psicología y arte

por Raquel Olmeda

La psicología se dedica al estudio del
comportamiento de la persona y cómo su
comportamiento es influido por otros ni-
veles. Es más las teorías psicosociológicas
actuales conciben a los grupos pequeños
como entidades psicosociales que poseen
características y modos de funciona-
mientos específicos.
Resulta realmente complejo vincular los
campos de la psicología y el arte partien-
do del simple carácter teórico e histórico
de estos, por lo tanto se les suele rela-
cionar desde una perspectiva cultural.
La psicología , empezó a interesarse, si
se me permite ese término, por el arte
al ver como se dotaban de significados
a las manifestaciones artísticas y cómo
estas sumergían a los individuos en una
cultura repleta de símbolos. La palabra
arte proviene de un antiguo vocablo de
origen griego básicamente significaría
“aquello que debe ser juntado, unido” o
“algo que une”. De esta manera, en sus
orígenes, el arte sería todo aquello que
tiende a unir partes separadas, produ-
ciendo además algo distinto a la mera
suma de las partes intervinientes.
Para saber abordar la intencionalidad de
la conducta del artista, del creador de és-
tos símbolos que dotan de significados lo
entendido como realidad y el papel que
todo ese proceso significa, hay que ob-
servar la cultura la sociedad. El llamado
proceso de socialización y culturización
de los individuos al que tantas veces he-
mos hecho referencia en nuestras clases,
es el punto clave, la construcción de cada
identidad personal, pero yo me pro-
pongo tomar esta construcción a nivel
colectivo, es decir de la sociedad como
conjunto. Para conseguir aclararnos el
concepto de psicología del arte, hay que
eleminar los prejuicios intelectuales exis-
tentes.
El desconocimiento de esta vertiente
de psicología (psico. del arte) se pro-
ducía porque la mayor parte de
los psicólogos se encontraban
más preocupados por abordar
tal diversidad de campos como
fuese posible que en conocer y
tratar de comprender las ma-
nifestaciones artísticas que se
producían. Es por ello que siempre
han existido vacíos, huecos por descifrar
entre la psicología y el arte, ya que no se
sabía cómo abordar los determinismos
existentes entre las dos “materias”, entre
las dos ramas de conocimiento. Cómo
detectar y establecer realidades paralelas
entre ellos es lo que me interesa en esta
investigación.
El arte se encuentra vinculado, a la pro-
pia experiencia del artista y de los di-
versos tipos de público, a determinadas
representaciones sociales a las que se
dirigen las obras artísticas de este, don-
de se implican y se funden sus propias
experiencias e intenciones. Conocer
este proceso en sí, es la psicología, in-
tentar examinar la realidad del artista
tan cuetionada a lo largo de la historia
y de construir, no de llegar a hacer una
definición generalizadora si no obtener
lo necesario para llegar a compren-
der un pequeño ápice de todo lo que en
realidad es. Nuestra mente es capaz de
crear infinidad de cosas. Preguntándole
a cualquier individuo qué entiende por
psicología nos la define como el estudio
encargado de indagar en nuestra mente,
siendo ésta una máquina de creación de
la que apenas conocemos y con la que a
través del arte podemos llegar a conocer
más.
Para facilitar la comprensión sobre la re-
lación entre arte y psicología comentaré
el doble punto de vista de estos, es decir
al arte, las creaciones y evidentemente las
biografías de los artistas son un complejo
grupo que forma parte de las distintas re-
presentaciones sociales de la cultura pero
pralelamente también constituyen las
representaciones sociales de los propios
artistas y de todas las miradas histórias
que se derivaron de sus obras. Las inten-
ciones científicas de la psicología consti-
tuyen una representación de la realidad
individual o social cambiante, respecto
de la cientificidad de la época en la que
se de el caso a estudiar, es decir, depende
de la realidad que domine en esa época
en cierto modo.

El arte se constituye
como saber, este saber
no delimita nada. Con
esto quiero decir que sí, hay un saber
artístico, pero no un sólo camino para
ese saber, hay varios caminos, varias
bifurcaciones que ayudan de gran ma-
nera a completar este saber artístico, que
principalmente se formaliza como una
experiencia indivudual, siempre desde
una visión cultural por supuesto.

