Está en la página 1de 10

Problemas de la salud mental y

psiquiatría

Psiquiatría Comunitaria

Operativamente definimos la Psiquiatría Comunitaria como el


conjunto de actividades que promueve y despliega el psiquiatra en
una comunidad con el objetivo de elevar el nivel de salud mental de
dicha población. Estas actividades incluyen la participación real y
efectiva de la comunidad en la continuidad del tratamiento y en el
desarrollo de acciones de prevención.

Para G. Caplan "es el cuerpo de conocimientos que requiere el


psiquiatra para participar en programas comunitarios organizados
para la prevención y tratamiento de los trastornos mentales y la
rehabilitación y reincorporación a la población de los que fueron
pacientes psiquiátricos. Exige del psiquiatra que se relacione con la
sociedad en sentido amplio". Para este autor, otros términos
utilizados para designar la Psiquiatría Comunitaria son los de Higiene
Mental Comunitaria, Psiquiatría Social y Psiquiatría Preventiva.

Atención Primaria de Salud Mental

La Atención Primaria de Salud Mental (APSM) está incluida en el


concepto de Atención Primaria de Salud (APS).

De acuerdo a la OMS la APS es un medio práctico para poner al


alcance de todos los individuos y familias de una comunidad la
asistencia de salud indispensable, de forma que resulte aceptable y
proporcionada a sus recursos y con su plena participación. Así, la APS
es mucho más que la extensión de servicios básicos de salud; abarca
factores sociales y de desarrollo y, si se aplica de manera apropiada,
influirá en el funcionamiento del resto del sistema de salud. La APS, y
en particular la APSM, es una estrategia en las acciones de psiquiatría
comunitaria. Actualmente, la OMS está reformulando los conceptos
de APS.

Son pilares de la APS:

- La promoción del desarrollo socio-económico de la comunidad en


coordinación multisectorial.
- La transferencia de conocimientos científicos y tecnológicos a la
comunidad con el fin de solucionar sus problemas de salud.

- La participación de la comunidad en la toma de decisiones,


planeamiento, programación, ejecución, evaluación y control de las
actividades de salud que la afectan o le interesan.

- La incorporación de conocimientos y tecnologías populares de


eficacia comprobada que permitirán el fortalecimiento de la praxis
sanitaria.

 Historia natural de los trastornos mentales

podemos decir que cualquier enfermedad en el hombre, incluyendo


los trastornos psiquiátricos, es el resultado de un proceso dinámico
que se inicia debido a la interacción entre los agentes de enfermedad
o noxas, el organismo humano o huésped (más o menos resistente) y
el medio ambiente que facilita o dificulta la acción del primero sobre
el segundo. La enfermedad, así considerada, por ejemplo, el
alcoholismo o un trastorno asociado a enfermedad cerebral
(encefalitis, arterioesclerosis u otro), es un proceso dinámico
organizado en una serie ordenada de acontecimientos, es decir, un
proceso que sigue una historia natural.

- Agente. En psiquiatría, igual que en medicina general, hay


entidades con agente conocido y agente desconocido.

- Huésped. Todo ser humano es susceptible de tener un trastorno


psiquiátrico. Diversos factores pueden aumentar o disminuir su
resistencia a la enfermedad.

- Ambiente. Siguiendo a Humberto Rotondo y John E. Gordon, se


puede afirmar que el ambiente es un agregado de todas las
condiciones e influencias exteriores que afectan la vida y el desarrollo
de un individuo, su comportamiento individual o grupal (familia,
comunidad, etc.). El ambiente facilita o dificulta la acción del agente o
noxa. La interrelación de las variables ambientales física, biológica,
psicológica y socio cultural, actúa en el fiel de la balanza
epidemiológica explicando las enfermedades en general y las
psiquiátricas en particular.

