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Sor Juana Inés de la Cruz escribió 

gran variedad de obras teatrales. Su comedia más célebre


es Los empeños de una casa. Otra de sus conocidas obras teatrales es Amor es más laberinto.
Sus tres autos sacramentales revelan el lado teológico de su obra.
De Sor Juana Inés de la Cruz también destaca su lírica, que aproximadamente ocupa la mitad de
su obra literaria. Se trata poemas de tema amoroso en los que la decepción es un recurso
habitual.
Otras obras destacadas de Sor Juana son sus villancicos y el tocotín, una   composición literaria
de México,  bastante habitual en la literatura barroca de Nueva España.
Sor Juana Inés de la Cruz y otras obras también escribió un tratado de música llamado El
caracol, que no ha sido hallado.
Según ella, casi todo lo que había escrito lo hacía por encargo y la única cosa que redactó por
gusto propio fue Primero sueño,  publicado en 1692. Ese poema es considerado el más
importante de Sor Juana Inés.

Poemas de Sor Juana Inés de la Cruz cortos

Entre la obra lírica de Sor Juana Inés de la Cruz son destacables, por su intensidad,  las
piezas breves. Suelen ser piezas llenas de emoción, de pasión, incluso de dolor y desesperación.
Entre los poemas de Sor Juana Inés de la Cruz cortos podemos destacar Amor empieza por
desasosiego y Con el dolor de la mortal herida. También resultan realmente impresionantes En
perseguirme, Mundo, ¿qué interesas? y Esta tarde, mi bien, cuando te hablaba.

Poemas de Sor Juana Inés de la Cruz:  Hombres necios

Además, de entre toda la obra de Sor Juana Inés de la Cruz es digna de mención la redondilla
titulada Hombres necios, una pieza considerada por muchos de corte feminista, muy adelantada
para su época, y que es considerada un texto de liberación para las mujeres.
Sor Juana Inés de la Cruz, en Hombres necios, ofrece una sátira que se suma a la amplia gama
de poemas burlescos que publicó.
Su defensa de la mujer se vio reflejada en más obras de Sor Juana Inés. De hecho, su  crítica a la
misoginia y a la hipocresía de los hombres la llevaron a ser condenada por el obispo poco
antes de morir.

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