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Unidad 4- Lit inglesa-

Adison

Los sueños nos dan la idea de las excelensias del alma humana y nocion de su independencia .

En primer lugar, nuestros sueños son muestra de la gran independencia del alma, que el poder del
dormir no logra abatir ni apaciguar.

Cuando el hombre se halla fatigado al cabo de la jornada, esta activa parte de su todo.

El alma sigue en acción, el cuerpo se cansa, los sueñpos se ven como relajaciones y distracciones
del alma cuando esta esta eximida de su maquina, deportes y recreaciones. Y ha dejado su carga a
dormir.

En segundo lugar, los sueños muestran la agilidad y perfeccion que son propios de las facultades
de la mente cuando están desligadas de su cuerpo.

El alma queda obstruida y demorada en sus operaciones cuando actúa de consuno con su pesado
y torpe compañero. Pero en los sueños es maravilloso obvservar como y con qué vivacidad y
locuacidad se manifiesta.

Lo lento del discurso provoca impremeditadas arengas o agiles diálogos en idiomas de los que
poco o nada se sabe. No hay acción mas penosa d e la mente que la invención; no obstante, en los
sueños funciona con una facilidad y diligencia que no se dan cuando estamos despiertos.

EN un sueño pude componer toda una comedia, cuando mi memoria es tan fiel como mi razón ello
es fructífero, pero nunca estudiaría en mis sueños aunque si haría mis devociones, nuestras
memorias solo relatan a nuestras almas una historia confusa de lo ocurrido.

Se ha obvservado que el hombre al momento de su partida habla y razón de si mismo en demasía,


el alma empieza a sentirse libre de sus ataduras del cuerpo y a razonar de si misma como
corresponde, a discutir imperiosamente sobre su inmortalidad.

EN tercer lugar, las pasiones afectan la mente con mas fuerza cuando estamos dormids, alegría y
tristeza dan mas vigorosa sensación de placer y pena que en cualquier otro momento. E igual la
devoción, tal como la da a entender el excelente autor citado, mientras que el alma se eleva el
cuerpo reposa. La experiencia de todo hombre informara al respecto aunque de distnta manera
según la constitución de cada uno.

Lo que deseo destacar es lo divino del poder del alma, capaz de producir su propia compañía.
Conversa con innumerables seres de su propia creación y se traslada a diez mil escenas de su
propia imaginación. Ella es su propio teatro, su actor y espectador. Lo que me hace acordar de
aquello que Plutarco asigna a Heraclito, todo hombre despierto habita un mundo común, pero
cada uno piensa que habita su propio mundo cuando duerme, sueña despierto, conversa con el
mundo de la naturaleza, dormido con su mundo particular.
No creo que el alma se desligue enteramente del cuerpo, basta con que no este hundida con
exceso en la materia o no se encuentre embrollada y perpleja por la maquina de la vigilia, la unión
con el cuerpo se desliga lo necesario para dar mas juego al alma la que se recoge en si misma y
recupoera su capacidad de surgir.

Sobre los sueños- Browne-

Una buena parte de nuestros sueños esta sapicada de visiones y objetos fntasticos por los cuales
somos confesadamente engañados. El dia nos proporciona certidumbres, la noche ficciones y
falsedades que incómodamente dividen la estimación natural de nuestro ser. Y, por tanto, tras
haber pasado el dia en trabajos serio e indagaciones racionales de la verdad, nos complacemos en
entregarnos a un estado del ser en el que las mentes mas sensatas han llevado a efecto todas las
monstruosidades de la melancolía y que, con los ojos abiertos, no son mejores que la necedad y l a
locura.

Los virtuosos pensamientos d el dia guardan buenos tesoros para la noche por lo cual las
impresiones de figuras imaginarias surgen convirtiéndose en formas serenas, aceptables para
nosotros cuando estamos dormidos y que sirven de preparación a las impresiones divinas, por
ende, el sueño de salomon fue dichoso. Asi preparado, bien pudo Jacob soñar con angeles en
almohada de piedra y el primer sueño de adan pudo ser mejor que cuantos le sucedieron.

Para aumentar el engaño de los sueños, los objetos fantásticos parecen mas grandes de cómo
son,y al ser contemplados en el vaporoso estado del sueño amplian sus diámetros a nuestros ojos,
po lo que puede resultar mas fácil soñar con gigantes que con enanos.

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