Está en la página 1de 67

1.

¿CÓMO EMPEZAR A
INVERTIR?
¿Qué es invertir?

En ocasiones previas hemos destacado que invertir no es lo mismo que


ahorrar. Ahorrar es el valiosísimo hábito que nos permitirá invertir, pero
este último tiene unas características particulares.

Mientras ahorrar lo podemos entender como reservar parte de mi ingreso


para utilizarlo en el futuro, invertir es procurar que este ingreso reservado
crezca de manera independiente.

Bajo esta lógica puedes ahorrar debajo del colchón, más no invertir, y ese
dinero nunca va a crecer solo. Podrás regresar después de unos meses, y
en el mejor de los escenarios, encontrarás el dinero que habías escondido
ahí.
Entendido esto, es claro que todos queremos que nuestros ahorros
crezcan, que ahora trabajen ellos. No sólo para tener más, por lo menos
para que no pierdan valor contra el enemigo invisible, la inflación.

¿Y cómo podemos hacer que nuestro ahorro se convierta en inversión?

Hoy en día existen una gran cantidad de instrumentos financieros que


nos apoyan en esta labor. Esta necesidad de invertir es universal, y los
vehículos disponibles hoy en día se adaptan a cualquier perfil, y más
importante a cualquier monto.

Date la oportunidad de conocer el mundo de las inversiones, aprovecha


el poder del interés compuesto y empieza hoy.

¿Estoy listo para invertir?

Siempre es un buen momento para comenzar a invertir, pero es


importante revisar que sea el momento indicado para ti.

Echemos un vistazo a algunos puntos básicos que te indicarán que es el


momento correcto para empezar.

Tienes orden en tus finanzas, es decir, tienes un presupuesto al cual te


apegas y logras cubrir tus gastos con tus ingresos actuales.
Utilizas correctamente el crédito, evitas cargar con deudas pesadas en tus
tarjetas de crédito. Los créditos que empleas son competitivos y para
bienes durables, como tu casa o auto, y te encuentras al corriente.

Tienes un fondo de emergencia. Producto de tus buenos hábitos, has


logrado reservar parte de tus ingresos para un día lluvioso. Es
recomendable que este fondo de emergencia cubra entre 3 y 6 meses de
tus gastos corrientes. Es triste que la gente se de cuenta de la importancia
de este, una vez que lo necesitaron y no lo tuvieron.

Si cubres estos requisitos, te encuentras en el momento idóneo, si no, no


te preocupes, la manera de alcanzar estos objetivos es ejercitando la
disciplina y el ahorro, piedras angulares para el bienestar financiero. Es
momento de ocuparse en vez de preocuparse.

El monto con el que empieces en el mundo de las inversiones no es lo


más relevante, te darás cuenta de que lo importante es ser constante. Si
hoy empiezas con $1,000 pesos, cultiva el hábito y que cada mes sean
$1,000 pesos y luego $2,000 pesos y así sucesivamente.

Interés Compuesto
Probablemente ya has escuchado el término interés compuesto y su
poderoso efecto en la generación de patrimonio. Si no, aquí te
explicamos de qué trata el interés compuesto.

Imagina que tienes $1,000 pesos y lo inviertes comprando un


instrumento que te dará un premio de 10% en un año. Al cabo de un año,
tendrás $1,100 pesos, hasta ahí todo muy sencillo. Ahora bien, si
pudieras invertir de nuevo en el mismo instrumento bajo las mismas
condiciones, al cabo de 2 años, no tendrías $1,200 pesos, sino $1,210
pesos.

¿Por qué? Por que la ganancia del primer año ($100 pesos) también te
darían un rendimiento. A esto se le conoce como poner a trabajar tu
dinero.

Hasta el momento, pareciera no ser gran cosa, son $10 pesos, pero aquí
es donde se pone interesante, imagina que en vez de 2 son 20 años. ¿Qué
tan grande sería la diferencia si no existiera el interés compuesto?

¿Cómo calcularías el valor futuro de una inversión, conociendo el monto,


la tasa y el plazo?

Valor Futuro = Monto x (1 + tasa) ^ períodos


Con interés compuesto $6,727.50 pesos (VF = 1,000 x [1 + 10%]^20),
sin interés compuesto $3,000 pesos. Como verás, el resultado es más del
doble.

¿De qué variables depende esta diferencia? El monto inicial es relevante,


pero el resultado final dependerá de manera importante de la tasa (o
premio) y aun más del tiempo. Aquí la importancia de empezar cuanto
antes.

Charlie Munger, uno de los más exitosos inversionistas de nuestra época


dice: “La primera regla del interés compuesto es que nunca lo
interrumpas innecesariamente”. Es por eso por lo que el monto que
invirtamos a largo plazo debe ser protegido de nuestros impulsos de
gasto, o incluso emergencias, por eso la relevancia de tener un fondo
para emergencias.

Una pregunta frecuente es, ¿dónde compro interés compuesto?

Existen instrumentos, como algunos bonos o de renta fija, que tienen


estas características. De igual forma, el mercado accionario ha
demostrado obtener rendimientos interesantes en el largo plazo. Es por
esto por lo que, comprando acciones o fondos de inversión, existen altas
probabilidades de mantener estos rendimientos hacia el futuro.

Otro punto importante para considerar, uno puede estar en el lado amable
del interés compuesto al estar invirtiendo, o en el lado oscuro, debiendo.

Imagina el efecto adverso en tus finanzas, cuando tienes una deuda en tu


tarjeta de crédito a una tasa promedio del 50%. Por ejemplo, si debes
$10,000, y asumiendo que no estas pagando, ¿cuánto deberías al cabo de
4 años? Nada más $50,625 pesos (VF = 10,000 x (1+50%)^4).
¿Cuáles son mis objetivos y mi
horizonte?

En ocasiones, la gente decide ahorrar para ciertas metas, y dependiendo


el plazo, uno podría aprovechar las bondades de la inversión para llegar
antes a las mismas.

Es importante recordar que las bondades del interés compuesto en los


mercados se aprecian mejor dándole tiempo, las metas de corto plazo
deberán incorporar estrategias más conservadoras.

Supongamos que uno de tus objetivos es juntar $1,000,000 pesos en 6


años para el enganche de un departamento. Si solo estuviéramos
ahorrando deberíamos apartar $13,888.89 pesos al mes.

