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REPÚBLICA BOLIVARIANA DE VENEZUELA

MINISTERIO DEL PODER POPULAR PARA LA EDUCACIÓN


U.E.A. SIMÓN BOLÍVAR
JUDIBANA-
JUDIBANA -ESTADO FALCÓN

ENSAYO
Comunicación, características e importancia en
la adolescencia y entorno familiar

ELABORADO POR:
MICHELLE SCIRETTA
4to AÑO SECCIÓN D
He visto a muchos jóvenes de mi edad que viven en mi comunidad, dedicarse al
pandillaje, a las drogas y al robo. Todos aquellos jóvenes tienen algo en común: no se
sienten amados, comprendidos, ni escuchados. En su interior existe un gran vacío que
nosotros y digo nosotros porque, este es un tema en el cual todos tenemos que
involucrarnos ,grandes y chicos, si quisiéramos podríamos llenar, pero la pregunta es
¿qué podría hacerse? O más bien ¿qué podría hacer una adolescente como yo? Es una
interrogante que me ha llevado a reflexionar mucho, partiendo de la premisa : ¿Qué tan
vacíos están? Es algo que no pasa desapercibido y menos puede ocultarse porque es
una gran verdad. La mayoría de los adolescentes que presentan estos problemas
provienen de familias desechas o rivalizadas entre sí, otras, en cambio a pesar de que
existe una buena convivencia familiar igual se encuentran inmersos en ese gran vacío.
En la definición de familia, las interacciones entre padres e hijos forman un elemento
esencial y constitutivo. En esta relación, la comunicación desempeña un papel
primordial. La familia constituye un sistema de relaciones fundamentalmente afectivas
entre personas que viven juntas, que presentan lazos consanguíneos y que son fuente
de apoyo. Además, la familia es el primer ámbito de socialización en el
individuo, y la comunicación constituye una herramienta fundamental para este
proceso. El sistema familiar es un escenario privilegiado para la transmisión de
valores, creencias, normas y códigos de conducta de una sociedad.
La comunicación en adolescentes es una exploración a todo un mundo de emociones,
aspiraciones, misterios, búsquedas, viajes, y aprendizajes de diversa índole. Para ellos,
todo se trata de vivir el presente, ser ellos mismos, compartir un espacio propio donde
se propicie el encuentro y a la vez el autoconocimiento.

Muchos padres sienten a sus hijos adolescentes distantes o tremendamente reactivos y


se sienten confundidos ante su conducta, sin saber cómo actuar. La etapa de la
adolescencia implica una diferenciación con los roles paternos en busca de una
identidad propia. En ocasiones esa búsqueda de identidad choca con de lleno con
valores o normas familiares, generando frecuentemente conflictos entre padres e hijos.
Además, la familia es el primer ámbito de socialización en el individuo, y la comunicación
constituye una herramienta fundamental para este proceso. El sistema familiar es un
escenario privilegiado para la transmisión de valores, creencias, normas y códigos de
conducta de una sociedad.

