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C A P Í T U L O

Enfermedad pulmonar
Mark S. Chesnutt, MD
y Thomas J. Prendergast, MD

El principal papel fisiológico de los pulmones es poner oxígeno a serias. La lesión o disfunción de las vías respiratorias da por re­
disposición de los tejidos para metabolismo y eliminar el princi­ sultado enfermedades pulmonares obstructivas, entre ellas bron­
pal subproducto de ese metabolismo, el dióxido de carbono. Los quitis y asma, mientras que la lesión del parénquima pulmonar
pulmones desempeñan esta función al mover el aire que se inspi­ puede producir enfermedad pulmonar restrictiva o vasculopatía
ra de modo que quede en estrecha proximidad al lecho capilar pulmo­nar. Para entender las presentaciones clínicas de la enfer­
pulmonar para permitir el intercambio de gases por medio de medad pulmonar, primero es necesario comprender la organiza­
difusión simple. Esto se consigue con una carga de trabajo míni­ ción ana­tómica y funcional de los pulmones que determina la
ma, se regula con eficiencia en un amplio rango de demanda me­ función normal.
tabólica, y tiene lugar con proporción estrecha entre la ventilación
y la perfusión pulmonares. La extensa superficie del sistema res­ PUNTO DE CONTROL
piratorio también debe protegerse de una amplia variedad de in­
fecciones o nocivos fenómenos adversos ambientales. 1. ¿Cuáles son las dos funciones fisiológicas principales de
Los seres humanos poseen un sistema respiratorio complejo los pulmones?
y eficiente que satisface estos requerimientos diversos. Cuando 2. ¿Cuáles son los requerimientos para la función pulmonar
ocurre lesión de componentes del sistema respiratorio, se altera exitosa?
la función integrada del conjunto; las consecuencias pueden ser

ESTRUCTURA Y FUNCIÓN NORMALES DE LOS PULMONES


ANATOMÍA
mones. Dividen segmentos, revisten las vías respiratorias y los
El sistema respiratorio maduro consiste en los pulmones cubier­ vasos, y apoyan las paredes alveolares con una red fibrosa muy
tos por la pleura visceral, contenidos por la pared del tórax y por elástica y delicada. El soporte elástico multidireccional que pro­
el diafragma; en condiciones normales este último sirve como el porciona esta red permite que los pulmones, desde los alvéolos
principal músculo fuelle para la ventilación. Los pulmones se di­ hasta las vías respiratorias de conducción, se sostengan a sí mis­
viden en lóbulos, cada uno demarcado por pleura visceral inter­ mos y retengan la permeabilidad de las vías respiratorias a pesar
puesta. Cada pulmón posee un lóbulo superior y uno inferior; el de cambios grandes del volumen.
lóbulo medio y la língula son los terceros lóbulos en los pulmo­ El surfactante es un material complejo que producen las cé­
nes derecho e izquierdo. Al final de la espiración, la mayor parte lulas alveolares tipo II, y está compuesto por múltiples fosfolí­
del volumen de los pulmones es aire (cuadro 9-1), mientras que pidos y proteínas relacionadas específicas. La función fisiológica
casi la mitad de la masa de los pulmones consta del volumen de del surfactante es aumentar la estabilidad anatómica de los pul­
sangre. El hecho de que el tejido alveolar sólo pesa 250 g en total, mones. La presencia de surfactante que cubre la superficie epitelial
pero tiene un área total de 75 m2, atestigua la delicada estructura alveolar origina una notoria disminución de la tensión superficial,
de la región de intercambio de gases de los pulmones. lo que permite la expansión de los alvéolos con una presión de
Las fibras de tejido conjuntivo y el surfactante sirven para man­ distensión transpulmonar de menos de 5 cmH2O. En ausencia
tener la integridad anatómica de esta área de superficie grande y de esta capa activa de superficie, la tensión superficial creciente
compleja. Las fibras de tejido conjuntivo son estructuras de colá­ que se vincula con un decremento del volumen alveolar duran­
geno, elásticas y muy organizadas que se irradian hacia los pul­ te la espiración colapsaría los alvéolos.

213
214  CAPÍTULO 9 Enfermedad pulmonar

CUADRO 9–1  Componentes de un pulmón normal

Respiratorias No respiratorias Cartílago, glándulas bronquiales


Tráquea
Generación
Componente Volumen (ml) o masa (g) Grosor (lm) 0

Vías respiratorias de conducción


Gas (capacidad 2 400 ml
residual funcional) 1

Bronquios
Tejido 900 g 2
Sangre 400 g
Pulmón 500 g
Estructuras de sostén 250 g 7
Paredes alveolares 250 a 300 g 8
Epitelio 60 a 80 g 0.18 9
Endotelio 50 a 70 g 0.10

Bronquíolos
Intersticio 100 a 185 g 0.22
15
Reproducido, con autorización, de Murray JF et al. Textbook of Respiratory Medicine,
16
4a ed. Copyright Elsevier/Saunders, 2005.

Unidades respiratorias
17
18

terminales
Anatomía de las vías respiratorias y epitelial 19
20

Conductos
alveolares
La división anatómica adicional de los pulmones se basa, sobre 21
todo, en la separación del árbol traqueobronquial hacia vías res­ 22
23
piratorias de conducción, que permiten el movimiento del aire
desde el ambiente externo hacia áreas de intercambio de gases, y
FIGURA 9–1  Subdivisión de las vías respiratorias de conducción y de
unidades respiratorias terminales, o ácinos, las vías respirato­ las unidades respiratorias terminales; este esquema muestra las subdivi-
rias y estructuras alveolares relacionadas que participan de modo siones de las vías respiratorias tanto de conducción como respiratorias. La
directo en el intercambio de gases (figura 9-1). Las vías respira­ ramificación sucesiva produce generaciones crecientes de vías respirato-
torias de conducción proximales se revisten de células epiteliales rias, empezando con la tráquea. Note que los segmentos de los pulmones
cilíndricas seudoestratificadas ciliadas, las cuales se apoyan en un donde ocurre el intercambio de gases sólo se encuentran después de
esqueleto cartilaginoso en sus paredes, y contienen glándulas secre­ ramificación extensa, con reducción concomitante del calibre de las vías
toras en la pared epitelial. El epitelio ciliado tiene una orientación respiratorias e incremento del área de corte transversal total (figuras 9-2
uniforme de cilios que se mueven al unísono hacia la faringe; esta y 9-3). (Redibujada, con autorización, de Weibel ER. Morphometry of the Human Lung.
Springer, 1963.)
acción ciliar, junto con la capa de moco que producen las glándu­
las submucosas secretoras de moco, proporciona un mecanismo
para el transporte continuo de material contaminante o excesivo
hacia afuera de los pulmones. Las vías respiratorias también tie­
.08
nen músculo liso circunferencial pero, al igual que con las glán­
dulas secretoras, se reduce y después se pierde conforme las vías
respiratorias se ramifican en posición más lejana hacia el pulmón,
y disminuyen de calibre. Las vías respiratorias de conducción de
Resistencia (cmH2O/L/s)

.06
menor tamaño son los bronquíolos no respiratorios; se caracte­
rizan por una pérdida del músculo liso y del cartílago, pero reten­
ción de un epitelio cúbico que puede ser ciliado, y que no es un
.04
sitio de intercambio de gases. Los lóbulos de los pulmones se di­
viden en lobulillos menos separados, se definen como colecciones
de unidades respiratorias terminales a las que delimitan de mane­ Bronquios Bronquíolos
ra incompleta tabiques de tejido conjuntivo. Las unidades respira­ .02 segmentarios terminales
torias terminales son la unidad fisiológica y anatómica final de los
pulmones, con paredes de células epiteliales alveolares delgadas
que permiten el intercambio de gases con el lecho capilar alveolar.
El principal sitio de resistencia para el flujo de aire en los pul­ 0 5 10 15 20
mones se encuentra en los bronquios de tamaño medio (figura Generación de vías respiratorias
9-2); esto parece contradictorio, porque se esperaría que las vías
respiratorias de menor calibre fueran el principal sitio de resisten­ FIGURA 9–2  Localización del principal sitio de resistencia al flujo de
aire. Las vías respiratorias de segunda a quinta generaciones incluyen los
cia. La ramificación repetitiva de las vías respiratorias de pequeño
bronquios segmentarios y bronquíolos de mayor calibre, que presentan
calibre conduce a un incremento profundo del área de corte trans­
la mayor resistencia al flujo de aire en individuos normales. Las vías respi-
versal que en circunstancias normales no contribuye significativa­ ratorias de menor tamaño contribuyen con poco pese a su menor calibre
mente a la resistencia de las vías respiratorias en individuos sanos debido al enorme número dispuesto en paralelo. Compare con la figura
(figura 9-3). En condiciones patológicas, como el asma, bronquios 9-3. (Adaptada con autorización de Elsevier, de Pedley TJ et al. The prediction of pressure
y bronquíolos de menor tamaño quedan estrechados, la resisten­ drop and variation of resistance within the human bronchial airways. Respir Physiol
cia de las vías respiratorias puede aumentar mucho. 1970;9(3):387.)
CAPÍTULO 9 Enfermedad pulmonar  215

500 bronquial, las estructuras hiliares, las arterias y venas pulmona­


res, sistema nervioso y linfáticos pulmonares, tabiques de tejido
conjuntivo y pleura visceral. Casi todos los tumores pulmonares
reciben su aporte sanguíneo a partir de la circulación bronquial.
400 Hay abundantes anastomosis broncopulmonares en los ámbitos
Área total de corte transversal (cm2)

arteriolar y capilar que son silenciosos en individuos sanos, pero


que pueden agrandarse en presencia de enfermedad y contribuir
a hemoptisis. El drenaje de la circulación bronquial ocurre tanto
300
hacia la aurícula derecha por medio de la vena ácigos como hacia
la aurícula izquierda mediante las venas pulmonares. Estas últi­
mas representan un cortocircuito anatómico de sangre desoxigena­
200
da, que típicamente constituye menos de 5% del gasto cardiaco.
Zona de conducción Zona Los linfáticos pulmonares surgen en espacios de tejido conjun­
respiratoria tivo por debajo de la pleura visceral y en plexos profundos en la
unión de los bronquíolos terminales y los alvéolos. Los linfáticos
100 no entran al espacio periintersticial alveolar (figura 9-4). Como
resultado, el líquido que está en el intersticio alveolar debe mo­
Bronquíolos verse hacia la región de los bronquíolos terminales para tener
terminales acceso a los linfáticos de drenaje. Los conductos linfáticos viajan
principalmente en la vaina peribroncovascular de regreso hacia
0 5 10 15 20 23
Generación de vías respiratorias
los ganglios linfáticos hiliares y mediastínicos antes de entrar al
conducto torácico izquierdo o el conducto linfático derecho. El dre­
FIGURA 9–3  Generación de vías respiratorias y área de corte transver- naje linfático del espacio pleural ocurre por medio de plexos que
sal total de las vías respiratorias. Note el aumento en extremo rápido del revisten de pleura parietal costal, diafragmática y mediastínica
área de corte transversal total en la zona respiratoria (compare con la fi-
que están anatómicamente separados de los linfáticos pulmonares.
gura 9-1), y la disminución de la resistencia como una consecuencia del in­
cremento del área de corte transversal (compare con la figura 9-2). Como
resultado, la velocidad anterógrada del gas durante la inspiración se hace Sistema nervioso pulmonar
muy baja al nivel de los bronquíolos respiratorios, y la difusión de gases Los pulmones están ricamente inervados con fibras neurales pro­
se convierte en el principal modo de ventilación. (Redibujada, con autoriza-
venientes de los sistemas parasimpático (vagal), simpático y el lla­
ción, de West JB. Respiratory Physiology: The Essentials, 4a ed. Williams & Wilkins, 1990.)
mado sistema no adrenérgico, no colinérgico (NANC). Las fibras
eferentes incluyen: 1) fibras parasimpáticas, con eferentes colinér­
gicos muscarínicos que median broncoconstricción, vasodilatación
Las arterias pulmonares están en estrecha asociación con el ár­ pulmonar y secreción de glándulas mucosas; 2) fibras simpáticas,
bol bronquial ramificado en los pulmones (figura 9-4). Tanto el cuya estimulación produce relajación del músculo liso bronquial,
flujo sanguíneo arterial como el del aire bronquial son regulados vasoconstricción pulmonar, e inhibición de la actividad de glán­
de manera activa mediante cambios del calibre del vaso o de las dulas secretoras, y 3) el sistema NANC, con múlti­ples transmisores
vías respiratorias. La relación anatómica entre arterias y bronquios implicados, entre ellos ATP, NO y neurotransmisores peptídicos,
brinda un entorno ideal para la coincidencia continua entre la como la sustancia P y el péptido intestinal vasoactivo (VIP). El
ventilación y la perfusión a diferentes segmentos del pulmón. sistema NANC participa en eventos inhibidores, como broncodi­
latación, y puede funcionar como el equilibrio recíproco predo­
Aspectos anatómicos vasculares y linfáticos minante para el sistema colinérgico excitador.
Los aferentes pulmonares constan principalmente de las fibras
El sistema vascular pulmonar incluye dos circuitos que distribu­
sensoriales vagales, las cuales incluyen:
yen sangre en los pulmones: las circulaciones pulmonar y bron­
quial. El ventrículo derecho bombea todo su gasto de sangre 1. Fibras provenientes de receptores de estiramiento bronco­
venosa mixta mediante las arterias pulmonares hacia los capila­ pulmonares, situados en la tráquea y los bronquios proxima­
res alveolares. Las arterias y arteriolas pulmonares son vasos re­ les. La estimulación de estas fibras por inflación pulmonar
vestidos de músculo liso situado adyacente a los bronquios den­tro da lugar a broncodilatación y frecuencia cardiaca aumentada.
del fascículo broncovascular pulmonar. Las arteriolas pulmona­ 2. Fibras provenientes de receptores irritantes, se hallan en las
res son muy sensibles a la PO2 alveolar, con respuesta vasocons­ vías respiratorias proximales. La estimulación de estas fibras
trictora prominente a la hipoxia. La vasoconstricción pulmonar por varios estímulos inespecíficos desenca­dena respuestas efe­
hipóxica permite que la perfusión alveolar coincida con la ventila­ rentes, entre ellas tos, broncoconstricción y secreción de moco.
ción (véase después). Las venas pulmonares sur­gen de los capilares 3. Las fibras C, o fibras de receptores yuxtacapilares (J), son
alveolares y forman vasos que cruzan los tabiques intralobulilla­ fibras no mielinizadas que terminan en el parénquima pul­
res para devolver sangre oxigenada a la aurícula izquierda. monar y las paredes bronquiales, y muestran respuesta a
Las arterias bronquiales que surgen a partir de la aorta y de las estímulos mecánicos y químicos. Las respuestas reflejas aso­
arterias intercostales suministran sangre oxigenada a presiones ciadas con la estimulación de fibras C comprenden un pa­
sistémicas a casi todas las estructuras intrapulmonares en po­ trón respiratorio superficial rápido, secreción de moco, tos
sición proximal a los bronquíolos terminales, incluso el árbol y lentificación de la frecuencia cardiaca con la inspiración.
216  CAPÍTULO 9 Enfermedad pulmonar

Volúmenes y capacidades pulmonares, y el espirograma normal

El volumen de gas en los pulmones se divide en volúmenes y capacidades, como se muestra en las barras a la izquierda de la figura que
aparece a continuación. Los volúmenes pulmonares son primarios: no se superponen entre sí. El volumen de ventilación pulmonar (VT)
es la cantidad de gas inhalada y exhalada con cada respiración en reposo. Un volumen de ventilación pulmonar normal en una perso-
na de 70 kg es de alrededor de 350 a 400 ml. El volumen residual (RV) es la cantidad de gas que queda en los pulmones al final de una
exhalación máxima. Las capacidades pulmonares están compuestas de dos o más volúmenes pulmonares. La capacidad vital (VC) es la
cantidad total de gas que puede exhalarse luego de una inhalación máxima. La capacidad vital y el volumen residual constituyen juntos
la capacidad pulmonar total (TLC), o la cantidad total de gas en los pulmones al final de una inhalación máxima. La capacidad residual
funcional (FRC) es la cantidad de gas en los pulmones al final de una respiración de volumen de ventilación pulmonar en reposo. (IC,
capacidad inspiratoria; IRV, volumen de reserva inspiratoria; ERV, volumen de reserva espiratoria.)
El espirograma que se muestra a la derecha en la figura está dibujado en tiempo real. La primera respiración de volumen de ventila-
ción pulmonar que se muestra toma 5 s, lo que indica una frecuencia respiratoria de 12/min. La maniobra de capacidad vital forzada
(FVC) empieza con la inhalación desde la FRC hasta la TLC (que dura alrededor de 1 s) seguida por una exhalación forzada desde la TLC
hasta el RV (que dura aproximadamente 5 s). La cantidad de gas exhalado durante el primer segundo de esta maniobra es el volumen
espiratorio forzado en un segundo (FEV1). Los sujetos normales expulsan alrededor de 80% de la FVC durante el primer segundo. La
relación entre el FEV1 y la FVC (llamada FEV2/FVC o FEV1%) está disminuida en pacientes con enfermedad pulmonar obstructiva, y
aumentada en aquellos con enfermedad pulmonar restrictiva.

Inspiración máxima

IRV
IC
VC
TLC VT

ERV Nivel espiratorio


en reposo
FRC
Espiración máxima
RV RV

5s
(Redibujada, con autorización, de Staub NC. Basic Respiratory Physiology. Churchill Livingstone, 1991.)

Estructura y función inmunitarias PUNTO DE CONTROL


De todos los órganos del cuerpo, los pulmones tienen una expo­
sición singular a fenómenos adversos ambientales. La ventila­ 3. ¿Cuáles son las funciones de los sistemas de tejido conjun-
ción no de esfuerzo en un adulto totaliza alrededor de 7 500 L de tivo y de surfactante en la función pulmonar?
aire al día, una cantidad que se incrementa de manera considera­ 4. ¿Cuál es la función de la acción ciliar del epitelio respira­
ble con la actividad. Esta exposición a un ambiente abierto, no torio?
estéril, impone un riesgo continuo de fenómenos adversos tóxi­ 5. ¿Por qué los bronquios de tamaño medio más que las
cos, infecciosos o inflamatorios. Además, la circulación pulmonar vías respiratorias de pequeño calibre son el principal sitio
contiene el único lecho capilar en el organismo a través del cual de resistencia al flujo de aire en los pulmones?
todo el volumen sanguíneo circulante debe fluir en cada ciclo 6. ¿Cuáles son las funciones fisiológicas de los sistemas neu-
cardiaco. Como consecuencia, el pulmón es un tamiz vascular rales eferente parasimpático, simpático y NANC de los pul-
obligatorio y funciona como un sitio principal de defensa contra mones?
la diseminación hematógena de infección u otras influencias no­ 7. ¿Cuáles son las categorías de receptores sensoriales vaga-
civas. La protección de los pulmones contra lesión ambiental e les aferentes?
infecciosa incluye una serie de respuestas complejas que tiene la 8. ¿Cuáles son las diferentes funciones de las arterias pulmo-
capacidad de proporcionar una defensa oportuna y exitosa con­ nar y bronquial?
tra el ataque mediante las vías respiratorias o el lecho vascular. 9. ¿Qué mecanismo sensitivo tienen las arterias pulmonares
Como se expone en el cuadro 9-2, es conveniente separar estas para igualar la perfusión con la ventilación alveolar?
respuestas en dos categorías principales —protecciones físicas y 10. ¿Cuáles son los componentes del sistema de defensa ines-
químicas inespecíficas, y las estructuras y acciones inmunitarias pecífico de los pulmones?
específicas—, las cuales funcionan de tal modo que previenen 11. ¿Cuáles son los componentes humoral y celular del sistema
lesión del área epitelial y vascular muy grande de los pulmones, de defensa inmunitario específico de los pulmones?
o invasión microbiana de la misma.
CAPÍTULO 9 Enfermedad pulmonar  217

Arteria pulmonar
Nervios vasomotores
Bronquio
Linfáticos

Arteria bronquial

Nervio broncomotor
Vena pulmonar

TB

Linfáticos
A
Nervios vasomotores RB
A
A

A AD
AD
AD A
AD
A
A A
A

FIGURA 9–4  Anatomía de las vías respiratorias, vascular y linfática de los pulmones. Este diagrama demuestra los vínculos anatómicos generales de
las vías respiratorias y las unidades respiratorias terminales con los sistemas vascular y linfático de los pulmones. Los puntos importantes son como si-
gue: 1) el sistema arterial pulmonar corre adyacente al árbol bronquial, mientras que las venas pulmonares de drenaje se encuentran a distancia de las
vías respiratorias; 2) las arterias bronquiales, ramas de origen arterial sistémico, proporcionan el riego sanguíneo de la pared bronquial; 3) los linfáticos
se encuentran adyacentes a los sistemas tanto arterial como venoso, y son muy abundantes en los pulmones, y 4) los linfáticos se encuentran tan lejos
en posición distal como los bronquíolos respiratorios terminales, pero no penetran en la pared alveolar. (A, alvéolo; AD, conducto alveolar; RB, bronquío-
lo respiratorio; TB, bronquíolo terminal.) (Redibujada, con autorización, de Staub NC. The physiology of pulmonary edema. Hum Pathol. 1970;1:419.)

FISIOLOGÍA mico, así como fisiológico y funcional, los pulmones son órganos
elásticos.
En reposo, los pulmones captan 4 L/min de aire y 5 L/min de san­ Los pulmones se inflan y desinflan en respuesta a cambios del
gre, los dirigen de manera que quedan a 0.2 μm uno de otro, y volumen de la caja torácica semirrígida en la cual están suspen­
luego regresan ambos a sus fondos comunes respectivos. Con el didos. Una analogía sería inflar un fuelle de herrero al tirar de las
ejercicio máximo, el flujo puede aumentar a 100 L/min de venti­ asas, lo que incrementa el volumen del fuelle, reduce la presión
lación y 25 L/min de gasto cardiaco. De este modo, los pulmones y produce flujo de entrada de aire. El aire entra a los pulmones
desempeñan su principal función fisiológica de poner oxígeno a cuando la presión en el espacio pleural disminuye por expansión
disposición de los tejidos para metabolismo, y eliminar el princi­ de la pared del tórax. El volumen de aire que entra a los pulmo­
pal subproducto de ese metabolismo, el dióxido de carbono. Los nes depende del cambio de la presión pleural y de la adaptabili­
pulmones desempeñan esta tarea en su mayor parte sin control dad del sistema respiratorio. La adaptabilidad es una propiedad
consciente y mantienen siempre la PaCO2 dentro de una toleran­ elástica intrínseca que relaciona un cambio de volumen con uno
cia de 5%. Es una magnífica hazaña de tubería y control neuro­ de presión. La adaptabilidad tanto de la pared del tórax, como de
químico evolutivos. los pulmones, contribuye a la adaptabilidad del sistema respi­
ratorio (figura 9-5). La adaptabilidad de la pared del tórax no
se modifica de manera significativa con el volumen torácico, al
menos dentro del rango fisiológico. La adaptabilidad de los pul­
Propiedades estáticas: mones varía de modo inverso con el volumen pulmonar. A capa­
adaptabilidad y retroceso elástico cidad residual funcional (functional residual capacity [FRC]), los
Los pulmones mantienen su parénquima en extremo delgado en pulmones son muy adaptables, alrededor de 200 ml/cmH2O. Así,
una enorme área por medio de una compleja estructura de sos­ un decremento de presión de 5 cmH2O, en el espacio pleural,
tén de fibras de colágeno y elastina. Desde el punto de vista anató­ impulsará una respiración de 1 L.
218  CAPÍTULO 9 Enfermedad pulmonar

CUADRO 9–2  Defensas pulmonares Pared del tórax


6 TLC 100

I.  Defensas inespecíficas

Capacidad vital (%)


Sistema 75
respiratorio

Volumen (L)
1. Depuración 4
50
a. Tos V
T
FRC 25
b.  Sistema mucociliar 2

2. Secreciones RV Pulmón 0
MV
a. Traqueobronquiales (moco) 0
–20 –10 0 10 20 30 40
b. Alveolares (surfactantes) Presión estática transórgano (cmH2O)

c. Componentes celulares (entre ellos lisozima, complemento, FIGURA 9–5  Interacción de las propiedades de presión-volumen de
proteínas surfactantes, defensinas) los pulmones y la pared torácica. El volumen pulmonar en reposo (capa-
cidad residual funcional [FRC]) representa el punto de equilibrio donde el
3. Defensas celulares retroceso elástico de los pulmones (tendencia a colapsarse) y la pared del
a.  No fagocíticas tórax (tendencia a desplazarse hacia afuera) están exactamente equili-
bradas. Otros volúmenes pulmonares también pueden definirse al hacer
Epitelio de las vías respiratorias de conducción referencia a este diagrama. La capacidad pulmonar total (TLC) es el punto
donde los músculos inspiratorios no pueden generar suficiente fuerza
Epitelio respiratorio terminal
como para vencer el retroceso elástico de los pulmones y la pared del
b. Fagocíticas tórax. El volumen residual (RV) es el punto donde los músculos espirato-
rios no pueden generar suficiente fuerza como para vencer el retroceso
Fagocitos (monocitos) de la sangre elástico de la pared torácica. La adaptabilidad se calcula al tomar la pen-
diente de estas relaciones entre presión y volumen a un volumen especí-
Fagocitos tisulares (macrófagos alveolares)
fico. Note que la adaptabilidad de los pulmones es mayor a volúmenes
4. Defensas bioquímicas pulmonares bajos, pero disminuye mucho por arriba de dos tercios de la
capacidad vital. (Modificada, de Staub NC. Basic Respiratory Physiology. Churchill Li-
a. Inhibidores de proteinasa (inhibidor de α1-proteasa, inhibidor vingstone, 1991.)
de leucoproteasa secretoria)

b. Antioxidantes (p. ej., transferrina, lactoferrina, glutatión,


albúmina) ca. El retroceso elástico pulmonar está determinado por dos fac­
II. Defensas inmunitarias específicas
tores, la elasticidad tisular y las fuerzas necesarias para cambiar
la forma de la interfaz aire-líquido del alvéolo (figura 9-6). La
1. Mediadas por anticuerpos (respuestas inmunitarias dependientes expansión de los pulmones requiere vencer fuerzas de superficie
de linfocitos B) locales que son directamente proporcionales a la tensión super­
a. Inmunoglobulina secretoria (IgA) ficial local. La tensión superficial es una propiedad física que
refleja la mayor atracción entre moléculas de un líquido más que
b. Inmunoglobulinas séricas entre moléculas de ese líquido y el gas adyacente. En la interfaz
2. Presentación de antígeno a linfocitos de aire-líquido de los pulmones, las moléculas de agua en la in­
terfaz son atraídas con más fuerza entre sí que hacia el aire que
a. Macrófagos y monocitos está por arriba; lo cual crea una fuerza neta, que junta las mo­
b. Células dendríticas léculas de agua en el plano de la interfaz. Si la interfaz se extiende
sobre una superficie curva, esa fuerza actúa para colapsar la cur­
c. Células epiteliales va. La ley de Laplace cuantifica esta fuerza: la presión necesaria
3. Respuestas inmunitarias mediadas por células (dependientes para mantener abierta la curva (en este caso representada por una
de linfocitos T) esfera) es directamente proporcional a la tensión superficial en la
interfaz, e inversamente proporcional al radio de la esfera (figu­
a. Mediadas por citocinas
ra 9-7).
b. Citotoxicidad celular directa El surfactante es una mezcla de fosfolípidos (sobre todo dipal­
mitoilfosfatidilcolina [DPPC, dipalmitoylphosphatidylcholine]) y
4. Respuestas inmunitarias celulares no de linfocitos
proteínas surfactantes específicas. Estas moléculas hidrofóbicas
a. Dependientes de mastocitos desplazan las moléculas de agua desde la interfaz de aire-líquido,
lo que aminora la tensión superficial. Tal reducción tiene tres
b. Dependientes de eosinófilos
inferencias fisiológicas: en primer lugar, disminuye la presión de
retroceso elástico de los pulmones, lo que aminora la presión ne­
cesaria para inflarlos; ello ocasiona menor trabajo de la respi­
La tendencia de un cuerpo deformable a regresar a su forma ración. En segundo lugar, permite que las fuerzas de superficie
basal es su retroceso elástico. El retroceso elástico de la pared varíen con el área de superficie alveolar, lo que promueve la estabi­
del tórax lo determinan la forma y la estructura de la caja toráci­ lidad alveolar y protege contra atelectasia (figura 9-7). En tercer
CAPÍTULO 9 Enfermedad pulmonar  219

