Está en la página 1de 89

Universidad Nacional de San Agustín de Arequipa

Facultad de
derecho

Escuela profesional de derecho

“ PARTIDOS POLÍTICOS-LEY DE PARTIDOS


POLÍTICOS, LEY Nº 28094 ”

Presentado por:
Milagros Cuyo Apaza
Carlos Antonio Ramos Ccalla
Mary Angeles Loayza Llerena
Marilyn Brighi Huamani Chacón
Maryelena Apaza Ccahuana

Arequipa, octubre, 2021


2
INTRODUCCIÓN 5

CAPÍTULO I. PLANTEAMIENTO TEÓRICO 7

1.1 ENUNCIADO DEL PROBLEMA 7

1.2. OBJETIVOS 8

1.2.1. Objetivo general 8

1.2.2. Objetivos específicos 8

1.3 HIPÓTESIS 9

CAPÍTULO II. MARCO TEÓRICO 10

2.1 Los partidos políticos 10

2.2 Evolución histórica 10

2.2.1 Etimología de la palabra partido 10

2.2.3 Primeros conceptos sobre partido y su deslinde con la facción 13

2.2.4 la idea de partido entre revolucionarios y franceses 17

2.2.5 En el umbral de una nueva dimensión 19

2.2.6 Principales Concepciones Sobre Partido Político 20

2.2.6.1 La Concepción Marxista-Leninista 20

2.2.6.2 La Concepción de partido según Max Weber 26

2.2.6.3 La concepción de partido según Giovanni Sartori 30

2.3 Partidos políticos en el Perú 33

2.3.1 Clasificación de los Partidos Políticos 34

2.3.1.1 Los primeros “partidos” 34

3
2.3.1.2 Primer sistema de partidos en el Perú 35

2.3.1.2.1 Gobernantes de la República Aristocrática 36

2.3.1.3 Interregno dictatorial y segundo sistema de partidos 37

2.3.1.4 El tercer y último sistema de partidos del siglo XX 42

2.3.1.4.1 Reglamentación Interna 48

2.4 Del partido de cuadros a los partidos de atracción 48

Partidos de cuadros: 49

Partidos de masas 50

Partidos de atracción 51

2.5 SISTEMAS DE PARTIDOS 52

Primera clasificación: 53

Segunda clasificación: 55

2.6 Ley de partidos políticos 28094 57

CAPÍTULO III METODOLOGÍA Y DESARROLLO. 75

CAPÍTULO IV RESPUESTAS Y CONCLUSIONES 77

4.1. CONCLUSIONES 77

4.2. RESPUESTAS 78

REFERENCIAS BIBLIOGRÁFICAS 80

ANEXOS 82

4
INTRODUCCIÓN

Los partidos políticos actúan en el marco de los principios y valores que fundamentan la

democracia, pues son vehículos para canalizar las demandas de la sociedad. En palabras

de Grompone (2005), los partidos políticos agregan voluntades, construyen consensos,

facilitan la rendición de cuentas y construyen espacios de deliberación. Así, la presencia

de partidos políticos que representan intereses o ideales diferentes, permite a los

ciudadanos elegir entre políticas de gobierno alternativas, lo que hace que la participación

ciudadana sea más efectiva (NDI, 2005).

El presente trabajo de investigación trata sobre las dimensiones y nociones de los

Partidos Políticos y su Ley 28094, su institucionalización, evolución histórica y sistemas

de partido, de igual manera se hace una recopilación y análisis de las normas orientadas

a asegurar el funcionamiento democrático de los partidos políticos, amparada en su Ley

28094, misma que los sistematiza y está constituida en tres grandes bloques de artículos

referidos a la constitución y reconocimiento, democracia interna y financiamiento de los

Partidos Políticos. Se habla también de las problemáticas de la actuación de los partidos

políticos peruanos, el continuo retroceso del sistema político y las medidas necesarias

que pueden adoptar los Partidos Políticos para el anhelado desarrollo y la mejor actuación

en el sistema de la democracia representativa, a través de una reforma de Ley.

El trabajo se divide en 4 capítulos incluyendo la introducción. En el capítulo 1 se plasma

el planteamiento del problema, los objetivos e hipótesis. En el capítulo 2, a modo de

contexto institucional se hace una reseña de la evolución histórica de los partidos

políticos, en el ámbito global y nacional, se presentan los diversos sistemas de partidos y

por último un análisis con relación a la institucionalización y problemáticas de los

partidos políticos teniendo como base las normas más relevantes que alberga la Ley

5
28094. En el capítulo 3 se presenta la metodología utilizada y en el capítulo 4 se finaliza

con las respuestas a la hipótesis y las conclusiones.

6
CAPÍTULO I. PLANTEAMIENTO TEÓRICO

1.1 ENUNCIADO DEL PROBLEMA

El Perú posee uno de los sistemas de partidos políticos con menores niveles de

institucionalización en América Latina. El país ha sido víctima de una serie de shocks

históricos que generaron un sistema político fragmentado y una cultura política poco

desarrollada, por otro lado, también tiene bajos niveles de legitimidad y de organización.

En la actualidad los partidos políticos han tenido un crecimiento respecto a su cantidad,

sin embargo, no en la calidad de su funcionamiento, lo que genera que haya un bajo

desempeño y una deficiente valoración y credibilidad por parte de la población. La

confianza en los partidos políticos es de las más bajas en la región, lo que ha resultado en

que el peruano promedio no está particularmente interesado en la política ni en trabajar

directamente por un partido o candidato (Carrión y Zárate, 2010). Según datos del

Proyecto de Opinión Pública de Latinoamérica (2010), los partidos políticos son la tercera

institución con el nivel más bajo de confianza entre los ciudadanos del país. La baja

opinión respecto a estas instituciones es, en parte, el resultado de que la mayoría de los

partidos actuales se definan por personalidades en lugar de ideología (Crabtree, 2006), lo

que afecta su solidez como instituciones.Además, muchos de ellos están inmiscuidos o

relacionados con actos de corrupción, despotismos, intereses personales, clientelismo,

etc. Enrique Bernales realiza un enjuiciamiento histórico de las tendencias políticas

generales y de las condiciones particulares del Perú y sostiene que: “... la crisis partidaria

se gesta principalmente por el comportamiento de los propios partidos y su incapacidad

para modernizarse, para abrirse a los problemas de la sociedad y para asumir con eficacia

el manejo de un régimen democrático que reposaba principalmente en la conducción de

los partidos”.Entre los factores de la crisis de los partidos políticos está la falta de

experiencia política, los bajos niveles de institucionalización, la limitada capacidad de

7
movilización y representación de los ciudadanos y de la intermediación entre la sociedad

y el Estado y una gran falta de construcción de las relaciones entre los poderes ejecutivo,

legislativo y de los gobiernos regionales y locales. Por otro lado, La ley N 28094 está

compuesta por 6 títulos, 42 artículos y 3 disposiciones transitorias, fue fruto de un

esfuerzo de consenso de las bancadas parlamentarias y ha sido modificada en la mayoría

de sus artículos, en los años 2005, 2009, 2017 y 2019 por otras leyes, por lo que refleja

constantes esfuerzos para poder ajustar dicha ley, pero lamentablemente de una manera

no completa y eficaz, ya que incluso generó una fragmentación y ruptura de las idea

centrales de esta ley.

1.2. OBJETIVOS

1.2.1. Objetivo general

● Explicar las dimensiones y nociones de los Partidos Políticos y su Ley 28094, su

evolución histórica y sistemas de partido, dentro de aquellos evaluando aportes,

tipologías y clasificación, así como analizar las relaciones entre los factores

políticos, culturales y jurídicos para una mejora en la transparencia y

gobernabilidad del Perú.

1.2.2. Objetivos específicos

● Dar a conocer la evolución histórica de la conceptualización, consolidación y

funcionamiento de los partidos políticos.

● Explicar los 3 grandes bloques de artículos referidos a la constitución y

reconocimiento, democracia interna y financiamiento de los Partidos Políticos.

8
● Analizar la ley 28094 y examinar algunas de sus falencias en conjunto con la

actuación de los partidos políticos en la democracia, institucionalización y

representatividad.

1.3 HIPÓTESIS

Una propuesta de reforma de la Ley de partidos políticos N.º 28094 se relacionará con la

formalización, permanencia y fiscalización de los mismos, y permitirá una mejor

gobernabilidad.

Variables:

- Variable independiente: Reforma de La ley de partidos políticos N.º 28094

- Variable dependiente: Formalización, permanencia y fiscalización de los partidos

políticos, y mejor gobernabilidad.

9
CAPÍTULO II. MARCO TEÓRICO

2.1 Los partidos políticos

Son instituciones que propicien la participación política de la ciudadanía y expresan el

pluralismo democrático. Tuesta Soldevilla (1995) afirma que los partidos forman la

estructura central intermedia e intermediaria entre la sociedad civil y el Estado, es un

grupo político que disponiendo de una base ideológica y organizativa tiene como objetivo

mantener los asuntos de gobierno y Estado.

Según el Jurado Nacional de Elecciones (2016) los partidos políticos son asociaciones de

ciudadanos que constituyen personas jurídicas de derecho privado cuyo objeto es

participar por medios lícitos, democráticamente, en los asuntos públicos del país dentro

del marco de la Constitución Política del Estado y de la Ley de Partidos Políticos Nº

28094.

El Sistema de Partidos Políticos en el Perú, está amparado legalmente en: El artículo 35

de la Constitución del Estado Peruano y señala que: “Los ciudadanos pueden ejercer sus

derechos individualmente a través de organizaciones políticas como partidos,

movimientos o alianzas, conforme a Ley. Tales organizaciones concurren a la formación

o manifestación de la voluntad popular. Su inscripción en el registro correspondiente les

concede personalidad jurídica”.

2.2 Evolución histórica

2.2.1 Etimología de la palabra partido

El término partido proviene de las voces latinas "pars”y "partire". En la traducción de la

palabra “pars” del latín al español significaría: "parte, pedazo,porción, componente,

10
pieza, acción en un negocio, partido (en el aspecto político); por otro lado el término en

latín “partire” significa dividir, partir o separar en porciones. Es por eso que de por sí,

partido tiene una relación clara con “parte”, o sea que tiene que ver con algún elemento

del todo, en este caso sería de un todo político, está inmerso en él, pero aun así tiene cierta

autonomía relativa.

En la antigüedad latina, las palabras "pars"y partire "tenían una cierta connotación

política; pero ésta apareció con mayor precisión y énfasis sólo el siglo XVII; por

consiguiente, como Sartori (1976) afirma "no ingresó en el discurso político directamente

a partir del latín"(p.29). Informa además Sartori que las instituciones que cumplían en la

antigüedad romana una función similar a lo que ahora son los partidos políticos, fueron

designada por los romanos como "sectas", término que deriva del latín"secare" que

significa separar, cortar, dividir; entonces se podría señalar de cierta manera al término

“sectas” como predecesor de “partidos” (Sartori, 1976 citado en Quesada Rada,

1994,p.498)

Existió también otro término relacionado con las voces latinas "pars" y "secta" que tuvo

una connotación de carácter político. Nos referimos a la palabra "facción", que deriva del

latín "facere" (hacer, actuar) y de la voz "factio". Se trata de un término más antiguo y

establecido y de significación negativa, como señala Sartori. Pero para los latinos, los

grupos dedicados a un facere" realizaban actividades nocivas y perturbadoras del orden,

y afectaban al todo.

Vemos que, el término partido, entendido como parte según los latinos y romanos, no

tenía connotación negativa; como sí lo tenían "secta" y "facción". Este criterio fue

conocido por los autores y estudiosos del medievo y el renacimiento hasta los siglos XVII

y XVIII; pero, con el correr del tiempo la palabra "parte y el término "partire" perdieron

11
su connotación inicial e intervinieron en otras lenguas en el sentido de compartir y

participación. Así, en francés es "portager"; en inglés, "partakind", "partnership",

"participation", en castellano, "compartir", "repartir", "participación". Cuando la palabra

“parte" se convierte en "partido" disponemos, pues, de un término que está sometido a

dos atracciones semánticas opuestas: de un lado, la derivación de partire, dividir, y del

otro, la asociación con participar, y, en consecuencia, con comparar".

2.2.2 La confusión inicial: Facción-partido

Según lo señalado anteriormente, entonces “partido” estaría en relación a la idea de

participación, división y compartir, y cuando este ingresa paulatinamente al vocabulario

político, a su vez va reemplazando al término “secta”. Ese reemplazo significó otro

problema que incluso el mismo Burke, no para ello una solución teórica; y este consistía

en considerar e identificar a los términos en cuestión como similares o sinónimos, claro,

incluyendo el hecho de que “secta” traspasara su pesada carga negativa al término

“partido”. Lo podemos connotar en autores y políticos como: Halifax, Rousseau,

Voltaire, Tolin, Bolingbroke, Hume, Washington, Madison, Condorcet, Robespierre,

Sain-Just y Tocqueville; quienes los identifican como elementos perturbadores de la

unidad democrática y de la voluntad popular en los asuntos del gobierno. (Quesada Rada,

1994).

La distinción y a su vez confusión de los términos “partido” y facción”, también se puede

hallar en Voltaire cuando dice en la “Encyclopedie”:"El término partido no es en sí mismo

odioso; el término facción, siempre lo es” (Voltaire, 1759 citado en Sartori, 1976, p.19)

No obstante, Sarturi agrega: “un partido es una facción, un interés o una fuerza que se

considera opuesta a otra” (1976)

12
Rousseau, en “Contrato Social”, habla sólo de facción como expresión negativa que se

opone al “gobierno racional nacional”, que es la expresión de la voluntad general. Dice:

“cuando se forman facciones, asociaciones parciales a expensas de la grande, la voluntad

de cada una de esas asociaciones resulta general con relación a sus miembros y particular

respecto del Estado. Entonces puede decidirse que no hay tantos votantes como hombres

sino sólo tantos votantes como asociaciones. Las diferencias se han vuelto menos

numerosas y dan un resultado menos general. En fin, cuando una de estas asociaciones

es tan grande que domina a todas las demás, ya no tenemos como resultado una suma de

pequeñas diferencias sino una diferencia única; entonces no hay voluntad general, y la

opinión que prevalece no es más que una opinión particular”. (Quesada Rada, 1994,

p.499)

2.2.3 Primeros conceptos sobre partido y su deslinde con la facción

Bolingbroke y Hume fueron los primeros que, a partir del siglo XVII, realizaron trabajos

sistemáticos sobre los partidos políticos; empero, cabe referimos a anteriores ensayos

realizados por Halifax y Tolin, aunque de carácter incipiente y asistemático.

George Sabille de Halifax sostenía que el hombre que se dedica al partido sacrifica toda

libertad personal de pensamiento y de acción y se convierte en esclavo de su partido. "La

mayoría de los hombres entran al partido por imprudencia y se retiran

avergonzadamente... el partido es poco menos que una inquisición donde los hombres se

encuentran bajo tal disciplina, por impulsar la causa común, que no les deja libertad para

la opinión personal... la ignorancia hace que la mayoría de los Hombres entren al Partido

y la Vergüenza les impide retirarse de él". Afirma Halifax, y luego agrega enfáticamente:

"Los partidos en el Estado son generalmente como los Filibusteros despliegan sus Falsas

Banderas, el pretexto es el Bien del Pueblo; el verdadero objetivo es tener Botín, como

13
los tártaros, donde ganan en lugar de Mejorar su Victoria, pronto caen sobre el Bagaje"

.John Tolin, quien en 1701, es decir, en los albores del siglo XVIII, pero con la mentalidad

del siglo XVII, se refiere a los partidos en su trabajo "Art of Governing by Partys"

(Sartori, 1976, p.23) en donde sostiene que la posición que debe evitarse en todos los

gobiernos es que se produzcan las divisiones y que un rey nunca puede disminuirse más

que si encabeza un partido; pues con ello se convertiría sólo en el rey de una facción y

deja de ser el padre común del pueblo. En su ensayo "The Idea of a Patriot King" (1738),

Lord Bolingbroke sostuvo que el partido siempre acaba en una facción: por consiguiente,

es un mal político; y que las facciones son peores que los partidos. El planteamiento de

Bolingbroke es una cuestión de grado, porque si bien el partido es un mal para la unidad

del gobierno y las facciones son peores aún, a la larga un partido se convertirá

irremediablemente en facción, es decir, en el peor de los males. Los partidos son

negativos por facciosos y porque se oponen a la unidad de toda una nación. (Quesada

Rada, 1994, p.500)

En otra obra, "Dissertation Upon Parties” (1733-34), Bolingbroke plantea la posibilidad

de suprimir y extinguir, incluso, el nombre del partido. El pensador inglés explica la

conversión del partido en facción al decir. "Los partidos, antes incluso de que degeneraran

en facciones absolutas, siguen siendo diversas cantidades de hombres asociados juntos

para determinados fines y con determinados intereses, que no son... los de la comunidad

constituida por otros. Un interés más privado o personal llega muy pronto...a

multiplicarse ya convertirse en el predominante en ellos... pero ese partido se ha

convertido entonces en una facción".(Sartori, 1976, p.24). Bolingbroke fue adversario de

los partidos que por su naturaleza centrada en presiones e intereses atentaban, según él,

contra el orden constituido, que es sinónimo de unidad nacional en torno a una corona

que respeta al Parlamento.

