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LA ESPERANZA DEL JUSTO EN UN MUNDO EN CRISIS

Lamentaciones 3:18-33

Lam 3:18 Y dije: Perecieron mis fuerzas, y mi esperanza en


Jehová.
Lam 3:19 Acuérdate de mi aflicción y de mi abatimiento, del
ajenjo y de la hiel;
Lam 3:20 Lo tendré aún en memoria, porque mi alma está
abatida dentro de mí;
Lam 3:21 Esto recapacitaré en mi corazón, por lo tanto
esperaré.
Lam 3:22 Por la misericordia de Jehová no hemos sido
consumidos, porque nunca decayeron sus misericordias.
Lam 3:23 Nuevas son cada mañana; grande es tu fidelidad.
Lam 3:24 Mi porción es Jehová, dijo mi alma; por tanto, en
él esperaré.
Lam 3:25 Bueno es Jehová a los que en él esperan, al alma
que le busca.
Lam 3:26 Bueno es esperar en silencio la salvación de
Jehová.
Lam 3:27 Bueno le es al hombre llevar el yugo desde su
juventud.
Lam 3:28 Que se siente solo y calle, porque es Dios quien
se lo impuso;
Lam 3:29 Ponga su boca en el polvo, por si aún hay
esperanza;
Lam 3:30 Dé la mejilla al que le hiere, y sea colmado de
afrentas.
Lam 3:31 Porque el Señor no desecha para siempre;
Lam 3:32 Antes si aflige, también se compadece según la
multitud de sus misericordias;
Lam 3:33 Porque no aflige ni entristece voluntariamente a
los hijos de los hombres.
La vida esta llena de paradojas, cosas que humanamente no
podemos entender y aún aceptar, una de las cosas que nos
cuesta aceptar es ver sufrir al justo, ver morir a un niño, ver
partir a quienes amamos, ver a los malos prevalecer y
podríamos nombrar muchas más, la Biblia está llena de
estas, por eso me propongo hablar de la situación del
profeta Jeremías, quien tuvo que enfrentarlas por causa de
la palabra de Dios, este hombre de Dios nos enseña que hay
esperanza para el justo en un mundo que está en crisis.
Jeremías le tocó vivir el proceso de degradación de Judá,
anunciar a todos el juicio inminente contra ellos hasta el
punto de que fue llamado conspirador, además ver la
palabra de Dios cumplida cuando Jerusalén es destruida y
llevada al cautiverio, era una crisis moral, social, de
liderazgo tremenda, pero allí estaba un hombre justo
viviendo toda esa contradicción.

Quien no conoce a Dios se pregunta ¿por qué le suceden


cosas malas, tragedias a la gente “buena”? pero esto es una
evidencia del desconocimiento que hay de Dios, porque
debemos tener presente una realidad, estamos en un mundo
caído, corrupto y esto a causa del hombre y no de Dios,
porque todo que lo Dios creo en su estado original era bueno
y en gran manera.
¿cómo ver la bondad de Dios en un mundo de sufrimiento y
dolor?
Miremos que, aunque la crisis es total hay esperanza en Dios
para aquel que confía en Dios.

1. La condición del profeta: El lamento ante la


disciplina del Señor

Estaba en una situación emocionalmente de tanto dolor que


había amargura en su alma, el poema de los V.1-17 nos
deja ver como le reclama a Dios, que se ha ensañado con él,
quien no le escucha sus oraciones, hay un alto grado
desesperación.
Su lamento no es solo el de un hombre abatido y
angustiado, sino que representa la condición de un pueblo
que sufre el castigo a causa de su pecado, esto llega a un
punto clímax, cuando el profeta expresa:

Lam 3:18 Y dije: Perecieron mis fuerzas, y mi esperanza


en Jehová.
Lam 3:19 Acuérdate de mi aflicción y de mi abatimiento, del
ajenjo y de la hiel;
Lam 3:20 Lo tendré aún en memoria, porque mi alma está
abatida dentro de mí;

 Se debilitó su fe: Perecieron mis fuerzas y mi


esperanza en Jehová: ya no puedo más, no hay fuerzas
para soportar o seguir adelante, no hay esperanza ni
en Dios.
 Amargura de alma: fueron momentos tan difíciles que
enfrentó que le pide a Dios recordar su aflicción y
abatimiento y amargura (en Jeremías 9:15 que le dará
a comer al pueblo ajenjo y aguas de hiel).