Solución salina Aire


200

150
P = 2T
r
Volumen, ml

100

r
50 P T
r
P
0 T
4 8 12 16 20
Presión (cmH2O)

FIGURA 9–6  Efecto de las fuerzas de superficie sobre la adaptabilidad


pulmonar: un experimento sencillo que demuestra el efecto de la tensión FIGURA 9–7  La importancia de la tensión superficial. Si dos alvéolos
superficial en la interfaz aire-líquido de pulmones de gato extirpados. Si conectados tienen la misma tensión superficial, entonces mientras más
se infla con solución salina, no hay fuerzas de superficie que vencer, y los pequeño es el radio, mayor es la presión que tiende a colapsar la esfera.
pulmones se adaptan y no muestran diferencia (histéresis) entre las cur- Esto podría llevar a inestabilidad alveolar cuando unidades de menor ta-
vas de inflación y desinflación. Cuando se infla con aire, la presión reque- maño se vacían hacia otras de mayor tamaño. Los alvéolos típicamente
rida para distender el pulmón es mayor a cada volumen. La diferencia no tienen la misma tensión superficial porque las fuerzas de superficie
entre ambas representa la contribución de las fuerzas de superficie. Tam- varían de acuerdo con el área de superficie como resultado de la presen-
bién hay una histéresis pronunciada que refleja surfactante reclutado cia de surfactante: la concentración relativa de surfactante en la capa
hacia el líquido alveolar durante la inflación (flecha hacia arriba), donde superficial de la esfera se incrementa conforme el radio de la esfera dis-
reduce más las fuerzas de superficie durante la desinflación (flecha hacia minuye, lo que aumenta el efecto del surfactante a volúmenes pulmona-
abajo). (Reproducida, con autorización, de Clements JA, Tierney DF. Alveolar instability res bajos. Esto tiende a contrarrestar el incremento de presión necesario
associated with altered surface tension. En: Handbook of Physiology, Respiration. Sect. 3, para mantener abiertos los alvéolos a volumen pulmonar disminuido, y
Vol. II, cap. 69. Washington, DC: American Physiological Society; 1965:1565-1584.) añade estabilidad a los alvéolos, que de otro modo podrían tender a co-
lapsarse uno hacia otro. De esta manera, el surfactante protege contra el
colapso regional de unidades pulmonares, estado conocido como ate-
lectasia, además de sus otras funciones. (r, radio del alvéolo; T, tensión
lugar, limita la reducción de la presión hidrostática en el intersti­ superficial; P, presión de gas.)
cio pericapilar que produce la tensión superficial; esto disminuye
las fuerzas que promueven la trasudación de líquido y la tenden­
cia a la acumulación de edema intersticial. 8 Enfisema
Los estados patológicos quizá se deban a cambios del retroce­
so elástico de los pulmones que se vinculan con aumento de la 7
adaptabilidad (enfisema), decremento de la adaptabilidad (fibro­
sis pulmonar), o alteración del surfactante con incremento de las 6 Normal
Volumen pulmonar (L)

fuerzas de superficie (síndrome de dificultad respiratoria del lac­


5
tante, IRDS) (figura 9-8).
4
Propiedades dinámicas: flujo y resistencia
3 Fibrosis
La inflación de los pulmones debe vencer tres fuerzas que se opo­
nen: retroceso elástico, incluso fuerzas de superficie; inercia del 2
sistema respiratorio, y resistencia al flujo de aire. Dado que la
inercia es insignificante, el trabajo de la respiración puede divi­ 1
dirse en trabajo para vencer fuerzas elásticas y trabajo para ven­
0
cer la resistencia al flujo. 0 10 20 30 40
Las fuerzas elásticas aumentadas predominan en dos trastor­ Presión transpulmonar (cmH2O)
nos comunes, fibrosis parenquimatosa difusa y obesidad. La reduc­
ción de la adaptabilidad pulmonar en presencia de enfermedad FIGURA 9–8  Curvas de presión-volumen espiratorias estáticas en su-
jetos normales y en pacientes con enfisema y fibrosis pulmonar. La anor-
pulmonar fibrótica, y de la adaptabilidad de la pared torácica y el
malidad fisiológica subyacente en el enfisema es un aumento notorio de
sistema respiratorio en presencia de obesidad, aumentan el tra­
la adaptabilidad pulmonar; esos pacientes tienden a respirar a volúme-
bajo de la respiración. Los sujetos obesos también experimentan nes pulmonares muy altos. Aquéllos con fibrosis pulmonar tienen pul­
resistencia aumentada al flujo de aire, en particular debido a su mones muy poco adaptables, y respiran a volúmenes pulmonares bajos.
tendencia a respirar a volúmenes pulmonares más bajos. (Redibujada, con autorización, de Pride NB et al. Lung mechanics in disease. En: Fishman
La resistencia al flujo depende de la naturaleza de este último. AP [editor]. Vol III, Part 2, de Handbook of Physiology. Section 3. Respiratory System.. Ame-
En condiciones de flujo laminar o aerodinámico, la resistencia rican Physiological Society, 1986.)
220  CAPÍTULO 9 Enfermedad pulmonar

se describe por medio de la ecuación de Poiseuille: la resisten­ tranquila. La presión peribronquiolar, la presión alrededor de vías
cia es directamente proporcional a la longitud de las vías respira­ aéreas de conducción no cartilaginosas de pequeño calibre, está
torias y la viscosidad del gas, e inversamente proporcional a la estrechamente relacionada con la presión pleural. Por ende, du­
cuarta potencia del radio. Una disminución del radio de las vías rante la respiración tranquila, las vías aéreas de conducción es­tán
respiratorias a la mitad da pie a un aumento de 16 veces de la re­ rodeadas por presión negativa que ayuda a mantenerlas abiertas.
sistencia de las vías respiratorias. En consecuencia, el calibre de Las presiones pleural y peribronquiolar se tornan positivas duran­
las vías respiratorias es el principal determinante de la resistencia te la espiración forzada, lo cual sujeta a las vías aéreas de conduc­
de las mismas en condiciones de flujo laminar. En condiciones de ción distensibles a presión positiva. El punto de presión igual
flujo turbulento, la presión de impulso necesaria para lograr un ocurre donde la presión peribronquiolar circundante es igual a
indicio del flujo dado es proporcional al cuadrado del índice de la presión dentro de la vía respiratoria o la excede, lo cual causa
flujo. El flujo turbulento también depende de la densidad del gas compresión dinámica de las vías respiratorias, que lleva a ines­
y no de la viscosidad de este último. tabilidad y colapso potencial de vías respiratorias (figura 9-9).
La mayor parte de la resistencia a la respiración normal sur­ El punto de igual presión no es un sitio anatómico sino un re­
ge en los bronquios medianos y no en los bronquíolos de menor sultado funcional que ayuda a esclarecer diferentes mecanismos
tamaño (figura 9-2). Hay tres razones principales para este dato de obstrucción del flujo de aire. Dado que la presión impulsora
contrario a la intuición. En primer lugar, el flujo de aire en el pul­ del flujo de aire espiratorio es principalmente la presión de retro­
món normal no es laminar sino turbulento, por lo menos desde ceso elástico pulmonar, una pérdida de la elasticidad de los pul­
la boca hasta las vías respiratorias periféricas pequeñas. De esta mones que reduce la presión de retroceso sin cambiar la presión
manera, donde el flujo es más alto (en los bronquios segmenta­ pleural o la presión peribronquiolar llevará a compresión diná­
rios y subsegmentarios), la resistencia depende sobre todo de los mica a volúmenes pulmonares más altos. El atrapamiento de aire
índices de flujo. En segundo lugar, en vías respiratorias periféricas resultante contribuye a disnea sintomática en pacientes con en­
de pequeño calibre, en las cuales el calibre de las vías respirato­ fermedad pulmonar obstructiva. Los pacientes con enfisema pier­
rias es el principal determinante de la resistencia, la ramificación den retroceso elástico pulmonar y pueden tener alteración grave
repetitiva crea un número muy grande de vías respiratorias de del flujo espiratorio incluso con vías respiratorias de calibre nor­
pequeño calibre dispuestas en paralelo. Su resistencia es recípro­ mal. La presencia de enfermedad de las vías respiratorias aumen­
camente aditiva, lo cual hace que su contribución a la resistencia tará la disminución de la presión impulsora a lo largo de las vías
total de las vías respiratorias sea menor que en circunstancias nor­ respiratorias y puede generar un punto de igual presión a volúme­
males. En tercer lugar, hay una transición hacia flujo laminar que nes pulmonares aún más altos; por el contrario, un incremento
se aproxima a los bronquíolos terminales como una consecuen­
cia del incremento del área de corte transversal, e índices de flujo
reducidos (figura 9-3). En los bronquíolos respiratorios y los al­ Patm = 0
véolos no hay un flujo masivo de gases, y el movimiento de gas
sucede por difusión.
La resistencia de las vías respiratorias se determina por varios
factores. Muchos estados morbosos afectan el tono del múscu­ +20 +20 Punto de presión igual
lo liso bronquial y se traducen en broncoconstricción, lo que da +25

lugar a un estrechamiento anormal de las vías respiratorias. Estas +30

últimas también pueden estrecharse por hipertrofia (bronquitis Palv = +30


crónica) o infiltración (sarcoidosis) de la mucosa de las vías res­
piratorias. En el aspecto fisiológico, la tracción radial del intersti­
PL = +10
cio pulmonar apoya las vías respiratorias y aumenta su calibre a
Ppl = +20
medida que se incrementa el volumen pulmonar. Por el contrario,
conforme el volumen pulmonar disminuye, el calibre de las vías
FIGURA 9–9  El concepto de punto de presión igual. Para que el aire
respiratorias también lo hace, y la resistencia al flujo de aire au­ fluya a través de un tubo, debe haber una diferencia de presión entre los
menta. Los pacientes con obstrucción del flujo de aire a menudo dos extremos. En el caso de la respiración forzada con la glotis abierta,
respiran a volúmenes pulmonares grandes porque los volúme­ esta presión impulsora es la diferencia entre la presión alveolar (la suma
nes más altos tienden a aumentar el retroceso elástico pulmonar, de la presión pleural y de la presión de retroceso elástico pulmonar) y la
maximizar el calibre de las vías respiratorias y minimizar la resis­ presión atmosférica (que se supone es igual a cero). La resistencia de fric-
tencia al flujo. ción ocasiona una disminución de esta presión impulsora a lo largo de la
El análisis en términos de flujo laminar y turbulento supone trayectoria de las vías respiratorias de conducción. En algún punto, la pre-
que las vías respiratorias son tubos rígidos; de hecho, son muy sión impulsora puede ser igual a la presión peribronquial circundante; en
compresibles. La compresibilidad de las vías respiratorias subya­ este caso, la presión transmural neta es de cero; esto define el punto de pre­
sión igual. Torrente abajo (hacia la boca) desde el punto de presión igual,
ce el importante fenómeno del flujo independiente del esfuerzo;
la presión fuera de las vías respiratorias es mayor que la presión impulso-
las tasas de flujo de aire durante la espiración pueden aumentarse
ra dentro de las mismas. Esta presión negativa neta tiende a colapsar las
con esfuerzo sólo hasta cierto punto. Más allá de ese punto, los vías respiratorias, lo que se traduce en compresión dinámica. La fuerza de
incrementos adicionales del esfuerzo no aumentan las tasas de la espiración está en relación directa con el incremento de la presión que
flujo. La explicación de este fenómeno se fundamenta en el con­ rodea vías respiratorias colapsables. El flujo se torna independiente del
cepto de un punto de presión igual. La presión pleural general­ esfuerzo. (Ppl , presión pleural; PL , presión de retroceso elástico pulmonar;
mente es negativa (subatmosférica) durante toda la respiración Palv , presión alveolar; Patm , presión atmosférica.)
CAPÍTULO 9 Enfermedad pulmonar  221

Resistencia Incremento de la
Normal elástica aumentada resistencia al flujo de aire

Trabajo de la respiración
(unidades arbitrarias)
Total Total

al

El
as
Total ia e
c

tic
n ir

El
te a

El

dai

as
is de

as

tic
s

d
e

tic
R flujo

ida
ida
l
ia a

d
ncia e

d
iste enc
Res o de a
ir e sist e aire
R jo d
uj flu
al fl

5 10 15 20 5 10 15 20 5 10 15 20
Frecuencia respiratoria (respiraciones por minuto)
FIGURA 9–10  Minimización del trabajo de la respiración. Estos diagramas dividen el trabajo total de la respiración a la misma ventilación por minu-
to hacia componentes elástico y de resistencia. En enfermedades que aumentan las fuerzas elásticas (p. ej., fibrosis pulmonar), el trabajo total se mini-
miza mediante respiración rápida y superficial; con el incremento de la resistencia al flujo de aire (p. ej., bronquitis crónica), el trabajo total se minimiza
por medio de respiración lenta y profunda. (Redibujada, con autorización, de Nunn JF. Nunn’s Respiratory Physiology, 4a ed. Butterworth-Heinemann, 1993.)

de la presión de retroceso se opondrá a la compresión dinámica. min, el contenido de oxígeno disuelto sería insuficiente para satis­
Los pacientes con fibrosis pulmonar pueden tener tasas de flujo facer las demandas metabólicas. En lugar de eso, las necesidades
anormalmente altas a pesar de volúmenes pulmonares gravemen­ de oxígeno altas de órganos internos complejos son satisfechas por
te reducidos. medio de una proteína soluble que se une al oxígeno con rapidez,
de manera reversible, y con una capacidad de almacenamiento
El trabajo de la respiración alta, a saber, la hemoglobina.
La hemoglobina es un tetrámero complejo de dos cadenas po­
Una ventilación por minuto constante puede lograrse por medio lipeptídicas α y dos cadenas polipeptídicas β, cada una de las
de múltiples combinaciones de frecuencia respiratoria y volu­ cuales contiene un grupo hem con un átomo de hierro en la forma
men de ventilación pulmonar. Los dos componentes del trabajo ferrosa (Fe2+) en su centro, capaz de unirse a oxígeno molecular
de la respiración —fuerzas elásticas y resistencia al flujo de aire— (O2 ). Cada molécula de hemoglobina puede unirse a cuatro mo­
son afectados de maneras opuestas por cambios de la frecuencia léculas de oxígeno. En condiciones fisiológicas, 1 g de hemoglobi­
y la profundidad de la respiración. La resistencia elástica es mi­ na por completo saturada puede transportar aproximadamente
nimizada por respiraciones frecuentes y superficiales; las fuerzas 1.34 ml de oxígeno. En consecuencia, 100 ml de sangre que con­
de resistencia son minimizadas por respiraciones de volumen de tienen 15 g/dl de hemoglobina saturada contienen 20.1 ml de O2 ,
ventilación pulmonar en menor número y más grandes. La figu­ cerca de 70 veces la cantidad en solución. La manera convencional
ra 9-10 muestra cómo estos dos componentes pueden sumarse de representar el oxígeno unido a la hemoglobina es la saturación
para proporcionar un trabajo total de la respiración para diferen­ de hemoglobina (SO2), la proporción de oxígeno unido a he­
tes frecuencias a una ventilación por minuto fija. El punto de moglobina dividido por la capacidad total de unión de oxígeno,
ajuste para la respiración basal es aquel al cual el trabajo total de típicamente expresada como un porcentaje. Note que la SO2 sola
la respiración es minimizado. En seres humanos normales, esto no determina el contenido de oxígeno. El contenido de oxígeno
ocurre a una frecuencia de aproximadamente 15 respi­raciones/min. en la sangre es la suma de dos términos: el oxígeno disuelto y el
En diferentes enfermedades, este patrón es alterado para compen­ oxígeno unido a la hemoglobina. El oxígeno disuelto es una fun­
sar la anormalidad fisiológica subyacente. ción lineal de la presión parcial de oxígeno (PO2) y la solubilidad,
La cantidad de energía necesaria para mantener los músculos mientras que el oxígeno unido a la hemoglobina es el producto
respiratorios durante respiración tranquila es pequeña, de aproxi­ de tres términos: capacidad de transporte de oxígeno, concentra­
madamente 2% del consumo basal de oxígeno. En pacientes con ción de hemoglobina y saturación de hemoglobina (SO2).
enfermedad pulmonar, los requerimientos de energía son mayo­
res en reposo, y aumentan de manera notoria con el ejercicio. Los CO2 = (0.003 × PO2) + (1.34 × [Hemoglobina] × SO2)
pacientes con enfisema pueden ser incapaces de aumentar su ven­
tilación por más de un factor de 2 porque el costo de oxígeno de Esta ecuación explica por qué el contenido de oxígeno y el su­
la respiración excede el oxígeno adicional puesto a disposición ministro de éste a los tejidos pueden ser bajos a pesar de SO2 de
para el organismo. 100% si la concentración de hemoglobina es bastante reducida.
Debido a sus propiedades químicas físicas, la saturación de he­
moglobina tiene una relación compleja con la presión parcial de
Transporte de oxígeno oxígeno. Las interacciones entre las cuatro cadenas polipeptídicas
El oxígeno es poco soluble en la sangre. A una temperatura de en la molécula de hem aumentan la afinidad general por oxígeno
37°C y una presión parcial de oxígeno de 100 mmHg (PaO2 = a medida que cada sitio de unión a oxígeno es llenado. Si se gra­
100), el oxígeno total disuelto en 100 ml de sangre entera es de fica la PO2 contra la SO2 para representar la curva de disociación
aproximadamente 0.3 ml. Dado que el consumo basal de oxíge­ de oxihemoglobina, se observa que la relación no es lineal sino
no en el ser humano adulto promedio es de alrededor de 250 ml/ en forma de S o sigmoidea (figura 9-11). La curva es muy pronun­
222  CAPÍTULO 9 Enfermedad pulmonar

100 –30 100


90 PO2 SO2 CO2 CO2
(mmHg) % Sat. (ml/dl) (ml/dl)
Porcentaje de saturación de O2

Volumen (%)
80
de Hb unido a Hb* O2 disuelto
70 600 100 201 1.8 –24 50
de la hemoglobina

200 99 199 0.6


60 100 98 197 0.3
90 97 195 0.27
50 80 96 193 0.24
70 94 188.9 0.21
60 91 182.9 0.18 0
40 +10 0 –10 –20 –30
50 85 170.9 0.15
30 40 75 150.8 0.12 A Presión pleural (cmH2O)
30 58 116.6 0.09
20 27 50 100.5 0.08
20 32 64.3 0.06
10 10 10 20.1 0.03 –8 100

0
0 50 100 150 200 250 300 350 400 450 500 550 600

Volumen (%)
PO2 (mmHg)
* Hg = 15 g/dl 50
–2
FIGURA 9–11  Curva de disociación de oxígeno-hemoglobina. pH de
7.40, temperatura de 38°C. (Datos tomados de Severinghaus JW. Blood Gas Calcu-
lator. J Appl Physiol. 1966;21:1108.)
0
+10 0 –10 –20 –30
B Presión pleural (cmH2O)
ciada en el rango fisiológico, PO2 de entre 10 y 70 mmHg, punto
al cual se aplana; esta relación explica la idoneidad de la hemoglo­ –4 100
bina para su función fisiológica primaria, la unión reversible a
oxígeno con captación en los pulmones y liberación en los tejidos.

Volumen (%)
Por arriba de 70 mmHg, la PO2 puede variar ampliamente con la
50
enfermedad o la altitud, con efecto mínimo sobre el contenido +2
de oxígeno. De 70 a 40 mmHg, una disminución de la PO2 se aso­
cia con un incremento proporcionalmente mayor de la liberación
de oxígeno, mientras que retiene una PO2 al final de los capilares 0
+10 0 –10 –20 –30
relativamente alta para promover la difusión de oxígeno hacia
C Presión pleural (cmH2O)
los tejidos. Por debajo de 40 mmHg, cambios pequeños de la PO2
siguen liberando oxígeno hacia los tejidos, hasta cifras de PO2 muy FIGURA 9–12  Distribución de la ventilación a diferentes volúmenes
bajas que se encuentran en algunos lechos capilares. pulmonares. El efecto de la fuerza de gravedad y el peso del pulmón ha-
cen que la presión pleural se haga más negativa hacia el vértice del pul-
món. El efecto de este cambio de presión es aumentar la expansión de
Distribución de la ventilación y perfusión alvéolos apicales. A: capacidad pulmonar total. A volúmenes pulmonares
El aire inhalado y el flujo sanguíneo arterial pulmonar no son dis­ altos, la curva de adaptabilidad del pulmón es plana; los alvéolos están
tribuidos por igual hacia todas las regiones del pulmón. En indi­ expandidos casi por igual porque las diferencias de presión dan lugar a
viduos sanos, la distribución heterogénea se debe principalmente cambios pequeños del volumen pulmonar. B: capacidad residual funcio-
a dos factores: los efectos de la gravedad y la geometría fractal de nal. Durante respiración tranquila, los lóbulos inferiores están en la por-
ción empinada de la curva de presión-volumen. Esta adaptabilidad
ramificación repetitiva de las vías respiratorias y los vasos.
incrementada a volúmenes más bajos es el motivo por el cual la ventila-
La presión pleural varía de la parte superior a la inferior del
ción a la capacidad residual funcional (FRC) está distribuida preferente-
pulmón por aproximadamente 0.25 cmH2O/cm; es más negativa mente hacia los lóbulos inferiores. C: volumen residual. Por debajo de la
en el vértice y más positiva en la base. El efecto es cambiado a FRC puede haber unidades pulmonares declive que están expuestas a
una distribución anteroposterior en la posición supina y dismi­ presiones pleurales positivas. Estas unidades pueden colapsarse, lo que
nuye mucho (aunque no queda suprimido) a gravedad de cero. da pie a la formación de áreas del pulmón que tienen perfusión, pero no
La ventilación regional depende de la presión pleural regional están ventiladas. (Reimpresa, con autorización, de Hinshaw HC et al. Diseases of the
(figura 9-12). La presión pleural más negativa en el vértice del Chest, 4a ed. WB Saunders, 1979.)
pulmón causa mayor expansión de los alvéolos apicales. Dado
que la adaptabilidad pulmonar es más alta a volúmenes pulmo­
nares más bajos, la ventilación está distribuida de manera prefe­ lugar a resistencia heterogénea. En la figura 9-13 se representan
rencial hacia los lóbulos inferiores a FRC. los detalles de la distribución.
El flujo sanguíneo pulmonar es un sistema de baja presión Otro factor que regula el flujo sanguíneo es la vasoconstric­
que funciona en un campo gravitacional a través de 30 cm verti­ ción pulmonar hipóxica. Las células de músculo liso de las arte­
cales. En la posición erecta, hay un incremento casi lineal del riolas pulmonares son sensibles a la PO2 alveolar (mucho más
flujo sanguíneo de la parte superior a la inferior del pulmón. Sin que a la PO2 arterial). Conforme la PO2 alveolar disminuye, hay
embargo, dentro de cualquier plano horizontal (isogravitacional), constricción arteriolar, un incremento de la resistencia local
hay heterogeneidad importante del flujo sanguíneo debido a la al flujo, y redistribución del flujo hacia regiones de PO2 alveolar
geometría fractal de ramificación repetitiva de vasos, lo cual da más alta. Cuando se regionaliza, éste es un mecanismo eficaz
CAPÍTULO 9 Enfermedad pulmonar  223