14
Hume se interesó en dicho dilema político, mediante sus ensayos, aunque no distinguió

claramente entre partido y facción, porque utilizó ambos términos indistintamente. Indica

que “las facciones subvierten al gobierno, hace impotentes las leyes y dan origen a más

animosidades entre hombres de la misma nación, los cuales deberían darse mutua

protección y asistencia. Y lo que haría más odioso a los fundadores de partidos sería la

dificultad de extirpar estas malas hierbas una vez que han echado raíces en cualquier

estado”.(Hume, 1956 citado en Quesada Rada, 1994) Lo fundamental en él, es su análisis

y clasificación que realiza sobre las facciones, dividiéndolas en personales y reales. Las

primeras están fundadas en la amistad o enemistad personales entre las partes

contendientes; las segundas están fundadas en diferencias de sentimientos o de interés.

Hay veces que habla de facciones de interés, estos son las más razonables y

excusables,para pasar luego a referirse a partidos de principios, “que se basan en un

principio, especialmente de carácter especulativo y absoluto, son cosa conocida solo en

los tiempos modernos y son quizás, el más extraordinario e inexplicable fenómeno que

se haya dado basta ahora en los asuntos humanos” (Hume, 1956). Luego agrega:" he

mencionado a los partidos de la afección como una clase de partidos reales además de los

del interés y del principio. Por partido de afección entiendo aquéllos que están fundados

en los diferentes apegos que los hombres sienten por familiares y personas particulares

por quienes desean ser gobernados. Estas facciones son a menudo muy violentas, aunque

debo reconocer que parece ser incomprensible que los hombres sientan tan vigoroso

apego por personas a las que de ninguna manera conocen, a las que quizás nunca vieron

y de las cuales no recibieron favor alguno, ni esperan recibirlo".

La confusión partido-facción y la concepción negativista que sobre estos grupos políticos

tenían los autores recientemente mencionados, van a ser "rebatidas" por Burke; quien

15
logra deslindar los conceptos en cuestión y aprecia en los partidos políticos movimientos

positivos ligados al desarrollo del régimen parlamentario y al voto popular: Burke ve en

los partidos políticos un adelanto en el progreso de las Cormas de participación política.

Apunta Sabine que "el esfuerzo hecho por Burke para dar nueva vida a los whigs le hizo

ver, antes que ningún estadista inglés, el lugar necesario que ocupa en el régimen

parlamentario el partido político. La argumentación de Burke se dirige contra el prejuicio,

especialmente favorable a las pretensiones de un "rey patriota", como Jorge III, de que

toda combinación que persigue el logro de una finalidad política dentro de la nación es

una lección que no busca sino ventajas partidistas antipatrióticas". Burke formuló su ya

clásica definición de partido al decir que: "Un partido es un grupo de hombres unidos

para fomentar, mediante sus esfuerzos conjuntos, el interés nacional, basándose en

algunos principios determinados, en el que todos sus miembros están de acuerdo”

(Sabine). En esta definición, el partido ya no es algo que divide, sino que fomenta el

interés nacional, pero tomando en consideración ciertos principios determinados en los

que están de acuerdo sus componentes. De esta manera, Burke intenta aclarar la confusión

inicial entre partido y facción. Para él, un partido tiene una connotación positiva; en

cambio, una facción es negativa. Cuando Burke habla de partidos se refiere a éstos en el

sentido de su definición; y cuando habla de facción la entiende como "el producto de

ambiciones mezquinas e interesadas por obtener puestos y emolumentos". Por el

contrario, los partidos tienen una "generosa ambición de poder". A diferencia de los

autores mencionados anteriormente, Burke si ve a los partidos como positivos puesto

que no afectan la legalidad y el orden constitucional. (Quesada Rada, 1994, p.502)

16
2.2.4 la idea de partido entre revolucionarios y franceses

La connotación negativa de "partido" y “facción", tras los planteamientos de Burke no

cesaron, los partidos eran facciones que atentaban contra el orden constitucional y la

voluntad del pueblo en los asuntos del gobierno. Es así como Madison se sigue refiriendo

a los partidos como facciones en el décimo artículo "El Federalista: "Entre las numerosas

ventajas que ofrece una unión bien estructurada, ninguna merece ser desarrollada con

más precisión que su tendencia a suavizar y dominar la violencia del espíritu de partido",

indica Madison. (Sartori, 1976)

Luego de definir la facción como "cierto número de ciudadanos, estén en mayoría o en

minoría, que actúan movidos por el impulso de una pasión común, o por un interés

adverso a los derechos de los demás ciudadanos o a los intereses permanentes de la

comunidad considerada en conjunto" (1788), sostiene que hay dos maneras de superar

los males del espíritu de partido: suprimiendo sus causas y reprimiendo sus efectos. Estos

serían: destruyendo la libertad esencial de su existencia o dar a cada ciudadano las mismas

opiniones, las mismas presiones y los mismos intereses.Pero respecto a la primera forma,

Madison considera que el espíritu faccioso tiene un origen en la naturaleza humana y por

lo tanto no se pueden erradicar solo evitar manteniéndolo a raya (Madison, 1788).

Al diferenciar entre democracia y república, en el sentido de que la primera delega la

facultad de gobierno a un pequeño número de ciudadanos y la segunda puede comprender

un número más grande de ciudadanos y una mayor extensión del territorio, Madison sentó

las bases del pluripartidismo como expresión múltiple de intereses, aunque en su país este

concepto no prosperó. En torno a esta idea dice: “Cuando más pequeña es una sociedad,

más escasos serán los distintos partidos e intereses que lo componen; cuando más escasos

son los distintos partidos e intereses, más frecuente es que el mismo partido tenga la

17
mayoría; y cuando menor el número de individuos que componen esa mayoría y menor

el círculo en que se mueven, mayor será la facilidad con que podrán concertarse y ejecutar

sus planes opresores. Ampliad la esfera de acción y admitiréis una mayor variedad de

partidos y de intereses; haréis menos probable que una mayoría del total tenga motivo

para usurpar derechos de los demás ciudadanos y, si ese motivo existe, les será más difícil

a todos los que lo sientan descubrir su propia fuerza y obrar todos de concierto" (Madison,

1788, p.40)

Dentro del contexto de la Revolución Norteamericana, Washington también tiene una

visión negativa de los partidos, aunque de alguna manera los admite como un "mal

necesario". Esta idea se observa en su famoso "Discurso del Adiós", de 1796, cuando ya

se estaban formando partidos en la joven república estadounidense. Washington dijo: “La

libertad es un hecho poco más que un nombre cuando el gobierno es demasiado débil

para soportar los embates de las facciones. Permitidme advertiros del modo más solemne

en contra de los efectos del espíritu de partido. Existe una opinión de que los partidos en

los países libres constituyen controles útiles y sirven para mantener vivo el espíritu de la

libertad. Es probable que así sea dentro de ciertos límites. Pero en los gobiernos

puramente electivos es un espíritu que no se debe fomentar".(Quesada Rada, 1994,p.504)

Durante la Revolución francesa, en el continente europeo empezaron a aparecer las

primeras formas de partidos (jacobinos, girondinos, entre otros), pero así como los

norteamericanos los revolucionarios franceses (Robespierre, Condorcel, Dantón, Saint-

Just) también cuestionaron su existencia debido a que van en contra de la razón

Rousseonana e individualismo, además de que eran de hecho grupos violentos y

agresivos.

Pero considerando que la teoría(especulativa) casi nunca concuerda con la realidad,

siendo así una constante histórica, en este caso los partidos políticos logran imponerse y

18
resultan esenciales para el desarrollo de la democracia. El gran ideal de unidad no se

concretó los partidos políticos proliferaron en todo el mundo, ello en el siglo XIX.

Otro francés, Alexis de Tocqueville en su obra "De la Democratie en Amérique, les

dedica todo un capítulo indicando que son " un mal inherente de los gobiernos

libres"(1963); además, considera que aparecen cuando las naciones son samaqueadas en

gran magnitud, cuando surge la idea de cambiar una forma de gobierno entre ciudadanos.

Por eso el tiempo de las grandes revoluciones es el tiempo de los grandes partidos

políticos. Él hace una diferencia entre grandes partidos políticos y pequeños partidos, los

grandes se adecúan más a los principios que a sus consecuencias, a la generalidad y no a

los casos particulares, a las ideas y no a los hombres; son más nobles, sus pasiones más

generosas y sus convicciones más reales, estos partidos reemplazan el interés particular

por el interés público, todo lo contrario a los pequeños partidos políticos. En su obra lo

que pretende demostrar es que en América no existen los grandes partidos políticos.

2.2.5 En el umbral de una nueva dimensión

Ya en el siglo XIX se denota que los partidos políticos eran fuerzas presentes y

dinamizadoras de la acción política, gracias a Hume se motivó el interés por conocer a

los partidos políticos científicamente.Una obra cumbre fue la de Ostrogorski "La

Démocratie lie et les partis politiques", fue el primero en hacer un estudio descriptivo y

explicativo, además a él se le consideró el pionero de la ciencia política contemporánea.

El tratará de usar su método (observación) a un objeto nuevo que él llamará "fuerzas

políticas". A él le interesa la relación entre los partidos y la democracia, porque para él,

esas fuerzas políticas son modos de organización de la democracia.En términos generales,

el intelectual ruso se refiere al nacimiento de los partidos políticos y a su vinculación con

el desarrollo del sufragio universal. Los estudia internamente, su organización y

19
dinámica, señala el engarce entre partidos políticos y la democracia representativa.La

obra de Blunstschli es la más antigua de este período (XIX) y se desarrolló cuando los

alemanes se preocupaban por diferenciar partido de facción. Este autor defendió los

partidos políticos, porque a diferencia de los teóricos clásicos dijo que no eran un mal del

Estado moderno sino que más bien era el signo de una política fuerte. Él sí comprende

que son necesarios para una nación sana, puesto que la engrandecen; en cambio, las

facciones son parte de naciones enfermas y solo las ponen en decadencia. Blunstschli

dice: "Un partido político es un partido que se inspira en un principio político y que

persigue un fin político". Menciona que se llama político porque está en armonía con el

Estado y orientados hacia el bien común. (Quesada Rada, 1994,p.508)

2.2.6 Principales Concepciones Sobre Partido Político

Hay una gran cantidad de estudios en relación a los partidos políticos, se podría decir que

los más importantes son los trabajos de Lenin, Weber, y Sartori. Estos autores han

intentado elaborar teorías explicativas con el fin de poder entender el complejo tema en

cuestión. Esas teorías pertenecen a diferentes épocas y contextos, y constituyen enfoques

teóricos globales e integrales, si bien son diferentes están sumamente articulados que

pretenden constituirse en teorías generales que expliquen con mayor rigor el mundo

partidario. Sus obras son paradigmas y han servido de modelo para la elaboración de

otros trabajos mucho más rigurosos pero menos integrales respecto a la explicación

teórica y uso de datos empíricos. (Quesada Rada, 1994)

2.2.6.1 La Concepción Marxista-Leninista

En el famoso "Manifiesto comunista", Marx y Engels plantearon la necesidad de crear

un partido combativo que representara los intereses de la clase obrera. Este tendría por

20
finalidad aglutinar coordinadamente a los obreros para derrocar al Estado burgués y,

sobre esa base, construir la nueva sociedad comunista. Vieron la necesidad de organizar

al proletariado en un partido político. Sostenían en su libro que los comunistas no forman

un partido distinto, opuesto a los partidos obreros, porque no tienen ningún interés

diferente al de esta clase ni tampoco proclaman principios distintos. Pero ambos se

preocuparon en establecer distinciones entre el partido de los comunistas y el resto de

partidos obreros, cuando afirmaron que:

1.Entre las diferentes luchas nacionales de los proletarios ellos se ponen por delante y

hacen valer los intereses independientes de la nacionalidad, comunes a todo

proletariado.

2.En las diferentes fases de la lucha entre proletarios y burgueses representa siempre

por todas partes los intereses del movimiento integral del proletariado."(Marx &

Engels, 1965, 849)

Marx y Engels consideraban que “los comunistas son la fracción más resuelta de los

partidos obreros de todos los países, la fracción que arrastra a los otros; teóricamente

tienen sobre el resto del proletariado la ventaja de un concepto claro de las condiciones,

de la marcha y de los fines generales del movimiento comunista".

El partido de los comunistas era la vanguardia de la clase obrera; el movimiento que

conduciría a esta clase hacia la toma del poder y hacia la construcción del socialismo para

edificar el comunismo. Marx y Engels habían previsto la importancia de un partido

político para la toma del poder y como expresión de los intereses de la clase obrera; pero

este partido debería estar organizado sobre bases reales y sobre una teoría científica que

le diera el sustento racional necesario para llevar a cabo y elaborar su propio

21
programa.Inspirado esas ideas, pero con basta experiencia política, Lenin elaboró toda

una doctrina sobre lo que debería ser un partido político. A diferencia de los filósofos

alemanes, el ruso se preocupó preferentemente de la organización y la praxis de este

partido, claro está, sin descuidar la docencia político ideológica en su interior.En 1902,

cuando Ostrogorski había terminado su famosa obra, Lenin escribe un trabajo que titula

"¿Qué hacer?". En este trabajo estableció las diferencias entre una organización de

trabajadores y una organización de revolucionarios. El sindicato podía ser tan amplio

como fuera posible, según las condiciones legales y políticas; pero la organización de

revolucionarios debería estar compuesta sola y exclusivamente por revolucionarios

profesionales.

En su famosa obra "El Estado y la revolución” (1917), Lenin sostuvo que la misión del

partido comunista era la toma del poder, la conducción del pueblo al socialismo, la de

organizar y dirigir el nuevo régimen, la de ser maestro, dirigente y jefe de todos los

trabajadores y explotados.Hablando sobre la estrategia del comunismo revolucionario,

Lenin se dirige a los "revolucionarios profesionales en los siguientes términos: "Afirmo;

1) Que ningún movimiento puede ser duradero sin una organización estable de dirigentes

para mantener su continuidad; 2) Que cuanto más lejos hayan espontáneamente las masas

a la lucha y constituyan el fundamento del movimiento y participen en él, más necesario

es tener una organización y más estable será; 3) Que la organización ha de componerse

principalmente de personas comprometidas en actividades revolucionarias como una

profesión; 4) Que en un país con un gobierno democrático, cuanto más se restrinjan los

miembros de esta organización a aquellas personas que están comprometidas en

actividades revolucionarias como profesión, que han sido entrenadas profesionalmente

en el arte de combatir el programa político, mucho más difícil será detener la

organización; 5) Cuanto mayor sea el círculo de hombres y mujeres de la clase trabajadora

22
o de otras clases sociales capaces de unirse al movimiento y realizar un activo trabajo

dentro de ella". (Quesada Rada, 1994,p.511)

Es indudable que Lenin fue un buen líder y estratega político, su fuerte presencia en el

contexto político no fue solamente significativa por su gestión, participación y

conducción en la revolución más importante del siglo XX, sino porque su praxis política

estaba fundamentada en una de las teorías más importantes que ha dado el pensamiento

filosófico. Es evidente que para él, el partido político es un medio para llegar al poder y

en esto no se diferencia mucho de las teorías que no abrazan las ideas de Marx. Lo más

importante en este conductor de masas es haber "marxistizado "la concepción de partido

como una entidad total que abarca diversas organizaciones. Al respecto, Lenin dice: "El

partido es una suma de organización que forman un todo único. El partido es la

organización de la clase obrera, que se halla ramificada en toda una red de las más

diversas organizaciones locales y especiales, centrales y generales". (Quesada Rada,

1994,p.512)

Uno de los problemas que más le preocupa a Lenin es el de la relación que hay entre

organización, teoría y práctica del partido político. En "Las Tareas de los Social-

Demócratas Rusos", Lenin sostiene que: "El problema más candente es, desde nuestro

punto de vista, el de la actividad práctica de los social-demócratas. Recalcamos el aspecto

práctico del movimiento social-demócrata, pues su aspecto teórico ha superado ya, al

parecer, el período más difícil: por una parte la pertinaz incomprensión de los adversarios

y los vehementes deseos de ahogar la nueva tendencia al momento de nacer, y por otra,

la calurosa defensa de las bases de la social-democracia".(1975) En el mismo trabajo,

