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Escrito por un hombre.

Muchos hombres desearían una gran mujer a su lado. Pero son muy pocos los que saben
agradecer la maravillosa mujer que tienen a su lado. Para el sexo todos son hombres, todos
son unas máquinas, que dicen hacer y deshacer y en el momento íntimo van solo a una cosa,
complacerse y luego quedar como un inútil en la cama. Son muy pocos los que saben desnudar
el alma antes de quitar la ropa. Son muy pocos los que no tienen sexo, y saben hacer el amor,
no permitiendo que se escape un rincón del cuerpo de su mujer del cual no hayan disfrutado.
Todo buen hombre sueña con tener una mujer libre, estable, con futuro, que le haga el amor
mirando a los ojos, que lo cuide cuando este se enferme, que los amigos lo envidien por la
calidad de mujer que tiene a su lado, que lo mime (aunque muy pocos aceptan que esto les
gusta). Tener una mujer así es una bendición, de lo cual deberíamos estar agradecido. Porque
un hombre jamás se definirá por todas las mujeres que tenga o haya tenido. Un hombre se
define por la calidad de mujer que tenga a su lado, pero más aún se define cuando la ama,
respeta y cuida de ella. Más hombre es el que constantemente enamora de diferentes manera
a una sola mujer. Porque muchos hablan y tratan bonito hasta que la llevan a la cama, y luego
se termina lo romántico y lo atento. 
Recuerda una mujer de calidad, necesita un hombre de calidad.

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