Según la OMS:

 450 millones de personas experimentan problemas mentales o


neurológicos en el mundo.
 Estos desórdenes constituyen 5 de las 10 principales causas de
discapacidad.
 Crean un impacto social y económico importante en los
individuos, familias y gobiernos.
 La depresión clínica será la 2da causa de discapacidad en el
mundo para el año 2020 y en países en desarrollo será la
primera causa.
 Las personas con trastornos mentales sufren de discriminación,
estigma y están proclives a sufrir violaciones en sus derechos
humanos.
 La pobreza interactúa en forma importante con la salud mental
en un círculo vicioso.

Factores en el análisis de la salud mental:

Niveles de prevención en Salud Mental

En Psiquiatría Comunitaria y Atención Primaria de Salud se hace


necesaria la claridad conceptual de lo que se entiende como
prevención. El esquema de Leavel y Clark que es, en nuestro
concepto, el más útil y aplicable a Salud Mental, comprende:

 Etapa Prepatogénica:

Prevención Primaria: Promoción de la Salud y Protección


específica.
 Etapa Patogénica:

Prevención Secundaria: Diagnóstico y Tratamiento Precoz


Prevención Terciaria: Limitación de la Incapacidad.
Rehabilitación

En la prevención primaria se trata de reducir en la comunidad la


prevalencia o frecuencia de todo tipo de afecciones mentales. En la
prevención secundaria se trata de reducir la duración de los
trastornos que se presenten, evitando la cronicidad. En la prevención
terciaria, se trata de reducir el deterioro que puede resultar de los
trastornos, es decir la invalidez.

MAGNITUD DEL PROBLEMA DE SALUD MENTAL

La patología psiquiátrica cubre una gama muy amplia de trastornos,


algunos de los cuales no siempre son vistos por el psiquiatra, siendo
del dominio de otras especialidades, por ejemplo, los trastornos
psicofisiológicos.

La OMS en su Programa Mundial de Mediano Plazo (Programa 10)


sobre la Protección y Fomento de la Salud Mental, incluye en un
conjunto los problemas psiquiátricos, neurológicos y psicosociales y
formula sus objetivos en la forma siguiente: "Prevenir o reducir los
problemas psiquiátricos, neurológicos y psicosociales (incluidos los
relativos al alcoholismo y la farmacodependencia). Incrementar la
efectividad de los servicios generales de salud mediante el empleo de
conocimientos teóricos y prácticos en el campo de la salud mental y
preparar estrategias de intervención sobre la base de una mayor
comprensión de los aspectos de salud mental relativos a la acción
social y al cambio".

Para lograr estas metas es preciso prestar atención a la forma como


se puede ayudar a conservar y mejorar la salud mental en todas las
edades y en el medio sociocultural particular de los países. El
establecimiento de métodos de identificación de grupos muy
expuestos a riesgos para su salud y de intervención preventiva,
constituye una de las metas del programa. La preocupación central se
ubica en la prevención y el control de los trastornos mentales y
neurológicos y en el uso indebido de drogas y del alcohol, propósito
que sigue siendo objeto de gran atención, particularmente en lo que
respecta a la prevención de la invalidez y al establecimiento de
métodos de evaluación de los programas de salud mental, en
cooperación con los estados miembros de la OMS.

La OMS afirma que: "de 400 millones de personas inválidas que hay
en todo el mundo, no menos de 2/5 han llegado a ese estado por
causa de enfermedades mentales o neurológicas o por las secuelas
del alcoholismo o la farmacodependencia".

Según estimados de la OMS, la prevalencia de los grandes trastornos


mentales, en los países en desarrollo, es la siguiente: Epilepsia, 2%;
Retardo mental, 4 a 6%; Síndrome Orgánico-Cerebral, 2%;
Esquizofrenia 1%.

De esta prevalencia es prevenible: Epilepsia, 1.0%; Retardo Mental,


3.5%; Síndrome Orgánico Cerebral, 1,5%; y Esquizofrenia, 0,0%.

En el Perú, no contamos con estudios de prevalencia a nivel nacional.