Y lo que la psicología pretende es tomar

objetos de estudio a través de estas expe-
riencias individuales, desde evidencias
empíricas que producen toda obra artís-
tica sobre la realidad,
Las obras de arte producen intermi-
nables reacciones (atracción, rechazo,
indiferencia, etc.), en las personas que las
contemplan. La relación existente entre
los estímulos de la obra y las respuestas
del indivíduo ha sido el problema central
que se encargaron de estudiar las prime-
ras tendencias de la psicología.
Los psicólogos de la gestalt prestaron pri-
mordial atención a las cualidades forma-
les de los referentes visuales. La psicolo-
gía llevada a cabo por estos psicólogos es
una corriente de la psicología moderna,
surgida en Alemania a principios del
siglo XX, y cuyos exponentes más reco-
nocidos han sido los teóricos Max Wer-
theimer, Wolfgang Köhler, Kurt Koffka y
Kurt Lewin. Según esta visión, la mente
configura, a través de ciertas leyes, los
elementos que llegan a ella a través de
los canales sensoriales (percepción) o de
la memoria (pensamiento, inteligencia y
resolución de problemas). Se refiere tan-
to a la forma como a lo que percibimos.
Lo que vemos no es la suma de todos los
estímulos que recibimos si no que
es más que le suma de las partes. Importa
la forma pero como totalidad. Depende
de la intención de la idea, y pone mucho
énfasis en la forma.
Dentro de la gestalt, encontramos cier-
tas variaciones que conviene saber para
entender mejor:
Principio de la Proximidad - El agrupa-
miento parcial o secuencial de elementos
por nuestra mente respecto de la distan-
cia.
Principio de Simetría - Las imágenes
simétricas son percibidas como iguales,
como un solo elemento, en la distancia.
Principio de Continuidad - Los detalles
que mantienen un patrón o dirección
tienden a agruparse juntos, como parte
de un modelo. Es decir, percibir elemen-
tos continuos aunque estén interrumpi-
dos entre sí.
Principio de dirección común - Implica
que los elementos que parecen construir
un patrón o un flujo en la misma direc-
ción se perciben como una figura.
Principio de simplicidad - Asienta que el
individuo organiza sus campos percep-
tuales con rasgos simples y regulares y
tiende a formas buenas.
Principio de la relación entre figura y
fondo - Afirma que cualquier campo
perceptual puede dividirse en figura con-
tra un fondo. La figura se distingue del
fondo por características como: tamaño,
forma, color, posición, etc.
Por lo tanto, las ideas son los objetos que
la mente produce y que por lo tanto el
psicólogo o investigador como prefirais
llamarlo, estudia. Por eso la mayoría de
las veces el conocimiento se nos presen-
ta como eso que está y se produce en la
mente (no llegamos a conocer qué es), y
que responde a patrones y procesos uni-
versales, se regimen por el mismo patrón
por así decirlo.
Lo artístico es una actividad de la mente
que muchas veces si no es siempre, im-
plica la utilización y la tranformación
de varios tipos de símbolos, sistemas de
símbolos que ayuden a aunar estas pau-
tas, algo imposible a mi modo de ver las
cosas.
Los artistas habitualmente son mostra-
dos como representantes de un cierto
desorden mental, como individuos que
poseen peculiaridades en su personali-
dad o en su actividad profesional, es de-
cir a la hora de imaginar o crear. Esto es
porque para investigar la mente el artista
es un sujeto muy valiso ayuda a indagar
en ésta.
Las teorías de Freud y muchos otros psi-
coanalistas han contribuído a que los in-
divíduos fijen las representaciones sobre
sí mismos y el mundo y sus modos de
personarse. Básicamente, la importancia
primordial del arte y la psicología la cons-
tituye el hecho de que ambas “ciencias”
configuración diferentes concepciones
sobre cómo mirar y mirarnos sobre como
entendernos de mejor forma, de ayudar-
nos a construirnos. Tanto la una como la
otra contribuyen a que los seres huma-
nos tengan mucha más consciencia de lo
que han experimentado personalmente
y a que los fenómenos producidos por
la creación o percepción constituyan esa
realidad.

