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Escuela Con Jesús Octubre 2018:

¡Misioneros del Amor!


¡Con mucha alegría transitamos juntos este Octubre Misionero que nos encuentra
celebrando los 175 años de la IAM! A través de esta propuesta de Escuela con Jesús, los
invitamos a trabajar con los niños y adolescentes la maravilla de la misión:“¿Qué hacemos
los misioneros?”. Anunciamos, compartimos, expresamos, hacemos, salimos… En una
palabra: ¡Amamos!
El ciclo con las actividades está pensado para niños y para adolescentes. Habrá
indicaciones precisas para ambos casos, cuando sea necesario; aún así, los animadores
adaptarán los encuentros y recursos según lo crean conveniente.

CATEQUESIS MISIONERA:
¡Un misionero… Ama! (y ama mucho)
Objetivo: Que el niño/adolescente comprenda que
los misioneros estamos llamados a amar, ya que la
misión de Jesús consiste en anunciar el Amor,
amando a los demás como Él lo hizo.

Recursos: Semillas fácilmente reconocibles (girasol,


maíz, etcétera). Si se pudiera, alguna imagen de
plantas de girasol, maíz, etcétera, según la semilla
elegida. Bollitos de papel de los colores de los
continentes (armados como si fueran semillas) en
cuyo interior habrá papelitos con la palabra “amar”
en diferentes idiomas. Un afiche y plasticola.

Ambientación: Rincón de la Palabra, imágenes de


plantas fácilmente reconocibles (las mismas de las
semillas a utilizar). Las semillas hechas de papel
estarán escondidas (con mayor o menor dificultad
según se trate de un encuentro para niños o adolescentes)

Oración Inicial: De manera espontánea, le daremos Gracias a Jesús por llamarnos


nuevamente a su encuentro y por amarnos con el amor de Amigos. Le pedimos que nos
permita escucharlo y descubrir su Amor en esta jornada.

Animación: Cantamos alguna canción sobre el amor o el amar. Interpretamos, además, el


Himno de la IAM (en el canal de YouTube de OMP Argentina está subido con las mímicas)
Revisamos nuestros compromisos misioneros de la semana pasada

EXPERIENCIA DE VIDA: El animador mostrará semillas (las hará circular por el grupo para
que todos tomen contacto con ellas) y preguntará si conocen de qué semilla se trata.
Cuando todos respondan (pondremos por ejemplo que llevamos semillas de girasol)
preguntará: Si la sembramos, ¿qué planta nacerá? (“Girasol”); ¿Y le saldrá una flor de qué
especie? (“De girasol”); Y, finalmente, dará semillas ¿de qué especie? (“¡De girasol!”). El
animador puede mostrar otras semillas de otras especies y preguntar lo mismo, a fin de
mostrar más ejemplos. Luego, indagará acerca de por qué una semilla de girasol está
llamada a ser girasol, dar flores de girasol y semillas de girasol… Los niños/adolescentes,
claramente responderán “¡Porque es un girasol!”

Entonces, si una semilla de girasol (para seguir con el ejemplo) fue creada para ser girasol
y solamente puede dar “productos” (aceite, por ejemplo) de girasol… Nosotros, las
personas, los misioneros ¿a qué estamos llamados? ¿Para qué fuimos creados? ¿Qué es lo
que estamos invitados a dar? ¡Vamos a averiguarlo!
El animador le dirá a los niños/adolescentes que en salón (o en el patio, o donde se realice
el encuentro) hay un montón de semillas que representan a todas las personas del
mundo. ¡Vamos a buscarlas para descubrir juntos a qué estamos llamados! Los
niños/adolescentes buscarán las semillas y, luego, las “abrirán” para ver cuál es esa
verdad que escondemos todos, que nos indica nuestra misión. Al abrir los bollitos de
papel, encontrarán papelitos con palabras del tipo: “Liebe“(alemán), “láska” (checo),
“l'amour »(francés), « aroha” (maorí), etcétera…

ILUMINACIÓN: ¡Un montón de palabras! No conocemos, por ahora, su significado. El


animador indicará que la única certeza que tiene es que todas las palabras dicen lo mismo,
en diferentes idiomas, ya que todas las personas del mundo, en todas las culturas, en
todos los continentes, ¡en todos los idiomas!, estamos llamados a lo mismo…
¡Jesús es la Palabra que nos va a ayudar a “traducir” y dar sentido a todos los papelitos
encontrados!