Existen estudios locales en Mendocita, (H. Rotondo et al. 1963); en
Lince (J. Mariátegui et al. 1969), y últimamente, el realizado en el
distrito de Independencia por el Instituto Nacional de Salud Mental
"Honorio Delgado-Hideyo Noguchi" (Hayashi, et al. 1985).
Actualmente, en el Perú se asiste a un aumento de la prevalencia del
abuso y dependencia a drogas, entre ellas al alcohol y pasta básica
de cocaína. (Ver Capítulos de Alcoholismo y de Farmacodependencia).
OBJETIVOS DE UN PROGRAMA DE APSM

1. Objetivos a largo plazo

1.1 Reducción a un mínimo de los trastornos y deficiencias mentales


o de las limitaciones asociadas en una población determinada.

1.2 Creación o desarrollo de nuevos enfoques preventivos.

1.3 Desarrollo progresivo, paso a paso, de un programa integral.

1.4 Contribución de la praxis e investigación a la teoría de la


psiquiatría en la comunidad.

2. Objetivos específicos inmediatos:

2.1 Utilización óptima y adiestramiento en servicio del personal


disponible.

2.2 Continuidad geográfica de los servicios a los usuarios.

2.3. Identificación de prioridades en el establecimiento de servicios a


través de un planeamiento continuo en el nivel de toma de
decisiones.

2.4 Aplicación de conceptos funcionales de administración en cada


paso.

3. Objetivos compartidos con profesionales e instituciones no


psiquiátricas.

3.1 Proteger y contribuir a la recuperación de la salud mental de una


determinada comunidad.

3.2 Desarrollar relaciones productivas de trabajo a través de


contratos formales e informales.

3.3 Inventariar las necesidades y recursos con respecto a servicios


de salud mental de una determinada comunidad.

3.4 Planear los servicios de salud mental en colaboración con la


comunidad.
3.5 Apoyar decisiones y ampliar acciones de la comunidad para la
salud mental.

 4. Estrategias

Siguiendo la experiencia de Castro de la Mata, señalamos las


siguientes:

4.1 Delegación de funciones: el psiquiatra delega funciones


promocionales, preventivas, diagnósticas, terapéuticas y de
rehabilitación en otros profesionales de salud mental (psicólogos,
asistentes sociales, enfermeras).

4.2 Integración de la salud mental dentro de la salud general: razón


por la cual los profesionales de salud mental forman un grupo de
apoyo en los Centros de Salud.

4.3 Trabajo en la comunidad: la idea central es trabajar en la


comunidad en diferentes niveles.

Una condición básica para trabajar en Psiquiatría Comunitaria es


tener emoción social y vocación de servicio, motivando, además, a
las instituciones de todo tipo para su participación.

OBSTÁCULOS A LOS PROGRAMAS DE PSIQUIATRÍA


COMUNITARIA

1. Subdesarrollo y Pobreza

Rotondo decía que "los servicios orientados hacia la comunidad, para


ser integrales, debían de instrumentarse flexiblemente, de acuerdo a
las características socioculturales de las poblaciones que se
proponían, directa o indirectamente, atender". Se trata, pues, de
servicios que inician un conjunto ordenado de acciones anticipatorias,
integrando todos los recursos disponibles en una comunidad.

En los países subdesarrollados, como bien sabemos, el ambiente, en


sus diversos aspectos no siempre es favorable para un desarrollo
óptimo y un buen funcionamiento de los individuos y de sus familias.
Privaciones de todo tipo, desorganización y tendencia a la
desintegración social, inestabilidad familiar y otros, se relacionan, en
forma circular, reforzándose mutuamente. La pobreza resulta, así,
causa y consecuencia. A la mala salud en general, frecuentemente, se
asocia mengua en la salud emocional. Así, puede decirse que los
problemas de los pobres se entremezclan con otros problemas, de
salud en general, de bienestar, de integración de la familia, etc. Por
otra parte, se crean círculos negativos en relación a la cobertura
insuficiente e inadecuada de las necesidades de salud y lo que
pudiera denominarse una tendencia a la presentación de reacciones
psicopatológicas, situaciones problemáticas sociales bajo forma de
"cadena, serie creciente o en espiral".

 2. Actitudes frente a la Salud Mental

Las actitudes negativas frente a la salud mental, particularmente


frente a la Psiquiatría y al psiquiatra, son muy conocidas, variando
desde los prejuicios y temores, hasta el rechazo y la marginación del
paciente mental.

