de
tido, la presunta vinculación de la elite nativa tos de oro y plata. También tenían mozos a su 1880 que marca
el periodo liberal
mojeña con lo que fue considerado una insu- servicio y habían sido avaladores de indígenas (1880-1938)
rrección, así como la pena corporal sufrida por y criollos que carecían de recursos propios.44
sus supuestos instigadores –ligada a la idea de 487
infamia–, supusieron la pérdida de sus derechos Además, para conservar su preeminencia so-
políticos (Barragán 1999, 27-28). Esto supuso cial y equiparar su nivel de vida con el de la
el desplazamiento de las esferas de decisión en población criolla, habían contraído deudas “Sin indios
o hay industria
el ámbito local y su total subordinación a los que pretendían sufragar con el fruto de sus del caucho”:
los indígenas
grupos dominantes. Perdido el respeto del que trabajos. Sin embargo, el deceso de ambos amazónicos frente
a la colonización
habían gozado ante la sociedad criolla hasta la tras la represión hizo que su pago recayera en gomera
fecha, la elite nativa tradicional vio relegada su los familiares sobrevivientes de la masacre.45
influencia al cabildo indigenal; entidad que, a su
vez, vio limitada su actuación a la organización
43 “Relación nominal de los propietarios forasteros y
de la vida ritual y festiva de la comunidad.42 naturales”, 22.02.1844 y “Catastro de la capital Tri-
nidad”, 20.04.1881 en ALP, SGL, 1844, 3/38 y 1881,
Al deterioro del prestigio social se unió el me- 3/62; “Escrituras de Manuel Prudencio Semo”,
noscabo de su propiedad. Retomando las ideas 03.07.1862 y 21-28.07.1882 en ANT, EN 1863 y
1882, sin signatura; “Padrón de repartimiento de
apuntadas por Cortés (1989, 41-43), resulta Trinidad”, 30.01.1862, 06.04.1867 y 25.05.1873 en
clara la voluntad de los notables locales por ABNB, TNC-Rv, Beni 2, 1861-1862, f. 222, Cercado
apropiarse de las tierras y bienes de valor po- 5, 1867, f.40 y Cercado, Magdalena y Sécure, 1874,
seídos por esos “insurrectos” quienes, igual que f. 27.
44 “Contrato de Ángel Maleca con Nicanor Cubene”,
10.09.1885 y “Autentificación del testamento de
42 Toda referencia al cabildo indigenal de Trinidad Nicolasa Nosa [29 de mayo de 1887]”, 30.07.1888
desapareció de las fuentes fechadas en las décadas en ANT, EN, 1885, s/f. y documento suelto, ff. 38-
siguientes, desconociéndose quiénes fueron sus 39, sin signatura.
integrantes, a excepción de algunos sacristanes, li- 45 “Autentificación de la muerte de Nicanor Cubene
gados al cabildo menor (Guiteras Mombiola 2019, y Nicolasa Nosa”, 24.02.1888 en ANT, documento
303-304). suelto, s/f., sin signatura.
El padre de Nicolasa intentó obtener el di-
nero para sufragar la deuda adquirida por su
yerno con Antonio y Rómulo Suárez, pero
los intereses sobre la misma dificultaron su
cancelación. Largos años después, y solamen-
te tras la venta de cerca de la totalidad de los
bienes de la familia, se dio por concluido el
procedimiento.46
46 “Procedimiento contra el deudor Nicanor Cube- 49 De las 139 familias criollas que vivían en Exaltación
ne”, 02.05.1894-05.11.1907, ANT, EN, 1894, ff. en 1867, sólo quedaban 31 en 1881. “Padrón de re-
82-118, sin signatura. partimiento de Exaltación”, 24.04.1867 en ABNB,
47 Ibidem, ff. 92-95. TNC-Rv, Sécure 12, 1867, ff. 15-18; “Catastro del
48 Transcripción de la “Orden dictada en la visita pre- Cantón Exaltación”, 24.10.1881 y “Predios rústi-
fectural a Exaltación”, 29.02.1864 en ACCB, RE, cos del Cantón Exaltación”, 02.11.1881 en ALP,
1870, ff. 106-109, sin signatura. SGL, 1881, 3/64 y 3/63.
inicios de la década de 1890, se estimara en proteger sus posesiones. Acuruza y Avaroma
unas escasas 300 almas.50 fueron de los primeros cayubabas en legalizar
la propiedad de los lotes urbanos y predios
Este panorama, desolador a ojos de muchos rústicos que ocupaban, propiedades que irían
de aquellos que visitaron Exaltación durante aumentando a lo largo de las décadas siguien-
el último tercio del siglo XIX, favoreció que la tes.53 Este proceso fue paralelo al empobre-
elite nativa reforzara su prestigio social y pre- cimiento de muchos otros nativos que, para
dominio económico. Desde finales de la déca- sobrevivir, devinieron jornaleros y sirvientes
da de 1840, los cargos de cacique y corregidor domésticos de los grupos de poder local, entre
fueron alternando entre dos “indios principa- los cuales figuraban las propias familias Avaro-
les”: Domingo Avaroma y José Gregorio Acu- ma, Anoapa y Acuruza.54 Este enriquecimien-
ruza.51 A ellos acudían las autoridades a la hora to resulta claro en el caso de este último quien,
de resolver cuestiones diversas en el ámbito a inicios de la década de 1880, poseía cinco ca-
político y judicial local, hecho que afianzó su sas en el pueblo, además de cuatro estancias
crédito social ante la población criolla.52 ganaderas y dos establecimientos agrícolas.55
A su vez, los decretos de 1842 los agraciaron al Siendo ya anciano, José Gregorio Acuruza
ofrecerles los mecanismos indispensables para se consolidó como la figura más poderosa de
Exaltación. Nombrado corregidor por varios Segundo periodo
a liderar el cabildo para, en 1857 y 1864, actuar de roma”, 07.08.1856 en ACCB, RE, 1894, ff. 118-
nuevo como corregidor. José Gregorio Acuruza, 124, sin signatura; “Escrituras de José Gregorio
tras ocupar cargos menores en el cabildo (alférez, Acuruza”, 17.06.1853; 18.08.1867, 04.09.1867,
intendente), fue cacique en 1853-1854, ejerció de 11.10.1867, 08.11.1867, 05.04.1873 y 30.03.1873
corregidor en 1858 y 1859 y volvió al cargo de ca- en ABNB, Instituto de Colonización (en adelante
cique en 1862 y 1867. Ver “Cuadro de distribución IC), 778.26 y ACCB, RE, 1867, ff. 97-99, 121-126,
de ganado”, 18.06.1849 en biblioteca privada de la 145-149; 1872-1786, ff. 43-47, 57-60.
familia Vázquez (en adelante BV), sin signatura; “Pa- 54 Ver “Padrón de repartimiento de Exaltación”,
drones de repartimiento de Exaltación”, 01.12.1849, 21.12.1873 en ABNB, TNC-Rv, Cercado, Magdale-
22.10.1853, 02.01.1857, 18.18.1858, 30.11.1861, na y Sécure 6, 1874, ff. 259, 269.
24.04.1867 en ABNB, TNC-Rv Mojos 9, 1849, ff. 55 “Catastro del Cantón Exaltación”, 24.10.1881
191, 212; Mojos 10, 1853-1854, f. 103; Sécure 11, y “Predios rústicos del Cantón Exaltación”,
1857, f. 15; Beni 2, 1858-1859, f. 165; Beni 2, 1861- 02.11.1881 en ALP, SGL, 1881, 3/64 y 3/63.
1862, f. 69; Sécure 2, 1867, f. 1; “Diligencias sobre 56 Toribio Gutiérrez, Recuerdos del Oriente (Bolivia:
solicitud de tierras”, 01.12.1864 en ABNB, MI, Con- Tipografía del Cruzado, 1888), 21 y Ladislao Ca-
cejo de la Municipalidad del Beni, 182/19, f.28. brera, Navegación fluvial de Trinidad a Villa Bella.
52 “Actas del vecindario contra las nuevas autorida- Diario de viaje por las cachuelas del Mamoré (Santa
des”, 09.11.1848-20.01.1849 en ACCB, Correspon- Cruz de la Sierra: La Estrella del Oriente, 1889),
dencia varia, sin signatura; y “Notas judiciales”, 4-5. También “Comunicación del corregimiento de
27.03.1844 y 02.08.1852 en ABNB, MI-PB, 101/23, Exaltación”, 20.03.1890 en ABNB, MI, Concejo de
ff. 15-16 y 143/25, s/f. la Municipalidad del Beni, 253/61, f. 2.
prácticas de dominación de origen colonial familias ascender en la escala interétnica al in-
perpetuadas por la sociedad criolla. vestir a ambos cónyuges de estatus y prestigio
social.
Un viajero que se alojó en casa afirmó que
“ha[bía] reunido a todas las familias indígenas Asimismo, el crédito, autoridad y dignidad ga-
con pocas excepciones”, empleándolas en sus nados por el mismo Domingo Avaroma garan-
distintas propiedades en actividades agrope- tizaron el nivel socioeconómico, el dominio
cuarias y náuticas, pagándolas con “algo de político y la condición letrada a sus descen-
dinero, pero no el que correspond[ía] a su tra- dientes para que pudieran seguir ejerciendo
bajo” (Cabrera 1889, 5). su condición de ciudadanos. Sus hijos contra-
jeron matrimonio con mujeres criollas. José
En su interés por unirse a la nueva elite criolla Gregorio se casó en primeras nupcias con Ca-
(Van Valen 2013, 99-100), Acuruza intervino ciana Carvalho, hija del comerciante brasilero
en todos los negocios del pueblo y de quienes Sebastián José de Carvalho y, tras enviudar,
lo visitaban, proveyendo también de mano de contrajo matrimonio con Petrona Méndez,
obra, y en particular tripulantes; negocios que anotada “forastera” (es decir, no-indígena) en
le reportaron la consideración de los grupos los registros de la época.60 Por su parte, Faus-
de poder regionales y los “industriales y co- tino se casó con Matilde Burgos.61
Un amor
desenfrenado merciantes que viaja[ba]n al río Beni, Madera,
por la libertad etc. [quienes] procura[ba]n agradarle” (Mat- La producción del patrimonio familiar per-
Antología de la thews 1879, 121; Cabrera 1889, 4-5), al punto mitió que ambos hermanos se integraran a los
historia política
de Bolivia de que algunos de ellos incluso devinieron sus espacios de poder controlados por los criollos.
(1825-2020)
albaceas en la capital.57 Ejemplo de ello es la sociedad gomera Avaro-
490 ma y Cia., dedicada inicialmente a “bajar por
Otros “indios principales” tejieron estrechas el Mamoré hasta su confluencia con el Beni y
relaciones familiares con actores de origen subir éste hasta el río Orton” la goma elástica
Tomo I criollo. Por lo general se trataba de uniones de las barracas del político, médico y empren-
1825-1952
entre colonos y mujeres indígenas de la elite dedor Antonio Vaca Díez, quien en honor a
cayubaba: una práctica que también adoptaron su antigua amistad habría propuesto a Fausti-
las hijas de la familia Acuruza58 y, en particular, no su asociación en favor del “primer empuje
de la estirpe Avaroma,59 que permitió a ambas de la colonización” de esa región amazónica
(Anónimo 1894, 37-38).
57 Entre ellos se encuentran Daniel Suárez, comer-
ciante y prefecto del Beni (1886-1887) y Fran-
cisco Suárez, el hermano mayor de los hermanos
Suárez, principales empresarios gomeros del norte
boliviano. “Escrituras de José Gregorio Acuruza”, 60 “Padrones de repartimiento de Trinidad y Exal-
22.04.1870 y 12.05.1885 y ANT, EN, 1870, ff. 27- tación”, 18.08.1858, 06.04.1867, 21.12.1873, en
30 y 1885, ff. 8-26. ABNB, TNC-Rv, Beni 2, 1858-1859, f. 162; Cerca-
58 Petrona Acuruza, hija de José Gregorio Acuruza, do 5, 1867, f. 64; Cercado, Magdalena y Sécure 6,
se casó con Joaquín Montenegro, en “Escritura de 1874, f. 269 y “Escritura de Petrona Méndez viu-
Petrona Acuruza”, 13.03.1880 en ANT, EN, 1880, da de Abaroma”, 21.11.1894, en ACCB, RE, 1894-
ff. 31-32, sin signatura. 1895, ff. 118-124, sin signatura.
59 Manuela Antonia Avaroma contrajo matrimonio 61 “Padrones de repartimiento de Exaltación”,
con José Guzmán Velasco, María Visitación Ava- 18.08.1858, 24.04.1867, 21.12.1873 en ABNB,
roma se desposó con Pedro Suárez y Rosa Avaro- TNC-Rv, Beni 2, 1858-1859, f. 162; Sécure 12,
ma se casó con Miguel Eugenio Bargas. “Padro- 1867, f. 14; Cercado, Magdalena y Sécure 6, 1874,
nes de repartimiento de Exaltación”, 01.12.1849, f. 269. Cabe señalar que en ocasiones Faustino es
18.08.1858, 24.04.1867, 21.12.1873 en ABNB, mencionado con su segundo nombre, Chávez, el
TNC-Rv, Mojos 9, 1849, f. 210; Beni 2, 1858-1859, cual no debe confundirse con un posible apellido, a
ff. 158, 164; Sécure 12, 1867, f. 12. pesar de su similitud.
Posteriormente realizaría el transporte de va-
lijas y mercancías con permiso estatal entre
Exaltación y Trinidad.62 Los réditos obtenidos
fueron suficientes como para enviar a sus hi-
jos a estudiar a Londres (Carvalho 1978, 45)
y desempeñarse en varios cargos públicos de
relevancia, logrando grandes cuotas de poder
e influencia durante las primeras décadas del
siglo XX.63
gerente general de la Casa Suárez con sede en en los informes y acuerdos comerciales. In- Bajo la
Constitución de
Cachuela Esperanza, por entonces la empresa cluso sabemos de determinados indígenas que 1880 que marca
el periodo liberal
más importante del norte amazónico bolivia- ascendieron (o descendieron) socialmente a (1880-1938)
no (Centeno y Fernández 1998, 14-19). través de toda una serie de documentos, fuen-
tes y archivos que nos permiten identificarlos 493
personal y étnicamente. En el norte amazóni-
72 “Fincas rústicas”, 1901-1902 en ABNB, TNC-Ct, co, no obstante, nos encontramos con un pa-
Beni 2c, ff. 26-7; “Lista nominal de contribuyentes. norama completamente distinto. “Sin indios
o hay industria
Iténez”, 1907, en ACCB, Tesoro Público-Catastros, del caucho”:
sin signatura. Ver también Antonio Carvalho Urey, los indígenas
Lo primero que llama la atención aquí es que amazónicos frente
Del ignorado Mojos (Bolivia: Editorial Serrano, a la colonización
1978), 52; y Ernst Leutenegger, “Gente en la selva: no aparecen indígenas firmando documentos gomera
vivencias de un suizo en Bolivia”, en Dos suizos en la con nombre y apellido cristianos, ni accedien-
selva. Historias del auge cauchero en el Oriente bolivia- do a los derechos civiles, comerciales y legales
no, (Bolivia: ed. Lorena Córdoba, 2015), 257-258.
que, como vimos, se ganaban lenta pero gra-
73 “Asamblea popular”, El Eco del Beni, núm. 2, 21 de
septiembre de 1911; “Carmelo López delegado na- dualmente en la misma época en los Llanos
cional”, El Eco del Beni, núm. 163, 11 de febrero de de Mojos. Las sociedades autóctonas del norte
1915; “Convención liberal”, El Eco del Beni, núm. amazónico no pasaron en primer lugar por ese
183, 3 de julio de 1915; “Carmelo López”, El Eco
tamiz misional, o si lo hicieron contactaron
del Beni, núm. 210, 8 de enero de 1916.
74 “Fianza de Pastor Oyola por tripulantes contrata- con el frente misionero de forma más incons-
dos” 21.01.1885 en ACCB, RE, 1885, ff. 38-9; “Es- tante e intermitente, por lo cual las fuentes del
critura de la sociedad comercial de Nazario Bui- período no los consideraban como seres civi-
trago y Pastor Oyola”, 10.4.1864 y “Contrato de
lizados.
indígenas con Pastor Oyola”, 26.03.1884 en ANT,
EN, 1864, s/f y EN, 1884, s/f, sin signatura.
75 “Fincas rústicas”, 1901-1902 en ABNB, TNC-Ct, Aquellos otros grupos que, por otra parte, más
Beni 2c, ff. 26-7; “Lista nominal de contribuyen- allá de su autonomía respecto del aparato mi-
tes. Iténez”, 1907, en ACCB, Tesoro Público-Catas-
sional, sí lograron trabar contacto con la in-
tros, sin signatura; “Censo General de Trinidad”,
08.11.1896 en BV, sin signatura y República de Bo- dustria de la goma elástica que a lo largo de los
livia 1913, 48-51. ríos penetraba por la selva tropical, lo hicieron
de forma mayormente satelital: las fuentes “salvajes” o “bárbaros”. En el imaginario ofi-
suelen caracterizarlos como “indios pacíficos” cial prevalece entonces la idea prejuiciosa de
que mayormente se ocupaban de aprovisionar que la violencia fronteriza es patrimonio casi
a los centros gomeros. exclusivo de los indígenas, cuando en reali-
dad no hay documentación suficiente para
Finalmente, aquellos otros grupos irreducti- demostrarlo, y la poca que existe nos invita
bles que, por una u otra razón, se mantuvieron a pensar más bien que en muchos casos fue-
tanto al margen de la colonización misional y ron los propios caucheros los responsables de
cauchera, padecieron una identificación ma- aquellos crímenes. Una percepción similar a
yormente negativa por parte de las crónicas: la de la prensa local reflejan los informes ofi-
son aquellos que suelen atacar a los caucheros, ciales de los delegados nacionales en el norte
a las embarcaciones que surcan los ríos, o bien del país:
los autores de las matanzas y masacres que de
tanto en tanto nutren los periódicos de la épo- En todo este año [1896] han sucedido tres
ca (Córdoba 2015b). hechos desgraciados; el primero en la ba-
rraca “Filadelfia” del río Tahuamanu en la
Al igual que en otras partes de Latinoaméri- que el patrón, don Santos Adriazola, fue
Un amor
ca, puede decirse que en Bolivia la legitima- muerto por los bárbaros que perseguía […]
desenfrenado ción del frente colonizador tuvo por bandera El segundo hecho ha tenido lugar en las
por la libertad
el progreso y su postulado básico en cuanto a proximidades del “Manuripi” en un centro
Antología de la
historia política las sociedades indígenas fue que debían some- perteneciente a la empresa del “Carmen” en
de Bolivia
(1825-2020)
terse por las buenas o por las malas (Córdoba, el Madre de Dios, un freguéz llamado Ru-
Bossert y Richard 2015). “Por las buenas” im- perto Gonzales que trabajaba con bárbaros
494 plicaba que se integrasen al sistema de trabajo, conquistados por él fue asesinado durante la
asimilándose a la sociedad nacional, tal como noche por sus propios peones que desapa-
en el caso de los Llanos de Mojos. “Por las recieron después de consumado el hecho.
Tomo I malas”, en cambio, que se transformasen en un El tercero, en una pequeña barraca del río
1825-1952
obstáculo que debía reprimirse o eliminarse: Orton en que un mayordomo que estaba a
cargo de unos pocos bárbaros ha muerto sin
Para librar de todo peligro la región com- saber con seguridad si con alguna enferme-
prendida entre el Acre y el Bajo Beni, que dad o también asesinado; lo último es lo más
encontramos susceptible de un desarrollo probable a causa de la fuga de los trabajado-
industrial de primer orden, no hay otro res (Baldivieso 1896, 60-61).
medio que el de limpiarlo de salvajes, ale-
jando a éstos sobre la margen izquierda del En todo caso la agenda parece clara: hay que
primero de dichos ríos […] Allí las causas disciplinar a los bárbaros, socializarlos e inte-
constantes que actúan en la naturaleza grarlos a la órbita republicana para que pue-
como auxiliares de la civilización, los redu- dan, en definitiva, convertirse en ciudadanos.
cirán a la impotencia para el mal, si no los El problema, por supuesto, surgía a la hora de
mueven a someterse al trabajo, para parti- resolver cuál era el método, el camino o la vía
cipar de los beneficios de la industria (Pan- de esa “civilización”. ¿Era a través de las mi-
do 1897, 108). siones y los métodos de los padres conversores
o era más bien a través de la incorporación a
En La Gaceta del Norte, abundan las noticias las barracas gomeras, que de alguna u otra for-
de un sinfín de crímenes acaecidos en las ma integraban a la masa de trabajadores que
barracas o centros gomeros; que, sin mucha picaban la goma elástica a la economía y la so-
prueba, se atribuyen indistintamente a los ciedad regionales?
El dilema provocó una serie de pugnas y pe- pertenecían a la familia lingüística pano, con
leas notorias entre los religiosos, por un lado, lo cual muchos viajeros y frailes señalaban
que estaban a favor de la propagación de las justamente la posibilidad de que se entendie-
misiones en el Beni y por tanto de su metodo- ran entre ellos, así como también advertían la
logía evangelizadora a fin de convertir a los in- similitud de sus léxicos y su cultura material
dígenas y, por otra parte, la industria cauchera (Córdoba et al. 2012).
y sus agentes y voceros –pero también en me-
nor medida otras industrias como la agrope- Por más que podamos rastrear algunos casos
cuaria–, que veían con malos ojos la mediación esporádicos de miembros de esos grupos tra-
de los religiosos inmiscuidos en su intención bajando alrededor de las barracas gomeras, lo
de contratar (o reclutar) a los indígenas. cierto es que los pacaguaras, los chacobos o los
caripunas jamás trabajaron masivamente con
En su descripción de la actividad franciscana la industria, como tampoco habían sido redu-
en Bolivia, el padre José Cardús (1886) sinteti- cidos antes en las reducciones religiosas de la
zó buena parte las informaciones etnográficas zona (Villar et al. 2009). Orbitando alrededor
por entonces disponibles sobre la Amazonía, de las barracas gomeras, su articulación con el
al basarse principalmente en las riquísimas in- frente extractivo fue más bien satelital, aleato-
formaciones que los misioneros de su orden ria, circunstancial, como veremos en diversos
recopilaban en el terreno. En el caso puntual registros que hablaban en positivo de aquellos Segundo periodo
del norte amazónico, contaba con los infor- mismos grupos que, cuando no se plegaban a Bajo la
Constitución de
mes que el franciscano Nicolás Armentia pu- las demandas colonizadoras, eran reputados 1880 que marca
el periodo liberal
blicó de manera exhaustiva durante el último inmediatamente como responsables de esca- (1880-1938)
cuarto del siglo XIX (Armentia 1885, 1887; brosas matanzas en la selva profunda.
Villar 2017). 495
El imaginario de la época, de esta forma, con-
A partir de esa información, fundamentalmen- sideraba a estos indígenas mayormente como
te, presentaba a los pacaguaras que habitaban “bárbaros” o “salvajes”. Dependiendo de las “Sin indios
o hay industria
las márgenes del río Beni, la parte baja del necesidades de cada ocasión, eran utilizados del caucho”:
los indígenas
Madre de Dios y casi todo el territorio com- como guías de las expediciones –por más que amazónicos frente
a la colonización
prendido entre los ríos Beni y Madera hasta muchas veces no fueran demasiado confiables, gomera
el Purús (Cardús 1886, 290-291; Villar et al. tal como puede comprobarse en las aventuras
2009). Los sinabos, capuibos, chacobos y ca- selváticas de Armentia (1885, 1887)–, como
ripunas eran indicados como una fracción de traductores esporádicos frente a otros indíge-
la “tribu” o “nación” de los pacaguaras pero nas selvícolas (Villar et al. 2009), o en la mayo-
de costumbres “más mansas” que estos últi- ría de los casos como proveedores coyuntura-
mos, que habitaban las márgenes del Mamoré, les de maíz, mandioca, plátano o productos de
el norte de Exaltación y las cercanías del lago caza y pesca. Así, Clements Markham (1883,
Rogoaguado (Balzan 2008 [1885-1893], 331). 324) observó campamentos gomeros a los que
los pacaguaras proveían bananas, caña de azú-
Se trataba de los mismos grupos que luego se- car y mandioca.
rían presentados por los primeros etnólogos
profesionales de principio de siglo XX –Erland Lo mismo reportaba el ingeniero Matthews
Nordenskiöld, Paul Rivet, Alfred Métraux–, (1875, 58), quien se encuentra con un hombre
que también hablaban de los pacaguaras y niño pacaguaras en el río Tres Hermanos que
como “tribu” originaria de la cual se despren- se comportan bien, visten ropas occidentales,
dían todos los demás subgrupos (Villar et al. e intercambian plátanos y maíz por machetes,
2009). Todos esos grupos, proponía Armentia, hachas y anzuelos; y, en su célebre expedición
por el río Beni, Edwin Heath (1896, 16) se apaciguarlos.77 No es raro, en estas circunstan-
topó por su parte con una familia de paca- cias, que se endilgasen a los pacaguaras los crí-
guaras viviendo con el gomero Fidel Endara, menes más grotescos, e incluso la imputación
ayudándolo con el caucho, con la navegación y de ser caníbales:
con las imprescindibles plantaciones de arroz,
caña y mandioca. A fines del mes de abril, la tribu salvaje de
los pacaguaras asaltó la barraca de los se-
En todos los casos, parecía tratarse de indí- ñores Suárez y Durán, entre el Río Negro
genas circunstancialmente “amansados” pero y el Abuná, matando al capataz Benjamín
que jamás duraron demasiado tiempo en las Pérez y a la sirviente Petrona Paniagua.
barracas y menos aún en o alrededor de las El primero fue descuartizado, llevándose
ciudades, de las cuales terminaban invariable- los salvajes, tal vez como bocato di cardinali,
mente huyendo (Villar et al. 2009). ambos brazos. A la segunda intentaron lle-
vársela consigo; pero los gritos de socorro
Si bien, como hemos visto, la necesidad re- a sus compañeros, próximos a la barraca,
gional de mano de obra era imperiosa, estos obligaron a los salvajes a ultimarla a hacha-
diversos grupos no parecían adaptarse a una zos, con la misma herramienta que acaba-
Un amor
incorporación definitiva en tiempos de la eco- ban de robarse en el saqueo de la casa. Esta
desenfrenado nomía de la goma elástica por más esfuerzos tribu feroz y probablemente antropófaga
por la libertad
que hicieran. Otras informaciones sobre los es la misma que, hace años, asaltó también
Antología de la
historia política pacaguaras del Orton y del Abuná los mues- la barraca del señor Santos Mercado, sobre
de Bolivia
(1825-2020)
tran de hecho como parcialidades infinita- el río Beni, y la que años más tarde le dio
mente menos dóciles, denunciadas incluso muerte en su establecimiento industrial del
496 como responsables de ataques armados a los Abuná.78
campamentos siringueros.
En junio de 1893 la barraca Buen Retiro del
Tomo I Los caucheros, por su parte, emprendían con bajo Beni fue asaltada por una horda de sal-
1825-1952
frecuencia expediciones punitivas para matar vajes pacaguaras, en circunstancias en que la
a los hombres y llevarse a las mujeres y a los población masculina se hallaba en las labo-
niños para obligarlos a trabajar o venderlos a res de pica. Los asaltantes dieron muerte a
otros caucheros.76 El informe de la expedición unas cuantas mujeres, y entre ellas a la del
de los coroneles Labre y Mercier, así, subraya capataz Manuel Jesús Parada y a varios ni-
en todo momento que los acuerdos con estos ños, y después de pillar cuanto objeto me-
grupos son siempre frágiles, y que hay que tálico estuvo a su alcance, emprendieron la
entregarles constantemente mercaderías para fuga hasta el cobijo de la selva.79
76 Por ejemplo: “Al regresar los hombres de la faena y 77 “Itinerario de la expedición al Acre presentada por
ver las víctimas del malón no vacilaron en empren- los suscritos al Dr. Antonio Vaca Díez”, La Gaceta
der la expedición de castigo hasta el norte, siguien- del Norte 3 (23 de octubre de 1887).
do las huellas de los asaltantes, y al fin hubieron de 78 “Asalto de Bárbaros”, La Gaceta del Norte 209 (15
alcanzarles en las cercanías de un arroyo que fue de junio de 1906).
conocido desde entonces con el nombre de Paca- 79 Hernando Sanabria Fernández, En busca de Eldo-
guara” (Sanabria 2009 [1958], 76). Véase, asimis- rado. La colonización del Oriente boliviano (Bolivia:
mo, la anécdota narrada por el militar y explorador La Hoguera Investigación, 2009), 76. Ver asimis-
británico Percy Fawcett (1954, 147), en que los mo Manuel Limpias Saucedo, Los Gobernadores de
peones de Suárez en Cachuela Esperanza disparan Mojos (Bolivia: Prefectura del Beni, 2005), 240-241.
con frenesí a unas canoas pacaguaras que pasaban Según Torres López (1930, 194-198), en cambio,
pacíficamente por el río. los protagonistas de la matanza son los caripunas.
Así, en definitiva, se construyó el estereotipo y de éste al río Beni. Estos mismos son los
regional sobre los pacaguaras: díscolos, sucios, que atacan los establecimientos gomeros del
peligrosos, imprevisibles. El padre conversor Bajo Beni y Orton, hasta la altura de Puerto
de Misión Cavinas dictaminaba: “Los paca- Rico. Son temibles en sus asaltos y precipi-
guaras es la gente que tiene todos los vicios tados en la fuga […] cuando son tomados
y ninguna virtud” (Villar et al. 2009, 53). Sus de sorpresa y conducidos como prisioneros,
alianzas eran frágiles y, a diferencia de los in- por mejor trato que se les dé, prefieren mo-
dígenas asimilados de los Llanos de Mojos, rir antes que aceptar alimento del enemigo.
cifraban el prototipo del “bárbaro” que no se ¿Serán antropófagos? No cabe la menor
integraba a la civilización. duda; y si lo son, no es precisamente por ne-
cesidad de carne, sino por la sed de sangre
No obstante, los pacaguaras no estaban solos de su carácter belicoso (Ballivián y Pinilla
en la cima del salvajismo regional. En efecto, 1912, 75-76).
los caripunas del lado brasileño disputaron
con ellos el podio del protagonismo en las no- Lo curioso es que, si procuramos leer el mismo
ticias escabrosas de la época. Si, en definitiva, paisaje interétnico a partir del punto de vista
las percepciones caucheras representaban a los de las fuentes brasileñas, estos mismos caripu-
pacaguaras como bárbaros irrecuperables, sus nas eran percibidos de forma muy distinta. Es
parientes caripunas eran retratados como per- posible que, como estos indígenas habitaban Segundo periodo
sonajes iguales, o aún peores. las fronteras del Mamoré y del Acre, proble- Bajo la
Constitución de
máticas por ser objeto de encendidas disputas 1880 que marca
Los mismos Labre y Mercier relatan que en- limítrofes entre Bolivia y Brasil, muchas opi- el periodo liberal
(1880-1938)
contraron un grupo de caripunas “quienes al niones variasen sustancialmente en función de
divisarnos dieron muestras de marcada ale- una lógica nacionalista. 497
gría, salieron a nuestro encuentro y nos hi-
cieron suponer que estas espontáneas mani- Así, encontramos a los caripunas (brasileños)
festaciones eran hijas de la sinceridad”; pero “compitiendo” con los chacobos/pacaguaras “Sin indios
o hay industria
se equivocaban, pues los indígenas trataron de (bolivianos) por la autoctonía regional: el pre- del caucho”:
los indígenas
atacarlos a traición durante la noche (Mercier fecto José Agustín Palacios exploraba los ríos amazónicos frente
a la colonización
1981 [1894], 11). El coronel y futuro presi- benianos para el gobierno boliviano encon- gomera
dente del país José Manuel Pando no admite trando “chacobos” por todas partes, mientras
medias tintas: “el caripuna es pérfido y no hay que los ingenieros Keller lo hacían para el go-
medio de reducirlo al trabajo; para asegurar bierno brasileño sin encontrar otra cosa que
este territorio y fomentar la industria gomera, “caripunas” (Villar et al. 2009, 98). Más allá
la primera medida que se debe tomar, es la de del registro nacionalista, sin embargo, lo no-
alejarlos o destruirlos por medio de frecuentes torio es que las crónicas del lado brasilero eran
batidas”. Asegura, asimismo, que los caripunas efectivamente opuestas a las caracterizaciones
del Abuná frecuentaban las cachuelas del Ma- de Pando, Ballivián o Pinilla.
dera para prestar auxilio a los viajeros si los
superaban en número, pero también para ata- Al describir las relaciones entre los indíge-
carlos sin misericordia si eran menos que ellos nas y las empresas brasileñas que construían
(Pando 1897, 105-106). No se trata del único el ferrocarril Madera-Mamoré, un testigo de
testimonio: la época evocó con nostalgia la abundancia de
tortugas y pescado en los campamentos ferro-
Los caripunas son los que atacan las tripu- viarios, provistos puntualmente por los cari-
laciones que hacen el transporte de la carga punas (Pearson 1911, 128). Algo similar ob-
del comercio de San Antonio al Mamoré servaban los Keller: “los tripulantes, hombres
Un amor
desenfrenado
por la libertad
Antología de la
Indígenas Caripunas en Tres Hermanos, Dana Merrill, 1878-1910.
historia política
de Bolivia Fuente: Biblioteca Nacional de Brasil. © BNDigital do Brasil.
(1825-2020)
498 y mujeres, en número de 10 a 12, de los cuales [L]os verdaderamente peligrosos son los
los primeros iban desnudos, nos convidaron bárbaros que habitan la banda brasileña,
para ir a la ranchería. Aceptamos brindándo- entre la boca del Itenes y la cachuela Bana-
Tomo I les cuchillos, tijeras, anzuelos, etc. En cambio, nera, los guaras, tribu caripuna, tan bravos
1825-1952
nos dieron algunas raíces de yuca y maíz” (Ke- y arrogantes, que entran en batalla campal
ller y Keller 1870, 11). con los viajeros, de los que ordinariamente
se apodera el pánico (Bayo 1911, 338).
Con mayor o menos claridad, entonces, los
testimonios brasileños parecen sugerir que Hay que recordar que los caripunas habían
la violencia interétnica era un pecado exclu- sido también los principales imputados por el
sivamente boliviano. En líneas generales, de asesinato del cauchero Gregorio Suárez, en
hecho, la literatura boliviana acumula cier- 1873, vengado cruelmente por su hermano
tamente referencias negativas sobre los cari- Nicolás Suárez. Ciro Torres López (1930,
punas, y algunos autores hasta les imputan la 194-198) afirma que era un secreto a voces
matanza de Buen Retiro, atribuida por otros que Suárez había vengado a su hermano de-
autores, como hemos visto, a los pacaguaras. jando latas de alcohol envenenado a orillas
del río, que acabaron con gran parte de la
Veamos: Baldivieso (1896, 61) informa que tribu.
por todas partes hay caripunas armados con
rifles que asaltan las barracas en el Acre; para Si los pacaguaras y caripunas se disputaban el
el coronel Quevedo (1875, 177), si bien estos podio regional de la mala reputación, el otro
indígenas son “tratables”, no dudan en come- grupo pano de la zona, los chacobos, parecía ser
ter actos de violencia; escribe, por su parte, un reputado en cambio como el grupo más ami-
viajero español: gable. Las fuentes los describían como nativos
“dóciles” o “mansos”, que incluso visitaban en El objetivo principal de su visita era mendi-
grupo pueblos regionales como Exaltación: gar azúcar y fósforos. Tampoco les disgusta-
ba fumarse uno que otro cigarrillo, lo que,
Los indios que ocupan la banda boliviana sin embargo, sólo habían aprendido en la
del Mamoré […] son los chacobos y sina- barraca. En casa no fuman; tampoco tienen
bos, tribus mansas de la nación pacaguara, tabaco (Ritz 2015 [1934], 135-136).
que a veces visitan Exaltación de Mojos y a
menudo salen al encuentro de los navegan- Un testimonio más detallado –y con un arco
tes, que los llaman ‘indios gritones’ por los argumental que lo lleva de la antipatía a la to-
japapeos o ademanes y gritos violentos con lerancia, e incluso a la amistad– es el provisto
que llaman la atención […] Van completa- por otro cauchero suizo, Ernst Leutenegger,
mente desnudos, aunque disimulan lo que quien nos relata sus andanzas con los chacobos
la decencia manda tapar, con un artificio que se acercaban a su barraca ocasionalmente
que despierta hilaridad de los viajeros del para conseguir herramientas o regalos a cam-
Mamoré; los cuales, sin distinción, regalan bio de los cuales entregaban adornos o armas:
a esta pobre gente con tabaco, yucas y plá- “Solían aparecer acicalados de fiesta, y antes de
tanos, amén de algún trago de aguardiente pisar nuestro asentamiento cubrían sus cuer-
que contribuye a que la despedida sea más pos desnudos con camisas de fibra de corteza.
ruidosa que la bienvenida (Bayo 1911, 338). Me traían arcos y flechas y collares bellamente Segundo periodo
configura dramáticamente la realidad de la re- tente y articulada como lo hicieron los moje- Bajo la
Constitución de
gión, marcó la era de los viajes y expediciones ños, los baures o los cayubabas. Sin embargo, 1880 que marca
el periodo liberal
pioneras que recorrían un territorio descono- otros grupos étnicos –sin estar completamente (1880-1938)
cido e inhóspito, pero con una riqueza oculta misionados tampoco– lograron articularse de
que cada aventurero, empresario e industrial forma más fluida con el frente colonizador y, 501
de la época aspiraba a descubrir. El releva- en particular, con la pujante economía de la
miento cartográfico e hidrográfico se volvía goma elástica: nos referimos a los araonas y
imperativo para exportar la goma a través de la cavineños, pertenecientes a la actual familia “Sin indios
o hay industria
red de ríos y afluentes de la cuenca amazónica: lingüística takana junto a los maropas, los ese del caucho”:
los indígenas
Lardner Gibbon, Heath o Palacios eran pues jjas y los tacanas.80 amazónicos frente
a la colonización
solo algunas de las figuras que los gobiernos de gomera
turno comisionaban como punta de lanza de la 80 También se incluyen en esta familia los ya citados
colonización. La variable nacionalista aparecía grupos de dialecto tumupaseño e ixiameño que
provenían de las antiguas misiones de Apolobam-
ligada estrechamente con la agenda gomera: la
ba. No incluimos en el análisis en cambio a los ta-
fiebre del caucho, así, era de hecho indisocia- canas stricto sensu, porque no suelen ser menciona-
ble del proceso de conformación republicana dos como grupo étnico en las fuentes del siglo XIX.
de las fronteras limítrofes, que en una de sus Obviamente esto no implica que no existiesen, sino
que las fuentes suelen confundirlos con los araonas
vertientes desencadena la guerra del Acre en-
o con los cavineños por superposición de criterios
tre Bolivia y Brasil (1899-1903). En ese lapso, lingüísticos, étnicos o territoriales. Algunos auto-
también, transcurrió el traslado de parte de res son conscientes de la dificultad, como Luigi
estos nuevos empresarios a los antiguos cen- Balzan (2008 [1885-1893], 174-175) o Marius del
Castillo (1929, 254, 261), que registra un censo de
tros misionales –hasta entonces ocupados casi
la barraca Fortaleza en el río Beni: 111 peones son
exclusivamente por población indígena–, la “oriundos del Beni” de habla tacana, mientras que
fundación de las principales ciudades del norte otros 130 son, efectivamente, tacanas, y en menor
del país, la repartición de títulos de propiedad, cantidad aparecen en la barraca trabajadores bau-
res, maropas y lecos. Para mayores precisiones,
el establecimiento sistemático de tributos fis-
ver Mickaël Brohan y Enrique Herrera, “Prólogo
cales o la apertura regional a la nueva econo- de los editores. Nota de los Editores” en El Eco de
mía de exportación. las Voces Olvidadas. Una autobiografía y etnohistoria
En la selva a orillas del río Beni, los araonas el año 1879 uno quedó trabajando un mes, y
y los cavineños encarnaron la figura del buen en 1880, nueve se contrataron por dos meses”
trabajador y formaron parte entonces de una (Heath 1969 [1879-81], 9-10). Los araonas no
fuerza de trabajo valorada, requerida, suscep- sólo proporcionaban datos geográficos a la co-
tible de adaptarse –a diferencia de los paca- mitiva exploradora, sino que acompañaron en
guaras o los caripunas– a la dura labor en las todo momento al norteamericano al sortear
barracas gomeras. Las fuentes describen a los los escollos de las cachuelas y lograr la haza-
araonas como indígenas dóciles, aptos para la ña de conectar por primera vez a los ríos Beni
civilización, trabajadores confiables y excelen- y Mamoré. Tal era la confianza mutua entre
tes rumbeadores.81 Aparecían por ejemplo en los araonas y el barón cauchero Antonio Vaca
la barraca Puerto Rico de Vaca Díez, donde el Díez que éste los enviaba a navegar río aba-
cura Sanjinés (1895, 59) encontró no menos jo para buscar nuevos siringales (Heath 1896,
de 400 indígenas, o bien en la barraca Azotea, 21-22). Por su parte, los araonas reconocían
ubicada en el Madre de Dios, donde la mayor los beneficios que les comportaba tal sociedad:
parte del personal consistía en 52 picadores “Al tata doctor [Vaca Díez] lo queremos por-
araonas sobre un total de 188 almas (Sanjinés que nos da herramientas para trabajar nuestras
1895, 59 y 63).82 chacras; nos da de comer a tantos que vinimos
Un amor
cada año y nunca nos ha hecho mal. Desea-
desenfrenado En la crónica de Edwin Heath podemos apre- mos que sea nuestro jefe, que nos mande y nos
por la libertad
ciar el carácter mayormente bien predispuesto defienda de los pacaguaras que son nuestros
Antología de la
historia política de los araonas, que participaron de sus expedi- enemigos” (Chávez 2009 [1926], 134).
de Bolivia
(1825-2020)
ciones entre 1879 y 1883: “Casi todos los años
vienen unos indios antropófagos83 Araunas Los araonas aparecen asimismo en la expedi-
502 [sic] que viven al lado del río Mano […] En ción del militar brasileño Antonio Labre, que
partió de la barraca Maravillas, propiedad de
de los Cavineños de la Amazonía boliviana, Alfredo los caucheros Víctor Mercier y Timoteo Ma-
Tomo I
Tabo Amapo (Copenhague: IWGIA, 2008), 12-49 riaca, para explorar la cuenca del río Madera
1825-1952
y 206-280. con una comitiva que incluía quince “araonas
81 Las crónicas de la época también resaltaban esa
semi-civilizados”. Los expedicionarios encon-
mansedumbre, pero también que en algunos ca-
sos escapaban de los patrones: “A lo largo del río traron a varios araonas que vivían en buenas
Madre de Dios y sus afluentes, persisten algunos relaciones con los comerciantes (Quijarro
toldos de los indios araonas, antes numerosos, pero 1893, 11). El propio coronel Pando, una de
hoy diezmados por epidemias de viruela y otras
las voces más duras sobre la cuestión indígena,
enfermedades. Hace años empezaron a tener re-
laciones con los blancos y con los buscadores de reconocía asimismo que los araonas eran “los
goma elástica, pero volvieron a la vida selvática e únicos que se prestan a la civilización”, refi-
independiente, pues eran perseguidos y además les riendo que trabajaban para un tal Cárdenas en
robaban a sus niños para venderlos” (Balzan 2008
la barraca Camacho (Pando 1897, 36). Otro
[1885-1893], 219-220).
82 Observa otro testigo: “Más tarde vendrá la civili- testimonio importante es el del presidente de
zación, pero entretanto el salvaje y sobre todo el la Sociedad Geográfica de La Paz y director
temible araona ya no teme ni persigue al hombre de la Oficina Nacional de Estadísticas y Pro-
y, al contrario, seducido por la generosidad de Vaca
paganda Geográfica, Manuel Vicente Balli-
Díez que le regala, cura y atiende, se convierte en
servidor de las barracas. Caza, pesca, sirve para el vián, quien era perfectamente consciente de
transporte, se ocupa de remar, y entra por fin, en la que el principal problema para el siringuero,
comunidad de estos colonos que plantan allí la ban- y por tanto para el desarrollo regional, era la
dera de la civilización nacional” (Anónimo 1894, 8).
captación de mano de obra. Si bien admitía
83 Esta buena voluntad no impide que se les atribuye-
ra la práctica de la antropofagia, clásico cliché del las eventuales correrías que los gomeros em-
salvajismo. prendían para proveerse de trabajadores entre
los indígenas, Ballivián describió a la vez una en la documentación disponible, sea porque
serie de tentativas para entablar relaciones su centro reduccional de origen se encontra-
comerciales o amistosas con ellos. Su descrip- ba en el epicentro de la fiebre gomera, o bien
ción de los araonas reitera el tema de su adap- porque se trataba de los protagonistas invo-
tabilidad a la industria, siempre y cuando pu- luntarios de la lucha regional entre misioneros
dieran mantener sus chacras y sus familias, y y caucheros por la captación de su mano de
comercializar la goma en su territorio bajo sus obra, como veremos en el siguiente apartado.
propias condiciones (Ballivián y Pinilla 1912, Fueron ellos, precisamente, quienes ayudaron
67-70 y 80). Armentia también reportó la ubi- a Pablo Salinas, comerciante de Reyes, a ex-
cación de las tribus araonas que conoció en su plorar la selva circundante a la reducción y a
viaje de 1884, ubicándolos en ambas márge- descubrir, así, su potencial gomero (Sanabria
nes del río Madre de Dios, sobre el Aquiry y 2009 [1958], 32-33).84 De esta forma, no sor-
sobre el Purús. Allí encontró grupos araonas prende que estos nativos fueran mencionados
y cavinas que “hablan un mismo idioma y tie- de forma elogiosa en los informes gomeros:
nen las mismas costumbres, y aun se hallan
mezclados en muchas tribus” (Armentia 1885, En el mes de junio siguiente [1884] me en-
5-6). Sin embargo, el experimentado fraile era tregué de lleno a la explotación de la goma,
al mismo tiempo uno de los mayores defenso- sin temer a los bárbaros, como que, en efec-
res de las misiones a la hora de civilizar a los to, habiendo avanzado unas dos leguas hacia Segundo periodo
indígenas, que no debían caer en manos de los el interior del bosque encontré una tribu de Bajo la
Constitución de
caucheros: 28 almas cuyo capitán llamado Ecuari que 1880 que marca
el periodo liberal
entrando en relaciones conmigo, me entre- (1880-1938)
Creemos que el Gobierno debe destinar, a gó un hijo suyo de corta edad […] Conti-
esta obra, al menos durante unos tres años nuando mi marcha más al interior con ayuda 503
la suma anual de tres mil bolivianos, faci- del capitán Ecuari, encontré también otra
litando al misionero cuanto sea necesario tribu de 15 matrimonios con su capitán Ino.
para una obra de tanta trascendencia. Los Al mes siguiente expedicioné sobre el Ta- “Sin indios
o hay industria
mismos industriales que elaboran la goma huamanu y en la margen derecha encontré del caucho”:
los indígenas
elástica, solo pueden conseguir vivir en paz al capitán Capa, en la tribu Buda, con una amazónicos frente
a la colonización
con los bárbaros, mediante continuos rega- población de ocho matrimonios. La primera gomera
los de hachas, cuchillos, machetes, ropa, etc.
etc. saliendo continuamente a las barracas,
multitud de bárbaros, que no dicen otra pa- 84 Los cavineños no solamente incursionaron tem-
pranamente y de forma voluntaria en la industria
labra, que: ¡¡hacha, cuchillo, camisa!! Y por gomera, sino que además las fuentes los describen
su propia seguridad y la de sus intereses, se participando tempranamente de la extracción de
ven precisados a proveerlos de estas cosas; quina o cascarilla a mediados del siglo XIX: “Pu-
con no pequeño perjuicio y costosas eroga- dimos encontrar un documento desconocido que
confirma la participación de los cavineños en esta
ciones: llegando el caso de no quedar en las actividad extractivista por cuenta de unos ‘empre-
barracas ni la herramienta necesaria para los sarios’ privados: He conocido a un señor Rada […]
trabajos (Armentia 1885, 5-6). que estableció esa industria en Cavinas, y aún más
al Norte; las cascarillas que logró reunir, las embar-
có en el Beni, y después en el Madera, y las condujo
Otro grupo que aparece con frecuencia en las así al Amazonas y ciudad de Pará. Según me dijo el
fuentes del período son los llamados cavine- señor Rada en ésta, de vuelta de su viaje del Pará a
ños, provenientes de la antigua misión Cavi- Europa, la expedición le fue muy favorable. Cavinas
nas, caracterizados por lo general por su con- es una Misión de los Padres Franciscanos, situada
a inmediaciones de la embocadura del Madidi en el
tracción al trabajo y por su buena inserción en Beni. Los indios de la comarca son altos y muy bien
las barracas. Se trata del grupo más conspicuo fornidos” (Brohan y Herrera 2008, 265-266).
población que descubrí pertenece a los ca-
vinas y las dos últimas a los Araonas […]
Yo me quedé haciendo picar gomeros con
mis mozos propios y con los bárbaros que
ya concurrían voluntariamente de las tres
tribus descubiertas por mí (Mariaca 1987
[1887], 11).
“no hai población porque no hai caminos, ni conquista naciones salvajes al Cristianismo y Bajo la
Constitución de
vías fluviales espeditas para la comunicación; a la civilización; solicita al bárbaro, lo busca 1880 que marca
el periodo liberal
no hai caminos ni vías fluviales porque no hai en sus propios dominios para levantarlo de (1880-1938)
población” (García Jordán 2001, 321). Había la postración en que se encuentra, ilustran-
consenso, a la vez, en que los bárbaros redu- do su inteligencia y enseñándole el trabajo; 505
cidos eran los que mayor utilidad dejaban al administra sus territorios y da todavía un va-
desarrollo de la industria regional, puesto que lioso caudal a la historia, a la lingüística, a la
no se invertía gran cosa en ellos ya que culti- geografía y a la ciencia en general (Luis Pas “Sin indios
o hay industria
vaban sus propios cercos y a la vez se proveían 1895, citado en García Jordán 2001, 352). del caucho”:
los indígenas
de carne mediante la cacería en los bosques amazónicos frente
a la colonización
circundantes. La cuestión consistía entonces Si los misioneros eran ciertamente encargados gomera
en que ese enrolamiento debía reglamentar- ideales para “civilizar” a la mano de obra nati-
se de algún modo, para obligar a los patrones va, muchos de ellos denunciaron activamente
locales a concederles mínimas condiciones los abusos, el despoblamiento regional o los
de educación, impedir los malos tratos, las enganches forzosos de los nativos del norte
amazónico. Al mismo tiempo, los caucheros
acusaban a los religiosos de monopolizar a los
Guamiri. En la reseña de la conferencia de Robu- neófitos, de escatimarlos para los trabajos de la
chon en la Sociedad Geográfica de Nantes, el in-
forme de la sociedad no sólo menciona el desarrollo
goma y de usarlos en cambio en su propio be-
de la conferencia sino a la vez a su exótica esposa: neficio. De algún modo, la ley de contratación
“Ella nos ha parecido grande y fuerte; no está des- de peones de 1883 buscaba encauzar y dar vía
provista de gracia en su traje todo europeo, y si bien
sus rasgos difieren un poco de la raza caucásica, su
figura no carece de encanto y respira bondad. La 89 Percy Fawcett (1954, 96), por ejemplo, denunció
tribu Cahivas [Cavinas], a la cual pertenece, es co- que las grandes firmas gomeras de Riberalta tenían
nocida por la dulzura de sus costumbres y carácter” grupos armados que salían a cazar indígenas para
(Echeverri 2010, 32-33). mantenerlos cautivos en los gomales: se les daba
88 “Personal Trabajador”, 15 de junio de 1942, en una camisa, herramientas y una porción de arroz
ACS, Fondo Documental archivo, Sala I, sin sig- y debían producir un total de setecientas libras de
natura. goma anuales.
a esas denuncias. Pero, como hemos visto, ta- et al. 2009, 26-27), pero mantuvo su nombre y
les reglamentaciones no resultaban siempre de su jurisdicción religiosa. No es nuestra inten-
cumplimiento efectivo y, demasiadas veces, su ción desarrollar toda la vida y la historia polí-
implementación no pasaba a la práctica más tico-administrativa de esta reducción, ni tam-
allá de la enunciación (García Jordán 2001, poco el importante papel de mediación que
343-344). Esta situación ciertamente se agra- los llamados cavineños desempeñaron entre la
vaba en el caso de las poblaciones indígenas sociedad colonial y los indígenas vecinos que
como los cavineños o los araonas, considera- todavía no habían sido evangelizados.90 Nos
dos “semi-civilizados”. Surgió, de esta forma, concentraremos en los años del boom cauche-
un evidente conflicto de intereses cuando el ro, para evaluar qué sucedió en la misión con
accionar misional comenzó a chocar con los respecto a la mano de obra indígena.
intereses de un frente gomero cada vez más
necesitado de mano de obra. Las crónicas de la El padre Ciuret, cura conversor de Cavinas
época dan cuenta de estas disputas regionales, desde 1842 hasta 1885, informaba que las
así como de los correspondientes intereses de tribus más numerosas allí eran los “Tirivas,
cada uno de los bandos: Cabinas y Pacaguara. Los Tirivas como los
que sofocaron el idioma Cavina ya desde los
Un amor
Tras una primera etapa reduccionista, con- principios de la conquista y dejaron el idioma
desenfrenado cluida con la concentración indígena, la que es el de ahora. El idioma Cavina se perdió
por la libertad
presión de los sectores propietarios por ob- que es el mismo que hablan los Araonas, se-
Antología de la
historia política tener tierras y/o acceder a la mano de obra gún creemos”. Otros misioneros concordaban
de Bolivia
(1825-2020)
indígena provocó el surgimiento de impor- en identificar la amalgama interétnica de gru-
tantes conflictos con los misioneros. Estos pos de habla takana y pano (Brohan y Herrera
506 sectores, superada la fase inicial de conquis- 2008, 33-34): recordemos que, hacia 1830, la
ta, a menudo en connivencia con las auto- cercana misión de Santiago de Pacaguaras se
ridades departamentales, abogaron por la había cerrado y unas quince familias pacagua-
Tomo I desaparición del sistema misional y la trans- ras se habían refugiado entonces en Cavinas, e
1825-1952
formación de la misión en beneficio cural incluso que se afirmaba que “gran parte de los
–la secularización– con la que la mediación indios Cavinas son descendientes de los Pa-
misionera desaparecería, permitiendo a los caguaras” (Villar et al. 2009, 51, 68). Durante
empresarios agropecuarios y comerciantes casi todo el siglo XIX, la circulación interétni-
un trato directo con las poblaciones indí- ca fluyó en todos los sentidos en la zona, y las
genas y, por ende, fijar condiciones para su crónicas hablan tanto de pacaguaras viviendo
contratación como mano de obra, el desa- en misiones cavineñas (Cavinas) como de ca-
rrollo del comercio y el acceso a los terrenos vineños habitando misiones pano (Santiago
misionales (García Jordán 2001, 289-290). de Pacaguaras) hasta su propio cierre. Ha-
blamos, entonces, de procesos de intercam-
bio, mestizaje, alianza y multilingüismo como
6. Cavinas: ¿barraca o misión? dato original de esas reducciones amazónicas.
La época cauchera retiene esa incertidumbre
En el siglo XVIII, a orillas de una laguna, se clasificatoria y, en los registros de las barra-
fundó en la margen occidental del río Beni la cas, las nóminas de los trabajadores aparecen
conocida misión de Jesús de Cavinas, y el pa- nombres seguidos de filiaciones como “los de
dre Simón José de Sisa fue nombrado primer
cura conversor del establecimiento (Brohan y
90 Para más información remitimos al lector a las in-
Herrera 2008, 32). La misión debió trasladarse vestigaciones más exhaustivas de Brohan y Herrera
varias veces por ataques de los bárbaros (Villar (2008) y Villar et al. (2009).
Reyes” o “Misión Cavinas” sin especificar ma- atrapan rápidamente y entonces, que se prepa-
yores detalles. re, le van a maltratar de lo lindo” (Nordens-
kiöld 2003 [1922], 234). Al mismo tiempo, el
No obstante, a diferencia de otros estableci- sueco es consciente de los trucos regionales
mientos misionales, lo cierto es que Cavinas empleados para hacerse con la preciada mano
logró sobrevivir a lo largo del tiempo. Desde de obra indígena:
su propia fundación a la fundación tardía de
una ciudad como Riberalta, en la década de En Benjamín me preguntan si hay muchos
1880, Cavinas fue incluso el único estableci- muchachos entre los chácobo. Estimado
miento permanente del noroeste de Bolivia: lector, ¿sabe usted lo que quiere decir eso?
“como la centinela y la última avanzada […]. “¿Se justifica ir hasta allí y robar esos niños
Hacia las fronteras del norte, y como una es- para educarlos como peones?”. En el curso
cala, o como un punto de apoyo y de partida superior de los ríos Tahuamanu y Manuripi
para poder explorar aquellas regiones tan fér- acostumbran a rodear las aldeas de los indios
tiles como desconocidas, y que confinan con el “salvajes” y asesinar a los adultos. La presa
Perú y con el Brasil” diría Cardús (1886, 173). de los saqueadores son los niños. Cualquiera
Quizás por esa ubicación estratégica fue que, que conozca los bosques de caucho puede
durante las últimas décadas del siglo XIX y co- confirmar que esto es cierto. Yo mismo he
mienzos del XX, coincidiendo con el esplendor conocido a un hombre bastante agradable y Segundo periodo
de las exploraciones científicas y comerciales apacible que ganaba su buen dinero con este Bajo la
Constitución de
relacionadas con la goma, la localidad fuera tipo de caza. Él mismo lo admitía. Justifi- 1880 que marca
el periodo liberal
visitada por viajeros, exploradores y misione- caba su comportamiento en que esos indios (1880-1938)
ros que, por diversas razones, reportaron su de la selva no eran cristianos como él. Otro
cotidianeidad y por tanto nos ofrecen matices blanco que conoce muy bien los bosques de 507
documentales prácticamente únicos. caucho, una vez, al tiempo que condenaba
estas infamias, me dijo encogiendo los hom-
Uno de los relatos más notables sobre Cavinas bros “sin indios no hay industria del cau- “Sin indios
o hay industria
se halla en los escritos de Nordenskiöld, quien cho” (Nordenskiöld 2003 [1922], 124). del caucho”:
los indígenas
pasó un mes y medio viviendo en la misión en- amazónicos frente
a la colonización
tre 1913 y 1914. Tal como hemos observado, el También nos hemos dado cuenta que por gomera
etnólogo sueco es una de las voces que denun- todas partes se necesitan trabajadores, que
ció con mayor elocuencia el maltrato indígena se necesita más fuerza indígena de trabajo.
a raíz de la fiebre gomera. Describe en deta- Vimos a los indios trabajando en este cli-
lle, por ejemplo, la forma en que los nativos se ma tropical y nos dimos cuenta que hacen
endeudan con los patrones a través del consu- bien su trabajo […] también sabemos que
mo de alcohol: “el indio borracho se presta y el hombre blanco en el clima tropical es un
se presta, y al final queda atrapado. No puede pésimo trabajador físico. Por eso es antie-
pagar más deudas y como consecuencia tiene conómico exterminar a los indios salvajes.
que emigrar a trabajar en los bosques de cau- A largo plazo traería mayores ventajas si se
cho. En realidad, se ha vuelto un esclavo que hiciese la paz con ellos. Lo demuestran los
ha perdido su libertad por años, quizás incluso misioneros, quienes tampoco desprecian las
para siempre. Cuando el acreedor ya no lo ne- ganancias pues cuidar almas también procu-
cesita, lo vende, ¡sí, lo vende! Esto sucede de ra beneficios. Esto es lo que hemos visto en
la siguiente manera: otra persona retoma las Cavinas (Nordenskiöld 2001 [1924], 413).
deudas, y un buen día el indio se da cuenta de
que su patrón ha cambiado y que es obligado Las últimas líneas son significativas. Además
a trabajar en otra barraca gomera. Si huye, lo de denunciar a los caucheros inescrupulosos,
Nordenskiöld fue sumamente crítico con los indígena (Cardús 1886, 169-170). Cuando en
misioneros de Cavinas y, de hecho, fue uno de 1897 Cavinas se quedó sin misioneros entre la
los pocos observadores que brindaba una de- salida del padre Ciuret y la llegada del padre
tallada descripción del funcionamiento de la Laugué, la población se dividió y muchos na-
misión. Sus observaciones son inequívocas: tivos trabajaron picando goma en las barracas
vecinas (Brohan y Herrera 2008, 268-269).
La misión Cavinas no se diferencia mucho Referencias similares sobre la influencia per-
de cualquier barraca gomera. Seducidos niciosa de la industria en la zona, aunque re-
por los altos precios del caucho, los padres latadas a partir de una óptica apologética, po-
casi han olvidado que son misioneros y no demos encontrar en el relato contemporáneo
comerciantes. Los cavina viven como los del cura Mendizábal, que nos informa que,
trabajadores de una barraca. Reciben apro- gracias a ese trabajo extractivo, uno de los
ximadamente 30 bolivianos al mes, deben padres conversores logró organizar grandes
trabajar seis días de la semana para la misión plantaciones de arroz y reunió una considera-
y tienen grandes deudas […] que abandonen ble suma de dinero para construir una iglesia
la misión y busquen trabajo en otro lugar con techo de zinc (Mendizábal 1932, 189).
se califica como un intento de fuga que se La crítica del religioso se dirigía más bien a
Un amor
castiga con palizas. Se los alquila a un pre- los empresarios caucheros quienes, pese a los
desenfrenado cio mayor que sus sueldos; la diferencia va beneficios de la industria y el progreso para
por la libertad
para la misión. Ningún cavina sabe leer ni el Beni, provocaban al mismo tiempo un re-
Antología de la
historia política escribir correctamente y pocos hablan algo troceso perjudicial para la moral, la religión
de Bolivia
(1825-2020)
de español. La escuela dirigida por un indio y las buenas costumbres de los neófitos. No
tumupasa ignorante es mala. El mosetene respetaban los días festivos ni los descansos y
508 Tomás Huasa, que hemos conocido ante- hacían trabajar a los indígenas como máqui-
riormente, dijo de Cavinas acertadamente: nas para acumular goma y más goma, repi-
“No parece una misión”. Claro que cada tiendo a cada rato “‘la goma vale plata y no
Tomo I día se pasa misa, pero la enseñanza religiosa hay que perder tiempo’, sin acordarse de sus
1825-1952
es completamente superficial y la religión obligaciones cristianas, ni si tienen alma espi-
cristiana todavía no ha logrado desplazar a ritual” (Mendizábal 1932, 195).
las antiguas creencias (Nordenskiöld 2001
[1924], 345-346). De esta forma, según los diferentes momentos
o percepciones, Misión Cavinas fue caracteri-
A inicios de la década de 1880, Cardús ha- zada como el faro de la autonomía indígena o
bía analizado el despoblamiento que sufría bien como el prototipo de la barraca misional,
la misión a causa de los trabajos en la goma encarnando las dos caras de la controversia
elástica. Sin acusar directamente a los curas entre los empresarios gomeros y los misione-
locales, escribía que reclutar tantos indíge- ros en su disputa por el control de la mano de
nas para el trabajo constituía una política obra indígena.
poco saludable para la vida de la misión y
que a la larga supondría un efecto negativo. La presión secularizadora era ciertamente
El franciscano recomendaba prohibir la ex- fuerte por parte de los comerciantes, que veían
tracción de indígenas para los trabajos de la con malos ojos la intermediación de los padres
goma, pero sus órdenes –tal como las orde- conversores de Cavinas a la hora de “ceder” a
nanzas gubernamentales– quedaron en pa- los cavineños, y por tanto los acusaban de ex-
labras bienintencionadas, dado que eran los plotar ellos mismos a los nativos para inclinar
propios curas conversores de Cavinas quienes a su favor la producción gomera. Este estable-
se encargaban de regentear la mano de obra cimiento, que a ojos de Nordenskiöld poco
tenía de religioso y mucho de comercio encu- 7. A modo de conclusión
bierto, fue un enclave particular donde, por las
razones históricas mencionadas, convergieron Mientras que, como hemos visto, algunos
diversos grupos de indígenas cavineños, paca- grupos étnicos del norte boliviano participa-
guaras y araonas. ron lateralmente del auge de la goma elástica,
miembros de otras parcialidades lo aprove-
Sin embargo, si hemos de creer a las fuentes, charon con creces para consolidar su posición
es notorio que solamente los grupos de habla social, política y económica; esta situación, no
takana hayan sido los que fueron ponderados obstante, no fue compartida ni se replicó en
como trabajadores civilizados, mientras los todo el universo indígena amazónico. En pri-
pacaguaras siguieron padeciendo el estigma de mer lugar, como resulta casi inmediatamente
su salvajismo irreductible. Y, aun así, la mejor evidente, porque los Avaroma, Acuruzau, Ojo-
conceptuación de los cavineños como fuera de pi e incluso Cubene ganaron espacio, fortuna
trabajo no implicó que hayan llegado al ex- y prestigio a costa de una multitud de indíge-
tremo de asimilación exitosa reportada en los nas anónimos que eran los que remaban, pi-
Llanos de Mojos. caban goma, cultivaban, atendían las estancias
o transportaban mercadería para ellos, y cuya
Los cavineños fueron peones de los misione- historia resulta por tanto infinitamente más
ros o siringueros independientes, pero jamás difícil de rastrear que en el caso de las fami- Segundo periodo
patrones: durante el auge gomero en Cavinas lias indígenas notables. En segundo término, Bajo la
Constitución de
trabajaban picando goma para Miguel Apuri, porque esa misma relación entre capital, Es- 1880 que marca
el periodo liberal
indígena de Guanay que vivía en las inme- tado e identidad étnica no se plasmó igual en (1880-1938)
diaciones de la misión (Balzan 2008 [1885- otras sociedades indígenas de la zona como
1893], 196). Tampoco compraban tierras los araonas, pacaguaras, chacobos o caripunas, 509
ni escalaban socialmente, y a veces –como que no estaban tan asimilados al aparato co-
sabemos por los padrones laborales de la lonial como aquellos otros que habían pasado
Casa Suárez– ni siquiera contaban con ape- por el tamiz socializador de las misiones jesuí- “Sin indios
o hay industria
llidos cristianos. Si bien se involucraban ac- ticas y franciscanas. del caucho”:
los indígenas
tivamente en el régimen misional, su propio amazónicos frente
a la colonización
cura conversor, el padre Ciuret, que estuvo Las disposiciones aprobadas en 1842, así gomera
cuarenta años a cargo de su evangelización como aquellas que las sucedieron, facilitaron
y hablaba perfectamente el idioma, no logró la paulatina institucionalización estatal en la
tampoco los resultados religiosos esperados Amazonía, la definición de la sociedad regio-
con ellos: nal integrada por criollos e indígenas y el es-
tablecimiento de las bases para el desarrollo
Han sido y son de índole perversa, pues de una economía de mercado. Los indígenas
consta que el año 1791, flechearon á su mi- de las antiguas misiones de Mojos vieron en
sionero y conquistador, el P. Simón de Sosa, esa legislación la oportunidad para conciliar
y hoy en día les costaría poco repetir la mis- sus garantías constitucionales con el desarro-
ma hazaña. Nada han adelantado en religión llo regional, interviniendo en una economía
ni en civilización: á pesar de los esfuerzos y orientada hacia la explotación de los recursos
desvelos del R.P. Fr. José María que se ha naturales y el comercio fluvial. Al tiempo que
esforzado en moralizarlos desde el año de los miembros de la elite nativa ascendieron
1842 hasta la fecha, sin lograr fruto alguno; económica, social y políticamente, llegando
sin embargo, de poseer perfectamente su algunos de ellos a consolidar su liderazgo
idioma, y predicarles oportuna é inoportu- regional entre propios y ajenos, la gran ma-
namente (Armentia 1887, 9). yoría de los indígenas ingresaron al devenir
republicano y a la economía global en calidad que recibieran nada a cambio; por otro con
de mano de obra. indígenas insertos de manera periférica en la
industria; y por otro de nativos capturados y
En estas páginas comenzamos explorando la obligados a trabajar en aras de su supuesta “ci-
incipiente legislación que procuró regular su vilización”.
contratación en la Amazonía boliviana desde
1850 en adelante. En particular, hicimos énfa- En esta diversidad, quienes cobraron mejor
sis en las diversas modalidades adoptadas para reputación durante el auge gomero parecen
contratar trabajadores empleados por las dis- haber sido los tripulantes de las embarcacio-
tintas ramas de la industria gomera y, a su vez, nes: sobre ellos la opinión fue casi unánime y
para defender de algún modo sus precarios de- por lo general las fuentes del período los elo-
rechos civiles y laborales. Una legislación que, gian sin ambages. Esto se diferencia notable-
como vimos, no fue aplicada de forma consis- mente del caso de los indígenas que por una u
tente en todo el universo indígena amazónico, otra razón se vieron compelidos a trabajar en
ni para todos los actores sociales, puesto que las barracas. Desconocemos en la mayoría de
algunos de ellos no la respetaban –comercian- los casos sus nombres o su identidad: carecen
tes, misioneros o funcionarios estatales– y a de voz propia y, muchas veces, su experiencia
Un amor otros, como en el caso de los “bárbaros”, di- se escurre en generalidades.
desenfrenado
por la libertad rectamente no les llegaba. Estas leyes fueron
Antología de la entonces promulgadas, pero en la práctica los Su relación con los patrones caucheros osciló
historia política
de Bolivia
agentes económicos regionales casi siempre entre el enfrentamiento armado, la incons-
(1825-2020) lograron encontrar artimañas, estrategias o ve- tancia laboral y las movilizaciones hacia otras
ricuetos legales para no cumplirlas, o en todo regiones como último recurso. Hasta los in-
510
caso aprovecharlas en su propio beneficio –lo dígenas que habían ciertamente pasado por el
cual, por otra parte, era bastante sencillo dada aparato socializador de las misiones, como los
Tomo I
la escasa presencia del Estado nacional en la cavineños, pocas veces tenían apellidos cristia-
1825-1952 región. nos y, si bien llegaban a ser trabajadores más
responsables, no gozaban de un estatus jurí-
Así como no sería correcto hablar de un “úni- dico que posibilitase el ejercicio pleno de sus
co frente gomero” homogéneo –por los em- derechos civiles, y aún menos el ascenso social
presarios que son a la vez políticos, por las di- logrados por sus pares cayubabas o baures. El
ferencias nacionales en el registro fronterizo mundo indígena, en definitiva, no fue un es-
de las poblaciones indígenas, por los conflic- cenario homogéneo, y menos aún durante el
tos entre comerciantes y misioneros, o por los llamado “boom del caucho”.
religiosos que a la vez son gomeros–, hablar
de la mano de obra indígena en este periodo Las elites nativas de los Llanos de Mojos que
supone un abanico de posibilidades de acción se consolidaron política y socialmente al ac-
diverso, amplio y variado. ceder a negocios, legitimidad social, presti-
gio, títulos de propiedad de la tierra e incluso
Nos encontramos por un lado con una pujante a sirvientes propios, así como los indígenas
elite nativa involucrada en las redes de contra- que lograron insertarse en el mercado laboral
tación; por otro con indígenas desempeñán- mediante una contratación legal, se contra-
dose como tripulantes, peones, siringueros, ponían con aquella otra experiencia marginal
mozos, etc. por un sueldo y un tiempo más o que acontecía al mismo tiempo en las inaccesi-
menos definidos; por otro con neófitos cuya bles selvas del norte amazónico beniano, para
fuerza de trabajo era vendida por terceros sin la cual resulta mucho más difícil –cuando no
directamente imposible– encontrar fuentes Bibliografía
históricas o algún tipo de documentación que
nos permita reconstruir qué sucedía exacta- Anónimo. 1894. El Doctor Don Antonio Va-
mente con las sociedades autóctonas. ca-Díez. Sus antecedentes, su obra, sus detrac-
tores. Cochabamba: Imprenta y Litografía
La copiosa información documental (contra- de “El Comercio”.
tos, pleitos, actas notariales, expedientes de Armentia, Nicolás. 1885. Exploración oficial
compras y ventas de propiedades, actas de mandada efectuar del Madre de Dios en
matrimonio, testamentos, padrones y censos, 1884. La Paz: Imprenta El Nacional.
etc.) que echa luz sobre la dinámica indígena _____ 1887. Navegación del Madre de Dios. La
en los Llanos de Mojos desaparece de la esce- Paz: Biblioteca Boliviana de Geografía e
na en los bosques septentrionales, cayendo en Historia.
un vacío documental en el cual de algún modo Baldivieso, Pastor. 1896. Informe que presenta al
se diluye la voz de los participantes. señor Ministro de Colonización el Intendente
de la Delegación nacional en el Noroeste, te-
Nos vimos forzadas, en ese caso, a reconstruir niente coronel Pastor Baldivieso. Bolivia, Ri-
el panorama interétnico y sus transformacio- beralta. La Paz: Taller Tipo-Litográfico.
nes a partir de una gama dispar, heterogénea Ballivián, Manuel Vicente y Casto Pinilla.
y fragmentaria de reportes de misioneros, 1912. Monografía de la Industria de la Segundo periodo
viajeros, exploradores, militares, caucheros o Goma Elástica en Bolivia. La Paz: Direc- Bajo la
Constitución de
científicos que por una u otra razón debieron ción General de Estadística y Estudios 1880 que marca
el periodo liberal
aventurarse por las selvas norteñas. Geográficos. (1880-1938)
Balzan, Luigi. 2008 [1885-1893]. A carretón y
El análisis cruzado de esas fuentes heterogé- canoa. La obra del naturalista Luigi Balzan 511
neas, en todo caso, nos permite poner en tela en Bolivia y Paraguay (1885-1893). Edición,
de juicio la imagen un tanto estereotipada so- estudio preliminar, notas y traducción de Cla-
bre una mano de obra indígena pasiva frente ra López Beltrán. La Paz: IFEA/IRD/Emba- “Sin indios
o hay industria
al avasallante poder del frente colonizador. jada de Italia/Plural editores. del caucho”:
los indígenas
En estas páginas, por el contrario, hemos de- Barragán, Rossana. 1999. Indios, mujeres y ciu- amazónicos frente
a la colonización
mostrado que en la Amazonía boliviana los dadanos. Legislación y ejercicio de la ciuda- gomera
diversos grupos indígenas alternaron entre danía en Bolivia (siglo XIX). La Paz: Fun-
la asimilación total, el aprovechamiento es- dación Diálogo/Embajada del Reino de
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La encrucijada irresuelta
Ciudadanía, indigeneidad y nacionalidad
Las tierras bajas de Bolivia
El caso chaqueño
Isabelle Combès
Instituto Francés de Estudios Andinos
Centro de Investigaciones Históricas y Antropológicas (CIHA - UAGRM)1
Bajo la
Constitución de
A lo largo del siglo XIX y parte del XX, los re- La Bolivia que nace en agosto de 1825 es un 1880 que marca
el periodo liberal
quisitos impuestos por las constituciones boli- país que no se conoce a sí mismo. Es la herede- (1880-1938)
vianas para acceder a la ciudadanía excluyeron ra de la Audiencia de Charcas, cuyos centros de
en la práctica a los indígenas de las tierras ba- poder político y económico (Potosí, La Plata, 515
jas. Más aún, si bien teóricamente eran reco- La Paz) están ubicados en los valles andinos y
nocidos como bolivianos, en muchos casos se en el altiplano. Es el “Alto Perú” –una expre-
La encrucijada
les negó hasta la nacionalidad, considerándo- sión que subraya nítidamente la identidad andi- irresuelta
los como “no civilizados”. Con énfasis en el na del nuevo país, obviando que la mayor parte Ciudadanía,
indigeneidad
caso guaraní (chiriguano) y chaqueño, el texto de su territorio se corresponde con la Amazo- y nacionalidad
examina cómo ciudadanía, indigeneidad y na- nía, el Chaco o la Chiquitania, con todas estas
cionalidad fueron términos excluyentes en las regiones que hoy solemos designar como “tie-
tierras bajas, pero también de qué manera los rras bajas”. En los llanos orientales, la pequeña
indígenas buscaron, y a menudo encontraron, ciudad de Santa Cruz de la Sierra se erige como
intersticios legales para ejercer algunos dere- solitario bastión de la (relativa) presencia esta-
chos civiles. El análisis se centra sobre el siglo tal y de “la civilización” en singular: la civiliza-
XIX, pero desborda hasta el tiempo presente ción y los valores occidentales, únicos modelos
para un mejor entendimiento de los procesos de la nación que nace, sin tomar en cuenta ni
históricos aun no resueltos en la actualidad. considerar a las culturas de los diversos pueblos
indígenas que moran en el país. Exceptuando
Palabras clave: Ciudadanía, nacionalidad, in- zonas como Mojos y Chiquitos, previamente
dígenas, tierras bajas. “civilizadas” o al menos incorporadas al orden
colonial mediante las misiones jesuíticas, la in-
1 Instituto Francés de Estudios Andinos (UMIFRE 17 mensidad de las tierras bajas sigue siendo terra
MAEDI/CNRS USR 3337) América Latina) / Cen- incognita y a menudo tierra insumisa también,
tro de Investigaciones Históricas y Antropológicas
hogar de los antiguos “antis” o los “chunchos”
(CIHA) del Museo de Historia de la Universidad
Autónoma Gabriel René Moreno, Santa Cruz de la de los incas, y que siguen considerados como
Sierra, Bolivia. tales: “bárbaros” y “salvajes”.
La mayor parte de la Amazonía y del Chaco Cuevo opone a los tres departamentos de San-
boliviano sólo logra ser explorada, conocida, ta Cruz, Chuquisaca y Tarija, que se disputan
conquistada y colonizada durante el primer los despojos del antiguo territorio chiriguano.
siglo de existencia de la República, y parti-
cularmente en dos momentos claves: la pre- La colonización avanza y los indígenas deben
sidencia de José Ballivián (1841-1847), que encararla, enfrentando desde un inicio la eter-
impulsa la exploración de los ríos amazónicos na paradoja de los vencidos: su integración a
y del Chaco en busca de una salida hacia el la nación que les acaba de arrebatar su tierra y
Atlántico y Europa para los productos nacio- su libertad; una nación que los considera, en el
nales (Groff Greever, 1987); la década de 1880 mejor de los casos, como menores de edad, y
luego, cuando, tras la guerra del Pacífico, la en el peor como meros estorbos del anhelado
pérdida definitiva del litoral boliviano da un “progreso”. ¿Cómo se desarrolla este proce-
nuevo impulso a las exploraciones que buscan so, y qué significa realmente? Las situaciones
nuevas vías para salir del enclaustramiento. A varían en la inmensidad de las tierras bajas:
los primeros exploradores se suman pronto las los mojeños del Beni obtienen temprano, en
misiones franciscanas entre los “infieles”, las 1842, una “ciudadanía” que pronto se esfuma
que, a su vez, propician la llegada de colonos, y sólo alcanza a sus elites (Guiteras, 2012 y
Un amor
la creación de pueblos, la paulatina integra- 2017; ver más adelante); otros buscan vías para
desenfrenado ción en suma de las diversas regiones orienta- ejercer, sino una ciudadanía real, al menos al-
por la libertad
les al Estado (García Jordán, 2001, 297-434). gunos derechos civiles; otros más se oponen
Antología de la
historia política por la fuerza al avance de los colonos. Muchos
de Bolivia
(1825-2020)
Desde un punto de vista indígena, el primer ensayan una y otra estrategia a la vez. Ése es el
siglo de libertad boliviana y de la formación caso de los llamados chiriguanos (los actuales
516 de la nación es, por el contrario, el inicio de guaraníes) que me propongo examinar en es-
una verdadera época colonial, el momento tas páginas. Lo haré interesándome también,
de la pérdida de una independencia que mu- aunque en menor medida y más que todo a
Tomo I chos grupos étnicos han sabido preservar en título de comparación, por sus vecinos indíge-
1825-1952
los siglos anteriores. La colonización avanza, nas del Gran Chaco como los tobas.
implacable, imparable. El ejemplo de la pro-
vincia Cordillera en el departamento de Santa
Cruz lo ilustra bien: al inicio de la República, 1. Se derrumba la Cordillera
las misiones franciscanas ubicadas entre los
ríos Grande y Parapetí han desaparecido y la Nota Rossana Barragán (2005) que, en la parte
región ha vuelto, en términos de los contem- andina del país, se empezó a utilizar el término
poráneos, al “barbarismo”. En estos primeros “indígena” por encima del despectivo “indio”
años, en los informes oficiales, la “provincia a partir de los decretos de Simón Bolívar emi-
Cordillera” se resume a las ex misiones de Pi- tidos en 1826. En contraste, quien recorre la
ray, Abapó, Cabezas y Florida, todas situadas literatura de la época sobre las tierras bajas del
al norte del río Grande y relativamente cer- país encuentra una profusión de “indios”, “bár-
canas a Santa Cruz (fig. 1). Pero pronto, en baros” y demás “salvajes”. Por cierto, en oca-
1836, la capital de la provincia se establece en siones, estos términos son utilizados de manera
Yanacocha (hoy Gutiérrez), ya al sur del río indiferente como sinónimos. Pero, en general,
Grande. En los años 1860, la capitalía provin- y en consonancia con los presupuestos ideoló-
cial pasa ya a Lagunillas, todavía más al sur, gicos evolucionistas de la época (y de antes) y
en el corazón de las tierras indígenas (Com- el darwinismo social de fin del siglo (Démélas,
bès, 2005, 124-125). A finales del siglo XIX, el 1981), existe una clara diferencia entre el “bár-
pleito por la posesión de los terrenos de Ivo y baro” y el “salvaje” –la misma que existe entre el
Segundo periodo
Bajo la
Constitución de
1880 que marca
el periodo liberal
(1880-1938)
517
La encrucijada
irresuelta
Ciudadanía,
indigeneidad
y nacionalidad
Mapa 1: La cordillera chiriguana y las misiones franciscanas, adaptación del mapa de las misiones franciscanas.
Fuente: Centro Eclesial de Documentación, Tarija.
“indígena” y el “indio”. “Salvajes” son los habi- del Isoso en la provincia Cordillera, “indio
tantes de la selva y, más que todo, los indios in- aliado”, protesta comparando su situación con
dómitos, enemigos, “bravos”, no “civilizados” la de los andinos, y establece una clara dife-
y que se oponen por la fuerza al avance de la rencia entre ellos y su propia gente: “hasta la
colonización. Por el contrario, los “bárbaros” clase indigenal goza de privilegios y garantías
están un escalón más arriba en esta peculiar cla- sociales que no se nos conceden a nosotros”.3
sificación: son, por ejemplo, los habitantes de
Mojos y Chiquitos, que adquirieron cierto bar- Los isoseños y, con ellos, todos los chirigua-
niz de “civilización” por su paso en las misiones nos, recorren estos diferentes escalones a lo
jesuíticas de la época colonial; son los neófitos largo del primer siglo de la República. En esta
de las misiones franciscanas que se instalan con época como en la actualidad, los chiriguanos
fuerza en las tierras orientales durante el siglo viven en los últimos estribos orientales de la
XIX; son los “indios aliados”, no siempre neó- cordillera andina y los confines más occiden-
fitos, pero sí más sumisos, más “mansos”. Esta tales del Chaco boreal, desde la región de San-
división de los indígenas de tierras bajas entre ta Cruz al norte hasta la Argentina al sur (fig.
“bárbaros” y “salvajes” rige durante todo el si- 1). Toda esta región es conocida, en la época
glo XIX y más allá; ha sido estudiada por varios colonial, como la “Cordillera chiriguana”, ori-
Un amor
autores, en diferentes contextos. Bossert (2012) gen del nombre de la “provincia Cordillera”
desenfrenado y Combès (2019) han mostrado cómo, a fina- del departamento de Santa Cruz.
por la libertad
les del siglo XIX, los chiriguanos ya sometidos
Antología de la
historia política son sistemáticamente vistos como superiores Durante todo el periodo colonial los chiri-
de Bolivia
(1825-2020)
a sus vecinos del Chaco (tobas, matacos, etc.) guanos, “luciferina, sanguinolenta y caribe
que son, además, nómadas y no agricultores; nación”,4 son el principal obstáculo de los es-
518 en la Amazonía, se oponen los ex neófitos de pañoles de Charcas para penetrar en el Cha-
las misiones (que gozaron, como vimos, de co. La Cordillera chiriguana se erige así en un
una efímera ciudadanía) y los “salvajes” que se formidable obstáculo de protección para los
Tomo I rehúsan a trabajar en la industria de la goma pueblos chaqueños (tobas, matacos, tapietes,
1825-1952
(Córdoba, 2015; Guiteras, 2012); en el contex- etc.), de hecho, poco o nada conocidos en los
to de las misiones de Guarayos, Pilar García siglos coloniales. La Cordillera es “la fronte-
Jordán también analiza, en un libro reciente, ra” y permanece fuera del control colonial, o
las representaciones encontradas de los sirio- casi. Los intentos de varias órdenes religiosas
nós (“salvajes”) y los guarayos (“civilizados” o por evangelizarlos fracasan uno tras otro, has-
“más civilizados” en todo caso), en los escritos ta la fundación de varias misiones francisca-
franciscanos (García Jordán, 2020). nas a finales del siglo XVIII, y la llegada en la
misma época de colonos en los márgenes del
Los “bárbaros” son, en definitiva, los indíge- territorio indígena.5 Este proceso es el que
nas que son, o al menos parecen, “menos in-
dios” y, de hecho, a ellos se aplica, aunque rara varias aldeas (“capitanía grande”). Esta estructura
vez, el rótulo de “indígena”. Pero la diferencia política y su designación en castellano permanecen
sigue siendo nítida con los habitantes nativos hasta la actualidad.
3 Memorial de José Iyambae al prefecto de Chuqui-
de los Andes que son el prototipo del “indíge-
saca, 19.06.1856, en Archivo y Biblioteca Naciona-
na”. En 1857 por ejemplo, el capitán grande2 les de Bolivia [de aquí en adelante. ABNB], Ministe-
rio del Interior [MI] 1857 161/52.
4 Carta del licenciado Cepeda al virrey, 1584, en Mu-
2 Desde la Colonia temprana, los jefes chiriguanos jía, 1914 t. 2: 270.
(tuvicha o mburuvicha, literalmente “los grandes”) 5 Historias generales de los chiriguanos son por
fueron llamados “capitanes”. El “capitán grande” ejemplo las de Susnik (1968), Pifarré (1989) y Saig-
es aquel que está a la cabeza de una zona que reúne nes (1990).
continúa luego en la época republicana, hasta Cumbay denuncia elocuentemente de esta ma-
la conquista total de la “Chiriguanía”. nera: los blancos, dice Cumbay, ponen
Las guerras de Independencia dan un breve … sus ganados a nuestras chacras y pue-
respiro a los indígenas: las misiones son ba- blos como a pastos baldíos, llegando […]
rridas en la tormenta independentista, los al extremo de meter dichos sus ganados en
colonos se repliegan y, como mencioné para nuestras sementeras estando cultivadas y
el caso de las tierras misionales entre los ríos con frutos pendientes de que ha resultado el
Grande y Parapetí, los chiriguanos logran in- daño de quedarnos sin cosecha y sin libertad
cluso recobrar parte de su territorio (Langer, de sembrar por estar ocupadas las tierras de
2002; 2009, 28-29). Pero pronto lo vuelven a labranza con dichos ganados.7
perder y, esta vez, definitivamente.
Más tarde, el capitán Iyambae del Isoso denun-
En la década de 1830 se reactivan en el país cia a su vez “un perjuicio tan terrible de mí y toda
los colegios de Propaganda Fide y las misiones mi gente, advirtiendo que las estancias se hallan
franciscanas, explícitamente pensadas como el en los mismos pueblos, consumiendo toda clase
“medio más eficaz y suave para reducir a la de siembras en particular nuestros algodonales
sociedad civil y religiosa” a los indígenas to- de donde salen nuestras vestimentas”.8
davía insumisos.6 En la Cordillera chiriguana, Segundo periodo
la misión de Itaú se reactiva en 1845, preludio Las relaciones entre frailes y colonos tampoco Bajo la
a nuevas fundaciones. Entre 1845 y 1872, el están exentas de ambigüedades y conflictos, que
Constitución de
1880 que marca
colegio de Propaganda Fide de Tarija funda se agudizan en el último cuarto de siglo y los el periodo liberal
(1880-1938)
ocho reducciones; el colegio de Potosí, que primeros años del siglo XX. El acceso a la tierra
inicia sus actividades poco después en la mis- y a la mano de obra indígena los opone abierta- 519
ma región, establece otras seis misiones entre mente: “existe una funesta colisión de intereses
1876 y 1914 (Langer, 2009, 52-3). entre los Padres conversores y los propietarios
de fincas de aquellos centros de población. Am- La encrucijada
irresuelta
Detrás de los frailes o junto con ellos llegan bos se disputan los brazos trabajadores” (Cam- Ciudadanía,
los colonos, grandes y pequeños ganaderos. Al pos, 1888, 273). De ahí que, para mitigar la in-
indigeneidad
y nacionalidad
ocupar y pacificar ciertas porciones de territo- vasión de sus cultivos y escapar de las garras de
rio, la fundación de las misiones favorece en los hacendados, numerosos chiriguanos recla-
efecto su instalación, y algunas de las familias man la fundación de una misión en sus tierras.
criollas más poderosas de la región se benefi- Los franciscanos son conscientes de ello, y no se
cian enormemente del trato con los misione- hacen demasiadas ilusiones sobre su tarea evan-
ros (Langer, 2009, 215, 222-25). La misión se gelizadora: dice Doroteo Giannecchini, misio-
convierte así “en instrumento de ocupación nero de Tarija, que el chiriguano no quiere
del territorio y una de las puntas de lanzas de
la penetración colonizadora en los territorios … sentirse obligado a cambiar de vida, de
ocupados por las poblaciones no sometidas” costumbres y creencias. Esto es tan cierto,
(García Jordán, 2001, 288). Una de las conse- que cuando queremos conquistar y conver-
cuencias para los indígenas es la agudización de tir a algún tubicha [jefe] y reducirlo a misión,
lo que Branislava Susnik (1968) denominó el
“conflicto maíz/vaca” y que el jefe chiriguano
7 Expediente formado a petición del capitán Cum-
6 Decreto promulgado el 22 de enero de 1830 bajo bay, indio bárbaro de la Cordillera, ABNB Colec-
el gobierno de Andrés de Santa Cruz (Colección ción Rück 143, 1799.
oficial de leyes…, 1834, 230-31; ver García Jordán, 8 Memorial de José Iyambae al prefecto de Chuqui-
2001, 284; Langer, 2009, 221. saca, 19.06.1856, ABNB MI 1857 161/52.
