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DERECHO Y SOCIOLOGIA

El Derecho es un conjunto de principios y normas, generalmente inspirados en


ideas de justicia y orden, que regulan las relaciones humanas en toda sociedad y
cuya observancia puede ser impuesta de forma coactiva por parte de un poder
público. El conjunto de principios y normas jurídicas de un Estado constituye
su ordenamiento jurídico. El derecho es el objeto de estudio de la ciencia del
derecho. El derecho guarda una íntima conexión con la política, la economía,
la sociología y la historia, y es el centro de problemas humanos complejos como la
determinación de lo que es justo. No hay una definición del derecho generalmente
aceptada o consensuada. Las cuestiones más generales sobre el carácter y el
contenido del derecho son estudiadas por la filosofía del derecho y la teoría del
derecho. Por ello, el derecho ha sido considerado simultáneamente una ciencia y
un arte.

La Sociología es una ciencia que se ocupa de las sociedades humanas, su


origen, condiciones de existencia, desenvolvimiento, relaciones entre sus
miembros individuales y organizaciones humanas a nivel local, nacional o
internacional, etcétera, estudiadas en forma sistemática. Las personas no viven
aisladas sino que interactúan a diario, y sus comportamientos son en su mayoría
aprendidos de “la escuela” que es la sociedad. Para poder actuar en sociedad y
que ésta se desarrolle en forma armónica se han impuesto ciertas reglas de uso
social, que permiten ser aceptado y no discriminado de ella, como el saludo u
otras reglas de cortesía, que son aprendidas desde el nacimiento de nuestras
actividades como seres humanos e integrantes de una sociedad.

Para comprender las trasformaciones sociales que se suscitan en nuestro entorno,


es imprescindible acudir a la sociología, con el objetivo de hacer conciencia
respecto a las conductas y roles que desarrollan los individuos dentro de la
estructura social.
El nacimiento de la sociología tiene como punto de partida la Revolución francesa.
Auguste Comte, filósofo francés a quien se le denomina el padre de la sociología
positivista, estableció que la sociedad no debía sustentarse bajo los
ordenamientos del ejercicio del poder en turno (los reyes) y tampoco someterse a
la ideología que imperaba, ambos en el contexto del siglo XIX. Por otra parte, las
bases de la sociología se conformaron de aspectos subjetivos que se
desencadenaron de la espiritualidad de la misma ciencia, a la par que la sociedad
experimentó de sus propios cambios sociales en aquel siglo.

La sociología como ciencia social, cultural y natural hace referencia al sociólogo


Max Weber, la cual, al ser interpretada, apenas es posible explicar los elementos
del actuar social (causalidad) y analizar los posibles efectos que se suscitan. Es
importante mencionar que las interpretaciones no son absolutas con respecto al
concepto de referencia, sino, por el contrario, son polisémicas; es decir, poseen
diversos significados que son producto de la manera en la que los sujetos sociales
perciben la realidad, a efectos de relacionar al objeto con múltiples conceptos y
analizar empíricamente sus características.
La causalidad, o también conocida como la causalidad sociológica, se ha
convertido en el elemento fundamental de la sociología general, en tanto que es
característico del sociólogo establecer una relación estrecha con la historia para
lograr una aproximación con su objeto de estudio.
La sociología y la historia son dos ciencias fundamentales para entender las
dinámicas que se presentan en la realidad social. Mientras que la sociología
estudia los elementos de la estructura social y su funcionamiento, así como las
formas de vida a través de un espacio y tiempo determinados, la historia se
interesa en acontecimientos concretos con características específicas, como son
las revoluciones en los países o las guerras internacionales a lo largo del tiempo.
Por ello, llevar a cabo estudios desde la perspectiva sociohistórica permite analizar
los hechos que son producto de las relaciones sociales, pues las contribuciones
de la sociología histórica han coadyuvado a cuestionar los paradigmas de la teoría
social y las ciencias sociales, como es el derecho, para poner en primer plano a la
historia y, de esta manera, se pueda revalorizar su importancia.

En ese orden de ideas, el derecho es un producto cultural de las relaciones entre


sujetos sociales, que difícilmente puede ser comprendido a través de sus
particularidades jurídicas. Por ello, resulta de vital importancia las intervenciones
sociales para tratar de comprender la organización social, la ideología, el marco
legal, la economía y la política de las sociedades en jurisdicción.

Entonces, la sociedad será todo aquel conglomerado de individuos que


interactúan entre sí para establecer relaciones sociales, las cuales se rigen bajo
ordenamientos normativos externos de forma coactiva. Por lo tanto, puede decirse
que el derecho nace en la sociedad y, de esta forma, derecho y sociedad están
estrechamente relacionados entre sí. El derecho es de carácter social y, por ende,
debe encargarse del estudio de los ordenamientos jurídicos internos en la
estructura social, que tienen como antecedente, de acuerdo con Eugen Ehrlich, la
Escuela Histórica del Derecho, que fue la encargada de fomentar el derecho
nacionalista y oponerse al derecho artificial creado por el ejercicio del poder.
De esta manera, la sociología jurídica es posible, “en la medida que la norma
jurídica es efectiva para alcanzar la realidad deseada de unos cuantos miembros
en el sistema social”.

La sociología jurídica, como método transdisciplinario, sirve para analizar, a partir


de la experiencia jurídica humana, los comportamientos de los sujetos sociales
inmersos en la política, la economía, la psicología, la criminología, el derecho y la
sociología. Lo ya mencionado indica que la sociología ha experimentado
una explosión; se ha diversificado en las diferentes ramas del saber científico,
como las ciencias sociales y las humanidades. Al mismo tiempo, ha sufrido
una implosión al especializarse; en otras palabras, hay sociólogos enfocados en el
estudio de lo jurídico, lo jurídico-penal, la política criminal, e incluso existen
sociólogos enfocados en el estudio de la comunicación organizacional, la
administración pública, la educación, las culturas y las ideologías.
Los objetos de estudio de la sociología jurídica, de acuerdo con Augusto Sánchez
Sandoval, son los siguientes: a) “los comportamientos de las personas que sean
derivados o tengan consecuencias en la imperatividad de las normas
jurídicas”; b) “las conductas humanas que tengan como consecuencia la
derogación o el nacimiento de normas jurídicas”, y c) “los comportamientos de
grupos de personas desvinculadas del derecho, que entren en relación funcional
con otros grupos humanos que son el resultado de normas jurídicas”.

Por lo anterior, se puede decir que aquellos comportamientos humanos que han
experimentado una estrecha relación con la norma jurídica son objeto de estudio
de la sociología jurídica y no de la sociología general. Esto significa que el objeto
de estudio tiene que distinguirse, porque no sólo se trata de la sociología jurídica
en sí, sino también de ver a través de ella y describir las diversas particularidades
que se despliegan del ejercicio del poder.

En consecuencia, puede decirse que el derecho es un instrumento de control


social creado por aquellos que detentan el poder. Por tanto, el derecho no es
autónomo, sino que es un sistema cerrado que está permeado por infinidad de
agentes externos a él, como la delincuencia organizada, el terrorismo, las políticas
públicas, las leyes institucionalizadas, el sistema económico, la religión, la política,
entre otros. En tal virtud, el derecho como sistema cerrado se rige bajo su propia
normatividad.

Finalmente, el papel de la sociología jurídica, a diferencia de la sociología general,


radica en estudiar el poder y sus estrategias para llevarlo a cabo, tomando en
cuenta que el poder no se da en acto, sino en potencia, a partir de las múltiples
relaciones sociales, a efectos de perpetuar instrumentos hegemónicos de control
social.

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