3. El sistema formal de salud y la Psiquiatría Comunitaria

El obstáculo mayor a la labor de Psiquiatría Comunitaria,


paradójicamente, se da en el sistema formal y, mucho más aún, en
su sistema directivo. La salud pública y la medicina asistencial
priorizan la mortalidad, muy poco la morbilidad y mucho menos la
incapacidad del enfermo mental. En la práctica, los directivos del más
alto nivel y los de nivel intermedio, abierta o encubiertamente, ponen
obstáculos a esta labor. Pero, a nivel local, el médico y el personal de
salud de los Centros y Postas de Salud, que viven la realidad del
enfermo, cooperan y participan activamente en este programa.

ATENCIÓN PRIMARIA DE SALUD EN EL PERÚ

La APS está ligada a la medicina popular, que alcanzó un alto grado


de desarrollo en el antiguo Perú.

En lo profesional, la APS se inicia en nuestro país con Núñez Butrón,


en Puno, en 1925, con el Programa que popularizará con la
denominación de "RIJCHARIS"; luego, en Ica, 1940-50; y,
posteriormente, en Puno-Tambopata, 1950-59.

Actualmente hay una labor intensa en este sentido, con variados


proyectos y una descentralización a través de 32 coordinadores de
Salud Mental en todo el país, dependientes del Programa de Salud
Mental del Ministerio de Salud, bajo la responsabilidad del Instituto
Nacional de Salud Mental "Honorio Delgado-Hideyo Noguchi".
ATENCIÓN PRIMARIA DE SALUD MENTAL

La OMS en un estudio colaborativo, señala que ciertas técnicas y


métodos efectivos son aplicables a la atención de los trastornos
mentales y neurológicos de la comunidad dentro del marco de la APS.

Los principios básicos de este enfoque son:

1. Concentrar los esfuerzos en un pequeño número de afecciones


prioritarias, que deben seleccionarse en cada país según los criterios
de prevalencia, consecuencias nocivas, preocupación que despiertan
en la comunidad y disponibilidad de tratamientos sencillos y eficaces.

2. La detección de casos y su tratamiento se encarga, en la


comunidad, al personal local de salud; inclusive, a los trabajadores de
APS después de un breve adiestramiento en las técnicas prácticas en
los centros de salud y dispensarios, se les facilita un número reducido
de medicamentos de eficacia e inocuidad probadas.

3. Participación activa de la comunidad en la evaluación de sus


propias necesidades de salud mental y en la decisión de las medidas
idóneas de asistencia.

ÁREAS BÁSICAS DEL TRABAJO DE ATENCIÓN PRIMARIA DE


SALUD MENTAL. LOS SÍNDROMES MAS FRECUENTES.

Siguiendo a Climent, podemos resumir:

Depresión.- Depresiones, con psicosis o sin ella. Evidencia suicida.


Riesgo suicida. Intento suicida.

Angustia.- Pocos síntomas. Varios síntomas. Formas leves.

Psicosis.- Alucinaciones auditivas. Conducta extraña. Desajuste


laboral. Sin conciencia de enfermedad. Sin contacto laboral. Sin
contacto o alejado de la realidad. Puede haber depresión psicótica,
desorientación confusión. Alteración de la conciencia (psicosis
orgánica).

Epilepsia.- Ataques, (también durante el sueño). Convulsiones


generalizadas o parciales (diferenciar las convulsiones histéricas).

Alcoholismo.- Intoxicación (embriaguez)

Enfermedad: dependencia física, incapacidad para controlarse o


detenerse. Incapacidad para abstenerse.
Consecuencias: delirium tremens, alucinosis alcohólica, convulsiones,
cirrosis hepática. Polineuritis, impotencia sexual.

Dependencia de drogas ilegales.- (Esencial). Dependencia de una


droga (cocaína, pasta básica de cocaína, anfetaminas, marihuana,
otros).

Tabaquismo.- Actividades de Prevención Primaria.

También podría gustarte