él lo hace principalmente para vivir tran- de su territorio y de su independencia por par-
quilo, lo acepta para estar pacífico bajo la te de los indígenas, reducidos a convertirse en
protección del misionero, pero no por otras peones de haciendas o neófitos de las misiones.9
ideas de orden espiritual y eterno” (Gian-
necchini, 1996 [1898], 373). A partir de este momento los chiriguanos, an-
taño tan temidos y equiparados a bestias fero-
A mediados de siglo, el gobierno Ballivián ces, se transforman en “industriosos y simpá-
impulsa dos expediciones seguidas al río Pil- ticos indígenas” que representan “el más alto
comayo, buscando verificar su navegabilidad escalón intelectual entre las tribus poblado-
y esperando llegar hasta el Paraguay. Manuel ras del territorio, pudiendo ser considerados
Rodríguez Magariños en 1843-1844 y Enrique como indios civilizados” (Baldrich, 1890, 204,
Van Nivel en 1844 fracasan lamentablemente 272; itálicas de origen). Son menos “indios”
en sus empresas, pero abren una brecha en el (menos “salvajes”), más “indígenas” e incluso,
hasta ahora impenetrable escudo cordillerano dice más tarde el Delegado nacional del Gran
del Chaco. Magariños funda en 1843 el pue- Chaco, ya superan el estado de “bárbaros”: la
blo-fortín de Caiza en las puertas del Chaco nación chiriguana, escribe Leocadio Trigo,
tarijeño; veinte años después se erige el fortín
Un amor
de Bella Esperanza río abajo. Aparecen a plena La tribu chiriguana que desde tiempo in-
desenfrenado luz “nuevos” indígenas, de los cuales sólo se memorable vive al lado de las poblaciones
por la libertad
conocía el nombre (Los Tobas, por ejemplo) civilizadas, ha adquirido condiciones de su-
Antología de la
historia política o ni siquiera la existencia, como los noctenes perioridad que la levanta sobre el nivel de
de Bolivia
(1825-2020)
(actuales weenhayek), que aparecen por pri- los bárbaros […] Hace mucho tiempo que
mera vez en los informes de Magariños (1844) pasando del estado salvaje al bárbaro, puede
520 y Van Nivel (1845). conceptuársela hoy en un grado de civiliza-
ción igual al de los campesinos bolivianos.10
En la segunda mitad del siglo el cerco se estre-
Tomo I cha sobre los chiriguanos. Agobiadas por una Como muestra de este cambio, un nuevo
1825-1952
colonización ya imparable, las diversas capita- nombre surge incluso, por un tiempo, para
nías optan por estrategias diferentes. Algunas designarlos: en los años 1880 suelen ser llama-
escogen pactar con los blancos y convertirse dos chiru-guaraníes –un calco de “chiriguanos”
en “indígenas aliados”: es el caso, por ejemplo, por cierto, pero probablemente “fabricado” a
de Caipependi e Isoso, ambas en la provincia partir de la expresión che irü, literalmente “mi
Cordillera de Santa Cruz. Otras, sobre todo al otro” en el sentido de “mi amigo”, frecuen-
sur del Parapetí donde está más activo el Cole- temente empleada entre hombres guaraníes.
gio Franciscano de Tarija, optan por la misión.
Otras más –o las mismas según las circunstan-
cias– siguen aferrándose a la guerra como ilu- 9 La rebelión posterior de Kuruyuki en 1892 es mucho
más conocida que la guerra de 1874, principalmente
sorio medio de frenar el avance colonizador. a raíz de la publicación de Sanabria Fernández sobre
Varias sublevaciones sacuden así la Cordille- el tema (1972). Se la presenta generalmente como
ra y, detalle importante, prácticamente todas la fecha de la pérdida de su independencia por parte
cuentan con el apoyo de los tobas, a veces de de los chiriguanos. Se trató sin embargo de la su-
blevación de sólo una parte minoritaria de los indí-
los noctenes o de los tapietes; es decir de los genas, precisamente porque ya estaban viviendo en
pueblos indígenas del Pilcomayo, ya amenaza- situación colonial y de servidumbre en las haciendas
dos directamente por la colonización (Combès, desde 1874. Una revisión de la historiografía sobre
2014b). La más cruenta de estas guerras, entre Kuruyuki en Combès, 2014a.
10 Leocadio Trigo: “Tribus salvajes” (1905) (Archivo
1874 y 1876, es también la última. Acaba en va- Histórico de Tarija, caja 105/180 copiador 2: 55,
rias escenas de masacre y la pérdida definitiva 73). Itálicas mías.
Un chiriguano más amigable, por así decir- avanzado que ocupan los pobladores bolivia-
lo. De hecho, en este fin de siglo, los tobas nos”, o bien menciona “los puntos en que ha-
son los que asumen el papel del villano y del bitan los pobladores bolivianos al medio de
salvaje absoluto de “la frontera”, el obstáculo las rancherías tobas” (Trigo, 1905, 533 y 549,
a ser vencido para dar paso a la civilización. respectivamente).
Lo siguen siendo hasta los años 1920 cuando,
tras una sublevación duramente reprimida, los A más de 50 años de distancia, ambos viajeros
tobas escogen migrar definitivamente al norte dicen lo mismo: chiriguanos en la época de
argentino (Combès, 2019). Weddell, tobas en la de Trigo, los indígenas
“salvajes”, los no sumisos, los que no integran
Éste es, a grandes rasgos, el marco histórico las misiones o las haciendas, no son conside-
que nos permitirá entender el difícil camino rados como bolivianos. Muchos incluso ni
de los chiriguanos y de sus vecinos hacia “la siquiera los consideran como hombres, sino
bolivianidad”, cuando no hacia la ciudadanía. como alimañas que deben exterminarse. Dice
el subprefecto del Gran Chaco, a propósito de
los tobas:
2. Borregos, panteras y amigos
de los bolivianos Jamás se les ha de poder reducir por la de
a buenas, y siempre han de ser dichos sal- Segundo periodo
La primera Constitución de la flamante Boli- vajes enemigos eternos de los cristianos y Bajo la
Constitución de
via, aprobada en 1826, define en su artículo 11 del progreso y de la civilización, por consi- 1880 que marca
el periodo liberal
que es boliviano todo aquel nacido en Bolivia. guiente, el atraso y ruina de estos pueblos (1880-1938)
La reunión de todos los bolivianos forma la nacientes. A estos hombres salvajes no se
nación boliviana (art. 1°). Variantes más, va- les debe considerar como a hombres sino 521
riantes menos, lo mismo afirman las diversas como a tigres y panteras y como a tales se
constituciones que se suceden en los siglos XIX les debe perseguir, por no ser útiles para sí,
ya XXI. Por ende, teóricamente al menos, to- para la humanidad o sociedad y ni para el La encrucijada
irresuelta
dos los indígenas (y todos los “indios”) del país Estado.11 Ciudadanía,
indigeneidad
gozan, desde 1826, de la nacionalidad bolivia- y nacionalidad
na. Sin embargo, la práctica dice otra cosa. A decir verdad, muchos de estos “salvajes” ig-
noran también por completo su nacionalidad.
En 1846, viajando por una Cordillera chiri- Primero, sus únicos contactos con el mundo
guana todavía indómita, el viajero anglo-fran- blanco tienen lugar en ocasión de robos o asal-
cés Hugues A. Weddell hace unas anotaciones tos, y no en el marco de alguna instituciona-
sobre la vestimenta de los indígenas y comen- lidad como dentro de las misiones o los co-
ta: “hablo de la vestimenta de los indígenas, rregimientos; segundo y más importante, en
pues la de los bolivianos es la misma en todas la segunda mitad del siglo XIX, tobas, nocte-
partes”; más tarde, durmiendo en la aldea chi- nes e incluso parte de los chiriguanos suelen
riguana de Abarenda tras una agotadora noche ir a trabajar estacionalmente en los ingenios
en el pueblo criollo de Caraparí en un lecho azucareros del noroeste argentino, y conocen
lleno de pulgas, constata: “en Abarenda estaba mucho mejor al vecino país que a la propia y
libre de los bichos que me habían atacado en sin embargo tan lejana Bolivia.
el sucio cuchitril del pueblo boliviano” (Wed-
dell, 2018 [1851], 75 y 199 respectivamente).
11 Informe del subprefecto de la provincia del Gran
Más de medio siglo más tarde, explorando el
Chaco, Eudogio Raña, al prefecto de Tarija (Caiza,
río Pilcomayo, el delegado nacional Leoca- 6.05.1882) en Ministerio de Hacienda de Bolivia,
dio Trigo dice haber llegado al “último punto 1882: 45.
Sin embargo, los neófitos de las misiones fran- de los apacibles “chiru-guaraníes” se subleva
ciscanas, o los “aliados” que suelen visitar pre- por última vez en 1892 en Kuruyuki, apare-
fectos y demás autoridades, tienen algo más cen de nuevo como “hordas salvajes” (Com-
de conocimiento sobre su país (cada misión bès, 2014a, 60-68); los isoseños, “indígenas
tiene su bandera, por ejemplo, y se celebran aliados” por lo general, bien pueden trans-
las fiestas nacionales). Son, también, “más ci- formarse en “pérfidos salvajes” en caso de no
vilizados” a ojos de los criollos. ¿Son por ello obedecer u obstaculizar los intereses estatales
considerados como bolivianos? ¿Se consideran (Combès, 2005, 181 y 147, respectivamente).
ellos como tales? La verdad es que, en su caso
también, las afirmaciones de la Constitución La correspondencia relativa a la región del
quedan en general como letra muerta o tie- Isoso es instructiva sobre el grado de “bolivia-
nen, por lo menos, interpretaciones sui géneris. nidad” atribuido a los indígenas. En mayo de
1871, al ser nombrado “capitán grande” por la
Por un lado, y aunque más sumisos, los neófi- prefectura cruceña, el jefe Aringui es calificado
tos no escapan de la animalización sufrida por de “aliado de las autoridades bolivianas”,13 una
los indómitos. Si, en los postreros años de la formulación más que ambigua que no deja cla-
Colonia, los misioneros afirmaban que su pa- ra la supuesta “nacionalidad” del capitán y hace
Un amor
pel era de “hacerlos hombres antes que cris- suponer, más bien, que Aringui es diferente de
desenfrenado tianos”,12 sus sucesores republicanos siguen los bolivianos. A finales del mismo año, cuando
por la libertad
utilizando expresiones que les deniegan toda la misma prefectura divide el mando del Isoso
Antología de la
historia política humanidad: “nace y crece el chiriguano como entre el sur (para Aringui) y el norte (para José
de Bolivia
(1825-2020)
nacen y crecen los borregos; no saben de dón- Iyambae), se dirige “al boliviano José Manuel
de proceden y todas sus acciones se reducen a Yñambae”, pero lo califica también de “aliado
522 la pura naturaleza […] come, bebe, duerme y de las autoridades bolivianas”.14 Años después,
vive el indio [chiriguano] como cualquier cua- el mismo Iyambae recalca haber sido nombra-
drúpedo” (Nino, 1912, 143 y 155, respectiva- do por “las autoridades bolivianas”, y en virtud
Tomo I mente). de “la alianza y amistad contraída con los cris-
1825-1952
tianos”.15 Todo parece mostrar, pues, que lo que
Por otro lado, las etiquetas y la diferencia entre prima en la visión tanto de la prefectura como
los “salvajes” y los “bárbaros” son cambiantes, de los propios isoseños es la brecha que sigue
en función no tanto o no siempre del grado existiendo entre lo “indio” (o lo “indígena”) y
de “civilización” alcanzado, sino de la real su- lo “blanco” o “cristiano” (karai, en guaraní).
misión de tal o cual grupo. Así, por ejemplo, José Iyambae bien puede ser un “boliviano” de
en la Amazonía del tiempo de la goma, Lore- conveniencia en los papeles, pero sigue nítida
na Córdoba (2015) muestra que los caripunas la diferencia entre él o su colega Aringui y “las
y pacaguaras que asaltan a veces las barracas, autoridades bolivianas”.
son conceptuados como “salvajes”; por el
contrario, los chácobos (que sin embargo son Más tarde, durante la guerra del Chaco (1932-
parientes, si no exactamente los mismos que 1936) entre Paraguay y Bolivia, la misma
los caripunas y pacaguaras), más pacíficos, son
vistos como “bárbaros”. Exactamente lo mis-
13 Carta del prefecto de Santa Cruz a José Aringui,
mo pasa en el caso chiriguano: cuando parte 4.05.1871 (Museo de Historia de la Universidad
Autónoma Gabriel René Moreno, Santa Cruz
[MHSC] Fondo Prefectural [FP] 3/96.
12 Representación del Discretorio del Colegio de 14 Carta del prefecto de Santa Cruz a José M. Iyam-
Tarija al Excmo. Sr. Virrey sobre las misiones, bae, 15.12.1871 (MHSC FP 3/96).
10.08.1799 (Archivo Franciscano de Tarija [en ade- 15 Carta de José Iyambae al prefecto de Santa Cruz,
lante AFT] 1-983). 26.06.1885 (MHSC FP 3/114).
dicotomía se acentúa aún más. Cuentan los neófitos y ejercerán el gobierno económico y
isoseños que “los bolivianos” empezaron a administrativo dentro de la circunscripción del
abrir caminos Chaco adentro, utilizando para territorio de su misión” (Ercole, 1871, art. 28).
ello la mano de obra isoseña.16 Estos bolivia-
nos son karai (“blancos”) en los relatos isose- Por ende, no pueden en ningún caso ejercer
ños, y no así los paraguayos que llegan hasta derechos ciudadanos y, de hecho, esta situa-
la zona y, por hablar guaraní, son vistos como ción se condice con lo postulado por las consti-
más cercanos. De hecho, las cartas escritas tuciones políticas de la Bolivia decimonónica.
por oficiales paraguayos reflejan la misma si- La Constitución de 1826 distingue en efecto
tuación: según ellos, el Isoso es un Paraguay- nítidamente entre nacionalidad y ciudadanía.
mi, un “pequeño Paraguay”, y sus habitantes Su artículo 14° enumera las condiciones “para
consideran al Paraguay como a su patria. La ser ciudadano”: ser boliviano, casado o ma-
excepción confirma la regla: se trata de Casia- yor de 21 años, saber leer y escribir, y “tener
no Barrientos, capitán del Isoso en la época de algún empleo o industria, o profesar alguna
la guerra, e hijo mestizo de una isoseña y de ciencia o arte, sin sujeción a otro en clase de
un comerciante vallegrandino –de un karai. sirviente doméstico”. Con pocas diferencias,
Casiano declara ser y sentirse boliviano y “las las constituciones que se suceden en el siglo
causas que motivaron tal actitud, nos explicó XIX retoman los mismos criterios. La de 1839
él mismo, diciéndonos que obedecían al he- agrega como condición de ciudadanía el tener Segundo periodo
cho de haber sido hijo de padre boliviano”.17 un capital de 400 pesos; en 1861, esta condi- Bajo la
Constitución de
Como si los demás isoseños no hubiesen naci- ción cambia a tener una propiedad inmueble, 1880 que marca
el periodo liberal
dos, pues, de “padre boliviano”. o bien una renta anual de 200 pesos (Barragán, (1880-1938)
2005, 288-291). Ya en el siglo XX, el gobierno
Con toda evidencia, no basta con ser aliado, de Germán Busch elimina la tenencia de pro- 523
neófito o sumiso. Los chiriguanos tienen un piedad como condición de ciudadanía, pero
largo camino que recorrer: de bestias a “sal- mantiene el criterio de la lectoescritura.
vajes”, de “salvajes” a “bárbaros”, de indios a La encrucijada
irresuelta
indígenas y de indígenas a karai o medio karai, Aunque no mencionen específicamente a los Ciudadanía,
indigeneidad
para poder ser lo que las diversas constitucio- indígenas, las diversas cartas magnas les nie- y nacionalidad
nes afirman que son: sencillamente bolivianos. gan en la práctica el ejercicio de la ciudadanía
–al igual, pues, que a gran parte de la pobla-
ción blanca o mestiza y a las mujeres. En las
3. Transformar al indio tierras bajas, únicamente existe una excepción
que, al final, sólo logra confirmar la regla: es
Aunque bolivianos, al menos teóricamente y la de los ex neófitos de las misiones jesuitas
en el papel, los neófitos de las misiones fran- de Mojos (ya “civilizados”) quienes “se elevan
ciscanas están considerados, en el reglamento a la clase de ciudadanos bolivianos y como
de misiones de 1871, como menores de edad, tales capaces de los derechos de igualdad, li-
sujetos a la tutela paternal de los frailes: “Los bertad y propiedad que las leyes garantizan a
padres conversores son tutores natos de los los bolivianos” en el momento de la creación
del departamento del Beni en 1842.18 Esta ciu-
16 Testimonio de Natalio Barrientos, isoseño, en
dadanía está acreditada por la adquisición del
Riester, 2005: 91. dominio de terrenos y la generación de traba-
17 Carta del oficial paraguayo Basiliano Caballero; jo. Sin embargo, en la práctica, los indígenas
Carta del ex militar paraguayo Basiliano Caballero
a la antropóloga Bárbara Schuchard, sin fecha [c.
1979]. Ambas conservadas en la comunidad de La 18 Decreto del 06.08.1842, citado por Guiteras, 2012,
Brecha, Alto Isoso. 163.
siguen siendo considerados como usufructua- de la zona del Ingre. Los tuvicha reciben rega-
rios y no propietarios de tierras concebidas los para ellos y su gente, reciben sueldos inclu-
como “fiscales”, y sólo unos pocos –los repre- so de las prefecturas. Elevan protestas oficiales
sentantes de la elite nativa en general– logran contra los abusos de los hacendados, Iyambae
efectivizar una compra real de terreno. Más empieza a querer fijar mojones y límites para
aún, cuando, más tarde, el auge de la goma y impedir el avance de los ganaderos en el Isoso
de la colonización provoca la llegada de mu- y más tarde, en los años previos a la guerra del
chos nuevos colonos criollos, la mayor parte Chaco, los indígenas buscan, y a veces consi-
de los propietarios mojeños acaban vendien- guen, títulos de propiedad de su tierra (Com-
do sus tierras, perdiendo así la fugaz ciudada- bès, 2005).
nía de la que han gozado por algunas décadas
(Guiteras, 2012 y 2017). Del lado de la sociedad dominante, la idea no
cambia: se trata de seguir recorriendo la esca-
Sin considerar, entonces, esta excepción re- la humana, se trata de “civilizar”. Los “salva-
lativa, los indígenas del Chaco o de la Ama- jes” deben volverse “bárbaros”, los bárbaros
zonía no cumplen los requisitos para ejercer deben hacer méritos para transformarse en
una ciudadanía plena. Esta situación, que se ciudadanos. La tarea de la “civilización” recae
Un amor
mantiene sin cambios significativos hasta la principalmente en los misioneros franciscanos,
desenfrenado revolución nacional de 1952, genera dos mo- perfectamente conscientes de su misión: en pa-
por la libertad
vimientos opuestos. labras de Doroteo Giannecchini, tarea de los
Antología de la
historia política frailes es, pues, convertir a las “hordas salvajes”
de Bolivia
(1825-2020)
Del lado de los indígenas, si bien los “salvajes” en “hombres útiles a sí mismos, a la religión y a
siguen oponiéndose a la colonización por la la patria” (Giannecchini, 1996 [1898], 1660; el
524 fuerza, en guerras cada vez más desesperadas y reglamento de misiones de 1871 también dice
fracasadas, los “aliados” intentan convivir con sin ambigüedad que los conversores “procura-
la sociedad dominante en busca de una ciuda- rán en lo posible la asimilación de las costum-
Tomo I danía más activa. No se trata tanto de conse- bres de los neófitos a las de los demás cristia-
1825-1952
guir, por ejemplo, el derecho de voto, sino de nos de la República” (Ercole, 1871, art. 27).
lograr ejercer algunos derechos civiles. Estas De hecho, este propósito prima por encima
estrategias son más conocidas en el ámbito an- de la evangelización o de la conversión. Como
dino,19 pero tuvieron igual vigencia en las tie- mostró Erick Langer (1995b; 2009), más allá
rras bajas en general, y entre los chiriguanos de la eliminación de algunas “malas costum-
en particular. Se traducen por el acercamiento bres” como la poligamia, las borracheras, etc.
de los capitanes chiriguanos a las autoridades (que se resisten además a desaparecer), la ver-
locales (corregidores), provinciales y departa- dadera tarea “civilizatoria” de las misiones, y
mentales, incluso al gobierno central en oca- su verdadero impacto, son otros: transformar
siones. Ahí, los capitanes consiguen títulos a los chiriguanos en una clase obrera fronteri-
oficiales que refrendan su autoridad –uno de za, en miembros productivos y activos (aunque
ellos, Güiracota, consigue incluso un nombra- siempre subalternos) de la economía nacional.
miento de parte del mismo presidente de la Instrumento privilegiado del Estado-nación en
República. La figura 2 reproduce uno de estos su proceso de expansión, eliminando el peli-
títulos, otorgado en 1894 al “capitán grande” gro de los “indios de guerra”, la misión fran-
ciscana brindó mayor seguridad a los colonos e
intensificó así el avance criollo sobre la región
19 Los indígenas de las tierras altas utilizaron distintas
chiriguana; transformó las normas tradiciona-
estrategias para ejercer la ciudadanía o al menos al-
gunos derechos civiles, aprovechando los resquicios les de trabajo y capacitó a sus neófitos como
legales (Barragán, 1999; Irurozqui, 2000; 2008). obreros especializados, los preparó en realidad
para emplearse en proyectos gubernamentales
(construcción de fortines, expediciones al Cha-
co) o como peones en las haciendas vecinas.
El papel económico de la misión en la fronte-
ra fue, dice Langer, más importante que el de
cualquier otra institución (fortines militares,
incluso haciendas) de la región.
No puede negarse que evangelizar o civilizar En 1916, el principal líder de los tobas de Bo-
son políticas algo más suaves que el extermi- livia muere asesinado en Campo Durán en el
nio reclamado por no pocos de los colonos de noroeste argentino, muy cerca de la frontera
la frontera chaqueña. Sin embargo, a la larga, entre ambos países. El hecho desencadena
apuntan a lo mismo: a la eliminación de lo in- una serie de sublevaciones entre los tobas del
dígena, transformando al indio en “cristiano” Pilcomayo, duramente reprimidas por las au-
o en “criollo” –no por casualidad ambos tér- toridades. Los tobas, que ya han emprendido
minos fueron utilizados como sinónimos en décadas atrás el camino hacia la Argentina y
los escritos de la época. La condición sine qua sus ingenios de azúcar, acaban abandonando
non para una verdadera ciudadanía es la desa- definitivamente Bolivia y se instalan en el ve-
parición de la indigeneidad. cino país. Ahí, por un tiempo, son conocidos
como “tobas bolivianos”: ironía de la historia,
aunque sólo sea en el lenguaje, los “salvajes”
20 Carta de Leocadio Trigo a Eliodoro Villazón,
13.04.1905 (Archivo privado de la familia Robert-
alcanzaron la “bolivianidad” una vez fuera de
son Trigo [AFR], Tarija). su país de origen (Combès, 2019, 146-147).
Esta historia es un reflejo paradigmático de la para hacerlas ejecutar”, y los mismos padres
situación que reina en Bolivia en el siglo XIX e pueden destituirlos a su antojo (Martarelli,
inicios del XX. Los indígenas de las tierras ba- 1918 [1889], 200).
jas sólo son acreedores de una bolivianidad de
papel, que nunca se concreta y mucho menos Lo que no advierten ni prefectos, ni corre-
desemboca en el ejercicio de una ciudadanía gidores ni misioneros, es que los títulos que
plena. Siguen siendo, en el imaginario (y las entregan son destinados a los capitanes legíti-
leyes) que imperan en el país, modernos “an- mos y tradicionales de la comunidad: no crean
tis” o “chunchos”, susceptibles a lo sumo de nuevos cargos ni autoridades fantoches, sino
“civilizarse” y ser ocupados en trabajos subal- que ratifican a jefes reconocidos por su gente.
ternos, cuya integración a la nación y a la ciu- Y los títulos se convierten, internamente, en
dadanía nunca se ha buscado realmente. otro símbolo de su poder, en un instrumen-
to para reforzar su autoridad o contrarrestar
Este mismo desprecio, o desconocimien- a posibles contrincantes. De hecho, no son
to, hace que las autoridades obvian la propia pocos los “capitanes aliados” y supuestamen-
agencia indígena. No sólo estallan subleva- te sumisos que son acusados al mismo tiempo
ciones sorpresivas (la Guayochería en el Beni, de ser muy sospechosos y fomentar subleva-
Un amor
Kuruyuki en el Chaco, en los años 1890); no ciones, evidenciando que su “sumisión” sólo
desenfrenado sólo los capitanes intentan acercarse a las au- existe en el papel (cf. Combès, 2005b).
por la libertad
toridades en buscar de algún intersticio en el
Antología de la
historia política marco legal para poder ejercer, aunque sea al- Los indígenas conocen a la perfección el es-
de Bolivia
(1825-2020)
gunos derechos civiles, o protestar contra los cenario político local y saben utilizarlos en su
abusos de la colonización. Más allá de estas provecho. En la misión de Macharetí a ini-
526 estrategias, los capitanes chiriguanos utilizan cios del siglo XX, el mayor dolor de cabeza de
a las autoridades blancas (“bolivianas”) de la los frailes franciscanos es el jefe Mandepora
misma manera que éstas quieren utilizarlos y, sobre todo, su hijo Tacu. Comunidad den-
Tomo I a ellos –y los hacen con éxito. Los títulos de samente poblada, punto de encuentro entre
1825-1952
“capitanes grandes” y demás nombramientos chiriguanos y tobas del Chaco y antaño pla-
rimbombantes son, para el prefecto o el co- za fuerte de la resistencia chiriguana frente
rregidor que los emite, una garantía de paz y a los blancos, Macharetí es un lugar estraté-
de sumisión por parte de los “indios aliados”: gico para el Colegio Franciscano de Tarija.
Para los padres, “ganar Macharetí fue el más
La autoridad del Capitán Grande, es para grande triunfo de su carrera como misione-
conservar el orden entre los indígenas, to- ros en Bolivia”; consciente de esta situación,
mar a los criminales y ponerlos a disposi- Mandepora “sabía que él tenía una posición
ción del Sub Prefecto, proporcionar brazos privilegiada, y fue lo suficiente capaz para
para el trabajo, obedecer al Corregidor que es la conseguir un trato favorable” (Langer, 1995a
autoridad superior del cantón y contener a los [1989], 232- 233). Es así que, desde los inicios
desmoralizadores21. de la misión en 1869, Mandepora impone sus
propias reglas para tolerar a los frailes, y és-
En las misiones franciscanas también, si bien tos tienen que aceptarla para no arriesgar una
los chiriguanos teóricamente pueden elegir a sublevación. Él mismo nunca se convierte,
sus propias autoridades, “los Capitanes son los sigue practicando la poligamia, organiza fies-
que reciben las órdenes del Padre Conversor tas de bebidas y mantiene incluso estrechos
contactos con los indómitos tobas del Chaco.
21 Carta del prefecto de Santa Cruz a José Iyambae, Tacu es su digno hijo y a fines del siglo XIX,
10.12.1890, MHSC FP 3/120; itálicas mías. junto con su padre y sus hermanos, oficia de
contratista para llevar a su propia gente como
peones en los ingenios azucareros del norte
argentino. Los franciscanos odian al perso-
naje, que no les obedece, que no reconoce su
autoridad, que sigue con varias mujeres y se
niega a enviar a sus hijos a la escuela misio-
nal: Tacu es “tan taimado y sicofanta a la vez
como éste no es dable encontrarlo entre los
indios”.22
es algo que ilustra además la fotografía que trola las deudas de los peones que lleva a tra-
le sacó el francés Jean-Baptiste Vaudry hacia bajar, y cobra por cada uno de ellos. Consigue
1904 (fig. 3). riqueza que reparte luego generosamente, al
mejor estilo chiriguano, en fiestas y borrache-
Valiéndose de la protección de Trigo, Tacu ras en Macharetí; consigue prestigio y respeto.
sigue viajando y llevando a su gente a la Ar- Tacu tal vez vista como hombre blanco, pero
gentina. Si bien, para el delegado, Tacu es su para reafirmarse mejor como cacique chi-
“antiguo amigo”25 y su aliado contra los fran- riguano. Es posible que, al ejemplo de otros
ciscanos, él mismo lo ve de otra manera. Lo jefes chiriguanos e isoseños en su misma situa-
que encuentra en los ingenios, y vuelve a traer ción (Casiano Barrientos, Enrique Iyambae,
entre otros), Tacu también haya estudiado en
el norte argentino, aprendido a leer, escribir
22 Carta del P. Gervasio Costa al ministro de relacio-
nes exteriores y culto, 1.06.1904 (AFT 2-672: 2v). y contar en las misiones protestantes de los
23 Carta del P. Domingo Ficosecco a Santiago Roma- ingenios, entendido mejor en suma cómo
no, Macharetí, 29.08.1906 (AFT 2-71: 2). funcionaba el mundo de los blancos.26 Éstas
24 Anales, 2006 [1905], 1477; Romano 2006 [1905-
1907], 900.
25 Carta de Leocadio Trigo a Isidoro Ortiz, 10.03.1905 26 Sobre Enrique Iyambae y Casiano Barrientos,
(AFR). remito a Combès 2005: cap. 8.
también son armas: blancas, y poderosamente podido prosperar: en estos mismos años, fue
efectivas. truncada por la Guerra del Chaco.
Bajo la
Misión de Santa Rosa de Cuevo vista desde el norte, 1898. Constitución de
Fuente: Fotografía en Giannecchini y Mascio 1995 [1898], fotografía n° 83. 1880 que marca
el periodo liberal
(1880-1938)
Sea lo que fuere, en las décadas que siguen el menstruación), los entierros en tinajas, la ves- 529
conflicto, ocurren cambios acelerados en el timenta tradicional de hombres y mujeres. Los
Chaco. Se multiplican las escuelas (con el con- jóvenes empiezan a salir al cuartel y el servicio
siguiente uso del idioma castellano), entran a militar es también, por supuesto, la ocasión de La encrucijada
irresuelta
instalarse varios “collas” (comerciantes, sol- encuentros con la sociedad nacional y con jó- Ciudadanía,
indigeneidad
dados que se quedaron). Nuevas costumbres venes de distintas partes del país, la ocasión de y nacionalidad
y nuevos hábitos aparecen y se afirman muy aprender mejor el idioma español, de apren-
rápidamente. De estos años debemos fechar der más sobre el país y su gente.
por ejemplo la introducción a gran escala del
cultivo de arroz en el Isoso, que llega hoy, en La época de la postguerra marca, en suma, la
muchos casos, a superar el tradicional maíz; verdadera irrupción del Estado boliviano en el
en estos años se generaliza también, al pare- Chaco boliviano. A la vez, al menos exterior-
cer, el uso de la coca entre los chiriguanos.31 mente, parecería ser un periodo de pérdida de
Costumbres y usos antiguos, todavía observa- la indigeneidad. Los chiriguanos se parecen
dos por Nordenskiöld en 1908, desaparecen más al casi criollo Tacu que a la tradicional
por completo: la tembeta (tarugo labial) de los imagen del “indio”; parecen, por así decirlo,
hombres, la yemondia (reclusión de las muje- “menos indígenas”. Es la época de los lamen-
res durante un año en ocasión de su primera tos de antropólogos e historiadores que pien-
san, hasta recientemente, en el siglo XX como
31 Veinte años antes de la guerra, Nino notaba que el de una “brutal desintegración” del mundo
el uso de la coca estaba muy generalizado ya entre chiriguano (Saignes, 1990: 221): “la nación
los chiriguanos (1912: 113); sin embargo, según chiriguana está agonizando: esta raza valero-
Métraux, en 1930 la coca era apreciada pero su uso
no estaba todavía muy difundido (Métraux, 1930,
sa que ha derrotado siempre a los conquis-
380). tadores españoles y que hasta el siglo pasado
se ha mantenido independiente, desaparece y su favor. El mejor ejemplo tal vez sea el, muy
se ‘barbariza’ al contacto del blanco” (Métraux, reciente, de la zona del Isoso, donde los capi-
1929, 1. Itálicas mías). tanes del Alto Isoso se aliaron con el partido
Demócratas y los del Bajo con el Movimien-
La revolución nacionalista de 1952 parece to al Socialismo (MAS): lejos de una verdadera
refrendar de alguna manera este lúgubre pro- elección partidaria o de una ideología compar-
nóstico. La Ley de Reforma Agraria de 1953 tida, se trata en este caso de reavivar, con nue-
diferencia los “grupos selvícolas”, “en estado vos aliados, la muy antigua disputa de poder
salvaje” y que poseen “una organización pri- en ambas zonas.33
mitiva”, de los demás habitantes de los llanos.32
Por lo demás, indios e indígenas se esfuman,
dando paso a la categoría única de “campe- 6. La encrucijada irresuelta
sino”, pero –esta vez–, un campesino que se
favorece con el derecho de voto universal. Escogí para terminar el anterior acápite un
Este logro no puede ocultar que la situación ejemplo muy reciente, y lo escogí a propósi-
sigue siendo la misma: los “indígenas” tienen to: porque si bien muchas cosas parecen haber
que dejar de serlo en el papel y convertirse en cambiado favorablemente para los indígenas
Un amor
“campesinos” para acceder a la ciudadanía. en las últimas décadas, en otros aspectos la si-
desenfrenado tuación parece más bien haberse estancado, o
por la libertad
A partir de esta fecha, los nuevos “campesi- haber incluso empeorado.
Antología de la
historia política nos” constituyen un potencial de votos útiles
de Bolivia
(1825-2020)
para los distintos partidos políticos que pug- El retorno de la democracia en el país en 1982
nan por el poder. Tal como las autoridades se es el punto de partida para la eclosión de los
530 acordaron de la “bolivianidad” de los chirigua- movimientos y organizaciones indígenas en
nos a raíz de la Guerra del Chaco, los partidos las tierras bajas bolivianas. Pese a los lamen-
se mueven afanosamente en cada elección para tos de los antropólogos y demás fúnebres
Tomo I captar los votos de los nuevos ciudadanos, y predicciones, pese a los cambios inevitables
1825-1952
eso hasta la actualidad. Distribuyen gorras, que atraviesa cualquier sociedad y pese al ró-
poleras, alimentos; regalan coca y alcohol, tulo de “campesinos” que les fue aplicado por
prometen hasta antenas parabólicas o postas décadas, los indígenas demuestran que siguen
sanitarias. Reparten sus dádivas como antaño estando vivos. Muy vivos, de hecho. Con o
misioneros o conquistadores sus baratijas, y la sin el apoyo de la profusión de organizacio-
comparación no es casual: “campesino” o no, nes no gubernamentales indigenistas que
ciudadano o no, el indígena sigue siendo un surgen en esta misma época, nace la Central
“indio” supuestamente fácil de engañar, fácil Indígena del Oriente Boliviano (hoy Con-
de convencer, incapaz de pensar por sí mismo. federación Indígena de Bolivia - CIDOB) en
Pero evidentemente, a su vez, los guaraníes 1982; nace entre los ex chiriguanos la Asam-
explotan a su favor esta credulidad. No sólo blea del Pueblo Guaraní en 1987; en 1990 la
aceptan los dones sin comprometer su voto primera Marcha Indígena por el Territorio y
(como antaño las baratijas sin convertirse, o la Dignidad propulsa a los indígenas de los
bien los títulos oficiales sin someterse): tam- llanos en el escenario político nacional. Se
bién traban alianzas con los diferentes frentes abandonan los etnónimos despectivos here-
políticos para utilizarlos como instrumentos a dados de la Colonia: los indios devienen en
32 Texto de la ley consultado en https://www.lexivox. 33 Sobre esta rivalidad entre Alto y Bajo Isoso, que es-
org/norms/BO-DL-19530802.xhtml (consultado el tructura toda la vida política de la capitanía, remito
2 de junio de 2020). a Combès, 2005.
Segundo periodo
Bajo la
Constitución de
1880 que marca
Indios tobas de Teyu, orilla izquierda del Pilcomayo. el periodo liberal
Fuente: Fotografía del libro Combès y Salaun eds. 2018, 122. (1880-1938)
531
indígenas, los chiriguanos ya son guaraníes. insistir demasiado en las diferencias que se-
Indígenas y guaraníes que votan, que ejercen paran a “los indígenas” entre sí). Más aún,
sus derechos: ¿ciudadanía plena por fin? Más al mismo tiempo que la CIDOB se proclama La encrucijada
irresuelta
que antes, sin duda. Pero algún malestar tam- “confederación” a nivel nacional, los indíge- Ciudadanía,
indigeneidad
poco está ausente. nas de las tierras altas optan por otro nombre y nacionalidad
para identificarse: son ahora “originarios”
Con las reformas propugnadas por el primer –acaso por no querer ser identificados con
gobierno de Gonzalo Sánchez de Lozada en los ex chunchos– y las instituciones guberna-
los años 1990, son reconocidos los territorios mentales ratifican la diferencia, con apelacio-
indígenas (TCO: Territorios Comunitarios nes como “Ministerio de Asuntos Indígenas y
de Origen), las lenguas y las culturas indíge- Pueblos Originarios”, por ejemplo.
nas a través de la Ley de Reforma Educativa,
son reconocidas en fin las identidades nati- Más aún, con la Segunda Reforma Agraria,
vas tanto tiempo soslayadas. Sin embargo, por ejemplo (1996), existen leyes especiales
en el plano político, es decir en el plano de para indígenas; existen también curules en la
ejercicio de los derechos ciudadanos, un hia- Asamblea Legislativa nacional (ahora “pluri-
to subsiste. De hecho, al representar a “los nacional”) y en las asambleas departamentales
indígenas” del país, la CIDOB recrea de al- que son exclusivamente reservados para los
guna manera la dicotomía entre “lo indio” y indígenas, sin correlación con el tamaño de
“lo blanco”. Por positivo que sea, se trata del la población a quienes deben representar. Los
(re)establecimiento y de la afirmación de una indígenas pueden tener más o menos derechos
diferencia, de una discriminación entre dos que los demás ciudadanos: son en todo caso
clases de ciudadanos (y que tampoco parece derechos diferentes, que plantean el problema
Un amor
desenfrenado
por la libertad
Antología de la
historia política
de Bolivia Comunidad de Ibasiriri, Isoso, 1998, Kathleen Lowrey.
(1825-2020) Fuente: Fotografía del libro Combès 2005a, 79.
532
de una verdadera ciudadanía abierta e igual acuña el concepto de “indígena originario cam-
para todos. pesinos” (sic), volviendo a una asimilación en-
Tomo I tre “indígena” (y originario) y “campesino” y
1825-1952
Podría pensarse que esta diferencia reconoci- acercando de nuevo la nueva categoría consti-
da es precisamente la que permite una inte- tucional a una clase social. Al mismo tiempo,
gración sin aculturación ni pérdida de iden- las Tierras Comunitarias de Origen se trans-
tidad, para finalmente reconciliar ciudadanía forman en TIOC, “Territorios Indígena Origi-
y indigeneidad. Es verdad en un sentido. Sin nario Campesinos”, algo que provoca bastante
embargo, en la práctica, no parece funcionar malestar entre los “indígenas” de tierras bajas,
tan idealmente, o al menos no siempre. pues podría significar la pérdida de sus terri-
torios abriéndolos a la colonización masiva de
De hecho, a partir de 2005, la era plurinacio- los “campesinos” andinos. El conflicto salió a
nal inaugurada por el gobierno de Evo Mora- la luz pública en el sonado caso del proyecto
les y su discurso indigenista a ultranza enredan de apertura de una carretera en el Territorio
de nuevo las cosas. La nueva Constitución Po- Indígena y Parque Nacional Isiboro-Sécure
lítica del Estado, promulgada en 2009, reco- (TIPNIS), en el que se opusieron campesinos (a
noce en su artículo 5° a 36 lenguas y/o nacio- favor) e indígenas (en contra, y no consultados
nes –la formulación no es clara– indígenas en previamente), evidenciando que la categoría
el país.34 Sin embargo, la misma carta magna única ideada por el gobierno no tiene asidero
en la realidad (Cf. Cloud et al., 2013, 73).
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irresuelta
Ciudadanía,
indigeneidad
y nacionalidad
TERCER PERIODO
El más grande empresario minero de Bolivia (Llallagua, Catavi, Uncía y Huanuni) y uno de los más importantes del
mundo durante la Segunda Guerra Mundial, con su empresa The Patiño Mines and Enterprises Consolidated In-
corporated. Probablemente, la figura más destacada en el ámbito de las grandes compañías mineras y financieras
(Banco Mercantil) que dominaron la economía boliviana durante buena parte del siglo XX.
“Paz y Libertad: esas son las bases de cualquier Becerra1 (1937-1939) pretendía instituir un Tercer periodo
existencia digna. Sin paz y libertad, no pueden
nuevo orden constitucional y cambiar algunos Bajo el debate
progresar los pueblos, no hay felicidad constitucional de
ni tranquilidad para la humanidad. principios esenciales que fueron arraigados des- 1938 que incorpora
el régimen social
La paz del individuo no es posible, sin paz de la constitución bolivariana de 1826, así en el (1938-1952)
en su pueblo. Pero la paz sin libertad, no es paz”. debate constitucional de 1938 se incorpora al
Konrad Adenauer, 1952
régimen social como esencia de sus postulados 539
L
padre alemán y madre española, considerado hé- de 1938
a décimo primera constitución de 1880 roe militar en la Guerra del Chaco, conflicto entre (1938-1952)
Un amor Artículo 17. La propiedad es inviolable, siempre que llene una función social; la expropiación podrá
desenfrenado imponerse por causa de utilidad pública, calificada conforme a ley y previa indemnización justa.
por la libertad
Artículo 23. Toda persona goza de los derechos civiles; su ejercicio se regla por la ley civil.
Antología de la
historia política
de Bolivia
Artículo 25. No existen la pena de infamia y la de muerte civil. La pena capital se aplicará únicamente
(1825-2020) en los casos de asesinato, parricidio y traición a la patria, entendiéndose por traición la complicidad con
el enemigo durante el estado de guerra extranjera.
542 Artículo 26. Los caminos abiertos por particulares serán de uso público. Una ley especial reglamentará
el ejercicio de este derecho, así como la colaboración del Estado y de los particulares para su conserva-
ción.
Tomo I
1825-1952 Artículo 28. Los principios, garantías y derechos reconocidos en esta Constitución no podrán ser alte-
rados por las leyes que reglamenten su ejercicio.
Artículo 30. Los que ataquen derechos y garantías constitucionales quedan sujetos a la jurisdicción
ordinaria.
Trabajo y Seguridad Social. El trabajo y el ca- cional. La ley de declaratoria de la reforma será Bajo el debate
constitucional de
pital, como factores de la producción, gozan enviada al Ejecutivo para su promulgación. 1938 que incorpora
el régimen social
de la protección del Estado (Articulo 121). (1938-1952)
El Estado dictará medidas protectoras de la
salud y de la vida de los obreros, empleados y Bibliografía 543
trabajadores campesinos; velará porque éstos
tengan viviendas salubres (Articulo 124). Abecia Valdivieso, Valentin, 1999. Historia
– Régimen Familiar. Se establece a protec- del Parlamento. Tomos I, II, III. La Paz. El debate
constitucional
ción a la unidad familiar. El matrimonio, la Barragán, Rossana, 2006. Asambleas consti- de 1938
(1938-1952)
familia y la maternidad están bajo la protec- tuyentes. Ciudadanía y elecciones, con-
ción de la ley (Articulo 131). La ley no re- venciones y debates, Bolivia, Muela del
conoce desigualdades entre los hijos, todos Diablo.
tienen los mismos derechos (Articulo 132). Donoso Torres Vicente, 1947. Reformas
– Régimen Cultural. Prioriza la educación y Constitucionales. Talleres Gráficos Ga-
la instrucción: a. La educación es la más alta marra. Yanacocha 612. La Paz.
función del Estado. b. La enseñanza pública Klein, Herbert, 1968. Orígenes de la revo-
se organizará según el sistema de la escuela lución nacional boliviana. La crisis de la
única. c. La obligación de asistencia escolar generación del Chaco. Librería editorial
es general desde los 7 años hasta los 14 años. Juventud. La Paz.
d. La instrucción primaria y secundaria del Quisbert, Ermo, 2010. “¿Que es el Constitu-
Estado es gratuita (Articulo 154). cionalismo Social?”. Disponible de ma-
– Régimen agrario y campesino. Se estable- nera digital en: http://jorgemachicado.
ce el reconocimiento de la estructura cam- blogspot.com/2010/05/coso.html Con-
pesina. El Estado reconoce y garantiza la sulta: Jueves, 18 enero de 2021.
existencia legal de las comunidades indígenas Legislación Boliviana - Compendio de leyes
(Articulo 165). Asimismo, el Estado fomenta- de 1825-2007, CD elaborado por la Bi-
rá la educación del campesino, mediante nú- blioteca y el Archivo Histórico del Hono-
cleos escolares indígenas que tengan carácter rable Congreso Nacional.
Anexo
Tabla 1
Breves diferencias entre constitucionalismo Liberal y Social
544
Tomo I
1825-1952
La diversidad latinoamericana antes y después
de la crisis de 1929
Luis Bértola
Programa de Historia Económica y Social
Facultad de Ciencias Sociales
Universidad de la República, Uruguay
E
constitucional de
l objetivo de este artículo es presentar, sición tuvo lugar, hasta la construcción de un 1938 que incorpora
el régimen social
de manera muy sintética y esquemá- nuevo orden internacional, que daría lugar a la (1938-1952)
tica, las diferentes trayectorias de las mayor expansión de la economía mundial, que
economías latinoamericanas durante un siglo conocemos como la Edad de Oro del capitalis- 545
de vida independiente, para luego abordar los mo, entre, aproximadamente, 1950 y 1973.
resultados de las décadas siguientes vinculados
a las formas en que hicieron frente a la crisis Si bien la crisis de 1929 y la depresión de los La diversidad
latinoamericana
global de los años de 1930. Si bien hay rasgos años 30 constituyen un momento de quiebre antes y después
de la crisis de 1929
comunes a los países latinoamericanos, el én- muy importante para las economías latinoa-
fasis de este artículo estará puesto en identifi- mericanas, también es cierto que algunas de
car la diversidad de las trayectorias regionales, ellas experimentaron la crisis global tempra-
en base a la tipología de países utilizada por namente, ya sea desde la crisis de 1913, o des-
Bértola y Ocampo (2013). de los inicios del período de entreguerras.
En las sucesivas secciones este artículo abor- Esta segunda Revolución Industrial tuvo un
dará: los cambios globales que tuvieron lugar enorme impacto en el desarrollo de la eco-
hasta 1930 (II); la tipología a ser utilizada para nomía mundial. Surgirían una gran cantidad
el análisis de las distintos países (III); algunas de nuevos bienes de consumo y una mejora
características de las guerras de Independen- sustantiva en la calidad, precisión y potencia
cia (IV); las características socio-instituciona- de los bienes de capital. Muy particular fue el
les del primer siglo de vida republicana (V); impacto en el desarrollo del transporte, tan-
el desempeño económico y social durante ese to terrestre con el ferrocarril, como marítimo
primer siglo, en términos de población, pro- mediante los navíos a vapor, que redujeron
ducto y diversos indicadores sociales (VI); el enormemente los tiempos de traslado de bie-
desempeño económico social en las décadas nes y personas (Bértola y Williamson 2005).
Un amor
posteriores a la crisis. Se cierra el artículo con
desenfrenado unas breves conclusiones y reflexiones. Esta revolución de los transportes permitió
por la libertad
abaratar de forma importante el acceso a ma-
Antología de la
historia política terias primas y alimentos, que demandaban las
de Bolivia 1. Los cambios globales en el largo sociedades industrializadas, tanto para alimen-
(1825-2020)
siglo 1810-1930 tar las cadenas industriales, como para abas-
546 tecer de alimentos a la creciente población
Si bien existen discusiones no del todo salda- urbana.
das sobre si existía y cuán importante era el
Tomo I liderazgo tecnológico y económico de Europa Las transformaciones sociales fueron de gran
1825-1952
frente a Asia antes de la Revolución Industrial, magnitud. La fuerte expansión del trabajo
no quedan dudas de que, a partir de ese proce- asalariado, la concentración en las ciudades,
so, la economía mundial habría de presenciar la expansión de los servicios y poco a poco
un permanente aumento de las desigualdades el surgimiento de distintas políticas sociales
entre países, que podría ser simplificada como para enfrentar los nuevos riesgos sociales, la
entre Occidente1 y el resto del mundo. expansión del sistema educativo, así como el
rol de las universidades y el indudable rol de
La Revolución Industrial no fue un proceso la ciencia al servicio de la solución de pro-
rápido ni breve. Según Mokyr (2010), este blemas.
abarcó muy amplias esferas de la vida social
y se prolongó durante todo el siglo XIX. Así, Desde el punto de vista político, se consolida
lo que los estudiosos de los llamados paradig- la caída de las instituciones del antiguo régi-
mas tecno-económicos llaman la Primer Re- men y se comienzan a consolidar los sistemas
volución Industrial, basada principalmente electorales y los formatos democráticos repre-
en la introducción de la máquina herramienta sentativos, aunque la democracia moderna re-
movida por la energía a vapor, se anudó con cién comienza a consolidarse en algunos paí-
ses a inicios del Siglo XX.
1 En este caso, Occidente se identifica con 12 paí-
ses de Europa Occidente y las economías de nuevo
asentamiento: Australia, Canadá, Nueva Zelanda y
La economía capitalista de mercado es clara-
Estados Unidos. mente dominante en los países industriales y
Tercer periodo
La Porteña, la primera locomotora del Ferrocarril Oeste. Argentina” c. 1873, Antonio Pozzo. Bajo el debate
Fuente: Archivo General de la Nación (Argentina). Dominio Público, disponible en Wikimedia Commons. constitucional de
1938 que incorpora
el régimen social
(1938-1952)
la creación de mercados de tierras, capitales y nuevas formas de relacionamiento, que algu-
mano de obra se extiende a amplios territorios nos llamaron imperio informal. 547
de la economía mundial.
A su vez, desde fines del siglo XIX comenzó
La Revolución Industrial fue seguida de pro- a surgir Estados Unidos como una nueva po- La diversidad
latinoamericana
fundas transformaciones sociales y políticas a tencia mundial, que habría de ocupar el rol antes y después
de la crisis de 1929
nivel global. Si bien la Revolución Industrial hegemónico progresivamente, aunque de ma-
terminó siendo un fenómeno europeo luego nera explícita a partir de la segunda posguerra
trasladado a Norteamérica, fue indudable el mundial.
despliegue del poder hegemónico del Reino
Unido en el nuevo orden mundial. Desde el
punto de vista económico, se produce un enor- 2. Una tipología para interpretar
me avance del comercio global, aunque no el desarrollo latinoamericano
siempre de la mano de la libertad de comercio,
ya que políticas proteccionistas se mantuvie- Siguiendo a Cardoso y Pérez Brignoli (1978)
ron vigentes en muchos países. El sistema mo- y Bértola y Ocampo (2013) discutiré el desa-
netario internacional estuvo dominado por el rrollo latinoamericano a partir de una tipología
Patrón Oro hasta inicios de la Primera Guerra que, de forma simplificada, ubica tres grupos
Mundial, debilitándose progresivamente hasta de países (por una discusión más detallada de la
su derrumbe en la década de 1930. tipología, ver Bértola y Ocampo 2013, 24-29):
Las relaciones internacionales siguieron es- Grupo 1: los países indoamericanos. Son
tando determinadas por relaciones de poder aquellos en los que existía una numerosa
económico, político y militar, pero las viejas población indígena, con sofisticado desarro-
formas de poder colonial fueron dando paso a llos culturales y organizaciones sociales, que
predominantemente ocupaban regiones de Grupo 3: los países euroamericanos, aquellos
mucha diversidad climática y topográfica. En en los que la población indígena era relativa-
estas regiones la combinación de hacienda y mente poco numerosa y mostraba niveles de
minería fue dominante y la población indíge- desarrollo menor, y en los que la principal
na se mantuvo como mayoritaria, a pesar de fuente de crecimiento demográfico fue la in-
la inmigración española y la incorporación de migración europea, y con fuerte predominio
mano de obra esclava de África y Asia. Los del trabajo asalariado libre. Los países que in-
países comprendidos en este grupo son Bo- tegran este grupo son Argentina y Uruguay,
livia, Colombia, Ecuador, El Salvador, Gua- aunque también puede integrarlo Chile, a pe-
temala, Honduras, México, Nicaragua, Para- sar de tener diferencias importantes con los
guay y Perú. dos primeros. Recientemente, Bértola (2018)
ha catalogado a Chile como Indo-euroameri-
Grupo 2: los países afroamericanos. Son aque- cano (ver especialmente en la Sección VII).
llos países generalmente llanos y tropicales, en
los que la mano de obra esclava constituyó la Esta distinción tiene un fuerte componente
principal fuente de crecimiento demográfico, étnico, pero no es la etnia en sí lo que es deter-
dedicados a la economía de plantación. Los minante, sino el tipo de relaciones sociales que
Un amor
países comprendidos en este grupo son Brasil, predomina en estas distintas sociedades y que,
desenfrenado Cuba, Panamá, República Dominicana y Ve- de manera extremadamente simple, podríamos
por la libertad
nezuela. identificar con las relaciones de subordinación
Antología de la
historia política
de Bolivia Cuadro 1
(1825-2020)
Estructura de la población en torno a 1800 (%)
Bajo el debate
constitucional de
1938 que incorpora
el régimen social
(1938-1952)
entabladas entre las comunidades indígenas y mucha nitidez las diferencias en la estructura La diversidad
latinoamericana
las distintas elites de hacendados y mineros, étnica de la población que, como veremos, con- antes y después
de la crisis de 1929
en el primer grupo, y la esclavitud y el trabajo llevan diferentes tipos de relaciones sociales.
asalariado, en los otros dos grupos, respecti-
vamente.
3. Un breve apunte sobre las guerras
La tipología es más compleja y siempre pre- de Independencia
senta muchas dificultades, ya que países gran-
des tienen regiones con características dife- A partir de la tipología presentada anterior-
rentes, que pueden cuadrar en los distintos mente, iniciamos en esta sección el recorrido
grupos. De todas formas, esta tipología resulta histórico de los distintos grupos de países.
ser muy útil, especialmente para el estudio del
período que trataremos en este artículo y nos La Independencia de las Repúblicas latinoa-
ayudará a presentar la información de manera mericanas tuvo lugar en el marco de los proce-
más compacta. sos antes señalados y se vio estimulada por dos
hechos más específicos: la Independencia de
El Cuadro 1 presenta de manera sintética la las 13 colonias norteamericanas y las Guerras
estructura de la población en las diferentes re- Napoleónicas.
giones y grupos de lo que serían los países inde-
pendientes: allí se muestra cuánto más alta era Las potencias coloniales ibéricas participaron
la densidad de la población en el Grupo 1, y con marginalmente de la Revolución Industrial y
no pudieron liderar la inserción de sus colo- status quo colonial. En las zonas más peri-
nias en el nuevo orden mundial. Se abrió en- féricas de la estructura colonial, como en el
tonces lo que Lynch (2008) llamó “la segunda Río de la Plata, el proceso fue más rápido y
conquista” y la gestación de un nuevo pacto expeditivo.
colonial, que Cardoso y Pérez Brignoli (1979)
habían llamado la transición hacia el capitalis-
mo periférico. 4. Cien años de transformación
socio-institucional
Más aún, las colonias latinoamericanas venían
perdiendo peso relativo al ser comparadas con La destrucción del orden colonial dio lugar a
el desarrollo de los EUA, lo que no se debía a la un complejo y prolongado proceso de cons-
disponibilidad de riquezas, sino a las caracte- trucción de un nuevo orden a partir de estruc-
rísticas del régimen institucional, las impreci- turas económicas poco integradas y en medio
sas y arcaicas formas de propiedad de la tierra, de un importante involucramiento interna-
las limitaciones del comercio monopólico, las cional. Las estructuras estatales que se ter-
trabas burocráticas, la creciente extracción de minaron por conformar décadas después no
recursos con fines bélicos y la muy poca inver- estaban en las cabezas de los revolucionarios.
Un amor
sión en infraestructura, educación y servicios A su vez, la violencia y los cuerpos militares
desenfrenado diversos por parte de los poderes coloniales. aparecen como un rasgo estructural de la vida
por la libertad
Las economías que mejor se desempeñaban de estos nuevos países, acaparando en prome-
Antología de la
historia política eran aquellas más periféricas, menos someti- dio el 50 por ciento de los presupuestos (Hal-
de Bolivia
(1825-2020)
das a los controles metropolitanos y con más perin 2008[1969], 136-138), lo que resulta de
posibilidades de participar del comercio con la interacción entre conflictos civiles e inter-
550 otras potencias. nacionales y se anuda con frecuentes cambios
constitucionales (Dye 2006).
Las Reformas Borbónicas y Pombalinas de la
Tomo I segunda mitad del siglo XVIII, más que pro- Se conoce como las reformas liberales al pro-
1825-1952
mover un cambio del sistema, promovieron ceso mediante el cual se crean los mercados de
una profundización del mismo, incorporando tierra y de fuerza de trabajo, es decir, merca-
nuevos actores, regiones y productos al viejo dos en los que la tierra puede ser comprada y
sistema, satisfaciendo la voracidad fiscal gene- enajenada, y en los que la fuerza de trabajo es
rada por la situación bélica en Europa. libre y móvil.
El ciclo de las guerras de Independencia, que Ese proceso fue tortuoso especialmente en las
duró aproximadamente 16 años, produjo una sociedades indoamericanas (Grupo 1), donde
gran destrucción de recursos humanos y ma- existía una compleja trama de terratenientes,
teriales (unos 800.000 muertos de 20 millones antiguas haciendas, tierras ejidales y públicas
de habitantes, ganado utilizado para sostener en general, tierras en poder de la iglesia y otras
a los ejércitos, minas abandonadas e inunda- bajo control de las comunidades campesinas.
das, destrucción de las fortunas de las elites). La creación de estos mercados está fuerte-
La guerra de Independencia fue más cruenta mente interrelacionada con la creación de los
y prolongada en los centros administrativos estados nacionales y la consolidación de sus
del imperio y donde las elites coloniales eran capacidades coercitivas.
más fuertes y donde residía la mayor parte de
la población indígena, lo que significaba una Este proceso se produjo en medio de fuertes
mayor amenaza por las connotaciones socia- cambios en la estructura de la propiedad, vio-
les y étnicas, que podían poner en jaque el lentos procesos de apropiación y expropiación,
el surgimiento de nuevas elites, especialmente forma de regímenes oligárquicos. Esta coali-
nuevos sectores comerciales vinculados al co- ción estaba basada en el poder de los viejas y
mercio con las nuevas potencias hegemónicas nuevos agentes que detentaban la propiedad
y las nuevas elites políticas y militares. En estas de los recursos naturales (tierras y minas) y el
regiones, tanto liberales como conservadores poder político local de los partidos y caudillos
coincidían en temer más a los sectores popu- políticos, con el creciente peso y capacidad de
lares que a posibles excesos del poder central. cooptación del capital extranjero y los agentes
Solamente un dos por ciento de la población del comercio internacional. Así se consolidó el
tenía derecho al voto a mediados del siglo XIX pacto neocolonial.
(Dye 2006, 181).
Vinculado a la afirmación de los derechos de
Desde el punto de vista de la propiedad de la propiedad y las estructuras de poder y el es-
tierra, la expansión de terratenientes y la ad- trechamiento de los vínculos comerciales con
quisición de tierras por parte de comerciantes la economía crecientemente globalizada, se
y letrados urbanos no logró reducir las tierras produjo una fuerte expansión de las tierras in-
bajo control de las comunidades indígenas. tegradas a los circuitos comerciales, basado en
tres procesos: la apropiación privada de tierras
En el plano laboral, los cambios fueron muy públicas, el aumento de la productividad de las
lentos y contradictorios, ya que no solamente tierras ya antes explotadas y la expropiación de Tercer periodo
el tributo indígena fue reinstaurado luego de las tierras de las corporaciones eclesiásticas y Bajo el debate
constitucional de
su eliminación, sino que el sistema de traba- de las comunidades indígenas. 1938 que incorpora
el régimen social
jo rotatorio conocido en el área andina como (1938-1952)
mita llegó a aplicarse en regiones en las que Como dice Glade: “La difusión de las regiones
no había existido en tiempos de la colonia y el de producción capitalista en América Latina 551
sistema de casta demora en desaparecer de los no eliminó todas las propiedades corporativas
textos constitucionales. precapitalistas, las propiedades comunales, los
cultivadores campesinos y los derechos con- La diversidad
latinoamericana
Las regiones afroamericanas también mostra- suetudinarios de usufructo de las tierras de los antes y después
de la crisis de 1929
ron un lento proceso de transformación de las latifundios, pero la nueva matriz social y eco-
relaciones sociales. Solamente en el caso hai- nómica de la época dio un significado en gran
tiano hubo una revolución social. A diferencia parte diferente a la posición de todos estos
de las economías todavía coloniales de otras vestigios culturales.” (Glade 1981, 30)
potencias europeas, en las que la esclavitud fue
abolida por decisión de las metrópolis, en las Los caminos que siguió América Latina ha-
Repúblicas independientes de América Latina cia la conformación de un mercado de trabajo
se decretó la libertad de vientres y se prohibió asalariado fueron muy diversos. En las econo-
el tráfico de esclavos luego de la Independen- mías del Grupo 3, especialmente en el Río de
cia, pero la abolición de la esclavitud se produ- la Plata, pero también de manera marginal en
jo recién en la segunda mitad del siglo y más muchas otras regiones, el flujo principal fue la
tardíamente cuanto más importante era el peso inmigración europea y su aporte posterior al
de la economía esclavista. Más aún, la abolición crecimiento vegetativo. Junto con la inmigra-
demoró todavía más cuando su importancia se ción se produjo una importante transferencia
combinaba con el carácter aún colonial, como tecnológica y de cultura institucional.
en los casos de Brasil, Cuba y Puerto Rico.
En las otras regiones, las principales fuentes de
Será recién hacia el último cuarto del siglo XIX oferta de mano de obra asalariada fueron do-
que el poder del Estado se consolide bajo la mésticas. Una de esas fuentes fue la expulsión
de mano de obra de la economía familiar, o la no despreciable es el de los pequeños y media-
captación de mano de obra estacional. Pero no nos campesinos, y un tercero es el de la gran
fue esa la principal fuente. Una fuente impor- propiedad, sin mayor presencia de comuni-
tante fue el excedente de mano de obra que dades campesinas organizadas y con distintas
se venía generando en diferentes regiones ru- combinaciones de trabajo libre y trabajo bajo
rales por la presión demográfica. Sin embar- coerción. Estos dos últimos escenarios son los
go, existían diversos mecanismos coercitivos que se combinaron predominantemente en las
por parte de hacendados para retener mano economías del Grupo 3.
de obra cautiva. Sin excluir la inmigración de
chinos e indios en condición de servidumbre, Las economías afroamericanas del Grupo 2
las formas coercitivas hacia la población rural mostraron una realidad muy diferente, me-
permanecieron durante mucho tiempo, parti- diante la combinación de esclavos liberados,
cularmente donde la población indígena era las migraciones internas de mano de obra in-
importante. dígena y mestiza y mediante inmigración eu-
ropea, como en el caso de los colonos italianos
Glade (1991, 33) sostiene que solamente se a San Pablo en Brasil y la mano de obra de la
pueden hacer tres generalizaciones: la escla- India, China y otros países asiáticos en Perú.
Un amor
vitud desapareció en todos los países, con la
desenfrenado abolición final en los dos países, Brasil y Cuba,
por la libertad
que la habían mantenido hasta finales del Siglo 5. El desempeño económico hasta 1929
Antología de la
historia política XIX; que la propia heterogeneidad de los mer-
de Bolivia
(1825-2020)
cados de trabajo reflejaba que no existía nada Sobre el trasfondo esquemáticamente pre-
semejante a un mercado de trabajo moderno sentado anteriormente, podemos ahora mirar
552 que interconectara las diferentes regiones y cómo se desempeñaron estas economías a lo
procesos productivos; y que los mercados de largo de los poco más de 100 años de vida in-
trabajo urbanos funcionaban con mucha más dependiente, hasta 1929.
Tomo I libertad que los rurales. A pesar de ellos el
1825-1952
trabajo asalariado continuó expandiéndose y Población
los salarios reales mostraron cierta tendencia
creciente, aunque menos, como se verá, que Como se muestra en el Cuadro 1, la población
otros ingresos. de América Latina creció a una tasa promedio
de 1,5 por ciento anual, pero el crecimiento
De la articulación entre formas de propiedad fue mucho más importante a partir de la dé-
de la tierra y tipos de relación laboral, surgen cada de 1870 en todas las regiones. Pero este
distintos escenarios de la vida rural (Bauer crecimiento fue muy desparejo. Los países
1991). En los países del Grupo 1 aparecen tres indoamericanos, que, por otra parte, eran los
grandes escenarios. El escenario dominante que concentraban la mayor parte de la pobla-
es el del eje de la relación haciendas-comuni- ción al inicio de la vida independiente, fueron
dades campesinas. Aquí coexisten formas más los que menos crecieron, en tanto la dinámica
autárquicas con formas de mayor integración poblacional, en parte gracias a la inmigración,
a los circuitos mercantiles, sin por ello basar- fue mucho mayor en los países del Grupo 3,
se en mano de obra móvil y plenamente libre. quedando el Grupo 2 en una situación inter-
Las comunidades indígenas también sufrieron media. Al cabo de estos más de 100 años, la
transformaciones y un proceso de hibridación, población del Grupo 1 pasó de duplicar a la
y sufrieron el permanente embate para despo- del Grupo 2 a ser similar. Por otra parte, a pe-
jarlas de sus tierras y forzar a sus miembros sar de su dinámica, el Grupo 3 no llegó a de
hacia el mercado de trabajo. Otro escenario representar la quinta parte del total.
Tercer periodo
Bajo el debate
constitucional de
1938 que incorpora
el régimen social
(1938-1952)
Cuadro 2 La diversidad
latinoamericana
Población de América Latina, 1820-1929
antes y después
de la crisis de 1929
Millones Estructura (%) Crecimiento anual (%)
1820 1870 1929 1820 1870 1929 1820-1870 1970-1929 1820-1929
Grupo 1 12.017 19.422 40.023 62,1 52,7 40,2 0,96 1,23 1,11
Bolivia 1.100 1.495 2.370 5,7 4,1 2,4 0,62 0,78 0,71
Colombia 1.206 2.392 7.821 6,2 6,5 7,9 1,38 2,03 1,73
México 6.587 9.219 16.876 34,0 25,0 16,9 0,67 1,03 0,87
Perú 1.317 2.606 5.396 6,8 7,1 5,4 1,37 1,24 1,30
Grupo 2 5.982 13.336 42.104 30,9 36,2 42,3 1,62 1,97 1,81
Brasil 4.507 9.797 32.894 23,3 26,6 33,0 1,57 2,07 1,84
Costa Rica 63 137 490 0,3 0,4 0,5 1,57 2,18 1,90
Cuba 605 1.331 3.742 3,1 3,6 3,8 1,59 1,77 1,69
Venezuela 718 1.653 3.259 3,7 4,5 3,3 1,68 1,16 1,40
Grupo 3 1.360 4.084 17.479 7,9 11,1 17,5 2,22 2,50 2,37
Argentina 534 1.796 11.592 2,8 4,9 11,6 2,46 3,21 2,86
Chile 771 1.945 4.202 4,0 5,3 4,2 1,87 1,31 1,57
Uruguay 55 343 1.685 0,3 0,9 1,7 3,73 2,73 3,19
Total 19.359 36.842 99.606 100,0 100,0 100,0 1,30 1,70 1,51
Fuente: Maddison (2008) adaptado a nuestra tipología.
Estos cambios en la estructura poblacional escenario de muy lento crecimiento econó-
constituyen una continuidad con lo sucedi- mico, o aún estancamiento. Al igual que en
do en las etapas finales del período colonial, el caso de la población, el crecimiento fue
cuando se produce un desplazamiento hacia la desparejo.
economía atlántica y del Caribe, a expensas de
las zonas montañosas y mineras que fueron el Como muestra el Cuadro 3, durante el pri-
centro de la economía colonial. mer medio siglo de vida independiente, el
crecimiento económico fue de apenas el 0,3
PIB per cápita por ciento, pero el Grupo 1 quedó estancado,
el Grupo 2 creció al promedio y el Grupo 3
Al iniciarse la vida independiente, América mostró un crecimiento bastante alto, aunque
Latina tenía más recursos en términos de po- su escasa población hizo que tuviera poco
blación y riquezas naturales que la América impacto en el conjunto. Existía ya una im-
del Norte (Engerman y Sokoloff 1997, 260), portante disparidad al inicio del proceso: el
por lo que la ruptura del orden colonial –que Grupo 3 tenía niveles de ingreso per cápita
estaba de espaldas al iluminismo, al libre co- superiores al Grupo 1 y muy superiores al
mercio y a la revolución industrial– prometía Grupo 2. Esa disparidad creciente se muestra
Un amor
abrir un período de esplendor. en el aumento del coeficiente de variación del
desenfrenado PIB per cápita. Al cabo del período, el Grupo
por la libertad
Sin embargo, lo que encontramos en las dé- 2 había alcanzado niveles de ingreso similares
Antología de la
historia política cadas iniciales de la vida independiente es un a los del Grupo 1.
de Bolivia
(1825-2020)
554
Tomo I
1825-1952
Colonas-italianas, c. 1890-1910.
Fuente: Imagen extraída de “Far l’America”, dominio público, disponible en: Wikimedia Commons.
En el período 1870-1929 la tasa de creci- siglo de crecientes desigualdades entre las re-
miento se quintuplicó, lo que puede ser pues- giones de América Latina. Al final del período
to en relación con varios de los factores que los niveles de ingreso per cápita del Grupo 3
hemos mencionado: la expansión e indus- son claramente superiores y las economías de
trialización de Occidente, la continuidad de herencia esclavista se hunden con los niveles
la revolución industrial y su impacto en los relativos más bajos.
transportes y las infraestructuras, la existen-
cia de una potencia hegemónica mundial y Si se pone ahora el foco en el desempeño
un orden monetario global, tanto como las relativo al de los países más avanzados de
transformaciones domésticas en el plano de Occidente, se encuentra que las décadas que
la consolidación del Estado, los derechos de siguieron a la Independencia fueron décadas
propiedad y las diversas infraestructuras. Sin de divergencia, es decir, fueron décadas en las
embargo, si bien el crecimiento se aceleró en que América Latina se distanció aún más de
todas las regiones, siguió haciéndolo de for- los ya más altos niveles de ingreso de Occi-
ma desigual. dente. Ese no fue el caso del Grupo 3, que
mantuvo posiciones, pero sí el de los otros
Ahora es el Grupo 1 el que tuvo un buen des- dos grupos, especialmente el 1. A partir de
empeño debido a la fuerte dinámica de la eco- 1870 y hasta 1929, lo que se constata es una
nomía minera, creciendo al mismo alto ritmo situación de estabilidad, pero nuevamente, Tercer periodo
que el Grupo 3. El Grupo 2 es el que crece ese promedio esconde realidades muy dife- Bajo el debate
constitucional de
menos, aunque igualmente duplica la tasa de rentes: mientras que el Grupo 3 acorta dis- 1938 que incorpora
el régimen social
crecimiento del medio siglo anterior. De esto tancias de manera importante, el Grupo 1 (1938-1952)
resulta que el coeficiente de variación siguió mejora levemente, pero son las economías de
aumentando, lo que consolida la visión de que pasado esclavista las que divergen de manera 555
el primer siglo de vida independiente fue un importante.
Cuadro 3 La diversidad
PIB per cápita de países latinoamericanos y Occidente, 1820-1929 latinoamericana
antes y después
(Dólares internacionales Gheary-Khamis de 1990) de la crisis de 1929
Cuadro 4
Exportaciones y exportaciones per capita de América Latina
herencia colonial jugó un rol importante, las tempranas formas de organización sindical. Bajo el debate
constitucional de
bases de una sociedad desigual se fueron trans- 1938 que incorpora
el régimen social
formando permanentemente y cambiando de Por otra parte, desde el punto de vista de la (1938-1952)
forma (Bértola 2018). propiedad de la tierra, si bien existió una fuer-
te tendencia a la concentración en latifundios, 557
También en el plano de la desigualdad nuestra no dejó de existir una importante clase media
tipología puede ser de ayuda. Más allá de las rural. Puede sostenerse que en estas regiones
indudables desigualdades de derechos, acceso la desigualdad sería menor a la de las regio- La diversidad
latinoamericana
a educación, servicios de salud, etc., si nos li- nes de herencia esclavista, pero igualmente antes y después
de la crisis de 1929
mitamos estrictamente a la desigualdad eco- experimentaron un importante aumento de la
nómica, resulta difícil estimar los niveles de desigualdad, debido a la fuerte valorización de
desigualdad en las regiones del Grupo 1. Si te- la tierra y el aumento de precios de sus pro-
nemos en cuenta que, como sostiene Baer, ha- ductos.
cia 1860 en Bolivia el 50 por ciento de la tierra
estaba en manos de las comunidades campesi- El caso más extremo es el chileno, en el que
nas (1991:138), es posible pensar que, más allá las haciendas del Valle Central y la expansión
de los bajos niveles de ingreso, la desigualdad de la frontera norte y sur, luego de un breve
no era extremadamente alta. período de caída de la desigualdad, tendió a
profundizarla y mantenerla en niveles estruc-
Adicionalmente, como se ha visto, el flujo de turalmente altos (Rodríguez Weber 2014).
ingresos de las exportaciones no fue muy alto
en estas regiones, más allá de casos puntuales No debemos olvidar en este contexto el rol de
muy sonados, como los de Patiño y el estaño la inversión extranjera y sus impactos distri-
en Bolivia. Si es razonable pensar que se pro- butivos. Estos sectores apropiaron una parte
dujo un importante aumento de la desigual- importante del excedente generado en la ex-
dad por la vía de la expropiación de tierras y plotación minera y petrolera, en las planta-
la necesidad de los campesinos de conseguir ciones azucareras y bananeras, en la indus-
ingresos fuera de las comunidades. tria frigorífica, en los servicios financieros y
comerciales. Como muestra Rodríguez We- tasas de analfabetismo 63, 52 y 25 por ciento,
ber (2014), es más fácil capturar su impacto respectivamente (Bértola y Ocampo, Cuadro
sobre la desigualdad desde la perspectiva de la III.14).
distribución funcional del ingreso, que desde
la perspectiva de la distribución personal, ya Las diferencias salariales tienen que ver con
que esos recursos fluyen al exterior. el funcionamiento de las instituciones domés-
ticas del mercado de trabajo, con la dotación
Como se ha dicho, los salarios reales mejora- de recursos naturales per cápita, pero también
ron en algunas regiones y se mantuvieron es- con el tipo de productos y el tipo de merca-
tables en otras (ver Bértola y Ocampo 2013, dos internacionales en los que están insertos.
Cuadro III.13), pero persistieron las grandes Como señalan Bértola y Ocampo (2013), ins-
diferencias entre los salarios reales de las dis- pirados en Lewis (1983), mientras los países
tintas regiones. El Gráfico 1 muestra los sala- tropicales compiten en el mercado mundial
rios reales de distintos países. Muy arriba está con otros países tropicales con abundancia de
Estados Unidos. Los países del Grupo 3 (Ar- mano de obra y con niveles salariales muy ba-
gentina y Uruguay) fluctúan en torno al nivel jos, no pueden capturar una buena renta de los
de las tres potencias europeas y se ubican por recursos naturales.
Un amor
encima de los dos países de los cuales recibie-
desenfrenado ron sus fuertes flujos migratorios: España e Por el contrario, los países de clima templa-
por la libertad
Italia. Muy por debajo se encuentran Brasil y do compiten con los mercados europeos y de
Antología de la
historia política Colombia, que aquí pueden representar a los América del Norte, en los que los niveles sa-
de Bolivia
(1825-2020)
Grupos 1 y 2 de nuestra tipología. lariales son altos y en los que los precios de
los bienes agrarios recogen esos altos costos
558 Gráfico 1 de producción. Así, esos países pueden atraer
Niveles salariales de paridad de poder compra
inmigrantes a los que pueden pagar altos sala-
comparados (Alemania, Francia y Gran Bretaña=100)
rios, dada la alta productividad de sus tierras
Tomo I
300 y los altos precios que marginales de sus pro-
1825-1952
250 ductos. En otras palabras, participan de mer-
cados globales de altos ingresos.
200
150
De todas formas, para demostrar que no sola-
100
mente eso juega y que las condiciones locales
50 de producción e institucionales juegan, basta
0 constatar que ni siquiera dentro del mundo
1870-74
1875-79
1880-84
1885-89
1890-94
1895-99
1900-04
1905-09
1910-14
1915-19
1920-24
1925-29
1930, según la CEPAL, el grado de urbaniza- condiciones de generar un profundo cambio Bajo el debate
constitucional de
ción era del 30 por ciento, pero en los países estructural de la economía latinoamericana. 1938 que incorpora
el régimen social
del Grupo 3 era ya del 57 por ciento. Esto Los países ya industrializados habían desarro- (1938-1952)
fue de la mano del desarrollo de los servicios, llado capacidades muy superiores que hacían
las industrias domésticas, la industria de la imposible el acceso de América Latina a los 559
construcción, los servicios bancarios, de se- mercados industriales.
guros, de alumbrado y electricidad, de aguas
y saneamiento, el transporte público urbano Incluso, muchas industrias artesanales lati- La diversidad
latinoamericana
y de distancia, los sistemas de enseñanza, las noamericanas se vieron literalmente arra- antes y después
de la crisis de 1929
diversas funciones administrativas del Esta- sadas por la competencia de la producción
do. El crecimiento de la economía urbana industrial, siendo el caso de las artesanías
trajo aparejado el desarrollo de visiones pro- textiles el más conocido y estudiado, no so-
gresistas y la creciente manifestación y or- lamente en América Latina. Por ello es que,
ganización de los sectores populares (Scobie difícilmente, podamos decir que este período
1991, 202). fue uno de industrialización, si por ello en-
tendemos un marcado aumento de la partici-
Los niveles de industrialización alcanzados pación de la industria en el producto total y
hacia 1929 en los países del Grupo 3 eran la transformación de la industria en el motor
aproximadamente del 16 por ciento del pro- del crecimiento.”
ducto, pero también era alto el grado de in-
dustrialización en los países grandes, Brasil y La época del Patrón Oro no fue tan liberal
México. desde el punto de vista comercial y el pro-
teccionismo persistió en varias regiones del
La dinámica de la industrialización fue, hasta mundo. América Latina fue una de ellas. En
cierto grado, espontánea. Algunas industrias parte, debido a cierta herencia colonial y posi-
tenían naturales ventajas de localización, como ciones conservadores de grupos tradicionales
las vinculadas a la industria de la construc- de poder en las regiones que fueron centro de
ción, y también por el fácil acceso a materias la vida colonial.
Sin embargo, las regiones de más reciente de organización comercial, y también cono-
poblamiento resultaron ser de las que man- cimiento directo de los principales merca-
tenían recaudaciones tarifarias más altas en dos de exportación e importación. De todas
relación al valor de las importaciones. Sin formas, muchos inmigrantes llegaban desde
embargo, esa no fue una característica exclu- zonas amenazadas por la industrialización y
siva de América Latina, sino que era un rasgo no tenían necesariamente una fuerte cultura
común de las economías de nuevo asenta- innovadora. Incluso, en muchas oportunida-
miento, como los países de Oceanía, Estados des tendían a aplicar técnicas de producción
Unidos y Canadá. Más aún, EEUU era, me- agraria poco aplicables en los nuevos entornos
dido de esa forma, el país más proteccionista (Bértola et. al. 2009).
del mundo (Coatsworth y Williamson 2003).
Ello se debía a que las sociedades aluvionales Por otra parte, las comparaciones entre países
tenían poco desarrolladas sus estructuras ad- del Río de la Plata y los de Australasia mues-
ministrativas en el territorio y les resultaba tran cómo el patrón de apropiación de la tierra
más fácil recaudar impuestos a través de unos y la forma en que ello condicionó la confor-
pocos puntos comerciales, especialmente los mación institucional, tuvo importantes im-
puertos. pactos en la conformación de los mercados de
Un amor tierra, en la distribución funcional del ingreso,
desenfrenado Si bien los altos aranceles tenían una finalidad en la diferenciación productiva, en el ritmo de
por la libertad
esencialmente fiscal, también tenían efectos incorporación de cambio tecnológico y en la
Antología de la
historia política proteccionistas. Algunos países latinoamerica- conformación de radicalmente diferentes sis-
de Bolivia
(1825-2020)
nos (Brasil, Chile, Colombia y México) practi- temas de innovación en el sector agrario: en
caron un proteccionismo muy activo. tanto en Nueva Zelanda se conformó un tem-
560 prano sistema de innovación y se procesaron
Del patrón de producción fuertemente espe- profundas transformaciones del entorno natu-
cializado en bienes primarios con trabajo no ral, en Uruguay prevaleció una estrategia ren-
Tomo I calificado sujeto a diferentes formas de coer- tista de los grandes ganaderos y un bloqueo
1825-1952
ción, surge un patrón de bajos niveles de in- político en la lucha con fuerzas progresistas de
novación y cambio tecnológico. base urbana (Álvarez 2007; Álvarez, Bértola y
Porcile 2007).
La transferencia internacional de tecnología
contribuyó al desarrollo de los sectores más
dinámicos, pero su impacto no siempre fue el 7. La crisis y el desempeño económico
de dinamizar al conjunto de la economía, sino social 1930-1970
que muchas veces la nueva tecnología sirvió
para reforzar el poder de los grupos de poder y Hacia el final de la era de las exportaciones, las
profundizar un patrón de desarrollo más bien condiciones estaban cambiando. Con la Pri-
arcaico, profundizando lo que se ha llamado mera Guerra Mundial se abrió el período de
el dualismo estructural. Los dos principales entreguerras, un período que en las economías
vehículos de transferencia internacional de europeas se caracterizó por las más bajas tasas
tecnología fueron en este período la inversión de crecimiento del siglo y por ser el único en
extranjera y la inmigración. el que el comercio exterior creció menos aún
que el alicaído producto doméstico.
Los inmigrantes traían la experiencia de la
civilización industrial, portaban conocimien- Este período crítico de la economía interna-
tos, experiencia práctica, cultura empresa- cional fue el resultado de un conjunto de con-
rial, técnica y obrera, en las nuevas formas tradicciones, tanto internas de las economías
desarrolladas como del propio sistema inter- en Occidente y al desarrollismo en América
nacional, financiero y comercial. Latina.
Hemos visto que algunas economías latinoa- Desde el punto de vista productivo, lo que
mericanas, especialmente las del Cono Sur, caracterizó la respuesta ante la crisis fue la
sintieron rápidamente este cambio de coyun- industrialización, lo que fue de la mano de
tura, en tanto otras, de incorporación más la restructuración de la producción primaria
tardía a la nueva ola expansiva y también más hacia la provisión de bienes de consumo y de
ligadas al mercado estadounidense, continua- bienes intermedios para el mercado nacional.
ron en expansión hasta la crisis de 1929. Si bien anteriormente había habido un no des-
preciable crecimiento industrial en la región,
No se abundará aquí sobre las características no se había producido un aumento importante
y el impacto general de la crisis, algo ya muy del peso de la industria en el PIB.
conocido. Las respuestas a la crisis habrían de
variar de país en país, en función de las carac- Sin embargo, no todos los países tuvieron lo-
terísticas del desarrollo anterior y de algunas gros importantes en materia de industrializa-
características estructurales de los países. Así, ción. Siguiendo a Bértola (2018), se presenta
el grado de consolidación del Estado y su capa- aquí la experiencia de seis países, que tuvieron
cidad de acción, el nivel de ingreso per cápita, logros destacados en este campo y que repre- Tercer periodo
la diversificación de sus actividades producti- sentan a los tres grupos de la tipología: México Bajo el debate
constitucional de
vas y de su estructura social, el grado de urba- y Perú, del Grupo 1; Brasil, del Grupo 2, y 1938 que incorpora
el régimen social
nización, los niveles educativos, serán factores los tres países del Grupo 3: Argentina, Chile y (1938-1952)
importantes de las respuestas, junto al tamaño Uruguay. Como se ha señalado, aquí tomare-
de los países, lo que habla del tamaño del mer- mos a Chile como un caso especial, catalogado 561
cado interno, junto a los niveles de ingreso. de euro-indoamericano.
En distinto grado, los estados nacionales apa- Los Cuadros 5 y 6 nos muestran el desempe- La diversidad
latinoamericana
recieron regulando las instituciones moneta- ño de estos países en diversas dimensiones, con antes y después
de la crisis de 1929
rias, la banca, y el comercio exterior, promo- resultados por momentos un tanto paradójicos.
viendo industrias, capturando las rentas de los
recursos naturales (cuando reaparecieron), la El primer resultado a constatar es que las dife-
construcción de infraestructura, en el desarro- rencias entre los países latinoamericanos ten-
llo de instituciones que regulaban el mercado dieron a reducirse, revirtiendo la tendencia de,
laboral y la provisión de cobertura social ante al menos, un siglo. La convergencia entre los
distintos riesgos. Todo eso existió en distinto países de América Latina continuó hasta la dé-
grado antes de la crisis, y se acentuó notoria- cada de 1970. Esto quiere decir que los países
mente a partir de ella (Cárdenas, Ocampo y que tenían mayores niveles de ingreso per cá-
Thorp 2003). Tampoco debe soslayarse el rol pita fueron los que menos crecieron. Por otra
que algunos estados jugaron intentando resol- parte, esos países, los del Grupo 3, mostraron
ver la crisis mediante la expansión territorial y un creciente retraso con respecto a los países
la guerra. desarrollados. Por el contrario, los países de
menores ingresos fueron los que más pudie-
Este creciente rol del Estado no fue exclusi- ron crecer, aunque no todos lograron acortar
vidad de América Latina, sino que fue carac- distancias con los países industriales. El caso
terístico de toda la economía mundial, con más exitoso fue el de Brasil, aun cuando lo que
creciente peso de la planificación, ya sea so- logró este país fue acercarse a los deteriorados
cialista o capitalista, asociado al keynesianismo niveles de los del Grupo 3.
Cuadro 5
Industrialización y desarrollo social en 6 países de América Latina (1930-1980)
La fuerte paradoja es que aun cuando retro- del golpe de Estado el modelo de crecimiento
cedían frente a los países ricos, los países del fue de la mano de mayor desigualdad. De esta
Grupo 3, no solamente tenían niveles de des- forma volvemos al famoso título de Fernando
igualdad más bajos que los otros países lati- Fajnzylber (1989): una caja negra, que refiere
Un amor noamericanos (a excepción de Chile), sino que a las dificultades de la teoría económica con-
desenfrenado
por la libertad lograron reducir de manera importante la des- vencional y de las elites locales para entender
Antología de la igualdad (inclusive Chile). Por el contrario, los la dinámica de un desarrollo económico inno-
historia política
de Bolivia países del Grupo 2 y 3 que más crecieron, no vador, y un casillero vacío de crecimiento con
(1825-2020)
lograron combinar el crecimiento con caída de equidad. En otras palabras: o se crece (pero no
la desigualdad. Brasil logró reducir la desigual- se converge) con desigualdad, o se distribuye
562
dad durante la época populista, pero después con bajo crecimiento y con divergencia.
Cuadro 6
Tomo I Indicadores sociales e indicadores de desarrollo económico y humano relativos, 1930-1970
1825-1952
te con los países desarrollados. El caso de Bra- importante, y extendiendo formas de control Bajo el debate
constitucional de
sil muestra cuán por debajo estaba su Índice coercitivo del trabajo de la mano de obra rural. 1938 que incorpora
el régimen social
de Desarrollo Humano y en todos los casos se (1938-1952)
constata que, al corregir el Índice de Desarro- El desarrollo económico también se vio pos-
llo Humano por indicadores de desigualdad tergado por límites geográficos y tecnológi- 563
de sus tres componentes, todos los países la- cos. El desarrollo de las jóvenes Repúblicas fue
tinoamericanos muestran una posición menos desigual y se vieron más beneficiadas aquellas
favorable. regiones costeras, especialmente las de la costa La diversidad
latinoamericana
atlántica. Pero esas regiones tenían muy poca antes y después
de la crisis de 1929
población y poco pudieron contribuir a un me-
8. A modo de conclusión jor desempeño total de América Latina. Las dé-
cadas posteriores a la Independencia fueron de
Al final de la era colonial, las economías la- retraso relativo a las principales potencias y de
tinoamericanas presentaban un escenario creciente desigualdad dentro de la región.
contradictorio. Por un lado, y con respecto a
las colonias del norte, contaban con más po- El despegue latinoamericano se produce de
blación y riquezas naturales. Por otro lado, manera desigual en la segunda mitad del si-
presentaban un conjunto de características glo XIX, cuando se conjugan varios factores.
sociales que dificultaban los procesos de de- Por un lado, la continuidad del proceso de la
sarrollo: una fortalecida dependencia política Revolución Industrial, generando una fuerte
de metrópolis que tenían un vínculo marginal expansión de la demanda de materias primas y
con las dinámicas más potentes de desarrollo alimentos por parte de los países industrializa-
económico de la época, un sistema económi- dos. El fuerte impacto de los cambios tecno-
co fuertemente extractivo, cierta debilidad de lógicos sobre el transporte marítimo y terres-
las elites locales, formas de organización del tre y sobre las comunicaciones, produjo una
mercado de trabajo fuertemente coercitivas, enorme reducción de los costos del comercio
altos niveles de desigualdad económica, social, y una fuerte compresión de las distancias en
política y civil. términos económicos.
Por otro lado, y de forma interrelacionada, los la esclavitud ralentizó su crecimiento. Puede
Estados nacionales se fueron consolidando, sostenerse que los países afro e indoamerica-
también gracias al recurso a tecnologías que nos confluyeron hacia combinaciones simila-
facilitaban el ejercicio del poder, se afianzaron res de mercado de trabajo.
los derechos de propiedad y las capacidades
para hacerlos cumplir y se generó un clima La llamada Primera Globalización generó en-
más favorable a la inversión, tanto nacional tonces un fuerte aumento de la desigualdad al
como extranjera. interior y entre las regiones latinoamericanas,
sin excepción. Las desigualdades entre las re-
La consolidación progresiva del poder polí- giones no solamente fueron notorias en el in-
tico mantuvo características que han sido lla- greso y exportaciones per cápita, sino también
madas oligárquicas, porque mayoritariamen- en los niveles salariales y en diferentes indica-
te tuvieron un sesgo fuertemente elitista: los dores de desarrollo humano.
mercados de trabajo mantuvieron el carácter
coercitivo, la esclavitud demoró en abolirse, Por otra parte, mientras los países euroame-
la fuerza de trabajo de las comunidades indí- ricanos estaban insertos en mercados in-
genas y del mundo rural permanecieron so- ternacionales caracterizados por el relativo
Un amor
metidas a diferentes formas de sometimiento alto ingreso de sus poblaciones, afectando
desenfrenado extraeconómico. al alza los costos marginales de producción,
por la libertad
especialmente los países tropicales forma-
Antología de la
historia política Por otra parte, se produjo un fuerte proceso ban parte de circuitos internacionales en los
de Bolivia
(1825-2020)
de concentración de la propiedad de los recur- que predominaban países de bajos ingresos,
sos naturales, especialmente mediante la apro- abundancia de mano de obra y muy bajos ni-
564 piación por parte de una nueva elite de tierras veles salariales.
de las corporaciones eclesiásticas, de tierras
fiscales y de tierras que estaban bajo control Acompañando estas características, también
Tomo I de las comunidades indígenas. fueron diferentes los grados de diversificación
1825-1952
productiva de los países y el desarrollo de las
En este contexto, el desempeño económico capacidades estatales. La ampliación de los
de las distintas regiones fue desigual. Las re- mercados internos dependió, además de los
giones euroamericanas crecieron muy rápida- niveles de ingreso, de los tamaños de los países
mente hasta la crisis de 1913 y la Primer Gue- y la existencia de grandes ciudades.
rra Mundial. Atrajeron fuertes contingentes
de inmigrantes, capital extranjero, generaron La crisis de 1929 y la depresión de la década
altos niveles de exportaciones per cápita y de- siguiente formaron parte de un período ex-
sarrollaron mercados de trabajo y tierras con traordinario, en el que el comercio mundial
mayor facilidad. creció menos que el producto mundial. La
gran contracción del mercado mundial, la caí-
Lograron una mayor diversificación produc- da de la demanda y precios de los productos
tiva y social y acortaron distancias con los lí- primarios generó la necesidad de implementar
deres de la economía mundial. Los países in- cambios radicales a los patrones de crecimien-
doamericanos fueron los que más lentamente to de los países latinoamericanos. En este pro-
se incorporaron a este proceso, pero tuvieron ceso, al igual que en muy diversas regiones del
un desempeño más dinámico a inicios del si- mundo, los Estados nacionales jugaron un rol
glo XX. Los países afroamericanos tuvieron un muy importante, buscando corregir los des-
crecimiento importante hasta fines del siglo equilibrios generados por la expansión de las
XIX, pero la crisis vinculada a la abolición de relaciones mercantiles y capitalistas globales,
aumento el proteccionismo para expandir sus América Latina ha sido, y sigue siendo, su difi-
mercados internos, a la que vez que se produ- cultad para entrelazar procesos de crecimiento
cía un aumento del belicismo y los conflictos económico y diversificación productiva –ba-
internacionales. sada en conocimiento científico tecnológico
e innovación–, con el desarrollo de capaci-
Las respuestas de los países de América Lati- dades sociales e institucionales que permitan
na ante esta nueva coyuntura, si bien mantuvo superar sus grandes deficiencias en términos
varios rasgos comunes, mostró también dife- de desigualdad y desarrollo humano. Más allá
rencias en sus resultados, muchas de las cuales de las notorias diferencias entre los países la-
dependieron del punto de partida. tinoamericanos, éste es un rasgo común a to-
dos. Ninguno de nuestros países ha logrado
Los países euroamericanos y los países media- incorporarse al núcleo de los países líderes de
nos y grandes lograron diversificar sus eco- la economía mundial. Las explicaciones de-
nomías y lograr niveles de industrialización ben buscarse tanto en las profundas raíces de
relativamente importantes. Los países eu- su historia y sus vínculos coloniales, como en
roamericanos ya contaban con ciertos sistemas las formas que adoptaron las sucesivas trans-
de bienestar y generaron avances importantes formaciones en interacción con los cambios
en sus políticas sociales, mejorando los indi- globales.
cadores sociales y reduciendo de manera im- Tercer periodo
portante la desigualdad, especialmente Chi- Las deficiencias de las capacidades estatales y Bajo el debate
constitucional de
le, que había heredado muy altos niveles de las debilidades de sus elites tienen profundas 1938 que incorpora
el régimen social
desigualdad. Pero lo paradójico es que estos raíces históricas y se recrean, entre otras co- (1938-1952)
países, si bien se mantuvieron en lo más alto sas, como resultado y como causa de las noto-
de los diversos indicadores de desarrollo, no rias dificultades para promover una agenda de 565
lograron crecer de manera importante y, por integración regional, que podría aumentar las
el contrario, perdieron posiciones relativas a capacidades políticas y generar un entorno más
los países desarrollados y sus distancias, con favorable para la transformación productiva. La diversidad
latinoamericana
respecto a los demás países latinoamericanos, antes y después
de la crisis de 1929
se acortaron. Los países que hemos tomado
como referentes de los indo y afroamericanos, Bibliografía
que experimentaron importantes procesos
de industrialización (Brasil, Perú y México), Álvarez, Jorge. 2007. Instituciones, cambio
mostraron desempeños muy distintos. tecnológico y distribución del ingreso.
