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Nutrición y Cáncer

Juan José Gorgojo Martínez

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4.40. Nutrición y cáncer

Juan José Gorgojo Martínez


Capítulo 4.40.

Nutrición y cáncer

1. Introducción

2. Prevalencia de la desnutrición en el paciente oncológico

3. Etiología de la desnutrición en el paciente oncológico


3.1. Clasificación de las causas de desnutrición
3.2. Diferencias entre anorexia y caquexia
3.3. Anorexia
3.4. Alteraciones en la asimilación de nutrientes
3.5. Anomalías en el metabolismo de los macronutrientes
3.6. Mediadores de la caquexia

4. Valoración del estado nutricional en el paciente oncológico


4.1. Anamnesis
4.2. Exploración física
4.3. Pruebas de laboratorio
4.4. Análisis de función discriminante
4.5. Valoración global subjetiva del estado nutricional
4.6. Otras pruebas

5. Intervención nutricional en el paciente oncológico


5.1. Paciente sin desnutrición o con desnutrición leve (categoría A de la valoración
global subjetiva)
5.2. Paciente con desnutrición moderada-grave (categorías B y C de la valoración
global subjetiva)
5.3. Nutrición en el paciente terminal
5.4. Soporte nutricional en neoplasias específicas

6. Recomendaciones nutricionales para la prevención primaria


y secundaria del cáncer

7. Resumen

8. Bibliografía

9. Enlaces web
Objetivos

n Comprender la importancia de la detección de desnutrición en el paciente oncológico.


n Conocer el significado de los términos anorexia y caquexia.
n Identificar las diferentes causas de desnutrición en el paciente con cáncer.
n Estudiar la etiopatogenia de la caquexia tumoral.
n Aprender a valorar el estado nutricional de un paciente oncológico.
n Aprender a realizar la prescripción del tratamiento nutricional.
n Revisar los fármacos disponibles en la actualidad para el tratamiento de la anorexia y caquexia tumoral.
n Discutir el controvertido manejo nutricional del paciente oncológico terminal.
n Examinar los aspectos diferenciales del tratamiento nutricional de neoplasias específicas, con especial atención
al trasplante de precursores hematopoyéticos.
n Recordar las recomendaciones nutricionales para la prevención primaria y secundaria del cáncer.
1. Introducción

L
a vida de un paciente tras el diagnóstico de cáncer transcurre por una suce-
sión de etapas: una fase de tratamiento antitumoral, una fase de recuperación,
una fase de mantenimiento de la salud y, desgraciadamente para algunos enfer-
mos, una fase de cáncer avanzado que conduce a la muerte. Las necesidades nutri-
cionales cambian a lo largo de las distintas etapas. El objetivo en la fase activa de la
enfermedad es prevenir la desnutrición y la caquexia y reducir la morbimortalidad
relacionada con la desnutrición, mientras que tras el tratamiento se persigue alcan-
zar un peso apropiado y seguir una dieta saludable para evitar favorecer la recidiva
tumoral o la aparición de una segunda neoplasia.
El término “caquexia” deriva de las palabras griegas kakós y hexis, por lo que se
podría traducir como “mala condición”. Se trata de un complejo síndrome caracte-
rizado por anorexia, pérdida involuntaria del peso corporal, disminución de la masa
muscular y del tejido adiposo, hiperlipemia y otras alteraciones metabólicas, que
aparece habitualmente en estadios avanzados de enfermedades crónicas graves.
La anorexia se define como la pérdida del deseo de comer o la falta de apetito.
Puede ser debida a saciedad precoz, náuseas o pérdida del gusto (disgeusia). La sa-
ciedad precoz es el deseo de comer que se asocia a una incapacidad para mantener
una ingesta adecuada.
La caquexia es observada frecuentemente en pacientes con cáncer y se asocia
con un aumento de la morbilidad, pérdida de calidad de vida y disminución de la
supervivencia. La anorexia y la caquexia son síntomas más prevalentes que el dolor
o la disnea en pacientes ingresados en unidades de cuidados paliativos. Los pacien-
tes oncológicos desnutridos tienen estancias hospitalarias más prolongadas, menor
respuesta terapéutica y mayores complicaciones derivadas del tratamiento antitu-
moral. Algunos estudios sugieren que una pérdida involuntaria de peso superior al
10% en un paciente oncológico constituye un factor de riesgo independiente para la
supervivencia. Sin embargo, no hay trabajos publicados que proporcionen evidencia
directa de que la caquexia sea una causa de muerte o que al revertir la caquexia
mejore el pronóstico de estos enfermos.
Intuitivamente, una intervención nutricional precoz y adecuada es importante
para minimizar los efectos adversos potenciales de la desnutrición.

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Capítulo 4.40. Nutrición y cáncer

Tabla 1. CAUSAS DE LA DISMINUCIÓN DE LA INGESTA O ABSORCIÓN DE NUTRIENTES


EN EL PACIENTE CON CÁNCER

• Anorexia: disminución espontánea de la ingesta de causa multifactorial (disgeusia, aumento


de serotonina, efecto de la quimioterapia, etc.)
• Relacionadas con la presencia del tumor: disfagia, odinofagia, obstrucción intestinal, diarrea,
malabsorción, fístulas, infección, hemorragia digestiva, ulceraciones digestivas
• Relacionadas con el tratamiento quirúrgico: hipercatabolismo, ayuno, íleo, fístulas, malabsorción,
síndrome de intestino corto, obstrucción intestinal, síndrome posgastrectomía
• Relacionadas con la quimioterapia: anorexia, anosmia, disgeusia, náuseas, vómitos, ulceraciones
orofaríngeas, esofagitis, alteraciones de la motilidad gástrica, colitis, diarrea, alteraciones de la mucosa
intestinal
• Relacionadas con la radioterapia: enteritis rádica, mucositis, xerostomía, colitis, fístulas, malabsorción

2. Prevalencia de sentaban peor tolerancia al tratamiento, así co-


la desnutrición en el mo una frecuencia significativamente mayor de
paciente oncológico hospitalizaciones.

La anorexia y la saciedad precoz son frecuen-


tes en los enfermos con cáncer, presentando ano-
rexia entre el 43 y 53% de los pacientes, y sacie- 3. Etiología de
dad precoz entre el 13 y 62%. La pérdida de peso la desnutrición en el
es observada en el 54-70% de los pacientes tras paciente oncológico
el diagnóstico de su enfermedad. Hasta un 45% de
los pacientes oncológicos hospitalizados pierden 3.1. Clasificación de las causas
más del 10% del peso corporal, y un 25% pierde de desnutrición
más de un 20%.
La prevalencia de desnutrición en pacientes on- Los factores causantes de la pérdida de peso y
cológicos varía en función del tipo de neoplasia, caquexia en pacientes con cáncer pueden clasifi-
el estadio de la enfermedad y la respuesta al tra- carse en dos grandes grupos:
tamiento, oscilando según las series entre el 40 y 1. Incapacidad para asimilar nutrientes, como
el 80%. En un estudio multicéntrico se comprobó consecuencia de la anorexia, obstrucción gastro-
una prevalencia de desnutrición superior al 80% en intestinal o malabsorción inducidas por la presen-
carcinoma gástrico y pancreático, 54-64% en car- cia del tumor o los tratamientos administrados
cinoma de colon, próstata y pulmón, y de un 31- (Tabla 1).
40% en carcinoma de mama, neoplasias hematoló- 2. Anomalías en el metabolismo de los macro-
gicas y sarcomas. nutrientes, causadas por alteraciones en las hor-
Los niños parecen presentar un mayor riesgo nu- monas reguladoras y las citokinas (Figura 1).
tricional que los adultos debido a sus requerimien- La importancia clínica de esta clasificación radi-
tos energético-proteicos más elevados y al hecho ca en el hecho de que es más probable que la te-
de disponer de reservas calóricas más limitadas. En rapia nutricional consiga recuperar la masa magra
un estudio se observó que los niños con neuroblas- en pacientes que presentan deficiencia simple de
toma registraban un menor peso al diagnóstico, un macronutrientes que en aquellos con alteraciones
mayor número de hospitalizaciones y más compli- primarias del metabolismo. En estos últimos, el au-
caciones que los niños con tumor de Wilms. mento de peso se producirá fundamentalmente
Entre los niños con tumor de Wilms, aquellos por un incremento de la masa grasa y el agua cor-
con mayor porcentaje de pérdida de peso pre- poral total.

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Figura 1. Alteraciones metabólicas en el paciente con cáncer. LPL: lipoproteína lipasa; AGL: ácidos grasos libres.