“Y ahora, así dice el Señor, el que te creó (…), el que te formó (…) es que tú vales mucho
para mí, eres valioso y yo te amo” (Isaías 43, 1; 4)

“Ámense los unos a los otros. Como yo los he amado, así también ámense los unos a los
otros. Por el amor que se tengan los unos a los otros reconocerán todos que son mis
discípulos” (Juan 13, 35-35)

Reflexionamos: ¡Qué maravilla! Hemos sido creados por amor… Entonces, ¿para qué
hemos sido hechos? ¡Claro! ¡Para amar! Esa es la verdad del misionero, la verdad de todas
las personas, en todos los idiomas, en cualquier parte del mundo: Estamos llamados a
amar…
Actividad: “Amar”, eso dicen los papelitos que encontramos.Sobre un afiche, se invitará a
que los niños/adolescentes coloquen los papelitos de tal forma que formen la palabra
“Amar”. Si el grupo fuera de adolescentes, se los puede invitar a que busquen en sus
celulares más idiomas, más maneras de decir “amar”, para enriquecer la actividad.

Oración Final: Agradecemos a Dios por expresarnos en su Palabra lo mucho que nos ama
e invitarnos a amar. Pedimos por aquellos que aún no conocen esta Buena Noticia de
saberse amados por Él.

Compromisos: Los niños/adolescentes asumirán sus propios compromisos. Podemos


sugerir, por ejemplo, que en esta semana realicen algún gesto (cada uno discernirá cuál)
que confirme que estamos “hechos por amor, para amar”.

ESPIRITUALIDAD MISIONERA:
“¡AMO… PORQUE SOY AMADO!”
Objetivo: Que el niño/adolescentehaga
experiencia de saberse amado. De esta
manera, confirmará que fue hecho por
amor… para amar.

Recursos: Una caja de bombones (se


sugiere que sea del tipo “surtidos”, para
que haya variedad, uno para cada
niño/adolescente); Dos corazones
grandes de tela (se sugiere que el
tamaño alcance para que entre dentro
del corazón un niño/adolescente de
cuerpo entero; si fuera posible, la tela
debe ser del tipo “polar” o alguna que sea acolchada, suave, gruesa, como si fuera una
manta, para asegurar la calidez de la experiencia). Música católica que hable del amor y de
cuánto nos ama Dios (“Nada te turbe” –Pascua Joven-, “Vida en Abundancia” –Pascua
Joven-, “Nada puede separarte” –Athenas-, etcétera). Si se trabaja con adolescentes,
sumar el audio “Hola soy Jesús” (se puede descargar de YouTube; se trata de una carta de
Jesús en la que nos invita a amar)

Ambientación: Rincón de la Palabra con velas. Los dos corazones de tela, uno arriba del
otro (un corazón quedará como alfombra y el otro encima quedará como una manta. En la
dinámica, los niños/adolescentes se “meterán” entre medio, quedando tapados por el
corazón de arriba y sostenidos por el de abajo)
Oración Inicial: De manera espontánea, le daremos Gracias a Jesús por llamarnos
nuevamente a su encuentro y por amarnos. Le pedimos que nos ilumine en este
encuentro para que estemos atentos a ese Amor que quiere expresarnos.

Revisamos compromisos misioneros de la semana anterior.


EXPERIENCIA DE VIDA: El animador mostrará a los niños/adolescentes una caja de
bombones. La idea es que tenga variedad. Hará circular la caja para que todos puedan
verla (aún nadie podrá sacar de ella ningún bombón). El animador preguntará: ¿Han
probado alguno de estos bombones? ¿Si pudieran elegir, cuál querrían? ¿Por qué?
(seguramente, los niños/adolescentes elegirán “los más ricos, los que más les gustan”).
¿Cuál de todos creen que es el más rico? ¿Cómo saben que éste (o estos) es (son) el (los)
más rico(s)? (los niños/adolescentes, seguramente responderán que lo saben porque los
han probado). El animador seleccionará dos bombones (o aquellos que hayan sido
elegidos como “los más ricos”) y dirá: “Yo aún no probé nunca ninguno de estos
bombones, ¿cuál me recomiendan? ¿Qué tengo que hacer para darme cuenta cuál de
estos me gustará más?” (seguramente, todos responderán que deberá probarlos y
descubrirlo). El animador probará dos bombones y elegirá el que más le guste. Luego,
animará a los niños/adolescentes a retirar de la caja los bombones que más les
gusten.Reflexionamos: ¡Necesitamos probar los bombones para descubrir cuál es el más
rico, cuál nos gusta! Si probamos el más rico, podemos discernir para la próxima cuál
preferiremos y, seguramente, volveremos a elegir aquel que más nos gustó. ¡Con Dios
pasa algo similar! En el encuentro pasado descubrimos que Dios nos hizo por amor y para
amar… La misión del misionero es amar porque es amado. Pero, ¿Cómo sabemos esto?
Básicamente, ¡porque hemos probado el Amor de Dios! Hemos hecho experiencia de ese
Amor, nos ha gustado tanto que nos mueve a elegirlo, a “recomendarlo” y a seguir
gustándolo… ¡Como los bombones!