Vértice

1 Colapso
Part = Palv

Distancia
2 Salto de agua
Pven = Palv

3 Distensión

4 Presión
intersticial
Base
Flujo sanguíneo
FIGURA 9–13  Efecto de la presión hidrostática cambiante sobre la distribución del flujo sanguíneo pulmonar. El flujo sanguíneo capilar en diferentes
regiones del pulmón está regido por tres presiones: arterial pulmonar, venosa pulmonar y alveolar. La presión arterial pulmonar debe ser mayor que la
venosa pulmonar para mantener perfusión anterógrada; por ende, hay tres disposiciones potenciales de estas variables. Zona 1: Palv > Part > Pven. No hay
riego capilar en áreas donde la presión alveolar es mayor que la presión de perfusión capilar. Puesto que la presión alveolar normalmente es de cero,
esto sólo sucede donde la presión arterial pulmonar media es menor que la distancia vertical desde la arteria pulmonar. Zona 2: Part > Palv > Pven. La pre-
sión arterial pulmonar excede la presión alveolar, pero la presión alveolar excede la presión venosa pulmonar. La presión impulsora a lo largo del capilar
se disipa por resistencia al flujo hasta que la presión transmural es negativa y ocurre compresión. Esta zona de colapso a continuación regula el flujo,
que es intermitente y depende de presiones venosas pulmonares fluctuantes. Zona 3: Part > Pven > Palv. El flujo es independiente de la presión alveolar
porque la presión venosa pulmonar excede la presión atmosférica. Zona 4: zona de compresión extraalveolar. En las regiones pulmonares declive, la
presión intersticial pulmonar puede exceder la presión arterial pulmonar. En este caso, el flujo capilar lo determina la compresión de vasos extraalveo-
lares. El lado derecho del diagrama muestra una distribución casi continua del flujo sanguíneo desde la parte superior del pulmón hasta la inferior, lo
que demuestra que en el pulmón normal no hay zonas diferenciadas. El pulmón normal del ser humano a FRC abarca 30 cm verticales; la mitad de esa
distancia está por arriba de la arteria pulmonar y la aurícula izquierda, y las presiones arteriales pulmonares representativas son de 33/11 cmH2O, con
una media de 19 cmH2O. Por consiguiente, no hay una zona 1 fisiológica en seres humanos en posición vertical excepto quizás al final de la diástole. La
presión de la aurícula izquierda promedia 11 cmH2O, y es suficiente para crear condiciones de zona 3 a dos terceras partes de la distancia desde el cora-
zón hasta el vértice. No obstante, en pacientes que reciben ventilación mecánica con presión positiva o en aquellos con enfermedad de las vías aéreas
que crean unidades pulmonares incapaces de vaciarse durante el ciclo respiratorio normal, la presión alveolar no es atmosférica. En condiciones de
presión positiva al final de la espiración (PEEP), la Palv puede ser de hasta 15 a 20 cmH2O. Esto en potencia cambia toda la distribución del flujo sanguíneo
pulmonar. (Adaptada y reimpresa, con autorización, de Hughes JM et al: Effect of lung volume on the distribution of pulmonary blood flow in man. Respir Physiol. 1968;4(1):58–72.)

para disminuir el flujo sanguíneo local sin un incremento im­ ral entre ventilación y perfusión de 0.8. Como se mencionó, la ven­
portante de la presión arterial pulmonar media. Cuando afecta tilación y la perfusión están distribuidas de manera preferencial
más de 20% de la circulación pulmonar, como en presencia de a regiones declive en reposo, aunque el incremento del flujo de­
hipoxia alveolar global, la vasoconstricción pulmonar diseminada pendiente de la gravedad es más notorio con la perfusión que
aumenta la presión arterial pulmonar media, y puede dar lugar a con la ventilación. Por ende, la proporción entre ventilación y per­
hipertensión pulmonar. fusión es más alta en el vértice y más baja en la base (figura 9-14).
Las alteraciones regionales de esta distribución general de la
ventilación y la perfusión se denominan desproporción V/Q, y
• •

Coincidencia entre son un fenómeno de importancia extrema que subyace al dete­


la ventilación y la perfusión rioro funcional en muchos estados morbosos. Una distribución
• •
El papel funcional de los pulmones es colocar aire ambiente en puede favorecer proporciones V/Q altas; el caso limitante es el
espacio muerto alveolar (ventilación sin perfusión, o V/Q = ∞),
• •
proximidad estrecha a la sangre circulante para permitir el inter­
• •
cambio de gases mediante difusión simple; para lograr esto, los o puede favorecer proporciones V/Q bajas; el caso limitante es un
cortocircuito (perfusión sin ventilación, o V/Q = 0). Estos dos ti­
• •
flujos de aire y sangre deben dirigirse al mismo sitio al mismo
• •
tiempo. El funcionamiento óptimo del sistema respiratorio re­ pos de desproporción V/Q afectan la función respiratoria de ma­
quiere que la ventilación coincida con la perfusión. nera muy diferente.
En el individuo normal, la ventilación alveolar en reposo típi­ En el individuo normal, alrededor de una tercera parte de la
ca es de alrededor de 4 L/min, mientras que el flujo sanguíneo en ventilación por minuto en reposo llena las vías aéreas de conduc­
la arteria pulmonar es de 5 L/min; esto da una proporción gene­ ción principales; se trata del espacio muerto anatómico; repre­
224  CAPÍTULO 9 Enfermedad pulmonar

.15
3 Ventilación Flujo sanguíneo
uniforme uniforme
% de volumen pulmonar

Flujo de sangre
.10 Sangre
2
VA/Q venosa mixta

VA/Q
Ventilación

.05 A B
1

Parte inferior Parte superior


Sangre arterial
5 4 3 2 Ideal
A
Número de costilla
Ventilación Flujo sanguíneo
FIGURA 9–14  Distribución cambiante de la ventilación y la perfusión nula hacia A uniforme hacia
por el pulmón en posición vertical. Las dos líneas rectas reflejan los au- AyB
mentos progresivos de la ventilación y la perfusión. La pendiente es más
pronunciada para la perfusión, por tanto, la proporción entre ventilación
y perfusión es más baja en la base y más alta en el vértice. (Redibujada, con
autorización, de West JB. Ventilation/blood flow and gas exchange, 5a ed. Oxford Black­
well, 1990.) A B

Cortocircuito
absoluto
senta ventilación a áreas que no participan en el intercambio de B
gases. Si las regiones del pulmón que intercambian gas participan­ Flujo sanguíneo Ventilación
tes son ventiladas pero no perfundidas, como puede ocurrir en nulo hacia A uniforme hacia
AyB
la embolia pulmonar, la enfermedad vascular pulmonar, o el en­
fisema, estas regiones tampoco funcionarán en el intercambio de
• •
gases. Las distribuciones desviadas hacia proporciones V/Q altas
se denominan espacio muerto alveolar o ventilación desperdi­
ciada (figura 9-15, panel inferior). Desde el punto de vista fun­ A B
• •
cional, un cambio hacia proporciones V/Q altas significa que
más trabajo de la respiración apoya ventilación que no participa
Espacio muerto
en el intercambio de gases, lo cual reduce la eficiencia general de alveolar
la ventilación. C
En ausencia de compensación respiratoria, el efecto primario
de un cambio hacia proporciones V/Q altas será un aumento de
• •
FIGURA 9–15  Tres modelos de relación ventilación/perfusión. En este
esquema, los círculos representan unidades respiratorias, y los tubos, las
la PCO2 arterial; la PaO2 también puede disminuir un poco. Em­
vías respiratorias de conducción. Los conductos en color representan el
pero, dado que el centro de control respiratorio es en extremo flujo sanguíneo pulmonar, que entra al lecho capilar como sangre venosa
sensible a cambios pequeños de la PaCO2, la respuesta integrada mixta (de color azul) y sale como sangre arterializada (de color rojo). Las
más común a incremento de la ventilación desperdiciada es au­ flechas grandes muestran la distribución del gas inspirado, y las peque-
mentar la ventilación por minuto total, con lo cual se mantiene ñas, difusión de O2 y CO2. En el caso idealizado (A), la PO2 y la PCO2 a la
la PaCO2 casi constante. La PaO2 permanece normal o puede salida de ambas unidades son idénticas. Véanse B y C. Los detalles se pre-
estar reducida si la fracción de ventilación desperdiciada es gran­ sentan en el texto. (Redibujada, con autorización, de Comroe J. Physiology of Respira­
de. La ΔPO2 A-a está aumentada (véase más adelante). Esta res­ tion, 2a ed. Year Book, 1974.)
puesta adaptativa puede hacerse de manera inconsciente, pero
plantea un problema clínico cuando el individuo ya no puede
sostener una ventilación por minuto aumentada, como en el pa­ La desproporción entre ventilación y perfusión comúnmente
ciente que presenta enfisema avanzado. ocurre entre los casos limitantes de cortocircuitos verdaderos y
espacio muerto alveolar. El efecto sobre los gases en sangre arte­
• •
Un cambio hacia proporciones V/Q bajas ocurre cuando la
• •
ventilación regional está reducida o eliminada pero persiste la per­ rial de cambios de la distribución de las proporciones V/Q puede
fusión, como podría suceder con un pulmón atelectásico, o en predecirse a partir de la exposición de los casos limitantes (figura
áreas de consolidación pulmonar donde los alvéolos están llenos 9-16). En la parte superior de la figura 9-16 hay una unidad res­
con líquido o con restos infectados (figura 9-15, panel de en me­ piratoria en la cual en un lado (B) la ventilación se ha reducido
dio). Un cortocircuito es el caso limitante de un área de V/Q baja pero la perfusión se mantuvo. Esto define un área de proporción
• •

• •
donde no hay ventilación y la proporción se hace de 0. La san­ V/Q baja. El efecto sobre la función de los pulmones puede en­
• •
gre arterial pulmonar (venosa mixta) a continuación pasará a la tenderse al dividirla en un área con una proporción V/Q normal
circu­lación arterial sistémica sin entrar en contacto con el gas (A) y un área de sangre que va a un cortocircuito (C). El efecto
• •
alveolar. El efecto fisiológico primario de tal cortocircuito de de­ fisiológico de áreas V/Q bajas es similar al efecto de cortocircui­
• •
recha a izquierda es reducir la PO2 arterial. tos: hipoxemia sin hipercapnia. La diferencia entre áreas de V/Q
CAPÍTULO 9 Enfermedad pulmonar  225

Ventilación Perfusión
regionalmente uniforme
reducida

Sangre
venosa mixta
C

A B B

Sangre Cortocircuito
arterial
Ventilación Perfusión regionalmente
uniforme reducida

Sangre C
venosa mixta

A B

Espacio
muerto alveolar
Sangre
arterial

FIGURA 9–16  Desproporción entre ventilación y perfusión. (Azul, desoxigenada; rojo, oxigenada.) Véanse los detalles en el texto. (Redibujada, con au-
torización, de Comroe J. Physiology of Respiration, 2a ed. Year Book, 1974.)

bajas y cortocircuitos verdaderos también puede observarse La hiperventilación o aumento del oxígeno inspirado a las re­
en este esquema. La sangre que va a un cortocircuito no entra en giones pulmonares no afectadas no compensa la disminución de
contacto con el aire inspirado; por ende, ninguna cantidad de PO2 de áreas de cortocircuito verdadero. El contenido de O2 en san­
oxígeno adicional proporcionado al aire inspirado revertirá la gre no se relaciona linealmente con PO2 (figura 9-11). La forma
• •
disminución de la PO2 arterial sistémica. Un área de V/Q baja sigmoidea de la curva de disociación de hemoglobina indica que
entra en contacto con el aire inspirado y puede revertirse con oxí­ la hemoglobina tiene una saturación casi máxima a una PO2 de
geno inspirado aumentado. 60. El aumento de la PO2 de 60 a 600 aumenta la presión parcial
En la parte inferior de la figura 9-16 hay una unidad respira­ 10 veces pero el contenido de O2 sólo 10%. Aumentar la ventila­
toria en la cual en un lado el flujo sanguíneo se ha disminuido ción o la PO2 alveolar a las unidades respiratorias no afectadas
(B) pero se ha mantenido la ventilación. Esto define un área de puede aumentar la PO2 de los capilares terminales, pero no cam­
• •
proporción V/Q alta. El efecto sobre la función pulmonar pue­ biar el contenido de O2 de la sangre al abandonar esas unidades.
de entenderse al dividir la unidad en un área con una proporción El contenido total de O2 será la media del contenido de oxígeno
• •
V/Q normal (A) y un área de espacio muerto o ventilación des­ sanguíneo normal y sangre desaturada, desviada. El contenido de
• •
perdiciada (C). El efecto fisiológico de proporciones V/Q altas es oxígeno reducido de la mezcla tiende a permanecer en la porción
aumentar la PCO2, lo cual típicamente lleva a respiración aumen­ empinada de la curva de disociación de oxihemoglobina, con el
tada para devolver la PaCO2 a lo normal. resultado de que disminuciones moderadas en el contenido de
La hiperventilación de regiones pulmonares no afectadas pue­ oxígeno conducen a decrementos largos en la PO2.
de compensar el incremento de la PCO2 desde el espacio muerto Los gases en sangre arterial detectan alteraciones importan­
alveolar, pero no puede compensar el decremento de la PO2 des­ tes de la función respiratoria. Un intento por evaluar anormalida­
de áreas de cortocircuito. La razón son las diferentes maneras en des más sutiles del intercambio de gases es calcular la diferencia
que el oxígeno y el dióxido de carbono son transportados en la entre las PO2 alveolar y arterial. Esto se llama A-a ΔPO2 o A-a DO2.
sangre, y las diferentes relaciones entre el contenido y la presión La membrana alveolocapilar permite equilibrio completo de
parcial de estos gases. Dado que la PCO2 y el contenido de CO2 la tensión de oxígeno alveolar y en los capilares terminales bajo la
• •
muestran relación lineal dentro del rango fisiológico normal, proporción V/Q normal. Empero, en individuos normales hay una
la ventilación aumentada hacia una unidad respiratoria reducirá la A-a ΔPO2 pequeña como resultado de cortocircuito de derecha a
PCO2 y el contenido de CO2 de la sangre que sale de esa unidad. izquierda a través de las venas bronquiales y las venas de Tebesio
El contenido general de CO2 será la media de unidades afectadas del hemicardio izquierdo. Esto explica alrededor de 2 a 5% del
y no afectadas. Puesto que la PCO2 es proporcional al contenido gasto cardiaco en reposo y lleva a una A-a ΔPO2 de 5 a 8 mmHg
de CO2, el contenido de CO2 reducido de regiones pulmonares en adultos jóvenes sanos que respiran aire ambiental a nivel del
hiperventiladas compensa el contenido alto desde áreas de ven­ mar. El aumento de la concentración fraccionaria de oxígeno en el
tilación desperdiciada. La PCO2 y el contenido de CO2 de la mez­ gas inspirado (FiO2) también incrementa este valor. Una A-a ΔPO2
cla se rastrean juntos. normal respirando oxígeno al 100% es de aproximadamente
226  CAPÍTULO 9 Enfermedad pulmonar

100 mmHg. Los valores normales aumentan con la edad, proba­ Cerebro
blemente como resultado de cierre de vías respiratorias declive (control

Controlador
• •
con un cambio consiguiente hacia proporciones V/Q bajas. Los voluntario)
incrementos adicionales de la A-a ΔPO2 reflejan áreas de propor­ Tallo encefálico
• •
ción V/Q baja, incluso cortocircuito. (control
automático)
Médula espinal
Control de la respiración

motoras respiratorias
Los pulmones se inflan y desinflan de manera pasiva en respues­ Fibras eferentes motoras

Fibras eferentes
respiratorias espinales
ta a cambios de la presión pleural; por ende, el control sobre la

Efectores

vagales
respiración yace en el control de los músculos estriados —sobre
Pulmones y parte Músculos
todo el diafragma, pero también los músculos intercostales y de alta de las vías de la
la pared del abdomen— que cambian la presión pleural. respiratorias respiración
Dichos músculos están bajo control tanto automático como Propioceptores
voluntario. El ritmo de la respiración espontánea se origina en el
Receptores pulmonares y de la
tallo encefálico, de modo específico en varios grupos de neuro­

Sensores
parte alta de las vías respiratorias
nas que se interconectan en el bulbo raquídeo. La investigación
Quimiorreceptores:
sobre la generación del ritmo respiratorio identifica que se origi­ arteriales periféricos
na en neuronas en el complejo pre-Bötzinger. Las neuronas res­ Del bulbo raquídeo, del CNS
piratorias son inspiratorias o espiratorias, y pueden activarse en
etapas tempranas, tardías, o de una manera en aceleración duran­ FIGURA 9–17  Representación esquemática del sistema de control res-
te el ciclo respiratorio. Sus eferencias integradas constituyen una piratorio. Se muestran las interrelaciones entre el controlador del sistema
señal eferente por medio del nervio frénico (diafragma) y nervios nervioso central (CNS), efectores y sensores, al igual que las conexiones
espinales (intercostales y de la pared abdominal) para generar con­ entre estos componentes. (Redibujada, con autorización, de Berger AJ et al. Regula­
tracción y relajación rítmicas de la musculatura respiratoria. El tion of respiration. N Engl J Med 1977;297:92, 138, 194.)

resultado es respiración espontánea sin participación consciente;


con todo, al poner atención a su respiración, el lector puede alte­
rar este patrón. Comer, hablar, cantar, nadar y defecar dependen matoencefálica permite la difusión libre de CO2, no así de iones
del control voluntario sobre la respiración automática. de hidrógeno. El CO2 se hidrata hacia ácido carbónico, que se
ioniza y reduce el pH del cerebro. Los quimiorreceptores centra­
A. Aferencias sensoriales les quizá responden a estos cambios de la concentración intrace­
La frecuencia, profundidad y cronología de la respiración espon­ lular de iones de hidrógeno.
tánea se modifican por información que proporcionan al cen­ Hay una gran variedad de receptores de estiramiento pul­
tro respiratorio sensores tanto químicos como mecánicos (figura monar que se localizan en el músculo liso y la mucosa de las vías
9-17). respiratorias, cuyas fibras aferentes se encuentran en el nervio
Hay quimiorreceptores en la vasculatura periférica y en el ta­ vago; se activan en respuesta a distensión pulmonar. El volumen
llo encefálico. Los quimiorreceptores periféricos son los cuerpos pulmonar creciente disminuye la frecuencia respiratoria al incre­
carotídeos que se ubican en la bifurcación de las arterias caró­ mentar el tiempo espiratorio; esto se conoce como el reflejo de
tidas primitivas y los cuerpos aórticos cerca del cayado (arco) de Hering-Breuer. Hay fibras C amielínicas situadas cerca de los ca­
la aorta. Los cuerpos carotídeos son, en particular, importantes pilares pulmonares (de ahí el nombre receptores yuxtacapilares
en seres humanos; funcionan como sensores de la oxigenación [J]). Estas fibras están inactivas durante la respiración normal,
arterial. Hay un aumento gradual de la activación del cuerpo ca­ pero pueden estimularse de modo directo por la administración
rotídeo en respuesta a una disminución de la PaO2. Esta respues­ intravenosa de sustancias químicas irritantes, como la capsaicina.
ta es más notoria por debajo de los 60 mmHg. Un incremento de Parecen estimular el impulso respiratorio aumentado en el edema
la PaCO2 o un decremento del pH arterial potencia la respuesta intersticial y la fibrosis pulmonar. El movimiento del esquele­
de los cuerpos carotídeos a decrementos de la PaO2. to  que transmite propioceptores en articulaciones, músculos y
En seres humanos, la ventilación aumentada que se observa ten­dones, ocasiona un incremento de la respiración, y puede te­
en respuesta a la hipoxia depende sólo de los cuerpos carotídeos. ner cierta participación en la ventilación aumentada propia del
La resección bilateral del cuerpo carotídeo, que se lleva a cabo ejerci­cio. Por último, hay receptores en los husos musculares en
para tratar disnea minusvalidante, y que puede ocurrir como una el diafragma y los músculos intercostales, que proporcionan re­
consecuencia involuntaria de tromboendarterectomía carotídea, troalimentación sobre la fuerza muscular. Quizá participen en la
produce pérdida completa de este impulso ventilatorio hipóxico sensación de disnea cuando el trabajo de la respiración es des­
en tanto que deja intacta la respuesta a cambios en la PaCO2. Los proporcionado en relación con la ventilación.
quimiorreceptores centrales median la respuesta a cambios de la
PaCO2. Cada vez hay más evidencia de que estos quimiorre­cepto­ B. Respuestas integradas
res están ampliamente dispersos en todo el tallo encefálico; están En condiciones normales en personas sanas la cifra de ion hidró­
separados de las neuronas que generan el ritmo respiratorio. La geno en la región de los quimiorreceptores centrales determina
respuesta ventilatoria aumentada al incremento de la PaCO2 se el impulso para respirar. Los cambios del pH de quimiorrecep­
media por cambios del pH de quimiorreceptores. La barrera he­ tores los determina, en gran parte, la PaCO2. En condiciones
CAPÍTULO 9 Enfermedad pulmonar  227

100 60

50
PaO2 55
75

Ventilación (L/min, BTPS)


Ventilación (L/min, BTPS)

PaO2 40
40
PaCO2 49

50 30
PaO2 100
PaCO2 44
20

25
10 PaCO2 37

0
0 20 40 60 80 100 120 140
40 50
PaO2 (mmHg)
PaCO2 (mmHg)
FIGURA 9–19  Respuesta ventilatoria isocápnica a la hipoxia. Estas
FIGURA 9–18  Respuesta ventilatoria al CO2. Las curvas representan curvas representan cambios de la ventilación por minuto graficados con-
cambios de la ventilación por minuto graficados contra cambios de la tra cambios de la PO2 alveolar cuando la PCO2 alveolar se mantiene cons-
PCO2 en aire inspirado a diferentes valores de PO2 alveolar. Hay un incre- tante a 37, 44 o 49 mmHg. Cuando la PCO2 está en el rango normal (37 a
mento lineal de la ventilación con la PCO2 creciente. El índice de aumento 44 mmHg) hay poco incremento de la ventilación hasta que la PO2 se redu­
es mayor a valores de PO2 más bajos, pero las curvas empiezan desde un ce a 50 a 60 mmHg. La respuesta ventilatoria a la hipoxia está aumentada
punto común donde la ventilación debe cesar en respuesta a PCO2 redu- ante concentraciones elevadas de PCO2; esta respuesta no es lineal, como
cida. En seres humanos despiertos, el despertamiento mantiene la venti- lo es la respuesta a una PCO2 aumentada, pero semeja una hipérbo-
lación incluso cuando la PCO2 disminuye por debajo de esta cifra; cuando la rectan­gular asintótica a ventilación infinita (a una PO2 entre 30 y 35)
reciben anestesia leve, sucede apnea. En el caso de la acidosis metabóli- y  ventilación sin estimulación tónica por los cuerpos carotídeos (que
ca, esta intersección X se desplaza hacia la izquierda, pero la pendiente ocurre por arriba de una PO2 de 500 mmHg). No se muestra el decremen-
de las líneas permanece casi sin cambios. Esto indica que los efectos de la to de la ventilación por minuto que sucede con la hipoxia extrema (valo-
acidosis metabólica están separados de, y son aditivos a, los efectos de res de PO2 por debajo de 30 mmHg) como resultado de depresión del
la acidosis respiratoria. BTPS (temperatura y presión del cuerpo, saturado centro respiratorio. (Redibu­jada, con autorización, de Ganong WF. Review of Medical
con vapor de agua.) (Redibujada, con autorización, de Ganong WF. Review of Medical Physiology, 22a ed. McGraw-Hill, 2005.)
Physiology, 22a ed. McGraw-Hill, 2005.)

normales, la PaO2 no es una parte importante del impulso respi­ sión de la ventilación. La PaCO2 afecta la respuesta a la hipoxia.
ratorio basal. Un aumento de la PCO2 alveolar desviará la curva de respuesta
La respiración la estimula un decremento de la PaO2, un in­ de O2 isocápnica hacia arriba y a la derecha (figura 9-19).
cremento de la PaCO2 o de la concentración de ion de hidrógeno Una disminución de las cifras arteriales de ion de hidrógeno
de la sangre arterial (disminución del pH arterial). incrementa la ventilación por minuto. Esta respuesta se produce
La ventilación aumenta aproximadamente 2 a 3 L/min por por estimulación de los cuerpos carotídeos y es independiente de
cada 1 mmHg de incremento de la PaCO2, dicha respuesta (figu­ cambios de la PaCO2. Hay una respuesta a la acidosis metabólica
ra 9-18) sucede primero mediante sensibilización del receptor grave en ausencia de cuerpos carotídeos. Se supone que esta res­
del cuerpo carotídeo, el cual aumentará su activación en respues­ puesta la median quimiorreceptores centrales; tal vez represente
ta a una PaCO2 incrementada, incluso en ausencia de cambios de alteración de la barrera hematoencefálica.
la PaO2; esto explica alrededor de 15% de la respuesta ventilato­
ria a la hipercapnia. Casi toda la respuesta está mediada por cam­
C. Situaciones especiales
bios del pH en la región de los quimiorreceptores centrales. Los
cambios del pH arterial son aditivos a cambios de la PaCO2. Las 1. Hipercapnia crónica. En pacientes con hipercapnia cró­
curvas de respuesta al CO2 en condiciones de acidosis metabó­ nica, el pH del cerebro vuelve hacia lo normal mediante
lica tienen una pendiente idéntica, pero se desvían hacia la izquier­ cambios compensadores de las concentraciones de bicarbo­
da. La respuesta ventilatoria a un aumento de la PaCO2 disminuye nato en el suero y en los tejidos. Como resultado, los quimio­
con la edad, el sueño y el acondicionamiento aeróbico, y con el receptores centrales se hacen menos sensibles a cambios
trabajo incrementado de la respiración. adicionales de la PaCO2. En este caso, la ventilación por
La respuesta individual a la hipoxemia es en extremo variable. minuto basal de un paciente puede depender de estímulos
En circunstancias normales, hay poco aumento de la ventilación tónicos provenientes de los cuerpos carotídeos. Si se dieran
en tanto la PaO2 no disminuye por debajo de 50 a 60 mmHg. En a ese paciente concentraciones altas de oxígeno inspirado,
este punto, hay un rápido incremento de la ventilación que alcan­ podría haber depresión de las eferencias del cuerpo carotí­
za su máximo en aproximadamente 32 mmHg; por debajo de esta deo, lo cual daría pie a un decremento de la ventilación por
cifra, los decrementos adicionales de la PaO2 conducen a depre­ minuto. El cambio de la ventilación por minuto no explica
228  CAPÍTULO 9 Enfermedad pulmonar

por completo la hipercapnia en respuesta a oxígeno com­ mento de la respuesta ventilatoria. Dos factores contribui­
plementario, lo cual sugiere que la ablación de la vasocons­ dores son la producción aumentada de dióxido de carbono
tricción pulmonar hipóxica también está implicada. y el incremento de la descarga aferente desde propiocepto­
2. Hipoxia crónica. La residencia a largo plazo a altitud ele­ res de articulaciones y músculos.
vada —o la apnea del sueño con episodios repetidos de desa­
turación grave de oxígeno— puede atenuar la respuesta
ventilatoria hipóxica. En esos individuos, la aparición de PUNTO DE CONTROL
enfermedad pulmonar e hipercapnia puede suprimir es­
tímulos endógenos para la respiración; este modelo se 12. ¿Cuáles son los componentes del retroceso elástico pulmo­
observa en pacientes con síndrome de obesidad-hipoventi­ nar? ¿Cuál es la función del surfactante?
lación. 13. ¿Cuáles tres fuerzas que se oponen deben vencerse nor-
3. Ejercicio. El ejercicio puede incrementar hasta 25 veces la malmente para inflar los pulmones?
ventilación por minuto en reposo. El ejercicio extenuan­ 14. ¿Cuáles son los cuatro factores que afectan la resistencia
te, pero submáximo en una persona sana típicamente no da de las vías respiratorias?
por resultado cambio, o sólo un aumento leve de la PaO2 15. ¿Cuáles son los componentes del trabajo de la respiración?
como producto de flujo sanguíneo pulmonar incremen­ 16. ¿Cuáles factores regulan la ventilación, y cuáles la per­
tado, y me­jor coincidencia entre la ventilación y la perfu­ fusión?
sión, sin cam­bio, o con un decremento leve de la PaCO2. Por 17. ¿Cómo coinciden ventilación y perfusión normalmente?
consiguiente, los cambios de la oxigenación arterial no son 18. ¿Cuáles son los efectos del cambio de las cifras de CO2 y O2
un factor detrás de la respuesta ventilatoria aumentada al sobre el control respiratorio?
ejercicio. No se conoce, con certeza, el motivo del incre­

