Está en la página 1de 1

Si bien las Escrituras nos han sido dadas por Dios para que conociéndolas y profundizando en ellas

crezcamos en el conocimiento y amor de su Hijo Jesucristo, y de este modo alcancemos la Verdad;


y no para que la empleemos como campo o instrumento de combate entre cristianos; dado que se
suele objetar muy duramente a los católicos por algunas prácticas o afirmaciones de fe que, se
dice, están reñidas con la Biblia, parece conveniente esbozar una breve respuesta a algunas de
estas cuestiones.

Jesús es verdadero Dios

Testigos de Jehová, y Mormones niegan la divinidad de Cristo. Con un lenguaje confuso suelen
darle el título de ´hijo de Dios´, pero lo interpretan como de un rango inferior a Dios Padre.

En este sentido hay que considerar ante todo:

Si bien asume el título de Hijo de Dios, y todos somos hijos de Dios, siempre mantiene una clara
distinción entre el modo en que Él es Hijo, y el modo en que lo somos nosotros: "Ustedes oren de
esta manera: ´Padre nuestro...´" (Mt 6,9).

Los signos que realiza Jesús y que lo muestran como Señor de la Vida (resucita muertos), Amo de
todo el mundo creado (calma la tormenta), con poder para perdonar los pecados.

Él mismo se manifiesta Dios cuando asume la función de Legislador al dar a conocer la nueva Ley y
reformar la Ley del Antiguo Testamento: "Ustedes han oído que se dijo... pero yo les digo..." (Cf.
Mt 5).

El Sumo Sacerdote reconoce que Jesús se proclama Dios cuando lo acusa de blasfemia: "¡Ha
blasfemado! ¿Qué falta nos hacen los testigos?..." (Mt 26,65).

Los discípulos lo reconocen como Dios cuando se postran ante Él, y Él admite este gesto que los
judíos reservaban solo para Dios: Mt 20,20; Lc 5,12; Jn 9,38; 11,32.

Además, hay algunas citas bíblicas, que la traducción jehovista deforma, entre otras:

Jn 1,1: "Al principio existía la Palabra, y la Palabra estaba junto a Dios, y la Palabra era Dios."

Autor: Oscar Gerometta

También podría gustarte