Documentos de Académico
Documentos de Profesional
Documentos de Cultura
ex¡~tendas
AÑO.l
Dirección Postal: CASILLA DE CORREO 736
====================~,
BUENOS AIRES, JULIO DE 1926
Buenos Aires
caela vez más buena, cada vez má.':l bella, HU noche de 'amor,
E! gobierno de 1810, s#g\in ;Mitre organi~ó in- DE lNMUNIDADES;~' ," ". cada vez más sana. y al hombro la azada se van a los' campos
medIatamente expediciones~tares "para llevar Ya hemos visto.c:ómo se venti16 el' asunto D~., diciendo la lmena, la eterna canción:
los mandatos del pneblo 'eri~:lai nta de sus ba-
vidóvich en los. tribunalesc1e La. Plata~> .fSe¡ (jond~-+'! MI NUEVO POBMA "Mi vida. es amor;
falta nó a un p:resuntoculpaple y se sobl1e~ei6::!res~; ¡1 por ella, por todos,
to de una buena cantidad de delhiC:ÜériteS:R~:J I
para dales. ......, '; . ' '.. . . / ...•......... <, .• <:()\~!;)i'~ mi vida es amor ...
La .ver~ª,~; es. qM,· a pesar ele esa. cOlúlena:;:rí~J~'J·y Hoy diré pI poema No eaben ya eludas
historia, deC>Ollvince¡ht\3, Iaponcia. ha frallasado:rot~lIi.t· ilJ .<'Lj,le nadie haya dicho: en mi corazón,
Y verí- te, Si)·s~ ;miSiÓll;(lS. vigilar, '!'lo'~a:bevigi~ai, } : ~Q~ . que estoy tan triste i Hermanos, hermanos:
~io. de r!lS tlese¡x?1'l'l!' yeas~Jgar,n?, de!)!Cub:í7irp ~'lqU(tvOY como llutl(~a dentro de' mí mismo, ]a vida es amor!
'I;:.!ve1'." eS~l'Iierzn. en castigar,... ,: , . ..
'''llel'lll;Ji;, <"..
~,e..!:~
ués de" las.,l··"""i··~..
,jJn~etito, sL
':,··e L o A o o f, 1 T
!ii;ne,iJC, ren i
t ,.
CLARIDAD
DE LA LOOICA FORMAL"
Js;Y,kriegos i siempre lo;.; griegos! - fum'on tale8 (~rall la,; razone" que yo tenía para mover 1 Visión
Para CLAEIDAP,
I
·~ti~s también en el lmltodBI sofisma. Sen- gl1erm ::t María Teresa, Heina \lp Bohemia y de
ll:i':;,voluptuosidad de la especulución y se colU- Hungría. Cae sohre la ciudad
':lHnl»en llegar lt cOllelusioneil opue¡;tas partien- '1 La ambición, el interés y el deseo de que se la ceniza minúf¡cula y tenue de la lluvia.
l~jidéniicos principios. hablase de mí, pudieron mús y quec16 decidida la
j Qué grato es en un día como éste acaric-iar
,nea.he .1)(),lido nveriguar hasta qué punto gunrrn."
elpopulat:1m griego en las eonstruceiones de Como fW ve, es difÍ(,il que tal causa de guerra un inocente sueño de ventura!
f~H'lnal; pero me parece indudable que, fue- sn reproduzca eH las sociedades modernas donde
l~.!wademia, los hombres de aeeión huhrún la vida dI'! todos 1m dejado de estar en manos de' Mientras cae la lluvia yo acaricio mi sueño:
ido'el consejo de un empirista analfabeto una snla voluntad ellfermiza, sin que esto quiera un día las mujeres serían todas hermanas,
un· sofista erudito. ;;ignifi(mr confianza ilimitada en las instituciones la ramera, la virgen,
lnpwoxlmidad con la evidencÍ!t del fraeaso dernoerátieas. la aristócrata altiva y la humilde mucama.
,n, Ji> ,'¡ue determina el e8cepticismo del pue- Sólo puede al'gunwntarse en su favor mediante
;ilL:se explica, por lo menos, entre el popu- eOI1Strueeiones de lógica formal, easi siempre in- Irían. por las calles llevando como emblema
.w~no del renacimiento, el desprestigio por fieles a la realidad. una sonris,a alegre y una mirada franca,
:·n:idad moral de una serie de papados ricos No existen tales imtintos feroces. Precisamen- ; y i,tsí, .sencillamente,
,:lnd~lol!, fé(~undoF.! en intrigas y -crímenes. te el hombre debe ~u talento a las prúcticas de .. 'se ofrecerían a todos los hombres que pasaran.
