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-PREGUNTAS PARA SANAR

Bloqueo Espiritual
Para conocer el bloqueo espiritual que te impide responder a una necesidad importante de
tu SER, utiliza las preguntas sugeridas.
Para precisar mejor la causa de tu problema físico, hazte las siguientes preguntas:

BLOQUEO FÍSICO:
"¿Qué adjetivos pueden describir mejor lo que siento en mi cuerpo?".
Tu respuesta representará lo que sientes ante la persona o la situación que ha
desencadenado el mal.

BLOQUEO EMOCIONAL:
"¿Qué me impide realizar esta enfermedad?".
Tus respuestas a esta pregunta representan al deseo o los deseos bloqueados.
"¿A qué me obliga esta enfermedad?".
Retoma esta respuesta (o respuestas) y agrega la palabra "no" al principio de cada uno de
ellas. Estas frases representan tus deseos bloqueados.
.
BLOQUEO ESPIRITUAL:
"Si me permitiera estos deseos, ¿qué sería?"
(Utiliza los deseos encontrados en la etapa anterior). La respuesta a esta pregunta
corresponde a una necesidad profunda de tu ser, bloqueada por alguna carencia.
BLOQUEO MENTAL:
"Si en mi vida me permitiera ser...
(Repite la respuesta de la pregunta anterior), ¿qué podría sucederme de desagradable o de
no aceptable?".
La respuesta a esta pregunta corresponde a la creencia no benéfica que bloquea tus deseos y
te impide realizar tu necesidad, creando así el problema físico. Cuando conoces la creencia
no benéfica o la manera de pensar que te impide ser lo que quieres, lo primero que debes
hacer para transformarte es permitirte haber tenido la necesidad de creerla, estableciendo
contacto con el niño que habita en ti y que la creyó después de haber experimentado un
sufrimiento. Después, pregúntate si todavía la necesitas realmente para ser feliz.
Si la respuesta es afirmativa, ello es señal de que todavía te es útil. Tú eres quien gobierna
tu vida, de modo que puedes seguir creyendo en ella, pero debes saber que, al actuar así,
obtendrás los mismos resultados que han obtenido hasta ahora. No esperes ningún cambio.
Si estás convencido de que esta creencia todavía es cierta pero que el hecho de creerla no te
hace feliz, verifica en tu interior si estás tan convencido de su veracidad como hace algunos
años. Es muy probable que ahora lo creas mucho menos. Por lo tanto, estás en vías de
sanar. Cuando en lo más profundo de ti sabes que no quieres seguir creyendo la misma
cosa, no te queda más que realizar las acciones necesarias para manifestar tus deseos a fin
de permitirte ser lo que quieres ser.

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