Si en lugar de ahorrar invirtiéramos, con una tasa de 10%, ¿cuánto


deberías de ahorrar cada mes para llegar a esa meta? Tan solo $10,192.50
pesos, nuestras aportaciones totales serían de tan solo $733,860.32 pesos,
y el resto sería producto de la inversión y el interés compuesto.

Piensa en todos los objetivos que ves dentro de 5, 10 o 20 años. En esos


objetivos el interés compuesto seguramente hará maravillas. Date cuenta
de que esas metas no se van a conseguir solas, no las dejes a la
casualidad o al azar.

Gracias al interés compuesto, y su efecto en el tiempo, los montos que


deberás destinar para tus objetivos serán menores mientras más rápido
empieces. Así que tómate tiempo para ver los logros que quieres para tu
futuro y pon manos a la obra, ¡ya!

Algunos objetivos de largo plazo pueden ser tu maestría, tu casa, la


educación de tus hijos, tu retiro, una casa de campo, ¡tú decide!

Estilo (activo o pasivo)

El mundo de las inversiones en ocasiones ha sido dividido en dos


grandes equipos: inversionistas activos e inversionistas pasivos. Ambos
estilos son efectivos, siempre que logres mantener el enfoque en el largo
plazo.

El estilo que mas se adapte a tus necesidades dependerá de tu


conocimiento, disposición, presupuesto, tolerancia al riesgo, entre otras.
El inversionista activo exitoso, deberá dedicar una buena parte de su
tiempo al mercado, noticias corporativas, eventos macroeconómicos,
diseño y ejecución de sus estrategias. Para algunos es el día a día y
hemos encontrado en los mercados financieros un mundo apasionante.

El inversionista pasivo no pasa toda la sesión comprando y vendiendo


acciones. Toma decisiones de manera anticipada, y las opera de manera
automática, buscando aprovechar las ventajas del interés compuesto y el
largo plazo.

Por su parte, no hay que confundir a un inversionista pasivo con alguien


desapegado o indiferente. Recordemos que, en cuanto a nuestro
patrimonio, siempre seremos responsables nosotros mismos. Si bien no
todos somos expertos, y buscamos ayuda o asesoría, es nuestro deber
estar al tanto de lo que pasa y evaluar nuestras decisiones de manera
objetiva.
¿En qué puedo invertir?

¿cómo empezar a invertir?

El abanico de opciones para invertir es muy amplio, y no sólo esta


restringido al mercado financiero.

Se puede invertir en bienes raíces, buscando obtener flujos recurrentes a


través de las rentas, así como de la eventual apreciación o plusvalía de
los inmuebles.

Este tipo de inversiones, de forma independiente, pueden acarrear altos


costos de transacción, así como necesitar montos muy altos, limitando el
potencial de diversificación. En el mercado bursátil, podemos acceder a
este tipo de inversiones a través de FIBRAs, o fideicomisos de bienes
raíces.

Podemos invertir en materias primas, donde nuestra ganancia estaría


ligada al comportamiento de los precios de éstas. Dichas estrategias
pueden incluir metales preciosos, energéticos, alimentos, entre otros.
Hay quienes invierten comprando instrumentos de renta fija, como
bonos, papel comercial, certificados bursátiles. ¿Qué es esto? Es
simplemente invertir prestando dinero. ¿Prestando dinero a quién? A
gobiernos, empresas públicas, o empresas privadas. ¿Cómo gano? Estas
entidades se comprometen a pagar el principal (dinero que presté), en un
plazo determinado, más un premio (tasa).

También podemos invertir volviéndonos socios de empresas, ya sea


creándolas, asociándonos, o comprando acciones en el mercado.

Acciones locales y globales

Uno de los instrumentos de inversión más populares son las acciones. Al


momento de comprar una acción un inversionista está adquiriendo un
pedacito del capital de la empresa, y se vuelve socio de los demás
accionistas.

Sí, cuando compras una acción de Amazon, te estas volviendo socio de


Jeff Bezos.
¿Cómo ganas invirtiendo en acciones? Como accionista de una empresa
pública adquieres derechos, por ejemplo, derecho a compartir las
utilidades que genera la empresa. Muchas compañías suelen decretar
dividendos provenientes de las ganancias que generan.

De ahí que cuando a las empresas les va bien, el accionista debiera seguir
la misma suerte.

La otra fuente principal de ganancia para los accionistas es la apreciación


del valor de las acciones, o ganancia de capital.

Los elementos que afectan el precio de las acciones en el mercado son


vastos, y en ocasiones parecieran irracionales. La realidad es que el
desempeño del negocio suele generar apetito por sus títulos.

Día a día las acciones de empresas públicas cambian de mano en un


choque de oferta y demanda que determina su precio en cada sesión de
mercado.

Unas de las bondades de estos instrumentos es la liquidez, es


significativamente más fácil vender acciones de una empresa que cotiza
en el mercado, que vender tu participación en una sociedad privada.

Hoy en día, en el mercado mexicano podemos adquirir acciones de


empresas nacionales e internacionales, facilitando así la diversificación
de nuestro patrimonio.

Fondos de inversión
Los fondos de inversión son vehículos que permiten participar en un
portafolio de acciones o bonos, de forma diversificada, a través de una
sola transacción.

Son instrumentos manejados por profesionales, que buscan ofrecer un


balance óptimo entre riesgo y rendimiento.

Mientras un inversionista puede adquirirlos con una modalidad pasiva,


los manejadores estarán activamente buscando las mejores oportunidades
de inversión, rebalanceando las carteras y haciendo el trabajo pesado.

Estas cualidades lo hacen una opción apropiada para quienes van


comenzando en el mundo de las inversiones. Adquiriendo unos cuantos
fondos podrías obtener una estrategia integral, balanceada, que se adapte
a cualquier perfil de inversión.

ETFs

Los ETFs o fondos indizados, son instrumentos similares a los fondos de


inversión. A diferencia de estos, los ETFs suelen tener una estrategia
pasiva, donde los cambios en la composición de las carteras son menos
frecuentes.
Otra característica es que se pueden comprar o vender a diferentes
precios durante la sesión de operaciones del mercado, mientras que los
fondos de inversión se operan al cierre del día a un precio.

Al igual que los fondos de inversión, los ETFs son instrumentos


diversificados, donde puedes tener exposición a acciones, bonos,
materias primas, activos inmobiliarios, monedas, etc.

