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Economía de Guatemala en tiempos de Covid-19

Guatemala ha experimentado estabilidad económica que puede ser atribuida a una


combinación de gestión fiscal prudente, políticas para el control de la inflación y un
tipo de cambio flotante administrado. El país ha tenido un desempeño económico
sólido en años recientes, con un crecimiento del PIB de 2.8 por ciento en 2017, 3.1
por ciento en 2018 y 3.6 por ciento en 2019. Debido al impacto de la pandemia de
covid-19 (coronavirus), se espera que la economía del país se contraiga a -1.8 por
ciento en 2020 y crezca 4.4 por ciento en 2021.

Situada en una ubicación estratégica, con abundantes recursos naturales y una


población multiétnica joven, Guatemala tiene un enorme potencial para generar
crecimiento y prosperidad para su gente.

Pero la estabilidad económica de Guatemala no se ha traducido en una aceleración


del crecimiento que permita cerrar la brecha de ingresos con países ricos. De
hecho, las tasas de pobreza y desigualdad en el país son persistentemente altas, y
los altos índices de retraso en el crecimiento infantil amenazan la capacidad de
Guatemala para alcanzar su pleno potencial de desarrollo.

La pobreza, medida en la línea de un ingreso de US$5.5 por persona por día,


aumentó entre 2006 y 2014 de 43.4 por ciento a 48.8 por ciento, lo que sumó a casi
2 millones de personas a la pobreza. La pobreza extrema (ingreso menor a US$1.9
por persona por día) afectó al 8.7 por ciento de la población en 2014, casi medio
millón de personas más que en 2000.

Las desigualdades persisten en las áreas geográficas y entre grupos étnicos, y los
pueblos indígenas continúan particularmente en desventaja, algo que el censo de
2018 volvió a confirmar. En esencia, hay “dos Guatemalas”, una con buena posición
económica y una pobre, una urbana y otra rural, una ladina y otra indígena con
grandes brechas sociales y económicas. Estas diferencias se ven agravadas por la
alta vulnerabilidad del país al cambio climático, que afecta la desnutrición, la salud,
la seguridad alimentaria, los recursos hídricos y los ecosistemas naturales.

Acelerar el crecimiento será crucial para lograr los objetivos sociales a mediano y
largo plazo del país. Si bien las reformas de políticas en favor de los pobres podrían
generar mejoras marginales, se necesita un cambio en el crecimiento económico.
Impulsar ese crecimiento dependerá de reformas continuas para movilizar una
mayor inversión privada y generar más ingresos para financiar importantes
inversiones en infraestructura y capital humano.

La inversión pública es esencial para alcanzar los objetivos de desarrollo de


Guatemala, pero sigue estando limitada debido a la falta de recursos. Dado que los
ingresos del gobierno central promediaron un 11 por ciento del PIB en los años
recientes, y un 9.7 por ciento estimado en 2019, el principal desafío fiscal de
Guatemala es la necesidad de recaudar ingresos adicionales para financiar
proyectos clave de inversión pública.

Otros desafíos cada vez más importantes para Guatemala son fortalecer la
gobernanza, aumentar la rendición de cuentas y la participación ciudadana y
mejorar los niveles de seguridad pública. Los altos niveles de delincuencia y
violencia representan enormes costos humanos y económicos para el país.
(bancomundial.or, 2020)

El impacto en la economía por el cierre de empresas, negocios y servicios está


generando una de las situaciones más difíciles, retadoras y peligrosas que hemos
tenido en las últimas décadas.

¿Qué necesitarán los países para después levantarse?

Depende de cuándo aparezca una vacuna o una cura y pueda ser administrada a
miles de millones de personas.

