Está en la página 1de 14

Voces: DESPIDO ~ RESPONSABILIDAD DE LA SOCIEDAD ~ RESPONSABILIDAD DEL SOCIO ~

RESPONSABILIDAD SOLIDARIA ~ SOCIEDAD COMERCIAL ~ TEORIA DE LA DESESTIMACION DE LA


PERSONALIDAD SOCIETARIA ~ TRABAJO NO REGISTRADO

Tribunal: Suprema Corte de Justicia de la Provincia de Mendoza, sala II(SCMendoza)(SalaII)

Fecha: 30/08/2004

Partes: Torres, N. c. Luz Verde S.R.L. y otros

Publicado en: LLGran Cuyo2005 (mayo), 426

Cita Online: AR/JUR/5046/2004

Hechos:

La actora dedujo demanda por despido contra una sociedad y sus socios, manifestando que había trabajado en
relación de dependencia para ellos en jornada completa en calidad de mucama. Los socios se opusieron a la misma
mediante excepción de falta de acción por no ser ellos quienes la contrataron sino la sociedad. La Cámara hizo lugar
a la demanda en todas sus partes. Contra dicha decisión se interpuso recurso de inconstitucionalidad y casación. La
Suprema Corte de Justicia de Mendoza hizo lugar a los recursos interpuestos.

Sumarios:

1. Resulta procedente el recurso interpuesto contra la sentencia que hizo lugar a la demanda por despido y condenó
en forma solidaria e ilimitada a la sociedad y sus socios pues, aún cuando existen diversas irregularidades en cuanto
a la registración de la actora, ellas no son suficientes para tener por acreditado que la sociedad haya sido utilizada
con el deliberado propósito de violar la ley, el orden público, la buena fe o frustrar los derechos de terceros.

2. La extensión de la responsabilidad a los socios por aplicación del tercer párrafo del art. 54 de la ley 19.550 (t.o.
1984) (Adla, XLIV-B, 1319), debe ser restringida al supuesto verdaderamente excepcional, de creación y utilización
del ente societario con el propósito de violar la ley, el orden público, la buena fe o los derechos de terceros, debiendo
además, interpretarse dichas situaciones en forma restrictiva, esto es, a favor de la no extensión de responsabilidad.

Texto Completo: Mendoza, agosto 30 de 2004.

1ª ¿Son procedentes los recursos de inconstitucionalidad y casación interpuestos? 2ª En su caso, qué solución
corresponde? 3ª Pronunciamiento sobre costas.

1ª cuestión. - El doctor Llorente dijo:

A fs. 22/31 vta., Carlos Roberto Esteves, por su propio derecho, interpone recursos de inconstitucionalidad y casación
contra la resolución dictada a fs. 346/354 vta., y su resolución aclaratoria de fs. 357, por la Cámara Primera del
Trabajo.

A fs. 37 se admiten formalmente los recursos deducidos y se ordena correr traslado por el término de ley.

I. Agravios:

1
a) El recurso de inconstitucionalidad:

El recurrente alega que la resolución de la Cámara Laboral es arbitraria y violatoria del derecho de propiedad y del
derecho de defensa, toda vez que en el tratamiento de los hechos se ha apartado de las circunstancias de la causa,
haciendo elucubraciones abstractas con citas jurisprudenciales y doctrinarias.

Sostiene que la finalidad perseguida es que se anule el pronunciamiento del inferior en cuanto se lo condena al pago
por despido (indemnización por antigüedad, preaviso, aguinaldo, SAC, etc.), aplicando el art. 54 de la ley de
sociedades extendiendo la responsabilidad a los socios y/o administradores de la sociedad Luz Verde SRL, sobre la
base de una arbitraria apreciación de las pruebas.

Afirma que el a quo tomó como verdad absoluta los dichos del perito contador, e ignoró todas las otras pruebas
aportadas a la causa, incluso el reconocimiento que hace la actora de que la sociedad Luz Verde SRL era propietaria
del fondo de comercio Residencial Venecia (fs. 76 vta.), y el informe de la Municipalidad de la Capital (fs. 247/250).

Aclara que el art. 54 de la ley de sociedades regula y reglamenta el abuso de la personalidad jurídica, por lo que se
refiere a un instituto de excepción, que debe interpretarse de manera restrictiva, toda vez que el pago parcialmente
clandestino o en negro, son violaciones específicas sancionadas por la ley 24.013.

Agrega que no existe constancia ni prueba alguna que la sociedad Luz Verde SRL tuvo o tiene propósitos
fraudulentos, ni que se haya desviado de los fines de su constitución, ni la existencia de vaciamiento de la empresa ni
la utilización de figuras no laborales; en síntesis, no se ha podido demostrar la configuración de ninguno de los
supuestos establecidos por el art. 54 de la ley de sociedades.

b) El recurso de casación:

El recurrente lo encuadra en los incisos 1 y 2 del art. 159 del CPC, toda vez que el inferior ha interpretado
erróneamente el art. 54 de la ley de sociedades comerciales 19.550, toda vez dicha norma regula y reglamenta el
abuso de la personalidad jurídica, por lo que se trata de un instituto de excepción, que debe interpretarse de manera
restrictiva. Por ello, para ser aplicada necesita de un plus, es decir, fraude laboral, abandono de la buena fe,
vaciamiento, maniobras dolosas, frustrar los derechos de los trabajadores en beneficio de los propios socios de la
sociedad.

En consecuencia, las deudas contraídas por la sociedad son de la sociedad, y/o de los socios en particular, y si el
legislador hubiere querido extender la responsabilidad a los socios de la sociedad y a sus administradores en el plano
laboral, lo hubiera hecho a través de normas que así lo dispusieran expresamente.

Concluye que al no invocarse ni acreditarse en juicio ninguno de los supuestos previstos por el art. 54 de la LS, no
resulta procedente la solidaridad en base a las disposiciones de dicha norma legal.

Afirma que el razonamiento de la Cámara en disidencia con el voto del doctor Cano, se enrola en la postura amplia
de la teoría de la penetración y para extender la responsabilidad a los socios de la sociedad, por vía de hipótesis,
dice que hay una posible insolvencia eventual del deudor principal, es decir, da por cierto un hecho posible, no
probado de ninguna manera.