Existen ETFs que replican el comportamiento de índices bursátiles como


el IPC, S&P500, Dow Jones, entre otros.

Utilizando Dollar-Cost Averaging

Esta es una reconocida forma de inversión que busca reducir impacto de


la volatilidad de los mercados, al igual que nutrir el hábito de la
constancia en los inversionistas.

Si piensas comenzar a participar en el mundo de las inversiones, aunque


sea con poco capital, esta estrategia es para ti. Imagina que cada mes vas
a invertir $2,000 pesos en una determinada acción. Si en los próximos
meses el precio de esta cae, estarías comprando más títulos con el mismo
dinero, estarías aprovechando el precio de descuento que el mercado está
ofreciendo. Si, por el contrario, el precio de dicha acción sube mucho,
estarías comprando menos acciones, pero continuarías con tu estrategia
en el largo plazo.

De igual forma, si alguien busca invertir una suma importante de dinero


en el mercado accionario, pero no está seguro de que sea el mejor
momento, o el mejor precio, podría optar por dividir el monto y hacer
compras semanales o mensuales. De esta forma si el precio cae, podrá
comprar más barato en un futuro, y si sube podrá garantizar haber
comprado una parte antes del alza.

Empieza hoy y sigue aprendiendo


Ya sea que tu estilo de inversión sea activo o pasivo, aprender un poco
más sobre los mercados financieros te ayudará en la gestión de tu
patrimonio.

La revolución tecnológica ha apoyado a la democratización de las


inversiones, abatiendo costos de forma importante, así como abriendo la
puerta a servicios de calidad para inversionistas nuevos.

Mantente al día con las opciones que existen, cada vez con menos
fricción y apoyando para cultivar mejores hábitos que te acerquen a la
libertad financiera.

Empieza hoy, abre una cuenta con alguna institución regulada


como GBM+ y apóyate en sus herramientas y asesores para dar el primer
paso. Ponte una meta y comienza hoy a invertir para alcanzarla más
pronto. Compra esa acción que siempre te ha gustado y ve qué se siente
dar el primer paso, que nadie te cuente.

2. BÁSICOS DEL ANÁLISIS


TÉCNICO
Teoría económica 101 y Psicología
En ocasiones, hay quienes se refieren al ‘análisis técnico’ como tabú.
Las proyecciones del precio de una emisora o activo financiero, con base
en figuras geométricas, suelen desatar debates entre otros tipos de
inversionistas y dan pie a desacreditaciones.

Lo cierto es que la validez del análisis técnico se centra comúnmente en


pragmatismo, es decir, hay quienes lo consideran como cierto, dado que
funciona.

Desde un punto de vista escéptico, para este análisis se investigó por qué
la gente lo sigue, y qué bases están dentro de la “efectividad” de algunos
traders.

Teoría Económica 101


Cada punto que describe el movimiento del precio de una acción o su
volumen, refleja el perfeccionamiento de oferta y demanda.

Hay que asumir que el trazo refleja el cruce de las necesidades de


distintos participantes, las ganas de comprar (demanda) con la intención
de vender (oferta) a cierto precio.
Por otro lado, el volumen dará información de la relevancia de dicho
trazo, y vale la pena tomarlo en cuenta para la toma de decisiones.

Esto refleja parte de la teoría de Charles Dow, considerando que:

‘el precio refleja todos los factores que podrían influenciar el precio de
un activo.’

Psicología
Dado que los participantes en el mercado, independientemente de su
estilo, son personas (o personas programando algoritmos y operaciones),
los movimientos de los mercados suelen reflejar factores emocionales.

Este último punto toma relevancia en algunos conceptos que se tratarán


más adelante, como tendencias, soportes y resistencias, entre otros.

En la ejecución de estrategias de inversión con base en análisis técnico,


uno de los conceptos más relevantes es la gestión del riesgo. Al
incorporar un Stop Loss, o máxima pérdida tolerada, los inversionistas
buscarán proteger su capital de minusvalías importantes al establecer
estas medidas de seguridad, pero sobre todo, al obedecerlas con
disciplina.

Aún dentro del mismo análisis técnico, existe una gran variedad de
estilos: hay quienes siguen tendencias, si sube, compran, o quienes
operan buscando swings, es decir, compran si los precios han caído,
anticipando un rebote.

Tendencias
Teoría Dow
El precio lo descuenta todo
Esto mantiene que el precio refleja todos los factores que podrían
influenciar el precio de un activo, lo que coincide con la Hipótesis del
Mercado Eficiente.

El mercado tiene tres tendencias


Los precios se mueven formando tres tendencias: primaria (entre 1 y 3
años), secundaria (3 semanas a 3 meses) y menor (menos de 3 semanas y
en sentido opuesto a la secundaria).

Las tendencias tienen tres fases


Los movimientos de mercado están compuestos por tres fases:
acumulación, tendencia y distribución.

Los índices deben confirmarse mutuamente


A finales del siglo XIX, Estados Unidos se encontraba inmerso en un
proceso de industrialización, y unos de los primeros índices del Dow
estaba orientados hacia Industria y Transporte. La teoría proponía que los
movimientos de ambos debían guardar relación; en caso de observar
divergencias entre ellos, se anticipaban cambios.

Las tendencias son confirmadas por el volumen


Dow consideraba como particularidades a los movimientos en precios
con bajos volúmenes de operación. La teoría supone que movimientos
acompañados por volúmenes altos tienen mayor validez, y confirman sus
tendencias o agotamiento.

Una tendencia se mantiene vigente hasta que se muestra lo contrario


Asume que las tendencias se mantienen a pesar del ruido del mercado y
mostrar ajustes temporales. Determinar el final de una tendencia y su
cambio es una tarea complicada, pero el inversionista deberá permanecer
al pendiente.

Teniendo esta información en mente, los traders encuentran utilidad en


poder identificar las tendencias, así como las fases en las que se
encuentran los precios de diferentes activos, y tener criterios para
anticipar cambios y beneficiarse de dichos movimientos.

La identificación de una tendencia podría ser algo muy intuitivo y visual.


Una tendencia alcista se define como un movimiento en precios que va
generando máximos y mínimos mayores a los anteriores. Por el
contrario, una tendencia bajista estará definida como cambios en precios
que generan máximos y mínimos menores a los anteriores.
Los máximos son mayores a los anteriores, al igual que los mínimos.

