En la publicidad de Rolex se puede observar una ideología de dominancia por parte
de la clase social alta. Las personas que cambian el mundo y, por lo tanto ejercen el poder, son las aquellas que son exitosas. Este éxito es representado mediante el consumismo, Rolex al ser bastante caro no puede ser adquirido por cualquier persona, marcando una diferencia de clases sociales y estableciendo cierto estatus social al poseer uno. Utilizan en sus anuncios publicitarios a personas socialmente conocidas por ser exitosas tales como presidentes, actores y deportistas famosos. En el anuncio anterior se afirma que las personas que cambian el mundo no son obligadas a usar un Rolex, eligen hacerlo porque es quien son, exitosas.