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CENTRO DE ESTUDIO SUPERIOR DE LOS TUXTLAS

Nombre del alumno:


Sergio Luis Cruz Olin

Nombre del profesor:


Bruce Rogelio Lau Figueroa

Materia:
Psicofisiológica del aprendizaje

Título:
Función del sistema nervioso simpático y parasimp ático

Fecha de entrega:
15- Septiembre- 2021

Licenciatura en pedagogía
Sistema nervioso simpático:

El simpático es una rama del sistema nervioso autónomo, el cual regula las
funciones involuntarias, que se encarga de controlar nuestros reflejos y
reacciones inconscientes ante estímulos peligrosos o que nos generan estrés.

Esquivar un obstáculo en la autopista en cuestión de milésimas de segundo,


agarrar al aire una taza que se nos ha caído de la mesa, protegernos la cara
cuando alguien nos lanza algo, correr cuando percibimos algún peligro… Hay
muchas situaciones cotidianas en las que nos sorprendemos de la increíble
capacidad de reacción de nuestro cuerpo.
En apenas milésimas de segundo y, sobre todo, sin tener que pensar en
hacerlo, nuestro cuerpo reacciona ante estímulos que nos generan estrés y/o
que percibimos como un peligro, ya sea algo realmente dañino (un obstáculo
en la autopista) o que simplemente puede ser molesto (que caiga una taza al
suelo).
Y en todos estos procesos, al implicar la comunicación veloz entre distintas
estructuras del cuerpo, está involucrado el sistema nervioso, que es la red de
neuronas que, interconectadas, permite la transmisión de información a lo
largo y ancho del cuerpo.

Las funciones del sistema nervioso simpático son las siguientes .

1. Incremento de la frecuencia cardíaca


Cuando hay que actuar rápido ante un peligro, ya sea huyendo o atacando,
los músculos tienen que estar listos para trabajar de una forma más eficiente
de lo normal. Pero esto no sale gratis. Si tienen que actuar más rápido,
necesitan más oxígeno y nutrientes.
El corazón es la “bomba” que hace llegar la sangre cargada de oxígeno y
nutrientes a todo el cuerpo, por lo que, si estos músculos necesitan más de lo
normal, deberá incrementar su actividad. Esto implica necesariamente
aumentar la frecuencia cardíaca (con el consecuente aumento de la presión
sanguínea), cosa que regula el sistema nervioso simpático.
2. Dilatar las pupilas
Cuando estamos ante un peligro, nuestros sentidos tienen que
agudizarse con el fin de captar tanta informaci ón como se pueda y
facilitar nuestra respuesta. Y uno de los sentidos m ás importantes,
tanto para la huida como la reacción, es la vista.
En este contexto, el sistema nervioso simpático ordena a los
músculos de los ojos que dilaten las pupilas, haciendo que se capte
más luz. Cuando estamos en calma, el parasimp ático hace que se
contraigan, pues no necesitamos tanta luz.

3. Aumentar la producción de las hormonas del estr és


Especialmente la adrenalina y la noradrenalina. Estas hormonas
son las que nos llevan a experimentar estrés físico y emocional
cuando estamos ante un peligro, pero son muy importantes para
propiciar todas las funciones que desempeña el sistema nervioso
simpático. El estrés es necesario. Una vez se ha activado su
producción, nuestro rendimiento físico y psicológico aumenta,
aunque la parte “mala” son las emociones negativas que se
derivan de su presencia en el cuerpo

4. Incrementar la respiración
Cuando estamos ante un peligro, nuestra respiraci ón se acelera.
Esto es debido a que el sistema nervioso simp ático, como “sabe”
que se necesitará más oxígeno del normal para satisfacer las
necesidades de los músculos, envía órdenes a los pulmones para
que la tasa de respiración sea también más alta de lo normal y as í
captar más oxígeno.