La reanimación será diferente si pasa dentro de unos meses o un año o más tiempo,
pero a pesar de esto, salir del coronavirus no va a resolver el legado de devastación
económica que dejó en el camino. (Martínez, 2020)

Lo que es inevitable es que algunos sectores productivos específicos se vean


severamente afectados, entre los que destacan los de turismo; restaurantes y
hoteles; aviación y aerolíneas; industria automotriz; energía y combustibles; y bienes
de consumo. También el virus dañará las cadenas de suministro globales, lo que
implicaría daños adicionales a la economía mundial. Afortunadamente, las
autoridades económicas de las principales economías han reaccionado con
medidas muy agresivas de impulso económico (reducción de tasas de interés,
líneas de crédito preferenciales, alivios fiscales y relajación de reglas laborales) que
pueden mitigar la desaceleración productiva.
Para la economía guatemalteca las consecuencias son ineludibles. Su
vulnerabilidad está relacionada con tres factores: el grado de solidez de sus políticas
macroeconómicas, su nivel de apertura hacia el resto del mundo y la eficacia de su
sistema de salud pública. Respecto del primer factor, aunque se necesita mayor
flexibilidad en tiempos de crisis, puede afirmarse que existe un aceptable grado de
resiliencia ante choques externos. Respecto del segundo, Guatemala (comparada
con otras economías) tiene una relativamente baja exposición a las crisis
internacionales cuando se mide su nivel de apertura a través de los principales
canales de transmisión de los flujos económicos (las remesas familiares, la inversión
extranjera, el comercio de bienes y el comercio de servicios). El eslabón más débil
será, entonces, el sistema de salud pública, cuya eficacia enfrenta ahora su más
grande prueba de fuego. (Lara, 2020)

¿Qué tiene que ver la discusión de las medidas económicas con la gestión efectiva
de la epidemia del covid-19? ¡Tiene absolutamente todo que ver!

El aislamiento social, la necesidad de guardar distancia para no contagiarse es una


de las principales medidas para detener la dispersión del virus y parar el contagio
entre personas. Esto ha implicado desde cerrar fronteras, detener vuelos y no
aceptar el ingreso de personas, hasta parar la actividad económica porque implica la
aglomeración de gente en lugares de trabajo, en el transporte público, en los centros
de comercio, enseñanza y mucho más. La afectación económica de la pandemia es
una de sus consecuencias más fatales y de más largo y profundo alcance. Por eso
las decisiones que tome el gobierno en esta materia son tan críticas como las que
toman en materia de salud pública. Ambas, juntas, son determinantes para la
gestión efectiva de la epidemia y para que podamos salir pronto de esta etapa, sin
que signifique perder vidas innecesariamente.

Por eso, hoy hago un llamado urgente al presidente para que el gobierno acelere el
paso y simplifique los procesos que lleven a ejecutar esa asistencia económica de
manera inmediata. No solo es necesaria para contener el deterioro de la economía;
es determinante para interrumpir la transmisión del virus, al asegurar el
cumplimiento del “Quédate en casa”.
El gobierno no puede exigirle a la gente que se quede metida en su casa si no tiene
cómo asegurar que sus familias contarán con alimento y con un ingreso mínimo que
les permita afrontar otros gastos mientras dura este período especial. La gente no
debe tener que escoger entre conservar su empleo y arriesgarse a infectarse con el
virus con tal de que no la despidan o suspendan, especialmente, en una economía
que normalmente ofrece tan pocos puestos de trabajo formales. Es obvio que la
gente tomará el riesgo, pues ingenuamente cree poco probable que se contagie o
que enferme.

La poquísima información epidemiológica que ha dado el gobierno muestra que, en


Guatemala, son las personas jóvenes, en edad de trabajar, quienes se están
contagiando con el virus. Eso explica por qué la mortalidad por el covid-19 no ha
sido tan alta todavía, lo cual es de alegrarse, pero sí implica que tenemos en la
gente joven un potencial ejército de portadores del virus hacia sus hogares y a los
miembros de sus familias de más avanzada edad o con problemas crónicos de
salud, y que sí corren el mayor riesgo de morir. También, de prolongar la epidemia.
(Slowing, 2020)