Una comparación del desempeño econó-
Por un lado, mantuvieron sus brechas con mico de Nueva Zelanda y Uruguay (1870-
los líderes mundiales, o incluso las acortaron, 1940). En Primos ricos y empobrecidos, eds.
como fue el caso de Brasil; también experi- Jorge Álvarez, Luis Bértola y Gabriel Por-
mentaron mejoras moderadas en términos de cile. Montevideo: Editorial Fin de Siglo.
desarrollo humano. Sin embargo, estos países Álvarez, Jorge, Luis Bértola y Gabriel Porci-
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Tercer periodo
Bajo el debate
constitucional de
1938 que incorpora
el régimen social
(1938-1952)
567
La diversidad
latinoamericana
antes y después
de la crisis de 1929
La Constitución no escrita de Bolivia
Continuidades y rupturas constitucionales
en dos siglos de vida republicana
La nave de los argonautas era la misma al retornar 1. La Constitución jurídica Tercer periodo
a casa que al partir, aunque en ese largo viaje sufrió
y la Constitución política Bajo el debate
reformas sucesivas, y difícilmente hubiera regresado constitucional de
con algunos materiales originales. 1938 que incorpora
el régimen social
Mathew Hale Una lectura jurídica de la Constitución conci- (1938-1952)
be a ésta como la ley fundamental por la que
Resumen se rige políticamente un Estado. En cuanto 569
ley fundamental, la Constitución trata sobre
D
esde la primera Constitución bolivia- la separación de poderes y la legitimidad del
La Constitución
na la definición sobre cuáles son las poder público, es decir del ejercicio del poder no escrita
sido una constante. Este ensayo revisa la histo- desarrolla una serie de derechos fundamenta-
ria constitucional boliviana de 1825 a 2009, las les, sus garantías y acciones que legitiman y
reformas, inclusiones e inferencias respecto a aseguran su cumplimiento.
la norma fundamental boliviana, así como las
continuidades y rupturas constitucionales en La Constitución, desde esta mirada jurídica,
dos siglos de vida republicana.1 no solo organiza los poderes públicos, sino que
también ordena al Estado territorial y econó-
Palabras clave: Constitución. Constitucio- micamente.2 Y, finalmente, es la base de todo el
nalismo boliviano. Reforma constitucional. ordenamiento jurídico porque es la legislación
Constitución escrita. Constitución no escrita. de mayor jerarquía y la que produce y justifica a
Antes de continuar, es necesario explicitar desarrollo político de una sociedad.8 Bajo el debate
constitucional de
una clásica división entre Constitución escri- 1938 que incorpora
el régimen social
ta y no escrita, que se refiere a la existencia o La segunda –Constitución formal– atiende a la (1938-1952)
inexistencia formal de un texto denominado forma, como el adjetivo señala, sobre la exis-
Constitución.6 Suele caracterizarse a Inglaterra tencia comprobada de estos cambios norma- 571
tivos en el texto mismo de una Constitución
dando un prefacio para una reflexión política más
profunda, señala lo siguiente: La Constitución
no escrita
“(…) mis investigaciones me llevaron a la conclu- un documento unitario, que se denomine Consti- de Bolivia
sión de que tanto las relaciones jurídicas como las
tución. Bidart Campos y Walter Carnota (2001)
formas de Estado no pueden comprenderse por sí
mismas ni por la llamada evolución general del es-
sostienen algo similar al clasificar a las constitu-
píritu humano, sino que, por el contrario, tienen sus ciones en codificadas y dispersas, insistiendo que
raíces en las condiciones materiales de la vida (…)” no es la escritura o no escritura de la norma sino
(Marx 2008, 96). la reunión de las normas fundamentales en un có-
En este sentido, y siguiendo la reflexión de Marx, digo o Constitución formal. Asimismo, Segundo
lo que se conoce como Estado moderno, no es un Linares Quintana (1976) nos señala que resulta
modelo arquetípico que pueda ser reconocido y más adecuado los términos de constituciones co-
aplicado en todo el planeta, o que en todo caso lo dificadas y dispersas.
sea a condición de que dicho modelo arquetípico, 7 Para un debate sobre las tensiones entre el cons-
en su aplicación, sea mutilado, corregido, tergiver- titucionalismo material y el constitucionalismo
sado, reducido e incluso después de todo ello, sea formal véase Sandro Chignola, Estado, Constitución.
excepcional. Pero además, que aquello que deno- Una lección, en Bustamante, Gonzalo, Sazo, Diego,
minamos como Estado, necesite, precise una for- 2016, Democracia y poder constituyente (Santiago:
mulación propia, es decir una base material propia FCE, 2016).
en cada caso de experiencia que se busque analizar. 8 Carl Schmitt ya señalaba que la Constitución, en-
En este sentido se debe proceder al estudio de cada tendida como un todo unitario, se refiere a “la si-
Estado como situación concreta. Una teoría del Es- tuación total de la unidad y ordenación políticas”
tado no sería otra cosa que la revisión crítica de la (Schmitt 1996,29), en contraste con desagregación
producción de estatalidad concreta en cada caso, es de la misma en una regulación legal fundamental.
decir en cada país. Esta unidad y ordenación políticas no descansa en
6 Para Vladimiro Naranjo Mesa (2010) no es sólo la criterios formales sino materiales, y no se refieren
condición escrita lo que caracteriza a las constitu- sólo a un estado de cosas, sino a un devenir en mo-
ciones escritas sino la existencia de un texto único, vimiento, a un cuerpo viviente.
unitaria y codificada. La Constitución formal nihilo),12 es decir se constituirían en un momen-
suele contar con una estrategia de rituales9 to dado y sólo desde ese momento (el de su
para su modificación, en tanto si se trata de constitución) causarían estado, es decir se apli-
una norma fundamental o una cuya jerarquía carían sin ninguna duda sobre su efectividad,
se la entiende como suprema no podría ser re- pero sin ninguna referencia al pasado, porque
formada de manera sencilla.10 la ley no puede girar la cabeza al pasado.13
En Bolivia, la mirada tradicional propia del Pero lo curioso de esta mirada jurídica del
campo jurídico ha sido la de analizar al cons- análisis de la formalidad y la ritualidad en la
titucionalismo escrito o formal a partir de una formación del Derecho, radica en que hay
serie de análisis de los textos constitucionales puntos ciegos que no permiten partir cómo-
bolivianos,11 que se exponen sobre la base de damente con los relatos de una historia cons-
una sucesión de fechas y textos, como conse- titucional boliviana, no sólo en los comienzos
cuencia de una lectura de lo que el texto consti- sino también en el desarrollo de esta historia
tucional ha puesto en juego desde un momento constitucional.
dado para la economía jurídica de los juristas.
Esta mirada parece concebir a las constitucio- Lo que pretendemos en este texto es explorar,
Un amor
nes como si las mismas vinieran de la nada (ex a partir de la existencia de estos puntos ciegos,
desenfrenado un acercamiento a un constitucionalismo no
por la libertad
escrito o, en suma, una Constitución material
Antología de la
historia política no codificada en Bolivia.
de Bolivia 9 El filósofo coreano Byung Chul Han (2020) señala
(1825-2020) que para Hannah Arendt los rituales se relacionan
con la durabilidad de las cosas, su misión es estabi-
572 lizar la vida humana, esta durabilidad de las cosas es 12 Émily Bounty señalaba que “el poder constituyente
lo que hace que una institución pueda ser indepen- es un acto imperativo de la nación, que surge de la
diente de los caprichos de un ser humano. nada y organiza la jerarquía de poderes” (Bounty
10 Una mirada de los rituales de reforma de la Cons- citado por Negri 2015, 28).
Tomo I
titución la encontramos en muchas lecturas jurí- 13 La relación del tiempo y del Derecho es compleja,
1825-1952
dicas de la historia constitucional boliviana, léase pero se puede partir señalando que la norma sólo
a continuación, como ejemplo, lo que señala José se la aplica desde el momento de publicación y no
Antonio Rivera respecto a las reformas consti- tiene efectos retroactivos, salvo en dos excepciones,
tucionales llevadas a cabo entre el siglo XIX y el si la aplicación de una norma de manera retroactiva
siglo XX: “El ejercicio del poder constituyente re- beneficia en materia penal al imputado, al reo, y
formador fue indebido en razón a que las reformas si la aplicación de una norma de manera retroac-
constitucionales, realizadas entre 1831 a 1967, no tiva beneficia en materia laboral al trabajador. En
se ajustaron a los mecanismos y procedimientos ambos casos se aplica la retroactividad bajo la con-
previstos por las normas de la Constitución vigen- dición in dubio pro reo e in dubio pro operario. En la
te” (Rivera 2012, 45). Constitución boliviana de 2009 (Constitución vi-
11 Hay una variedad de estudios del constitucionalis- gente) en el artículo 123 se señala la retroactividad
mo entendido como una colección de comentarios de la norma también “en materia de corrupción, para
a las constituciones escritas formalmente estableci- investigar, procesar y sancionar los delitos cometidos por
das en un texto unitario. Tal vez los más conocidos servidores públicos contra los intereses del Estado”, sin
sean los textos de Ciro Félix Trigo (2003a y 2003b): embargo el Tribunal Constitucional Plurinacional
Derecho Constitucional boliviano y Las Constitu- en su sentencia STCP 0770/2012 ha aclarado que
ciones de Bolivia. Pero también podemos mencio- la retroactividad de la norma penal sólo puede apli-
nar a René Canelas (1972) y su libro Nuevo dere- carse de manera que beneficie al servidor público,
cho constitucional, a Alipio Valencia Vega (1982) bajo el razonamiento de que las garantías estableci-
y su Manual de Derecho Constitucional y el com- das en la Constitución (en particular las de la irre-
pendio normativo razonado que excede la materia troactividad de la norma) deben ser interpretadas
constitucional y apunta a un panorama del Derecho sólo como garantías de las personas naturales y no
en Bolivia de Richard Osuna Ortega (2009) en su así bajo un supuesto derecho del Estado contra los
Introducción a la historia jurídica de Bolivia. Esta derechos de las personas. Sobre este tema volvere-
lista es solo referencial. mos en este ensayo más adelante.
3. Constitucionalismo no escrito las leyes.16 Para otros17 la primera Constitución
en Bolivia boliviana fue la de 1826 redactada casi en su
totalidad por Simón Bolívar, pero que, como
Aunque parezca lógico, es necesario recor- muchos historiadores del Derecho Constitu-
dar que todo punto de partida en un relato cional en Bolivia repiten, la Asamblea Cons-
histórico es una prótesis de origen,14 pues en tituyente boliviana revisó, retiro y añadió a la
el lugar de la supuesta pureza del origen, hay redacción enviada por el libertador muchos
identidades plurales no homogeneizables. Di- artículos, por ejemplo el artículo 6 referido a
cho en otras palabras, que en el lugar en el que la religión católica como religión del Estado
debía estar una tesis auto-mantenida, lo que que Bolívar no redactó y parece, incluso, ha-
hay es prótesis, es decir, un origen que se erige ber estado en contra de esta manifestación de
autojustificador ocultando que no es presen- Estado confesional.
cia pura. Es lo que encontramos en el relato
de los comienzos de la historia constitucional Atendiendo a nuestra definición de constitu-
boliviana, pero lo es de igual forma, lo que po- cionalismo y nuestra intención de exponer las
demos encontrar más adelante en otros relatos bases para un estudio de un constitucionalis-
de transformaciones constitucionales y tam- mo no escrito en Bolivia, en el que se obser-
bién en nuestro relato, al momento de haber ven las continuidades y rupturas constitucio-
elegido empezar de esta manera. nales, el proceso parece18 extenderse desde el Tercer periodo
574
Tomo I
1825-1952
en curso, pues pese al decreto de Bolívar, la un código único, y así parece entender Bolívar Bajo el debate
constitucional de
Asamblea alto peruana se reunió, no en Oruro que en el reglamento para la elección de di- 1938 que incorpora
el régimen social
y no en la fecha prevista, sino desde el 10 de putados para la Asamblea Constituyente de 26 (1938-1952)
julio de 1825 en Chuquisaca.21 de noviembre de 1825 señala que la Asamblea
General del Alto Perú carecía de facultades 575
para constituir a la decretada República boli-
19 El profesor Richard Osuna comenta al respecto
que “pese a que Sucre había dictado el Decreto de viana, porque la representación nacional es la
9 de febrero de 1825 interpretando el anhelo alto- única que puede formar una Constitución. Fue La Constitución
no escrita
peruano de obtener su libertad de manera legal y de esta manera que llegamos a la Constitución de Bolivia
formal, Bolívar se opuso a dicha norma dictando
bolivariana sancionada el 6, promulgada el 19
el presente decreto [Osuna se refiere al Decreto
de 16 de mayo de 1825] que aparentemente respe- y publicada el 26 de noviembre de 1826. Es
ta la decisión de Sucre; sin embargo, condiciona la decir, llegamos a una Constitución escrita en
formalización de la independencia del Alto Perú a lo formal, con una serie de normas reunidas en
las decisiones del bajo Perú y la Argentina respec-
un solo cuerpo que denominamos, desde una
to de dicho proceso de independización, llegando
al extremo de decidir dictatorialmente que los al- lectura jurídica, la primera Constitución boli-
toperuanos deberían esperar hasta el año siguiente viana, pero con una serie de materiales (decre-
para recién, después de la decisión del Congreso tos, declaraciones) constitucionales necesaria
bajoperuano, confirmar su anhelo de plena y for-
para la comprensión del fenómeno constitu-
mal libertad. Por supuesto que el propio Sucre y
los propios altoperuanos desobedecen la decisión yente boliviano.
de Bolívar y empiezan a reunirse y decidir sobre
la suerte del país a partir del 10 de julio de 1825” Nótese que las normas jurídicas son puntos
(Osuna 2009, 27).
de llegada, más que de partida. Es indiscutible
20 El decreto de 16 de mayo de 1825, en su resolución
5º señala: “Las provincias del Alto Perú no reconocerán que para la mirada de los juristas la Constitu-
otro centro de autoridad, por ahora, y hasta la insta- ción bolivariana de 1826 deba ser reconocida
lación del nuevo congreso peruano, sino la del gobierno
supremo de esta República”.
21 Para Jaime Moscoso esta Asamblea debería ser lla- sobria y directa, como exigía el magno y trascen-
mada por los historiadores del Derecho “Primera dental hecho histórico, implantó la piedra angular
Asamblea Constituyente porque de ella de manera de la nueva República” (Moscoso 1992, 73).
Un amor
desenfrenado
por la libertad
Antología de la
historia política
de Bolivia
(1825-2020)
576
Tomo I
1825-1952
Bajo el debate
constitucional de
1938 que incorpora
el régimen social
(1938-1952)
579
La Constitución
no escrita
de Bolivia
(…)
de algunas reformas en 1947, continuó rigiendo El actual texto constitucional, fué [sic]
las relaciones sociales en todo aquello que no ha- adoptado por el Congreso extraordinario de
bía modificado o renovado la revolución mediante 1947 y por el Ordinario del mismo año, que
decretos-leyes con validez de normas fundamen-
aprobaron varias reformas a la Constitución
tales (…) Hubo un implícito reconocimiento de
la Carta anterior” (Canelas 1972, 153). Para Ali- de 1945, reformas que fueron promulgadas
pio Valencia Vega si bien la Constitución de 1947 mediante leyes de 20 de septiembre y 26 de
estaba vigente “toda la legislación revolucionaria, noviembre de 1947.
dictada por medio de decretos-leyes y en uso del
(Urquidi 1954, 9)
poder revolucionario, remozaba la organización
del país desde la propia estructura económica, es (…)
claro que el marco constitucional anterior, riguro-
samente individualista, había saltado por los aires d) Sufragio y elecciones
y una nueva Constitución venía conformándose
en el ambiente jurídico revolucionario” (Valencia, Uno de los derechos inherentes a la calidad
1982 183). de ciudadano, consiste, según el artº 42 de
31 Las cursivas son nuestras, y tienen la finalidad de la Constitución, en concurrir como elector
mostrar el reconocimiento tácito de la Constitu-
o elegido a la formación de los Poderes Pú-
ción de 1947, en todo lo que no haya sido modifi-
cado por los decretos-ley de la revolución de 1952. blicos.
Un amor
desenfrenado
por la libertad
Antología de la
historia política
de Bolivia
(1825-2020)
Para ser ciudadano, dice el artº 43, se re- hecho se realizan a la Constitución de 1947
Tomo I
1825-1952
quiere: 1º Ser boliviano; 2º Tener 21 años de nos revelan que se trata de un proceso evo-
edad; 3º Saber leer y escribir; 4º Estar inscri- lutivo de Constitución y adecuación entre el
to en el Registro Cívico. entramado de un texto que busca la formali-
Sin embargo, y por simple Decreto (el dad, las decisiones políticas del presente y los
Nº3128 de 21 de julio de 1952), se ha modi- factores sociales que rodean todas las transfor-
ficado esta disposición constitucional como maciones que se inician en 1952.
sigue:
Será la reforma a la Constitución de 1961 la
“Art. 1º- Tendrán derecho al voto para la que constitucionalice los cambios de hecho
formación de los poderes públicos, todos realizados por la revolución de 1952. Seis años
los bolivianos, hombres y mujeres, mayores más tarde, en 1967 y bajo el gobierno del Pre-
de veintiún años de edad siendo solteros o sidente René Barrientos Ortuño, se reforma
de dieciocho siendo casados, cualquiera que una vez más la Constitución, la misma que
sea su grado de instrucción, su ocupación fue suspendida en múltiples ocasiones por los
o renta”. regímenes dictatoriales, pero retornamos a la
(Urquidi 1954, 14) democracia en 1982 bajo la vigencia de esa
Constitución.
Carlos Walter Urquidi ordena el texto cons-
titucional añadiendo las reformas realizadas La Constitución de 1967 incorporó el Am-
mediante decretos supremos y otros cambios paro Constitucional, una de las garantías más
normativos. En el fondo las reformas que de importantes de resguardo de los derechos
fundamentales que complementan al Habeas La reforma constitucional de 1994 es un pun-
Corpus constitucionalizado en 1931. Asimis- to de llegada de una serie de procesos previos,
mo, reiteró las instituciones que creó la revolu- que obedecen a los rasgos del modelo econó-
ción de 1952 y que se constitucionalizaron en mico que empieza a implementarse en Bolivia
lo formal en 1961. Sin embargo, una vez que desde 1985, que se caracteriza por la deses-
Bolivia retornó a la democracia se consideró la tatización, desnacionalización y consiguiente
necesidad de avanzar a una reforma más acorde privatización de los núcleos de la economía,
con los tiempos y exigencias de la región. permitiendo que el Estado deje de ser el prin-
cipal agente económico. Esto implicó que el
3.3. Multiculturalismo y plurinacionalismo Estado haya desarmado, poco a poco y algunas
constitucional veces de golpe, la base material con la que se
financiaba a sí mismo, es decir que desmon-
La Constitución de 1967 fue reformada en tó la posibilidad de recuperar para su finan-
1994 en el gobierno del Presidente Gonzalo ciamiento el excedente económico producido
Sánchez de Lozada, aunque el procedimiento por la minería, el sector de hidrocarburos y las
comenzó en el gobierno del Presidente Jaime llamadas empresas estatales. Sin la posibilidad
Paz Zamora. Para algunos juristas esta refor- de autofinanciarse el Estado empieza a dejar
ma fue la única que se llevó a cabo siguiendo de cumplir una de sus tareas más antiguas, re-
las normas de reforma constitucional estable- crear el proyecto del Estado-nación que había Tercer periodo
te Evo Morales, se convocó a una Asamblea terpretación, atendiendo a lo señalado por el Bajo el debate
constitucional de
Constituyente que se inauguró en Chuquisa- artículo 196, parágrafo II de la CPE: 1938 que incorpora
el régimen social
ca el 6 de agosto de 2006, organizándose en (1938-1952)
21 comisiones que permitieron inteligir la conflicto respecto a la aprobación del reglamento
estructura del proyecto de Constitución que de debates de la Asamblea Constituyente, una vez 585
la asamblea aprobó en dos etapas. La primera resuelto este primer conflicto, aparecieron otros
como la definición de la capitalía plena, es decir,
en Chuquisaca (aprobación en grande) en no- no solo el reconocimiento de Sucre como la ca-
viembre de 2007 y la segunda en Oruro (apro- pital de Bolivia sino la concreción de que la mis- La Constitución
no escrita
bación en grande y en detalle) en diciembre de ma sea la sede de gobierno, el rechazo de ésta y de Bolivia
otras propuestas por la mayoría de los asambleístas
2007.41 Después de un periodo de conflictivi-
constituyentes llevó a que la sede de la Asamblea
Constituyente sea trasladada del Teatro Gran Ma-
40 Se trata de una modificación realizada al artículo riscal de Sucre a un cuartel militar a las afueras de la
93 del texto constitucional de 2004, mediante Ley ciudad de Sucre, para finalmente terminar su labor
Nº3089 de 6 de julio de 2005. Es una reforma pe- en la ciudad de Oruro en diciembre de 2007. Sin
queña en lo formal, pero de mucha importancia en embargo, la conflictividad no terminó y se lleva-
lo material, pues es la que permite que se convo- ron a cabo una serie de reuniones y diálogos en la
quen a elecciones generales en 2005. De otra ma- ciudad de Cochabamba entre septiembre y octubre
nera, si se mantenía la redacción de la Constitución de 2008 para modificar el proyecto de texto cons-
de 2004 sólo se convocaba a elecciones de presiden- titucional aprobado por la Asamblea Constituyente
te y vicepresidente, dejando intactos a los diputados en diciembre de 2007. Estas modificaciones fueron
y senadores que fueron elegidos el año 2003. tratadas y ordenadas por el H. Congreso de la Re-
41 La Asamblea Constituyente fue una experien- pública en octubre de 2008 para ser incluidas en
cia política sui generis en la construcción de una el texto que se somete a referendo constitucional
Constitución en Bolivia. Fue la primera vez que el 25 enero de 2009, en el cual la población bo-
se convocó a una Asamblea Constituyente dedica- liviana, por primera vez en la historia de Bolivia,
da al cambio total de la Constitución, pues no se por el 61,43% de votos válidos. En consecuencia,
trató sólo de la reforma de algunos artículos sino el texto constitucional vigente es distinto en cerca
de un diseño constitucional nuevo. La conflictivi- a un centenar de artículos respecto a los proyectos
dad en la definición del modo de aprobación de los de texto constitucional aprobados por la Asamblea
informes de las 21 comisiones de la Asamblea, así Constituyente en 2007. Un estudio pormenorizado
como el modo de aprobación del proyecto de texto del proceso constituyente boliviano se encuentra
constitucional que se llevaría a referendo desató un en Schavelzon, 2012.
Artículo 196 que el texto constitucional boliviano caracteri-
(…) za con el adjetivo plurinacional, poseen presen-
cia indígena: Asamblea Legislativa Plurinacio-
II. En su función interpretativa, el Tribunal
nal (artículos 146 y 147, presencia indígena),
Constitucional Plurinacional aplicará como Órgano Electoral Plurinacional (artículo 206
criterio de interpretación, con preferencia, parágrafo V, presencia indígena), Tribunal
la voluntad del constituyente, de acuerdo Constitucional Plurinacional (Artículo 197,
con sus documentos, actas y resoluciones, parágrafo I, presencia indígena), hasta los mi-
así como el tenor literal del texto. nistros que constituyen parte del Órgano Eje-
Fuente: Constitución Política del Estado, 2009 cutivo deben ser nombrados bajo criterios de
plurinacionalidad (Artículo 172 numeral 22).
Una vez más la Constitución boliviana no se La presencia indígena está dispuesta a la trans-
encuentra sólo en el texto codificado y unita- formación del Estado, a la creación de materia
rio, sino en la existencia de un exterior consti- estatal no sólo por esta presencia sino por las
tutivo, de un afuera que lo constituye, que se prácticas que puedan desarrollarse y darse a
refiere a las huellas del proceso constituyente condición de esta presencia.
en esta voluntad del constituyente, plasmada
en sus documentos, actas y resoluciones. La Constitución boliviana de 2009 es la pri-
Un amor
desenfrenado mera que podemos caracterizar como rígida,
por la libertad La Constitución de 2009 fue la primera en es decir, que su modificación precisa de un
Antología de la ser realizada por una asamblea constituyente
historia política
de Bolivia ampliamente participativa y aprobada por un
(1825-2020) de un Estado-nación en una sociedad claramente
referéndum constitucional con amplia partici- plurinacional y con prácticas plurales (desde un
586 pación, no sin conflictos ni observaciones res- pluralismo económico, jurídico, lingüístico, social,
pecto a su elaboración y mecanismos de apro- religioso, político, entre otras formas o maneras del
bación de los proyectos, pero sin duda con una pluralismo). Lo real, entonces, desborda la repre-
sentación. En el fondo de esta respuesta preliminar,
Tomo I masiva votación para su aprobación. Si bien el la ausencia se desarrolla a partir de la representa-
1825-1952
texto constitucional continúa en los márgenes ción, para representar se precisa que aquello que
del constitucionalismo pluralista, inaugura el es representado se encuentre ausente. La represen-
llamado constitucionalismo plurinacional, de tación es también simplificación política, la ausen-
cia da paso a que la norma idealice al sujeto y a la
manera conjunta con la Constitución de Ecua- práctica que representa, generando una hiancia en
dor de 2008. el sujeto, caracterizada por la carencia. El sujeto es
claramente sujetado a la representación que se hace
El Constitucionalismo plurinacional puede ser de él. Sucede lo mismo con el reconocimiento (otra
manera de la representación), que no obra de abajo
caracterizado como un constitucionalismo de para arriba, es decir no hay una realidad previa que
la presencia,42 en tanto todas las instituciones se reconoce, sino al revés, se presenta primero un
enunciado en el que deben de reconocerse, muchas
veces forzando al reconocido, a que se parezca a la
42 Dar cuenta de un constitucionalismo de la presen- imagen del reconocimiento del enunciado. La nor-
cia, supone que existe un constitucionalismo de la ma vuelve a idealizar al sujeto y a la práctica que re-
ausencia. ¿A qué llamamos un constitucionalismo presenta, generando una hiancia en el sujeto, carac-
de la ausencia? Sin agotar en una respuesta un tema terizada por la carencia y la ausencia pues no se ve
que puede ser más complejo, podríamos decir que la reconocido en el enunciado que está hecho para re-
ausencia radica en una minimización de la comple- conocerlo. Esta reflexión también puede aplicarse a
jidad social en un texto constitucional, me refiero a la Constitución boliviana de 2009, en tanto es claro
una Constitución que pretende moldear la realidad, que se desarrolla una representación de lo indígena
acomodarla a una representación vacía que se reali- que muchas veces no se adecua a la pluralidad que
za de lo social y que en definitiva no causa estado, es se encuentra detrás de la palabra indígena. Una ex-
decir no llega a ser efectiva ni a aplicarse en la reali- plicación más detallada de lo referido se encuentra
dad, cabe como ejemplo el reconocimiento jurídico en De la Rocha y Rojas, 2020.
órgano y de un procedimiento especial, que
incluye en todos los casos (es decir, ya sea que
se quiere modificar una parte de la Constitu-
ción o toda la Constitución) la participación
de la población mediante la institución del
referéndum. Es también la primera Constitu-
ción con un catálogo extenso de derechos que
remite a la aplicación preferente en materia
de derechos humanos, dicho de otro modo, y
conforme lo señala el artículo 256:
De acuerdo a los datos otorgados por el Ins- control de constitucionalidad de las decisiones Bajo el debate
constitucional de
tituto Nacional de Estadística (INE) sobre de la jurisdicción indígena originario campesi- 1938 que incorpora
el régimen social
el Censo de Población y Vivienda del 2012, na por parte del Tribunal Constitucional Plu- (1938-1952)
dio como resultado del ejercicio del derecho rinacional.
a la autoidentificación cultural, del total de 589
declaraciones de pertenencia a Naciones y El parágrafo I del artículo 191 de la Constitu-
Pueblos Indígena Originario Campesinos ción señala que la jurisdicción indígena origi-
(NPIOC), se tiene un número de ciento vein- nario campesina se fundamenta en un vínculo La Constitución
no escrita
tidós pertenencias culturales declaradas, da- particular de pertenencia de las personas que de Bolivia
tos que todavía no fueron analizados cualita- son miembros de la respectiva nación o pueblo
tivamente por las instituciones competentes indígena originario campesino. Este vínculo
a fin de determinar el número de identida- de pertenencia se encuentra en relación a lo
des culturales existentes en el Estado Pluri- establecido en el parágrafo I del artículo 30 de
nacional de Bolivia; sin embargo, la cifra nos la Constitución que manifiesta que es nación y
da una idea de la gran diversidad cultural pueblo indígena originario campesino toda colecti-
que existe, más allá de las treinta y seis na- vidad humana que comparta identidad cultural,
ciones o culturas que se asumen de una erra- idioma, tradición histórica, instituciones, territo-
da lectura del Art. 5 de la CPE, puesto que, rialidad y cosmovisión, cuya existencia sea anterior
la citada disposición constitucional refiere a a la invasión colonial española. Sin embargo, el
los idiomas oficiales y no así al número de Tribunal Constitucional Plurinacional ha rea-
naciones en el Estado. lizado una aclaración sobre el sujeto de la ju-
Fuente: Sentencia SCP-0007/2019 risdicción indígena originaria campesina en su
sentencia SCP 1422/2012 de fecha 24 de sep-
47 Son variadas las interpretaciones de este tipo. Para tiembre de 2012. Esta aclaración se da en los
muestra véase la referencia al periódico de circulación siguientes términos:
nacional llamado “Opinión” en https://www.opi-
nion.com.bo/articulo/bolivia-194-anos/las-36-na-
ciones-de-bolivia/20130806020300444625.amp.
[D]ebe precisarse además que en el contexto
html, visitado el 30 de septiembre de 2020. de las naciones y pueblos indígena originario
campesinos, su estructura organizativa por procedimientos propios en los que se desa-
razones también de orden socio-histórico, rrolla la vida cotidiana del pueblo indígena. Al
podría estar compuesta por organizaciones respecto, la sentencia SCP 0026/2013 de 4 de
campesinas, juntas vecinales u otras modali- enero de 2013 y la sentencia SCP 006/2019 de
dades organizativas que reflejen un proceso 6 de febrero de 2019 señalan que:
de mestizaje vivido en el país, en estos casos,
el reconocimiento de derechos colectivos [D]ebe considerarse que el vínculo ‘parti-
como naciones y pueblos indígena origina- cular’ que une a los miembros de una na-
rio campesinos, responderá a la concurren- ción o pueblo indígena originario campesi-
cia de cualquiera de los elementos de cohe- no de ninguna manera podría fundarse en
sión colectiva descritos supra, es decir, a la el nacimiento o los rasgos físicos, por ello
existencia de identidad cultural, idioma, or- mismo, una persona no nacida en una de-
ganización administrativa, organización te- terminada cultura puede adoptar la misma
rritorial, territorialidad ancestral, ritualidad y por ende ser juzgada por la jurisdicción
y cosmovisión propia, entre otras; por tanto, indígena originaria campesina, por ello
a pesar de la influencia de elementos organi- el mismo Art. 1.2 del Convenio 169 de la
zativos propios de un proceso de mestizaje, Organización Internacional del Trabajo
Un amor
en la medida en la cual se identifique cual- (OIT), establece que: ‘La conciencia de su
desenfrenado quiera de los elementos de cohesión colecti- identidad o tribal deberá considerarse un
por la libertad
va antes señalados, la colectividad será sujeta criterio fundamental para determinar los
Antología de la
historia política de derechos colectivos y le serán aplicables grupos a los que se aplican las disposiciones
de Bolivia
(1825-2020)
todos los efectos del Art. 30 en sus dos pa- del presente Convenio’ (…) Por otra parte,
rágrafos de la Constitución, así como los y considerando que el derecho colectivo a
590 efectos del principio de libre-determinación administrar su justicia está relacionado a la
inherente a los pueblos y naciones indígenas construcción de su identidad social, es lógi-
originario y campesinos plasmado en el se- co aceptar que es posible el juzgamiento de
Tomo I gundo artículo de la CPE. personas que no necesariamente pertenez-
1825-1952
Fuente: sentencia SCP 1422/2012 y reiterada can a la nación o pueblo indígena origina-
en la sentencia SCP 0006/2019.
ria campesino pero que voluntariamente de
manera expresa o tácitamente se sometan a
Entonces, son sujetos de la jurisdicción indí- dicha jurisdicción; por ejemplo, al decidir
gena originario campesina las organizaciones ocupar sus territorios ancestrales aunque
campesinas, juntas vecinales u otras modalida- ello no implica que no deba analizarse en
des organizativas que reflejen un proceso de cada caso la concurrencia de los ámbitos
mestizaje. Es notorio que esta Constitución territorial, material y personal referidos
de los jueces no encasilla a las comunidades por el Art. 191.II de la CPE.
indígenas a un territorio y entiende que lo in- Fuente: sentencia SCP 0026/2013, reiterada
dígena es diverso y se desplaza por el territorio por la sentencia SCP 006/2019.
boliviano de distintas formas.
Hasta aquí hemos visto cómo las sentencias
Pero el Tribunal Constitucional Plurina- del Tribunal Constitucional Plurinacional han
cional no solo intervino aclarando al sujeto generado modulaciones y aclaraciones respec-
de la jurisdicción indígena en lo referente al to al ámbito de vigencia personal y al ámbito
territorio, sino que también precisó que el de vigencia territorial, ampliando a los sujetos
vínculo particular de pertenencia se puede de esta jurisdicción así como a las formas te-
adquirir viviendo en la comunidad y, en con- rritoriales en las que se puedan encontrar. Sin
secuencia, habiendo aceptado las normas y embargo, sobre el ámbito de vigencia material
la misma CPE determina una reserva de ley; es Forestal, Derecho Informático, Derecho
decir, establece que una ley, denominada Ley Internacional público y privado, y Dere-
de Deslinde Jurisdiccional, es la que determinará cho Agrario, excepto la distribución in-
los asuntos que conoce esta jurisdicción. terna de tierras en las comunidades que
tengan posesión legal o derecho propie-
En fecha 29 de diciembre de 2010, en cum- tario colectivo sobre las mismas;
plimiento de la reserva de ley del parágrafo II d) Otras que estén reservadas por la Cons-
del artículo 191, se promulgó la Ley 073 de titución Política del Estado y la Ley a las
Deslinde Jurisdiccional, en cuyo artículo 10 se jurisdicciones ordinaria, agroambiental
establece el esperado deslinde material: y otras reconocidas legalmente.
Primera. Las acciones de investigación y juz- En este marco, conforme la doctrina uni-
gamiento de delitos permanentes de corrup- forme, la jurisprudencia nacional e inter-
ción y vinculados a ésta, establecidos en el nacional en lo referente a la aplicación de
Artículo 25 numerales 2) y 3) de la presente la norma penal adjetiva, la norma procesal
Ley, deben ser aplicados por las autoridades aplicable es la vigente siempre y cuando no
competentes en el marco del Artículo 123 tenga afectación al derecho sustantivo en
de la Constitución Política del Estado. cuyo caso se aplica la norma adjetiva más
Fuente: Ley 004 de 30 de marzo de 2010. favorable.
Por lo tanto, los juristas bolivianos no sólo de- meral 2 del artículo 23 de la Convención Ame- Bajo el debate
constitucional de
ben revisar la Constitución boliviana de 2009, ricana sobre Derechos Humanos que expresa: 1938 que incorpora
el régimen social
sino la Constitución de los jueces conforme a (1938-1952)
No estamos delante de una Constitución reu- b) de votar y ser elegidos en elecciones pe-
nida en un código fundamental, sino delante riódicas auténticas, realizadas por sufra-
de una Constitución material que excede a su gio universal e igual y por voto secreto
carácter unitario y que se transforma constan- que garantice la libre expresión de la vo-
temente, es decir estamos delante de una expre- luntad de los electores, y
sión más de un Constitucionalismo no escrito. c) de tener acceso, en condiciones genera-
les de igualdad, a las funciones públicas
de su país.
4. ¿Estamos a puertas de un
Constitucionalismo de excepción? 2. La ley puede reglamentar el ejercicio de
los derechos y oportunidades a que se refiere
Como parte de este activismo judicial, y como el inciso anterior, exclusivamente por razones
parte de esta llamada Constitución de los jueces, de edad, nacionalidad, residencia, idioma,
mediante la sentencia SCP 0084/2017 de 28 de instrucción, capacidad civil o mental, o con-
noviembre de 2018 el Tribunal Constitucional dena, por juez competente, en proceso penal.
Plurinacional declara la posibilidad de que el ex Fuente: Convención Americana sobre Derechos
Humanos,Pacto de San José, 22 de noviembre de 1979,
presidente Evo Morales y el ex vicepresidente ratificada por Bolivia mediante Ley Nº1430 de 11 de
Álvaro García Linera participen por cuarta vez febrero de 1993.
Sin embargo, en la práctica no se obró de esta
manera.
dad y quitarsela a los tribunales, muchas veces reelectos de forma continua a un cargo elec-
porque estos desacuerdos profundos fueron tivo durante los dos periodos constituciona-
propiciados por los mismos tribunales que han les anteriores, no podrán postularse como
capturado la Constitución popular.52 candidatos al mismo cargo electivo.
Fuente: Ley 1266 de 24 de noviembre 2019.
son claramente políticas y pueden reconfigu- lo determinado por la Ley 1266 y todas las Bajo el debate
rar al texto mismo de la Constitución más allá fuerzas políticas, incluida la del ex mandatario constitucional de
1938 que incorpora
de la interpretación que el Tribunal o la Corte Evo Morales, participaron inscribiendo a sus el régimen social
(1938-1952)
Constitucional podrían hacerlo. Es decir, una candidatos para la celebración de las eleccio-
interpretación excepcional que la realice la co- nes del 17 de octubre de 2020, respetando lo 597
rrelación de fuerzas políticas no expresadas en expresado por la ley 1266 y sin la mínima refe-
institucionalidad alguna. rencia a la sentencia SCP 0084/2017 de 28 de
noviembre de 2018. La Constitución
no escrita
El 24 de noviembre de 2019 se promulgó la ley de Bolivia
Tercer periodo
Bajo el debate
constitucional de
1938 que incorpora
el régimen social
(1938-1952)
601
La Constitución
no escrita
de Bolivia
Caciques, escuelas y sindicatos rurales
Una cartografía de las luchas y organizaciones del campesinado indígena
durante la primera mitad del siglo XX
E
n este texto se presenta un panorama configurando un proceso de trascendentales y Bajo el debate
constitucional de
general de los movimientos indígenas duraderas transformaciones en las relaciones 1938 que incorpora
andinos entre 1900 y 1952 mediante un entre el Estado y la sociedad. Abordar este el régimen social
(1938-1952)
conjunto de crónicas contextualizadas que, en crucial ciclo no es una tarea fácil: se trata de
conjunto, trazan un itinerario temático, tanto de un período formativo, equiparable –salvando 603
tópicos clásicos como de otros menos conocidos. las obvias diferencias– a los primeros 50 años
A partir de una narrativa que tiene por ejes prin- decimonónicos.
cipales a los caciques apoderados, a las escuelas Caciques, escuelas
y sindicatos
rurales y a los sindicatos campesinos, el artículo Caracterizo a este período como formativo rurales
muestra cómo se fue actualizando una cultura en el sentido de que en él se formó realmen-
política indígena proveniente de la época colo- te el moderno Estado nacional boliviano, si
nial, que estaba basada en el uso de la ley, en el bien se trata de un proceso iniciado durante
recurso a las alianzas y eventualmente en el ejer- la centuria de la Independencia. Es un pe-
cicio de la fuerza. El argumento desarrollado es ríodo formativo debido a varios factores, en-
que, tras los objetivos comunes a todos los movi- tre otros, el ascenso y ocaso del liberalismo
mientos aquí abordados y que pueden resumirse como fuerza política hegemónica en un sis-
en control de la tierra y acceso a la educación, tema de partidos más o menos nuevo; el auge
subyacía un proyecto de modernidad alternativa. de la economía minera del estaño junto a sus
extensas consecuencias; la formación del mo-
Palabras clave: Caciques, sindicalismo cam- vimiento obrero mediante el sindicalismo; la
pesino, escuelas rurales, rebeliones indígenas. emergencia del nacionalismo político y de la
izquierda partidaria; la crisis bélica y econó-
mica de los años 30; el renovado interés letra-
Introducción do por la denominada “cuestión indígena”; la
agudización de la expansión latifundista y el
La primera mitad del siglo XX constituye un resurgimiento de las luchas indias adaptadas
período de gran importancia en la historia bo- a los nuevos tiempos: un cóctel de hechos y
liviana, pues durante él se agudizaron muchas fenómenos que hicieron de fermento para las
profundas transformaciones cristalizadas a dirigentes más destacados y cuáles sus orga-
partir de la década de los 50. En otros tér- nizaciones? ¿Cuál fue el grado de articulación
minos, se trata de una época marcada por la de los movimientos indígenas con sectores
irrupción de una nueva modernidad política, urbanos y de elite? ¿Qué impacto tuvieron en
junto con su denso correlato de conflictos la vida política nacional? ¿Hubo un evidente
y contradicciones, cuyos ecos resuenan aún y claro proyecto político en ese largo proceso
hoy en las calles y en los pasillos del poder insurgente, y si fue así, en qué medida o hasta
político. qué punto coincidía o no con los proyectos li-
berales y nacionalistas?
Revisitar esas agitadas décadas, poniendo el
foco de atención en el activismo indígena, El argumento que desarrollo es que el movi-
supone un gran desafío tanto por lo azaroso miento indígena emergido entre 1900 y 1952
de la búsqueda de fuentes primarias, como tiene características que demuestran que los
también por la dificultad de interpretar y considerados “indios” no solo no vivían al
descifrar los ambivalentes discursos y actos margen de la sociedad criolla urbana letrada,
de los protagonistas implicados. El presente sino que también consiguieron desplegar una
texto asume ese desafío con un objetivo do- gran capacidad de llegada, y a veces inciden-
Un amor
ble: por una parte, reconstruir el devenir de cia, en instancias político-administrativas na-
desenfrenado las luchas y organizaciones indígenas andinas cionales, desarrollando a la vez un proyecto
por la libertad
del período en cuestión, articulando un diá- diverso que no siempre fue muy evidente. En
Antología de la
historia política logo con la historiografía especializada a fin otros términos, el conjunto de historias que
de Bolivia
(1825-2020)
de esbozar un panorama general y, por otra, aquí se narran y analizan muestra la construc-
identificar los vacíos de conocimiento aún ción de una cultura política indígena, basada
604 existentes con la ambición de inspirar nuevas primordialmente en la negociación legal y a
investigaciones. veces también en el ejercicio de la fuerza. Si
bien esta cultura política tenía un origen colo-
Tomo I Así, este texto propone ser un fresco inacaba- nial y no era completamente novedosa, lo que
1825-1952
do o más bien un mapa de conjunto con deli- la hizo diferente entre 1900 y 1952 fue que
berados pliegues e intersticios nebulosos que, se articuló a un naciente proyecto de moder-
espero, otros investigadores puedan remover. nidad india, delineado tanto por los propios
En suma, aquí va a encontrarse una síntesis indígenas como por los rasgos específicos del
trans coyuntural actualizada –que inevitable- período.
mente incluye tópicos clásicos como los ca-
ciques apoderados, la educación indígena o Ahora bien, conviene señalar asimismo una li-
el sindicalismo rural– y a la vez una suerte de mitación que tiene que ver con el recorte geo-
agenda subyacente, compuesta por diferentes gráfico. Y es que aquí solo se abordan las lu-
interrogantes y recurrentes temas laterales chas desarrolladas en las regiones andinas del
poco explorados. Pero este ensayo es también país, en los altiplanos y valles centrales del eje
una propuesta interpretativa que discuto en las La Paz, Potosí, Oruro, Chuquisaca y Cocha-
conclusiones. bamba, excluyendo a las amplias zonas orien-
tales y del Chaco y también a los valles del ex-
Las preguntas que me han guiado son las si- tremo sur. Pese a la existencia de estudios que
guientes: ¿cuáles fueron las formas y reper- ya han trazado importantes sendas al respecto,
torios de acción colectiva que adoptaron los es sin duda una labor todavía pendiente explo-
indígenas en sus luchas por la tierra y la justi- rar las peculiaridades de las luchas rurales en
cia? ¿Qué peso tuvo el rol asignado a la educa- aquellas regiones durante la primera mitad del
ción en aquellas luchas? ¿Quiénes fueron los siglo XX.
Finalmente, unos breves apuntes conceptua- En relación a las definiciones y usos de catego-
les y metodológicos. Considero que el uso rías de raza y étnicas, cabe recordar que las eli-
de la noción de “campesinado indígena”, al tes bolivianas se han referido históricamente a
incorporar las dimensiones de clase y etnia, los denominados pueblos originarios andinos
define claramente la doble condición de los simplemente como “indios”, “indígenas”, “ra-
pueblos nativos andinos en tanto trabaja- zas” –“aimara”, “uru” o “quechua”– y partir de
dores rurales y en tanto culturas distintivas los años 30 cada vez más como “campesinos”.
poseedoras de patrones culturales específicos Por su parte, la población racializada andina
como el idioma –en este caso aimara y que- de diversas latitudes ha utilizado también esos
chua mayoritariamente– o una cosmogonía términos para referirse a sí misma. En cuan-
compartida, entre otros elementos. Pero esto to a mi preferencia, utilizo indistintamente
tiene sus matices y conviene recordar algunas los términos “indígena” o “indio”, asumiendo
pautas básicas. que tales expresiones incluyen implícitamen-
te la dimensión de clase- clase campesina-,
Siguiendo una definición operativa formulada aún en los casos en que se daban cambios o
por Guillermo de la Peña, el término “cam- combinaciones de estatus ocupacionales. Sin
pesinado” alude propiamente a un modo de embargo, cuando hago uso del término “cam-
producción y también a una clase social cuya pesino” sin más, lo hago para enfatizar que
característica central es la agricultura a peque- muchos personajes construyeron para sí esa Tercer periodo
ña escala.1 En general suele darse por senta- autoidentificación a fin de combatir la carga Bajo el debate
constitucional de
do que los campesinos son trabajadores ru- peyorativa que el vocablo “indio” podía lle- 1938 que incorpora
el régimen social
rales que poseen cierto control, a veces total, gar a tener en algunos contextos. Esto es lo (1938-1952)
a veces relativo y en ocasiones nulo, sobre la ocurrido, por ejemplo, en el Valle Alto de Co-
tierra que usufructúan y su actividad se basa chabamba desde las primeras décadas del siglo 605
en la fuerza laboral familiar. Mas ello no im- XX, donde los pobladores rurales y trabajado-
plica necesariamente la propiedad de la tierra, res quecha-hablantes consideraron que el tér-
de suerte que la noción puede incluir tanto a mino “campesino” era el más adecuado para Caciques, escuelas
y sindicatos
comunarios y minifundistas como a colonos, referirse a sí mismos, hecho que tampoco les rurales
tes”, y si bien algunas de las tierras usurpadas comunidad. Para las operaciones de compra-
fueron devueltas, las elites criollas continua- venta se desplegaron las llamadas “revisitas” o
ron desarrollando políticas muy concretas y “mesas revisitadoras”: equipos de burócratas
cada vez más elaboradas contra los derechos que calculaban la capacidad de producción de
territoriales de los ayllus. Eso fue la denomi- las estancias de los ayllus, tomaban medidas y
nada Ley de Ex-vinculación de 1874, conside- dividían terrenos para luego exigir la compra
rada por Tristan Platt en varias de sus obras de títulos de propiedad en acuerdo con la nue-
como la primera reforma agraria boliviana. En va ley. Por otro lado, las consideradas “tierras
términos generales tenía el ambicioso objeti- sobrantes” pasarían a propiedad del Estado y
vo de desarrollar un capitalismo agrario como se pondrían a la venta.
complemento a la minería exportadora, crean-
do un mercado de tierras a fin de estimular la La ley tenía también una dimensión tributaria,
formación de propiedades agrícolas grandes y pues planteaba abolir el viejo tributo que se-
rentables. Tal pretensión exigía una condición ría reemplazado por un nuevo impuesto, más
indispensable desde el punto de vista criollo: oneroso, reconceptualizado como “contribu-
la extinción jurídica del ayllu. ción territorial indígena”. Conviene recordar
que el tributo en la época colonial era un gra-
En síntesis, la ley planteaba otorgar a los indí- vamen entregado a la Corona dado que ésta
genas “el derecho de propiedad absoluta” de había impuesto su derecho eminente sobre la
totalidad de la tierra. Las comunidades, por su al sistema económico y territorial andino que
parte, terminaron admitiendo el tributo en el John Murra designó como “control vertical
lento proceso de constitución de la nueva so- de distintos pisos ecológicos”. Al respecto
ciedad colonial, junto a servicios como la mita, Platt recuerda que desde inicios de la Repú-
pues entendieron que sólo así sería posible es- blica la pervivencia del control vertical ge-
tablecer cierta seguridad respecto a sus tierras. neró incomprensión en los administradores
Esto es lo que Platt ha denominado el “pacto del Estado, ya que se consideraba que todos
de reciprocidad”: la entrega puntual de servi- los ayllus debían pertenecer a un mismo can-
cios y un monto de tributo, también conocido tón, provincia y departamento. El descono-
como tasa, a cambio de que el Estado colonial cimiento del ayllu multi cantonal amenazaba
reconozca los derechos colectivos de los ayllus las bases multi ecológicas de las comunida-
a sus tierras, además de ciertos márgenes de des, ya que sus terrenos dispersos a lo largo
autonomía. de amplios territorios eran considerados “tie-
rras sobrantes” del Estado (Platt 2016 [1982],
Era ciertamente un pacto asimétrico y algunas 85-105).
características remiten a las relaciones entre el
Estado incaico y los ayllus. Otros casos para- Este nuevo proceso de despojo contras las co-
Un amor
lelos que pueden servir de comparación son munidades se hacía en nombre de una preten-
desenfrenado los “pactos de vasallaje” de la Edad Media en dida modernidad liberal, basada en una visión
por la libertad
Europa (Platt 2018, 52). Con todo, el punto librecambista y positivista que tuvo expresio-
Antología de la
historia política es que el pacto terminó siendo una garantía nes muy concretas, como el montaje de líneas
de Bolivia
(1825-2020)
para que los indios tuvieran un acceso seguro ferroviarias que permitieron la importación
a la tierra, aunque también es cierto que fue de trigo y harinas baratas desde Chile, afec-
608 de utilidad en unas regiones más que en otras. tando a la importante producción de granos
de los valles cochabambinos y norpotosinos.
Sin embargo, para el Estado republicano las De hecho, los ayllus de Chayanta, en el nor-
Tomo I cosas resultaban distintas, ya que los ayllus te de Potosí, habían estado viviendo un auge
1825-1952
eran vistos como simples usufructuarios de comercial durante la primera mitad del XIX,
tierras fiscales y el tributo era considerado construido a través de su exitosa inserción en
un arriendo (Platt 2016 [1982], 83), uno muy el mercado interno vía producción de cereales.
importante, por cierto, pues el presupuesto Pero el paquete “modernizador” de la reforma
nacional decimonónico era sostenido en gran agraria y tributaria, junto con el librecambis-
medida por esa contribución. mo, hundieron la floreciente economía comu-
naria norpotosina, creándose así el mito del
Tenemos entonces que la Ley de Ex-vincula- “campesino atrasado”, refractario al mercado
ción implicaba no sólo la ruptura de la alianza y dedicado solo a la subsistencia (Platt 2016
política entre el movimiento indígena y las [1982], 105).
elites criollas del país, formada al calor de
resistencia contra Melgarejo, sino también la La Ley de Ex-vinculación tuvo efectos distin-
ruptura del pacto de reciprocidad. Además, tos dependiendo de las regiones. En Cocha-
otorgar a los comunarios el dominio pleno bamba las mesas revisitadoras de dicha ley
de sus tierras a cambio de dinero, permitió operaron desde 1878; en Chayanta desde 1882
el establecimiento de recurrentes procedi- y en otras regiones, como La Paz, recién desde
mientos de compra- venta fraudulentos, que 1888, mediante una serie de reglamentaciones
a la vez autorizaban la enajenación de la tie- y normativas adicionales que se constituyeron
rra, muchas veces contra la voluntad de sus en armas de una compleja lucha entre el Esta-
legítimos dueños. La Ley atentaba asimismo do, los hacendados y las comunidades.
Este es, grosso modo, el telón de fondo sobre el ellos sean atendidos ante los tribunales. Así,
que surgió el movimiento de los caciques apo- en principio, los apoderados suplieron a los
derados. Conviene recordar que el término ca- antiguos caciques y no siempre fueron indí-
cique fue en principio un vocablo arawak que genas (Mendieta 2010, 83-89). Tampoco eran
significaba simplemente “jefe”. Los españoles autoridades originarias en todos los casos,
llevaron la palabra desde el Caribe a otras re- dado que en ocasiones se trataba de personajes
giones del continente y la utilizaron para de- procedentes de orígenes diversos y con esta-
signar a los jefes indígenas cuyos poderes eran tus sociales ambiguos. Como fuere, los nuevos
hereditarios. En los Andes coloniales el térmi- apoderados empezaron a adquirir verdadero
no se aplicó en principio e indistintamente a protagonismo durante la lucha contra Melga-
los mallkus, jefes en aimara, y a los curacas, sus rejo, pero sobre todo en la oposición hacia la
equivalentes en quechua. En la era colonial los Ley de Ex-vinculación, así como también en la
caciques fueron considerados los representan- Guerra Federal.
tes oficiales de la comunidad ante el Estado,
intermediarios étnicos por definición, pero Si bien los apoderados republicanos habían
en la segunda mitad del siglo XVIII su ima- actuado desde la década de 1830, la resisten-
gen estaba en franco deterioro ante los ayllus. cia a la Ley de Ex-vinculación fue el hecho
Hacia la década de las grandes insurrecciones que inauguró su auténtico protagonismo. La
de 1780 los caciques perdieron legitimidad ya oposición de las comunidades indígenas a esta Tercer periodo
que se alejaron de sus bases, constituyéndose legislación consiguió una resolución en 1881 Bajo el debate
constitucional de
en una suerte de aristocracia en la sociedad ru- que autorizaba la emisión de títulos pro-indi- 1938 que incorpora
el régimen social
ral. Amparados en la sucesión hereditaria san- viso para las comunidades que así lo requirie- (1938-1952)
guínea varios de ellos empezaron a convertirse sen. Por otra parte, y de modo muy inteligen-
incluso en terratenientes. Posteriormente, en te, las autoridades de los ayllus se ampararon 609
la temprana República, perdieron importancia en algunos aspectos de la propia Ley de Ex-
y eran simples equivalentes a los jilacatas, au- vinculación. Ésta, por ejemplo, otorgaba la fa-
toridades menores de los ayllus. No obstante, cultad a los indígenas para hacerse representar Caciques, escuelas
y sindicatos
como señala Gotkowitz (2011, 92), a lo largo por “apoderados” precisamente, y no mencio- rurales
del XIX, el término fue retomado y resignifica- naba que éstos no podían ser indígenas. Esto
do desde las comunidades, de manera que los permitió a los comunarios otorgar poderes le-
caciques de las postrimerías decimonónicas y gales a representantes de confianza, surgiendo
de las primeras décadas del siglo XX no siem- así nuevos apoderados que mediante una serie
pre eran caciques de sangre, aunque muchos de demandas obtuvieron una ley dictada el 23
de ellos afirmaban lo contrario para darse le- de noviembre de 1883.
gitimidad ante el Estado.
Dicha legislación fue un verdadero triunfo,
En cuanto al término “apoderado”, y más con- puesto que establecía que “Los terrenos de
cretamente el “apoderado indígena”, alude a origen consolidados en la época del colo-
una figura surgida del vacío de intermediación niaje, mediante cédulas de composición, son
generado por el declive de los caciques a fines de propiedad de sus poseedores, quedando
del siglo XVIII. Considerando que en el Estado excluidos de la Revisita” (Taller de Historia
republicano las autoridades étnicas no cabían Oral Andina –en adelante THOA– 1988, 21;
en los nuevos esquemas legales de la admi- Gotkowitz 2011, 66-67). Tal conquista mar-
nistración pública, se exigió a los indígenas el có con mucha claridad el rumbo que debía
nombramiento de apoderados, o sea represen- seguir la lucha: los comunarios tenían que
tantes legales, conforme una orden suprema buscar las denominadas cédulas de compo-
del 7 de febrero de 1834 para que mediante sición- títulos de propiedad certificados y
expedidos por funcionarios de la Corona a fa- de los ayllus, en el caso del Norte de Potosí.
vor de los caciques coloniales- y legalizarlos. Asimismo, se entreveía una pulsión autonó-
A la vez debían buscar a descendientes legíti- mica expresada en varias acciones y discur-
mos de los antiguos caciques, o al menos que sos que han sido tratados extensamente por
pareciesen serlo, a fin de confirmarlos como los trabajos de Condarco (2011), Mendieta
herederos de las tierras de los ayllus y nom- (2010) y Hylton (2005).
brarlos apoderados para que representen a las
comunidades en los tribunales (THOA 1988, Los apoderados indígenas tuvieron un papel
21). Este procedimiento permitiría proteger de gran relevancia en el conflicto: personajes
las tierras comunitarias y excluirlas de revisi- importantes, pero casi completamente igno-
tas abusivas. Fue así que la lucha legal contra tos como Feliciano Espinosa y Diego Cari
las revisitas se llevó a cabo en La Paz, Oruro Cari, que contribuyeron a la articulación
y Potosí y éstas coincidieron desde la década de descontentos y demandas hasta poco an-
de 1890 con la pugna que el Partido Liberal tes de la guerra, y ya durante ésta fue otro
sostenía contra la oligarquía conservadora, apoderado, Pablo Zarate Willka, quien aca-
generándose las condiciones para la realiza- baría asumiendo el liderazgo militar indio a
ción de una nueva alianza ente los indígenas escala trans regional. Otros líderes indígenas
Un amor
y sectores criollos que culminó con la Guerra importantes en la confrontación fueron Lo-
desenfrenado Federal. renzo Ramírez y Juan Lero, además de dece-
por la libertad
nas de menor relieve, casi todos detenidos y
Antología de la
historia política 1.2. La rebelión de Pacajes y la red la mayoría ajusticiados tras la guerra, cuando
de Bolivia
(1825-2020)
de Santos Marka Tula el Partido Liberal incumplió sus promesas y
desató una ingrata ola represiva contra sus
610 No es casual que la Guerra Federal- desarro- exaliados, dando continuidad a las políticas
llada entre diciembre de 1898 y abril de 1899- de despojos de tierras.3
haya inaugurado el siglo XX, pues fue un su-
Tomo I ceso que dice mucho acerca de las tensiones Si bien las operaciones ex vinculatorias fueron
1825-1952
sociales y étnicas del período. La participa- detenidas con éxito tras la guerra- por ejem-
ción indígena resultó crucial para el derro- plo, en el norte de Potosí donde desde 1902
camiento del régimen conservador: al igual las mesas revisitadoras ya no volvieron dada
que lo ocurrido décadas antes con la caída de la resistencia de los ayllus movilizados-, en
Melgarejo, en 1898 se entretejió una alianza otros lugares, los despojos legales de tierras de
entre indios y sectores criollos alineados en comunidad continuaron y se incrementaron,
torno al Partido Liberal, que logró finalmen- como fue el caso de varias zonas del altiplano
te acabar con el viejo régimen oligárquico, paceño, afectadas también por el impacto ne-
inaugurando así una nueva era política. Y fue gativo que el desarrollo de las vías ferroviarias
la participación indígena lo que inclinó la ba- produjo en la economía campesina y arriera.
lanza a favor de los liberales, quienes habían
asumido una posición populista prometiendo Con todo, la primera década del siglo XX se
la devolución de tierras usurpadas y la verda- vivió una paz tensa que llegó a su fin en 1913.
dera integración ciudadana de todos los sec- Aquel año las invasiones de hacendados a
tores subalternos de la sociedad. Por su parte,
los indígenas participaron en esta contienda
con distintos objetivos buscando enterrar de- 3 La represión liberal postbélica estuvo amparada en
la búsqueda de justicia frente a los terribles excesos
finitivamente los efectos de la Ley de Exvin-
cometidos por varias fuerzas indígenas en Ayo Ayo
culación, pero también como un rechazo a las y Mohoza, tanto contra liberales como contra con-
políticas que destruyeron el auge comercial servadores.
Tercer periodo
Bajo el debate
constitucional de
Campesinos que realizaron una sublevación campesina en la cárcel de San Pedro, 1917, Colección Julio Cordero Castillo. 1938 que incorpora
el régimen social
Fuente: Archivo Fotográfico Ciudad de La Paz, Unidad de Museos Municipales GAMLP, La Paz. (1938-1952)
611
tierras de ayllus en la provincia paceña Pa- ca de títulos de composición coloniales para
cajes y otras adquirieron gran virulencia, contrarrestar legamente la expansión de las
generando hondas preocupaciones entre los haciendas. A su retorno al país, a inicios de Caciques, escuelas
y sindicatos
comunarios. Uno de ellos, llamado Martín 1914, convocó junto a otros líderes a una rurales
Vásquez, decidió que era hora de informarse asamblea en la calle Sagárnaga, el barrio in-
minuciosamente acerca de las leyes. Asistido dígena de la ciudad de La Paz, a la que asis-
por un par de abogados apellidados Monro- tieron aproximadamente 100 delegados de
y,4 Vásquez hizo un viaje hasta Lima en bus- Cochabamba, Sucre y Potosí.
en el Archivo General de la Nación, en Sucre, contó con gremios indígenas de la ciudad: al- Bajo el debate
constitucional de
una vez hubo obtenido copias debidamente le- bañiles, cargadores y otros sectores artesanales 1938 que incorpora
el régimen social
galizadas (THOA 1988, 25-30). que constituían una suerte de ayllus urbanos. (1938-1952)
Más adelante, en 1928 y ya en libertad, Marka
Toda esta búsqueda tuvo ribetes épicos y, como Tula concibió la idea de fundar una organiza- 613
señala Silvia Rivera, permitió la creación de un ción específica para promover la creación de
horizonte de memoria colectiva: los elementos escuelas en el campo.
de un pasado lejano, que yacían en los papeles Caciques, escuelas
y sindicatos
viejos, se reproducían a través de la tradición Aquí conviene mencionar algunos hechos rurales
oral de los cuentos y de los mitos (1986, 46). importantes del contexto político que en al-
En efecto, existía un componente místico en guna medida abrieron oportunidades a la lu-
la lucha cacical: todo indica que Marka Tula cha indígena. Y es que los quiebres al interior
se sentía portador de una verdad ancestral y de de la elite liberal, junto a la importación de
hecho acudía a los espíritus tutelares andinos nuevas ideas políticas, generaron la aparición
para cuidar los títulos coloniales, lo que con- de nuevas organizaciones partidarias ansiosas
llevó la incorporación de los mismos en ciertas de contar con apoyos populares e indígenas.
prácticas rituales purificando los papeles anti- La primera en orden de importancia fue la
guos con ceremonias, que incluían sacrificios Unión Republicana, nacida en 1914, entidad
de animales, para proteger a sus portadores de conocida también como Partido Republicano.
las fuerzas malignas que podían traer consigo Estuvo liderada por el célebre abogado Bau-
(THOA 1988, 33).5 El movimiento de caciques tista Saavedra, quien intentó seducir a los ca-
apoderados generó así una notable conexión ciques apoderados y lo logró en cierto grado,
mediante la ayuda legal que les brindó en al-
gunas gestiones. Este personaje llegó al poder
5 Hasta la actualidad ciertos papeles escritos son usa- en julio de 1920 mediante una mezcla de golpe
dos en sesiones chamánicas andinas, llegando a ser
de Estado y revuelta, dando fin a 21 años de
considerados fuentes de poder, tanto por los men-
sajes que pueden contener como por su sola mate- gobiernos liberales de los que al final no se di-
rialidad sacralizada (Platt 2018, 29-43). ferenció mucho.
Un amor
desenfrenado
por la libertad
Antología de la
historia política
de Bolivia Jilakatas en la Policía, tras haber realizado una sublevación campesina, 1917, Colección Julio Cordero Castillo.
(1825-2020) Fuente: Archivo Fotográfico Ciudad de La Paz, Unidad de Museos Municipales GAMLP, La Paz.
614
Añádase a esto que Saavedra empezó a gober- ejército perpetró la primera masacre obrera
nar en medio de la primera crisis económica boliviana contra una organización de mineros
Tomo I de consideración para el país en el siglo XX y y artesanos que luchaba por el derecho a la
1825-1952
para intentar superarla aplicó una serie de ac- organización sindical.
ciones represivas, pero paradójicamente bar-
nizaba su gestión con una pigmentación obre- En medio de una seguidilla de contextos de
ra y popular a través de ciertas leyes sociales, crisis Marka Tula consiguió crear la organi-
además de aprobar solicitudes para establecer zación educativa que había ido proyectando
escuelas rurales gestionadas por los caciques desde 1928. Así, a inicios de los años 30 –en
apoderados. Su gobierno inició un nuevo ci- 1930, según Soria (1992, 64), y en 1932 se-
clo político marcado por dos hechos trágicos. gún el THOA (1988, 47)– se fundó el Cen-
El primero de ellos sucedió en marzo de 1921 tro Educativo de Aborígenes Bartolomé de
cuando indígenas del cantón Jesús de Macha- las Casas. Esta organización fue en parte un
ca, hartos de la injusticia, se sublevaron dando producto de los vínculos entre los caciques
muerte al corregidor y a algunos funcionarios apoderados y la Iglesia, a través de curas de
locales y hacendados, por lo que el gobierno parroquias de la zona oeste de la ciudad de La
envió inmediatamente tropas al lugar. El re- Paz que eventualmente colaboraban con los
sultado fue una masacre que cobró la vida de indígenas (Soria 1992, 63). Los antecedentes
varias decenas de indígenas, matanza acom- de tales nexos los estableció el propio Mar-
pañada de casas incendiadas, violaciones y un ka Tula en 1925 cuando solicitó a la Diócesis
sinfín de crueles atropellos. El segundo hecho de La Paz ayuda y protección desde la cárcel.
trágico del período ocurrió el 4 de junio de Más tarde se contactó con la Iglesia Adven-
1923 en Uncía, en el Norte Potosí, donde el tista en procura de apoyo a la fundación de
escuelas en las comunidades. Años después, Local. Cusicanqui era amigo de Marka Tula
en 1939, pocos meses antes de su muerte, y aparte de cierto asesoramiento le daba tam-
asistió al Segundo Congreso Eucarístico en bién cobijo en su propia casa (Lehm y Rivera
La Paz, donde junto a otros caciques pidió 1988, 41). De este modo y con tales apoyos
que los “españoles” abandonen la tierra ocu- el Centro Bartolomé de Las Casas vivió un
pada (THOA 1988, 49 y 50). efímero período de intensa actividad durante
sus primeros cuatro años, concentrando sus
Volviendo al Centro Bartolomé de las Casas, acciones en la creación de escuelas rurales, las
vale la pena conocer algunos de sus estatutos cuales llegaron en 1931 al número de 96 a lo
elaborados quizá con la ayuda de los párrocos largo de ocho provincias del departamento de
que apoyaban al movimiento indígena: La Paz, afrontando un sinfín de dificultades
y la oposición de muchos hacendados (Soria
Son sus objetivos fundar escuelas con los 1992, 66; Conde 1992, 114).
métodos más modernos de pedagogía, di-
vulgar los sistemas agrarios útiles a la pro- En este contexto de expansión de la red de
ducción, economía y bienestar del indio. Marka Tula advino la Guerra del Chaco junto
Militarizar al indio para fortalecer más a su a una gran ola de transformaciones. El con-
raza y contar en su conjunto con una fuerza flicto bélico puso a los caciques apoderados
poderosa, efectiva para hacer que el indio frente a varios dilemas y disyuntivas, mien- Tercer periodo
practique una clara conciencia de la religión tras la represión crecía y el país se hundía Bajo el debate
constitucional de
católica y una moral evangélica. El centro entre las trincheras internas y externas. Tras 1938 que incorpora
el régimen social
no se inmiscuirá en política de partidos, la guerra el panorama político configuró un (1938-1952)
su estandarte es la bandera nacional (Soria nuevo escenario que en gran medida era pro-
1992, 65). picio para la continuidad de la lucha indígena. 615
No obstante, muchas cosas habían cambiado
Este fragmento es una muestra del modo en y nuevas generaciones de líderes estaban ma-
que los líderes indios utilizaban la retórica ci- duras para un recambio generacional y tam- Caciques, escuelas
y sindicatos
vilizatoria de las elites criollas y las apelacio- bién regional. rurales
La organización contó con el apoyo de inte- 6 El kharisiri es un siniestro personaje de origen co-
lectuales como Jaime Mendoza, pero asimis- lonial al que se le atribuyen poderes místicos: se
mo de sectores populares. Se sabe, por ejem- supone que saca la grasa a sus víctimas para prepa-
rar y vender ungüentos y pócimas. En sus inicios se
plo, que Marka Tula conocía muy bien a Luis
asociaba a los curas y con el tiempo ha generado un
Cusicanqui, un famoso anarcosindicalista y complejo fenómeno pan-andino, al punto de con-
dirigente de la legendaria Federación Obrera vertirse en un motivo ya clásico de la antropología
dolo. Hallado el cadáver después, con el pe- un lugar común y simplificador. Me refiero al
cho abierto, alguien extrajo el corazón para estigma de mestizaje que se ha construido en
depositarlo en una fuente sin esperar el suceso torno a la historia regional cochabambina con
extraordinario que estaba por acontecer, pues base en la idea de una temprana extinción de
del órgano extraído empezaron a brotar flores todo rastro de ayllus. Conviene sintetizar al-
(THOA 1988, 51 y 54). La tradición oral de gunos puntos importantes al respeto.
este final mítico encierra una paradoja reve-
ladora. Aunque el fenómeno del kharisiri se Lo que hoy constituye el departamento de
ha transformado en la actualidad, en el caso Cochabamba fue desde épocas remotas el lu-
de la muerte de Marka Tula funciona como gar de encuentro de diversos grupos étnicos
una verdadera metáfora del colonialismo. En cuyos núcleos estaban en otras partes. Las
principio el cura –y me refiero al cura como intermitentes migraciones de etnias altipláni-
símbolo– es un agente tradicional de la opre- cas a los valles centrales se produjeron por las
sión, que en ocasiones actúa como potencial políticas expansionistas de los estados inca y
aliado y promete ayuda sobrenatural. Pero luego peninsular desde inicios del siglo XVI.
ambas facetas se entremezclan en este caso, Desde entonces, como ha mostrado Brooke
pues tal como puede ayudar al indio también Larson (1992), las múltiples interacciones de
Un amor
puede extraerle la energía vital para susten- los indios que permanecieron en los valles
desenfrenado tar un sistema de dominación y lubricar sus con los españoles dieron forma a un impor-
por la libertad
engranajes, acabando al mismo tiempo con tante mestizaje cultural en torno a la agricul-
Antología de la
historia política una vida peligrosa desde la óptica criolla. No tura comercial, proceso que a la larga gene-
de Bolivia
(1825-2020)
obstante, el mito hace florecer el corazón de ró la aparición de un creciente campesinado
Marka Tula en las mentes de sus allegados, con vínculos comunitarios débiles, que fue
616 quizá como una forma de asumir que la vida insertándose hábilmente en el mercado para
y la lucha iban a continuar inevitablemente y obtener medios económicos independientes.
pese a todo. Por su parte, Leandro Condori, En ese largo proceso las fronteras étnicas se
Tomo I el escribano principal de Marka Tula, presen- entrecruzaron hasta hacerse incomprensibles
1825-1952
ta una visión menos romántica. Aunque no debido a que los indígenas llegados a las ha-
ofrece muchos detalles, Condori insinúa que ciendas buscaban borrar su “indianidad” y
alguien habría agredido al cacique poco des- pasar por “mestizos” para evadir el control
pués del congreso eucarístico al que asistió, estatal y las cargas fiscales. Ahora bien, es
muriendo luego en un hospital de la ciudad de cierto que esta configuración cultural definió
La Paz (Condori y Ticona 1992, 100). el devenir regional general, pero no implicó
la completa “desaparición” de los indígenas y
1.3. La desconocida historia de los caciques sus comunidades, pues a principios del siglo
apoderados de Cochabamba XX todavía pervivían algunos fragmentos de
y la reinvención de la comunidad antiguos ayllus que evidentemente se habían
transformado y estaban restringidos en zonas
Durante mucho tiempo se ha considerado a como Vacas, Pocona, Arque, Ayopaya y Ta-
Cochabamba como a una región carente de pacarí.
identidades étnicas, lo cual es evidentemente
El caso de Vacas es especial pues fue ahí don-
andina por sus múltiples implicaciones. En versio- de surgió el movimiento de caciques apode-
nes más recientes los kharisiris son también “dego- rados cochabambinos que hacían parte de la
lladores” e incluso traficantes de órganos. Véase red de Marka Tula. Se trata de una zona fría
el trabajo de Alison Spedding, Sueños, kharisiris y
curanderos. Dinámicas de las creencias en los Andes con-
y de altura ubicada al este del Valle Alto, en
temporáneos (La Paz: Mama Huaco, 2011). la cual durante la colonia española se había
establecido una viceparroquia que era “toda Con el paso del tiempo la situación fue a peor
de indios”, según la describió Francisco de para los indios, pues el Concejo Municipal em-
Viedma en las postrimerías del siglo XVIII pezó a vender algunas tierras en la década de
(Mercado 1994, 68). Era una suerte de puna 1860, durante el contexto melgarejista, lo que
rodeada de llanuras y colinas que poseía tierras originó la aparición de hacendados con preten-
fértiles y un sistema de lagunas naturales que siones latifundistas que erosionaron gradual-
garantizaban buenas pasturas para el ganado. mente el dominio indígena. Los nuevos propie-
En 1830 Alcide D’Orbigny describió Vacas tarios aspiraban al control total de los recursos
como un villorrio de 50 casas de techos de lacustres, a la vez que sobreexplotaban la fuerza
paja, en el que no había corregidor ni alcalde. de trabajo de los colonos. Ello provocó descon-
Encontró allí sólo un cura rodeado de “indios tentos y pequeñas rebeliones, la más destacable
quichua” (1958 [1830], 121-122). En realidad, en 1873, que produjo algunos muertos por ar-
pervivían allí residuos orgánicos de comple- mas de fuego (Mercado 1994, 67-78).
jos mosaicos multiétnicos prehispánicos, que
con el tiempo homogenizaron su lengua con Frente a todo esto, tanto comunarios como
el quechua y consiguieron mantener sus tradi- colonos se vieron forzados a usar otras formas
cionales formas de vida y modos organizativos de resistencia, como sabotaje, robos y abigea-
y agrícolas pese al colonialismo. Además del tos dirigidos contra las nuevas haciendas. No
villorrio lo que había en la zona eran dos tipos obstante, nada fue suficiente ante la arreme- Tercer periodo
de estancias- en este caso casas campesinas-: tida de la Ley de Ex-vinculación que empezó Bajo el debate
constitucional de
unas que formaban parte de lo quedó de anti- a aplicarse en la zona desde 1879 mediante 1938 que incorpora
el régimen social
guos ayllus y otras dispersas habitadas por in- una revisita que parceló las tierras comunales, (1938-1952)
dios forasteros arribados por los flujos migra- asignando “hilos” de terreno a los comunarios
torios coloniales. La economía estaba basada con sus respectivos títulos de propiedad indi- 617
en la cría de ganado y en el cultivo de papa, vidual.7 Posteriormente algunos hilatarios –los
cebada y habas. Junto con otras comunidades poseedores de hilos– fueron estafados y termi-
en Pocona y Chimboata, Vacas era parte de naron vendiendo sus parcelas a hacendados y Caciques, escuelas
y sindicatos
un eje de intercambios inter-ecológicos que se mestizos del antiguo villorrio, transformándo- rurales
vieron afectados por la gradual incursión del se poco después en colonos en sus anteriores
Estado republicano desde fines de la década de propias tierras. Además, la revisita identificó
1820, cuando tempranas revisitas descubrie- muchas “tierras sobrantes” que el municipio
ron “tierras sobrantes”. Desde entonces toda no tardó en ocupar y en poner en arriendo
la zona pasó al dominio del Estado a través del únicamente a “locatarios emprendedores”.
municipio cochabambino y se previó que las
utilidades que se generasen fuesen destinadas
a la educación pública de la ciudad. 7 Un “hilo” eran una fracción de tierra compuesta por
ocho hectáreas. La asignación de los hilos excluyó a
la gran cantidad de indios forasteros que quedaron
En esas “tierras sobrantes” se fueron constru- sin acceso a la tierra, pasando a convertirse en co-
yendo rápidamente una serie de fincas que el lonos de las haciendas, tanto de las privadas, como
Concejo Municipal de Cochabamba empezó de las pertenecientes al municipio (Mercado 1994,
83). Con el tiempo también se daba la paradójica
a arrendar a ávidos hacendados del Valle Alto.
situación de hilatarios que aún mantenían sus hilos,
Las fincas invadieron terrenos de las estancias pero que a la vez arrendaban pequeños fragmentos
indígenas y poco a poco los indios forasteros de hacienda sometiéndose al colonato, quizá como
acabaron convirtiéndose en colonos, o sea en un intento de reponer su mellada economía campe-
sina o por haber perdido acceso a tierras de pasto-
campesinos sin tierra obligados a intercambiar
reo. La figura de colonos que eran al mismo tiem-
fuerza de trabajo servil a cambio de parcelas de po pequeños propietarios es irónica y ejemplifica la
subsistencia. complejidad de las relaciones laborales rurales.
A inicios del siglo XX la presión sobre la mano en 1915 y fue un viaje exitoso pues Rosa y los
de obra y el cobro de “herbaje” para que los suyos hallaron un expediente del siglo XVII
animales de los colonos e hilatarios puedan que reconocía estancias comunales en Vacas
pastar en terrenos que ya no eran suyos, oca- y establecía sus linderos. Desde entonces se
sionaron nuevas pequeñas sublevaciones y forjó un tejido de dirigentes que se expandie-
un estado de tensión permanente en la zona ron desde Vacas hacia un gran territorio que
(Mercado 1994, 83-84). Allí aparecieron los incluía el Valle Alto y Pocona, solicitando a
caciques Guillermo Cruz y Mariano Rosa, hilatarios y colonos aportes económicos para
personajes desconocidos hasta su descubri- subvencionar trámites y más viajes, correrías
miento documental por parte de David Mer- en las que, al parecer, también se barajaba la
cado a inicios de la década de 1990 y redescu- posibilidad de un alzamiento, aunque esto úl-
biertos después por los hallazgos archivísticos timo no queda totalmente claro.
de Laura Gotkowitz. Por mi parte tuve la suer-
te de encontrar en el Archivo del Juzgado de Toda esta trama salió a la luz debido a la de-
Totora, en adelante AJT, un nuevo expediente nuncia de un tal Carlos Cámara, administra-
elaborado en 1916: el primer documento ge- dor de haciendas en Vacas y otras zonas, quien
nerado en torno a estos caciques. Se trata de el 31 de julio de 1916 elevó una airada denun-
Un amor
un documento voluminoso, sin catalogación y cia ante el prefecto del departamento. Cámara
desenfrenado sin portada, compuesto por 408 folios escritos aseguraba que “desde hace tiempo” los colo-
por la libertad
entre julio de 1916 y enero de 1918. A conti- nos rehuían el cumplimiento de sus “obliga-
Antología de la
historia política nuación, una síntesis de lo que puede extraerse ciones” desobedeciendo “órdenes concretas”,
de Bolivia
(1825-2020)
de este conjunto de fuentes. actos “en desmedro no solo de la autoridad del
patrón sino también […] del correcto funcio-
618 Tanto Cruz como Rosa se autodefinieron de namiento y normal administración de la pro-
distintas maneras en los escasos rastros docu- piedad [municipal]”. Para él se trataba “de una
mentales que han dejado: a veces “vecinos de sublevación” extendida, que incluía a los indí-
Tomo I Vacas y agricultores” y en otras ocasiones “in- genas de Vacas, Pocona y Totora. Añadía que
1825-1952
dígenas principales y comunarios” o solamente los supuestos sublevados “habían acordado
“caciques principales”. Eran hilatarios y a la vez apoderarse de todas las propiedades, pasando
colonos en una de las fincas municipales. Tuvie- a degüello a cuanto blanco encuentren”, rea-
ron contacto con la red de Marka Tula y por los lizando “conciliábulos nocturnos” y “bacana-
indicios existentes se puede conjeturar que los les” (AJT 1916-1917, 1v, 1r).
emisarios de Martín Vásquez llegaron a Vacas,
reclutando delegados para la asamblea de 1914 A partir de ese momento la paranoia de una
que fundó el movimiento en La Paz. Es posible inminente “sublevación general de la india-
que Cruz, Rosa y otros hilatarios de la zona ha- da” movilizó al aparato judicial y aparecieron
yan estado presentes en aquella asamblea. nuevos denunciantes entre varios hacendados
y vecinos de Vacas. Uno de ellos señaló lo si-
El caso es que hacia fines de 1914 ya tenían guiente al juez designado al caso: “Quieren
montada una red clandestina de activistas. En adueñarse de estos terrenos porque creen que
esa dinámica Rosa y Cruz organizaron una co- les pertenecen desde su origen”. Con este ob-
misión para viajar a Sucre, junto a caciques de jeto los indios andaban “caminando de noche,
La Paz, en procura de hallar documentación de rancho en rancho y casa en casa, alimen-
virreinal en el Archivo General de la Nación tando esta idea y propagándola”, pero además
que acreditase la propiedad comunal del terri- enviaban comisiones “a Sucre y los altos de
torio en el que se había constituido el latifun- La Paz para ponerse de acuerdo con los fe-
dio municipal. Esto ocurrió probablemente roces indígenas del altiplano”. Por último,
iban “comprando armas” y tenían “suficien- y Rosa, dedicados a recaudar “contribuciones
tes a su disposición” (AJT 1916, 2v, 3r.). Este […] para ir a Sucre a sacar testimonios de los
tono alarmista generó una ola de detenciones títulos primitivos de la finca de Vacas”. Algu-
en Vacas y Pocona mediante requisas sorpresa nos detenidos obligados a hablar “confesaron”
por la noche. En menos de una semana hubo que los dirigentes manifestaban “que ya no
más de medio centenar de detenidos a los que tendríamos patrones y que los indígenas serían
se les inició rápidamente procesos sumarios. dueños pagando una tasa moderada; han en-
sañado títulos primordiales, testimonios que
La mayoría de los aprehendidos y los citados a han traído de Sucre”. Además, añadieron los
declarar afirmaron que la movilización estaba informantes más locuaces, vendrían los “tatas”
dedicada a realizar trámites legales y en ningún del altiplano que ya “habían botado a sus pa-
caso a preparar una rebelión armada. Sin em- trones” y que a quienes no se sumasen a la mo-
bargo, los denunciantes insistían en destacar la vilización los despedirían junto a los hacenda-
presunta dimensión subversiva y armada del dos. Para ello los caciques caminaban de “aillo
movimiento: el juez mencionó cuatro cajones en aillo” y “contaban con miles de laris del al-
de dinamita incautados “para la sublevación”, tiplano y tres mil soldados que deberían venir
y “saqueos” de trojes y de haciendas en las que para [la fiesta de] San Andrés, inmediatamente
los conjurados buscaban armas y se llevaban [después] de ganar el pleito en La Paz”. Otro
especies (AJT 1916-1917, 22 r, 32 r). Otro tema testigo afirmó que Rosa le ofreció un terreno Tercer periodo
de insistencia del juez y los demandantes era la y escuchó que vendrían “nuevos patrones” a Bajo el debate
constitucional de
presencia en Vacas de caciques llegados desde Vacas, unos “laris” que “iban a volver por los 1938 que incorpora
el régimen social
La Paz. Al respecto llama también la atención, cerros a tomar posesión de los terrenos” (AJT (1938-1952)
en las declaraciones de aprehendidos y en las 1916-1917, 20 v).
de testigos de cargo y descargo, la recurrente 619
mención a los “laris”, en referencia quizá a los Las detenciones continuaron y también las de-
delegados del altiplano paceño, como asimis- claraciones, los careos y los extensos desfiles de
mo a los habitantes de las estancias más leja- testigos de uno y otro lado. Otro detenido de Caciques, escuelas
y sindicatos
nas y altas de la zona, lo cual insinúa una dife- Pocona mencionó a un tal Jacobino Condori rurales
renciación interna entre los movilizados: una quien “titulándose descendiente del antiguo ca-
verdadera alteridad al interior de los sectores cique o curaca, ha caminado recolectando cuo-
subalternos que merecería más atención.8 tas de los indios para entregar a un Guillermo
Cruz de Vacas, para que estos y otros que ha-
A medida que avanzaba el proceso judicial fue- bían hecho cabeza gestionen y saquen en lim-
ron saliendo más detalles: no existía un cabeci- pio los hilos y terrenos sobrantes para convertir
lla sino varios, entre los que destacaban Cruz en comunidad y entrar en antiguo régimen de
sus antepasados”. Con toda esa información re-
colectada, Cruz no tardó en caer preso y dijo
8 Lari es un término polisémico, usado tanto en que-
chua como en aimara, que hace referencia al zorro que desde antes del carnaval Mariano Rosa
y más en general a lo “salvaje”. Se aplicaba también había estado “caminando entre los indígenas
a los indios habitantes de las punas más remotas haciéndoles comprender que todos los terrenos
y de las montañas más elevadas que conformaban
eran comunidad, que tenían títulos y que para
comunidades más o menos aisladas y monolingües.
En Cochabamba era un término usado por el pro- hacer las gestiones pusieran cuotas”.
pio campesinado valluno que se auto-distinguía de
los habitantes de zonas altas de cordillera, tenidos Esta conversación habría ocurrido en Cliza.
por temibles. En el caso de Vacas, algunas declara-
“Me avisó que el plan era general de los de-
ciones halladas en el expediente arriba citado su-
gieren tensiones territoriales entre los “laris” de las partamentos de Potosí, Sucre y Cochabamba y
alturas y los colonos de la finca municipal. La Paz”. Agregó que las cuotas de dinero eran
voluntarias con objeto de “sacar los títulos y decidieron ampliar sus estrategias legales.
primordiales que Rosa, no sé de cómo, había En 1919 requirieron la inscripción de títulos
sabido que existían en Sucre, títulos que me coloniales de “tierras de origen” en la Ofici-
afirmó eran de nuestros abuelos”. En Sucre na de Derechos Reales de la provincia Arani.
se encontraron con caciques de La Paz, Po- Pedían a la vez al prefecto del departamento la
tosí y Chuquisaca, como Feliciano Condori, “protocolización de obrados” referentes a las
cercano a Marka Tula, y con la ayuda de un tierras de Vacas que los caciques identificaron
abogado obtuvieron copias de “títulos y cédu- en un documento de 1651, el cual acreditaba
las reales del rey Felipe”. Entretanto, habían que dichos terrenos lindaban con estancias de
presentado los escritos obtenidos en Sucre a “comunidades de indios”: una prueba de que
la prefectura de Cochabamba mientras que en existían territorios comunales y con linderos
La Paz tomaron otro abogado para hacer re- claros y consolidados durante la época colo-
clamaciones ante el Congreso, estableciendo nial. El problema fue que los burócratas que
asimismo contacto con ministros y diputados. procesaban los documentos eliminaron mali-
Cruz concluyó negando el levantamiento e ciosamente de los papeles la parte de los lin-
insistió en que lo único que hicieron fue una deros establecidos entre las haciendas y las tie-
serie de gestiones para conseguir “nuestras rras de los antiguos ayllus (Mercado 1994, 92).
Un amor
pretensiones comunarias conforme al régimen
desenfrenado antiguo incásico”. Al final de sus declaraciones Pese a todas las dificultades los caciques no
por la libertad
firmó un abogado por él, porque no sabía leer abandonaron sus ofensivas legales y solicita-
Antología de la
historia política ni escribir, por lo cual fue calificado por el juez ron al ministro de Hacienda que declare nula
de Bolivia
(1825-2020)
como “indígena perspicaz” pero “ignorante” y sin efecto la revisita de 1879, pidiendo a la
(AJT 1916-1917, 29 r, 31 v). vez un nuevo deslinde según títulos coloniales.