Para el trazo de una línea de tendencia alcista, suele tomarse la gráfica de


precios en línea y buscar dos pivotes, o puntos de inflexión, de tal modo
que se trace una línea ascendente por debajo de la línea de precio.

Aquí, se asumiría que un rompimiento de esta línea recta, o en otras


palabras, una perforación del precio, podría anticipar un cambio en la
tendencia.
Ejemplo de línea de tendencia ascendente.

Para identificar una línea de tendencia bajista, se toma la gráfica de


precios en línea y se ubican dos pivotes, de tal modo que se trace una
línea descendente por arriba del trazo del precio.

En este caso, se asume que un rompimiento de esta línea recta, o en otras


palabras, que el precio la supere, podría anticipar un cambio en la
tendencia bajista.
Ejemplo de línea de tendencia descendente.

Estos rompimientos toman mayor validez si van acompañados de


volúmenes altos, así como de rompimientos de otros niveles críticos,
como soportes, resistencias o promedios móviles, entre otros.

Soportes y resistencias
Soportes
Son líneas horizontales que determinan un punto bajo, donde los dueños
de las acciones (o activos financieros) ya no están dispuestos a vender, a
pesar de existir demanda por los títulos. Estos niveles suelen fungir como
pisos.

Resistencias
Líneas horizontales que determinan un punto alto, donde se asume que
los compradores ya no están dispuestos a pagar un precio superior por
determinada acción. También son conocidas como techos.

Un método para identificarlos es directamente visual; la validez y la


fortaleza suelen estar ligados a las veces que han funcionado como pivote
(recurrencia), o bien, las veces que se han respetado en el pasado
inmediato (vigencia).

Una vez que un soporte o resistencia son identificados, dan señales


valiosas de posibles puntos de entrada o salida. Si un soporte fuera
respetado siempre, parecería un buen punto de entrada, al igual que, si se
supiera que una resistencia es infranqueable, podría ser considerada
como un punto de salida. El problema radica en la siguiente parte de la
teoría:

Un soporte perforado se puede volver una resistencia. De igual forma,


una resistencia superada puede convertirse en un soporte.
Fuente: Trading

En la gráfica anterior, se observa que el precio de las acciones de


WALMEX, entre los meses de marzo y noviembre del año pasado, se
comportaron de forma lateral, es decir, respetando un soporte y una
resistencia. En ese periodo, se pudo identificar un soporte cercano a los
MX$41.50 y una resistencia ubicada por los MX$44.00.
Una resistencia superada puede convertirse en un soporte.

En este ejemplo, se puede ver cómo la resistencia de los MX$44.00


fungió como soporte a principios de diciembre, donde el precio retomó
su racha alcista.

Retroceso de Fibonacci
Una herramienta visual que facilita la determinación de soportes y
resistencias es el retroceso de Fibonacci. Al utilizar los máximos y
mínimos de la gráfica, en un determinado periodo, dicho estudio arrojará
niveles que respetan razones derivadas de la sucesión de Fibonacci (76.4,
61.8, 50, 38.2 y 23.6 por ciento).

Retroceso de Fibonacci

Llama la atención cómo con tan solo dos variables (máximo y mínimo)
se pueden identificar de forma automática niveles relevantes que se
respetan con gran precisión.

Promedios Móviles
Estos indicadores tienen como principal función tratar de matizar la
volatilidad — o filtrar el ruido — derivado de los cambios aleatorios en
los precios de los activos financieros en el día a día. Al estar construidos
con información histórica, son considerados indicadores rezagados.

Existen varias clasificaciones de promedios móviles, dependiendo de la


metodología empleada para su cálculo: simples, exponenciales,
triangulares, ponderados, etc. Destacamos estos dos:

Promedio Móvil Simple (Simple Moving Average o SMA)


Como su nombre lo indica, se calcula como la suma de precios de cierre
de n períodos, dividido sobre n. Por ejemplo, la suma de los últimos 20
precios de cierre dividido entre 20. Una de las principales críticas a este
promedio es que el efecto de la historia reciente se diluye, o no es
representativo en el cálculo final. Imagina el efecto del último precio en
el cálculo de un promedio móvil de 200 días; aunque este último
movimiento sea grande en dimensión, el efecto será de 0.5 por ciento
sobre el cálculo final.
Promedio Móvil Exponencial (Exponential Moving Average o EMA)
En su cálculo, se les da mayor atención a las observaciones más recientes
para poder integrar la nueva información, dando una mayor relevancia al
dato más actual.
Aplicaciones

 Identificar tendencias y tratar de anticipar posibles cambios. En


episodios de alta volatilidad, la pendiente de un promedio puede
dar una idea más clara de la tendencia.
 Algunos inversionistas consideran que, en tendencias alcistas, los
precios de ciertas acciones suelen tomar ‘respiros’ y mientras los
precios respeten (es decir no perforen) algún promedio, pueden
participar con cautela en esos momentos. En otras ocasiones, el
perforar dichos promedios móviles puede considerarse como señal
para toma de utilidades.

Horizontes de tiempo
Los traders suelen utilizar promedios con diferentes horizontes de tiempo
para representar corto, mediano o largo plazo. Algunos utilizan 10, 20 y
100, o 20, 50 y 200, mientras que otros utilizan números de la progresión
de Fibonacci como 8, 21 y 89, etcétera.

¿Qué es OPA?
Cuando el precio de un activo se encuentra por arriba del promedio
móvil de corto, mediano y largo plazo, se dice que está en Orden
Perfecto Ascendente (OPA), y demuestra mayor fortaleza en la
tendencia. El caso contrario se conoce como Orden Perfecto
Descendente, y la conclusión sería la opuesta.

Cruces de promedios
Cuando el precio de una acción cruza algún promedio, son consideradas
señales importantes. Por su parte, los cruces entre promedios confirman
con mayor fuerza los cambios en las tendencias, y deberán ser
considerados dentro de la estrategia.

Los promedios móviles son de mayor utilidad en mercados cuando hay


tendencias presentes, ya sean alcistas o bajistas, dado que en mercados
laterales, los cruces entre precios y promedios suelen ser más frecuentes
y las señales menos significativas.

RSI o índice de fuerza relativa


Por sus siglas en inglés, RSI (Relative Strength Index o Índice de Fuerza
Relativa) es un indicador técnico de momentum que busca representar la
fortaleza o debilidad observada en los precios de una acción (o activo
financiero en términos generales).