3.2. Diferencias entre de glucosa por el cerebro es reemplazada por los


anorexia y caquexia cuerpos cetónicos derivados de la grasa. Esto con-
duce a una disminución de la gluconeogénesis he-
Aunque la mayoría de los pacientes con caquexia pática procedente de los aminoácidos y a la pre-
presentan anorexia, en algunas ocasiones la caquexia servación de la masa muscular. Este fenómeno se
tumoral cursa sin pérdida de apetito. La anorexia observa en pacientes con anorexia nerviosa, en los
puede ser más aparente que real en algunos pacien- cuales la pérdida de peso se produce a expensas
tes oncológicos, los cuales muestran una reducción del compartimento graso. Por el contrario, en pa-
de la ingesta por kilo de peso habitual, pero sin em- cientes con caquexia tumoral por cáncer de pul-
bargo esta ingesta se mantiene si se considera el pe- món que habían perdido el 30% de su peso habi-
so actual. Esto sugiere que primero ocurre la pérdi- tual, se observó un 85% de disminución en la masa
da de peso inducida por el tumor y posteriormente grasa y un 75% en la masa muscular, mientras que
una adaptación de la ingesta al nuevo peso. el compartimento proteico visceral estaba conser-
El cambio en la composición corporal en pacien- vado. Esta pérdida de músculo esquelético condu-
tes con caquexia difiere del encontrado en enfer- ce a debilidad e inmovilidad y finalmente a la muer-
mos con anorexia. Durante el ayuno, la utilización te por deterioro de la musculatura respiratoria.

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Capítulo 4.40. Nutrición y cáncer

3.3. Anorexia provenir de una depresión que pase inadvertida por-


que sus síntomas sean atribuidos al proceso tumoral.
La anorexia en pacientes con cáncer puede cla-
sificarse en secundaria a la enfermedad, relaciona-
da con el tratamiento y de causa emocional. 3.4. Alteraciones en la asimilación
Secundaria a la enfermedad: se han demos- de nutrientes
trado anomalías en el sentido del gusto y el olfato
en pacientes oncológicos. En especial, estos pacien- Los tumores de la orofaringe, esófago, estóma-
tes muestran un dintel más elevado para los sabo- go, páncreas, hígado y peritoneo pueden compro-
res dulces y menor para los sabores amargos que meter la ingesta oral por interferencia mecánica
los sujetos sanos. Muchos factores han sido impli- con estructuras anatómicas. También se ha descri-
cados en la génesis de la anorexia tumoral: lacta- to maldigestión por insuficiencia pancreática en
to, cetosis, hipercalcemia, toxohormona L, bombe- pacientes con cáncer de páncreas o malabsorción
sina, serotonina, sacietinas, etc. Diversas citokinas por infiltración intestinal debida a un linfoma.
como el factor de necrosis tumoral α (TNF-α), in- La cirugía mayor de un tumor del tracto gastro-
terleukina 1 (IL-1) e interferón γ (IFN-γ) parecen intestinal puede producir alteraciones en la deglu-
ser mediadores de anorexia en animales de expe- ción, digestión y absorción y puede contribuir indi-
rimentación y humanos. La IL-1 incrementa los ni- rectamente a la anorexia; la quimioterapia, disgeusia,
veles de serotonina cerebral, neurotransmisor con mucositis, náuseas y vómitos; la radioterapia de ca-
efecto anorexígeno central. La inhibición farmaco- beza y cuello, estomatitis, xerostomía, alteraciones
lógica de la síntesis de PGE2 con ibuprofeno blo- del gusto y el olfato; y la radioterapia abdominal,
quea el efecto anorexígeno de la IL-1. La anorexia anorexia, náuseas, vómitos, diarrea y malabsorción.
inducida por TNF-α también puede ser bloquea-
da por inhibidores de la ciclooxigenasa. Es pro-
bable que ambas citokinas (TNF-α e IL-1) actúen 3.5. Anomalías en el metabolismo
sinérgicamente. de los macronutrientes
En animales de experimentación se ha observa-
do que la inyección hipotalámica de neuropéptido Y Los pacientes con caquexia tumoral tienen alte-
(NPY) a ratas con sarcoma estimula menos la inges- raciones metabólicas que afectan a todos los prin-
ta que en ratas control, lo que sugiere que esta im- cipios inmediatos.
portante vía orexígena se encuentra alterada en ani-
males portadores de un tumor.
La utilización anormal del triptófano por las cé- 3.5.1. Alteración del metabolismo
lulas tumorales favorece su transformación en se- de los hidratos de carbono
rotonina en el cerebro, lo que puede favorecer la
actividad serotoninérgica en el hipotálamo ventro- a) Aumento de la actividad del ciclo de Co-
medial e inducir anorexia. ri e incremento del recambio de glucosa: la célu-
Relacionada con el tratamiento: estu- la tumoral se caracteriza por una elevada utiliza-
dios realizados sobre el mecanismo de los vómi- ción de glucosa con producción de ácido láctico.
tos inducidos por quimioterapia han mostrado El lactato es reconvertido en el hígado a glucosa
que el daño celular, la degradación, necrosis y res- mediante la gluconeogénesis. La conversión de
puesta inflamatoria dentro del tracto gastrointes- glucosa a lactato produce 2 ATP, mientras que la
tinal liberan serotonina por las células enterocro- reconversión de lactato a glucosa requiere 6 ATP.
mafines que activa los receptores S3 de las fibras Este ciclo fútil energético es conocido como ci-
viscerales aferentes, las cuales a su vez activan el clo de Cori. Sin embargo, algunos investigadores
centro del vómito. han sugerido que el incremento del ciclo de Cori
De causa emocional: la anorexia puede ocu- es insignificante en términos de gasto energéti-
rrir con el distrés emocional, ya sea en el momento co, y que la utilización aumentada de glucosa por
del diagnóstico o al comprobar que la enfermedad el enfermo tumoral por sí misma es responsable
está avanzando. Una causa de pérdida de peso puede de la pérdida de peso y la caquexia.

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b) Intolerancia a la glucosa y resistencia insulí- 3.6.1. Citokinas proinflamatorias


nica: inducidas por el aumento de hormonas con- producidas por el huésped
trainsulínicas, como el cortisol y el glucagón, y la
producción de citokinas proinflamatorias, como TNF-α, IL-1, IL-6 e IFN-γ, producidos por lin-
TNF-α, IL-1 e IFN-γ, que incrementan la liberación focitos activados o por monocitos-macrófagos. En
de ácidos grasos libres. algunos casos se ha documentado su producción
por las células tumorales. Su mecanismo de acción
es la inducción de anorexia (ver más arriba) y la in-
3.5.2. Alteración del metabolismo hibición de la lipoproteína lipasa.
de los lípidos

a) Aumento de la lipólisis: la actividad lipolítica 3.6.2. Factores producidos


aumenta en los pacientes oncológicos por factores por el tumor
lipolíticos producidos por el tumor (factor movili-
zador de lípidos -LMF-, factor inhibidor de la leu- Se pueden dividir en factores lipolíticos y facto-
cemia -LIF-), citokinas secretadas por el huésped y res proteolíticos.
hormonas lipolíticas. Se incluyen dentro de los factores lipolíticos la
b) Aumento del recambio de los ácidos grasos toxohormona L, LMF y LIF. Actúan fundamental-
libres y del glicerol e hipertrigliceridemia: conse- mente activando la lipasa sensible a hormona. Se ha
cuencia del incremento de la actividad lipolítica y la observado que LMF incrementa el gasto energéti-
resistencia insulínica. co en reposo a través de la estimulación de recep-
tores β3 adrenérgicos en tejido adiposo marrón.
El factor movilizador de proteínas (PMF) fue ais-
3.5.3. Alteración del metabolismo lado de la orina de pacientes con caquexia tumo-
de las proteínas ral. Se trata de una glicoproteína sulfatada de 24
kDa que induce la proteólisis muscular cuando se
a) Aumento del recambio de proteínas: el meta- administra por vía intravenosa a animales de expe-
bolismo proteico se altera de forma marcada en los rimentación. Su mecanismo de acción parece ser la
pacientes oncológicos, como consecuencia de una activación de la vía ubiquitina-proteasoma.
disminución de la síntesis de proteínas musculares,
aumento de su degradación e incremento de la sínte-
sis de proteínas de respuesta de fase aguda. La prin- 3.6.3. Hormonas
cipal vía proteolítica implicada en la caquexia tumoral
es la vía de la ubiquitina, la cual se une de forma co- El paciente con caquexia presenta resistencia in-
valente al sustrato proteico, y a través de un proceso sulínica periférica y aumento de hormonas contra-
que requiere ATP inicia la degradación proteica por la insulínicas, como glucagón, hormona de crecimien-
multisubunidad proteasoma (ver Capítulo 1.6). to (GH: Growth Hormone), cortisol y catecolaminas.
b) Mala adaptación al ayuno: a diferencia de los También existe resistencia periférica a GH con dis-
pacientes que pierden peso por anorexia, los pa- minución de factor de crecimiento similar a la insu-
cientes con caquexia tumoral muestran una ma- lina (IGF-1: Insulin Growth Factor-1). Esta situación
la adaptación al ayuno con incapacidad de aho- favorece la aparición de intolerancia a la glucosa o
rrar proteínas estructurales, consecuencia de la diabetes mellitus, hipertrigliceridemia y activación
acción de múltiples mediadores sobre diferentes de las vías catabólicas.
vías metabólicas.