Dicho razonamiento resulta muy peligroso, ya que se omite y se deja de lado hechos y pruebas aportadas a la causa,
en donde se establece sin lugar a dudas que la sociedad Luz Verde SRL, es propietaria del fondo de comercio de
Residencial Venecia.
2
La Cámara hace hincapié en irregularidades cometidas por los socios, en la falta de colaboración de la demandada
en poner libros a disposición del perito contable, para correr el velo de la sociedad.

En autos, se acredita que la sociedad hace más de ocho años que funciona y que cumple con sus obligaciones
laborales, por lo que la falta de presentación de alguna documentación no es motivo bastante para la aplicación al
caso del art. 54 de la LS, sino que debe haber otras condiciones además de la mera violación a la legislación laboral
para que sea factible el corrimiento del velo de la personería jurídica de la sociedad, y así poder llegar directamente a
sus socios y controlantes.

II. Lo resuelto por la Cámara del Trabajo:

El voto mayoritario de la resolución cuestionada, concluyó que la posibilidad de penetrar la sociedad no


necesariamente debe hacerse con la llave de la insolvencia, sino que bastaría simplemente que la misma fuera
eventual o posible para que el juez se adentre en la investigación; de no ser así y habiendo sospechas fundadas de
que el deudor principal se insolventará, el derecho se tornaría ilusorio. La solidaridad deviene indefectiblemente
frente a un acto fraudulento, entendido como un perjuicio concreto al trabajador o a los organismos de la seguridad
social. La ley extiende la responsabilidad solidaria como una medida ejemplar frente al simple incumplimiento. De
acuerdo a estos fundamentos, entendió que el informe pericial es suficiente prueba de la capitalización insuficiente,
por lo tanto condenó en forma solidaria e ilimitadamente responsable, tanto a la sociedad Luz Verde SRL, como a sus
socios, Carmen Gloria Pizani White, Olga Mabel Podestá y Carlos Roberto Esteves.

Mientras que, para la minoría, si una sociedad comercial realiza un hecho ilícito, o varios, ello no implica que la
misma constituya una pantalla o la utilización de un recurso, para a través de ella, desarrollar una actuación violatoria
de la ley, el orden público, la buena fe o frustrar derechos de terceros, por cuanto ese acto, en sí mismo considerado
e independientemente de su licitud o ilicitud, está dentro del objeto de la misma. En consecuencia, hizo lugar a las
defensas opuestas al progreso de la acción contra los socios y gerente de la sociedad demandada.

En definitiva, prosperaron por mayoría: indemnización por antigüedad, indemnización por falta de preaviso,
integración de despido mayo, sueldo mes de mayo, sueldo mes de abril, indemnización vacaciones no gozadas
proporcionales 1999, SAC proporcional del primer semestre de 1999 y adicionales por diversas tareas; mientras que
la minoría entendió que estos rubros debían prosperar sólo en contra de la sociedad Luz Verde SRL.

III. El dictamen de procuración:

A fs. 53/55 vta. obra el dictamen del Procurador General, aconsejando el rechazo de los recursos incoados, toda vez
que en su opinión, en el caso de autos se dan las notas que han sido correctamente señaladas en el voto mayoritario
de la Cámara: la infracapitalización de la sociedad y la falta de colaboración con el servicio de justicia por parte de los
demandados que ha impedido tener por acreditada la responsabilidad económica de la SRL.

En conclusión considera probado en el caso concreto, un ejercicio abusivo de la figura societaria contrariando los
fines que justificaron su creación legislativa, por lo que la sanción que se impone es la de la inoponibilidad de la
personalidad jurídica.

IV. Antecedentes:

Antes de entrar en el tratamiento de las quejas interpuestas, haré un breve relato de la causa a mis colegas de sala.

3
Noelia del Carmen Torres dedujo demanda por despido contra Luz Verde SRL, y los socios de la misma Carlos
Roberto Esteves, Carmen Gloria Pizani y Olga Mabel Podestá de Magariños por la suma de $ 4.941,46, o lo que más
o menos resulte de la prueba de autos, con más sus intereses legales, manifiesta que había trabajado en relación de
dependencia para la demandada en jornada completa en calidad de mucama.

Al contestar la demanda se planteó una negativa general, en particular los socios se opusieron a la misma mediante
la excepción de falta de acción (falta de legitimación pasiva de los socios) por no ser ellos quienes contrataron a la
actora, sino la sociedad Luz Verde SRL; que ésta era una entidad distinta de los socios, que estaba inscripta
regularmente, en pleno funcionamiento, solvente, propietaria del fondo de comercio de Residencial Venecia, y por
ende propietaria de todos los muebles allí existentes, que al momento de su compra dicho fondo valía $ 15.000 y a la
fecha de contestación de la demanda $ 35.000.

Finalmente la Cámara, con voto en disidencia del doctor Cano, hizo lugar a la demanda en todas sus partes,
condenando a la sociedad Luz Verde SRL y sus socios Carmen Gloria Pizani White, Olga Mabel Podestá y Carlos
Roberto Esteves, a pagar en forma solidaria e ilimitada a la actora la suma de $ 11.038,12.

V. Algunas reflexiones sobre el recurso de inconstitucionalidad y casación en el ámbito local:

Entre los remedios extraordinarios admitidos por nuestro ordenamiento procesal, cabe distinguir, por un lado, el
recurso de inconstitucionalidad, y por el otro, el de casación.

El primero de ellos sirve para canalizar el vicio de la arbitrariedad, y en este punto, reiteradamente esta Corte ha
dicho que "la tacha de arbitrariedad requiere que se invoque y demuestre la existencia de vicios graves en el
pronunciamiento judicial recurrido, consistentes en razonamientos groseramente ilógicos o contradictorios,
apartamiento palmario de las circunstancias del proceso, omisión de consideración de hechos o pruebas decisivas o
carencia absoluta de fundamentación" (LS 188-446, 188-311,192-206, 209-348, etc.) (LS 223-176).

"La arbitrariedad también existe en los casos de análisis erróneo (cuando el error es inexcusable) ilógico o
inequitativo del material fáctico. La omisión o merituación torcida de prueba decisiva, relevante, esencial y
conducente para la adecuada solución del litigio, hace que el fallo no sea una derivación razonada de lo alegado y
probado en la causa, agraviando el art. 18 de la Constitución Nacional" (LS 238-392).

