Pautas

(Dn. 7, 9-10.13-14)

La primera lectura me hacía imaginarme una escena de película de ciencia ficción, de esas
de superhéroes o del espacio donde por lo regular cuando se representa al mero mero de la
película sale una escena súper deslumbrante, tipo el señor de los anillos… un anciano con
vestido blanco como la nieve y su cabello como lana limpia, el trono y sus ruedas eran
llamas de fuego, ¡qué tan poderoso y grande es este anciano que el fuego no le hace nada!,
sigue diciendo que miles y miles le servían, un ejército, una multitud reunida mirándolo
esperando a que hable y luego de una nube baja alguien parecido a un hijo de hombre y el
anciano le da todo el poder, la gloria y el reino… así como para quedarse sorprendido, esta
visión del profeta Daniel, me dejaba alucinado, y un poco confundido de que iba el dialogo
el día de hoy. Un poco apocalíptico podríamos pensar, pero leyendo el evangelio de hoy me
queda ya un poco más claro.

(Jn. 1, 47-51)

Vemos a Jesús conociendo a Natanael, y apenas llega le dice …aquí viene un verdadero
israelita, en quien no hay engaño…. Es como al día de hoy nos dijera Jesús aquí viene un
verdadero cristiano, en quien no hay engaño, alguien que camina en la verdad, que en
verdad es libre porque escucha la palabra de Dios y hace su voluntad, ¿hoy te podría llamar
así Jesús? No solo por tu nombre o apodo, sino describiéndote por tus mejores cualidades,
¿pero cuáles son? Ahí viene Vicente él que es …sincero, el que no se enoja tan fácil, el que
sabe perdonar, el que siempre confía, el que nada lo turba … me gustaría que así fuera y ¿a
ti? El día de hoy veo la invitación a evaluarnos como estoy viviendo el seguimiento de
Cristo, que tan buen cristiano estoy siendo, que tanto le hago caso y lucho por seguir su
voluntad?. Por eso la canción del inicio que es Salmo 139, el del día del hoy es el 138, pero
va muy de la mano. Jesús y el Padre nos sondean y nos conocen, adonde quiera que
vayamos conocen nuestras acciones, lo que pensamos, todas nuestras sendas y andanzas les
son familiares. ¿A quien queremos engañar? Ellos nos conocen mejor que nosotros mismos,
así que es bueno que constantemente podamos estar evaluando nuestro actuar, nuestra
forma de pensar y de orar, y no para reprocharnos y hacernos menos, sino para saber dónde
debemos de tener cuidado e incluso donde pedir ayuda o apoyo de alguien más.

Siguiendo la lectura, Natanael le contesta seguro de que Jesús dice la verdad, …¿Cómo es
que me conoces?.. , actualmente muchos diríamos –Nombre como crees- o -¿Quién yo?-
Como que tendemos a dudar o a sernos menos ante algún cumplido, pero muchas veces no
es por humildad sino por pena, porque sabemos que hay algo que no hemos hecho bien, y
muy probablemente la gente no lo sabe o no lo ve, en el mejor de los casos pueden estar en
lo cierto pero entonces el problema es que también nos sentimos menos, no nos valoramos,
una segunda invitación de Jesús hoy, aprende a valorarte, si continuamente te estas
evaluando puedes saber mejor de que pie cojeas pero también cuáles son tus fortalezas, y si
alguien las reconoce pues dar las gracias, pero sobre todo decir gracias a que lo has logrado.
Aprender a valorarnos porque la trinidad habita en nuestro interior y eso ya nos hace
valiosos.

Una tercera invitación, a dar gracias por todo lo recibido y porque nos ama y nos llama de
forma personal, este Dios tan grande y poderoso de la primer lectura, nos trata de forma
personal y en cualquier lugar está con nosotros, en cualquier situación y nos conoce mejor
que nadie. Recordemos esos momentos difíciles en los que hemos sentido que todo se
perdió, que todo nos sale mal, que ya no sabemos que vamos a hacer, y él ha estado ahí
dándonos fuerza, esperanza, fe en que todo tiene un propósito o una parte buena que
rescatar. Cuando murió mi Madre, cuando nos enteramos de las pérdidas de los 3 bebes a
los 2 meses, cuando hay malas rachas de trabajo o de economía o de salud. Ahí ha estado y
por eso nos conoce como reaccionamos en esas circunstancias, pero también en los
momentos felices, en el nacimiento de mis hijas, cuando me case, cuando termine mis
estudios, cuando hice mi primer convivencia, cuando aprendía a orar y en muchas
oraciones posteriores, ahí ha estado acompañándome y hablandome, y cuando hemos
dudado, cuando dejamos de orar porque no tenemos ganas o se nos ha bajado la fe, cuando
no entendemos porque pasan las cosas, que al parecer no entendimos bien por donde era.
Jesús siempre con nosotros, pero por eso nos puede decir que nos conoce.

Ahora espero que también podamos decir como Natanael …¡tú eres el hijo de Dios!... Que
nosotros lo reconozcamos y sigamos escuchándolo, no quedarnos solo con lo que hasta
ahora hemos podido experimentar, hay mucho más que nos espera, el amor de Dios es tan
grande que nos lo va dando poco a poco, … Les aseguro que ustedes verán el cielo abierto
y a los ángeles de Dios subir y bajar sobre el Hijo del Hombre… Jesús nos confirma que
aquella visión de Daniel es cierta, se cumple en él. Él tiene el poder sobre todas las cosas,
esa película que parece de ciencia ficción es cierta. Adonde quiera que vayamos al subir a
la inmensidad, o al entrar a lo pequeño, si volara y fuera al otro lado del mar ahí está
dándonos la mano. Él tiene el poder sobre todo. Cuarta invitación de hoy, Deja de pelear
por querer ser tu quien controla tu futuro, o quien propone por dónde ir, más bien esfuérzate
por entenderme mejor, por realizar lo que te propongo y veras como las cosas salen mejor.
Ser humildes, darle gracias por todo, por su llamado, por su amor y por su verdad (sal 138,
2) por su palabra que nos da fuerza y por su misericordia, que aun conociéndonos como
somos nos alienta a seguir adelante nos anima a seguir como apóstoles.

Hoy es santo o día de San Miguel, San Gabriel, San Rafael arcángeles, solo mencionaré que
por eso también las lecturas de hoy, porque nos hablan de que Jesús quedaba al mando de
los ángeles, por ser el Hijo de Dios, pero con quien podemos hablar todos los días,
directamente y aun así luego vamos con temor por la vida ¿Porque? Pidámosle a María que
nos ayude a creer más en que Jesús lo puede todo, a poder hacer lo que él nos dice para que
nuestra vida se convierta en vino del bueno para muchos.