REFORMA AGRIARIA EN AMERICA LATINA

Esta misma en un primer momento conformo una reforma para las tierras de las
haciendas en Latinoamérica y conformo un nuevo estatuto que vario de país en país
desde la época de los 50’s.
Esta se produjo por los siguientes factores: Crecimiento económico, distribución del
ingreso y pobreza, inflación, tamaño del mercado, razonamientos políticos y presión
externa.
Dadas las siguientes causas, se crearon diferentes conflictos a lo largo de la región sobre
todo en los años 60’s, lo que hizo que la reforma agraria aparezca como respuesta a la
inminente transformación del mercado y a la modernización de las granjas agrícolas
capitalistas. La reforma empezó como una forma de repartición equitativa de la riqueza
que era producida por la tierra y estaba en manos de los terratenientes las cuales
conformaban lo que era las haciendas tradicionales por toda américa latina. En Bolivia y
Cuba cuatro quintas partes fueron expropiadas. En países como México, Chile, Perú y
Nicaragua se expropiaron casi la mitad de las tierras agrícolas, en cambio en países
como Ecuador, Costa Rica, Honduras, Uruguay la repartición fue incluso menor que
25% de la totalidad. En Panamá, Honduras, Colombia, Ecuador y Costa Rica apenas se
beneficiaron el 10% de las familias agrícolas y en otros países incluso fueron aun
menores. Cabe destacar que Brasil se resistió a estas reformas por lo que no hubo
pronunciamiento alguno allí.
Después de esto, la falta de recursos, la inexistencia de nuevas gestiones y la
incertidumbre dio como resultado que la reforma agraria no fuera si no una nueva forma
de avance capitalista de apropiación del capital latinoamericano, ya que no considero a
los campesinos y sus formas de producción agrícolas rudimentarias, lo que causo más
estragos por la falta de nuevos conocimientos. Por lo que se puede concluir que el papel
que desempeño la reforma agraria en la modernización y el crecimiento fue pequeño e
indirecto.