TECNOLÓGICO DE ANTIOQUIA - INSTITUCIÓN UNIVERSITARIA

SEDE - ROBLEDO

TEMA

INFORME SOBRE EL CASO DIH-ESTADO DE PEROVIA

ASIGNATURA

DERECHO INTERNACIONAL II

ESTUDIANTES

JUAN DAVID MINOTTA QUINTO

CRISTIAN MORENO LONDOÑO

PROFESOR

JOSE FERNANDO TOLEDO PERDOMO

HORARIO

MARTES - JUEVES 2 – 4 PM

FECHA

16/11/2021
 INFORME CASO DIH-ESTADO DE PEROVIA

I. INTRODUCCIÓN

I.1 RECONSTRUCCIÓN DE LOS HECHOS

El 25 de mayo de 2002 a las cuatro de la mañana ingresaron al

corregimiento de Melut, del municipio La Libertad, departamento de
Arafura, un grupo de aproximadamente 60 hombres, quienes iban
caminando, vestían uniformes camuflados sin ningún distintivo, solo
un brazalete con la sigla AUCOL, portando armas de largo alcance
(fusiles), cuatro ametralladoras M-60 y dos equipos de lanza llamas.
El sujeto N.N alias el comandante JUDAS, ordenó a un grupo de sus
hombres tomarse el campanario de la iglesia de la localidad con el fin
de controlar el parque principal. Allí empotrarían las dos
ametralladoras M-60; a otro grupo le ordenó que se tomara la
escuela de la localidad y allí estableciera la oficina del comandante;
así mismo un grupo de los combatientes se dirigió a la salida del
pueblo y otro a la entrada para controlar a los habitantes del casco
urbano del Municipio. Por último, el comandante JUDAS y 5 de sus
adeptos se dedicaron a dañar mediante el empleo de explosivos el
acueducto municipal, la central eléctrica y la oficina de teléfonos con
el fin de dejar a la población incomunicada y sometida a su voluntad.
Hacia las diez de la mañana, los miembros del grupo ilegal
convocaron a una reunión obligatoria a todos los habitantes de esa
localidad en la cancha de fútbol del municipio para explicarles las
razones de su presencia y los motivos de su lucha. En el desarrollo de
la reunión, donde la vocería fue tomada por el comandante JUDAS,
un sujeto vestido de militar y quien portaba un pasamontaña se
paseaba lentamente por la multitud seguido por otro miembro del
grupo ilegal, el encapuchado iba señalando unas personas, las cuales
eran tomadas a la fuerza por otros ilegales y conducidas a los
camerinos y baños de la cancha de fútbol, mediante este proceso
recogen a 23 personas que son señaladas como miembros y
auxiliadores de las FARL-EP. Entre las personas retenidas se
encontraban 8 niños entre los 10 y 15 años de edad, 4 mujeres, dos
de ellas en avanzado estado de gravidez y un anciano de 75 años de
edad. Allí fueron amarradas y luego de terminada la reunión,
aproximadamente a las 12 del día, fueron trasladadas en un camión
a un paraje llamado El Valle De Los Lamentos a la salida del pueblo.
Allí fueron acusados de ser guerrilleros o auxiliares de la guerrilla por
el encapuchado, los retenidos fueron sometidos a todo tipo de
torturas físicas, tratos crueles y degradantes, las mujeres fueron
violadas repetidas veces y posteriormente asesinadas a cuchillo, sus
cuerpos cercenados con una motosierra y sus despojos mortales
tirados al río Cáucaso.

Mientras mantuvieron a las personas retenidas en la cancha de

fútbol, un grupo de los hombres comandados por alías JUDAS
ingresaron a una finca cerca al pueblo y obligaron a sus habitantes a
arriar su ganado y el de otras fincas vecinas hacia un puesto de
mando ubicado cerca al pueblo, posteriormente las personas fueron
llevadas a la cancha de fútbol.