3.6.4. Disfunción del circuito


3.6. Mediadores de la caquexia neuropeptidérgico

Los mediadores de la caquexia pueden clasifi- La desregulación del circuito neuropeptidérgi-


carse en cuatro grupos: co que controla la ingesta alimentaria y el gasto

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Capítulo 4.40. Nutrición y cáncer

Tabla 2. MANIFESTACIONES CLÍNICAS DE LA CAQUEXIA TUMORAL

• Síntomas: astenia, anorexia, saciedad precoz, náuseas, disgeusia


• Signos: hipertermia, piel atrófica, huesos prominentes por pérdida generalizada de panículo adiposo,
atrofia muscular, úlceras por decúbito en sacro y trocánteres mayores, edema en áreas declives, lesiones
en las mucosas por deficiencia vitamínica
• Hallazgos de laboratorio: gasto energético elevado en algunos tumores (pulmón, cabeza y cuello,
sarcoma), resistencia insulínica, intolerancia a la glucosa, hipoglucemia en tumores productores
de pro-IGF-II o insulina, hipertrigliceridemia, anemia de enfermedad crónica, hipoalbuminemia,
elevación de reactantes de fase aguda, hiponatremia por SIADH, etc.
SIADH: síndrome de secreción inapropiada de la hormona antidiurética.

energético parece jugar un papel importante en el 2. Posibles causas que expliquen la pérdida de
desarrollo de la anorexia y caquexia tumoral. Como peso (Tabla 1).
se indicó anteriormente, en animales de experimen- 3. Encuesta dietética, con especial atención a las
tación parece existir una alteración de la señalización preferencias alimentarias del paciente.
postsináptica del NPY. Varias citokinas aumentan los
niveles plasmáticos de leptina y de factor liberador
de corticotropina (CRF), activando por tanto las vías 4.2. Exploración física
anorexígenas hipotalámicas y aumentando el gasto
energético. Esta vía patogénica es un campo de inten- Además de la realización de la exploración físi-
sa investigación en el momento actual. ca general, se recogerán los datos antropométricos
del paciente: peso, talla, índice de masa corporal,
pliegue tricipital (y percentil), circunferencia mus-
cular media del brazo (y percentil). Estos dos últi-
4. Valoración del estado mos parámetros presentan importantes limitacio-
nutricional en el paciente nes en su reproducibilidad.
oncológico
No existe un patrón estándar universalmente 4.3. Pruebas de laboratorio
aceptado para valorar el estado nutricional de un
paciente. En general, en el paciente oncológico se La excreción de creatinina en orina (índice crea-
aplican los mismos criterios que en otro tipo de tinina-talla) proporciona una estimación de la ma-
enfermos. Las manifestaciones clínicas más relevan- sa muscular. La albúmina, transferrina, prealbúmina
tes en pacientes desnutridos con cáncer se expo- y proteína transportadora de retinol son utiliza-
nen en la Tabla 2. das para la estimación del compartimento protei-
co visceral. Las pruebas de inmunocompetencia se
alteran en los pacientes desnutridos, apareciendo
4.1. Anamnesis linfopenia y anergia. Sin embargo, todos estos pa-
rámetros están influidos por factores no relaciona-
Los datos más importantes que se han de reco- dos con la desnutrición, por lo que de forma aislada
ger en la historia clínica nutricional de un paciente no constituyen un buen índice del estado nutricio-
con cáncer son: nal del paciente. Por ejemplo, el paso de albúmina
1. Peso habitual y porcentaje del peso habitual del plasma al espacio extravascular se duplica en pa-
perdido desde el inicio del proceso; este último da- cientes con caquexia cancerosa. El descenso de al-
to se correlaciona con la mortalidad y la aparición búmina plasmática, no obstante, se correlaciona con
de complicaciones. Una pérdida > 5% del peso ba- la morbimortalidad de los pacientes oncológicos. La
sal en 1 mes, o >10% en 6 meses, sugiere desnutri- prealbúmina es un parámetro cuyo ascenso es un
ción o enfermedad grave. indicador de respuesta al tratamiento nutricional.

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4.4. Análisis de función lación eléctrica. Son muy sensibles a la mejoría en


discriminante el estado nutricional, aunque su uso aún no se ha
generalizado.
Se han desarrollado múltiples ecuaciones mate-
máticas basadas en parámetros nutricionales, con
objeto de identificar pacientes con riesgo de com- 4.6.2. Análisis de composición corporal
plicaciones médicas. Tres índices pronósticos pre-
dicen morbilidad en pacientes quirúrgicos: el Ín- De uso limitado en la práctica clínica, no han de-
dice Pronóstico Nutricional (PNI), basado en la mostrado predecir el pronóstico clínico del paciente.
albúmina, la transferrina, pliegue tricipital y prue-
bas de hipersensibilidad cutánea retardada; el Ín-
dice Pronóstico e Inflamatorio Nutricional (PINI), 4.6.3. Tests de calidad de vida
que utiliza glicoproteína ácida α1, proteína C reac-
tiva, albúmina y prealbúmina, y el Índice de Ries- El mantenimiento de una buena calidad de vi-
go Nutricional (NRI), basado en la albúmina y en da, aunque es un concepto subjetivo, resulta cru-
el peso actual e ideal. Sin embargo, su utilización cial en el cuidado del paciente oncológico. Se de-
no se ha generalizado por su baja especificidad y be evaluar de forma periódica el estatus funcional
sensibilidad. y psicológico del enfermo como índice de su ca-
lidad de vida.

4.5. Valoración global subjetiva


del estado nutricional
5. Intervención nutricional
La valoración global subjetiva (VGS) propuesta por en el paciente oncológico
Detsky (Tabla 3) es un método clínico para evaluar
el estado nutricional que combina parámetros de la Los objetivos del soporte nutricional en el
anamnesis y la exploración física. Clasifica a los pa- paciente oncológico se pueden resumir en dos
cientes en tres grupos: apartados:
a) Bien nutridos. 1. Provisión de las calorías, proteínas y micronu-
b) Desnutrición moderada o sospecha de des- trientes adecuados para cubrir las necesidades del
nutrición. enfermo y restaurar las alteraciones de la compo-
c) Desnutrición grave. sición corporal.
Por su simplicidad y rapidez en su elaboración 2. Disminuir la morbilidad, aumentar la supervi-
será la clasificación que se utilice para diseñar la es- vencia y mejorar la calidad de vida.
trategia nutricional en el paciente oncológico. Aunque el catabolismo proteico y la pérdida
En algunos protocolos y grupos de trabajo se uti- de masa muscular no pueden ser completamen-
liza una modificación de esta clasificación denomi- te abolidos en pacientes con caquexia tumoral, se
nada valoración global subjetiva generada por el debe perseguir una reducción del balance nitroge-
paciente (Tabla 4), similar a la original aunque aña- nado negativo para preservar proteínas estructu-
diendo algunos parámetros como la albúmina o la rales vitales.
prealbúmina. La mejoría del estado nutricional en estos pa-
cientes no suele conseguirse en un corto periodo
de tiempo. Por tanto, el tratamiento antineoplási-
4.6. Otras pruebas co no debe ser pospuesto hasta la consecución de
una rehabilitación nutricional. Sin embargo, el so-
4.6.1. Pruebas de función muscular porte nutricional ha de ser incorporado al mane-
jo global del paciente con cáncer tan pronto como
Incluyen la medida de la fuerza de prensión de sea posible.
la mano, la fuerza de los músculos respiratorios y Se aplica la VGS para decidir la estrategia de in-
la respuesta de músculos específicos a la estimu- tervención nutricional en un paciente concreto.