Lenin sostiene que: "La tarea primera y esencial de la social-democracia consiste en crear

una firme organización revolucionaria entre los obreros fabriles de la ciudad". Esta

23
concepción de practicidad y organicidad, como se ha señalado, vuelve a desarrollarse con

más precisión en su obra "¿Qué hacer?".Para Lenin, el partido político debe constituirse

en una entidad canalizadora de los intereses de la clase obrera y de todas las clases

progresistas y revolucionarias. Al respecto, en "Dos Tácticas de la Social-Democracia",

Lenin indica que: "Nos planteamos el fin de subordinar la insurrección de las masas

proletarias y no proletarias a nuestra influencia, a nuestra dirección y utilizarla en

provecho propio".(41) El partido político para Lenin juega, pues, un rol fundamental

durante los procesos revolucionarios para tomar el poder y para organizar la sociedad una

vez adquirido el control del aparato estatal. Esa importancia que le da Lenin a los partidos

políticos es la base para criticar a los grupos sin partidos dentro de una revolución; por

eso, Lenin sentencia que "él sin partido es una idea burguesa, en cambio, el partidismo es

una idea socialista". (42) En casi todas las obras de Lenin, salvo las más doctrinarias y

científicas, hay referencias a la idea y conceptualización del partido político como

conductor de la praxis revolucionaria y constructor de la nueva sociedad. El partido no

sólo canaliza la revolución, la organiza, la enseña, la divulga, la constituye, la ejerce y la

dirige. En Lenin la idea de partido es "total", porque expresa la praxis y la ideología de

aquella clase que representa los intereses de la mayoría: el proletariado.Las ideas también

deben ser canalizadas por el partido. Así Lenin sostiene: "Los periódicos deben ser

órganos de las diversas organizaciones del partido", pero esto para el estratega ruso no

implica uniformidad, reglamentarismo o esquematismo. En este sentido, Lenin cae en

una contradicción; pues luego de rechazar la tesis controlista, subordina el pensamiento

al partido en primer lugar". Se trata de las publicaciones del partido y de su subordinación

al control del partido. Cada cual es libre de escribir y de hablar cuando quiera, sin la

menor cortapisa. Pero toda asociación libre (incluido todo partido) es también libre para

arrojar de su seno a aquellos de sus miembros que utilicen el nombre de ésta para

24
propugnar puntos de vista contrarios a ella.La libertad de palabra y de prensa debe ser

completa. Pero también debe serlo la libertad de asociación. "Yo tengo la obligación de

conceder, en nombre de la libertad de palabra, el pleno derecho a gritar, mentir y escribir

todo lo que desees, pero tú tienes la obligación de concederme a mí, en nombre de la

libertad de asociación, el derecho de concertar o anular una alianza con quienes se

expresan de tal o cual manera. El partido es la unión voluntaria cuya disgregación,

primero ideológica y luego material, sería inevitable si no se desembarazarse de los

miembros que sostienen opiniones opuestas a las del partido. Pues bien, para determinar

los límites entre lo que es del partido y lo que es contrario al partido está el programa del

mismo, están sus resoluciones sobre tácticas y sus estatutos y está, por último, toda la

experiencia de la social-democracia internacional, de las asociaciones voluntarias

internacionales del proletariado, que da constantemente entrada en sus partidos a distintos

elementos o tendencias no del todo consecuentes, no del todo marxistas puros, no del

todo justos, pero que también lleva siempre periódicamente a cabo depuraciones de su

partido".(44) En otras palabras, la libertad de crítica y de opinión siempre serán posibles

dentro de los marcos programáticos, estatutarios y principistas del partido. Fuera de este

contexto, toda crítica no tiene fundamento ni sustento teórico, tampoco base legal que la

respalde. El individuo que no actúe al interior de esos marcos será expulsado del seno del

partido.El concepto de centralismo democrático es fundamental para comprender la

concepción leninista de partido. Por un lado, está la idea planteada; el problema de la

democracia como un mecanismo de participación a través del voto al interior del partido.

Los militantes deben elegir en todos los niveles y en todas las instancias a sus autoridades

por el otro, se entiende que el centralismo es fundamental para la observación

incondicional de la disciplina, una necesidad perentoria para que el partido tenga una

voluntad común, única, y asegure la unidad de la praxis.

25
No se trata, pues, de anteponer el centralismo a la democracia, o viceversa. Ambos

conceptos y prácticas deben estar indisolublemente ligados. El centralismo es necesario

para lograr una estabilidad en la estructura gubernamental del partido; la democracia es

el medio por el cual se dinamiza la política interna, gracias a la discusión de los más

importantes problemas y la aprobación de los acuerdos que, por decisión mayoritaria,

deben ser obligatorios para todos.

Que una de las tendencias predomine sobre la otra dependerá de las circunstancias

históricas y de las situaciones reales del momento. En épocas de clandestinidad destaca

en el primer plano el centralismo y se conservan en lo posible los mecanismos

democráticos. En condiciones de legalidad, la democracia partidaria puede desenvolverse

normalmente. Pero, si el partido llega al poder ésta podrá desarrollarse al máximo. Lenin

establece las diferencias entre el centralismo democrático, el centralismo burocrático y el

anarquismo: "El centralismo democrático no excluye la autonomía, ni mucho menos, sino

por el contrario, presupone la necesidad de la misma. En efecto, incluso la federación,

cuando se realiza dentro de límites sensatos desde el punto de vista económico, cuando

se funda en peculiaridades nacionales serias, que provocan una verdadera necesidad de

determinado aislamiento estatal, no contradice de manera alguna el centralismo

democrático”.

2.2.6.2 La Concepción de partido según Max Weber

En sus trabajos sobre partidos políticos, Max Weber se refiere a tres aspectos

fundamentales a La concepción de partido propiamente dicha; b. La clasificación

del mismo;y c. La organización.

26
En este capítulo nos vamos a referir al primer aspecto, donde para Weber, los

partidos son "las formas de socialización" que, descansando en un reclutamiento

(formalmente) libre, tienen como fin proporcionar poder a sus dirigentes dentro

de una asociación y otorgar, por ese medio, a sus miembros activos determinadas

probabilidades ideales o materiales (la realización de fines objetivos o el logro de

ventajas personales o ambas cosas)". (Weber, 1964, p.228 citado en Quesada

Rada, 1954, p.520)

Entiende Weber que estas "asociaciones tienen por meta lograr el poder, "su

acción se orienta hacia la adquisición de "poder" social, o sea, a influir sobre las

acciones comunales, sea cual sea su contenido".

El partido para Weber es una forma de "socialización" porque persigue una causa,

sea un programa o un conjunto de ideales o fines materiales. Este objetivo se

puede lograr en forma planificada, pero también puede ser individual como son

las prebendas personales, el honor para el jefe y para los seguidores del partido.

(Quesada Rada,1954)

En tal sentido, los partidos sólo pueden existir en "comunidades 50 civilizadas".

Pero, ¿por qué en éstas y no en otras?; porque estas sociedades "están dotadas de

algún tipo de orden racional y de un equipo de personas disponibles, dispuestas a

hacerlo cumplir". (Weber, 1972, p.239)

Para Weber, según el reclutamiento que hagan, los partidos pueden ser de clase o

de status, pero esta clasificación no es absoluta porque hay partidos combinados;

es decir, de clase y status al mismo tiempo. A veces, los partidos no son tampoco

27
ni de clase ni de status, y pueden presentar estructuras efímeras o duraderas".

(1972)

Ya que la meta de un partido es la adquisición de mayor poder social y, dentro de

éste, de mayor poder político, pueden alcanzarlo por diversos medios desde la

franca violencia, de todo tipo, a la caza de votos con medios burdos o sutiles:

dinero, influencia social, hierza de oratoria, sugestión, grosera coacción y, así

sucesivamente, hasta las tácticas burdas o más refinadas de obstrucción en los

cuerpos parlamentarios". (Weber, 1972)

Si, por ejemplo, siguiendo a Weber, un partido anima dentro de un ordenamiento

legal que permita la competencia de intereses políticos e ideológicos, éstos se

dedicarán al reclutamiento para la adquisición de votos.

Los partidos se desarrollan en una sociedad de acuerdo a la estructura de

dominación que existe en ella, por eso difieren según la comunidad a la que

pertenecen. La tendencia a la dominación de los partidos se manifiesta en la

práctica política de sus dirigentes, cuya finalidad es la conquista de la

comunidad”. (Weber, 1972) La tendencia al control del poder, que se expresa en

una estructura social con un orden determinado de dominación, se ha presentado

con cierta regularidad en los partidos antiguos y en los modernos.

Como Michels, Weber observa que los partidos se hallan "con frecuencia

organizados en forma autoritaria muy rigurosa". (1972)

Habíamos señalado, siguiendo a Weber, que los partidos sólo pueden concebirse

como asociaciones políticas. Estos partidos luchan por el control del aparato

estatal y para influir sobre la comunidad. Ya que el partido es una asociación en

28
sí misma, una asociación voluntaria, en su interior se forman grupos que luchan

entre sí, a los que Weber llama subpartidos.

Los subpartidos existen con frecuencia como forma de "socialización" de carácter

efímero; de modo típico, en toda campaña de designación de candidatos para la

presidencia en los partidos norteamericanos; como forma duradera, por ejemplo,

los llamados jóvenes liberales" en la política alemana". (1964)

Sólo puede haber partidos, según Weber, en sociedades "abiertas" porque hay

competencia; y en este sentido, los partidos pueden actuar libremente, sca porque

se adecuan a las reglas del juego o incluso aunque estén contra ella En una

sociedad "abierta", los partidos son asociaciones independientes, pero

relacionadas con otra asociación mayor que es el Estado, aunque no siclos

definitivamente a éste. Pero, en sociedades "cerradas", como sucede en los

Estados totalitarios, el partido depende del Estado o viceversa; entonces no sólo

no hay competencia sino una dependencia total entre las dos asociaciones, y si

existiera alguna diferencia ésta formal que real. Al fundirse una "asociación" (el

partido) con otra más amplia (el Estado), el primero está en el segundo

formándose una simbiosis en una sola asociación como sucedió, por ėjemplo, en

el Estado nazi-fascista; y viceversa, cuando una asociación (el Estado), se funde

en otra asociación, (el partido), como sucede en las sociedades de economía

socializada, pero de poder centralizado y burocratizado, del llamado "mundo

comunista".

Finalmente, aunque Weber insiste en la naturaleza política de los partidos, no

descuida la íntima relación que hay entre los intereses políticos y. los intereses

económicos, y cómo estos partidos reflejan también intereses económicos. Acota

29
Weber "económicamente, el financiamiento del partido es una cuestión central

para determinar la dirección material de la conducta del partido, y cómo se reparte

su influencia; es decir, si proviene de contribuciones pequeñas de las masas, de

un mecenazgo ideológico, de compra (directa o indirecta) interesada, o de

imposiciones sobre las probabilidades proporcionadas por el partido, o sobre los

enemigos sometidos”. (1964)

2.2.6.3 La concepción de partido según Giovanni Sartori

El estudio de Sarlori está dividido en dos partes. La primera es un intento de

explicar por qué hay partidos; y la segunda es un profundo estudio sobre el sistema

de partidos: Nosotros nos referiremos a la primera parte.

Uno de los móviles, entre otros, que incitó a Sartori a estudiar los partidos

políticos fue que "no estaba contento con el volumen pionero de Duverger";

(Sartori, 1980, p.9) porque, a pesar de Duverger, esa gran teoría de los partidos

políticos no se había logrado, incluso el mismo trabajo de Sartorino lo logra pero

sí es el que más se acerca a este propósito.

Luego de hacer referencia a los aspectos etimológicos y semánticos sobre los

partidos políticos en gran parte ya citados en esta obra Sartori, intentando hacer

una racionalización completa, sostiene lo siguiente: a. Los partidos no son

facciones , b. Un partido es parte de un todo; y, c. Los partidos son conductos de

expresión.

30
Sobre el primer punto, Sartori indica que: "La diferencia, pues, es que los partidos

son instrumentos para lograr beneficios colectivos, para lograr un fin que no es

meramente de beneficio privado de los combatientes. Los partidos vinculan al

pueblo a un gobierno, cosa que no hacen las facciones. Los partidos realizan una

serie de capacidades del sistema, cosa que no hacen las facciones. En resumen,

los partidos son órganos funcionales-sirven, para unos fines y desempeñan unas

funciones cosa que no hacen las facciones" (Sartori, 1980, p.54)

Sobre el segundo punto, entiende Sartori que: "Un partido es "parte" de un todo".

Pues, como es evidente, el partido es parte de un todo social comunitario. "El

partido es una de las "partes” del todo político. Pero no es una parte aislada y que

incomoda la dinámica de la totalidad, es una parte plural, que constituye por la

reunión de todas y cada una de ellas una parte "pluralista".... pero si nos preocupan

las partes que son partidos, la consecuencia es que pasamos a estudiar un todo

pluralista. Y si se concibe la comunidad política como un todo pluralista, entonces

lo que hace falta es un todo formado por partes en plural: un todo de partes y, de

hecho, resultado de la interacción de sus partes”. (Quesada Rada, 1994, p.528)

Respecto al tercer tema, los partidos políticos son "conductos”. "canales" de

expresión de los diversos intereses diseminados en la opinión pública. Son

mecanismos o instrumentos que, de alguna manera y de forma más o menos

organizada, conducen a los planteamientos de las diversas tendencias sociales ante

un gobierno. Es decir, que se expresan políticamente desde fuera del gobierno y

sirven de conductos de las diversas expresiones políticas societales. Este es un

fenómeno reciente que se ha desarrollado gracias al progreso de la democracia

representativa en este siglo.

31
Los partidos políticos, al entender de Sartori, tienen tres funciones importantes:

son órganos representativos, instrumentos expresivos y transmiten unas

exigencias respaldadas por una presión. El partido respalda con su propio peso las

exigencias a las que se siente obligado a responder". (Sartori, 1980 citado en

Quesada Rada, 1994)

Sartori plantea lo que él llama una definición mínima de partido; pues reconoce

que toda definición, sea genérica o sintética, tiene una serie de limitaciones.

Agrega Sartori que la definición mínima que formula basta para identificar su

objeto. Esta definición es la siguiente: “Un partido es cualquier grupo político que

se presenta a elecciones y que puede colocar medianlç elecciones a sus candidatos

en cargos públicos".(1980)

Sartori reconoce las limitaciones de esta definición cuando subraya: "La

definición mínima bace falta únicamente para disipar la indefinición al indicar

qué es lo que se debe incluir en, o excluir de una clase dada”.(1980)

Sartori es plenamente consciente y muy claro al darse cuenta y explicar con

nitidez la imposibilidad de edificar" una teoría general sobre los partidos

políticos''. "El argumento que venimos aduciendo es que no podemos edificar una

teoría de los partidos y de los sistemas de partidos, a menos que establezcamos lo

que no es un partido y que tengamos bien claro el para qué son fundamentalmente

los partidos. Podría ser incluso Que los partidos y sistemas de partidos existan

únicamente porque existen, esto es, sin más objetivo que el de

autoperpetuarse”.(1980)

32
Si fuera así, el problema podría haber quedado zanjado y no sería difícil elaborar

una teoría de los partidos políticos; porque, de alguna manera, aunque sea de

modo vago e impreciso, se puede saber lo que es y lo que no es un partido. Se

puede saber también para que son los partidos, incluso por intuición, y Sartori lo

hace pero incide en un planteamiento que demuestra en gran medida dónde está

el “quid" del problema "Cuando más sabemos acerca de los partidos, más nos

enfrentamos a una proliferación de hilillos y menos parecemos capaces de

juntarlos todos. Quizá esto se deba en escasa medida a que tenemos que contar

con. muchos datos empíricos. Sea cual sea el motivo, los detalles y lo secundario

adquieren precedencia sobre lo primario. De ahí que la tarea de unir los hilillos

por inferencia, esto es, a partir de los datos empíricos, parezca. ser ya algo

inmanejable. Nos quedamos, pues, con la esperanza de que se pueda realizar la

tarea de edificar la teoría de la otra forma: "Desde lo fundamental hasta lo

particular". (1980)

Quesada entiende que las aproximaciones de Sartori para elaborar una teoría

general de los partidos políticos, sin dejar de ser excesivamente descriptiva, es

más explicativa que la de Duverger; sin embargo, no logra superar el

planteamiento del politólogo galo: el problema continúa pendiente. (1994)

2.3 Partidos políticos en el Perú

Los sistemas políticos en la trayectoria del Perú, vendría a ser un proceso histórico donde

la institucionalidad va obteniendo mayor nivel en los distintos gobiernos.