620 Paralelamente optaron por la interpretación
En el transcurso de la investigación salieron a la estratégica de las leyes, usando una de 1871
luz las cargas de obligaciones que los hacenda- que declaraba la restitución de tierras comu-
Tomo I dos hacían recaer sobre sus colonos, “maneján- nitarias tras la caída de Melgarejo y también
1825-1952
dose a chicotes”, en especial el patrón Cámara la propia legislación ex-vinculatoria, apelando
que amenazaba con quemar casas y ejecutar a los “derechos absolutos”, pues para aquellos
severos castigos corporales (AJT 1916-1917, 24 caciques no importaba si ellos eran propieta-
r). De hecho, los patrones y arrenderos pudien- rios de sus estancias como individuos o como
tes, junto al corregidor de Vacas, aprovecharon comunidad, sus “derechos eran absolutos”.
la detención de los dirigentes indígenas y usu- No obstante, el problema era que las inter-
fructuaron abusivamente sus sementeras y sus pretaciones que hacían los caciques resultaban
animales (AJT 1916-1917, 305 r). Los deteni- equivocadas e infundadas ante las autorida-
dos, incluyendo a Cruz, estuvieron presos en des. En un sugerente análisis al respecto, Go-
distintas cárceles del Valle Alto durante casi un tkowitz (2011, 119 y 121) señala que, de modo
año, pero al final la Corte Superior de Distri- insospechado, la privatización generó nuevas
to de Cochabamba dictaminó a su favor por no formas de comunidades, sustentadas en distin-
hallarse evidencias contundentes sobre el pre- tos modos de ocupación de la tierra que com-
sunto alzamiento armado. binaban la pequeña propiedad, el colonato y
la comunidad. Esto es doblemente interesante
Una vez en libertad, Cruz continuó la lucha considerando que el movimiento cacical de
junto a otros dirigentes como Mariano Vás- Vacas se extendió hacia el campesinado del
quez y Feliciano Salazar. Todos ellos junto Valle Alto, Cliza y Punata, zonas donde ha-
a Rosa, quien por cierto no había caído pre- cía tiempo ya no existían comunidades indias
so, se autoproclamaron caciques originarios reclamando territorios prehispánicos perdidos
y redescubiertos en los expedientes coloniales, internas- por ejemplo, algunas comunidades,
que hasta dos siglos antes pertenecían a gru- guiándose por papeles coloniales, acabaron re-
pos étnicos de tierras altas. clamando tierras que ya estaban ocupadas por
otras comunidades-, pero también por la gran
Ante esta situación las autoridades quedaban un crisis social desatada por la Guerra del Chaco
poco perplejas, mas no dudaron en desconocer (Gotkowitz 2011, 143). Los líderes de Vacas
tanto la existencia de caciques como de ayllus. desaparecieron y no se supo nada más de ellos,
Por ejemplo, Guillermo Urquidi, abogado del salvo que, en el caso de Cruz, vivió un tiempo
municipio, hacendado y también concejal, afir- en La Paz como portero y cargador, integrado
maba en 1928 que Rosa se había atribuido “el a un barrio indígena de la ciudad. Con todo,
título de cacique de una comunidad de indios la lucha continuó mediante nuevos brotes de
que al presente no existe”. De forma parecida conflictos a lo largo de los años 30, cuando
los subprefectos de Arani y de Totora sostu- la estrategia se orientó enteramente hacia el
vieron una y otra vez que no existían comu- arrendamiento, la sindicalización y la apuesta
nidades indígenas en sus jurisdicciones a raíz total por la educación.
de la Ley de Exvinculación. Por su lado Cruz
ostentaba siempre que podía su condición de Esta historia rompe el estereotipo que tiende a
“cacique principal, supuestamente “de sangre”, homogenizar al campesinado de Cochabamba
de Yanatama, una de las estancias de Vacas, y lo en la figura del “mestizo individualista”, parce- Tercer periodo
mismo hacían sus compañeros de lucha, pese lario y sin identidad étnica. El caso presentado Bajo el debate
constitucional de
a que el subprefecto de Totora insistió en que revela la existencia de varios campesinados en 1938 que incorpora
el régimen social
Rosa no era cacique, sino sencillamente un la región, mostrando que uno de ellos, asenta- (1938-1952)
indígena con tierras. Otro de los caciques de do en Vacas, apeló al pasado remoto, no sólo
Vacas, Feliciano Salazar, fue catalogado por el colonial, sino también “incásico”. Como seña- 621
mismo subprefecto como un “mestizo” o “cho- la Mercado (1994, 102), la emergencia indíge-
lo” (Gotkowitz 2011, 116-124). na de Vacas insinúa la construcción de un hori-
zonte utópico basado en la reconstrucción del Caciques, escuelas
y sindicatos
Dado que las estrategias desplegadas en torno ayllu. Sea que se trate de una reconstrucción o rurales
a los títulos coloniales no estaban funcionado de una reinvención, no cabe duda de que aque-
Cruz y Rosa redirigieron estratégicamente sus llos indígenas que revivieron la autoridad de
demandas contra los abusos patronales, pues los caciques, combinando la imaginación con
era más fácil que las autoridades atiendan tales la memoria y las leyes, crearon también una
reclamos, pero los caciques siempre hacían sus suerte de etnogénesis, una indianidad renova-
conexiones argumentales y de contexto: los da en zonas donde el Estado daba por sentado
abusadores eran a la vez usurpadores de tie- la inexistencia de comunidades indígenas.
rras. Al mismo tiempo tomaron contacto con
caciques de Tapacarí, coordinando varias ac-
ciones conjuntas. Tales reclamos empezaron a 2. Nuevos dirigentes, la cuestión
combinarse con la demanda de educación: en educativa y la guerra
1925 los caciques solicitaron permisos para la
creación de escuelas rurales y hacia 1928 un 2.1. Eduardo Nina Qhispi y Warisata
documento menciona que Cruz había creado
escuelas en seis estancias de Vacas, a pesar del Paralelamente a la extensa red de Marka Tula,
sostenido boicot del corregidor del pueblo. durante los años 20 habían ido surgiendo otros
grupos de dirigentes, uno de ellos liderado por
A inicios de la década siguiente la red de Cruz, Eduardo Nina Qhispi. Este fue un comunario
Rosa y Ramos desapareció, quizá por disputas originario de Taraqu, en la provincia Ingavi de
La Paz, zona apetecida por poderosos hacen- Dicha reforma ampliaba la posibilidad de que
dados que desde inicios del siglo XX realizaron los indígenas puedan crear sus propias escue-
una serie de usurpaciones en tierras de ayllus. las particulares, es decir privadas, que eran
Entre 1920 y 1922 los comunarios de la zona, hasta cierto punto apoyadas legal y adminis-
cansados del permanente hostigamiento, de- trativamente por el Estado, aunque después
clararon un estado de rebelión permanente, quedaban fuera de su control directo. En
pero los hacendados consiguieron expandir otros términos, el Estado acabó delegando
sus fronteras sobre las comunidades por la por un tiempo sus responsabilidades a los
fuerza y Nina Qhispi fue expulsado de su es- propios indígenas, lo que presentaba ventajas
tancia (Mamani 1991, 81). y desventajas, pero esto cambió paulatina-
mente después de la Guerra del Chaco (Brie-
Arribado a una zona de la ciudad de La Paz nen 2005, 137).
habitada por gremios de artesanos, aprendió
a leer autodidactamente e instaló una escuela Retomando la saga de Nina Qhispi, es pre-
en su propia morada, donde procedió a alfa- ciso advertir que sus actividades entraron
betizar a los hijos de los matarifes, todos ellos lógicamente en conexión con las de los ca-
migrantes aimaras como él. Dicha labor, rea- ciques apoderados y ese encuentro reveló no
Un amor
lizada a partir de 1926, obtuvo rápidamente sólo la heterogeneidad del movimiento in-
desenfrenado el apoyo de las autoridades educativas que dígena, sino también el paulatino ocaso que
por la libertad
le concedieron un aula y material escolar en aquellos estaban empezando a experimentar.
Antología de la
historia política una escuela municipal. Más adelante Nina Al respecto resulta revelador el testimonio de
de Bolivia
(1825-2020)
Qhispi se entrevistó personalmente con el Leandro Condori, un personaje que al igual
presidente Hernando Siles, quien le brindó que Nina Qhispi, tuvo que escapar de su ayllu
622 el apoyo logístico necesario para crear un debido a los inadmisibles abusos y despojos
centro educativo en 1928, llamado Escuela cometidos por los patrones de haciendas ex-
Nocturna de Indígenas. Un año más tarde pansionistas.
Tomo I fundó la Sociedad República del Kollasu-
1825-1952
yo –en algunas ocasiones llamada Sociedad
de Educación Indigenal Kollasuyo– entidad
latinoamericanos. Fue ese el marco en el que se
organizada con la colaboración de la Iglesia elaboraron diversos planes y programas estatales
Católica el 23 de septiembre de 1929 (Tico- para llevar la educación a las áreas rurales. Pero
na 1992, 99-106). el paquete de medidas y políticas que la reforma
ofrecía constituía en realidad un proyecto disci-
plinador orientado a mantener y promover el ofi-
Y aquí conviene aclarar que las iniciativas in- cio de la agricultura en los indígenas, buscando
dígenas en procura de la educación se inscri- evitar que abandonen su “medio natural”. Adi-
bían en un contexto más amplio producido cionalmente la reforma contemplaba la castella-
nización y la correspondiente eliminación de las
por el arribo del Partido Liberal al poder,
lenguas nativas. Así, las promesas de la reforma
organización que formuló la primera gran se reducían, en el fondo, a una transformación
reforma educativa en la historia republicana.9 controlada de los indígenas para que asimilaran
valores “modernos”, mas intentando no alterar su
posición subalterna en tanto trabajadores rurales
9 La reforma era parte de un programa de preten- explotados y racialmente discriminados (cf. Lar-
dida modernización y fue aplicada gradualmente son, 2008). Sin embargo, ese programa resultó en
a través de reglamentos, leyes y códigos elabo- gran medida un fracaso, porque el Estado nunca
rados durante las primeras tres décadas del siglo gestionó el presupuesto suficiente para consolidar
XX, basándose en dos pilares centrales que fue- su ambiciosa empresa disciplinadora, además de
ron la formación docente y la educación indíge- que los líderes indígenas, por su parte, intentaban
na, a tono con el indigenismo que se desarrollaba aprovechar lo más posible las oportunidades que
en aquella época entre las elites de varios países la reforma generaba.
pues suponía, al menos en teoría, un tipo de
jefatura por heredad sanguínea. “Los caci-
ques manejan leyes antiguas y los apoderados
leyes nuevas”: esa era la visión de la nueva ge-
neración de líderes que estaba surgiendo des-
de mediados de los años 20. De hecho, Nina
Qhispi se consideraba apoderado- lo era le-
galmente pues ostentaba un poder notarial de
representación- y nunca cacique.
Eduardo Nina Quispe posa al lado de un avión. gún cacicazgo y orientaban sus esfuerzos con Bajo el debate
constitucional de
Fuente: El Diario, 20 de marzo, 1930. claridad hacia el escenario político, estable- 1938 que incorpora
el régimen social
ciendo vínculos cada vez más estrechos con (1938-1952)
Oriundo de una comunidad de Wanqullu del lo urbano.10 Según relata Leandro Condori,
cantón Tiwanaku, Condori había aprendido los apoderados decían que los caciques eran 623
las primeras letras en una escuela de pueblo “antiguos“ y que las leyes que reivindicaban
gracias a un cura que fue su padrino, pero la “ya estaban anuladas“ (Condori y Ticona
abandonó dado el acoso que sufría allí por 1992, 119). Caciques, escuelas
y sindicatos
ser aimara. Emigrado a los barrios indígenas rurales
de La Paz no tardó en conocer a los caciques De ahí que surgió el mote de “tituleros” para
apoderados, quienes lo tomaron por su es- los viejos caciques como Marka Tula, cuyas ac-
cribano en 1921 cuando contaba con sólo 18 ciones legales de recuperación de la tierra no
años. A partir de ese momento trabajó como estaban siendo tan eficaces como prometían
escribano para casi todos los líderes indios frente a las nuevas urgencias y cambios que
hasta 1952, obteniendo un conocimiento
privilegiado y crítico de muchos de ellos. Al 10 Esto se manifestaba también en la vestimenta. En
referirse a Nina Qhispi, a quien conoció en una declaración hecha por Nina Qhispi, aparecida
en el periódico El Norte durante octubre de 1928,
1925, Condori destacó la cada vez más fuerte
el educador aimara planteó “desterrar” el poncho,
diferenciación entre las nociones “cacique” y dado que, en su visión, la diferencia del atuendo de
“apoderado”, lo que revelaba en el fondo un los indios se convertía en un estigma utilizado por
recambio generacional y una distinción polí- la sociedad criolla para discriminar a los indígenas
en el contexto urbano (Choque y Quisbert 2006,
tica de fondo. Esta diferencia la agudizó Nina
213). La actitud modernizadora de Nina Qhispi
Qhispi al plantear que la figura de los apode- puede observarse también en una foto publicada en
rados tenía mayor eficacia para la representa- El Diario, el 9 de agosto de 1930, en la que se lo ve
ción indígena por ser más acorde al contexto al lado de un avión, luciendo una gorra de aviador.
En la sugerente visión de Cecilia Wahren (2016,
moderno de las legislaciones, a diferencia del
137-164) este tipo de actitudes eran una transgre-
cacicazgo que empezó a ser visto como una sión de Nina Qhispi frente a la folklorización que
institución anacrónica y menos democrática, las elites hacían en torno al “indio autóctono”.
la difícil coyuntura política planteaba (Arias Iglesia Católica. Leandro Condori, por ejem-
1994, 79). Si bien el propio Nina Qhispi es- plo, recuerda que en la fundación del Centro
tuvo muy comprometido con la búsqueda y Bartolomé de las Casas los caciques contaron
reivindicación de cédulas de composición co- con el apoyo de algunos sacerdotes, y de ellos
loniales, sus esfuerzos más notables y eficaces señala: “pero esos curas eran bebedores, les
estuvieron orientados hacia la educación.11 gustaba bailar cualquier cosa y eran muy píca-
Además de todo esto, también hubo rivalida- ros. Incluso tenían mujeres, vivían con las coci-
des personales: “tenía algo contra el anciano neras o estaban con algunas jóvenes”.
Marka Tula”, afirmó Condori en una ocasión
refiriéndose al carácter de Nina Qhispi (Con- Destaco esto sin un sentido moral y lo hago
dori y Ticona 1992, 120). Sin embargo, estas porque tales perfiles y prácticas deberían
diferencias tenían sus matices- además de que conducirnos a una nueva exploración de los
en principio sólo se manifestaban en La Paz- y vínculos de la dirigencia indígena con secto-
a pesar de ellas también existían coincidencias, res del clero, pues su colaboración a la lucha
objetivos comunes y grados de cooperación, de apoderados y caciques, por lo visto, tenía
particularmente en lo referido a la expansión demasiadas limitaciones, al margen de deter-
de la escolaridad hacia las áreas rurales. En minadas acciones puntuales y humanitarias
Un amor
cualquier caso, el ascenso de Nina Qhispi en la realizadas por curas de modo individual. Otro
desenfrenado dirigencia indígena altiplánica era el síntoma ejemplo de las imposturas eclesiásticas es el
por la libertad
de un cambio generacional que no se dio de Congreso Eucarístico de 1939, al que asistió
Antología de la
historia política golpe, ya que los caciques apoderados tuvie- Marka Tula, del cual Condori señala: “[los
de Bolivia
(1825-2020)
ron todavía relieve e influencia hasta la Guerra curas] no han denunciado claramente [las in-
del Chaco. justicias]; era por encima y ocultaron muchas
624 cosas”. “Los curas daban mayor importancia
Con todo, y más allá de la división que inau- a hablar de Dios y no a denunciar los abusos
guró, Nina Qhispi fue capaz de desplegar una de la hacienda. Al respecto no hacían mayores
Tomo I gran capacidad de acción y un importante nú- cosas” (Condori y Ticona 1992, 90 y 125).
1825-1952
cleo de seguidores, tanto en la ciudad como en
algunas provincias y ello fue el resultado, en Por su parte, Nina Qhispi buscó las mismas
alguna medida, de los nexos que estableció con alianzas hasta casi el final de su lucha cuando,
el Estado y con ciertas autoridades concretas. durante 1933, se dirigió al obispo de La Paz
No obstante, algunos de esos nexos tenían sus para manifestarle que la Sociedad República
límites, sobre todo los que se establecían con la del Kollasuyo quería proseguir sus labores
bajo los auspicios de “Nuestra señora madre,
11 Mamani (1991) y Soria (1992) se esfuerzan por de- la virgen de La Paz”, a la que ofreció una co-
mostrar lo contrario, es decir que las principales ac- rona de kantutas pidiendo a la vez una misa
ciones de Nina Qhispi iban dirigidas fundamental-
para la organización indígena (en Choque
mente hacia la búsqueda de documentos en procura
de solicitar deslindes de tierras entre comunidades 1992, 26-27). Ya en sus inicios la Sociedad Re-
y haciendas, y que las acciones alfabetizadoras de pública del Kollasuyo tuvo el respaldo de un
la Sociedad República del Kollasuyo en realidad presbítero llamado Tomás Lagos que incluso
encubrían esa lucha por la tierra. Desde luego que
fue nombrado Presidente Honorario de la en-
ambos frentes, educación y tierra, eran parte de una
misma lucha, pero me parece difícil calibrar cuál tidad, cuya sede fue por un tiempo una escuela
era la prioridad más importante para Nina Qhispi. sostenida por la parroquia de San Sebastián
Lo que sí es posible afirmar es que el contexto de (Ticona 1992, 106).
1931-1932 fue muy represivo y ello se agudizó con
la Guerra del Chaco, por lo que resulta lógico pen-
sar que la lucha legal por la tierra se hacía cada vez Según Vitaliano Soria (1992, 63) el poder de
más difícil en esa coyuntura. la Iglesia fue “hábilmente manejado” por los
líderes indígenas para sus propios fines y para seis estancias de Vacas y ni bien empezaron a
evitar cualquier pretexto de represión, pero ese funcionar, el corregidor del pueblo confiscó
“manejo”, en mi perspectiva, fue claramente los materiales escolares, pese a que dichas es-
insuficiente considerando la terrible e indis- cuelas tenían autorización del propio ministe-
criminada represión que se desató desde 1932, rio del ramo (Gotkowitz 2011, 130).
ya durante el gobierno de Daniel Salamanca,
producto de la cual el propio Nina Qhispi fue La Sociedad República del Kollasuyo logró de-
apresado recibiendo una condena de cárcel. sarrollar su propia red interregional, incorpo-
Además, parecería que el “hábil manejo” de la rando dirigentes de Cochabamba, Chuquisaca
Iglesia por parte de los indígenas no fue unidi- incluso de Santa Cruz con un líder llamado Ca-
reccional, dado que la propia Iglesia sacaba ré- siano Barrientos del Izozog, figura ignota que
ditos simbólicos de su interesada caridad hacia merecería ser investigada. Empero la Guerra
los indios. Tomando en cuenta las reflexiones de del Chaco canceló toda esa expansión.
Leandro Condori, y sin desconocer la existencia
del “catolicismo andino” producido por viejas Por último, otra de las experiencias educativas
yuxtaposiciones coloniales que van más allá del indígenas más importantes del período fue sin
poder de la Iglesia, parece ser que la alianza con duda la escuela de Warisata entre 1931 y 1939.
la institución religiosa católica no tuvo los frutos Si bien tuvo como creador a Elizardo Pérez,
esperados e implicó, por el contrario, grandes y un maestro no indígena, dicha experiencia no Tercer periodo
vanas concesiones ideológicas y simbólicas por se comprendería sin la labor del cacique Ave- Bajo el debate
constitucional de
parte del movimiento indígena. lino Siñani, personaje que tras haber obtenido 1938 que incorpora
el régimen social
por su cuenta firmes rudimentos de lectura y (1938-1952)
Por otro lado, Condori señala también de escritura en la localidad de Huarina había em-
Nina Qhispi que era inteligente y “habla- pezado a enseñar las primeras letras de forma 625
dor”, que “enredaba sus ideas” y que “habla- sistemática a los miembros de su comunidad
ba exagerando, porque rápidamente prome- a inicios del siglo XX. Esta labor llegó a oídos
tía cualquier cosa, pero no cumplía”. Insinúa de un diputado liberal en 1905 que, buscando Caciques, escuelas
y sindicatos
también intrigas e intereses económicos de nuevos electores para su partido, le propuso rurales
Nina Qhispi en sus acciones, pues los líde- pagarle una suma de dinero por cada indio al-
res administraban dineros recolectados de las fabetizado que vaya a votar por los liberales
bases para la lucha (Condori y Ticona 1992, en las elecciones siguientes (Siñani 1992, 128).
118-120). Con todo, y al margen de las des- Siñani aceptó para beneficiar a su comunidad
confianzas de Condori hacia Nina Qhispi, y cumplió su parte del trato. Más tarde, en
lo cierto es que éste tuvo gran predicamen- 1909, incluso fue invitado al Congreso donde
to y logró fundar varias escuelas rurales ha- algunos políticos le ofrecieron bienes y más
cia 1932, centenares señala Soria, aunque sin dinero por su trabajo alfabetizador en busca
ofrecer cifras (1992, 73). de electores, pero él sólo pidió la dotación de
un profesor para la improvisada escuela que
Cabe subrayar también que toda aquella des- presidia. Consiguió un ítem del Estado, mas
centralizada red de escuelas rurales indíge- las autoridades locales y los hacendados inte-
nas, fundadas por influjo tanto de Marka Tula rrumpieron violentamente su trabajo y se dice
como de Nina Qhispi, se extendió por varios que su hermano, Julián Siñani, pasó más de
departamentos y enfrentó muchos problemas, diez en la cárcel (Siñani 1992, 130).
dada la sañuda oposición de hacendados y del
“Estado pequeño”: prefecturas, corregidores, La escuela fundada en Warisata durante
etcétera. Por ejemplo, Guillermo Cruz había 1931 cuenta con ese antecedente. Fue cons-
gestionado la creación de varias escuelas en truida por los mismos indios mediante sus
instituciones de trabajo colectivo y Pérez tuvo permitan establecer los grados de esas vincu-
la oportunidad de elaborar desde la práctica laciones.
sus propias teorías y metodologías pedagó-
gicas basadas en la educación integral. Entre Un efecto no siempre visto del “sistema nu-
otras cosas se practicó la enseñanza laica, se clear” fue que a corto plazo se presentó ante el
redujo la vida escolar de doce a nueve años, se Estado como un método eficaz para controlar
suprimieron horarios, exámenes, vacaciones y la educación rural: permitió a las autoridades
aplazos y finalmente se instauró un kindergar- ministeriales de educación utilizar sus limita-
ten, un internado y una sección normal que dos recursos a fin de dirigir la extensa red de
preparaba maestros en sólo dos años. Otra de escuelas que funcionaron durante décadas sin
las innovaciones consistió en que la adminis- supervisión alguna y de forma más o menos
tración y gestión de la escuela fue puesta en autónoma. Así, desde los años 30 gran parte
manos de un consejo de ancianos propio de los de las escuelas indígenas fueron siendo incor-
ayllus aimaras –la ulaka–, el cual fue rebauti- poradas a los núcleos hasta caer bajo el control
zado con el nombre de “Parlamento Amauta” total del poder político central en los años 50.
por Pérez y Siñani. Con la nueva organización un sólo director
podía supervisar hasta 30 escuelas y tales es-
Un amor
Se trataba, en gran medida, de una reinven- tablecimientos se constituyeron en “la única
desenfrenado ción y reinterpretación de lo andino a la luz de organización o cuerpo representativo del Es-
por la libertad
las necesidades impuestas por la escuela y su tado” (Brienen 2005, 145). Por lo demás, el
Antología de la
historia política modernidad inherente (cf. Pérez 1992 [1962]). fin de la época dorada de Warisata ocurrió a
de Bolivia
(1825-2020)
Con el transcurso de los años la escuela mo- inicios de los años 40, cuando fue interveni-
dificó el paisaje y se convirtió en un gran edi- da por los gobiernos reaccionarios de Carlos
626 ficio que formó en torno suyo una especie de Quintanilla y Enrique Peñaranda.
oasis en medio la helada altiplanicie: se desa-
rrollaron diversos emprendimientos que iban 2.2. El caso del norte de Potosí
Tomo I desde la agricultura hasta la fabricación de
1825-1952
tejas, muebles, catres plegables de hierro, la- Mientras en La Paz y Cochabamba lo caci-
drillos, ropa, alfombras y tejidos, y Warisata ques apoderados luchaban sin poder revertir la
era de pronto un centro de peregrinación de usurpación de tierras y la formación de nuevos
la intelectualidad progresista boliviana e inter- latifundios, limitándose a preservar las comu-
nacional que alababa la labor de Pérez. Pero nidades que se podía, en el norte de Potosí los
sin duda la invención más exitosa de Pérez fue robustos y aguerridos ayllus multi cantonales
la noción del “núcleo escolar”: una escuela se distribuían en un territorio amplio en el que
matriz o central, grande y bien equipada que la presencia hacendal estaba restringida sólo a
atendía a otras más pequeñas, seccionales, di- ciertas zonas, lo que era una fortaleza que per-
seminadas en un extenso territorio. La idea mitió que las luchas indígenas sean más efica-
era que ninguna escuela rural quedara aislada, ces. La combatividad de esos ayllus compactos
de forma que todas intercambien productos y había frenado completamente la Ley de Ex-
servicios. Este sistema traía reminiscencias del vinculación y ésta terminó siendo un fracaso
antiguo control de distintos pisos ecológicos rotundo.
y se extendió a varios departamentos e inclu-
so a regiones orientales selváticas, mediante la Incluso pequeños propietarios mestizos de la
creación de decenas de escuelas rurales. Desde región se opusieron a la legislación, pues las
luego, los viejos caciques como Nina Qhispi propiedades que no estaban en el sistema co-
apoyaron esa labor y se relacionaron con ella. munal serían sometidas a un catastro para em-
No obstante, aún faltan más evidencias que pezar a pagar un nuevo e impopular impuesto
predial, de modo que terminaron aliándose con prescindiendo casi enteramente de la violencia,
los indios para evitar que se compruebe que no eso no significó la no existencia de vínculos con
tenían títulos. La dimensión impositiva de la las otras tendencias del movimiento indígena o
ley generó también el rechazo de la prefectura que no se hayan vivido coyunturas violentas y
de Potosí que entendió lo poco conveniente dramáticas. Para empezar, allí también llegó la
que era dejar de percibir la tasa indígena para influencia de Marka Tula y sus estrategias de lu-
sus arcas departamentales a cambio del nuevo cha que combinaban litigio y alfabetización. De
e incierto impuesto que se pretendía aplicar. hecho, el curacazgo de Macha Alasaya contó
Así, el “Estado pequeño” aceptó tácitamente con la ayuda de un profesor normalista llamado
una renovación del pacto de reciprocidad con Pedro Gómez, entre 1926 y 1936, arribado allí
los ayllus y desde 1906 las propias autoridades en el contexto de la lenta expansión de las es-
étnicas se encargaron de la recaudación de la cuelas rurales como resultado de la propaganda
tasa, desde entonces entregada directamente a cacical (Platt 2018, 53). Al mismo tiempo, los
la prefectura, reapareciendo la figura colonial diversos ecos de los acontecimientos urbanos
de los “curacas recaudadores”, quienes consi- no cesaban de llegar, entrecruzándose con el
guieron centralizar buena parte del poder fis- reavivamiento de viejas problemáticas que des-
cal (Platt 2016, 152-161). encadenaron graves conflictos como la deno-
minada rebelión de Chayanta en 1927: uno de
Si bien la victoria sobre la Ley de Exvincula- los acontecimientos más duros e importante de Tercer periodo
ción fue paradójica, pues de todas maneras se la región en toda su historia. Bajo el debate
constitucional de
consolidó la quiebra del comercio comunal y 1938 que incorpora
el régimen social
su exitosa articulación con en el mercado in- Ese hecho remite a la consolidación de algu- (1938-1952)
terior (Rivera 2016, 25), esa misma victoria nas haciendas por parte de las elites regionales
permitió una renovación del pacto de recipro- vencidas en la Guerra Federal en una zona in- 627
cidad, ahora limitado a una relación entre los terdepartamental entre el norte de Potosí y el
ayllus y la prefectura potosina. Aquella reno- norte de Chuquisaca a expensas de varias co-
vación del pacto implicó también la formación munidades. Hacendados como Julio Berdeja, Caciques, escuelas
y sindicatos
de un proyecto indígena paralelo al de los ca- amparados en los poderes políticos locales, no rurales
ciques apoderados que Tristan Platt denomina sólo consolidaron sus fincas, sino que empe-
el “techo fiscal”: una suerte de cobertura para zaron a expropiar tierras comunales, además
reglar las relaciones entre los ayllus y el “Es- de cometer recurrentes abusos, exigir por la
tado pequeño” y garantizar la protección de fuerza mayores cargas laborales a los colonos
las comunidades mediante el pago semestral y y violar sistemáticamente a sus mujeres. Todo
puntual de la “contribución territorial” o tasa, esto fue causando inquietud en Chuquisaca e
una actualización del antiguo tributo colonial. incluso en los ayllus norpotosinos, particular-
Los caciques de la provincia Chayanta, llama- mente entre 1922 y 1923, cuando se dieron
dos allí curacas, construyeron paciente y es- pequeños altercados en distintos puntos de
tratégicamente ese techo fiscal, institucional, Chayanta protagonizados por comunidades de
jurídico y político con base en prácticas de co- Sacaca, Pocoata, Macha y Mojocoya (Hylton
branza y cargos de turno que posibilitaron la 2005, 150-156).
recolección de la tasa, conformando a la vez
un verdadero sistema social que protegió los Es en ese marco que, a inicios de los años 20
derechos a la tierra y la relativa autonomía de y por influencia de la red de Marka Tula, fue-
los ayllus (Platt 2018, 52-61). ron emergiendo nuevos caciques apoderados
en ese territorio interregional, particular-
Si bien ese proyecto indígena más o menos en- mente en Chuquisaca. Apareció así la figura
cerrado en sí mismo sirvió durante casi 50 años de Manuel Michel, un comunario del ayllu
Moromoro/Tomoyo, en el norte de Chuqui- comunidades y el desarrollo de la educación
saca, que junto a otros líderes expulsados de indígena, en atención a las demandas de Mi-
sus ayllus empezaron a viajar por varios depar- chel, quien se había convertido en militante
tamentos en busca de asesoramiento legal. En del Partido Socialista de Marof y tuvo su in-
esas búsquedas Michel se juntó con otros ca- tervención en la magna reunión obrera.
ciques de la región como Saturnino Choque,
Agustín Saavedra –vinculado a Nina Qhispi– y Esto era muy importante para aquellos caci-
Marcelino Burgos, tomando a la vez contacto ques, pues el movimiento obrero contaba con
con hombres de Marka Tula y también con el abogados de confianza y con una estructura
movimiento obrero urbano que se estaba for- con la que se podía contar para la lucha. De
mando al calor de luchas intestinas entre el hecho Michel salió del congreso con un certi-
anarcosindicalismo y el socialismo partidario. ficado que le “autorizaba” propagar en el agro
las resoluciones, documento que señalaba asi-
Hacia 1926 y con la mediación de varios acti- mismo la necesidad de que sean los propios
vistas obreros Michel llegó a Sucre para vin- caciques los encargados de “liderar a los traba-
cularse con Rómulo Chumacero, un sastre jadores [rurales] en la lucha por sus derechos”,
sucrense de amplia trayectoria en la organiza- mostrándonos todo esto que los dirigentes in-
Un amor
ción sindical de obreros y artesanos. En 1922 dígenas utilizaron de forma inteligente a sus
desenfrenado Chumacero había creado una entidad llama- aliados artesanos e intelectuales como contra-
por la libertad
da Escuela Francisco Ferrer Guardia, que al- peso y fuente de legitimidad política frente a
Antología de la
historia política fabetizaba a sectores populares y alentaba el los terratenientes y a las autoridades locales.
de Bolivia
(1825-2020)
sindicalismo. Fundó también un periódico de-
nominado Tierra y Libertad en 1926 y pese a Entretanto, los abusos patronales en Chuqui-
628 su simpatía por el anarquismo estaba estrecha- saca y en algunas zonas del norte de Potosí
mente vinculado con Tristan Marof (Gustavo continuaban, y la paciencia llegó a un límite.
Navarro) y su recientemente fundado Partido El 25 de julio de 1927, a casi tres meses del
Tomo I Socialista, del cual llegó a ser militante (Ro- congreso obrero, miles de comunarios y colo-
1825-1952
dríguez García 2012, 55). nos, cansados de la explotación y de los atro-
pellos, declararon la guerra a los terratenientes
Junto a un activista llamado Víctor Vargas Vi- lanzando una ofensiva guerrera y prendiendo
laseca se contactó con Michel y los caciques fuego a las casas de los “señores” en toda la
del norte de Chuquisaca pues estaba muy in- provincia de Chayanta y en varias otras de los
teresado en establecer nexos entre el naciente departamentos vecinos. Los rebeldes estaban
movimiento sindical y los líderes indios, en precariamente armados, pero contaban con
una lúcida visión de alianzas populares. De ese dinamitas, facilitadas por aliados mineros,
modo Chumacero invitó a Michel y otros ca- que eran peligrosamente lanzadas con hondas
ciques al Tercer Congreso Obrero que se lle- (Albó y Harris 1986, 67).
vó a cabo en Oruro durante abril de 1927.12
Allí estuvieron varios caciques en efecto y el Agustín Barcelli cuenta horrorizado que du-
evento incluyó las problemáticas rurales: Var- rante este alzamiento el cruel hacendado Julio
gas Vilaseca, delegado de la Escuela Ferrer Berdeja fue muerto por los indígenas, quie-
Guardia, presentó un documento que plan- nes acto seguido devoraron su cadáver (1976,
teaba la expropiación de tierras a favor de las 117). Esta acción en realidad fue un ritual an-
tropofágico que ocurrió el 30 de julio, cuando
el ayllu Jaiguari tomó una finca llamada Gua-
12 El Primer Congreso Obrero se había realizado du-
rante 1921 en Oruro, y el segundo durante 1925 en dalupe dando muerte a su propietario, el ha-
La Paz (cf. Rodríguez García, 2012). cendado Berdeja y enterrando posteriormente
sus huesos en sacrificio al espíritu de la mon- Ante ello la respuesta del presidente Hernan-
taña Cóndor Nasa (Albó y Harris 1986, 61-62; do Siles no tardó en llegar enviando soldados
Hylton 2005, 138). a las regiones convulsionadas que no sólo die-
ron muerte a más de trescientos rebeldes, sino
Otros latifundistas locales también cayeron que también incendiaron pueblos y cometie-
muertos a manos de muchedumbres indígenas ron todo tipo de abusos. El accionar represivo
rebeldes que desataron una serie de saqueos e se extendió asimismo a las ciudades. Rómulo
incendios, incluso más allá de Chayanta y del Chumacero y otros artesanos e intelectuales
norte de Chuquisaca, alcanzando amplios te- fueron detenidos acusados de instigar a la re-
rritorios de cuatro de los nueve departamen- vuelta. Valiéndose de las conexiones entre ca-
tos del país. Fue un levantamiento descentra- ciques y activistas obreros la prensa oligárquica
lizado que se extendió desde julio hasta fines quería hacer ver que el desarrollo del “comu-
de agosto, tras el que estaba una urdiembre nismo” era la causa principal de la agitación
de dirigentes como Manuel Michel, Agustín india. El periódico republicano El Tiempo de
Saavedra, Saturnino Choque y muchos otros. Sucre, por ejemplo, señalaba lo siguiente en
A la rebelión se unieron también los ayllus de sus páginas correspondientes al 4 de agosto:
Macha en procura de hacer respetar su techo
fiscal, ya que el “Estado pequeño” no estaba Por las amplias informaciones que damos
operando debida ni suficientemente ante las hoy se verá hasta dónde habían llegado las Tercer periodo
nuevas amenazas de hacendados inescrupulo- actividades revolucionarias del comunismo. Bajo el debate
constitucional de
sos a quienes, desde la óptica comunal, había El elemento indígena ha sido tomado como 1938 que incorpora
el régimen social
que desterrar definitivamente, siendo aquella uno de los factores del movimiento subver- (1938-1952)
una gran oportunidad. sivo y aprovechándose de su ignorancia y
sencillez de criterio, se le hizo concebir la 629
El alzamiento fue masivo –cifras sensatas idea de una reivindicación territorial am-
apuntan a por lo menos 10.000 indígenas plia […]. La famosa escuela Ferrer que, con
movilizados, en tanto otras fuentes señalan pretexto de fomentar la cultura obrera y de Caciques, escuelas
y sindicatos
12.000, 50.000 e incluso 100.000 (Hylton la clase indígena ha venido funcionando en rurales
2005, 135-136)– y ocasionó una auténtica sen- esta ciudad, ha sido uno de los focos de don-
sación de pavor en la sociedad criolla. Además de han salido las inspiraciones revoluciona-
de los hacendados, también los grandes em- rias que han comenzado a producirse (citado
presarios de la minería veían amenazados sus en Lehm y Rivera 1988, 35).
intereses, puesto que el punto nodal de la acu-
mulación capitalista y de las inversiones ex- Tanto Michel como otros líderes fueron dete-
tranjeras estaba cada vez más amenazado por nidos y se les deslegitimaba poniendo en duda
la acción rebelde rural, es decir los enclaves su indianidad y por tanto su representatividad.
mineros norpotosinos y la red de vías férreas. De hecho, Michel fue caracterizado por las
En las ciudades de Sucre y Oruro empezaron a autoridades policiales como un “cholo”, pese
escasear los víveres y la alarma pronto cundió a que ostentaba el título de “cacique princi-
en el gobierno y en la prensa nacional e inter- pal del departamento de Chuquisaca” (Albó y
nacional,13 desde donde se veían estos acon- Harris 1986, 62; Hylton 2005, 164). Por otra
tecimientos como una “amenaza comunista” parte, el peso de la represión que cayó sobre
bajo la modalidad de la “guerra de razas”. los aliados urbanos de los indígenas los redujo
a una impotencia tal, que ni la Escuela Ferrer
Guardia ni el Partido Socialista de Marof pu-
13 Albó y Harris (1986) han descubierto que el New
York Times se ocupó de la sublevación de Chayanta dieron hacer nada para expandir la rebelión a
durante una semana entera. las ciudades. Empero, pese a todo, finalmente
el levantamiento logró arrancar del gobierno víveres, lo que implicaba mayores cargas la-
la determinación de bloquear temporalmente borales, la leva masiva y forzada no tardó en
la expansión de la hacienda en Chuquisaca y aplicarse desatando disputas entre el ejército,
Potosí y también de reemplazar a las autorida- los hacendados, sus colonos y las comunidades
des locales corruptas, además de que se declaró (Arze Aguirre 1987, 40).
una amnistía para varias decenas de detenidos
que estaban sometidos a procesos judiciales Esto reavivó la vieja polémica republicana en
(Arze Aguirre 1987, 25; Hylton 2005, 191). torno a la pertinencia de obligar el servicio mi-
litar a los indios. La posición de algunos caci-
Para los ayllus norpotosinos fue una nueva vic- ques apoderados, en particular de Marka Tula,
toria y una confirmación del pacto de recipro- era favorable a la instrucción militar a los co-
cidad que había sido temporalmente amenaza- munarios y buscaba relaciones de cooperación
do por las temerarias acciones de un grupo de con los militares; en 1923, por ejemplo, los
débiles e ilegales hacendados ante los cuales el caciques de varias provincias de La Paz envia-
“Estado pequeño” no estaba actuando como ron una carta al jefe del Estado Mayor, general
se esperaba. Así, los ayllus de Chayanta logra- Hans Kundt, pidiendo que el Ejército les cola-
ron mantener sin mayores sobresaltos el techo borase con el establecimiento de escuelas, pedi-
Un amor
fiscal que protegía sus tierras y su autonomía; do al que Kundt respondió en términos apro-
desenfrenado por lo menos hasta la revolución de 1952. batorios, dando respaldo a un par de gestiones
por la libertad
de los indios (Mamani Capchiri 1992, 85).
Antología de la
historia política La rebelión dejó en evidencia, entre otras co-
de Bolivia
(1825-2020)
sas, el alcance que empezaban a tener las cone- La posición del Estado respecto al servicio mi-
xiones entre artesanos e intelectuales urbanos litar indígena fue ambivalente a lo largo del
630 con los dirigentes indios, un vínculo en el que siglo XIX por no afectar la mano de obra que
éstos demostraron con elocuencia su capaci- sustentaba el régimen de hacienda. A princi-
dad de movilización y agencia. Estas articula- pios del siglo XX la obligatoriedad del servicio
Tomo I ciones urbanas fueron intensificándose cada intentó ser aplicada a todos los bolivianos sin
1825-1952
vez más, pero sólo después de la Guerra del distinción y el cuartel se convirtió en un lugar
Chaco constituirían una base más sólida y ar- de alfabetización y castellanización de facto,
ticulada con las políticas indigenistas. ya que los instructores militares monolingües
tenían que dar las órdenes en español. Mama-
2.3. Los movimientos indígenas ni Capchiri ha mostrado que el cuartel tenía
ante la Guerra del Chaco efectos contradictorios para el orden domi-
y sus consecuencias nante y es que los reclutas indígenas concluían
el servicio alfabetizados, bilingües y en algu-
La Guerra del Chaco fue una coyuntura radi- nos casos más rebeldes que cuando ingresaban
calmente dramática para el campesinado indí- en él. Además, quienes aprendían rudimentos
gena, que se vio enfrentado a serios dilemas de lectura y escritura transmitían esos conoci-
y contradicciones. René Arze Aguirre ha des- mientos a sus comunidades.
crito en detalle la complejidad de la realidad
rural en el contexto bélico mostrando que el Por ello, hacia fines de los años 20 ciertas
Estado tuvo que atender dos frentes de lucha, autoridades locales vinculadas con los terra-
uno externo contra Paraguay y otro interno tenientes sostuvieron, preocupadas, que los
contra los indios movilizados y el caos rural. indios estaban yendo a los cuarteles para ad-
Si bien en los inicios del conflicto hubo cier- quirir conocimientos militares y luchar contra
ta tolerancia en el reclutamiento campesino los hacendados. Por su lado, muchos indios
a condición de incrementar la producción de veían el ingreso al cuartel como un medio de
acceder a la ciudadanía y en tal lógica parti- usurpar tierras ajenas o defender las propias
cipaban de los discursos criollos nacionalistas (Arze Aguirre 1987, 33-94). Por otra parte,
con entusiasmo. Por ejemplo, en 1933, ya en el ejército determinó la leva forzosa y apare-
plena guerra, Nina Qhispi publicó un texto cieron por varias latitudes rurales comisiones
que decía: “…inculcaremos en las escuelas in- reclutadoras que se llevaron a miles de indios,
digenales el deber de sacrificarnos por nuestra cometiendo innumerables abusos durante su
hermosa bandera nacional y por nuestra ama- triste misión. Fue la primera vez que se reclutó
da patria” (en Soria 1992, 73). Poco después masivamente y por un tiempo extenso a indí-
declaró: “queremos a su sagrada imagen [la genas para el servicio militar activo (Gruner
virgen] rogar por la vida y salud de nuestros 2015, 233) y ello generó una autentica despo-
hijos que combaten en el sudeste defendiendo blación y desarticulación de centenares de fa-
la soberanía nacional, mellada salvajemente milias campesinas. Pronto se desató una crisis
por el rapaz guaraní” (en Mamani 1991, 110), de mano de obra rural, tanto porque muchos
afirmaciones lanzadas quizá para salvar la crí- indios huían a lugares recónditos para evitar
tica situación represiva, pero que no bastaron el reclutamiento como porque muchos más
para librarlo de la represión que caracterizó al eran arrastrados a la línea de combate, en tan-
gobierno de Daniel Salamanca, cayendo pre- to otros trabajaban obligados en caminos ca-
so a fines de diciembre de 1933 y siendo sen- rreteros para las zonas de operaciones y la re-
tenciado después a seis años de prisión (Arze taguardia. Con todo, no faltaron colonos que Tercer periodo
Aguirre 1987, 30). Las causas de su detención se enrolaban voluntariamente, en una “fuga” Bajo el debate
constitucional de
fueron acusaciones de instigación a la revuelta hacia la guerra, para librarse de los trabajos 1938 que incorpora
el régimen social
entre los indios de La Paz. Adicionalmente se forzados en las haciendas (Arze Aguirre 1987, (1938-1952)
la acusaba de pretender sustituir al presidente 51-59).
Salamanca con su propia presidencia en una 631
hipotética República de indios, restablecien- En ese dramático cuadro los comunarios asu-
do el Kollasuyo prehispánico, dado el nombre mieron diversas actitudes: en ocasiones pro-
que usaba para su organización. movieron el enrolamiento y/o la entrega vo- Caciques, escuelas
y sindicatos
luntaria de víveres, ganado o la prestación de rurales
Por su lado, algunos caciques apoderados se servicios varios, por ejemplo, en la escuela de
plegaron a los sectores pacifistas de izquierda, Warisata (cf. Pérez 1992 [1962]) o en algunos
aunque subyacían distintas visiones y dudas ayllus norpotosinos (Platt 2018, 80). También
frente a la guerra que terminaron por erosio- se daba el caso de cambios de actitud, cuan-
nar totalmente el movimiento de Marka Tula, do poco después de colaborar se desataba el
mientras en las áreas rurales se empezaba a vi- reclutamiento forzoso y los abusos de las pa-
vir una época caótica y oscura. trullas militares y los indígenas se negaban a
otorgar nuevas ayudas e incluso pasaban a la
Desde el inicio del conflicto muchos hacen- lucha abierta contra las violentas levas. De
dados vieron la oportunidad de crecer y reali- hecho, ante la escalada de arbitrariedades –sa-
zaron una serie de compras ilícitas de tierras, queos, cobros indebidos, corrupción, aumento
recurriendo inclusive a las usurpaciones vio- ilegal de impuestos– cometidas por el ejército,
lentas. Los reiterados despojos del período se la policía y los administradores estatales a es-
hicieron también entre hacendados e incluso cala local, muchas zonas rurales se declararon
entre comunarios. Una triste secuencia de en rebelión. Esto ocurrió con gran intensidad
enfrentamientos intercomunitarios a favor y desde enero de 1934, particularmente en el
en contra del ejército sucedieron en Oruro, altiplano paceño. En Guaqui, el ataque comu-
en tanto varios patrones presionaban a sus nal al pueblo ocasionó la muerte de 29 indios
colonos para crear grupos de choque a fin de por balas de los vecinos. La revuelta destruyó
la línea telegráfica, una locomotora y otros Con todo, la guerra también reveló el desa-
bienes públicos. También en Tiwanaku hubo rrollo de una conciencia nacional entre los
desmanes que produjeron nueve fallecidos, indígenas que asistieron al frente contra Para-
entre ellos, cuatro indígenas y cinco vecinos. guay, un renovado sentido de pertenencia a la
Se registraron disturbios igualmente en las nación boliviana, algo que si bien no era nuevo
provincias Ingavi, Camacho, Omasuyos y Je- se reforzó con la experiencia de las trincheras
sús de Machaca y en otras de Oruro y Potosí, y fue usado como carta de ciudadanía y fuente
mientras que una ola de bandolerismo y cua- de derechos en las nuevas luchas que el con-
trerismo asolaba las regiones chuquisaqueñas texto postbélico acabó generando.
de Padilla y Tomina. A tal punto llegó la si-
tuación que el propio Salamanca tuvo que re- Un efecto importante de la guerra fue el surgi-
conocer la existencia de una “sublevación in- miento, dentro del Ejército, de una oficialidad
digenal” que tomaba “caracteres alarmantes”, inconforme que se convirtió en la encarnación
amenazando “extenderse a todo el país” (Arze del sentimiento de frustración por la derrota
Aguirre 1987, 100-109). ante Paraguay. Sus representantes fueron Da-
vid Toro y Germán Busch, quienes instaura-
Al respecto, y sin muchos datos convincentes, ron un régimen conocido como “socialismo
Un amor
Arze Aguirre atribuye a Nina Qhispi la diri- militar”. Esta nueva generación de oficiales
desenfrenado gencia de algunos de los persistentes levanta- experimentó un giro hacia la izquierda mo-
por la libertad
mientos, aunque lo que sí parece evidente es derada y hacia el indigenismo, asumiendo un
Antología de la
historia política que su apresamiento catalizó las rebeliones rol protagónico al hacerse cargo del gobierno
de Bolivia
(1825-2020)
rurales de 1934. Si bien quizá estas revuel- desde 1936 hasta 1939, primero David Toro,
tas se desarrollaban al margen de las órdenes quien entre otras medidas lanzó un “decreto
632 de Nina Qhispsi, éste figuraba en la prensa y de sindicalización obligatoria” para todos los
en las comunicaciones oficiales del gobierno trabajadores- de insospechadas consecuencias
como el cerebro de las revueltas, convirtién- en el agro-, y después Germán Busch, patro-
Tomo I dose en una especie de chivo expiatorio. cinador de la denominada Convención Nacio-
1825-1952
nal de 1938, una verdadera asamblea constitu-
El estado de conmoción rural continuó en yente que discutió el “problema del indio” y el
1935 y las fuerzas represivas no abastecían futuro de la nación.
para sofocar los puntos de revuelta, que se ex-
tendieron a los Yungas de La Paz, zona con- La Constitución resultante de la Convención
vertida en refugio de muchos instigadores. Y de 1938 tuvo un acápite llamado “Del campe-
junto a las acciones de hecho hubo asimismo sinado”, en el que se declaraba que el Estado
una guerra de desinformación y propaganda: reconocía la existencia legal de las comunida-
varios procesos judiciales abiertos en contra des indígenas y que se expandiría la educación
de indios revelan la propagación de la idea de rural a través de los “núcleos escolares” inven-
que los reservistas indígenas vueltos de la gue- tados por Warisata. En otro lugar del texto
rra distribuirían tierras. Rumores parecidos también se prohibían los trabajos no remune-
se propalaron en la provincia paceña Murillo, rados o la servidumbre, pero sin hacer alusión
donde corrían “noticias” de que casi todos los específica al pongueaje. Además, se mantuvo
blancos estaban muriendo en la guerra, así que el requisito del alfabetismo como condición
era el momento de acabar con los pocos que para una ciudadanía plena. Como señala Go-
iban quedando (Arze Aguirre 1987, 89). En fin, tkowitz, los artífices del socialismo militar no
toda esta situación crítica acabó debilitando la se emanciparon del pretendido “problema del
energía del Estado y del Ejercito, ya desgasta- indio”, según el cual los indígenas eran un
do en el mantenimiento de la guerra externa. óbice para el progreso y la construcción de la
nación, por lo que debía rehabilitárseles me- principal fue Toribio Miranda, un uru-murato
diante el sindicato y la escuela manteniendo su que además de hablar uru-chipaya se desem-
posición subalterna (2011, 183). peñaba sin problemas en aimara, castellano y
quechua (Condori y Ticona 1992, 113). Junto
En cuanto al movimiento indígena, éste atra- a su hijo Lucas, Toribio Miranda creó varias
vesó algunas transformaciones destacables. escuelas rurales en Oruro y Potosí, y su llega-
Una de ellas fue el tránsito de la representa- da a Chuquisaca produjo el nacimiento de una
tividad desde el cacicazgo apoderado hacia vertiente sui generis del alcaldismo: los apode-
lo que popularmente se denominó el “alcal- rados espiritualistas.
dismo”. La figura colonial del alcalde era un
cargo de autoridad comunaria que seguía en Esta vertiente surgió en la región chuquisa-
jerarquía al jilakata. Los alcaldes estaban en- queña de Icla y Tarvita durante 1936: zonas
cargados de funciones de representación de la en las que un puñado de agresivos hacenda-
comunidad ante poderes externos y sobre todo dos habían desestructurado a las comuni-
de la administración de la justica en coordina- dades en un largo y doloroso proceso desde
ción con los corregidores de provincia. Bajo el el siglo XIX, reduciendo a sus miembros a la
régimen colonial fungían asimismo como go- condición de colonos. La explotación de los
bierno de los pueblos de reducción y existían patrones sobre la mano de obra campesina se
dos tipos: los alcaldes mayores y los alcaldes fue haciendo cada vez más tenaz, de modo que Tercer periodo
originarios, con obligaciones iguales, aunque cuando los alcaldes mayores Toribio y Lucas Bajo el debate
constitucional de
los primeros gozaban de un estatus superior. Miranda arribaron hasta allí, sus ideas de re- 1938 que incorpora
el régimen social
En algunas zonas, como Ayopaya en Cocha- dención mediante la escuela fueron recibidas (1938-1952)
bamba, a los alcaldes mayores también se les con un entusiasmo conmovedor, quizá porque
denominaba alcaldes de campo. La recupera- el proyecto legalista de la escuela prometía 633
ción de esta figura en el siglo XX se debió, se- contar con apoyos institucionales poderosos y
gún Platt, a su hallazgo mediante la lectura de se presentaba como más pragmático con rela-
documentos antiguos en el marco de la lucha ción a la esforzada e incierta búsqueda de tí- Caciques, escuelas
y sindicatos
cacical (2018, 157). tulos coloniales. Si bien los miembros de este rurales
riales, de manera que fue desarrollando la mis- lucha contra la hacienda a través de la compra Bajo el debate
constitucional de
ma utopía de la tierra propia surgida en tantas y el arrendamiento, pero también utilizando 1938 que incorpora
el régimen social
otras regiones, pero con ciertas características el sindicalismo y las escuelas, siendo este úl- (1938-1952)
particulares. timo punto el común denominador de todas
las luchas en todas las regiones. 635
La utopía de la tierra propia se forjó en el
Valle Alto como un ideal posible desde me- En 1936 los campesinos de una pequeña ran-
diados del siglo XIX, cuando la zona empezó chería del Valle Alto, que pocos años después Caciques, escuelas
y sindicatos
a vivir un largo proceso de fragmentación de se llamaría Ucureña, se propusieron arrendar rurales
las haciendas debido a prácticas de herencia, los terrenos de la hacienda del monasterio de
al crecimiento demográfico y a las crisis eco- Santa Clara: el latifundio más grande y ren-
nómicas y ecológicas, y ello se aceleró entre table de Cochabamba. Esta hacienda estaba
1880 y 1935, generándose un activo merca- ubicada en las tierras más fértiles de todo el
do de tierras que, en gran medida, abarcaban valle y pertenecía a la Iglesia, en concreto a
menos de una hectárea. A principios del si- la orden de las clarisas quienes la arrendaban
glo XX varias de esas hectáreas habían sido a hacendados ambiciosos que se enriquecie-
compradas por pequeños agricultores cono- ron subarrendando parcelas y explotando
cidos como “piqueros”:14 campesinos libres cruelmente durante décadas la mano de obra
y propietarios de diminutas porciones de de los campesinos sin tierra forzados al co-
terrenos que se convirtieron en un modelo lonato. Por su parte, éstos recurrieron a for-
a seguir y en una clase cada vez más politi- mas de resistencia como el sabotaje y el robo,
zada (cf. Larson 1992). Y es que la oferta de pero los abusos persistían hasta que la nueva
conciencia emergida de la Guerra del Chaco
14 De piqui, palabra quechua para designar insectos empezó a manifestarse en toda la zona. Los
pequeños, particularmente piojos y pulgas, en re- campesinos excombatientes descubrieron que
ferencia a las parcelas pequeñas –llamadas precisa-
habían perdido sus piquerías o que habían sido
mente piojales– que llegaron a poseer los piqueros.
Los piojales eran de algún modo equivalentes a los expulsados de las parcelas que arrendaban, y
hilos de Vacas. sucedió una pequeña sublevación en octubre
de 1935 –la culminación de una larga saga de vallunos eran migrantes que regresaron a sus
revueltas y motines de subsistencia en la zona ranchos con un nuevo bagaje de conocimien-
desde fines del siglo XIX– sofocada con fuerzas tos sobre las luchas y las organizaciones obre-
represivas arribadas desde la ciudad. Tras esto ras. Con el sindicato consolidado los campe-
los colonos se plantearon que podían arren- sinos formalizaron su solicitud de arrendar las
dar ellos mismos las tierras de la hacienda de tierras de Santa Clara, obteniendo el apoyo
Santa Clara, idea concebida por un grupo de de Toro, quien fue persuadido por Arze Lou-
colonos de un rancherío llamado Ana Rancho, reiro que empezó a realizar gestiones para
poblado en gran medida por excombatientes y favorecer la demanda de los campesinos sin-
exprisioneros de guerra. dicalizados.
escuela se convirtió en el centro de las acti- caron sus esfuerzos en crear nuevas escuelas, Bajo el debate
constitucional de
vidades políticas y simbólicas de la zona. En pues las fundadas por Guillermo Cruz habían 1938 que incorpora
el régimen social
el “Día del Indio”, decretado por Busch como sido desmanteladas por los corregidores, los (1938-1952)
homenaje a la fecha de creación de Warisata hacendados y los patrones-arrenderos. Fue
–2 de agosto–, la escuela realizaba actos y re- una labor difícil que solo pudo ser concretada 637
presentaciones que criticaban explícitamente una vez finalizado en conflicto bélico y gracias
el abuso patronal y apoyaban los objetivos del a la ayuda de un profesor indigenista llamado
sindicato. Por otro lado, el sindicato continuó Toribio Claure quien, con el apoyo de Elizar- Caciques, escuelas
y sindicatos
negociando la compra de algunas hectáreas do Pérez, fundó una “escuela indigenal” en rurales
Miranda y Francisco Chipana Ramos, figuras resulta lógico pensar que varios estuvieron
que iniciaron un proceso de agitación rural allí. En cualquier caso, está claro que a inicios
sin precedentes como respuesta a la arreme- de los años 40 la idea de un evento indíge-
tida patronal que se desató en diversas latitu- na de magnitud estaba muy difundida entre
des tras la muerte de Busch. Algunos de estos los dirigentes, tanto nuevos como veteranos,
personajes, entendiendo perfectamente el más aún cuando llegaron las noticias del Pri-
clima favorable propiciado por el socialismo mer Congreso Indigenista Interamericano de
militar, habían creado una entidad conocida 1940 en México.
como Comité Indigenal Boliviano, proba-
blemente en 1939, con miras a organizar un El cabecilla principal del Comité Indigenal
Boliviano fue Luis Ramos Quevedo, perso-
naje fascinante y enigmático que ameritaría
en el norte de Potosí, que es una transcripción lite-
una pesquisa específica. Hijo de un piquero
ral de lo que fue publicado en el Boletín Indigenista
–porque alude directamente a él–, lo cual es una en Chacapaya, a las alturas del pueblo de Sipe
muestra de la difusión que tuvieron las conclusio- Sipe, en el Vallo Bajo cochabambino, se invo-
nes del mencionado congreso en Sucre, además lucró en las luchas sociales desde muy joven y
de evidenciar las extraordinarias formas de la cir-
con gran tenacidad, lo que le valió el apodo de
culación de ideas y noticias durante aquel período,
en un ir y venir a través de lejanas fronteras (Platt Rumi Sonko: “corazón de piedra” (Dandler y
2018, 165-168). Torrico 1984, 143-144). Estableció contactos
con diversos sectores urbanos y trabajadores y fin de organizar el congreso indígena con el
también con el campesinado indígena de Ta- que soñaba, razón por la que acudió inteligen-
pacarí y Ayopaya, alternando el activismo ru- temente al gobierno de Villarroel solicitando
ral con el pugilismo. Gotkowitz encontró una apoyo. Sus gestiones dieron frutos y el gobier-
noticia periodística en la que Ramos Queve- no le otorgó credenciales y varias facilidades
do fue presentado como “temible boxeador” con las que recorrió lejanas comarcas junto a
dedicado también a organizar espectáculos y un amplio grupo de esforzados chaskis y cola-
al respecto se sabe que colaboró por un tiem- boradores que difundían y explicaban la nece-
po con un grupo teatral anarquista extranjero sidad de organizar un gran evento para discu-
(Gotkowitz 2011, 268). También se conoce tir temas cruciales y exigir derechos y justicia.
que fue él quien “descubrió” a Manuel Cama- Esas labores, aunque contaban con respaldos
cho, el extraordinario e internacionalmente oficiales del gobierno, eran muchas veces clan-
conocido “Gigante Camacho”, durante 1923 destinas porque los regentes del Estado a nivel
en el marco del negocio del boxeo. Al respec- local y también los hacendados mantenían una
to, Armando Montenegro, escritor, músico actitud sumamente hostil a toda actividad rei-
y también púgil, refiriéndose a ese descubri- vindicativa indígena en esa época.
miento caracterizó a Ramos Quevedo como
Un amor
“robusto joven indigenista y comunistoide” Durante diciembre de 1944 y tras realizar va-
desenfrenado (Montenegro 1965, 87). Además, se convirtió rios pequeños y secretos congresos regiona-
por la libertad
en militante de la Federación Obrera Sindi- les y locales, Ramos Quevedo publicó al fin
Antología de la
historia política cal, nacida con el auspicio de Toro, que tenía una convocatoria impresa para su proyectado
de Bolivia
(1825-2020)
filiales en varios departamentos. Sus activi- evento al que bautizó como Congreso Indi-
dades de activismo obrero implicaban viajar genal Boliviano, en la que aparecían fotos de
640 frecuentemente a Oruro y Sucre, donde tomó Villarroel y de varios ministros y autoridades
contacto con varios caciques apoderados a sin autorización oficial alguna. Sonó una se-
quienes colaboró. ñal de alarma. Temerosos de que la iniciativa
Tomo I indígena adquiera demasiada autonomía, los
1825-1952
Con estos rasgos y desde el limitado punto de asesores de Villarroel le convencieron de la
vista criollo, Ramos Quevedo era visto como necesidad de tomar el control de la convoca-
un mestizo o, más precisamente aún, como un toria, por lo que el Rumi Sonko no sólo fue
cholo, y de hecho fue presentado así en varias desautorizado sino también apresado a fines
ocasiones por patrones y autoridades hostiles, de abril de 1945, acusado de presuntas estafas
para desacreditar la legitimidad de represen- en transacciones de tierras y de difundir ideas
tación que empezó a tener en amplias bases “extremistas”. Cayeron con él otros cinco
indígenas interregionales entre Cochabamba “agitadores” y Ramos Quevedo fue traslada-
y Oruro. El perfil del Rumi Sonko ilustra muy do al Beni, consiguiendo huir supuestamente
bien la complejidad de las dinámicas de movi- hacia Brasil poco después, según informes sin
lidad de muchos campesinos y ex campesinos confirmar de la prensa de la época. El caso
bilingües que, estando articulados plenamente es que no se supo más de él y su final es un
a la modernidad y a sus subculturas urbanas, misterio aún irresuelto (Gotkowitz 2011, 283;
podían transitar con holgura por distintos Dandler y Torrico 1984, 155).
mundos sociales, en un ayllu o en un teatro de
la ciudad, reivindicando una identidad étnica Anulado Rumi Sonko el gobierno buscó a
al mismo tiempo. otros interlocutores y contactó con Antonio
Álvarez Mamani, un personaje igualmente
A partir de 1940 Ramos Quevedo se dedicó extraordinario que pese a ciertas discrepan-
íntegramente al Comité Indigenal Boliviano a cias con Ramos Quevedo fue también parte
del Comité Indigenal. Era médico kallawaya, de Ramos Quevedo, su principal impulsor.
sabía leer y escribir, y hablaba quechua, aima- Esto es sin duda una triste y significativa iro-
ra, castellano y por supuesto kallawaya. Tuvo nía considerando que el Rumi Sonko había
una vida agitada, llena de aventuras, perse- dedicado largos y sacrificados años de su vida
cuciones y destierros, creando varias organi- exclusivamente a la consecución del congreso,
zaciones grandilocuentes e intrascendentes empresa convertida en un verdadero objetivo
entre 1940 y 1952, como el Movimiento Indi- de vida, pues consideraba que sólo un evento
genal de Trabajadores Campesinos de Bolivia consensuado y de gran amplitud, con las ca-
–con un millón de afiliados supuestamente–, racterísticas que él mismo delineó, iba a ca-
y el Partido Indígena Pachakamaj. Se sabe talizar el cambio social. Y tuvo razón, aunque
que viajó por muchos países del continen- después acabara excluido de su propia obra y
te, junto a su padre, ejerciendo de médicos desterrado de las memorias oficiales.
kallawayas, llegando incluso hasta Centroa-
mérica. Proponía que los indios sean parla- La magna reunión se desarrolló entre el 10
mentarios y se vinculó con distintas tiendas y el 15 de mayo de 1945 con la asistencia de
partidarias: el Partido Obrero Revoluciona- por lo menos 1.500 delegados de distintas par-
rio, la Falange Socialista Boliviana y el PIR tes del país, incluyendo una minoría arribada
para terminar militando en el MNR. Sus ve- desde el oriente. Francisco Chiapana Ramos-
leidades partidarias, sus posturas redentoras y un joven aimara que estuvo involucrado con Tercer periodo
cierta actitud charlatana le granjearon adver- la escuela de Warisata –fue el presidente del Bajo el debate
constitucional de
sarios al interior del movimiento indígena. Se evento; Dionisio Miranda –colono quechua 1938 que incorpora
el régimen social
refería a los viejos caciques apoderados como de Cochabamba– ejerció como vicepresidente (1938-1952)
“ídolos de barro” por no saber leer y escri- y Desiderio Cholina –indígena del oriente–
bir, y también como “caciques inkaicos” por asumió el cargo de secretario general, que- 641
su visión nativista (en Ranaboldo 1987, 97, riendo mostrar esta distribución la diversidad
84, 85), mientras que Leandro Condori de- étnica de Bolivia. También asistieron mujeres
cía que el inquieto kallawaya era “un metete” y al respecto cabe señalar que las dirigencias Caciques, escuelas
y sindicatos
que buscaba intereses personales en la lucha de todas las tendencias del movimiento indí- rurales
Bajo el debate
constitucional de
1938 que incorpora
Congreso Indígena de 1945. el régimen social
Fuente: El Rostro de la furia, Enrique Rocha Monroy, 1979. (1938-1952)
643
los campesinos de todo el país, pues creyeron en mayo de 1946 por autoridades provincia-
ver el fin de una larga época de servidum- les del altiplano paceño, sin que el gobierno
bre, lo que también fue interpretado como central pudiese hacer algo al respecto. Dos Caciques, escuelas
y sindicatos
la oportunidad de recuperar las tierras con meses después el propio Villarroel caía de- rurales
la aprobación del Estado. Esto generó una rrocado por una confusa revuelta urbana y su
agudización radical de los conflictos rurales cadáver pendía de un farol en la plaza Mu-
porque los patrones de las haciendas deci- rillo de La Paz. La coyuntura no hacía sino
dieron no cumplir los decretos de Villarroel, empeorar y a inicios de 1947 los medios de
en tanto que las autoridades nombradas para prensa empezaron a hablar- otra vez- de una
ejecutarlos y otras ya establecidas- corregido- “guerra de razas”.
res o subprefectos- asumieron con desdén las
medidas, ya que a nivel provincial y local el 3.3. Las rebeliones de 1947 y el papel
Estado estaba en gran medida aún en manos de Ayopaya y de la Federación Agraria
de los hacendados. Tal situación produjo un Departamental
clima de violencia que se hizo habitual en-
tre campesinos y terratenientes en distintas El constante estado de rebeldía rural que si-
zonas del país. Hacia fines de 1945 diversas guió al Congreso Indígena auspiciado por
huelgas de brazos caídos convulsionaron Villarroel se agudizó terriblemente a partir
haciendas de Cochabamba, La Paz, Tarija y de enero de 1947. Misteriosos indios conver-
Chuquisaca, extendiéndose pronto a otras tidos en bandoleros asaltaban a comercian-
regiones hasta el siguiente año. Desde enton- tes y viajeros en los caminos, centenares de
ces ningún dirigente estaba completamente a haciendas paralizaban su producción de un
salvo e incluso Chipana Ramos fue detenido momento a otro por huelgas de brazos caídos
que duraban meses enteros, decenas de casas más aptos para la generación de recursos la
de patrones ardían en llamas sorpresivamen- agricultura era intensiva y la mano de obra
te y algunos de sus administradores aparecían no muy abundante (Dandler y Torrico 1984,
muertos por la ira campesina mientras se 138-139). En ese escenario habitaba un cam-
desataban crisis de desabastecimiento en las pesinado quechua-hablante y sin tierra que
ciudades. empezó a ser cada vez más explotado desde la
posguerra, tanto por hacendados que exigían
En fin, advino una sangrienta saga de enfren- mayor rendimiento comercial a sus fincas
tamientos y conflictos que en conjunto fue- como por las autoridades de los pueblos que
ron conocidos como “la rebelión indígena de imponían una serie de obligaciones y exac-
1947”, consideraba por Antezana y Romero ciones.
(1973) como unas de las más grandes de la
historia republicana, junto con los alzamien- Una de las haciendas más extensas de Ayopaya
tos de Zárate Willka de 1899 y de Chayanta se llamaba Yayani. Era un centro de poder ru-
de 1927. De hecho, fue algo muy parecido a ral, a la vez parroquia y corregimiento duran-
lo que ocurrido en Chayanta 20 años antes, te el colonialismo hispánico, perteneciente al
pero a una escala geográfica y temporal in- Monasterio de Santa Teresa. En una situación
Un amor
cluso mayor. La rebelión no estaba limitada análoga al caso de Santa Clara en el Valle Alto,
desenfrenado a una región, cantón o provincia, puesto que las carmelitas arrendaron su rico latifundio a
por la libertad
sucedió en vastas áreas rurales de los depar- poderosas familias de hacendados que esta-
Antología de la
historia política tamentos de La Paz, Oruro, Cochabamba, blecieron un pequeño imperio patronal desde
de Bolivia
(1825-2020)
Chuquisaca, Potosí y Tarija. Tampoco estuvo inicios del siglo XIX. Fue allí donde surgió un
organizada bajo un mando único ni ocurrió interesante y poco estudiado grupo de diri-
644 de forma simultánea. Se trató más bien de gentes en la posguerra del Chaco, liderados
una ola de sublevaciones de diferente inten- por Hilarión Grájeda, un activo colono que
sidad que se prolongaron durante casi todo empezó a ser secundado por varios campesi-
Tomo I un año y que pudieron ser derrotadas sólo nos de la región, conformando un grupo que
1825-1952
mediante la movilización masiva de fuerzas desde 1935 tomó contacto con las redes de al-
policiales, civiles y militares. caldes mayores particulares de otros departa-
mentos. De ese modo llegó Ramos Quevedo a
Uno de los primeros y principales focos de la zona incorporando a Yayani y otras hacien-
agitación estuvo en la provincia cochabambi- das al campo de acción de su red de activistas.
na de Ayopaya, una vasta región multi ecoló- Otro líder destacado que colaboró estrecha-
gica, de valles fértiles y serranías, que estaba mente con el grupo de Grájeda fue Dionisio
casi totalmente controlada por el sistema de Miranda, un colono de Chacapaya, de donde
hacienda. En términos comparativos sus pue- también era el Rumi Sonko, quien ayudaba
blos centrales, Independencia y Morochata, asimismo a los ayllus de la provincia Tapacarí.
se parecían más a Achacachi –en el altiplano Dos aliados adicionales del movimiento local
norte de La Paz– o a poblados como Chulu- iniciado por Grájeda fueron Luis Bustaman-
mani, Coroico y Sorata –en los Yungas pa- te, oriundo del Valle Bajo cochabambino que
ceños– que a los otros pueblos de los valles por un tiempo fue minero en Oruro, y el ubi-
cochabambinos. O sea, eran centros de poder cuo Álvarez Mamani (Dandler y Torrico1984,
latifundista más que de comercialización, dis- 143-145).
puestos para otorgar servicios e infraestruc-
tura a fin de que las haciendas saquen su pro- Tras haber asistido al congreso de 1945 Grá-
ducción hacia los mercados urbanos a costa jeda desató una campaña propagandística de
de la explotación laboral, pues en los puntos los decretos que favorecían a los trabajadores
rurales, chocando con la tenaz oposición de rumores de ataques a la propia ciudad de Oru-
los hacendados, ante lo cual los campesinos ro, donde cundió el pánico entre los vecinos,
decidieron actuar con una apuesta radical y hasta que Grájeda y otros cabecillas fueron de-
extrema: la rebelión masiva y la lucha arma- tenidos en la población de Challa (Antezana y
da. La noche del 4 de febrero de 1947 una Romero 1973, 138; Dandler y Torrico 1984,
masa enorme de campesinos, compuesta por 179-180).
aproximadamente 10.000 personas, declara-
ron la guerra al viejo orden atacando la casa Tras una semana de lucha, la movilización
de hacienda de Yayani y dando muerte al hijo emergida en torno a Yayani fue derrotada,
del patrón, el teniente coronel José Mercado. pero la convulsión generada desde allí conti-
Fue un plan ambicioso y muy bien elaborado y nuó como una ola incontenible en valles y pu-
coordinado; los alzados no sólo contaban con nas a lo largo de una geografía extendida hacia
armas de fuego y dinamitas, obtenidas a través La Paz y Oruro, que abarcó las provincias de
de Luis Bustamante y sus contactos mineros, Arque, Tapacarí, Inquisivi y Aroma. Fue tan
sino que también habían calculado extender la amenazadora la expansión del alzamiento que
sublevación hacia el Valle Bajo cochabambi- el gobierno dispuso bombardeos aéreos so-
no, las provincias vecinas y sobre todo Oruro, bre distintos enclaves rebeldes y la represión
objetivo que consiguieron rápidamente pues por tierra también fue cruel (Antezana y Ro-
el núcleo humano de la rebelión, que en su mero 1973, 138). Los hacendados y las auto- Tercer periodo
espacio de lucha que, al contrario de las vanas violencia para hacer prevalecer sus derechos. Bajo el debate
constitucional de
aspiraciones liberales, favoreció la movilidad 1938 que incorpora
el régimen social
social de forma extraordinaria y descontro- Este movimiento diverso revela también la (1938-1952)
lada. A propósito, Marten Brienen tiene ra- existencia de una suerte de cosmopolitismo
zón cuando afirma que las escuelas indígenas indígena, si pensamos en la extraordinaria 649
constituían ciertamente un acto de resistencia, interculturalidad de caciques investigando en
pero no tanto contra el Estado como contra el Archivo General de la Nación, en Buenos
los hacendados. Además, algunas de estas es- Aires, de líderes que se desempeñaban en tres Caciques, escuelas
y sindicatos
cuelas se convirtieron en la única instancia de o cuatro idiomas, de campesinos que tras tra- rurales
representación estatal en zonas donde el do- bajar en las salitreras chilenas volvían a sus
minio exclusivo residía precisamente en los estancias con nuevos hábitos, de comunarios
hacendados (2005, 145). de base que habían asistido a una guerra in-
ternacional, pasando incluso más de un año
Tenemos también el caso del Valle Alto co- como prisioneros en Paraguay, de herbolarios
chabambino, donde los trabajadores agrícolas kallawayas que llegaban hasta Centroamérica
quechua-hablantes, de insondables orígenes o de agitadores profesionales que se decían
multiétnicos, proyectaron una conciencia y indios y que también podían ser boxeadores
una identidad campesina con base en la lucha urbanos exitosos. En un sentido, podría de-
por la piquería y la articulación de la escue- cirse que algunos indios eran más liberales y
la con el sindicato. En este caso, la identidad modernos que muchos liberales criollos, para
de “campesino” fue una lucha por rechazar las quienes la indianidad resultaba incompatible
connotaciones negativas que implicaba “ser con todo lo que no tuviese que ver con trabajo
indio” en el contexto hacendal del Valle Alto agrícola y “atraso”.
y esa lucha estaba relacionada con el deseo
de poseer la tierra y expulsar a los patrones. Por otra parte, es importante destacar que,
Dicha identidad, como han demostrado Gor- pese a las tendencias y disensiones internas
dillo (2000) y Dandler (1969), no fue impues- y personales en las organizaciones del pe-
ta desde arriba o por agentes externos tras la ríodo analizado, existían asimismo objetivos
comunes centrales: la defensa de la tierra, o su continuidad en Bolivia: etnicidad, cultura e
recuperación o el acceso a la misma según los identidad, ed. Nicolas Robins, 133-150.
casos, la abolición de los servicios forzosos y La Paz: Plural.
la conquista de la ciudadanía plena, siendo la Choque, Roberto. 1992. La escuela indigenal:
escuela, el sindicato y el uso selectivo de la ley La Paz (1905-1938). En Educación indí-
los instrumentos para su consecución. gena: ¿ciudadanía o colonización?, coords.
Roberto Choque, Vitaliano Soria, et al,
Finalmente, si hubo un proyecto subyacente a 19-40. La Paz: Aruwiyiri.
las luchas aquí reseñadas, ese fue el de la mo- Choque, Roberto y Cristina Quisbert. 2006.
dernidad india, con toda su gama de tenden- Educación indigenal en Bolivia. Un siglo de
cias expresadas tanto en el techo fiscal como ensayos educativos y resistencias patronales.
en la piquería o la reinvención del ayllu. Pero La Paz: IBIS.
construir esa modernidad pasaba en última Claure, Toribio. 1949. Una escuela rural en Va-
instancia por el control de la tierra y por la cas. Cochabamba: Editorial Universo.
adquisición del poder de la escritura, elemen- Condarco Morales, Ramiro. 2011. Zárate. El
tos que permitieron a amplias capas del cam- “temible” Willka. Historia de la rebelión in-
pesinado indígena la elaboración de nociones dígena de 1899. El País: Santa Cruz.
Un amor
alternativas de indianidad que continúan reso- Conde, Ramón. 1992. Lucas Miranda Mama-
desenfrenado nando el día de hoy. ni: Maestro indio Uru-Murato. En Edu-
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Antología de la
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desenfrenado
por la libertad
Antología de la
historia política
de Bolivia
(1825-2020)
652
Tomo I
1825-1952
Invisibles y excluidos, pero siempre presentes
Los indígenas en la historia política boliviana
La lucha continúa
1825-1965
E
desorganización e improvisación. Presionados Tercer periodo
l artículo hace un recuento de 140 años por el abuso de los hacendados y la situación in- Bajo el debate
de rebeliones y normativa indígena, or- sostenible de vida (servidumbre y explotación) constitucional de
1938 que incorpora
ganizados en cuatro periodos entre 1825 que afectaba su bienestar, dichos levantamientos el régimen social
y 1965, desde la creación de la República has- terminaban, por lo general, con la represión vio-
(1938-1952)
ta la implementación de la reforma agraria. Se lenta, que invisibilizaba su lucha y sus deman- 653
evidenció que la lucha del movimiento indígena das. El segundo momento está asociado a la post
pasó por dos etapas organizativas en particular: guerra del chaco hasta la revolución del 52, que
la primera entre 1825 hasta la Guerra del Cha- mostró un movimiento, más organizado e insti- Invisibles y
co (1932-1935), periodo en el cual se dieron tucionalizado (sindicatos, consejos, movimientos
excluidos, pero
siempre presentes
de base, entre otros) que estaban asociados y ge-
1 A la memoria del Profesor Dr. Stephan Klasen de neraban sinergias con otros grupos y movimien-
la Georg-August-Universität Göttingen, mentor y
amigo, fallecido el 27 de octubre 2020.
tos sociales, como obreros, mineros y partidos
2 A la memoria del Profesor e historiador aimara políticos. Finalmente, el artículo muestra que la
Dr. Roberto Choque Canqui nacido en Caquiaviri, Revolución de 1952 representó la visibilización
1942 fallecido el 18 de julio de 2020. de sus derechos políticos, la inclusión del indio
3 Se agradece los comentarios y sugerencias de Lupe
Cajías, Robert Brockmann y Gustavo Rodríguez
como ciudadano a través del voto universal y el
Ostria (1952-2020) su visión en la etapa inicial de mejoramiento de su desarrollo humano a partir
esta investigación le dio valor agregado y cambió el de la reforma educativa. Empero, se identificó
enfoque con el que fue concebido. Asimismo, a la que el Decreto Ley 3464 de Reforma Agraria,
Ing. Hypatia Vanessa Saravia Jiménez por la siste-
matización de la Legislación Indígena 1825-1965.
contrariamente a lo que se pensaba, restauró ju-
4 Especial agradecimiento a la Sra. Lola Paredes que rídicamente la propiedad feudal, amparó la usur-
superó al Covid-19, actual Jefa de la Biblioteca de la pación de las comunidades y se convirtió en una
Fundación Xavier Albó por su generosidad y aten- reforma regresiva para estructura de la propie-
ción en la búsqueda de literatura para esta investiga-
ción en época de pandemia rígida y confinamiento,
dad rural indígena.
sin su gentil ayuda la revisión de la literatura hubie-
se sido mucho más incompleta e imperfecta. Palabras clave: Bolivia, indígenas, rebeliones
5 Instituto de Investigaciones Económicas (IIE), Fa- indígenas, pobreza, Revolución del 52, Reforma
cultad de Ciencias Económicas y Financieras. Ca-
rrera de Economía.
Agraria.
repartición de individuos, la mita,8 el ponguea-
je,9 entre otros) que entramparon a los indíge-
nas en las áreas rurales en pobreza (Platt 1982),
(Reyeros 1963), (Velásquez 2018).
organizaciones sindicales y campesinas que descubiertos. Para Hering Torres (2010) du- Bajo el debate
constitucional de
reemplazaron el pongueaje colonial por un rante la conquista de América, los europeos 1938 que incorpora
el régimen social
pongueaje de diferentes características, (Re- utilizaron la categoría “indio” para designar (1938-1952)
yeros 1963), (Rivera 1984), (Choque 2003). a los pueblos originarios de este hemisferio.
Lo hicieron “por medio de procedimientos 655
En sus inicios la población originaria del con- retóricos y de la “alegoresis” y mediante ima-
tinente americano fue categorizada como “na- ginarios sobre los enanos, gigantes y mons-
turales, aborígenes o nativos”, es decir, origi- truos de la Antigüedad y la Edad Media” Invisibles y
excluidos, pero
narios pertenecientes a la naturaleza del lugar. (Hering Torres 2010). Ya es bien sabido que, siempre presentes
Bajo el debate
constitucional de
1938 que incorpora
Campos de coca en los Yungas. el régimen social
(1938-1952)
Fuente: Bolivia sus tipos y belleza, fotografías de Herbert Kirchhoff.
657
1. Primer periodo: 1825-1880. del Ecuador y Perú (Bonilla 1978). Lo remo-
El complicado nacimiento to de sus centros urbanos, el grado de aisla-
de la República miento y las distancias, junto con la geografía Invisibles y
excluidos, pero
difícil e inexistencia de la interconexión con siempre presentes
La República de Bolivia se constituye como el exterior; las rutas coloniales hacia el atlán-
país independiente el 6 de agosto de 1825 bajo tico por Potosí a Buenos Aires dejaron de ser
el paraguas de los territorios que constituían importantes en la República. El acceso hacia
la Real Audiencia de Charcas18 bajo la orien- el Océano Pacífico por el puerto de Cobija se
tación política del patrón liberal. Para Bonilla constituyó en una larga travesía, toda vez, que
(1978) sus comienzos y su proceso económi- se tenía que franquear el desierto de Atacama
co y político durante el siglo XIX fueron en y la conexión por Arica tenía que superar las
verdad dramáticos. Ilustra con claridad y con constantes tensiones políticas entre Perú y
fuerza gran parte de las vicisitudes por las que Bolivia.
también atravesaron las Repúblicas andinas
Antezana (1969) claramente describe el mun-
do rural agrario. Expresa que, al fundarse la
18 Para Bonilla (1978) la separación y la constitución República, la economía agraria boliviana se
como República independiente de una región es-
tructuralmente ligada al Bajo Perú era inesperada.
caracterizaba en dos formas particulares: la
Charcas había sido separada del Perú a raíz de la primera, de los indígenas comunitarios que
creación del Virreinato del Río de la Plata para ser poseían casi toda la tierra y que la cultivaban
incorporada a este último, para después ser nueva- ya sea en forma colectiva o bajo un régimen
mente reintegrada al primero, cuando Buenos Ai-
res opto por la ruptura del pacto colonial en 1810
de pago en productos. Segundo: los “blancos”
(Bonilla 1978). todavía no habían invadido las tierras de las
comunidades y sus actividades estaban centra- mucho menos se integrarán ni formarían parte
lizadas en las minas y en las ciudades donde de la nueva Bolivia: se verán entrampados en
se dedicaban a la artesanía o al comercio. En la nueva arquitectura legal e institucional que
general, la economía agraria estaba en manos no les permitirá hacer un uso pleno de sus de-
de las comunidades, que en tiempo de la fun- rechos, se les otorgará, en un vaivén de nunca
dación de la República llegaba a unas 5.000 acabar, su principal activo la “tierra” pero se
aproximadamente. Las haciendas feudales les quitará después por leyes y decretos, como
eran muy pocas. El país se autoabastecía de en la colonia y se les continuará rebajando a
todos sus productos alimenticios y aun podía la categoría de servidumbre, el hacendado los
exportarlos a Argentina, Perú y Chile. Enton- continuará explotando y retendrá para sí el
ces se decía que “Cochabamba era el granero poco ingreso (en especie) que generaban.
del Perú”.
Lema (2017), en la línea descrita anterior-
Tanto en la colonia como en la República, la mente, considera que, pese al nuevo régimen
cualidad social “indio” se utilizó como instru- político con la nueva República, no hubo ma-
mento que estableció una categorización de yores cambios en la estructura de la sociedad
la población que establecía jerarquías, y por boliviana con relación al pasado colonial. En
Un amor
medio de dicha categorización se atribuyó e la base de la pirámide social se encontraban los
desenfrenado impuso la limitación de sus derechos civiles y indígenas –los más numerosos y diversos– y un
por la libertad
políticos, se los relegó a actividades y/o oficios escaso número de ex esclavos negros, luego los
Antología de la
historia política de baja y nula remuneración, por lo general mestizos y, finalmente, los criollos.19 Los gru-
de Bolivia
(1825-2020)
actividades en el sector agrícola, convirtiendo pos sociales se distinguían a partir de criterios
a este segmento mayoritario de la población, étnicos, políticos y fiscales, pero estas clasifi-
658 junto a las regiones donde habitan, en los sec- caciones no eran excluyentes entre sí (Lema
tores de mayor vulnerabilidad del país (Pent- 2017). Ricketts (1827) menciona que los indios
land 1827). o aborígenes componen la mayor parte de los
Tomo I habitantes del Alto Perú: “pueden aptos por
1825-1952
Marta Cabezas (2007) considera que la funda- su naturaleza y afables, pero son ignorantes,
ción de la República, se asentó sobre bases co- serviles, sobornables e inertes y aunque sean
loniales: “la explotación económica, exclusión tal vez menos viciosos que sus vecinos, son tan
política y exterminio cultural del indio”. Bases poco predispuestos como ellos, hacia las me-
coloniales –podemos decir– que se prolonga- joras”. Agrega que igualmente intolerante en
ron a lo largo del siglo XX (Cabezas 2007). La general es la clase más reducida pero influyen-
lucha por la reivindicación de los derechos de te de los criollos y mestizos (Ricketts 1827).
los pueblos indígenas fue orientada en pri-
mera instancia por la defensa del régimen de Sin duda, esos “ignorantes y serviles indios”
tierras de las comunidades originarias y pos- como describe Ricketts (1827), sin cono-
teriormente la lucha por el reconocimiento cimiento de la realidad social, sostuvieron
de su existencia en la vida política (Chihuailaf la economía colonial, fueron la bisagra que
2008), (Ticona Alejo 2004). Ante ese panora- prestaba servicios en el umbral de la escla-
ma, los indígenas y su dramática problemática vitud a título cuasi gratuito, jugaron con su
no estaban en la agenda de la nueva Repúbli-
ca, ni en los planes de los hacedores de políti- 19 La esclavitud fue abolida en la Constitución de
ca pública y legislación. Los indígenas, serán 1826 pero, en la práctica, persistió y fue abolida,
nueva y definitivamente, en el gobierno de Manuel
dominados, discriminados y explotados tam-
Isidoro Belzu en 1851 (Lema 2017). Pero también
bién por los criollos republicanos. En 1825 los estará presente en la Constitución Política del Es-
indígenas no se independizarían de nadie, ni tado de 1888 y 1937.
mano de obra un rol preponderante en el ex- Sin embargo la organización fiscal heredada del
tractivismo minero de la plata potosina, que periodo colonial (Cajas Reales)21 fue muy difícil
tuvo destino europeo y continuarían siendo de reemplazar, por las necesidades, intrínsecas
pieza clave en la economía republicana a par- de la metrópoli (Lofstrom 1972). Si bien con
tir de los tributos que pagaban financiando la el Decreto del 08.04.1824, de Trujillo (Cuadro
hacienda pública (Gráfico y cuadro 1) de la A del Anexo), Simón Bolívar declara propieta-
nueva República. Pese a su importancia eco- rios a los indios de sus tierras para que puedan
nómica, preocupaba el estado de abandono y venderlas, donarlas y tengan dominio de ellas,
marginamiento de la población indígena en no consideró el Estado y nivel de la Hacienda
los periodos ex ante y ex post de la Repúbli- Pública del Alto Perú y sus efectos económicos.
ca. Pentland (1827) sostiene que hacia 1825 La radiografía de la economía (1825), muestra
Bolivia contaba con 1.100.000 habitantes, de que, debido a la guerra de la Independencia,
los cuales 800.000 eran indios, 200.000 blan- las haciendas estaban abandonadas, las mi-
cos, 100.000 mestizos, 4.700 negros esclavos nas inundadas y cerradas, por lo que no había
y 2.300 negros libres. Bajo este panorama, generación de ingreso de otras fuentes. En la
los criollos intentaban construir un país para práctica el decreto mencionaba que las tierras
un 23 por ciento de la población ignorando comunitarias se repartirán entre los indios des-
y desconociendo al 77 por ciento restante poseídos. Se otorgaban activos a los indígenas y
se eliminaba tributos, pero la medida chocaría
constituido por indígenas. Tercer periodo
con una realidad: la depresión y desaceleración
Bajo el debate
del ciclo económico de ese período, que debido constitucional de
Como lo fue en la colonia y mucho más en 1938 que incorpora
a las circunstancias se repondrían y restituirían el régimen social
la República, la distinción entre ciudadanía (1938-1952)
nuevamente al estilo de las Cajas Reales y el sis-
(con derechos y obligaciones) y nacionalidad
tema fiscal heredado de la colonia.
(ser boliviano) no consideraba a los indíge- 659
nas, por las limitaciones constitucionales de
El Decreto del 22.12.1825 emitido en Chuqui-
facto: la condición de analfabetismo y no ser
saca establecería la contribución de impuestos
sirviente ni prestar servicio doméstico, ser Invisibles y
(tributos), en la que todo hombre entre los 18 excluidos, pero
propietarios de activos y bienes y mayor de siempre presentes
y 70 años deberá pagar tres pesos trimestral-
edad, constituían en exclusiones de facto, es-
mente. Excluiría a personas con limitaciones
tablecidas en la colonia que se prolongaron
físicas, religiosos y militares activos. Según
127 años en la República hasta mediados del
Sánchez-Albornoz (1978) el tributo indigenal
siglo XX.20 Una característica geográfica del continuaría siendo una institución de explota-
aporte de los indígenas se presenta en el grá- ción hacia el indio, si bien sucesivos gobiernos
fico y cuadro 1, en donde se muestra que las bolivianos atrapados entre las intenciones más
comunidades indígenas de La Paz (45,26 por generosas y el más estricto pragmatismo conti-
ciento) y Potosí (27,57 por ciento) sostienen nuarían dependiendo del aporte indígena para
la hacienda pública pagando el 72,83 por el funcionamiento de la administración guber-
ciento de los tributos del total en el período namental. Algunos gobiernos aparecen allí fran-
1820-1827. Para (Lofstrom 1972) la reforma camente dispuestos a abolir el tributo indigenal,
tributaria y la reorganización económica ju- pero el erario no se hallaba en condiciones de
garon un papel importante en el proceso de
descolonización y formación nacional en el
21 Las Cajas Reales eran los sitios donde se depositaba
siglo XIX. y disponía del oro, piedras preciosas, plata, dinero
y otros bienes que provenían de los tributos indí-
genas, decomisos, novenos, quintos y diezmos; por
20 Un análisis más detallado y extenso de la ciudada- la producción y acuñación de oro y plata, pago de
nía se encuentra en: (Irurozqui 2005) e (Irurozqui derechos, depósitos y deudas pertenecientes a la
Victoriano 2019). Corona.
Gráfico 1
Tributo Indigenal Recaudado de 1820 a 1827, a nivel regional
(En pesos)
Administraciones gubernamentales
a. 12.08.1825-29.12.1825 Simón Bolívar Palacios.
1818-1820 Desorden en el Consejo de Buenos b. 29.12.1825-18.04.1828 Antonio José de Sucre Alcalá
Aires. Inestabilidad política intra regiones y entre 1822 y 1823 desavenencias entre el Virrey
el ápice estratégico de mando de los españoles. La Serna y el General Olañeta, pugnas de
Victoria de Bolívar en Junín. En agosto de 06.08.1825, Asamblea de representantes
poder internas e inestabilidad política.
1824 derrota definitiva de los españoles. de los 5 departamentos del Alto Perú
300.000 Shock de Ingreso en Potosí. declaran la Independencia. 800.000
250.000 700.000
600.000
200.000 500.000
150.000 400.000
100.000 300.000
200.000
50.000 100.000
0 0
1820 1821 1822 1823 1824 1825 1826 1827
Chuquisaca 32.166 37.023 39.187 37.502 19.576 29.370 41.896 43.843
Potosí 139.910 157.367 250.403 179.766 0 146.811 181.581 183.599
Cochabamba 56.499 71.374 52.763 37.552 41.305 30.208 46.781 57.758
Oruro 74.037 74.402 65.874 68.337 61.168 43.359 84.499 74.972
La Paz 263.850 261.464 259.330 256.215 222.302 240.525 269.899 260.941
Total 566.462 601.530 667.557 579.372 344,351 490.273 624.656 621.113
Chuquisaca Potosí Cochabamba Oruro La Paz Total 2 per. med. móv. (Total)
Fuente: ANB. 1820-1824. Estado Jeneral que manifiesta los Ingresos de la Caja Nacional de los Departamentos del Alto Perú, Tomo 1 y (Lofstrom
Un amor 1972). Elaboración: Propia.
desenfrenado
por la libertad
Antología de la
historia política prescindir de los ingresos correspondientes. Los salario por los servicios que este preste. De-
de Bolivia
(1825-2020)
sentimientos no prevalecieron y el Estado se en- berán ser tratados como ciudadanos dignos de
contraba atado a ese impuesto y por su conduc- consideración en lo que no perjudique a los
660 to a la suerte de las comunidades rurales. derechos e interés de los demás ciudadanos; lo
cual era una utopía difícil de realizarse debido
Las administraciones gubernamentales de a la estructura social heredada de la colonia.