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Capítulo 4.40. Nutrición y cáncer

Tabla 3. VALORACIÓN GLOBAL SUBJETIVA (VGS) DEL ESTADO NUTRICIONAL (DETSKY)

Historia clínica
• Peso y altura
- Altura (cm):
- Peso (kg):
- Pérdida de peso en los últimos 6 meses (kg):
- % peso perdido:
- Variación de peso en las últimas 2 semanas: a) aumento; b) sin cambios; c) pérdida
• Modificaciones de la ingesta dietética
- Sin cambios
- Cambios: duración (semanas):
- Tipo de cambios: a) dieta sólida subóptima; b) dieta líquida completa; c) líquidos hipocalóricos; d) ayuno
- Suplementos: a) no; b) vitaminas; c) minerales; d) frecuencia semanal:
• Síntomas gastrointestinales (duración > 2 semanas)
- No
- Náuseas
- Vómitos
- Diarrea
- Anorexia
• Capacidad funcional
- No disfunción
- Disfunción: duración (semanas):
- Tipo de disfunción: a) disminución del rendimiento laboral; b) deambulación; c) encamado
• Enfermedad y su relación con los requerimientos nutricionales
- Diagnóstico primario (especificar):
- Demanda metabólica (estrés): a) no; b) bajo; c) moderado; d) alto
Exploración física (para cada signo especificar: 0 = normal, + = leve, ++ = moderado, +++ = grave)
• Pérdida de grasa subcutánea (tricipital, torácica)
• Atrofia muscular (cuádriceps, deltoides, temporal)
• Edema maleolar
• Edema sacro
• Ascitis
• Lesiones mucosas
• Lesiones cutáneas
• Cambios en el pelo
Clasificación VGS (seleccionar uno)
• Bien nutrido
• Desnutrición moderada o sospecha de desnutrición
• Desnutrición grave

5.1. Paciente sin desnutrición dict, multiplicando el resultado por un factor de


o con desnutrición leve estrés, que en enfermos neoplásicos oscila entre
(categoría A de la valoración 1,1 y 1,45, dependiendo del estadio de la enferme-
global subjetiva) (Figura 2) dad. Una estimación aproximada en estos pacien-
tes es 25-35 kcal/kg/día. Los hidratos de carbono
5.1.1. Cálculo de requerimientos representan la fuente primaria de calorías, consti-
nutricionales tuyendo el 60-70% de las calorías no proteicas. Los
requerimientos lipídicos diarios representan el 25-
El gasto energético total del paciente puede ser 30% de las calorías con objeto de proporcionar
calculado mediante las ecuaciones de Harris-Bene- ácidos grasos esenciales y cubrir las necesidades

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J. J. Gorgojo Martínez

Tabla 4. VALORACIÓN GLOBAL SUBJETIVA GENERADA POR EL PACIENTE

Dato clínico A B C
Pérdida de peso < 5% 5-10% > 10%
Alimentación Normal Deterioro leve-moderado Deterioro grave
Impedimento para la ingesta No Leve-moderado Grave
Deterioro de la actividad No Leve-moderado Grave
Edad < 65 > 65 > 65
Úlceras por presión No No Sí
Fiebre/uso de corticoides No Leve-moderado Elevado
Terapia antineoplásica Bajo riesgo Riesgo moderado Alto riesgo
Pérdida adiposa No Leve-moderada Elevada
Pérdida muscular No Leve-moderada Elevada
Edemas/ascitis No Leves-moderados Importantes
Albúmina (pretratamiento) > 3,5 g/dl 3-3,5 g/dl < 3 g/dl
Prealbúmina (postratamiento) > 18 mg/dl 15-18 mg/dl < 15 mg/dl

Figura 2. Intervención nutricional en pacientes oncológicos clasificados en la categoría A de la valoración global subjetiva
(VGS). NE: nutrición enteral; NPT: nutrición parenteral total.

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Capítulo 4.40. Nutrición y cáncer

energéticas. El aporte proteico debe oscilar entre crito e intervención de un equipo de nutrición en
1,0-1,5 g/kg/día, dependiendo del estado catabólico este grupo de pacientes, su eficacia parece limi-
del paciente. El cociente kcal no proteicas/gramo tada. Un grupo estudió el efecto del consejo nu-
de nitrógeno recomendado es 150:1. tricional frecuente en pacientes con cáncer so-
Durante el tratamiento inmunosupresor se de- metidos a quimioterapia. Aunque la intervención
ben extremar las normas de higiene alimentaria pa- nutricional incrementó la ingesta diaria de calo-
ra evitar la ingesta de microorganismos patógenos: rías y proteínas y el pliegue tricipital, la frecuen-
lavarse las manos antes de comer, limpiar cuidado- cia de respuesta al tratamiento y la superviven-
samente todos los utensilios de cocina, lavar enér- cia no fue superior a la que presentaba el grupo
gicamente frutas y verduras, cocinar a temperatu- control.
ra apropiada carne, pollo y pescado, tomar bebidas
pasteurizadas, conservar los alimentos a baja tem-
peratura para evitar el crecimiento bacteriano, evi- 5.1.4. Selección del soporte nutricional
tar el consumo en bares y restaurantes de pro-
ductos potencialmente contaminados (mahonesas, Los pacientes con balance nutricional negativo
ensaladas, carnes poco cocinadas, pescado, maris- que no se corrige con las modificaciones dietéticas
co, pollo, huevos…), en viajes consumir agua em- son candidatos a soporte nutricional. Si la toleran-
botellada, etc. cia oral es buena, se añadirán a la dieta suplementos
calórico-proteicos. En caso contrario, se indicará
NE por sonda o NP, teniendo en cuenta el funciona-
5.1.2. Balance energético miento del tracto gastrointestinal (si éste funciona,
aunque sea parcialmente, la NE sola o combinada
La encuesta dietética permitirá determinar si se con la NP debe ser la primera elección).
están cubriendo los requerimientos nutricionales. La utilización rutinaria de suplementos vitamíni-
En caso afirmativo se debe realizar una valoración cos y minerales durante el tratamiento oncológico
periódica del estado nutricional, con el fin de de- es un tema controvertido y que ha sido revisado
tectar estadios incipientes de desnutrición e iniciar recientemente por el Instituto Americano para la
una intervención nutricional eficaz. Investigación del Cáncer. Sus principales conclusio-
nes se resumen en la Tabla 6. Se recomienda una
alimentación equilibrada que contenga entre 5 y
5.1.3. Indicación del soporte 10 raciones de frutas y verduras, con la adición de
nutricional un complejo multivitamínico que aporte las inges-
tas dietéticas recomendadas (RDA: Recommended
Si el paciente presenta un balance energético Dietary Allowances). Deben evitarse aquellos suple-
negativo y no va a ser sometido a un tratamien- mentos con alto aporte de ácido fólico en pacien-
to oncológico agresivo (cirugía, radioterapia, qui- tes que reciben quimioterapia con antimetabolitos
mioterapia), se intentará conseguir un balance como el metrotexato. Tampoco se aconseja un al-
positivo adaptando la dieta a las preferencias y si- to aporte de antioxidantes durante la radioterapia
tuación clínica del paciente (Tabla 5). Del mis- o la quimioterapia, ya que podría reducir la eficacia
mo modo, un paciente bien nutrido que va a ini- de estas terapias.
ciar un tratamiento oncológico pero en el que se Una revisión sistemática estudió la eficacia de
prevé una ingesta oral adecuada en 7 días no tie- los suplementos nutricionales orales en pacientes
ne indicación de soporte nutricional enteral (NE) con desnutrición. Los pacientes que recibieron su-
o parenteral (NP). El uso rutinario de NE o NP a plementos ganaron más peso y aumentaron su in-
corto plazo no disminuye las complicaciones o la gesta energética, pero hubo insuficientes datos pa-
mortalidad en pacientes sometidos a cirugía, ra- ra demostrar diferencias en la mortalidad o en
dioterapia o quimioterapia con un buen estado parámetros funcionales. Por tanto, se requiere un
nutricional. estudio prospectivo y aleatorizado con suficiente
Aunque se ha recomendado la realización for- poder estadístico para demostrar un efecto positi-
mal de consejo nutricional mediante material es- vo de los suplementos nutricionales.

1180
J. J. Gorgojo Martínez

Tabla 5. MODIFICACIONES CUALITATIVAS Y CUANTITATIVAS DE LA DIETA


EN PACIENTES ONCOLÓGICOS

Síntoma Modificación
Disgeusia • Alimentos con sabores agradables (evitar sabores amargos y potenciar
alimentos dulces, lácteos, huevos, legumbres y frutos secos)
Aversión a la carne • Añadir suplementos hiperproteicos
Saciedad precoz • Comidas frecuentes, raciones pequeñas, moderado contenido
en grasas
Disfagia • Alimentos con textura más espesa
Lesiones orales • Utilizar pajitas para dietas líquidas
Náuseas y vómitos • Alimentos con sabores suaves

Tabla 6. SUPLEMENTOS DIETÉTICOS DURANTE EL TRATAMIENTO ANTINEOPLÁSICO.


RECOMENDACIONES ESPECÍFICAS DEL INSTITUTO AMERICANO
PARA LA INVESTIGACIÓN DEL CÁNCER

• La suplementación dietética con antioxidantes aislados o de forma combinada por encima de las RDA
no puede recomendarse como una práctica segura o efectiva
• El empleo de altos niveles de antioxidantes (vitaminas A, E, C, selenio, flavonoides) no es aconsejable
pues podría tener consecuencias perjudiciales sobre las células normales vía efecto prooxidante
o conferir una ventaja a las células tumorales
• No existe una evidencia sólida para recomendar el uso rutinario de suplementos de vitamina E
en pacientes tratados con quimio o radioterapia
• Los pacientes oncológicos deberían recibir una dieta razonable que proporcione vitamina C
en cantidades RDA y que no sobrepasen el doble de esta recomendación
• Los pacientes con cáncer no deberían tomar dosis altas de β-caroteno
• No hay evidencia suficiente para realizar recomendaciones sobre el aporte de selenio
• La falta de información sobre las interacciones de sustancias antioxidantes aconseja precaución
sobre el uso indiscriminado de combinaciones de antioxidantes
• No se pueden hacer recomendaciones en el momento actual sobre derivados de la soja. Los suplementos
que contienen isoflavonas procedentes de la soja no se aconseja porque las cantidades de isoflavonas
son muy superiores a las que aporta la dieta
• Se recomienda que los pacientes oncológicos tomen la misma cantidad de grasa poliinsaturada
que los sujetos sanos
• No se pueden realizar recomendaciones en el momento actual sobre el aporte de vitamina D
• Un complejo multivitamínico que contenga las RDA puede ser utilizado con seguridad como parte
de un programa de alimentación sana que contenga 5-10 raciones diarias de frutas y verduras

RDA: ingestas dietéticas recomendadas.