En el año 1980 se da inicio a un estado democrático, después de un periodo de gobierno

militarista (1968-1980). Se establecieron los cargos que serían escogidos por elección

popular; la Presidencia, la vicepresidencia; representantes del poder legislativo, como

33
división de dos Cámaras: 60 senadores y 180 diputados; los concejos municipales

provinciales y distritales de todo el país. (Meléndez, 2007)

Por otro lado, también se fijó que las elecciones presidenciales y legislativas se realizan

cada cinco años, teniendo como requisito para salir electo presidente, contar con el 50%

más uno de los votos en favor. Si se daba el caso de que no se alcanzara dicho porcentaje,

se optaría por la segunda vuelta electoral entre los que obtuvieron mayor voto.

2.3.1 Clasificación de los Partidos Políticos

Se considera que desde el año 2000 en el momento de Valentín Paniagua teniendo el

cargo de Presidente del Congreso, se le otorgaría el puesto de Presidente de la República,

por la posterior salida de Alberto Fujimori. Los nuevos partidos se denominaron como

organizaciones independientes.

2.3.1.1 Los primeros “partidos”

En un inicio, los nuevos “partidos” tenían cierta rivalidad con ideologías separadas de conservadores

y liberales en el inicio de la república, viniendo a ser controntroversiales.

Las primeras corrientes ideológicas nacen en la República, a mediados del siglo XIX se les denomina

Partidos Políticos. Por esa razón surgen controversias entre liberales y conservadores por ser un

nuevo proceso histórico de un Estado independiente. La república surge en un espacio sin equilibrio,

puesto que no existía una Estado sólido y se daría la asamblea Constituyente de 1822 siendo la

primera institución política del Perú. Existían conflictos ideológicos entre conservadores y liberales.

El caudillismo detiene la corriente liberal hasta principios de la segunda mitad del siglo XIX. A

pesar del rechazo militar y las clases dominantes, siguen vigente.Los líderes militares ( liberales) se

oponen al gobierno de Rufino Echenique por cierta irregularidades en su gobierno. En 1851 se fundó

el club progresista por Domingo Elias, más adelante Manuel Justo Pardo y Lavalle, primer presidente

civil del Perú fundó la “Sociedad Independencia Electoral”.

El partido civil, denominado el primer partido político moderno en el Perú, ya que se consigna la

34
participación de un civil por primera vez. Prado tendría una ideología liberal, puesto que consideraba

que era el caminó correcto para el progreso del Perú, se propone organizar los sectores sociales y

mejorar el comercio internacional, a través de la mejora administrativa del guano. Sin embargo, más

adelante por la lucha interna que existía hace que la presidencia se le designe como sucesor a otro

militar, siendo Mariano Ignacio Prado .

2.3.1.2 Primer sistema de partidos en el Perú

Se considera como el primer sistema de partidos políticos, aparece el partido Constitucional

en el año 1882, fundado por el general Andrés Avelino Caceres, por consiguiente aparece el

partido demócrata en el año 1884 fundado por Nicolas de Pierola. Ambos partidos

coexistieron por un cuarto de siglo, empero, más adelante existiría una interrupción militar

al partido demócrata dirigido por Guillermo Billinghurst. Por consiguiente, surgiría un

nuevo pequeño partido liberal, dirigido por Augusto Durand en el año 1901, ambos partidos

resolvieron sus conflictos por vocación de poder. (Haya, 2004)

Ambos partidos de Cáceres y Piérola funcionaron en la Constitución de 1860, que fue

modificada por Balta en 1868 y por Francisco García Calderon en 1881, siendo la

Constitución más longeva de la historia republicana. Pasando el proceso de transigencia

entre liberales y conservadores, conjuntamente Ramon Castilla anhelaba institucionalizar el

Estado.

La república Aristocrática (1895- 1919)

En resumen de lo anterior dicho, a este proceso de gobierno se le denomina una oligarquía,

cuya economía se basaba en la agroexportación y áreas de cultivo, y que tenía como sustento

político al partido civil donde recae el poder del poder ejecutivo, legislativo, judicial y la

educación universitaria. El Perú de manera interna seguía igual, porque aún se regía en las

relaciones feudales, casi idéntico al sistema colonial. Por consiguiente surge la

35
“reconstrucción nacional'' empezando con el pago de la deuda externa (contrato de Grace) y

a su vez se impulsó el movimiento obrero y campesino.

2.3.1.2.1 Gobernantes de la República Aristocrática

● Nicolas de Pierola (1895-1899)

En el gobierno de Nicolas de Pierola se estableció la libra peruana de oro y el

Estanco de la sal. Se da gran apoyo a la fundación de instituciones crediticias y

financieras.Se funda la escuela militar de Chorrillos y se establece el servicio

militar obligatorio.

● López de Romaña (1899 – 1903)

Se estimulo de inversión norteamericana en minería con la cerro de pasco

Minning Company. Se promulgaron los códigos de minería, comercio y aguas. Se

inició la construcción del ferrocarril La oroya – Cerro de Pasco y se rompió

relaciones diplomáticas con Chile.

● Manuel Cándamo (1903 – 1904)

Gobierna después de salir elegido por el partido civil. Propone un gran proyecto

de construcción de ferrocarriles. No culminó su periodo presidencial.

● José Pardo y Barreda (1904 – 1908)

Se produce la gran movilización social de obreros con la federación de panaderos

“Estrella del Perú”. Se crean escuelas nocturnas y se construye el ferrocarril La

Oroya – Huancayo. Se construye la cripta de los Héroes.

● Primer Gobierno de Augusto B. Leguía (1908 – 1912)

Enfrentó para llegar al poder a los nacionalistas del partido demócrata. Impulsó

la colonización de la selva. Se promulgó la primera ley de Accidentes de Trabajo.

Los problemas limítrofes se dieron en todas las fronteras (Bolivia, Ecuador,

Brasil, Chile y Colombia).

36
● Guillermo Billinghurst (1912 – 1914)

Se consiguió las 8 horas de jornada laboral para los trabajadores del Muelle del

Callao, se reglamentó el derecho a huelga. Ante la ola de huelgas los civilistas

optaron por el golpe militar con Oscar Benavides (1914 – 1915).

● Segundo gobierno de José Pardo y Barreda (1915 -1919)

“Rompió relaciones con Alemania en el marco de la Primera Guerra Mundial.

Se produjo el levantamiento campesino de Rumi Maqui. Se dio el arbitraje

internacional del asunto de la Brea y Pariñas.Se elevaron las exportaciones. Se

establecieron a nivel nacional las ocho horas de trabajo. Cáceres apoyó el golpe

de estado de Leguía. (La República Aristocrática, 2020. Recuperado de Historia

Peruana).

Existía el miedo a la soberanía popular y se realizó el sufragio mediante colegios

electorales, por lo tanto quien tuviera el control ya obtendría el resultado

asegurado.

Los mecanismos utilizados resultan disfuncionales, llegando el final de la

República Aristocrática, siendo el final del primer sistema de partidos”.

2.3.1.3 Interregno dictatorial y segundo sistema de partidos

De Leguía se rige en un gobierno autoritario, abriendo las puerta a inversionistas para el Perú,

por esa razón se empieza con la modernización de Lima, a su vez culmina con el sistema de

partidos del sistema aristocrático.

Llegando a ser un estado dirigido por su representante, la población empieza a manifestarse, sin

embargo no existía un interés por solucionar el problema. En ese proceso se realiza un cambio a

la Constitución 1820 para que se dé la reelección del mandatario. Luego, en 1923 se modifica

para que su reelección sea por un periodo más, y en el año de 1927 se modificaría para un periodo

indefinido. (Haya, 2004)

37
La crisis capitalista, desembocó en protestas del pueblo, siendo la causa del golpe de estado por

el general Luis Miguel Sánchez Cerro, teniendo como salida crear su propio partido, Unión

Revolucionaria en el año 1931. Se le cede el puesto a David Samanez Ocampo, que se encargaría

de las elecciones y nombraría una comisión para proponer una nueva Constitución.

La reivindicación social ocasiona un cambio, siendo el momento de la aparición de nuevos

partidos políticos con una ideología popular y nacionalista. Aparecen los partidos políticos de

Unión Revolucionaria y el Partido Aprista Peruano, que se enfrentarían en las elecciones de

1931.Tras 4 meses realizados los comicios, favoreciendo a Sánchez Cerro con un 47.02% a

comparación de Haya de la torre con un 32.18%. En el Congreso elegido se tendrá funciones

legislativas y constituyentes, semanas después el partido aprista será expulsado del parlamento.

A partir de esa situación, surgen desacuerdos internos entre la oligarquía y las fuerzas populares.

En 1993 se promulga la nueva Carta Política, resulta ser sugerente con respecto a la de 1920, un

motivo sería, el artículo 53 en el cual no se reconoce la existencia de los partidos políticos de

organización internacional y sus miembros no podrían ejercer el cargo que les corresponde.

Se inicia un extenso proceso de confrontación entre la oligarquía y las fuerzas célebres, que por

instantes tiene las propiedades de la guerra civil. A pesar de la expulsión de la célula aprista, el

debate continúa y en 1933 se promulga la nueva Carta Política. Trae creaciones interesantes en

relación a la de 1920, sin embargo, su carácter queda sellado por el artículo 53, de acuerdo con

el cual el Estado no reconoce la vida legal de los partidos políticos de «organización

internacional» y sus miembros no tienen la posibilidad de realizar ni una funcionalidad

política.El nuevo escrito pierde de esta forma su sentido de ser garante de la incorporación social

y la convivencia civil. Desconoce brutalmente los derechos políticos de buena parte de la

ciudadanía estructurada en las fuerzas de la naciente izquierda. El PAP y el Partido Comunista

representaban al menos al 40% del electorado.Este caso se extiende hasta 1945. O sea, a lo largo

de las dictaduras de Sánchez Monte, Benavides y el régimen autoritario de Manuel Prado, no

38
hay sitio para un sistema de partidos. Las libertades civiles y políticas no hay y es recién con la

formación del Frente Democrático Nacional y la candidatura del abogado Luis Bustamante y

Rivero que se abre un lugar democrático.El Frente arrasa en las elecciones, empero las

contradicciones en medio de las fuerzas que lo sustentan y la tiesa contraposición de la derecha

oligárquica, impiden que la transición democrática se consolide. La inestabilidad política agota

al régimen apenas a los 3 años de iniciada su administración y nuevamente un golpe de estado

finaliza con su realidad. El golpista general Manuel Odría supone primordial darles un barniz

institucional a sus aspiraciones y convoca a elecciones en 1950. En ellas, termina siendo en la

práctica el exclusivo candidato viable y práctica el poder hasta 1956. Tiene en aquel tiempo un

parlamento obsecuente, que solo cumple funcionalidad decorativa.Los partidos de

contraposición son ilegalizados y al igual que en las dictaduras anteriores, ni siquiera rige la

Constitución de 1933. Leyes de emergencia y estabilidad interior que concentran todo el poder

en el dictador de momento, la reemplazan.Es otro lapso de 8 años sin vida democrática, hasta la

nueva etapa que se abre en 1956. Sin que el artículo 53 de la Constitución de 1933 haya sido

derogado, se posibilita la colaboración indirecta de las fuerzas ilegalizadas. Tal cual, el Apra

puede respaldar la candidatura de Manuel Prado que le había autorizado la legalidad y otros

conjuntos progresistas auspician al jefe del nuevo Frente de Juventudes, Fernando Belaunde

Terry, que recibe un sorpresivo segundo sitio.Entre 1956 y 1968 se proporcionaron las

condiciones para la aparición de un segundo sistema de partidos. El Partido Aprista puede actuar

sin que lo persigan. El Frente de Juventudes da paso al Partido Acción Popular. El mandatario

Manuel Prado organiza su propio Desplazamiento Democrático Peruano. Aparecen nuevos

equipos que representan a sectores medios radicalizados, como la Democracia Cristiana, el

Desplazamiento Social Progresista. El Partido Comunista impulsa como frente electoral el Frente

de Liberación Nacional. El ex dictador aspira volver al régimen por medio del voto popular y

forma la Alianza Nacional Odrista. El veto de los militares al Partido Aprista, viejo rezago de la

39
etapa dictatorial iniciada en 1930 y culminada un cuarto de siglo después, produce el golpe del

18 de junio de 1962. Se instala el comité Militar de Régimen que convoca novedosas elecciones

para el año siguiente. En estas elecciones, aparecen 3 partidos como los que predominan,

repartiéndose en 2 situaciones, alrededor de un tercio de la elección ciudadana: Acción Popular,

el Apra y la Alianza Nacional Odrista.La crisis provocada por el veto de los militares a la

candidatura de Víctor Raúl Haya de la Torre, líder del Partido Aprista, marca la coyuntura

política. Al haber quedado a 0.2% del tercio exigido por la ley para triunfar la presidencia de la

República, (porcentaje que superaron los candidatos a las vicepresidencias del mismo partido) la

votación tiene que resolverse en el Congreso entre los 3 candidatos más votados. El PAP anuncia

que va a ceder sus votos al antiguo dictador y jefe de la UNO. Sin embargo, Acción Popular

incriminación las elecciones por «voluntad de fraude» a favor del candidato aprista. En aquel

ambiente enrarecido, a escasas semanas del fin de su segundo mandato, Manuel Prado es

derrocado.Las novedosas elecciones le brindan la victoria a Fernando Belaunde Terry. En el

Congreso, se coaligan el Apra y la UNO, lo cual les posibilita guiar las dos cámaras. Las

interrelaciones entre el régimen, controlado por la unión de Acción Popular y la Democracia

Cristiana y la contraposición parlamentaria, son tensas y difíciles. Las interpelaciones

ministeriales y las censuras a los gabinetes se suceden, a medida que la movilización social se

acentúa alentada por las expectativas que despertó el candidato Belaunde.La Alianza y la

Coalición hegemonizan la vida política. El MDP queda bastante disminuido y los conjuntos de

izquierda, que se han diversificado, demuestran un relevante aumento en las elecciones

complementarias de 1967 en Lima, al obtener 14.3% de los votos.No obstante, es complicado

conseguir seguridad política ya que no se han superado de forma definitiva los inconvenientes

que provocaron la confrontación política del cuarto de siglo de gobiernos dictatoriales y

autoritarios a partir de los años treinta. La Constitución excluyente de 1933 sigue vigente. La

confrontación entre el Apra y la fuerza armada se traduce en el veto de las Fuerzas Armadas a la

40
presidencia de Haya de la Torre. Los convenios del PAP con sectores de la derecha abren un

flanco a su izquierda que es ocupado velozmente por conjuntos políticos de inspiración

marxista.El entorno universal se tensa por el empuje de la revolución cubana y su aliento a los

movimientos insurreccionales en toda Latinoamérica. Los efectos de la guerra gélida se sienten

con especial fuerza y los gobiernos norteamericanos garantizan cualquier elección que frene «el

desarrollo comunista”.En dicha situación, son difíciles las condiciones para que se afiance el

sistema de partidos. La polarización impide una interacción idónea en medio de las fuerzas

políticas y los esfuerzos que ello crea acaban por entrampar el manejo de los propios partidos

políticos. Acción Popular se divide a medida que rompe su unión con la Democracia Cristiana.

La crisis en el partido de régimen, el escándalo en la renegociación del contrato con la

International Petroleum Company, las huelgas sindicales, inventan una sensación de desorden

que es utilizada como pretexto para el nuevo golpe militar.Esta vez se trata del pronunciamiento

corporativo, institucional, que les posibilita a los militares tomar el poder a lo extenso de doce

largos años. Poseen el objetivo proclamado de situar fin al sistema oligárquico. Aplican una

política económica nacionalista y estatista que expropia a enormes organizaciones petroleras,

mineras, industriales y agrarias. Desde aquellas medidas, se generan unas doscientas

organizaciones públicas y se dan permisos mecanismos de colaboración en la administración

empresarial.En lo político el discurso está poderosamente dirigido contra los partidos políticos.

Inclusive la consigna del «no partido» llega a transformarse en doctrina oficial de manera tal que

el artefacto estatal se convierte en la expresión de acción política de los militares.

Es la primera dictadura militar en la historia peruana que rechaza de manera consciente el manejo

de la representación parlamentaria. No permiten la realidad del Congreso ni para guardar las

maneras. En reemplazo de la democracia representativa contrapone la tesis del

«participacionismo» y la «movilización social» que no es otra cosa más que el mecanismo de

apoyo al poder dictatorial controlado y subvencionado por el comité militar.Los líderes de los

41
partidos, en especial de Acción Popular, del Apra, del PPC y de pequeños conjuntos de la

izquierda extremista, son perseguidos, hostigados y marginados de la actividad pública. La

«revolución» corporativa de los militares sospecha que se ha producido para durar largo tiempo

y anula el derecho del habitante al sufragio. Las fuerzas políticas democráticas se mantienen en

relativa actividad, vinculandose a movilizaciones de diversa índole que se impulsan a partir de

la sociedad civil, más que nada por medio de gremios expertos y sindicatos.