"No puede confundirse arbitrio y arbitrariedad. El arbitrio es razonable, fundado y permite el contralor del superior. La
arbitrariedad es el reino de lo absurdo, ilógico, caprichoso y es lo que la doctrina de la Corte ha pretendido evitar, al
admitir esta causa genérica de defectos en la forma de las sentencias que dictan los jueces" (LS 240-8).

El recurso de inconstitucionalidad tiene carácter excepcional, por ello, las causales se interpretan restrictivamente,
evitando que la Corte se convierta en una tercera instancia ordinaria, contraviniendo todo el sistema recursivo (LS
223-176).

Mientras tanto, el segundo "es un remedio extraordinario, que tiene por finalidad activar el control técnico jurídico de
los fallos del inferior, con el objeto de observar la correcta aplicación del derecho y producir la unificación
jurisprudencial que confiere seguridad jurídica y previsión en las decisiones frente a planteos similares . La crítica a la
errónea aplicación o interpretación de la ley, debe ser completa, decisiva, convincente, demostrativa del error en que
ha incurrido el a quo, de manera que el superior advierta el error señalado, consignándose además de qué modo
superar el defecto legal apuntado" (LS 302-419, 321-182).

4
VI. La solución al caso particular:

1. Ideas introductorias:

A partir del año 1997 se inició, en el ámbito del derecho del trabajo, una corriente jurisprudencial y doctrinaria que,
fundada en los arts. 54, 59 y 274 de la ley de sociedades 19.550, propició la extensión de la responsabilidad a los
socios, a los controlantes y/o administradores de las sociedades comerciales, por los créditos laborales debidos por
aquellas (sociedades empleadoras) a los trabajadores no registrados o irregularmente registrados.

Cabe tener presente que ambos supuestos, responsabilidad del administrador de una sociedad y responsabilidad de
los socios y/o controlantes, son esencialmente diferentes, ya que el primer caso, que se encuentra regulado por los
arts. 274 y 59 de la LS, presupone la subsistencia de la personalidad jurídica de la sociedad (tan es así que ésta
puede accionar contra el director como lo señalan los arts. 274 y 276 LS), mientras que la responsabilidad de los
socios o controlantes, normada por el tercer párrafo del art. 54 LS, parte de la base de la caída de la misma (conf.
Foglia, Ricardo Arturo, "Comentario a los fallos de la Corte Suprema de Justicia de la Nación sobre la responsabilidad
solidaria de los administradores y socios de sociedades comerciales por deudas laborales", TySS, 03-492).

2. La responsabilidad de los socios o controlantes:

a) Antecedentes internacionales:

-Estados Unidos: El fenomenal desarrollo corporativo producido a principios del siglo XIX dio como resultado la
creación de innumerables sociedades comerciales a las cuales se las reconoció jurisprudencialmente como un ser
artificial, intangible y que existe sólo en consideración legal. La regla general es la separación entre la persona
colectiva y sus miembros, es decir que de alguna manera se adoptaba la teoría de la ficción de Savigny. Así se ha
definido a una corporación como una entidad artificial creada por el derecho (casos Darmouth College vs. Woodward
(1819), South Carolina vs. Mac Donald, Porte vs. Rockford y Código de Carolina de 1914).

Pero los mismos tribunales reconocieron que debía estar permitido al juez levantar el velo de la persona jurídica para
poder examinar las auténticas fuerzas que se ocultan tras de dicho velo, en aquellos casos en que se abusa de la
personalidad jurídica para fines ajenos o contrarios a la vida de la sociedad. Esta jurisprudencia ha sido denominada
"disregard of legal entity" (ignorar la entidad legal), "to pierce the veil" (perforar el velo) o "to look the man behind the
mask" (mirar al hombre detrás de la máscara), uno de cuyos primeros casos fue un antiguo fallo del juez Marshall en
Bank of the United States vs. Deveaux (1809). Otros fallos trascendentes en esta materia fueron Booth vs. Bence
(1865), Hibernia Insurance Co. vs. St. Louis and New Orlenas Trans Co. (1882), Pepper vs. Litton (1925), este último
de la Corte Suprema.

No obstante, en términos generales puede afirmarse que la desestimación de la personalidad societaria siempre ha
sido excepcional.

-Inglaterra: La "disregard doctrine" no se desarrolló con la misma libertad que en E.E.U.U., debido principalmente a
que en sus orígenes la base de la teoría en el derecho americano era la regla de equidad (equity) a la que se
contraponían en Inglaterra las peculiaridades del procedimiento del "common law" (derecho consuetudinario). El
principio general de la radical separación entre la persona jurídica y sus miembros era tal, que en caso Salomon vs.
Salomon (1897) se lo extiende incluso a la sociedad unipersonal. Recién en la Companies Act de 1929 (arts. 28) se
admite que se adopten medidas que recaigan directamente sobre el socio de la persona jurídica.

5
-Alemania: En 1956 apareció un estudio del profesor Rolf Serick bajo el título "Apariencia y realidad en las
sociedades mercantiles: el abuso de derecho por medio de la persona jurídica". En este libro Serick expresa que la
jurisprudencia alemana era hasta entonces poco satisfactoria ya que existían "decisiones judiciales contradictorios y
criterios científicos que se contradicen dando lugar en este punto a una extraordinaria inseguridad jurídica".

Faltaban, según Serick, investigaciones sistemáticas donde se discutiera con carácter general cuándo podía
levantarse el velo de la persona jurídica.

En síntesis, para este autor, corresponde desestimar la personalidad jurídica concedida a los entes ideales cuando se
efectúa un uso abusivo y fraudulento de la misma. En estos casos se debe prescindir de dicha creación legal y
analizar la realidad sustancial, responsabilizando a quienes se valieron del recurso legal contrariando el fin querido
por la ley.

-Francia: Carbonnier sostiene que si bien en la lógica de la realidad la persona moral debería ser totalmente
separada de las personas físicas que la componen, la lógica ha debido ceder ante las necesidades prácticas y el
derecho, apartando el velo de la pretendida realidad jurídica, saber hacer reaparecer las realidades humanas. El
medio técnico utilizado por el derecho francés para poner de relieve la persistencia de las personas físicas tras las
personas morales, es la teoría del abuso del derecho. Esta limita así la teoría de la personalidad jurídica.