En el momento actual se dispone en el mer- nina, leucina, metionina y vitamina E (ver Capítu-
cado de suplementos orales con fórmulas nutri- los 4.3 y 4.4).
cionales específicas para pacientes con caquexia No hay aún estudios publicados con estas fór-
tumoral, hipercalóricas e hiperproteicas, con mulas y, por tanto, valen aquí las mismas consi-
aporte elevado de ácidos grasos n-3 (EPA), argi- deraciones que en los suplementos estándares.

1181
Capítulo 4.40. Nutrición y cáncer

5.1.5. Prescripción del soporte Tabla 7. FÁRMACOS UTILIZADOS EN EL


nutricional TRATAMIENTO DE LA ANOREXIA
Y CAQUEXIA TUMORAL
Para el cálculo de las kcal totales y los gramos de
proteínas se aplican las fórmulas descritas previa- Agentes orexígenos
mente. En general, las formulaciones de NE y NP en • Glucocorticoides
pacientes oncológicos no difieren de las utilizadas en - Prednisona
otros pacientes. Sin embargo, varios estudios pros- - Metilprednisolona
pectivos y un metaanálisis han demostrado que la ad- - Dexametasona
ministración enteral perioperatoria de una dieta in- • Progestágenos
munomoduladora (suplementada con arginina, RNA - Acetato de megestrol
y ácidos grasos n-3) reduce las infecciones y la estan- - Acetato de medroxiprogesterona
• Cannabinoides
cia media en pacientes sometidos a cirugía de diver-
- Dronabinol
sos tumores (gastrointestinales y cabeza y cuello), en • Antagonistas serotoninérgicos
comparación con una fórmula estándar, aunque no -Ciproheptadina
se ha observado una reducción en la mortalidad. No • Procinéticos
hay ensayos clínicos que hayan evaluado el empleo - Metoclopramida
de estas sustancias de forma individual. - Cisaprida
Por consiguiente, estas formulaciones especiales Andrógenos y anabolizantes
pueden beneficiar al grupo de enfermos oncológi- • Testosterona y análogos de la
cos sometidos a tratamiento quirúrgico. Se trata testosterona
de un tema controvertido y las actuales recomen- • Dihidrotestosterona
daciones no apoyan su uso rutinario. • Nandrolona
Inhibidores metabólicos
• Sulfato de hidrazina
5.1.6. Tratamiento farmacológico • Agentes anticitokinas
- Pentoxifilina
- Talidomida
En la Tabla 7 se indican los fármacos que se - Ácido eicosapentaenoico
han empleado en el tratamiento de la anorexia y - Antiinflamatorios no esteroideos
caquexia tumoral. Su eficacia es limitada y tan sólo i. Indometacina
se han realizado ensayos clínicos aleatorizados en ii. Ibuprofeno
algunas sustancias. Reguladores del ritmo circadiano
Los corticoides estimulan el apetito y aumen- • Melatonina
tan la sensación de bienestar; sin embargo, no tie- Agentes experimentales
nen ningún efecto sobre el peso, la funcionalidad o • Anticitokinas
la supervivencia. • Anticuerpos anticitokinas
El dronabinol, un derivado de la marihuana uti- • Inhibidores de la metaloproteinasa
lizado como antiemético durante los tratamientos • Suramina
quimioterapéuticos, produjo aumento del apetito • IL-10, IL-12
en estudios no aleatorizados. No se ha estudiado
su efecto sobre la composición corporal. Su dosis IL: interleukina.
habitual es 5 mg/día. Los efectos secundarios inclu-
yen mareo, ansiedad, incoordinación y confusión.
El acetato de megestrol, en dosis de 160 a 1.600 la lipólisis. Su eficacia es superior a la de los anabo-
mg/día, ha demostrado en estudios prospectivos lizantes, corticoides y dronabinol en estudios com-
aleatorizados inducir un aumento dosis-depen- parativos. En un estudio multicéntrico se observó
diente del apetito y del peso corporal en pacien- que el acetato de megestrol producía un mayo in-
tes neoplásicos, a expensas de masa grasa, sin estu- cremento del apetito y del peso corporal que el
diarse sus posibles efectos sobre la supervivencia. dronabinol. Un 11% de los pacientes que recibie-
Su mecanismo de acción parece ser la inhibición de ron megestrol ganaron > 10% del peso basal frente

1182
J. J. Gorgojo Martínez

a un 3% de los enfermos que recibieron dronabinol. energético basal. Un estudio aleatorizado mostró
El tratamiento combinado no mejoró los resulta- un aumento de la supervivencia en pacientes on-
dos obtenidos con megestrol sólo. Se recomienda cológicos bien nutridos y desnutridos que toma-
comenzar con 400 mg de una formulación líquida, ron un suplemento de ácidos grasos n-3.
titulando la dosis hasta un máximo de 800 mg/día La melatonina reduce los niveles de TNF-α en
en función de la respuesta clínica o la aparición de pacientes con cáncer avanzado, pero los resultados
efectos adversos. Entre los efectos secundarios de obtenidos hasta la fecha en enfermos oncológicos
este fármaco destaca la supresión adrenal, disfun- no permiten establecer su papel en el tratamiento
ción eréctil, edema periférico y un mayor riesgo de la caquexia tumoral.
de trombosis venosa. Estudios preliminares de una La GH no se está utilizando en los pacientes ca-
combinación megestrol-antiinflamatorio no este- quécticos tras comunicarse un incremento de la
roideo han proporcionado resultados prometedo- mortalidad en pacientes críticos tratados con do-
res, pero no se puede hacer en el momento actual sis elevadas de esta hormona.
ninguna recomendación con estos datos iniciales. En definitiva, en el momento actual el fármaco
Los esteroides anabolizantes han sido utilizados de elección para aumentar el apetito y el peso de
por los atletas para aumentar la fuerza e hipertro- los pacientes oncológicos con desnutrición es el
fia muscular. Se han realizado ensayos clínicos con acetato de megestrol. El empleo de suplementos
nandrolona en pacientes con cáncer de pulmón no de ácidos grasos n-3 aún no aparece reflejado en
microcítico sometidos a tratamiento quimiotera- las recomendaciones de las sociedades científicas.
péutico. Aunque el grupo tratado experimentó
menor pérdida de peso, la respuesta a la quimiote-
rapia y la supervivencia fueron comparables. El es- 5.2. Paciente con desnutrición
teroide anabolizante oxandrolona (a dosis de 10 moderada-grave (categorías B y C
mg/12 h) está siendo evaluado en ensayos clínicos. de la valoración global subjetiva)
En el momento actual no se dispone de resultados (Figura 3)
que permitan establecer una recomendación.
La ciproheptadina, la metoclopramida y la ci- 5.2.1. Cálculo de requerimientos
saprida no han mostrado un efecto favorable sobre nutricionales
el peso en pacientes oncológicos.
El sulfato de hidracina, un inhibidor de la gluco- Se realiza del mismo modo que en pacientes
neogénesis, ha sido probado en pacientes con cán- de la categoría A. En este caso será preciso aña-
cer, sin mostrar efectos beneficiosos sobre el ape- dir 500-1.000 kcal/día a los cálculos realizados pa-
tito, peso, calidad de vida o supervivencia. ra conseguir un balance positivo. El aporte protei-
Existe un especial interés en los inhibidores del co será de al menos 1,5 g/kg/día.
TNF-α (pentoxifilina, talidomida, anticuerpos mo-
noclonales etanercept e infliximab) como terapia
específica de la caquexia tumoral. Los resultados 5.2.2. Balance energético
de estudios en marcha estarán disponibles en los
próximos años. Si el paciente cubre los objetivos nutricionales
El ácido eicosapentaenoico (EPA) es un ácido con las modificaciones dietéticas, deberá reeva-
graso poliinsaturado que posee actividad antitu- luarse frecuentemente su estado nutricional (ini-
moral y anticaquectizante en modelos animales. Su cialmente cada 15 días). En caso de presentar un
mecanismo de acción parece ser la inhibición de la balance negativo, se iniciará el soporte nutricional.
lipólisis por disminución de la síntesis de prosta-
glandinas y el bloqueo del LMF. Dieciocho pacien-
tes con cáncer de páncreas fueron tratados con 5.2.3. Indicación del soporte
suplementos de aceite de pescado (EPA y doco- nutricional
sahexaenoico). Estos pacientes mostraron ganan-
cia ponderal acompañada de una reducción de los Si el paciente no va a ser sometido a un tra-
reactantes de fase aguda y estabilización del gasto tamiento quirúrgico, radio o quimioterapia, y la