2.3.1.4 El tercer y último sistema de partidos del siglo XX

La presión social y política obliga a los militares desgastados a retirarse a sus cuarteles. Deciden

hacerlo en orden y diseñan un cronograma que incluye la convocatoria de una Asamblea

Constituyente para julio de 1978. Las elecciones se realizaron sin sobresaltos y en medio de una

fuerte presión de la sociedad civil para asegurar el retiro de las Fuerzas Armadas. Todas las

fuerzas democráticas, salvo el partido del derrocado ex presidente Belaunde Terry, deciden

participar en el proceso electoral. El resultado favorece con un 35% de votos al Partido Aprista

que, por primera vez en su medio siglo de existencia, logra elegir para un cargo público a su

líder. El segundo lugar lo alcanza el PPC, y luego varios grupos de izquierda suman un

sorprendente 32% de sufragios. (Haya, 2004)

Durante un año la Asamblea debate la nueva Constitución mientras se preparan las elecciones de

1980. En agosto de 1979 se promulga la que resulta la primera Carta democrática del siglo XX,

que reconoce como sustento del régimen político los derechos fundamentales. Por precaución,

incluyen como artículo final la disposición anti golpista de la Constitución mexicana de

Querétaro de 1917, que luego recogió la venezolana de 1961. El artículo 307 proclama el

carácter ultra activo del texto constitucional, al señalar que no puede ser derogado por golpe

alguno ni modificado por medio distinto al que dispone.El período abierto en 1980 y que dura

hasta el golpe de Alberto Fujimori en 1992, permite la vigencia predominante de cuatro fuerzas

políticas: Acción Popular, el PAP, el PPC y la Izquierda Unida. AP en alianza con el PPC

42
gobiernan de 1980 a 1985. El Apra lo hace de 1985 a 1990 mientras que la IU tiene presencia

significativa en los gobiernos municipales y regionales, además de fuerte representación

parlamentaria.Tres factores se entrecruzan para entorpecer el nuevo tránsito democrático: la

crisis de la deuda externa, la acción terrorista de Sendero Luminoso y la crisis económica que

lleva a la hiperinflación de fines de los ochenta.

Cuando los militares presionados por las fuerzas democráticas deciden convocar a la Asamblea

Constituyente, se abre un proceso de refundación constitucional de la República que convoca a las

fuerzas democráticas. Señalamos que AP decide no participar por razones de táctica electoral, lo

que no le impide reconocer y poner en vigencia la Carta democrática. Sin embargo, un pequeño

grupo maoísta rechaza de plano la opción por la democracia y promueve la sedición terrorista

contra el Estado.Este quizás fue el problema más difícil de manejar por los gobernantes y se

convirtió junto con las dificultades económicas, en el acicate que debilitó la institucionalización

democrática. A partir de 1978 se han realizado 3 elecciones presidenciales y parlamentarias, 4

municipales y una de gobiernos regionales, con plena vigencia de las libertades democráticas. En

1980, 1985 y 1990 se escogieron 3 parlamentos bicamerales de 180 diputados y 60 senadores cada

uno. La aplicación del sistema electoral proporcional (cifra repartidora) introducido en las

naciones de Europa étnicamente más heterogéneos como parte de su táctica de consolidación

territorial, permitió en el Perú la representación de fuerzas minoritarias que contaban con

predominancia en sectores sociales definidos.La nueva Constitución ha sido la primera que en la

historia republicana estima a los partidos políticos. En el capítulo sobre derechos políticos le

dedica los artículos 68, 69, 70 y 71. En ellos se rigurosa que los partidos manifiestan el pluralismo

democrático y concurren a la formación y manifestación de la voluntad exitosa. Se les estima

como «instrumento primordial para la colaboración política de la ciudadanía”.

43
Se reconoce el derecho de los habitantes de asociarse en partidos y de participar democráticamente

en ellos. A los partidos les corresponde postular candidatos en las elecciones. En los artículos 70

y 71 se reconoce una forma de subvención indirecta por parte del Estado, al asegurar la entrada

gratuita a los medios de comunicación social de propiedad pública, según la proporcionalidad

resultante de las elecciones parlamentarias. La futura ley de partidos políticos debía entablar

pautas más exactas.Esta novedad constitucional terminó un gran paso adelante después de que las

dictaduras militares y los gobiernos autoritarios, tomasen como consigna denigrar

permanentemente a las fuerzas políticas organizadas, en especial si provenían de las clases

célebres. Por primera ocasión disfrutaban de reconocimiento constitucional y tenían plena

independencia para organizarse y ayudar a la formación de la voluntad política de los

habitantes.Hubo pues un marco conveniente para el juego político. Entonces la plena vigencia de

las libertades civiles y políticas se puso a prueba por la necesidad de contestar frente a los ataques

terroristas de Sendero Luminoso, cada vez de más grande envergadura. Los gobiernos

democráticos respondieron sin alterar el curso constitucional. No pudieron, no obstante, mantener

el control de la violación de derechos primordiales de parte de los agentes represivos del Estado.

El agotamiento de la autoridad civil en esta situación tiene que ver en buena parte con la tradición

militarista cultivada en las Fuerzas Armadas por la vieja oligarquía, carente de convicciones

democráticas.Parlamentarios de los partidos que predominan en el Congreso hicieron diversos

intentos para traducir al derecho positivo los artículos señalados. En la Cámara de Diputados se

presentaron distintas propuestas que no encontraron acuerdo en 2 aspectos capitales: la supervisión

pública de la financiación partidaria y los mecanismos de democracia interna, como para escoger

a las autoridades internas como las candidaturas a cargos públicos. Los acercamientos iniciales a

estas propuestas han permitido verificar que no existía el temperamento suficiente para aprobar la

idea legislativa.Primaba entonces la iniciativa de que los partidos debían organizarse al margen de

la injerencia estatal, tanto en el funcionamiento de sus ingresos como en la denominación de sus

44
autoridades. Ya en la década de los ochenta, se sentía la crítica pública contra el funcionamiento

cerrado de las cúpulas en las empresas partidarias, así como se abrían preguntas en la crítica

pública sobre la legalidad de ciertas financiaciones.La precaria institucionalidad democrática,

resultado del predominio de las dictaduras y el miedo a los golpes de estado, provocaron profunda

desconfianza en el desempeño imparcial de las entidades públicas. Hasta el golpe de 1992 el asunto

no se ha solucionado y las iniciativas no pasaron de ciertos debates anteriores en las comisiones

parlamentarias.Esta indecisión concluyó por socavar el propio proceso de consolidación ciudadana

de las fuerzas políticas. Perseguidas y hostigadas a lo largo de largos periodos, enfrentadas por la

banda terrorista de Sendero Luminoso, los partidos se pusieron a la defensiva y dejaron pasar la

posibilidad. Los habitantes exigían respuestas más eficaces contra la violencia y la crisis

económica y comenzaron a quitarle su apoyo a los partidos organizados. Ya en las elecciones

municipales de 1989 apareció con fuerza la figura del marginal de la vida política, que de rápido

ganó la alcaldía de Lima.Si bien los movimientos estaban identificados por el escrito

constitucional ya habían aparecido esporádicamente, era la primera ocasión que el fenómeno se

presentaba en toda su magnitud. Sobre la base de una mezcla de recursos que combinaba a partir

de la existencia profesional y empresarial en la radio y la televisión, simpatía personal, liviandad

ideológica, sin ni una clase de organización organizada y con la exclusiva promesa de hacer obras,

el empresario de medios de comunicación Ricardo Belmont derrotó a cada una de las fuerzas

organizadas.Desde ahí, vastos sectores de la ciudadanía comenzaron a creer que no se necesitaba

tener una trabajada formación orgánica ni doctrinas o programas producidos. Ni siquiera planes

de régimen eran necesarios para convencer a los electores. Bastaba un rostro conocido que hablara

en general y prometiera hacer cosas sin más grandes precisiones.Durante los 80, partidos como el

Apra, Acción Popular y el PPC, hicieron diferentes tipos de elecciones internas, inclusive bajo el

inicio de un militante un voto. La coalición agrupada en la Izquierda Unida entregó además ciertos

pasos de esa forma para superar su carácter de frente de varios núcleos políticos y transformarse

45
en un partido.El procedimiento electoral que se aplicó a partir de 1978 tiene 2 recursos relevantes

que inciden en su comportamiento. Por un lado, la proporcionalidad asignada por medio de la cifra

repartidora, posibilita que empresas que obtienen menos del 5%de votos, que es el listón legal para

conservar vigente la inscripción, tienen la posibilidad de conseguir representación parlamentaria.

El otro es el voto predilecto. Introducido por los militares a partir de las elecciones a la Asamblea

en 1978, con el fin explícito de situar a prueba el respaldo del aprismo a la candidatura de su líder,

ha tenido efectos diversos en la vida orgánica.El voto predilecto que posibilita que el elector elija

hasta 2 candidatos en las listas parlamentarias de cada partido, debilitó el control de las direcciones

sobre la denominación de las candidaturas. Simultáneamente incentivó la competencia al interior

de los partidos y acentuó la utilización de recursos económicos particulares a causa de los

candidatos, en el tamaño de sus maneras. Esto les abrió las puertas a candidatos provenientes de

sectores políticamente inorgánicos, en varios casos con intensa presencia en los medios de

comunicación o por su dedicación a las más distintas ocupaciones, en todo caso dueños de

relevantes recursos económicos. El fenómeno que los italianos en la posguerra llamaron el

qualunquismo, se acrecentó. Por el momento no se apreciaba la trayectoria del militante

reconocido con la línea y las ocupaciones del partido, sino que bastaba la existencia en los medios

y más que nada, los recursos económicos que permitieran pagar la campaña. (Haya, 2004)Una de

las secuelas de esta clase de voto ha sido el ingreso decidido del dinero en la política, propiciado

por la creciente fuerza de las ideologías neoliberales que postulaban la hegemonía de las leyes de

mercado en la conducta social.Con dichos recursos, las elecciones de 1990 poseen un resultado

imprevisible. Las primordiales fuerzas políticas, atenazadas por la crisis económica y los

crecientes atentados terroristas de Sendero Luminoso, polarizan la confrontación al extremo de

preferir que ni una de las 4 hegemónicas hasta el momento se suceda en el régimen. Los actores

democráticos radicalizan la confrontación recíproca y ello provoca que, en plena etapa final de la

campaña electoral, un candidato hasta el momento marginal, crezca por sorpresa en las encuestas.

46
Alberto Fujimori, ex rector de la Universidad Nacional Agraria, ve crecer su respaldo a partir de

menos del 1% hasta el 30% en las encuestas en poco más de un mes. Producida la votación, recibe

24% de votos que lo realizan pasar a la segunda vuelta y confrontar al entonces candidato

predilecto, el jefe del Frente Democrático Mario Vargas Llosa. Este resultado se observó

favorecido por la separación de la Izquierda Unida y los esfuerzos internos en el PAP, que pese al

mal régimen, bordeó el 20% de votos. Para la segunda vuelta, la militancia aprista y de IU, vota

masivamente por el outsider Fujimori para «cerrarle el paso a la derecha». Todo lo mencionado

por el encono que despertó en estas fuerzas la beligerante candidatura de Vargas Llosa, jefe del

Fredemo, promotor de un encendido neoliberalismo a partir de la fallida estatización de la banca

por parte gubernamental aprista.Fujimori derrotó a Vargas Llosa en la segunda vuelta con una

intensa votación. De 1990 a 1992 dirige según la Constitución, aun cuando plantea un descontento

persistente por no tener mayor parte parlamentaria y verse por consiguiente obligado a comerciar

con los partidos «tradicionales». Su apego inmediato a las políticas económicas recomendadas por

el «Consenso de Washington» y su constante reclamo de una legislación antiterrorista más rígida,

lo conducen a afrontar con las fuerzas parlamentarias. (Haya, 2004)Rápido muestra su desapego

por las maneras democráticas de concertación. Reacio al diálogo con la contraposición y opuesto

a darle más grande organicidad al conjunto que lo secunda en las elecciones, se pronuncia cada

vez con más claridad contra los partidos, a los cuales implican por las graves deficiencias en el

desempeño de la economía y en el combate a Sendero Luminoso. (Haya, 2004) En estas

condiciones se genera el golpe del 5 de abril de 1992. Con la ayuda de las Fuerzas Armadas, cierra

el Congreso, disuelve los gobiernos regionales, participa el Poder Judicial y clausura el Tribunal

Constitucional. La utilización arbitraria de la fuerza contra las instituciones que emergen de la

autonomía exitosa, hace retroceder al territorio otra vez a la era de las dictaduras. De esta forma

acaba la vigencia del tercer sistema de partidos que se organiza en el Perú en todo el siglo XX. Si

bien es cierto que los errores realizados fueron graves y que llevaron a una polarización suicida,

47
nada justificaba el golpe de estado. Fujimori jugó a detectar efectividad con absolutismo, para lo

que abandonó que la economía se sometiera a los designios del Fondo Monetario Internacional y

la batalla antiterrorista quedará en manos de los militares.

2.3.1.4.1 Reglamentación Interna

También los partidos políticos requieren de reglamentos internos. Todos los partidos que

participan del estudio cuentan con estatutos y, en su mayoría, con idearios, reglamentos internos

y documentación complementaria, siendo un requisito indispensable para formar parte del registro

del Jurado Nacional de Elecciones. (Meléndez, 2007)

2.4 Del partido de cuadros a los partidos de atracción

Miró Quesada Rada (2001) señala que a partir del siglo XIX hasta la fecha surgieron

diversas clases de partidos lo que posibilitó establecer una tipología de los mismos, en

efecto, una clasificación. Al iniciar esta parte, evaluaremos lo manifestado por este autor,

particularmente en su libro “Manual de Ciencia Política“, es decir que básicamente nos

centraremos en los aportes de este politólogo pues nos interesó mucho la clasificación

que hace en su obra, así como la denominación de “partidos de atracción” que realiza.

De acuerdo al autor, inicialmente se tienen a los “partidos tradicionales” conformados

principalmente por los ya conocidos, partidos de cuadros y partidos de masas, no

obstante, señala que aparecieron nuevas expresiones partidarias como el denominado

"catch-all party", que hace referencia a aquel partido que agarra de todo o más

específicamente que “atrapa a todos” (Miró Quesada Rada, 2001). Es así que como

anteriormente mencionamos Francisco Miró Quesada denominará a este tipo de partidos

como "partidos de atracción", precisamente por esta característica.

48
Cabe destacar que en su obra el autor menciona que esta clasificación es considerada

como “modelo tipo”, dado que existen otras clasificaciones, no obstante, para este trabajo

de investigación tomaremos en cuenta su clasificación de partidos políticos en partidos

de cuadros, de masas y de atracción. Tales que se detallan a continuación:

Partidos de cuadros:

Como indica Miró Quesada Rada (2001), estos partidos son los más antiguos y sus

orígenes provienen de los comités electorales y, en ocasiones, de los clubes políticos, en

donde cada parlamentario representaba o era apoyado por un comité.

El origen histórico de los partidos de “notables” o partidos de cuadros puede remontarse

en la etapa del parlamentarismo, cuando justamente las facciones partidarias se

empezaban a organizar desde el interior del parlamento entonces se consideraba una

representación básicamente de tipo individual, es ahí donde aparece la figura del notable

que va a representar o va a estar vinculado directamente con su electorado, es decir con

su jurisdicción electoral.

Asimismo, este tipo de partido “tradicional” correspondía a la pugna entre la aristocracia

terrateniente y la burguesía industrial comercial. De manera que tienen una estructura

partidaria elitista, eran, por lo tanto, clanes poderosos que servían para reunir a algunos

“notables”. Así los partidos de cuadros poseían una limitación en su organización, en el

campo político y en la naturaleza real de la democracia, pues la mayor parte de la

población estaba excluida de participar en ellos (Miró Quesada Rada, 2001).

Después de citar esta concepción sobre partidos de cuadros, podemos decir que en este

tipo de partidos los miembros eran escogidos “selectivamente”, por ende, contaban con

un número reducido de afiliados. Asimismo, podemos resaltar que lo que va a caracterizar

a este tipo de partidos es la representación individual (“notable”) y su organización débil.

49
Partidos de masas

Como bien señala Miró Quesada Rada (2001), estos partidos a diferencia de los partidos

de cuadros corresponden a un periodo de mayor democratización de la sociedad europea,

puesto que surgen a principios del siglo XX. Además, los partidos de masas fueron

inventados por los socialistas y no son partidos “selectivos” puesto que pueden llegar a

tener millones de adherentes, cabe mencionar que esta “estructura masiva” de los partidos

socialistas será posteriormente adoptada por los partidos social-cristianos, comunistas y

fascistas.

