La llamada investigación científica es una forma importante de producción de conocimiento,
pero las universidades producen conocimiento en otras actividades, como el diseño, la arquitectura o el arte. Por lo tanto, sería conveniente ampliar el término para abarcar todas las tendencias, por lo que se recomienda a las universidades considerar la organización del espacio dentro de los sistemas de producción de conocimiento, incluido el espacio para la investigación científica. Las universidades, para restituir sus roles y planificar su futuro, necesitan conocerse a sí mismas, necesitan una reflexión interna, deben clarificar los problemas que se presentan y las intenciones de la institución, y asumir sus tareas igualmente importantes; una reflexión que les puede ayudar a lograr transformación real, y señalar el camino a seguir para el futuro.