-España: Para Puig Brutau la doctrina jurídica del "disregard" no ha sido objeto de abierta discusión pero está
presente en una serie de problemas que tratan de hallar el criterio orientador que les brinde la solución más
adecuada. Y si bien no exige someter a profunda revisión el concepto de persona jurídica, tal como lo propone
Ascarelli, por lo menos puede servir para señalar los límites más allá de los cuales aparece como el resultado
absurdo de una jurisprudencia puramente maquinal la obtención de deducciones a base de esta premisa tan
ilusoriamente acariciada: el concepto de persona jurídica. De todas formas reconoce este autor que los problemas
resueltos en el derecho americano por la teoría del "disregard" lo son en el derecho español por la doctrina de
terceros (conf. Maddaloni, Osvaldo, "Aspectos laborales en la extensión de responsabilidad a los socios, controlantes
y directivos de sociedades comerciales", TySS, 02-898/899, Foglia, Ricardo, "Comentario a los fallos de la Corte
Suprema de Justicia de la Nación 'Palomeque' y 'Tazzoli' referidos a la aplicación del tercer párrafo del art. 54 de la
ley de sociedades al ámbito del derecho del trabajo", RDL, Número Extraordinario-Actualización doctrinaria y
jurisprudencial, Rubinzal-Culzoni, p. 111).

b) Antecedentes legislativos nacionales:

Los primeros antecedentes legislativos en nuestro país fueron de carácter impositivo, para tratar de evitar la evasión
del impuesto a la transmisión gratuita de bienes a través de la constitución de sociedades.

En lo que respecta a la materia laboral, el principio de la desestimación de la persona jurídica, también denominado
"allanamiento o redhibición de la personalidad jurídica", en un comienzo apareció establecido en materia antifraude a
través de la ley 16.593, que luego con algunas modificaciones quedó plasmado en el art. 102 de la LCT. Dicho art.
introdujo los siguientes principios: "El contrato por el cual una sociedad, asociación, comunidad o grupo de personas,
con o sin personalidad jurídica, se obligue a una prestación de servicios, obras o actos propios de una relación de
trabajo por parte de sus integrantes, a favor de un tercero en forma permanente y exclusiva, será considerado
contrato de trabajo por equipo, y cada uno de sus integrantes, trabajador dependiente del tercero a quien se hubiera
prestado efectivamente los mismos".

6
Otro antecedente importante en materia laboral es el art. 31 de la ley de contrato de trabajo, que dispone para los
casos de personas jurídicas vinculadas, la caída del velo societario y la correspondiente solidaridad respecto de las
obligaciones contraídas por cada una de ellas con sus trabajadores, cuando haya mediado maniobras fraudulentas.

Sin embargo, hasta la sanción de la ley 22.903 (1983), no existía en nuestro derecho la consagración de la teoría de
la desestimación de la personalidad jurídica. La ley citada añadió un tercer párrafo al art. 54 de la LS que al decir de
Manóvil introduce por primera vez en el derecho positivo conocido una norma específica referida al apartamiento de
los límites de la personalidad jurídica societaria.

Textualmente el párrafo tercero del art. 54 de la LS dice: "La actuación de la sociedad que encubra la consecución de
fines extrasocietarios, constituya un mero recurso para violar la ley, el orden público o la buena fe o para frustrar
derechos de terceros, se imputará directamente a los socios o a los controlantes que la hicieron posible, quienes
responderán solidaria e ilimitadamente por los perjuicios causados".

Tal como surge de su lectura, el art. se refiere a la responsabilidad de los socios y controlantes que hagan posible
que la sociedad actúe de manera que encubra la consecución de fines extrasocietarios o constituya un mero recurso
para violar la ley, el orden público o la buena fe o para frustrar derechos de terceros. Así, fija normas abiertas como el
principio cardinal de la buena fe, y las pautas de la moral y buenas costumbres y la frustración de derechos de
terceros, que son llevados al status de standard por esa norma, que contempla situaciones ya focalizadas por el
Derecho Civil, como el abuso del derecho (art. 1071, Cód. Civil) y la nulidad del acto por inmoralidad de su objeto
(arts. 953 y 21, Cód. Civil).

La doctrina no se pone de acuerdo acerca de los supuestos fácticos contemplados por la norma, y así para Rolón la
misma contempla una única situación (la actuación de la sociedad que encubra la consecución de fines
extrasocietarios), mientras que para Ferrer y Maddaloni se trata de dos situaciones distintas (la ya mencionada, es
decir la actuación de la sociedad que encubra la consecución de fines extrasocietarios y que la actuación de la
sociedad constituya un mero recurso para violar la ley, el orden público, la buena fe o para frustrar derechos de
terceros).

Pero más allá de las discusiones doctrinarias, lo cierto es que ambas situaciones generan una consecuencia única: la
extensión de la responsabilidad por daños a los socios y controlantes que hiciera posible el uso desviado de la
personalidad de la sociedad, o bien, la imputación de dicha conducta, con lo que se puede exigir el cumplimiento de
una prestación a los socios (conf. Livellara, Carlos (h.), "La aplicación de la teoría de la desestimación de la persona
jurídica en materia laboral por la Corte de Mendoza", RFC 60-2003, ps. 157/158, Maddaloni, Osvaldo A.,
"Jurisprudencia acerca de la extensión de la responsabilidad a los socios y directivos de sociedades comerciales",
Revista Sociedad de Derecho Laboral, año 2003, p. 38, del mismo autor, "Aspectos laborales..." cit., ps. 903/904,
Manóvil, Rafael M., "Grupos de sociedades", Ed. Abeledo Perrot, Bs. As., 1998, p. 1009, Rolón, Enrique A. M.,
"Reflexiones en torno de la desestimación de la personalidad jurídica de las sociedades comerciales en materia
laboral", TySS, 02-921, López Mesa, Marcelo J., "El abuso de la personalidad societaria y la doctrina de la
desestimación (El presente de una institución veinte años después de su apogeo)", LA LEY, 1995-A, 1115 y sigtes.,
Gulminelli, Ricardo Ludovico, "Responsabilidad por abuso de la personalidad jurídica", Depalma, p. 103).

c) Distintos criterios de interpretación del art. 54 de la LS:

A este respecto, existen tres posturas:

7
-Criterio amplio: considera que debe ampliarse la responsabilidad a los socios pues en tales supuestos se viola la ley,
el orden público, la buena fe y hay frustración de derechos de terceros (sala II CNAT, "Aybar Rubén E. y otros c.
Pizzería Viturro SRL y otros", "Rodríguez Emilio y otros c. Lago del Bosque SRL y otro", sala III CNAT "Delgadillo
Linares Adela c. Shatell SA y ots. s. Despido", sala V CNAT, "Pavón Reina c. Romio Elsa y otro s. despido", "Acosta
Bibiana c. Establecimiento Metalúrgico de Poli SA s. accidentes", sala VI CNAT, "Maison María c. Show del Pollo SRL
y otros", "Bogado Gladys c. Pinar Video Home SA y otros", sala VII CNAT, "Nusdeo Silvina c. Excelsitas y otro s.
despido", "Díaz Ricardo c. Distribuidora Norte y otros s. despido", "Lencinas José c. Intercambio SRL y otros", sala IX
CNAT, "Winter Jorge c. La Casa de los Hules SCA y otros s. despido", sala X CNAT, "Bianco Bruno c. Orrico Catering
SA s. despido, "Coleur Sergio c. Frigorífico La Nona SRL y otro s. despido").

-Criterio pragmático: tiene en cuenta los casos concretos y considera responsable en forma personal a los socios de
una persona jurídica, si estos la han utilizado en forma abusiva, como por ejemplo utilizar a la sociedad como mera
figura estructural, como instrumento para lograr objetivos puramente individuales muy distintos a los que son propios
de la realidad social que justificaría aquella personalidad (sala II CNAT, "Wild Jorge c. Plamet SRL y otro s. despido",
"Pereyra Eduardo c. Pro fan SA y otro s. despido").

-Criterio restrictivo: entiende que la aplicación de la desestimación de la personalidad jurídica debe ser efectuada en
forma prudente, restrictiva y excepcional cuando la sociedad sea utilizada como un mero recurso o pantalla para
encubrir los verdaderos fines ilícitos de sus miembros; de forma tal que la existencia de empleados en negro, si bien
es un acto ilícito no constituye una actuación extrasocietaria y por tanto no justificaría la caída del velo societario y la
responsabilidad de los controlantes (sala I CNAT, "Lynch de Schefer María c. Omint SA de servicios s. despido",
"Tegler Moreno Augusto c. Truper SA y otro s. despido", "Crespi Karina c. Instituto del Centenario SRL y otros s.
despido"; sala IV CNAT, "Bellay Fernando c. Organización Fiel SRL s. despido", "Fontes Hugo M. y otros. c.
Consorcio Conexim SRL y otros s. despido", sala VIII CNAT, "Franco Héctor c. Buenos Aires Sur SRL y otros s.
despido" (conf. Livellara, Carlos (h.), op. cit., ps. 159/160, Maddaloni, Osvaldo A., "Aspectos laborales..." cit., ps.
916/918, Rolón, Enrique A. M., op. cit., p. 922).

d) La jurisprudencia de la Cámara Nacional de Apelaciones del Trabajo:

-Fallos anteriores a la reforma: Uno de los primeros fallos en el que se desestimó la personalidad jurídica de una
sociedad fue de la sala I de la CNAT, autos "Mecánica Italiana SRL s. tercería en autos Muscolino Eduardo y otros c.
La Pavoni SRL". En este fallo, la Cámara rechazó la tercería de dominio planteada por Mecánica Italiana SRL, cuyos
socios eran los mismos de Pavoni SRL (sociedad cuyos bienes habían sido embargados), porque se consideró que
existía identidad entre tercerista y demandado.

Poco tiempo después, la sala IV de la CNAT se expidió en los autos "Rubalcaba Miguel c. La Ley SA". En el caso el
actor trabajaba como vendedor de libros de la demandada, habiendo suscripto a su ingreso un contrato con la misma
a nombre de "Sociedad Subalcaba". La Cámara consideró que había relación laboral.

Luego los autos "Corvetto Osvaldo c. La Ley SA Editora e Impresora" fueron fallados por la sala II de la CNAT. Aquí
el actor se había desempeñado para la misma a título personal desde su ingreso y luego constituyó la sociedad
Orsin, a través de la que cumplió para la demandada las mismas tareas que venía haciendo. También se consideró
que existía relación laboral.

8
Con relación a la extensión de responsabilidad a los socios basada en el abuso de la personalidad jurídica, pueden
citarse dos interesantes casos de la sala II de la CNAT, "Aybar Rubén y otro c. Pizzería Viturro SRL y otros" y
"Rodríguez Emilio y otros c. Lago del Bosque SRL y otro".

-Fallos posteriores a la reforma: El primer antecedente que encontramos es el caso "Delgadillo Linares Adela c.
Shatell SA y ots. s. Despido". En este caso el actor demandó a la sociedad y a dos de sus socios por el pago de las
indemnizaciones por despido incausado y las multas previstas en la ley 24.013. Se consideró que la conducta
asumida por la empleadora constituía un típico fraude laboral y previsional que si bien no encubría la consecución de
fines extrasocietarios, perjudicaba al trabajador, al sector pasivo y a la comunidad comercial y en base a estas
consideraciones estimó aplicable el tercer párrafo del art. 54 de la LS, haciendo extensiva la condena en forma
solidaria a los socios directivos de la SA (CNAT, sala III, 11/04/97).

Con posterioridad, las distintas salas de la CNAT, se han pronunciado, adoptando diferentes criterios de
interpretación.

e) La jurisprudencia de la Corte Suprema de Justicia de la Nación:

-Fallos anteriores a la reforma: Pueden señalarse como hitos en esta materia los casos "Parke Davis y Cía. SA" (LA
LEY, 151-353), "Compañía Swift de La Plata SA" (ED, 51-223) y "Mellor Goodwin" (ED, 51-341).