En este tipo de partidos por lo general se sacrifica a los electores para asegurar la

militancia, asimismo sus dos principales características son: la naturaleza burocrática de

su comando y la existencia de una doctrina como justificación teórica de la práctica

política. Cabe destacar que el líder se debe a sus “electores internos” ya que existe una

especie de interdependencia entre los líderes y la militancia. Por su parte, la organización

eficiente y burocrática tiene un papel central, así como el electorado pues los primeros

partidos de masas contaban con un electorado de base preferentemente obrera en el caso

del contexto europeo, entonces claramente la ideología cumple un rol fundamental

porque pertenecer a ese partido está directamente asociado a una pertenencia social y a

una ideología asociada.

Partiendo de esta concepción sobre los partidos de masas, podemos manifestar que a

partir de este contexto de mayor democratización se originaron partidos que

representarían a los intereses de la clase obrera. También podemos ver que una distinción

básica de este tipo de partidos es que consideraban como algo imprescindible el

“reclutamiento” de los adherentes. Todavía cabe señalar que el partido burocrático o de

masas va a estar asociado a una diversificación de las funciones del estado y a la

50
democratización de masas, entonces claramente este es un partido de reclutamiento de

miembros del partido para acceder al poder.

Partidos de atracción

Este tipo de partidos tal y como lo indica su nombre tienen como función “atraer” a todo

tipo de elector. Por otro lado, el desarrollo tecnológico y otros “recientes” hechos

económicos relacionados mostraron que la sociedad política ya no se puede regir

aplicando los modelos clásicos de los partidos “tradicionales”. En consecuencia, estos

partidos fueron transformándose en "partidos que agarran de todo" (Miró Quesada Rada,

2001).

Estos "catch-all party" dejan de lado la ambición de encuadrar a las masas dentro de

conceptos ideológicos rígidos y se dirigen específicamente en la escena electoral, es decir,

que lo más importante para ellos es captar electores mas no militantes. Asimismo, aspiran

a un éxito electoral inmediato y a tener una acción más profunda sobre una audiencia

amplia, por consiguiente, su objetivo es la "vocación mayoritaria” con el fin de obtener

la mayor cantidad posible de sufragios. Es así que evitan caer en el dogmatismo y

sectarismo para no perder electores, es decir, que evitan la rigidez ideológica y

doctrinaria, por lo cual adecúan programas de síntesis de acuerdo a las distintas demandas

de los individuos y grupos, que tienen la intención de hegemonizar y armonizar las

mismas. No obstante, los partidos de atracción pueden llegar a perder la aprobación y

aceptación de algunos grupos de personas que necesitan tener una conexión ideológica

con los partidos.

A diferencia de los partidos de masas la elección de los líderes se hace en función de los

electores y no de los militantes, en otras palabras, en este tipo de partidos la idea central

es la siguiente: “la democracia externa debe prevalecer sobre la democracia interna”.

51
En síntesis, se habla de que los partidos habían promocionado una ideología, tales como

los partidos “tradicionales”, sin embargo las nuevas expresiones partidarias según lo

mencionado son partidos sin una ideología determinada, es decir un poco más neutros,

como el caso de los “partidos de atracción”, pues vendrían a ser instituciones en las que

puede entrar cualquier persona, porque lo importante es que se genere un voto a favor.

Dentro de las características de estos partidos se encuentra el mayor fortalecimiento de

los grupos de alta dirección, la devaluación del papel miembro individual del partido, la

pérdida del vínculo de identificación de sectores sociales y el apoyo de la mayor cantidad

de grupos de interés. Es importante considerar también que para los partidos de atracción

la imagen y reputación de los candidatos es muy importante ya que su interés es atraer

votantes, por eso vemos que por lo general la mayoría de los partidos ponen a ex

funcionarios públicos con una buena trayectoria y reputación en puestos claves para las

elecciones.

2.5 SISTEMAS DE PARTIDOS

Los científicos políticos coinciden en afirmar que “a un determinado tipo de régimen

político corresponde una forma específica de sistema partidario”. De esta forma se

asevera que en los regímenes totalitarios hay partidos únicos y que en los regímenes

democráticos se han establecido sistemas bipartidistas y multipartidistas, no obstante,

Miró Quesada indica que esta afirmación no es del todo cierta, pues en los regímenes

políticos se encuentran una serie de variantes con respecto a los sistemas de partidos,

como por ejemplo, en los ex regímenes socialistas, además del unipartidismo, existió el

sistema denominado de "partidos hegemónicos ideológicos". Es así que esta clasificación

es muy útil sin embargo presenta una serie de problemas (Miró Quesada Rada, 2001).

52
Por su parte, Francisco Miró Quesada Rada, cita a famosos autores, que también muestran

muchas formas de estudiar y clasificar los sistemas de partidos, así tenemos a Giovanni

Sartori que indica que el "partido hegemónico ideológico” no permite la competencia

oficial por el poder, sin embargo, que si permite la existencia de otros partidos pero como

“partidos de segunda” que son relegados pues no se les permite competir con el partido

hegemónico en términos de igualdad, es decir que en este sistema la alternancia no puede

ocurrir es más ni siquiera se contempla la posibilidad de la rotación del poder. De la

misma manera el autor menciona las clasificaciones y posiciones de Duverger,

Lapalombara y Weiner, entre otros.

No obstante, la clasificación que nos pareció importante considerar es la que menciona

el politólogo Francisco Miró Quesada Rada en su libro “Introducción a la Ciencia

Política” pues muestra dos importantes clasificaciones del sistema de partidos políticos

cada uno con un régimen distinto:

Primera clasificación:

- Régimen de partido único (sistema unipartidista o monopartidista). El

régimen de partido único se origina generalmente por ciertas situaciones

históricas concretas, resultado de cambios revolucionarios, procesos de

independencia colonial o por regresiones contrarrevolucionarias

“antidemocráticas”. En este sistema se monopoliza el poder político, pues solo se

permite la existencia de un solo partido, es decir que se impide el pluralismo de

partidos (Miró Quesada Rada, 2006).

Habría que decir también que Miró Quesada (cita a Jean Blondel) identificando

tres subtipos de partido único: partido único autoritario-radical (tipo comunista);

53
partido único autoritario de centro (tipo populista) y el partido único autoritario

conservador (tipo fascista).

- Régimen bipartidista (sistema de dos partidos). La característica principal del

sistema bipartidista es la alternancia del poder, en otras palabras, hay que

considerar la existencia de dos partidos que se encuentren en condiciones de

competir por la disputa del poder.

En este sistema se encuentran dos modelos: el “bipartidismo perfecto”, en el que

participan en libre competencia, dos partidos políticos que suman la mayor parte

del electorado. Estos partidos predominan sobre otros "partidos menores" que no

llegan a alcanzar una presencia relevante en la sociedad, es decir, que poseen poca

influencia en el electorado, destacando que este modelo suele aparecer en países

anglosajones (Gran Bretaña, Estados Unidos, Canadá, Australia y Nueva

Zelanda), pero también hay bipartidismo perfecto en sociedades no anglosajonas

como Austria, Honduras y Uruguay. Por otra parte, se encuentra el “bipartidismo

imperfecto”, este se origina cuando al lado de los dos partidos importantes existe

un tercero que, a pesar de no tener influencia en la sociedad ni arraigo electoral,

es valioso para conseguir estabilidad en el parlamento y el gobierno, lo que trae

como consecuencia que generalmente uno de los dos partidos principales forme

una alianza con el tercero para obtener el control del gobierno, en pocas palabras,

el tercer partido sólo sirve de apoyo para los dos más importantes. Asimismo, la

imperfección puede consistir en la marginación de ciertos sectores y partidos

políticos que los grupos dominantes imponen, como práctica y norma, en una

sociedad: como por ejemplo por la discriminación racial y política (Miró Quesada

Rada, 2001).

54
- Régimen multipartidista (sistema multipartidista, más de dos partidos). En

este sistema hay una serie de variantes, por un lado el multipartidismo puede ser

integral o extremo cuando hay más de cuatro partidos que determinan una

polarización del sistema político que podría poner en riesgo el sistema

parlamentario; lo que prácticamente obliga a dar lugar a la formación de alianzas

partidarias con la finalidad de lograr estabilidad de la democracia competitiva,

asimismo el multipartidismo puede ser atemperado o moderado. Según autores,

como Schwartzenberg y Sartori, esta modalidad implica la presencia de cuatro

partidos, que a través de pactos y alianzas, como en el caso anterior, lo que

conlleva a que se evite la polarización extrema y a su vez una situación intermedia

entre el bipartidismo y el multipartidismo extremo. El multipartidismo moderado

predomina en países como Alemania Federal, Bélgica e Irlanda, este sistema

existe también en Suecia, Islandia y Luxemburgo. Hay multipartidismo integral o

extremo en la mayoría de los países de Europa latina (Francia, Italia, España,

Portugal); en países de América Latina como Perú, Ecuador, Chile, República

Dominicana, El Salvador, Nicaragua, Panamá. Sin embargo, en Brasil,Venezuela,

Argentina y Costa Rica se inclinan hacia el multipartidismo moderado. Por otra

parte, en países no latinos como Dinamarca, Finlandia, Suiza, Israel, Noruega se

tiende al multipartidismo extremo (Miró Quesada Rada, 2001).

Segunda clasificación:

- Régimen de partidos no competitivos (sistema no competitivo).

Podemos hablar de competencia significativa cualquiera que sea el resultado

cuando se disputan los puestos, en otras palabras, cuando se da un enfrentamiento

sin temor y con igualdad de derechos entre candidatos competidores con el

55
candidato del partido predominante. Un sistema no competitivo se da cuando no

se permite que las elecciones sean disputadas, es decir cuando no hay capacidad

de rotación del poder a otro partido ya que muchas veces se ponen impedimentos

y amenazas. Existen dosconceptos clave que hay que definir y diferenciar: la

“competencia” es la estructura, dicho de otra manera, son las reglas del juego y la

no competitividad sigue las normas de la competencia, pero da muestras escasas

de competitividad o posibilidades reales de ganar. Por otro lado, “competitividad”

es un estado concreto del juego, cabe mencionar que la competencia se considera

“competitiva” siempre y cuando dos o más partidos consigan resultados

aproximados y ganen por escasos márgenes. Habría que decir también que los

sistemas de partidos al interior del régimen de partidos políticos no competitivos

pueden ser: el partido de sistema único y el sistema de partido hegemónico.

- Régimen de partidos competitivos (sistema competitivo).

Una distinción básica de este sistema es el hecho de que existen partidos

“diferentes” que son legítimos, estos compiten por la mayoría absoluta de votos,

es decir que hay competencia partidaria, pues hay más de un partido, por ende

este régimen político es “democrático”. Hay que mencionar, además que algunos

de los sistemas de partidos al interior del régimen de partidos políticos

competitivos pueden ser: el sistema bipartidista y multipartidista.

56
2.6 Ley de partidos políticos 28094

LEY DE PARTIDOS POLÍTICOS-LEY N 28094

Publicada el 01 de noviembre de 2003

DEFINICIONES GENERALES

Artículo 1º.- Definición

Los partidos políticos expresan el pluralismo democrático. Concurren a la formación y

manifestación de la voluntad popular, y a los procesos electorales. Son instituciones

fundamentales para la participación política de la ciudadanía y base del sistema

democrático.

Artículo 2º.- Fines y objetivos de los partidos políticos

Son fines y objetivos de los partidos políticos, según corresponda:

a) Asegurar la vigencia y defensa del sistema democrático.

b) Contribuir a preservar la paz, la libertad y la vigencia de los derechos humanos

consagrados por la legislación peruana y los tratados internacionales a los que se adhiere

el Estado.

57
c) Formular sus idearios, planes y programas que reflejen sus propuestas para el

desarrollo nacional, de acuerdo a su visión de país.

d) Representar la voluntad de los ciudadanos y canalizar la opinión pública.

e) Realizar actividades de educación, formación, capacitación, con el objeto de forjar una

cultura cívica y democrática, que permita formar ciudadanos preparados para asumir

funciones públicas. Inciso modificado por el artículo 2 de la Ley N° 30414, publicada el

17 de enero de 2016.

f) Participar en procesos electorales.

g) Contribuir a la gobernabilidad del país.

h) Realizar actividades de cooperación y proyección social.

i) Las demás que sean compatibles con sus fines y que se encuentren dentro del marco

normativo establecido por la presente ley.

CONSTITUCIÓN Y RECONOCIMIENTO DE LOS PARTIDOS POLÍTICOS

Artículo 3º.- Constitución e inscripción

Los partidos políticos se constituyen por iniciativa y decisión de sus fundadores y, luego

de cumplidos los requisitos establecidos en la presente ley, se inscriben en el Registro de

Organizaciones Políticas.

Artículo 4.- Registro de Organizaciones Políticas

El Registro de Organizaciones Políticas está a cargo del Jurado Nacional de Elecciones,

de acuerdo a ley. Es de carácter público y está abierto permanentemente, excepto en el

58
plazo que corre entre el cierre de las inscripciones de candidatos y un mes después de

cualquier proceso electoral.

En el Registro de Organizaciones Políticas consta el nombre del partido político, la fecha

de su inscripción, los nombres de los fundadores, de sus dirigentes, representantes legales,

apoderados y personeros, la síntesis del Estatuto y el símbolo.

Las inscripciones se realizan por el mérito de copia certificada de la parte pertinente del

acta donde conste el acuerdo válidamente adoptado por el órgano partidario competente.

Dentro de los cinco (5) días posteriores a la fecha de cierre de inscripción de

organizaciones políticas, el Jurado Nacional de Elecciones remitirá a la Oficina Nacional

de Procesos Electorales copia de los resúmenes de las organizaciones políticas inscritas

o en proceso de inscripción.

Las organizaciones políticas pueden presentar fórmulas y listas de candidatos en procesos

de Elecciones Presidenciales, Elecciones Parlamentarias, de Elección de Representantes

ante el Parlamento Andino, Elecciones Regionales o Elecciones Municipales, para lo cual

deben contar con inscripción vigente en el Registro de Organizaciones Políticas del

Jurado Nacional de Elecciones, como máximo, a la fecha de vencimiento del plazo para

la convocatoria al proceso electoral que corresponda. Texto modificado por el Artículo 8º

de la Ley Nº 30673, publicada el 20-10-2017

Artículo 5º.- Requisitos para la inscripción de partidos políticos

59
Los partidos políticos se constituyen por iniciativa y decisión de sus fundadores y, luego

de cumplidos los requisitos establecidos en la ley, se inscriben en el Registro de

Organizaciones Políticas de acuerdo al reglamento correspondiente. La solicitud de

inscripción de un partido político debe estar acompañada de la siguiente documentación:

a) Las actas de constitución de los comités partidarios debidamente identificados, de

acuerdo con lo establecido en la presente norma.

b) La relación de afiliados equivalente, como mínimo, al 0,1% de los ciudadanos

del padrón aprobado para el último proceso electoral nacional.

c) El acta de fundación, conforme a lo establecido en la ley.

d) El estatuto, que debe contener lo previsto en la ley.

e) El reglamento electoral, conforme a lo previsto en la ley.

f) La designación de los representantes, personeros legales y técnicos, titulares y alternos.

g) La designación de un tesorero titular y un suplente del partido político.

Texto modificado por el Artículo 1 de la Ley Nº 30995, publicada el 27-08-2019.

Artículo 9º.- Estatuto del partido

El Estatuto del partido político es de carácter público y debe contener, por lo menos:

a) La denominación y símbolo partidarios

b) La descripción de la estructura organizativa interna.

c) Los requisitos para tomar decisiones internas válidas.

d) Los requisitos de afiliación y desafiliación.

60
e) Los derechos y deberes de los afiliados.

El órgano máximo estará constituido por la Asamblea General del conjunto de sus

miembros, que podrán actuar directamente o por medio de representantes, según lo

disponga el Estatuto, respectivo. Todos los miembros tendrán derecho a elegir y ser

elegidos para los cargos del partido político, conforme lo establezca el Estatuto. No

pueden establecerse limitaciones adicionales a las previstas en la Constitución Política y

en la ley.

f) Las normas de disciplina, así como las sanciones y los recursos de impugnación contra

éstas, que deberán ser vistos cuando menos en dos instancias. Los procedimientos

disciplinarios observarán las reglas del debido proceso.

g) El régimen patrimonial y financiero.

h) La regulación de la designación de los representantes legales y del tesorero.

i) Las disposiciones para la disolución del partido.

Artículo 10º.- Tacha contra la solicitud de inscripción de un partido político

Recibida la solicitud de inscripción, el Registro de Organizaciones Políticas verifica el

cumplimiento de los requisitos formales y la publica en su página electrónica. Además,

un resumen de la solicitud se publica en el diario oficial dentro de los cinco días hábiles

siguientes a su presentación, quedando a disposición de los ciudadanos toda la

información en las oficinas correspondientes.

El resumen al que se refiere el párrafo anterior deberá contener: a) La denominación y

símbolo del partido; b) El nombre de sus fundadores, dirigentes y apoderados; c) El

nombre de sus personeros; d) El nombre de sus representantes legales.