Tomo I buena gana hubieran disociado el tributo de
1825-1952
comunidad, pero no pudieron. Sánchez-Al- La eliminación del tributo encontrará su dra-
bornoz (1978) expresa que: “Merced pues al mática realidad y se impondrá muy pronto a la
tributo, éstas perduraron durante el siglo XIX. salida de Bolívar. Con Sucre, la organización de
El tributo disgregador, de comunidades de an- la nueva burocracia estatal hallará al gobierno
taño, se convirtió andando el tiempo en gaje en déficit y su administración repondrá el tri-
de su conservación. Valga la paradoja” (N. buto indígena, toda vez que en ese momento
Sánchez-Albornoz 1978). La idea de igualdad el erario nacional no alcanzaría ni para suel-
en los decretos y resoluciones de Bolívar, de dos y salarios. En efecto, la Ley del 20.09.1826
cómo somos iguales ante la ley (indígenas y (Cuadro A del anexo) suspenderá el decreto de
el resto de ciudadanos) consideró también la Trujillo referente a la repartición de tierras a
eliminación de la jerarquía de los caciques me- los indígenas. Una nueva paradoja para la nue-
diante la resolución del 29.08.1825 (Cuadro A va República, la cual vivirá del tributo indige-
del Anexo) emitida en el Cuzco, que establece nal (Cuadro y gráfico 1), sin embargo, le dará
la “Extinción de los caciques” y determinaba la espalda a las aspiraciones y necesidades del
que deberán ser tratados como ciudadanos indígena, el sujeto que soporta la economía de
dignos de consideración en lo que no perjudi- la nación. Así, la República no reconocerá la
que a los derechos e interés de los demás ciuda- propiedad comunal y omitirá la jerarquía de in-
danos. Establece asimismo reconocimiento de termediación establecida con el mundo indíge-
la propiedad individual del indio, formalizaba na. Peor aún, también desconocerá la nobleza
el no pago del tributo y se debía reconocer un indígena incorporada por la nobleza española.
Cuadro 1
Tributo Indigenal Recaudado de 1820 a 1827, a nivel regional
(En pesos y porcentaje)
Años Chuquisaca % Potosí % Cochabamba % Oruro % La Paz % Total
1820 32.166 5,68% 139.910 24,70% 56.499 9,97% 74.037 13,07% 263.850 46,58% 566.462
1821 37.023 6,15% 157.267 26,14% 71.374 11,87% 74.402 12,37% 261.464 43,47% 601.530
1822 39.187 5,87% 250.403 37,51% 52.763 7,90% 65.874 9,87% 259.330 38,85% 667.557
1823 37.502 6,47% 179.766 31,03% 37.552 6,48% 68.337 11,80% 256.215 44,22% 579.372
1824 19.576 5,68% — — 41.305 12,00% 61.168 17,76% 222.302 64,56% 344.351
1825 29.370 5,99% 146.811 29,94% 30.208 6,16% 43.359 8,84% 240.525 49,06% 490.273
1826 41.896 6,71% 181.581 29,07% 46.781 7,49% 84.499 13,53% 269.899 43,21% 624.656
1827 43.843 7,06% 183.599 29,56% 57.758 9,30% 74.972 12,07% 260.941 42,01% 621.113
Total 280.563 6,24% 1.239.337 27,57% 394.240 8,77% 546.648 12,16% 2.034.526 45,26% 4.495.314
Fuente: ANB. 1820-1824. Estado Jeneral que manifiesta los ingresos de la Caja Nacional de los Departamentos del Alto Perú, Tomo 1 y (Lofstrom
1972). Elaboración: Propia.
Para Sánchez-Albornoz (1978) el eje de la ex- decisivo que se establece en el seno de la po-
plotación en la colonia, pero también en la blación india y que es, a la vez, el resultado
República es el problema del tributo de los del funcionamiento colonial combinado de la
indios del Alto Perú. Considera que el tributo mita y el tributo (N. Sánchez-Albornoz 1978).
fue signo y estigma de la dominación colonial Ambas instituciones (tributo y mita) fueron un Tercer periodo
impuesta sobre los indios. Según él, las funcio- mecanismo de expulsión de segmentos impor- Bajo el debate
constitucional de
nes económicas que cumplían eran igualmen- tantes de la población indígena de sus comuni- 1938 que incorpora
te evidentes: convertir a los indios en una de dades. Asimismo, la evasión fue una respuesta el régimen social
(1938-1952)
las principales fuentes de mantenimiento de casi natural de los indios frente a la presión fis-
la Hacienda Real y contar con un mecanismo cal y las condiciones imperantes en las minas. 661
indirectamente compulsivo en la adjudicación
de la mano de obra indígena a los principales 1.1. La densidad demográfica indígena
centros mineros (N. Sánchez-Albornoz 1978) Invisibles y
excluidos, pero
(N. Sánchez-Albornoz 2014). A mediados del Desde el nacimiento de la República en 1825, siempre presentes
siglo XIX, Bolivia contaba con 134.090 indios se desprenden estimados poblacionales, como
tributarios, de los cuales cerca del 84 por ciento el que relaciona una población indígena de
se encontraba en el altiplano. (Sánchez-Albor- 800,000 habitantes, sobre un total aproximado
noz 1978, 2014) identifica una dicotomía básica de 1,5 millones (Jordán 2001) (Pentland 1827),
entre los originarios con tierra (24,19 por cien- otras estimaciones, refieren, de manera más
to) y los forasteros sin tierra (75,81 por ciento). precisa un millón cinco mil habitantes, don-
de el 56 por ciento era considerada población
Para 1854, por cada indio originario22 habían indígena (Guzmán y Toledo 1998). En 1831
tres que no lo eran: este es el clivaje social se emitió la Ley de Obligatoriedad de los Le-
vantamientos Estadísticos, con la que se inició
22 El indio originario era el que pertenecía a la co- oficialmente el primer censo poblacional, en
munidad y/o a la hacienda; el que no era originario ese año, durante la presidencia del Mariscal
era un migrante categorizado como forastero (que Andrés de Santa Cruz se realizó el primer cen-
vino de otro lugar) por temporadas para ayudar en
so y se estableció que el país tenía 1.088.768
los trabajos de la agricultura. Podría considerarse
por un lado la mobilidad migratoria de los indios habitantes (Cortes 1861); en 1835 claramente
(forasteros) como una forma encubierta de evasión de mayoría indígena, también durante el go-
fiscal y por la otra como un resultado de la indi- bierno de Santa Cruz, se realizó el recuento
gencia toda vez que el forastero no tenía tierra y su
poblacional II, para ese momento ya se había
mobilidad respondía a la búsqueda y generación de
ingreso más en especie que en dinero. creado la Oficina de Estadística, dando como
Un amor
desenfrenado
por la libertad
Mujeres en el área rural cosechando en el Valle cochabambino.
Antología de la Fuente: Bolivia sus tipos y belleza, fotografías de Herbert Kirchhoff.
historia política
de Bolivia
(1825-2020)
dato oficial que en 1835 Bolivia contaba con fecha habían 2.326.126 habitantes (Blancos y
662 1.060.777 habitantes (Mesa 2008). Mestizos: 632.674; Indígenas: 1.692.170), a
diferencia de los cuatro censos anteriores, que
Una década después, en 1845 en el gobierno del se realizaron con un intervalo de tiempo bas-
Tomo I general José Alivian, se creó la Comisión de Es- tante corto, para el quinto censo tuvieron que
1825-1952
tadística que realizó el tercer censo poblacional pasar 28 años, de esta forma en 1882, durante
identificando a 1.378.896 habitantes (Guzmán el gobierno de Narciso Campero, la Oficina
y Toledo 1998), ese mismo año, el naturalista de Estadística ejecuto el recuento y estable-
francés Alcides D’Orbigny23 dio pautas demo- ció que, Bolivia había bajado el número de
gráficas de interés para la época (Mesa 2008), sus habitantes, respecto del ultimo conteo, y
en 1846 José María Dalence realizó una esti- que para ese año existían 1.172.156 habitantes
mación de la “población salvaje” no censada en (Guzmán y Toledo 1998).
zonas selvícolas y de fronteras, apuntando que
en Bolivia existían 760 mil habitantes salvajes En dieciséis años de la guerra de la Independen-
(Cortes, 1861) como al inicio de la República la cia (1809 a 1825) los indígenas formaban parte
población de Bolivia era primordialmente in- de las tropas rebeldes, pero se enumeran decenas
dígena y rural representando el 52 por ciento. de levantamientos indígenas en el periodo colo-
nial entre los siglos XVI y XVII, el más notorio
En 1854 durante el gobierno de Manuel Isi- en 1781 dirigido por Túpaj Amaru en el Cus-
doro Belzu se desarrolló el cuarto censo de co, Túpaj Katari en La Paz, Tomás Katari y sus
población, que señalaba que en Bolivia, a la primos Dámaso y Nicolás Katari, en Chayanta;
que desestabilizaron la estructura organizativa
de la colonia. Ya en la República la principal
23 Rrealizó la primera publicación denominada “Des-
cripción Geografía-Historia y Estadísticas de Boli- contradicción histórica de Bolivia, radicaba en la
via” Tomo I. exclusión de la mayoritaria población indígena
del derecho a la ciudadanía, a la participación En el Censo de 1900, bajo el mandato José
política, al desarrollo y al respeto de su cultura, Manuel Pando, el país registraba 1.633.610 ha-
aspecto que se perpetuó durante la República bitantes (Población urbana: 26.10 por ciento,
y se expresó en la figura de exclusión y racis- rural: 73,9 por ciento. Blancos: 231.088 habi-
mo (Choque Canqui, Cinco Siglos de Historia tantes, mestizos: 484.611: Subtotal: 715.699.
2003), (Ticona Alejo 2004), (Gotkowitz, 2012), Indígenas: 792.850 y negros: 3.945. Tribus y
(Colque, Tinta y Sanjinés 2016). No civilizados: 121.116: Subtotal: 917.911), no
hubo interés por hacer otro recuento, por casi
El proceso de explotación continúo siendo in- 50 años, pero ello también estuvo ligado a la
soportable en la República, los indígenas contri- inestabilidad política y económica y al conflicto
buían al funcionamiento del Estado a partir de del Chaco, sin embargo, en 1950, en el gobier-
tributos, con su mano de obra en el sector agrí- no de Mamerto Urriolagoitia se llevó a cabo
cola y en el sector minero, por ello, el tema fun- el séptimo Censo de Población y el primero
damental del mundo andino es el de su principal de Vivienda, registrando 2.704.165 habitantes
activo la “tierra” el cual era muy complejo, pero (Población urbana: 708.568 (26,20 por ciento).
además conflictivo entre los mestizos republica- Rural: 1.995.597 (73,80 por ciento)). Es impor-
nos que conformaban la elite que gobiernan la tante denotar, que, a partir de la revolución de
nueva República y el mundo indígena. Las me- 1952, se busca cambiar la acepción de “indio”
didas de política tributaria y agraria no mejoran por campesino, en una búsqueda de identidad Tercer periodo
la situación de los indígenas, no resuelven sus nacional (Hall y Patrinos 2004). Sin embargo, Bajo el debate
constitucional de
problemas, en los primeros 38 años de vida re- hasta la reforma agraria (1953) claramente Bo- 1938 que incorpora
el régimen social
publicana (1825-1863) en 1863 en la presidencia livia era mayoritariamente rural e indígena. (1938-1952)
del general José María de Achá Valiente, se de-
termina la entrega de una parcela a los indígenas 1.2. La expropiación a favor del estado 663
sin tierra en diferentes dimensiones (ver Anexo y enajenación de tierras comunitarias
A), además establece que los indios contribuyen-
tes son propietarios de las tierras que poseen de En 1829, se da un hecho histórico para el mun- Invisibles y
excluidos, pero
10 años atrás, mediante la Ley del 19.07.1863 do indígena, de notable relevancia en el ápice siempre presentes
Cuadro 2
Población indígena de Bolivia hacia 1856, por departamentos
Contribuyentes Indígenas
Porcentaje sobre habitantes
Departamento Número Porcentaje del total (a x 4,5)
del departamento
a b C d
La Paz 70.797 52,56 318.586,50 64,39
Oruro 7.665 5,69 34.492,50 63,50
Potosí 34.628 25,71 155.826,00 55,41
Chuquisaca 5.563 4,13 25.033,50 11,19
Cochabamba 9.437 7,01 42.466,50 13,22
Cobija 750 0,56 3.375,00 64,01
Beni 5.855 4,35 26.347,50 97,89
Total 134.695 100,00 606.127,50 43,70
Fuente: (N. Sánchez-Albornoz 1978).
rural de Huarina, fue hijo de una familia noble En la administración de Mariano Melgare-
en la colonia, su padre era un maestre de cam- jo la Asamblea Nacional, mediante la Ley
po José de Santa Cruz y Villavicencio, noble de 28.10.1864 se decretó que José Vicente
criollo miembro de la Orden de Santiago, na- Dorado junto con otras personalidades fue-
tural de Huamanga (en la actualidad Ayacucho, ra Consejero del Estado, sus ideas sobre la
Perú), y por Juana Basilia Calahumana herede- política agraria gubernamental directamente
ra en línea directa de una familia aymara noble planteaban la expropiación y la enajenación
y rica de Huarina que decía descender de los de las tierras comunitarias a favor del esta-
incas y que ostentaba el cacicazgo del pueblo de do. En 1864, recomendó la necesidad de des-
Huarina en Bolivia, a orillas del lago Titicaca. pojar la tierra a los indígenas sobre la base
También, fue presidente de la Junta de Gobier- de ser carentes de conocimientos técnicos
no del Perú (1827), Protector de la Confedera- e instrucción y por ello estancarían el desa-
ción Perú-boliviana (1836-1839) y fue nombra- rrollo de la agricultura; en contraposición a
do por el gobierno peruano Gran Mariscal de ello, se recomendaba que la elite, es decir: los
Zepita (Mesa 2016). blancos progresistas de mayor visión e ins-
trucción, mecanizarían el campo y lo harían
La legislación sistematizada en el cuadro A en más productivo, por tanto, desarrollarían el
Un amor
anexo, de la administración gubernamental de sector agrícola. El indio, bajo la óptica de
desenfrenado Santa Cruz y Calahumana al igual que Bolívar Dorado, transitaría en términos de bienestar
por la libertad
respetaron la estructura comunitaria de la tie- de propietario pobre a colono rico y acomo-
Antología de la
historia política rra, sin embargo, ello no implicó un cambio dado, sus ideas y la legislación sentarían las
de Bolivia
(1825-2020)
cualitativo ni sustancial a favor de los indíge- bases de una sociedad feudal que entramparía
nas, las disposiciones se orientan al ámbito tri- en la servidumbre al indio.
664 butario, de la propiedad de la tierra y de la pro-
tección tenue de sus derechos, por ejemplo la Posteriormente, en 1866 y de manera formal,
Orden del 03.11.1829 emitida en Ayacucho es- comienza la política de ampliación de la ha-
Tomo I tablecía que: Ningún indígena es obligado a satis- cienda a favor de determinados patrones cer-
1825-1952
facer a cualquier clase a que pertenezca, lo que im- canos a la administración pública de Melga-
plicaba la no obligatoriedad de la servidumbre rejo, procediéndose a la expropiación de las
aunque en la práctica no se cumplía. La Orden tierras de comunidad y apropiación de gran
del 13.11.1829 de La Paz prohibía a los curas que parte de las tierras del altiplano y valles. Así,
obligue a indígenas a pasar fiestas contra su volun- el décimo quinto presidente de Bolivia Ma-
tad que paguen que triple del valor de ellas. La ley nuel Mariano Melgarejo Valencia (1864-1871)
del 28.09.1831 emitida en Ayacucho establecía mediante el Decreto Supremo del 20.03.1866
que: los extinguidos caciques de sangre y sus descen- (Anexo A) establece la venta de los “Terrenos
dientes, eran declarados propietarios de los terrenos de comunidad” y se ordena despojar a los co-
que poseían; lo propio que los indígenas de los que munarios indígenas de sus tierras que deberían
han disfrutado por más de diez años. El Decreto ser adquiridas de modo individual en un plazo
del 07.04.1836 de Ayacucho: declaró propietarios de 60 días, previo pago de un título entre 25 y
los indígenas que poseen terrenos por más de diez 100 pesos, de manera tal que si no se cumplía
años, pena de los funcionarios que perturbaren esta con el pago de ese título las tierras pasaban al
posesión. El vaivén legal de otorgar tierras a los gobierno y serían puestas a la venta en subas-
indígenas y luego quitárselas era común para la ta pública. En la práctica el decreto formalizó
normativa en los primeros veinte años de la Re- el despojo y la expropiación de las tierras con
pública, se restituyeron el pago de los tributos y apoyo de los militares y los beneficiados fue-
los indígenas sostuvieron la hacienda pública al ron personeros del propio gobierno de Melga-
inicio de la República. rejo y sus familiares.
Dichas disposiciones originaron sublevaciones
en contra de las autoridades y levantamientos
indígenas propiciados por el Dr. Casimiro Co-
rral (Ex Secretario de la Prefectura de La Paz,
1857, (Pittari 2014)) como el levantamiento
de Huaicho (Puerto Acosta, 1869-1870) en la
frontera con el Perú y el de Ancoraime (1870),
ambos conducidos por el líder indio Luciano
Villca, los cuales fueron fuertemente reprimi-
dos por los militares. Con una visión distinta
sobre la política agraria y de activos (tierras de
comunidad) a la de Melgarejo el presidente
Agustín Morales Hernández (1871-1872) de-
termino mediante la Ley del 31.07.1871 emi-
tida en La Paz, la devolución de las tierras de
comunidad y eliminación de las revisitas a los
indígenas, pese a los reclamos de los hacenda-
dos la disposición se hizo efectiva.
Tercer periodo
deberían pagar los propietarios; e implementa ejercer todos los actos de dominio que realiza-
mesas revisitadoras (Cuadro Anexo A). Para ba cualquier ciudadano.25
Flores Gonzalo (2018), esta ley estaba dirigida a
disolver o reducir las comunidades y a levantar a) El Estado por su poder de imperio ejercía
tuición de las demás tierras, las cuales pasa-
rían a su jurisdicción y derecho propietario.
24 La idea de la ex vinculación consistía en sustituir la
propiedad colectiva del Ayllu por la propiedad indi- b) La ley no reconocería tierras comunitarias
vidual en favor de la hacienda y no de los indígenas ni comunidades y nadie podría apersonarse
comunarios. Tácitamente, se propuso la desaparición en nombre de ellas.
del Ayllu en occidente, se parceló los territorios co-
c) El impuesto que pagarían los indígenas
lectivos individualizando la propiedad comunal, me-
diante la dotación de títulos individuales a una elite sería sobre los terrenos en los cuales te-
de hacendados. Para las poblaciones indígenas andi- nían derecho propietario; los indígenas
nas fue un golpe duro, pues el Estado boliviano pre- sin tierras quedarían libres de cualquier
tendía destruir la sociedad ayllu mediante un decreto.
contribución.
Como consecuencia de la aplicación de la citada ley,
se desató el más importante proceso de expropiación
de tierras indígenas de la historia republicana, imple-
mentado a través de la Revisita General de tierras del 25 Se rompía la estructura comunitaria de la propie-
año 1881 (Condarco Morales 1986). Lo cual inevi- dad de la tierra lo cual a la larga generaría conflicto,
tablemente causaría conflicto e incertidumbre en las toda vez que el derecho propietario no era indivi-
comunidades indígenas del área rural. dual, sino colectivo.
d) Se suprimía los servicios personales a au- consistía en que 1 peso era equivalente a 8
toridades políticas, militares y eclesiásticas reales, mientras que 1 boliviano valía 10. Por
(pero la ley no mencionó a los hacendados). tanto, por cada boliviano, el indígena pagaría
e) La ley requería también el levantamiento 2 reales más, (Reyeros 1963), (Rivera 1984),
de un nuevo catastro, que permitiera aso- (Choque 2003), (Flores, 2018).
ciar individuos (y no sólo ayllus) con parce-
las específicas, así como conocer la ubica- Adicionalmente a ello, los indígenas tenían que
ción y superficie de éstas. pagar de 5 a 50 bolivianos por el título y los
papeles sellados, y desde entonces estar sujetos
Para Flores (2018), el alcance de la ley tiene al impuesto de propiedad pagado por todos los
dos interpretaciones: propietarios, por lo que se eliminaba la contri-
bución indigenal (Flores, Estructura Agraria y
1. La primera está relacionada con el tipo de actores en el conflicto (1900-1952) 2018). En
propiedad que se deseaba instituir. La ley suma, las leyes de Melgarejo y Frías repercu-
establecía que los indígenas podían conver- tieron negativamente en la precaria estructu-
tirse en pequeños propietarios o colonos de ra agraria que instituyó la España colonial y
hacienda, hasta más de la mitad del siglo afecto negativamente a la propiedad que los
XX la política agraria de las administracio- indígenas creían tener sobre sus tierras, antes
Un amor
desenfrenado nes gubernamentales fue convertirlos en de la República, los indígenas compraron sus
por la libertad
colonos sujetos al poder de los hacendados. tierras de la corona española y la mayoría de
Antología de la
historia política
Además, ingenuamente los que estaban a los ayllus conservaban sus títulos de propiedad
de Bolivia favor de la ex-vinculación creían que, al denominados “títulos de composición”. Según
(1825-2020)
privatizar la tierra en favor de la estructura De Solorzano y Pereira (1979) (Pereira 1979)
666 de hacienda y hacendados, los indígenas se y (Capdequí 1959) la “composición” era una
convertirían en ciudadanos con derechos y figura jurídica del derecho castellano median-
que tendrían que ser liberados de los tra- te la cual se podían regularizar las situaciones
Tomo I bajos de servidumbre. Flores (2018) men- que estaban al margen de la ley, tales como la
1825-1952
ciona que había una gran distancia entre ocupación indebida de la tierra o la condición
el “ciudadano digno” y el “tributario de- extra oficial de los extranjeros, a través de un
gradado”; encontraban una contradicción pago a la Real Hacienda.27
entre la servidumbre y la ciudadanía, cosa
que era cierta, ya que el “ciudadano” era
definido por las leyes como aquel que tenía 27 Por tanto, era un mecanismo de negociación, pac-
to o concierto entre el soberano y sus súbditos, en
derecho a votar y ser elegido, y para ello
el cual las dos partes resultaban beneficiadas, pues
había que tener educación y patrimonio. el vasallo corregía su condición irregular y obtenía
2. La segunda interpretación está relacionada certeza legal, mientras que la Corona se favorecía
con el tributo indigenal. Los indios que po- de la contribución monetaria correspondiente. El
seían tierras pero que estaban a la espera de efecto de la composición hacía que una situación de
hecho, producida afuera o en contra de derecho, se
sus títulos debían pagar el tributo en “bolivia- convirtiera en una situación de derecho. En el caso
nos” (la nueva moneda de esa época) la mis- de las tierras realengas la composición no era un tí-
ma cantidad que antes pagaban en “pesos”.26 tulo originario de propiedad, como sí lo fue la mer-
El problema surgió por diferencia de cambio ced o gracia real, sino un acto jurídico por el cual la
situación ilegal podía convertirse en legal, generan-
do otro tipo de título que amparaba el derecho del
26 Por ejemplo: si el indígena pagaba 20 pesos de tri- posesionario, y que en última instancia le concedía
buto, ahora debería pagar con la nueva moneda 20 el dominio absoluto. También dispensaba todas las
bolivianos, la diferencia de cambio encarecía el tri- faltas, defectos y vicios que pudiesen presentar las
buto y no era sostenible su pago por parte de la escrituras de propiedad Solorzano y Pereira (1979)
comunidad indígena. (Pereira 1979) y (Capdequí 1959).
A nivel comunitario, en los ayllus se asignaba lugar a conflictos sociales, entre indios y el
tierras a las familias para que las cultiven, pero gobierno de la época. Según Ticona (2003):
la propiedad era comunitaria no era individual “Como consecuencia de la aplicación de la
o de familias individuales. La España colonial citada Ley de Ex-vinculación, se desató el
exigía el pago de un tributo aproximadamen- más importante proceso de expropiación de
te proporcional a la superficie de total de la tierras comunales de la historia republicana,
tierra. El tributo era pagado por ayllu, no de implementado a través de la Revisita General
manera individual o por familia y fue durante de tierras, del año 1881 (A. E. Ticona 2003).
muchos años el sostén principal de las finanzas El intento de formar una estructura agraria
públicas. El cobro de los tributos sólo era po- campesina se ve obstaculizada por la resisten-
sible merced a una compleja red burocrática, cia de los indígenas, que generó conflictivi-
que comprendía curacas, hilacatas, jilancos, dad, revueltas y rebeliones con consecuen-
recaudadores, segundas y caciques (Flores, cias políticas y económicas. Con el objetivo
Estructura Agraria y actores en el conflicto de contrarrestar la política de usurpación de
(1900-1952) 2018), los cuales recolectaban tierras y pago asimétrico de tributos aparece
el tributo y los recaudadores eran los corre- la primera forma de organización y repre-
gidores, alcaldes y subprefectos. La Ley de sentación indígena alrededor de 1880 que se
Ex-vinculación eliminó esta jerarquía de au- constituye un movimiento indígena, denomi-
toridades tradicionales y de esa manera minó nado el de los “Apoderados Generales”, con- Tercer periodo
las estructuras de autoridad local. El tributo o formado por autoridades indígenas que en la Bajo el debate
constitucional de
contribución indigenal era clave en las finan- colonia gozaban de representatividad: Jilaca- 1938 que incorpora
el régimen social
zas públicas. Representó una parte importante tas, Mama jilacatas, Jilanqus, Mallkus, Mama (1938-1952)
de los ingresos de la administración colonial y Mallkus, Curacas, entre otros, de los depar-
siguió jugando ese papel durante la República, tamentos de La Paz, Oruro, Potosí, Chuqui- 667
particularmente para las administraciones de- saca y Cochabamba (Chihuailaf 2008), (A.
partamentales (Gráficos 2, 3 y 4). En el cuadro E. Ticona 2003) y (Flores, 2018). Para Ti-
en Anexo B, refleja la dependencia de la admi- cona (2003) Feliciano Espinosa y Diego Cari Invisibles y
excluidos, pero
nistración regional de Potosí de la contribu- Cari fueron sus primeros representantes. Las siempre presentes
1.000.000
900.000
800.000
700.000
600.000
500.000
919.006
877.836
882.562
874.821
864.239
859.205
836.606
835.658
400.000
823.481
766.939
756.886
759.695
759.695
756.740
745.237
752.275
740.000
743.536
723.994
717.920
717.920
717.920
717.920
708.446
700.000
693.779
677.694
665.635
664.156
650.208
650.000
635.695
300.000
618.115
637.474
600.453
566.326
550.747
200.000
425.557
367.995
339.779
305.444
100.000
0
1827 1828 1829 1830 1831 1832 1833 1834 1835 1836 1837 1838 1839 1840 1841 1842 1843 1844 1845 1846 1847 1848 1849 1850 1852 1853 1854 1855 1856 1860 1862 1863 1864 1865 1867 1868 1869 1871 1874 1880 1882
669
Invisibles y
(1938-1952)
Tercer periodo
Bajo el debate
excluidos, pero
el régimen social
constitucional de
siempre presentes
1938 que incorpora
0
1.000.000
2.000.000
3.000.000
4.000.000
5.000.000
6.000.000
7.000.000
8.000.000
9.000.000
2.000.000
4.000.000
6.000.000
8.000.000
10.000.000
0
1825
1826 1.500.000
1827 1.500.000
1828 1.500.000
1829 1.500.000
1830 1.537.702
1831 934.753
552.074
1835
1832
1833 461.069
1834 744.500
Ingreso del presupuesto nacional
1835 1.537.297
1836 1.401.848
1839 1.442.120
1845
1840 1.643.961
1841 1.735.687
1842 2.493.160
1843 1.969.474
1844 2.192.770
1845 2.276.045
1846 2.151.298
1855
Rendimiento de la contribución indígena
Gráfico 4
1854 2.366.577
(En pesos)
Fuente: Memorias de Hacienda (Biblioteca de la Vicepresidencia del Estado, Biblioteca de la UMSA). Elaboración: Propia.
(1825-2020)
1855 2.308.889 de Bolivia
1856 2,616.267
historia política
Antología de la
1860 1.767.850
2.780.188
por la libertad
1862 desenfrenado
1864 2.223.388
1875
Un amor
1865 1.695.098
Presupuesto de la Hacienda Pública (1826-1901)
2 per. med. móv. (Ingreso del presupuesto nacional)
1867 2.472.399
1868 2.877.613
1869 3.716.318
Gráfico 3
(En pesos)
1871 1.707.910
1880 2.889.279
1885
1882 2.459.453
1883 2.213.980
1884 2.443.804
1885 3.396.604
1886 2.600.248
1887 1.540.586
1895
1893 5.234.821
1894 4.115.700
2.271.859
Bolivia: Tributo indigenal y Presupuesto de la Hacienda Pública (1826-1901)
1895
1905
0
1899 5.194.559
1900 5.939.580
200.000
400.000
600.000
800.000
1901 7.331.400
1.000.000
Desde 1880 ya existía una red de apoderados El movimiento de los Apoderados Generales
muy bien establecida, con bases sobre todo instituyó una primera forma organizada de
en el Departamento de La Paz, pero también reivindicación indígena, que mostró el poder
en Oruro y Potosí. En la esfera política, se de los ayllus y comunidades, que comenzaron
fortalecía el Partido Liberal., en 1890 sus a plantear el derecho a la autonomía. En este
postulados consideraban elementos pro-indí- panorama de movilización indígena se ubica el
genas. Pensaban que había que devolver a las desacato a las autoridades superiores y subal-
comunidades las tierras que habían sido ven- ternas, propugnado por los Apoderados Ge-
didas durante las revisitas, que se debía abolir nerales (Demelas 1984), (A. E. Ticona 2003),
la contribución indigenal y que se debía tener (Condarco Morales 1986). Si bien no existe li-
una forma federal de gobierno. Ya en el po- teratura sobre la movilización indígena en este
der, los liberales abandonaron rápidamente periodo, la formación del primer gobierno in-
sus ideas sobre federalismo y derechos indí- dígena en Peñas (Oruro), alrededor de 1900 a
genas. El desarrollo de los ferrocarriles había la cabeza de Juan Lero, no fue una casualidad
ampliado grandemente el mercado de ali- de la participación aymara-quechua en la gue-
mentos, el precio de la tierra había subido y rra federal de 1899, sino una consecuencia de
creado un motivo adicional para capturar las la fuerte convicción indígena de buscar su au-
tierras comunales; la capacidad de resistencia togobierno (Condarco Morales 1986).30
indígena había disminuido. Por consiguien- Tercer periodo
te, las ventas y confiscaciones se reiniciaron Para Flores (2018) los resultados principales Bajo el debate
constitucional de
en 1905, esta vez con fuerza mayor que en de la Ley de Ex-vinculación fueron el creci- 1938 que incorpora
el régimen social
el pasado (Flores, 2018). La siguiente ola de miento de las haciendas, la definición de una (1938-1952)
venta y captura de tierras comunales ocurrió frontera “dura” entre zonas de haciendas y
entre 1905 y 1915. A diferencia de la ante- zonas de comunidades libres y la caída en la 671
rior, ocurrió en áreas donde antes no existían recaudación de tributos. La Ley de Ex–vincu-
haciendas.29 lación representó el ataque más fuerte contra
las tierras comunales en la era republicana. De Invisibles y
excluidos, pero
1881 a 1920 hubo 7.616 operaciones de venta siempre presentes
29 Flores (2018) advierte un cambio en la composición de tierras de comunidades. Las acciones lega-
geográfica y las diferencias regionales en materia de
activos e institucionalidad: En el Departamento de les de los apoderados sólo lograron la anula-
La Paz el resurgimiento de la minería y el creci- ción de 20. En 1880 las comunidades contro-
miento de la población resultaron en más demanda laban al menos la mitad de la tierra cultivable;
de alimentos, por lo que las tierras de Omasuyos,
en 1930 menos de un tercio.
Pacajes y Cercado se volvieron muy demandadas.
Algunos dirigentes del Partido Liberal resultaron
entre los más beneficiados por la compra de gran- la ruptura de un pacto entre ellos y el Estado. En
des extensiones, pero también hubo muchísimas Cochabamba, en cambio, se dio la menor resisten-
ventas de parcelas pequeñas. En Chuquisaca las re- cia. Ese valle ya presentaba una gran cantidad de
visitas empezaron en 1881, pero la fuerte resisten- pequeños propietarios en el siglo XVII. La ley de
cia indígena impidió que se realizaran hasta 1890 e ex-vinculación no fortaleció a los hacendados; los
incluso después de 1900. Las comunidades cerca- debilitó, al permitir el ingreso de nuevos competi-
nas a la capital fueron las primeras en venderse. Los dores, incluso a zonas donde todavía prevalecían las
compradores fueron terratenientes, miembros de la comunidades. La instalación de la propiedad pri-
elite local y vecinos pudientes. Las comunidades en vada fue fácil en Capinota y el valle bajo, pero más
las zonas más altas y con acceso a valles resultaron difícil en las comunidades de las alturas de Vacas,
menos vulnerables. Hubo comunidades que logra- Arque y Tapacarí, aunque finalmente considerables
ron evitar la venta de todas sus tierras. En el norte extensiones fueron vendidas a afuereños (Flores,
de Potosí los ayllus se alzaron contra las revisitas Estructura Agraria y actores en el conflicto (1900-
desde 1880 hasta 1892. Se ha argumentado que los 1952) 2018).
ayllus del norte de Potosí conceptualizaban el con- 30 En esta edición, ver el artículo de Huascar Rodrí-
flicto de una manera extremadamente particular, guez quien desarrolla el tema en mayor profundidad.
2. Segundo periodo 1880-1938 correspondiente caída de su precio en el con-
Movimientos de resistencia indígena texto internacional por el efecto de la sobreo-
ferta del bien.
Según datos del Censo General de la Po-
blación de la República de Bolivia con base Las políticas de apertura impactaron a las ma-
en empadronamiento de 1ro de septiembre nufacturas y pequeñas industrias locales. En
del 1900 la población en Bolivia alcanzaba a 1878 se registró una hambruna y sequía que
1.633.610 habitantes. Un aspecto a resaltar impacto la agricultura y los centros urbanos
era que el 73,1 por ciento era rural y solo un en La Paz, Cochabamba, Potosí y Sucre un
26,9 por ciento urbano, en 75 años desde el año después (Velásquez 2018), Chile invadía
1825 la característica rural del país no había Bolivia. En desigualdad de condiciones físicas,
cambiado en sentido cualitativo (Cuadro 3), logísticas y materiales, nos enfrascábamos en
y los problemas de la tierra, titulación, tribu- una contienda bélica, la pérdida del Litoral
to tampoco se habían transformado sustan- boliviano por efecto de la Guerra del Pacífi-
cialmente. De la población total el 34,5 por co también implicó la pérdida de los ingre-
ciento se dedicaba a la agricultura fundamen- sos por la explotación del huano y el salitre,
talmente para abastecer a los centros mineros se perdieron recursos minerales como los del
Un amor y a las ciudades; la industria representaba el cobre de Chuquicamata que formaban parte
desenfrenado 24,4 por ciento (Cuadro 4). Las administra- el departamento del Litoral pertenecientes a
por la libertad
ciones gubernamentales entre 1825 y el 1900 Bolivia ubicado a 15 km al norte de Calama,
Antología de la
historia política no administraron los recursos del erario na- en la región de Antofagasta y en infraestructu-
de Bolivia
(1825-2020) cional con eficiencia, mucho menos con cri- ra se perdió un puerto de salida de productos
terios de calidad del gasto, sus ingresos de- al contexto externo, lo cual afectaría inevita-
672 pendían de la minería, del tributo indigenal blemente al desarrollo del país. La situación
y de la agricultura. La alta inestabilidad po- económica, social y política que vivía el país
lítica, las guerras, el conflicto armado y los era dramática y desfavorable.
Tomo I golpes de Estado empeoraban la situación de
1825-1952
un país que no terminaba de configurarse, la Para Parada (2006) durante el siglo XIX las
infraestructura era altamente precaria, anal- comunidades indígenas participaron de forma
fabetismo y pobreza eran las dos caracterís- activa en la política nacional aprovechando la
ticas principales que afectaban el bienestar oportunidad que los quiebres en el seno de la
de la población mayoritariamente indígena elite les ofrecían para decidir a quienes debían
(Velásquez 2018). o no apoyar. En la práctica, los indígenas es-
tablecieron alianzas con la facción de la elite
La economía a finales del siglo XIX y XX mos- que accediera a incorporar sus demandas rela-
traba signos de desaceleración y en algunos cionadas principalmente a la defensa de la co-
sectores como en el minero estancamiento, munidad frente a los embates de las políticas
la plata lentamente dejaba de ser importante estatales que pretendían su abolición. Parada
en la estructura de las exportaciones; nacía la (2006) considera que, al supeditar sus reivin-
era del estaño, la ganadería y las manufactu- dicaciones a los conflictos entre las elites, las
ras tibiamente aportaban al ingreso nacional. comunidades pusieron en práctica una sagaz
La caída de los precios de la plata impactó visión de oportunidad política considerando
por un lado negativamente a la minería y por que, como colectivo actuando en solitario,
el otro al funcionamiento del sistema finan- tendrían pocas posibilidades de éxito, sin em-
ciero, debilitando al sector. Disminuyeron bargo, los problemas legales, de propiedad y
las exportaciones de quina, debido al incre- la pesada carga burocrática hacían que las de-
mento de la producción de Colombia con la mandas no se materialicen.
Cuadro 3
Bolivia: Población censada urbana y rural, 1900
Bajo el debate
constitucional de
1938 que incorpora
el régimen social
(1938-1952)
“Hacienda de Turquiña, 1887.
Fuente: Colección privada.
675
logrado ubicarse en el poder y reproducirlo a 1930 que refleja que entre 1879 a 1888 la con-
partir de la expropiación y usurpación de tie- tribución indígena representaba 90 por ciento Invisibles y
excluidos, pero
rras, estableciendo relaciones de explotación y de los ingresos de Potosí, de 1889 a 1907 el 70 siempre presentes
servidumbre. Hacienda y poder se refuerzan por ciento y entre 1910 a 1930 el 58 por ciento
mutuamente. En algunas ocasiones, el po- lo que refleja que sin tributo pagado por los
der genera haciendas; en otras, las haciendas indígenas simplemente la administración re-
conducen al poder. No puede la hacienda –ni gional de Potosí no hubiese podido funcionar,
sus duras normas no escritas– sobrevivir sin la toda vez que no poseía aparte de las primicias31
protección del poder. El caso boliviano no es y los diezmos de otras fuentes importantes de
una excepción, sino una confirmación de esta generación de ingresos, esa realidad financiera
regla (Flores 2018). se refleja en otras administraciones en Boli-
via (La Paz y Cochabamba por ejemplo) y es
En lo que respecta al tributo pagado por los in- entre otras una de las explicaciones para que
dígenas (tributo indigenal) continuaba vigente el poder central no permita que esta realidad
a inicios del siglo XX y representaba una fuen- cambie y fue un factor que entrampo a los in-
te importante de ingresos de la administración dígenas en un círculo de servidumbre y escla-
central y subnacional en especial de las Pre- vitud. Pese a su contribución está claro que las
fecturas, las cuales necesitaban la contribución
indigenal para poder financiar su estructura de
gasto, a continuación (Gráfico 5) se presenta 31 Los diezmos y primicias eran tributos que gravaban
la producción agropecuaria bruta y tenían como fi-
el presupuesto del departamento de Potosí, nalidad el mantenimiento de la Iglesia, sus minis-
por fuente de financiamiento entre 1879 y tros y el culto.
Gráfico 5
Potosí: Presupuesto del departamento, por fuente de financiamiento, 1879 - 1930
(En Bolivianos de la época)
400.000
350.000
300.000
250.000
200.000
150.000
100.000
50.000
0
1879-1880
1881-1882
1884
1885
1886
1887
1888
1889
1890
1892
1893
1894
1895
1896
1897
1898
1899
1900
1901
1902
1903
1904
1905
1906
1907
1908
1909
1910
1911
1912
1913
1914
1915
1916
1917
1919
1920
1921
1922
1923
1924
1925
1926
1928
1930
Contribución indígena Diezmos Primicias Total
Fuente: (Platt 1982), basado en Presupuesto General de la Nación 1879-1930 BNB, Memorias de Hacienda de la Biblioteca de la Vicepresidencia
del Estado Plurinacional de Bolivia. Elaboración: Propia.
Un amor
desenfrenado
por la libertad
administraciones gubernamentales en los pri- de libertad para generar ingreso de otras fuen-
Antología de la
historia política meros 100 años de vida de la República (1825- tes de financiamiento.
de Bolivia
(1825-2020)
1925) hicieron poco o nada por mejorar la ca-
lidad de vida y las condiciones de bienestar de La legislación de la época intentaba instituir
676 los indígenas que eran mayoría no solamente el “impuesto predial único”, pese a esa figura
en tamaño poblacional sino en su aporte en la de generación de ingresos, las prefecturas se
generación del ingreso nacional (ver Gráfico 5 resistían a prescindir del tributo indigenal que
Tomo I y Cuadro A y C en Anexo). por muchos años sustento la hacienda pública.
1825-1952
Sin embargo, la eliminación del tributo indi-
El tributo indígena en la época colonial sus ca- genal presentaba diferentes problemas que no
racterísticas y particularidades se extendió en permitían el que fuese eliminado: Primero, se
la vida republicana. Demografía y tributo junto presentó el problema de conversión moneta-
con geografía están íntimamente relacionados ria, la antigua moneda el peso feble, seguía cir-
y configuran la estructura agraria, que si bien culando en poder del público, pero su conver-
establece formas tradicionales de tenencia de tibilidad a la nueva moneda no tenía muchos
la tierra y relaciones sociales de producción, adeptos y era menor. Lo que representaba que
constituye un escenario sumamente sensible las recaudaciones disminuirían. Segundo: la
a los cambios generados por los conflictos Ley del 1ro de Octubre 1880 había liberado
entre hacendados y gobierno (dominadores) a los forasteros32 del pago de tributos, con lo
e indígenas (dominados) y fue un elemento
que detonó sublevaciones y alzamientos en los
32 Sánchez Albornoz (1978) advierte una diferencia
principales centros de producción agrícola a
entre categorías tales como originarios –adscritos
finales del siglo XIX e inicios del siglo XX. Por al tributo– y forasteros –exentos de tributo–, detec-
tanto, el tributo indígena seguiría vigente al tando una merma en el número de los primeros con
empezar el siglo XX, a nivel local las prefec- respecto al crecimiento de los segundos en la colo-
nia, en la República ambos (originarios y forasteros)
turas como gobiernos regionales necesitaban
eran sujeto al pago de tributos. Sin embargo, con el
la contribución indigenal para poder sustentar paso del tiempo los indígenas deseaban evadir los
una estructura de gasto que tenía pocos grados tributos a partir de categorizarse como forasteros.
Tercer periodo
Bajo el debate
constitucional de
1938 que incorpora
el régimen social
(1938-1952)
Hacienda el Molino, 1902.
Fuente: Colección privada.
677
altiplano de La Paz y de Oruro y realizaron un de ese gobierno fueron la destrucción, incen- Bajo el debate
constitucional de
trabajo intenso con el movimiento indígena dio y saqueo de las propiedades particulares, 1938 que incorpora
el régimen social
y el discurso de acercamiento estuvo cercano el juzgamiento de todas las personas cono- (1938-1952)
a las demandas indígenas sobre la restitución cidas por su parcialidad con los adversarios
de tierras, titulación y contribución indigenal. y la “eliminación de mestizos y blancos” sin 679
Por ejemplo, en las elecciones de 1896 (en las distinción de su filiación política. Similar fe-
que Pando participó como candidato de los nómeno ocurrió en Sacaca (norte de Potosí)
liberales), los campesinos expresaron una vez (Flores, 2018). Invisibles y
excluidos, pero
más su descontento ante la expansión de las siempre presentes
Fuente: (Corral 1872), (Morales 1871), (Dorado 1864), (Antezana, 1994), (Choque Canqui, 2003), (A. E. Ticona 2003), (Albó, 2007), (Flores, 19
79), (Flores, 2018). Elaboración: Propia.
La recuperación de los títulos coloniales de 2.4. La estructura política del siglo XX
composición y venta otorgados por la Espa-
ña colonial llevó a los Caciques Apoderados Desde finales del siglo XIX se evidencia una
a interpretar en su real dimensión su derecho ruptura entre el Estado oligárquico de mo-
propietario sobre el único activo que les per- delo europeo con la visión y las demandas in-
tenecía, ello les motivo a demandar autonomía dígenas que eran la mayoría en términos de
e independencia del poder central, recupera- población. Para (Mansilla 2017) a comienzos
ción de los límites y demarcaciones originales del siglo XX Alcides Arguedas (1879-1946) y
de sus ayllus, sin duda ello implicó enfrenta- Franz Tamayo (1879-1956) personificaron las
mientos con el gobierno y la elite de hacen- dos tendencias básicas del debate sobre el des-
dados. Los levantamientos, masacres y suble- tino de la nación: el liberalismo modernizante
vaciones indígenas entre indígenas y criollos y el telurismo nacionalista.37
era el problema del territorio: no meramente
como medio de producción, sino como el te- Bolivia inicia el siglo XX bajo la influencia li-
rritorio del ayllu y la comunidad considerado beral, las relaciones económicas giraban en
en su conjunto, a ello hay que sumar la abo- torno a la minería del estaño que junto con el
lición del trabajo servil, los impuestos y “le- caucho determinarían la primera bonanza de
yes nuevas” que entrampaban al indio en un ingresos en la primera administración de Is-
círculo vicioso de pobreza, sobreexplotación, mael Montes que estuvo acompañada de inte- Tercer periodo
Todas las revueltas, todas las tempestades del Félix Laime38 plantea que las jurisdicciones
indio, han sido ahogadas en sangre (Mariate- de Santiago, San Andrés y Jesús de Machaqa
gui 1925). En cuanto a la importancia geográ- fueron compradas a la corona española en La
fica de Jesús de Machaqa, extensa literatura, Plata en 1585 por los caciques Carlos Llan-
analiza sobre las características territoriales y qui y Sebastián Llanqui con 32 llamas llevadas
sus diferencias entre lo que respecta a ayllu y y 5 millones de pesos de oro. Posteriormen-
marka. Para (Choque 1986) (Choque Canqui, te, en 1645, Jesús de Machaqa fue comprada
2003) la marka de Jesús de Machaqa poseía por Gabriel Fernández Guarachi, yerno del
tierras en los valles de Larikexa (Larecaja) y rico cacique Fernando Axat Qamaqi. Fuera Tercer periodo
Sikasika (Sicasica) así como minas de oro y ha- de estas, se conoce una tercera adquisición en Bajo el debate
constitucional de
ciendas, pero con el advenimiento de la Repú- 1746. Las sucesivas recompras realizadas por 1938 que incorpora
el régimen social
blica de Bolivia, las markas fueron perdiendo las representaciones de la marka de Jesús de (1938-1952)
jurisdicción a efecto del nuevo modelo políti- Machaqa no solo explican el afán por conser-
co administrativo organizado en departamen- var sus pertenencias territoriales incluidos los 685
tos, provincias, y cantones sobre todo por la territorios discontinuos, sino por preservar los
avanzada terrateniente. tres niveles de pachas que hacen a la marka.
Invisibles y
excluidos, pero
Para (Albó, 1979) desde el inicio de sus in- Los caciques apoderados de la marka jugaron siempre presentes
vestigaciones concibió el concepto de marka un papel importante a nivel local, pero estable-
como un “mini estado”, según (Murra 1975) cieron una red en toda la República, Faustino
son mini estados conformados por un nume- Llanqui Titi cacique apoderado de Jesús de
ro variable de islas, archipiélagos verticales, Machaca coordinaba con Santos Marka T’ula
como un ideal andino compartido por etnias peticiones y representaciones ante gobiernos
muy distantes geográficamente entre sí, en locales. Según (THOA 1984) desde 1919 apa-
cuanto a su organización económica y política recen con un trabajo intenso de representación
o territorios discontinuos que permiten tener en varios departamentos del país; esas represen-
mayor o menor control de una máximo de pi- taciones chocaban con las acciones arbitrarias y
sos ecológicos. coercitivas de corregidores, intendentes, de po-
licía, munícipes, sacerdotes, administradores de
Para (Condarco y Murra 1987) la marka son hacienda entre otros que ejercían presión sobre
zonas simbióticas, estas referencias son im- los comunarios, (Choque 1986) confirma los
portantes de precisar toda vez que reflejan el abusos de las autoridades y los atropellos.39
peso específico de Jesús de Machaca desde la
concepción de territorio y tierra desde la vi-
38 Ver, el Prólogo a La Masacre de Jesús de Machaqa, 2da
sión indígena. Desde la visión socio política
edición. Biblioteca del Bicentenario de Bolivia. 2019.
de (Choque Canqui, 2003) y (Choque 1986) 39 El criollo-mestizo del pueblo tuvo control de las
establece que los comunarios de los distintos instituciones burocráticas estatales, sin efectuar
Recuadro 1
El Kuraka y abogado iletrado del movimiento indígena:
Santos Marka T’ula
Según el Taller de Historia Oral Andina (THOA 1984), la ley de Ex vinculación (1871) desconoció
la estructura organizativa de los ayllus e instituyó la figura de representación indígena por apode-
rados. En noviembre de 1883 una ley establecía el reconocimiento del derecho propietario de las
tierras si estas contasen con títulos originales de composición muchos de ellos otorgados en tiem-
pos de la colonia. Así, se instituyo la representación de los descendientes de los indígenas que en
la colonia habían firmado los títulos de composición con la corona española y por derecho propio
se les nombraron apoderados. En este sentido, (THOA 1984), (Albó, Movimientos indígenas desde
1900 hasta la actualidad 2007), (A. E. Ticona 2003) y (Choque Canqui, 2003) identifican a Martín
Vásquez e Isidro Kanki de Qallapa, los cuales tomaron conocimiento que en los archivos de Lima
se encontraban las escrituras de propiedad que sus antepasados firmaron con las autoridades co-
loniales españolas, recabaron copias de los mismos y se anoticiaron que existían otros registros de
otros ayllus. En este sentido, Martín Vásquez inicio una cruzada de comunicación a los dirigentes
indígenas de La Paz, Potosí, Chuquisaca y Cochabamba para anoticiar esta posibilidad legal. Sin
embargo, se lo catalogó de subversivo, se lo apresó y le confiscaron sus escrituras de propiedad. De
Un amor la revisión documental en Lima, Vásquez identificó que los propietarios de Qallapa eran los Marka,
desenfrenado de los cuales el descendiente directo era Santos Barco Tola. Para Roberto Choque (2013), nació en
por la libertad
Qurawara de Pakasa en 1879, probablemente haya sido descendiente de Carlos Marka T’ula, que
Antología de la
historia política fue registrado en una revisita en 1575. Para THOA (1984) en el Archivo y Biblioteca Nacionales
de Bolivia de Bolivia (ABNB) se conserva un expediente de 1784 en que aparece el nombre de Gabriel Marka
(1825-2020)
T’ula, quizás también pariente de Santos Marka T’ula. En la investigación efectuada por el THOA
en 1983 se menciona como sus padres a Mariano Barco o Warqu y Margara Puqa. THOA (1984)
686
revisando las revisitas de Jilata, encontró a dos Marianos Guarco, uno viudo y otro casado con Mag-
dalena Paco, registrados el año 1877. Finalmente, Santos Barco Tola, fue nombrado apoderado y
retomó el apellido original de su familia como: Santos Marka T’ula.
Tomo I
1825-1952
Según THOA (1984) su trayectoria como autoridad originaria comienza en 1910 en adelante, en que
se desempeña como kuraka principal del ayllu Jilata de Kallapa y Julluma. En 1914 Marka T’ula se
presentó ante la Prefectura como apoderado del ayllu Condo, solicitando los testimonios de los títulos
rescatados por Martín Vásquez, los cuales no les fueron entregados. Para 1916, según señala en uno
de sus memoriales, habría sido junto a Dionisio Paxipati y Feliciano Condori, uno de los tres caciques
facultados mediante nombramiento “protocolizado en la capital Sucre” para representar a los caciques
y autoridades originarias. Sus diligencias y solicitudes a la burocracia estatal, motivó su detención el
13 de octubre de 1917 acusado de revoltoso. Entre 1917 y 18 cuando fue liberado continuó buscando
títulos en Potosí, La Paz y Sucre. Para marzo de 1918, fue identificado como un agitador extremo,
fue detenido y confinado a los Yungas en el Rio Cajón (hacia Caranavi), donde habría salvado la vida
tras un intento de asesinato. En la Administración de José Gutiérrez Guerra su Ministro de Gobierno,
en 1919, ratificó su nombramiento como representante y apoderado de los ayllus de las provincias
Pacajes, Ingavi, Inquisivi, Loayza, Omasuyos, Larecaja, Caupolicán, Muñecas, Nor y Sud Yungas de
La Paz.
Marka T’ula era iletrado, THOA (1984) considera que apenas sabía firmar y pedía a sus escribanos
Leandro Condori, Rosendo Zárate y otros que le leyeran la documentación obtenida, lo que les per-
mitía defender mejor sus tierras comunales. Su batalla era intelectual, pero de asombrosa reivindica-
ción de derechos, contra el sistema jurídico por el reconocimiento legal del derecho propietario de
los indígenas sobre sus tierras. Se estableció una red y apoderados de otros ayllus como con Faustino
Llanki Titi, apoderado de Jesús de Machaqa y coordinaban actividades con él. Progresivamente los
caciques apoderados debido a la burocracia y a que sus solicitudes eran desestimadas empezaron a
desconfiar de las Prefecturas y tribunales. Marka T’ula y otros apoderados depositaron cinco expe-
dientes en el Archivo General de la Nación (AGN) y recabaron certificaciones por el depósito. Según
THOA (1984) en el AGN hoy Archivo y Biblioteca Nacionales de Bolivia (ABNB) se conservan varios
expedientes que llevan la firma de Santos Marka T’ula y están fechados en distintos periodos: Un
primer grupo tiene como fechas extremas los meses de junio y octubre de 1919. Se trata de un testi-
monio de un memorial presentado al Ministro de Gobierno solicitando se ordene a las autoridades
de la provincia Sica Sica que se atienda en justicia a los reclamantes; tiene la fecha del 24 de julio de
1919. Este documento está acompañado por varios testimonios de otros escritos, todos del mismo
año. El segundo grupo procede del año 1929 y se trata de testimonios de memoriales presentados
por los caciques al Ministro de Gobierno y a la Prefectura de La Paz; están acompañados de otros
anexos y solicitan, en el primer caso, se ordene mediante circular que los subprefectos de Pacajes,
Omasuyos, Sica Sica y Larecaja remitan toda la documentación que se halla en sus oficinas relativa
a reclamos de los indígenas y, en el segundo, que se reconozca como su procurador a Andrés Cho-
quechambi, de la comunidad Pujri, cantón Escoma, para poder hacer el seguimiento de los trámites
de los caciques y autoridades facultados con nombramiento protocolizado en Sucre desde 1916. El
tercer grupo está integrado por un memorial dirigido al Fiscal General de la Nación, fechado en
enero de 1931 y acompañado de otros varios testimonios (Máximo Pacheco Balanza, Director del
Archivo y Biblioteca Nacionales de Bolivia (ABNB)).
En 1923, Marka T’ula, fue nuevamente detenido bajo la figura de “conmoción subversiva”. Siguió Tercer periodo
dirigiendo la lucha de la red de caciques desde el panóptico de La Paz. La red de caciques se amplió
Bajo el debate
y en noviembre de 1924 e hizo una asamblea de unificación. La red incluyó a artesanos de origen constitucional de
1938 que incorpora
indígena (albañiles, bordadores, sastres, herreros, cerrajeros, pintores, cargadores, matarifes, otros) el régimen social
y se planteó también la defensa de los ayllus suburbanos como San Pedro y San Sebastián. Desde la (1938-1952)
cárcel, el 6 de agosto de 1924 hizo un pedido para que terminen la usurpación de tierras; la creación
de la escuela fiscal normal y el servicio militar para jóvenes comunarios, requisito para optar a la 687
ciudadanía. Marka T’ula, quien nunca claudicó, atribuía los abusos a la sociedad criolla, a no saber
leer ni escribir. Hacia 1925, T’ula se acercó a la Diócesis de La Paz pidiendo amparo a comunarios
y agregados en la búsqueda y protección de sus títulos, luego se acercó a la Iglesia Adventista que Invisibles y
excluidos, pero
tenía influencia en el área rural. Flores (2018) comenta que, en 1927, comunarios de Laja iniciaron siempre presentes
un juicio contra los hacendados Jáuregui, Perou y otros por apropiación ilegal de tierras comunales.
Los acusados recurrieron al argumento de la “sublevación encabezada por T’ula”. Los comunarios
lograron que se haga el deslinde general de tierras entre comunidades y haciendas de provincias
Sicasica, Omasuyos y otras. Cerca al fin del juicio los hacendados hicieron desaparecer los papeles y
lograron que se archive el proceso por “desistimiento” de los demandantes. Para 1928 se le encuen-
tra liderando a varios caciques del departamento de La Paz, entre los que podemos citar a: Rufino
Villca, Mariano Pocori, Santiago Mamani, Pascual Collqui, Gerónimo Collo, Mateo Yampara, Gre-
gorio Titirico, Anselmo Choque y otros.
En la década de 1930, presidía el movimiento integrado por caciques y autoridades indígenas de los
departamentos de La Paz, Oruro, Potosí y Chuquisaca, en defensa de su territorio y de sus derechos.
En 1932, al iniciarse la Guerra del Chaco, los caciques-apoderados resultaron en el bando pacifista,
aunque algunos querían prestar un servicio más a “los blancos” a cambio de garantías sobre sus tierras.
El gobierno realizó el reclutamiento forzado de indios en las comunidades. Los indios resultaron
también ser la mayor parte de los fallecidos. Marka T’ula encabezó en La Paz una marcha de 120
mujeres comunarias –que habían perdido a sus familiares– pidiendo el cese de la Guerra. En 1932
fundó la “Sociedad del Centro Educación de Aborígenes Bartolomé de las Casas”, para la educación
de los indios y la defensa de la tierra. En 1939 se presentó con otros caciques apoderados al Segundo
Congreso Eucarístico como si fuera un alto tribunal de justicia, pidiendo protección y reclamando
sus derechos. Santos Marka T’ula el incansable abogado iletrado de los indígenas falleció el 13 de
noviembre de 1939.
El inicio de la sublevación data de muchos Paz de un levantamiento indígena. Al llegar la
años atrás, de demandas, atropellos y abusos fiesta del 3 de octubre, la comunidad se pre-
por parte de hacendados y autoridades criollas paró para la celebración comunal. Los vecinos
locales; por ejemplo: Faustino Llanqui40 de 86 pensaron que los indígenas se sublevarían,
años cacique principal de Jesús de Machaba en dada la gran cantidad de gente que se reunió
1919 reclamó ante la prefectura y la Cámara (más de 6 mil personas) indios de los 12 ayllus,
de diputados por el despojo de tierras que los entre bailarines y espectadores, Ríos expresó
terratenientes de los ayllus colindantes de Qa- que la fiesta era pretexto para atacar el pueblo
lla y Sullkatiti Arriba ejercían contra los co- y el vecindario. Sin embargo, la fiesta pasó y no
munarios, así los hacendados Carlos Villegas y se registró ningún incidente ni levantamiento
Guarachi,41 el patrón de la hacienda Sinimuru armado. El 9 de noviembre de 1920 el mismo
de apellido Castillo, Pastor Escobar42 fueron corregidor acusó a Marcelino Llanqui (maes-
acusados por constantes atropellos. El 22 de tro en una escuela e hijo de un antiguo caci-
agosto de 1920 los representantes de los co- que apoderado, Faustino Llanqui) de reunir a
munarios: Faustino Llanqui;43 Blas Ajacopa, los comunarios para exterminar a los blancos
Apolinar Forra y los jilaqatas denunciaron y nombrar autoridades en el cantón Jesús de
ante la Junta de Gobierno que Augusto Ríos Machaqa. Fue capturado, maltratado y luego
Un amor
el Corregidor del Cantón, Lucio Estrada, Na- liberado. Se le acusó de “hacer consentir a los
desenfrenado talio Nates, Modesto Peláez,44 Nicolás Rea, indígenas que sobrevendría una revolución
por la libertad
Francisco Rico, Gerónimo Apasa, Dámaso que significaba el exterminio de la raza blanca
Antología de la
historia política Pelaez, Corcino y Filomeno Calderón, Julio y de los liberales” y que “los indígenas podrían
de Bolivia
(1825-2020)
Fernando Pastor Escobar, Nemesio Tarqui, gobernarse por sí mismos” (Choque Canqui,
Rumaldo Pérez, Calestino Pérez, Gregorio 2003) y (Choque 1986).
688 Pérez y otros vecinos de Jesús de Machaqa se
estaban armando para atentar contra sus vidas El 1 de diciembre de 1920, Faustino Llanqui,
y bienes, según (Choque 1986) esta denuncia y otros representantes, solicitaron un amparo
Tomo I resultó una alerta y advertencia para el gobier- y protección a su persona y propiedades a cau-
1825-1952
no de Bautista Saavedra. sa de los numerosos abusos cometidos. Al año
siguiente, aunque simpatizaban con el gobier-
El 27 de septiembre 1920 Augusto Ríos hizo no de los republicanos, los indígenas habían
conocer al prefecto del departamento de La puesto la mira en el corregidor, Lucio T. Es-
trada. Este corregidor era considerado una au-
toridad perversa, que cometía abusos y exac-
ningún cambio, una especie de racismo y terro-
rismo político. Por ejemplo, en la primera admi- ciones por faltas inexistentes.45 Aún más, los
nistración de Montes la oligarquía terrateniente indígenas pensaban que el gobierno de Saave-
a través de la prefectura de La Paz y también en dra no había cumplido su palabra de nombrar
el gobierno Republicano de Bautista Saavedra se un corregidor indígena. El 11 de marzo de
apropió de gran parte de las tierras de los ayllus
de Tiwanacu, Waqui y Wiyacha, los actos de pre-
1921 Marcelino Llanqui convocó a un cabil-
varicato de las autoridades eran comunes, denun- do comunal (Ulaqa) en la escuela ambulante
ciados por los líderes comunales, pero no se hacía de Qhunqhu, la cual duró hasta la madrugada
absolutamente nada al respecto (Choque Canqui,
del día siguiente, cuando los comunarios que
2003) (Choque 1986).
40 Descendiente de Sebastián Llanqui cacique colo- habían asistido atacaron el pueblo de Jesús de
nial de 1547 (En el periódico: El Eco del Norte, La Machaqa, saquearon el pueblo, capturaron
Paz, 8 de septiembre de 1929). y mataron al corregidor y a dos miembros
41 Del Ayllu Qalla.
de su familia. Según el periódico El Andino
42 De la Hacienda Achajiri.
43 El cacique principal de la comunidad.
44 El Compadre del ex prefecto de La Paz. 45 Choque (1986).
murieron 10 mistis (mestizos) incendiaron 10 participación de comunidades aledañas y en
casas y saquearon 3646 (Choque 1986), (Cho- algunos casos alejadas del centro del conflic-
que Canqui, 2003). to y se establecieron acciones penales que no
siguieron el camino del debido proceso y los
La masacre se inició el 12 de marzo de 1921. derechos de los imputados.
La Prefectura de La Paz ordenó al subpre-
fecto de Inkawi (Ingavi) se constituyera con 2.6. La sublevación en Potosí
la fuerza policial, por su parte la reacción del con epicentro en Chayanta, 1927
gobierno de Saavedra fue extrema, se ordenó
la movilización de 1200 hombres del Regi- El 25 de julio de 1927 se produjo la suble
miento Abaroa, se retomó el pueblo de Je- vación de 100 mil indígenas de Potosí, Co-
sús de Machaca (14 de marzo de 1921). Los chabamba,Chuquisaca y Oruro como pre-
militares saquearon varias comunidades, se ludio de la revolución agraria de 1953 que
fusilaron a 118 comunarios, se incendiaron lo liberaría del sistema de trabajo gratuito y
316 viviendas, 70 indígenas apresados. Mar- que le hizo propietario de su parcela. La su
celino y Faustino Llanqui fueron perseguidos blevación implicó mucho más que el pueblo
y posteriormente apresados. La rebelión se o la provincia en donde se originó, por sus
extendió a otras provincias y tuvo un impacto características, extensión geográfica y por
importante a nivel rural y urbano (Choque la magnitud de los eventos. Investigaciones Tercer periodo
cación indígena podía coadyuvar a la enseñanza, Bolivia, sobre el propio territorio boliviano. En Bajo el debate
constitucional de
defensa, y restitución de los territorios de los ay- 1934, Eduardo Nina Quispe, como presiden- 1938 que incorpora
el régimen social
llus, amenazados y/o convertidos en haciendas te de la Sociedad Centro Educativo Collasuyo, (1938-1952)
(E. Ticona 2002). Este fue un paso importante incorpora en su solicitud del deslinde general
que se dio en el desarrollo educativo indígena, de territorios andinos a los pueblos indígenas 693
en el que este Centro Educativo Collasuyo se guaraní, mojeño y chiquitano, de los departa-
caracterizaba por ser una institución comunita- mentos de Santa Cruz, Tarija y Beni. Entre los
ria de ayllus y markas, siendo ésta la base para nombres que acompañan estas solicitudes están Invisibles y
excluidos, pero
que esta idea se amplié a varios departamentos Casiano Barrientos, capitán grande del Izozog, siempre presentes
Después de la Guerra del Chaco el país se en- Con la nueva Constitución Política del Estado
contraba en una crisis económica y el camino (CPE, 1938) promulgada en la administración
no solamente era recomponerla sino además de Germán Bush (1937-1929) por primera vez
resolver el problema social y político en el que se estableció la prohibición, al trabajo contra Tercer periodo
se encontraba. Los indígenas que participa- la voluntad de las personas (CPE 1938, Art 5). Bajo el debate
constitucional de
ron en la guerra se quedaron en las ciudades y Estaba claro que cada vez la legislación debía 1938 que incorpora
el régimen social
muchos otros retornaron a sus comunidades, modernizarse a la par de la evolución de los (1938-1952)
pero con otra mentalidad y con otra visión de derechos, para hacer eco a los reclamos de
lucha, la institucional. El presidente David los indígenas en contra de las condiciones de 695
Toro (1936-1937) entendió las diferencias de trabajo en las haciendas, pero también en los
clase, que la guerra se encargó de mostrar en centros mineros y en las pocas fábricas que
su corta administración, por ello se preocupó existían en las ciudades. Invisibles y
excluidos, pero
de abrir caminos hacia la inclusión de los sub- siempre presentes
Las relaciones laborales entre indios y hacen- trabajos obligatorios, cosechaban los productos del
Tomo I
dados no eran de las mejores y surge la figura hacendado, pero los confiscaban; rechazaban reali-
1825-1952
zar servicios personales en casa del hacendado o se
de la desobediencia a las actividades habituales
rehusaban a transportar sus productos. Estaba claro
que se realizaban en el marco del trabajo en que las actividades (gratuitas, entre otras) al hacen-
el campo, Flores (2018) y Gotkowitz (2011) dado llegaron a un punto de inflexión.
identifican esa figura como una huelga de 59 El caso de Tacorama (1939, Cochabamba) descrito
por Gotkowitz (2011) sobre una demanda que pre-
brazos caídos,58 los indígenas claramente esta-
sentó un hacendado para el desalojo de dos colonos
acusados de instigadores al levantamiento. En los
departamentos presentaron una demanda solici- hechos esa demanda involucró a 300 hombres, mu-
tando la elección y reconocimiento de alcaldes jeres y niños de 10 comunidades. Al final el juez
mayores, regidores, alguaciles, escribanos y otras falló a favor del hacendado y el desalojo con ayuda
autoridades indígenas. Se basaban en la Constitu- de la fuerza policial tuvo un saldo de 8 muertos.
ción de 1938 y en otros documentos que no tenían Las demandas legales y las acciones de hecho en
estatus legal. Su movimiento indica claramente la contra de los servicios personales se multiplicaron.
necesidad que los colonos de hacienda tenían que Los hacendados ante esa situación que les ocasio-
contar con un aparato institucional local y confia- naba inestabilidad e incertidumbre, generaron un
ble. Dos fuerzas fueron en su auxilio: la Federación mercado negro de bienes raíces y gran parte de
Obrera Local (FOL), que promovió la elección ellos se vieron obligados a arrendar, dividir o ven-
de alcaldes y jilakatas en las haciendas y la red de der sus propiedades, dando lugar al ascenso social
“Alcaldes Mayores Particulares” que surgió en las de una nueva categoría de propietarios rurales, de
zonas quechuas de Chuquisaca, Norte de Potosí y nuevos apellidos, sin pretensiones de alcurnia, pero
Cochabamba. indudablemente más hábiles en el manejo de sus
58 Abarcaba diversidad de acciones en la relación ha- relaciones con los indígenas.
cendado/ indígena. Por ejemplo: los indígenas se 60 El “postillonaje” consiste en la conducción de las
negaban a presentarse cuando eran convocados a carretas y del cuidado de los caballos.
más rechazada, el pongueaje. La mayoría y demandaron la abolición del pongueaje y
mezclaba esta demanda con la exigencia de los impuestos cobrados a los indígenas.
tierra para los colonos y autoridades locales 2. Organizaciones de mujeres que pedían
confiables. La lucha continuaba no solamen- compensación por viudez, protección so-
te en el altiplano, sino que tenía su epicentro cial y devolución de tierras usurpadas.
en los valles de Cochabamba. 3. Militares socialistas con preocupaciones
en torno a la solidez de la nación, la nece-
3.1. 1938: La Convención Nacional sidad de superar el trauma de la guerra e
alrededor de la Nueva Constitución ideas difusas sobre el progreso, la ciudada-
Política del Estado (CPE) nía, la nación, la pobreza, exclusión de los
indígenas.62
El debate constitucional del 38, daba esperan-
za a la elite de hacendados para que el nuevo La elaboración de la sección primera del pro-
marco legal configure una arquitectura insti- yecto de CPE, estuvo a cargo de una comisión
tucional a favor de los pocos (hacendados) en que partió preguntándose: ¿A quiénes perte-
desmedro de los muchos (colonos/ indígenas). necía la nación? Para la sección segunda (De-
En la práctica, la representatividad de los dife- rechos y garantías) del proyecto se identifica-
rentes sectores e instituciones en la Conven- ron los derechos y obligaciones que deberían
ción reflejaron asimetrías: Sobre representados considerarse. Asimismo, se determinó los as- Tercer periodo
se encontraban los sectores urbanos, de clase pectos socioeconómicos, geográficos, cultu- Bajo el debate
constitucional de
media, artesanos, obreros y ex combatientes de rales o raciales; si las mujeres deberían estar 1938 que incorpora
el régimen social
la Guerra del Chaco. Los sectores más conser- representadas y si los indígenas podían ser (1938-1952)
vadores también estuvieron presentes, aunque ciudadanos (Gotkowitz, 2011). La discusión
en menor proporción, el área rural estuvo re- sobre la temática indígena también estuvo 697
presentada por una sola persona. El panorama presente. Sin embargo, muchas ambigüedades
político y social antes de la Convención mos- y vacíos se encontraron.
traba a hacendados fortalecidos en estructura Invisibles y
excluidos, pero
como en número, ampliaron su poder con la En el texto constitucional aprobado, descono- siempre presentes
cooptación de más tierras en los valles princi- ce a la esclavitud63 y servidumbre: Artículo 5to.-
palmente, desterraron a los colonos rebeldes y La esclavitud no existe en Bolivia. No se reconoce
en algunos casos anularon la representatividad ningún género de servidumbre y nadie podrá ser
de los caciques que los consideraban revoltosos. obligado a prestar trabajos personales sin la justa
retribución y sin su pleno consentimiento. Los ser-
En el otro frente, sentimientos nacionalistas y vicios personales sólo podrán ser exigibles cuando así
posiciones de izquierda intentaban restablecer lo establezcan las leyes.64
equilibrios. Era un cambio de ideología que
venía de la mano de la postguerra, tal el caso
62 (Albó, 2007), (Choque Canqui, 2003), (Gotkowitz,
de ex combatientes indígenas que retornaron 2011), (Choque Canqui, 2016), (Flores, 1986),
reclamando derechos, formaron organizacio- (Flores, 1979) (Flores, 2018).
nes corporativas influyentes:61 63 El 13 de febrero de 1880 en España, el rey Alonso
XII firma la ley de abolición de la esclavitud. En Bo-
livia, la Constitución Política del Estado de 1880,
1. Fuerzas políticas como el Partido Obrero 28 de octubre de 1880 en la administración de Nar-
Revolucionario (POR) y la Confederación ciso Campero. En la sección: De los derechos y ga-
Socialista Boliviana (CSB), las cuales exa- rantías, Artículo 3° establece que: La esclavitud no
cerbaron sus críticas al sistema oligárquico existe en Bolivia. Todo esclavo que pise el territorio
boliviano es libre.
64 Constitución Política del Estado (CPE) de 1938, 30
61 La Legión de Ex Combatientes. de octubre de 1938.
Aunque desde la CPE de 1880 (28.10.1880) en y ser admitido a las funciones públicas.66 Flo-
la administración de Narciso Campero se re- res (2018) comentaba que ello ampliaba el
conocía que la esclavitud no existía en Bolivia número de ciudadanos, pero todavía dejaba
tanto en el siglo XIX y hasta la primera mitad fuera a los indígenas (por la condición de lec-
del siglo XX, las prácticas de explotación, es- to escritura). Sin embargo, ya se había abierto
clavitud, servidumbre estaban presentes en la una brecha. El tema sería tratado nuevamente,
sociedad boliviana, después de la revolución pero sin cambios, en la Convención de 1945
del 52 y hasta el siglo XXI todavía el racismo y (CPE, 1945, artículos 43 y 44).67
la discriminación continúan presentes.
El tema central de la comisión de debates era
La convención también debatió sobre la uni- el derecho propietario de la tierra y la Conven-
versalidad de la instrucción (Educación) y se ción (1938) discutió ampliamente los aspectos
estableció en la constitución promulgada en su económicos, políticos y sociales que giraban
Artículo 6to inciso f: Que toda persona tiene de- en torno a la tierra y a la propiedad rural. Jurí-
recho a recibir instrucción. Lo que implicaba a dicamente el derecho propietario absoluto, no
que todo ciudadano boliviano debería recibir fue contemplado y los representantes ante la
educación, tanto en el área urbana como en convención, aprobaron una cláusula a favor de
Un amor
el área rural, en la práctica la implementación la elite de hacendados, garantizando la invio-
desenfrenado de la educación indigenal tardaría en materia- labilidad de la propiedad privada.68 El Artículo
por la libertad
lizarse y estuvo plagada de muchos problemas
Antología de la
historia política estructurales. En el tema de la ciudadanía, la
de Bolivia 66 Artículos 43 y 44 de la Constitución Política del
(1825-2020)
discusión giraba en torno a que: ¿Sí los indí- Estado de 1938, 30 de octubre de 1938.
genas deberían ser ciudadanos o no? Sin em- 67 CPE (Bolivia: Constitución política de 1945, 24 de
698 bargo, en el texto constitucional aprobado en noviembre de 1945. Gualberto Villarroel, Presi-
dente Constitucional de la República) Artículo 43°.
su Sección 4ta de Nacionalidad y Ciudadanía, Ar-
- La ciudadanía consiste: En concurrir como elec-
tículo 39° establecía: Son bolivianos de nacimiento, tor o elegido a la formación o el ejercicio de los po-
Tomo I los nacidos en el territorio de la República. deres públicos. En la admisibilidad a las funciones
1825-1952
públicas, sin otro requisito que la idoneidad, sal-
vo las excepciones establecidas por la ley. Artículo
La interpretación lógica establecería que los
44°.- Para ser ciudadano se requiere: Ser boliviano.
indígenas nacidos en territorio boliviano, de- Tener veintiún años de edad. Saber leer y escribir.
berían ser considerados ciudadanos, en los he- Estar inscrito en el Registro Cívico.
chos ese reconocimiento llegaría 14 años des- 68 La Función Social de la propiedad fue estableci-
da por primera vez en la Constitución Política del
pués de la revolución del 52. La Convención
año 1938, en el artículo 17 que reza: “La propie-
también, estableció requisitos para la ciudada- dad es inviolable cuando llena la función social”,
nía, los adaptó y flexibilizó de acuerdo a las articulado que se ha mantenido en las posteriores
siguientes características: para ser ciudadano constituciones de 1967, 1994, y siguientes. El pa-
radigma de la tierra es de quién la trabaja que ins-
se requería ser boliviano, tener veintiún años
piró la reforma agraria de 1953, establecía como
de edad, saber leer y escribir y estar inscrito elementos caracterizadores de la función social,
en el Registro Cívico65 (Marof 1935). Pero ser los siguientes: Primero; trabajo productivo referi-
ciudadano permitía concurrir como elector o do al planeamiento y ejecución de actos y hechos
resultantes del esfuerzo físico e intelectual del
elegido a la formación de los poderes públicos
campesino dirigidos a lograr una mayor produc-
ción y mejor productividad a los efectos de abas-
65 El registro cívico era el registro de los ciudadanos tecer la demanda del mercado regional y nacional,
para votar y similar al trabajo que realizan las no- el segundo elemento está referido al trabajo direc-
tarías o los registros civiles hoy en día. También se to y eficiente, en este contexto los actos y hechos
gestionaban y diligenciaban, los requisitos que ya ejercitados deben ser realizados por el titular del
estaban presentes en constituciones de fines del si- predio, el tercer elemento tiene que ver con el
glo XIX. cumplimiento de planes y programas agrícolas del
17° establecería que: La propiedad es inviolable,
siempre que llene una función social; la expropia-
ción podrá imponerse por causa de utilidad pública,
calificada conforme a ley y previa indemnización
justa (CPE, 1938).
tearon reformas radicales, visiones como las de comunidades para evitar más parcelación y dar
Marof y Mendoza ingresaron al debate de la viabilidad pacíficamente a la clase indígena. Invisibles y
excluidos, pero
Convención (Marof 1935) (Gotkowitz, 2011) siempre presentes
(Flores, 1986). También dos intelectuales pro- La Convención de manera escrita y en plena-
pusieron reformas y una agenda de trabajo. rio recibió por parte de autoridades indígenas
Primero; Víctor Paz Estenssoro,69 propuso la y caciques apoderados solicitudes sobre el es-
formación de cooperativas a partir de la sub- tablecimiento geográfico de la comunidad y
división de las haciendas para los nuevos pro- el establecimiento de límites, solicitando un
pietarios indígenas; segundo Walter Guevara levantamiento estadístico a partir de una nue-
va revisita general de las tierras de origen, un
segundo grupo de solicitudes estuvo vinculado
gobierno, es decir que este trabajo debe ejercitarse
a sus derechos, reclamando sobre discrimina-
dentro de los lineamientos generales fijados por el
gobierno nacional, y por último el cuidado y de- ción, trato desigual (ante tribunales), encarce-
fensa de los recursos naturales, que buscan el buen lamientos, en el ámbito de la instrucción, pi-
uso y cuidado del factor tierra, con el propósito de dieron el establecimiento escuelas indigenales.
evitar su deterioro. Como se puede evidenciar se
mantiene la esencia en esta Constitución de este
principio consagrado en la Ley de Reforma Agra- La CPE de 1938, al final estableció el régi-
ria del año 1953, en efecto el artículo 397 esta- men agrario y campesino, reconociendo a las
blece al trabajo como la fuente fundamental para
adquirir y conservar la propiedad agraria.
69 Posterior líder y fundador del Movimiento Na- 70 Miembro fundador del MNR junto con Hernán Si-
cionalista Revolucionario (MNR, 7 junio de 1942), les Suazo, Víctor Paz Estenssoro, Carlos Montene-
Presidente de la República en cuatro gestiones. gro y José Cuadros Quiroga.
organizaciones campesinas, establecidas en el y fabriles) se institucionalizaron importantes
Artículo 165: El Estado reconoce y garantiza la organizaciones sindicales de los trabajadores
existencia legal de las comunidades indígenas, el mineros y fabriles y se generó una ideología
Articulo 167: estuvo destinado a la instrucción: en contra de la oligarquía estatal. También
El Estado fomentará la educación del campesino, la década de los 40 fue una década de masa-
mediante núcleos escolares indígenas que tengan cres en el área rural, represión a los indígenas,
carácter integral, abarcando los aspectos económico, grandes luchas en las minas y en las ciuda-
social y pedagógico, (CPE de 1938). des como momentos previos al shock y pun-
to de inflexión que constituyó la revolución
En general, la convención desestimo las so- del 1952. Según Dandler (1984) el congreso
licitudes indígenas, porque en el debate se de 1945 fue un evento nacional y fue en ese
estableció que se incluiría en la constitución momento la culminación de varios congresos
un régimen agrario y campesino, arriba des- regionales y otros esfuerzos organizativos del
crito, por tanto, no se dio respuesta al tema campesinado.
central de propiedad y tampoco el tema de la
ciudadanía indígena fue resuelto. Gotkowitz En este sentido, el punto de inflexión de las
(2011) menciona que la Constitución de 1938 demandas y de la lucha indígena convergió
Un amor enfrentó un futuro incierto por lo radical de en el Congreso Indigenal (1945) en la admi-
desenfrenado
por la libertad las posiciones en la Asamblea de 1938, y el nistración de Gualberto Villarroel López,71
Antología de la Presidente Busch suspendió su aplicación y sintetizó todas las demandas que venían del
historia política
de Bolivia
declaró ilegales a las organizaciones comu- siglo XIX, con sus disposiciones se gene-
(1825-2020) nistas y anarquistas. No obstante, los deba- ró una crisis que impactó la estabilidad ur-
tes antes y durante la Convención de 1938 bana pero a nivel rural permitió establecer
700
habían iniciado una confrontación abierta de la nueva agenda del movimiento indígena.
ideas respecto del problema de la tierra, el in- También en la década de los 40 a nivel de
Tomo I
dio y el “ser nacional”. Se precisaría aún de la academia y de la clase política cada vez y
1825-1952 una grave crisis política y de una guerra civil con más frecuencia debatían la situación en
para que el país diera una respuesta de largo la que se encontraban los indígenas no sola-
plazo a este dilema; Gotkowitz (2011), (Flo- mente su Estado de bienestar, sino también
res, 1986), (Flores, 2018), (Choque Canqui, su relación con la sociedad.
2016).
Al igual que México, Guatemala y los países
3.2. Congreso Indigenal de 1945 que componen la región andina como Bolivia
y el punto de inflexión del sistema cuentan con población indígena importante,
de hacienda pero en nuestro país los problemas asociados
a su situación eran extremas, se habían acu-
(Dandler Jorge 1984) caracterizó la década de mulado sus demandas, levantamientos, rebe-
los 40 como un período importante, que re- liones y masacres que se sucedieron a finales
flejó la crisis del Estado y la sociedad como del siglo XIX y la primera mitad del siglo XX.
parte de las consecuencias que trajeron la gran En lo institucional se organizaron mejor lue-
depresión de los años 30 y la Guerra del Cha- go de la Guerra del Chaco, se reunieron en al
co. A partir de las demandas indígenas que se
sucedieron en el siglo XIX y a lo largo de los 71 Gualberto Villarroel López (1908; 21 de julio de
primeros años del siglo XX, se organizaron de 1946) fue un militar y político boliviano, presidente
de la Junta Militar de Gobierno (1943-1944), pre-
manera institucional partidos pertenecientes a
sidente provisorio (1944-1945) y presidente consti-
grupos mayoritarios de la población (mineros tucional (1945-1946).
Francisco Chipana Ramos, Carlos Morales Guillen y Dionisio Miranda, 1945.
Fuente: Revista Ilustración Boliviana, 1945.
menos dos “congresos indigenales” departa- y al menos tres congresos de indígenas de los Tercer periodo
mentales, cada vez y con más fuerza diferen- valles (quechuas) en Sucre que se realizaron Bajo el debate
constitucional de
tes sectores de la sociedad boliviana, se unían entre 1942 y 1944, se constituyeron en las 1938 que incorpora
a su lucha (dirigentes sindicales y políticos, razones y los motivos que presionaron a un el régimen social
(1938-1952)
abogados, entre otros), la creciente agitación cambio en la estructura de la conservadora so-
rural, el apoyo de intelectuales del Movimien- ciedad boliviana. 701
to Nacionalista Revolucionario (MNR), los
debates en la Convención de 1938 y el Con- La administración de Gualberto Villarroel
greso Indigenista Interamericano72 en México López giraba en torno a la inestabilidad po- Invisibles y
excluidos, pero
lítica y a los problemas económicos derivados siempre presentes
Posteriormente, Hernán Siles Zuazo en re- Con relación a la reglamentación de los servi-
presentación del MNR declaró que uno de los cios personales, se establecía que: Mientras se Tercer periodo
principales postulados de su partido era: La dicte el Código de Trabajo Agrario, la presen- Bajo el debate
constitucional de
tierra debe pertenecer a los que la trabajan, tación de servicios del campesino se regulará 1938 que incorpora
el régimen social
aunque para esta superación faltan muchos en esta forma: (1938-1952)
años (La Razón, 11 de mayo 1945). Las de-
liberaciones del congreso y las comisiones 1. No se exigirá a los colonos como obliga- 703
estuvieron acompañadas de innumerables ción, trabajos ajenos a faenas propiamente
exposiciones sobre abusos, violaciones de agropecuarias, sin previos consentimientos
derechos y proyectos de resoluciones, es así y justa retribución. Invisibles y
excluidos, pero
que, en vez de discutir el problema de la tie- 2. Los servicios personales o domésticos… se siempre presentes
rra y la propiedad, la discusión estaba orien- efectuarán obligatoriamente por los colo-
tada a abordar el problema de las relaciones nos previo acuerdo de su retribución y en
laborales y la servidumbre. En este sentido, caso contrario, con la intervención de la
el presidente del comité organizador Carlos autoridad política más próxima…
Morales Guillen, presentó proyectos de de- 3. El colono es dueño absoluto de su cosecha,
creto para la abolición del pongueaje y mi- que podrá venderla en libre comercio… la
tanaje y de reglamentación de los servicios prestación de acémilas, envases, entrega
personales que fueron presentados en forma de corderos, lanas, aves… y otras especies
de decretos al congreso indígena en su clau-
sura el 15 de mayo. 77 a. Decreto Supremo Nro. 318, en contra de la pres-
tación de servicios personales gratuitos y de espe-
cies y productos sin justa remuneración. b. Decreto
Supremo Nro. 319, abolición de los servicios de
ha de ser tratado por el gobierno: será protegido, pongueaje y mitanaje. c. Decreto Supremo Nro.
tendrá escuelas, tendrá garantías, pero él también 320, aplicación de la educación indigenal en base al
está obligado a trabajar cumpliendo fielmente sus Decreto Supremo del 19 de agosto de 1936 sobre
deberes y obligaciones, tengan en cuenta que el el establecimiento de escuelas rurales. d. Decreto
trabajo será respetado y protegido hoy comienza la Supremo Nro. 321, medidas transitorias tendientes
obra del gobierno que vela por ustedes como un a obtener un máximo de producción en el país y
padre cuida a sus hijos, se acabaran los abusos (La facilitar las relaciones entre patrones y colonos evi-
Razón, 11 de mayo 1945). tando abusos de ambos.
Un amor
desenfrenado
por la libertad
Antología de la
historia política
de Bolivia
(1825-2020)
Tomo I (diezmos…) no podrán ser exigidos por los fiscales que otorgara el ministerio de agropecua-
1825-1952
propietarios en forma gratuita o como re- ria; en estos casos, será pasibles de acción penal pu-
muneración por concepto de herbaje o pas- blica los instigadores también a las colonias fisca-
toraje de ganado… en todo caso se pagará les, serán responsables de los daños y de la sanción
el precio corriente… asimismo se prohíbe penal correspondientes… también se prohíbe la
exigir a los colonos, sea en dinero o espe- recolección de “ramas” en dinero o en especies; los
cies, contribución alguna para el pago de instigadores o agitadores que fueran denunciados
impuestos catastrales o de la renta. por las autoridades, serán obligados a la devolu-
ción de las sumas… más el pago de una multa…
Al mismo tiempo se dictaron medidas comple-
mentarias, se especificaba que: Con respecto a los propietarios de hacien-
da y sus Administradores se estableció que:
… Si los campesinos alegando falsamente estas Cualquier persona que emplee violencia y vete a
disposiciones o siguiendo consignas de agitación los campesinos serán sancionados… Y, … todos los
política, incurrieran en el cumplimiento de las indígenas que tengan reclamaciones sobre tierra
obligaciones inherentes a las faenas propiamente presentarán sus quejas en las Oficinas de Defensa
agropecuarias con perjuicios de la producción pre- Gratuita de Indígenas…
via comprobación del Ministerio de Gobierno y las
autoridades provinciales, serán sancionadas con el (Choque, 2016) destaca que el resultado del
aislamiento de la propiedad de la que es colono, Congreso Indigenal y sus resoluciones con-
destinándose con toda su familia a las colonias vertidas en decretos supremos generó la
resistencia gamonal (hacendados) y las re- contra de su administración, lo consideraban
beliones indígenas en diferentes puntos del “fascista” y se oponían a la implementación
país, especialmente en los departamentos de de su política pública en especial a su política
La Paz y Cochabamba con ataques a las ha- social, los dueños de minas estaban en con-
ciendas. Como efecto de las resoluciones del tra del decreto que los obligaba a depositar
Congreso Indigenal, la denuncia de los ha- en el Banco Central de Bolivia, el monto que
cendados respecto del sabotaje indígena en percibían por exportaciones de minerales; los
las faenas agrícolas del campo fue motivo para dueños de las haciendas resistían las políticas
pedir el amparo mediante una comisión para en favor de los indígenas, las damas de clase
que explique y notifique a los colonos acerca alta rechazaban las reformas legales que igua-
de los alcances de los decretos supremos del laban a los hijos naturales con los legítimos y
15 de mayo de 1945 concerniente a la aboli- daban derechos a las convivientes; el sector
ción de los servicios personales del pongueaje del magisterio demandaba por mejores sala-
y mitanaje. Sin embargo, la legislación y nor- rios, en suma era una etapa de polarización
mativa promulgada fue el más significativo política.
avance por parte de una administración gu-
bernamental a la lucha y demanda indígena Posterior a la muerte de Gualberto Villarroel
desde el siglo XIX. López y debido a la alta conflictividad que ge-
Tercer periodo
neró el congreso indigenal, los decretos y la
Bajo el debate
3.3. El derrocamiento normativa promulgada en favor los indígenas, constitucional de
de Gualberto Villarroel López (1946) se formó en el área rural una oposición a las 1938 que incorpora
el régimen social
y la conflictividad en 1947 transformaciones sociales que se estaban dan- (1938-1952)
Área de
Año Características Causa Estrategia Resultado y desenlace
Conflicto
La rebelión de Ayopaya fue una violenta El movimiento fue
Los sublevados deseaban designar a los
sublevación protagonizada por indígenas violentamente sofocado.
La explotación, intensificación alcaldes y no permitir a hacendados ni al
de la hacienda Yayani en contra del Los líderes huyeron,
de las cargas laborales gobierno nombrarlos. Pedían autonomía
Yayani, hacendado, involucró su muerte, se hacia Oruro y Tapacarí.
impuestas por el hacendado ya creían que, al controlar la autoridad
Ayopaya, 1947 destruyó su casa y su documentación Ayudaron a promover un
y particularmente su negativa local, establecerían las haciendas bajo la
Cochabamba legal, la oficina del corregidor y la escuela. levantamiento, dirigido a
a acatar los decretos de tuición del indio. Ayopaya no solamente
Alcanzó otras 8 propiedades de la misma suprimir los costos por
Villarroel. fue una rebelión contra la explotación y
provincia y participaron de 3 a 10 mil derechos de pastoreo
el abuso, fue búsqueda del poder local.
indígenas. (herbaje).