',ño:r B()'rgeret, 'en P~l'ís, (i (~aramb!l.!) sahio fr.nsiva~, hahiendo sido, probablemente, en Ins ca-
verna~, autes tranquilo. y cobarde que agre~ivoy Ellos se tornarían
.,'í!\nO. es 0apaz de eneontrar U:lfl ensa para
?'JulIa. ~COnfl(\f!a que su mecam"mo pfmsan- sang'l'iento. Si el hombre huhiera sido feroz en tan buenos como el sol, como el pan, como el ¡agua,
fUllCíri:nru dm.éxito cuando dehe harl1jar 1'ea- la ·Ilrehistoria, nuestra inteligencia de hoy .fúe- la dicha cantaría doquier, los oprimidos
iíS prÍl,·tl¡,P;), Cmno que no hay COAn ~áA sim- Ya apenas, garras y ,colmillos;' que los homhres
súa vizarían las matiQ,.'l, el gesto y las palabras.
e~)lllo:'!a que lit ospoelllación. pura, lejos de somos lmme;; fu;;tl'ado~ por milenaria iúcapaeidad
tolesto inl'oIlvenicnte de la confrontación con hélimt, gente de paz, filogenéticamente. Y noexis- J?ajo los cielos límpidos,banderas de alegría
;!eMs. ten tales in;;;tinto5 feroces porque no existé la desplegarían sus paños como .alas
• ,jiel'tw que Le Ve1'l'ilJl' señaló a los astróno- 1:lmvieei6n individual de la guerra; si se nos pre~'
cual si quisíerancobijar a todas ' )
.•,í~naeióll d!! 1iff!ptU110 desde su mesa de ma-
'}.. ~~y ,o/en .. ,Cuerdamente, hay que reco-
la ~p;ell1¡¡:laewll --' sobre todo en matemú·
guntnl'll. UIlO a llIlO si la de3ealllos, no" faltaría
t;irmpo pnm decir quc no.
La musa 1ll1mana. fiel a la eOllciencia indivi~
,[] las mujeresql1e un día supieron ser humanas.
(Sigue cayendo sobre la ciudad
la, más 'til'me :¡ sólida de todas las ciencias dual, no va espontáneamente a la guerra; nece-
-!-Il fr.e(luel1~f 1 en el éxitopi·áctico. Pero oeu~
;le Le Ve1'1'i.,1.' caleu16 In situaeiórl exaeta de
Hita una serie gradual de inyecciones de ideas
- 'habidas exprofeHo mediante pl'oeedimielltos de
lógica formnl - nI caho de Ins cuales. v ya eon
[] la ceniza minúscula y tenue de la lluvia.
i Qué grato es en un día como éste acariciar
un inocente sueño de ventura!)
plalleta~l ¡;YH presPllcia real no ha podido
"mar hasta iI,~y l.a a~tronomía. Esto sngiere do;;
" ..,: CJl1Q le "las 'lmdo que le puede oeurrir a uu
,I)e~pnf.."· ,le UTl gran acierto ei; morirse, y
la certeza. de que la guerra es lleeesarfa,' queda
en couclieiones de aproveehar el eAtímulofinal:
t1'l':-; (:oehe" de alquiler eOl1 nueve banderni'i ;n11··
I CLARA BETEN.
l!~J'dlIm,;n ti!, wllvielle deseol1fial' de las e,;;- tidas y doce franceseti; veintidós vagabundos -
,>7lOne" pura;;, aun en matemúti(~aR o en fí- eon spudas antorchas - n do;; pe~o." cada nnl~'
lll~'; .f~l bo.tín de los asaltos; gritos lastimeros por
o esta d<~ii(!(mfianza debe extremllr;¡e cuando Belglea vIOlada; asaltos y robos (de desagravio)
a los restaurantes alemanes; pie(h'ns, lmevosr
"peculaCÍóll se produel! en el terreno de las
"ln~rra-hurra-Imrra" y otros oll)eto8 de gran cfi,,:
'~·sociale,s, bnscadoras infatigables de rela-
·;ilurableR, de fenómenos constantes de la
.:ooleetiva conque construir rieles al porvenir.
eaem· para el arrastre total de acéfalos.