FISIOPATOLOGÍA DE ENFERMEDADES PULMONARES SELECCIONADAS

ENFERMEDADES PULMONARES El asma es una enfermedad que se caracteriza por inflamación


y obstrucción del flujo de aire de las vías respiratorias, así como
OBSTRUCTIVAS: ASMA Y ENFERMEDAD por la presencia de síntomas intermitentes, entre ellos sibilan­
PULMONAR obstructiva CRÓNICA cias, sensación de estrechez en el tórax, falta de aliento (disnea) y
(COPD) tos, junto con hiperreactividad bronquial demostrable. La expo­
sición a alergenos definidos o a diversos estímulos inespecíficos
El problema fisiológico fundamental en las enfermedades obs­ inicia una cascada de eventos de activación celular en las vías
tructivas es el aumento de la resistencia al flujo de aire, como respiratorias, lo que suscita procesos inflamatorios tanto agudos
resultado de disminución del calibre de las vías respiratorias de como crónicos mediados por toda una gama, compleja e integra­
conducción. Este incremento de la resistencia puede originarse da, de citocinas y otros mediadores liberados localmente. La li­
por procesos: 1) dentro de la luz, 2) en la pared de las vías respi­ beración de mediadores puede alterar el tono del músculo liso de
ratorias, o 3) en las estructuras de apoyo que rodean a las vías las vías respiratorias y la capacidad de respuesta de estas últimas,
respiratorias. Los ejemplos de obstrucción luminal comprenden producir hipersecreción de moco, y dañar el epitelio de las vías
las secreciones aumentadas que se observan en el asma y la bron­ respiratorias.
quitis crónica. El engrosamiento de la pared de las vías respirato­ Estos eventos patológicos producen anormalidad crónica de
rias y el estrechamiento de estas últimas pueden producirse por la estructura y la función de las vías respiratorias.
la inflamación que se observa tanto en el asma como en la bron­ La posibilidad de variación considerable de la magnitud y las
quitis crónica, o por la contracción del músculo liso bronquial en manifestaciones de la enfermedad dentro de individuos y entre
el asma. El enfisema es el ejemplo clásico de obstrucción causada individuos con el tiempo, es inherente en la definición de asma.
por pérdida de la estructura de apoyo circundante, con colapso Por ejemplo, mientras que muchos asmáticos tienen síntomas
espiratorio de las vías respiratorias que provoca la destrucción de poco frecuentes y leves, otros pueden tener síntomas persistentes
tejido elástico pulmonar. Aunque las causas y las presentaciones o prolongados muy graves. De manera similar, los estímulos ini­
clínicas de estas enfermedades son diferentes, los elementos co­ ciadores o exacerbantes pueden ser muy distintos entre pacien­
munes de su fisiopatología proporcionan información. tes individuales.

Datos epidemiológicos y factores de riesgo


1. Asma
El asma es una enfermedad pulmonar crónica común, que afecta
Presentación clínica hasta a una tercera parte de los adolescentes en Australia y Nue­
El asma es un síndrome clínico con múltiples fenotipos. Esta di­ va Zelanda. La prevalencia general en EUA fue de 8.5% en 2011;
versidad refleja interacciones complejas entre predisposición ge­ las tasas son más altas en varones de menos de 18 años de edad
nética y exposición ambiental, y sugiere heterogeneidad de la (10.2%) y en mujeres de más de 18 años de edad (10.0%). Cada
fisiopatología subyacente. año, alrededor de 500 000 admisiones a hospitales y 4 500 muer­
CAPÍTULO 9 Enfermedad pulmonar  229

tes en EUA se atribuyen a asma. La prevalencia, las hospitali­ y enfermedades autoinmunitarias en el mundo desarrollado, han
zaciones y el asma mortal han aumentado en EUA durante los llevado a los investigadores a buscar las causas subyacentes de la
últimos 30 años. Las tasas de mortalidad alcanzaron una meseta atopia misma. Una teoría es que la exposición a infecciones y/o
a finales de la década de 1990-1999, y han declinado un poco du­ antígenos orgánicos en etapas tempranas de la niñez puede al­
rante la década pasada. Las tasas de hospitalización han sido más terar fundamentalmente la inmunidad adaptativa. Ciertas ex­
altas entre individuos de raza negra y niños, y las tasas de muer­ posiciones pueden promover un fenotipo TH1 (diferenciación de
tes son constantemente más altas entre sujetos de raza negra de células T auxiliares CD4+ hacia una respuesta TH1 caracteriza­
15 a 24 años de edad. da por producción de interferón γ), mientras que la ausencia de
El factor predisponente identificable más fuerte para la apari­ estas exposiciones puede promover un fenotipo TH2 (que se ca­
ción de asma es la atopia, o la producción de anticuerpos inmu­ racteriza por una respuesta primaria de citocina que incluye in­
noglobulina E (IgE) en respuesta a exposición a alergenos. En la terleucina [IL]-4, IL-5, IL-13 y factor de necrosis tumoral, que
NHANES III (National Health and Nutrition Examination Sur- juntos se asocian con atopia, enfermedades alérgicas y asma). La
vey III ) de 12 106 estadounidenses realizada entre 1988 y 1994, complejidad de la respuesta inmunitaria y sus interacciones con
56% de los casos de asma fue atribuible a atopia. La exposición el microbioma humano impiden emitir conclusión firme algu­
de pacientes sensibles a alergenos inhalados aumenta la inflama­ na en este momento, pero ésta es un área de investigación que se
ción de las vías respiratorias, la hipercapacidad de respuesta de está expandiendo con rapidez, que promete reformar el entendi­
las vías respiratorias, y los síntomas de asma. Los síntomas pueden miento básico de la causa de la atopia y el asma.
aparecer inmediatamente (respuesta asmática inmediata) o 4 a 6
horas después de la exposición al alergeno (respuesta asmática Patogenia
tardía); en el cuadro 9-3 se listan los alergenos comunes. En múl­ La anormalidad fundamental en el asma es la reactividad aumen­
tiples estudios, la obesidad se asocia con una prevalencia aumen­ tada de las vías respiratorias a estímulos. Hay muchos agentes
tada de asma. desencadenantes conocidos para el asma (cuadro 9-3); éstos pue­
La exposición en interiores a los ácaros del polvo casero o a den clasificarse a grandes rasgos como sigue: 1) mediadores fi­
antígenos de cucarachas es un fuerte factor de riesgo para asma. siológicos o farmacológicos de respuestas asmáticas de las vías
Al mismo tiempo, se ha establecido bien que los niños criados en respiratorias, 2) alergenos que pueden inducir inflamación de
granjas tienen prevalencia más baja de atopia y asma, y en un las vías respiratorias y reactividad de las mismas en individuos
estudio se mostró que la diversidad de exposición microbiana sensibilizados, y 3) agentes o estímulos fisicoquímicos exóge­
durante la niñez guarda relación inversa con el riesgo de asma. nos que producen hiperreactividad de las vías respiratorias. Al­
Estas observaciones y la incidencia aumentada de atopia, alergia gunos de estos agentes provocadores producirán respuestas sólo
en asmáticos (p. ej., ejercicio, adenosina), mientras que otros pro­
ducen de manera característica respuestas aumentadas en los as­
CUADRO 9–3  Asma: factores desencadenantes máticos, que pueden ser usadas para distinguirlos de no asmáticos
bajo condiciones de práctica de prueba controlada (p. ej., hista­
Mediadores fisiológicos y farmacológicos de contracción normal mina, metacolina; véase más adelante). No hay un mecanismo
de músculo liso único conocido que explique la ocurrencia del asma en todos los
Histamina individuos. Hay, sin embargo, eventos comunes que caracterizan
los procesos patológicos que producen el asma.
Metacolina Es importante reconocer el papel central de la inflamación de
Trifosfato de adenosina las vías aéreas en la evolución del asma. Los eventos más tempra­
nos en las respuestas de las vías respiratorias de asmáticos son la
Agentes fisicoquímicos activación de células inflamatorias locales, sobre todo mastocitos
Ejercicio; hiperventilación con aire frío y seco y eosinófilos. Esto puede suceder por mecanismos dependientes
de IgE específicos, o de modo indirecto por medio de otros pro­
Contaminantes del aire
cesos (p. ej., estímulos osmóticos o exposición a irritantes quími­
Dióxido de azufre cos). Los mediadores de reacción aguda, entre ellos leucotrienos,
prostaglandinas e histamina, inducen con rapidez contracción del
Dióxido de nitrógeno
músculo liso, hipersecreción de moco, y vasodilatación con esca­
Infecciones respiratorias virales (p. ej., influenza A) pe endotelial y formación de edema local. Las células epiteliales
también parecen participar en este proceso al liberar leucotrienos
Sustancias ingeridas
y prostaglandinas, así como citocinas inflamatorias en el momen­
Propranolol to de la activación. Algunos de estos mediadores preformados y
Aspirina; antiinflamatorios no esteroideos
de acción rápida poseen actividad quimiotáctica; reclutan célu­
las inflamatorias adicionales, como eosinófilos y neutrófilos, ha­
Alergenos cia la mucosa de las vías respiratorias.
Sustancias químicas de bajo peso molecular (p. ej., penicilina,
Un proceso crítico que acompaña a estos eventos agudos es
isocianatos, anhídridos, cromato) el reclutamiento, la multiplicación y la activación de células in­
flamatorias inmunitarias mediante las acciones de una red de
Moléculas orgánicas complejas (p. ej., caspa de animales, ácaros del
citocinas y quimiocinas que se liberan localmente. Las citocinas
polvo, enzimas, polvo de madera)
y quimiocinas participan en una serie compleja y prolongada de
230  CAPÍTULO 9 Enfermedad pulmonar

CUADRO 9–4  Asma: eventos inflamatorios celulares edematosa e infiltrada con células inflamatorias, sobre todo lin­
focitos, eosinófilos y mastocitos. Se observa músculo liso de las
Activación o lesión de célula epitelial vías respiratorias hipertrófico y contraído. Las células epiteliales
Liberación de citocina (IL-8) y quimiocina, con quimiotaxis o activación bronquiales y bronquiolares suelen estar dañadas, en parte por
de neutrófilos productos de eosinófilos como proteína básica mayor y la pro­
Presentación de antígeno a linfocitos teína quimiotáctica de eosinófilos, que son citotóxicas para el
Hiperplasia e hipersecreción de células epiteliales secretoras epitelio. La lesión y muerte epiteliales dejan porciones de la luz
Muerte epitelial; magnitud aumentada de los reflejos neurales de las vías respiratorias denudadas, lo que expone fibras aferen­
sensoriales de las vías respiratorias tes del sistema nervioso autónomo y quizá no colinérgicas, no
Activación de linfocitos adrenérgicas, que pueden mediar hiperreactividad de las vías res­
Exposición a antígeno con proliferación de linfocitos piratorias. Se observan hiperplasia de glándulas secretoras e hi­
Expresión incrementada de citocinas y quimiocinas; activación de
persecreción de moco, con taponamiento de vías respiratorias por
células efectoras adicionales (células dendríticas, mastocitos, moco, un dato notorio en el asma grave. Incluso en vías respirato­
eosinófilos, macrófagos) rias de asmáticos con afección leve se encuentran números incre­
Activación de células B; síntesis aumentada de IgE mentados de células inflamatorias en la mucosa y submucosa, y
Activación incrementada de linfocitos por citocinas locales se nota que los miofibroblastos subepiteliales proliferan y produ­
Activación de mastocitos y eosinófilos
cen colágeno intersticial aumentado; esto puede explicar el com­
ponente de obstrucción relativamente fija de las vías respiratorias
Liberación por eosinófilos de mediadores citotóxicos y
que se observa en algunos asmáticos. Los datos anatomopato­
proinflamatorios agudos
lógicos en el asma grave letal corren parejas con los eventos pa­
Activación de mastocitos mediada por IgE, con liberación aguda de
mediador (p. ej., histamina, leucotrienos, factor activador de plaquetas)
tológicos antes descritos, pero reflejan la mayor magnitud del
fenómeno adverso. Se notan lesiones y pérdida epi­teliales más gra­
Nueva expresión de múltiples citocinas por mastocitos, con activación
de células efectoras múltiples, como con linfocitos ves de las vías respiratorias, a menudo con obstrucción grave y
completa de la luz de las vías respiratorias por tapones de moco.

eventos que originan perpetuación de la inflamación y de la hi­ Fisiopatología


perreactividad de vías respiratorias locales (cuadro 9-4). Estos Los eventos celulares locales en las vías respiratorias tienen im­
eventos incluyen promoción del crecimiento de mastocitos y eo­ portantes efectos sobre la función pulmonar. Como una conse­
sinófilos, flujo de entrada y proliferación de linfocitos T, y dife­ cuencia de la inflamación y de la hiperreactividad del músculo
renciación de linfocitos B hacia células plasmáticas productoras liso de las vías respiratorias, estas últimas muestran estrechez,
de IgE y de IgA. Un componente importante de este proceso pa­ lo que produce un incremento de la resistencia de las vías respi­
rece ser la diferenciación y activación de linfocitos T auxiliares ratorias (Raw) (recuerde que Raw ∝ 1/radio4). Las vías respira­
del fenotipo TH2. Estos linfocitos TH2, por medio de su produc­ torias periféricas de pequeño calibre no contribuyen de manera
ción de citocinas, entre ellas IL-3, IL-4, IL-5, IL-6, IL-9, IL-10 e significativa a la resistencia al flujo de aire en individuos sanos,
IL-13, promueven la activación de mastocitos, eosinófilos y otras pero conforme estas vías respiratorias se estrechan en pacientes
células efectoras, e impulsan la producción de IgE por células con asma, contribuyen considerablemente a la obstrucción del
B, todos los cuales son componentes patológicos del fenotipo del flujo de aire. La hipersecreción de moco y los estímulos bron­
asma. Así, mediante sus mediadores específicos, estas células coconstrictores adicionales pueden exacerbar la fisiología pul­
múltiples participan en los procesos proinflamatorios que están monar obstructiva. La función neural bronquial también parece
activos en las vías respiratorias de asmáticos. Entre ellas figu­ participar en la evolución del asma, si bien esto probablemente
ran lesión de células epiteliales y denudación de las vías respi­ es de importancia secundaria. La estimulación de receptores de
ratorias, mayor exposición de nervios sensitivos aferentes, así irritantes bronquiales va seguida por tos y broncoconstricción
como la consiguiente hiperreactividad del músculo liso mediada refleja mediadas por fibras eferentes vagales; quizá también par­
por mecanismos neurales; la regulación ascendente de la activa­ ticipen neurotransmisores peptídicos. El neuropéptido proinfla­
ción de mastocitos y eosinófilos mediada por IgE y la liberación matorio sustancia P puede liberarse a partir de fibras aferentes
de mediadores, incluso mediadores agudos y de acción prolon­ amielínicas en las vías respiratorias, e inducir contracciones de
gada, e hipersecreción de glándulas submucosas con aumento del músculo liso y liberación de mediador a partir de mastocitos. El
volumen de moco. Al mismo tiempo, la producción de factores péptido intestinal vasoactivo (VIP) es el neurotransmisor peptí­
de crecimiento, como TGF-β, TGF-α y factor de crecimiento de dico de algunas neuronas no adrenérgicas, no colinérgicas de las
fibroblastos (FGF) por las células epiteliales, así como por ma­ vías respiratorias, y funciona como un broncodilatador; la in­
crófagos y otras células inflamatorias, impulsa el proceso de re­ terrupción de su acción por desdoblamiento del VIP puede pro­
modelado de tejido y de fibrosis submucosa de vías respiratorias. mover la broncoconstricción.
Esta fibrosis submucosa puede causar obstrucción fija de las vías La obstrucción de las vías respiratorias ocurre de manera di­
respiratorias que puede acompañar a la inflamación crónica de fusa, aunque no homogénea, en la totalidad de los pulmones.
las mismas en el asma. Como resultado, la ventilación de unidades respiratorias se vuelve
no uniforme, y la proporción entre ventilación y perfusión se al­
Patología • •
tera. Hay áreas de relaciones V/Q tanto anormalmente bajas como
• •
Los datos histopatológicos del asma reflejan los procesos celula­ altas; las regiones con proporción V/Q baja contribuyen a hipoxe­
res en juego. La mucosa de las vías respiratorias está engrosada, mia. El cortocircuito puro es poco común en el asma aun cuando
CAPÍTULO 9 Enfermedad pulmonar  231

el taponamiento con moco es un dato frecuente, en especial en el pulmonar, con alteración del llenado del ventrículo izquier­
asma grave, mortal. La tensión arterial de CO2, por lo general es do, junto con incremento de la circulación venosa hacia el
normal a baja, dada la ventilación aumentada que se observa en ventrículo derecho durante inspiración más vigorosa en la
exacerbaciones de asma. Incluso la hipercapnia leve debe con­ obstrucción grave. Con el volumen al final de la diástole
siderarse un signo ominoso durante un ataque grave de asma; del ventrículo derecho aumentado durante la inspiración, el
indica obstrucción progresiva de las vías respiratorias, fatiga tabique interventricular se mueve hacia la izquierda, lo que
muscular y ventilación alveolar en disminución. altera el llenado y el gasto del ventrículo izquierdo. La con­
secuencia de este gasto disminuido es un decremento de la
Manifestaciones clínicas presión sistólica durante la inspiración, o pulso paradójico.
Las manifestaciones del asma se explican fácilmente por la pre­ 6. Hipoxemia. El estrechamiento de las vías respiratorias redu­
sencia de inflamación y obstrucción de las vías respiratorias. ce la ventilación hacia las unidades pulmonares afectadas, lo
• •
cual causa desproporción V/Q con un cambio hacia propor­
A. Síntomas y signos.  La variabilidad de éstos es una indicación • •
ciones V/Q bajas, lo cual da lugar a un incremento de la A-a
del tremendo rango de gravedad de la enfermedad, desde leve e ΔPO2, e hipoxemia manifiesta en casos graves. El cortocircui­
intermitente hasta asma crónica, grave y a veces mortal. to verdadero es poco común excepto en el asma muy grave.
1. Disnea y sensación de estrechez en el tórax. Estas sensa­ 7. Hipercapnia y acidosis respiratoria. En el asma leve a mo­
ciones se producen por varios cambios fisiológicos concer­ derada, la ventilación es normal o está aumentada, y la PCO2
tados. El mayor esfuerzo muscular que se requiere para arterial es normal o está disminuida. En ataques graves,
vencer la resistencia aumentada de las vías respiratorias es la obstrucción de las vías respiratorias puede empeorar, y
detectado por receptores de estiramiento de huso, principal­ sobreviene fatiga de los músculos respiratorios, con la evo­
mente de músculos intercostales y la pared torácica. La hiper­ lución de hipoventilación alveolar, hipercapnia y acidosis
inflación por obstrucción de las vías respiratorias da lugar respiratoria. Note que esta progresión puede ocurrir a pe­
a distensión torácica. La adaptabilidad pulmonar disminu­ sar de taquipnea continua. Una frecuencia respiratoria au­
ye y el trabajo de la respiración aumenta, lo cual también es mentada no revierte la hipoventilación alveolar porque los
detectado por nervios sensoriales de la pared torácica, y volúmenes de ventilación pulmonar están reducidos como
se  manifiesta como sensación de estrechez en el tórax y consecuencia de hiperinflación dinámica.
disnea. Conforme empeora la obstrucción, la desproporción 8. Defectos obstructivos por pruebas de función pulmonar.
• •
V/Q aumentada pro­duce hipoxemia. La PCO2 arterial cre­ Los pacientes con asma leve pueden tener función pulmo­
ciente y, más tarde, la hipoxemia arterial en evolución (cada nar por completo normal entre las exacerbaciones. Durante
una sola o juntas como estímulos sinérgicos) estimularán el ataques de asma activos, todos los índices de flujo de aire
impulso respiratorio por medio de quimiorreceptores peri­ espiratorio están reducidos, entre ellos el FEV1, la FEV1/
féricos y centrales. Este estímulo en presencia de fatiga de FVC (FEV1%), y el índice de flujo espiratorio máximo (fi­
músculos respiratorios produce disnea progresiva. gura 9-20). La FVC suele también estar disminuida como
2. Sibilancias. La contracción del músculo liso, junto con la resultado de cierre prematuro de las vías respiratorias antes
hipersecreción y retención de moco, ocasiona disminución de la espiración completa. La administración de un bron­
del calibre de las vías respiratorias y flujo de aire turbulento codilatador produce decremento de la obstrucción del flu­
prolongado, lo que se traduce en sibilancias auscultatorias jo de aire. Como consecuencia de la obstrucción del flujo
y audibles. La intensidad de las sibilancias no se correlacio­ de aire, el vaciamiento incompleto de las unidades pulmona­
na bien con la gravedad del estrechamiento de las vías res­ res al final de la espiración ocasiona hiperinflación aguda y
piratorias; como un ejemplo, con la obstrucción extrema de crónica; y puede haber incremento de la capacidad pulmo­
las vías respiratorias, el flujo de aire puede estar tan reducido nar total (TLC), la capacidad residual funcional (FRC), y el
que las sibilancias apenas son detectables, si es que lo son. volumen residual (RV). La capacidad de difusión pulmonar
3. Tos. La tos se produce por la combinación de estrechamien­ para monóxido de carbono (DlCO) con frecuencia está au­
to de las vías respiratorias, hipersecreción de moco, y la hi­ mentada por el volumen pulmonar (y de la sangre capilar
percapacidad de respuesta aferente neural que se observa pulmonar) incrementado.
con la inflamación de las vías respiratorias. También puede 9. Hipercapacidad de respuesta bronquial. La hipercapaci­
ser una consecuencia de inflamación inespecífica después dad de respuesta bronquial se define como 1) un incremen­
de infecciones superpuestas, en particular virales, en pacien­ to de 12% o más del FEV1 en respuesta a un broncodilatador
tes asmáticos. En virtud del estrechamiento compresivo inhalado o 2) un decremento de 20% o más del FEV1 en
y la velocidad alta de flujo de aire en las vías respiratorias respuesta a un factor desencadenante que, a la misma in­
centrales, la tos proporciona suficiente fuerza de corte y pro­ tensidad, causa un cambio de menos de 5% en un indivi­
pulsora para eliminar el moco acumulado y partículas rete­ duo sano. La metacolina y la histamina son agentes para los
nidas de las vías respiratorias estrechadas. cuales se ha establecido práctica de pruebas de provoca­
4. Taquipnea y taquicardia. En la enfermedad leve puede no ción estandarizadas. Esas pruebas revelan hipercapacidad
haber taquipnea ni taquicardia, pero son casi universales de respuesta inespecífica en la mayoría de los asmáticos,
en las exacerbaciones agudas. incluso aquellos con enfermedad leve y datos normales en
5. Pulso paradójico. El pulso paradójico es una reducción de la espirometría. Otros agentes que se han usado para esta­
más de 10 mmHg de la presión arterial sistólica durante la blecer sensibilidades a exposición específicas son el dióxi­
inspiración. Parece ser una consecuencia de hiperinflación do de azufre y el diisocianato de tolueno.
232  CAPÍTULO 9 Enfermedad pulmonar

Trastorno restrictivo Normal Trastorno obstructivo


16 16 16
14 14 14
12 12 12
10 10 10
Espiración
8 8 8
6 6 6
Flujo (L/s) 4 4 4
2 2 2
0 0 0
–2 –2 FEV1 –2
–4 –4 –4
–6 –6 Inspiración –6
–8 –8 –8
–10 –10 –10
–12 –12 –12
0 1 2 3 4 0 1 2 3 4 0 1 2 3 4
Volumen (L) Volumen (L) Volumen (L)
FVC = 2.56 L FVC = 5.65 L FVC = 4.20 L
FEV1 = 2.14 L FEV1 = 4.18 L FEV1 = 1.09 L
FEV1/FVC = 84% FEV1/FVC = 74% FEV1/FVC = 26%
FIGURA 9–20  Curvas (“asas”) de flujo-volumen a partir de espirometría estándar en un paciente normal (centro), un paciente con un defecto venti-
latorio obstructivo grave (derecha) y un paciente con defecto ventilatorio restrictivo moderado (izquierda).

