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Lo que Dios te dice en medio de la prueba

Dios te dice que: Yo soy tu sanador, no hay nada imposible para mí.
Hoy día, ante tantas evidencias de enfermedades es el mejor momento para
reconocer a Dios como nuestro sanador. El mismo Jesús dijo que no había
venido al mundo por los sanos, sino por los enfermos.
Haciendo énfasis en Éxodo 15:26 y Santiago 5:15.
Éxodo 15:25-26 TLA 25 “Moisés le pidió ayuda a Dios. Entonces Dios le
mostró un arbusto y le ordenó que lo arrojara al agua amarga. Moisés así lo
hizo, y al instante el agua se puso dulce. En ese mismo lugar Dios puso a
prueba a los israelitas y además les dio reglas de conducta. 26 Les dijo: «Yo
soy su Dios. Yo soy quien les da salud. Si ustedes prestan atención a mis
consejos y obedecen estos mandamientos y estas leyes que hoy les doy, y
hacen sólo lo bueno, no los castigaré como a los egipcios»”
Santiago 5:15 Y la oración de fe salvará al enfermo, y el Señor lo levantará;
y si ha cometido pecados, le serán perdonados.
De esta manera, Dios ha dado a su pueblo una promesa que sigue en pie
hasta nuestros días, y es que Él es nuestro sanador. Pero hay algo que es
determinante en la efectividad de la promesa de nuestro Dios, que, para
experimentar la sanidad completa y total, no sólo el área física sino también
en el perdón de los pecados y a la salvación en pleno sentido de estos
términos, debemos vivir en obediencia absoluta ante sus ojos, en santidad y
hacer justicia.
El señor nuestro Dios te dice hoy:
 La sanidad te la entrego como un regalo.
 No temas, porque yo estoy contigo;
 No desmayes, porque yo soy tu Dios que te esfuerzo;
 Siempre te ayudaré, siempre te sustentaré con la diestra de mi
justicia.
  Cuando Dios te da una promesa es para creerla, y guardarla en tu
corazón.
En este instante, haz una oración ante el señor y entrégale tu vida como una
ofrenda, escucha esta alabanza y recibe tu milagro con fe.