El nuevo nacimiento

Juan 3:1-5
Introducción:

El nuevo nacimiento es un tema de mucho interés en la vida cristiana. Porque la Biblia dice que
el que no naciere de nuevo, no puede ver el reino de los cielos. Entramos a considerar en
primer lugar:

I. El significado de nacer de nuevo.

a. Significa nacer del agua y del espíritu

b. Significa dejar las cosas malas y vivir una vida nueva en Cristo Jesús.

II. Nicodemo, un hombre principal de los fariseos, no entendía lo que significaba nacer de
nuevo.

a. Vino a Jesús de noche.

b. Reconoció que Jesús había venido de Dios.

c. Jesús le advirtió lo que tenía que hacer, si quería entrar al cielo.

1. Nacer del agua y del espíritu.

III. El proceso del nacimiento de un niño, un ejemplo del nacimiento espiritual.

a. Es engendrado. (Nosotros espiritualmente, somos engendrados no de voluntad de varón,

sino de Dios)

b. Se va formando durante un periodo de nueve meses en el vientre de la madre.

2. Tiene ojos – pero no puede ver.

3. Tiene oídos – pero no puede oír.

4. Tiene boca – pero no puede hablar.

5. Tiene pulmones – pero no puede respirar.

6. Tiene pies – pero no puede caminar.

(Esto es porque el bebé formado no ha nacido todavía y sí es la persona cuando no ha nacido

de nuevo)

c. Cuando un niño nace

1. Inmediatamente lo lavan: (Todo lo sucio del pecado es limpiado por Jesucristo)

2. Es vestido con ropas nuevas: (Dios nos viste con vestiduras de justicias, Isaías 61:10)

3. Es cuidado alimentado con la leche materna para estar bien nutrido: (Ese alimento es la
palabra de Dios, 1ra de Pedro 2:2)
4. Los padres le dan un nombre: (Nuestro padre nos da un nombre y venimos a ser parte de
una gran familia, Isaías 43:1)

Conclusión:

Un cristiano que no ha nacido de nuevo, es como el feto en el vientre de la madre; con todos
sus órganos, pero sin poder hacer nada.

Está ciego espiritualmente; no canta, no trabaja en la obra de Dios, tiene dificultades en su

caminar cristiano etc. Si hemos nacido de nuevo, hemos sido lavados de nuestros pecados y
debemos alimentarnos cada día con la palabra de Dios, renunciar el pecado y servirle a Dios.