Creado por Welles Wilder, compara la magnitud de las ganancias contra


las pérdidas en un periodo reciente para dimensionar la velocidad de los
cambios, e intentar identificar condiciones de sobrecompra o sobreventa.

El rango del RSI va de 0 a 100, teniendo como valor central el 50.


¿Cómo se calcula?
Promedia el precio de cierre en un periodo, generalmente se utiliza el de
14 días. Posteriormente, se calcula el promedio de cierre al alza o baja
dentro de estos 14 días, y se establece en un rango de 0 a 100, en el cual
los más comunes para establecer rangos de sobre venta es en 30 y sobre
compra en 70.

El RSI nos ayuda a tener una perspectiva sobre el interés de los


inversionistas por el activo, y es más útil en momentos de lateralidad.

¿Cómo utilizar el RSI al momento de operar?


Algunos traders consideran que, al momento que el RSI de una emisora
supera las 30 unidades, o sale de sobreventa, puede apuntar a un nivel
atractivo de entrada. En ocasiones, se toma la decisión en conjunto con
otros indicadores, como promedios móviles o resistencias.

¿Qué son las divergencias entre RSI y precio y cómo se interpretan?


Por el contrario, cuando el precio de una empresa ve un alza súbita, es
común que su RSI se encuentre en territorio de sobrecompra (RSI>70).
Existen traders que esperan a que el RSI perfore la barrera de las 70
unidades para tomar utilidades.

Se dice que existe una ‘divergencia bearish’ cuando el precio llega a un


nuevo máximo, pero el RSI hace un máximo menor, y suele ser
interpretada como señal de venta. Por el contrario, una ‘divergencia
bullish’ se da cuando el precio llega a un mínimo y el RSI hace un
mínimo mayor; algunos traders lo toman como una señal de compra.

Es importante tener en cuenta que, tanto el RSI como otros osciladores


técnicos, son herramientas que nutren tu estrategia de trading; sin
embargo, es necesario mantener disciplina a la hora de operar y estar
preparado siempre para las sorpresas que el mercado puede presentar.

3. ANÁLISIS TÉCNICO
Volumen
En el estudio de los mercados con bases en análisis técnico, la unidad
principal de información es el precio, sin embargo, en un muy cercano
segundo lugar aparece el volumen.

El volumen nos dará idea de la intensidad, o convicción, sobre el


movimiento de un precio de determinado activo.

Como volumen entendemos a la cantidad de acciones operadas en un


periodo de tiempo determinado, un día, semana, mes, etc.

Es importante observar el comportamiento del precio y volumen de un


activo de forma simultánea. Al mirar el volumen de cerca podemos
encontrar señales tempranas de cambios en el sentir del mercado.

Se considera que para que una tendencia alcista continúe, es necesario


observar un patrón creciente en el volumen operado. En el caso de
tendencias bajistas, el volumen operado suele ser mayor al inicio de una
corrección.

El volumen es útil para identificar divergencias, y anticipar posibles


cambios de tendencia. Si el precio de un activo muestra avances, pero el
volumen no hace lo propio, podemos suponer que se ha alcanzado un
balance, y/o una corrección se encuentra cercana.
Algunas reglas para considerar:

1. Si el precio y el volumen muestran patrones de crecimiento, es una


buena señal.
2. El alza de un precio, acompañada de volumen cada vez menor,
anticipa problemas.
3. Volumen creciente con poco impacto en el precio, después de un rally,
puede anunciar un regreso.
4. El rompimiento de una resistencia, acompañada de mayor volumen
siempre es buena noticia
5. El perforar un soporte con volumen creciente sugiere esperar a que el
volumen baje para encontrar nuevo piso o equilibrio

En conclusión, el volumen puede ser una herramienta de gran utilidad


para juzgar la validez del movimiento en precios. Puede ser un elemento
de confirmación, así como de advertencia.

MACD
Por sus siglas en inglés, Moving Average Convergence/Divergence
(Convergencia o Divergencia de Promedios Móviles) es un oscilador que
genera señales a partir del cruce de promedios.

¿Cómo se calcula?
Este indicador lo componen varios elementos, el primero es el propio
MACD.

MACD, mide la diferencia entre dos promedios exponenciales,


comúnmente el de 12 y 26 días.
Señal, es el promedio móvil exponencial del propio MACD

Histograma, calcula la diferencia entre MACD y Señal.

¿Cómo utilizar el MACD al momento de operar?

 Cuando la línea de MACD supera la línea Señal, se considera una


oportunidad de compra.
 Cuando la línea de MACD perfora la línea Señal, se puede
considerar una oportunidad para vender.
 Cuando MACD cruza la línea de cero, puede ser señal de
confirmación, aunque en ocasiones tardía.

En la siguiente gráfica vemos como el 25 de marzo, la línea MACD


(azul) supera la línea señal (roja), apuntando oportunidad. El día 15 de
abril, la línea MACD superó el cero, confirmando tendencia. Por último,
el 14 de mayo la línea MACD perfora a la señal, esto puede ser
considerado como un momento oportuno para toma de utilidades.
 

Bandas de Bollinger
Esta herramienta fue creada, y registrada, por John Bollinger, y busca
identificar momentos de sobre-compra y sobre-venta de un activo.
Este indicador se compone por tres elementos, un promedio móvil (linea
central), una banda superior y una banda inferior.

Generalmente se emplea el promedio movil de 20 periodos, mientras que


los límites suelen ubicarse a 2 desviaciones estandar de este promedio.

¿Cómo interpretarlas?
Los inversionistas consideran que mientras el precio opere más cercano
al límite superior, el activo está sobre-comprado, y viceversa.

En periodos de alta volatilidad, las bandas se ensanchan, mientras que en


episodios de menor volatilidad estas se contraen.

Cuando las bandas se acercan se conoce como squeeze, y apuntan a un


potencial aumento futuro de volatilidad y oportunidad de operación. En
el caso contrario, un rango amplio anticipa una reducción en la
volatilidad y hay quienes consideran momentos oportunos para salir de
alguna posición.

En la gráfica de AMD podemos ver cómo de mayo a julio las bandas


comenzaron a contraerse. Hacia mediados de julio, se dio un
rompimiento hacia arriba, acompañado de volatilidad.
Velas Japonesas
Son de las representaciones gráficas más utilizadas para realizar análisis
técnico. La cantidad de información que nos proporciona es más
completa que la de una gráfica lineal.