-Fallos posteriores a la reforma: El 5/03/02 la Corte dictó sentencia en los autos "Cingiale, María C. y otro c. Polledo
Agropecuaria SA y otros". En estos autos, provenientes de la sala III de la CNAT, la Corte denegó el recurso
extraordinario que motivara la queja de la demandada, por cuando la misma no refutó todos y cada uno de los
fundamentos de la sentencia apelada. No obstante el fallo cobra trascendencia por cuanto, por primera vez, dos de
los Ministros del Alto Tribunal (doctores Moliné O'Connor y López) hacen conocer su opinión con respecto a la
aplicación del art. 54 de la LSC. Los Ministros, avalan el criterio restrictivo de interpretación del art. citado. Indican
que la extensión de responsabilidad sería posible por la utilización ilegal del contrato de sociedad y no por ilegalidad
de los actos que la sociedad realice. Es decir que lo que se sanciona con el corrimiento del velo societario es la
utilización ilegal de la personalidad jurídica de la sociedad y no la ilegalidad de los actos realizados por ésta.

Luego, el 31/10/02, en el caso "Carballo, Atiliano c. Kanmar SA (en liquidación) y otros", se pronunció sobre la
aplicación del art. 54 de la LSC, expresando que: "La sentencia apelada vulnera las garantías constitucionales
relativas al derecho de propiedad y de defensa en juicio en tanto extiende al director de una sociedad anónima la
condena dictada contra la empresa por obligaciones laborales, subvirtiendo las reglas sobre la carga probatoria
aplicables en la materia. Los jueces laborales han hecho aplicación de una disposición de la ley de sociedades que
no constituye una derivación razonada del derecho vigente, pues se contrapone con principios esenciales del
régimen societario. Han prescindido de considerar que la personalidad diferenciada de la sociedad y sus
administradores constituye el eje sobre el que se asienta la normativa sobre sociedades anónimas y ésta conforma
un régimen especial que se explica porque aquellas constituyen una herramienta que el orden jurídico provee al
comercio como uno de los principales motores de la economía"... "Resulta irrazonable que, el simple relato del actor
sin mencionar el respaldo de otras pruebas producidas en la causa tenga la virtualidad de generar la aplicación de
una causal de responsabilidad en materia societaria que tiene carácter excepcional, sin la debida justificación".

El 3/04/03, en la causa "Palomeque, Aldo c. Benemeth SA y otro", el Alto Tribunal adhirió al dictamen del Procurador
Fiscal doctor Obarrio, que enrolándose en el criterio restrictivo expresaba lo siguiente: "...no ha quedado acreditado
que estemos en presencia de una sociedad ficticia o fraudulenta, constituida en abuso del derecho y con el propósito
9
de violar la ley, que, prevaliéndose de dicha personalidad, afecta el orden público laboral o evade normas legales,
extremo al que se añade que tampoco se advierte... que estén reunidos los elementos necesarios para considerar
que entre los codemandados a título personal y el actor existía un contrato de trabajo... la personalidad diferenciada
de la sociedad y sus socios y administradores constituye el eje sobre el que se asienta la normativa sobre sociedades
anónimas y que ésta configura un régimen especial porque aquéllas constituyen una herramienta que el orden
jurídico provee al comercio como uno de los relevantes motores de la economía. Desde esta perspectiva no alcanzo
a advertir que, el contexto probatorio del caso, posea virtualidad suficiente como para generar la aplicación de una
causal de responsabilidad en materia societaria de orden excepcional, sin la suficiente y concreta justificación, ni que
los motivos expresados provean del debido sustento a la inteligencia conferida al precepto en examen".

Finalmente, el 4/07/03 en los autos "Tazzoli, Jorge Alberto c. Fibracentro SA y otros s. Despido", y también
adhiriéndose al dictamen del Procurador Fiscal, la Corte señaló que el art. 54 de la LS es procedente "... cuando se
dan circunstancias de gravedad institucional que permitan presumir fundadamente que la calidad de sujeto de
derecho fue obtenida al efecto de generar el abuso de ella o violar la ley...". La norma en cuestión es de aplicación
restrictiva y exige la presencia de "... pruebas concluyentes...". Y agrega un argumento que no había sido
considerado en el fallo "Palomeque", y es que la existencia de "... sanciones específicas para reprimir las violaciones
mencionadas en la ley 24.013..." corrobora aún más el carácter restrictivo de aplicación e interpretación del artículo
en cuestión.

f) La jurisprudencia de la Suprema Corte de Justicia de Mendoza:

En consonancia con el criterio restrictivo adoptado por la Corte Suprema de la Nación, este Cuerpo ha tenido
oportunidad de expedirse sobre la interpretación que debe darse al art. 54 de la LS, en las causas "Garro..." (LS 315-
170) y "Ceverino..." (LS 328-53).

Allí en lo pertinente se dijo: "La última parte de dicho artículo es utilizado por esta posición para penetrar la
personalidad jurídica de la sociedad y extender la responsabilidad a los socios o a los controlantes en los supuestos
que la misma norma prevé: a) actuación de la sociedad que encubra fines extrasocietarios; b) sea un recurso para
violar la ley, el orden público y la buena fe; c) sea un recurso para frustrar los derechos de un tercero".

"La norma tiene una ineludible finalidad ética y es fomentar el proceder de buena fe, sin violar la ley, ni atentar contra
el orden público ni frustrar derechos de terceros, entre ellos los trabajadores y en tal sentido parecería conveniente su
recepción en materia de derecho del trabajo".

"Empero, parecería que tal institución debería ser admitida con suma prudencia y criterio restrictivo".

"De tal modo que, para que la extensión de la responsabilidad sea aplicable, deben comprobarse todo y cada uno de
los supuestos de la norma, es decir la actuación de la sociedad que cubra fines extra societarios y la violación de los
principios de la buena fe, la intención de frustrar los derechos de los trabajadores, el vaciamiento con esa misma
intención".

"En el caso de autos, se trata de una sociedad de larga trayectoria que funcionó más de treinta años, que cumplía las
obligaciones laborales y estos hechos no se han desvirtuado en el desarrollo del proceso".

"La falta de presentación de balances a la Dirección de Personas Jurídicas, o su no confección en los últimos
ejercicios, por sí sólo resultan insuficientes para encuadrar la conducta societaria y de sus socios en el art. 54 de la
ley de sociedades".
10
"Por el contrario, la sociedad tiene registrados todos sus trabajadores y ha cumplido normalmente sus obligaciones
hasta que se produjo la crisis de la misma. Sobre el punto en cuestión hay que extremar la prudencia frente a la
situación de dificultades económicas que vive el país en general y el sector denominado PYME en especial".