61
Cualquier persona natural o jurídica puede formular tacha contra la inscripción de un

partido político. Dicha tacha sólo puede estar fundamentada en el incumplimiento de lo

señalado en la presente ley. La tacha debe presentarse ante el Registro de Organizaciones

Políticas dentro de los cinco días hábiles posteriores a la publicación efectuada en el

diario oficial, a que se refiere el párrafo anterior. El Registro de Organizaciones Políticas

resuelve la tacha dentro de los cinco días hábiles después de formulada, con citación de

quien la promovió y del personero de los peticionarios cuya inscripción es objeto de la

tacha. La resolución que resuelve la tacha puede ser apelada ante el Jurado Nacional de

Elecciones, en un plazo de cinco días hábiles posteriores a su notificación. El Jurado

Nacional de Elecciones, en sesión pública, sustancia y resuelve la apelación dentro de los

cinco días hábiles después de interpuesta con citación de las partes. Contra lo resuelto por

el Jurado Nacional de Elecciones no procede recurso alguno. Verificados los requisitos

que establece la presente ley y vencido el término para interponer tachas, sin que éstas se

hayan formulado, o ejecutoriadas las resoluciones recaídas en las tachas planteadas, el

Registro de Organizaciones Políticas efectúa el asiento de inscripción del partido político,

el mismo que será publicado de forma gratuita y por una sola vez en el diario oficial,

dentro de los cinco días hábiles posteriores a la inscripción. En el mismo plazo, se remitirá

a la Oficina Nacional de Procesos Electorales el listado de las organizaciones políticas

con inscripción definitiva.Asimismo, el Jurado Nacional de Elecciones publica en su

página electrónica el Estatuto del partido político inscrito.

Artículo 13º.- Causales de la cancelación de la inscripción de un partido político

La inscripción de un partido político se cancela en los siguientes casos:

62
a) Si, al concluirse el último proceso de elección general, no se hubiera alcanzado al

menos cinco (5) representantes al Congreso en más de una circunscripción y, al menos,

cinco por ciento (5%) de los votos válidos a nivel nacional en la elección del Congreso.

b) En caso de haber participado en alianza, si esta no hubiese alcanzado al menos seis

por ciento (6%) de los votos válidos. Dicho porcentaje se eleva en uno por ciento (1%)

por cada partido político adicional.

c) A solicitud del órgano autorizado por su estatuto, previo acuerdo de disolución. Para

tal efecto, se acompañan los documentos respectivos legalizados.

d) Por su fusión con otra organización política, según decisión interna adoptada conforme

a ley y a su estatuto. Para tal efecto, se acompañan los documentos legalizados donde

conste el acuerdo.

e) Cuando no participe en elecciones de alcance nacional o retire todas sus listas de

candidatos del proceso electoral correspondiente.

f) Cuando el partido político no participe en las elecciones regionales en, por lo menos,

tres quintos (3/5) de las regiones; y en las elecciones municipales, en por lo menos la

mitad (1/2) de las provincias y un tercio (1/3) de los distritos a nivel nacional.

g) Si se participa en alianza, por no haber conseguido cuando menos un representante al

Congreso.

Texto modificado por el artículo 1 de la Ley N° 30995, publicada el 27 de agosto de 2019.

Artículo 15. Alianzas entre organizaciones políticas

63
Las organizaciones políticas inscritas pueden hacer alianzas entre ellas, bajo una misma

denominación y símbolo común, para poder participar en cualquier tipo de elección

popular. La alianza debe inscribirse en el Registro de Organizaciones Políticas. Para su

inscripción, la alianza presenta el acta de constitución correspondiente y su reglamento

electoral. El acta debe contener, además, el proceso electoral en el que se participa; los

órganos de gobierno y sus miembros; la denominación, el símbolo y domicilio legal; la

declaración expresa de objetivos y los acuerdos que regulan el proceso de democracia

interna conforme a ley; la definición de los órganos o autoridades que toman las

decisiones de índole económico-financiera y su relación con la tesorería de la alianza; la

designación de los personeros legales y técnicos de la alianza, la designación del tesorero

y de los tesoreros descentralizados que tienen a su cargo la ejecución de las decisiones

económico-financieras, la forma de distribución del financiamiento público directo que

le corresponda a la alianza; y, en caso de disolución, a los partidos que la conforman.

Para participar en el proceso electoral, la alianza debe solicitar y lograr su inscripción en

el Registro de Organizaciones Políticas conforme al calendario electoral establecido para

tales fines. Las organizaciones políticas que integren una alianza no pueden presentar, en

un mismo proceso electoral, listas de candidatos distintas de las presentadas por la

alianza.

Texto modificado por el artículo 1 de la Ley N° 30995, publicada el 27 de agosto de 2019.

DEMOCRACIA INTERNA

Artículo 19°.- Elecciones internas

64
La elección de las autoridades y de los candidatos de las organizaciones políticas y

alianzas electorales se rigen por las normas sobre elecciones internas establecidas en la

ley, el estatuto y el reglamento electoral de la agrupación política. Las normas electorales

internas de las organizaciones políticas y de las alianzas electorales entran en vigencia a

partir de su inscripción en el Registro de Organizaciones Políticas. No pueden ser

modificadas, desde los treinta (30) días anteriores a la fecha límite para la convocatoria a

elecciones internas hasta su conclusión. Texto modificado por el artículo 1 de la Ley N°

30998, publicada el 27 de agosto de 2019.

Art 23 Candidaturas sujetas a elecciones primarias son para los siguientes cargos:

Presidente de la República, Representantes al Congreso de la República, Gobernadores

Regionales, alcaldes provinciales y distritales. Los cuales están obligados a entregar al

partido, alianza, movimiento u organización política local, al momento de presentar su

candidatura a elección interna o de aceptar por escrito la invitación a postular a los cargos

referidos, una Declaración Jurada de Hoja de Vida que es publicada en la página web del

respectivo partido, alianza, movimiento u organización política local.

Art 23.3 La Declaración Jurada de Hoja de Vida del candidato se efectúa en el formato

que para tal efecto determina el Jurado nacional de Elecciones, el que debe contener:

1. Lugar y fecha de nacimiento.

2. Experiencia de trabajo en oficios, ocupaciones o profesiones, que hubiese tenido en el

sector público y en el privado.

3. Estudios realizados, incluyendo títulos y grados si los tuviere.

65
4. Trayectoria de dirigente de cualquier naturaleza, en cualquier base o nivel,

consignando los cargos partidarios, de elección popular, por nombramiento o de otra

modalidad, que hubiese tenido.

5. Relación de sentencias condenatorias firmes impuestas al candidato por delitos

dolosos, la que incluye las sentencias con reserva de fallo condenatorio.

6. Relación de sentencias que declaren fundadas las demandas interpuestas contra los

candidatos por incumplimiento de obligaciones familiares o alimentarias, contractuales,

laborales o por incurrir en violencia familiar, que hubieran quedado firmes.

7. Mención de las renuncias efectuadas a otros partidos, movimientos de alcance regional

o departamental u organizaciones políticas de alcance provincial y distrital, de ser el caso.

8. Declaración de bienes y rentas, de acuerdo a las disposiciones previstas para los

funcionarios públicos.

La omisión de la información prevista en los numerales 5, 6 y 8 del párrafo 23.3 o la

incorporación de información falsa dan lugar al retiro de dicho candidato por el Jurado

Nacional de Elecciones, hasta treinta (30) días calendario antes del día de la elección. El

reemplazo del candidato excluido sólo procede hasta antes del vencimiento del plazo para

la inscripción de la lista de candidatos

En caso de que se haya excluido al candidato o de que haya transcurrido el plazo para

excluirlo, y habiéndose verificado la omisión o falsedad de la información prevista en el

párrafo 23.3, el Jurado Nacional de Elecciones remite los actuados al Ministerio Público.

Artículo 24º.- Modalidad de las elecciones primarias

66
Las elecciones primarias se realizan de manera simultánea mediante voto universal, libre,

obligatorio, igual, directo y secreto de todos los ciudadanos, estén o no afiliados a una

organización política. Para continuar con su participación en el proceso electoral, el

partido político debe obtener al menos el 1,5% de los votos válidamente emitidos en las

elecciones primarias. Para el caso del movimiento regional, debe obtener al menos el 4%

de los votos válidamente emitidos en las elecciones primarias de su circunscripción. De

existir alianza electoral, los porcentajes referidos se incrementan en 0,5% por cada

organización política adicional.

Artículo 24-A.- Candidatos en elecciones primarias

Solo el afiliado que tenga como mínimo un año de afiliación a la fecha límite de la

convocatoria a elecciones generales puede postular para ser candidato en una elección

primaria. El incumplimiento de esta exigencia invalida la candidatura individual. La

organización política puede establecer mayores requisitos a los señalados en la presente

disposición. Las candidaturas se presentan e inscriben de forma individual ante el jurado

electoral especial correspondiente.

Artículo 24-B.- Candidatos designados Hasta un 20% de la totalidad de candidatos al

Congreso puede ser designado entre sus afiliados o no afiliados por el órgano de la

organización política que disponga el estatuto. En la lista de candidatos, la ubicación de

los designados es establecida por el órgano competente de la organización política

respetando los principios de democracia interna. No pueden inscribirse como candidatos

en otros partidos políticos o movimientos regionales los afiliados a un partido político

inscrito, a menos que hubiesen renunciado con un (1) año de anticipación a la fecha del

cierre de las inscripciones del proceso electoral que corresponda o que cuenten con

autorización expresa de la organización política a la que pertenecen, la cual debe

67
adjuntarse a la solicitud de inscripción; y que esta no presente candidato en la respectiva

circunscripción. No se puede postular por más de una lista de candidatos

FINANCIAMIENTO DE LOS PARTIDOS POLÍTICOS

Artículo 28.- Financiamiento de los partidos políticos

Los partidos políticos reciben financiamiento público y privado, de acuerdo a la presente

ley.

Artículo 29º.- Financiamiento público directo solo los partidos políticos y alianzas

electorales que obtienen representación en el Congreso reciben del Estado financiamiento

público directo. Con tal fin, el Estado destinará el equivalente al 0.1% de la Unidad

Impositiva Tributaria por cada voto emitido para elegir representantes al Congreso.

Dichos fondos se otorgan con cargo al Presupuesto General de la República y son

recibidos por los partidos políticos para ser utilizados, durante el quinquenio posterior a

la mencionada elección, conforme a las siguientes reglas:

-Hasta el 50% del financiamiento público directo recibido para ser utilizado en

actividades de formación, capacitación, investigación y difusión de estas.

- Hasta el 50% del financiamiento público directo recibido para ser utilizado en gastos de

funcionamiento ordinario, así como a la adquisición de inmuebles, que son destinados

para el funcionamiento de los comités partidarios, y mobiliarios necesarios para atender

actividades consustanciales al objeto de la organización política.

La transferencia de los fondos a cada partido político se realiza a razón de un quinto por

año, distribuyéndose un cuarenta por ciento en forma igualitaria entre todos los partidos

políticos con representación en el Congreso y un sesenta por ciento en forma proporcional

68
a los votos obtenidos por cada partido político en la elección de representantes al

Congreso

La Oficina Nacional de Procesos Electorales se encarga de la fiscalización del

cumplimiento de lo previsto en el presente artículo

Artículo 30. Financiamiento privado

Las organizaciones políticas pueden recibir aportes o ingresos procedentes de la

financiación privada, mediante:

a) Las cuotas y contribuciones en efectivo o en especie de cada aportante como persona

natural o persona jurídica extranjera sin fines de lucro, incluido el uso de inmuebles, a

título gratuito, que no superen las ciento veinte (120) unidades impositivas tributarias al

año, las mismas que deben constar en el recibo de aporte correspondiente.

b) Los ingresos obtenidos por la realización de actividades proselitistas, provenientes de

aportes en efectivo debidamente bancarizados o de contribuciones que permitan

identificar a los aportantes y el monto del aporte con los comprobantes correspondientes,

hasta cien (100) unidades impositivas tributarias por actividad. La organización política

debe informar de las actividades que realicen sus órganos ejecutivos a la Oficina Nacional

de Procesos Electorales (ONPE) en un plazo no menor de siete días calendario previos a

la realización del evento para efectuar la supervisión respectiva. La organización política

identifica a los aportantes de las actividades proselitistas y remite la relación a la Oficina

Nacional de Procesos Electorales (ONPE).

c) Los rendimientos producto de su propio patrimonio y de los bienes que tienen en

posesión, así como los ingresos por los servicios que brinda la organización política a la

ciudadanía y por los cuales cobra una contraprestación.

69
d) Los créditos financieros que concierten.

e) Los legados.

Todo aporte privado en dinero, que supere el veinticinco por ciento (25%) de una unidad

impositiva tributaria (UIT), se realiza a través de entidades del sistema financiero. Los

aportes privados en especie y los que no superen el veinticinco por ciento (25%) de una

unidad impositiva tributaria (UIT) se efectúan mediante recibo de aportación, que

contiene la valorización del aporte y las firmas del aportante y el tesorero o tesorero

descentralizado de la organización política o el responsable de campaña, según

corresponda. La entidad bancaria debe identificar adecuadamente a todo aquel que

efectúe depósitos, aportes, retiros y transferencias de la cuenta de una organización

política. Los ingresos de cualquiera de las fuentes establecidas en el presente artículo se

registran en los libros contables de la organización política. Artículo modificado por el

Artículo 1 de la Ley N° 31046, publicada el 26 de septiembre de 2020.

Art.36 Infracciones

Constituyen infracciones los incumplimientos por parte de las organizaciones políticas

de las disposiciones de la presente ley. Las infracciones pueden ser leves, graves y muy

graves.

A) Constituyen infracciones leves: a) La recepción de aportaciones recibidas o los gastos

efectuados que se realicen a través de una persona de la organización política distinta al

tesorero nacional o tesorero descentralizado; b)Cuando no se informe, hasta 14 días

calendario después de abiertas, sobre las cuentas abiertas y activas en el sistema

financiero; c) Cuando no se informe ante la Oficina Nacional de Procesos Electorales los

datos del tesorero nacional y los tesoreros descentralizados, hasta 14 días calendario

70
después de su designación e inscripción definitiva en el Registro de Organizaciones

Políticas del Jurado Nacional de Elecciones;d) Cuando no se presenten los informes sobre

las aportaciones e ingresos recibidos, así como de los gastos efectuados durante la

campaña electoral, en el plazo señalado en la presente ley; e) Cuando las organizaciones

políticas que integran una alianza electoral no informen a la Oficina Nacional de Procesos

Electorales, en el plazo previsto, sobre su aporte inicial a la alianza electoral; f) Cuando

las organizaciones políticas que integran una alianza electoral no informen a la Oficina

Nacional de Procesos Electorales, en el plazo previsto, sobre su aporte inicial a la alianza

electoral; g)Cuando los aportes en especie, realizados a la organización política, que no

superen cinco (5) Unidades Impositivas Tributarias no consten en el recibo de aportación

correspondiente; h)El incumplimiento de lo dispuesto en el artículo 40 de la presente ley.

B) Constituyen infracciones graves:

a) Cuando las organizaciones políticas no presentan los informes sobre las aportaciones

e ingresos recibidos, así como sobre los gastos efectuados durante la campaña electoral,

dentro de los treinta días posteriores al vencimiento del plazo señalado en la presente ley;

b)Cuando las organizaciones políticas reciban aportes mayores a los permitidos por la

presente ley; c)Cuando las organizaciones políticas reciban aportes mayores a los

permitidos por la presente ley; d) Cuando los incumplimientos que generaron sanciones

por infracciones leves no hayan sido subsanados en el plazo otorgado por la Oficina

Nacional de Procesos Electorales; e) Cuando no se expidan los recibos de aportaciones

correspondientes, en el caso previsto en el literal a) del artículo 30 de la presente ley; f)

Cuando los aportes en especie que superen cinco (5) Unidades Impositivas Tributarias

realizados a la organización política no consten en documento con firmas, que permita

identificar al aportante, la fecha de entrega del bien, derecho o servicio, o su precio o

71
valor de mercado, de ser el caso; g) Cuando las organizaciones políticas reciban aportes

de fuente prohibida, conforme a lo dispuesto en el artículo 31 de la presente ley

C) Constituyen infracciones muy graves: a) Cuando hasta el inicio del procedimiento

sancionador correspondiente, las organizaciones políticas no presenten los informes

sobre las aportaciones e ingresos recibidos, así como de los gastos efectuados durante la

campaña electoral o la información financiera anual; b)Cuando no se haya cumplido con

subsanar la infracción grave en el plazo otorgado por la Oficina Nacional de Procesos

Electorales.