Una vela japonesa se compone por cuatro factores, precio de apertura,


precio de cierre, precio máximo, precio mínimo. De igual forma el color
de la vela estará determinado por el hecho de cerrar arriba o debajo de la
apertura.

Esta simple representación gráfica nos puede dar una idea sobre cómo se
vio la operación durante la sesión.

En ocasiones, la forma del cuerpo de la vela, y la posición de acuerdo al


pasado reciente, puede ser interpretada como una señal de cambio de
tendencia, tomando gran relevancia para los traders.
En este curso hablaremos de: dojis, haramis, engulfings y martillos.

Doji

Son velas prácticamente sin cuerpo, el precio de la apertura y cierre son


casi idénticos. Algunos inversionistas lo interpretan como momento de
indecisión. Por si sólo no indica mucho, pero su ubicación al final de una
racha alcista o bajista puede anticipar un cambio. Es necesario confirmar
dicho cambio con la siguiente vela.
Harami

Son velas de cuerpo pequeño, con poca sombra. Toda la vela cabe dentro
del cuerpo de la vela del periodo anterior.

Cuando se encuentran en el punto alto, y son de color rojo, pueden


anticipar un ajuste. Cuando se encuentran en un punto bajo, y son de
color blanco (o verde), pueden anticipar un rebote. En ambos casos, es
necesaria una confirmación.
Bullish Harami

 
Bearish Harami

Enfgulfing 

 Este término se refiere a que el cuerpo de una vela pueda envolver


completamente a la vela anterior.

Al final de una tendencia bajista, es de color blanco (o verde) y anticipa


un cambio positivo. Cuando se encuentra al final de una racha alcista, es
de color rojo, y anticipará un ajuste. A diferencia de los Harami’s, estas
no necesitan una vela posterior de confirmación.

Bullish Engulfing
Bearish Engulfing

Martillo y estrella fugaz

El martillo se encuentra al final de una tendencia bajista, no tiene sombra


en la parte superior. Anticipa un cambio de tendencia, la sombra refleja
que se tocó un punto mínimo en la sesión y regresó, la siguiente vela
confirmará el patrón.
La estrella fugaz se encuentra en la parte superior de una tendencia
alcista, no tiene sombra en la parte inferior. Anticipa un ajuste, la sombra
refleja el punto más alto donde se vio un regreso del precio. La siguiente
vela confirmará el cambio de tendencia.

Martillo
Estrella fugaz

Estas son algunas de las formaciones con velas japonesas, recuerda que
la práctica te convertirá en mejor observador. Te invitamos a que trates
de identificarlas y hagas tus propias conclusiones para incluirlas dentro
de tu arsenal de herramientas técnicas.
Formaciones
Hemos comentado que el mercado se mueve en tendencias: ascendentes,
laterales o descendentes. Dicho esto, en todo momento el precio de un
activo se encuentra dentro de una tendencia o terminando alguna.

Identificar el final, o cambio, de una tendencia es una habilidad que


puede ser muy redituable en el trading. A través del estudio de
formaciones, o patrones, podemos mejorar nuestro instinto para
encontrar estos cambios de tendencia o reversals.

Para que estas estrategias sean más efectivas debe presentarse el


rompimiento de un soporte o resistencia relevante. Estos rompimientos
son señales que las fuerzas entre oferta y demanda se han invertido.

Doble techo y doble piso

Estas formaciones se suelen encontrar después de movimientos


importantes en el mercado. Una vez que un movimiento alcista presenta
pérdida en su magnitud, y retrocede de un máximo, tomará impulso para
continuar, si en el segundo intento falla en superarlo, podemos empezar a
cuestionarnos. Comúnmente se observa mayor volumen al alcanzar el
primer techo. De igual forma, el rompimiento a la baja deberá mostrar un
incremento en el volumen de operación.
Doble Techo
Doble Piso

Cabeza y hombros

Es una de las formaciones más utilizadas. Se caracteriza por un rally que


pierde fuerza, seguido por un par de rallys de menor proporción. Es
importante prestar atención al comportamiento del volumen en este
patrón para poder garantizar su validez.
Por lo general un máximo debe alcanzarse con volumen creciente, si
observamos un menor volumen al momento de la formación de la
cabeza, estamos anticipando problemas. Después de un breve ajuste, se
presenta un intento fallido por regresar a los máximos (segundo hombro),
con menor volumen aún.

Al trazar una línea entre los dos valles, llamada neckline, se define un
soporte. Una vez que se perfore este soporte (con mayor volumen) se
estimará como objetivo una distancia similar a la presente entre el
máximo y el neckline, hacia abajo.
Cabeza y hombros

Triángulos

Existen tres tipos de triángulos: simétricos, ascendentes y descendentes.


Todos son considerados patrones de continuación.

Los triángulos simétricos son zonas de descanso para patrones de largo


plazo, se forman de dos líneas que convergen. La línea inferior la definen
dos mínimos crecientes, y la superior la describe dos máximos
decrecientes. El punto donde cruzan estas definirá el rompimiento. En
estos triángulos suele resolverse en favor de la tendencia de largo plazo,
comúnmente acompañada de volumen creciente.

Triángulo simétrico

Los triángulos ascendentes tienen las mismas características que


los simétricos, solo que la línea superior es descrita por dos máximos,
formando una resistencia.
Por su parte los triángulos descendentes ven su línea inferior formada
por una línea horizontal que define un soporte.

Triángulo ascendente
Triángulo Descendente

Al momento de realizar la compra de una acción, existen innumerables


resultados posibles, pero direccionalmente solo un par, que esta suba, o
que baje.

‘Lo importante es cuánto pierdes cuando pierdes’ – George Soros


Es importante ser disciplinado con nuestras estrategias, y una de las
lecciones más importantes es asimilar las pérdidas y aceptar cuando el
trade no salió como esperábamos.

Que una acción suba más de 12% no es algo que podamos controlar, pero
que no aceptemos una pérdida mayor a un determinado porcentaje es
algo que sí podemos hacer.

El Stop Loss es la máxima pérdida tolerada determinada antes de


comprar una acción.

Por ejemplo, si compro acciones de Apple en $130 y defino un Stop Loss


en $125, quiere decir que lo máximo que estaré dispuesto a perder en
este trade es un 3.8%.