Cuando el grupo de criminales regresaba hacia el Municipio en el

camión en que trasladaron a los civiles, estos fueron atacados por un
grupo de guerrilleros de las FARL-EP, con varios cilindros de gas, lo
que generó que el camión se volcara. Dos de los paramilitares
resultaron gravemente heridos y además perdieron sus armas, los
guerrilleros los tomaron prisioneros esperando órdenes del
comandante PILATOS de las FARL-EP, quien ordenó a sus hombres
fusilarlos por lo que acababan de hacer y sin mediar palabra fueron
ajusticiados con tiro en la cabeza. El combate entre estos dos grupos
continuo por espacio de varios minutos, luego se produce un silencio
general, se ordena la inspección del lugar por parte de la guerrilla y
se percata que hay un grupo de 4 paramilitares quienes levantan sus
manos cuando van a ser fusilados por los guerrilleros indicando que
se rinden, los guerrilleros hicieron caso omiso y procedieron a
fusilarlos, los 7 paramilitares restantes murieron en combate,
igualmente 5 guerrilleros murieron en medio del fuego y varios de
ellos quedaron heridos. Un paramilitar se logró escapar y avisar al
resto de sus compinches que estaban en el municipio, quienes
enterados de lo sucedido tomaron las siguientes decisiones: -
combatir hasta el último momento y no dejar ningún miembro de la
guerrilla vivo, utilizando tanto las ametralladoras como los
lanzallamas.

Los miembros de la guerrilla trasladaron a los heridos hacia el casco

urbano con el fin de ingresarlos al Hospital “Dios nos Guarde”, donde
laboraban dos médicos titulados y tres estudiantes de medicina que
realizan su año rural o de servicio a la comunidad, además había un
alto número de personas de la comunidad que por el miedo de lo
ocurrido habían entrado en pánico y crisis nerviosa, al ver la
imposibilidad de atención en el centro médico, el grupo de
guerrilleros se llevaron a los Galenos y a los estudiantes hasta el
lugar donde tenían a sus heridos. Los profesionales de la salud
comenzaron a realizar su trabajo cuando aparecieron varios
helicópteros del Ejército Nacional quienes empezaron a disparar
contra la multitud que se encontraba reunida en la cancha de fútbol,
ocasionando la muerte de varias personas y dejando un gran número
de heridos. Los guerrilleros no sufrieron ninguna baja por estar
escondidos al igual que los miembros de las Autodefensas. Una vez
terminada la incursión de los helicópteros se desencadeno
nuevamente un fuerte combate entre paramilitares y guerrilleros, los
combates más intensos se hacen entre los paramilitares que se
encontraban en la iglesia y los guerrilleros que se encontraban en el
parque principal, allí PILATOS ordenó atacar a la iglesia con cilindros
de gas, los guerrilleros obedecieron y arrojaron consecutivamente 4
cilindros de gas de 40 libras cada uno. Tres de estos hicieron impacto
en la estructura de la iglesia, ocasionando su destrucción y la muerte
de 12 paramilitares y 37 habitantes del pueblo quienes habían
buscado refugio en el templo.

Los guerrilleros que tenían retenidos a los médicos y a los

estudiantes los obligaron a regresar al hospital y allí a atender
primero a sus heridos y luego a las mujeres y niños de la población
civil, allí los guerrilleros fueron atacados con roques y lanza-granadas
por parte de los paramilitares, causando daños cuantiosos y graves a
la sala de cirugía causando la muerte de una enfermera, dos
camilleros, un estudiante de medicina y tres pacientes. Los
guerrilleros se atrincheraron en la sala de urgencias y desde allí
repelaron el ataque.

Finalmente aparecieron unos helicópteros del ejército nacional

quienes al observar lo sucedido, decidieron atacar a las personas que
hostigaban el hospital matando a varios paramilitares y a varios
miembros de la población civil.
Los miembros de las autodefensas que conservaron la vida, en medio
del desespero ingresaron a las instalaciones de los almacenes de
depósito del municipio, en el primer piso funcionaba la oficina de la
Cruz Roja Peroviana, allí encontraron varios uniformes y distintivos
del organismo humanitario, se disfrazaron con el único fin de poder
eludir el control de seguridad dispuesto por los miembros de la
guerrilla.