ILUMINACIÓN: Escuchemos un pasaje de la Biblia en el cual se expresa cómo el misionero


anuncia aquello que ha probado, que ha experimentado…

“Prueben y vean qué bueno es el Señor,


Dichoso el hombre que se refugia en Él” (Salmo 34 -33-, 9)

“El amor con el que te amo es eterno (…) no cambiará mi amor por tí, dice el Señor, que te
ama”(Isaías 54)

Reflexionamos: ¡Cuánto nos ama Dios! El animador invitará a los niños/adolescentes a


preguntarse y responderse acerca de las experiencias de haberse sentido amados por Dios
a lo largo de su vida. Indudablemente, ese amor los mueve hoy a amar, a ser misioneros
de ese Amor y a seguir queriendo experimentarlo, gustarlo, saborearlo.

Momento de Celebración y Oración: ¡Volvamos a hacer experiencia del Amor de Dios! Se


encenderán las velas y se invitará a los niños/adolescentes a sentarse en el suelo en torno
al corazón doble (un corazón de tela encima del otro). Se colocará una música suave, a fin
de crear un clima de oración mientras el grupo se dispone a celebrar. El animador invitará
a que, mientras suena la música escogida que refleja el Amor de Dios, cada
niño/adolescente se pueda “meter” dentro del corazón de Dios, taparse con el corazón y
quedarse un ratito dentro (entre los dos corazones) para hacer experiencia de cuánto nos
ama. En el momento en el que cada uno está dentro del corazón, se los invitará a recordar
y revivir esos retazos de historia en los que nos hemos descubierto siendo amados por Él.
Dentro del corazón, podrán saborear el bombón elegido, gustando de esa dulzura,
relacionándola con esta experiencia de Dios amándonos.

Si se trabaja con adolescentes, escuchar el Audio “Hola soy Jesús”.

Citas sugeridas para que el animador lea mientras se realiza la dinámica/oración:

“No temas porque yo estoy contigo, no te angusties porque yo soy tu Dios. Yo te fortalezco
y te ayudo y te sostengo con mi brazo victorioso” (Isaías 41, 10)
“Es que vales mucho para mí, eres valioso y yo te amo” (Isaías 43, 4)
“No temas que yo te he rescatado. Te he llamado por tu nombre y eres mío” (Isaías 43, 1)
“Yo hago nuevas todas las cosas” (Apocalipsis 21, 5)
“No temas, basta que creas” (Marcos 5, 36)
“Yo estoy contigo y nadie podrá hacerte daño” (Hechos 18, 10)

Luego de que todos se hayan metido dentro del corazón de Dios (el animador también), se
dará Gloria a Dios por tanto amor, en acción de gracias.

Compromisos: Los niños asumirán sus propios compromisos, pero se les puede sugerir
tener en la semana algún momento de oración (poner música en casa, hacer silencio, leer
una cita bíblica… tomarse unos minutos para sentirse amados y dejarse amar)

PROYECCIÓN MISIONERA:
¡Amamos tanto, tanto…!
Objetivo: Que el niño/adolescente anuncie el Amor a
través de gestos concretos de amor. Específicamente,
¡que el misionero AME!

Recursos: Si se trabaja con adolescentes, colocar la frase


“Por los siglos de los signos Amen (Así, sin acento)” –si los
niños son pequeños no podrán comprender la sutileza
del mensaje de la frase-. Cartones, cartulinas, papeles,
fibrones, pinturas, etcétera.

Ambientación: Rincón de la Palabra. La frase “Por los


siglos de los signos Amen (Así, sin acento)”. Carteles
grandes con la palabra “amar” en diferentes idiomas
(como en el encuentro de Catequesis Misionera; si es
posible, se puede decorar con plantas y de cada rama
colgar las palabras como si fueran hojas, para remitir al
niño/adolescente a lo aprendido desde el primer
encuentro con las semillas y plantas)

Oración Inicial: De manera espontánea, le daremos Gracias a Jesús por llamarnos


nuevamente a su encuentro y por amarnos. Le pedimos que nos ilumine en este
encuentro para que seamos anunciadores del Amor.

Revisamos compromisos misioneros de la semana anterior.

EXPERIENCIA DE VIDA: Luego de tratar de recordar lo aprendido y experimentado en los


encuentros anteriores, el animador preguntará: Entonces, de acuerdo a todo lo que
hemos vivido, ¿Qué hace un misionero que se descubre amado?... ¡Ama! “El misionero
ama”, así de simple, así de profundo… Para que el mensaje quede como síntesis, el
animador repetirá varias veces “el misionero…” para que los niños/adolescentes repitan
“¡Ama!”. Luego, hará que se lo digan al compañero de la derecha y de la izquierda; que lo
griten al compañero del frente; que se pongan de pie (si están sentados) y que lo griten
más fuerte para que se escuche más allá de las fronteras.