1183
Capítulo 4.40. Nutrición y cáncer

Figura 3. Intervención nutricional en pacientes oncológicos clasificados en las categorías B y C de la valoración global subje-
tiva (VGS). NE: nutrición enteral; NP: nutrición parenteral. GI: gastrointestinal.

tolerancia oral es buena, se intentará complemen- perioperatorio (enteral o parenteral) comenzando


tar la dieta con suplementos calórico-proteicos. La 7-14 días antes de la cirugía, disminuye la incidencia
persistencia de un balance negativo es indicación de complicaciones postoperatorias. En esta situa-
de NE por sonda o de NP, utilizando los mismos ción, los beneficios potenciales del soporte nutri-
criterios que en pacientes no desnutridos. cional deben ponderarse con los riesgos derivados
En pacientes moderada o gravemente desnutri- de la terapia nutricional y el retraso de la cirugía.
dos que requieren cirugía, el soporte nutricional Es fundamental que el soporte nutricional se inicie

1184
J. J. Gorgojo Martínez

antes de la cirugía, puesto que el uso rutinario de ya iniciado que evitar su inicio, debido al temor de
NPT posquirúrgica en pacientes con desnutrición que la retirada del soporte nutricional acelere la
grave que no recibieron NPT preoperatoria incre- muerte del paciente.
menta las complicaciones en un 10%. El paciente oncológico terminal, con una ca-
El uso rutinario de NE o NPT a corto plazo no lidad de vida aceptable y tracto gastrointestinal
disminuye las complicaciones o la mortalidad en funcionante, puede ser nutrido por vía enteral.
pacientes que están recibiendo radio o quimiote- Cuando los beneficios y perjuicios del soporte
rapia para el tratamiento del cáncer. De hecho, el nutricional no están claros, se recomienda reali-
uso de NPT está asociado a una mayor inciden- zar tratamientos de prueba limitados en el tiem-
cia de infecciones (incluyendo infecciones no rela- po. Aquellos pacientes cuya expectativa de vida
cionadas con el catéter) en pacientes tratados con es inferior a 3 meses probablemente no se be-
quimioterapia. nefician de ningún tipo de soporte nutricional. La
La NE o NPT puede ser beneficiosa para man- decisión de retirar el soporte nutricional no sig-
tener la hidratación, proporcionar nutrientes, in- nifica que se retire la dieta oral. Los pacientes ca-
crementar el bienestar y mejorar la supervivencia paces de comer seguirán recibiendo alimentos
en aquellos individuos incapaces de comer o ab- sólidos y líquidos.
sorber nutrientes durante un periodo prolongado En pacientes terminales con disfunción intesti-
(> 7 días) y sometidos a tratamiento quimio o ra- nal que impida la nutrición enteral se debe indivi-
dioterápico. Sin embargo, no hay estudios prospec- dualizar el manejo, aunque es improbable que la NP
tivos que hayan evaluado este punto. beneficie a este grupo de pacientes.

5.2.4. Selección del soporte nutricional 5.4. Soporte nutricional


en neoplasias específicas
Si el tracto gastrointestinal es funcionante, se in-
dicarán suplementos orales o nutrición enteral por 5.4.1. Cáncer de cabeza y cuello
sonda. En caso contrario, se optará por la NPT.
Estos pacientes se presentan frecuentemente
con una desnutrición grave debido a una ingesta
5.2.5. Prescripción del soporte dificultada por la obstrucción. La radioterapia pue-
nutricional de inducir mucositis, disgeusia, trismus, boca seca o
alteraciones dentales. Es preciso modificar durante
Se aplicarán los mismos criterios señalados al ha- y después del tratamiento la textura, temperatura,
blar de los pacientes oncológicos no desnutridos. consistencia, contenido y frecuencia de los alimen-
tos. Generalmente no se toleran las comidas muy
calientes o muy frías, picantes, saladas o ácidas. El
5.3. Nutrición en el paciente empleo de chicles y caramelos puede mejorar la
terminal salivación. Los alimentos líquidos, en puré y los zu-
mos son mejor tolerados durante las fases de tra-
El soporte nutricional es un tratamiento médi- tamiento y recuperación.
co indicado en pacientes que no pueden mante- La gastrostomía percutánea permite la NE en
ner una adecuada ingesta e hidratación por vía oral. los pacientes con imposibilidad de mantener una
No iniciar o retirar el soporte nutricional a un pa- ingesta adecuada por vía oral; su indicación precoz
ciente son decisiones basadas en consideraciones evitará el deterioro nutricional del enfermo.
distintas que otras terapias, en parte por el signifi- Estudios sobre la etiología de los cánceres de
cado emocional, religioso y simbólico de la alimen- cabeza y cuello sugieren que la ingesta de fruta y
tación. Aunque retirar y no iniciar la terapia nutri- verdura puede asociarse a una reducción de la inci-
cional son acciones igualmente justificables desde dencia de estos tumores, pero pocos estudios han
un punto de vista ético y legal, frecuentemente es considerado si estos factores dietéticos influen-
más duro para un médico retirar un tratamiento cian el pronóstico en los pacientes afectados. Un

1185
Capítulo 4.40. Nutrición y cáncer

ensayo clínico con β-caroteno no mostró diferen- tico y disminución de la liberación enzimática, lo
cias con el placebo. que unido a la anorexia favorece la pérdida de pe-
so. También se puede observar insuficiencia biliar
por obstrucción de la ampolla de Water. En estos
5.4.2. Cáncer de esófago y estómago pacientes y en aquellos sometidos a pancreatec-
tomía se suplementarán enzimas pancreáticas. En
La disfagia es casi universal en estos enfermos los enfermos desnutridos, la nutrición enteral por
y se asocia a una pérdida media del 10% del peso yeyunostomía puede suplementar la ingesta oral.
basal al diagnóstico. El tratamiento quirúrgico, ra- Se debe prestar especial atención a los niveles de
dio o quimioterapéutico del tumor suele impedir glucosa en los pacientes sometidos a cirugía pan-
una adecuada nutrición oral. Por tanto, la gastros- creática e iniciar insulinoterapia si está clínicamen-
tomía o yeyunostomía endoscópica percutánea es te indicado.
una vía adecuada para nutrir a estos pacientes. En Existe una evidencia limitada sobre el efecto fa-
aquellos enfermos sometidos a gastrectomía se vorable de la suplementación con ácidos grasos
deben dar recomendaciones antidumping: comidas n-3 en el mantenimiento del peso de los pacientes
frecuentes en pequeñas cantidades, de alto conte- con cáncer de páncreas.
nido proteico y bajas en hidratos de carbono sim-
ples y fibra insoluble, tomar líquidos fuera de las
comidas. 5.4.5. Hepatocarcinoma
Otro problema común es el reflujo. Se indica-
rá en estos casos una dieta hiperproteica y baja en La resección del carcinoma hepatocelular es-
grasas, evitar algunos alimentos que disminuyen el tá asociada a porcentajes elevados de morbilidad y
tono del esfínter esofágico (chocolate, alcohol, ca- mortalidad. Algunos autores son de la opinión de
fé, etc.) e irritantes gástricos. que este grupo de pacientes puede beneficiarse de
NPT preoperatoria independientemente de su esta-
tus nutricional previo. La hipofosfatemia es una com-
5.4.3. Cáncer colorrectal plicación posquirúrgica muy frecuente y debe ser
corregida para prevenir consecuencias adversas.
Los pacientes con este tipo de tumor habitual-
mente no muestran desnutrición. En ellos se reco-
miendan las medidas nutricionales estándar. 5.4.6. Cáncer de pulmón
Muchos estudios epidemiológicos indican que el
riesgo de cáncer colorrectal aumenta con las dietas Pocos estudios han examinado la relación en-
ricas en carnes rojas (especialmente las procesadas) tre factores dietéticos y pronóstico del cáncer de
y en grasa saturada, y bajas en frutas y verduras. La pulmón. Dos pequeños estudios mostraron que
obesidad y el consumo de alcohol también son fac- una intervención dietética aumentando la ingesta
tores de riesgo. Se desconoce si todos estos facto- de verduras se traducía en una menor pérdida de
res nutricionales condicionan el pronóstico del cán- peso y supervivencia más prolongada en pacientes
cer colorrectal. Hasta la fecha, diversos estudios han con cáncer de pulmón no microcítico estadios III
fracasado a la hora de mostrar beneficios de anti- y IV. Otros estudios intentaron la estrategia de in-
oxidantes, fibra dietética o incremento de fruta y crementar la ingesta calórica, pero no consiguieron
verdura en la prevención de aparición de nuevos pó- un aumento de peso.
lipos colónicos. Los suplementos de calcio parecen El tratamiento del cáncer de pulmón es agresi-
ofrecer un modesto beneficio. vo y frecuentemente causa efectos adversos. Mu-
chos pacientes tienen deficiencias nutricionales in-
cluso antes del diagnóstico, como resultado de
5.4.4. Cáncer de páncreas dietas inadecuadas o los efectos adversos del ta-
baco. Durante el tratamiento y en el periodo de
El cáncer de páncreas puede ocasionar maldi- recuperación inmediato, los pacientes con cáncer
gestión por obstrucción del conducto pancreá- de pulmón se pueden beneficiar de alimentos hi-