5. Suprimir las funciones no esenciales


Cuando estamos ante un peligro, el organismo tiene que destinar
todas las energías a mantener los mecanismos de supervivencia,
que son básicamente músculos, cerebro, sentidos, sistema
cardiovascular y aparato respiratorio. Todo lo dem ás, en ese
momento, molesta en el sentido que es malgastar energ ías en
algo que no nos llevará a responder mejor ante la amenaza .
Sistema nervioso parasimpático:
Existen múltiples estímulos que disparan nuestras reacciones de
alarma. Estrés, amenazas potenciales nos alteran y provocan una
activación del organismo. Dicha activación supone el consumo de
gran cantidad de energía. Sin embargo, pasado el momento en
que es necesario estar alerta, es necesario cesar ese gasto
energético tranquilizándonos, relajando nuestros sistemas
corporales y volviendo a un estado normal.
Este proceso, que al igual que en el momento de activarse es
llevado a cabo a nivel fisiológico de forma inconsciente e
involuntaria, es realizado por el sistema nervioso parasimp ático

Las funciones del sistema nervioso parasimpático son las


siguientes:
1. Región craneal
Dentro de esta región podemos encontrar conexiones con
diferentes regiones, tanto a nivel de de hipotálamo , mesenc éfalo y
romboencéfalo . En esta región del sistema nervioso parasimp ático
destacan la presencia y participación de muchas fibras nerviosas
de gran importancia.
Por ejemplo, a través del nervio vago el sistema llega al coraz ón, a
los pulmones y al tubo digestivo, provocando diferentes
actuaciones. Además, el nervio glosofaríngeo también se puede
encontrar en esta zona, gestionando la deglución. Los nervios
faciales también participaron en este sistema, llevando
información que permite la generación de saliva y mucosa en la
boca y de lágrimas en los ojos.

2. Región sacra
En la parte más inferior de la médula espinal encontramos las
vértebras sacras, estando en adultos fusionadas en una única
estructura ósea. En esta región, podemos encontrar una de las
pocas conexiones del sistema nervioso parasimp ático que no se
encuentran a nivel intracraneal. En el sacro encontramos ganglios
que inervan el sistema urogenital, lo cual es l ógico teniendo en
cuenta el tramo de la médula en la que se sitúa
Reacciones en los diferentes sistemas

Sistema visual
En situaciones de peligro el ser humano dilata la pupila dado que
es necesario ser capaz de percibir cuanto más mejor con el fin de
poder detectar y discriminar estímulos amenazantes. Esto se hace
para detectar cualquier atisbo de posible amenaza a tiempo y
poder dar paso a una pronta reacción.
Sin embargo, en estado de reposo no es necesario que se capte
tanta luz. El sistema parasimpático se encarga de contraer la
pupila, disminuyendo la luz que entra en el sistema visual y queda
proyectada en la retina

Sistema cardíaco
El sistema parasimpático provoca en el corazón una respuesta
opuesta a la del sistema simpático. Dado que se trata de disminuir
el gasto energético y recuperar el equilibrio interno del cuerpo, se
enlentece el ritmo cardíaco y la presión sanguínea, fluyendo la
sangre con más lentitud por el organismo.

Sistema respiratorio
En el sistema respiratorio el parasimpático actúa produciendo
broncoconstricción, es decir, permitiendo su contracción y
relajación. Participa en su ritmo normal y permite que el sistema
respiratoria reduzca la entrada de oxígeno en situaciones en las
que previamente se ha precisado de un aumento de él. Esto
provoca que la energía obtenida y aprovechada por el cuerpo
esté dentro de la normalidad.
Sistema excretor
En situaciones de peligro la excreción supone un riesgo al
necesitar de un cierto nivel de energía para realizarla, adem ás del
riesgo que supone tanto el proceso excretor como la propia
excreción en sí (puede servir para localizar al sujeto por el olor o
el calor). Sin embargo la expulsión de residuos es fundamental
para el equilibrio del cuerpo. En este aspecto el sistema
parasimpático inerva tanto vejiga como esfínter anal, contrayendo
la primera y relajando la segunda.
Sistema genital
El parasimpático también tiene una importante vinculaci ón con la
sexualidad humana. Y es que estando el organismo en estado de
reposo permite la excitación sexual, causando la erecci ón (tanto
del pene como del clítoris).

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