Walter Laqueur _
Mark Leonard
Udo Diedrichs
Ian Begg
Michel Wieviorka
Michael Keating
Fabio Liberti
Manuel Castells
Jean Pisani-Ferry
Simon Tilford
Anton Hemerijck
Kenneth Weisbrode'ACIONES DE MONTSE BERNAL
Forjarse en las crisis
8 Uni6n Europea recibia el pasado mes de octubre el Premio
Nobel de la Paz por “haber logrado que la paz, la democracia
ylos derechos humanos” hayan arraigado en Europa y que la
“guerra continental”, Ja Segunda Guerra Mundial (1939-1945),
acabase en “la paz continental”, Gracias al sueiio europeo, el
Viejo Continente pasaba de sufrir una guerra cada 20 afios a
disfrutar de més de 60 aftos de paz, reconciliandose y exten-
diendo la democracia la estabilidad alos paises del Este tras
la caida del muro de Berlin en 1989. El Comité Nobel concedia el galardén
cuando Buropa se encuentra inmersa en una grave crisis y muchos analistas
se preguntan qué sera de ella. Jean Monnet, uno de sus padres, dejé dicho:
“Europa se forjaré en crisis y serd la suma de las soluciones adoptada para
esas crisis.” VANGUARDIA DOSSIER dedica esta monografia a intentar anali-
zar qué posibles soluciones tendrd esta crisis econémica y financiera, pero
cada vez més politica y social.
Europa no parece caminar hacia la unidad politica: 1os Estados Unidos de
Europa sofiados por los padres fundadores. Parece que intenta salir del paso
para salvar el euro de forma temporal, lo que no evitara futuras crisis
Necesita una sacudida de carécter revolucionario porque la globalizacién
Tequiere una mayor integracién (Laqueur). Pero los lideres europeos, aunque
constatan que es necesaria mas Europa, no saben como persuadir a sus cit
dadanos, mercados, parlamentos o tribunales para que la acepten. Lo econé-
micamente necesario es politicamente imposible (Leonard). ¥ la bandera de
los intereses na-cionales se alza contra Bruselas y sus normativas, su tecno-
craciay su incapacidad de reactivarel crecimientoy crear empleo (Wieviorka),
Pero esté claro que silos gobiernos no cambian de estrategia, la recuperacion
econ6mica resultard esquiva y as finanzas ptblicas seguirdn siendo crénica-
mente débiles (Iilford). 2Estén los estados de bienestar en peligro de conver-
trseen victimas de a crisis? Lo que es seguro es que no serdn comoson. stn
en una fase de cambio constante y de importantes reformas (Hemerijck),
Como también lo esté el sistema econémico y monetario, con el proyecto de
uuni6n bancatia, logro insuficiente del que puede surgir la cuestién mas am-
lia de la unién fiscal y los eurobonos (Pisani).
Europa, que se ha convertido tanto o mas que Estados Unidos en una for-
taleza caracterizada por la insularidad yjo el aslamiento (Weisbrode), vive una
grave crisis, pero parece improbable que se rompa en una del Norte y otra del
Sur (Diedrichs). Pese a ello, es cada vez més plausible que se convoque en el
Reino Unido un referéndum sobre su permanencia en el que el triunfo del "no"
‘esmas que probable Begg). Mientras, las naciones sin Estado, que antafio tuvie
ron cabida con el discurso de la Europa de las regiones, enarbolan hoy la ban-
dera de la independencia (Keating), y emerge un movimiento social que esté
sustituyendo la divisién clésica entre derecha e izquierda por el de a favor 0
en contra del sistema (Liberti). Ha comenzado una transicién en Europa entre
una democracia liberal agotada en sus formas y procesos y una nueva demo-
cracia que esté todavia por descubrir (Castell).