Según la Encuesta Nacional de Empleo e Ingresos (2018), en Guatemala el 69.5%


de la población trabaja en el sector informal. Es decir, sin garantías ni protecciones
laborales. Este sector depende directamente del trabajo de cada día para obtener
ingresos. Pensar en esta posibilidad no significa ser pesimista ni tampoco dudar del
futuro, sino simplemente tener las cosas claras, para prever los posibles problemas
y buscar las mejores soluciones. El poder por contactos podría ayudar a obtener
más recursos y hacer más negocios. El poder por contactos se basa en las
relaciones con personas que tienen influencia de algún tipo. Mientras más aliados
se consigan, mayor poder de influencia se tendrá para cumplir con los objetivos. El
poder por contactos puede ayudar también a obtener los recursos necesarios para
continuar con su negocio.
Ante las instrucciones del gobierno, y con el fin de resguardar la vida y salud de los
trabajadores, muchas empresas suspendieron labores. Existe la posibilidad de
recortes de personal, por no tener la capacidad económica para mantener los
salarios. Sin duda, económicamente la situación se pondrá difícil, por lo que
necesitamos pensar en dos cosas: ¿Qué puedo hacer para que me afecte lo menos
posible? ¿Qué habilidades se van a necesitar cuando esto termine?

El ser humano ha ejecutado su papel de consumidor (individuo necesitado), pero


también ha ejercido su papel de productor (individuo proveedor); lo que le hace
diferente de cualquier otra especie sobre la tierra, porque transforma su hábitat, sus
niveles de producción y la forma de obtenerla. Las hormigas, las abejas y otras
especies realizan labores de recolección para satisfacer necesidades. Sin embargo,
no han transformado su medio, ni han cambiado la forma de adquirir y proteger sus
satisfactores; no han creado `` necesidades nuevas `` que exijan otros medios o
formas diferentes de satisfacerlas. (Vásquez, 2020)

Si los que tienen empleo formal están sufriendo económicamente, imagínese cómo
le va a quienes sobreviven en la economía informal, que viven de sus ingresos del
día; no digamos quiénes son pequeños agricultores o en infrasubsistencia, sin poder
cultivar o perdiendo sus cosechas; o a los profesionales en autoempleo, que han
tenido que dejar de ofertar sus servicios o cerrar sus centros de trabajo. Esta
epidemia ha desnudado plenamente la extrema fragilidad de la economía
guatemalteca: no solo afecta a la micro y pequeña empresa, o a la mediana, sino
también a las grandes empresas. ¡Nadie diría que son estas las que normalmente
acaparan la mayor parte de la riqueza que se genera en el país!

De nada sirve que el Congreso haya apoyado el nuevo endeudamiento y el gasto


adicional, si el Ejecutivo se tarda en ejecutar las medidas. La ayuda económica se
necesita ¡ahora! Dentro de un mes será tarde. Reconstruir la economía será mucho
más difícil así, pero también el esfuerzo habrá perdido propósito como soporte
esencial de las medidas de salud pública que se necesitan para detener la
epidemia. (Slowing, Prensa Libre, 2020)
BIBLIOGRAFÍA

bancomundial.or. (12 de Abril de 2020). Guatemala Panorama general. Obtenido de


https://www.bancomundial.org/es/country/guatemala/overview

Lara, M. A. (16 de Marzo de 2020). elPeriodico. Obtenido de Impacto económico del


Covid-19: https://elperiodico.com.gt/opinion/2020/03/16/impacto-economico-
del-covid-19/

Martínez, F. (9 de Abril de 2020). Prensa Libre. Obtenido de Un análisis sobre cómo


el covid-19 cambia el sistema económico que conocemos:
https://www.prensalibre.com/guatemala/politica/un-analisis-sobre-como-el-
covid-19-cambia-el-sistema-economico-que-conocemos/

Slowing, K. (22 de Abril de 2020). Prensa Libre. Obtenido de Asistencia económica


en tiempos de covid-19:
https://www.prensalibre.com/opinion/columnasdiarias/asistencia-economica-
en-tiempos-de-covid-19/

Slowing, K. (22 de Abril de 2020). Prensa Libre. Obtenido de Asistencia económica


en tiempos de covid-19:
https://www.prensalibre.com/opinion/columnasdiarias/asistencia-economica-
en-tiempos-de-covid-19/

Vásquez, M. E. (1 de Abril de 2020). Universidad San Pablo Guatemala. Obtenido


de PANDEMIA COVID-19: CONSECUENCIAS SOBRE LA ECONOMÍA
NACIONAL: https://uspg.edu.gt/site/blog/pandemia-covid-19-consecuencias-
sobre-la-economia-nacional

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