Jer 9:13 Dijo Jehová: Porque dejaron mi ley, la cual di


delante de ellos, y no obedecieron a mi voz, ni caminaron
conforme a ella;
Jer 9:14 antes se fueron tras la imaginación de su corazón,
y en pos de los baales, según les enseñaron sus padres.
Jer 9:15 Por tanto, así ha dicho Jehová de los ejércitos,
Dios de Israel: He aquí que a este pueblo yo les daré a
comer ajenjo, y les daré a beber aguas de hiel.

 El error de recordar el pasado: una de las cosas que


tiende el ser humano es guardar, recordar las cosas
negativas que ha vivido, se justifica buscando una
razón para entender lo que vive en el presente,
Jeremías esta derrotado, humillado, abatido y culpa el
pasado por ello.

Cuando miramos la vida de Jeremías entendiendo todo lo


que tuvo que enfrentar siendo un hombre justo en medio de
una generación depravada, ver como el mismo pueblo de
Dios se corrompe, abandona a Dios y él mismo hablando en
nombre de Dios sufre el maltrato de los que decían conocer
a Dios, ser echado en una cisterna porque nadie le cree,
porque la mayoría de los profetas y sacerdotes tienen un
mensaje diferente al que Dios le da, podía preguntarse
¿Qué de bueno tiene todo esto? ¿cómo decir que Dios
es bueno si por servirle me suceden cosas malas?, es
mas estuvo a punto de tirar la toalla y no habla más
de Dios.

Jer 20:7 Me sedujiste, oh Jehová, y fui seducido; más


fuerte fuiste que yo, y me venciste; cada día he sido
escarnecido, cada cual se burla de mí.
Jer 20:8 Porque cuantas veces hablo, doy voces, grito:
Violencia y destrucción; porque la palabra de Jehová me ha
sido para afrenta y escarnio cada día.

Jer 20:9 Y dije: No me acordaré más de él, ni hablaré más


en su nombre; no obstante, había en mi corazón como un
fuego ardiente metido en mis huesos; traté de sufrirlo, y no
pude.
Jer 20:10 Porque oí la murmuración de muchos, temor de
todas partes: Denunciad, denunciémosle. Todos mis amigos
miraban si claudicaría. Quizá se engañará, decían, y
prevaleceremos contra él, y tomaremos de él nuestra
venganza.

Jeremías había vivido situaciones muy difíciles por causa de


la palabra de Dios, cuando leemos el lamento del capitulo 3
varios autores coinciden que no se trata solo del sufrimiento
de un hombre, sino del sufrimiento del pueblo personificado
en profeta, es un hombre justo.
La realidad es que nosotros como seguidores de Cristo
podemos vivir situaciones tan dolorosas que nos
lleven a cuestionar nuestra fe, situaciones tale como:
enfermedad, muerte de seres queridos, persecución,
escasez, tragedias.
El asunto es que no podemos quedarnos
contemplando las crisis, no debemos dar lugar a que
nuestras emociones y razonamientos nos gobiernen,
debemos entender que hay algo mas grande que
nosotros.

El sufrimiento del profeta llega a un clímax tal que lanza una


expresión de desesperación y angustia, pero no solo
entendemos la condición de lo que el profeta ha vivido, sino
que es dolor de un pueblo amado por Dios a quien tuvo que
corregir duramente enviándolo al cautiverio de Babilonia
dejándonos ver el dolor del pueblo.
Podemos decir que fue un mal buscado, el juicio y castigo de
Dios es inminente, pero aun en medio de eso se ve la mano
de Dios a su favor.

