Diplomado

Diseño de Moda

Clase: Patronaje, Corte y Confección

Facilitador: Prof. Jose Ramirez

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El Planchado
Para que una prenda sea considerada de alta costura debe estar cosida con
atención en los detalles y los acabados, también se considera el corte impecable de la
prenda, que tenga un diseño apropiado y una elaboración esmerada.
La mayoría de las técnicas de los acabados de alta costura son usadas para el
interior de la prenda y no para ser vistas por los demás.
Los acabados de alta costura son simples y sencillos, detalles ocultos y son lo que
le dan calidad a las prendas.
Cada vestido es diseñado y confeccionado para ayudar a la figura femenina, para
resaltar aquellos detalles que la hacen ver más sencilla y fina y para disminuir los que
puedan afectarle en su imagen.

El planchado es un trabajo que requiere cierta práctica puesto que no es fácil hacerlo
bien a la primera vez. Para un buen planchado se requieren varias herramientas como la
plancha, planchador, almohadilla, paño, entre otros.

Un planchado correcto, durante cada fase del trabajo de costura, simplifica mucho
la tarea y mejora notablemente el resultado.

El planchado durante el proceso de confección se realiza cada vez que se

van uniendo las piezas, de esta manera las prendas van tomando forma y al hacer
la primera prueba ya puede verse el aspecto que tendrán una vez terminadas.

Las piezas que deben plancharse son las siguientes: costuras, esquinas, pinzas,
pliegues y vistas, el planchado se debe hacer en forma suave por si hay que efectuar alguna
modificación posterior.

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A continuación se muestran gráficamente algunas recomendaciones de planchado.

1. Poner siempre un paño cuando se planche por el derecho de la prenda para evitar
brillos.

2. Las costuras se planchan primero de forma plana y después abriendo los márgenes.

3. En telas suaves y delicadas, al planchar costuras abiertas colocar papel debajo para
evitar marcas por el derecho de la tela.

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4. Si, a pesar de todo, se marcan los márgenes o dobladillos, volver a planchar con
cuidado por debajo de los cantos (costuras).

7. En las costuras redondeadas hacer varios cortes en los márgenes. Para separar los
márgenes de costura con la plancha, poner la prenda sobre la tabla de planchar, de forma
que la costura quede justo al lado del canto o utilizar una almohadilla de plancha.

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No planchar nunca por encima de alfileres.

8. El planchado correcto no es deslizar la plancha sobre la prenda, sino asentar el

trabajo de costura, es decir, ir colocando la plancha sobre una zona presionando muy poco,
levantar y pasar a la zona siguiente.

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9. El Planchado de entretela termo adhesiva. Este tipo de tejido se aplica en forma

muy rápida y sencilla ya que como su nombre lo indica se fija a la tela directamente con la
plancha muy caliente, pero sin moverla de un lado a otro o sea hay que apoyarla unos
instantes sobre un sitio fijo, no haciendo mucha presión sobre la plancha para evitar que su
forma quede marcada por el derecho de la tela, luego dejar la pieza tendida por 20 min, o
en su caso darle golpecitos para liberar el calor de la prenda, (no debe moverse caliente
porque puede deformarse la pieza). Si utiliza plancha de vapor, utilice un paño húmedo, así
conseguirá que el pegamento se ablande y se fije en la tela uniformemente.

10. Planchado de pliegues, se coloca un paño húmedo encima de pliegue sobre el

derecho y se plancha con suavidad.

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11. El planchado y las telas con brillo.

a. Si antes de empezar a planchar se aprecia que la tela tiene brillo, colocar un paño
húmedo doblado varias veces sobre la zona brillante y planchar por encima sin presionar
mucho y sin que el trapo llegue a secarse. Retirar el trapo el paño mientras aun salga vapor
y cepillar la tela ligeramente.

b. Si la plancha de vapor no necesitara el paño húmedo: mantener la plancha muy

cerca de la zona brillante pero sin llegarla a tocarla y hacer que salga una buena cantidad
de vapor.

c. Otra manera de eliminar los brillos consiste en colgar la prenda y aplicarle por el
revés y sobre la zona brillante mucho vapor, consiguiendo así se levanten los pelillos
alisados.

