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Empieza a ser egoísta

Si el espejo es digno de imitación, y el teatro es el espejo de las costumbres,


volvámonos actores representando ante nosotros y los demás, nuestra vida de
una forma sencilla, aceptemos las experiencias de vida y aprendamos de los
demás, las experiencias ajenas son los espejos que tenemos para aprender de
ellas. Confiemos y no olvidemos esto jamás.

Para explicar este título piensa el ejemplo de George Bernard


Shaw, quien decía: "El hombre razonable se adapta al mundo, el
irrazonable insiste en que el mundo se adapte a él. De ahí que el
progreso dependa del hombre irrazonable".
Es fundamental que busques tu
¿Puedes decir que
inspiras a los que te singularidad, lo que te distingue, debes
rodean?
aprender a debes diferenciarte, porque
¿En qué eres su
inspiración? si no eres diferente, eres invisible. Pero
al mismo tiempo pregúntate: ¿Cómo iluminas los espacios?
Como plantea Shaw para lograr este proceso es necesario que
te detengas en seguir las reglas, porque salvo la gravedad todas las
reglas son negociables, alguien las hizo. Precisamente esa es la
capacidad: negociar las reglas, no aceptar que te las impongas e
imponerlas.
Para lograr transformar lo que sea, tenemos que hacer
compromisos irrazonables. Si solo nos comprometemos con lo que
creemos razonable, nos estamos comprometiendo a vivir según la
inercia cultural, y no estamos asumiendo el compromiso de
transformar las cosas.
Comprometerse con lo razonable es "cómodo", aprendemos lo
ya aprendido, nos comprometemos siempre y cuando tengamos
ganas, tiempo o sea de nuestra "conveniencia" y nada agregamos al
crecimiento personal o colectivo. Para crear un futuro extraordinario
es necesario comprometerse más allá de nuestra conveniencia, es
necesario declarar compromisos irrazonables.
Ser irrazonable no es un defecto, es actuar de tal manera de
trascender el sentido común. Toda transformación empezó con
alguien que se comprometió más allá del sentido común. Las
personas comprometidas con lo irrazonable son las que han viajado a
la luna o las que se disponen a trabajar para erradicar la poliomielitis
del mundo.
Su nivel de compromiso manifiesta que tan importante es algo
para una persona y para saber si podemos confiar en ella observemos
sus acciones y no sus palabras.
Cuando lograr el proceso de aprendizaje que estoy
describiendo, tu mente empieza a “resonar”: la intuición emerge
poderosa, pues tus sentimientos y pensamientos pasan a estar
gobernados por la verdad interior, por lo positivo, y emerge la
creatividad. Lo extraordinario es que los que te rodean te empiezan a
ver en esta dimensión.
Para lograr esta abierto a lo nuevo y no estar limitado por
temores, frustraciones, angustias…puedes seguir los siguientes
pasos:
Paso 1: Identifica lo que te ata, lo que te frustra, lo que te
inhibe.
Paso 2: Escribe las razones por las cuales piensas que has
almacenado en la memoria esa experiencia.
Paso 3: Elaborar un cuadro de dos columnas que incluye las
preguntas: ¿Qué hace este recuerdo en mí? (LADO IZQUIERDO)
¿Qué dice este recuerdo que hace por mí? (LADO DERECHO).
Paso 4: Escribe un resumen breve de cada columna.
Paso 5: Responde 7 preguntas sobre si el resumen de tus
afirmaciones son verdaderas, falsas, o contradictorias.
Paso 6: Aborda la mentira de la columna derecha, púrgala.
Paso 7: Pregúntate sobre la toxicidad de ese recuerdo y
púrgalo.
Paso 8: Vuelve a las razones del listado del paso 1 y púrgalos.
Paso 9: Visualiza la nueva experiencia después de liberar ese
recuerdo.

Hemos olvidado escuchar-nos. La intuición nos permite


escuchar nuestra voz interior de conocimiento y esto ocurre porque
“no tenemos tiempo” o simplemente “nos evita-mos”. Como
resultado, quedamos des-conectados de nosotros mismos, del
proceso de darnos cuenta. Hemos aprendido a desconfiar de nuestra
voz interior, quizás por temor.
En el proceso de desarrollo de nuestra singularidad, haya que
estar conciente de dos pérdidas que debería evitar: o perder al TÚ o
perder al YO en este proceso.
En la primera pérdida, sólo parece el YO. El TÚ no entra en tu
vida, no pertenece a tu vida. Empiezas a hablarte a ti mismo: me
defino por lo que pienso, y si hago matemáticas, pienso de modo
riguroso y fiable. Es el yo solitario haciendo matemáticas. Y así
empiezas a aparecer los yo solitario que construyen puentes y
aviones y poco a poco vamos perdiendo al tú en el camino.
Fromm analiza profundamente y muy bien, las situaciones
patológicas del amor, a si nos describe perfectamente, como hay
personas, que para superar esa separatividad confunden el amor que
es cuidado y respeto hacia la persona amada, por dominación,
anulando al objeto de su amor, por que así "absorben su voluntad y
su personalidad", y como esas personas que se dejan anular, son
casos también patológicos, que necesitan para librarse de su soledad,
renunciar a su personalidad e integrarse en otra más "fuerte" que
ellas, y digo mas fuerte entre comillas, por que no es cierto por que
el dominante, para mantenerse, necesita al dominado tanto o mas.
Es el segundo tipo de pérdida. Pero a menudo, al dejar de
escuchar-nos y volcar toda nuestra energía hacia escuchar al tú
(individual o grupal), llega un momento en que empezamos a acallar
nuestra voz interior y en ese proceso de silenciamiento, perdemos el
yo.

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