Freud fue uno de los psicólogos que más

profundizó en el campo del arte. Sus
teorías, así como la de otros psicoanalis-
tas posteriores, se suelen utilizar como
marco teórico para analizar obras de arte,
literatura y cine. Las distintas interpreta-
ciones freudianas se basan en la visión de
Freud del arte como un método efectivo
para la sublimación de deseos reprimi-
dos. Un análisis freudiano de una obra
de arte puede ser enfocado a la psicología
de los personajes, del autor o del público.
Desde principios del Siglo XX sus ideas
se han representado con frecuencia de
forma explícita o implícita en corrientes
del arte, la literatura y el cine.
2. Conciencia Colectiva
La conciencia se refiere a la capacidad
que nos indica qué está bien o mal. Es-
tas valoraciones del instante, permiten
al individuo percibirse a sí mismo como
alguien capaz de modificar su entorno
o por el contrario como alguien sujeto a
unas restricciones que le superan. Tene-
mos conciencia cuando sabemos lo que
está aconteciendo en nuestro Yo y otor-
garle un concepto, ya en lo que es propio
de nuestro mundo interior, ya en lo que
es el mundo exterior que en él se refleja.
La conciencia presenta algunas propie-
dades claramente diferenciadas: dina-
mismo, unidad o totalidad, subjetividad,
intencionalidad y conocimiento certero.
La conciencia se caracteriza por predis-
poner a la persona a actuar de forma
equilibrada entre su cosmovisión y los
hechos percibidos en el presente.
En psicología la conciencia tiene varias
funciones fundamentales:
Representa idealmente las posiciones de
las personas que están incluidas junto
con él en determinadas relaciones socia-
les. Permite al individuo ser el represen-
tante de estas relaciones. El individuo,
gracias a la conciencia, organiza la activi-
dad propia al desarrollar funciones bási-
cas en la psiquis tales como: la búsqueda,
la prueba y la imagen ideal de la activi-
dad misma.
Por otra parte, hay diferentes desarrollos
de esta función cerebral:
Conciencia individual: se refiere a la
conciencia de uno mismo y de cómo el
entorno lo puede perjudicar o favorecer.
Se establece lo que es bueno y malo para
uno mismo. El ejercicio acertado de esta
función mental se llama instinto de su-
pervivencia. En el hombre, el resultado de
su racionalización le dota de mayor capa-
cidad de autodominarse, de una mayor
creatividad y de esto nace la Inteligencia
preconsciente (Véase nota).
Conciencia social: se refiere a la concien-
cia del estado de los demás miembros de
su comunidad y de cómo el entorno los
puede perjudicar o favorecer. Se establece
lo que es bueno y malo para una comuni-
dad. El ejercicio acertado de esta función
mental se llamainstinto de protección. En
el hombre, el resultado de su racionaliza-
ción le dota de capacidad cooperacional,
y de esto nace la Inteligencia social.
Conciencia temporal o competente: se re-
fiere a la conciencia del medio que le ro-
dea y de cómo afecta a uno mismo y a los
demás en la línea del tiempo. Se establece
lo que es bueno y malo para el futuro de
la comunidad.
El término de conciencia social hace
referencia a la capacidad de determina-
dos individuos, grupos uorganizaciones
sociales de percibir aquellas realidades
circundantes que requieren atención, de
reflexionar sobre ellas y en algunos casos,
de actuar para la transformación de las
mismas. La idea de conciencia social está
hoy altamente extendido por el impor-
tante aumento de grupos poblacionales
en inferioridad de condiciones (inferiori-
dad que se representa a nivel económico,
ideológico, étnico y sexual) y por la ne-
cesidad cada vez más acuciante de actuar
de modo positivo en la modificación de
esasrealidades sociales alternativas a la de
uno mismo.
Ligado muy fuertemente a las ideas de
solidaridad y compromiso, la concien-
cia social es el primer paso en el cami-
no hacia la alteración de estructuras de
discriminación voluntaria e involuntaria
ejercidas sobre determinados grupos
sociales dentro de una comunidad. La
conciencia social, por tanto, tiene que ver
con la posibilidad de estar al tanto de los
problemas intrínsecos a una sociedad que
requieren solución. Si bien normalmente
se utiliza la idea de conciencia social para
hacer referencia a la necesidad de actuar
en beneficio de aquellos que viven en si-
tuaciones de pobreza, marginalidad y ex-
clusión, también con ella se puede hacer
referencia a la importancia del cambio de
