Al agotarse el tomo octavo de su protocolo, la suscrita notaria deja constancia de
que el mismo contiene trece escrituras, siendo la primera de ellas el número uno y la última el número trece, que los folios del tomo se encuentran en perfecto estado de conservación y limpieza y el total de las escrituras se encuentran debidamente firmadas por las partes, testigos si correspondiere y por la suscrita Notaria. En los casos que ha correspondido, se han consignado las notas marginales pertinentes y se ha puesto la razón “no corre”. Asimismo, la suscrita Notaria hace constar que no quedan folios en blanco. ES TODO. San José, dieciséis de abril de dos mil veintiuno