Virgilio Vargas, distribuyó Los movilizados tenían la intención
Los indígenas de hacienda se movilizaron títulos de propiedad, de crear y legitimar un poder paralelo,
Se anularon los títulos y la
Anzaldo, por la propiedad de las tierras, apoyados deficientemente elaborados que capaz de distribuir tierras. Dicho
1947 distribución de tierras no
Cochabamba en la tenencia de títulos de propiedad que llevaban el nombre y sello de poder descansaría en las autoridades
prospero.
carecían validez. Toribio Miranda, alcalde mayor más creíbles a los ojos indígenas, los
de Lechechoto (Mizque). alcaldes.
Los indígenas solicitaron que se lo
Los sublevados deseaban
cambiara por uno de confianza. Basaban
nombrar y posesionar
El administrador realizaba su solicitud en las decisiones de 1945,
a alcaldes de las
detenciones arbitrarias, se consideraban que Villarroel dispuso
Sacabamba, comunidades o haciendas o
Los colonos dirigieron sus protestas en apropiaba de los animales de el cese de todas las obligaciones con
Tarata, 1947 administradores mediante
contra del administrador de hacienda. los colonos, los insultaba, los hacendados (no era tan cierto).
Cochabamba mecanismos propios, al
les cobraba impuestos y los Los sublevados combinaban un
margen de los del gobierno.
ofendía verbal y físicamente. entendimiento muy selectivo de la ley “a
El poder local era una
favor del indio”, asumían que su acción
Un amor cuestión esencial para ellos.
subversiva era hacer cumplir la ley.
desenfrenado
Compartían la visión de 2
por la libertad
Repúblicas establecida en la El origen de este movimiento fue la El gobierno de Herzog
Debido a la influencia de misioneros
Antología de la legislación colonial, cuando rebelión de Tarvita (1945), se inició reprimió violentamente en
protestantes, los indígenas se convirtieron
historia política el indio gozaba de tribunales como una huelga de brazos caídos, Icla, se detuvieron a varios
a la iglesia evangélica, metodistas y
de Bolivia especiales, no podía ser en tierras de los hacendados. Duró líderes; otros escaparon,
bahai, lo que dio al movimiento una
(1825-2020) juzgado por tribunales para desde 1945, pero especialmente sus casas fueron quemadas.
orientación religiosa. Su doctrina
españoles y viceversa. 1947, hasta 1948, en las provincias Carlos Condori, Alcalde, fue
sacroindigenal cuestionaba el orden social
1945 Demandaban educación, hasta Zudañez, Azurduy y Tomina. En colgado en Pocoata (1947).
Icla y Tarvita, (anti latifundismo y anticolonialismo);
1947 1947 fundaron 23 escuelas pleno conflicto otorgaron “títulos de Marcelino Mamani (líder
706 Chuquisaca
1948
reafirmaban la identidad pura (ellos son
rústicas y semi clandestinas. propiedad” a los indígenas y obligaron de la rebelión en Carapari,
españoles; nosotros somos jallpa sangres,
Eran centros de alfabetización al uso generalizado de ropa nativa. Nor Cinti) fue fusilado en
estamos con el mandato de Dios); creían
para niños en comunidades Las escuelas fueron un centro de Sucre (1951). Los indígenas
que Dios había establecido el orden
de haciendas. Los hacendados rememoración, reflexión y agitación fueron obligados a cumplir
natural de las cosas y se levantaron para
solicitaron el uso de la fuerza permanente. Se discutía continuamente otra vez: servidumbre y
Tomo I reponerlo. Se denominaron Apoderados
pública para obligar al pago el tema de la tierra y las obligaciones y trabajo forzoso (en Salvia,
1825-1952 Espiritualistas.
de la renta (Por ej. en Chunca relaciones con los hacendados. Churumumu y Jatun Mayo).
Cancha).
Sucedieron sublevaciones en Chapaca
En La Paz las haciendas (del altiplano)
(Larecaja), Pacajes y Sud Yungas.
eran muy extensas. La conexión entre
Inicialmente no fueron violentas.
la ciudad y el campo era evidente. En
Consistían en huelgas de brazos caídos,
1946 la FOL estableció nexos con el
los movilizados protestaban contra la La represión fue violenta.
1er sindicato rural paceño en Guaqui,
insolencia de los administradores de Herzog promulgó un
siguieron: Tophoco, Laja, Cucuta,
haciendas, la apropiación de bienes, decreto contra los
Qachuma, Caquiaviri, Araca, eran similares La FAD y la FOL organizaron
la retención de cobros y exigían las sublevados y empleó la
a sindicatos mineros. A fines de 1946 los un encuentro. Se reunieron
tierras para sí. El paso a la violencia vino Fuerza Policial Rural (300
sindicatos agrarios de La Paz crearon la 4.000 indígenas que
después: en Anta (Pacajes), Tatanoca hombres armados, en
Federación Agraria Departamental (FAD), formaron el Sindicato de
(Los Andes) y Puerto Acosta (Camacho) coche y a caballo), creada
que firmó un pacto de solidaridad con la Labradores y eligieron 200
las comunidades de hacienda ya estaban a partir del Congreso
FOL. La FAD fue apoyada por profesores, representantes. Pidieron al
organizadas en sindicatos y se aliaron Indigenal de 1945. Esta
inmigrantes, red de caciques apoderados y gobierno: reconocimiento
con comunidades libres, generando así fuerza (más guardias
dirigentes obreros. En 1947 se ampliaron como organización auténtica,
1946 una base social más amplia y numerosa. privados y las Legiones
La Paz las organizaciones indígenas, se realizaron reconocimiento a los sindicatos
1947 Se movilizaron para tomar las tierras y Patrióticas) sofocaron
elecciones municipales, las primeras de las escuelas y la abolición
expulsar a los hacendados. Proponían: a los sublevados. Los
desde 1932 y las primeras en las que del pongueaje (a pesar de la
derechos civiles, inalienabilidad del hacendados, no recurrían
las mujeres podrían votar. En muchas eliminación de la esclavitud
hogar indígena, suspensión de los a autoridades locales, lo
regiones (Occidente), los partidos se en la CPE (1880 y 1938 y los
desalojos y expulsiones arbitrarias por hacían a los prefectos
movilizaron para postular a sus candidatos decretos de Villarroel). La
los hacendados, abolición del pongueaje, y gobierno central que
rurales y buscaron el apoyo de los servidumbre y el pongueaje
creación de escuelas indígenas y un reprimían violentamente.
indígenas para sus candidatos blancos seguía vigente en la mayoría de
congreso nacional campesino. En 1947 Se produjo un alto número
y mestizos. Con las sublevaciones, los las haciendas).
en las movilizaciones en La Paz donde la de detenciones; 1.400
hacendados empezaron a abandonar sus
categoría dio un giro: aunque se siguió detenidos y numerosas
haciendas. Los puestos de corregidores y
hablando de “indígenas” por mucho muertes.
alcaldes fueron ocupados por indígenas,
tiempo, se empezó a usar el concepto
con lo que el gobierno vio aún más
de “campesino”. Ayudaron las políticas
reducidas sus posibilidades de hacerse
“pro indio” de Villarroel y el lenguaje de
obedecer en el campo.
los sublevados.
Fuente: El Diario (1946, 1947), La Noche (1947), La Razón (1946, 1947), (Antezana, 1994), (Choque Canqui, 2003), (A. E. Ticona 2003), (Albó,
2007), (Flores, 1979), (Choque Canqui, 2016), (Flores, 2018). Elaboración: Propia.
Según (Choque Canqui, 2016) cinco meses y 26 4. Cuarto periodo 1952- 1964:
días después del derrocamiento de Villarroel se La Revolución Nacional en 1952 y
desencadenó la gran sublevación indígena que las asimetrías de la estructura agraria
duró alrededor de dos meses, siendo reprimi-
dos por las fuerzas policiales, tropas del ejército La intensa inestabilidad a nivel político y
y aviones de reconocimiento. Los epicentros económico, derivó a mitad del siglo XX en
importantes estaban ubicados en Pukarani en un punto de inflexión que cambiaría de ma-
La Paz (más cercano a la sede de gobierno) y en nera radical la estructura social, organizativa
Ayopaya en el departamento de Cochabamba. y económica de la nación más rezagada en
términos de desarrollo de Latinoamérica.
En general entre 1946 y 1948, las rebeliones (Velasquez Castellanos 2018) comentaba que
y sublevaciones indígenas, presionaban y cada hacia 1951 nuevamente, tras un golpe de Es-
vez con más fuerza la reversión de tierras (en tado y declarando estado de sitio cuando asu-
consonancia a lo dispuesto en la Constitución mió el poder Hugo Ballivián Rojas80 toma el
de 1938) y que se declarasen comunidades li- mando de la República, desconoció al gana-
bres, en lo referente a las relaciones laborales, dor de las elecciones Víctor Paz Estenssoro81
las frecuentes huelgas de brazos caídos, refle- y ante la conspiración de los militantes del
jaban que era ya hora de la abolición de la ser- Movimiento Nacionalista Revolucionario
vidumbre indígena, los conflictos entre indíge- (MNR) y el Cuerpo Nacional de Carabine- Tercer periodo
nas y hacendados perdurarían por poco tiempo ros, lo derrocaron. Bajo el debate
constitucional de
hasta la insurrección definitiva que sería en 1938 que incorpora
el régimen social
1952. (Choque Canqui, 2016) menciona que a Para (Zondag 1966), “La revolución social bo- (1938-1952)
medida que se desarrollaban las sublevaciones liviana bien puede encerrar una lección para el
se iba acentuando el conflicto entre el indio y el futuro que nadie, interesado en esta cuestión 707
blanco, hasta concebir la creación de una nue- puede darse el lujo de ignorar” y en verdad el 9
va República de Indios como una identidad de de abril de 1952, se inicia en Bolivia una nueva
lucha indígena contra otra República opresora. época, preñada de sucesos que, en su comple- Invisibles y
excluidos, pero
jo imbricamiento, envolvió a los hombres de siempre presentes
Gotkowitz (2011) y Flores (2018) expresaban este país y los convirtió en actores, por acción
que aunque el gobierno de Herzog, otorgó o por reacción, sobre un tablado telúrico, que
la libertad a los sublevados y permitió el re- a lo largo y a lo ancho del territorio se desa-
torno de los confinados79, decidió la disolu- ta paisajes que sólo tienen término en la ma-
ción de la FOL y la FAD, porque considera- jestuosa cadena de los Andes, por un lado y
ban que eran instituciones que alentaban el en las selvas lujuriantes por el otro. Hay que
conflicto. Pese a ello, las movilizaciones en el convenir que esta revolución abrió compuer-
área rural continuaron. De esta manera, cesó tas y desencadenó tempestades, ganó adeptos
la “gran rebelión”, pero fue sustituida por y alimento rencores; por ello –al margen de
levantamientos aislados pero numerosos en las pasiones que pudieran excitar los hechos
las haciendas. Se contabilizó 44 entre 1948
y 1952. Las reivindicaciones fueron las mis-
mas: abolición del pongueaje, supresión de 80 En la administración gubernamental del 16 mayo
de 1951 al 11 de abril de 1952 (de facto).
abusos y exacciones, instauración de autori- 81 En la administración gubernamental en 4 periodos,
dades locales indígenas, entrega de tierras a 3 consecutivos, del 15 de abril de 1952 al 6 de agos-
las comunidades. to de 1956 (de facto); del 6 de agosto de 1960 al
4 de noviembre de 1964 (constitucional); del 6 de
agosto al 4 de noviembre de 1964 (constitucional)
79 Excepto Grájeda y Yucra, que permanecieron en y finalmente del 6 de agosto de 1985 al 6 de agosto
prisión. de 1989 (constitucional).
todavía frescos– hay necesidad de juzgar sus Después de la implementación de esa Refor-
consecuencias, sus efectos, sus resultados con ma, si bien se repartieron las tierras entre los
la serenidad que solo da el análisis científico campesinos, no se les dotó de elementos téc-
(Zondag, C. (1966)). nicos y equipos para el fortalecimiento y de-
sarrollo de la producción agrícola, hecho que
Así, tras la revolución de 1952 Víctor Paz Es- derivó a que las comunidades indígenas no se
tenssoro asume el gobierno, instauró un pa- desarrollaran económicamente, por tanto, no
quete interesante de medidas que cambiarían la mejoraron sus condiciones de vida y estarían
estructura política, social y económica de la Re- entrampados en las diferentes dimensiones de
pública de Bolivia: Voto Universal; Nacionali- la pobreza.
zación de las Minas para que sean dependientes
del Estado; firmó el decreto de Reforma Agra- En 1950, el 67,13 (1.815.311 habitantes) por
ria; estableció la Educación Universal; ordenó ciento de la población vivía en La Paz (31,58
el cierre del Colegio Militar, estableció milicias por ciento), Potosí (18,83 por ciento) y Co-
de mineros, campesinos, fabriles y clase media. chabamba (16,72 por ciento), de ese porcenta-
je una importante proporción era indígena en
En este sentido, la revolución popular del 52, La Paz (67,10 por ciento), Potosí (77,10 por
Un amor contiene lineamientos para una transforma- ciento) y Cochabamba (75,20 por ciento). A
desenfrenado
por la libertad
ción en el bienestar y las condiciones de vida continuación, se presentan datos desagrega-
Antología de la
de la población más pobre de Latinoamérica, dos a nivel departamental.
historia política no sólo impacta en las condiciones políticas
de Bolivia
(1825-2020) de la época, se produce un cambio, de ten- De esta forma La Paz, Potosí y Cochabamba
dencia de las variables sociales y económicas eran los departamentos en términos de den-
708 de Bolivia; a nivel rural la condición indígena sidad demográfica, que aglutinaban a la ma-
campesina se transformará de productor servil yor población en Bolivia. Altiplano y valles
a productores y consumidores, como conse- concentraban también mayoritariamente a la
Tomo I
1825-1952 cuencia de la Reforma Agraria de 1953 y de población rural (indígenas) le siguen en im-
su incorporación al mercado nacional, aunque portancia Chuquisaca en donde vivían el 9,63
la producción económica campesina seguirá por ciento de la población boliviana, Santa
siendo de subsistencia, carezca de tecnología Cruz (9,05 por ciento) y Oruro con el 7,11 por
y de acceso al crédito. ciento de la población (ver cuadro 7 y gráfico
Cuadro 7
Censo de Población y Vivienda de Bolivia de 1950: Población indígena y no indígena por departamento
No % % No
% Indígena % Total % % Indígena
indígena Departamental indígena
Chuquisaca 74.057 28,4 186.422 71,6 260.479 100,0 9,63% 7,40% 10,94%
La Paz 280.705 32,9 573.374 67,1 854.079 100,0 31,58% 28,05% 33,66%
Cochabamba 112.018 24,8 340.127 75,2 452.145 100,0 16,72% 11,19% 19,97%
Potosí 116.482 22,9 392.605 77,1 509.087 100,0 18,83% 11,64% 23,05%
Oruro 74.929 39,0 117.427 61,0 192.356 100,0 7,11% 7,49% 6,89%
Santa Cruz 202.433 82,7 42.225 17,3 244.658 100,0 9,05% 20,23% 2,48%
Tarija 61.721 59,7 41.720 40,3 103.441 100,0 3,83% 6,17% 2,45%
Beni 62.431 87,2 9.205 12,8 71.636 100,0 2,65% 6,24% 0,54%
Pando 16.018 98,4 266 1,6 16.284 100,0 0,60% 1,60% 0,02%
Total 1.000.794 37,0 1.703.371 63,0 2.704.165 100,0 100,00% 100,00% 100,00%
Fuente: Dirección General de Estadística y Censos, Ministerio de Hacienda y Estadística (1950). Elaboración: Propia.
6), ello implica sin lugar a dudas también que (9,4 por ciento) ocupaban una amplia superfi-
para 1950 como lo era al inicio de la República cie: 12.701.076 de hectáreas (38,8 por ciento)
en 1825, Bolivia tenía mayoritariamente po- las cuales eran cultivadas en una pequeña pro-
blación indígena y era más rural que urbana; porción 290.164 hectáreas (44,4 por ciento) y
de los 2.704.165 habitantes censados en 1950, era claro que existía mucha tierra improduc-
el 63 por ciento eran indígenas (1.703.371) y tiva que no cumplía su función económica ni
solamente el 37 por ciento (1.000.794) eran no social, pese a ello no podía ser distribuida ni
indígenas. Como en el nacimiento de la Repú- cedida (ver Cuadro 8 y Gráfico 7). Por esas
blica, todavía 125 años después en 1950, poco desigualdades sumadas a la explotación y la
más de una tercera parte de la población (no servidumbre de los indígenas es que el quiebre
indígena) definía y tomaba decisiones por la de esta realidad se expresaría en la revolución
mayoría (indígena), muchas de ellas sin consi- del 52 y la posterior reforma agraria de 1953.
derar su bienestar y en contra de su estándar
vida; sin preocuparse de su nivel de educación La estructura agraria también estaba confor-
ni su estado de salud. mada por productores individuales catalogados
como operadores solos, que utilizaban su fuerza
En 1950, las asimetrías se reflejaban en el área de trabajo en compañía de sus familias; el censo
rural, lo que provocaban que las desigualdades registró gran cantidad de ellos en especial en el
de la estructura de la tierra (activos e ingreso) altiplano y los valles, a nivel nacional existían Tercer periodo
sean evidentes, en La Paz, Potosí y Cocha- 56.259 (65,1 por ciento) ocupaban una super- Bajo el debate
constitucional de
bamba estaban concentradas el mayor número ficie de: 9.526.421 hectáreas (29,1 por ciento) 1938 que incorpora
el régimen social
de haciendas, a nivel nacional existían 8.137 las cuales eran cultivadas en una proporción (1938-1952)
Gráfico 6 709
Estructura de la Población en Bolivia (1950)
1.800.000 1.703.371
1.600.000 Invisibles y
No indígena Indígena excluidos, pero
1.400.000 siempre presentes
1.200.000
1.000.794
1.000.000
800.000
573.374
600.000
392.605
186.422 280.705 340.127
400.000
116.482 202.433
74.057 112.018 117.427 61.721
200.000 74.929 42.225 41.720 62.431 9.205 16.018
266
0
Chuquisaca La Paz Cochabamba Potosí Oruro Santa Cruz Tarija Beni Pando Total
Fuente: Dirección General de Estadística y Censos, Ministerio de Hacienda y Estadística (1950). Elaboración: Propia.
Cuadro 8
Estructura Agraria en 1950
14.000.000 350.000
12.000.000 300.000
10.000.000 250.000
800.000 200.000
600.000 150.000
400.000 100.000
200.000 50.000
0 0
Haciendas Operador solo Comunidades Arrendtario Otros
y medieros
Superficie (ha) 12.701.076 9.526.421 7.178.448 2.365.879 978.023
Unidades 8.137 56.259 3.779 16.631 1.571
Superficie cultivada (ha) 290.164 123.327 170.106 49.673 20.986
Un amor Fuente: Dirección General de Estadística y Censos, Ministerio de Hacienda y Estadística (1950) y (D. Paz 2009). Elaboración: Propia.
desenfrenado
por la libertad
Antología de la
historia política menos a la de las haciendas 123.327 hectáreas 4.1. La lucha indígena continúa:
de Bolivia
(1825-2020)
(18,8 por ciento). El censo (1950) identificó Hacia la Reforma Agraria de 1953
3.799 comunidades, que representaban el 4,4
710 por ciento del total de unidades agrario pro- Los acontecimientos previos a la revolución
ductivas, ocupaban una superficie de 7.178.448 en 1952 invisivilizaron las demandas indígenas
hectáreas (21 por ciento) de la tierra y 26 por y en cierta manera el problema agrario per-
Tomo I ciento de la superficie cultivada (170.106), si se manecía invariable, pese a ello el movimiento
1825-1952
compara su número con relación al siglo XIX e indígena comenzó a presionar y a organizar-
inicios del XX, las comunidades representaban se como una variable importante clave de la
un menor número, con estos datos claramen- revolución popular, paralela a la nacionaliza-
te se identifica un problema de productividad ción83 de las minas. A finales de ese año el mo-
de la fuerza de trabajo e improductividad de la vimiento indígena se convirtió nuevamente en
tierra, que ni la reforma agraria de 1953 sería un actor importante pero además en un signo
incapaz de resolver. Se identifican también a y símbolo de la revolución.
los arrendatarios82 (que eran unidades produc-
tivas individuales que alquilaban una propor- De esta manera, en enero de 1953 el gran le-
ción de tierra económicamente productiva, y vantamiento indígena se conocería como: “La
los medieros eran fuerza de trabajo que cola-
boraba con otros propietarios y trabajaban en 83 El 31 de octubre de 1952, el presidente de la revo-
tierra ajena, compartiendo el resultado de su lución iniciada en abril de 1952, Víctor Ángel Paz
producción. Estenssoro, firmó el decreto supremo de naciona-
lización de las minas en el campo donde ocurrió
la masacre del 21 de diciembre de 1942, llamado
María Barzola, en Catavi. Uno de los postulados de
82 Los arrendatarios y medieros representaban el 19,3 la revolución fue la eliminación de la denominada
por ciento de las unidades productivas (16.631), se rosca minero feudal. La nacionalización minera re-
asentaban en 7,2 por ciento de hectáreas (2.365.879 vertía la propiedad del Estado todos los bienes de
ha), la superficie cultivada era de 49.673 hectáreas los llamados Barones del Estaño: Simón Iturri Pati-
(7,6 por ciento). ño, Mauricio Hochschild y Carlos Víctor Aramayo.
revolución agraria democrática de los campesinos
de 1953” y podría decirse que a partir de este
momento los indígenas tendrían definitiva-
mente la categoría de campesinos, los cuales
fueron apoyados por los jóvenes intelectua-
les del Movimiento Nacionalista Revolucio-
nario (MNR) a la cabeza de Víctor Ángel Paz
Estenssoro, bajo la idea fuerza de: “La tierra
es para quien la trabaja”. Carlos Montenegro,
fundador del MNR, ya en 1949 cuando se en-
contraba exiliado en Buenos Aires, Argentina,
formuló la tesis de que el cambio de la política
agraria en Bolivia debía realizarse como una
repetición del levantamiento iniciado Tupak
Katari en 1789.
“Sociedad Rural Boliviana” que fue una insti- autoridades (Alcaldes y Prefectos) sino esta-
tución que velaba sus intereses y presionaba al blecer un nuevo orden, en ese momento esa
gobierno de turno sobre sus demandas y posi- estrategia política de lucha fue denominada
ciones con respecto al movimiento indígena. como: “El Poder Democrático Campesino Revo-
lucionario”85 (Antezana 1978).
Para diciembre de 1952 se percibió un movi-
miento campo/ ciudad, gran parte de los ha- Posteriormente, como una medida revolucio-
cendados se trasladaron a las ciudades84, ello naria de acción directa los indígenas desde los
también se debió a los acontecimientos polí- principales puntos de la realidad rural nacional
ticos y a la intensa conflictividad en la tensa
relación hacendado/ indígena que fue una 85 Como parte de su estrategia de lucha: Primero:
constante desde 1938. En sus inicios, muchos abolieron los servicios feudales que estableció el
dirigentes del MNR apoyaron al movimiento régimen de hacienda como también en las comu-
nidades, fundos y estancias en el oriente. Segundo:
indígena, sin embargo, se dieron cuenta que eliminaron he hicieron desaparecer el sistema de
dicho movimiento tenía tanta fuerza y había colonato, que incluía a los pongos, los mitayos y
acumulado una lógica de lucha desde 1825 e postillones. Tercero: prescindieron de todo el res-
to de la escala social que se había establecido con
la Ley de ex-vinculación, junto con el sistema de
84 Pero en general una gran mayoría poseía casas, en servidumbre gratuita vigente desde la colonia, pero
zonas residenciales de los centros urbanos. formalizado en el gobierno de Mariano Melgarejo.
(La Paz, Potosí, Cochabamba y Chuquisaca) 2009) y (Choque Canqui, 2003) se empezó a
iniciaron el asalto a las haciendas para expul- configurar una nueva superficie de la tierra
sar a los hacendados que todavía se aferraban que en promedio era de un cuarto de hectárea,
a sus propiedades en el área rural, los más im- también se identificaron dimensiones de vein-
portantes enfrentamientos y tomas de hacien- te, treinta o más hectáreas en base a la calidad
da se registraban en: los valles de Cochabamba, de suelo y a sus características propicias para
una característica importante, de este periodo la agricultura que decidieron crear los nuevos
del movimiento indígena, fue la organización campesinos, se estaba configurando un cam-
institucional, para ello se formaron quince mil bio a la estructura agraria en Bolivia 125 años
sindicatos campesinos y quinientos regimien- después de su fundación.86
tos logísticamente organizados en la central de
Ocureña y Achachachi, los sindicatos fueron De esta forma, entre febrero y marzo de 1953
gestionados y manejados logísticamente por el el movimiento indígena había finalizado una
MNR y en el mediano plazo, una vez que el mo- transformación a la estructura agraria bolivia-
vimiento arrasó y tomó por la fuerza las princi- na y este cambio tuvo un avance mayor a favor
pales haciendas de la geografía nacional, desapa- de los indígenas superior a los registrados en
recieron y se desintegraron institucionalmente. 1899, 1927 e incluso 1947. En el segundo tri-
Un amor
mestre de 1953 se sistematizó un nuevo gru-
desenfrenado De la misma manera que en la administración po de demandas del movimiento indígena que
por la libertad
de Villarroel, desde el punto de vista político, básicamente establecían:
Antología de la
historia política el poder de los hacendados y sus relaciones
de Bolivia
(1825-2020)
políticas urbanas con el poder central, generó a) La totalidad de tierra de los campesinos
intentos de desestabilización en contra del go- establecerían propiedades medianas de alta
712 bierno de Paz Estenssoro. El primero aparen- técnica y producción en base a la nueva for-
temente desde el interior del partido del MNR, ma de reparto del suelo: la campesina.
el 6 de enero de 1953 y el segundo propiciado b) Queda abolida todas las formas de trabajo y
Tomo I por la Falange Socialista Boliviana (FSB) entre servicios gratuitos por parte de los indíge-
1825-1952
junio y julio del mismo año (Antezana 1978). nas, y se instituye el salario como forma de
Sin embargo, el movimiento indígena se en- pago al trabajo realizado, el salario debe-
contraba empoderado, y cualquier acción que rá ser en unidades monetarias y en ningún
hacían los hacendados profundizaba la revo- caso es en especie.
lución indígena y el cambio social y político c) Se condonan todas las deudas generadas y
difícilmente daría marcha atrás. cuyo sujeto pasivo hayan sido los indígenas.
tendía modificar la estructura de la propiedad no pudo hacer absolutamente nada, ni siquiera Bajo el debate
constitucional de
y producción de la tierra en Bolivia. en los centros de conflicto localizados en Ayo 1938 que incorpora
Ayo, Ucureña ni Achacachi. El movimiento el régimen social
(1938-1952)
La reforma agraria buscaba resolver y solucio- indígena fue sofocado solamente, ante el aviso
nar dos problemas interrelacionados, primero: de la promulgación de reforma agraria para el 713
la concentración de la propiedad de la tierra en 2 agosto de 1953, el movimiento indígena y
pocos dueños (hacendados) y segundo: la baja los nuevos campesinos creyeron que se iba a
productividad agrícola debido al no empleo de instituir todo lo conseguido hasta ese momen- Invisibles y
excluidos, pero
tecnologías y especulación con los precios de to. Pero la realidad era otra y muy diferente, siempre presentes
la tierra que impidió su uso productivo pleno la ley estaba siendo preparada por miembros
desde 1825. Así la forma de cambiar la tenen- del Partido de Izquierda Revolucionaria (PIR),
cia de la tierra y el derecho propietario fue a por hacendados feudales y políticos progresis-
partir de la expropiación de la tierra y las to- tas autodenominados de izquierda.
mas de hacienda por parte de los indígenas,
no hubo mecanismo de compensación a los El proyecto de ley fue rechazado por el gabi-
antiguos propietarios y se pretendió crear una nete de gobierno de Paz Estenssoro, pero, sin
clase de pequeños y medianos agricultores que embargo, por presión política fue aprobado,
desplazarían la hegemonía de los latifundistas sin modificación alguna. De esta manera el 2
y la hacienda feudal.
87 La comisión que preparó el proyecto de Decreto
Posteriormente, por contrariedades en la con- Ley de Reforma Agraria, tuvo como presidente a
Hernán Siles Zuazo, Arturo Urquidi (presidente
figuración de la estructura agraria se identifi-
en ausencia del primero), Alcibíades Velarde, Rai-
carán, más adelante, problemas relacionados mundo Gregoriú, Ernesto Ayala Mercado, José
con la titulación, acceso a la tecnología y al Flores Moncayo, Eduardo Arze Loureiro, Fede-
crédito, que no tendrán solución incluso, con- rico Álvarez Plata, Zenón Barrientos (el único
campesino), Hugo López Ávila, Oscar Alborta
tinúen siendo problemáticos en el siglo XXI.
Velasco y Secretario General: Mario Rolón Ana-
Por el lado, de la burocracia estatal, la comi- ya, los cuales eran hacendados autodenominados
sión encargada de elaborar el proyecto de Ley de izquierda.
Un amor
desenfrenado
por la libertad
Antología de la
historia política
de Bolivia
(1825-2020)
714
Músicos chipayas.
Fuente: Revista Khana, s.f.
Tomo I
1825-1952
de agosto de 195388 se aprobó el: Decreto Ley 4.3. ¿El Decreto Ley de Reforma Agraria
3464 de Reforma Agraria promulgado en Ucu- fue concebido para mantener
reña en el municipio de Cliza (departamento de la estructura feudal de la tierra?
Cochabamba) lugar donde se había creado el
primer sindicato Agrario del país en 1936. Pos- Antezana (1978) expresaba, que el objetivo del
teriormente fue elevado a Ley el 29 de octubre movimiento indígena se basaba en crear una
de 1956 durante la presidencia de Hernán Siles nueva sociedad un régimen más justo, equitati-
Suazo, la ley que decretó la abolición definiti- vo y moderno, pero además un nuevo régimen
va y la ilegalidad de latifundio y convirtió a los de propiedad de la tierra y un nuevo sistema
antiguos peones de haciendas en pequeños pro- de producción basado en el salario (el régimen
pietarios y ciudadanos libres, “la tierra es para democrático campesino). Una característica del
quién la trabaja” era la idea fuerza. movimiento indígena desde 1825 era que no se
constituyó en un movimiento político, basado
en una ideología específica, o de carácter socia-
88 Firmaron el Decreto Ley de Reforma Agraria:
Víctor Paz Estenssoro, Walter Guevara Arce, Juan lista, comunitarista, colectivista o un sistema de
Lechín Oquendo, Ñuflo Ortiz, Federico Gutiérrez ayllus, por el contrario, buscaba solución especi-
Granier, Augusto Cuatro Sánchez, General Luis fica al régimen de propiedad (derecho propieta-
Ernesto Arteaga, Federico Fortún Sanjinés, Ger-
rio), impositivo y al régimen de servidumbre que
mán Butrón Márquez, Fernando Iturralde Chinel,
Adrián Barrenechea, Juan Manuel Aramayo y Ger- entrampo su bienestar, en un círculo de pobreza
mán Vera Tapia. e indigencia, pero sobre todo de desigualdad.
Desde el punto de vista de la evaluación a la Lo mismo sucedió con la (sayañas, pegujales)91
Ley de la Reforma Agraria, no contempla las las cuales se considerarían en favor del media-
propuestas que se habían hecho desde finales no propietario cuando el campesino las deje
del siglo XIX y primera mitad del siglo XX con vacantes (artículo 33).92
respecto a la propiedad de la tierra, al pago
de tributos, a las formas de explotación y a las En lo que respecta a los latifundios la ley esta-
diferentes medidas legales que bloqueaban su blece que quedaron reducidos a las dimensiones
plena integración como ciudadanos en la so- de mediana propiedad, ello se encontraba en el
ciedad boliviana. De manera simple, Decreto artículo 35.93 En el artículo 7894 se estableció
Ley 3464 de Reforma Agraria señalaba que que los campesinos fueran declarados propieta-
todas las haciendas los campesinos (indígenas) rios de las parcelas que poseen (sayañas, peguja-
quedarían como propietarios de las sayañas89 les) de acuerdo con las definiciones de pequeña
que se encontraban al interior de la estructura
feudal, lo cual pretendía que el derecho pro- 91 Los Pegujales son una pequeña porción de siembra
pietario sobre las grandes extensiones de tierra o de ganado, que el dueño de la hacienda agrícola
que pertenecían a los hacendados no pasen di- cede al encargado para que la cultive por su cuenta
rectamente a propiedad de los indígenas (pri- como parte de su remuneración anual.
92 Artículo 33. La propiedad mediana es inafectable. Sin
mera medida restrictiva). embargo, por vía de excepción, será afectable en las ex-
tensiones poseídas por los campesinos (sayañas, pegujales, Tercer periodo
Asimismo, estableció un cambio semántico etc.), que pasan a propiedad de los. Trabajadores, sin Bajo el debate
perjuicio de la dotación de tierras en otras zonas, en la constitucional de
en el derecho propietario del latifundio y el 1938 que incorpora
extensión mínima de la pequeña propiedad. Cuando es- el régimen social
decreto ley sugirió que podían convertirse en tas áreas, que serán inajenables, queden vacantes por el (1938-1952)
propiedades medianas y las cuales deberían traslado de los trabajadores dotados de tierras, se conso-
respetarse por parte de los indígenas (segunda lidarán a favor del mediano propietario, hasta la exten- 715
sión máxima de la mediana propiedad con la obligación
medida restrictiva). Ahora bien, si vemos la es-
de indemnizar las mejoras del trabajador (Decreto Ley
tructura de la hacienda feudal desde la colonia 3464 de Reforma Agraria).
estaba constituída por los latifundios que bá- 93 Artículo 35°.- No se considera latifundio, para los efectos
Invisibles y
excluidos, pero
sicamente eran medianas y pequeñas propie- del artículo anterior, la propiedad en la que el propieta- siempre presentes
rio hubiera invertido capital en maquinarias y métodos
dades rurales donde se practicaba diferentes
modernos de cultivo y que se encuentra trabajada per-
formas de explotación en contra de los indí- sonalmente por él o por sus familiares inmediatos. En
genas. En este sentido, la comisión de reforma aquellas regiones, en que la topografía de la tierra culti-
agraria consideró una única forma de exten- vable, impida el empleo de maquinarias, se exigirá solo
el trabajo personal del propietario o de sus familiares in-
sión y propiedad de la tierra, que era similar
mediatos. Este tipo de propiedad, así como los que tengan
a la establecida por los hacendados. Así, en el las características del artículo 8, quedan reducidos a las
artículo 3290 de la ley de reforma agraria esta- dimensiones de la mediana propiedad, con todos los dere-
blecía: Que la propiedad pequeña (feudal) era ina- chos y deberes inherentes al propietario mediano (Decreto
Ley 3464 de Reforma Agraria).
fectable en lo que a la propiedad del suelo se refiere.
94 Artículo 78°.- Los campesinos que hubiesen sido someti-
dos a un régimen de trabajo y explotación feudales, en su
89 La Sayaña era una parcela o tipo de propiedad ay- condición de siervos, obligados, arrimantes, pegujaleros,
mara que relaciona intereses colectivos (del ayllu, agregados, forasteros, etc., mayores de 18 años, los casa-
nombre con que se designa a cada grupo de familia dos mayores de 14 años y las viudas con hijos menores,
en la comunidad indígena en la región andina) con son declarados con la promulgación del presente Decreto,
intereses familiares, quienes la han ocupado traba- propietarios de las parcelas que actualmente poseen y tra-
jando y realizando los rituales correspondientes por bajan, en tanto el Servicio Nacional de Reforma Agra-
generaciones. ria les dote, racionalmente, de las que les correspondan
90 Capítulo II. De la inafectabilidad de la mediana y de acuerdo a las definiciones de la pequeña propiedad o les
pequeña propiedad. Artículo 32°.- La pequeña pro- compense con la explotación colectiva de tierras, que les
piedad es inafectable en el límite establecido por el permita cubrir sus presupuestos familiares (Decreto Ley
artículo 15 (Decreto Ley 3464 de Reforma Agraria). 3464 de Reforma Agraria).
latifundios del país quedaron en condición
mediana y en general los latifundistas se
ampararon en el artículo 35 del Decre-
to Ley 3464 de Reforma Agraria y en los
hechos la estructura latifundista cambiaría
solo de nombre.
b) El Decreto Ley 3464 de Reforma Agraria
tampoco afectó los intereses de los peque-
ños hacendados.
c) Lo mismo sucedió con los hacendados de
mediana propiedad que junto con los ante-
riores explotaban a los indígenas mediante
el colonato y la servidumbre que los indí-
genas prestaban a ellos, en la práctica la ley
simplemente les privó de la propiedad de las
sayañas y parcelas que daban en usufructo a
los indígenas y este tipo de hacendados no
Un amor
perdió en lo absoluto, nada de su propiedad.
desenfrenado d) Los indígenas se volvieron propietarios
por la libertad
del mísero y pequeño tamaño de parcelas,
Antología de la
historia política sayañas y pejugales que poseían según el
de Bolivia
(1825-2020) Altiplano, Feria Indígena en la plaza de un pueblo. Decreto Ley 3464 de Reforma Agraria, esa
Fuente: Bolivia en Acción, Herbert Kirchhoff. limitación no les permitirá titularizar esa
716 tierra, tener acceso al crédito ni mucho me-
propiedad y cuando se verifiquen que hayan nos tener acceso a tecnología, no solo por
sido sometidos a la explotación feudal. Las em- lo insignificante que representaban sino por
Tomo I
presas agrícolas que establece el artículo 3695 se las condiciones restrictivas per se de esa pe-
1825-1952
declararon inafectables, aunque en ellas existie- queña propiedad. Ahora bien, los indígenas
sen formas de trabajo de colonato y se verificase al migrar, al dejar la tierra o al no utilizarla
el trabajo. En definitiva, todo lo mencionado podrían perderla. Y la ley establecía que esta
en el Decreto Ley 3464 de Reforma Agraria tierra pasaría nuevamente al hacendado, en
con respecto al derecho propietario, era más de muy pocos casos los indígenas recibieron
lo mismo: parcelas mayores a las sayañas y pegujales.96
e) La usurpación de las tierras de comunidad
a) Los latifundios simplemente cambian de data de la administración de Melgarejo en
nombre y se reducen a un estatus de pro-
piedad mediana, pero de igual significado.
96 Según, datos del Consejo de Reforma Agraria,
Según la ley se convertirán en propiedades menos de 400 latifundios fueron afectados de los
medianas si demostrasen tener inversio- 8.137 que el Censo de 1950 registró; de esos 400,
nes y maquinarias. En la práctica todos los los indígenas recibieron alrededor de diez hectá-
reas, pero los indígenas propietarios de sayañas de
las haciendas medianas y pequeñas se quedaron en
95 Artículo 36°.- La empresa agrícola que, al promulgarse posesión de parcelas de menos de una hectárea en
el presente Decreto Ley, conservará el régimen mixto de los cuales las características del suelo no eran las
colonato y asalariado, será inafectable, previa comproba- mejores por ser tierras infértiles lejanas al agua en
ción de la inversión de una parte de capital suplemen- lugares pedregosos no aptos para la agricultura. Las
tario, por lo menos del doble del capital fundiario y el condiciones, las asimetrías y la desigualdad en que
empleo de técnicas modernas en su explotación (Decreto estaban las tierras siendo distribuidas no se modifi-
Ley 3464 de Reforma Agraria). caron en sentido cualitativo.
Tercer periodo
Bajo el debate
constitucional de
Mujeres indígenas de Potosí. 1938 que incorpora
Fuente: Suedamerika - Über die Kordilleren, Jirí Hanzelka, Miroslav Zikmund. el régimen social
(1938-1952)
ese entonces en cuatro años unas 1.500 ciento del total de los casos de usurpación 717
unidades de producción pasaron a propie- convirtieron tierras comunitarias en ha-
dad de 2.000 hacendados y alrededor de ciendas. Además, probar el derecho pro-
20.000 comunarios indígenas fueron con- pietario era casi imposible para los indí- Invisibles y
excluidos, pero
vertidos en colonos, esta práctica continúa genas por la falta de documentación y la siempre presentes
pagar indemnizaciones a los usurpadores de ción los decretos del 15 de mayo 1945, Bajo el debate
constitucional de
las comunidades, este artículo fue elabora- dicto el decreto ley de reforma agraria y 1938 que incorpora
el régimen social
do a la medida de los propietarios (hacen- abolió el colonato, específicamente en la (1938-1952)
dados) que enajenaron tierras de comuni- ley establece que queda abolido el siste-
dad, a más de hacer una expropiación se los ma de colonato,101 así como toda forma de 719
premia otorgándoles una indemnización, prestación de servicios personas gratuitos
esta medida se encuentra explicitada en el o compensatorios. Y se incorpora al traba-
artículo 15698 del decreto ley. Adicional- jador campesino al régimen jurídico de la Invisibles y
excluidos, pero
mente a ello, el artículo 16099 establece que nación con todos los derechos reconoci- siempre presentes
los campesinos beneficiados con la dotación dos por la ley, establece en vez del colona-
de tierras, abonaran por ellas el importe de to el sistema de trabajo de pago en salario
su valor catastral en el término de 25 años el cual se encuentra en el artículo 145102
computables a partir de la fecha de su pose- de dicho decreto ley. Pese a esa normativa
sión, lo que implicaba que los campesinos el sistema de propiedad feudal de la tierra,
98 Artículo 156°.- Las expropiaciones que se efec- 100 El colonato consistía en prestar servicios tempora-
túen en conformidad con el artículo 34, serán les y pagar al hacendado diversos tributos en dinero
pagadas, en su valor catastral vigente, en la pro- o producto del cultivo del suelo de la parcela.
porción que corresponda a la parte afectada, con 101 Título X. Régimen del trabajo campesino. Capítu-
bonos de la Reforma Agraria, que devengarán un lo Único Artículo 144°.- Queda abolido el sistema
interés no capitalizable del 2 por ciento anual, en de colonato, así como toda otra forma de presta-
el término de 25 años (Decreto Ley 3464 de Re- ción de servicios personales gratuitos o compen-
forma Agraria). satorios. Se incorpora al trabajador campesino al
99 Artículo 160°.- Los campesinos beneficiados con la régimen jurídico-social de la Nación, con todos los
dotación de tierras abonarán, por ellas, el impor- derechos reconocidos por la ley (Decreto Ley 3464
te de su valor catastral, en el término de 25 años, de Reforma Agraria).
computables a partir de la fecha de su posesión. El 102 Artículo 145°.- Se establece el sistema de salario, en to-
Servicio Nacional de Reforma Agraria señalará los dos los contratos individuales o colectivos, como norma de
procedimientos para determinar. Las cuotas que les remuneración. Se con-donan en favor de los trabajadores
corresponda abonar por sus parcelas (Decreto Ley todas las deudas provenientes de obligaciones personales
3464 de Reforma Agraria). (Decreto Ley 3464 de Reforma Agraria).
así como el régimen de producción con- de hacienda no trajo en ningún momento de
tinuó siendo una característica de la es- la historia económica progreso para el mundo
tructura de la propiedad agraria en Bolivia rural, para (Antezana 1978) la comisión enca-
(Antezana 1978), (Choque Canqui, 2003), bezada por Urquidi y Siles Zuazo influyeron
(Choque Canqui, 2016). para aprobar el programa terrateniente mel-
garejista, el programa de los hacendados sobre
De esta forma, la normativa de la reforma agra- el programa de los campesinos y al aprobarse
ria conservó la estructura feudal de la propie- en Decreto Ley, la Reforma Agraria de 1953
dad del suelo, los hacendados quedaban con consolidó jurídicamente el sistema de propie-
casi todos sus activos (tierras) y los indígenas, dad feudal vigente desde 1864 dando amplio
ahora campesinos, con sus sayañas. Arturo Ur- margen para la restauración económica y po-
quidi (Presidente de la Comisión del Proyecto lítica de los usurpadores de las comunidades,
de Reforma Agraria) al respecto mencionaba: los hacendados feudales conservadores o re-
formistas (Antezana 1978).
Los terratenientes actuales, por razones de
cultura personal y por el hecho de disponer Finalmente, la revolución de 1952 representó
de mayores recursos económicos, están en para el movimiento indígena una etapa para
condiciones de convertirse en agricultores la visibilización de sus derechos políticos, la
Un amor
desenfrenado progresistas (vale decir capitalistas), con ma- inclusion del indio como ciudadano a través
por la libertad yor facilidad que los campesinos indígenas, del voto universal y la iniciativa de mejorar
Antología de la quienes requieren todavía bastante tiempo su desarrollo humano a partir de la reforma
historia política
de Bolivia para abandonar sus costumbres rutinarias, educativa. En términos de su bienestar y la
(1825-2020)
acrecentar su economía y elevar su nivel de mejora en la generación de su ingreso a partir
720 cultura (Urquidi 1955). del Decreto Ley 3464 de Reforma Agraria
5. Consideraciones finales
los 40’s fue una década de masacres en el área ria Económica y Social de Bolivia (1821-
rural, represión a los indígenas, grandes lu- 1879).” Historica 11, nº 2 (Diciembre
chas en las minas y en las ciudades como mo- 1978): 159-183.
mentos previos al shock y punto de inflexión Cabezas, Marta. “Caracterización del Ciclo
que constituyo la revolución del 1952. El Rebelde 2000-2005.” Bolivia en Movi-
congreso de 1945 fue un evento nacional y miento. Acción colectiva y poder político (El
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congresos regionales y otros esfuerzos orga- Capdequí, J.M. Ots. España en América. El ré-
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En este sentido, el punto de inflexión de las Chihuailaf, Arauco. “Los indígenas en el es-
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tizo todas las demandas que venían del siglo dad y Discurso 14, 2008: 33-54.
XIX, con sus disposiciones se generaron crisis Choque Canqui, Roberto. Cinco Siglos de His-
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rural permitió establecer la nueva agenda del de Investigación 45. La Paz: Plural Edito-
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Anexo A
Recuento de la legislación boliviana de los indígenas: Primer periodo: 1825-1880
Norma
Fecha Lugar Propósito / objetivo
Jurídica
Se declara propietarios a los indios de sus tierras, para que puedan venderlas,
Decreto 08.04.1824 Trujillo donarlas y tengan dominio de ellas. Las tierras comunitarias se repartirán entre los
indios que no gocen de alguna de ellas para que sean propietarios de las mismas.
Extinción de los caciques. Deberán ser tratados como ciudadanos dignos de
Resolución 29.08.1825 Cuzco consideración en lo que no perjudique a los derechos e interés de los demás
ciudadanos.
Las tierras sobrantes de comunidades se venderán a beneficio del estado, y se
Resolución 09.11.1825 Chuquisaca
arrendarán depositando sus productos en el tesoro público.
Si un año después de haber adjudicado las tierras, los beneficiarios que no hacen
Decreto 15.12.1825 Santa Cruz buen uso de ellas al trabajarlas como se debe, se repartirá a otros que cultiven
como corresponde.
Contribución de impuestos (tributos), en la que todo hombre entre los dieciocho
Decreto 22.12.1825 Chuquisaca y setenta años, deberá pagar 3 pesos trimestralmente. Se excluye a personas con
limitaciones físicas, religiosos y militares activos.
Que el cura que exija a los indígenas contra su voluntad, cantidad alguna para
Orden 11.02.1826 Chuquisaca
fiestas de Iglesia, sea multado con quinientos pesos.
Un amor Los comisionados de compra, para las tropas paguen con dinero el precio justo
desenfrenado Orden 21.02.1826 Potosí y paguen a los indígenas por el viaje que hagan a ciudades, conduciendo las
por la libertad especies que se les encarguen.
Antología de la Pena de doscientos palos a los soldados que tomen a cualquier indio y lo ocupe,
Orden 17.06.1826 Chuquisaca
historia política sea en lo que fuere sin pagarle.
de Bolivia
(1825-2020) Resolución 27.08.1826 Chuquisaca No exigencia, ni recibir dinero en nombre de la gratificación.
Se suspende el decreto de Trujillo referente a la repartición de tierras a los
Ley 20.09.1826 Trujillo
726 indígenas.
Para que los indígenas que extraigan bienes de Bolivia al Perú, se les consigne la
Resolución 24.11.1826 Chuquisaca
guía con expresión de que deben pagar los derechos en el lugar de su expendio.
La ley de contribución directa, no comprende las tierras de comunidades,
Tomo I ni ganados, de indígenas; estos satisfagan como única su contribución de
1825-1952 Ley 27.12.1826 Chuquisaca
costumbre que a los indígenas que quieran se les adjudiquen en perpetuidad los
terrenos que ocupan, u otros baldíos .
Pena de liberto al abandono o huya de la hacienda o casa de su patrono; que los
Resolución 10.04.1827 Ayacucho
recueros entre los libertos y sus patronos se resuelva como caseros.
Orden 02.07.1827 Chuquisaca Se exime a los postillones del pago de la contribución.
Declara la facultad de eximir de la contribución indígena, es privativa de la contaduría
Orden 23.02.1829 Chuquisaca
general: ante quien y como ha de instruir sus recursos los que lo soliciten.
Se les debe dar un trato digno a los indígenas en sus servicios de parte de los
Decreto 02.07.1829 Santa Cruz
gobernadores y curas.
Rebajas a las contribuciones de los indígenas de “Caupolicán” (lideró la
resistencia de su pueblo contra los conquistadores españoles que llegaron a la
Orden 22.07.1829 Ayacucho
actual Chile durante el siglo XVI) ya que ellas pueden ser satisfechas en especies
y reducidas por el gobernador.
Orden 03.11.1829 Ayacucho Ningún indígena es obligado a satisfacer a cualquier clase a que pertenezca.
Los curas que obliguen a indígenas a pasar fiestas contra su voluntad que
Orden 13.11.1829 La Paz
paguen que triple del valor de ellas.
Se reglará el modo de pagar la veintena y diezmo de los corderos, y la
Orden 24.03.1830 Ayacucho
huasiventena: que se observe la costumbre de cada provincia.
Cuando los derechos que cobren los indígenas sean aprendidos sin guía, no se
Orden 31.03.1830 Ayacucho
decomisen, y solo se les cobre derechos dobles.
Que los indígenas del cantón de Suri paguen la misma contribución que los de la
Resolución 12.05.1830 Suri
capital de la provincia, rebajándoseles el exceso.
Exime de la contribución a los capitanes y sus segundas, encargados del servicio
Resolución 05.11.1830 Chuquisaca de los indígenas, que se comprometen voluntariamente a los trabajos mineros
de Potosí.
Norma
Fecha Lugar Propósito / objetivo
Jurídica
Sobre el modo de practicarse las revisitas y matricula de los indígenas
Reglamento 28.02.1831 Ayacucho
contribuyentes.
No puedan los cuerpos militares pedirá pongos más que para el servicio de
Orden 04.05.1831 Ayacucho
hospitales: tampoco puedan pedir taquia de balde.
Los extinguidos caciques de sangre y sus descendientes, son declarados
Ley 28.09.1831 Ayacucho propietarios de los terrenos que poseían; lo propio que los indígenas de los que
han disfrutado por más de diez años.
Métodos de practicarse las matrículas de contribuyentes, en adición al reglamento
Resolución 15.11.1831 Ayacucho
de revisitas.
Las comunidades de Tuiri y Caharapaca pertenecen en todo a la provincia de
Orden 30.04.1832 Ayacucho
Yungas.
Rebajas de contribución a los indígenas de algunos cantones de Atacama; sean
Ley 05.11.1832 Chuquisaca
exentos de ellas los avecindados en Lamar.
Ley 06.11.1832 Chuquisaca Extingue la contribución de Huasiventena y la llamada Faena en Potosí.
Distribución de terrenos a los maestros de postas que hasta ahora hayan estado
Resolución 09.11.1832 Chuquisaca
privados del goce de ellos.
Los postillones estarán exentos de la contribución, previniéndose a los
Orden 12.11.1832 Chuquisaca
corregidores que so les cobran serán castigados.
Reencárguese a las autoridades subalternas, el cumplimento de las disposiciones
Orden 13.11.1832 Chuquisaca que favorecen a los maestros de posta, y que los proteja contra todo el que
infiera daños.
Tercer periodo
Desaprueba la corruptela de cobrarse el diezmo a las madres que se repriman los
Orden 30.01.1833 Chuquisaca Bajo el debate
diezmos, sujetándoles a la ley y orden del 24 de marzo de 1830.
constitucional de
Resolución 26.02.1833 Chuquisaca Se declara que la huasiventena ha debido de pagarse en el año 1832. 1938 que incorpora
el régimen social
En cuanto a pago de los diezmos la junta reprimirá los desórdenes de los
Resolución 11.03.1833 Chuquisaca (1938-1952)
diezmeros.
Para que no se permita cobrar el diezmo sino cada año de las crías existentes:
Resolución 28.06.1833 Chuquisaca las diferencias ente diezmeros y contribuyentes se terminen ante el Juez de Paz, 727
sin ocupar al gobierno.
Exención en favor de los indígenas forasteros sin tierra; que esta ley y el decreto
Ley 19.10.1833 Chuquisaca
de 2 de julio de 1829 se publique por un año. Invisibles y
En qué caso será verbal el juzgamiento sobre heridas, golpes, penas de los excluidos, pero
siempre presentes
Ley 19.10.1833 Chuquisaca agresores, causas criminales en que no deben pagarse costas criminales en que
no sean condenadas en ellas.
No se espere la revisita, para que los indígenas empiecen a contribuir o
Resolución 03.01.1834 Chuquisaca reservarse, según su edad: Los gobernadores restituyan lo que les hubiesen
exigido cumplido los cincuenta años.
Entése a la costumbre en cuanto al nombramiento de Hilacatas y al número de
Resolución 07.01.1834 Ayacucho
los alcaldes de campaña.
Los tribunales no admitan peticiones a nombre y con firmas de las comunidades
Orden 07.02.1934 Ayacucho
de indígenas; como podrán estos ya en particular o sobre intereses comunes.
Son declarados propietarios los indígenas que poseen terrenos por más de diez
Decreto 07.04.1836 Ayacucho
años, pena de los funcionarios que perturbaren esta posesión.
Los indígenas lisiados para ser eximidos de la contribución, reconocimiento por
Resolución 10.07.1837 Chuquisaca
peritos o empíricos.
Se prohíbe a los curas exigir de los priostes cantidades de dinero, poniendo en
Resolución 27.12.1837 Ayacucho
vigencia un artículo del arancel.
Prohíbe se reclute a los contribuyentes. Si por equivocación se ha tomado algunos
Orden 28.06.1838 La Paz
bastará para su soltura, el informe verbal del gobernador o del corregidor.
Los revisitadores asignen a los indígenas reservados la cuota que deben pagar,
Suprema
26.08.1838 Cochabamba según el terreno que disfrutan declara igualmente la clase de indígenas que
resolución
deben ser preferidos para el servicio de la iglesia, y otros públicos.
Sucesión de los terrenos de repartimiento poseídos por los indígenas
Suprema
22.11.1838 Cochabamba contribuyentes, debe seguirse el orden de primogenitura prefiriendo el varón a la
resolución
hembra y el mayor al menor entre los herederos del ultimo poseedor.
Norma
Fecha Lugar Propósito / objetivo
Jurídica
Prescribe el modo con que deben ser calificados los indígenas contribuyentes y
Circular 07.09.1839 Sucre
manda que no se les cobre otra contribución que la establecida.
Resolución 29.10.1840 Oruro Diezmos que ha de pagar los comunarios de paria.
Designa el número de cargas de que deben pagarse el diezmo y el peso o medida
Ley 07.11.1840 Sucre
en que ha de cobrarse.
Resolución 22.07.1842 Cochabamba Los indígenas reservados de la contribución, no lo están del pago de diezmo.
Resolución 01.08.1842 Cochabamba Revisitas de provincias.
Decreto 06.08.1842 Cochabamba Varias medidas para mejorar la suerte de los naturales de la provincia de Mojos
Las boletas de reserva de indígenas contribuyentes, deben darse en papel del
Orden 19.10.1842 Potosí
sello quinto.
Orden general 20.01.1843 Sucre Los militares no pueden ocupar violentamente a los indígenas.
Orden 11.09.1843 Sucre La provincia Caupolicán eximida del pago de comida.
Contribución 10.12.1844 Sucre Contribución indígena, reemplazos de fallas – Mostrencos.
Modos de proceder en las demandas verbales sobre terrenos de indígenas. –
Orden 25.04.1845 Sucre
Apelación.
Decreto 24.05.1845 Sucre Tarifas para la producción del Beni. Recaudación de la contribución indígena de allí.
Resolución 08.10.1845 La Paz Efectos en que los indígenas del Beni deben pagar las contribuciones.
Atribuciones de los gobernadores de provincias en los asuntos de terrenos de
Resolución 13.11.1845 La Paz
indígenas.
Un amor
desenfrenado Las viudas de los indígenas deben pagar la contribución, si continúan en
Resolución 26.11.1845 La Paz
por la libertad posesión de los terrenos.
Antología de la
Orden 07.02.1846 Sucre Deslinde de las comunidades de Salinas, Lilica y Tagua.
historia política Cantón de Luribia y se permite a los vecinos ocupar para la población algún
de Bolivia Orden 12.03.1846 Sucre
terreno de la comunidad, indemnizándose con otro.
(1825-2020)
Los indígenas siendo reos rematados no pagaran la contribución de su clase sino
Resolución 16.03.1846 Ayacucho
poseen terrenos, por lo que tuvieren, satisfacen los tenedores de ellos.
728 Orden 19.03.1846 Sucre Comunidades de Tariri y Charapacsi; quedan incorporadas al cantón de Suri.
Exime del pago de diezmos a los habitantes del Bermejo y del Pilcomayo los
Decreto 25.05.1846 Tarija
exime también de las leyes del reclutamiento militar.
Tomo I Los indígenas de Cavari e Inquisivi, no están exceptuados de servir en clase de
1825-1952 Resolución 27.08.1846 Sucre
postillones en la carrera de Sicasica.
Resolución 05.10.1846 Sucre Los Ribereños del Bermejo exceptuando del pago de diezmos.
Ley 17.10.1846 Sucre Los originarios de Ichoca, como de Sicasica e Ingavi, no pagan primicias.
EL ministerio fiscal debe intervenir en los asuntos judiciales de indígenas sobre
Resolución 29.03.1847 La Paz
los terrenos de origen.
Los indígenas contribuyentes forasteros o sin tierra que hayan sido reservados
Resolución 01.08.1848 Sucre no deben destinarse a ningún servicio y los que tengan deben preferirse para el
de las iglesias.
Orden 02.03.1849 La Paz Los indígenas contribuyentes no deben ocuparse en el servicio de las iglesias.
Los indígenas forasteros sin tierra no deben pagar las contribuciones de su clase
Circular 20.07.1849 Sucre por el tiempo que dure su condena judicial; no así los que tengan, por quienes
satisfarán las personas que las poseen.
Los indígenas deben prestar sus servicios en el territorio en que se hallen,
Resolución 26.07.1849 Sucre
matriculados y no en otro, aunque posean terrenos de comunidad.
Contribución indígena: se prohíbe su cobro anticipado. La recaudación no puede
practicarse antes del 25 de junio y 25 de diciembre de cada año, para procesar al
Decreto 17.10.1853 Ayacucho
cobro de un semestre se otorga al gobernador un certificado de cancelación del
anterior semestre por el administrador de su respectivo tesoro.
Indígenas contribuyentes; ellos, sus mujeres e hijos, como son considerados por
la ley pobres de solemnidad, no deben pagar derecho alguno por los testimonios
Resolución 23.03.1854 La Paz
que solicitaren, los que se darán gratis por los escribanos y en papel que esta
determinado por la ley.
Los indígenas y los pobres de solemnidad están exentos de pagar la multa a
Resolución 28.03.1854 La Paz que se refiere el decreto de 17 de febrero de; los segundos deberán satisfacerla
cuando mejore la fortuna.
Norma
Fecha Lugar Propósito / objetivo
Jurídica
Resolución 22.12.1855 La Paz Los indígenas tienen expeditos sus derechos civiles y políticos.
Resolución 03.01.1856 Oruro Solo tres servirán en la iglesia.
La recaudación de la contribución indígena del cercado de Oruro, corre a cargo
Orden 12.10.1855 Oruro
de un colector.
Resolución 09.05.1856 La Paz Todas las expensas de pleito del arancel vigentes de derechos judiciales.
Se les exime desde el próximo tercio de San Juan del pago de contribuciones
Resolución 07.06.1856 La Paz
indigenales.
Se reglamenta el pago de la contribución indígena, y se suprime el destino de
Orden 07.06.1856 La Paz
intendente de policía.
Indígenas conductores oficiales retribuidos por el tesoro público, en el
Orden 20.07.1856 La Paz
departamento de Cochabamba.
Armonía que los del ejercito deben guardare con las demás clases de la sociedad.
Orden 12.11.1857 La Paz
Aquellos no pueden ocupar por fuerza a los indígenas.
Los indígenas quedan libres de todo servicio forzado en favor de los funcionarios
Decreto 18.01.1858 Ayacucho
públicos.
Los indígenas poseedores de los terrenos del Estado, de Quilaquila de Huata y de
Resolución 06.03.1858 La Paz Yotala deben turnarse en el expresado servicio sin exigir por esta nueva resolución
que sean ocupados mas de los cuatro que según costumbre atienden a la posta.
Los servicios públicos que prestan indígenas no están comprendidos en la
Resolución 09.03.1858 La Paz
prohibición del decreto de 18 de enero último.
Resolución 16.06.1858 La Paz La contribución indígena de Caupolicán debe satisfacerse en dinero efectivo. Tercer periodo
Pena a los militares que Vejaren a los ciudadanos particulares y a los indígenas
Orden 01.07.1858 La Paz Bajo el debate
modo de justificar el hecho.
constitucional de
La recaudación debe hacerse por la nueva matricula en todo caso y principalmente 1938 que incorpora
Resolución 14.08.1858 La Paz
ahora que la matricula ha sido exigida por la mortandad resultante de la peste. el régimen social
(1938-1952)
Decreto 03.11.1858 Oruro En Caiza no se pagan diezmos ni primicias.
Queda derogada la resolución del 3 de enero de 1856. Por lo tanto, el número de
Resolución 29.11.1858 Oruro indígenas destinados al servicio de las iglesias, será el que estuviese anotado en 729
los libros de matrícula antigua.
Las cuestiones de repartimiento de terrenos que tengan lugar solo entre
Resolución 11.02.1860 La Paz
originarios, pertenecientes a los tribunales comunes. Invisibles y
Personas exceptuadas del reclutamiento o conspiración, (casados hijos unidos excluidos, pero
Circular 12.03.1860 La Paz siempre presentes
de familia y los que se encuentran de transito con negocios de comercio.
Tribunal para cuestiones de terrenos de repartimiento. Apelación en estos casos
Resolución 12.05.1860 La Paz
abroga la disposición de 11 d febrero de 1860.
Circular 14.11.1860 La Paz Personas exceptuadas de todo reclutamiento militar.
Orden 10.12.1860 La Paz Pago que los militares deben hacer por forraje.
Suspensión de la contribución de diezmos. Se sustituye con la predial,
aplicación de esta, catastros que deben formarse para cumplimiento de esta ley.
Decreto 01.07.1861 La Paz
Departamentos exceptuados de ella. Contribución sobre predios urbanos en los
departamentos de Cochabamba y Santa Cruz.
Resolución 10.05.1862 La Paz No se obligue a los indígenas a trabajos incompatibles con su industria
Los colonos del cantón de Caracollo quedan exceptuados del pago de diezmos
Resolución 07.09.1863 Oruro
por las papas denominadas luqui o amarga.
Los individuos que no pertenecen a la raza indígena deben ser excluidos del
Resolución 30.09.1863 Oruro repartimiento de terrenos de matrícula de contribuyentes. Las propiedades
territoriales poseídas contra esta disposición deben venderse en pública subasta.
Ley 19.07.1863 Oruro Venta y repartimiento de terrenos que posean los indígenas.
Circular 21.03.1864 Cochabamba Indígenas intervención del ministerio publico en los juicios indígenas.
Resolución 22.03.1864 Cochabamba Los diezmos como deben de pagar los alfalfares.
Decreto 20.03.1866 Ayacucho Terrenos de comunidad se ordena su venta.
Decreto 13.04.1866 Ayacucho Se exime del pago de diezmos a las provincias de Cordillera y Azero.
Resolución 28.09.1866 La Paz Se les exime de varios servicios personales a los indígenas.
En las provincias de la República se abra una revista general para lo que nombrara
Circular 16.10.1866 La Paz oportunamente los apoderados fiscales que deban practicarla para los cobros de
la contribución indígenales.
Norma
Fecha Lugar Propósito / objetivo
Jurídica
Los comunitarios cuyos terrenos se hayan vendido, paguen solo la contribución
Resolución 06.02.1867 La Paz
personal.
Los blancos y mestizos que se hallaban empadronados en la matrícula de
Resolución 23.03.1867 La Paz contribuyentes, como poseedores de las sayañas pertenecientes al Estado, no
hay razón para que continúen empadronados en dichas matriculas.
Circular 08.04.1867 La Paz Se exime de su pago a los compradores de Sayañas.
Originarios dejen de pagar la contribución territorial los de las tierras que
Resolución 24.10.1867 La Paz
hubiesen sido vendidas a particulares.
Se suspende todo procedimiento cuando entablen oposición a la venta de
Resolución 25.07.1868 La Paz
terrenos sobrantes.
Villa de los Rebajan la contribución del último año a los indígenas tributarios de La Paz y
Decreto 08.07.1868
Obrajes Mejillones.
Resolución 25.10.1868 La Paz Contribuciones indigenales aclaratorias.
El número de indígenas destinados al servicio de la iglesia no sean más de dos
Resolución 09.11.1868 La Paz
que el gobierno considera suficiente en cada parroquia.
Los indígenas que han consolidado su Sayaña o Sayañas solo deben abonar su
Resolución 17.12.1868 La Paz
impuesto personal.
Los indígenas que han consolidado sus tierras no están obligados sino al pago
Resolución 10.04.1869 La Paz
de la contribución personal.
Circular 19.01.1871 La Paz Garantías sobre indígenas.
Un amor Circular 06.03.1871 La Paz Paguen la contribución indígenal como Yanaconas.
desenfrenado
por la libertad El abuso reprensible de cobrar derechos a los indígenas por la posesión de sus
Circular 29.04.1871 La Paz
terrenos.
Antología de la
historia política Tierras de comunidad y de indígenas revisitas. Propiedad de las tierras de origen
Ley 31.07.1871 La Paz
de Bolivia y de comunidad.
(1825-2020)
Circular 02.05.1873 La Paz Se debe cobrar la contribución a los indígenas que cambien de domicilio.
Los herbajes que se cobran en las fincas de pastoreo son una retribución
730 Resolución 02.05.1873 La Paz convencional establecida por la mantención de los ganados, no constituye una
verdadera contribución.
Tierras de comunidad se ex-vincularían; impuestos que deben pagar los
Ley 05.10.1874 La Paz
propietarios; mesas revisitadoras.
Tomo I
1825-1952 La contribución indigenal se recaude la del presente semestre con ejecución a
Circular 30.10.1874 Sucre las matrículas vigentes hasta que se reglamente la ejecución de ley de 5 del mes
de octubre de 1874.
Tierra de la comunidad reglamento para la ejecución de ex-vinculación conforma
Decreto 24.12.1874 Sucre
a la ley del 05 de octubre 1874.
Resolución 04.12.1875 La Paz Contribución indigenal su recaudación en las fincas rusticas.
Resolución 11.12.1875 La Paz Contribución predial quienes deben pagar la correspondiente a “Sayañas” vacantes
Indígenas contribuyentes su reglamento la ley que exime de la contribución a los
Circular 15.02.1876 La Paz
que sepan leer y escribir.
Tierras de comunidad, declaratoria relativa a los contratos de venta y
Resolución 06.03.1876 La Paz
arrendamiento celebrados por los indígenas.
Ex-vinculación de tierras principie a verificarse en el departamento de
Orden 12.04.1878 La Paz
Cochabamba a la revisita ordenada en 05 de octubre de 1874.
Tierras de comunidad las viudas conserven en la posesión de sus Sayañas
Resolución 01.10.1878 La Paz
cuando sucedan a sus maridos.
Tierras de comunidad los indígenas pueden ejercer derechos de dominio desde
Resolución 18.10.1878 Cochabamba
que obtengan sus títulos de propiedad.
Revisitas en general se practique en toda la República para el cumplimiento de la
Circular 16.09.1879 La Paz
ley del 05 de octubre de 1874.
Tierras de comunidad, explicación y modificación de la ley del 05 de octubre
Ley 01.10.1880 La Paz de 1874 sobre las ex-vinculaciones de ella, impuestos que deben pagar los
indígenas quedando eximidos del tributo.
Tierras de comunidad; reglamentación de la ley del 01 de octubre de 1880 sobre
Decreto 01.12.1880 La Paz ex-vinculaciones de ella, sobre revisitas y sobre el impuesto que deben pagar
los indígenas.
Elaboración: Propia en base al compendio de Leyes y Reglamentos de la Gaceta Oficial de Bolivia.
Segundo periodo: 1880-1938
Bajo el debate
constitucional de
1938 que incorpora
Anexo B el régimen social
(1938-1952)
Potosí: Presupuesto del departamento, por fuente de financiamiento, 1879-1930
733
Contribución indígena Diezmos Primicias Total
Año
Bs % Bs % Bs % Bs %
1879-1880 195.000 95,2 4.000 2,0 5.887 2,9 204.887 100,0 Invisibles y
excluidos, pero
1881-1882 210.214 92,2 4.000 1,8 13.887 6,1 228.101 100,0
siempre presentes
1884 187.489 91,3 4.000 1,9 13.887 6,8 205.376 100,0
1885 187.489 91,3 4.000 1,9 13.887 6,8 205.376 100,0
1886 189.489 91,4 4.000 1,9 13.887 6,7 207.376 100,0
1887 195.491 92,4 1.000 0,5 15.000 7,1 211.491 100,0
1888 161.780 90,6 1.000 0,6 15.815 8,9 178.595 100,0
1889 156.723 72,4 45.000 20,8 14.600 6,7 216.323 100,0
1890 168.722 71,7 50.000 21,2 16.600 7,1 235.322 100,0
1892 168.723 70,8 53.000 22,2 16.600 7,0 238.323 100,0
1893 168.723 70,3 53.000 22,1 18.300 7,6 240.023 100,0
1894 177.154 70,8 53.000 21,2 20.000 8,0 250.154 100,0
1895 174.704 70,5 53.000 21,4 20.000 8,1 247.704 100,0
1896 174.457 70,5 53.000 21,4 20.000 8,1 247.457 100,0
1897 175.957 72,7 48.000 19,8 18.000 7,4 241.957 100,0
1898 173.715 76,0 40.000 17,5 15.000 6,6 228.715 100,0
1899 173.748 74,0 42.000 17,9 19.000 8,1 234.748 100,0
1900 173.748 73,1 44.000 18,5 20.000 8,4 237.748 100,0
1901 173.800 73,1 44.000 18,5 20.000 8,4 237.800 100,0
1902 173.672 72,5 46.000 19,2 20.000 8,3 239.672 100,0
1903 173.672 100,0 0,0 0,0 173.672 100,0
1904 173.635 72,5 46.000 19,2 20.000 8,3 239.635 100,0
1905 173.707 71,5 49.000 20,2 20.400 8,4 243.107 100,0
Contribución indígena Diezmos Primicias Total
Año
Bs % Bs % Bs % Bs %
1906 173.707 68,6 56.000 22,1 23.400 9,2 253.107 100,0
1907 173.707 63,6 71.000 26,0 28.400 10,4 273.107 100,0
1908 174.207 100,0 0,0 0,0 174.207 100,0
1909 175.040 100,0 0,0 0,0 175.040 100,0
1910 175.532 61,5 0,0 110.000 38,5 285.532 100,0
1911 177.164 58,6 0,0 125.000 41,4 302.164 100,0
1912 178.506 61,9 0,0 110.000 38,1 288.506 100,0
1913 179.427 52,0 35.885 10,4 130.004 37,6 345.316 100,0
1914 179.795 52,9 30.000 8,8 130.004 38,3 339.799 100,0
1915 169.548 52,4 16.955 5,2 136.991 42,3 323.494 100,0
1916 169.817 52,7 16.981 5,3 135.696 42,1 322.494 100,0
1917 179.658 51,4 33.938 9,7 135.696 38,8 349.292 100,0
1918 0 0,0
1919 180.121 57,0 0,0 135.656 43,0 315.777 100,0
1920 180.593 57,1 0,0 135.656 42,9 316.249 100,0
1921 180.673 57,1 0,0 135.656 42,9 316.329 100,0
1922 180.673 57,1 0,0 135.656 42,9 316.329 100,0
1923 180.673 57,1 0,0 135.656 42,9 316.329 100,0
Un amor
desenfrenado 1924 180.673 57,1 0,0 135.656 42,9 316.329 100,0
por la libertad 1925 180.673 57,1 0,0 135.656 42,9 316.329 100,0
Antología de la 1926 180.673 57,1 0,0 135.656 42,9 316.329 100,0
historia política
de Bolivia
1927 0 0,0
(1825-2020) 1928 180.673 57,1 0,0 135.656 42,9 316.329 100,0
1929 0 0,0
734 1930 137.030 82,9 0,0 28.194 17,1 165.224 100,0
Total 7.950.375 68,3 1.001.759 8,6 2.685.039 23,1 11.637.173 100,0
Fuente: (Platt 1982), basado en Presupuesto General de la Nación 1879-1930 BNB.
Tomo I
1825-1952
La industrialización boliviana en contextos de adversidad
1900-2020
Alfredo V. Seoane Flores
CIDES
Universidad Mayor de San Andrés (UMSA)
Bajo el debate
E
constitucional de
l artículo analiza el periodo de moder- La relación entre el proceso histórico del de- 1938 que incorpora
el régimen social
nidad y transformación en Bolivia, a sarrollo económico nacional con el desempe- (1938-1952)
través de la historización del sector in- ño del sector industrial constituye el núcleo
dustrial, considerando las etapas características, de interés de este ensayo. Diferentes etapas 735
que se dividen por periodos de tiempo, pero se han sucedido en esa relación cada una con
que relatan transformaciones profundas que sus particularidades, pero también han existi-
La industrialización
produjo el siglo 20. A grandes rasgos pueden do continuidades que intentaremos descubrir boliviana
clasificarse más genéricamente como i) de la y describir. en contextos
de adversidad
acumulación originaria derivada del exceden- 1900-2020
te minero y la extensión de la relación salarial Nos interesa relacionar esos desempeños con
y empresarial 1900-1920; ii) de la revolución las políticas públicas orientadas al desarrollo
industrial boliviana 1920-1941; iii) el desarro- productivo o a la trasformación productiva,
llismo, diversificador con ayuda internacional que interactuaron y afectaron a los agentes
1942-1980; iv) la época de las exportaciones no privados de la sociedad involucrados en la
tradicionales y v) la época de rentismo extrac- producción y la economía, como los empre-
tivista. Al final del artículo se ensaya un análisis sarios y trabajadores. En la literatura espe-
de las perspectivas de la industria boliviana bajo cializada se prefiere llamar a ese conjunto de
las condiciones actuales. 1 políticas como la política industrial, enten-
diéndosela como la que promueve mejoras
Palabras clave: Revolución industrial, indus- y transformaciones en el sector productivo y
tria, empresarios, desarrollo, diversificación, no solo aquella circunscrita a acciones en el
inversiones, política industrial, ventaja com- subsector de la industria manufacturera. El
parativa, especialización inteligente. criterio más amplio que mira las transforma-
ciones productivas que propicia o no propicia
el Estado mediante sus políticas públicas es
1 Economista, Doctor en Ciencias del Desarrollo.
Actualmente es Director del CIDES-UMSA, La el que adoptamos aquí para hablar de política
Paz, Bolivia. industrial.
En relación al título de este trabajo, éste sur- sentido común ligado con la modernización
ge de la constatación de que, por diversos y bienestar socioeconómico. Parafraseando a
motivos, los propósitos y programas de in- Hirschman (1964), podemos decir que toda
dustrialización del país no logran cuajar com- sociedad busca el progreso, aunque ignora el
pletamente y son afectados adversamente por camino que debe llevarle hacia esa meta, la
circunstancias de la política pública interna, de que debe ser formulada y propuesta por sus
la influencia externa o por la inestabilidad y dirigencias intelectuales, políticas y sociales,
alta confrontación social y política. proporcionando una “visión” de cambio y hoja
de ruta, para recorrerlas usando los instru-
Para entender esos procesos e intereses, re- mentos que proporciona el Estado. Entonces,
currimos a una metodología “ecléctica” de- en un análisis más sofisticado se añadirá que
nominada aproximación narrativa, que con- faltará también que esa “visión” tome las rien-
siste en la búsqueda de elementos diversos das del poder para impulsarla desde el Estado
de información que permitan una mejor y las Instituciones.2
aproximación al análisis y comprensión de
los eventos históricos. Así se complementan En términos prácticos y reales, el desarrollo
acercamientos de la información estadística hace relación con la elevación de la producti-
Un amor
con información obtenida de documentos vidad y diversificación productiva y de expor-
desenfrenado y libros, que confirman, ratifican y comple- tación, con suficiencia alimentaria, densifican-
por la libertad
mentan los datos. do los circuitos productivos, intensificándoles,
Antología de la
historia política dándole mayor transformación y generando
de Bolivia
(1825-2020)
Para ordenar esta narrativa se parte de conside- una dinámica social de desarrollo. Es decir,
raciones generales del tema del desarrollo in- con aplicación de política industrial, conside-
736 dustrial en Bolivia y los factores que han perdu- rando situaciones y desempeños en los mer-
rado para impedir el éxito pleno de los procesos cados. Sin embargo, este entendimiento no
de despegue industrial. Es decir, las constantes siempre es compartido en la historia de las so-
Tomo I que han entrabado el desarrollo industrial del ciedades que buscan los caminos del progreso
1825-1952
país bajo el subtítulo “los sentidos generales”. y bienestar.
En los siguientes acápites se revisan las carac-
terísticas más particulares de cada fase de esos En Bolivia estuvo presente, en el ideario de-
momentos, que son cinco, sistematizando los sarrollista, la idea de que el progreso/desa-
datos sobre el nivel de actividad, la acumulación rrollo consiste en contar con una situación
de capital y variables proxy de la productividad, de mayor bienestar, emergente de las expor-
así como algunas situaciones que particulari- taciones de recursos naturales a buenos pre-
zan a cada etapa y, paralelamente, las medidas cios; que el sector primario exportador de la
que adoptando los gobiernos fueron motivo de economía crezca ofreciendo mayores ingre-
análisis y tuvieron consecuencias. Este ensayo sos y oportunidades; incrementando el cre-
concluye con unos comentarios sobre las pers- cimiento urbano y demás componentes de
pectivas del sector dadas las circunstancias que la llamada modernidad y no necesariamen-
se producen en el año 2020. te como idea industrializadora.3 En efecto,
con escasos eslabonamientos con el resto de la las fases de auge, que fue cuando existieron
red productiva, explica fundamentalmente el los recursos y se pudo llevar adelante polí-
comportamiento fluctuante y espasmódico del ticas proactivas para el desarrollo industrial
mediante inversión pública, no se contó con
el enfoque adecuado o no se tomaron las de-
será en otro trabajo a realizar en el futuro. Sin em- cisiones hacia una mayor eficacia transfor-
bargo, es destacable que tempranamente en Bolivia madora. Asimismo, cuando llegaba la época
se hizo presente la idea importada del pensamiento
de “vacas flacas”, se escuchaban los lamentos
socialista internacional, con la “utopía” de la dic-
tadura del proletariado y de lo pernicioso del de- por no haber utilizado sabiamente los exce-
sarrollo capitalista, que predominó tempranamente dentes, que después escaseaban, por lo que ya
en los sindicatos y otros estamentos sociales, en un no se podía desarrollar políticas de impulso
país con muy poca industria y clase obrera. Resul-
necesarias, dada la emergente situación de in-
ta difícil que la industrialización como fenómeno
capitalista progrese sin la consolidación de un su- suficiencia de recursos.
jeto obrero disciplinado en la productividad. La
colaboración entre clase burguesa capitalista y clase Parece entonces una regularidad constante
obrera asalariada es mutuamente conveniente para
en el país, que cuando se puede no se hace y
el desarrollo y ha sido clave en los casos exitosos de
desarrollo como Alemania, Japón, Corea del Sur, cuando aparecen restricciones y falencias de
entre otros. recursos se desea y no se puede. Un ejemplo
elocuente lo proporciona el ciclo de bonan- Revolución Nacional de 1952 o la recupera-
za entre 2005 y 2014 por elevados precios de ción de la democracia.
productos primarios de exportación, que duró
toda una década y que no se tradujo en me- Lo más seguro es que situaciones, procesos y
joras productivas ni en educación y salud. Así eventos, internos y externos, se combinaron
transcurrieron los ciclos de la economía y la de cierta manera en los diferentes momentos,
industria que fueron influenciados negativa- para que la evolución se haya dado de mane-
mente, la mayoría de las veces, por políticas ra poco satisfactoria para la industrialización,
públicas de derroche, inversiones inadecuadas, que no avanzó en mayor medida en el país.
erradas o mal ejecutadas.
Aun cuando el discurso de la industrialización
Es necesario mencionar otra regularidad y ca- y el convencimiento de que nada se ha hecho
racterística de lo acontecido en el siglo XX y lo en materia de industrialización es lo corrien-
que va del XXI, y es que los factores externos, te en Bolivia, existe también una preferencia
sea bajo la forma de cooperación para el de- por encontrar y aprovechar una fuente de re-
sarrollo o por influencias ideológicas y políti- cursos fácilmente explotable y que permita la
cas, van a inclinar las determinaciones que se obtención de rentas y que exportado el pro-
Un amor
adoptan en el país. ducto natural permita incrementar ingresos y
desenfrenado bienestar. Las esperanzas fueron, por ejem-
por la libertad
Mencionaremos como ejemplos, a propósito plo, el estaño –que hacia la década de 1920
Antología de la
historia política de influencias extranjeras, la temprana ideo- dio basamento a un importante desarrollo in-
de Bolivia
(1825-2020)
logización política y comportamiento anti- dustrial–; el petróleo desde antes de la Gue-
sistema de la clase obrera (ver nota de pie de rra del Chaco; en la década de 1970 el hierro
738 página); el Plan Bohan que inclinó la política del Mutún y luego el gas natural en los inicios
pública a favor de la diversificación; o la doc- del siglo XXI; hacia adelante aparece el litio
trina de seguridad nacional impulsada por Es- del salar de Uyuni, como la nueva promesa
Tomo I tados Unidos que devino en alineamientos y de desarrollo.
1825-1952
tensiones políticas extremas importadas o el
llamado Consenso de Washington que en la A partir de ello, en las mejores versiones, se
década de 1990 impulsó una orientación neo- aspira a poder financiar un cambio estructu-
liberal de la política económica; así como –ya ral que produzca la diversificación y la indus-
en este siglo– el llamado socialismo del siglo trialización, lo que no ocurre realmente has-
XXI, por el que la influencia de países como ta ahora. En Bolivia, la conformación de la
Cuba y Venezuela se hizo sentir en Bolivia, industria inicialmente en la década de 1920,
imponiendo un libreto determinado en las po- en muy buena medida fue producto del auge
líticas públicas. que produjo el crecimiento de la producción
y exportación de estaño. Otras fases de auge
Tampoco fueron de menor importancia situa- se repitieron, por ejemplo: los años 70, del
ciones y eventos endógenos como pueden ser petróleo y minerales y el crédito barato, o
la inestabilidad política, la alta conflictividad el más reciente auge del gas natural expor-
social, las seculares situaciones de discrimina- tado, con cierto impacto favorable sobre la
ción, entre otras. Estas situaciones, que son el industria existente, pero ninguno, como el
campo de mayor reflexión y trabajo para ge- primero, con un impulso transformador de
nerar dinámicas conductivas al desarrollo, han la estructura productiva. Todos los siguientes
originado en determinados momentos, verda- al primer auge, también impulsaron la indus-
deros cismas político-sociales, como fueron la tria sobre todo por haber generado mayor
Revolución Federal, la Guerra del Chaco, la demanda interna, pero no por combinar esa
fuerza de expansión del mercado y gasto, con la industrialización y el desarrollo, surgen de
el impulso deliberado de la industria por las convulsiones o transformaciones políticas, que
políticas públicas.4 conllevan el surgimiento de cambios hacia ins-
tituciones inclusivas o conductivas (Acemoglu
Como veremos con mayor detalle en los si- y Robinson 2015). En Bolivia, algunas de esas
guientes acápites, salvo el Plan Bohan, que circunstancias pudieron haberse dado con el
tuvo los recursos y la fortaleza institucional cambio de elites y la emergencia de una nueva
emergente de acuerdos internacionales, desa- elite con una nueva visión, por ejemplo, como
tando un proceso de diversificación producti- producto de la Revolución de 1952 o, en 2005,
va y geográfica-regional del país, que ha con- cuando ocurrió el empoderamiento de un re-
tinuado exitosamente por la concreción del presentante de las clases subalternas y una dis-
desarrollo del Oriente boliviano, el resto de ponibilidad nacional, popular y externa muy
las estrategias, repetían en la misma dirección amplia que dio origen al llamado Proceso de
o pretendían innovar mediante la industriali- Cambio.
zación dirigida desde el Estado, sin resultados
sostenibles y con fracasos estrepitosos. Definir En la Revolución Nacional de 1952 se vivía un
los roles del Estado y del mercado para gene- contexto de fuertes restricciones y de escasez
rar sinergias entre iniciativa privada empren- de recursos, pero con fuerte empoderamiento
dedora y Estado facilitador e impulsor, con real de las masas, generándose una movilidad Tercer periodo
desarrollos institucionales que les den soste- social de inclusión de mayorías. Sin embargo, Bajo el debate
constitucional de
nibilidad y solidez, es algo que aún no se ha el país sufrió una profunda recesión y crisis, 1938 que incorpora
el régimen social
producido con eficacia en Bolivia. que llevó a priorizar la sobrevivencia y paliar (1938-1952)
las escaseces, dejando de lado la posibilidad
Como señala la teoría institucionalista fuerte- de invertir en el desarrollo industrial. La si- 739
mente respaldada en la historia: las transfor- tuación cambiará una década después, ya que
maciones fundamentales de un país ocurren desde 1958, retomando el crecimiento y pla-
impulsadas por energías sociales que dan lu- nificación del sector industrial, previo ordena- La industrialización
boliviana
gar a transformaciones institucionales y éstas miento de la macroeconomía se ha de produ- en contextos
de adversidad
a cambios de comportamiento, adecuados cir un crecimiento sostenido, resultado de las 1900-2020
de pollos y una cadena eslabonada muy impor- mayores al 20 % del PIB producido en la ac-
tante del sector alimentario. tividad industrial. En cambio, Bolivia apenas
pudo hacerlo de manera no duradera en perío-
Por lo tanto, tal experiencia muestra la nece- dos de expansión (Ver: CEPAL 2018).
sidad de que se apliquen medidas de política
pública conductivas y de impulso, a través de La gráfica siguiente muestra cómo el sector
presiones y estímulos como fue el apoyo fi- industrial manufacturero, desde 1980 no pudo
nanciero que recibió el emprendimiento pri- superar el 20 por ciento de participación en el
vado en el Oriente del país, primero como PIB y fue en franco decrecimiento, de manera
un hecho de política pública, pagado princi- que inclusive en la coyuntura de bonanza de
palmente con recursos de la exportación de 2005 a 2014 la economía va creciendo a mayor
recursos naturales y de la cooperación in- ritmo que la industria. Existen algunos otros
ternacional, pero después, por el mismo alto indicadores que permiten, junto a la partici-
rendimiento del capital privado que atrajo pación en el PIB, observar una desindustriali-
nuevas inversiones y desarrollo productivo, zación, como en el caso de las exportaciones
que conllevó el crecimiento urbano y la cre- industriales, que han disminuido su participa-
ciente industrialización, generando un círcu- ción mientras que son mayor porcentaje los
lo virtuoso ascendente. productos primarios de extracción.
Gráfico 1
PIB Bolivia y de Industria Manufacturera 1980-2018
(Miles de Bs. de 1990)
60.000.000 25,0%
50.000.000 20,0%
19,4%
16,9% 17,1% 16,7% 17,1% 16,6% 16,5%
40.000.000
16,1% 17,0% 16,7% 17,3% 15,0%
30.000.000
10,0%
20.000.000
10.000.000 5,0%
0 0,0%
PIB: precios de mercado Industrias manufactureras Industria en % PIB
molineras, etc.” (CNI 1981, iii). ción nacional de manufacturas que pudieran
sustituir los abastecimientos discontinuados,
La situación emergente de la Primera Guerra necesarios para la minería y en general para la
Mundial tuvo consecuencias al imponer cre- economía nacional.
cientes dificultades para el abastecimiento de
otros mercados como el mercado boliviano con Los capitales privados asumieron la oportu-
productos importados, por la ruptura de los nidad de que dicha escasez y racionamiento
circuitos comerciales entre Europa y América se atenúen, ampliando la producción de pro-
Latina. Los mismos productores de minerales y ductos industriales, morigerando los efectos
otras materias primas como la goma y la quina, negativos sobre la producción minera. El pun-
que vendían al exterior en cantidades crecientes to máximo de dicho desarrollo se dio desde
durante la Primera Guerra Mundial –particu- la segunda mitad de la década de 1920 hasta
larmente el pujante sector productor de esta- 1935, ya que fue el período cuando se produje-
ño–, necesitaron alternativas para el abasteci- ron nuevas inversiones y los más importantes
miento de los insumos y elementos mecánicos y emprendimientos industriales a lo largo de los
otros indispensables para la explotación y para siguientes años. La ampliación de la capacidad
el consumo de la masa trabajadora, que prove- productiva se reflejó en una incrementada ac-
nían del exterior y que empezaron a escasear. tividad industrial, concentrada en las ciudades
de La Paz y Oruro, que facilitó un proceso de
acumulación con una intensidad superior a
cualquier época anterior y también en varias
décadas posteriores.
Fábrica de Tejidos Forno, Fábrica de Oxíge- Aviso comercial de la Fábrica de Hilados y Tejidos de Algodón Said
e Hijos, c. 1946.
no, Tejidos de Punto, Molineras de Harina,
Fuente: Guía Incla, 1946.
Fábrica Domingo Soligno, Fábrica de Ce-
mento Viacha, Calzados García, Tejidos de
Un amor
Algodón Said, Yarur y Cía., Embotelladoras La anterior información sugiere que en esos
desenfrenado de refrescos, Fábrica de Calzados Zamora, años ocurrió la formación más importante de
por la libertad
productos alimenticios Dillmann, cervece- la capacidad productiva industrial en Bolivia,
Antología de la
historia política ría Taquiña (CNI 1981, 27) llegando a un incremento sustancial de la pro-
de Bolivia
(1825-2020)
ducción industrial potencial. En un lapso de
Un trabajo de la Comisión Económica para seis a siete años, la capacidad instalada se mul-
744 América Latina y el Caribe (CEPAL) sobre la tiplicó varias veces.
situación de la economía boliviana, realizado
en 1958 (CEPAL 1958), comparte el mismo En cuanto a las importaciones de materia pri-
Tomo I criterio señalando que en la década de los ma y productos intermedios e insumos, el es-
1825-1952
veinte se fundaron algunas de las empresas tudio de la CEPAL da cuenta de que el índice
que aun en 1958 eran las más importantes en con base en 1925 fue creciendo en las décadas
Bolivia. de 1930 y 1940, mostrando que la capacidad
instalada en los años previos permitió un in-
Careciendo de información estadística sis- cremento considerable de la actividad produc-
temática, el estudio de la CEPAL trabajó con tiva manufacturera.
una variable proxy de la acumulación de capital
–como son las importaciones de maquinaria y La iniciativa pública estuvo ausente en este
equipos para la producción manufacturera e período inicial del esfuerzo para promover
industrial–, mostrando que en la segunda mi- una capacidad productiva industrial. En con-
tad de la década de 1920 se dio el índice más traste, fue muy notable el aporte de los inmi-
alto de importaciones de maquinaria y equipos grantes que desarrollaron emprendimientos
ya que, con una base de 1925=100 llegó a su con inversiones y conocimientos traídos desde
máxima expresión en 1928, cuando dicho nú- el exterior; un aporte emprendedor muy dina-
mero índice alcanzó más de 400, decayendo un mizador para la sociedad boliviana.
poco en 1930 a 300. En los siguientes años los
índices fueron inferiores y en ninguno de los Se puede deducir por el listado de empre-
años siguientes se logró superar los 150, aun- sas, nombres y apellidos que presenta el
que tampoco decayeron abruptamente (CEPAL acta de fundación de la Cámara de Fomen-
1958, 119). to Industrial, que el país recibió importantes
inversiones directas del exterior, como fue el reposición del capital consumido- las relacio-
caso de las cervecerías, las textileras (Forno, nes anteriores fueron aún más contundentes.
