“Reza, espera y no te preocupes. La preocupación es inútil.

Dios
es misericordioso y escuchará tu oración... La oración es la mejor
arma que tenemos; es la llave al corazón de Dios. Debes hablarle
a Jesús, no solo con tus labios sino con tu corazón. En realidad, en
algunas ocasiones debes hablarle solo con el corazón...”

Me es muy grato dirigirme a ustedes a fin de hacer de su conocimiento que dejare el

puesto de coordinación del grupo de la divina misericordia de la parroquia de San
Hilario Pico Rivera entregando el puesto al nuevo coordinador Humberto Rodríguez,
deseando ver a la comunidad unida y apoyándose los unos a los otros.
Al nuevo coordinador solo le dejo este consejo que escuche a los fieles, es necesario
estar atento a la voz constante de la Iglesia ellos son la razón de su tarea pastoral y a
la comunidad les pido apoyar al nuevo coordinador para construir amistades sólidas y
sostenidas por el Señor, para que cuando tengas un problema no se lo cuentes a
cualquiera, sino a tu hermano que lo ayudará, le tenderá la mano y le dará un consejo.

“Entrego mi alma a la misericordia de Dios, a través de nuestro Señor y Salvador

Jesucristo, y exhorto a mis queridos hijos a tratar humildemente de conducirse por las
enseñanza”