1186
J. J. Gorgojo Martínez

percalóricos fáciles de deglutir, raciones pequeñas 5.4.9. Trasplante de precursores


y frecuentes, fármacos orexígenos, complejos mul- hematopoyéticos
tivitamínicos o suplementos nutricionales.
El paciente con una neoplasia sólida o hematológi-
ca sometido a trasplante de precursores hematopo-
5.4.7. Cáncer de mama yéticos (TMO) presenta unas características diferen-
ciales respecto al resto de pacientes oncológicos.
El exceso de peso es el principal factor nutricio- El TMO convencional aplica quimioterapia en
nal que afecta a la supervivencia del cáncer de ma- altas dosis con o sin irradiación para erradicar
ma. Se han realizado, sin embargo, pocos estudios el tumor en pacientes con cáncer. En trasplantes
que investiguen la relación entre ganancia ponderal alogénicos, el sistema inmunológico del recep-
tras el diagnóstico de cáncer de mama y pronósti- tor también se suprime para prevenir el rechazo
co. En un estudio se encontró que las mujeres que del injerto. Estos regímenes son los tratamientos
ganaban más de 6 kg tenían 1,5 veces mayor ries- más agresivos empleados en oncología. La toxici-
go de recidiva y 1,6 veces mayor riesgo de morta- dad gastrointestinal o hepática (enfermedad ve-
lidad. Desafortunadamente, la ganancia de peso es nooclusiva) son el principal efecto adverso limi-
una constante en este tipo de pacientes. El incre- tante de esta terapia. Las anomalías metabólicas
mento ponderal que acontece en pacientes some- incluyen un aumento del catabolismo proteico,
tidas a quimioterapia adyuvante parece ser a ex- hiperglucemia, hiperlipemia y deficiencias de vita-
pensas de masa grasa exclusivamente, sin cambios minas y electrólitos. El receptor está expuesto a
o con disminución de la masa magra. la enfermedad injerto contra huésped (EICH) de-
Actualmente hay dos ensayos clínicos en mar- bido al paso de linfocitos T del donante. Existen
cha para estudiar la hipótesis de que una dieta ba- dos formas de EICH: una forma aguda, que afec-
ja en grasa tras el diagnóstico puede favorecer el ta a la piel, hígado y tracto gastrointestinal, y una
pronóstico del cáncer de mama. forma crónica multisistémica que remeda una co-
No está suficientemente comprobado si los su- nectivopatía. La disrupción de la barrera mucosa
plementos de soja tienen efectos beneficiosos o contribuye a la patogénesis de la infección y fie-
perjudiciales en mujeres con cáncer de mama. Las bre en el periodo de neutropenia. Los pacientes
isoflavonas de la soja presentan propiedades es- pasan por un periodo prolongado de mínima in-
trogénicas y antiestrogénicas. Se aconseja en la ac- gesta oral debido a los efectos duraderos de la
tualidad evitar los preparados comerciales en es- terapia citorreductora sobre el apetito, el gus-
tas pacientes por el riesgo de que predominen los to, la salivación, el vaciamiento gástrico y la fun-
efectos estrogénicos. ción intestinal.
Los requerimientos energéticos están aumenta-
dos tras el TMO (130-150% sobre el gasto ener-
5.4.8. Carcinoma de próstata gético teórico, calculándose unas necesidades en
adultos de hasta 44 kcal/kg/día). La vía de adminis-
Una alta ingesta de alimentos de origen animal, tración es controvertida: aunque existen estudios
especialmente alimentos ricos en grasa saturada, que utilizan tanto NE como NPT, la vía enteral sue-
se asocia con un aumento del riesgo de cáncer de le estar limitada por los efectos de la quimioterapia
próstata. La ingesta de grasa saturada además es a dosis elevadas. La NPT se asocia a mayor ganan-
un factor pronóstico negativo en estos pacientes, cia ponderal, supervivencia y tiempo de recidiva en
mientras que la grasa monoinsaturada se asocia a comparación con la sueroterapia en pacientes so-
una mayor supervivencia. La obesidad también es metidos a TMO alogénico. No hay estudios de sufi-
un factor que incrementa el riesgo de mortalidad ciente tamaño en TMO autóloga para establecer la
por cáncer de próstata. eficacia de la NPT en estos pacientes.
No se han llevado a cabo estudios rigurosos que En comparación con la NPT, la NE es menos
evalúen el papel que desempeñan los fitoestróge- eficaz en preservar la masa magra (un 75% de
nos en la prevención primaria o secundaria del los pacientes precisaron suplementos parentera-
cáncer de próstata. les de aminoácidos en un estudio). Sin embargo, la

1187
Capítulo 4.40. Nutrición y cáncer

Tabla 8. COMPOSICIÓN DE LA NUTRICIÓN PARENTERAL EN PACIENTES SOMETIDOS


A TRASPLANTE DE MÉDULA ÓSEA

• Calorías: 35 kcal/kg/día
• Distribución calórica: glucosa: 50-60%; lípidos: 25-30% (LCT-MCT); proteínas: 1,5 g/kg/día (algunos
grupos utilizan 0,5 g/kg/día como dipéptido de glutamina, práctica actualmente no recomendada)
• Si hay enfermedad de injerto contra huésped: aumentar el aporte calórico a 40-45 kcal/kg/día,
y el contenido proteico a 1,8 g/kg/día
• Si existe enfermedad venooclusiva: aumentar el aporte calórico a 40-45 kcal/kg/día, y disminuir
el aporte proteico a 0,8 g/kg/día
• Si hay insuficiencia renal: ajustar las proteínas según el aclaramiento de creatinina

LCT: triglicéridos de cadena larga; MCT: triglicéridos de cadena media.

estancia hospitalaria y la supervivencia no difirie- La NPT habitualmente se mantiene durante un


ron entre los grupos. periodo de 2 semanas, iniciándose la alimentación
Intervención nutricional pretrasplante: se ha ob- oral cuando cedan las lesiones digestivas. Se supri-
servado una mortalidad significativamente mayor mirán en los primeros días los crudos y lácteos (al-
en pacientes con desnutrición previa al TMO (cu- to riesgo bacteriológico e intolerancia transitoria a
riosamente, la obesidad también parece jugar un la lactosa); posteriormente se añadirán los lácteos
papel deletéreo en estos pacientes). Resulta funda- y finalmente se pasará a una dieta basal.
mental por tanto en estos pacientes la realización En general, la nutrición enteral precoz peritras-
de una valoración del estado nutricional pretras- plante tras los regímenes convencionales de acon-
plante. En enfermos normonutridos, se mantendrá dicionamiento presenta un elevado índice de fra-
una dieta oral que cubra sus necesidades energé- casos. Las dificultades de establecer una vía enteral
ticas. Si se detecta desnutrición, se añadirán suple- segura son muy importantes debido al sangrado, el
mentos orales o se iniciará NE o NPT según la si- riesgo de aspiración, sinusitis, diarrea, íleo, vacia-
tuación del paciente, retrasándose el TMO en caso miento gástrico lento o vómitos. Cuando se com-
necesario. No se ha investigado, sin embargo, la efi- prueba la recuperación del recuento de leucoci-
cacia de la intervención nutricional pretrasplante. tos y plaquetas, y la reparación de la mucosa oral
Intervención nutricional postrasplante: a las 48 y gastrointestinal, la NE por sonda constituye una
horas del trasplante se iniciará NPT si el enfer- adecuada forma de transición entre la NPT y la
mo está hemodinámicamente estable. La compo- dieta oral.
sición de la NPT (Tabla 8) es empírica y no ba- La NE también puede estar indicada en aquellos
sada en estudios prospectivos. La suplementación pacientes con requerimientos nutricionales eleva-
con glutamina en un estudio disminuyó la tasa de dos a causa de complicaciones como la EICH.
infección, acortó la estancia hospitalaria y mejoró
el balance nitrogenado, aunque no aumentó la su-
pervivencia a largo plazo. Sin embargo, otros auto-
res han encontrado una utilidad limitada en la su- 6. Recomendaciones
plementación con glutamina enteral o parenteral a nutricionales para la
este tipo de pacientes. No se han publicado estu- prevención primaria
dios con suficiente poder estadístico que valoren y secundaria del cáncer
el efecto de la glutamina sobre la recidiva tumo-
ral, la supervivencia o la incidencia y severidad de Se dispone en la actualidad de una gran canti-
la EICH. Actualmente las guías clínicas de la Socie- dad de datos epidemiológicos que sugieren que
dad Americana de Nutrición Enteral y Parenteral los factores dietéticos y ambientales juegan un
(ASPEN) no recomiendan la suplementación con papel relevante en el desarrollo de neoplasias en
glutamina de la NPT o NE en estos pacientes. múltiples órganos. Las recomendaciones de las