Soligno y Said), las cementeras, la fundición Según el cuadro de estimaciones siguiente, la
y metalmecánica Volcán en La Paz y Peró en IN de los seis primeros años estudiados por el
Oruro, la empresa de embutidos Stege, la fá- trabajo de la CEPAL (1958), es decir de 1925
brica de sodas Salvietti, entre otras. Además, a 1930, representó casi el 50 por ciento de la
el aporte de los inmigrantes en cuanto al de- IN realizada en el período de 1925 a 1955, o
nominado know-how (saber hacer manufactura sea 20 millones de dólares de los 42 calculados
e industria) fue fundamental para el nacimien- como IN en ese periodo de 30 años.
to de la industria nacional (CNI 1981).
Asimismo, como en los años siguientes a 1930
Los datos sobre las importaciones de maqui- la inversión se dirigió en buena parte hacia
naria y equipo que mostraron índices especta- líneas de producción nuevas, diferentes a las
culares en el quinquenio 1925 a 1930, estudia- instaladas en la década de 1920, se deduce que
dos por la CEPAL explican: para los sectores más “antiguos” la Inversión
Bruta alcanzó en adelante a poco más de la
un acentuado crecimiento de la produc- simple reposición. Algo lógico ya que las in-
ción a partir del comienzo de los años 30, versiones realizadas habían expandido la capa-
al contarse con una capacidad productiva cidad instalada y que en relación a la demanda Tercer periodo
ya instalada en el período anterior y con el efectiva no se ocupaba al 100 por ciento. Bajo el debate
constitucional de
estímulo de la acentuada contracción de las 1938 que incorpora
el régimen social
importaciones derivada de la crisis de esos La conclusión obvia es que fueron los años de (1938-1952)
años (CEPAL 1958, 119). la segunda mitad de la década de 1920 los que
permitieron la conformación de una capacidad 745
En cuanto a la acumulación de capital, utili- productiva significativa en la historia del sector
zando la variable proxy de las importaciones de industrial manufacturero boliviano. Más ade-
maquinaria y equipo, el mismo estudio men- lante veremos que ese dinamismo se ralentiza La industrialización
boliviana
ciona que de todo el período 1925 a 1955, el significativamente en los años posteriores. en contextos
de adversidad
promedio de las importaciones realizadas en los 1900-2020
años 1925-1930 superó en el doble al promedio 2.2. La década de 1930: crisis internacional,
anual de los años siguientes (CEPAL 1958, 122). Guerra y Posguerra del Chaco
En términos de inversión neta (IN) –que des- La crisis internacional que se inició en octubre
cuenta de la inversión total, la realizada para de 1929 con el crash de la bolsa de Nueva York
Cuadro 1
Inversión neta en industria manufacturera de Bolivia 1925-1955
(Valores CIF, miles de dólares de 1950)
Año Inv. Neta Año Inv. Neta Año Inv. Neta Año Inv. Neta
1925 1.775 1933 665 1941 434 1949 3.100
1926 2.218 1934 -401 1942 542 1950 718
1927 1.000 1935 -346 1943 776 1951 1.541
1928 4.314 1936 406 1944 329 1952 2.336
1929 6.137 1937 1.025 1945 -103 1953 533
1930 4.111 1938 1.777 1946 726 1954 -132
1931 1.133 1939 1.498 1947 855 1955 612
1932 727 1940 1.820 1948 2.666
Fuente: Elaboración propia, con datos de CEPAL 1958, 123.
y que se extendió por el mundo entero hasta Yarur, Fábrica de Casimires Sucs, Fábrica de
por lo menos el año 1933, tuvo efectos con- textiles Forno, Lanificio Boliviano Soligno,
tractivos sobre la actividad minera boliviana Fábrica Stege, Sociedad Boliviana de Ce-
por la caída de los precios y en los niveles de mento, Bolivian Power, entre otras fábricas
producción. Lógicamente esto tuvo un reflejó de diverso giro como jabones, alcoholes, ca-
en la actividad productiva del país con la caída misas, fideos y galletas, cerámica, gaseosas,
de la demanda efectiva y la aparición de una muebles, maestranzas, fundiciones, moline-
alta desocupación por el despido de obreros de ras, imprentas, editoriales y frigoríficos. (CNI
las minas-, que implicó que en el sector indus- 1981, 30-31).
trial la producción declinara también.
El conjunto de emprendimientos para la acti-
Debido al inicio de aprestos bélicos y a conti- vidad industrial que enlista el Acta fundacional
nuación de la Guerra del Chaco, que implicó de la CFI demuestra que ellos fueron encara-
un esfuerzo de organización y logística, y por dos exclusivamente por la iniciativa privada
lo tanto de abastecimientos, la producción in- y que muchas de estas iniciativas –probable-
dustrial vio incrementada la demanda y tuvo mente las más importantes– fueron empren-
un rol importante para sostener el esfuerzo de didas por inmigrantes7 que aportaron capital y
Un amor
la guerra, que pudo ser cubierto por la capa- conocimiento o know how.
desenfrenado cidad instalada previamente. Parte de los des-
por la libertad
empleados en las minas fueron incorporados En su primer congreso, la CFI realizó un diag-
Antología de la
historia política en la ocupación industrial. nóstico y algunas recomendaciones al gobier-
de Bolivia
(1825-2020)
no de la época:
Al inicio de la década de 1930, con una capa-
746 cidad productiva ampliada por las inversiones 1. Mejorar la situación crediticia de las em-
realizadas, adquirió importancia la conforma- presas, mediante la revisión de las leyes
ción de los entes agremiados de industriales y bancarias, para sostenimiento del crédito
Tomo I la consecuente acción propositiva y de exigen- a la actividad productiva
1825-1952
cias al poder público que el empresariado in- 2. Desarrollo de la infraestructura mediante
dustrial empezó a gestionar. Los empresarios obras públicas, especialmente mejorando
se convirtieron en interlocutores proactivos la infraestructura caminera. Para el efecto,
del desarrollo nacional. conseguir financiamiento para ese fin y ra-
cionalizar el gasto público
En febrero de 1931 se fundó y organizó la 3. Fomentar la industrialización del país y la
Cámara de Fomento Industrial (CFI). En ese agricultura, diversificando la producción
marco, surgieron desde el empresariado agre- y logrando la disminución de las impor-
miado propuestas e interpelaciones al Estado taciones, remplazándolas por producción
sobre una estrategia económica que contem- nacional.
ple los intereses de la industria.
La situación de disponibilidad de divisas se De acuerdo con la información que propor- Tercer periodo
agravó cuando estalló la Guerra del Chaco, con- ciona el documento de la CNI conmemorati- Bajo el debate
constitucional de
flagración que generó fuertes presiones sobre la vo de sus 75 años de fundación (CNI, 2006), 1938 que incorpora
economía nacional y ciertamente una aguda es- en los años de 1934 a 1949 se produjo un el régimen social
(1938-1952)
casez de divisas para usos no bélicos. Este even- verdadero salto cuantitativo de la industria.
to de emergencia nacional tuvo un efecto posi- En términos reales creció 39,4 veces en un 747
tivo de presionar y estimular la dinamización y período de 16 años, lo que tiene una enorme
ampliación de la actividad industrial en Bolivia, significación equivalente al despegue de un
logrando la mayor sustitución de importaciones proceso de industrialización, que no conti- La industrialización
boliviana
e incrementando la capacidad utilizada en las nuó, al mismo o parecido ritmo, en los años en contextos
de adversidad
plantas ya instaladas en los años previos. posteriores. 1900-2020
Bajo el debate
constitucional de
1938 que incorpora
el régimen social
(1938-1952)
Vista de la maquinaria industrial en una de las instalaciones de la fábrica de hilos HILBO, 1989. 749
Fuente: Colección Última Hora-Archivo de La Paz (85499).
Por ello recomendaba la urgencia de hacer un la década anterior. Sin embargo, significó un La industrialización
boliviana
reajuste de la economía boliviana que impli- cambio muy importante por el impulso que se en contextos
de adversidad
cara el desarrollo industrial y agrícola del país le dio a la región oriental del país. 1900-2020
para lo que se necesitaba tener presente “…un
viejo convencimiento nacional que Bolivia ne- Respecto a la dinámica industrial que se dio
cesita industrias propias, pero no basta el sim- en los años 40, particularmente después de la
ple enunciado o el simple deseo de que ellas Segunda Guerra Mundial, el estudio de la CE-
existan, sino que es preciso atraerlas, implan- PAL dice:
tarlas, protegerlas de la competencia externa”
(Citado por PNUD 2007, 159). Después de crecer con gran rapidez desde
la crisis de comienzos de los años treinta
hasta la preguerra y luego durante la guerra
3. Las transformaciones de la década misma, el volumen de producción industrial
de 1940: Apoyo externo y política se ha mostrado prácticamente estacionario
industrial (…) estos hechos sugieren que el problema
inmediato de la industria boliviana no radica
La década de 1940 fue en algunos aspectos me- tanto en la expansión de la capacidad pro-
nos dinámica que la anterior en cuanto al desa- ductiva como en reacondicionar una capaci-
rrollo del sector industrial, ya que entre 1940 dad ya existente y en eliminar aquellos fac-
y 1949 el crecimiento promedio anual alcanzó tores que impiden su buen aprovechamiento
solamente el 5,2 por ciento, muy inferior al de (CEPAL 1958, 111).
Según la “Breve Historia”, una serie de obstá- Se puede decir que a raíz de los estímulos y
culos y restricciones que enfrentó la industria recursos que aportó esta misión y sobre todo
dieron como resultado el estancamiento en la por el enfoque hacia la diversificación pro-
dinámica de crecimiento del sector. Entre los ductiva e industrial, se produjo una segunda
que se puede mencionar se tiene junto con la ola de industrialización que comenzó en esos
restricción de divisas y el efecto inflacionario años como consecuencia de la aplicación del
de la devaluación, la liberalización de las im- Plan Bohan, que entre otras medidas impul-
portaciones, las compras públicas que subesti- só la creación de la Corporación Boliviana de
maban la producción nacional, las deficiencias Fomento (CBF), dando origen a varios em-
en el abastecimiento de energía y otros insu- prendimientos fundamentalmente en el sector
mos, los elevados impuestos a las utilidades y agroindustrial con la presencia del Estado em-
sobre todo a la actividad empresarial manufac- presario.
turera en general y, en suma, la ausencia de
una política pública clara respecto al desarro- El propósito del Plan partía por identificar la
llo industrial. (CNI 2006) necesidad de crear una infraestructura de co-
municaciones que permitiera una expansión
Por tanto, pese a las circunstancias favorables y diversificación de la producción agrícola y
Un amor
para el país por el incremento de los requeri- un mayor grado de autoabastecimiento, con
desenfrenado mientos de minerales por los países centrales la posibilidad posterior del desarrollo de ex-
por la libertad
que afrontaban durante la Segunda Guerra portaciones de productos agrícolas tropicales.
Antología de la
historia política Mundial, la década de los 40 fue menos diná- También contemplaba la necesidad de mejorar
de Bolivia
(1825-2020)
mica que la anterior, aunque con tasa de cre- la producción minera y petrolera con métodos
cimiento promedio positiva de 5,2 por ciento. más eficientes para el tratamiento de minera-
750 les de baja ley, la fundición de estaño y la cons-
3.1. El Plan Bohan trucción de refinerías.
Tomo I Sin embargo, un evento que marcó positiva- En su diagnóstico mencionaba que la minería
1825-1952
mente el patrón de desarrollo del país, ini- representaba el 94 por ciento del valor de las
ciando la diversificación de la producción, la exportaciones en 1940, pero solo empleaba
autosuficiencia alimentaria y la integración del directamente a una cantidad de empleados
territorio, fue la suscripción del acuerdo entre que con sus familias no superaban el 7 por
Bolivia y EEUU para declarar la guerra a las ciento de la población. En cambio, la agricul-
potencias del Eje y la misión que definiría la tura proporcionaba los medios de vida para
estrategia de crecimiento y desarrollo del país: dos tercios de la población, con la caracterís-
el Plan Bohan. tica de que esencialmente era una actividad
de subsistencia, de muy baja productividad y
En circunstancias en que Bolivia se convirtió produciendo muy poco excedente para el co-
en aliada de EEUU y declaró la guerra al Eje mercio. Esto determinaba que casi el 50 por
Berlín-Roma-Tokio durante la Segunda Gue- ciento de las importaciones fueran productos
rra Mundial, fue enviada al país, como parte de agrícolas.
la cooperación estadounidense con los aliados,
la misión técnica encabezada por el economis- Se mencionaba que Bolivia potencialmente po-
ta Merwin Bohan e integrada por expertos del día producir “prácticamente todos los produc-
desarrollo de la agricultura, la infraestructura tos agrícolas y en cantidades ilimitadas, pero no
caminera y el desarrollo industrial. Esta misión puede encontrar mercados para esos productos
planteó una estrategia diversificadora y de sus- fuera de Bolivia”. Entonces la producción agrí-
titución de importaciones para el país. cola de Bolivia debía ser adaptada al consumo
interno y su expansión dependería del aumento
de la población y de su consumo per cápita.
mayor exportación y captación de divisas. tral y Banco Agrícola. Su objetivo debería ser Bajo el debate
constitucional de
alentar la compra por intereses privados de 1938 que incorpora
En ese marco, el Plan Bohan definió desarro- proyectos empresariales prósperos estableci- el régimen social
(1938-1952)
llar un programa de fomento para alcanzar dos por la corporación para que no se convier-
una economía más diversificada y estable, a ta en una organización de inversión en lugar 751
partir de las siguientes acciones: de fomento.
arroz, ganado, trigo y otros cereales, pro- Unidos pensaba que no era prioritario en ese
ductos de lechería, grasas y aceites comes- momento por la existencia de necesidades más
tibles, algodón y lana y establecimiento de vitales, además de las dificultades para impor-
plantas de procesos industriales tar maquinaria y equipo de la economía de
3. Construcción de obras para irrigación de guerra de los países industrializados. En ese
cultivos sentido, se consideró más importante utilizar
4. Desarrollo de los campos petroleros pro- la capacidad instalada existente y posterior-
bados, exploración de nuevas áreas y desa- mente buscar su expansión.
rrollo de infraestructura para la exporta-
ción de hidrocarburos En síntesis, el principal eje en la reflexión de la
economía boliviana que planteaba el Informe
Para desarrollar esas acciones, el Plan Bohan de la comisión estadounidense giraba en torno
venía acompañado de un crédito de 88 millo- a la necesidad del desarrollo de una agricul-
nes de dólares, que financió, por una parte, tura diversificada y que atendiera adecuada-
la construcción de la carretera Cochabam- mente las necesidades del consumo nacional y
ba-Santa Cruz y, por otra, proyectos que debía creara la oportunidad potencial para exportar.
encarar la Corporación Boliviana de Fomento Asimismo, detectando que uno de los prin-
(CBF). cipales problemas para la producción era la
desvinculación entre las diferentes regiones y a lo largo de todo el territorio nacional (Gi-
entre los distritos productores y consumido- ménez 1988, 21).
res, el desarrollo de infraestructura de comu-
nicaciones fue considerado prioritario. 3.2. Intentos promotores de la industria
en el gobierno de Hertzog (1947-1949)
En cuanto al planteamiento inicial de partici-
pación de la empresa pública en la actividad Hacia fines de la década de los 40, el gobierno
industrial del Plan Bohan, éste concebía un ini- del presidente Enrique Hertzog adoptó una
cial momento con la empresa pública como ele- serie de medidas para impulsar el desarrollo
mento para impulsar la subsiguiente participa- del sector industrial. Entre ellas, se creó la Jun-
ción de la empresa privada y la diversificación ta de Fomento Industrial, por iniciativa y cabil-
de la producción nacional para incrementar el deo de los industriales organizados en la CNI.
abastecimiento de bienes de consumo del país.
En efecto, parte sustancial del Plan Bohan fue Según la “Breve Historia” los industriales a
la prescripción de que las empresas creadas por través de la CNI entregaron al gobierno de
la CBF fueran transferidas al sector privado lue- Hertzog proyectos de decretos para la crea-
go de un período prudente de maduración. ción de la Junta de Fomento Industrial y la
Un amor
escuela industrial, propuesta que se converti-
desenfrenado Para la diversificación de la producción se ría en el decreto del 7 de enero de 1948, que
por la libertad
priorizaron acertadamente obras de infraes- establecía en el artículo 1:
Antología de la
historia política tructura caminera e impulsar el desarrollo de
de Bolivia
(1825-2020)
la agroindustria, con el propósito de incorpo- El presente decreto tiene por objeto crear
rar regiones poco desarrolladas, pero de gran disposiciones que impulsen y fomenten la
752 potencial para la producción de alimentos, producción y extracción de materias primas
como el Oriente boliviano. nacionales y el desarrollo de las industrias bo-
livianas establecidas o por establecerse, con el
Tomo I Con ese tipo de proyectos e inversiones, que a propósito de fortalecer la economía y procurar
1825-1952
partir del Plan Bohan recibirían financiamiento la capacitación de la clase obrera en las distin-
internacional, el país logró superar la situación tas ramas de la producción (CNI 1981, 56-57).
de dependencia respecto a importaciones de ali-
mentos y otros productos esenciales, logrando la Para cumplir su objetivo, el decreto dictó las
sustitución de importaciones en el rubro, lo que siguientes medidas: diversos tipos de protec-
representó un gran alivio para la situación es- ción arancelaria, liberación de impuestos de
tructural de la escasez de divisas que durante lar- importación para maquinaria, tarifas prefe-
go tiempo caracterizó a la economía de Bolivia. renciales del transporte ferrocarrilero, conce-
sión de divisas a cambio oficial y facilidades
La CBF estableció empresas en varias regiones crediticias, entre otras.
y departamentos del país, buscando un desa-
rrollo más diversificado y extendido: Mediante el artículo 13 dispuso que las empre-
sas destinaran el 2,5 por ciento de sus utilidades
estableció el ingenio azucarero de Guabirá por las adquisiciones públicas para la fundación
en Santa Cruz, se instaló la fábrica de ce- o ampliación de escuelas e instituciones indus-
mento de Sucre, nació la Planta Industriali- triales, así como para dar tratamiento preferen-
zadora de Leche de Cochabamba, se instaló cial a la producción industrial boliviana.
la laminadora de goma en Riberalta, surgie-
ron los ingenios azucareros de Bermejo y Se debe destacar que las anteriores dos disposi-
muchas otras empresas que se dispersaron ciones contienen los rasgos más característicos
de una política industrial, como la que se apli- 4. Nacionalismo y planificación
caba en países que lograron avances en la in- del desarrollo en la década de 1950
dustrialización tales como México, Brasil o
Argentina y que por primera vez se proponía La década de los 50 fue el tiempo de la Re-
fomentar en Bolivia. volución Nacional que inauguró un período
fundamental de la historia del país.
Otro decreto del 9 de enero de 1948 creó la
Junta de Fomento Industrial como “entidad Puesto que se trata de un período histórico de
encargada de planear y coordinar el desarrollo tremenda movilización social, con la captura
industrial del país y prestar al Estado asesora- del poder por un partido que encarnaba el
miento técnico para la buena orientación de la bloque histórico nacional popular, las realiza-
política industrial” (CNI 1981,57). ciones en el ámbito del cambio institucional
fueron grandes y han tenido, por ello, enorme
La Junta debería contar con representación trascendencia. Los cambios estructurales co-
privada y pública. rresponden –en una enumeración no exhaus-
tiva–, entre otros a:
Sin embargo, la convulsión política que arre-
ciaba hacia fines del año 1949 provocó la re- 1. Ampliación del mercado con la incorpo-
nuncia de Hertzog, revelando la precariedad ración al intercambio mercantil y como Tercer periodo
en que se desenvolvía la institucionalidad del ciudadanos reales a sectores amplios del Bajo el debate
constitucional de
país. La “Breve Historia” lo refleja en los si- campesinado y población urbana 1938 que incorpora
el régimen social
guientes términos: 2. La democratización de la política exten- (1938-1952)
diendo los derechos políticos y sociales a
Parecía que con esas dos disposiciones lega- sectores marginados 753
les se había llegado a un punto de arranque 3. La redistribución del ingreso a favor de las
para emprender, sobre bases firmes, una ac- clases incorporadas y una mayor participa-
ción de desarrollo industrial. Esa esperanza ción del Estado en la generación del ingreso La industrialización
boliviana
resultó ilusoria. La agitación política, siem- 4. El propósito nacional de desarrollar una en contextos
de adversidad
pre prevaleciente en la colectividad, desem- transformación sustancial del Estado, la 1900-2020
Un amor
Respecto a 1950=100 el índice de producción La Revolución de abril de 1952 fue el resulta-
desenfrenado industrial después de un breve ascenso en do de una acumulación de tensiones que cul-
por la libertad
1953 y 1954 fue decayendo y llegó en 1957 minó en la toma del poder por una fuerza que
Antología de la
historia política a 72, para recuperarse lentamente y superar a pretendía superarlas mediante la nacionaliza-
de Bolivia
(1825-2020)
principios de la década de 1960 el parámetro ción de la principal actividad del país, la mi-
de 1950. En cuanto a su aporte a la generación nería, una reforma agraria que incorporase al
754 del PIB, la industria manufacturera bajó de campesinado al intercambio mercantil y la di-
13,5 por ciento a 10,5 por ciento en 1957, al- versificación económica para desarrollar nue-
canzando en 1960 el 12,1 por ciento. Aunque vos sectores de actividad que sustituyeran las
Tomo I en general todos los indicadores de produc- importaciones de todo tipo, principalmente de
1825-1952
ción de la economía boliviana se encogieron, alimentos. De inicio el proceso revolucionario
la situación fue mucho más aguda en el caso de se caracterizó por una activa participación sin-
la industria manufacturera. dical en la política y los planes de gobierno.
Cuadro 4
Evolución del PIB y PIB industrial 1950-1961
(Estimado en millones de dólares de 1958)
cados. La CNI señala que “a tales dificultades vetas de los socavones estaban poco menos Bajo el debate
constitucional de
se añadió la escasez de materiales de trabajo y que agotadas y su explotación era costosa; 1938 que incorpora
el régimen social
materias primas y la creación de una Comisión los concentrados de minerales exportados (1938-1952)
de Defensa de la Economía Popular” (64). no tenían una cotización razonable y re-
muneradora; el pago de beneficios sociales 755
Asimismo, el gremio de los industriales consi- a todos los trabajadores del subsuelo y de
deró que en ese período el mayor de los pro- ingenios, demandó cuantiosas cantidades
blemas surgió por el dramático crecimiento de moneda, y la recontratación de personal La industrialización
boliviana
del contrabando, ya que desde Arica –declara- supernumerario no dio una administración en contextos
de adversidad
do puerto libre por el gobierno chileno– toda financiera equilibrada a las empresas (…) se 1900-2020
lizan alrededor de 600 obreros y emplea- tiendan a utilizar materia prima nacional y Bajo el debate
constitucional de
dos. Fabrican algo más de un millón de pa- aquellas industrias que produzcan los más ne- 1938 que incorpora
el régimen social
res de zapatos. cesarios abastecimientos de insumos para la (1938-1952)
– Bebidas, principalmente cerveza en La Paz, producción de las minas, agropecuaria y otros
Cochabamba y Oruro. También alcohol y que se importaban por montos considerables. 757
gaseosas. Los establecimientos existentes
emplean 1.200 trabajadores. Un componente fundamental para la promo-
– Alimentos, se fabrican harinas (molineras), ción del sector industrial del Plan de Acción La industrialización
boliviana
conservas, pastas, dulces, etc. emplean 700 Inmediata está relacionado con la educación en contextos
de adversidad
obreros. técnica, creando nuevas instituciones y forta- 1900-2020
Las medidas adoptadas hasta 1955 para la Plan Eder, por el apellido del jefe de la misión.
Tomo I estabilización, antes de la adopción del Plan Los principales elementos de este plan fueron:
1825-1952
Eder en 1957, consistieron principalmente en
controles de precios y mecanismos de asigna- – Supresión del sistema de cambios múlti-
ción de subsidios y cupos, no logrando frenar ples, devaluación del boliviano y estableci-
la inflación y produciendo, más bien, prácticas miento de cambio único y fluctuante
perniciosas de especulación, contrabando al – Eliminación de prohibiciones y controles
exterior y privilegios para grupos particulares. sobre las importaciones y exportaciones,
Ese alto nivel inflacionario conspiró para que liberalizando el comercio exterior, sujeto
el Plan Inmediato no sea efectivo y no pueda solamente al pago de aranceles y regalías
dar los resultados que se proponía. de exportación
– Supresión de subsidios fiscales directos e
4.3. Plan Eder de estabilización indirectos a los artículos de primera nece-
sidad
Con el cambio de gobierno de Víctor Paz Es- – Supresión de los controles de precios, ex-
tenssoro y la asunción de Hernán Siles Zuazo cepto los alquileres
en 1956, se decidió aplicar un plan de estabi- – Congelamiento de sueldos y salarios du-
lización mucho más riguroso, orientado hacia rante un año, previa su elevación para com-
los mecanismos de mercado, que se planificó pensar la pérdida de poder adquisitivo por
con una misión económica del gobierno de la devaluación
Estados Unidos y de funcionarios del Fondo – Eliminación del sistema de pulpería barata
Monetario Internacional (FMI), denominado en las minas
– Control del crédito bancario y adopción de estabilización y para el despegue posterior,
medidas para equilibrar el presupuesto dado el impulso a la diversificación produc-
– Constitución de un fondo de estabilización tiva que apoyó.
de 25 millones de dólares, provistos por el
FMI (7,5MM) y el gobierno de los EEUU A partir de 1958 se observa claramente la re-
(17,5MM). cuperación del crecimiento positivo del PIB
total y del PIB de la industria manufacturera.
Los efectos de este plan de estabilización en Tanto las industrias más antiguas como las
el corto plazo fueron efectivos para lograr la nuevas que surgieron, más ligadas al sector
estabilización con la desaparición de los vicios agropecuario, empezaron un ciclo de creci-
del sistema de control de precios y de cambios miento prometedor.
múltiples, restableciendo una situación de
oferta que permitió superar la escasez artificial En Asamblea extraordinaria, realizada en
y responder a la demanda. “Este hecho unido septiembre de 1958, la CNI declaró que: “la
al aumento de los bienes esenciales provenien- incomprensión sobre la verdadera situación
tes de la ayuda norteamericana, ha causado de la Industria, tanto desde los sectores la-
una mayor oferta de productos en el mercado borales como desde las esferas del gobierno,
interno y la desaparición virtual de la escasez” está conduciendo a la actividad industrial del
(CEPAL 1958, 82). país a un colapso (…)” (CNI, 1981:77). Para Tercer periodo
miento con proyectos de la CBF y las Fuerzas tras que el sector de la industria manufacturera Bajo el debate
constitucional de
Armadas (FFAA): superó ese ritmo, alcanzando un 7 por ciento 1938 que incorpora
el régimen social
de crecimiento promedio anual. De esa mane- (1938-1952)
Del monto total de recursos financieros que ra, el sector de la industria manufacturera pasó
harán posible el desarrollo industrial, en de representar un 15,8 por ciento del PIB en 761
esta primera etapa, más del 80% beneficia- 1960 a un 17,8 por ciento en 1970.
ran a los empresarios privados, para atender
la recuperación y rehabilitación de la indus- Fue positivo para el desarrollo industrial del La industrialización
boliviana
tria existente, así como para la ejecución de país la emergencia de una cadena productiva en contextos
de adversidad
proyectos específicos (…) que también de- ligada al agro, que se eslabonó, a través de la 1900-2020
La industrialización acelerada que conside- el incremento en el stock de capital, medido Bajo el debate
constitucional de
ra la Estrategia supone una profunda trans- como Formación Neta de Capital Fijo. Como 1938 que incorpora
formación social y cultural del país a través se puede apreciar en el cuadro siguiente, el el régimen social
(1938-1952)
de la asimilación de la técnica moderna, la incremento del stock de capital tendrá tasas
calificación de la mano de obra, la creación positivas para la economía en su conjunto y 763
de hábitos de organización y disciplina la- aún mayores tasas para la industria manufac-
borales y la planificación, a fin de concen- turera.
trar en pocos años el desarrollo que para La industrialización
boliviana
los países hoy adelantados llevó decenios En efecto, en la industria manufacturera la en contextos
de adversidad
(GTZ 2009, 287). inversión neta crece a un ritmo muy superior 1900-2020
que su similar nacional durante la década de
4.6. La década de 1970 1970, llegando a más que duplicar el stock de
capital del sector industrial manufacturero.
En la década de los 70, el promedio de creci- En millones de pesos bolivianos de 1980 el
miento del PIB de la industria manufacture- stock de capital del sector alcanzaba 9.064,4
ra fue de 5,8 por ciento, de manera que este millones de pesos y al terminar la década es de
sector alcanzó en 1978 un 20,2 por ciento 21.721,9 millones, es decir, más que se duplica
del PIB, participación récord, no superada el stock de capital del sector.
posteriormente. También crecieron signi-
ficativamente el sector de hidrocarburos y Obsérvese además que el stock de capital de la
agropecuario empresarial, mientras que la industria seguirá creciendo hasta el año 1979
agricultura tradicional tuvo un fuerte de- cuando la tendencia a perder dinamismo de la
crecimiento. Como vimos anteriormente, la inversión neta nacional ya era signo de la re-
expansión del stock de capital del sector de cesión posterior. A nivel nacional, aun cuando
la industria manufacturera fue superior al la inversión bruta mostraba un flujo positivo y
promedio nacional, elemento que explica esa no decrecía sustancialmente, la inversión neta
mayor importancia que adquiere el sector en nacional decreció llegando en 1979 a un flujo
la economía nacional. negativo.
Cuadro 7
El stock de capital 1970-1979
(En millones de pesos bolivianos de 1980)
Un amor
prendas de vestir y de cuero era el más im-
desenfrenado portante con 34,4 por ciento, seguido de cer-
por la libertad
ca por el subsector de productos alimenticios,
Antología de la
historia política bebidas y tabaco con 33 por ciento, mientras
de Bolivia
(1825-2020)
que el conjunto de sectores productores de
bienes intermedios, de consumo duradero y
764 de capital, representaba el 29,6 por ciento.
bismuto) y la refinación de petróleo fueron búsqueda de otro nuevo marco para la elabo-
las más significativas del sector. De hecho, las ración de las políticas públicas.
exportaciones industriales se expandieron casi
exclusivamente por efecto de la exportación 5.1. La década de 1980: ¿Década perdida?
de estaño y bismuto fundidos. Asimismo, la
producción de derivados del petróleo en las La primera mitad de la década de los 80 fue Tercer periodo
refinerías propiedad del sector público fue el muy negativa para el desarrollo del sector in- Bajo el debate
constitucional de
subsector con mayor crecimiento. dustrial. Desde los inicios se manifestó una 1938 que incorpora
el régimen social
tendencia al decrecimiento del sector, que ex- (1938-1952)
Vale decir que la década de los 70 significará presó con antelación y con mayor intensidad
un crecimiento importante de la industria ma- la contracción de la economía boliviana que 765
nufacturera, que se expresa en la duplicación sobrevendría en los siguientes años.
de la capacidad instalada, medida como stock
de capital. Sin embargo, este impulso se pier- Entre 1979 y 1986 el crecimiento del PIB a La industrialización
boliviana
de hacia finales de la década. precios constantes fue negativo. La industria en contextos
de adversidad
manufacturera decreció a un ritmo mayor que 1900-2020
Cuadro 10
Tasas de crecimiento de la demanda final 1981-1989
(Porcentajes del valor a precios constantes)*
Entendiendo que la estabilización era el fun- El antecedente inevitable para el análisis es el 767
damento de la reactivación, se llevó adelante Decreto Supremo 21060, cuyo principal obje-
un muy interesante debate sobre la natura- tivo era la estabilización de precios. Sin embar-
leza que debía tener la reactivación con se- go, su influencia ha sido mayor, porque inicia- La industrialización
boliviana
ñalamientos sobre la necesidad de realizar ba y proyectaba toda una reforma estructural en contextos
de adversidad
transformaciones profundas de carácter es- de la economía boliviana para que funcione en 1900-2020
tructural. cánones de libertad económica, es decir abierta
al comercio exterior, libre contratación, liber-
Entre los hitos importantes de dicho debate tad cambiaria, etc., buscando deliberadamente
se encuentra el Foro Económico denomina- que sea el mercado el que diera las señales para
do “Estabilización y Desarrollo en Bolivia” la asignación de los recursos.
del ILDIS (1987).8 En ese debate se ponderó
la mayor efectividad del modelo boliviano del Al Decreto 21060 le siguieron otras medidas
Decreto Supremo 21060 frente a las experien- e instrumentos legales que se irán comple-
cias heterodoxas de la época como el Plan Cru- mentando sucesivamente en fases a las que
zado, el Austral o Inti de Brasil, Argentina y corresponderá el denominativo de reformas
Perú, respectivamente, para frenar la hiperin- de primera y de segunda generación, dentro
flación y la restauración del clima de confianza del Programa de Ajuste Estructural (PAE).
Las reformas de primera generación, más
8 En el Foro Económico “Estabilización y desarrollo ligadas a la recuperación de los equilibrios
en Bolivia” del ILDIS, participaron a título personal macroeconómicos y las bases para la reacti-
economistas prestigiados del país y del exterior, así
vación del crecimiento de la producción, se
como funcionarios de gobierno de ese entonces,
como el ministro de Finanzas, Juan Cariaga y el de irán implementando y logrando equilibrios
Planeamiento, Gonzalo Sánchez de Lozada. importantes.
Cuadro 12
Indicadores de la industria manufacturera 1990-2005
(En millones de Dólares)
Cuadro 14
Exportaciones industriales y no tradicionales
(En millones de dólares)
1990 1991 1992 1993 1994 1995 1996 1997 1998 1999 2000 2001 2002 2003 2004 2005
Industriales 304 277 293 442 700 630 688 701 655 629 716 697 727 781 950 933
No tradicionales 288 254 229 301 545 474 595 647 576 569 643 583 627 715 886 878
Fuente: INE.
marco normativo y legal favorable lograron Si medimos el crecimiento sectorial con un ín-
niveles altos de inversión extrajera directa. En dice de volumen físico producido y lo compa-
estos años el stock de capital de la economía ramos con el índice de valor a precios constan-
se expandió y produjo un efecto positivo en tes –ambos con base 1990=100–, tenemos que
la producción de exportación, principalmente en volumen la producción industrial manu-
de hidrocarburos, iniciando un período don- facturera llega en 2012 a 215, mientras que el
de se logró superar la restricción externa o de PIB del sector a precios constantes llega a 234.
divisas. Esto nos está orientando respecto a la mayor
incidencia que tuvo la evolución del índice de
La IED desplazó a la inversión pública como precios al alza de los productos exportados del
principal agente de incremento del stock de sector, que fue elemento principal a considerar
capital desde 1996 a 2002. Antes, entre 1990 en el crecimiento del valor producido.
a 1995 y después de 2002, la inversión pú-
blica ha de ser el principal componente de la En los años 2006 al 2012, la industria manu-
FBKF con excepción del año 2005 en el que facturera empleaba en promedio a un 11 % de
la inversión privada nacional tiene un com- la población ocupada y el mismo sector pro-
portamiento inédito (la inversión nacional ducía alrededor del 17 % del PIB, mientras el
Un amor
privada se calcula sustrayendo de la FBKF sector de la agricultura con el 33 % del em-
desenfrenado total lo correspondiente a la IED y la Inver- pleo aportaba al PIB alrededor de un 13 %.
por la libertad
sión pública). La Inversión pública se dirige
Antología de la
historia política en elevado porcentaje a la construcción (de
de Bolivia
(1825-2020)
carreteras e infraestructuras), en cambio, la 6. La bonanza sin transformación
inversión privada a la adquisición de bienes productiva
770 de capital, como son plantas industriales, ma-
quinaria, equipos con tecnología moderna, En Bolivia, a partir de 2006, se dieron con-
principalmente. diciones para la transformación productiva,
Tomo I tanto por la disponibilidad de recursos para
1825-1952
Los años 2002 a 2012, la Inversión públi- sin restricciones mayores incrementar la in-
ca será la dominante, incrementando en su versión y, también, por un cambio en las eli-
composición la adquisición de los bienes de tes dirigenciales del gobierno, que pudieron
capital expandiendo o reponiendo los bienes plantear un modelo alternativo a las políticas
de capital. neoliberales. Sin embargo, aun con los “astros
Cuadro 15
Formación bruta de capital fijo, según producto, 2000-2012
(En millones de bolivianos de 1990)
2000 2001 2002 2003 2004 2005 2006 2007 2008 2009 2010 2011 2012
TOTAL 3.927 3.085 3.656 3.259 3.223 3.438 3.757 4.232 5.022 5.167 5.553 6.870 6.971
Bienes de Capital 2.033 1.338 1.566 1.572 1.510 1.613 1.746 1.894 2.437 2.293 2.438 3.504 3.391
Construcción 1.894 1.747 2.090 1.687 1.713 1.824 2.011 2.338 2.585 2.874 3.115 3.366 3.580
Público 1.112 1.190 1.167 1.134 1.499 1.628 1.882 2.275 2.672 2.804 3.043 3.574 3.781
Bienes de Capital 161 114 128 151 317 375 479 589 752 691 728 1.053 1.036
Construcción 951 1.077 1.039 983 1.182 1.253 1.403 1.686 1.919 2.113 2.315 2.522 2.744
Privado 2.815 1.894 2.489 2.126 1.724 1.809 1.876 1.957 2.351 2.363 2.510 3.296 3.190
Bienes de Capital 1.871 1.224 1.438 1.422 1.194 1.238 1.268 1.305 1.685 1.602 1.710 2.451 2.354
Construcción 943 670 1.051 704 530 571 608 653 666 762 800 844 836
Fuente: Instituto Nacional de Estadística.
alineados” fue en las ideas respecto a la mane- en precios de 100 a 198 en los mismos años.
ra de gestionar los recursos públicos, así como Es decir, los términos del intercambio se vol-
en los comportamientos éticos, donde no se vieron más favorables para el país incremen-
produjeron los cambios necesarios. Es decir, tando su poder de compra externo. El año
se pudo avanzar en un cambio de modelo eco- 2014 las exportaciones alcanzaron su valor
nómico por un entorno favorable para em- más alto, sobrepasando los 12.000 millones
prender la transformación productiva, e inclu- de dólares.
so se contó inicialmente con el Plan Nacional
de Desarrollo (PND) de 2006, que prometía Sin embargo, a partir de 2015, las exportacio-
justamente la Transformación Productiva con nes tendrían una tendencia al decrecimiento,
Equidad y la industrialización, pero no se lo mientras las importaciones lo harían en menor
implementó. Veamos su concreción. proporción, de manera que se produjo desde
ese año una situación deficitaria de la balanza
La coyuntura económica, considerada de bo- de mercancías. La cuenta corriente también
nanza, se origina en un cambio de los resul- sufrió esa tendencia, mostrando resultados ne-
tados de las transacciones de cuenta corriente gativos desde 2015, lo que obviamente impli-
con el mundo, con un superávit sostenido por có la disminución de reservas y el incremento
varios años, inédito por su duración y magni- de pasivos externos.
tud. Dicho resultado se explica porque el cre- Tercer periodo
cimiento de las exportaciones ha sido enorme, Con el cambio de año base a un índice de pre- Bajo el debate
constitucional de
de manera que su valor se multiplicó en 10 cios 2012=100, que realizó el INE, las exporta- 1938 que incorpora
el régimen social
veces desde 2000 a 2014, lo que generó una ciones en 2018, en general fueron de 82,8 y de (1938-1952)
capacidad para importar ampliada. las exportaciones de gas el índice fue de 54,9,
lo que significa que el deterioro de precios fue 771
En efecto, las exportaciones, que alcanzaron mayor para el gas que para las exportaciones en
niveles récord en la historia económica del general. El índice de volumen, en los mismos
país, permitieron también un incremento sus- años, pasó de 2012=100 a 2018=220,5 para las La industrialización
boliviana
tancial de las importaciones, siguiendo la ten- exportaciones totales y de gas a 2018=103,8. en contextos
de adversidad
dencia alcista de las primeras. Los datos anteriores muestran que las expor- 1900-2020
Gráfico 3
Cuenta corriente y saldo de balanza de mercancías
(Millones de dólares)
15.000,0
10.000,0
5.000,0
0,0
2000
2001
2002
2003
2004
2005
2006
2007
2008
2009
2010
2011
2012
2013
2014
2015
2016
2017
2018
(5.000,0)
Gráfica 4
Tomo I Participación de la Industria Manufacturera
1825-1952 % del PIB
17,50 17,28
17,11
17,00 16,74
16,71
17,03 16,62
16,54 16,88 16,86 16,45 16,48
16,50
16,52 16,51 16,56 16,18
16,34 16,33
16,22
16,00
15,50
2000
2001
2002
2003
2004
2005
2006
2007
2008
2009
2010
2011
2012
2013
2014 (p)
2015 (p)
2016 (p)
2017 (p)
Cuadro 16
Crecimiento porcentual del PIB e industria manufacturera
Bajo el debate
constitucional de
1938 que incorpora
el régimen social
Planta de la Empresa Estatal de Yacana-Complejo productivo textil, 2018. (1938-1952)
Fuente: Fotógrafo Christian Eugenio Calderón M.
773
Gráfica 5
Industria manufacturera participación porcentual
40% La industrialización
boliviana
35%
en contextos
30% de adversidad
25% 1900-2020
20%
15%
10%
5%
0%
Alimentos Bebidas Textiles, prendas Madera Productos Productos Otras industrias
y tabaco de vestir y productos de refinación de minerales manufactureras
y productos de madera del petróleo no metálicos
de cuero
Se debe notar el retroceso relativo de los sub- Las ramas con crecimiento, como la de los pro-
sectores de textiles y prendas de vestir, made- ductos minerales no metálicos, se explica por la
ra y otras industrias manufactureras. En estos mayor producción de cemento, ligado al boom
sectores están algunas de las cadenas identi- de la construcción que caracterizó este período.
ficadas en los gobiernos previos que tenían
potencialidades y debieron recibir atención de Pese al predominio de las exportaciones de gas,
parte de políticas públicas. el logro mayor de la industria manufacturera
boliviana en los últimos tiempos se relaciona de los otros grupos disminuyeron a partir de
con las exportaciones de productos industrial un máximo alcanzado en 2006 de 40 por cien-
manufactureros. De la producción o valor agre- to a 22 por ciento de las exportaciones de la
gado del sector, el componente dirigido al exte- industria manufacturera en 2012.
rior fue creciendo a una tasa superior que el PIB
sectorial. Las exportaciones del sector crecieron Adicionalmente, si consideramos que las expor-
entre 2000 a 2012 en 364 por ciento y el PIB taciones totales representaron en 2012 un 34
sectorial en 178 por ciento en términos nomi- por ciento del PIB, mientras que en 2000 sólo
nales. En 2003 las exportaciones de productos un 25 por ciento, y que respecto a 2000 la par-
industriales manufactureros llegaron a repre- ticipación del sector industrial en la generación
sentar un 53 por ciento del total exportado por del PIB no ha variado en torno al 17 por ciento,
el país, participación relativa que fue decrecien- nuestra conclusión es que, pese a la apariencia
do conforme las exportaciones de gas y minera- antes anotada, las exportaciones manufactureras
les fueron incrementando su valor e importan- representan, deducidos los insumos importados,
cia relativa. Para el año 2012 la participación del una menor proporción del valor agregado sec-
sector industrial manufacturero en el total de las torial, debido a que han incrementado su com-
exportaciones fue del 28 por ciento. ponente importado en mayor proporción que el
Un amor
crecimiento del valor de las exportaciones.
desenfrenado Casi el 80 por ciento de las exportaciones del
por la libertad
sector de la industria manufacturera en 2012 Estos cambios nos remiten a una reflexión
Antología de la
historia política provenía de dos grupos de actividad correspon- acerca de un retroceso en la diversificación de
de Bolivia
(1825-2020)
dientes a la Clasificación Industrial Internacio- la producción industrial, que se ha de mani-
nal Uniforme CIIU rev. 3: el 272, “Productos festar también en un retroceso respecto a las
774 Primarios de Metales Preciosos y Metales no importaciones. Hay un incremento del com-
Ferrosos” junto con el 151: “Procesamiento ponente importado de la producción nacional
Conservación de Carne, Pescado, Frutas, Le- en general y de la producción industrial ma-
Tomo I gumbres, Hortalizas, Aceites y Grasa”. nufacturera en particular. Las importaciones
1825-1952
para el sector industrial manufacturero, con-
En consecuencia, se puede decir que las expor- sistentes en insumos, materias primas y bienes
taciones del sector tienen una escasa transfor- de capital, constituyen un monto elevado de
mación y descontando al grupo 272 y al 151 las importaciones totales y superan a las ex-
mencionados, se tiene que las exportaciones portaciones del sector.
Gráfica 6
6.000
3.000
2.000
1.000
0
2000 2001 2002 2003 2004 2005 2006 2007 2008 2009 2010 2011 2012 2013 2014
ción de la moneda nacional. precios de 1990, de 178 millones de bolivianos Bajo el debate
constitucional de
en 2000 a 775 millones de bolivianos en 2011 y 1938 que incorpora
el régimen social
En el cuadro siguiente se puede observar que las a 714 millones en 2012 y en 2017 a 1.478 millo- (1938-1952)
exportaciones van a sufrir una fuerte caída en nes. Este incremento en la inversión del sector
el índice de precios, compensado por el índice público en la industria manufacturera fue resul- 775
de volumen, de manera que la disminución del tado de la compra y montaje de diversas plantas
valor de las exportaciones afectará sobre todo industriales en diferentes sectores.
al valor de las exportaciones de hidrocarburos, La industrialización
boliviana
mientras que las de minerales y no tradiciona- En el gobierno del MAS se crearon varias em- en contextos
de adversidad
les tendrán caídas del índice de precios, pero se presas y se tuvo una importante cantidad de 1900-2020
recuperarán a los niveles de 2012. Siendo que fondos para impulsar al sector productivo,
la ponderación de las exportaciones es mayor principalmente destinados a crear empresas
en el total, se tiene que afectaron al índice de públicas en diversos sectores. Mediante leyes
precios general de las exportaciones, compen- se autorizó que el Banco Central de Bolivia
sado por los volúmenes crecientes y las caídas (BCB), el Banco de Desarrollo Productivo
menos estrepitosas de las exportaciones de mi- (BDP), el Banco Unión y otras entidades na-
nerales y no tradicionales. cionales e internacionales (incluida la emisión
Cuadro 17
Índice de valor y volumen de las exportaciones tradicionales y no tradicionales
(Base 2012=100)
generación del PIB como algo positivo en sí mientos para enfrentarlas de forma realista, Bajo el debate
constitucional de
mismo, desplazando al sector privado en va- pero se realizaban de todas maneras. 1938 que incorpora
el régimen social
rias actividades para ampliar la participación (1938-1952)
del Estado en la generación del producto. El proceso de estatización enviaba señales ne-
gativas a la inversión privada, en particular la 777
En ese sentido se puede decir que el efecto generadora de actividad industrial, afectando
desplazamiento (crowding out) –ampliamente la capacidad de producción y de suministro
teorizado en la teoría macroeconómica– fue a los mercados de exportación y al mercado La industrialización
boliviana
un resultado buscado deliberadamente como interno. Esta situación afectó a todos los sec- en contextos
de adversidad
lo reafirmaron en varias intervenciones los tores y en particular al sector industrial manu- 1900-2020
Este pensamiento ideológico del MAS no era Al mismo tiempo, la inversión pública que de-
proteccionista en el sentido estricto de tal bía asumir un rol dinamizador desde la pers-
Un amor
doctrina económica, porque no se combinó pectiva del modelo productivo de economía
desenfrenado con políticas públicas de transformación pro- plural, no se produjo con eficiencia, efectivi-
por la libertad
ductiva o de protección selectiva del mercado dad ni racionalidad económica. En efecto, las
Antología de la
historia política interno, es decir con políticas industriales que adquisiciones de instalaciones privadas bajo el
de Bolivia
(1825-2020)
acompañaran ese proteccionismo. Además, nombre de nacionalización, por ejemplo, el
las importaciones gozaron de amplia libertad caso de las refinerías, significaron una mala
778 para realizarse. asignación de los recursos ya que, consideran-
do que tarde o temprano se tendría que in-
La estructura arancelaria se modificó durante demnizar a los antiguos propietarios, se pudo
Tomo I el gobierno del MAS hacia un promedio bajo y, haber adquirido refinerías nuevas al mismo
1825-1952
paralelamente, se desarrollaron nuevas prácti- precio y duplicar la capacidad instalada en el
cas permisivas, como la elevación del monto país. Asimismo, las acciones jurídicas para la
de importación que no se consideraba contra- indemnización de las empresas nacionalizadas
bando de 10.000 a 200.000 UFV, es decir, de o expropiadas significaron tensiones y dificul-
1.500 a más de 30.000 dólares. Asimismo, para tades financieras para el país.
frenar las presiones inflacionarias, el gobierno
de Evo Morales decretó la libre importación Con el fin de acelerar la reactivación econó-
de varios productos alimenticios y de consumo mica el gobierno del MAS emitió decretos con-
popular. También, se produjo una expansión formando fideicomisos millonarios, eliminan-
del contrabando, que podría estar relacionada do los procedimientos de control y licitación
con la desintitucionalización y politización de transparente de esos recursos. Fue creado el
la administración aduanera. Banco de Desarrollo Productivo con recursos
provistos por gobiernos y organismos interna-
Si algo caracterizó a dicho gobierno en cuanto cionales, además de los proporcionados por el
a la generación de un ambiente de negocios Banco Central, sin transparencia y controles
fue la constante incertidumbre y adversidad adecuados.
respecto al emprendimiento de la inversión
privada. El discurso amenazante y la acción El costo de oportunidad en el que se incurrió
contraria respecto a instituciones como la con inversiones públicas en sectores de baja
propiedad privada, el Estado de Derecho, la productividad, con poco impacto en el empleo
productivo, junto con la ineficiencia caracte- decir porque se hizo casi nada. La creación del
rística del sector público boliviano, acrecen- Viceministerio de Ciencia y Tecnología, como
tada por la improvisación y el manejo político parte del Ministerio de Educación y no del de
poco transparente, dejaron serias dudas sobre Desarrollo Productivo y Economía Plural, así
el mentado rol estratégico del Estado en el como el presupuesto asignado a esa dependen-
nuevo “Modelo Nacional Productivo”. cia, dan cuenta de la orientación de la política
pública respecto al tema, alejada de los temas
De otro lado, síntomas de la enfermedad ho- fundamentales de la política industrial que hoy
landesa (que consiste en una situación del se impulsan para adquirir ventajas de conoci-
mercado de sobreoferta de divisas que encare- miento y entrar en dinámicas de aprendizaje
ce la moneda nacional y eleva los costos de las de base ancha, elevando la productividad y los
exportaciones y abarata las importaciones), así ingresos.
como la ausencia de políticas para promover
al sector productivo nacional, constituyeron la
combinación explosiva que llevó a un deterio- 7. Perspectivas de la industria boliviana
ro de los sectores transables (exportadores no
tradicionales y que sustituyen importaciones) La nueva situación demográfica de Bolivia,
especialmente el industrial y la tendencia a re- compuesta en su mayoría por personas en edad
forzar el extractivismo y el rentismo. de trabajar, representa oportunidades para que Tercer periodo
recurso humano. y precarización del empleo por falta de trans- Bajo el debate
constitucional de
formaciones e inversiones. 1938 que incorpora
el régimen social
La política industrial tiene además el desafío (1938-1952)
emergente de la crisis del Covid-19 y sus efec- Así, los contingentes de jóvenes que se in-
tos recesivos, que va a sumir en mayor pobreza corporan cada año a la población económica- 781
a nuestra economía, pero que debe ser gestio- mente activa continúan sin encontrar opcio-
nada mediante la búsqueda de opciones en la nes de trabajo bien remunerado y de mayor
nueva economía mundial, que está cambiando productividad, refugiándose en la informali- La industrialización
boliviana
radicalmente. dad del sector de comercio ambulante y sec- en contextos
de adversidad
tores similares. 1900-2020
Un amor
_____. 1988. Seminario internacional sobre “Po- ger-term Program Engagement _ Staff re-
desenfrenado lítica industrial para Bolivia”. La Paz: CNI port and public information notice on the
por la libertad
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(1825-2020)
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Tercer periodo
Un amor
desenfrenado
por la libertad
Antología de la
historia política
de Bolivia
(1825-2020)
784
Tomo I
1825-1952
Minería y desarrollo económico en Bolivia, 1825-1950
¿Valía Potosí, un Potosí?1
José A. Peres-Cajías
Universitat de Barcelona
E
constitucional de
l actual espacio económico boliviano tal; mediterraneidad; rentismo. 1938 que incorpora
el régimen social
ha estado vinculado con la economía (1938-1952)
mundial desde principios del período
colonial, cuando Potosí adquirió fama mun- Introducción 785
dial gracias a su preponderancia como pro-
ductor de plata. Dicha importancia está muy “Con toda la plata que fue enviada de Poto-
presente en el sentido común de los bolivianos. sí a España, se podría construir un puente de Minería y desarrollo
económico
Éste, sin embargo, se alimenta muchas veces plata y otro de huesos”. Es muy probable que en Bolivia,
1825-1950
de prejuicios o ideas refutadas por la historio- un turista escuche esta frase en alguna de sus ¿Valía Potosí,
un Potosí?
grafía. Bajo este contexto, el objetivo de este visitas a las minas o a los monumentos histó-
artículo es analizar cómo cambió la impor- ricos que persisten en Potosí. Esta frase hace
tancia económica de Potosí y de la minería en referencia a dos elementos que tienden a estar
general desde las últimas décadas del perío- muy presentes en el sentido común de los bo-
do colonial hasta 1950. Luego, se analiza la livianos: la importancia económica que tuvo
capacidad que tuvo el sector de consolidarse Potosí durante el período colonial y la noción
como motor de crecimiento y desarrollo de que, a través de la imposición de un sistema de
la economía boliviana en su conjunto, iden- explotación, esa centralidad económica no fue
tificando aquellos ámbitos en los cuales hubo aprovechada por la gente local, sino por una
cambios positivos y aquellos en los que no. potencia extranjera. En última instancia, ello
Estos elementos son analizados bajo la lupa se asocia con la noción de que el país se halla
de diferentes hipótesis explicativas surgidas beneficiado con una enorme riqueza natural
en la historiografía latinoamericana en los úl- que termina beneficiando a otros.
timos años.
Este supuesto de partida estuvo también pre-
sente en las principales corrientes de pensa-
1 El autor agradece los comentarios de Manuel Con-
treras e Iván Velásquez a una versión anterior de miento y en las principales obras de historia
este trabajo. económica publicadas en América Latina en
las décadas de 1960 y 1970.2 En efecto, si bien (1820s-1850s) fueron las primeras “décadas
existen diferentes grados de complejización pérdidas” de América Latina (Haber 1997;
teórica y matices heterogéneos, se planteaba Bates, Coatsworth y Williamson 2007). A
que la historia económica de América Latina medida que se ha ido generando más evi-
se caracterizaba por una especialización en la dencia empírica y el foco de comparación
exportación de recursos naturales cuyos bene- se ha ampliado hacia otras regiones, el con-
ficios terminaban por favorecer desproporcio- senso actual remarca ante todo la existencia
nadamente a las economías del centro. Estas de historias muy heterogéneas (Prados de la
ideas comenzaron a cuestionarse a principios Escosura 2009; Bértola y Gerschunoff 2011).
de la década de 1980 y, en el caso de la mi- Por ejemplo, se contrasta una rápida recupe-
nería de Potosí, fue fundamental la obra de ración en las economías del Cono Sur, como
Assadourian (1982). De acuerdo a este autor, la argentina y la chilena, frente a las dificul-
la exportación de plata de Potosí a España no tades por rencontrar un dinamismo estable
sólo dinamizó la economía mundial, sino que en aquellas economías que fueron centrales
también generó una vibrante economía regio- durante el período colonial, como México y
nal donde Potosí actuaba como centro de gra- Bolivia (Coastworth 1993).
vedad económica; ello gracias al tamaño de su
Un amor
población y a la producción de circulante mo- Se ha revisado también si la integración de las
desenfrenado netario. Así, regiones tan distantes como el sur economías latinoamericanas a los mercados
por la libertad
ecuatoriano, el norte argentino o Santa Cruz internacionales durante el período 1850-1929
Antología de la
historia política respondían a los incentivos generados por la generó meros enclaves económicos o si, por
de Bolivia
(1825-2020)
economía potosina y vivían de acuerdo a las el contrario, el crecimiento del sector exter-
pulsaciones de la misma. no tuvo un impacto positivo sobre el resto de
786 la economía (Haber 2006; Bulmer-Thomas
En la década de 1990 y a lo largo del siglo XXI 1995). Una vez más, resalta ante todo la exis-
se han publicado diferentes obras donde tam- tencia de experiencias heterogéneas, con paí-
Tomo I bién se cuestiona la idea de que las continuas ses que contaban con sectores exportadores
1825-1952
exportaciones de recursos naturales sólo be- dinámicos y un mercado interno que tendía
neficiaron a las economías del centro. Por un a la industrialización, tales como Argentina y
lado, bajo la sombra de la crisis de la deuda de México, y otros países con un sector exporta-
1980, muchos historiadores se preguntaron dor concentrado y poco dinámico, como Co-
si las primeras décadas post-Independencia lombia y Bolivia (Kuntz-Ficker 2017).
2 También estuvo presente en obras de divulgación Así, el revisionismo que se dio en las últimas
amplia que fueron muy populares en esas décadas. décadas no cambia necesariamente la valo-
Por ejemplo, en Las venas abiertas de América Latina, ración ante todo pesimista del efecto que las
Galeano afirma: “Aquella sociedad potosina, enfer-
exportaciones de recursos naturales pudieron
ma de ostentación y despilfarro, sólo dejó a Bolivia
la vaga memoria de sus esplendores, las ruinas de tener sobre el comportamiento de la econo-
sus iglesias y palacios, y ocho millones de cadáveres mía boliviana. Con base en estos anteceden-
de indios. Cualquiera de los diamantes incrustados tes, el objetivo de este capítulo es presentar y
en el escudo de un caballero rico valía más, al fin
discutir la evidencia empírica disponible para
y al cabo, que lo que un indio podía ganar en toda
su vida de mitayo, pero el caballero se fugó con los entender cómo evolucionaron las exportacio-
diamantes. Bolivia, hoy uno de los países más po- nes bolivianas en el período 1825-1950; es
bres del mundo, podría jactarse –si ello no resultara decir, se trata de identificar qué pasó duran-
patéticamente inútil– de haber nutrido la riqueza
te la República con ese Potosí que dinamizó
de los países más ricos. En nuestros días, Potosí es
una pobre ciudad de la pobre Bolivia…” (Galeano, la economía colonial. En segundo lugar, se
1971: 51). ofrece evidencia empírica para entender cuál
pudo ser la capacidad de arrastre de esas ex- en Oruro, el segundo distrito minero en impor-
portaciones mineras a lo largo del tiempo. En tancia, tendió a hacerse marginal entre finales
particular, se presta atención a los efectos de la del siglo XVIII y las primeras décadas del siglo
minería sobre la construcción de la capacidad XIX, cuando llegó a equivaler a menos del 10%
fiscal estatal. Ésta hace referencia a la capaci- de la producción potosina (véase, por ejemplo,
dad del Estado de recaudar ingresos públicos Gavira Márquez 2006).
para después ofrecer bienes y servicios públi-
cos que son fundamentales para el desarrollo Una primera idea que debe quedar clara cuan-
económico, tales como escuelas, infraestruc- do se analiza la producción de plata en Potosí
tura o políticas de fomento económico. es que la fama mundial de este distrito minero
deriva ante todo de lo sucedido durante la pri-
mera parte de la colonia (Gráfico 1). En efecto,
1. La minería en las primeras décadas fue durante las últimas tres décadas del siglo
post-Independencia3 XVI y las dos primeras del XVII, que la cre-
ciente producción minera en Potosí fue fun-
El objetivo de esta sección es analizar la evo- damental para dinamizar la economía mundial
lución de la producción y exportación de plata y consolidar el “espacio económico peruano”
durante las primeras décadas post-Independen- (Assadourian 1982).5 Fue también durante
cia (1820s-1860s) y el impacto que las mismas este período que la producción minera en Po- Tercer periodo
pudieron tener sobre el resto de la economía. tosí era la más importante de todo el Imperio Bajo el debate
constitucional de
La concentración en la plata se explica por Español. Sin embargo, este dinamismo se fue 1938 que incorpora
el régimen social
nuestro interés en entender qué pasó con la ralentizando a medida que fue pasando el siglo (1938-1952)
producción de plata potosina en el período XVII y no se recuperó sino hasta la segunda
republicano. Además, hablar de la plata poto- mitad del siglo XVIII (Tandeter 1992). A pesar 787
sina implica hablar del principal producto de de esta recuperación, la producción minera en
exportación boliviano: si bien no existen series Potosí durante las últimas décadas del período
que presenten de manera sistemática la com- colonial continuó a la zaga de la producción Minería y desarrollo
económico
posición de las exportaciones bolivianas duran- mexicana y no tuvo el dinamismo de la pro- en Bolivia,
1825-1950
te el siglo XIX (Peres-Cajías y Carreras-Marín ducción peruana. ¿Valía Potosí,
un Potosí?
2017), las referencias de la época y los datos
sueltos existentes remarcan que la plata –ya sea Lo anterior se entiende si se considera que el
en piñas o acuñada– fue el principal producto boom minero de la segunda mitad del XVIII
de exportación boliviano. Por ejemplo, se sabe no derivó de cambios tecnológicos profundos
que representó el 85% del total exportado en o de grandes inversiones que pudieran asegu-
1826 y 1848 (Dalence, 1851: 268; Pentland, rar su sostenibilidad económica. Más bien, el
1975: 124).4 Asimismo, la producción minera boom fue resultado del aprovechamiento de
los sueltos y desmontes acumulados por más
3 Esta sección se basa en el ensayo inédito “Potosí
de dos siglos de explotación, y estuvo en gran
ya no valía un Potosí. El impacto económico de la medida determinado por diferentes subvencio-
independencia en Bolivia” que fue presentado en la nes brindadas por la Corona a los productores
Sesión Plenaria “El impacto económico en España y
Latinoamérica de las independencias de las colonias
y la revolución liberal”, que tuvo lugar en el X Con- 5 La producción de plata en Potosí, en particular,
greso Internacional de la Asociación Española de y en América, en general, fue fundamental para
Historia Económica realizado el 2011 en Carmona. consolidar las bases del sistema monetario interna-
4 Otros productos de exportación que alcanzaron cional y del comercio mundial. Respecto al primer
cierta relevancia durante este período fueron el co- punto, véase Marichal (2006). Respecto a la impor-
bre y la quina. Véase Barragán, Lema, Mendieta, & tancia de la plata en la conexión comercial entre
Peres-Cajías (2015: 53-55, 61-63). Europa y Asia, véase: Glahn (2019).
Gráfico 1
Producción anual media de plata en Bolivia (marcos de plata, promedios decenales), 1550-1910
1.800.000
1.600.000
1.400.000
1.200.000
1.000.000
800.000
600.000
400.000
200.000
0
1550-59
1560-69
1570-79
1580-89
1590-99
1600-09
1610-19
1620-29
1630-39
1640-49
1650-59
1660-69
1670-79
1680-89
1690-99
1700-09
1710-19
1720-29
1730-39
1740-49
1750-59
1760-69
1770-79
1780-89
1790-99
1800-09
1810-19
1820-29
1830-39
1840-49
1850-59
1860-69
1870-79
1800-89
1890-99
1900-09
Un amor
desenfrenado Fuente: Klein (2011: Apéndice 1).
por la libertad
Antología de la
historia política mineros (Buechler 1989). Bajo este contexto, eran similares a los de 1836. Más aún, en 1850
de Bolivia
(1825-2020)
Potosí entró en una crisis de larga duración los niveles de producción eran inferiores a
hacia principios del siglo XIX, cuando una los de 1830. Desde una perspectiva diferente,
788 sequía y problemas en el abastecimiento de Langer (2021) sostiene que las cifras de pro-
mercurio (materia prima fundamental para el ducción no recogen el dinámico contrabando
tratamiento de la plata) obligaron a parar la de plata que se dio durante estas primeras dé-
Tomo I producción minera. Así, la producción minera cadas post-Independencia. De acuerdo a sus
1825-1952
en Potosí comenzó a caer antes de la Indepen- estimaciones, el contrabando de plata podría
dencia (1825). haber representado entre el 25 y 30% de las
cifras oficiales de producción en las décadas de
Existe un debate en la historiografía bolivia- 1840 y 1850. Así, la crisis en la minería potosi-
na en torno a la duración y profundidad de la na podría haber sido inferior a lo sugerido por
crisis en la minería de la plata.6 Por un lado, los datos existentes.
Mitre (1981) propone que la crisis minera se
extendió hasta finales de la década de 1860. La propuesta de Langer (2021) incorpora
Frente a esta posición, Platt (1996) sostiene nuevos elementos en la discusión y matiza la
que existió un primer período alcista durante magnitud de la crisis. Sin embargo, la nueva
la década de 1830 que no se debería obviar. evidencia no contradice un hecho que creemos
Sin embargo, el análisis detallado de las cifras fundamental cuando analizamos el Gráfico 1:
proporcionadas por el autor muestra que el ci- no fue hasta inicios de la década de 1870 que
clo alcista se restringe al período 1836-1840 la producción minera pudo superar de manera
y que ya hacia 1846 los niveles de producción sostenible los niveles de producción del último
boom colonial. Por ello, es relevante enten-
der por qué los niveles de producción de plata
6 En los siguientes párrafos se resumen algunos de fueron sistemáticamente más bajos durante las
los argumentos de este debate. Para más detalles,
véase la segunda sección en el artículo de Nigel
primeras décadas post-Independencia que du-
Caspa que forma parte de esta colección. rante el último boom colonial.
Tercer periodo
Bajo el debate
constitucional de
1938 que incorpora
el régimen social
(1938-1952)
789
Crecimiento
Crecimiento poblacional
Pob. c. 1820 Pob. c. 1850 Pob. c. 1900 poblacional
c. 1820-1900
c. 1820-1850
Argentina
Buenos Aires 55,416 90,076 663,854 1.48 3.37
Córdoba 10,000 15,000 47,609 1.36 2.10
Salta 6,000 8,000 16,692 0.78 1.37
Santa Fe 6,980 6,102 22,244 -0.34 1.56
Tucumán 5,000 12,475 34,305 2.31 2.60
Perú
Arequipa 25,000 25,000 35,000 0.00 0.48
Cerro de Pasco 5,000 7,000 7,000 1.09 0.48
Lima 64,628 94,195 103,956 1.26 0.68
Bolivia
La Paz 40,000 42,849 52,697 0.33 0.37
Cochabamba 30,000 30,396 21,886 0.06 -0.42
Oruro 4,600 5,687 15,898 1.02 1.67
Un amor
desenfrenado
Potosí 9,000 16,711 20,910 2.99 1.13
por la libertad Sucre 12,000 19,235 20,907 2.27 0.74
Antología de la Fuente: Davis (1973) para población en las ciudades argentinas y peruanas; Sagredo y Barragán (2008) para población en ciudades bolivianas.
historia política
de Bolivia
(1825-2020)
ciudades peruanas y bolivianas consideradas llamar la hipótesis de la aptitud natural. Una
790 en la muestra. No obstante, ello es en parte hipótesis donde las variables críticas son tres:
resultado de la existencia de puntos de partida lotería de bienes, localización geográfica y el
bajos hacia 1820. Además, este mayor creci- impacto de las guerras de la Independencia.
Tomo I miento no hizo que ni la población de Potosí
1825-1952
ni la de Oruro, superasen en número de ha- La lotería de bienes hace referencia a los dife-
bitantes tamaño a otras ciudades como Lima, rentes tipos de recursos naturales con los que
Arequipa, La Paz o Cochabamba. cada país de América Latina contaba y con la
demanda que dichos bienes tenían en los mer-
Gelman explica la divergencia entre las econo- cados internacionales. En el caso de Bolivia,
mías argentina y peruana de la siguiente ma- esta variable no sería crítica para entender la
nera: “El Perú, entonces, tenía menos aptitud crisis en Potosí ya que la demanda de plata se
‘natural’ en esta etapa para alterar sus patrones mantuvo relativamente estable entre 1820 y
económicos coloniales que la Argentina, bien 1870, tal como se refleja en la evolución del
ubicada en las rutas internacionales (…) dis- precio internacional de este bien. Asimismo, si
ponible para producir bienes demandados por se estiman los términos de intercambio boli-
las economías del norte” (Gelman 2009: 59). vianos como el ratio entre el precio de la plata
Así, para el autor, el desafío de las economías (Mitre 1981: Apéndice 1) y el Índice de Pre-
del antiguo espacio económico peruano en la cios de Exportación británico (Mitchell 1988:
post-Independencia fue transitar de econo- 256), no se observa ningún empeoramiento en
mías centradas en el mercado interno colonial, los términos de intercambio sino, más bien,
a economías capaces de aprovechar el dina- cierta mejora entre 1830 y 1870.
mismo de los mercados internacionales, par-
ticularmente el generado por las economías En contraste, las otras dos variables propues-
nor-atlánticas. Propone así lo que podríamos tas por la hipótesis de la aptitud natural (la
guerra y la localización geográfica) sí ten- puerto hasta la capital de diferentes países de
drían una mayor relevancia para entender América Latina, siendo el costo en Bolivia
la duración de la crisis en la minería potosi- uno de los más elevados de la región (Prados
na. Respecto a la guerra, es evidente que el de la Escosura 2009: 291).7
escenario de partida de la minera potosina
republicana no era auspicioso luego de más Si bien la guerra y la existencia de elevados
de quince años de enfrentamientos (1809- costos de transporte explican en parte la du-
1825). Éstos se tradujeron en la destrucción ración de la crisis de Potosí, la recuperación
de capital físico y agravaron el problema re- minera potosina antecedió a la llegada del
lativo a la inundación de las minas potosinas ferrocarril (1888). Por tanto, en un contexto
(Pentland 1975). Las secuelas de la guerra se de costos de transporte más o menos constan-
dejaron sentir incluso dos décadas después de tes, es necesario aún explicar la existencia de
su finalización: en la década de 1840 se esti- saltos significativos en la producción minera.
mó que alrededor de dos tercios de las 10.000 En este sentido, resulta útil revisar también la
minas abandonadas contenían plata, pero se- hipótesis institucional que remarca que para
guían inundadas (Dalence, 1851: 260-261). entender la crisis de la post Independencia no
Así, el potencial comercial generado por la se deben considerar solo los costos directos de
lotería de bienes fue en parte restringido por la guerra (destrucción de capital físico, capital
los efectos directos de las guerras indepen- humano e infraestructuras), sino también los Tercer periodo
¿Permitió la depreciación al menos mantener de una serie de crisis de subsistencia que se re- Bajo el debate
constitucional de
la persistencia del espacio económico perua- pitieron hasta inicios del siglo XX (Henriques 1938 que incorpora
el régimen social
no? Como se comentó previamente, Mitre 2015; Larsson 1988: 288-291).11 En este senti- (1938-1952)
menciona que gracias a la depreciación mo- do, la escasa urbanización, la existencia de po-
netaria “…durante un buen tramo del siglo cos productos comerciales que no presentaron 793
XIX existió, entre los países del área andina, grandes cambios tecnológicos y la existencia
un espacio mercantil articulado por la moneda de malas vías de comunicación, limitaban la
de Potosí y cuyas fronteras, simplemente, no expansión del mercado interno. Minería y desarrollo
económico
se ajustaban al territorio controlado por cada en Bolivia,
1825-1950
uno de los Estados individualmente” (Mitre, Los límites de la economía boliviana post-in- ¿Valía Potosí,
un Potosí?
1986: 16). Sin embargo, sobrevivencia no im- dependiente son también claros cuando se ana-
plica vitalidad. Por ejemplo, al contrario de liza la evolución de las manufacturas textiles.
lo acontecido durante la colonia, las importa-
ciones bolivianas procedentes de países limí-
11 A la hora de analizar la capacidad de arrastre de la
trofes no significaron más del 20% del total minería potosina sobre las diferentes economías
importado ni en 1825, ni en 1840, ni en 1880 regionales, es importante considerar que en su hi-
(Dalence 1851: 273-274; Pentland 1975: 112, pótesis original Assadourian (1982) reconoce que,
al mismo tiempo que existían espacios altamente
120; veáse también Memoria del Ministerio
vinculados y monetizados, existían también am-
de Hacienda de 1880). Al respecto, tal como plios espacios ajenos a esta dinámica. Igualmente,
se vio en la Tabla 1, Prado (1995) remarca que la capacidad de arrastre de la minería potosina y la
el clásico espacio económico peruano tendió a fortaleza del mercado interno fue variable a lo largo
del tiempo, siendo mucho más marcada al princi-
ser un espacio cada vez más marginal a lo largo
pio del período colonial y un tanto más débil hacia
del siglo XIX. finales, cuando la presión de los productos de con-
trabando de otras potencias europeas comenzaba a
Asimismo, nótese que, hacia mediados de la dé- sentirse. De todas maneras, incluso en el último pe-
cada de 1840, como máximo el 11% de la po- ríodo colonial, se plantea que 80% de los productos
que se comerciaban en el espacio económico perua-
blación censada podía ser calificada como po- no provenían de las economías regionales internas
blación urbana (Dalence 1851: 178-179). Esta (Tandeter 1999).
Durante la colonia, Cochabamba y, en menor que exportaban ilegalmente su propia produc-
medida, La Paz, fueron importantes centros ción y/o la producción que recolectaban de
productores de telas y vestimenta destinados pequeños productores y recolectores mineros.
a los sectores populares. Este protagonismo En ambos casos, el contrabando generaba in-
comenzó a mermar antes de la Independencia gresos a pobladores indígenas (ya sea gracias a
y se consolidó durante las primeras décadas la venta o transporte del mineral, ver también
post-independiente. Por ejemplo, las cente- Langer 2009) que luego eran redistribuidos
nas de obrajes existentes durante la colonia se dentro de las comunidades indígenas. En el
redujeron a unas cuantas decenas hacia 1846 segundo caso, el contrabando dinamizaba la
(Dalence 1851). Las referencias contemporá- acumulación de capital de grandes comercian-
neas al respecto son diversas y ubican en la im- tes o productores mineros.
portación de telas extranjeras la principal cau-
sa del fenómeno (Aldeano 1994). Al respecto, ¿Significa esto que el mercado interno boli-
se debe considerar que a pesar de la existencia viano presentaba ese dinamismo alguna vez
de tres tipos diferentes de protección comer- reclamado por Mitre? Si bien el debate se
cial –costos de transporte elevados, protección ha abierto de nuevo, es difícil pensar que el
arancelaria y protección cambiaria- las impor- contrabando tuviese un efecto permanente
Un amor
taciones de textiles no hicieron más que crecer a nivel macroeconómico. De hecho, Langer
desenfrenado al menos hasta 1860 (Huber Abendroth 1994). (2021) recalca que el arrastre económico del
por la libertad
Por tanto, el desplazamiento de la producción contrabando afectaba al rectángulo situado
Antología de la
historia política local por parte de las importaciones externas entre Oruro, Salta y la costa del Océano Pa-
de Bolivia
(1825-2020)
sería resultado no tanto de políticas comercia- cífico. No obstante, se hace referencia a un
les liberales (como muchas veces ha tendido a fenómeno que es clave para entender la recu-
794 asumirse), sino de significativas diferencias en peración de la minería de la plata: la progre-
términos de productividad. siva acumulación de capital gracias a la explo-
tación agrícola y al comercio (legal e ilegal)
Tomo I Frente a esta sensación de crisis y estanca- de una nueva elite que progresivamente irá
1825-1952
miento, la reciente investigación de Langer invirtiendo directamente en la explotación de
(2021) subraya que el contrabando de plata minas.
durante las primeras décadas post-Indepen-
dencia tuvo efectos multiplicadores positivos Esta inversión se generalizó en la década de
sobre el resto de la economía. Para entender 1850 y se vio beneficiada por otros dos shoc-
estos efectos multiplicadores se debe conside- ks externos (Klein 2011). Por un lado, la fiebre
rar la existencia de dos tipos de contrabandis- del oro en California y el descubrimiento de
tas o sistemas de contrabando. Por un lado, mercurio en esa región, incrementó la compe-
aquellos formados por los kajchas y jucos que tencia entre los actores privados que controla-
trabajaban en las minas de medianos y grandes ban su comercialización en América del Sur, lo
propietarios o que explotaban independiente- cual llevó a la caída de su precio (Mitre, 1981:
mente determinados parajes en minas que ha- 119-121). Por otro lado, el boom del guano y
bían sido descubiertas durante la colonia.12 Por de los nitratos en las costas peruana y chilena
otro lado, el grupo de grandes contrabandistas dinamizó la llegada de inversores extranjeros
y de nuevas tecnologías que, indirectamente,
afectaron a la minería potosina. La nueva clase
12 Los kajchas fueron la fuerza de trabajo predomi- emergente minera aprovechó este proceso en-
nante durante el siglo XIX. Estos eran trabajadores
dógeno de acumulación de capital y estos dos
indígenas que se dedicaban al trabajo agrícola pero
que también tenían experiencia en el trabajo de las shocks externos para invertir en la recupera-
minas. ción de las minas y en la introducción de nuevas
tecnologías, lo cual redinamizó la minería po- el caso boliviano, los intereses políticos de los
tosina y consolidó una nueva elite minera.13 productores mineros se consolidarían en la
década de 1870 y a lo largo de esta década y
Este proceso tuvo también efectos políticos principios de la de 1880 se sucedieron refor-
importantes. Por un lado, fortaleció las de- mas estructurales, tal como se verá en la si-
mandas de los principales productores mine- guiente sección.
ros en torno a la liberalización de las exporta-
ciones de minerales (un proceso que comenzó
a fines de la década de 1850 y que se consoli- 2. El despegue de la minería
daría a principios de la de 1870) y el fin de la de la plata y ¿la traición de las elites?
emisión de la moneda feble (ver abajo). Por
otro lado, la dinamización de la minería en el El gráfico 1 muestra que la producción de pla-
altiplano y la explotación de recursos naturales ta superó desde la década de 1870 los niveles
en la costa, ofrecieron alternativas fiscales (si de producción del último boom colonial. Este
bien aún insuficientes) a un Estado que depen- proceso estuvo en gran medida determinado
día de la contribución indigenal. En la medida por inversiones nacionales e internacionales
que esta dependencia fiscal se reducía, el Esta- que, de acuerdo a Mitre (1981), se vieron di-
do podía quebrar el denominado pacto de re- namizadas por dos importantes cambios le-
ciprocidad (Platt 1982). En este sentido, no es gislativos: la eliminación del monopsonio de Tercer periodo
casual que las primeras leyes de ex-vinculación la plata y el fin de la emisión de la moneda Bajo el debate
constitucional de
y de privatización de las tierras comunales se feble, dos medidas ampliamente defendidas 1938 que incorpora
el régimen social
hubiesen dado en la década de 1860. por el sector minero desde mediados del siglo (1938-1952)
XIX. Además de estas inversiones, el auge ex-
Así, la experiencia boliviana confirmaría la hi- portador minero estuvo inicialmente apoyado 795
pótesis de Coastworth (1993) en torno al fin en la elevada ley del mineral y, desde 1889, en
de la crisis post-Independencia en América los beneficios generados por el ferrocarril (ver
Latina. Ésta resalta que la consolidación de abajo). A pesar de ello, las exportaciones de Minería y desarrollo
económico
un producto de exportación permite la esta- plata comenzaron a caer hacia 1893 cuando, en Bolivia,
1825-1950
bilización de la economía y el fin de la ines- en un contexto donde eran necesarias nuevas ¿Valía Potosí,
un Potosí?
tabilidad política pues uno de los grupos en inversiones, las ganancias generadas por el fe-
disputa cuenta con las rentas suficientes para rrocarril fueron insuficientes para compensar
imponerse sobre las demás. Una vez que uno la caída sustancial del precio internacional de
de estos grupos se consolida, existe la posibi- la plata.
lidad de imponer reformas estructurales. En
El auge minero en las montañas del departa-
mento de Potosí coincidió con el auge de la
13 Los actores más representativos de esta elite (cono- explotación de nitratos y guano en el litoral
cida después como los “Patriarcas de la Plata”) fue-
ron Aniceto Arce, Gregorio Pachecho y Felix Ara- boliviano y el de la plata en Caracoles. Estos
mayo. Por razones de espacio, no explico en detalle procesos se iniciaron a finales de la década de
los orígenes y el desarrollo empresarial de cada uno 1850 y fueron sumamente dinámicos durante
de estos actores. Sin embargo, el lector puede revisar
la década de 1870, pero fueron aprovechados
un resumen que elaboré previamente en una sección
del Tomo IV de la colección Bolivia, su historia, ela- ante todo por empresas extranjeras (inglesas,
borada por la Coordinadora de Historia (ver Ros- estadounidenses y chilenas). Más aún, fue-
sana Barragán et al. 2015, en concreto las páginas ron procesos basados ante todo en el trabajo
154-156). Toda esta colección se halla digitalizada y
de mano de obra chilena, la cual era mayori-
puede ser libremente obtenida a través de este en-
lace http://historiabolivia.org.bo/publicacion/?pu- taria en la región. Asimismo, la capacidad de
b=9&c=1 (11/12/2020, último acceso). control del Estado boliviano en estas zonas se
Un amor
desenfrenado
por la libertad
Antología de la
historia política
de Bolivia
(1825-2020)
Tomo I hallaba sumamente restringida. Ello se hizo porque el Estado boliviano decidió firmar el
1825-1952
particularmente evidente en 1863 cuando, en tratado de 1866 con Chile, el cual determi-
un proceso de arbitraje que debía resolver la nó que la frontera entre Bolivia y Chile se
justicia boliviana en torno a una empresa chi- hallaba en el paralelo 24. El tratado también
lena, el Estado chileno decidió desconocer la estipulaba que todos los beneficios fiscales de
jurisdicción boliviana en Atacama. El Estado la producción de guano y de la exportación
chileno aducía que los territorios de Mejillo- minera que se desarrollase entre los parale-
nes, ricos en nitratos, formaban en realidad los 23 y 25 debía ser compartida entre am-
parte de su territorio (Klein 2011: 131-132). bos estados. Más aún, se determinó que las
importaciones chilenas que se internasen por
Diversas fuerzas políticas bolivianas reclama- Mejillones estarían libres de impuestos en te-
ron esta afrenta y defendieron la idea de ir a rritorio boliviano.
una guerra con Chile. No obstante, el éxito de
esta iniciativa estaba restringido por la escasa Un año antes, Bolivia había firmado un tra-
presencia, tanto del Estado como de ciudada- tado similar con Perú, el otro país con el que
nos bolivianos, en la región. Ello contrastaba compartía frontera en el Océano Pacífico. La
con la preponderancia de intereses chilenos y firma de este tratado estuvo determinada por
británicos que habían sido fundamentales en dos elementos críticos. Por un lado, por el
el desarrollo del puerto de Antofagasta y de hecho de que, a pesar de contar con puertos
la región desde finales de la década de 1850. propios, gran parte del comercio boliviano,
Estos elementos son críticos para entender sobre todo el de importación, transitaba por
Arica (en ese momento bajo soberanía perua- Estas restricciones al comercio boliviano se
na) (Fifer 1972). Por otro lado, por la depen- hicieron más evidentes durante y después de
dencia fiscal del Estado boliviano frente al tri- la Guerra del Pacífico (1879-1883), cuando se
buto indígena y el relativo estancamiento de consolidó la condición mediterránea de la eco-
los ingresos totales fiscales bolivianos en las nomía boliviana. Por ejemplo, dado el control
primeras décadas post-Independencia. En este chileno sobre los puertos tradicionalmente
contexto, el tratado permitía alivianar la penu- usados por el comercio boliviano, las exporta-
ria fiscal boliviana pues el gobierno peruano se ciones mineras tuvieron que ser enviadas por
comprometía a pagar un monto fijo de dinero una ruta más larga, la de Buenos Aires. Estos
(450.000 bolivianos) de manera anual. Dicho efectos de la guerra sobre los costos de tran-
monto equivalía al 20% de los ingresos totales sacción15 de las exportaciones bolivianas ayu-
del gobierno boliviano (Peres-Cajías, 2017). dan a entender el apoyo de los principales pro-
A cambio, el gobierno boliviano dejaba que ductores mineros a una rápida solución de la
todos los productos de ultramar que fuesen disputa con Chile. Más aún, los mineros recu-
destinados a Bolivia y que pasasen por Arica peraron un proyecto que había quedado trun-
debían pagar impuestos en Perú y de acuerdo co por la guerra: la conexión por tren entre la
a la normativa tarifaria peruana. Más aún, con zona productora minera boliviana y un puerto
el fin de evitar posibles procesos de arbitra- en el Pacífico. Así, en 1889 se inauguró la co-
je, las tarifas arancelarias en Cobija no podían nexión ferroviaria entre Antofagasta y Uyuni, Tercer periodo
ser más bajas que las peruanas. Finalmente, el conexión que sería posteriormente ampliada Bajo el debate
constitucional de
tratado estipulaba la eliminación de impuestos hasta Oruro (1892). Los ferrocarriles fueron 1938 que incorpora
el régimen social
de importación entre ambos países: la produc- fundamentales para mantener la expansión de (1938-1952)
ción peruana podría ser internada libremente las exportaciones plata bolivianas pues abara-
a Bolivia y viceversa. taban los costos de transporte y permitían ex- 797
portar los depósitos de baja ley acumulados en
Estos tratados fueron refrendados a inicios de las montañas (Mitre 1981).
la década de 1870 tanto con Perú (1870) como Minería y desarrollo
económico
con Chile (1874). Luego, en 1878, se introdu- En su viaje de ida, sin embargo, los trenes en Bolivia,
1825-1950
jeron algunos cambios en el tratado con Perú. traían importaciones que también ganaban en ¿Valía Potosí,
un Potosí?
Por un lado, se mantuvo la eliminación de competitividad. Este elemento es crítico para
aranceles entre ambos países, con la excepción entender la crisis que muchas economías re-
de las importaciones a Bolivia de alcoholes pe- gionales sufrirían durante las últimas décadas
ruanos que debían pagar 50 centavos por galón del siglo XIX y las primeras del siglo XX. En
importado. Por otro lado, se aceptó que Bolivia efecto, fue en esta época que se terminó de
podía cobrar sus propios aranceles e imponer resquebrajar el vínculo económico generado
sus tasas arancelarias pero que estas no podían por la expansión de la minería de la plata en
ser menores que las peruanas. Además, se de- Potosí sobre otras economías regionales del
finió que Bolivia debía pagar un impuesto de país. Por ejemplo, significó el cierre de los
5% por el tránsito de sus productos por terri- mercados de occidente para el azúcar cruceño
torio peruano. Esta política, que es una de las
restricciones típicas de los países mediterráneos
eliminaba los impuestos de tránsito que debían pa-
(Agramont y Peres-Cajías 2016), encarecía los gar los productos bolivianos. Una vez terminados
costos de tránsito de comercio boliviano.14 los enfrentamientos militares, se firmó un Pacto de
Tregua con Chile en 1884 que, entre otras medidas,
mantenía la libre importación de productos entre
14 En 1880, en plena Guerra del Pacífico, se firmó ambos países.
un nuevo tratado con Perú. Este mantenía la ex- 15 Aquellos costos relacionados con los pagos tributa-
cepción de aranceles entre ambos países, pero rios y con los costos de transporte.
o para diferentes manufacturas y productos de la vigorización de la minería de la plata:
procedentes de Cochabamba (Rodríguez Os- las exportaciones de plata eran gravadas con
tria 1994). un impuesto a las exportaciones, pero tam-
bién generaban las divisas que se usaban para
De acuerdo a la historiografía tradicional importar productos, los cuales eran también
boliviana, dicho proceso habría estado acen- gravados por el Estado. Los derechos de ex-
tuado por una política de apertura comercial portación sobre la plata se redujeron durante
total (laissez faire, laissez passer) propiciada por la crisis iniciada en 1893 con el fin de reducir
las nuevas elites políticas que se consolidaron la presión fiscal sobre el sector (Peres-Cajías
luego de la guerra del Pacífico (Rodríguez 2015). Desde entonces y hasta la década de
Ostria 2012; Mesa, Mesa y Gisbert 2012; Ca- 1930, los derechos de importación fueron la
jías y Cajías 1996). Sin embargo, dicha visión principal fuente de ingresos del Estado boli-
se halla en contraposición con una serie de in- viano (Peres-Cajías 2014).
vestigaciones que se han dado en otros países
de América Latina que muestran, más bien, A pesar de su motivación fiscal, se podría pen-
que la tasa arancelaria promedio16 en los paí- sar que los aranceles brindaron un efecto pro-
ses de la región se encontraban entre las más teccionista a la producción nacional. Ello no
Un amor
altas del mundo (Coatsworth y Williamson fue así porque, entre otras causas, la firma de
desenfrenado 2004). ¿Fue entonces Bolivia una excepción? tratados comerciales con países vecinos (co-
por la libertad
El Gráfico 2 muestra que no: la tasa arancela- mentados previamente) terminó generando un
Antología de la
historia política ria promedio boliviana se encontraba en nive- sistema arancelario dual. En efecto, gran parte
de Bolivia
(1825-2020)
les similares a las del resto de América Latina de los ingresos arancelarios bolivianos prove-
y estaba muy por encima de la de países asiá- nían de impuestos sobre productos provenien-
798 ticos, escandinavos y de Europa Occidental tes de ultramar, y gran parte de los productos
(Peres-Cajías 2017).17 importados desde Chile y Perú entraban libres
de impuestos. Por ejemplo, la Memoria del
Tomo I Esta tasa arancelaria promedio elevada no era Ministerio de Hacienda e Industria presenta-
1825-1952
necesariamente consecuencia de una política da a la legislatura de 1906, muestra las impor-
proteccionista. Más bien, estuvo determinada taciones bolivianas según origen e impuestos
en gran medida por la importancia fiscal de pagados (p. 52). Así, mientras el 15% de las
los impuestos aduaneros. En efecto, el Estado exportaciones alemanas o el 7% de las expor-
boliviano comenzó una transición fiscal des- taciones británicas estaban exentas del pago de
de impuestos coloniales a impuestos liberales aranceles, la ratio subía a 53% y 96% (!!!) en
a mediados de la década de 1860, cuando la el caso de las peruanas y chilenas. Así, se daba
re-dinamización del comercio internacional el caso que un mismo producto o un mismo
comenzaba a sostenerse. La transición fiscal tipo de producto terminaba pagando diferen-
se consolidó en 1872 cuando la contribución tes derechos según su procedencia. Esta poro-
indígena se descentralizó y los impuestos al sidad en el sistema arancelario boliviano era
comercio exterior se consolidaron como los ampliamente reclamada y reconocida por las
más importantes. Dicho proceso fue resultado propias autoridades bolivianas, tal cual puede
evidenciarse en diferentes Memorias del Mi-
16 La tasa arancelaria promedio se obtiene de la divi- nisterio de Hacienda emitidas en las décadas
sión de los impuestos de importación sobre el valor de 1880 y 1890.18
de importación total.