EQUIPO PARA PLANCHADO

La plancha: Indispensable una plancha de vapor con

rociador y una amplia gama de temperaturas que se
acomoden a la tela. También es importante que cuente con
el mayor número posible de salidas en la placa, por lo
menos 20 orificios, pues con ello nos aseguramos una
mejor distribución del vapor y no se marquen las salidas de
éste en la prenda.

La mesa de planchar: Comúnmente se dispone de una

tabla de planchar portátil en la mayoría de los hogares, sin
embargo puede optar por una superficie más estable como
la mesa del comedor o alguna estructura sólida.

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Tabla para planchar mangas (llamado también

manguero): Entre las superficies de planchado
se encuentra este accesorio que resulta muy útil,
se asemeja a una mesa de planchar en miniatura
y resulta muy práctica para asentar costuras,
detalles en zonas pequeñas y angostas como
mangas, las piernas de los pantalones y los
escotes.

El vapor de mano: es una plancha de vapor

liviana que concentra el vapor en una zona, a una
baja temperatura. No requiere de paño para
planchar, aun cuando se plancha por el derecho
de la tela. Es muy útil para pinzas, costuras,
pliegues y dobladillos.

El paño de planchar: Lo ideal es contar con tres

diferentes gruesos: percal (algodón), popelina y
muselina son los más apropiados. Hacerlos lo
suficientemente grandes nos permite usarlos un
buen rato sin necesidad de humedecerlos
continuamente, 1m x 50 cm es un tamaño
adecuado.

El percal retiene más humedad que los demás paños y es mejor para
planchar tejidos de lana de grueso medio o muy gruesos. Estos hay que plancharlos
con bastante presión ya que tiene una capacidad de reacción y hacen difícil la
penetración del vapor.

Para tejidos finos utilice un paño de muselina ligeramente humedecido.

Como la muselina es semitransparente, podrá ver las zonas que está planchando y
evitar así el exceso de plancha en tejidos delicados.

El paño de uso general más útil es el de popelina, que sirve para la mayoría
de los tejidos, sea cual sea su grueso.

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El rodillo de planchar costuras es un tubo de tela

relleno de serrín bien apretado. Se emplea para
impedir que se noten las marcas de las costuras en
la prenda.

La almohadilla de sastre tiene una forma oval, con

lados curvos, va también rellena apretadamente de
serrín. Es ideal para planchar la corona de la manga,
el fondillo de los pantalones o las costuras princesa,
zonas todas que necesitan que al planchar se
mantenga al mismo tiempo la curva.

El mitón de plancha es una especie de manopla

firmemente rellena que se pone en la mano y se
introduce en las zonas curvas más pequeñas
durante el planchado. El relleno protege la mano
del calor y del vapor. Todos estos elementos
pueden encontrarse en una buena mercería o
tiendas de hogar, pero también puede fabricarlos
en casa, por un coste mucho más reducido.

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FORMA CORRECTA DE CORTAR EL BIES

1. Doble la tela en ángulo recto (90º). El bies se localiza a la mitad del ángulo recto
(45º). El bies que se corta a menor de 45º no sirve.

2. Con una regla marque cada 2 o 3 cm (o el ancho deseado), desde la línea diagonal
y paralelo al doblez hasta terminar.
3. Dibuje las líneas y después siguiendo el hilo de la tela, prenda con alfileres.
4. Corte las tiras con cuidado.

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5. Prenda las orillas de las tiras: derecho con derecho, alinee el bies en forma recta
según se observa en la figura A.
A

Fig. A Fig. B

6. Prenda, hilvane y cosa. Fig. A. Planche las costuras abriéndolas y corte los bordes
de las orillas. Fig. B.

“La ropa no es nada hasta que alguien

vive en ella”.
Marc Jacobs

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