1188
J. J. Gorgojo Martínez

Tabla 9. RECOMENDACIONES DE LA AMERICAN CANCER SOCIETY SOBRE NUTRICIÓN


Y ACTIVIDAD FÍSICA EN LA PREVENCIÓN DEL CÁNCER

• Comer una dieta sana y variada, con elevado consumo de alimentos de origen vegetal
- Tomar > 5 raciones de frutas y verduras
- Seleccionar cereales integrales en lugar de productos refinados
- Limitar el consumo de carnes rojas, especialmente las procesadas y ricas en grasa
- Elegir alimentos que ayuden a mantener un peso saludable
• Estilo de vida activo
- Adultos: actividad física moderada 30 minutos/día 5 días por semana. 45 minutos/día de actividad
enérgica realizada 5 días por semana pueden contribuir a reducir el riesgo de cáncer de mama y colon
- Niños y adolescentes: 60 minutos/día de actividad moderada-enérgica 5 días por semana
• Mantener un peso saludable a lo largo de toda la vida (IMC: 18,5-25 kg/m2)
- Equilibrar ingesta calórica con actividad física
- Perder peso en caso de sobrepeso u obesidad
• Limitar el consumo de bebidas alcohólicas

IMC: índice de masa corporal.

distintas sociedades científicas coinciden en in- El efecto carcinogénico del alcohol se asocia a
crementar la ingesta de fruta, verdura y cereales, ingestas elevadas, especialmente en pacientes fu-
reducir las grasas saturadas y los azúcares refina- madores.
dos y evitar un exceso de sal. Se sugiere mantener Aunque la evidencia científica que soporta las re-
un peso corporal saludable, realizar actividad físi- comendaciones dietéticas en la prevención secun-
ca regular y limitar la ingesta de alcohol a menos daria del cáncer es mucho más débil que en preven-
de dos bebidas al día en varones y a una en muje- ción primaria, es probable que la aplicación de las
res (Tabla 9). mismas pautas contribuya a reducir la aparición de
En el Lyon Diet Heart Study, la indicación pros- una segunda neoplasia en el paciente oncológico.
pectiva de una dieta mediterránea (con más pan y Existen datos convincentes sobre la asociación
cereales, fruta fresca y verdura, legumbres y pes- de obesidad con recurrencia de cáncer de ma-
cado, y menos ternera y cerdo, sin mantequilla) se ma, así como la influencia pronóstica negativa de
asoció con una frecuencia menor de muerte por la obesidad en diversos tumores. La obesidad es
cáncer en comparación con la dieta fase 1 de la un factor de riesgo para desarrollar algunos de los
American Heart Association. cánceres más comunes, como el de mama, endo-
La recomendación de reducir la ingesta de gra- metrio, colon y próstata. Los pacientes oncológi-
sa total del 40 al 30% se basa en una correlación cos obesos pueden iniciar una dieta hipocalórica
positiva entre ingesta de grasa e incidencia de y equilibrada durante el tratamiento oncológico,
cáncer de mama, colon y próstata. Basado en es- siempre que la pérdida de peso sea gradual (máxi-
tudios preliminares es recomendable aumentar el mo 1 kg por semana) y dicha pérdida no interfiera
consumo de ácidos grasos n-3 (pescado). La evi- con el tratamiento.
dencia en la que se basa la indicación de aumentar Recientemente se ha publicado un estudio pros-
el consumo de fruta y verdura proviene de estu- pectivo de una cohorte de 900.000 adultos ame-
dios caso-control y cohortes que demuestran una ricanos sin diagnóstico previo de cáncer. El índice
correlación inversa entre incidencia de cáncer y de masa corporal se asoció con mayores porcen-
niveles séricos de vitaminas. Los ensayos clínicos tajes de mortalidad por cáncer de esófago, colon,
con vitaminas antioxidantes no han demostrado, recto, hígado, vesícula biliar, páncreas, riñón, linfoma
sin embargo, un efecto protector hasta la fecha. no Hodgkin y mieloma. Los autores concluyen que

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Capítulo 4.40. Nutrición y cáncer

el sobrepeso y la obesidad son responsables de un que no se dispone de resultados en cuanto a la in-


14% de todas las muertes por cáncer en varones y fluencia del ejercicio físico sobre la recurrencia
20% en mujeres. del cáncer o la supervivencia tras el tratamien-
Tras el tratamiento oncológico, la ganancia o to, están en marcha diversos estudios de cohor-
pérdida ponderal debe llevarse a cabo mediante te que proporcionarán respuestas en torno a es-
una combinación de dieta y ejercicio físico. Aun- te aspecto.

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J. J. Gorgojo Martínez

7. Resumen
 La desnutrición es un problema frecuente en cientes oncológicos antes de que puedan ser
los pacientes oncológicos. Muchos estudios han recomendadas de forma sistemática.
mostrado que la pérdida de peso o de masa
magra se asocia con un incremento de la mor-  En los últimos años se están realizando impor-
talidad. Sin embargo, no hay datos que indiquen tantes avances en la farmacoterapia de la ano-
que la caquexia sea una causa de muerte o que rexia y la caquexia tumoral. Su aplicación clínica
el soporte nutricional revierta la caquexia. En asociada a un correcto manejo nutricional del
realidad, se puede considerar la caquexia como paciente pueden permitir en el futuro lograr
un marcador de gravedad de la enfermedad. un objetivo fundamental: la reversión de la
caquexia y la reducción de la morbimortalidad
 Los objetivos del soporte nutricional en el pa- asociada a la misma.
ciente oncológico son la prevención de la des-
nutrición secundaria a la neoplasia o su trata-
miento. Desgraciadamente hoy en día la terapia
nutricional no es capaz de revertir el proceso
de caquexia tumoral ni reducir la morbimor-
talidad del paciente. En el paciente con cáncer
que ha sobrevivido a su enfermedad, el objetivo
prioritario es reducir el riesgo de recidiva tu-
moral o la aparición de una segunda neoplasia.
En la población general, los profesionales sanita-
rios deberán esforzarse en recomendar hábitos
nutricionales saludables que han demostrado
un papel relevante en la prevención primaria
del cáncer.

 Actualmente se dispone de múltiples paráme-


tros clínicos para valorar el estado nutricional
del paciente con cáncer, pero no se pueden
realizar recomendaciones generales para todos
los tipos de tumores. Existen algunas neoplasias
o terapias con mayor riesgo nutricional, como
el trasplante alogénico de precursores hemato-
poyéticos. La valoración del estado nutricional
y la instauración del soporte nutricional deben
realizarse de forma precoz para maximizar su
eficacia. El uso paliativo del soporte nutricional
en el paciente oncológico terminal raramente
está indicado. No existe indicación de terapia
nutricional en pacientes bien nutridos some-
tidos a cirugía, radio o quimioterapia en los
que se prevé una ingesta oral adecuada. Por el
contrario, los pacientes con desnutrición grave
precisan soporte nutricional precoz preopera-
torio. La decisión de utilizar nutrición enteral
o parenteral dependerá del estatus nutricional
del paciente, la modalidad de terapia antitumo-
ral, la esperanza de vida y la calidad de vida. Las
fórmulas enriquecidas con inmunonutrientes
necesitan de una evaluación adicional en pa-

1191
Capítulo 4.40. Nutrición y cáncer

8. Bibliografía
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Uno de los mejores manuales de nutrición clínica. En su última estancia media en pacientes sometidos a cirugía de diversos
edición se presenta completamente actualizado, incluyendo múlti- tumores (gastrointestinales, y cabeza y cuello), en comparación
ples referencias bibliográficas. Imprescindible para cualquier clínico. con una fórmula estándar, aunque no se ha observado una re-
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daciones sólidas con una base bibliográfica extensa para el mane- el acetato de megestrol y el dronabinol, en pacientes oncológi-
jo nutricional de múltiples patologías. En el capítulo del paciente cos. El acetato de megestrol produjo un mayor incremento del
oncológico dedica un apartado especial al trasplante de precur- apetito y del peso corporal que el dronabinol. El tratamiento
sores hematopoyéticos. Resulta interesante consultar también el combinado no mejoró los resultados obtenidos sólo con
capítulo dedicado a los aspectos éticos de la nutrición. megestrol.

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Revisión de la mejor evidencia disponible hasta 1997 en el cam-
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