En cambio la masa humana gusta y ; disfruta
,)!' se fieron de mi •••
.¡,SeJ1'á siempre el hombre un animal guerrero '! e,¡pontáneamente de la paz; no necesita estímulo .. Para CLARIDAD.
alguno y pl'Olongaría su práctica· indefinic1am~m..'
Jii¡~ historia, rica alact,na en que cada cual en- te si los gobiernoR la dejaran sosegada. y se rieron de mí, porc!ua una tarde
.•~~. lo .que le place, es un auxiliar dequ!l con- Los hombres que piensan, en cambio, pueden: a un rústico compré
'! }Se1-'Vll'se con precauciones. En ella apar13ce llegar mediante especulaciones lógicas a concIa- tres palomas to-rcazas por un peso,
.:,oIll):bre .con un pTOntuario negro o luminoso . "iones (:ontl'arias a la paz y aseguranlOs quela: .. "
':!gf:lll se: qruéra. A juzgar por sus crímenes histó~ y a volar las eché. . '
guerra es indispensable necesaria, fatal por l'!l- y se rieron de mí, porque una noche
'~Og merllr.e endenR perpetua, y gloria perpetua zones históricas, sociales, económicas, ete., y que
'1' I'e'~lw:dan s.us 1ll0l1lunento, sus libros, SUil r.ua-
ella es obra de nuestra propin resolueióll,"pl'cci- ., eruda, de un Junio cruel,
'" sus mvenClOnes y descubrimientos. ~amente cuando lo que todos queremo$.' con .• di mi rebüzo a un pobre vagabundo
~p~~1iera ,afir~arse (¡ue lns cansas de las gue- mayor urgencia es vivir tranquilos, rnJ1Y tT'fmrJll11, y me quedé sin él!
·:pa,;ac1as perSIsten y persistirán indefinida- los,. todo 10 más tranquilos posible:1.• ¡Torna, Séñor... (es. tiempo todavía)
hay inconveniente en vatieínul' guerra
no. hay eausas ele guerra que no 1'01-
. La divulgación de las ideas de guerra es
cillnrnellte criminal; .cuando el resultado
piedra mi corazón!'
i Que pueda andar en medio de la gente
I
1
,,:uuu.eucse; las que eseribió Federico II meditadónreduuda en perjuicio de la
.
eJempl ' Voltaire, en los'
o, segun sin lltúnar la atención!
dad el pensador honesto deberá.:tl'abajar .
muerte en la :revisaciónde las. premisas. ÁNTONIO A. GIL. ....
consideraciones unastropa.;¡ ser verdad aquello que reCí}¡azan
i1'11' ..... vp·niT' en cual'quiel' momento, hnTY'o'h'~"o bajo las inspitacionesde la
la viveza de mi carácter; "
.)
CLARIDAD
CLARIDAD
,~.:; La verdadera mujer española cuando mira que- han. U na desproporción en arte al ser concor- diendo ni ~abiel1do por qué. ' grotesco lo que en otJ:o tiempo hemos considerado
ma y cURmlo abraza, aunque sea por ese minuto, dancia estética es justo y elocuente proporciona- admirable?