Presentación clínica
PUNTO DE CONTROL
A. Bronquitis crónica. La bronquitis crónica se define por una
19. ¿Cuál es el problema fisiológico fundamental en la enfer- historia clínica de tos productiva durante tres meses del año du­
medad pulmonar obstructiva? Dé un ejemplo de cada una rante dos años consecutivos. Hay disnea y obstrucción de las vías
de sus tres fuentes principales. respiratorias, a menudo con un elemento de reversibilidad, de ma­
20. ¿Cuáles son los eventos patológicos que contribuyen a la nera intermitente o continua. El tabaquismo de cigarrillos es con
anormalidad crónica de la estructura de las vías respirato- mucho la causa principal, aunque otros irritantes inhalados pue­
rias en el asma? den producir el mismo proceso. Si bien los eventos patológicos
21. ¿Cuáles son las tres categorías de agentes que pueden des­ predominantes son inflamación de las vías respiratorias de ma­
encadenar asma? yor calibre, acompañada de engrosamiento de la mucosa e hiper­
22. ¿Cuáles mediadores de acción aguda contribuyen a las res­ secreción de moco, el sitio principal de obstrucción aumentada
puestas de las vías respiratorias de asmáticos? del flujo de aire es la inflamación en los bronquíolos de calibre
23. ¿Cuáles son algunas características histopatológicas del más pequeño.
asma?
24. Nombre tres razones de aumento de la resistencia de las B. Enfisema. El enfisema pulmonar es una enfermedad que se
vías respiratorias en el asma. caracteriza por agrandamiento irreversible de los espacios aé­
25. ¿Por qué la PCO2 arterial por lo general está baja en exacer- reos distales a los bronquíolos terminales y se acompaña de des­
baciones de asma? trucción de sus paredes sin fibrosis evidente. En contraste con la
26. ¿Cuáles son algunos de los síntomas y signos frecuentes bronquitis crónica, el defecto anatomopatológico primario en el
del asma aguda? enfisema no yace en las vías respiratorias, sino más bien en las
paredes de las unidades respiratorias, donde la pérdida de tejido
elástico da por resultado pérdida de la tensión de retroceso apro­
piada para soportar las vías respiratorias distales durante la espi­
2. COPD: bronquitis crónica y enfisema ración. La destrucción del espacio aéreo se acompaña de disnea
progresiva y obstrucción irreversible, sin hipersecreción de moco
“Enfermedad pulmonar obstructiva crónica” es un término de­ ni tos productiva importante. Más aún, la pérdida del área de su­
liberadamente impreciso, que se emplea para denotar un pro­ perficie alveolar y el lecho capilar acompañante para el intercam­
ceso que se caracteriza por bronquitis crónica o enfisema, y que bio de gases contribuye a la hipoxia y disnea progresivas. Pueden
puede llevar a obstrucción de las vías respiratorias. Si bien la bron­ hacerse distinciones patológicas y causales entre diversos mode­
quitis crónica y el enfisema suelen considerarse procesos inde­ los de enfisema, pero la presentación clínica de todos es similar.
pendientes, comparten algunos factores causales, y a menudo se
encuentran juntos en el mismo paciente. Es con el fin de incluir
ambos bajo la misma categoría amplia que la definición sigue Etiología y datos epidemiológicos
siendo imprecisa: refleja lo que hoy se sabe acerca de la evolu­ Los datos epidemiológicos por lo general consideran tanto bron­
ción de estas enfermedades. quitis crónica como enfisema juntos dentro de la COPD. La COPD
CAPÍTULO 9 Enfermedad pulmonar  233

afecta a casi 15 millones de personas en EUA; la bronquitis cró­ Epitelio


nica es el diagnóstico en aproximadamente dos tercios de los
casos, y el enfisema en el resto. La COPD es la tercera causa prin­ a Membrana
cipal de muerte en EUA; en 2011 hubo 138 080 muertes. Las tasas b basal
de incidencia, prevalencia y mortalidad de la COPD aumentan
con la edad, y son más altas en varones, individuos de raza blan­ Glándula
ca, y personas de nivel socioeconómico más bajo. El tabaquismo mucosa
c
de cigarrillos persiste como la principal causa de enfermedad en
hasta 90% de los pacientes con bronquitis crónica y enfisema. El d Pericondrio
diagnóstico de COPD probablemente es significativamente insu­
ficiente; aunque sólo 15 a 20% de los fumadores presenta obs­
trucción grave del flujo de aire, hay una relación dependiente
de la dosis entre la exposición al humo de tabaco y la pérdida de Cartílago
la función pulmonar. Estudios basados en la población sugieren
que la exposición crónica a polvo (incluso sílice y algodón) y a FIGURA 9–21  Anatomía de la pared bronquial. Estructura de una
humos de sustancias químicas son factores de riesgo contribui­ pared bronquial normal. En la bronquitis crónica, el grosor de las glándu-
dores importantes para COPD. En el mundo en desarrollo, la ex­ las mucosas aumenta, y puede expresarse como la proporción de (b-c)/
posición en interiores a humo proveniente de la combustión de (a-d); esto se conoce como el índice de Reid. (Redibujada, con autorización, de
biocombustibles es una causa importante de COPD. Thurlbeck WM. Chronic airflow obstruction in lung disease. En: Bennington JL [editor].
El factor de riesgo genético más importante identificado para Major Problems in Pathology. Saunders, 1976.)
la evolución de la COPD es la deficiencia del inhibidor de la α1-
proteasa (α1-antitripsina). La concentración reducida en la circu­
lación y en los tejidos puede llevar al inicio temprano de enfisema broncoconstrictores inespecíficos (incluso histamina y metacoli­
grave. El inhibidor de la α1-proteasa es capaz de inhibir varios na). Los bronquíolos suelen estar infiltrados con células inflama­
tipos de proteasas, entre ellas elastasa de neutrófilo, que está im­ torias, y están deformados con fibrosis peribronquial relacionada.
plicada en la génesis del enfisema (véase la sección de Fisiopa­ Con frecuencia se observa impacción de moco y obstrucción de
tología, más adelante). Las mutaciones autosómicas dominantes, la luz de vías respiratorias de calibre más pequeño. En ausencia
especialmente en individuos del norte de Europa, producen con­ de algún proceso superpuesto, como neumonía, el parénquima
centraciones anormalmente bajas de este inhibidor en el suero y pulmonar, donde sucede el intercambio de gases, integrado por
en los tejidos, lo cual altera el equilibrio de la síntesis de tejido unidades respiratorias terminales, está en su mayor parte indem­
conjuntivo y proteólisis. Una mutación homocigótica (el genoti­ ne. El resultado de estos cambios combinados es obstrucción y
po ZZ) da lugar a concentración de inhibidor de 10 a 15% de lo alteración de la eliminación de secreciones, de las vías respirato­
normal. El riesgo de enfisema, particularmente en fumadores que rias, crónicas.
portan esta mutación, está aumentado de manera notoria. La obstrucción no uniforme de las vías respiratorias propia de
la bronquitis crónica tiene considerables efectos sobre la venti­
A. Bronquitis crónica. En la bronquitis crónica se observan va­ lación y el intercambio de gases. La obstrucción con tiempo es­
rios cambios patológicos de las vías respiratorias, aun cuando piratorio prolongado suscita hiperinflación. Las relaciones entre
ninguno es patognomónico de esta enfermedad. Los datos clí­ ventilación y perfusión están alteradas, con áreas aumentadas de
• • • •
nicos de la bronquitis crónica pueden atribuirse a lesión y es­ proporciones V/Q bajas. Estas desproporciones V/Q bajas son
trechamiento crónicos de las vías respiratorias. Las principales en su mayor parte la causa de la hipoxemia en reposo más im­
características anatomopatológicas son inflamación de las vías portante que se observa en individuos con bronquitis crónica, en
respiratorias, en especial las de pequeño calibre, y la hipertrofia comparación con la que se observa en el enfisema. El cortocir­
de glándulas mucosas de vías respiratorias grandes, con incre­ cuito verdadero (perfusión sin ventilación) es poco común en la
mento de la secreción de moco y obstrucción acompañante de las bronquitis crónica.
vías respiratorias por moco (figura 9-21). La mucosa de las vías
respiratorias muestra infiltrado variable por células inflamato­ B. Enfisema. Se cree que el principal evento patológico en el en­
rias, entre ellas leucocitos polimorfonucleares y linfocitos. La in­ fisema es un proceso destructivo continuo que produce un des­
flamación de mucosas puede estrechar considerablemente la luz equilibrio de la lesión por oxidante local y actividad proteolítica
bronquial. Como una consecuencia de la inflamación crónica, el (en particular elastolítica) causada por una deficiencia de inhi­
epitelio cilíndrico seudoestratificado ciliado normal a menudo bidores de proteasa (figura 9-22). Los oxidantes, sean endógenos
se reemplaza por metaplasia escamosa en parches. En ausencia (anión superóxido) o exógenos (p. ej., humo de cigarrillos), pue­
de epitelio bronquial ciliado normal, la función de limpieza mu­ den inhibir la función protectora normal de los inhibidores de
cociliar está gravemente reducida o suprimida por completo. La proteasa, lo que permite la destrucción progresiva de tejido.
hipertrofia e hiperplasia de las glándulas submucosas son caracte­ En contraste con la bronquitis crónica, que es una enferme­
rísticas prominentes; las glándulas suelen constituir más de 50% dad de las vías respiratorias, el enfisema es una enfermedad del
del grosor de la pared bronquial. La hiperplasia de glándulas mu­ parénquima pulmonar circundante. Las consecuencias fisiológi­
cosas se acompaña de hipersecreción de moco, lo que contribuye cas se producen por tres cambios importantes: 1) destrucción de
al estrechamiento de la luz. A menudo hay hipertrofia del múscu­ unidades respiratorias terminales, 2) pérdida del lecho capilar al­
lo liso bronquial, y puede observarse hipersensibilidad a estímulos veolar y 3) pérdida de las estructuras de sostén de los pulmones,
234  CAPÍTULO 9 Enfermedad pulmonar

Fenómenos adversos pulmonares Defensas pulmonares

Oxidantes Antioxidantes
• Humo de cigarrillo
• Oxidantes
endógenos Antielastasas:
α1-antiproteasa
α2-macroglobulina
Inhibidor mucoso
Macrófago bronquial

Elastasas de Daño de fibras de


macrófago elastina y de colágeno

Neutrófilo

Enfisema

FIGURA 9–22  Esquema de la hipótesis de la elastasa-antielastasa del enfisema. La activación se representa por líneas continuas, y la inhibición por
líneas discontinuas. El pulmón está protegido contra el daño elastolítico por el inhibidor de la α1-proteasa y la α2-macroglobulina; el inhibidor de moco
bronquial protege las vías respiratorias. La elastasa se deriva de los neutrófilos, pero los macrófagos secretan una metaloproteinasa parecida a elastasa,
y pueden ingerir y más tarde liberar elastasa de neutrófilos. Los oxidantes derivados de los neutrófilos y macrófagos, o de humo de cigarrillos, pueden
desactivar al inhibidor de α1-proteasa, e interferir con la reparación de la matriz pulmonar. Los antioxidantes endógenos, como la superóxido dismuta-
sa, el glutatión y la catalasa protegen a los pulmones contra lesión por oxidante.

entre ellas tejido conjuntivo elástico. La pérdida de tejido conjun­ efecto compresivo que pueden tener sobre el pulmón circundan­
tivo elástico reduce el apoyo normal de las vías respiratorias no te y el espacio muerto fisiológico grande vinculado con estas es­
cartilaginosas, lo cual lleva a un pulmón con retroceso elástico tructuras.
disminuido y adaptabilidad aumentada. Sobreviene colapso es­
piratorio prematuro de vías respiratorias, con síntomas obstruc­ Manifestaciones clínicas
tivos y datos fisiológicos característicos.
A. Bronquitis crónica. Las manifestaciones clínicas de la bron­
El cuadro anatomopatológico del enfisema consiste en des­
quitis crónica son, sobre todo, el resultado del proceso obstructi­
trucción progresiva de unidades respiratorias terminales o de pa­
vo e inflamatorio de las vías respiratorias.
rénquima pulmonar distal a bronquíolos terminales. Los cambios
inflamatorios de las vías respiratorias son mínimos, si los hay, aun­ 1. Tos productiva. La tos es productiva de esputo espeso, que
que en vías respiratorias de conducción grandes puede observar­ suele ser purulento, debido a la inflamación local en proce­
se algo de hiperplasia de glándulas de moco. El intersticio de las so, y a la probabilidad alta de colonización e infección bac­
unidades respiratorias alberga algunas células inflamatorias, pero terianas. La viscosidad del esputo está incrementada en su
el principal dato es una pérdida de paredes alveolares y agranda­ mayor parte como resultado de la presencia de DNA libre
miento de espacios aéreos. También se pierden capilares alveo­ (de alto peso molecular y muy viscoso), que proviene de cé­
lares, lo que puede traducirse en decremento de la capacidad de lulas lisadas. Con el aumento de la inflamación y la lesión
difusión, e hipoxemia progresiva, en especial con el ejercicio. de mucosa puede ocurrir hemoptisis, pero por lo general es
La destrucción alveolar no es uniforme en todos los casos de escasa. La tos, que es muy eficaz en la limpieza de vías res­
enfisema. Se han descrito variantes anatómicas con base en el piratorias normales, es mucho menos eficaz debido al estre­
modelo de destrucción de la unidad respiratoria terminal (o áci­ cho calibre de las vías respiratorias y al mayor volumen y
no, como también se le conoce). En el enfisema centroacinar, la viscosidad de las secreciones.
destrucción se enfoca en el centro de la unidad respiratoria ter­ 2. Sibilancias. El estrechamiento de las vías respiratorias y la
minal; hay preservación relativa de los bronquíolos respiratorios obstrucción por moco persistentes pueden producir si­
y los conductos alveolares; este modelo se relaciona, con mayor bilancias localizadas o más difusas. Esto quizá tenga capa­
frecuencia, con tabaquismo prolongado. El enfisema panacinar cidad de respuesta a broncodilatadores, lo que representa
comprende destrucción global de la unidad respiratoria termi­ un componente reversible de la obstrucción.
nal, con distensión difusa del espacio aéreo. Este modelo típica­ 3. Crepitación gruesa inspiratoria y espiratoria. El incremen­
mente, aunque no de manera singular, se observa en la deficiencia to de la producción de moco, junto con función deficiente
de inhibidor de α1-proteasa. Es importante notar que la distin­ del sistema mucociliar, deja secreciones excesivas en las vías
ción entre estos dos modelos es, en su mayor parte, anatomopa­ respiratorias, incluso con el aumento de la tos. Se escuchan
tológica; no hay diferencia importante de la presentación clínica. de modo prominente en vías respiratorias de mayor calibre
Un mo­delo adicional de enfisema, de relevancia clínica, es el durante la respiración de volumen de ventilación pulmo­
enfisema ampollar. Las ampollas son espacios aéreos confluen­ nar o con la tos.
tes grandes, formados por mayor destrucción local o distensión 4. Examen cardiaco. La taquicardia es frecuente, en particu­
progresiva de unidades pulmonares. Son importantes debido al lar con exacerbaciones de bronquitis o con hipoxemia. Si la
CAPÍTULO 9 Enfermedad pulmonar  235

hipoxemia es importante y crónica, el resultado puede ser hi­ 3. Estudios de imágenes. Suele haber hiperinflación, con
pertensión pulmonar, y el examen cardiaco revela un ruido hemi­diafragmas aplanados e incremento del diámetro an­
de cierre de la válvula pulmonar (P2) prominente, o presión teroposterior del tórax. La destrucción del parénquima da
venosa yugular alta y edema periférico. lugar a atenuación de las marcas vasculares periféricas pul­
5. Estudios de imágenes. Los datos radiográficos típicos en monares, a menudo con dilatación de la parte proximal de
el tórax incluyen incremento de los volúmenes pulmonares la arteria pulmonar como resultado de hipertensión pulmo­
con diafragma relativamente deprimido, congruente con nar secundaria. También pueden observarse cambios quís­
hiperinflación. Son frecuentes las densidades lineales pa­ ticos o ampollares.
ralelas (“líneas de vía de tranvía”) de engrosamiento de las 4. Pruebas de función pulmonar. La destrucción del parén­
paredes bronquiales. El corazón puede estar aumentado de quima pulmonar y la pérdida del retroceso elástico pulmo­
tamaño, lo que sugiere sobrecarga de volumen del hemicar­ nar son las causas fundamentales de las anormalidades de
dio derecho. Se observan, a menudo, arterias pulmonares la función de los pulmones. La pérdida del apoyo elástico
prominentes, y son congruentes con hipertensión pulmonar. en el tejido pulmonar que rodea las vías respiratorias da lu­
6. Pruebas de función pulmonar. En las pruebas de función gar a compresión dinámica aumentada de las vías respira­
pulmonar la obstrucción difusa de las vías respiratorias se torias (figura 9-9), en especial durante espiración forzada.
demuestra como una reducción global de los flujos y volú­ El colapso prematuro de las vías respiratorias reduce todos
menes espiratorios. El FEV1, la FVC, y la relación FEV1/ FVC los flujos, incluso el FEV1, la FVC, y la FEV1/FVC (propor­
(FEV1%), están reducidos. La curva de flujo-volumen mues­ ción de FEV1%). Al igual que con la bronquitis crónica y el
tra limitación considerable del flujo (figura 9-20). Algunos asma, la curva de flujo-volumen espiratoria muestra con­
enfermos pueden mostrar respuesta a los broncodilatado­ siderable limitación del flujo (figura 9-20). La prolongación
res. La medición de los volúmenes pulmonares revela un del tiempo espiratorio, el cierre temprano de las vías respi­
incremento del RV y la FRC, lo que refleja aire atrapado en ratorias originado por pérdida del retroceso elástico, y el
los pulmones como resultado de obstrucción difusa de las atrapamiento consiguiente del aire, causan incrementos
vías respiratorias, y cierre temprano de las vías respirato­ del RV y la FRC. La TLC está aumentada, aun cuando una
rias a volúmenes pulmonares más altos. La DlCO es nor­ cantidad considerable de este incremento suele provenir de
mal, lo que refleja un lecho capilar alveolar preservado. gas atrapado en unidades pulmonares que se comunican
7. Gases en sangre arterial. La desproporción entre venti­ mal o no se comunican, incluso ampollas. La DlCO por lo
lación y perfusión es frecuente en la bronquitis crónica. La regular está disminuida en proporción con la magnitud del
A-a ΔPO2 está aumentada, y la hipoxemia es frecuente de­ enfisema, lo que refleja la pérdida progresiva de alvéolos y
• •
bido a áreas importantes de relaciones V/Q bajas (cortocir­ sus lechos capilares.
cuito fisiológico); la hipoxemia en reposo tiende a ser más 5. Gases en sangre arterial. El enfisema es una enfermedad
profunda que en el enfisema. Con la obstrucción cada vez que consta de destrucción de la pared alveolar. La pérdi­
• •
mayor, se observa PCO2 creciente (hipercapnia) y acidosis da  de los capilares alveolares crea desigualdades V/Q en
respiratoria, con alcalosis metabólica compensadora. áreas de ventilación alta en comparación con la perfusión.
8. Policitemia. La hipoxemia crónica se relaciona con un au­ Típicamente, los individuos con enfisema se adaptarán a
• •
mento variable del hematócrito, mediado por eritropoyeti­ relaciones V/Q altas al aumentar su ventilación por minu­
na. Con la hipoxia más grave y prolongada, el hematócrito to. Pueden mantener concentraciones de PO2 y de PCO2 cer­
puede incrementarse a bastante más de 50%. canas a lo normal pese a enfermedad avanzada. El examen
de los gases arteriales siempre revela un incremento de la
B. Enfisema. El enfisema se presenta como una enfermedad no A-a ΔPO2. Con la gravedad mayor de la enfermedad y la pér­
inflamatoria que se manifiesta por disnea, obstrucción progresi­ dida adicional de la perfusión capilar, hay decremento de la
va e irreversible de las vías respiratorias, y anormalidades del in­ DlCO, lo que da pie a desaturación de hemoglobina arte­
tercambio de gases, en especial con el ejercicio. rial que se vincula con el ejercicio y, por último, en reposo.
1. Ruidos respiratorios. En el enfisema típicamente hay dis­ La hipercapnia, la acidosis respiratoria y una alcalosis meta­
minución de la intensidad de los ruidos respiratorios, lo que bólica compensadora, son frecuentes en la enfermedad grave.
refleja decremento del flujo de aire, tiempo espiratorio pro­ 6. Policitemia. Al igual que en la bronquitis crónica, la hipoxe­
longado, e hiperinflación pulmonar prominente. Las sibilan­ mia crónica a menudo se relaciona con un hematócrito alto.
cias, cuando las hay, son de menor intensidad. Los ruidos de
las vías respiratorias, incluso crepitación y ronquidos, son
poco comunes en ausencia de procesos superpuestos, como PUNTO DE CONTROL
infección o edema pulmonar.
2. Examen cardiaco. Puede haber taquicardia como en la bron­ 27. ¿Cuál es la principal causa de la bronquitis crónica?
quitis crónica, en especial con exacerbaciones o hipoxemia. 28. Describa los cambios fisiopatológicos en el enfisema en
La hipertensión pulmonar es una consecuencia común de contraposición con la bronquitis crónica.
la obliteración vascular pulmonar. El examen cardiaco pue­ 29. ¿Las mutaciones que tienen lugar en cuál proteína muestran
de revelar cierre prominente de la válvula pulmonar (P2, fuerte correlación con riesgo incrementado de enfisema?
componente del segundo ruido cardiaco, aumentado). La 30. Nombre ocho síntomas y signos de bronquitis crónica.
presión venosa yugular alta y el edema periférico son datos 31. Nombre seis síntomas y signos de enfisema.
menos comunes que en la bronquitis crónica.
236  CAPÍTULO 9 Enfermedad pulmonar

ENFERMEDAD PULMONAR pér­dida de capilares alveolares. Esta alteración extensa de la es­


tructura pulmonar normal por procesos intersticiales influye pro­
RESTRICTIVA: FIBROSIS fundamente sobre la función pulmonar.
PULMONAR IDIOPÁTICA Las causas más comúnmente identificadas de enfermedad pul­
monar intersticial se relacionan con exposiciones ocupaciona­
La enfermedad pulmonar intersticial (o enfermedad pulmonar les y ambientales, en especial a polvos orgánicos e inorgánicos.
parenquimatosa difusa) es un término descriptivo que abarca más También hay enfermedades pulmonares intersticiales de causa
de 180 trastornos; dichos trastornos múltiples se agrupan debido desconocida, como la fibrosis pulmonar idiopática (IPF). Las con­
a características anatomopatológicas, fisiológicas, clínicas y ra­ secuencias fisiológicas que se observan en la IPF son típicas de
diográficas compartidas. La característica más común de la en­ otras causas de enfermedad pulmonar parenquimatosa difusa,
fermedad pulmonar parenquimatosa difusa es la infiltración del particularmente en sus etapas avanzadas. Por esa razón, el resto
pulmón por células inflamatorias y líquido, lo cual conduce a for­ de esta sección se enfoca en la IPF.
mación de tejido cicatrizal, fibrosis y obliteración capilar (figura
9-23). La fibrosis pulmonar difusa conduce a retroceso elástico
pulmonar aumentado, adaptabilidad y volúmenes pulmonares Presentación clínica
• •
disminuidos, y empeoramiento de la V/Q, lo cual lleva a deterio­ La IPF, previamente conocida como fibrosis pulmonar intersticial
ro del intercambio de gases, patrón que se conoce como enfer­ o alveolitis fibrosante criptogénica, se caracteriza por inflamación
medad pulmonar restrictiva. crónica de las paredes alveolares, lo cual da lugar a fibrosis difusa
La enfermedad pulmonar parenquimatosa difusa a menudo y progresiva, y destrucción de la estructura pulmonar normal.
se denomina enfermedad pulmonar intersticial, pero el modifi­ Este proceso no sólo produce un defecto restrictivo, con ventila­
cador “intersticial” es una caracterización incompleta del proce­ ción alterada y trabajo de la respiración aumentado, sino lesión
so patológico. El intersticio pulmonar formalmente se refiere a la vascular destructiva y obliterante que puede alterar gravemente
región de la pared alveolar exclusiva de, y que separa, las mem­ la perfusión y el intercambio de gases pulmonares normales.
branas basales de las células epiteliales alveolares y de las células La IPF habitualmente se presenta con inicio insidioso, duran­
endoteliales de los capilares pulmonares. En el pulmón normal, te meses a años, de disnea progresivamente grave, acompañada
este intersticio es un espacio potencial que puede contener al­ por una tos seca y persistente. Por lo general no hay fiebre ni do­
gunas células mesenquimatosas (p. ej., fibroblastos), moléculas lor torácico. Con la progresión de la enfermedad, puede ocurrir
de la matriz extracelular (p. ej., colágeno, elastina y proteoglu­ disnea incluso en reposo. La cianosis digital, los dedos en palillo
canos) y leucocitos tisulares, incluso mastocitos y linfocitos. En de tambor y la hipertensión pulmonar son comunes en las etapas
condicio­nes patológicas, no sólo hay afección del intersticio, sino más tardías de la enfermedad.
que puede haber afección de todos los elementos de la pared al­ El diagnóstico de IPF puede hacerse mediante CT del tórax
veolar, incluso células epiteliales alveolares y endoteliales capila­ de alta resolución en presencia de una historia clínica adecuada
res. Además, a menudo hay afección del espacio alveolar, incluso y resultados apropiados en las pruebas de función pulmonar, o

Enfermedad pulmonar
parenquimatosa difusa (DPLD)

Neumonía intersticial idiopática DPLD de causas conocidas


- IPF -Vasculopatía del colágeno (p. ej., esclerodermia)
- IIP que no son IPF -Inducida por fármacos (p. ej., amiodarona, bleomicina)
-DIP -COP -Ocupacional (neumoconiosis de los trabajadores del carbón)
-RBILD -NSIP -Ambiental (p. ej., asbestosis)
-AIP -LIP

Granulomatosa Otras formas de DPLD


-Causas desconocidas (sarcoidosis) -LAM (linfangioleiomiomatosis)
-Causas conocidas (neumonitis -Neumonía eosinofílica
por hipersensibilidad) -Histiocitosis de células de Langerhans