Ahora bien, estos niveles pueden ser definidos de distintas formas. Hay
quienes utilizan un porcentaje predefinido, otras personas que
determinan porcentajes con base en la volatilidad del activo. Otros
operadores suelen definirlos con base en: soportes, promedios móviles
u otros indicadores.

Hay quienes utilizan el stop loss como estrategia para asegurar


ganancias, imagina que un trade ha resultado ganador y acumulas ya un
porcentaje de plusvalía. Al incorporar un Stop Loss dinámico, o trailing
stop, puedes fijar tu salida con base en un avance máximo. Es decir que
las acciones se vendan, una vez que el precio ajuste determinado
porcentaje después de haber hecho un máximo.

Supongamos que compraste acciones de Twitter a $40 con un Stop Loss


en $36. Posteriormente la acción avanzó y alcanzó $55, a estos niveles
probablemente tu máxima pérdida tolerada ya no se encuentre en $36
(que sería una caída de 35% a estos niveles). Por lo mismo, se puede
ajustar el Stop Loss para reflejar tu nueva visión, probablemente a
niveles de $49.50 o $50.

La idea central es que el Stop Loss haga sentido dentro de la estrategia,


pero principalmente que se respete.

Una de las piezas centrales en el mundo de las inversiones, y el trading,


es el correcto manejo del riesgo.

En el capítulo anterior abordamos qué es un stop loss, y su relevancia.


Ya que hemos identificado nuestra tolerancia al riesgo en determinada
operación, la pérdida máxima para nuestra cartera será producto de estos
stop loss, y la ponderación de cada operación.

Sabemos que los estilos de inversión y trading pueden ser muy diversos,
hay personas que les gusta tener alta concentración en su cartera, solo 2 o
3 nombres. Por otro lado, hay quienes gustan de incluir arriba de 20
diferentes acciones. La realidad es que el diligente manejo del riesgo
deberá tener esto en cuenta.

Supongamos que vas a operar solo un nombre, y tu stop loss implica una
minusvalía digamos de 8%. Por otro lado, la máxima pérdida deseada
por cada trade para tu cartera es de 1%. ¿Con qué porcentaje de nuestra
cartera podríamos participar para cumplir nuestro objetivo?

Si compramos 100% de nuestra cartera de ese nombre, nuestra pérdida


esperada sería 8%. Si compramos 50% la pérdida esperada sería 4%, si
compramos 25% la pérdida esperada sería 2%, y así sucesivamente.
Entonces, para mantener un riesgo total de 1%, participaríamos con un
12.5%. Otra manera de calcularlo sería:

Ponderación activo x = máxima pérdida objetivo por activo / máxima


pérdida en activo x
= 1% / 8%
= 0.125 = 12.5%

Recordemos que a medida que participamos con más nombres, se busca


que el riesgo total sea menor que la suma de sus partes, y si buscamos
una diversificación eficiente, este objetivo se puede lograr.

4. ANÁLISIS TÉCNICO
AVANZADO
Volumen
La primera herramienta es el indicador del volumen. Con este puedes
conocer cuántas acciones se han comprado y vendido en un día o en un
periodo de tiempo.

Te recomendamos primero revisar el volumen histórico. Si el volumen


de operación de la emisora en cuestión es más alto que en cualquier otro
periodo de su historia, hay que poner atención.

Después puedes revisar el promedio del volumen de operación de los


últimos diez días y cotejarlo con el volumen de hoy, ¿es más alto o más
bajo? Si es más alto, ¿es más del 150% o del 200%? Si es así y el precio
va al alza, esto puede indicar que hay una buena oportunidad de comprar
esa emisora.

Podemos ver que un periodo alcista importante coincide con un volumen alto de compra, que

vemos en la parte de abajo de la gráfica en barras verdes. De igual forma, una baja importante de

precios sucedió en un periodo de venta fuerte.

Líneas de tendencia
Las líneas de tendencia se trazan tocando todos los precios más bajos o
más altos de un periodo de tiempo con una tendencia alcista o bajista
clara.

Si estamos observando una tendencia bajista, trazaremos una línea que


toque todos los precios más altos. Si es una tendencia alcista, la línea se
trazará por debajo de los precios, tocando los más bajos. Entre más veces
se toque esta línea, más relevante será para saber si la pendiente puede
seguir indicando la misma fuerza relativa en esa tendencia alcista.
En un momento dado, los precios pueden cruzar esa línea, sea
lateralmente o con fuerza en la dirección opuesta. En ambos casos, puede
indicar que la tendencia ya terminó. Esto no significa que podemos dejar
de observarla, porque son momentos críticos para conocer información
nueva sobre esa emisora.

Las herramientas por sí mismas son útiles, pero cuando se combinan con
las demás son generosas con la información que nos proporcionan. Si
habíamos comprado acciones en un periodo alcista y los precios cruzan
la línea de tendencia con un alto volumen de venta, esto podría significar
que estamos en el inicio de un fuerte periodo de corrección.

Abajo del ícono del ratón está la herramienta para trazar líneas. Con ella puedes trazar los precios

mínimos de una tendencia alcista y ver si, cuando cruza, eso significa que la tendencia terminó.

Para identificar el fin de una tendencia bajista, la línea se traza tocando los precios máximos de esa

tendencia.
Promedios móviles

Quizá hayas escuchado de los promedios móviles en otra ocasión y


sabrás que son muy útiles. Sirven para identificar nuevas tendencias una
vez que iniciaron, que es parecido a lo que puede indicar una línea de
tendencia.

Este indicador toma los precios de un intervalo de tiempo y calcula el


promedio. Como lo hace para cada punto del intervalo, esta línea va
evolucionando conforme va tomando los valores nuevos y dejando atrás
los viejos. Esto es lo que les da el nombre de promedios móviles. Entre
menor sea su intervalo de tiempo, más cerca estarán de los precios,
porque toman menos datos que pueden desviar su posición. Por el
contrario, los promedios móviles de periodos largos se mueven menos.

Usar diferentes promedios móviles nos ayuda a conocer la fuerza de la


tendencia actual relativa al historial de la emisora. Se recomienda usar
por lo menos dos si la gráfica va a observarse en días u horas: uno que
tome entre 5 y 20 periodos y otro entre 144 y 200. Estos son números
estadísticamente significativos con los que podemos guiarnos para
identificar cambios de tendencia importantes.