17 La estimación de la tasa arancelaria promedio bo-
liviana entre 1895 y 1935 puede ser libremente 18 Véase Informe 1885, p. 15; Informe 1886, p. 6; In-
descargada a través del siguiente enlace: https:// forme 1890, pp. 72-91; Informe 1891: pp. 41-57;
joseperescajias.com/data/ Memoria 1898, pp. 68-70.
Gráfico 2
Tasa Arancelaria Promedio en Bolivia (%), 1846-1935
40
35
30
25
20
15
10
50
0
1846
1849
1852
1855
1858
1861
1864
1867
1870
1873
1876
1879
1882
1885
1888
1891
1894
1897
1900
1903
1906
1909
1912
1915
1918
1921
1924
1927
1930
1933
Fuentes. El dato de 1846 es una estimación basada en Dalance; los datos de 1880 y 1881 provienen de estimaciones basadas en Memorias del
Ministerio de Hacienda; la serie entre 1895 y 1935 proviene de Peres-Cajías (2017). Tercer periodo
Bajo el debate
constitucional de
Este escenario de virtual libre comercio con de productividad por hectárea en el período 1938 que incorpora
Chile y Perú tenía importantes implicancias 1880-1900 (Robles Ortiz 2009). el régimen social
(1938-1952)
para los productores locales. Si bien es muy
difícil encontrar datos con la composición de En cuanto a las principales exportaciones de 799
las importaciones bolivianas desde Chile o Perú a Bolivia durante la última década del
Perú, las fuentes de comercio exterior chilena siglo XIX y principios del XX, sobresalen cin-
y peruana muestran qué productos se envia- co productos: azúcar, tocuyo, alcohol, vinos y Minería y desarrollo
económico
ban al país. En el primer caso, las tres prin- arroz. Como vimos, la exportación de bebi- en Bolivia,
1825-1950
cipales exportaciones a Bolivia eran carbón, das alcohólicas a Bolivia debía pagar impues- ¿Valía Potosí,
un Potosí?
harina de trigo y vino (Peres-Cajías 2017). tos desde 1878. Ello no sucedía en los otros
El primer producto no era producido en el casos, siendo el del azúcar particularmente
país por lo que no afectaba a ningún produc- crítico para la economía cruceña. En efecto,
tor local. La harina de trigo, en cambio, era mientras el azúcar peruano se beneficiaba de
crítica para las economías del norte de Po- una entrada libre y una mayor cercanía eco-
tosí y para la de Cochabamba. Más aún, las nómica y geográfica con los mercados de oc-
ganancias de competitividad que obtenía el cidente, el azúcar cruceño no contaba con la
trigo chileno gracias a su libre introducción infraestructura vial para llegar a los mercados
y el ferrocarril se potenciaban con la existen- más dinámicos del país. Una vez más, esta si-
cia de diferencias de productividad respecto tuación se veía empeorada por la existencia
a la producción nacional. Al respecto, mien- de importantes diferencias de productividad.
tras la evidencia existente sugiere que no se En efecto, mientras relatos de la época resal-
dieron grandes innovaciones tecnológicas tan el carácter rudimentario de la producción
o mejoras en la productividad del trigo bo- azucarera cruceña (International Bureau of
liviano, se observa que el trigo chileno era the American Republics 1904: 88), el sector
un producto que compitió en los principales azucarero en Perú vivió importantes cambios
mercados internacionales durante el período tecnológicos en las décadas de 1870 y 1890
1850-1880, y que mantuvo niveles elevados (Armas-Asín 2011).
Por tanto, si bien la producción minera po- Un último punto que vale la pena analizar es
tosina recuperó importante dinamismo en el el efecto de la recuperación de la minería so-
último tercio del siglo XIX, a diferencia de lo bre la organización del trabajo. En efecto, tal
acontecido durante el período colonial, este como comentamos previamente, durante el
boom no tuvo necesariamente un efecto dina- siglo XIX la forma predominante de trabajo
mizador sobre las regiones del centro y oriente minero fue la de los trabajadores indepen-
del país. En la historiografía tradicional bolivia- dientes y estacionales. Así, la disponibilidad
na se tiende a atribuir dicho fracaso, en parte, de mano de obra (ya sea por su escasez, su
a supuestas opciones ideológicas que tenían las estacionalidad o su “indisciplina”) fue una de
elites políticas que se consolidaron luego de la las mayores preocupaciones de los produc-
Guerra del Pacífico. En efecto, la historiografía tores mineros (Rodríguez Ostria 1991, secc
boliviana ubica en la Convención de 1880 y la 1). Esta preocupación explica, por ejemplo,
postguerra del Pacífico, el inicio del denomina- la creación del complejo mina-hacienda de
do “período oligárquico”. Entre otros elemen- Guadalupe en la década de 1880: la dotación
tos, éste se caracteriza por la consolidación de de tierras a campesinos indígenas permitía
partidos políticos y presidentes civiles que se contar con una reserva de trabajadores para
sucedieron en el poder (con algunas excepcio- la actividad minera (Rodríguez Ostria 1998).
Un amor
nes) a través de mecanismos políticos institu- Sin embargo, durante las últimas décadas
desenfrenado cionalizados. Entre 1880 y 1899, la presidencia del siglo XIX se sentaron algunas de las ba-
por la libertad
del país estuvo ocupada precisamente por los ses que potenciarían la proletarización de los
Antología de la
historia política principales representantes de la elite minera o mineros. Por un lado, la introducción de ma-
de Bolivia
(1825-2020)
por personas íntimamente ligadas a ella. quinaria moderna generaba y/o demandaba
mayores controles sobre los trabajadores y a
800 Esta consolidación, no obstante, no implica la vez reducía la dependencia de la mano de
que el sector minero fuese monolítico (por obra menos calificada en determinadas acti-
ejemplo, fueron frecuentes y agudas las peleas vidades. Por otro lado, se dio un progresivo
Tomo I entre Aniceto Arce y Gregorio Pacheco) o que cambio en el paradigma de los grandes pro-
1825-1952
aplicasen una política comercial totalmente ductores mineros que empezaron a castigar
abierta a las importaciones. En efecto, en esta el robo de mineral y la indisciplina laboral.
sección hemos mostrado que dicha visión entra Finalmente, fue en este período que, dadas
en contraposición con tres diferentes elemen- las dificultades de acceder a terrenos de tierra
tos: a) otras investigaciones que se han dado cultivable, muchos cochabambinos comen-
en América Latina; b) la reconstrucción de la zaron a emigrar hacia las minas bolivianas y
tasa arancelaria promedio boliviana; y, c) las chilenas (Rodríguez Ostria 1991, secc 1; Lar-
propias quejas de las autoridades reflejadas en sson 1988). Todos estos procesos potenciaron
diferentes memorias de las décadas de 1880 y la consolidación de una mano de obra espe-
1890 en torno a la porosidad del sistema adua- cializada y estable que se proletarizaría en las
nero nacional. Así, la crisis de los mercados primeras décadas del siglo XX.
regionales podría ser mejor entendida a través
del análisis de: a) el rol de los ferrocarriles so-
bre los costos de transporte y competitividad; 3. De la crisis de la plata
b) la persistencia de tratados comerciales con a la consolidación de la minería
países vecinos cuya firma se explicaría por las del estaño
propias debilidades del proceso de construc-
ción estatal boliviano; c) por la existencia de De acuerdo a las estimaciones del PIB pc
diferenciales de productividad considerables de Bolivia de Herranz-Loncán y Peres-Ca-
entre la producción local y extranjera. jías (2016), el dinamismo de la economía
boliviana durante el siglo XIX fue escaso en
términos macroeconómicos. Ello hizo que
las brechas existentes entre la economía bo-
liviana y las economías más desarrolladas del
mundo y de la región (las del Cono Sur), se
ampliasen durante la segunda mitad de ese
siglo. Sin embargo, también de acuerdo a di-
chas estimaciones, esta divergencia entre la
economía boliviana y las más desarrolladas
del mundo y de la región se frenó durante la
primera mitad del siglo XX.
lejos las más importantes del país. Estas pasa- todo el progresivo reemplazo de la plata por el
ron de representar el 80% de las exportacio- estaño.20 Este producto explicó entre la mitad Minería y desarrollo
económico
nes entre 1900 y la Primera Guerra Mundial, en Bolivia,
1825-1950
en promedio; el 90% entre el fin de la Primera ¿Valía Potosí,
19 Véase el trabajo de Orsag Molina (2021), quien un Potosí?
Guerra Mundial y la Gran Depresión (1929); analiza los efectos redistribuidores de la explota-
y llegando, incluso, a tasas en torno al 95% ción de la goma dentro de las economías del oriente
entre el fin de la guerra del Chaco (1935) y la boliviano.
20 De acuerdo a Mitre (1993: 82-87), para enten-
Revolución de 1952.
der el tránsito de la minería de la plata hacia el
estaño se deben considerar dos elementos (la ley
A diferencia de lo que pasa para el siglo XIX, del mineral y la distancia al ferrocarril) y tres ti-
esta vez es posible saber con certeza el peso pos de distritos mineros: aquellos en los que sólo
relativo de las exportaciones mineras gracias a había plata, aquellos en los que había plata y es-
taño y aquellos en los que había sólo estaño. En
la publicación de estadísticas de comercio ex- los primeros, la producción se mantuvo hasta que
terior detalladas desde 1912 (ver discusión en: la caída del precio de la plata anuló el ahorro de
(Peres-Cajías 2017). Estas fuentes recogen da- costos obtenido por el acceso al transporte ferro-
viario. En los segundos, la explotación de estaño
tos de composición de las exportaciones desde
era rentable si estaba cerca al tren o si tenían una
1908, las que muestran la progresiva consoli- elevada ley; en cuanto a la plata, las exportacio-
dación del estaño como el principal producto nes se pudieron mantener si la distancia al tren
de exportación boliviano (ver Gráfico 3). En era baja ya que así se podía seguir exportando los
desmontes pues los altos volúmenes mantenían las
efecto, si bien el caucho tuvo cierto protago-
tarifas ferroviarias bajas. En los terceros, el éxito
nismo desde la última década del siglo XIX has- exportador estaba determinado por la calidad del
ta 1915, llegando a alcanzar el 15% del valor mineral y/o la distancia al tren.
Un amor
desenfrenado
por la libertad
Antología de la
historia política
de Bolivia
(1825-2020)
Llamas en la avenida 6 de agosto, c. 1920.
Fuente: Fundación Torrico Zamudio.
802
Gráfico 3
Composición de las exportaciones bolivianas (% sobre valor total exportado), 1908-1950
Tomo I
1825-1952 100
90
80
70
60
50
40
30
20
10
0
1908
1909
1910
1911
1912
1913
1914
1915
1916
1917
1918
1919
1920
1921
1922
1923
1924
1925
1926
1927
1928
1929
1930
1931
1932
1933
1934
1935
1936
1937
1938
1939
1940
1941
1942
1943
1944
1945
1946
1947
1948
1949
1950
50
45
40
35
30
25
20
15
10
5
0
1880
1882
1884
1885
1886
1890
1892
1894
1896
1898
1900
1902
1904
1906
1908
1910
1912
1914
1916
1918
1920
1922
1924
1926
1928
1930
1932
1934
1936
1938
1940
1942
1944
1946
1948
1950
Fuente: Elaboración propia con base en Dalence y Censos de 1900 y 1950.
Un amor estuvo impulsada por múltiples productores todo durante los años de la Segunda Guerra
desenfrenado
por la libertad que aprovecharon, ante todo, la elevada ley del Mundial, no se alcanzaron los niveles récord
Antología de la
mineral (Contreras 1994). Ya durante la Pri- de 1929. Al respecto, nótese que, ya sea por la
historia política
de Bolivia
mera Guerra Mundial fueron cada vez más ne- inestabilidad económica mundial, la madurez
(1825-2020) cesarias las inversiones de capital, con lo que del sector o por la inestabilidad política inter-
la actividad exportadora tendió a concentrarse na (ver siguiente sección), las inversiones mi-
804 en pocas manos. Si bien la producción de es- neras se ralentizaron luego del crack de 1929
taño sufrió un fuerte revés durante la crisis de (M. E. Contreras 1994).
la postguerra de 1921, en los siguientes años
Tomo I
1825-1952 se dio luego un fuerte crecimiento hasta 1929. Una vez analizadas las cantidades de estaño
Este ascenso estuvo en gran parte determi- exportadas, el Gráfico 5 muestra la evolución
nado por fuertes inversiones que tendieron a del valor total exportado entre 1900 y 1950.
concentrarse en los tres productores que des- Las series que se presentan son resultado de
pués serían conocidos como los “Barones del un trabajo previo de corrección de las series
Estaño” (Contreras 1994).21 La producción oficiales. En este trabajo se excluye de las se-
de estaño cayó fuertemente de nuevo duran- ries oficiales los valores de reexportación (ya
te los años de la Gran Depresión. Posterior- que estos no deben ser contabilizados como
mente, si bien se recuperó dinamismo, sobre exportaciones) y las exportaciones de plata y
oro en moneda, ya que éstas deben ser con-
21 Los tres “Barones del Estaño” fueron Simón I Pa- tabilizadas en la balanza de capital y no en
tiño, Mauricio Hoschild y Carlos Víctor Aramayo. la balanza comercial (Peres-Cajías y Carre-
Al igual que en el caso de los “Patriarcas de la Plata” ras-Marín 2017). Con el fin de poder realizar
no presento el desarrollo empresarial de los princi-
pales mineros del estaño por cuestiones de espacio.
comparaciones internacionales, los datos se
Sin embargo, pueden revisarse los resúmenes pre- presentan en dólares estadounidenses corrien-
sentes en una sección del Tomo IV de la colección tes y reales.22 La información proporcionada
Bolivia, su historia, elaborada por la Coordinadora
de Historia (Peres-Cajías 2015: 255). Toda esta co-
lección se halla digitalizada y puede ser libremente 22 Respecto a los datos reales, las series usan como re-
obtenida a través de este enlace http://historiaboli- ferencia los precios de 1913 y se usa como deflactor
via.org.bo/publicacion/?pub=9&c=1 (11/12/2020, un índice de precios que considera los precios in-
último acceso). ternacionales del estaño, el caucho y la plata.
Gráfico 5
Exportaciones bolivianas (US$ y US$ de 1913), 1900-1950
120.000.000
100.000.000
80.000.000
60.000.000
40.000.000
20.000.000
0
1900
1902
1904
1906
1908
1910
1912
1914
1916
1918
1920
1922
1924
1926
1928
1930
1932
1934
1936
1938
1940
1942
1944
1946
1948
1950
Exportaciones corrientes, US$ Exportaciones constantes, US$ 1913
muestra un notorio crecimiento de las expor- Este crecimiento de la capacidad fiscal del Es- Bajo el debate
constitucional de
taciones bolivianas entre 1900 y 1920. Luego, tado boliviano es evidente cuando se analizan 1938 que incorpora
el régimen social
se confirma la reducción en las exportaciones los ingresos públicos en términos per cápita (1938-1952)
bolivianas por la crisis de 1921 y 1922 y la si- y en términos reales (aislando el efecto de la
guiente recuperación de las mismas, pero en inflación).23 En efecto, los ingresos públicos 805
niveles inferiores a los alcanzados durante los per cápita en 1882 eran de Bs. 48 y luego de
años de la Primera Guerra Mundial. También cierto ascenso durante los primeros años de
se verifica el impacto de la Gran Depresión la década de 1890, la crisis de la plata generó Minería y desarrollo
económico
y la recuperación de las exportaciones desde un retroceso hasta los mismos Bs. 48 en 1902 en Bolivia,
1825-1950
1933. Sin embargo, no fue hasta los años de la (Peres-Cajías 2014). Una vez que el estaño ¿Valía Potosí,
un Potosí?
Segunda Guerra Mundial que el valor expor- se consolidó como el principal producto de
tado creció a tasas más dinámicas. Luego de la exportación, los ingresos públicos per cápita
guerra, las exportaciones siguieron creciendo crecieron de manera continua desde Bs. 49 en
en términos nominales, pero no en términos 1904 hasta Bs. 153 en 1913. Si bien la crisis
reales, lo que refleja una vez más el estanca- inicial de la guerra redujo los ingresos públi-
miento en las cantidades de exportación. cos hasta Bs. 75 en 1915, tal como lo hizo la de
1921 (Bs. 66), hacia 1929 los ingresos públicos
¿Cómo afectó esta evolución de las exporta- per cápita fueron de Bs. 166. Es decir, entre
ciones a la economía boliviana en su conjunto? principios de siglo y 1929, los ingresos públi-
Si enfocamos el análisis en el período 1900- cos per cápita se habían multiplicado por 3.4.24
1929, período en el cual crecieron tanto las
cantidades exportadas de estaño, como el valor
23 Los ingresos públicos fueron deflactados tomando
exportado total, es posible identificar diferen- como referencia los precios en Bs del año 2000.
tes impactos positivos. En primer lugar, dada 24 La estimación sobre la evolución de los ingresos y
la dependencia fiscal del Estado boliviano gastos públicos (tanto en términos agregados como
desagregados) del Estado central boliviano entre
frente a los impuestos al comercio exterior,
1880 y 2010 pueden ser libremente descargados a
el dinamismo de éste supuso el crecimiento través del siguiente enlace: https://joseperescajias.
de los ingresos del Estado Central boliviano. com/data/.
Publiciadad Banco Mercantil.
Fuente: La Ilustración.
inversión privada extranjera, permitió la con- proteger a los productores locales frente a la Bajo el debate
constitucional de
solidación de servicios eléctricos, agua pota- competencia internacional. Al respecto, nóte- 1938 que incorpora
el régimen social
ble, alcantarillado y transporte por tranvía en se que más allá de los aranceles, la competiti- (1938-1952)
diferentes ciudades del país. Así, la fisonomía vidad de la producción nacional estaba todavía
de las ciudades, particularmente la de La Paz, restringida por la existencia de elevados cos- 807
cambió de manera notoria durante este perío- tos de transporte (particularmente en aquellos
do (Cajías et al. 2007). lugares donde no llegó el ferrocarril) y dife-
rencias de productividad (véase el debate en Minería y desarrollo
económico
La mejora de la capacidad fiscal del Estado bo- (Peres-Cajías 2017). en Bolivia,
1825-1950
liviano se verifica también al analizar la políti- ¿Valía Potosí,
un Potosí?
ca arancelaria. A principios del siglo XX, Boli- El boom exportador del primer tercio del si-
via firmó una serie de tratados limítrofes con glo XX permitió también la consolidación de
casi todos los países vecinos (Paraguay fue la nuevas actividades económicas, tales como la
excepción). Estos tratados, entre los que se en- banca o las de las grandes casas comerciales
cuentra el de Paz y Amistad firmado con Chile importadoras. Sobre la primera, si bien es cier-
en 1904, incluían diferentes disposiciones co- to que esta actividad comenzó a finales de la
merciales. Éstas permitieron cerrar la antigua década de 1860, el sector se dinamizó en la úl-
dualidad del sistema arancelario boliviano y tima década del siglo XIX y la primera del siglo
consolidar una política aduanera autónoma, XX. En este período se abrieron nuevos bancos
algo que no se conseguía desde mediados de de capitalistas locales que tendrían una signi-
ficativa participación en el mercado, el Banco
Francisco Argandoña (del minero Francisco
26 “Un poco menos de la mitad del total de la red
ferroviaria actual de Bolivia fue construida en el
Argandoña) en 1892 y el Banco Mercantil (del
primer cuarto del siglo xx” (Contreras, 2017). Para minero Simón I. Patiño) en 1905. También se
más detalles sobre la construcción de ferrocarriles abrieron sucursales de bancos extranjeros en
en Bolivia, véase la obra citada y también esta pá- Oruro y La Paz, lo cual fortalecía la conexión
gina de Wikipedia que es regularmente alimentada
por este autor: https://es.wikipedia.org/wiki/His- de la minería boliviana con la economía mun-
toria_de_los_ferrocarriles_en_Bolivia. dial. Pero, además, fue durante este período
Tabla 3
Tarifas arancelarias promedio por grupos de productos (Ad Valorem, %), 1912
Arancel
Clasificación Internacional Estándar 10 productos más Arancel Promedio
Promedio
del Comercio (SITC) importantes Ad-valorem
Ad-valorem
Alimentos y animales 26.46 Manufacturas de acero 7.72
Bebidas y tabaco 51.63 Textiles de algodón 29.34
Materias primas no comestibles, excepto hidrocarburos 2.53 Azúcar 20.97
Hidrocarburos 1.57 Harina de trigo 10.05
Aceites animales y vegetales 21.27 Textiles de lana 28.19
Productos Químicos 26.29 Armas y municiones 2.54
Maquinaria y equipos de transporte 1.26 Carbón 0.00
Textiles (terminados) 29.53 Bebidas alcohólicas 67.75
Textiles (intermedios) 16.47 Caballos 3.28
Otras manufacturas 16.70 Pólvora 0.11
Número de Productos 169
Tasa Arancelaria Promedio 21.76
Fuentes. Peres-Cajías, 2017.
Un amor
desenfrenado
por la libertad que se crearon diferentes entidades bancarias debe considerar que existían hornos de fundi-
Antología de la que darían paso luego al Banco de la Nación ción en altitudes similares en el caso peruano.
historia política
de Bolivia Boliviana (1911), entidad que poco a poco fue En este sentido, Mitre (1993a) plantea que la
(1825-2020)
adquiriendo las características propias de un principal restricción provino de la inexistencia
banco central.27 de fuentes cercanas de energía que permitie-
808
sen el funcionamiento eficiente y regular de
Al mismo tiempo que se dieron estos avan- los hornos.28
Tomo I ces, la expansión exportadora no fue capaz de
1825-1952 quebrar otras restricciones estructurales. Una El desarrollo exportador del primer tercio
temática ampliamente discutida en la historio- del siglo XX tampoco pudo lograr la re-in-
grafía boliviana es la incapacidad de instalar tegración al mercado nacional de muchas de
hornos de fundición. Ello es remarcado como las zonas que habían quedado marginadas
el típico ejemplo de las restricciones que tie- desde el último boom de la plata, en par-
nen los países periféricos en el comercio in- ticular Santa Cruz. Asimismo, al contrario
ternacional: se limitan a vender materias pri- de otros casos de la región donde la expan-
mas sin ningún tipo de transformación o valor sión exportadora vino acompañada del cre-
agregado. En el caso del estaño, la falta de cimiento de la producción industrial (véase
hornos no sólo es relevante bajo la perspectiva Haber 2006), la producción manufacturera
previamente mencionada, sino también por el en Bolivia estuvo ampliamente restringida
poder de mercado que los mismos tenían en el hasta mediados de la década de 1920 (véase
mercado mundial del estaño (Ingusltad, Per- el trabajo de Seoane en este volumen). Otro
chard y Storli 2015). La falta de hornos era
muchas veces explicada como consecuencia de
28 El trabajo de Arana (2020) muestra los desafíos que
la imposibilidad de instalarlos en las elevadas
enfrentaban los productores mineros a la hora de
alturas de los centros mineros. Sin embargo, se elegir entre el uso de fuentes de energía locales,
que eran menos potentes desde el punto de vista
energético y que tendían a desaparecer, y fuentes de
27 Véase Peres, Antezana y Peres-Cajías (2013) para re- energía externas, que eran más potentes pero que
ferencias sobre la actividad bancaria y su regulación. debían ser importadas.
Tercer periodo
Bajo el debate
constitucional de
1938 que incorpora
el régimen social
(1938-1952)
200.00
180.00
140.00
140.00
100.00
100.00
80.00
60.00
40.00
20.00
0.00
1900
1902
1904
1906
1908
1910
1912
1914
1916
1918
1920
1922
1924
1926
1928
1930
1932
1934
1936
1938
1940
1942
1944
1946
1948
1950
Términos de intercambio Poder de compra exportaciones
Fuente: Peres-Cajías & Carreras-Marín, 2017.
Tercer periodo
monetario. La vulnerabilidad del modelo ex- Gráfico 6 presenta una estimación de los Tér- Bajo el debate
constitucional de
portador latinoamericano se hizo evidente du- minos de Intercambio de Bolivia entre 1900 y 1938 que incorpora
el régimen social
rante los primeros años de la Primera Guerra 1950.30 Esta estimación está en línea con otras (1938-1952)
Mundial en el caso de las economías exporta- estimaciones disponibles; en todos estos casos
doras de alimentos. También fue evidente para resalta ante todo la volatilidad del indicador 811
las economías exportadoras de minerales du- y no necesariamente una tendencia negativa
rante los primeros años de la década de 1920. (ver Peres-Cajías and Carreras-Marín 2017).
Sin embargo, tales crisis no tuvieron ni la mag- Minería y desarrollo
económico
nitud ni el impacto del de la Gran Depresión. En el Gráfico 6 se presenta también una esti- en Bolivia,
1825-1950
En consecuencia, los países de América Latina mación de la evolución del poder de compra ¿Valía Potosí,
un Potosí?
buscaron y experimentaron con nuevas y di- de las exportaciones bolivianas.31 Se observan
versas estrategias de crecimiento y desarrollo tres períodos diferentes: el primero entre 1903
económico desde inicios de la década de 1930. y 1918, caracterizado por una mejora constan-
te en la capacidad de compra de las exportacio-
Es en este contexto que surgió la tesis de Raúl nes bolivianas; el segundo entre 1920 y 1938,
Prebisch en torno a la idea de una tendencia donde resalta ante todo la inestabilidad del
secular a la caída de los términos de intercam- indicador; y, un tercero que se inicia con un
bio (la ratio entre los precios de exportación
y los precios de importación). Esta idea fue 30 Esta se obtiene de la división entre un índice de
muy usada para explicar las restricciones del precios de exportaciones que considera los precios
modelo exportador latinoamericano. Sin em- del estaño, la goma y la plata (ponderados por su
bargo, a lo largo del últimos años se han suce- importancia relativa) y un índice de precios de im-
portaciones que incorpora la evolución del IPC de
dido diferentes investigaciones que, al menos los principales socios comerciales de Bolivia (Ale-
en lo relativo al período 1850-1929, rechazan mania, Argentina, Brasil, Estados Unidos y Gran
la idea de una tendencia al empeoramiento Bretaña), ponderados de acuerdo al peso que cada
progresivo de los términos de intercambio la- uno de éstos tenía en el comercio boliviano.
31 Este indicador se obtuvo deflactando las exporta-
tinoamericano (ver, por ejemplo, Kuntz-Fic- ciones totales por el índice de precios de importa-
ker 2017). Dentro de esta discusión general, el ciones comentado previamente.
fuerte ascenso durante los años de la Segunda en lugar de reducir la fuerza organizativa de
Guerra Mundial y una nueva contracción una los mineros, terminó potenciándola: fue en
vez terminada la contienda. Se confirma una estos años que las organizaciones laborales
vez más que, luego de la Gran Depresión, las creadas desde fines del siglo XIX en términos
exportaciones bolivianas ganaron dinamismo de mutuales y ligas de socorro, se fueron re-
sólo durante los años de la Segunda Guerra constituyendo hacia federaciones obreras que
Mundial (ver Gráficos 4 y 5). daban voz política a los mineros (Rodríguez
Ostria 1991; secc. 2).
La vulnerabilidad de las economías latinoa-
mericanas frente a los mercados externos no El nuevo contexto económico y político surgi-
sólo generaba problemas económicos, sino do en la postguerra ayuda también a entender
también políticos. Por un lado, la caída en los la progresiva participación del Estado en las
ingresos públicos restringía la capacidad de rentas mineras (Gráfico 7). La caída en la co-
gasto y de inversión del estado, lo cual afecta- tización del estaño y la consecuente reducción
ba a grupos (por ejemplo, profesores) o regio- en el valor exportado, generaron una caída en
nes determinadas. Por otro lado, las empresas los ingresos públicos y un notorio crecimiento
optaban por rebajas salariales y/o despidos con en el déficit público en 1921 y 1922. Con el fin
Un amor
el fin de ajustar sus costos a la nueva situación de atender el déficit, pero también con la vista
desenfrenado económica. En un contexto de creciente or- puesta en nuevos proyectos de infraestructura,
por la libertad
ganización laboral, estas acciones generaban a el Estado decidió contratar dos empréstitos con
Antología de la
historia política su vez huelgas o reclamos laborales de distinta la Stifiel Nicolaus (en 1921 y 1922). A cambio,
de Bolivia
(1825-2020)
índole. Esto fue evidente en el caso bolivia- los prestamistas extranjeros pidieron accio-
no durante los primeros años de la década de nes concretas que asegurasen el pago de estas
812 1920, cuando se sucedieron diferentes huelgas deudas. Dentro de estas propuestas, el Estado
y/o enfrentamientos laborales en diferentes decidió incrementar las tasas tributarias o crear
minas del país. La respuesta a estos reclamos nuevos impuestos sobre la minería (Contreras
Tomo I terminó siendo muchas veces violenta lo que, 1990; Gallo 1991; Peres-Cajías 2014). En este
1825-1952
Gráfico 7
Importancia relativa de los impuestos cobrados a la minería en Bolivia (porcentaje de ingresos totales
del Estado Central; porcentaje de exportaciones mineras), 1900-1950
70
60
50
40
30
20
10
0
1900
1902
1904
1906
1908
1910
1912
1914
1916
1918
1920
1922
1924
1926
1928
1930
1932
1934
1936
1938
1940
1942
1944
1946
1948
1950
taria sobre el sector en la segunda mitad de la sobre el sector a través del uso de una medida Bajo el debate
constitucional de
década de 1920. no convencional, tipos de cambio diferencia- 1938 que incorpora
el régimen social
dos. La presión tributaria sobre la minería no (1938-1952)
Sin embargo, las condiciones de negociación cayó con la muerte de Busch (1939), solo fue
entre el Estado y los productores mineros vol- formalizada a través de la eliminación de los 813
vieron a cambiar a principios de la década de tipos de cambio diferenciados y la creación de
1930. Por un lado, la recuperación que se ob- nuevos derechos de exportación. Como se ob-
serva desde 1933 en los términos de intercam- serva en el Gráfico 7, desde 1939 hasta 1950 los Minería y desarrollo
económico
bio (Gráfico 6) y en el valor exportado (Gráfi- impuestos cobrados al sector minero siguieron en Bolivia,
1825-1950
co 5) fue resultado de las acciones del Comité representando, en promedio, el 50% de los in- ¿Valía Potosí,
un Potosí?
Internacional del Estaño (creado en 1931). gresos públicos del Estado Central boliviano y
Éste era un acuerdo entre los principales paí- el 20% del valor exportador minero.
ses productores de estaño que tendía a restrin-
gir los volúmenes de producción y exportación Para explicar el mantenimiento de esta pre-
con el fin de propiciar la recuperación de los sión tributaria sobre el sector minero es útil
precios internacionales (Hillman 1988). Ello partir del marco interpretativo sugerido en
incrementaba el poder de negociación del Es- Peres-Cajías, Torregrosa-Hetland y Ducoing
tado ya que era el encargado de decidir cómo (2020). Por un lado, con base en la literatura
se repartía la cuota nacional entre los diferen- de la “maldición de los recursos naturales”, se
tes productores. El Estado podía explotar este reconoce que los países abundantes en produc-
instrumento y las diferencias de intereses entre tos mineros y petroleros tienden a crear una
los diferentes Barones del estaño y entre éstos excesiva dependencia fiscal frente a esta acti-
y los otros dos grandes grupos de productores vidad.32 Ahora bien, para que este potencial se
(minería mediana y minería chica) para con-
seguir créditos u otras concesiones políticas
32 Ello es así debido a diferentes ventajas fiscales in-
(Contreras 1990). Por otro lado, la explosión
trínsecas del sector: ventajas económicas derivadas
de la Guerra del Chaco (1932-1935) permitió de la existencia de elevadas rentas potenciales de-
al Estado usar esta situación excepcional para rivadas de las elevadas necesidades de inversión;
Un amor
desenfrenado
por la libertad
Antología de la
historia política
de Bolivia
(1825-2020)
Puente Laikakota.
814 Fuente: La Razón, 25 de marzo de 1948.
haga efectivo se requieren otras condiciones década de 1920, su capacidad de generar ren-
Tomo I
1825-1952 económicas y políticas. Entre las primeras, la tas fiscales hacia mediados de la década de
tentación será mayor en la medida que la eco- 1930 era radicalmente inferior a la del sector
nomía y el sector exportador estén menos di- minero. En cuanto al sector externo, el 95%
versificados; es decir, en la medida que no exis- de las exportaciones bolivianas estaba com-
tan otros sectores de donde obtener recursos puesto por productos mineros.
fiscales. Entre las segundas, el abuso fiscal de
los recursos naturales es más probable en con- En cuanto a los condicionantes políticos, se
textos en los que los actores políticos relevan- deben considerar al menos tres procesos dife-
tes no tienen una preocupación especial por las rentes generados por la derrota en la Guerra.
ganancias empresariales y/o por la sostenibili- Por un lado, la guerra hizo evidente la falta de
dad económica del sector. conexión del país, la inexistencia de un merca-
do interior nacional y la urgencia de conectar
Ambas condiciones se cumplían en la Bolivia el occidente con el oriente del país. Por otro
de la postguerra del Chaco. En cuanto a las lado, nuevos actores se hicieron relevantes
primeras, si bien la industria manufacturera en el debate político.33 Estos actores tenían
moderna había comenzado a crecer desde la
salta la inversión del Estado en partidas que Dado que la caída en la ley del mineral exigía de Bajo el debate
constitucional de
tienen un elevado impacto en el crecimiento nuevas inversiones, la falta de inversiones hizo 1938 que incorpora
el régimen social
y/o bienestar de largo plazo. Por ejemplo, se que el sector se mantenga extremadamente vul- (1938-1952)
dio un fuerte crecimiento del gasto público nerable a los vaivenes del precio internacional.
social (educación, salud y otros gastos meno- Esta vulnerabilidad fue heredada por el Estado 815
res), el cual pasó de representar el 10% del boliviano con la nacionalización de la gran mi-
gasto público total hacia finales de la década nería en octubre de 1952. Finalmente, la nueva
de 1920, al 25% hacia finales de la década de configuración tributaria sobre el sector mine- Minería y desarrollo
económico
1940 (Peres-Cajías 2014). Asimismo, junto a ro e hidrocarburífero realizada en la década de en Bolivia,
1825-1950
los impuestos sobre el sector minero, se or- 1930 dio inicio a la serie de ciclos de naciona- ¿Valía Potosí,
un Potosí?
ganizó un sistema de reparto de divisas prefe- lización/privatización que caracterizan a estos
renciales. El efecto marginal de esta política sectores desde entonces. Estos ciclos se inician
no ha sido aún analizado, pero nótese el cre- con marcos regulatorios relativamente flexibles
cimiento del sector manufacturero durante que permiten la llegada de nuevas inversiones
estos años: pasó de representar el 8% del PIB y, con ello, el reimpulso de la producción de
recursos naturales. Sin embargo, cuando estas
inversiones están maduras, y particularmente
en 1946); c) se dio una progresiva apertura política
cuando la disputa política requiere urgente-
hacia nuevos actores (por ejemplo, se crea el Minis-
terio de Trabajo en 1936 y se elige como ministro mente de recursos económicos, se incrementa
a un trabajador gráfico; o, se organiza el Primer notoriamente la intervención del Estado sobre
Congreso Indigenal bajo auspicio gubernamental el sector lo que termina afectando las decisio-
en 1945).
nes de inversión de las empresas privadas.35
34 La mayor participación del Estado boliviano en las
rentas generadas por la explotación de recursos na-
turales no se limitó a la minería y, más bien, se pre- 35 En un reciente artículo, sugiero que dicha sucesión
senció también en hidrocarburos con la fundación ha hecho que los bolivianos tendamos muchas ve-
de Yacimientos Petrolíferos Fiscales Bolivianos y ces a evaluar el éxito de las estrategias de apertura a
el monopolio de facto que esta empresa tuvo en el la Inversión Extranjera Directa a través básicamen-
sector desde 1937 hasta 1956 (Klein y Peres-Cajías te de la cantidad de recursos fiscales que puedan
2014). generar. Esto puede terminar diluyendo estrategias
5. Conclusiones siendo las economías de los departamentos del
oriente del país las más afectadas.
Este artículo estudia la evolución de la explo-
tación minera y los efectos que el sector ge- La recuperación de la plata se frenó hacia
neró sobre el conjunto de la economía boli- mediados de la década de 1890, cuando el fe-
viana desde el último período colonial hasta rrocarril no pudo compensar las pérdidas ge-
1950. Antes de la Independencia (1825), el neradas por la fuerte caída en el precio inter-
sector se encontraba en crisis, lo que muestra nacional de la plata. Desde entonces y hasta
las frágiles bases sobre las que se sustentó el 1904, se generó una transición en la minería
último boom de la plata colonial (1750-1800). desde la plata hacia el estaño. Al mismo tiem-
Esta coyuntura de crisis, la lejanía del país del po, se consolidó el boom en la explotación de
circuito comercial nor-atlántico y los efectos goma en el norte del país, el cual tuvo tam-
indirectos de la Independencia reflejadas en bién consecuencias positivas sobre aquellas
un dificultoso proceso de construcción estatal, regiones que se habían visto afectadas durante
determinaron que la recuperación del sector el último boom minero. La explotación de la
minero y de las exportaciones de plata fuera goma, sin embargo, perdió dinamismo en los
muy lenta. Así, no fue hasta mediados del siglo primeros años de la Primera Guerra Mundial
Un amor XIX que se recuperó un dinamismo basado en y el estaño se consolidó como el principal pro-
desenfrenado nuevas inversiones, lideradas además por una ducto de exportación.
por la libertad
nueva clase económica emergente.
Antología de la
historia política La producción y la expansión del estaño se
de Bolivia
(1825-2020) Estos cambios se consolidaron a principios de la realizó a diferentes velocidades a lo largo de la
década de 1870, una vez que se eliminaron dos primera mitad del siglo XX. Desde 1904 y has-
816 políticas que habían determinado críticamente ta la Primera Guerra Mundial, la expansión
la evolución del sector –el monopsonio de pla- fue rápida y basada ante todo en la riqueza de
ta y la emisión de la moneda feble. Desde en- la ley del mineral. Una vez acabada la Primera
Tomo I tonces y hasta principios de la década de 1890, Guerra Mundial, la cantidad exportada tendió
1825-1952
las exportaciones de plata crecieron de mane- a crecer, pero el valor de exportación tuvo un
ra continua y superaron los niveles existentes comportamiento más volátil. Debido a la ne-
durante el último boom colonial. Este proceso cesidad de nuevas inversiones, el sector se fue
se potenció con la elevada ley de los minerales re-concentrando en pocos agentes, entre los
explotadas, inicialmente, y con la instalación de que posteriormente resaltarían los denomina-
ferrocarriles que brindaron mayor competiti- dos “Barones del Estaño”.
vidad al sector. Sin embargo, el tren también
brindó competitividad a las importaciones. Esta expansión tuvo efectos positivos sobre la
Estas diferencias en el acceso a los principales economía, tales como el crecimiento de la ca-
mercados de consumo, junto a la existencia de pacidad fiscal del Estado traducida en mayores
tratados comerciales desfavorables y niveles de recaudaciones impositivas y mayores gastos en
productividad bajo, minimizaron la posibilidad educación, la expansión de la red ferroviaria y
de diversos productores locales no mineros de la consolidación de nuevas actividades econó-
aprovechar el dinamismo generado por la re- micas como la banca. Sin embargo, continuó
cuperación de la plata. Esta divergencia se ex- la divergencia en la suerte económica de las
presó también en un mercado interno dividido, regiones. Asimismo, a diferencia de otros paí-
ses de la región, no se presenció una conside-
rable expansión de la industria manufacturera.
que busquen aprovechar otras potencialidades que
ofrece la IED, particularmente la transferencia de Un tema adicional que requiere de más inves-
tecnología de punta (Peres-Cajías 2018). tigación está relacionado con la evolución de
la producción y la productividad agrícola, en Monsalve, y Alejandro Salinas, 93–164.
general, y con la interacción entre las exporta- Lima: Instituto de Estudios Peruanos.
ciones mineras y el desarrollo del sector agro- Arze Cuadros, Eduardo. 1979. La Economía
pecuario, en particular. de Bolivia: Ordenamiento Territorial y Do-
minación Externa 1492-1979 . La Paz/Co-
Las exportaciones mineras se vieron afectadas chabamba: Los Amigos del Libro.
por la crisis internacional de la Gran Depre- Assadourian, Carlos Sempat. 1982. El Sistema
sión y solo recuperaron un claro dinamismo de la Economía Colonial. Mercado Interno,
durante los años de la Segunda Guerra Mun- Regiones y Espacio Económico. Lima: Insti-
dial. Durante este período cambió también la tuto de Estudios Peruanos.
política económica en torno a la minería y la Barragán R., Rossana, y José Peres-Cajías.
presión tributaria sobre el sector creció fuer- 2007. “El Armazón Estatal y sus Imagi-
temente. Esto permitió un incremento de los narios. Historia del Estado.” En Informe
ingresos estatales, pero también generó in- Nacional de Desarrollo Humano 2007. El
certidumbre en el sector. Esta incertidumbre, Estado del Estado. La Paz: PNUD, 127-218.
junto a la madurez alcanzada por el sector y Barragán, Rossana, Ana María Lema, Pilar
la existencia de un contexto externo incierto, Mendieta, y José Peres-Cajías. 2015. “La
restringieron la llegada de nuevas inversiones lenta Reorganización de la Economía.”
al sector. Esta falta de renovación durante las En: Bolivia, su historia. Tomo IV. Los Pri- Tercer periodo
décadas de 1930 y 1940 fue una de las limi- meros Cien años de la República, 1825-1925, Bajo el debate
constitucional de
tantes más importantes del desarrollo de la editado por R. Barragán, A. M. Lema, y P. 1938 que incorpora
el régimen social
minería nacionalizada luego de la Revolución Mendieta. La Paz: Plural. (1938-1952)
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Minería y desarrollo
económico
en Bolivia,
1825-1950
¿Valía Potosí,
un Potosí?
Línea de tiempo
Hitos para comprender la historia política boliviana y su contexto
1825-1879
Año Descripción
1825 Creación de la República de Bolivia, después de 15 años de lucha por la independencia
Se proclamó a Simón Bolívar como Padre de la República
Frente a la declinación de Bolívar se designó al general Antonio José de Sucre, como presidente
de Bolivia
1826 Congreso General Constituyente. Primera Constitución firmada el 12 de noviembre
823
Bolivia se formó con cinco departamentos: Chuquisaca, Potosí, La Paz, Cochabamba y Santa
Cruz
Sucre, la antigua Charcas, fue nombrada capital de la nueva república
Línea de tiempo
Publicación del Informe sobre Bolivia del geógrafo, naturalista, y viajero irlandés Joseph B.
Pentland
1827 Ley de la Educación (Escuelas de primera letra, colegios de ciencias y artes, Instituto Nacional,
Sociedades de Literatura)
1829 Abolición de la esclavitud en México Latinoamericano
Decreto referido a la acuñación de moneda feble
1830 Desintegración de la Gran Colombia y sus estructuras políticas Latinoamericano
1831 Asamblea Nacional
Gobierno designado: Gral. Andrés Santa Cruz
Creación del Departamento de Tarija
1832 Primer estatuto de la Universidad Mayor de San Andrés de La Paz
Fundación mediante ley de la Universidad Mayor de San Simón
1834 Establecimiento mediante ley de la Sociedad Nacional para el rescate, venta y exportación de
la cascarilla
1836 Creación de la Confederación Perú Boliviana que se extiende hasta 1839
1841-1842 Guerra entre Perú y Bolivia
1841 Batalla de Ingavi, enfrentó a las tropas bolivianas al mando de José Ballivián con las tropas
peruanas de Agustín Gamarra
1842 Creación del Departamento del Beni
Decretos, órdenes y circulares que establecen las universidades, los colegios de ciencias y artes
Decreto sobre la propiedad estatal de las tierras indígenas
Ocupación del Gral. José Ballivián de las provincias de Puno, Tacna, Arica y Tarapacá; posterior
firma de tratado de Paz
Año Descripción
1843 Convención Nacional
Gobierno de facto: Gral. José Ballivián
1845 Revolución Marcista o la Revolución de Marzo, primer movimiento armado revolucionario en Latinoamericano
el Ecuador
1847 Guerra de castas. Conflicto indígena (mayas) en la península de Yucatán que terminó años más Latinoamericano
tarde, en 1901, con la intervención de Porfirio Díaz
1848 Declaración como presidente provisional al Gral. Manuel I. Belzu
1851 Convención Nacional
Gobierno de facto: Gral. Manuel I. Belzu
La Bandera Nacional de Bolivia se consolida con La Tricolor: rojo, amarillo y verde
Publicación del Bosquejo Estadístico de Bolivia del geógrafo boliviano José María Dalence
Creación de la Escuela de Artes y Oficios en Cochabamba; en La Paz se creó el Liceo Belzu
donde se enseña ciencias exactas
1855 Iquique (Perú) se declaró Puerto Mayor para favorecer el comercio del salitre Latinoamericano
1856 Aniceto Arce se convirtió en el accionista principal de la Compañía Minera Huanchaca
1858 La editorial JH. Colton de Nueva York imprimió diez mil copias del primer mapa del país
1859 Pozo de petróleo en Pensilvania desató la era del petróleo MUNDIAL
1861 Asamblea Nacional
Gobierno de facto: Gral. José María Achá
Un amor
desenfrenado Invasión francesa a México (ocupación hasta 1867) Latinoamericano
por la libertad
Guerra Civil en Estados Unidos que continuó hasta 1865 MUNDIAL
Antología de la
1864 Guerra de la Triple Alianza, conflicto militar entre el Imperio del Brasil, Uruguay y Argentina Latinoamericano
historia política
de Bolivia contra Paraguay, duró hasta 1870
(1825-2020)
1867 “Tratado Muñoz-López Netto” entre Bolivia y Brasil que definió nueva demarcación de la
frontera, pérdida del Río Paraguay desde Río Verde hasta Bahía Negra, a cambio de seis años
824 de navegación libre sobre sus aguas para Bolivia
1868 Asamblea Nacional
Gobierno de facto: Gral. Mariano Melgarejo
Tomo I 1870 Los precios de la plata iniciaron su caída, consecuencia de la gran producción de plata en
1825-1952 Estados Unidos
1871 Asamblea Constituyente
Gobierno de facto: Gral. Agustín Morales
Ley de reglamentación de municipalidades
Creación por decreto de la Fundación del Banco Nacional de Bolivia
1872 Determinación de la libre exportación de las pastas de plata
Ley de conversión de la moneda feble
1873 Creación de sociedades literarias y científicas en varias ciudades
Tratado Secreto de Alianza Defensiva con el Perú
La Compañía de Salitres de Antofagasta tendió la primera línea férrea en el tramo que unió el Latinoamericano
salar El Carmen y el puerto de Antofagasta (Chile)
1874 Ley de Exvinculación, abolió las tierras comunales en beneficio del Estado
1875 Ataque al gobierno de Tomás Frías y el palacio de Gobierno, tras el incendio el edificio quedó
inhabitable y adquirió el nombre popular del “Palacio Quemado”
1877 Fundación en La Paz de la “Sociedad Fraternal de Artesanos y Obreros”
1878 Asamblea Constituyente
Gobierno de facto: Gral. Hilarión Daza
1879 Guerra del Pacífico, conflicto que enfrentó a Chile contra los aliados Bolivia y Perú en el desierto
de Atacama; uno de los primeros detonantes fue el impuesto alrededor del salitre
1880-1937
Año Descripción
1880 Convención Nacional
Gobierno designado: Gral. Narciso Campero
Aprobación de la Constitución de 1878 junto a la implementación del sistema de partidos
Creación de la “Sociedad de Propietarios de Yungas”
1883 Fundación de la “Sociedad Fraternal de Artesanos de Socorros Mutuos”
Creación del Tribunal de Cuentas para controlar los fondos públicos; duró hasta 1928
Fundación del Partido Liberal de Bolivia por el General Eliodoro Camacho
El Partido Constitucional se transformó en Partido Conservador al fusionarse con el
Democrático coordinado principalmente por Aniceto Arce
1884 Pacto de Tregua o Tratado de Valparaíso celebró el fin al estado de guerra entre las
Repúblicas de Bolivia y Chile
1885 La República de Bolivia se adhirió a la Convención de Unión Postal Universal
1886 Creación de la Oficina de Tierras y Colonias en el Ministerio de Colonización
Traspaso de los derechos del ferrocarril Antofagasta-Bolivia a la compañía boliviana
Huanchaca, ampliación de la línea férrea hasta Calama
Construcción del establecimiento de fundición en Playa Blanca-Antofagasta, anterior
territorio boliviano
Manifestación del 1º de mayo en los EEUU MUNDIAL
1887 Firma de Tratado de Límites entre Bolivia y Paraguay por el cual ambos países acordaron
dividir a la región disputada
Creación del Ministerio de Gobierno, Colonias, Correo, Telégrafo y Obras Públicas
1888 Abolición de la esclavitud en Brasil Latinoamericano
1889 Caída del Imperio de Brasil Latinoamericano
825
Inauguración del tramo ferrocarril Antofagasta-Uyuni, primera locomotora en territorio
boliviano
Firma de Tratado que fija los límites entre Bolivia y Argentina
Línea de tiempo
Primer telégrafo que unió a Bolivia con Perú y el Litoral del Pacífico
1890 Colapso del mercado de la plata y auge del mercado de la goma elástica
1891 Estalló en Santa Cruz de la Sierra una revolución federal acaudillada por el coronel
Domingo Ardaya; se constituyó la Junta Gobernativa Federal del Oriente
1892 Inauguración de la ampliación del ferrocarril de Antofagasta hasta Oruro
La batalla de Kuruyuki enfrentó por última vez a los chiriguanos con el ejército boliviano
dejando un saldo de miles de muertos
1894 Tratado Benítez-Ichazo dividió con una línea recta el área disputada entre Bolivia y
Paraguay
1898 Ley de Radicatoria declaró a Sucre como capital permanente de la República
Inicio de la Guerra Federal, entre Sur (Sucre) y Norte (La Paz) de Bolivia, hasta 1899
La Paz se convirtió en la tercera ciudad de Sudamérica en contar con el servicio de
alumbrado eléctrico, que fue implementado por el paceño Jorge Granier, quien creó la
empresa Fábrica de Luz
Creación de la compañía multinacional Goodyear Tire and Rubber Company que potencia MUNDIAL
el mercado del caucho
1899 Decreto que declaró a la ciudad de La Paz como capital definitiva de la República
1900 Creación del Territorio de Colonias al Norte del País (hoy Pando más la región del Acre)
Simón Patiño descubrió la mina de estaño “La Salvadora” ubicada en Llallagua (Potosí)
Primer Censo Nacional de Población del siglo XX
Creación de la “Sociedad de Socorros Mutuos de Artesanos”
1901 Construcción del ferrocarril Mollendo-Puno (1874) que a su vez unió al país conectando
el Lago Titicaca
Año Descripción
1902 Guerra del Acre entre Brasil y Bolivia, principales intereses del conflicto la producción de
caucho o goma elástica de la región
Proceso Judicial por los sucesos de Mohoza
Llegó la Misión Científica francesa Créqui Montfort
1903 Tratado de Petrópolis entre Bolivia y Brasil; el acuerdo estableció que Bolivia entregue
187 830 km² del Acre por 2 000 000 libras esterlinas y la construcción de un ferrocarril
en la región
Se importó el primer automóvil
Creación del festejo del 6 de agosto; se prohíbe la celebración de fiestas regionales
El estaño se consolidó con rentas importantes
Orville Wright realizó el primer vuelo en Estados Unidos; inicio de la aviación en el mundo MUNDIAL
1904 Tratado de Paz y Amistad entre Chile y Bolivia para terminar el estado de guerra entre
ambos países, cesión de los territorios bolivianos ocupados por Chile deja a Bolivia sin
acceso al océano Pacífico
La Sociedad de Estudios Geográficos e Históricos de Santa Cruz emitió el documento
“Memorándum” entre las demandas más importantes la necesidad de una vía férrea en
el Oriente
Llegaron los primeros automóviles a La Paz y se propone servicios hasta Oruro
1905 Fundación del Banco Mercantil por Simón Patiño en la ciudad de Oruro
Un amor
desenfrenado Ingreso de empresas chilenas a las minas bolivianas de estaño con capitales británicos
por la libertad The Bolivian Rubber duplicó el servicio de electricidad en La Paz
Antología de la Construcción del ferrocarril Guaqui- La Paz
historia política
de Bolivia Plan de estudios y de enseñanza primaria
(1825-2020)
1906 Decreto de libertad de culto
Se aprobó el contrato entre el Poder Ejecutivo con el Nacional City Bank y los señores
826 Speller y Cª. de Nueva York para la construcción y explotación de ferrocarriles en Bolivia
Creación de la Bolivian Railway
1907 Inauguración del ferrocarril Viacha-Oruro
Tomo I Promulgación del Servicio Militar Obligatorio
1825-1952
Masacre de la Escuela Santa María de Iquique, Chile Latinoamericano
1908 Fernando Eloy Guachalla ganó las elecciones nacionales, pero fallece antes de asumir
el mando
Plan General de Educación
Armando Chirveches publicó la Candidatura de Rojas
1909 “Tratado Polo-Sánchez Bustamante” se firmó entre Bolivia y Perú con el objetivo de
rectificar las fronteras entre ambos países
Alcides Arguedas publicó Pueblo Enfermo
Fundación de la Escuela Normal de Profesores y Preceptores
Se instalaron tranvías eléctricos en La Paz
1910 Inauguración de tranvía Cochabamba-Quillacollo
Se publicó Creación de la pedagogía nacional de Franz Tamayo
Ley General de Ferrocarriles el 3 de octubre de 1910
Crédito Mobilier de Paris para la creación del Banco de la Nación boliviana
Revolución Mexicana Latinoamericano
1911 Fundación en Tupiza de la “Unión Obrera de Socorros Mutuos”
Inauguración del ferrocarril Río Mulato – Potosí
1912 Inauguración de trenes Cochabamba-Quillacollo-Arani y Madeira-Mamoré
Cae la última dinastía china (Qing) y se estableció una República MUNDIAL
1913 Se inició el descenso de los precios del caucho y el estaño
Año Descripción
1914 Inauguración del ferrocarril La Quiaca- Tupiza
Fundación del Partido Socialista
Fundación del Partido Republicano
Se publicó El ayllu de Bautista Saavedra
Apertura del canal de Panamá Latinoamericano
28 de Julio, inicio I Guerra Mundial MUNDIAL
1915 Inauguración del ferrocarril Potosí-Betanzos
Ley suspende la venta de tierras baldías
1916 Ley de Reserva Fiscal para terminar las concesiones indiscriminadas de tierras para
exploración petrolífera
1917 Inauguración del ferrocarril Oruro-Cochabamba
Asesinato del expresidente José Manuel Pando
Reforma Agraria Mexicana, primera en el Continente Latinoamericano
Revolución Rusa MUNDIAL
1918 Creación del movimiento cultural revolucionario “Gesta Barbara” en Potosí; su
instrumento de difusión fue una revista
11 de noviembre, fin de la I Guerra Mundial MUNDIAL
Pandemia global: Gripe Española MUNDIAL
Estallido de la reforma universitaria en Córdoba, Argentina Latinoamericano
1919 Llegó el primer automóvil a Santa Cruz desde Puerto Suárez
Se publicó la novela Raza de Bronce de Alcides Arguedas
Firma de tratado de Paz de Versalles MUNDIAL
1920 Richmond Levering of New York (RL) inició la explotación de petróleo entre los
departamentos de Santa Cruz, Chuquisaca y Tarija
827
Primeros vuelos de avión en Bolivia entre La Paz y Oruro
Protestas mineras en Catavi demandaron la jornada laboral de 8 horas
Golpe de Estado que derribó al Presidente Constitucional José Gutiérrez Guerra e instaló
Línea de tiempo
una Junta de Gobierno de transición que convocó a una Convención Nacional
1921 Convención Nacional
Gobierno elegido: Bautista Saavedra
Poder Legislativo boliviano aprobó el primer código de Petróleo
Primer Congreso Nacional de trabajadores donde participaron artesanos, mineros,
ferroviarios
Sublevación en Jesús de Machaca
Creación de la Standard Oil Company of Bolivia
Ley Orgánica del petróleo
Préstamo Nicolaus con Estados Unidos
Primer servicio internacional de vuelo regular para pasajeros MUNDIAL
I Congreso Internacional de Estudiantes, México Latinoamericano
1923 Creación de la Federación Obrera Central de Uncía
Masacre minera en Uncía
1924 Fundación de la Alianza Popular Revolucionaria Americana (APRA) en Perú con el líder Latinoamericano
Víctor Raúl Haya de la Torre
Organización del Sindicato Central del Albañiles y Constructores
Se fundó la Patiño Mines and Enterprises Consolidated, Inc. registrada en Delaware
(Estados Unidos)
Año Descripción
1925 Centenario de la creación de Bolivia
Creación de Lloyd Aéreo Boliviano y establecimiento del servicio aéreo de pasajeros
II Congreso de Trabajadores
Creación de la Federación Obrera Sindical (FOS)
Se estableció en La Paz la primera empresa de generación hidroeléctrica del país:
Bolivian Power
Anulación de elecciones. El presidente Bautista Saavedra entregó el mando de la nación
al Presidente del Congreso Nacional, Felipe Segundo Guzmán, que se encargó de
convocar a nuevos comicios, en los que resultó elegido el político republicano Hernando
Siles Reyes
1926 Decreto Supremo legalizó la jornada laboral de ocho horas para todos los trabajadores
bolivianos
Se fundó Amauta, revista cultural peruana dirigida por José Carlos Mariátegui Latinoamericano
1927 Ley que creó la cédula de identidad obligatoria para todos los bolivianos
Rebelión de indígenas en Chayanta
Se construyó la primera refinería en Sanandita
1928 Misión Kemmerer
Creación del Banco Central de Bolivia BCB
Un amor Creación de la Superintendencia de Bancos
desenfrenado Creación de la Contraloría General de la República de Bolivia
por la libertad
Primeros conflictos en el Chaco con el ataque paraguayo al Fortín Vanguardia
Antología de la
historia política Realización del primer Congreso Nacional de estudiantes Universitarios en Cochabamba,
de Bolivia donde se aprobó el primer programa de principios del movimiento estudiantil reformista
(1825-2020)
Los estudiantes de colegios secundarios de La Paz iniciaron protestas por retrasos en el
pago de los salarios a los maestros
828
1929 La gran depresión cae la bolsa de valores de NY MUNDIAL
Creación de la Asociación de Productores de Estaño
Conferencia Nacional de trabajadores
Tomo I
1825-1952 Convención Nacional de Mujeres
Creación de la Academia Boliviana de la Lengua
Creación de la Academia Boliviana de Historia
Creación de la primera radio en Bolivia: Radio Nacional (emisora privada)
1930 Getulio Vargas se convirtió en jefe del Gobierno Provisorio con amplios poderes, Brasil Latinoamericano
Se gestó la denominada “Revolución de junio” en Oruro que provocó la caída del
presidente Hernando Siles
Junta Militar
Gobierno de facto: Carlos Blanco Galindo
IV Congreso Nacional de Trabajadores o también llamado el Primer Congreso Libertario
Se concedió mediante decreto la Autonomía y el Cogobierno docente-estudiantil, en la
Universidad Nacional
Inauguración de la primera planta generadora de energía eléctrica en Zongo, La Paz
(Bolivian Power Compay)
Fundación de la Sociedad Arqueológica de Bolivia
1931 Inglaterra abandona el patrón oro MUNDIAL
Bolivia rompe relaciones con Paraguay
Construcción de la refinería en Camiri
Fundación de la escuela Ayllu de Warisata, La Paz
Fundación de la Cámara de Fomento Industrial (CFI)
1932 Inicio de la Guerra del Chaco
Ley de Gobiernos departamentales
Año Descripción
1933 Adolf Hitler, líder del partido nazi, toma el poder en Alemania MUNDIAL
Fundación de Radio Illimani, radio estatal
1934 El presidente Daniel Salamanca dimitió ante la presión de jefes militares que participaban
en la Guerra del Chaco mientras los soldados combatían en Cañada Strongest; este
episodio se conoció como “Corralito de Villamontes”
1935 Se firmó el Protocolo de Paz que puso fin a las hostilidades y consolidó un acuerdo entre
Bolivia y Paraguay para dar fin a la Guerra del Chaco
Fundación del Partido Obrero Revolucionario (POR) en un congreso en Córdoba,
Argentina, convocado por Gustavo Navarro y otros radicales bolivianos que se
encontraban en el exilio
Se publicó Aluvión de fuego de Oscar Cerruto
1936 Creación de Yacimientos Petrolíferos Fiscales Bolivianos (YPFB)
Se publicó Sangre de Mestizos de Augusto Céspedes
1936 Guerra Civil Española que duró hasta 1939 MUNDIAL
Creación del primer Sindicato Agrario del país en el cantón Huasacalle de la provincia de
Cliza, Cochabamba
1937 Las concesiones de la Standard Oil en Bolivia fueron declaradas nulas y revertidas al
Estado, la primera corporación internacional nacionalizada en América Latina
Creación del Banco Minero con capital mixto
Fundación de la Falange Socialista Boliviana (FSB)
Creación de logias militares posteriores a la guerra del Chaco por jóvenes oficiales. Las
más influyentes de esos años fueron la “Santa Cruz” que se conocía públicamente y la
RADEPA (Razón de Patria) que funcionó primero secretamente
1938-1952
829
Año Descripción
1938 Convención Nacional
Gobierno de facto: Tcnl. Germán Busch Becerra Línea de tiempo
1952-1963
Año Descripción
1952 Estallido de la Revolución Nacional el 9 de abril; activa participación de pobladores
paceños, artesanos, fabriles y mineros
Asume el poder el MNR, presidente interino Hernán Siles; posteriormente asume Paz
Estenssoro al retornar del exilio
V Congreso de Maestros
Aprobación del Estatuto de la Educación Nacional
Fundación de la Central Obrera Boliviana (COB)
Firma del decreto de nacionalización de las minas y creación de la Corporación Minera
de Bolivia
Aprobación del Voto Universal
Creación del Instituto Cinematográfico de Bolivia (IBC)
Creación del Ministerio de Asuntos Campesinos
Creación de la Confederación Nacional de Campesinos de Bolivia
1953 Firma del Decreto de Reforma Agraria
Indemnización a los antiguos propietarios por la nacionalización de las minas
1954 Inauguración de la primera carretera asfaltada del país, entre Cochabamba y Santa Cruz
831
Primer Congreso Nacional de Trabajadores, en la era post 52, convocado por la COB
Misión norteamericana llega a La Paz
Inicio de la Dictadura militar de Alfredo Stroessner en Paraguay que dura hasta 1989 Latinoamericano Línea de tiempo
1955 Inauguración del Ferrocarril Santa Cruz-Corumbá
Código del Petróleo con incentivos para compañías petroleras extranjeras conocido
como “Código Davenport”
Conferencia Nacional de Dirigentes Universitarios
Código de la Educación Boliviana
Tras una serie de hechos de violencia el presidente Juan Domingo Perón es derrocado, Latinoamericano
Argentina
Pacto de Varsovia MUNDIAL
1956 Código de Seguridad Social
Reforma del sistema electoral y creación de la Corte Nacional Electoral y cortes
departamentales
Ley de Cooperativas
Primer plan de estabilización con apoyo del FMI
Se suscribió un convenio entre la South American Gold and Platinium Compañy y el
Estado boliviano
1957 Inauguración del ferrocarril Santa Cruz - Yacuiba
Se creó la Fuerza Aérea como nueva rama del Ejército
Inauguración de la primera Normal Industrial de Bolivia y la Escuela de Artes y Oficios
en Cochabamba
El Comité Cívico pro Santa Cruz envió una carta al mandatario Hernán Siles Suazo para
exigir la promulgación de la ley interpretativa de las regalías petroleras
Año Descripción
1957 El Gobierno de Hernán Siles Suazo movilizó parte del Ejército nacional a las cercanías
de Santa Cruz, por el norte a Montero y por el oeste a Tarumá debido a las tensiones
alrededor de las regalías
II Congreso Nacional de Trabajadores
Reorganización del Ejército
Se publicó Tihuanacu, La Cuna del Hombre Americano. Tomo II de Arthur Posnansky
1958 Finaliza la construcción del oleoducto a Arica
Segundo Congreso Nacional de Universidades Bolivianas, Sucre
Tras una revuelta de la Falange Socialista Boliviana (FSB), el Gobierno central aprovechó
ese levantamiento para tomar Santa Cruz, con el Ejército, las milicias armadas de Cliza
y Ucureña, además de mineros de Huanuni y Colquiri donde se produjo la Masacre de
Terebinto
CEPAL realizó el trabajo Desarrollo Económico de Bolivia
1959 Revolución Cubana MUNDIAL
Se publicó Los deshabitados de Marcelo Quiroga Santa Cruz
Ley reconoce los ingresos de regalías para departamentos productores de petróleo
Intento de derrocar al gobierno del MNR por la Falange Socialista Boliviana (FSB); 14
dirigentes mueren, además de su jefe nacional Oscar Unzaga de la Vega y su colaborador
René Gallardo
Un amor
desenfrenado 1961 Reforma Constitucional sancionada por el Congreso Nacional Extraordinario el 31 de
por la libertad julio de 1961 y promulgada el 4 de agosto del mismo año durante el gobierno de Víctor
Paz Estensoro
Antología de la
historia política Proyecto de colonización de Alto Beni a cargo de la Corporación Boliviana de Fomento
de Bolivia (CBF) y la Agencia de Estados Unidos para el Desarrollo Internacional (USAID)
(1825-2020)
Construcción del muro de Berlín MUNDIAL
Congreso Nacional Extraordinario
832
Gobierno electo: Dr. Víctor Paz Estensoro
1962 Bolivia rompe relaciones diplomáticas con Chile por desviar las aguas del río Lauca sin
consentimiento de las autoridades bolivianas
Tomo I Creación de la Confederación de Empresarios Privados de Bolivia
1825-1952
Llegaron al país 35 voluntarios del Cuerpo de Paz desde Estados Unidos
1963 Expansión del proyecto de colonización de la CBF al Chapare y Yapacaní
XIII Congreso de Trabajadores Mineros en Colquiri
Asesinato de John F. Kennedy MUNDIAL
Se fundó el Partido Revolucionario de Izquierda Nacionalista (PRIN)
1964-1981
Año Descripción
1964 Conflicto armado en Colombia Fuerzas Armadas Revolucionarias de Colombia - Ejército Latinoamericano
del Pueblo FARC-EP
El presidente João Goulart fue derrocado por un golpe de estado y se instauró la dictadura Latinoamericano
militar de Humberto de Alencar Castelo Branco
Ley de Reforma Agraria y Colonización en Ecuador Latinoamericano
Golpe de Estado que puso en la presidencia a una junta militar dirigida por el general de
aviación René Barrientos Ortuño
Inicio del Pacto Militar Campesino
1965 Guerra de Vietnam MUNDIAL
Se inició huelga general por la Central Obrera Boliviana (COB)
Intervención militar y bombardeo al distrito minero de Milluni; estas acciones se repitieron
cuatro meses después en los distritos de Catavi y Siglo XX
Año Descripción
1966 Inicio de la revolución Cultural China MUNDIAL
Ley de Seguridad del Estado
Ley de Inversiones y nuevo Código de Minería
Fundación de la Universidad Católica Boliviana (primera universidad privada)
1967 Asamblea Constituyente y reforma Constitucional
Gobierno electo: Gral. René Barrientos Ortuño
Inició de Guerrilla de Ñancahuazú, grupo guerrillero de orientación comunista pro cubana
comandada por Ernesto Che Guevara
Creación del Ejército de Liberación Nacional (ELN)
Masacre minera de San Juan, intervención militar en centros mineros con la intención de
evitar la formación de una nueva guerrilla; se atacó a hombres, mujeres y niños a quemarropa
Muere Ernesto Che Guevara en La Higuera
Bolivia se adhiere a la Asociación Latinoamericana de Libre Comercio
Publicación Réquiem para una República de Sergio Almaraz
Ley de Creación de los Consejos Regionales de Desarrollo
Creación del Ministerio de Cultura
1968 Inauguración del Aeropuerto Internacional JF Kenedy en El Alto
Manifestaciones estudiantiles en París MUNDIAL
Asesinato de Martín Luther King MUNDIAL
Represión plaza de Tlatelolco, México Latinoamericano
Juan Velasco Alvarado dirigió un golpe de Estado contra el gobierno del presidente Latinoamericano
Fernando Belaunde resultado de este episodio se nombró a Juan Velasco Alvarado como
presidente del Perú
1969 Creación del Pacto Andino Latinoamericano
Murió el presidente René Barrientos en un accidente aéreo; le sucedió Luis Adolfo Siles 833
Salinas
Golpe de estado militar dirigido por el General Alfredo Ovando de orientación nacionalista
Derogación del Código de Petróleo “Davenport” y se decidió la Nacionalización de los Línea de tiempo
bienes de la Gulf Oil Company
Tragedia de Viloco, accidente aéreo del Lloyd Aéreo Boliviano en el que viajaba el equipo
Club The Strongest
Inauguración del canal estatal Televisión Boliviana
1970 Inicio de la Guerrilla de Teoponte; un grupo de jóvenes partió de La Paz hacia el norte del
departamento para formar una guerrilla inspirada en el espíritu de la Guerrilla del Che
Quinto Congreso de la COB
XIV Congreso Nacional Minero
Primer Congreso Pedagógico
Se inició exportaciones agrícolas de azúcar y algodón
Se crearon las primeras corporaciones de desarrollo regional en La Paz y Tarija
Firma del Convenio de Educación Andrés Bello
Inauguración de la planta de fundición de estaño en Vinto
Salvador Allende triunfó en las elecciones presidenciales y dos meses después el Latinoamericano
Congreso lo ratificó como presidente de Chile
1971 El gobierno de Juan José Torres, que había asumido el poder en octubre de 1970, decidió
expulsar a los Cuerpos de Paz de Bolivia luego de casi una década de operaciones
Golpe Militar de Hugo Banzer Suarez
Congreso Sindical Campesino considerado la cuna del katarismo a nivel sindical
Congreso FSTMB. Universitarios aprueban tesis socialista y deciden salir en masa a
alfabetizar con la COB y no con el “gobierno capitalista”
Se inició la exportación de gas natural a Argentina
Año Descripción
1971 Se inició la exportación de estaño fundido y refinado
Fundación del partido Movimiento de Izquierda Revolucionaria (MIR)
Fundación del Partido Socialista
Cierre de Universidades por 14 meses
1972 Creación de la Ley General de Hidrocarburos
Creación de la Ley de Municipalidades
Creación de la Ley de Universidades
Creación de Códigos Penal y de Familia
1973 Tratado de Paz para terminar con la Guerra de Vietnam (París) MUNDIAL
Augusto Pinochet protagonizó Golpe de estado que acabó con el gobierno socialista de Latinoamericano
Salvador Allende
Golpe de estado del político-ganadero Juan María Bordaberry el inicio de la dictadura Latinoamericano
cívico-militar en Uruguay
Nueva Ley de Reforma Agraria en el Ecuador Latinoamericano
1974 Masacre del valle (Tolata, Epizana, Melga, Sacaba), Cochabamba; intervención de los
militares a bloqueos en diferentes regiones; al menos 80 muertos, varios desaparecidos
y heridos
Decreto 11947 prohíbe la actividad política y Sindical
Un amor Suscripción del convenio de venta de gas natural a Brasil
desenfrenado
por la libertad 1975 Plan Cóndor Latinoamericano
Antología de la
Detención de líderes políticos junto a el ingreso de fuerzas policiales y paramilitares en
historia política Siglo XX, Catavi y Llallagua
de Bolivia
(1825-2020)
El Acuerdo de Charaña; reunión entre los dictadores de Bolivia y Chile, generales Hugo
Banzer y Augusto Pinochet donde se restablecieron las relaciones diplomáticas entre
ambos países
834
Conmemoración del Sesquicentenario de la República de Bolivia
Creación de la Biblioteca del Sesquicentenario para recuperar textos monográficos de la
historia boliviana (20 tomos)
Tomo I 1976 Asesinato del expresidente Juan José Torres en Buenos Aires
1825-1952
Creación del Instituto Boliviano de Cultura
Tercer Censo de Población del siglo XX
Creación clandestina de la Asamblea Permanente de Derechos Humanos de Bolivia
(APDHB)
XVI Congreso de Trabajadores Mineros de Bolivia en Corocoro
Golpe de Estado militar por el general Jorge Rafael Videla Latinoamericano
en Argentina
1977 Creación del Código de Comercio
Inicio de huelga de hambre de cuatro mujeres mineras exigiendo al gobierno del general
Banzer la amnistía para los perseguidos políticos de la dictadura
Publicación de Llallagua de Roberto Querejazu
1978 Retorno de exiliados y liberación de los presos políticos. La COB, FSTMB y otros
sindicatos salen de la clandestinidad
Ruptura de relaciones diplomáticas con Chile
Fundación del partido Frente Revolucionario de Izquierda (FRI)
Fundación de Unidad Democrática y Popular (UDP) alianza formada por exiliados
bolivianos, Hernán Siles Zuazo por el MNRI y Antonio Araníbar por el MIR
Elecciones presidenciales después de 12 años de golpes militares; el proceso es anulado
y un nuevo golpe de estado define la presidencia para el General Juan Pereda
Nuevo Golpe coloca al General David Padilla para que convoque a nuevas elecciones
Año Descripción
1979 Elecciones generales no logran un vencedor. Por designación, del Congreso el abogado Walter
Guevara Arze fue nombrado presidente interino para llamar a nuevas elecciones generales
Golpe de estado del General Alberto Natush Busch con violentas represiones y resistencia
popular
Masacre de Todos Santos fuerte represión en la ciudad de La Paz, más de 200 muertos,
125 desaparecidos y alrededor de 200 heridos
El Congreso eligió a Lidia Gueiler como presidenta de la República, convirtiéndose en la
primera mujer en asumir el cargo
Fundación de la Confederación Sindical Única de Trabajadores Campesinos de Bolivia
(CSUTCB)
Fin del Pacto Militar Campesino
Fundación del partido Acción Democrática Nacionalista (ADN)
Triunfo de la revolución sandinista en Nicaragua Latinoamericano
1980 Unión Soviética invade Afganistán MUNDIAL
Nuevas elecciones presidenciales, victoria de la Unión Democrática y Popular (UDP) con
Hernán Siles Zuazo
Golpe de estado de Luis García Meza y Luis Arce Gómez desconoce el resultado de las
elecciones. En el asalto al edificio de la COB paramilitares asesinaron el ex diputado de
la UPD, Juan Carlos Flores Bedregal, al dirigente minero Gualberto Vega Yapura y al líder
socialista, Marcelo Quiroga Santa Cruz
Se elimina el impuesto a la exportación
Fundación de la Confederación Nacional de Mujeres Campesinas Bartolina Sisa (FNMC/BS)
Inicio de transmisiones de televisión a color
1981 Asesinato de ocho dirigentes del MIR en la calle Harrington de La Paz
1982-1999 835
Año Descripción
1982 Retorno a la democracia Línea de tiempo
Siles Zuazo fue elegido presidente; de esta forma se reconoció el triunfo en las elecciones
de 1980 al mando de la UDP
Creación de la Confederación Indígena del Oriente Boliviano (CIDOB)
Flotación del peso en relación al dólar
1983 Inauguración del aeropuerto internacional de Viru Viru en Santa Cruz
Consigue la personería jurídica la Asociación de Detenidos Desaparecidos y Mártires por
la Liberación Nacional - ASOFAMD
Deportación a Francia del nazi Klaus Barbie
Desdolarización de la economía
Creación de la zona franca de Cobija
Servicio Nacional de Alfabetización y Educación Popular (SENALEP) por D.S. 18841 que
inició el Plan Nacional de Alfabetización y Educación Popular
1984 Fuerte episodio hiperinflacionario que dura 17 meses; los precios llegaron a aumentar
625 veces
Inauguración de la planta de Fundición Karachipampa en Potosí
1985 Hernán Siles Zuazo aceptó acortar en un año su mandato y llamar a nuevas elecciones el
6 de agosto de 1985
Nuevas elecciones generales, las primeras con continuidad constitucional. Victoria del
MNR con V. Paz Estenssoro
Promulgación del DS 21060 con el fin de revertir la crisis financiera, liberación de la
economía con la regulación de las empresas y la inversión extranjera
Cierre de minas estatizadas y despido (“relocalización”) masivo de trabajadores mineros
Ley Orgánica de Municipalidades
Año Descripción
1986 Marcha por la Vida movilización popular en contra de la relocalización y la perdida de las
fuentes laborales
Acuerdos con el FMI
Asesinato de Noel Kempff Mercado en Santa Cruz. Protesta ciudadana contra el avance
del narcotráfico en Bolivia
Inicio del Juicio de Responsabilidad contra exdictador Luis García Meza y sus
colaboradores, que será condenado a 30 años de cárcel sin derecho a indulto
Plan Trienal de Lucha contra el Narcotráfico
1987 Primeras Elecciones Municipales
Fundación del partido Movimiento al Socialismo-Unzaguista (MAS-U), posterior sigla
para el MAS /Instrumento por la Soberanía para los Pueblos
Creación de la Asamblea del Pueblo Guaraní (APG)
Nuevas leyes y reformas económicas para la modernización del Estado. Cambio del Peso
boliviano al Boliviano; hiperinflación fue controlada
1988 Fundación de los partidos Conciencia de Patria (CONDEPA) CONDEPA y Unidad Cívica
Solidaria (UCS)
Visita del Papa Juan Pablo II, primer papa que visita Bolivia
Ley 1008 para encarar el narcotráfico
1989 Cae el muro de Berlín, Alemania MUNDIAL
Un amor
desenfrenado Remedios Loza es la primera diputada de pollera del partido CONDEPA
por la libertad
Fundación de la Central de Pueblos Indígenas del Beni
Antología de la
1990 Marcha por dignidad y el territorio de grupos indígenas de tierras bajas del norte y este
historia política
de Bolivia del país hacia La Paz
(1825-2020)
Nuevas elecciones consolidad democracia, aunque sin mayorías suficientes. Jaime Paz
del MIR es nombrado presidente, aunque quedó en tercer lugar; alianza con ADN.
836 1991 Nacimiento del MERCOSUR Latinoamericano
Creación de nuevo Código de Minería
Creación de la Ley del Cine Boliviano
Tomo I Ingreso la tecnología de telefonía celular a Bolivia
1825-1952
1992 Bolivia firma con Perú un acuerdo de acceso comercial al puerto de Ilo mediante un
comodato denominado Convenio de Amistad, Cooperación e Integración “Gran Mariscal
Andrés de Santa Cruz”
Cuarto Censo de Población y Vivienda en el siglo XX
Creación de leyes de Inversiones y Privatizaciones
Creación de Ley de Derechos de Autor
Nombramiento de Corte Electoral, Jueces de la Corte Suprema y Controlador General de
la República con base en méritos profesionales
1993 Se condena a Luis García Meza y Luis Arce Gómez
Congreso Nacional
Gobierno Electo: Gonzalo Sánchez de Lozada como presidente y Víctor Hugo Cárdenas
como el primer aimara vicepresidente
Creación de Ley de Reformas a la Constitución
Creación de Ley de Exportaciones, Bancos y Entidades Financieras
Suscripción entre YPFB y Petrobras del contrato de venta de gas a Brasil
1994 Creación de la Ley 1551 de Participación Popular
Creación de la Ley de Capitalización
Creación de la Ley de Reformas a la Constitución
Creación de la Ley 1565 de Reforma Educativa
Nelson Mandela elegido presidente de Sudáfrica MUNDIAL
Ejército Zapatista de Liberación Nacional (EZLN) Chiapas, México Latinoamericano
Año Descripción
1995 Promulgación de la primera Constitución multicultural boliviana
Muere el líder del UCS Max Fernández
Creación de la Ley del Banco Central de Bolivia
Creación de la Ley de Descentralización Administrativas
Creación de la Ley de Telecomunicaciones
Creación de la Ley contra la violencia doméstica
Extradición del Brasil del exdictador Luis García Meza
Capitalización de ENTEL
1996 Creación del Instituto Nacional de Reforma Agraria
Bolivia ingreso al MERCOSUR
Creación de la Ley de Pensiones
Creación de la Ley INRA
Creación de la Ley Forestal
Capitalización de Yacimientos Petrolíferos Fiscales Bolivianos (YPFB)
Capitalización de Empresa Nacional de Ferrocarriles del Estado (ENFE)
Creación de la aerolínea AEROSUR
Reunión de la Comisión Andina de Naciones, CAN, en Sucre
Secuestro masivo de la organización terrorista peruana Movimiento Revolucionario Túpac Latinoamericano
Amaru (MRTA); entre los secuestrados estuvo el embajador de Bolivia Jorge Gumucio
Año Descripción
1997 Encuentran los restos de Ernesto Che Guevara y de otros guerrilleros en Vallegrande,
Bolivia
El partido MAS se fusiona con el Instrumento de la Soberanía Popular y la Confederación
de Trabajadores del Trópico Cochabambino (MAS-IPSP)
837
Muere Carlos Palenque el líder de Conciencia de Patria (CONDEPA)
Introducción de la diputación uninominal
Ley del Defensor del Pueblo
Línea de tiempo
Capitalización del Lloyd Aéreo Boliviano (LAB)
1998 Inauguración del gasoducto a Brasil
Programa HIPC de alivió a la deuda externa
Creación de la Ley del Mercado de Valores
Creación de la Ley del Tribunal Constitucional
Creación de la Ley de Propiedad y Crédito Popular
Creación de la Ley de Seguros
Reforma al Poder Judicial
1999 Se otorga la administración de las normales a las universidades
Nueva Ley de Partidos Políticos
Creación de la Ley General de Aduanas
Creación de la Ley del Niño, Niña y Adolescente
2000-2020
Año Descripción
2000 Guerra del Agua en Cochabamba
Se funda el Movimiento Indígena Pachakuti (MIP)
Muere en Santa Cruz Roberto Suarez Gómez, conocido como el “Rey de la cocaína”
Protestas alrededor de mejores salarios para profesores se suma el movimiento campesino
Año Descripción
2001 Primer Censo de Población y Vivienda en el siglo XXI
Muere el expresidente Víctor Paz Estenssoro
Sucesión Constitucional
El presidente Hugo Banzer dimite a la presidencia por enfermedad dejando el cargo a su
vicepresidente Jorge Tuto Quiroga
Atentados a las dos Torres Gemelas en Nueva York, Estados Unidos; se agravan conflictos MUNDIAL
con Irak, Irán y otros países árabes
“Corralito” financiero en Argentina Latinoamericano
2002 Desastre natural excepcional una granizada azota la ciudad de La Paz
Muere el expresidente Hugo Banzer Suarez
Elecciones Generales
Congreso Nacional: Gonzalo Sánchez de Lozada fue reelegido presidente, recibiendo 84
votos en el Congreso contra 43 votos por Evo Morales
2003 Movilización popular provocada por un “impuestazo al salario” terminó con 36 fallecidos,
entre policías, militares, vecinos y estudiantes, además de más de 200 heridos “Febrero
negro”
Gonzalo Sánchez de Lozada decide exportar a Estados Unidos gas por puertos chilenos.
Tras la decisión, la población boliviana inició las protestas lideradas en el altiplano por
Felipe Quispe “el Mallku” el suceso se convierte en la Guerra del Gas en El Alto y La Paz
Un amor Congreso Nacional ante la renuncia de Sánchez de Lozada
desenfrenado Sucesión constitucional: Carlos Mesa
por la libertad
Fundación del partido Frente de Unidad Nacional (UN)
Antología de la
Ignacio Lula da Silva del Partido de los Trabajadores (PT) es elegido presidente del Brasil. Latinoamericano
historia política
de Bolivia 2004 Referéndum sobre la venta de gas a Chile y el futuro de los hidrocarburos en Bolivia
(1825-2020)
2005 Carlos Mesa renuncia a la presidencia. Congreso Nacional aprueba la sucesión
constitucional y elige a Eduardo Rodríguez V., presidente de la Corte Suprema de Justicia
838
Fundación del Partido Poder Democrático Social (Podemos)
Quiebra administrativa del Lloyd Aéreo Boliviano
El Movimiento al Socialismo (MAS-IPSP) gana las elecciones nacionales extraordinarias;
Tomo I presidente Evo Morales Ayma y vicepresidente Álvaro García Linera
1825-1952
2006 Convocatoria a la Asamblea Constituyente con la Ley 3364
Decreto Supremo 28701 “Héroes del Chaco”, reactivando a Yacimientos Petrolíferos
Fiscales Bolivianos (YPFB) como la empresa más importante del país
Enfrentamientos entre cooperativistas mineros y trabajadores asalariados de la Empresa
Minera Huanuni en el cerro Posokoni
2007 Bloqueos y enfrentamientos en Cochabamba contra el prefecto Manfred Reyes Villa
Se nacionalizó la Empresa metalúrgica detentada por la empresa Sinchi Wayra bajo el
nombre de Empresa Metalúrgica de Vinto (EMV)
Decreto Supremo Nº 29318 crea la Empresa Pública Nacional Estratégica denominada
“Boliviana de Aviación” cuya sigla es “BOA”
2008 Se decide expulsar al embajador de Estados Unidos en Bolivia, Philip Goldberg
Se expulsa a la DEA y suspenden sus operaciones en el territorio boliviano
El Decreto Supremo 29544 nacionalizó la Empresa Nacional de Telecomunicaciones, ENTEL
Campesinos son humillados en la ciudad de Sucre cuando aguardaban la llegada del
presidente boliviano Evo Morales
Masacre de Porvenir (Pando); se inició un proceso contra el ex prefecto de esa región,
Leopoldo Fernández
Creación de la Empresa Boliviana de Industrialización de los Hidrocarburos (EBIH)
Refundación como empresa pública nacional estratégica y corporativa de ENDE mediante
Decreto Supremo Nº 29644
El precio del barril de petróleo alcanzó un récord histórico de 147 dólares por barril MUNDIAL
El primer presidente negro de Estados Unidos, Barack Obama MUNDIAL
Año Descripción
2009 Asamblea Constituyente y Congreso Ordinario
Gobierno electo: Evo Morales Ayma
Operativo de la policía denominado asalto en el Hotel Las Américas (Santa Cruz de la
Sierra), tuvo fallecidos y detenidos
Nueva constitución boliviana entra en vigencia después de ser aprobada en un referendo.
Creación del Estado Plurinacional de Bolivia
Golpe de Estado en Honduras MUNDIAL
2010 Ley de autonomías y descentralización
Ley de Educación “Avelino Siñani - Elizardo Perez”
Protestas masivas que consiguieron la derogación del decreto supremo 748 llamado
“gasolinazo” que buscó nivelar los precios de los carburantes
La primavera árabe, movimiento que derrocaría a líderes de Túnez, Egipto, Yemen y Libia MUNDIAL
2011 VIII Marcha en defensa del Territorio Indígena y Parque Nacional Isiboro Sécure (TIPNIS)
contra la construcción de una carretera en medio del bosque
Violenta intervención policial en Chaparina, Beni en el marco de la VIII marcha
Conflictos sectoriales por el incremento de salarios con los trabajadores de salud y
magisterio
2012 Senado de Paraguay realiza un juicio “express” al presidente Fernando Lugo destituyéndolo Latinoamericano
del cargo
Segundo Censo de Población y Vivienda del siglo XXI
Creación de la Ley 222 que convirtió al tema del Territorio Indígena y Parque Nacional
Isiboro-Sécure TIPNIS en sujeto de consulta pública, lo que afectó en gran medida los
alcances de la Ley 180 que declaró al TIPNIS patrimonio sociocultural y natural
IX Marcha Indígena en defensa del Territorio Indígena y Parque Nacional Isiboro-Secure
TIPNIS
Decreto Supremo 1126 restableció las ocho horas de jornada laboral en el sector de salud,
839
reemplazando la previa jornada laboral de seis horas; esta medida trajo un conflicto de 52
días que obligó a la abrogación del decreto
Enfrentamiento entre mineros cooperativistas y asalariados, estos últimos pertenecientes
a la reactivada e histórica Corporación Minera de Bolivia (COMIBOL) Línea de tiempo
Tomo I Reino Unido lanzó el proceso de salida de la Unión Europea, nueve meses después del MUNDIAL
1825-1952 referéndum que dividió al país
Después de cuatro meses de violentas manifestaciones, Venezuela eligió una Asamblea Latinoamericano
Constituyente, dotada de poderes ilimitados
IX Congreso del Movimiento al Socialismo (MAS) que se realizó en Montero, Santa Cruz
Tribunal Constitucional Plurinacional (TPC) con la sentencia 084/2017 anuncia la
habilitación del presidente Evo Morales y Álvaro García Linera para presentarse en las
elecciones del 2019
Asalto a la remesa de Brinks, en Roboré, y el atraco frustrado a la joyería Eurochronos
en Santa Cruz
Escándalo sobre millonario desfalco de 37,6 millones de bolivianos al Banco Unión
2018 El Órgano Electoral Plurinacional habilitó la candidatura del binomio Morales-Álvaro
García Linera sin subordinarse al referendo de 2016
Corte Internacional de Justicia (CIJ) da fallo por 12 votos contra 3, concluyendo que la
República de Chile no contrajo la obligación de negociar un acceso soberano al mar para
el Estado Plurinacional de Bolivia
Comunidad Ciudadana (abreviado como CC) es una alianza política boliviana conformada
por los partidos políticos Frente Revolucionario de Izquierda (FRI), Chuquisaca Somos
Todos (CST) y la Agrupación Ciudadana Jesús Lara (ACJL)
Jair Bolsonaro militar y político ultraderechista apoyado por el Partido Social Liberal ganó Latinoamericano
las elecciones presidenciales de Brasil
Año Descripción
2019 Multitudinaria marcha exigió respeto al 21F, al recordar el tercer año del referendo
donde se rechazó proyecto de modificación constitucional para permitir la reelección del
presidente o vicepresidente
Elecciones Nacionales
Transmisión de resultados Electorales Preliminares (TREP) se paralizó al 83,76% del
conteo de los votos, horas más tarde Evo Morales se declaró como ganador provocándose
una ola de protestas y tensión social que duro 21 días
Evo Morales frente a la crisis política informó a través de una conferencia de prensa su
renuncia y salió a México
Tras la renuncia de varias autoridades, la senadora Jeanine Áñez Chávez se proclamó
presidente interina del Estado Plurinacional de Bolivia
Incendios forestales en Brasil y Bolivia consumieron miles de hectáreas del “pulmón
verde” del planeta promoviendo un fuerte impacto internacional
Alberto Fernández del Partido Justicialista (PJ) y candidato por la coalición Frente de Latinoamericano
Todos, con la expresidenta Cristina Fernández de Kirchner como compañera de fórmula
obtiene la victoria de las Elecciones Nacionales en Argentina
El narcotraficante mexicano Joaquín “Chapo” Guzmán Loera, líder del Cártel de Sinaloa y Latinoamericano
el hombre más buscado por la Interpol es sentenciado a cadena perpetua y 30 años más
de prisión
Una serie de medidas económicas por parte del presidente Lenin Moreno en Ecuador Latinoamericano
provocó varias protestas que terminaron con fallecidos, heridos y detenidos
Protesta en contra del aumento de $30 en el costo del metro de Santiago de Chile se Latinoamericano
convirtió en un movimiento social que el presidente Sebastián Piñera declaró Estado de
Emergencia y toque de queda, sacando a los militares a la calle
2020 Elecciones generales de Bolivia
Ganadores en primera vuelta al binomio del Movimiento al Socialismo (MAS) Luis Arce
Catacora y David Choquehuanca
841
Pandemia COVID-19 y procesos de cuarentena con cierres de aeropuertos en todo el MUNDIAL
mundo
Línea de tiempo
Plebiscito Nacional de Chile 2020 donde se aprobaron las reformas a la Constitución Latinoamericano
Política de la República, promulgada en 1980, durante la dictadura militar de Augusto
Pinochet
Lista de autores
Tomo I
Ha trabajado:
1) los partidos políticos y los discursos partidarios en las competencias
de poder entre las elites, la construcción de la ciudadanía
2) a través de la infracción electoral (18826-1952) y
3) a través del ejercicio de la violencia sancionada por la Constitución
(1839-1875).
Actualmente investiga el discurrir del poder legislativo en el siglo XIX
boliviano, en concreto su interacción con la sociedad y su proyección/relevancia en la conforma-
ción de lo político y lo público.
845
BROOKE LARSON