Está en la página 1de 2

1. V. LOSSKY, Teología mística de la iglesia de oriente, Herder, Barcelona, 1982.

Leer la Introducción, pp. 7-18 y la Conclusión, pp. 175-185.

El libro es una obra fundamental de la teología ortodoxa rusa. Se pide:


a) Consultar algunos datos biográficos esenciales de Vladimir Lossky, uno de
los más importantes teólogos ortodoxos rusos del siglo XX, para ubicar el
momento del texto en estudio dentro del camino teológico de su autor.
b) Destacar en el texto dos características de la teología según esta tradición.
c) Comparar la dimensión apofática de la teología según Lossky con la
presentación de La Teología Hoy, señalando una semejanza y una
diferencia.

Desarrollo

a) Vladimir Lossky es mejor recordado por su libro La Teología Mística de


la Iglesia Oriental, la primera síntesis patrística de la teología
del dogma y es ampliamente reconocido dentro de la Iglesia Ortodoxa.
Hizo del apofatismo o teología negativa una característica de su
teología, en sintonía con los planteamientos del oriente cristiano.

b) Dos características que de la teología Ortodoxa que destacamos son:


que la tradición oriental no ha distinguido entre mística y teología; pues
afirma que la mística cristiana sin teología no existe, pero sobre todo no
hay teología sin mística; ya que la mística es considerada como la
perfección de la teología.
Otra característica es que la ortodoxia no admite un jefe visible de la
Iglesia, la catolicidad de la Iglesia de una sede se realiza mas bien en la
riqueza y multiplicidad de las tradiciones locales, que permiten un
testimonio unánime de la una verdad. Esto en el caso de un patriarcado
que goce de cierta primacía de honor como es el de Constantinopla.

c) Una diferencia que podemos encontrar es que la tradición occidental


esta mas liga, vinculada al misterio desde el conocimiento, la
investigación, la especulación de los misterios divinos, por lo tanto, no
está muy enraizada en la gran tradición bíblica. Una consecuencia de
esto es la separación de lo místico y teológico.
Una semejanza importante que se ha podido observar es que las dos
tradiciones apuntan como fin último la unión con Dios; que el
conocimiento solo debe servir como medio para llegar a ese fin que
excede a todo concepto. Por lo tanto, se rinden ante el Misterio de Dios
y se dejan empapar por la revelación de Dios que nos muestra lo
inexplicable e incomprensible para la razón como es la encarnación,
muerte y resurrección de Jesucristo.

También podría gustarte