Reflexionamos: El misionero ha sido creado por amor para amar. Con la vida misma, con
el testimonio, con los gestos, estamos llamados a anunciar el Amor… Amando.
Iluminación: “Ámense los unos a los otros. Como yo los he amado, así también ámense los
unos a los otros. Por el amor que se tengan los unos a los otros reconocerán todos que son
mis discípulos” (Juan 13, 35-35)

Reflexionamos: ¡No podemos quedarnos quietos! Estamos llamados a amar.¡Eso hacen


los amigos de Jesús, los discípulos! ¡Eso hacemos los misioneros!

Gesto Misionero: Utilizando cartones, cartulinas, fibrones, etcétera, por grupo (si se trata
de niños, se recomienda ya tener los carteles preparados para no perder tiempo; con
adolescentes pueden realizarlos durante el encuentro) armarán carteles con consignas de
amor para amar, por ejemplo: “Un abrazo por los niños del mundo”, “Un mate por la
amistad”, “Una sonrisa por la paz”, “Te barremos la vereda por la IAM”, “Un Ave María
por los niños y adolescentes del mundo”, “Una monedita por los niños del Orfanato de Bo
(Sierra Leona)”, “Choque los cinco por la familia”… (si se utilizan estos mensajes, deberá
preverse llevar mate, escoba, etcétera al encuentro, tal como se pide en algunos carteles)

Divididos en grupo, los niños/adolescentes saldrán a la calle con los carteles a cumplir las
consignas con las personas con las que se encuentren (e invitándolas a responder al gesto
de amor que se pide en dichos carteles). Si se trata de adolescentes, se les puede pedir
que saquen fotos de las consignas con las personas que las hayan cumplido y que las
suban como historias a las redes sociales con el Hashtag #ElMisioneroAma. Se puede
aprovechar para compartir acerca del DOMUND, una ocasión para seguir amando más allá
de las fronteras.

Oración: Agradecemos a Jesús por la misión realizada. Pedimos para que Él transforme la
vida de quienes hayan recibido los gestos de amor y que éstos los muevan a seguir
amando.

Compromisos: Los niños/adolescentes asumirán sus propios compromisos. Podemos


sugerir, por ejemplo, que en esta semana traten de seguir teniendo gestos de amor para
con los demás.
COMUNIÓN MISIONERA: ¡AMÁNDONOS… SOMOS
UNA COMUNIDAD DE AMOR!
Objetivo: Que el niño/adolescentefesteje con su comunidad ser
amado y llamado a amar en este mes misionero, aquí y más allá de
las fronteras.

NOTA: Este encuentro tiene una particularidad: La Comunión


Misionera se vivirá en comunidad, en la celebración de la Eucaristía.
Por lo que la propuesta consiste en que cada grupo pueda modificar
el día y hora del encuentro semanal para vivir la Misa con la
comunidad.

Ambientación: Decorar el Templo con la palabra “amar” en distintos


idiomas o el afiche realizado en la actividad del Encuentro de
Catequesis Misionera. Se puede colocar el afiche del Mes de las
Misiones y algo referido al DOMUND.

Oración Inicial: Antes de comenzar la Misa, le daremos Gracias a Jesús por llamarnos
nuevamente a su encuentro. Le pedimos que nos permita vivir y crecer en la comunidad
de quienes conocen y viven el Amor.

Revisamos compromisos misioneros de la semana anterior.

EXPERIENCIA DE VIDA: El Animador repasará con los niños/adolescentes lo vivido en este


mes misionero. Invitará a que los niños/adolescentes puedan reflexionar acerca de por
qué la Misa es por excelencia la muestra de Amor que nos mueve a amar en comunidad.

ILUMINACIÓN: “La multitud de los fieles tenía un solo corazón y una sola alma. Nadie
consideraba como propios sus bienes, sino que todo lo tenían en común. Los apóstoles
daban testimonio de la resurrección del Señor Jesús con gran poder, y aquél era para todos
un tiempo de gracia sin igual”(Hechos 4, 32-33)

Reflexionamos: Somos comunidad de Amor que ama. Esto es la Eucaristía, esto es


celebrar ser amados, amar a Dios y amar a los demás. ¡Vayamos a vivir juntos la Misa! (si
coincidiera el Encuentro con la Jornada del DOMUND, se puede animar a los
niños/adolescentes a que compartan testimonio acerca de las misiones y la importancia
de ayudar a los misioneros y sus gestos concretos de amor por los demás)

Oración: Agradecemos a Jesús por estos encuentros. Pedimos por todos los niños y
adolescentes que a través de gestos de amor nuestros y de los demás podrán descubrirse
amados, y por los misioneros, para que sientan que ese anuncio del Amor está siendo
acompañado por nosotros, como comunidad.
Compromisos: Los niños asumirán sus propios compromisos.

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