Es verc1aderamente divm'tido ver hoy la manera
se e~trega con toda su alma. Además, la mujer miento. . Hace algunos años gustaban las mujeres con
de))e?fial' de los. mismos hombres que lll"ll día tan
espunoIa no es la desenvuelta y gallarda niña de Era tan gr31ule la coneepción idHológica que las cac1;rfis y lo~ pechos gordos; en cOl1secüencia,
?nerg:¡~amente Ihfamaron u Wagner cuanc10 'se
i
veinte abriles. Pinam, seguramente no quiso ha- crl'Yeroll pequeño el cuerpo hmnallo para con- mtento ha{;cr oonoeer su música en Francia, 'lo;; las mUJeres :=;e oprimían easi hasta el sofocamien-
.1 eer la psicología de la española, sino agradar al tenerla . que, despHé~ le juzgaron uno de los más grandes to ~ quizá el sufrimiento de graves enfermedades,
público con niñas apuestas y agradables, a todo Zubiuurr(! injustamente 1108 encaja muñequitos gemos mmacales de l~ humanidad, y después, de pOl11enl1o en . In::; caderas y los senos grandes ma-
p;aladar. Yo, en verdad, no me explieo cómo crí- en segund.? plano que parece~ soldaditos de ,plo- nuevo llegaron su gemo, porque cometió el crimen sas, de ~'elleno, haRta llegaron a adoptar In irri-
ticos avezados se dejen sorprender por valores que mo, eseapando;:;ü a sus respecttvas casa;,;, y as! las de Rel' ele origen al!~mán. SOria 'Cl'111. Hoy están obligac1ns a de fonuarse al
en realidad no existen, dándose lugares que no Tigl1ra.s {~elltrales y el paisajH - amanerado e revés y hacerse' plana;; y ter;:;ns. ¿ Dónde está 111
Se constató anúloga comedia eon el músiro Bi- YGrdnd ']
•les: corresponden. irreal - nos hacen efectos de aeartonamiento e. zet on oeasión del sensacional fraenso de "C:tr·
Debido n este :fenómeno, en Europa, creyeron insulsez. men", euyo mérito artÍRtico sin igual hoy procla- fhora nh:o n~unto:. ~ilt ·dudn npi\l{¡i~ que los
.p·or mncho tiempo que la República Argentina Creemos que siendo sinceros en nuestro juicio, man todos. • mas bellos tIpO;; tle JI1U;jer son los nuestros de Eu-
era Un. alrnMén de gauchos al por mayor, y que sin creer haber dicho todo, lIaeemos un gran bien ro pa. ¿, QUt~ prt1()ha vu(';;tra verdad e] i, Qué os pl'l1e-
~.y .el desg'l'aeiado pintor Millet '! Sus pinturas 1m que la H'rdaclem helleza no l'eside en 1m; 110-
€n la Avenida tIe Mayo se comía asado con cuero al público de Buenos Aires eontrl1 los artistas que
al mediodía. .10, .encont::!tl'Oll nin~n comprador durante mu- tentotes '1
nos vienen del extranjero aunque de ellos se haya ,~hlsU1lusa;nos, y ai fm murió en la miHeria' míen-
La pintura de Zübiaurre muestra a un pueblo ooupac1o un Max Norl1au u otro gran crítico de Estas sin c1u(la opinan que 1as eUl'OjlNlS son pro.
Qn sus gustos predilectos: el hogar, la pipa, la ¡;ras . ahora las mismas pinturas, por djemplo duc,t!)S clegenerat1.os de lltWHtl'll envejedcla dvili-
arte. "L' A~cIu~", :fué ,vendida por 1111 millón de :frnu- znelOll lJue las luzo perder su, natural"s l'dínves
l?e~ca; y: la contemplación de lo suyo, a lo cual es-
,~os y ha~h1 en mas.
~¡i.I?J.. 'iodo enamorados. Zubiamre hacl\ perfec- RIOARDO A. G. BERN ARDO¡¡¡-I. anteriores y posteriol'ü", que las hlitpll \cntes hall
~. ~.. . . i. Y. Me¡~;"mi('l ~ Sus tóontmnpol'iÍlleos Plodmnn- "oll!'I'I'\'ndo eun todo ['1 1 \l'!~1I \lit.
1,((.
CLARIDAD
CLAHIDAD
Otro asunto todavía: Se lucha interminablemen- repiten forzosamente en las llllsmas circuustan-
te un día por la estética de los automóvi:les i todos cias. nales, nunca captando ni un poco de 11111sica. Es gusto ? medida, sin los que ninguna arquitectura.
repetÍlU1 incansablemente que sería nooe5111'io poner Eso que se llama arte es sólo un sueño del hom- verdad que los gustos varían. Es veruad que cam- por oJemplo, podría existir. A usted mismo no
un eahallo artificial dehl.nte de -ellos para amino- bre, buscando a menudo sin conseguirlo, mejora- bian. También la naturaleza varía. Sin embargo le gustaría substituir el .Louvre por uu conjunto
tiülUJ leyes.