36. a Sanciones

EL QUE IMPONE ES LA (GSFP) : a) Por la comisión de infracciones leves, una multa

no menor de diez (10) ni mayor de treinta (30) Unidades Impositivas Tributarias (UIT;

b) Por la comisión de infracciones graves, una multa no menor de treinta y uno (31) ni

mayor de sesenta (60) Unidades Impositivas Tributarias (UIT). En el caso de la infracción

prevista en el artículo 36, inciso b, numeral 2, la multa es del monto equivalente al íntegro

del aporte recibido indebidamente. c)Por la comisión de infracciones muy graves, una

multa no menor de sesenta y uno (61) ni mayor de doscientos cincuenta (250) Unidades

Impositivas Tributarias (UIT) y la pérdida del financiamiento público directo.En caso de

disolución de la alianza, la sanción se extiende a las organizaciones políticas que la

integran.

Las resoluciones de sanción pueden ser impugnadas ante el Jurado Nacional de

Elecciones en el plazo de quince (15) días hábiles contados desde el día siguiente de su

notificación. Contra lo resuelto por el Jurado Nacional de Elecciones no procede recurso

alguno.Las resoluciones que emita la Oficina Nacional de Procesos Electorales, en

aplicación de la facultad sancionadora prevista en el presente artículo, deben estar

72
debidamente motivadas, identificar la conducta infractora y ser notificadas al tesorero,

tesorero descentralizado o responsable de campaña, según corresponda, y al personero de

la organización política. Asimismo, deben otorgar plazos razonables para la

regularización de la infracción cometida, de ser el caso

36.B Sanciones a candidatos

Los candidatos que no informen a la Gerencia de Supervisión de Fondos Partidarios de

la Oficina Nacional de Procesos Electorales, de los gastos e ingresos efectuados durante

su campaña son sancionados con una multa no menor de diez (10) ni mayor de treinta

(30) Unidades Impositivas Tributarias (UIT). En caso de que el candidato reciba aportes

de fuente prohibida señalados en el artículo 31 de la presente ley, la multa es del monto

equivalente al íntegro del aporte recibido indebidamente.

ANÁLISIS

Como ya se ha venido indicando en la presente investigación, los partidos políticos tienen

serios problemas de institucionalización, existen bastantes partidos políticos inscritos

ante el Registro de Organizaciones Políticas (ROP) del Jurado Nacional de Elecciones (

JNE) y aunque esta situación parezca aparentemente favorable, no lo es, pues muchos de

esos partidos y movimientos no poseen una verdadera consistencia y han mantenido su

registro vigente aunque no cuenten con apoyo electoral, de forma que han subsistido a

través de diversos mecanismos, como camuflarse a través de alianzas electorales,

absteniéndose de participar en procesos electorales o sacando provecho de las barreras

electorales muy bajas, tal como ocurre en los ámbitos regionales, lo que nos hace

reflexionar sobre su percepción ya que muchos de ellos funcionan como “franquicias

electorales”, y pueden provocar la mercantilización de la posibilidad de participar en

procesos electorales y actos vinculados a actividades ilícitas.

73
Satisfacción de la población con las instituciones públicas Según Latinobarómetro (2016)

La confianza en las instituciones registra caídas respecto a 2016 en todos los organismos

medidos, con excepción de las fuerzas armadas y la policía, que tuvieron leves alzas.

Entre 2015 y 2016 la confianza en la iglesia cayó del 69% al 66%; en la institución

electoral cayó del 44% al 32%; en el gobierno pasó del 33% al 28%; en el poder judicial

del 30% al 26%; en el congreso del 27% al 25% y en los partidos políticos cayó 3 puntos

porcentuales, del 20% al 17%. Por otro lado, la policía pasó del 36% al 38% de confianza,

en un aumento que no es estadísticamente significativo, y las fuerzas armadas subieron

en 3 puntos porcentuales, del 66% al 69%. Esta baja confianza en las instituciones es

congruente con la caída de otros indicadores en 2016, dando cuenta de un punto

especialmente negativo para la región en los últimos años.

Es esencial que haya continuas mejoras en la reforma de las leyes vigentes con el fin de

poder establecer partidos políticos fuertes y representativos, dentro de una dinámica

pluralista y moderada.

74
CAPÍTULO III METODOLOGÍA Y DESARROLLO.

3.1 Diseño de investigación

Teniendo en cuenta Hernández Sampieri (2014) la presente investigación es de enfoque

cuantitativo, ya que se realizó un proceso de recolección de datos que sirvieron de insumo

para medir las variables en un determinado contexto y probar las hipótesis planteadas.

3.1.2 Alcance de la presente investigación

Tomando en cuenta a Hernández Sampieri (2014) es Correlacional-explicativa.

Correlacional, ya que este estudio tuvo la finalidad de conocer la relación o grado de

asociación que existe entre las variables en una muestra o contexto en particular.

Explicativa, porque damos a conocer los hechos o fenómenos críticos.

3.2. Población

"Una población es un conjunto de todos los elementos que estamos estudiando, acerca de

los cuales intentamos sacar conclusiones". Levin & Rubin (1996) La población con la

que se realizó el presente trabajo de investigación fue mediante una encuesta que se

realizó, de las cuales fueron 60 personas las que respondieron. La encuesta realizada fue

del tema de partidos políticos.

3.3. Técnicas e instrumentos

La técnica de recolección de datos que se utilizó en la presente investigación fue una

encuesta.

Según García (1993) una encuesta es: “Una investigación realizada sobre una muestra de

sujetos representativa de un colectivo más amplio, que se lleva a cabo en el contexto de

75
la vida cotidiana, utilizando procedimientos estandarizados de interrogación con el fin de

obtener mediciones cuantitativas de una gran variedad de característica objetivas y

subjetivas de la población”.

El instrumento empleado fue un cuestionario diseñado con 7 preguntas cerradas, con el

objetivo de conocer y evaluar las percepciones de ciudadanos con edades que abarcan

desde los 17- 30 años y 30-70 años con respecto a la “Reforma integral de los partidos

políticos” para tal fin se utilizó el consentimiento informado y la difusión por redes

sociales, lo cual facilitó la obtención de datos, con la finalidad de responder a los

objetivos propuestos.

76
CAPÍTULO IV RESPUESTAS Y CONCLUSIONES

4.1. CONCLUSIONES

En el presente trabajo de investigación, nos hemos podido contextualizar desde un

principio en sí sobre lo que significaron los partidos en la realidad socio histórica, además

de ello percibir su progreso e importancia en la historia de la República como

representantes de la población. Lamentablemente tuvo que llevar una pesada carga de

negatividad no correspondida en su origen, pero que a lo largo de los años se podría decir

que los propios partidos políticos generaron con mérito propio desconfianza y poca

solidez ante la sociedad a través de actos dañinos y perturbadores como la corrupción y

todo lo relacionado a lo ilícito. Nuestro país requiere de organizaciones políticas más

constantes, fuertes y representativas. Una propuesta de reforma integral de Ley de los

Partidos Políticos, considerados que definitivamente contribuirá al fortalecimiento de la

gobernabilidad, estabilidad política, económica y democrática del país, con los fines de

elevar los niveles de institucionalización, asimismo promoviendo la participación e

inclusión de los artículos de la Ley que regula el funcionamiento de los partidos políticos

a fin de generar mayores niveles de transparencia, probidad y responsabilidad, evitando

el fraccionamiento y la debilidad organizativa, superando los errores y falencias en los

operadores políticos de nuestro país, para avanzar hacia un sistema democrático más

efectivo, el sistema peruano requiere el aumento progresivo del grado de

institucionalización de los partidos existentes. De los resultados de la encuesta se puede

concluir que los ciudadanos más allá de las leyes escritas quieren una verdadera práctica

de las mismas, de manera que el Estado se ocupe de su cumplimiento y no quede todo en

un mero documento.

77
4.2. RESPUESTAS

Contrastación de hipótesis

Ha: La propuesta de reforma de la Ley de partidos políticos N.º 28094 se relaciona con

la formalización, permanencia y fiscalización de los mismos, y permitirá una mejor

gobernabilidad.

Ho: La propuesta de reforma de la Ley de partidos políticos N.º 28094 no se relaciona

con la formalización, permanencia y fiscalización de los mismos, y permitirá una mejor

gobernabilidad.

Podemos resaltar la relación existente entre las variables determinadas en el estudio: El

diseño de una propuesta de reforma integral de la Ley de partidos políticos y

formalización, permanencia y fiscalización de los partidos políticos queda comprobada,

pues nos permitió comprender la realidad problemática, debido a que los ciudadanos

encuestados rechazan todo tipo de actos que contravienen el buen funcionamiento y

representatividad democrática de los partidos políticas y consideran pertinente una

reforma integral de la Ley de partidos políticos, pues es evidente que estas organizaciones

políticas no tienen la talla necesaria para gestionar una sociedad bicentenaria que espera

de sus organizaciones políticas tenga más consensos y menos conflictos.

RESULTADOS

De acuerdo al análisis de la información recolectada se afirma, que en el sistema político

de nuestro país existe una baja institucionalización, escasa transparencia, así mismo hay

una baja confianza por parte de los ciudadanos pues los consideran oportunistas que

tienen únicamente por objetivo alcanzar el poder y obtener beneficios personales, y son

78
incapaces de atender a las necesidades de la población y contribuir con el desarrollo en

todos los ámbitos

Por otro lado consideran necesario una reforma integral de La ley de partidos políticos,

de forma que se analicen, evalúen y desarrollen nuevos planteamientos teóricos, así como

incorporar en la legislación articulados concretos referentes a la formalización,

permanencia y fiscalización de los partidos políticos para una mejor gobernabilidad y

transparencia.

79
REFERENCIAS BIBLIOGRÁFICAS

Agustín H. (2004). El sistema de partidos políticos en el Perú y la nueva ley


Miró Quesada Rada, F. (2001). Manual de Ciencia Política (2da ed.). Libros y publicaciones.

Miró Quesada Rada, F. (2006). Introducción a la Ciencia Política (2da ed.). Grjiley.

Rafael R. y Carlos M. (2007). La política por dentro. Cambios y continuidades en las


organizaciones políticas de los países andinos.

Hume, D. (1956). Sobre los partidos políticos en general.

Madison. (1788). El Federalista.

Marx, & Engels. (1965). El manifiesto comunista.

Quesada Rada, F. M. (1994). Introducción a la ciencia política (2013th ed., Vol. 1).

Rousseau, J. J. (1762). El contrato social. Marc-Michel Rey.

https://books.google.com.pe/books/about/El_Contrato_social.html?id=kXYcb5uUK9Q

C&printsec=frontcover&source=kp_read_button&hl=es&redir_esc=y#v=onepage&q&

f=false

Sabine, G. (n.d.). Historia de la teoría política.

Sartori, G. (1976). Partidos y sistemas de partidos.

https://ezequielsingman.files.wordpress.com/2017/03/sartori-partidos-y-sistemas-de-

partidos.pdf

Tanaka, Martín (1998). Los espejismos de la democracia. El colapso del sistema de


partidos en el Perú, 1980-1995, en perspectiva comparada, Lima: IEP.

Tanaka, Martín (2002). Los partidos políticos en el Fujimorismo y los retos de su


reconstrucción. En El asedio a la política, Marcelo Cavarozzi y Juan Manuel Abal
Medina (editores), Rosario: Homo Sapiens, pp. 317-347

Carrión, J. y P. Zárate. Cultura Política de la Democracia en el Perú. Lima: Instituto de


Estudios Peruanos. 2010.

J, Torres, R. Grompone y Barrenechea, Rodrigo. 2008. Las bases del gobierno local en
el Perú. Territorio, autonomía y representación en municipalidades rurales. Lima:

80
Instituto de Estudios Peruanos.TUESTA SOLDEVILLA, F. (2003). Desafíos de la
Democracia Contemporánea. ELECCIONES , 12. TUESTA SOLDEVILLA, F. (s.f.).
Regulación Jurídica de los Partidos Políticos en el Perú. Lima.

Sampieri, R. H. (2018). Metodología de la investigación: las rutas cuantitativa,


cualitativa y mixta. McGraw Hill México.

García Ferrando, M. (1993). La encuesta. En M. García Ferrando, F. Alvira, & J.

Ibáñez, El análisis de la realidad social. Métodos y técnicas de investigación. Alianza

Universidad.

Weber, M. (1964). Economía y sociedad.

Weber, M. (1972). Ensayo de Sociología contemporánea.

81
ANEXOS

Link del formulario:


https://docs.google.com/forms/d/1w93R6Q1F6zNgN8UiJEUw5n7LSdHb2VwUI6KzJMNpCus
/edit

Los resultados de la encuesta fueron:

Pregunta 1. Considera que, cuando los partidos políticos, ocupan un cargo público
¿se preocupan por el bienestar de la población peruana?

Tabla 1
Preocupación del bienestar de la población, por parte de los partidos políticos en una
ocupación pública

Preocupación de los partidos políticos N° de Personas Porcentaje

Muy en desacuerdo 21 35%

En desacuerdo 18 30%

Indeciso 13 21.7%

Muy de acuerdo 8 13.3%

Total 60 100%

Fuente: Elaboración Propia.

Figura 1

Preocupación del bienestar de la población, por parte de los partidos políticos en una

82
ocupación pública

Fuente: Elaboración propia.

Pregunta 2. ¿La clase política realiza un proceso efectivo del gasto público con el
fin de satisfacer las necesidades de la población?
Tabla 2
Adecuada distribución del gasto público, teniendo el fin de satisfacer las necesidades
de la población

Distribución efectivo del gasto público N° de Personas Porcentaje

No 49 83.1%

Sí 10 16.9%

Total 60 100%

Figura 2
Adecuada distribución del gasto público, teniendo el fin de satisfacer las necesidades
de la oblación

83
Fuente: Elaboración propia

Pregunta 3. ¿Considera que los partidos políticos tienen la capacidad de resolver


los problemas sociales en el país?
Tabla 3
Capacidad idónea de los partidos políticos al gestionar problemas sociales

Capacidad de los partidos políticos ante N° de Personas Porcentaje


problemas sociales del país

No 26 43.3%

Tal vez 24 40%

Sí 10 16.7%

Total 60 100%

Fuente: Elaboración propia

Figura 3
Capacidad idónea de los partidos políticos al gestionar problemas sociales

84
Fuente: Elaboración propia.

Pregunta 4. ¿La actual Ley de los partidos políticos se relaciona con la baja
institucionalidad de los partidos políticos a nivel nacional y local?
Tabla 4
La ineficiencia de la institucionalidad se debe a la relación que tiene con la ley de los
partidos políticos

Baja institucionalidad con relación a la N° de Personas Porcentaje


ley de los partidos políticos

Sí 44 81.5%

No 10 18.5%

Total 60 100%

Fuente: Elaboración propia.

Figura 4
La ineficiencia de la institucionalidad se debe a la relación que tiene con la ley de los

85
partidos políticos

Fuente: Elaboración propia.

Pregunta 5. ¿Es pertinente que se efectúe una reforma integral de los partidos
políticos en el Perú?
Tabla 5
Necesidad de una reforma integral de los partidos políticos en el Perú

Necesidad de una reforma integral de los N° de Personas Porcentaje


partidos políticos

Totalmente 16 26.7%

Parcialmente 20 33.3%

No es necesario una reforma 1 1.7%

Lo creo pertinente 23 38.3%

86
Total 60 100%

Fuente: Elaboración Propia.

Figura 5

Necesidad de una reforma integral de los partidos políticos

Fuente: Elaboración propia.

Pregunta 6. ¿Qué propuesta de reforma de la Ley de Partidos Políticos considera


más pertinente?

Tabla 6
Propuestas de reforma de la Ley de Partidos Políticos más pertinentes

Propuestas de reforma de la Ley de N° de Personas Porcentaje


Partidos Políticos más pertinentes

Fortalecimiento de los partidos inscritos 47 78.3%


con base organizativa

Establecimiento de Democracia interna 40 66.7%


con garantías

87
Incentivar a los partidos políticos a 40 66.7%
institucionalizarse

Mejorar las relaciones internas como el 39 65%


caso de la relación de cuentas

Mejorar el financiamiento de los partidos 40 66.7%


políticos

Figura 6

Propuestas de reforma de la Ley de Partidos Políticos más pertinentes

Fuente: Elaboración propia.

Pregunta 7. ¿Considera que a través de la reforma de la Ley de partidos políticos

se logrará una mejor transparencia y gobernabilidad?

Tabla 7

Transparencia y gobernabilidad ante la reforma de la Ley de partidos políticos

Transparencia y gobernabilidad ante la N° de Personas Porcentaje


reforma de la Ley de partidos políticos

No 3 5%

88
Sí 57 95%

Total 60 100%

Fuente: Elaboración Propia.

Figura 7
Transparencia y gobernabilidad ante la reforma de la Ley de partidos políticos

Fuente: Elaboración propia

89

También podría gustarte