Que queda para nosotros hoy, en un mundo totalmente


corrupto, violento, malo, donde los principios y valores de
Dios no tienen lugar, un mundo donde somos afligidos a
causa de la maldad y el pecado, ¿qué hay para un cristiano
en este tiempo?

2. La esperanza del justo en un mundo en crisis

Humanamente vivimos crisis de fe, crisis emocionales, pero


no podemos quedarnos culpando y culpando a otros,
culpando la familia, los cercanos, y hasta Dios por nuestra
infelicidad, justificando una razón para estar amargados y
dolidos, si es nuestro caso necesitamos hacer una reflexión
en nuestro corazón y decidir.

Lam 3:21 Esto recapacitaré en mi corazón, por lo tanto


esperaré.
Este texto nos arroja dos términos de obligatoria
observación, el primero nos lleva a reflexionar que en medio
de su crisis debemos recapacitar, este término en su
definición básica indica: volverse, regresar, volver a
traer, el segundo es esperanza, aparece cuatro veces en
nuestro texto de estudio, el los V.21, 24, 25 y 26, los V. 21,
25, 26 hacer referencia a esperar con esperanza, en medio
de la oscuridad vendrá una luz de esperanza, mientras que
el v.24 hace alusión a aguardar, esperar con confianza.
Otras traducciones para el texto dicen así:

LBA:
Esto traigo a mi corazón, por esto tengo esperanza.

DHH:
Pero una cosa quiero tener presente y poner en ella mi
esperanza.

NTV
No obstante, aún me atrevo a tener esperanza cuando
recuerdo lo siguiente.

La idea de recapacitar es traer al corazón o hacer memoria


de algo que sabía o había vivido con Dios, es importante
resaltar que este análisis se hace en el corazón, no
solo un razonamiento lógico, sino hacerlo desde el
corazón.

Tengo que detener mis emociones y darle lugar a la verdad


de Dios, cuando hacemos eso entonces podemos esperar en
el Señor, esto nos da esperanza, nos anclamos en una
verdad para esperar, después de entender lo que estaba
viviendo el profeta y el mismo pueblo debía recordar
quien es Dios y recapacitar en las siguientes verdades:

Lam 3:22 Por la misericordia de Jehová no hemos


sido consumidos, porque nunca decayeron sus
misericordias.
Lam 3:23 Nuevas son cada mañana; grande es tu
fidelidad.

a. Dios es misericordioso: Es bueno así nosotros


seamos malos.

Misericordia: «bondad; amor constante; gracia;


misericordia; fidelidad; devoción».
No solo es pasar nuestras miserias por su corazón, es
un amor constante por la humanidad, por ti y por mí,
es un amor eterno con el cual nos ama.
Esta misericordia o amor continuo no se entiende por
la razón, se entiende por la fe, se entiende por el
Espíritu, humanamente Dios tendría todas las razones
para no amarnos, pero a pesar de lo que somos y
hacemos nos ama.

Cuando nos hemos equivocado ha mostrado misericordia


hacia nosotros, entendemos que estamos en un mundo
caído, corrupto, malo porque nosotros pecamos, podemos
recordar que cuando Dios termino toda la creación dijo: “que
todo era bueno en gran manera”, fuimos nosotros los que
contaminamos su mundo, su creación, somos nosotros los
malos mayordomos, somos nosotros quienes dimos lugar al
pecado y corrompimos esta tierra, pero a pesar de esto sus
misericordias no han faltado, ¿sabes por qué? Porque la
misericordia es para el pecador, para aquel que ha caído en
miseria, tal es nuestra condición que merecíamos morir,
pero sus misericordias son nuevas cada día, cada mañana,
cada nuevo amanecer.
El significado para misericordia en este texto también puede
ser el amor de Dios, por su amor que es inagotable no
hemos sido consumidos, así lo merezcamos, tengamos
confianza que las misericordias de Dios se renuevan cada
día y no se acaban.

b. Dios es fiel: Es firme en sus planes, en lo que ha


pactado y en lo que ha dicho.