Tal' en algo su fealdad abominable. i Qué itliota mientos para la vida. Ei artista, demasiado impa- de torres Eiffel, ¿verdad '] También bastantes
parece' ahora esa tesis! Cuándo se com}lrende1'á,' ciente para resolver por medio de 'la búsqueda . El arte no esUi fuera ele nosotros. Estú en los sentimientos y costumbres son comunes a muchos
en fin, que la teoría estética 110 puede existir, que el problema de nuestra suerte, intenta encontrar ~ombres., Las o~ras de aquél presentan los sue- .hombres, para' que generaciones tras generaciones
la única indiscutible belleza de un objeto es su alguna solución ilusoria; espera aminorar las mi- 110S tle estos. SI uno supo HXpreSal' el sueño de
a,m~n y aplal~dan las mismas obms principales de
perfeda confonnación a los servicios futuros. Y serias de nuestra vida actual, fabricándole mejo- muchos, .se haee amigo del público. Si su sueño Sofocles admll'ando en ellas la pura belleza igual
HSa. confonnación podéis conocerla sólo después rumí/mtos imaginarios. Así intenta disfrazar - es ~emasIaclo elevado, sólo U110S pocos le compren- que en. una. escultura maravillosa y regoeijante,
que esté perfeccionada en su múximum. pero completamente sin eonseguirlo - las deplo- der~n al momento. Si está loco, únicamente gus- que el lllolvldable poeta no estropeó sus tragedias
Según mi ,definición, comprendo sólo el artcJ rahles imperfecciones de nuestra naturaleza, y el tara a los locos.
'OH "In divulgaci6n del IJl'ogreso social o cientí-
como 1m adminÍeulo de la ciencia, <:omo lo usan uetl1al retroceso de nuestra lastimera humanidad. Los poema" de :E'rancois Coppée pl'esental'on fico". Lo bello vale por sí mi"mo y a menudo pier-
los inteligentes artesanos, Los científicos definen Efectivamente, los artista" dan a los objetos la la helleza de modestos rineones de la vidabul'- de mezelándose COIl lo útil.
las mejores formas pam los ohjetos en relación forma do ellos; eso solo en {Oonsecuencia del es- .gn~~;;a. ¿ Cómo podrían gustar a los arnatC'lI1'8 del Si el "progreso de la ciencia nos va a imponer
a sn uso y los artesauos lo cumplen seg·ún esa,,; tado embrionario de la ciencia humana, que toda- 0l}1ll110 '1 L? mismo los di] Vigny cantaron al una forma úni~a para todos los ohjetos usados por
definiciones con su total competencia. vía no posihilit6 el estableeer matemútieamellte ma". SO~er?I,O do].or del eorazón humano por la nosotros, preCIsamente según su más fácil uso"
A ve(JC)s el artista y el eientífico se juntan en >ill'; formas óptieaa. La ahsoluta bclleza serÍlt la gla~lal llldlfsrenela de la naturaleza para eon él. entoIll'es Dios me salve de esa edad de oro... ~
el mismo hombre, pero eso es, desgraciadamente, ullión dn todas las perfHceiones te6ricas en U11 ¿ Como podl'lan pnrantur al risueño optimista' ele aeero, .a mí, lastimoso l'eaeeionario, porque gus-
muy raro. objeto, Jlerfeecione~ para lns que no tenemos nin- l. Qué demuestran lns l¡eriódieas moda" sobre to demaSIado algo de fantasía, aunque todos los
Igualmente yo no eomprf~lldo a los literato" que gún dü;tintivo segUl'o. la forma ele los versos o hasta do los vestidos d,ías reprocho n una amiga que contempla dema-
müdall del arte únicamente, y l:uyas obms no tie- Ji::s indUllnhle que los in<:esl1ntes progresos de femeninos '1 Prueba e~o la inexistencia del arte. slUc10 toc1n la elegancia. Ya imagino el día terro-
nen como objeto la divulgaei6n del progreso den- la ¡j¡,nüÍn no;; eondncHll al estahlecimiento de nna Que el 3lJl'oveehmniento tle famosos moc1istos o rífico mumrlo In moda persiga la óellcia fanática
tífiIJo o social. forma únif:a para todos los ohjetoil usados por el fanati"rn~) pol~ti(:o de alguna nación en la gue- abandonando todo arte y ¡;uando Sofía ya corte
Y, desdichadamente, esa preocupación parece 110501:1'0" precisamente en conformidad con su más rra g,el~eralIza (,1erta5. fo1'masc1e vestir o prohibe completamente al rape S11 ya corta cahellera "para
(lada vez más fl'eeuente en nuestro,'l ¿tutores mo- fú(dl UilO. la mUSlen c!ll eomposItores extranjeros, de eso no el má" fácil uso". i Alto! señor Archdeacon, alto!
dernos. El nrte es un juguetito que Dios dejó al honl- l'esponde el arte, "iuo sentimientos ele otra Ín- Ya temo la eficacia de su artículo en los inocen-
Conduvo: hre para quo se entretenga durantH la infancia dole. te;; ledo re".