"Es más, el hecho de haber iniciado el procedimiento de crisis demostró a mi juicio la intención de la sociedad en
cumplir con la ley y en finalizar el procedimiento del modo legal previsto, demuestra básicamente al buena fe y la
inexistencia del propósito de frustrar los derechos de los trabajadores".

"La irregularidad del funcionamiento de la sociedad no es ni más ni menos que la evidencia de que la crisis
económica iba atrapando al ente social y manifiesta el propósito de respetar el derecho de los mismos".

"No es suficiente, a mi juicio, con demostrar un mal funcionamiento e inclusive una errónea conducción. La norma
para ser aplicada tiene un plus, esto es el fraude laboral, el abandono de la buena fe, la frustración premeditada de
derechos del trabajador, el vaciamiento empresario como evidencia de una maniobra que tiende a frustrar los
derechos de los trabajadores en beneficio de los propios socios integrantes de la entidad".

g) Mi opinión:

Teniendo en cuenta los criterios doctrinarios y jurisprudenciales anteriormente citados, me adelantaré a decir que en
la resolución del presente caso, debo apartarme de lo dictaminado por el Procurador General, atento a las razones
que a continuación se exponen.

Atento a la conexidad de agravios existente entre ambos recursos y por razones de economía procesal, me avocaré
al tratamiento de los mismos en forma conjunta.

La recurrente se queja, toda vez que el voto mayoritario de la Cámara se ha enrolado en el criterio amplio de
interpretación del art. 54 de la LS, y, en consecuencia, extendió la responsabilidad solidaria e ilimitadamente, tanto a
la sociedad Luz Verde SRL, como a los socios de la misma, por vía de hipótesis, bastando simplemente que la
insolvencia fuera eventual o posible, frente a un acto fraudulento, entendido como un perjuicio concreto al trabajador
o a los organismos de la seguridad social.

Con ese criterio, y teniendo en cuenta las conclusiones del dictamen pericial contable obrante a fs. 231/232 vta. y su
aclaración de fs. 254/255 vta. de los principales, el inferior consideró que "son innumerables las irregularidades
cometidas por los socios", señalando como tales las siguientes:

a) El perito no pudo informar si la demandada cumple o no con la ley de sociedades, ya que sólo presentó el libro de
sueldos y jornales, debidamente rubricado, pero no presentó libros societarios, libros contables, libro municipal ni libro
de registro de pasajeros.

b) La demandada no aportó documentación para verificar si la Residencial Venecia era explotada comercialmente por
Luz Verde SRL.

c) De acuerdo con el recibo de sueldo del mes de junio, el sueldo básico era de $ 398, mientras que en el Libro de
Sueldos y Jornales aparecía registrado el monto de $ 199.

d) Desde noviembre de 1996 hasta marzo de 1999, no se encuentra registrada la firma de la actora en el Libro de
Sueldos y Jornales.

11
e) Carlos Roberto Esteves le manifestó telefónicamente al perito que no lo dejaría entrar al fondo de comercio para
realizar el inventario de los bienes que posee el mismo.

f) El perito no pudo determinar el valor económico real del fondo de comercio, porque no pudo inventariar los bienes
del mismo, ni las ventas que ha tenido en los últimos años.

g) El perito no pudo inventariar los bienes de la residencial porque se le negó la entrada a la misma.

h) La demandada no suministró ningún recibo de sueldos que coincida con lo registrado en el Libro de Sueldos, es
decir, por media jornada.

i) La demandada no ha colaborado con el servicio de justicia al negarse a suministrar pruebas que acrediten sus
afirmaciones.

Ahora bien, como ya lo anticipara, la extensión de la responsabilidad a los socios por aplicación del tercer párrafo del
art. 54 de la ley 19.550, debe ser restringida al supuesto verdaderamente excepcional, de creación y utilización del
ente societario con el propósito de violar la ley, el orden público, la buena fe o los derechos de terceros, debiendo,
además, interpretarse dichas situaciones en forma restrictiva, esto es, a favor de la no extensión de la
responsabilidad.

Ello es así porque, en palabras de Foglia, "si bien hay un interés en combatir y erradicar el empleo no registrado o
defectuosamente registrado, también hay un interés general en el sistema societario, uno de cuyos pilares es la
personalidad jurídica atribuida a los entes colectivos. Y cada uno de dichos ámbitos tiene las herramientas propias y
específicas para combatir sus patologías, resultando un despropósito arrasar con los pilares de un sistema jurídico
para intentar solucionar los problemas particulares y propios que plantea otra disciplina y otro segmento de la
compleja realidad social" (conf. Foglia, Ricardo, "Comentario a los fallos...", cit., p. 115).

En mi opinión, en el presente caso, entiendo que las supuestas irregularidades cometidas por la parte demandada,
no son suficientes para tener por acreditado que la sociedad Luz Verde SRL haya sido utilizada con el deliberado
propósito de violar la ley, el orden público, la buena fe o frustrar los derechos de terceros. Cabe puntualizar que aun
cuando dichas anomalías hubieren sido cometidas por la entidad, en materia laboral existen normas específicas
dictadas para intentar erradicar o paliar el flagelo del trabajo clandestino y la falta o defecto de registración, por
ejemplo, las leyes 24.013, 25.250, 25.345, los arts. 3° y 7° de la ley 23.771 (ley penal tributaria) y último párrafo del
art. 41 de la ley 24.037 (blanqueo de capitales).

En síntesis, los hechos tenidos en cuenta por el inferior para extender la responsabilidad en forma solidaria e ilimitada
tanto a la sociedad Luz Verde SRL como sus socios integrantes, deben ser denunciados y perseguidos a través de
las herramientas legales correspondientes, pero de ninguna manera autorizan per se, la aplicación lisa y llana del art.
54 de la LS.

Por las razones expuestas, me inclino por la admisión de los recursos de inconstitucionalidad y casación.

Así voto.

El doctor Salvini adhiere por los fundamentos al voto que antecede.

2ª cuestión. - El doctor Llorente dijo:

12
De conformidad al resultado a que se arriba en la cuestión anterior, haciendo lugar a los recursos extraordinarios de
inconstitucionalidad y casación, corresponde por imperativo del art. 154 y 162 del CPC, anular la resolución atacada
en sus considerandos y resolutivos en lo que ha sido materia de agravios declarados conducentes, debiendo esta
Corte avocarse a su resolución.