Grande es su fidelidad (3:23b)

Dios es inmutable, no cambia, Él es fiel a su palabra, a su


pacto, así el pueblo haya pecado, así la embarremos Él sabe
de que estamos hechos, nos conoce y permanece fiel a sus
propósitos, a sus planes, fiel a su pacto con nosotros, su
fidelidad es grande.

c. Dios es mi mejor parte: Mi parte en esta vida es


Dios, Él es mi herencia, es mi todo.

Lam 3:24 Mi porción es Jehová, dijo mi alma; por


tanto, en él esperaré.

Dios es todo lo que tengo seguro, las cosas de esta vida


vienen y van, pero Dios permanece para siempre, es Eterno.

Entendamos esta verdad en estos términos, pensemos en un


pastel gigante, el cual tiene muchas porciones:
Familia, amigos, dinero, bienes, ministerio, éxito…póngale el
nombre que quiera a cada porción, el profeta dijo: Dios es
mi parte, Dios es mi porción, de todo eso que me ofrecen,
Dios es todo lo que yo necesito, Dios es suficiente para mí.
El salmista Asaf quien reconoce la bondad de Dios en su vida
y estuvo a punto de caer por estar deseando las riquezas y
cosas de este mundo, concluyó:

Sal 73:25 ¿A quién tengo yo en los cielos sino a ti?


Y fuera de ti nada deseo en la tierra.
Sal 73:26 Mi carne y mi corazón desfallecen;
Mas la roca de mi corazón y mi porción es Dios para
siempre.

Esto debe ser suficiente para tener esperanza, cuando


somos controlados por las emociones negativas estas
nublan nuestro entendimiento, nuestra fe, no nos
dejan ver a Dios así nos acerquemos a Él.
LA INVITACIÓN EN ESTE DÍA ES A PENSAR:CÓMO HA SIDO
DIOS CON NOSOTROS, COMO SE HA REVELADO A
NUESTRAS VIDAS.

Mi porción es Dios, por tanto en Él esperaré: como Dios es


su parte tiene su esperanza en Él, va a esperarlo a Él, esto
nos lleva a una decisión, tenemos que elegir con cual parte
nos vamos a quedar.

Nuestra salida en medio de la crisis no son soluciones


humanas, nuestra salida es conocer a Dios, sabe quien es Él
y anclarnos en su verdad y no en nuestras emociones, en lo
que sentimos.

Aquí cuatro razones absolutas para tener esperanza en


medio de la crisis:

3. Dios es bueno y nuestra única esperanza


 Saber que Dios es bueno

Lam 3:25 Bueno es Jehová a los que en él esperan, al alma


que le busca.

Está es su naturaleza, la realidad es que Dios es bueno y el


hombre malo, en tiempos de crisis, en tiempos malos hemos
de recordar y creer que Dios es bueno, dudar de ello sería
dudar de su naturaleza.

Como Dios es bueno, ¿qué debemos hacer?

 Bueno es para el hombre esperar y buscar a Dios

Como Dios es bueno puedo esperar en Él, pero no solo me


siento a esperar, sino que le busco en una relación objetiva,
puedo esperar con esperanza porque Dios es bueno, en un
mundo como el que vivimos y en unos tiempos como los que
enfrentamos, usted y yo debemos recordar, que Dios es
bueno, es fiel, es misericordioso, debemos recapacitar
que aunque este mundo sea malo, Dios es bueno, por
eso no confiemos en nuestra estabilidad laboral, económica,
no confiemos, ni pongamos nuestra esperanza en esas
cosas, pongamos nuestra confianza y esperanza en Dios,
porque él es bueno, y como es bueno busquémoslo
con todo nuestro ser.