Una vez terminados los combates y vuelta la calma al Municipio, los

médicos del hospital que ya habían sido dejados en libertad,
atendieron a la población civil, entre los heridos se encontraba una
joven mujer vestida de civil y desconocida por los habitantes.
Presentaba heridas a nivel de tórax y en las extremidades inferiores,
había perdido mucha sangre y los médicos sugirieron que debía ser
remitida a un hospital de mayor capacidad en la Capital que queda a
tan solo dos horas de distancia. Se ordenó el traslado en la
ambulancia del hospital y por la gravedad de la paciente el director
del hospital autorizó la compañía de un médico rural y la enfermera
jefe. Cuando llevaban treinta minutos de recorrido, la ambulancia fue
interceptada por miembros de AUCOL quienes, sin mediar palabra,
ordenaron bajar a los pasajeros de la ambulancia incluida la herida a
quien identificaron como la comandante Carina de las FARL-EP, razón
por la cual es asesinada inmediatamente. Posteriormente pasaron a
interrogar al conductor, al médico y a la enfermera pidiéndoles que
se identificaran. El conductor y la enfermera se identificaron, el
médico había extraviado sus papeles y por tanto fue acusado de ser
guerrillero disfrazado de médico, lo cual causó la ira de los
paramilitares quienes posteriormente asesinaron a los tres.
Finalmente procedieron a incinerar el vehículo.
II. CONCLUSIONES

Con la reconstrucción de los hechos mencionados anteriormente, se

pudo identificar a los autores de varios de los delitos que violan el
DIH, por lo que se les atribuirán a sus diferentes infractores las
responsabilidades de lo cometido y estas violaciones al DIH serán
investigadas y sancionadas por el órgano competente.

1.1 Violación al DIH por parte de AUCOL

El grupo armado de AUCOL es responsable por poner en peligro a la

población civil exponiéndolos al conflicto generado en ese entonces.
De no respetar la dignidad humana, por vulnerar el derecho a la vida,
las garantías judiciales, retener, torturar y asesinar 23 personas
entre las cuales se encontraban niños. Entre las infracciones contra
DIH se incluyen los ataques a civiles destrucción de propiedades
civiles y violencia sexual.

También se le atribuye la vulneración del derecho a la vida del

médico, enfermera y el conductor de la ambulancia en la cual se
estaban transportando que fue interceptada por este grupo ilegal.

Lo infringido se encuentra estipulado en los Convenios de Ginebra

artículo 3 y el artículo 13 del Protocolo II.

Título II – protección general de la población contra ciertos efectos de

la guerra.

1.2 Violación al DIH por parte de las FARL-EP

Se le atribuye la responsabilidad a este grupo ilegal, de exponer a la

población civil mientras emprendía un enfrentamiento con el grupo
armado de AUCOL. Son responsables de la muerte de 37 habitantes
del pueblo quienes habían buscado refugio en el templo, los cuales
murieron junto unos cuantos paramilitares por la explosión de
cilindros de gas en la iglesia.

Lo infringido se encuentra estipulado en el artículo 3 común a los

Convenios de Ginebra y el artículo 13 del Protocolo II.

1.3 Responsabilidad del Estado por violaciones al DIH

Teniendo conocimiento de los hechos anteriormente reconstruidos, el

Estado es responsable por permitir que estos grupos ilegales se
tomaran el corregimiento de Melut y emprendieran a formar un
conflicto entre ellos y así exponiendo a la población civil, por lo que
hicieron caso omiso y no realizaron su respectiva protección a favor
de la población civil, ya que el Estado tiene la obligación de prevenir,
proteger y garantizar el bienestar de la población.