Principio Supremo de todas las por eso antes de empezar cada día cosas: derrama tu luz en mi invocare a tu Santo Espíritu para que inteligencia y aleja de ellas las me auxilie, me guie, me regale tinieblas del pecado y de la concentración y capacidad de ignorancia. Concédeme comprender, para así aprender todo concentración para entender, lo que lea. También te pido el don de memoria para retener, método para la alegría y de disfrutar cada instante aprender, lucidez para interpretar y cada cosa que me toque hacer. expresarme. Ayuda el comienzo de mi trabajo, dirige su progreso y Amen corónalo de Éxito sin fin, por Cristo, nuestro Señor Amen. Sto. Tomas de Aquino