Bajo la afirmación de Tullio Ascarelli: “Si nos preguntasen cuál es la
contribución del derecho comercial en la formación de la economía moderna,
tal vez no podríamos apuntar otra que haya influido más en esa economía que la institución de los títulos de crédito (1). La vida económica moderna sería incomprensible sin la densa red de títulos de crédito...Gracias a los títulos de crédito, el mundo moderno puede movilizar sus propias riquezas, gracias a ellos el derecho puede vencer el tiempo y el espacio transportando con mayor facilidad, representados en esos títulos, bienes distintos y materializando en el presente riquezas futuras”. Tullio Ascarelli denota la importancia de los títulos valores en la
economía moderna; ante ello, nos inclinamos por la posición adoptada
por este tratadista debido a que, evidencia el papel fundamental de estos
títulos valores para la satisfacción de necesidades; los títulos valores, son
instrumentos que facilitan y aseguren la eficiente circulación de los créditos
[…] por medio de éstos se realizan gran parte de las operaciones bancarias
y constituyen instrumentos esenciales cuya seguridad depende la
prosperidad de las economías; siendo indispensables por su facilidad de
circulación de forma rápida y eficaz. Cuando nos referimos que la creación
de los títulos valores fueron para facilitar la circulación, hace referencia a
que tienen un diseño de transmisión de persona a persona; por lo que, el
Derecho al tratar de brindar la seguridad de estas transacciones requiere
determinados requisitos que son indispensables para constituir un título
valor.
La importancia radica en que un título valor representa o incorpora
derechos, porque los derechos contenidos en el título valor y este mismo se
encuentran fusionados. Esto es, documento y derecho constituyen una
unidad, por lo que si alguien transfiere el título valor también está