FIGURA 9–23  Categorías de enfermedad difusa del parénquima pulmonar que suelen llevar a enfermedad pulmonar restrictiva. En ausencia de
enfermedad maligna subyacente o antecedente de quimioterapia o radioterapia, la enfermedad difusa del parénquima pulmonar puede agruparse en
términos generales en las categorías clínicas que se muestran. DIP, neumonía intersticial difusa; RBILD, enfermedad pulmonar intersticial relacionada
con bronquiolitis respiratoria; AIP, neumonía idiopática aguda; COP, neumonía en organización criptogénica; NSIP, neumonía intersticial inespecífica;
LIP, neumonía intersticial linfocítica.
CAPÍTULO 9 Enfermedad pulmonar  237

mediante biopsia pulmonar quirúrgica. Los datos típicos en la CUADRO 9–5  Eventos celulares involucrados
CT se describen a continuación. La correlación histopatológi­ en la lesión y fibrosis pulmonares
ca  para la IPF es la neumonía intersticial habitual (UIP) un
patrón temporal y espacialmente heterogéneo de depósito de co­ Lesión tisular
lágeno maduro y destrucción de la pared alveolar con agrupa­ Activación y cambios de permeabilidad del endotelio vascular,
ciones dispersas de fibrosis activa llamadas focos fibroblásticos con trombosis y trombólisis
que contienen tanto fibroblastos como miofibroblastos. Hay cé­
lulas inflamatorias, pero por lo general son escasas. Lesión y activación epitelial

Flujo hacia adentro, activación y proliferación de leucocito

Etiología y datos epidemiológicos Lesión, remodelado y fibrosis tisulares adicionales:

En comparación con la COPD, la IPF es un trastorno poco co­ Perpetuación de la inflamación de tejido
mún, con una prevalencia estimada de 14 × 100 000 habitantes
Resolución incompleta o tardía de trombosis intersticial
en EUA. Típicamente se presenta durante la quinta a séptima dé­
cadas de la vida, con un predominio en varones de 1.5:1.0; por Proliferación de fibroblastos y producción o depósito de moléculas de
definición, el término “idiopático” se refiere a casos sin un agente matriz
causal conocido. Los principales factores de riesgo son exposición
Proliferación y repoblación epiteliales
a humo de tabaco y exposiciones ambientales a polvo orgánico e
inorgánico. Varias enfermedades sistémicas, entre ellas esclero­
dermia, sarcoidosis y neumonitis por hipersensibilidad, pueden, en
etapas avanzadas, producir datos clínicos, y estudios de imáge­ ciones  de poblaciones celulares y producción aumentada de
nes e histopatológicos indistinguibles de la IPF. Por ende, cuando matriz.
se evalúa a un paciente que presenta enfermedad pulmonar paren­ El desafío al describir las características fisiopatológicas de la
quimatosa difusa es necesario investigar los antecedentes ocupa­ IPF y su correlación histopatológica UIP, es que no se conocen ni
cionales y el potencial de trastornos del tejido conjuntivo, porque la lesión primaria ni los mecanismos que perpetúan una respues­
los datos tempranos pueden alterar la evaluación o las opciones ta fibrótica no regulada. De hecho, la investigación actual sobre
de tratamiento. Se ha descrito una forma hereditaria de fibrosis IPF se enfoca en maneras en que puede ser distinta de otras cau­
pulmonar, pero los casos típicos no parecen tener una base gené­ sas de enfermedad pulmonar parenquimatosa difusa, porque la
tica. Quedan por definir asociaciones con el envejecimiento y IPF se caracteriza por fibrosis progresiva en presencia de infla­
con otros trastornos, entre ellos enfisema, enfermedad por reflu­ mación mínima. Se está efectuando investigación interesante
jo gastroesofágico y obesidad. sobre la lesión y apoptosis de células epiteliales alveolares que
La evolución natural de la IPF es progresión no remitente: la llevan a activación anormal de células epiteliales adyacentes, al­
supervivencia mediana es de aproximadamente tres años desde teraciones del plegado de proteína surfactante, disregulación de
el diagnóstico; sin embargo, la evolución clínica es muy hetero­ vías embrionarias en la respuesta a lesión, y acortamiento acele­
génea y tal vez refleje fenotipos separados más que progresión rado de telómeros.
variable. Los factores de riesgo para progresión acelerada son edad Una característica singular de los datos histológicos en la IPF
más avanzada (>70 años) en el momento del diagnóstico, expo­ es que el proceso de lesión y de formación de tejido cicatrizal
sición acumulativa a humo de tabaco, y gravedad de la enferme­ pulmonares no es ni uniforme ni sincrónico: áreas de lesión y
dad con base en los síntomas (puntuación de disnea) o en una fibrosis intensas a menudo están entremezcladas con pulmón
evaluación estandarizada (magnitud de la enfermedad radiográ­ relativamente preservado. En las etapas tempranas de la enfer­
fica, gravedad de la restricción pulmonar en pruebas de función medad, la hiperplasia epitelial alveolar tipo II en placas acompa­
pulmonar, presencia de hipertensión pulmonar). ña  la infiltración de estructuras alveolares por leucocitos. El
daño de células epiteliales alveolares tipo II altera la producción
de surfactante y el recambio del mismo, con un incremento de la
Fisiopatología ten­sión de superficie alveolar en unidades pulmonares afectadas.
La enfermedad pulmonar parenquimatosa difusa abarca muchos Esto va seguido por leucocitosis tisular, proliferación de fibro­
trastornos con eventos precipitantes diferentes y posiblemente dis­ blastos, y formación de tejido cicatrizal crecientes. Se encuentran
tintos mecanismos celulares y moleculares. Es posible describir números aumentados de linfocitos —de modo predominante
una serie común de eventos celulares que median procesos infla­ células T— y mastocitos en el intersticio alveolar y en regiones
matorios pulmonares y respuestas fibróticas, y los regulan (cua­ submuco­sas hay notorio aumento del depósito de colágeno y
dro 9-5). Estos eventos incluyen: 1) lesión tisular inicial; 2) lesión elastina. Más tarde en la evolución de la enfermedad, hay des­
vascular y activación de células endoteliales, con permeabilidad trucción alveolar progresiva, con áreas grandes de fibrosis y
aumentada, exudación de proteínas plasmáticas hacia el espacio espacios de aire residuales revestidos por epitelio cúbico; éstos
extravascular, y trombosis y trombólisis variables; 3) lesión y ac­ aparecen en las radiografías como aspecto en panal de abejas.
tivación de células epiteliales alveolares, con pérdida de la inte­ Junto con destrucción alveolar, el lecho vascular acompañante
gridad de barrera y liberación de mediadores proinflamatorios; está obliterado, también en un patrón en placas. El resultado es
4) adherencia de leucocito aumentada a endotelio activado, con alteración de las carac­terísticas fisiológicas que incluye retroce­
tránsito de leucocitos activados hacia el intersticio, y 5) proce­ so  elástico aumentado y  poca adaptabilidad pulmonar, inter­
sos de lesión y reparación continuos caracterizados por altera­ cambio de gases alterado y anormalidades vasculares pulmonares.
238  CAPÍTULO 9 Enfermedad pulmonar

CUADRO 9–6  Aspectos fisiopatológicos en la enfermedad temprana típicamente no se observan hi­


de las enfermedades pulmonares intersticiales persecreción de moco ni una tos productiva.
2. Disnea y taquipnea. Múltiples factores contribuyen a la
Adaptabilidad pulmonar disminuida disnea en pacientes con IPF. La fibrosis del parénquima
pulmonar disminuye la adaptabilidad pulmonar; en com­
• Los pulmones son más rígidos y más resistentes a la expansión (figura
9-8) binación con alteraciones del recambio de surfactante, la
• La curva de adaptabilidad pulmonar está desviada hacia abajo y hacia presión de distensión requerida para inflar los pulmones au­
la derecha (figura 9-20) menta, como lo hace el trabajo de la respiración. Estímulos
• La presión de retroceso estática está aumentada a capacidad aumentados provenientes de fibras C en paredes alveolares
pulmonar total (TLC) (debido a fuerzas elásticas aumentadas)
fibróticas o receptores de estiramiento en la pared toráci­
• El trabajo de la respiración está aumentado
ca pueden detectar la fuerza aumentada necesaria para in­
Volúmenes pulmonares disminuidos como consecuencia flar pulmones menos adaptables. La taquipnea se produce
de adaptabilidad pulmonar disminuida por estímulos de receptores sensoriales pulmonares aumen­
• La TLC, la capacidad vital (VC), la capacidad residual funcional (FRC)
tados, y el intento por mantener una ventilación por minu­
y el volumen residual (RV) están proporcionalmente reducidos to alveolar normal (y por ende, PaCO2 normal) conforme los
• Los volúmenes de ventilación pulmonar están reducidos (figura 9-10) volúmenes pulmonares disminuyen. Un patrón respirato­
• La frecuencia respiratoria aumentada mantiene la ventilación alveolar rio superficial rápido también reduce el trabajo ventilatorio
(figura 9-10) en presencia de retroceso elástico pulmonar aumentado. El
Deterioro de la red capilar pulmonar lecho capilar disminuido y la membrana alveolocapilar en­
grosada contribuyen a la hipoxemia con el ejercicio. En
• Capacidad de difusión pulmonar (DlCO) disminuida debido a pérdida la enfermedad avanzada, el intercambio de gases alterado
de capilares pulmonares y reducción de la superficie capilar pulmonar • •
con desproporción V/Q grave puede producir hipoxemia
• El aumento de la longitud de la vía de difusión puede contribuir
a la anormalidad de la difusión en algunos pacientes en reposo.
3. Crepitación inspiratoria. A menudo hay crepitación ins­
Alteraciones del intercambio de gases piratoria seca, fina y difusa, y refleja la abertura sucesiva en
• La naturaleza en placas de la fibrosis da pie a falta acentuada
el momento de la inspiración de unidades respiratorias que
de homogeneidad en la ventilación están colapsadas debido a la fibrosis y la pérdida del surfac­
• La falta de homogeneidad regional causa desproporción de la
• •
tante normal.
ventilación y la perfusión, con cambio hacia regiones de V/Q baja, 4. Dedos en palillo de tambor. Los dedos de las manos y los
incluso áreas de falta de ventilación (cortocircuito) pies en palillo de tambor son un dato frecuente, pero se des­
• A-a ΔPO2 aumentada secundaria a regiones bajas, con hipoxemia
en casos graves
conoce la causa. No hay un enlace establecido con alguna
• La hipoxemia típicamente se exacerba por ejercicio (figura 9-24) variable fisiológica específica, incluso hipoxemia.
• La PaCO2 típicamente es normal o baja debido a ventilación por 5. Examen cardiaco. Al igual que con la hipoxemia por otras
minuto aumentada; la hipercapnia en la fibrosis pulmonar idiopática causas, el examen cardiaco puede revelar evidencia de hiper­
(IPF) pura es indicativa de enfermedad muy avanzada tensión pulmonar con ruido de cierre de la válvula pulmonar
Hipertensión en la arteria pulmonar (P2 ) prominente. Esto puede acompañarse de sobrecarga o
descompensación del hemicardio derecho, con presión ve­
• Superficie capilar pulmonar disminuida nosa yugular alta, soplo de regurgitación tricuspídea, o un
• Resistencia vascular pulmonar aumentada por FRC reducida
• La falta de homogeneidad de la ventilación causa hipoxia alveolar
tercer ruido cardiaco (S3 ) del lado derecho.
regional con vasoconstricción pulmonar hipóxica consiguiente
• Exacerbación notoria con el ejercicio debido a incapacidad para B. Estudios de imágenes
reclutar nuevos vasos
Los datos característicos en la radiografía de tórax comprenden
volúmenes pulmonares reducidos con opacidades reticulares au­
mentadas prominentes en la periferia del pulmón, y pérdida de
El cuadro 9-6 resume los aspectos fisiopatológicos de las enfer­ definición de estructuras vasculares, diafragma y borde cardiaco.
medades pulmonares intersticiales. La fibrosis alrededor de espacios de aire pequeños expandidos se
observa como aspecto en panal de abejas. Con la hipertensión
pulmonar, las arterias pulmonares centrales pueden estar agran­
Manifestaciones clínicas dadas. Los datos típicos en la CT del tórax comprenden engro­
A. Síntomas y signos samiento difuso de tabiques, opacidades reticulares subpleurales
aumentadas, bronquiectasias por tracción con festoneado pleu­
1. Tos. Una tos no productiva, irritante e intermitente a me­
ral y espacios de aire quísticos subpleurales pequeños (3 a 10 mm)
nudo es el primer síntoma de IPF; puede ser resistente a la
y agrupados (aspecto en panal de abejas). Por lo general no hay
terapia antitusiva. El mecanismo probablemente es multi­
opacidades en vidrio esmerilado.
factorial; el daño fibrótico de unidades respiratorias ter­
minales causa deformación bronquial y bronquiolar, lo cual
conduce a alteraciones de fibras nerviosas tanto estimu­ C. Pruebas de función pulmonar
ladoras como inhibidoras que participan en los reflejos La fibrosis pulmonar típicamente produce un modelo ventila­
de la tos. Si bien puede haber lesión de células epiteliales, torio restrictivo, con reducciones de la TLC, el FEV1 y la FVC,
CAPÍTULO 9 Enfermedad pulmonar  239

mientras que mantiene una relación FEV1/FVC (FEV1%) preser­ debido a hipoxia, y los estímulos irritantes de la fibrosis pulmo­
vada o incluso incrementada (figura 9-20). El aumento del re­ nar. Sólo en las etapas más tardías de la enfermedad, cuando el
troceso elástico ocasiona índices de flujo espiratorio normales a retroceso elástico pulmonar y el trabajo de la respiración aumen­
incrementados cuando se ajustan para el volumen pulmonar. La tados evitan ventilación apropiada, la PaCO2 aumenta por arriba
DlCO en la fibrosis pulmonar se reduce de manera progresiva en de lo normal. La hipercapnia es un signo grave; implica una in­
función de la obliteración fibrótica de los capilares pulmonares. capacidad para mantener ventilación alveolar adecuada como
resultado de exceso de trabajo de la respiración.
D. Gases en sangre arterial
La hipoxemia es común en la IPF avanzada. Se produce por la na­
turaleza en placas de la fibrosis, que causa variabilidad extrema PUNTO DE CONTROL
de la adaptabilidad y la ventilación regionales que lleva a des­
• • • •
proporción V/Q prominente desviada hacia proporciones V/Q 22. ¿Cómo se afecta la función pulmonar por la enfermedad
bajas. El gasto cardiaco tiende a ser bajo, lo que reduce la PO2 intersticial pulmonar?
venosa mixta (PmvO2). El deterioro de la difusión aumenta con la 23. Nombre los eventos en la fisiopatología de la fibrosis pul-
gravedad de la fibrosis, pero rara vez contribuye a hipoxemia en monar idiopática.
reposo. El deterioro de la difusión es un contribuidor importante 24. Mencione ocho síntomas y signos de fibrosis pulmonar
a desaturación inducida por ejercicio cuando la combinación de idiopática.
PmvO2 baja y el tiempo de tránsito capilar reducido limita la carga
de oxígeno de la hemoglobina (figura 9-24). La PCO2 arterial tí­
picamente es baja como consecuencia de ventilación aumentada
EDEMA PULMONAR
PO2 alveolar
100 Presentación clínica
El edema pulmonar es la acumulación de líquido excesivo en el
Tiempo de contacto reducido
espacio extravascular de los pulmones, en particular en el inters­
ticio y en el espacio alveolar. Esta acumulación puede ocurrir
80
con lentitud, como en un paciente con insuficiencia renal oculta,
o de modo repentino, como en un paciente con insuficiencia del
ventrículo izquierdo luego de un infarto agudo de miocardio. El
Membrana
edema pulmonar se presenta más a menudo con disnea, a saber,
PaO2 (mmHg)

60 alveolar engrosada
la respiración percibida por un paciente como incómoda o des­
encadenante de ansiedad, y desproporcionada para la magnitud
de la actividad. Al principio el paciente sólo nota disnea con el
40 PO2 venosa mixta esfuerzo, pero puede progresar a disnea en reposo. En casos gra­
ves, el edema pulmonar puede acompañarse de líquido de edema
en el esputo y dar lugar a insuficiencia respiratoria aguda.

20
Etiología
Ejercicio El edema pulmonar es un problema común relacionado con una
variedad de condiciones médicas (cuadro 9-6). A la luz de estas
múltiples causas, es útil pensar sobre el edema pulmonar en tér­
0 0.25 0.5 0.75
minos de los principios fisiológicos subyacentes.
Tiempo en el capilar (s)

FIGURA 9–24  Cambio de la PaO2 a lo largo de los capilares pulmona-


res. El tiempo de tránsito típico en reposo para un eritrocito a través
Fisiopatología
de un capilar alveolar es de 0.75 s. En el pulmón normal, la diferencia de Todos los vasos sanguíneos muestran escape; en circunstancias
presión parcial y la tasa de difusión de O2 a través de la barrera alveoloca- normales, el líquido se mueve entre vasos sanguíneos y los espa­
pilar aseguran saturación completa de la hemoglobina en 0.25 s. Incluso cios alrededor de ellos, mientras que el flujo de proteína es míni­
con el tiempo de tránsito capilar más corto propio del ejercicio, el pul- mo. En el ser humano adulto, los capilares pulmonares son el
món normal permite saturación completa de hemoglobina en los capila- principal sitio de flujo de líquido desde la vasculatura pulmonar.
res alveolares. Si la barrera alveolocapilar está engrosada, como sucede
La ecuación de Starling —(Jv ≈ K ([Pc - Pi] - σ[πc - πi])— des­
en la fibrosis pulmonar, y particularmente si el punto de inicio (la PO2 ve­
cribe el movimiento de líquido entre los capilares pulmonares y
nosa mixta) está reducido, la difusión disminuida en presencia de tiempo
de tránsito capilar acortado hará que la sangre al final del capilar alveolar el compartimiento extravascular pulmonar. El flujo de líquido a
no esté por completo saturada con O2. Ocurrirá desaturación mayor con través de una membrana semipermeable (Jv) se relaciona con la
el ejercicio progresivo conforme la extracción periférica disminuya más la permeabilidad inherente de la membrana a líquido (K = coefi­
PO2 venosa mixta. (Redibujada, con autorización, de West JB. Pulmonary Pathophysio­ ciente de filtración de líquido del endotelio capilar) y macromo­
logy: The Essentials, 6a ed. Lippincott Williams & Wilkins, 2003.) léculas (σ = coeficiente de reflexión de proteína del endotelio
240  CAPÍTULO 9 Enfermedad pulmonar

capilar), así como los gradientes de presión hidrostática y coloi­ pleural, donde hay capacidad de resolución alta a través
dooncótica a través de la membrana (Pc = presión hidrostática de poros en la pleura parietal hacia linfáticos pleurales pa­
capilar, Pi = presión hidrostática intersticial, y πc y πi son las pre­ rietales.
siones coloidooncóticas capilar e intersticial, respectivamente).
La tasa de resorción de líquido por el sistema linfático por lo
La extravasación de líquido desde los capilares hacia los espa­
general es suficiente para prevenir la acumulación de líquido en
cios intersticiales circundantes es limitada por uniones interce­
el intersticio y los espacios alveolares. El edema pulmonar ocurre
lulares herméticas (zonas de oclusión) entre células endoteliales
cuando el líquido sale en el espacio vascular pulmonar, excede la
de los capilares pulmonares. Los espacios alveolares pulmona­
capacidad de depuración de líquido, y se acumula en los espacios
res normalmente están protegidos contra el líquido extravascular
extravasculares del pulmón. A cierta magnitud crítica no defini­
en el espacio intersticial por medio de tres mecanismos: i) una
da después de que los intersticios perivascular y peribronquiolar
barrera de células epiteliales alveolares que es casi impermeable
se han llenado, la presión hidrostática intersticial aumentada
al paso de proteína, ii) linfáticos precapilares que en circunstan­
hace que el líquido de edema entre al espacio alveolar (figura
cias normales eliminan líquido antes de que pueda acumularse
9-25). Aún se desconoce la vía hacia el espacio alveolar, pero se
lo suficiente como para abrumar la barrera epitelial alveolar y
iii) transporte activo de sodio desde el alvéolo, que regula la canti­
dad de líquido en el espacio alveolar. En circunstancias normales:
Etapa I
Edema pulmonar intersticial
1. La presión hidrostática capilar pulmonar excede la presión
hidrostática intersticial y, por ende, las fuerzas hidrostáti­
cas favorecen el movimiento de líquido hacia afuera de los
capilares y hacia el espacio intersticial.
2. La presión coloidooncótica capilar pulmonar excede la pre­
sión coloidooncótica intersticial, lo que favorece el mo­
vimiento de líquido hacia afuera del espacio intersticial y
hacia los capilares. Además, la presión coloidooncótica in­ Etapa II
Llenado de alvéolos en medialuna
tersticial excede la presión coloidooncótica del líquido al­
veolar, lo cual favorece el movimiento de líquido hacia
afuera del espacio alveolar hacia el intersticio.
3. El efecto de las fuerzas hidrostáticas es mayor que el de las
fuerzas coloidooncóticas y, así, hay una tendencia a movi­
miento neto de líquido hacia afuera de los capilares y hacia
los espacios intersticiales. La tasa neta de movimiento de
líquido hacia afuera de los capilares pulmonares en cir­ Etapa III
cunstancias normales es de aproximadamente 15 a 20 ml/h, Inundación alveolar
lo cual representa menos de 0.01% del flujo sanguíneo pul­
monar.
4. El líquido en el espacio intersticial pulmonar es eliminado
por los linfáticos pericapilares que no entran en la pared
alveolar y se denominan “yuxtaalveolares”. El intersticio pe­
ricapilar es contiguo con los intersticios perivascular y peri­
bronquial. La presión intersticial en estas áreas más centrales
es negativa respecto al intersticio pericapilar, de modo que FIGURA 9–25  Etapas de la acumulación de líquido de edema pulmonar.
Las tres columnas representan tres vistas anatómicas de la acumulación
el líquido tiene una trayectoria en dirección central y en
progresiva de líquido de edema pulmonar. De izquierda a derecha, las
dirección contraria a los espacios de aire. En efecto, los in­ columnas representan un corte transversal del haz broncovascular, que
tersticios perivascular y peribronquiolar actúan como un muestra el tejido conjuntivo laxo que rodea la arteria pulmonar y la pared
sumidero para líquido, y pueden dar cabida a alrededor bronquial, un corte transversal de alvéolos fijos en inflación, y el capilar
de 500 ml con un incremento insignificante de la presión pulmonar en corte transversal. La primera etapa consta de acumulación
hidros­tática intersticial. Dado que este líquido tiene agota­ excéntrica de líquido en el espacio intersticial pericapilar. La limitación
miento de proteína en comparación con la sangre, las fuerzas del líquido de edema a un lado del capilar pulmonar mantiene la trans­
osmóticas favorecen la resorción desde el intersticio hacia ferencia de gases mejor que la acumulación simétrica. Cuando la for­
los vasos sanguíneos adyacentes a estas áreas centrales; éste mación de líquido de edema excede la eliminación linfática, distiende el
es el principal sitio de resorción de líquido desde los inters­ intersticio peribronquial vascular. A esta etapa, no hay inundación alveo-
lar, pero se observa algo de llenado en medialuna de alvéolos. La tercera
ticios perivascular y peribronquiolar. El líquido de edema
etapa es la inundación alveolar. Note que cada alvéolo individual está por
puede tener una trayectoria más hacia el mediastino, don­
completo inundado o tiene llenado en medialuna mínimo. Este modelo
de es captado por linfáticos mediastínicos. Los intersticios quizá ocurre debido a que el edema alveolar interfiere con el surfactante
perivascular y peribronquiolar también son contiguos con y, por arriba de cierto umbral, hay un aumento de las fuerzas de superfi-
los tabiques interlobulillares y la pleura visceral. En algu­ cie que incrementa considerablemente la presión transmural y da por
nos pacientes, una cantidad importante de líquido transita resultado inundación. (Redibujada, con autorización, de Nunn JF. Nunn’s Applied Res­
hacia afuera a través de la pleura visceral hacia el espacio piratory Physiology, 6a ed. Copyright Elsevier/Butterworth-Heinemann, 2005.)
CAPÍTULO 9 Enfermedad pulmonar  241