Alex Rodriguez,61
14)
161
18
221
26)
30|
SUMARIO
ENERO / MARZO 2013
Europa: escenarios de futuro
por Walter Laqueur
No hay respuesta fables ala pregunta de cémo seré a Europa de
dentro de 15 030 afios, El futuro vendré éeterminado por Lo que
‘ocurra en otras partes del mundo y por el consenso para fjar una
forma de soberania untaria, viable, soidaiayduradera, El ncleo
europeo sobrevivié ala vaivenes de le actual crisis, cuyes causas
pueden buscarse en el ntento de avanzar en la economia sin haber
establecid previamente as condiciones potas basics.
LAEUROPAUNIDA
La reinvencion de Europa: necesidad
e imposibilidad de una mayor integracion
por Mark Leonard
En plena crisis del euro, la Unién Europes se entrenta aun desafio
més complejoy de mayores consecuencias: el préctcocalapsodel
sistema polio. A las crecientes presiones de os populistas se
afaden los difteltades de os drigantes para canvencera ciuda-
danos, partamentos y mercados de la necesidad doa integracién,
FORJADORES DE LA UNION
¢Hlabra dos Europas? ¢Alemania
con sus aliados y Francia con Espaiia e Italia?
por Udo Diedrichs
‘Mercozy” ha muerto, pero Franciay Alemania se necesitarn co-
smo motor paraimpulsar nuevas reformas yun ierazgo ntligen
te capaz de materializar la idea de una fedoracién europea de es-
tados-nacién, El “Club Med” (Francia, Espafa e Italal no es tan
homagéneo yuntaria com podria parecer a primera vista
éSeguira el Reino Unido en la Union Europea?
écual sera su grado de compromiso?
por lan Begg
Un “no” del Reino Unido # la Unién Europea no seria improbable
en un referéndum susceptible de convocarse en laproximaliegis-
lature. En un escenario donde el euroescepticisme cuenta con un
indiseutble apoyo politico, el préximo decenio seré crucial tanto
para negociar una posible alida como para definir os trios
de una nueva relacién, Ambas cosas no serén una tara ci.
éMis nacionalismo, menos Europa?
por Michel Wieviorka
Impulsados por fuerzas heterogénaas, la ifluencia det naciona-
lism trasciende los circulas de suelectorado. Laincopacidad de
la UE para responder adecuadamente a los actuales desafios
econémicos favorece un fomenta nacionalista que se evidencia
tanto a escala de Estad-nacién como de nacin sin Estado,34| La cuesti6n de las nacionalidades
por Michael Keating
Escocia, el Pais de Gales, Flandes, Catalunya y el Pais Vasco son
destacados ejemplos de las reivindicaciones de las naciones sin
Estado que avanzan en funcién det debilitamiento del Estado-
nacién, atrapado atn por las vielas ideas sobre la soberania y la
Independencia. Es poco probable que proliferen nuevos estados
en Europa, pero sila aspiraciones de las naciones sin Estado en
{querer sentarse con voz propia en la mesa de las decisiones.
38|
DELA GUERRAALA UNION (EUROPA 1946-2012]
22
El fin de la division izquierda-derecha
por Fabio Liberti
En los Paises Bajos, Grecia, Hungria e Italia han aflorado par-
tidos ycorrientes de opinién que ponen enjaque a una tradicio-
nal alternancia bipolar derecha-izquierda que ha brillado por
‘suincompetencia. La crisis econémica y le desconfianza popu-
larhacia las élites dirigentes amenazan la estabilidad.
46| Movimientos sociales contra la crisis
por Manuel Castells
Las protestas multitudinarias iniciadas en mayo de 2011 (M-18]
en Espaa se han convertido an el icone mundial de un peculiar
movimiento, surgido de las redes de internet, contra la crisis
‘econémica y sus causas. Los “indignados” condenan ta clase po-
Utica y denuncian la complicidad de gobiernos en unas medidas
dde austeridad que amenazan seriamente el Estado de bienestar.
