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Las cosquillas y la risa[editar]

Niño riéndose como respuesta a las cosquillas. Provine considera este tipo de comportamientos como
un mecanismo de socialización innato, destinado a crear vínculos, que heredamos de nuestros
ancestros.

Probablemente, las cosquillas son la forma más antigua y segura de estimular la risa. Las


cosquillas y la risa son unas de las primeras formas de comunicación entre la madre y el bebé.
La risa aparece entre los tres y medio a cuatro meses de vida, es decir, mucho antes que
el habla. Por este motivo, la madre utiliza las cosquillas para estimular la risa del bebé y
establecer así una comunicación. La risa a su vez estimula a la madre a continuar haciendo
cosquillas, hasta que llega un momento en que el bebé empieza a quejarse, momento en el
que la madre se detiene.3
Por el mismo motivo que es más difícil reírse en solitario, también es difícil que una persona
se haga cosquillas a sí misma. Las cosquillas constituyen una parte importante del juego, de
manera que, cuando se le hacen cosquillas a una persona, no solo intenta escaparse y se ríe,
sino que intenta devolverlas. En el proceso de dar y recibir cosquillas, se tiene una especie de
programación neurológica que hace que las personas establezcan vínculos, y sucede lo
mismo con el sexo. Las axilas, las palmas de las manos y las plantas de los pies son zonas
cuya estimulación mediante cosquillas produce la risa con mayor facilidad. 3

La risa es contagiosa[editar]
Al igual que el bostezo, la risa es un comportamiento social neurológicamente programado,
cuyo origen se encuentra en la necesidad de sincronizar el estado de comportamiento grupal.
Es, por ejemplo, el motivo por el que hay una pista de risas en las series
cómicas de televisión.n. 5 Cuando oímos a otra persona reírse de algo, inmediatamente nos
fijamos en ese algo y lo consideramos más divertido que si esa persona no se ríe, y entonces
sonreímos o incluso llegamos a reír.3

El sexo[editar]
Tanto los hombres como las mujeres se ríen en la misma medida. No obstante, la situación
que produce más risa es cuando un hombre habla con una mujer, o viceversa, y en esta
situación la mujer es la que lidera la risa y el hombre el líder de producción de la risa. Al igual
que ocurre con el habla, la risa de las mujeres presenta en general un tono más agudo que la
de los hombres. Una de las características de los hombres más atractivas para las mujeres es
el sentido del humor, aunque no precisamente la capacidad de reírse. Es decir, la mujer busca
a un hombre que la haga reír y que no se ría demasiado. 3

Como mecanismo de control de los demás[editar]


La relación entre la risa y los sucesos del mundo está modulada por la cultura y la sociedad.20
Actualmente, relacionamos la risa con la idea de «ser feliz y sentirse bien». Sin
embargo, Platón y Aristóteles, entre otros autores que escribieron sobre la risa, tenían una
visión más oscura sobre ella. Ellos, por ejemplo, encontraban divertidas
las ejecuciones públicas, algo que actualmente es políticamente incorrecto, del mismo modo
que también se reían, además de con las personas de su grupo, de personas de otros grupos,
como por ejemplo, otras etnias o razas. En la actualidad, nuestro propio lenguaje matiza tal
diferencia: no es lo mismo reírse con alguien, que reírse de alguien. Para Robert Provine, la
risa ridiculizadora es un mecanismo instintivo ancestral diferente de la risa de grupo que servía
para modular la conducta de los individuos que no pertenecían al grupo propio, con la finalidad
de que éstos se adaptasen y se integrasen en el mismo. 3 La antropóloga Verena Alberti utiliza
los términos «risa de acogida» y «risa de exclusión». 20
Según el científico, esa es la razón por la que la gente ríe en circunstancias embarazosas o
desagradables. Afirma que la risa es un instrumento para cambiar el comportamiento de los
demás. En una situación embarazosa, como una disputa, la risa representa un gesto de
apaciguamiento, una forma de disminuir la ira y la tensión. Si la otra persona logra
contagiarse, se disipa el riesgo de confrontación. 3
Las observaciones de Provine le sugirieron que el rango social determina los patrones de risa,
especialmente en el lugar de trabajo; los jefes provocan fácilmente carcajadas de sus
subordinados y hacen bromas a costa de ellos, lo que sugiere que el fenómeno es
generalmente una respuesta de sumisión al dominio. 18

Como origen del lenguaje[editar]


Según Robert Provine, los lingüistas y estudiosos del lenguaje no prestan a la risa la debida
atención, mientras que sí lo hacen respecto al papel que juega en la producción del sonido
la fisiología de la laringe y de diversas partes de las vías vocales. En sus propias palabras:
La risa forma parte del vocabulario universal humano, y si queremos comprender cómo
el cerebro produce el sonido deberíamos analizar comportamientos que todo el mundo tiene de la
misma manera; o sea, que estudiar la risa —si queremos comprender el comportamiento humano—
será como usar el E. coli, o la mosca de la fruta, para comprender el mecanismo de la genética. En lugar
de afrontar la inmensa complejidad de la naturaleza, intentamos concentrarnos en una
pequeña molécula, que es una parte, a la que se puede acceder mejor.3
Robert Provine

Perspectiva filosófica[editar]
Albert Einstein. Figura emblemática de la ciudad de Ulm, basada en una fotografía que le fue tomada al
científico el 14 de marzo de 1951 por el fotógrafo Arthur Sasse, quien le pidió a Einstein que posara para
él a la salida de una fiesta por su 72º cumpleaños.

Antes de aproximadamente el siglo XIX, la risa se interpretaba como un elemento frívolo y de


poca profundidad.20 Con la excepción de un puñado de pensadores clásicos que dedicaron
algo de su tiempo al estudio serio de esta materia, prácticamente ninguno fijó su atención
sobre tal cometido.21
Peter Berger apunta que posiblemente la filosofía no ha centrado su atención en lo cómico
debido a la fragilidad de su experiencia: cuando se intenta aprehender, se disuelve. 21
La frivolidad atribuida a la risa, según el sociólogo, proviene del hecho de que lo cómico y lo
serio son mutuamente excluyentes, de tal modo que una broma en una situación seria se
considera, precisamente, eso, frívola. En sus propias palabras: «Las personas que escriben
libros sobre lo cómico son blancos legítimos de la parodia, la sátira y otras modalidades
agresivas de respuesta humorística frente a una sociedad intolerable». 21
De la superficialidad, por otra parte, podemos hacer constancia con buenos ejemplos
procedentes nada menos que del Diccionario de la lengua española, vestigios de la antigua
concepción de la risa que, más que facilitar su definición, producen su aparición en el lector: 22
1. Movimiento de la boca y otras partes del rostro, que demuestra alegría.
2. f. Voz o sonido que acompaña a la risa.
3. f. Lo que mueve a reír.
Otro ejemplo —quizás más preocupante—, es la ausencia de una entrada para la
expresión «sentido del humor». Y el problema se repite en la lengua inglesa con
el Oxford English Dictionary, como muestra Berger en su libro Risa redentora.23
Actualmente, la risa tiene la capacidad de mostrarnos las distintas facetas de la
realidad, y, por lo tanto, hacernos comprender el mundo de forma más completa. 20
En nada se manifiesta más claramente una personalidad que en aquello de lo
que se ríe

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