cree que ocurre por flujo masivo. El edema pulmonar puede causar incrementos grandes de la formación de edema. De modo
ocurrir bajo diversas condiciones: similar, si hay daño de la barrera epitelial alveolar, incluso el flujo
basal de líquido a través de un endotelio capilar intacto puede
1. El gradiente de presión hidrostática aumenta (presión hi­
causar llenado alveolar.
drostática capilar pulmonar alta). El edema pulmonar que
Los aspectos fisiopatológicos del edema pulmonar de permea­
ocurre en estas circunstancias se denomina edema pulmo­
bilidad aumentada (ARDS) son complejos y pueden depender
nar cardiogénico o hidrostático; éste es principalmente un
de múltiples fenómenos adversos diferentes. El líquido alveo­
mecanismo mecánico que da lugar a un ultrafiltrado del
lar se acumula como resultado de pérdida de la integridad de la
plas­ma. El líquido de edema en estas circunstancias tiene
barrera epitelial alveolar, lo cual permite que solutos y moléculas
un contenido de proteína relativamente bajo, por lo gene­
grandes como la albúmina entren al espacio alveolar. Esta pérdi­
ral de menos de 60% del contenido de proteína en el plasma
da de integridad puede producirse por lesión directa del epitelio
de un paciente. En individuos normales, la presión capilar
alveolar por toxinas inhaladas o por infección pulmonar, o pue­
pul­monar (esto es, la presión en cuña pulmonar) debe ex­
de ocurrir después de lesión primaria del endotelio capilar pul­
ceder alrededor de 20 mmHg antes de que el líquido que
monar por toxinas circulantes, como en la sepsis o la pancreatitis,
sale del espacio vascular exceda la tasa de resorción, lo cual
seguida por lesión inflamatoria secundaria de la barrera epitelial
conduce a la acumulación de líquido intersticial y, final­
alveolar. Esto contrasta con el edema pulmonar cardiogénico, en
mente, de líquido alveolar el cual se describe como edema
el cual tanto el epitelio alveolar como el endotelio capilar por lo
pulmonar. El edema pulmonar cardiogénico o hidrostático
general están intactos. Las causas potenciales de edema pul­
clásicamente se produce por presiones venosa pulmonar y
monar que dan pie a ARDS comprenden un grupo diverso de
auricular izquierda altas debido a insuficiencia sistólica o
entidades clínicas (cuadro 9-7). Muchos problemas diversos se
diastólica ventricular izquierda, estenosis mitral o regurgi­
agrupan en el síndrome llamado ARDS porque comparten le­
tación mitral.
sión del epitelio alveolar, y surfactante pulmonar alterado, que da
2. La permeabilidad de células endoteliales vasculares y/o
lugar a cambios característicos de la mecánica y función pulmo­
de células epiteliales alveolares aumenta. El edema pul­
nares. Con lesiones por inhalación, como la que producía el gas
monar que ocurre en estas circunstancias se denomina ede­
mostaza durante la Primera Guerra Mundial, hay lesión química
ma pulmonar no cardiogénico o de permeabilidad. La
directa del epitelio alveolar, que altera esta barrera celular nor­
permeabilidad de la barrera endotelial o epitelial puede
malmente estrecha. La presencia de líquido con alto contenido
aumentar como resultado de lesión celular; se trata princi­
de proteína en el alvéolo, en especial la presencia de productos de
palmente de un proceso inflamatorio que típicamente da
degradación de fibrinógeno y fibrina, desactiva el surfactante pul­
lugar a disfunción de las barreras tanto endotelial como
monar, lo que ocasiona incrementos grandes de la tensión su­
epitelial. En estas circunstancias, aumenta la permeabili­
perficial. Esto se traduce en disminución de la adaptabilidad
dad tanto al líquido como a proteína, aunque puede haber
pulmonar, e inestabilidad alveolar, que da pie a áreas de atelecta­
poco cambio de la presión hidrostática. En condiciones de
sia. La tensión superficial aumentada disminuye la presión hidros­
permeabilidad de membrana aumentada, el líquido de ede­
tática intersticial y favorece el movimiento de líquido adicional
ma tiene contenido de proteína similar al del líquido in­
hacia el alvéolo. Una monocapa de surfactante dañada también
travascular, por lo general al menos 70% del contenido de
puede incrementar la susceptibilidad a infección.
proteína en el plasma. El síndrome de dificultad respirato­
Los factores circulantes pueden actuar de modo directo sobre
ria aguda (ARDS) epitomiza este tipo de edema pulmonar
el endotelio capilar o afectarlo mediante diversos mediadores in­
(véase una exposición detallada más adelante).
munitarios. Un caso frecuente es la bacteriemia por gramnega­
3. El gradiente de presión oncótica disminuye (presión coloi­
tivos. La endotoxina bacteriana no da lugar a daño endotelial de
dooncótica plasmática baja). El líquido de edema en estas
manera directa; hace que los neutrófilos y macrófagos se adhie­
circunstancias tiene un contenido de proteína relativamen­
ran a superficies endoteliales y liberen diversos mediadores in­
te bajo. La hipoalbuminemia debida a enfermedad prolon­
flamatorios, como leucotrienos, tromboxanos y prostaglandinas,
gada o síndrome nefrótico puede causar este tipo de edema
así como radicales de oxígeno que dan por resultado lesión por
pulmonar.
oxidante. Tanto los macrófagos como los neutrófilos pueden libe­
4. El drenaje linfático está alterado. Esta forma de edema pul­
rar enzimas proteolíticas que originan daño adicional. También
monar es rara, pero puede observarse con obstrucción físi­
puede haber estimulación de macrófagos alveolares. Las sustancias
ca del sistema linfático por enfermedad maligna (linfoma)
vasoactivas pueden causar vasoconstricción pulmonar intensa,
o infección (histoplasmosis, tuberculosis), por obliteración
lo que lleva a insuficiencia capilar.
de linfáticos debido a radioterapia para cáncer mamario
La histopatología del edema pulmonar por aumento de la per­
o pulmonar, o por causas idiopáticas (síndrome de la uña
meabilidad refleja estos cambios. Los pulmones están muy ede­
amarilla).
matosos y pesados. La superficie tiene aspecto violáceo, y exuda
Los edemas hidrostático y de permeabilidad pulmonar no son líquido hemorrágico desde la superficie pleural cortada. Al mi­
mutuamente excluyentes; de hecho, están estrechamente enlaza­ croscopio, hay infiltración celular de los tabiques interalveolares
dos. El edema pulmonar ocurre cuando la presión hidrostática y el intersticio por células inflamatorias y eritrocitos. Se obser­
es excesiva para una permeabilidad capilar dada y para una tasa va daño de los neumocitos tipo I, que deja una barrera alveolar
dada de depuración de líquido intersticial. Por ejemplo, en pre­ denudada. Hojas de material de color rosado compuestas de pro­
sencia de endotelio capilar dañado, aumentos pequeños de un teínas plasmáticas, fibrina y restos celulares coagulados revisten la
gradiente de presión hidrostática por lo demás normal pueden membrana basal denudada; éstas se llaman membranas hialinas.
242  CAPÍTULO 9 Enfermedad pulmonar

CUADRO 9–7  Causas de edema pulmonar La lesión inflamatoria progresa a fibrosis en algunos casos, aun­
que llevan a ARDS que también puede ocurrir recuperación completa con regenera­
ción del epitelio alveolar de los neumocitos tipo II.
Presión hidrostática capilar pulmonar aumentada

Disfunción ventricular izquierda, aguda o crónica Manifestaciones clínicas


Isquemia o infarto de miocardio Los edemas pulmonares tanto cardiogénico como no cardiogé­
Insuficiencia cardiaca sistólica o diastólica nico se producen por incremento del agua pulmonar extravascu­
Obstrucción del flujo de salida de la aurícula izquierda lar y ambos pueden suscitar insuficiencia respiratoria. Dadas las
diferencias de la fisiopatología, no sorprende que las manifesta­
Estenosis de la válvula mitral
ciones clínicas sean muy diferentes en los dos síndromes.
Mixoma auricular
Sobrecarga de volumen intravascular A. Edema pulmonar por aumento
Expansión de volumen yatrogénica de la presión transmural hidrostática
Insuficiencia renal (edema pulmonar cardiogénico)
Los incrementos tempranos de la presión venosa pulmonar pue­
Presión coloidoosmótica plasmática disminuida
den ser asintomáticos. Es posible que el paciente sólo note dis­
Hipoalbuminemia nea de esfuerzo leve o una tos no productiva estimulada por la
Síndrome nefrótico activación de receptores de irritantes, acoplados con fibras C.
Cuando la posición de decúbito produce redistribución de san­
Insuficiencia hepática
gre o líquido de edema, por lo general acumulado en las extre­
Presión intersticial disminuida midades inferiores, hacia la circulación venosa, que aumenta el
volumen sanguíneo torácico y las presiones venosas pulmonares,
Laringoespasmo con esfuerzos inspiratorios máximos
ocurren ortopnea y disnea paroxística nocturna.
Reexpansión rápida de pulmón colapsado Los signos clínicos empiezan con la acumulación de líqui­
Edema pulmonar por reexpansión do  intersticial. El examen físico puede revelar un tercer ruido
cardiaco, pero en el edema puramente intersticial hay escasez de
Permeabilidad aumentada del endotelio capilar pulmonar
datos pulmonares. El signo más temprano en una radiografía
Neumonía infecciosa de tórax suele ser incremento del calibre de los vasos del lóbulo
Bacteriemia superior (“redistribución vascular pulmonar”) y acumulación de
líquido en los espacios perivasculares y peribronquial (“formación
Sepsis
de manguitos”). La radiografía también puede mostrar líneas B de
Traumatismo no torácico acompañado de hipotensión (“pulmón Kerley, que representan líquido en los tabiques interlobulillares.
de choque”)
La adaptabilidad pulmonar se aminora, y el paciente empieza a
Pancreatitis aguda respirar con mayor rapidez y más superficialmente con el fin de
Coagulación intravascular diseminada minimizar el trabajo elástico aumentado de la respiración. Con­
Después de derivación cardiopulmonar forme empieza la inundación alveolar, hay reducciones adicio­
nales del volumen y la adaptabilidad pulmonares. Con algunos
Lesión pulmonar aguda relacionada con transfusión
alvéolos llenos de líquido, hay aumento de la fracción del pulmón
Permeabilidad aumentada del epitelio alveolar que está perfundida, pero poco ventilada. Esta desviación hacia
relaciones V/Q bajas ocasiona un aumento de la A-a ΔPO2, si no
• •

Aspiración de contenido gástrico ácido


es que hipoxemia franca. El oxígeno complemen­tario corrige la
Toxinas inhaladas: oxígeno, fosgeno, cloro, humo hipoxemia. La PaCO2 es normal o baja, lo que re­fleja el impulso
Semiahogamiento y ahogamiento incrementado para respirar. El paciente puede tornarse sudoro­
so y cianótico. El esputo puede mostrar líquido de edema que es
Depuración linfática disminuida
de color rosado por hemorragia capilar por presiones venosas
Obstrucción de vasos linfáticos intrapulmonares por diseminación pulmonares altas. La auscultación revela crepi­tación inspiratoria
linfangítica de carcinoma principalmente en las bases, donde la presión hidrostática es ma­
Masa o carcinoma central que obstruye linfáticos yor, pero en potencia en los pulmones com­pletos. Puede haber
Alteración de linfáticos por intervención quirúrgica, traumatismo,
ron­quidos y sibilancias (“asma cardiaca”). La radiografía mues­
radioterapia o inflamación tra opacidades en vidrio esmerilado perihiliares bilaterales re­
presentativas de áreas de edema intersticial y alveolar.
Mecanismos contribuidores múltiples o inciertos

Neurogénicos B. Edema pulmonar de permeabilidad aumentada


Asociados a altitud elevada (edema pulmonar no cardiogénico)
Sobredosis de narcóticos La forma más común de edema pulmonar de permeabilidad
aumentada es el ARDS; de acuerdo con la Berlin Definition de
Asociados a tocolítico
consenso, el ARDS se caracteriza por inicio agudo (<7 días)
CAPÍTULO 9 Enfermedad pulmonar  243

de infiltrados pulmonares radiográficos bilaterales e insuficiencia meses. Un número importante presentará nueva enfermedad reac­
res­piratoria no explicada por completo por insuficiencia cardia­ tiva de las vías respiratorias o fibrosis pulmonar.
ca o sobrecarga de volumen, con deterioro asociado de la oxige­
nación definido como proporción PaO2/FiO2 de 300 o menos. La
gra­vedad del ARDS es definida por la intensidad del deterioro PUNTO DE CONTROL
de la oxigenación. Los ARDS leve, moderado y grave se definen
por proporciones PaO2/FiO2 de 200 a 300, 100 a 200 y menos de 35. ¿Cuáles cuatro factores participan en la producción de ede­
100 mmHg, respectivamente. El ARDS es la vía común final ma pulmonar? ¿De qué modo quedan afectados en causas
de varias enfermedades médicas graves, todas las cuales con­du­ cardiogénicas en contraposición con no cardiogénicas de
cen a incremento del escape capilar pulmonar. El rango de pre­ edema pulmonar?
sentaciones clínicas incluye todos los diagnósticos en la ICU para 36. ¿Cuáles son las causas frecuentes de edema pulmonar no
adultos, entre ellos sepsis, neumonía, pancreatitis, aspiración de cardiogénico?
contenido gástrico, choque, contusión pulmonar, traumatismo 37. ¿El daño de los pulmones dependiente de edema pulmo-
no torácico, inhalación de tóxicos, semiahogamiento y múltiples nar por aumento de la permeabilidad es reversible? De ser
transfusiones de sangre. Alrededor de una tercera parte de los pa­ así, ¿cómo?
cientes con ARDS inicialmente tiene síndrome de sepsis. 38. ¿Cuáles son las dos razones principales por las cuales a me­
Aunque el mecanismo de lesión varía, el daño de células en­ nudo se requiere ventilación mecánica en el edema pul-
doteliales capilares y de células epiteliales alveolares es común al monar grave?
ARDS independientemente de la causa. Después del fenómeno
adverso inicial (p. ej., un episodio de bacteriemia de alto grado),
por lo general hay un periodo de estabilidad, que refleja el tiempo EMBOLIA PULMONAR
que se requiere para que mediadores proinflamatorios liberados
a partir de células inflamatorias estimuladas causen daño. El daño
de células endoteliales y epiteliales causa incremento de la permea­
Presentación clínica
bilidad vascular y decremento de la producción de surfactante y La palabra “émbolo” se deriva del griego, significa “tapón”; un ém­
de la actividad del mismo. Estas anormalidades dan pie a edema bolo pulmonar consiste en material que tiene acceso al sistema
pulmonar intersticial y alveolar, colapso alveolar, un incremento venoso y después a la circulación pulmonar. Finalmente alcanza
importante de las fuerzas de superficie, adaptabilidad pulmonar un vaso cuyo calibre es demasiado pequeño como para permitir
notoriamente reducida e hipoxemia. Durante las primeras 24 a el paso libre, y ahí se forma un tapón, que ocluye la luz y obstru­
48 horas después del fenómeno adverso, el paciente tal vez expe­ ye la perfusión. Hay muchos émbolos pulmonares (cuadro 9-8).
rimente incremento del trabajo de la respiración, que se manifies­ El más común es la tromboembolia pulmonar, que ocurre si trom­
ta por disnea y taquipnea pero sin anormalidades en la radiografía bos venosos, principalmente provenientes de las extremidades
de tórax. A esta etapa temprana, la A-a ΔPO2 aumentada refleja inferiores, migran hacia la circu­lación pulmonar. Note que una
• •
edema alveolar con desproporción V/Q desviada hacia propor­ función normal de la micro­circulación pulmonar es evitar que
• •
ciones V/Q bajas que pueden corregirse mediante FiO2, y venti­ material embólico entre a la circulación arterial sistémica. Los
lación por minuto, aumentadas. El cuadro clínico puede mejorar, o pulmones poseen tanto capacidad funcional excesiva como riego
puede haber disminución adicional de la adaptabilidad, y altera­ vascular redundante, lo que les permite filtrar una cantidad im­
ción de capilares pulmonares, lo cual lleva a áreas de cortocircuito portante de trombos y agregados plaquetarios con repercusiones
verdadero e hipoxemia resistente a tratamiento. La combinación mínimas sobre la función pulmonar o la hemodinámica. Sin em­
de trabajo aumentado de la respiración e hipoxemia progresiva bargo, los tromboémbolos grandes, o una acumulación lo bas­
por lo general requiere ventilación mecánica. Dado que el pro­ tante grande de unos más pequeños, pueden causar afectación
ceso subyacente es heterogéneo, con pulmón de aspecto normal sustancial de la función cardiaca o respiratoria y muerte.
adyacente a pulmón atelectásico o consolidado, ventilar a los pa­
cientes a volúmenes de ventilación pulmonar típicos puede so­
CUADRO 9–8  Tipos de émbolos pulmonares
bredistender alvéolos normales, reducir el flujo sanguíneo hacia
áreas de ventilación suficiente y precipitar más lesión pulmonar Material Situación clínica
(“volutraumatismo”). Aceite Linfangiografía
La hipoxemia suele ser profunda y puede sobrevenir hipercap­
Aire Cardiocirugía, neurocirugía, manipulación
nia debida a ventilación de espacio muerto creciente. Es posible inapropiada de catéteres venosos centrales
que las radiografías revelen opacidades alveolares difusas o “al­
Cuerpo extraño Piezas de dispositivos intravenosos, talco
borismo polar” de los pulmones, lo que representa llenado alveo­
lar confluente difuso. El estudio anatomopatológico revela daño Émbolos sépticos Endocarditis, tromboflebitis
alveolar difuso (DAD), que se caracteriza por células inflamato­ Grasa Fractura de hueso largo, liposucción
rias y la formación de membranas hialinas. La mortalidad es de Huevos de parásitos Esquistosomiasis
30 a 40%. La mayoría de los pacientes muere por alguna com­ Líquido amniótico Trabajo de parto activo
plicación de su enfermedad de presentación, no por hipoxe­
Trombo Trombosis venosa profunda
mia resistente a tratamiento. La mayor parte de quienes sobreviven
recuperará función pulmonar casi normal, pero el tiempo nece­ Tumor Carcinoma de células renales con invasión
de la vena cava
sario para su recuperación puede prolongarse a seis o incluso 12
244  CAPÍTULO 9 Enfermedad pulmonar

Los tromboémbolos pulmonares son frecuentes y dan lugar a CUADRO 9–9  Factores de riesgo
morbilidad importante. Se encuentran en la autopsia en 25 a 50% para trombosis venosa
de los pacientes hospitalizados y se consideran una causa contri­
buidora importante de muerte en un tercio de ellos. No obstante, Incremento de la estasis venosa
el diagnóstico antes de que el paciente muera sólo se hace en 10 Reposo en cama
a 20% de los casos.
Inmovilización, en particular después de intervención quirúrgica
ortopédica
Etiología y epidemiología Estados de gasto cardiaco bajo
La embolia pulmonar (PE) y la trombosis venosa profunda re­­pre­ Embarazo
sentan un continuo de una enfermedad única que se ha denomi­
nado enfermedad tromboembólica venosa (VTE). Los trombo­ Obesidad
émbolos casi nunca se originan en la circulación pulmonar, y Hiperviscosidad
llegan ahí al viajar a través de la circulación venosa.
Daño vascular local, en especial trombosis previa con válvulas
Más de 95% de los tromboémbolos pulmonares surge a partir incompetentes
de trombos en las venas profundas de la extremidad inferior: ve­
nas poplítea, femoral e iliaca. La trombosis venosa por abajo de Catéteres venosos centrales
las venas poplíteas o que ocurre en las venas superficiales de las Edad cada vez mayor
piernas es frecuente en clínica, pero no es un factor de riesgo para
Coagulabilidad aumentada
tromboembolia pulmonar porque los trombos en estas ubicacio­
nes rara vez migran hacia la circulación pulmonar sin extenderse Lesión tisular: intervención quirúrgica, traumatismo, infarto de miocardio
primero por arriba de la rodilla. Dado que menos de 20% de los Enfermedad maligna
trombos en la pantorrilla se extenderá hacia las venas poplíteas,
los trombos en la pantorrilla aislados pueden observarse con prue­ Presencia de un anticoagulante de lupus
bas seriadas para excluir extensión hacia el sistema profundo y no Síndrome nefrótico
necesariamente requieren anticoagulación. En ocasiones suceden
Uso de anticonceptivos orales, en particular administración de estrógeno
trombosis venosas en las extremidades superiores o en el lado
derecho del corazón; esto ocurre más a menudo en presencia de Trastornos de la coagulación genéticos: resistencia a proteína C
catéteres intravenosos o alambres de marcapasos cardiacos y pue­ activada (factor V Leiden); mutación de 20210A de protrombina;
de ser de importancia clínica creciente a medida que se incremen­ hiperhomocisteinemia; variante termolábil de la metilentetrahidrofolato
reductasa (MTHFR); deficiencia de antitrombina III, proteína C o su
ta el uso de catéteres intravenosos a largo plazo. cofactor, proteína S, o de plasminógeno; fibrinógeno disfuncional;
Por tanto, los factores de riesgo para tromboembolia pul­ síndrome de anticuerpos antifosfolípido
monar son aquellos para la aparición de trombosis venosa en las
venas profundas de las piernas (trombosis venosa profunda) (cua­
dro 9-8). El patólogo alemán Rudolf Virchow declaró estos facto­
res de riesgo en 1856: estasis venosa, lesión de la pared vascular, y bosis familiar (cuadro 9-9). Ahora está claro que estas varian­
activación aumentada del sistema de coagulación; sus observacio­ tes genéticas pueden interactuar con otros factores (p. ej., uso de
nes todavía son válidas. anticonceptivos orales, deficiencias en la dieta) y aumentar el ries­
El factor de riesgo más prevaleciente en enfermos hospitaliza­ go de trombosis.
dos es estasis por inmovilización, particularmente en quienes se
realizan procedimientos quirúrgicos. Se informa que la inciden­ Fisiopatología
cia de trombosis de vena de la pantorrilla en pacientes que no
reciben profilaxis con heparina luego de reemplazo total de ro­ Los trombos venosos están compuestos de una masa friable de
dilla es de hasta 84%, y es de más de 50% después de intervención fibrina, con muchos eritrocitos y algunos leucocitos y plaquetas
quirúrgica de la cadera o de prostatectomía. El riesgo de trombo­ atrapados al azar en la matriz. Cuando un trombo venoso viaja
embolia pulmonar mortal en estos pacientes puede ser de hasta hacia la circulación pulmonar, origina una amplia gama de cam­
5%. En consecuencia, los médicos que atienden a estos enfermos bios fisiopatológicos (cuadro 9-11).
deben estar conscientes de la magnitud del riesgo, e instituir te­
rapia profiláctica apropiada (cuadros 9-9 y 9-10). A. Cambios hemodinámicos
La enfermedad maligna y el daño de tejido en el momento Todo paciente con un émbolo pulmonar tiene cierto grado de
de la operación son las dos causas más frecuentes de incremen­ obstrucción mecánica. El efecto de esta última depende de la
to de la activación del sistema de coagulación. Las anormalida­ proporción de circulación pulmonar obstruida, en reflejos neuro­
des en la pared del vaso contribuyen poco a la trombosis venosa humorales estimulados por el trombo, y de la presencia o ausen­
en contraposición con arterial. De cualquier modo, la trombosis cia de enfermedad cardiopulmonar preexistente. Los pacientes
previa puede dañar válvulas venosas y llevar a incompetencia ve­ sin enfermedad cardiopulmonar preexistente pueden adaptarse
nosa, lo que promueve la estasis. a la oclusión de hasta aproximadamente una tercera parte de la
Los avances ahora permiten la identificación de trastornos ge­ circulación pulmonar, con un incremento insignificante de la re­
néticos en hasta un tercio de los pacientes no seleccionados con sistencia vascular pulmonar y de la presión arterial pulmonar. La
trombosis venosa, y en más de la mitad de los pacientes con trom­ circulación pulmonar se adapta al flujo aumentado a través de
CAPÍTULO 9 Enfermedad pulmonar  245

CUADRO 9–10  Riesgo de trombosis venosa profunda o de embolia pulmonar posoperatoria en pacientes
que no reciben profilaxis con anticoagulante

Incidencia de trombosis venosa Incidencia de trombosis Incidencia de émbolo


Categoría de riesgo profunda en la pantorrilla venosa profunda proximal pulmonar fatal

Riesgo alto 40 a 80% 10 a 20% 1 a 5%


1. Edad >40
2. Anestesia >30 min
3.  Al menos uno de los que siguen:
a.  Intervención quirúrgica ortopédica
b.  Operación para tratar cáncer pélvico o abdominal
c. Antecedente de trombosis venosa profunda o
embolia pulmonar
d. Coagulopatía hereditaria

Riesgo moderado 10 a 40% 2 a 10% 0.1 a 0.7%


1. Edad >40
2. Anestesia >30 min
3. Por lo menos uno de los factores de riesgo secundarios
que siguen:
a. Inmovilización
b. Obesidad
c. Enfermedad maligna
d. Uso de estrógenos
e. Venas varicosas
f. Parálisis

Riesgo bajo <10% <1% <0.01%


1. Cualquier edad
2. Anestesia <30 min
3. Ningún factor de riesgo secundario

Modificado y reproducido, con autorización, de Merli G. Update: Deep vein thrombosis and pulmonary embolism prophylaxis in orthopedic surgery. Med Clin North Am. 1993;77:397.