50] Union bancaria y eurobonos:
ésustitucion o complemento?
por Jean Pisani-Ferry
Launién bancaria nose plantea comoUuna inciatva para solucio-
nar la crisis, pero puede ayudar a romper la actual espiral nega
tive en el sistema econémico y monetaro al abrir una via para la
recaptalizacién de la banca, La unign fiscal y las eurobonos
configuran las expectvas de este marco financiero integrado
55| La recuperacion exige un nuevo pacto
entre el capital y el trabajo
por Simon Ttford
Sila situacin eeonémica ne muestra sitoras de recuperacié, as
Finanzas piblicas seguiréndebilténdose.Y, también, sls gobier-
nos insisten en aplicar medidas de austeridad que se alejan de as
polticas de redistribucin fiscal y de los sistemas de pratecién
socal, el escenario que se creard agravaré los problemas de os
rercades, debiltaré la cohesén social, sacavaré a credibilidad de
te clasepoltcayalimentarté el euroescepicisme
60] ELPODER DEL EURO
62| Los estados de bienestar y la crisis del euro
ppor Anton Hemerijck
¢Sobrevivrd el Estado de bienestar europeo a las réplicas conta-
giosas dela crisis del euro? ,sise supera esta situacién, ,cémo
quedaran los sistemas de prateccién social? De momento, las
‘medidas preventivas parecen contraproducentes mientras siguen
aumentando las diferencias entre el norteyelsur dela zona euro,
68] EL BIENESTAR EN EUROPA
70| Islas atlanticas: el papel de Estados Unidos
or Kenneth Weisbrode
Se ha esfurado el conceptointegrador de una comunidad oc-
cidental de aliados,socios y amigos. Pero si Estados Unides y
Europa actian como dos “isla allintcas” separadas serén
mucho mas difclles de defender de lo que aparenta su fuerza
yes casi imposible que prosperen cada una por su cuenta,
PARA SABER MAS
7 LIBROS
80) LITERATURA
82| CINE
84| VIAJES.
86| WEBS
88) INDICE 2012
\VANGUARDIA DossiER
bistros)
Station mene
irae tannin
gin med touts,
‘quite caceice mente,
‘Sircmandpengpetepie
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Shucnalaspablpresmedtacon
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Bagpelinm em nec DOSSIER
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Wi mouistar“escenarios de futuro
\ ‘CoNSEIERO DEL CRYTHO DP ESTUDIOS
y INTERNACIONALES VESTRATEGICOSDE VASHINGTON.EUROPA: ESCENARIOS DE FUTURO
Mo SERA EUROPA DENTRO DE
15, 20 0 30 afios? Es una pre-
gunta planteada y respon-
dida numerosas veces. Los
pronésticos no pueden ofte-
cer una fiabilidad completa
por razones evidentes, pues
la situacién de Europa de-
pende también de aconte
cimientos en otras partes del mundo, en Es-
tados Unidos, Rusia y China; de las consecuen-
cias de una guerra en Oriente Medio (si tal
guerra estallara) y también de otras circuns-
tancias. Se trata de una
ecuacién con demasia-
dos factores.
Paradéjicamente,
‘es mas ficil predecir las
tendencias alargo quea
corto plazo en Europa.
or qué? Porque acorto
plazo puede suceder ca
si cualquier cosa, mien-
tras que a largo plazo las posibilidades son mas
limitadas. No todos los acontecimientos posi
bblemente espectaculares de los préximos atios
tendran un impacto duradero; las consecuen-
cias a largo plazo de una guerra en Oriente
‘Medio podrian ser menos espectaculares de lo
Jean Monnet tenia raz6n cuando
advirti6 que el futuro de una
Europa unida debia afirmarse
mediante la creacién de una
federacién con més rasgos
culturales que econémicos
que pensamos y cabe aplicar lo propio, para
Citar otros ejemplos, alos resultados de las elec-
ciones en Estados Unidos 0 a una lucha de
poder en el Lejano Oriente.
