B LECTURA
La moral cristiana se basa, nace y se nutre de la fe en Jesús de Nazaret,
confesado como Cristo y aceptado como la norma incondicional de la
práctica de la fe y la celebración. Jesús nos enseña a través del
Evangelio cómo debemos vivir en esta vida temporal para alcanzarla
vida eterna, pues es el AMOR principio básico de su enseñanza, nos
enseña a vivir de acuerdo a sus normas. Es el amor el único principio
que debe regir toda acción y el final que debe tender: “Jesús le contestó:
Amarás al Señor tu Dios con todo tu corazón, con toda tu alma y con toda tu
mente. Este es el primer mandamiento y el más importante. El segundo es semejante a éste:
Amarás a tu prójimo como a ti mismo. En estos dos mandamientos se basa toda la ley y los
profetas” (Mt22,37-40). Las Parábolas, nos enseñan verdades fundamentales, también en
el aspecto moral. Los ejemplos que nos pone Jesús, están siempre vivos en nosotros,
especialmente porque nos exigen tomar conciencia de lo que es ser cristiano. La sencillez
del mensaje de Jesús, nos referimos a la delicada, suave e interesante forma que utiliza
Jesús para llegar a nuestro corazón, nos invita a rechazar los estilos de vida que
conducen al pecado, aquellos que deforman la imagen de Dios en el hombre. En
consecuencia, en los Evangelios, encontramos una perfecta enseñanza de moral
cristiana, pues descubrimos en ellos el llamado de salvación y conversión a Dios. Jesús,
nos hace una invitación a cambiar de vida: ¿por qué no ser como Dios quiere que
seamos? Nuestro Padre tiene un gran deseo, que todos sus hijos sean como Jesucristo,
que seamos hombres buenos, generosos, caritativos, amorosos con todos nuestros
hermanos.
FUNDAMENTOS DE LA MORAL CRISTIANA.
Consideramos los siguientes:
1. LA LIBERTAD. Es el poder de obrar o de no obrar, y de ejecutar por sí mismo acciones
deliberadas orientadas hacia el bien. La libertad alcanza su perfección cuando está
ordenada a Dios, que es el supremo bien. La Sagrada Escritura fundamenta el tema de la
libertad en el designio Divino: - Dios ha creado al hombre para que logre felicidad,
conociendo la verdad y el bien. - Pero la verdad y el bien no han sido impuestos, el hombre
ha de ir libremente hacia ellos. Dios hizo libre al hombre para que por su propia decisión
busque a su Creador y se una a él por amor y por ello elija un camino recto, bueno y justo.
Asimismo, en el Nº17, del documento del Concilio Vaticano II, Gaudiumet Spesse nos habla
sobre la grandeza de la libertad: - No se trata de decidir lo que está bien sino de hacer
libremente lo que objetivamente esté bien. - No se trata de decidir lo que es la verdad sino
de obrar libremente conforme a lo que objetivamente es verdad. - Yo como ser libre decido
acercarme a aquello para lo que he sido enviado, o bien me alejaré de aquello para lo que
no he sido enviado. - La libertad es el poder de obrar o no, de hacer esto o aquello, de
ejecutar así por sí mismo, acciones de liberadas. La libertad alcanza su perfección, cuando
está ordenada a Dios, el Supremo Bien.- El derecho al ejercicio de la libertad, especialmente
en materia religiosa y moral, es una exigencia inseparable de la dignidad del hombre. Pero
el ejercicio de la libertad no implica el pretendido derecho de decir o de hacer cualquier
cosa. “Para ser libres, nos ha liberado Cristo. Por eso, manténgase firmes y no permitan de
nuevo el yugo de la esclavitud. Es cierto, hermanos, que han sido llamados a la libertad.
Pero no tomen la libertad como pretexto para satisfacer sus apetitos desordenados; antes
bien, háganse esclavos los unos de los otros por amor”.
2.LA CONCIENCIA. Es la voz interior que ilustra la inteligencia para juzgar si una acción es
buena o mala, y le impulsa a obrar el bien y a evitar el mal. En lo más profundo de su
conciencia el hombre descubre una ley que él no se da a sí mismo, pero a la que debe
obedecer y cuya voz resuena, cuando es necesario, en los oídos de su corazón, llamándole
siempre a amar y a hacer el bien y a evitar el mal… El hombre tiene una ley inscrita por Dios
en su corazón… La conciencia es el núcleo más secreto y el sagrario del hombre, en el que
está solo con Dios, cuya voz resuena en lo más íntimo de ella.
C ACTIVIDADES DE PRÁCTICA
Después de ANALIZAR COMPRESIVAMENTE LA LECTURA responda las siguientes
preguntas:
1. ¿En qué se basa la moral cristiana?
2. Explicar los tres fundamentos de la moral cristiana.
3. ¿Por qué se dice que Jesús es el modelo de la moral cristiana?