La comunicación en adolescentes es una exploración a todo un mundo de emociones,


aspiraciones, misterios, búsquedas, viajes, y aprendizajes de diversa índole. Para ellos,
todo se trata de vivir el presente, ser ellos mismos, compartir un espacio propio donde
se propicie el encuentro y a la vez el autoconocimiento. Muchos padres sienten a sus
hijos adolescentes distantes o tremendamente reactivos y se sienten
confundidos ante su conducta, sin saber cómo actuar. La etapa de la
adolescencia implica una diferenciación con los roles paternos en busca de
una identidad propia.
En ocasiones esa búsqueda de identidad choca con de lleno con valores o normas
familiares, generando frecuentemente conflictos entre padres e hijos. En esta etapa se
hace especialmente necesario que los padres intenten ponerse en el lugar de los hijos,
intentando conocer y comprender esta etapa de desarrollo con el objetivo de poder dar
significado a conductas inherentes a la adolescencia y que en un primer momento
pueden dar la sensación de ser transgresoras, provocadoras y conflictivas.
Algunas actitudes habituales con la llegada de la adolescencia y que suelen ser motivo
de preocupación para la mayoría de los padres son:
Sentir que el adolescente se niega o se cierra ante los intentos de comunicación
por parte de los padres:
padres: muchos padres viven con ansiedad el silencio de sus hijos. Se
preocupan especialmente si creen que hay algún problema que el adolescente se niega
a compartir.
¿Cómo actuar? La comunicación es un proceso de doble vía. Es aconsejable que
nosotros como padres también compartamos nuestras inquietudes con nuestros
hijos adolescentes para servir de modelo. Otro aspecto clave es que tal vez
nuestros hijos nos sientan poco disponibles o se sientan interrogados por
nuestras preguntas. Recomendamos tener paciencia, mostrar disponibilidad,
curiosidad real y utilizar el modelaje.
Sentir que el adolescente nunca está disponible:
disponible puede dar la impresión de que
siempre tiene otros planes, está conectado con sus amigos y la familia pasa a ocupar un
lugar relegado. Podemos pasar de relaciones muy estrechas en la infancia a una
marcada distancia en la adolescencia. Es importante aprender a respetar su necesidad
de espacio. Esto implica renunciar a realizar actividades agradables con ellos.
¿Cómo actuar? Se recomienda mostrar interés por sus aficiones e intereses y no
olvidarnos de proponer (sin atosigar) actividades que podamos realizar
conjuntamente. En cuanto al uso de aparatos tecnológicos, practicar con el
ejemplo y tener claro que prohibir es aumentar el deseo.
Sentir que el adolescente siempre está de mal humor y que salta a la mínima mínima: La
adolescencia es una etapa de múltiples cambios no solo sociales, sino también físicos,
biológicos y neurológicos que hacen que algunos adolescentes estén especialmente
sensibles o reactivos emocionalmente. Es aconsejable no tomarnos esto como algo
personal, aunque esto no significa que debamos tolerar conductas agresivas o
reacciones muy desproporcionadas.
¿Cómo actuar? Tratar de mantener la calma y no desbordarnos ante comentarios del
tipo “te odio”, “me estás amargando la vida” u “ojalá no fueras mi padre/madre”. Si
ante comentarios de este tipo aprendemos a mantenernos serenos y firmes,
ayudaremos a nuestro hijo a autorregularse y le enseñaremos una manera
diferente de responder en situaciones de elevada carga emocional.
Sentir que cada negociación es una batalla a vida o muerte: muerte en su búsqueda de
autonomía e identidad es habitual que el adolescente empiece a cuestionar las reglas y
normas familiares establecidas.
¿Cómo actuar? El adolescente puede o no rebelarse por sistema, pero lo habitual es
que ese desafío a la autoridad paterna se haga para evidenciar el cambio de
etapa. Es muy importante saber elegir las batallas que queremos luchar. Que un
adolescente esté castigado las veinticuatro horas del día no es eficaz y estar todo
el día encerrado tampoco nos va a ayudar a mejorar nuestra forma de
comunicarnos. Para evitarlo, pactar una serie de normas inamovibles y establecer
las consecuencias por su transgresión puede ser una buena base y, a partir de
ahí, estar abiertos a la negociación.
Deja de vivir ese momento de sentarte a hablar con ellos con ansiedad. No te preocupes
más de sus silencios y pregúntate si tú lo estás contando todo.
Una buena comunicación permitirá al adolescente tomar decisiones apropiadas y ante
los errores, tendrá la oportunidad de responsabilizarse de las consecuencias de una
decisión inadecuada.

Hay tres aspectos muy importantes a tener en cuenta:


La comunicación entre adultos y adolescentes es un proceso. No va a suceder de
forma inmediata, hay que ser pacientes y buscar las oportunidades para conocer cuáles
son sus temores y sus alegrías.
La comunicación es de doble vía. Hablar es muy importante, pero sin duda alguna lo
primordial es saber escuchar, para comprender y no para responder. Hay que
intercambiar ideas, pensamientos y emociones desde el respeto mutuo.
No hay juicios. No todo lo que escucharemos, será de nuestro agrado. Es necesario
tener una actitud emocional abierta.

Ya para finalizar, la comunicación en la adolescencia es muy importante porque con ella,


nos podemos evitar muchas discusiones con los mayores e incluso con personas de
nuestra edades. Además, nos hace tener una mejor relación con todos y no nos
estresamos tanto en la adolescencia, pues comunicarnos, sacamos todo lo que tenemos
adentro.
BIBLIOGRAFÍA
Martínez Ferrer, Belén. Investigación y Ciencia. Marzo 2020. Disponible:
https://www.investigacionyciencia.es/revistas/mente-y-cerebro/dormir-para-aprender-
500/comunicacin-familiar-en-la-adolescencia-875

Eresmamá. Febrero 2022. Disponible: https://eresmama.com/formas-comunes-


comunicacion-en-adolescentes/

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