Es cierto que los economistas disponen de
‘modelos complejos para elaborar andlisis y
pronésticos. Pero, como dijo uno de ellos re-
cientemente, en wltima instancia las causas de
la crisis econémica son en realidad psicot6-
igicas y sociolégicas, de dificil 0 incluso impo-
sible cuantificacién,
‘Todo lo que cabe hacer razonablemente es,
abordar a grandes rasgos las tendencias mas
probables
Al referirse al
futuro, es menes-
ter poner el acento
en las tendencias
politicas. Cierto,
los factores econé-
micos, la crisis de
la deuda y las difi-
cultades presentes
apremian y debe hallarse una solucién de un
‘modo u otro, pero en lo concerniente al futuro
ylaunidad de Europa puede afirmarse que Jean
Monnet tenia razén: es la figura que en mayor
‘medida se hizo cargo del proyecto de la Europa
‘unida durante y después de la Segunda GuerraEUROPA: ESCENARIOS DE FUTURO
‘Mundial. Muchos aftos después dijo: “Si hubiera
de empezar de nuevo, yo impulsaria una inicia-
tiva tendente a la creacién de una federacién
europea de rasgos mds culturales que econémi-
os.” Cuando mencionaba la “cultura” tenia,
por supuesto, algo mucho més amplio en mente
que la poesia o la pintura.
En Jos primeros afios de la posguerra, una
unién del carbén y del acero se presentaba
como la base més plausible de cooperacién.
Existian claros intereses comunes, Sin embar-
go, a medida que el movimiento hacia una
Furopa unida prosiguié su andadura y abrigé
:mayores pretensiones, fue evidente que los fac-
tores econémicos podian guiar solo hacia una
‘uni6n econémica, pero no mucho més alld,
Ademés, como la suerte del euro ha demostra-
do, sin una mayor federacién politica la estre-
cha cooperacién econémica no podia funcio-
nar. No obstante, no hubo acuerdo en y entre
Jos paises de Europa sobre si una mayor fede~
racién politica era, de hecho, conveniente.
Jean Monnet, el citado politico francés que
permanecié siempre en segundo plano, era un
economista y hombre de negocios; su familia
posefa una importante firma productora de
cofiac en el suroeste de Francia, Pero fue cons-
ciente desde el principio de los limites de la
cooperacién econémica.
En agosto de 1943, en un discurso ante el
(Comité Nacional Francés de Londres (el movi-
miento De Gaulle), dijo: "No habra paz en
Europa si Ios estados se reconstruyen sobre la
base de la soberania nacional. Los paises de
Europa son demasiado pequeios para asegurar
a sus pucblos la prosperidad y el desarrollo
social necesarios. Los estados europeos deben
constituirse en una federacién.”
Tales palabras fueron proféticas. Es cierto
que ha habido paz en Europa, excepto en st
patio trasero, los Balcanes. No porque los
europeos se hayan convertido todos en pacifis-
tas, sino porque se hallan en una situacién de-
masiado débil como para librar y soportar una
guerra prolongada, Los paises europeos dieton
algunos pasos hacia una federacién y han avan-
zado hacia la prosperidad y el desartollo social.
