La conducción de un vehículo consta de tres elementos que se relacionan de
manera sincronizada: ser humano, vehículo y entorno o medio ambiente. Evitar accidentes de automóvil depende de la armonía de estos componentes. Conducir es la interacción entre la máquina y el humano rodeados de otros obstáculos, la mayoría previsibles como otros automóviles y un camino trazado.