Atendiendo que la prementada anulación lleva implícita la afirmación de que no corresponde la condena en forma
solidaria e ilimitada de la sociedad Luz Verde SRL y sus socios Carmen Gloria Pizani White, Olga Mabel Podestá y
Carlos Roberto Esteves, corresponde anular los dispositivos I), II), III), IV) y V) del pronunciamiento impugnado
inserto a fs. 346/354 vta., y su resolución aclaratoria de fs. 357 quedando redactados de la siguiente manera: "I.
Hacer lugar a la demanda en todas sus partes condenando a Luz Verde SRL a pagar a Noelia del Carmen Torres, la
suma de $ 11.038,12 en concepto de: 1. Indemnización por antigüedad (4 períodos), 2. Indemnización por falta de
preaviso (1 período), 3. Integración mes de despido mayo (13 días), 4. Sueldo mes de mayo (18 días), 5. Sueldo mes
de abril, 6. Indemnización vacaciones no gozadas proporcionales 1999, 7. S.A.C. proporcional del Primer Semestre
de 1999 y 8. Adicionales por diversas tareas, más intereses legales, dentro de los cinco días de quedar firme y
ejecutoriada la presente sentencia"; "II. Hacer lugar a la excepción de falta de acción opuesta por Carlos Roberto
Esteves, Carmen Gloria Pizani White y Olga Mabel Podestá de Magariños a fs. 63/66, con costas a la actora "; "III.
Las costas y honorarios del perito contador, son a cargo de la parte demandada"; "IV) Regular los honorarios
profesionales de los doctores: O. R. S. en la suma de $ 662,30, P. R. en la suma de $ 441,50, A. C. en la suma de $
883 y C. E. en la suma de $ 927,20 (arts. 2°, 3°, 31 y 32 ley 3641 modificada por dec.-ley 1304/75) en lo que
prospera; y de los doctores C. E. en la suma de $ 1.324,57, O. R. S. en la suma de $ 463,61, P. R. en la suma de $
309,05, A. C. en la suma de $ 618 en lo que se rechaza (arts. 2°, 3°, 31 y 32 ley 3641 modificada por dec.-ley
1304/75)"; "V. Regular los honorarios profesionales del perito contador A. S., en la suma de $ 441,50"; "VI. Emplazar
a los condenados en costas para que dentro del término de diez días de quedar firme y ejecutoriada la presente
sentencia, abonen los aportes correspondiente a Derecho Fijo, Tasa de Justicia y Aporte ley 5059. Notifíquese la
presente resolución a la Caja Forense, Dirección General de Rentas, Colegio de Abogados y A.F.I.P.".

Así voto.

El doctor Salvini adhiere al voto que antecede.

3ª cuestión. - El doctor Llorente dijo:

Atento el resultado a que se arriba en el tratamiento de las cuestiones que anteceden, corresponde imponer las
costas a la recurrida vencida (arts. 148 y 36 inc. I CPC).

Así voto.

El doctor Salvini adhiere al voto que antecede.

Por el mérito que resulta del acuerdo precedente la sala segunda de la Excma. Suprema Corte de Justicia fallando en
definitiva, resuelve: 1°. Hacer lugar a los recursos de inconstitucionalidad y casación planteados a fs. 22/31 vta. por
Carlos Roberto Esteves en contra de la resolución dictada a fs. 346/354 vta., y su resolución aclaratoria de fs. 357 por
la Cámara Primera del Trabajo, en consecuencia, anular los dispositivos I), II), III), IV) y V), los que quedan
redactados de la siguiente manera: "I) Hacer lugar a la demanda en todas sus partes condenando a Luz Verde SRL a
pagar a Noelia del Carmen Torres, la suma de $ 11.038,12 en concepto de: 1. Indemnización por antigüedad (4
períodos), 2. Indemnización por falta de preaviso (1 período), 3. Integración mes de despido mayo (13 días), 4.

13
Sueldo mes de mayo (18 días), 5. Sueldo mes de abril, 6. Indemnización vacaciones no gozadas proporcionales
1999, 7. S.A.C. proporcional del Primer Semestre de 1999 y 8. Adicionales por diversas tareas, más intereses
legales, dentro de los cinco días de quedar firme y ejecutoriada la presente sentencia"; "II. Hacer lugar a la excepción
de falta de acción opuesta por Carlos Roberto Esteves, Carmen Gloria Pizani White y Olga Mabel Podestá de
Magariños a fs. 63/66, con costas a la actora"; "III. Las costas y honorarios del perito contador, son a cargo de la
parte demandada"; "IV. Regular los honorarios profesionales de los doctores O. R. S. en la suma de $ 662,30, P. R.
en la suma de $ 441,50, A. C. en la suma de $ 883 y C. E. en la suma de $ 927,20 (arts. 2°, 3°, 31 y 32 ley 3641
modificada por dec.-ley 1304/75) en lo que prospera; y de los doctores C. E. en la suma de $ 1.324,57), O. R. S. en la
suma de $ 463,61, P. R. en la suma de $ 618 en lo que se rechaza (arts. 2°, 3°, 31 y 32 ley 3641 modificada por dec.-
ley 1304/75)"; "V. Regular los honorarios profesionales del perito contador A. S., en la suma de $ 441,50"; "VI.
Emplazar a los condenados en costas para que dentro del término de diez días de quedar firme y ejecutoriada la
presente sentencia, abonen los aportes correspondiente a Derecho Fijo, Tasa de Justicia y Aporte ley 5059.
Notifíquese la presente resolución a la Caja Forense, Dirección General de Rentas, Colegio de Abogados y A.F.I.P.".
2°. Imponer las costas a la recurrida vencida (arts. 148 y 36 inc. I CPC). 3°. Regular los honorarios profesionales de
los doctores C. R. E., C. B. de P., O. R. S. y O. E. M. en las respectivas sumas de $ 158,94, $ 529,82, $ 111,26 y $
370,87 (arts. 2°, 3°, 4°, 15 y 31 ley 3641). 4°. Líbrese cheque por la suma de $ 150 con imputación a la boleta de
depósito de fs. 1 en favor del recurrente.

Se deja constancia que la presente resolución no es suscripta por el doctor Böhm por encontrarse en uso de licencia
(art. 88 inc. III C.P.C.). - Pedro Llorente. - Herman Salvini.

14

También podría gustarte