‘También podria argumentarse que no era del
todo seguro que fueran a triunfar las ideas de
Monnet de basar al principio una federacién
europea en la “cultura”, dExistia suficiente soli
daridad europea? (Se compartian suficiente-
‘mente unos valores comunes para poder en-
caminar el continente hacia unos Estados Uni
dos de Europa? Todos conocemos las fuertes
tendencias centrifugas no solo entre los paises
de Europa, sino también dentro de cada uno de
ellos. dBran las ideas de una politica comtin
La idea de unos
Estados Unidos
de Europa
ha topado
con fuertes
tendencias
centrifugas
tanto entre
los paises
comunitarios
como en el
seno de cada
uno de ellosexterior y de defensa minimamente
realistas? éFue una casualidad que
fracasaran todos los anteriores movie
mientos federales en Europa y, en afios
és recientes, el movimiento Paneuro-
padel conde CoudenhoveXalergi en la
década de los aos 20 y 30? Este tltimo
intento cont6 con numerosos apoyos
pero, en suma, no fructifics
También fue Jean Monnet quien
4ijo que las crisis son los grandes ele
‘mentos que ejercen un efecto federa-
dor en el curso de la historia. Las deck
siones importantes y de largo alcance
(especialmente las mds arduas) se
adoptan tinicamente sila situacion es
muy grave. Si hubo cierto progreso
hacia una Unién Europea en el siglo
pasado, fue el resultado de una grave
crisis, a Segunda Guerra Mundial. Con
‘venci6 a los europeos de que una estre-
cha cooperacién econémica era lo que
mis convenia a todos. Pero el caso no
fue lo suficientemente traumtico co-
‘mo para superar este estadio. La creen-
cia en la soberania nacional se revel6
mis fuerte que la idea de una fede:
racién europea. De ahi la crisis actual
0
Las causas de la crisis econémica
la crisis de Ta deuda y la crisis del euro
son bien conocidas~ radicaron sobre
todo en el intento de dar un gran paso
adelante en el plano econdmico sin
haber establecido antes las condiciones
previas en el plano politico, Las diver-
sas iniciativas para salir del desbara-
juste econémico -ya sea mediante los
recortes y el ahorro 0 mediante el gasto
para dar asi un gran impulso al crect
miento econémico- han sido amplia-
mente debatidas. Sin embargo, nues-
tro principal interés y preocupacién,
aqui y ahora, se refiere al futuro de
Europa, sobre si avanzaré hacia una es
trecha Unidad o existen més probabi-
lidades en sentido contrario.
La mayoria de los participantes en
€1 debate sobre el euro y la zona euro
son economistas 0 empresarios, to cual
es comprensible dada la gravedad de la
crisis. Pero la raiz del problema es mas
amplia porque, incluso si el euro se
EUROPA: ESCENARIOS DE FUTURO
salva y la zona euro sobrevive por aho-
ra, queda abierta la cuestiOn del fe
deralismo y de la unidad europea. Su-
poniendo que tras una intervencién a
gran escala del Banco Central Europeo
(BCE) bajo ta direccién de Mario Draghi
sobrevivan el euro y la zona euro, los
problemas de fondo persistirén: es de-
Gir, el conflicto entre la soberania na-
ional y los Estados Unidos de Europa.
Hay que admitir que en el caso de que
las instituciones europeas sean nota-
blemente reforzadas por la reforma de
la Unién Econémica y Monetaria y la
imposicién de la disciplina presupues-
taria, 1a zona euro sera mas competi
tiva y sera posible una estabilizacién
de Ios bancos y un control de los pre:
supuestos del Bstado, de las deudas y
del déficit. Todo ello es muy impor-
tante, pero no conduciré a una Europa
mis fuerte, una Europa que seguira
siendo (como dijo el ex ministro de
‘Asuntos Exteriores belga Mark Eys-
kens, “un enano en términos politicos
y un gusano en términos militares".
Cabe la posibilidad de que ni siquiera
pueda impedir otra crisis econdmica
profunda en un futuro no muy lejano,
Estas reformas pueden ser esen-
ciales para la supervivencia de un mer-
cado comin, pero para que sean dura-
deras y puedan convertirse en pelda-
fios hacia una federacién europea se
necesitaré algo de mayor alcance simi-
lar a una sacudida de cardcter revolu-
cionario, porque ello implicara cam-
bios profundos en la mentalidad exis-
tente, Me refiero a una disposici6n mu-
cho mayor a ceder derechos de sobe-
rania nacional; esto es, a una ruptura
casi total con el pasado. Y no hay indi-
ios de tal cosa en la actualidad.