 Bueno es esperar en silencio la salvación de Dios

Lam 3:26 Bueno es esperar en silencio la salvación de


Jehová.

La salvación viene de Dios, los tiempos que vivimos


requieren que hagamos de Dios nuestra porción, nuestro
todo, no hay nada mas seguro, esperemos, aguardemos sin
quejarnos, sin lamentarnos, la salvación que viene de Dios,
nos ama tanto que envió a su Hijo para salvarnos, tenemos
un pacto con Dios, somos su iglesia por eso esperemos en
Dios, es lo mejor que podemos hacer, nadie puede darnos
seguridad, solo Dios puede hacerlo, por eso es bueno
esperar en silencio su salvación.
Por su bondad nos salvará, Dios hará su parte,
creamos que Dios es bueno, creamos que es bueno
para aquellos que esperan (confían en él), por eso es
bueno para nosotros buscarle, así el mundo en que
vivimos haya tanta desesperanza, busquémoslo
porque él es bueno.

 Bueno es aceptar la voluntad de Dios

Lam 3:27 Bueno le es al hombre llevar el yugo desde su


juventud.

(NTV)  Y es bueno que todos se sometan desde temprana


edad al yugo de su disciplina.

(DHH)  Es mejor que el hombre se someta desde su


juventud.

Bueno es para el hombre llevar la palabra de Dios o la


doctrina de Dios desde la juventud, en la condición en que
vivimos lo mejor para el hombre es someterse a la palabra
del Señor a la instrucción divina.

"Llevar el yugo" significa ponerse bajo la disciplina de


Dios voluntariamente y aprender lo que El nos quiere
enseñar. Esto involucra diversos factores importantes: (1)
meditación en silencio sobre lo que Dios quiere, (2)
arrepentimiento humilde, (3) dominio propio frente a las
adversidades, y (4) paciencia confiada dependiendo del
Maestro divino para que nos dé lecciones de amor para la
vida. Dios tiene diferentes lecciones tanto a corto como a
largo plazo para usted ahora. ¿Cumple usted su tarea?
 Que guarde silencio, sin lamentarse
Lam 3:28 Que se siente solo y calle, porque es Dios quien
se lo impuso;
 Que se humille: incluye bajarse hasta el
polvo y ante la disciplina del Señor
someterse, poner la otra mejilla
Lam 3:29 Ponga su boca en el polvo, por si aún hay
esperanza;
Lam 3:30 Dé la mejilla al que le hiere, y sea colmado de
afrentas.

o Razones de aceptar la disciplina del Señor


Ya sabemos que Dios es misericordioso, fiel, bueno, además
que lo mejor que el hombre puede hacer ante su pecado es
humillarse ante Dios y no ser arrogante.

o Pero encontramos algo más, es que la disciplina


no es para siempre, Dios no desecha para
siempre, pues si nos quebranta, también se
compadece de nosotros, según la multitud de sus
misericordias las cuales son nuevas cada mañana.

Lam 3:31 Porque el Señor no desecha para siempre;


Lam 3:32 Antes si aflige, también se compadece según la
multitud de sus misericordias;

o Porque no aflige voluntariamente: esto quiere


decir por capricho o sin razón, pues lo que Dios
busca con el quebrantamiento del hombre es su
arrepentimiento.
Lam 3:33 Porque no aflige ni entristece voluntariamente a
los hijos de los hombres.

Jer 20:11 Mas Jehová está conmigo como poderoso


gigante; por tanto, los que me persiguen tropezarán, y no
prevalecerán; serán avergonzados en gran manera, porque
no prosperarán; tendrán perpetua confusión que jamás será
olvidada.
Jer 20:12 Oh Jehová de los ejércitos, que pruebas a los
justos, que ves los pensamientos y el corazón, vea yo
tu venganza de ellos; porque a ti he encomendado mi causa.
Jer 20:13 Cantad a Jehová, load a Jehová; porque ha
librado el alma del pobre de mano de los malignos.

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