CUADRO 9–11  Cambios fisiopatológicos en la embolia pulmonar

Fisiología pulmonar Cambio con tromboembolia pulmonar Mecanismo de cambio observado

Hemodinámica Incremento de la resistencia vascular pulmonar Obstrucción vascular

Vasoconstricción mediada por tromboxano A2 y serotonina

Intercambio de gases PO2 disminuida (hipoxemia) Presión incrementada de unidades pulmonares con relaciones V/Q
• •

bajas

Decremento del gasto cardiaco con reducción de la PO2 venosa mixta

Cortocircuito de derecha a izquierda

Espacio muerto alveolar aumentado Obstrucción vascular


• •
Perfusión aumentada de unidades pulmonares con relaciones V/Q altas

Trabajo de la respiración Decremento de la adaptabilidad pulmonar Pérdida de surfactante, lo que origina edema y hemorragia alveolares

Incremento de la resistencia en las vías respiratorias Broncoconstricción refleja

Control ventilatorio Frecuencia respiratoria aumentada (hiperventilación) Estimulación refleja de receptores de irritante
246  CAPÍTULO 9 Enfermedad pulmonar
• •
un lecho vascular reducido por medio de reclutamiento de capi­ un incremento de unidades pulmonares con proporciones V/Q
lares que tienen perfusión insuficiente (figura 9-13) y dilatación bajas, incluso algunas áreas de cortocircuito verdadero, ambas
vascular por flujo aumentado. Estos mecanismos adaptativos fra­ de las cuales contribuyen a una A-a ΔPO2 aumentada e hipoxe­
casan con la oclusión aumentada de la circulación pulmonar por mia arterial.
émbolos, punto en el cual hay aumento de la resistencia vascular
pulmonar y de la presión arterial pulmonar. En pacientes con en­ C. Hipoxemia
fermedad cardiopulmonar preexistente, no se ha mostrado que La hipoxemia leve a moderada con una PaCO2 baja es el dato
los incrementos de las presiones en la arteria pulmonar se corre­ más frecuente en la tromboembolia pulmonar aguda. La hipoxe­
lacionen con la magnitud de embolización. La explicación proba­ mia leve puede oscurecerse por la tendencia a depender de la
ble es que los mecanismos adaptativos normales son ineficaces en oximetría sola, porque más de la mitad de los pacientes tendrá
pacientes que tienen hipertensión pulmonar preexistente, lo que saturaciones de oxígeno (SaO2) por arriba de 90% (figura 9-26).
los hace susceptibles a inestabilidad importante con cualquier de­ Históricamente se creyó que la A-a ΔPO2 era un indicador más
terioro subsiguiente de la vasculatura pulmonar. sensible de embolia pulmonar porque compensa para la presen­
Los émbolos grandes que no ocluyen por completo los va­ cia de hipocapnia y la cantidad de FiO2 inspirada. No obstante, el
sos, en especial en sujetos con función cardiaca alterada, pueden reciente estudio Prospective Investigation of Pulmonary Embolism
producir un incremento agudo de la resistencia vascular pulmo­ Diagnosis II (PIOPED II) cuestiona esta creencia. En un tercio de
nar. Esto lleva a distensión aguda del ventrículo derecho y una los pacientes con una PE aguda identificada mediante tomogra­
reducción mortal del gasto cardiaco. La complicación más devas­ fía computarizada (CT), se encontró una A-a ΔPO2 de menos de
tadora y temida de la tromboembolia pulmonar aguda es la oclu­ 20, que es normal o casi normal dependiendo de la edad del pa­
sión súbita de la vía de flujo de salida pulmonar (“émbolo de silla ciente (figura 9-26).
de montar”), lo que reduce el gasto cardiaco a cero y suscita co­ Ningún mecanismo explica por completo la hipoxemia en la
lapso cardiovascular y muerte inmediatos. Esas presentaciones PE (embolia pulmonar) aguda. Se han sugerido al menos cinco
notorias ocurren en menos de 5% de los casos, y son en esencia mecanismos:
intratables. Sirven para poner de relieve la importancia de la pro­
1. Pérdida de surfactante, que da lugar a atelectasia y edema
ducción primaria de trombosis venosa.
pulmonar localizado durante las primeras 24 horas después
de obstrucción vascular pulmonar. Cuando estas áreas son
B. Cambios de las relaciones ventilación/perfusión reperfundidas, las unidades pulmonares atelectásicas repre­
• •
La tromboembolia pulmonar reduce o elimina la perfusión dis­ sentan áreas de V/Q baja que causan hipoxemia.
tal al sitio de la oclusión. El efecto inmediato es desproporción 2. Perfusión aumentada de zonas del pulmón poco ventiladas

o no ventiladas. Normalmente la perfusión hacia regiones

V/Q aumentada, con un cambio de la proporción de segmentos

pulmonares hipoventiladas se reduce por medio de vaso­

pulmonares con proporciones V/Q altas (espacio muerto alveo­
lar o ventilación desperdiciada). Un cambio hacia proporciones constricción pulmonar hipóxica. Sin embargo, si la presión

en la arteria pulmonar se incrementa después de trombo­

V/Q altas altera la excreción de dióxido de carbono, con efecto
mínimo sobre la oxigenación. El paciente compensa este incre­ embolia, la perfusión puede aumentar en áreas de vasocons­
• •
mento de la ventilación desperdiciada al aumentar la ventilación tricción, lo cual da lugar a cambios hacia áreas de V/Q baja
por minuto total. Después de varias horas, la hipoperfusión local que causan hipoxemia.
interfiere con la producción de surfactante por células tipo II al­ 3. Cortocircuitos de derecha a izquierda verdaderos. Esos cor­
veolares. El surfactante después se agota, lo que da lugar a edema tocircuitos se han descrito en un pequeño porcentaje de
alveolar, colapso alveolar y áreas de atelectasia que crean unida­ pacientes con hipoxemia en presencia de tromboembolia
des pulmonares con poca ventilación o con ventilación nula. De­ pulmonar aguda. Se ha propuesto que estos cortocircui­
pendiendo de la magnitud de perfusión a estos segmentos, habrá tos se producen por la abertura de un agujero oval, o por

30 30
32% 32%
Número de pacientes

Número de pacientes

25 25
27%
20 20 24%
19% 19%
15 15
16%
14%
10 10
7%
5 5% 5 4%

0 0
49 50–59 60–69 70–79 80 20 21–30 31–40 41–50 51–60 61
PaO2 (mmHg) Diferencia A-a O2 (mmHg)

FIGURA 9–26  Diferencia de PO2 y A-a O2 arterial en 74 pacientes con PE del estudio PIOPED II. La sangre para cuantificar los gases arteriales se extra-
jo mientras los pacientes estuvieron respirando aire ambiente. (Datos de Stein PD et al. Clinical characteristics of patients with acute pulmonary embolism: data from
PIOPED II. Am J Med. 2007; 120:871.)
CAPÍTULO 9 Enfermedad pulmonar  247

cortocircuito de arteria pulmonar a la circulación venosa tensión aguda del ventrículo derecho, como una elevación del
pulmonar, pero se desconoce su ubicación exacta. ventrículo derecho, y acentuación del componente pulmonar
4. PO2 venosa mixta baja. En algunos pacientes, con fun­ del segundo ruido cardiaco.
ción cardiaca alterada preexistente o con émbolos grandes
que causan esfuerzo ventricular derecho agudo, el gasto car­ B. Electrocardiografía
diaco puede disminuir, con una disminución resultante de
El electrocardiograma es anormal en 70% de los pacientes con
la concentración de oxígeno en sangre venosa mixta. Ésta
PE aguda. Empero, las anormalidades más comunes son taqui­
es una causa importante de hipoxemia en pacientes muy
cardia sinusal y cambios inespecíficos del segmento ST y de la
graves.
onda T, cada uno observado en alrededor de 40% de los pa­
5. Área de superficie capilar pulmonar disminuida que da lu­
cientes. El dato clásico de un modelo de distensión aguda del
gar a decremento de la capacidad de difusión pulmonar.
ventrículo derecho en el ECG —una onda S profunda en la de­
rivación I y tanto una onda Q como una onda T invertida en la
D. Broncoconstricción derivación III (S1Q3T3)— se observó en 11% de los pacientes en
La broncoconstricción refleja causa sibilancias y trabajo de la res­ el Urokinase Pulmonary Embolism Trial.
piración aumentado en algunos pacientes.
C. Datos de laboratorio
E. Infarto pulmonar En más de dos terceras partes de los pacientes se observa aumen­
La obstrucción de ramas de pequeño calibre de la arteria pul­ to de la A-a ΔPO2 y la hipoxemia es un dato frecuente pero ines­
monar que actúan como arterias terminales conduce a infarto pecífico. La medición del producto de degradación de la fibrina
pulmonar en alrededor de 10% de los enfermos. Por lo gene­ entrecruzada, dímeros d, puede emplearse para excluir el diag­
ral  muestra vínculo con alguna anormalidad concomitante de nóstico de PE en pacientes que se considera que tienen una pro­
la circulación bronquial, como se observa en pacientes con insu­ babilidad de PE baja antes de la prueba con base en criterios
ficiencia del ventrículo izquierdo y aumento crónico de las pre­ clínicos. Dependiendo de la valoración específica y de la pobla­
siones de la aurícula izquierda. ción de pacientes, el dímero d tiene sensibilidad alta (85 a 99%)
y especificidad moderada a alta (40 a 93%). Casi todos los estu­
dios sugieren que el dímero d no puede usarse para excluir PE en
Manifestaciones clínicas
un paciente con una probabilidad intermedia o alta de PE an­tes
A. Síntomas y signos de la prueba.
La tríada clásica de inicio repentino de disnea, dolor torácico En pacientes con PE por lo general se miden el péptido natri­
pleu­rítico y hemoptisis ocurre en una minoría de los pacientes. urético cerebral (BNP), un indicador de distensión ventricular, y
En un estudio grande reciente de sujetos con PE hubo disnea en las troponinas cardiacas, que indican muerte de miocitos car­
73% de los casos, y el dolor torácico pleurítico estuvo presente diacos. Debido a sensibilidad y especificidad bajas, estos marca­
en 44% de las veces. La disnea quizá se produce por broncocons­ dores no pueden emplearse para diagnosticar PE. Empero, se ha
tricción refleja, así como por incremento de la presión arterial mostrado que un incremento del BNP o de las troponinas en la
pulmonar, pérdida de la adaptabilidad pulmonar y estimulación situación de la PE conocida se correlaciona con la presencia de
de fibras C. En pacientes con émbolos grandes, tal vez haya un sobrecarga del ventrículo derecho, y mayor riesgo de resultados
elemento de distensión aguda del hemicardio derecho como fac­ adversos, entre ellos insuficiencia respiratoria y muerte.
tor que contribuye a la disnea. El dolor torácico pleurítico es mu­
cho más frecuente que el infarto pulmonar; un grupo ha sugerido D. Estudios de imágenes
que el dolor se origina por áreas de hemorragia pulmonar. La
La radiografía de tórax resultó normal en sólo 12% de los pa­
hemoptisis se observa con el infarto pulmonar, pero también pue­
cientes con tromboembolia pulmonar confirmada en el estudio
de producirse por transmisión de presiones arteriales sistémicas
PIOPED. Los datos más frecuentes fueron atelectasia, infiltrados
hacia la microvasculatura por medio de anastomosis bronco­
parenquimatosos, y derrames pleurales. Con todo, la prevalencia
pulmonares, con alteración capilar subsiguiente. Puede reflejar
fue igual en pacientes hospitalizados sin sospecha de tromboem­
edema pulmonar hemorrágico por agotamiento de surfactante o
bolia pulmonar. La oligohemia local (signo de Westermark) o áreas
lesión capilar relacionada con neutrófilos. El síncope puede seña­
de opacidad aumentada basadas en la pleura que representan he­
lar un émbolo masivo.
morragia intraparenquimatosa (giba de Hamp­ton) son raras. La
El signo más convincente no se encuentra en el tórax sino
radiografía del tórax se requiere para excluir otras enfermeda­
en las piernas: una pantorrilla hinchada, hipersensible, caliente
des pulmonares frecuentes, y para permitir la in­terpretación de la
y enrojecida que proporciona evidencia de trombosis venosa pro­
gammagrafía de ventilación/perfusión, pero no establece el diag­
funda. La ausencia de esa evidencia no excluye el diagnóstico, por­
nóstico por sí misma. Paradójicamente, puede ser más útil cuan­
que el examen clínico carece de sensibilidad, y la falta de signos
do resulta normal en presencia de hipoxemia grave aguda.
puede indicar que todo el trombo ha embolizado. Los datos de la
auscultación del tórax son frecuentes pero inespecíficos. La ate­
lectasia puede llevar a crepitación inspiratoria; el infarto puede E. Gammagrafía de ventilación/perfusión
causar un frote de fricción pleural focal, y la liberación de me­ Una gammagrafía de perfusión se obtiene al inyectar albúmina
diadores puede suscitar broncoconstricción y sibilancias. En la microagregada con un tamaño de partículas de 50 a 100 µm en
embolización grande, es posible que se encuentren signos de dis­ el sistema venoso y permitir que las partículas embolicen hacia el
248  CAPÍTULO 9 Enfermedad pulmonar

lecho capilar pulmonar (diámetro de aproximadamente 10 µm). cientes con una probabilidad clínica baja o intermedia de PE es
La sustancia se marca con un isótopo de tecnecio con emisión de menos de 2%. Congruente con el primer estudio PIOPED en
gamma (Tc-99m pertecnetato) que permite obtener imágenes de el que se compararon la gammagrafía de ventilación/perfusión y
la distribución del flujo sanguíneo pulmonar. Una gammagrafía la angiografía pulmonar tradicional cuando se interpreta la angio­
de ventilación se efectúa al hacer que el paciente respire xenón grafía pulmonar con CT, debe tomarse en cuenta la probabilidad
(Xe-133) o un aerosol radiactivo, y llevar a cabo gammagrafías antes de la prueba, basada en puntuaciones de riesgo clínico. Si
secuenciales durante la inhalación y la exhalación. Una gamma­ los resultados son discordantes, debe considerarse la práctica de
• •
grafía de perfusión normal excluye tromboembolia pulmonar más pruebas, como gammagrafía de V/Q o ecografía Doppler
importante en clínica. Un defecto de perfusión segmentario o de la extremidad inferior.
de mayor tamaño en un área normal desde el punto de vista ra­ La angiografía pulmonar es un procedimiento seguro pero
diográfico que muestra ventilación normal es diagnóstico; lo an­ invasivo con datos bien definidos sobre morbilidad y mortali­
terior se designa como un defecto “desproporcionado” y es muy dad. Ocurren complicaciones menores en alrededor de 5% de los
específico (97%) para tromboembolia pulmonar. pacientes. Casi todas son reacciones alérgicas al medio de con­
Inlcuso así, solamente una minoría de las gammagrafías de traste, o lesión renal transitoria, o se relacionan con la inserción
ventilación/perfusión revela datos claramente diagnósticos. El del catéter percutáneo; se reportan perforación y arritmias car­
estudio PIOPED demostró que las gammagrafías de ventila­ diacas, pero son raras. Entre los pacientes del PIOPED I en quie­
ción/perfusión no diagnósticas pueden estratificar el riesgo de nes se practicó angiografía, cinco muertes (0.7%) se relacionaron
tromboembolia pulmonar de un paciente. Además, dentro de las de manera directa con el procedimiento. La angiografía pulmo­
categorías de estudios con probabilidad alta, media y baja, la eva­ nar aún es el estándar de referencia para el diagnóstico de PE,
luación por parte del médico, antes de la prueba de la probabili­ pero su papel comparado con el de la angiografía con CT es un
dad de tromboembolia pulmonar, puede estratificar más a los tema de debate continuo. Hay acuerdo general respecto a que la
pacientes. angiografía está indicada cuando el diagnóstico está en duda
pero hay una probabilidad “pretest” clínica alta de PE, o cuando
F. Tomografía computarizada el diagnóstico de PE debe establecerse con certeza, como cuan­
y angiografía pulmonar do  la anticoagulación está contraindicada o se contempla la
La tomografía computarizada con administración de medio de con­ colocación de un filtro en la vena cava inferior. Un defecto de lle­
traste por vía intravenosa (angiografía pulmonar con CT) ha su­ nado intraluminal en más de una proyección establece un diag­
• •
plantado ampliamente a la gammagrafía de V/Q como la mejor nóstico definitivo. Los datos secundarios altamente sugestivos de
prueba inicial para diagnosticar PE. La fuerza diagnóstica de esta PE son punto de corte arterial repentino, asimetría del flujo san­
modalidad de obtención de imágenes yace en su valor predictivo guíneo —en especial oligohemia segmentaria— o una fase arterial
negativo alto y su capacidad para identificar otras enfermedades prolongada con llenado lento.
que producen disnea y dolor torácico (p. ej., disección aórtica y Se efectuó angiografía pulmonar en 755 pacientes en el estu­
neumonía). Múltiples estudios mostraron sensibilidad y especi­ dio PIOPED I. Se estableció un diagnóstico definitivo en 97%; en
ficidad altas de esta técnica de obtención de imágenes, aunque 3% los estudios no fueron diagnósticos. En cuatro pacientes
las utilidades diagnósticas dependen en parte de la selección de (0.8%) con resultados negativos en angiografías la autopsia reve­
pacientes, y de la experiencia del radiólogo que interpreta las imá­ ló después tromboembolia pulmonar. La angiografía seriada ha
genes. En el estudio PIOPED II se evaluó la angiografía con CT demostrado resolución mínima de trombo antes del día siete des­
para el diagnóstico de PE y se hallaron sensibilidad de 83% y es­ pués de la presentación. De este modo, los resultados negativos
pecificidad de 96% (cuadro 9-12). Varios estudios indican que el en la angiografía en el transcurso de siete días de la presentación
riesgo de PE después de una CT con resultados negativos en pa­ excluyen el diagnóstico.

CUADRO 9–12  Valores predictivos positivo y negativo de la angiografía con CT


para embolia pulmonar (PE) aguda

Probabilidad clínica1 (%)

Alta Intermedia Baja

Resultados de la CT PE +/núm. de pacientes % PE +/núm. de pacientes % PE +/núm. de pacientes %

CT+ (probabilidad de PE presente) 22/23 96 93/101 92 22/38 58

CT- (probabilidad de PE ausente) 9/15 60 121/136 89 158/164 96

1
Probabilidad clínica basada en la puntuación de Wells: menos de 2.0, probabilidad baja; 2.0 a 6.0, probabilidad moderada; más de 6.0, probabilidad alta.
Datos tomados de Multidetector computed tomography for acute pulmonary embolism. N Engl J Med. 2006;354(12):2317–2327.
CAPÍTULO 9 Enfermedad pulmonar  249

G. Resolución
PUNTO DE CONTROL
La variabilidad entre pacientes es tan grande que es difícil hacer
generalizaciones. El mayor número de pacientes vigilado de ma­ 39. ¿Dónde se origina 95% de las tromboembolias pulmo­
nera seriada con evaluaciones cuantitativas estuvo en el Urokinase nares?
Pulmonary Embolism Trial. En ese estudio, gammagrafías de per­ 40. ¿Cuáles son los factores de riesgo para tromboémbolos
fusión seriadas mostraron resolución de 35 a 56% de los defectos de pulmonares?
perfusión a los 9 a 14 días. Estudios más recientes, algunos de los 41. ¿Qué cambios hemodinámicos se desencadenan por las
cuales comprendieron angiografía cuantitativa, han mostrado tromboembolias pulmonares importantes?
una tendencia a respaldar la evolución temporal de estos datos. 42. ¿Qué cambios en las relaciones ventilación/perfusión se
En algunos pacientes los émbolos pulmonares no se resuelven desencadenan por las tromboembolias pulmonares im-
por completo, sino que se organizan y quedan incorporados en portantes?
la pared arterial pulmonar como una masa fibrosa epitelizada, que 43. Sugiera algunas explicaciones posibles para la hipoxemia
ocasiona la tromboembolia pulmonar cró­nica. Esta entidad se pre­ en la tromboembolia pulmonar.
senta con estenosis de las arterias pulmonares centrales con hi­ 44. ¿Cuáles son las manifestaciones clínicas de la tromboem-
pertensión pulmonar e insuficiencia del ventrículo derecho (cor bolia pulmonar?
pulmonale) relacionadas. El tratamiento es quirúrgico.

ESTUDIOS DE CASO
Yeong Kwok, MD

(Véanse las respuestas en el cap. 25, pág. 715.)

CASO 43

Una mujer de 25 años de edad, que estaba bien, acude al con- Preguntas
sultorio por falta de aliento y sensación de estrechez en el tó-
A. ¿Cuáles son las tres categorías de agentes que pueden desen-
rax, episódicas. Los síntomas han aparecido y desaparecido
cadenar asma? ¿Cuáles son algunos desencadenantes posibles
durante dos años, pero la paciente declara que en los últi-
en esta paciente?
mos días empeoraron; suceden 2 o 3 veces al mes y notó que
B. Describa los eventos tempranos de los cuales depende la pato-
los síntomas se intensifican durante los meses de primavera.
genia del asma. ¿De qué modo esto se traduce en inflamación
No tiene síntomas inducidos por ejercicio o nocturnos. Los an-
crónica, e hiperreactividad, de las vías respiratorias?
tecedentes familiares notables son asma en el padre. La pa-
C. ¿Qué mecanismos patogénicos dan lugar a los síntomas de si-
ciente es soltera y trabaja como secretaria en una empresa de
bilancias, falta de aliento y sensación de estrechez en el tórax
alta tecnología. Vive con una compañera de cuarto, que se
de esta paciente?
mudó con ella dos meses antes. La compañera de cuarto tie-
D. ¿Qué resultados podrían esperarse en las pruebas de función
ne  un gato. La paciente fuma de manera ocasional cuando
pulmonar? ¿Por qué?
sale  con amigos, es bebedora social y no tiene antecedentes
de consumo de drogas. En el examen destacan sibilancias le-
ves al final de la espiración. El interrogatorio y el examen físico
son congruentes con un diagnóstico de asma; se solicitan prue­
bas de función pulmonar para confirmarlo.
250  CAPÍTULO 9 Enfermedad pulmonar

CASO 44

Un varón de 67 años de edad acude al consultorio de usted con Preguntas


tos, producción de esputo y disnea en empeoramiento. Ha sido
A. ¿Cuáles son los dos síndromes clínicos principales que se clasi-
fumador de cigarrillos durante los 50 años previos; fuma alre-
fican como enfermedad pulmonar obstructiva crónica? ¿En qué
dedor de una cajetilla al día. Tiene tos matutina crónica produc­
difieren?
tiva de un poco de esputo amarillo, pero en general se siente
B. ¿Cuál de esos dos síndromes predomina en este paciente? ¿Cuá­
bien durante el día. Estuvo en su estado de salud habitual hasta
les son los datos epidemiológicos y los factores predisponen-
dos semanas antes, cuando presentó un resfriado; desde en-
tes para esta enfermedad?
tonces, ha tenido una tos seca y constante, además de una pro-
C. ¿Qué podrían mostrar las pruebas de función pulmonar en este
ducción cada vez mayor de esputo espeso. También ha tenido
paciente?
dificultad para caminar más de una cuadra sin detenerse de­
D. ¿En qué difieren los gases en sangre arterial en la bronquitis
bido a disnea. El examen físico revela espiración prolonga-
crónica y en el enfisema?
da, sibilancias audibles, y ronquidos difusos en ambos campos
pulmonares completos. La radiografía de tórax muestra hiper­
inflación de ambos pulmones, con un diafragma aplanado.

CASO 45

Un varón de 68 años de edad acude a la clínica quejándose de Preguntas


falta de aliento. Declara que esta última ha sido progresiva-
A. ¿Cuáles son los eventos celulares involucrados en la lesión y la
mente más intensa en el transcurso de los últimos dos meses,
fibrosis pulmonares en la fibrosis pulmonar idiopática?
de manera que ahora la presenta al caminar una cuadra. Más
B. ¿Qué mecanismos fisiopatológicos dan por resultado los sín­
aún, ha tenido tos no productiva. Niega fiebre, escalofríos, su-
tomas de disnea y tos de este paciente? ¿Qué mecanismos pató­
dores nocturnos, dolor torácico, ortopnea y disnea paroxística
genos originan los signos de taquipnea, crepitación inspiratoria
nocturna; no ha notado edema en las extremidades inferiores.
y dedos en palillo de tambor?
El interrogatorio médico no revela datos notorios. En el exa-
C. ¿Qué se podría esperar que mostrara la radiografía de tórax?
men físico destacan frecuencia respiratoria de 19/min, y crepi-
¿Las pruebas de función pulmonar?
tación inspiratoria seca y fina que se ausculta en ambos campos
pulmonares. Hay dedos en palillo de tambor. Recibe un diag-
nóstico de fibrosis pulmonar idiopática.
CAPÍTULO 9 Enfermedad pulmonar  251

CASO 46

Un varón de 72 años de edad acude a la sala de urgencias por Preguntas


falta de aliento grave. Tiene hipertensión mal controlada de
A. ¿Cuáles son los cuatro factores que explican la mayor parte de
larga evolución, y antecedente de arteriopatía coronaria y dos
los casos de edema pulmonar? ¿Cuáles son las causas proba-
infartos de miocardio. Alrededor de una semana antes de la ad-
bles del edema pulmonar de este paciente?
misión tuvo un episodio de dolor torácico retroesternal con
B. ¿De qué manera la función cardiaca inadecuada causa edema
una duración aproximada de 30 minutos. Desde entonces ha
pulmonar?
notado falta de aliento progresiva hasta el grado en que ahora
tiene disnea con esfuerzos mínimos, como caminar de un lado
a otro del cuarto. Percibe falta de aliento de nuevo inicio mien-
tras está acostado y sólo está cómodo cuando se apoya so-
bre tres almohadas. A veces se despierta por la falta de aliento
aguda. En el examen el paciente está afebril, con presión arte-
rial de 160/100 mmHg, frecuencia cardiaca de 108/min, frecuen­
cia respiratoria de 22/min, y saturación de oxígeno de 88% en
aire ambiente. El paciente está pálido, frío y diaforético. La pre-
sión venosa yugular es de 10 cmH2O. La auscultación del tórax
revela estertores en ambos pulmones hasta los campos pulmo-
nares medios. En el examen cardiaco se encuentra taquicardia,
con S3 y S4 audibles. No se auscultaron soplos o frotes ni hay
edema en las extremidades. El ECG muestra hipertrofia del
ventrículo izquierdo y ondas Q en las derivaciones anteriores y
laterales, congruentes con el antecedente de hipertensión e
infarto de miocardio. La radiografía de tórax revela infiltrados
bilaterales congruentes con edema pulmonar. Se admite al pa-
ciente a la UCI con un diagnóstico de insuficiencia cardiaca con­
gestiva y posible infarto de miocardio.

CASO 47

Un varón de 57 años de edad es objeto de reemplazo total de Preguntas


rodilla por enfermedad articular degenerativa grave. Cuatro
A. ¿Dónde surgió la embolia pulmonar?
días luego de la intervención quirúrgica presenta inicio agu-
B. ¿Cuáles son los factores de riesgo para tromboembolia de este
do de falta de aliento y dolor torácico pleurítico del lado de­
paciente?
recho. Ahora tiene dificultad respiratoria moderada, con una
C. ¿Cuáles son los cambios hemodinámicos que se observan en la
frecuencia respiratoria de 28/min, frecuencia cardiaca de 120
embolia pulmonar aguda?
latidos por minuto (bpm, beats per minute), y presión arterial
D. ¿Qué cambios podrían esperarse en las relaciones ventilación/
de 110/70 mmHg. La saturación de oxígeno es de 90% en aire
perfusión? ¿Cuál podría esperar que fuera la A-a ΔPO2 de este
ambiente. El examen pulmonar es normal. El examen cardiaco
paciente?
revela taquicardia, pero por lo demás no se encuentran datos
notorios. La extremidad inferior derecha posquirúrgica cica­
triza bien, y muestra edema con signo de godete 2+, hiper­
sensibilidad de la pantorrilla, eritema e incremento local de la
temperatura. La pierna izquierda es normal. Tiene signo de Ho-
man a la derecha. Se sospecha embolia pulmonar aguda.
252  CAPÍTULO 9 Enfermedad pulmonar

CASO 48

Un varón de 46 años de edad se presenta al hospital con tos, Preguntas


fiebre alta y falta de aliento, en empeoramiento, de cinco días
A. ¿Cuáles son los principales factores fisiopatológicos en el ARDS
de evolución. En el examen físico se nota taquipnea (frecuencia
que suscitan acumulación de líquido extravascular en los pul-
respiratoria de 30/min), hipoxia con saturación baja de oxígeno
mones?
(89%) y fiebre (39°C). La radiografía de tórax revela infiltrados
B. ¿Cuáles son las causas frecuentes de ARDS?
en ambos lóbulos inferiores. Una biometría hemática comple-
C. ¿Qué explica la hipoxia grave que suele encontrarse en el ARDS
ta revela un recuento leucocítico alto. Se admite al paciente al
a pesar del uso de ventilación mecánica y concentraciones al-
hospital. A pesar de tratamiento con oxígeno y antibióticos, la
tas de oxígeno?
hipoxia se acentúa y se necesitan intubación endotraqueal y
ventilación mecánica. En los hemocultivos se aísla Streptoco­
ccus pneumoniae. Pese a ventilación mecánica empleando con-
centraciones altas de oxígeno, las cifras de oxígeno en sangre
arterial permanecen bajas. La radiografía de tórax muestra pro-
gresión de infiltrados en la totalidad de ambos campos pulmo-
nares. Se diagnostica síndrome de dificultad respiratoria aguda
(ARDS).

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