Si las personas realmente necesitan lo que ofreces actualmente, debes tener la certeza
que tu idea resuelve un problema. Recopila datos que demuestren esto y lanza tu idea.
Es preferible darse cuenta de todos los factores de riesgo a tiempo, ya que sería
desafortunado ver que, una vez que se han hecho las inversiones en activos del producto
que pretendía dar una solució n a un problema, este no tenga mercado.
Se requiere escribir el plan de una forma que realmente se entienda para transformar la
idea en negocio.
Oportunidades limitadas: no porque se cree apasionadamente que el producto
o servicio es muy bueno y que mucha gente lo va a necesitar, significa que todos
lo van a comprar. No se puede sustituir a la investigació n de mercado, se requiere
conocer qué porcentaje de la població n lo comprara.
Llevar a cabo la idea de negocio: solo la idea de negocio sin ejecutarla o llevarla
a cabo no tiene valor. Si el emprendedor no se siente có modo tomando decisiones
y riesgos, significa que no tiene perfil para empresario.
Excesiva competencia: no tener competencia significa que no hay mercado,
pero encontrar má s de 10 competidores en una bú squeda rá pida en la red
demuestra que el á rea o producto que interesa está saturada.
No tener suficiente marketing: sin una estrategia de marketing efectiva e
innovadora no será fá cil conseguir clientes y, por tanto, el negocio no funcionará .
Darse por vencido muy rápidamente: una de las principales causas del fracaso
es que el emprendedor se cansa, cierra la compañ ía. Hay que tener en cuenta que,
pese a algunos errores, muchos emprendedores exitosos como Steve Jobs
continuaron trabajando en su proyecto hasta triunfar.