‘Todas las encuestas muestran que
‘una mayorfa, incluso la gran mayoria,
de 1a opinién ptiblica europea se opo-
ne a la cesién en materia de institu-
ciones tradicionales y derechos de (en
‘muchos casos) miles de aftos de histo-
ria, No es solo una cuestién de “euroes-
cepticismo” =de dudas sobre la efica-
cia de Ia burocracia de Bruselas~; es
tuna cuestién que atafie a los funda-
_mentos basicos de la existencia nacio-
nal, del patriotismo, de la solidaridad
nacional, eteétera. Seria, tal como al-
‘gunos consideran, una préctica entre:
ga de la mayoria de los valores nacio-
nales en un gesto que equivaldria aun
suicidio nacional.
En la historia de las naciones se
han dado situaciones en las que existia
tal disposicion, pero han sido poco fre-
cuentes; en general, esto sucedié en
condiciones de profunda desespera-
ci6n, Cuando Francia estaba a punto
de ser derrotada en la Segunda Guerra
Mundial, Winston Churchill propuso
una préctica unién de los dos paises,
que fue aceptada por el gabinete de
guerra briténico, Seguin este documen-
to, Francia y Gran Bretana ya no serian
dos naciones sino una soia, y los bri-
tanicos y los franceses tendrian la
misma nacionalidad. Pero la resolt-
in se vio superada por los aconte-
‘cimientos. Francia fue derrotada y se
rindi6, Fue un ejemplo de un intento
de unin nacida de la desesperacién.
as decisiones de gran alcance y
cardcter radical que afectan al destino
de las naciones se adoptan casi siem-
pre ante un peligro claro y actual,
porque solo en esas situaciones hay un
motivo de peso suficiente como para
optar por un cambio radical.
Sin embargo, la crisis a que hace
frente Europa en la actualidad no pre-
senta todavia la misma gravedad; no
parece haber peligro inmediato de un
desplome absoluto. Es posible que el
riesgo sea extremo, pero es una crisis
de tipo progresivo y falta el factor de
jinmediatez. Una famosa figura litera-
ria briténica (Dr. Johnson) sefial6 en
tuna ocasién que nada aclara tanto la
‘mente de una persona como la certeza
de que él (0 ella) sera ahorcadoja al
cabo de un dia o dos. Sin embargo, sila
fecha de ejecucién no es tan cercana,
siempre resta la esperanza de que ocu-
ra algo para que el triste destino sea
‘menos seguro y, por tanto, no se produ-
ciré la claridad de mente en cuestién,
Fs dificil imaginarse aconteci-
ientos tales que puedan resolver en
breve plazo los problemas de los paises
endeudados. Pero también es ciertoEUROPA: ESCENARIOS DE FUTURO
que a lo largo de la historia los paises en quie
bra no solo han sobrevivido, sino que también
se han recuperado -recientemente Argentina
en el periodo 1999.2002-,yla misma esperanza
subsiste en Ja actualidad. Cabe confiar en que
los pafses més ricos de la Europa del norte,
sobre todo Alemania, rescaten a los paises me-
nos afortunados del sur de Europa, no quiz a
causa de un fuerte sentimiento de solidaridad,
sino porque un fracaso de la zona euro les haria
mucho dao. ¥, una vez se supere la crisis ac
tual, el repunte del ciclo econémico propiciard
tun renovado crecimiento y las cosas podrian ir
bien. Estados Unidos, tras el término de la Se-
‘gunda Guerra Mundial (y de nuevo a finales del
siglo pasado) era un pais muy endeudado, pero
logré prosperar en fos afios posteriores.
éQué grado de realismo cabe atribuir a
tales expectativas? No lo sé. Pero distan de ser
impensables. En el curso de la historia, diversos
intentos de crear una moneda comin han fra-
<=>