estructuras o pautas de comportamiento
que afectan al conjunto de una sociedad,
por ejemplo, el cuidado del medio am-
biente, el respeto por las normas de trán-
sito, etc.
Hay muchas maneras en que la concien-
cia social puede aparecer en un individuo
o grupo social. Mientras que los teóricos
sostienen que lo más aconsejable es ase-
gurar la presencia de la conciencia social
desde que se es niño (de modo que ésta
esté siempre presente en la persona, para
lo cual los sistemas informales y formales
de educación son esenciales), la concien-
cia social también se puede despertar en
las personas y ser adquirida y/o expan-
dida con el paso del tiempo, de acuerdo
a las necesidades momentáneas de cada
conjunto social. Así, si bien personas de
determinada edad no han sido educadas
en la adquisición de conciencia social res-
pecto a diferentes temas, campañas pu-
blicitarias de diverso cariz pueden servir
para que se generen espacios de reflexión
sobre la importancia de la misma en mo-
mentos específicos de la existencia de una
comunidad.
Pero además para entender el concepto
de conciencia colectiva creo que antes
debemos tener claro la existencia de la
psicología social. Esta rama de psicología,
es intermedia, y estudia como influyen
en la sociedad, grupos, organizaciones y
también las relaciones entre grupos. Por
separado, se definene sociología como el
estudio que revisa cómo está estructurada
la sociedad y cómo influye en el resto de
niveles. Lo que hay que tener en mente
y realmente claro esque este trabajo va a
partir de estudiar el grupo de jugadores
de básquet mediante, no sólo ellos como
grupo si no también, como espectáculo y
estrellas a las que los espectadores mani-
pulan y contrariamente, adoran.
Una vez explicado esto, veamos en que
consiste lo que denominamos por con-
ciencia colectiva.
La conciencia puede funcionar en ‘piloto
automático’, es decir, sin necesidad de
ejercitar inteligencia alguna, únicamente
basándose en los instintos. El individuo
es consciente de lo que está haciendo,
pero no se plantea si es bueno o malo.
Existen varias vertientes pero para acla-
rar pondremos más atención a la con-
cienci individual y conciencia colectiva o
social.
La conciencia individual se refiere a la
conciencia de uno mismo y de cómo el
entorno lo puede perjudicar o favore-
cer. Se establece lo que es bueno y malo
para uno mismo. El ejercicio acertado de
esta función mental se llama instinto de
supervivencia. En el hombre, el resultado
de su racionalización le dota de mayor
capacidad de autodominarse, de una
mayor creatividad y de esto nace la Inte-
ligencia preconsciente.
La noción de conciencia colectiva se
refiere a todo tipos de creencias y actitu-
des morales compartidas que funcionan
como una fuerza unificadora dentro de
una sociedad. Esta fuerza es dominante
si se compara con la conciencia indivi-
dual y propia de cada ser humano. Por
lo tanto partimos de que una sociedad,
nación o grupo constituyen una entidad
que se comporta como un individuo glo-
bal, siguen las mismas creencias, tienen
los mismos pensamientos, etc.
En las diferentes y multitudes de mentes
humanas, hay una conciencia colectiva
o también llamada conciencia espiritual,
que está extendida por toda la humani-
dad, no existe nada más poderoso que el
poder de controlar los pensamientos de
miles de personas. Para verlo de forma
más clara quizás apuntar ciertos aspectos
de la historia que han sido guiados por
esta consciencia nos ayude como por
ejemplo, la supremacía del hombre, del
ser masculino, lo viril, el hombre como
centro del mundo. Una visión androcén-
trica del mundo. Todo el ocultamiento
de la mujer desde la prehistoria hasta
actualmente y aun no destapado del todo
es acausa de la consciencia colectiva y en
consecuencia, constituye un nuevo modo
de ser para la humanidad.
El concepto de conciencia colectiva
fue acuñado por el sociólogo Èmile
Durkheim en varias de sus obras. Él
sostiene que el conjunto de creencias y
sentimientos comunes al término medio
de los miembros de una misma sociedad,
forma un sistema determinado que tiene
vida propia y que podemos denominarlo
conciencia colectiva o común. Es pues
algo completamente distinto a las con-
ciencias particulares aunque sólo se reali-
ce en los individuos.
En su libro “De la división du travail
social”, sostiene que en sociedades “tra-
dicionales” (basadas en las relaciones
familiares, tribales o entre clanes).