Los promedios móviles pueden leerse de dos formas. La primera es ver si


se entrecruzan estas dos líneas (o más, en caso de que decidamos usar
más de dos). Si el promedio corto (15) cruza al largo (144), quiere decir
que hay un cambio importante en la tendencia. Si el promedio móvil del
periodo más breve cruza hacia arriba al promedio del periodo más largo,
quiere decir que los precios de los últimos 15 periodos están por encima
del promedio de los últimos 144 periodos.
EMA es Exponential Moving Average, o Media Móvil Exponencial. Lo puedes encontrar
dentro de la plataforma de GBM+. La línea naranja es de 15 periodos y la azul de 144 En
este caso, cada vela es un día de operación.
La segunda es ver si los precios cruzan a los promedios móviles. Si el
precio va por encima de las líneas de todos los promedios móviles que
tengamos, quiere decir que la tendencia actual es todavía más alcista de
lo que había sido hasta ahora. Si los precios van por debajo de los
promedios, quiere decir que la tendencia actual es todavía más bajista de
lo que había sido en promedio.

Si observas el volumen y los promedios móviles y notas que hay un gran


volumen de compra durante un periodo sostenido, y además los
promedios móviles viajan por debajo de los precios, esto te dirá con
bastante certeza que hay una fuerte tendencia alcista.
Si, además, trazas unas líneas de tendencia, tu operación va acompañada
de suficientes indicadores como para decirte cuándo es momento de salir.
Si el precio atraviesa hacia abajo a una línea de tendencia alcista en lugar
de seguirla, y además cruza al promedio móvil más chico, lo único que
falta es ver que haya poco volumen para saber que es momento de salir
del mercado.

Patrón secuencial
¿Qué pasa cuando todas las señales anteriores nos presentan la
posibilidad de que una tendencia bajista revierta su dirección?
Posiblemente, el momento de hacer una buena compra ha llegado. Para
aprovechar esa oportunidad, podemos trazar en nuestra gráfica un patrón
secuencial o patrón de las cinco señales.

Este último recurso técnico es bastante útil si se usa correctamente. La


desarrollan en el IAT Bursátil con herramientas preexistentes que
encontrarás en la gráfica, algunas de las cuales ya se han mencionado en
capítulos anteriores.

Le llamamos también patrón de las cinco señales porque se traza en


cinco pasos, cada uno haciendo más relevante la tendencia que está bajo
observación. Lo explicaremos para cuando lo que quiere identificarse es
una tendencia alcista que apenas comienza:

1.- Lo primero que necesitamos hacer es trazar una línea de tendencia


que toque los precios máximos de la última tendencia bajista que
observemos. Si estamos viendo nuestra gráfica en velas japonesas, esta
primera línea de tendencia tocará los extremos superiores de los pabilos.
Si los precios cruzan esta línea, aquí está la primera señal.
2.- Indicaremos con una línea horizontal el precio mínimo que alcanzó
esta tendencia bajista que parece haber terminado. Este es el origen de la
nueva tendencia alcista que estábamos esperando, sea tan corta o tan
larga como vaya a ser.
La línea punteada roja indica los máximos de la tendencia bajista y la línea punteada verde es la
cuarta señal, en donde los precios mínimos retroceden menos de lo que los precios han avanzado.
Las dos líneas negras indican el precio máximo y el mínimo de la tendencia bajista, ambos
superados por los nuevos precios mínimos y máximos de la tendencia alcista.
3.- En esta nueva tendencia alcista puede pasar una de dos cosas: o
comienza a bajar, lo que significaría que es un ajuste y entonces no existe
todavía una señal clara de entrada; o continúa subiendo. Si es así, esta
alza de precios debe alcanzar, como mínimo, el precio máximo de la
tendencia bajista que estábamos analizando previamente. Recuerda que,
entre más licencias le des a las herramientas técnicas, menos efectivas
son, así que debes observar cuidadosamente.

4.- Como queremos ver qué tan fuerte es esta tendencia alcista que
apenas comienza, buscaremos la cuarta señal, que se presenta cuando los
ajustes no sobrepasan a los incrementos de los precios. En otras palabras,
cada vez que los precios bajen, no pueden bajar más allá del precio
mínimo anterior a ese. Si viéramos que la gráfica se recupera cada vez
menos de lo que ha caído, entonces no estaríamos observando una
tendencia alcista. Si fuera así, la cuarta señal no existe y aquí nos
detenemos para comenzar de nuevo cuando notemos una nueva primera
señal. El orden cronológico del patrón secuencial debe seguirse porque,
de lo contrario, no sería eficaz. Al final, trazarás una línea de tendencia
que toque todos los puntos mínimos de esta tendencia alcista. Si la línea
es ascendente de izquierda a derecha, ¡felicidades!, ahí tienes tu cuarta
señal.

5.-Así como en la cuarta señal debemos observar que las caídas de precio
no rebasen a las caídas anteriores, así también debemos buscar que los
precios a los que la gráfica llega sean cada vez mayores.

Si ya tenemos una línea de tendencia alcista como cuarta señal, ¿por qué
no buscar algo más que nos dé más información? La quinta señal eso es.
Es muy sencillo verla: si los impulsos superan a los precios máximos de
la tendencia bajista que observamos en el primer punto, tendremos la
quinta señal.

6.- ¿Por qué hay una sexta señal en el patrón de las cinco señales? A
este paso se le llama “la señal viva”. Todo el trabajo que se hizo
anteriormente debe repetirse ad infinitum para confirmar que seguimos
en una tendencia alcista.

Conclusiones
Usar estas cuatro herramientas no quiere decir que tu operación será
infalible, pero tienes una ventaja que antes no tenías. Si tus rendimientos
mejoran con estas herramientas, sabrás que es momento de incorporarlas
a tu plan de trabajo. En el apartado de gráficos avanzados de GBM+
puedes trazar tus líneas de tendencia, revisar el volumen y usar los
promedios móviles como herramientas. Así podrás practicar y ajustar tu
estrategia.

Estas herramientas pueden ayudarte a operar con éxito, pero siempre con
una actitud sobria y observando atentamente. No se trata de observar
pabilos que cruzan ligeramente las líneas de tendencia y entonces vender
todas nuestras posturas, pero tampoco de concederle licencias a lo que
los indicadores muestran.

En el apartado de ebooks de GBM+ Academy encontrarás información


sobre los sesgos cognitivos que podrían llevarte a ignorar la información
que estas herramientas nuevas puedan darte.

También podría gustarte