Po~que· uuestro,; artistas mi,anos ennstaten iJ.;1C delu humanidad; pero en un estado de progreso Ahora ;,;?bre el progreso o el retroceso. /Í¡Es Felizmente, los fabricantes de autom6viles no,
do llwgunlt manera progresaron encomparaeJOn superior e;; innegable que la helleza y la utilidad del, todo ~Ierto que los antiguos egipcios no co- "iguieron vue"tros principios, sino que adornaron
con 10:; artistas que" vivieron antes de Cristo, se se igualaron eompletamente. noelan ya mucho de la ciencia descubierta en el las máquinas con encantadores objetos externos, .
está forzado :1 borrarlos de la lista de los {~ono Todas las ciencias, al pan~\el' muy diversas, siglo XIX? Bien, si fl1ern efectivo que nuestra aunque !lO los más útiles. .. pero elevémonos más.
cimiento" dignoii de la cultura de los hombres, también se unirán tragando al mismo tiempo a épo~a sobrepasó a todas las otras e11 el enrique- t, La pura üiencia tan seguramen tc conduce lt
}JOrque por l!onfesión misma de sus adeptos re- todas las artes que son su forma emhrionaria. cl1l1~ento de los conocimientos de lns hombres, los hombres a la justicia? /Í¡No descubre gases
·trocede en vez de progresar. La ciencia tiene ya un gran número de firmes pOSIblemente ello sea la causa justa del por qué mortíferos y prepara las guerras más te1'rol'ífi-
Además, opino que nadie 110S probará que la y sólidos peldaños que los científicos ulliversall,Js nosotros somos me!lOS al'ti~tas que lo que por ejem- casi? ilAdónde ¡'aería la humanidad si no tuviera
tnlefonÍa sill l!ilos y la aviación fueroll deseubier- ~uhen ya (\on pel',~istencia asombrosa. plo fueron los gl'legos. No se puede hacerlo todo sueños y espcC'.ialmente sueños ele amor y armonía,
tas antes de .Tesú¡,;. Nadie puede negar que la De uno a otro progreso el ,hombre puede espe- a un tiempo. Vuestros más geniales cerebros eu- las m{¡:; hermosas fuentes del arte y al mismo tiem-
cieneia hnce diariamente progTesos maravilloso,,>. rar 1;011 rnzón que él, trabajaudo muchos siglos, ropeos busean ahora novedades científicas. En los po las !llÚ~ fuertes inspix;aciones de justicia ~
¡, Conocía dios el arte '? i En absoluto! Solamen- llegará a la eieneia única, ciencia integral, que .griegos, ellos esculpieron o escribieron. Sill em- Al terUllllO de su artiCulo, usted mismo elo-
,\, te lmede juzgar la perfección que sigue inmuta- será la síntesis ele todas las otras. Ese día podrá hargo, ¿qué era su música comparada con la nues- euentemente, expresó un sueño, muy alto y' nohle
bles leyes que él mismo creó y que él, poco a po- orgullosamente sentarsü al lac10 de Dios, .~1 quien tra '! Apenas un jazz-bancl. su sueño. .. Y voluntaria o involul1tariame~lte en-
co, nos permite descubrir. hahrá verosímilmente alcanzado. ? .. El prilleipal error del que procesa el arte, re- tonces cay6 usted en el arte, maltk'eido por ll~ted.
Oblígadamente eOllstata como nosotros, que dos SIde en ¡::u frase; "Si el arte tuviera existeneia Créallle, los pueblos, siempre ser{¡n instigados
'y dos son cuatro, y que los fenómenos físicos se rea~, tendría. re~las y leyes aute las que estarían por esos graneles, fuertes sueños tt la unidad. Es-
/l.bhga~os a lIlchnal'se todqs; no se podría diseu- forcémouos para que no paren en ningún límite
tu mas la bellez:: de una obra de arte que el . nacional, lingiustico, racional o de credo. No des-
La Defensa del Arte ~uadl'ado, de la lllpotenusa". i All! justamente, .si , ~)rceiemos los sueños c!e la humanidad, pero eU-.
fuera aSl, ya no sería arte, sino lóO'ica científica. .Jamos solamente los mas armoniosos.
Vigilante, paradojal, abiertamente eomo acos- ee~o del arte, elltollllElS hágase el. vroee50 del amor. Ni amor, ni sentimiento, ni arte c~ltiene el cua- Entollces el arte no se opondrá ni a la eieneia,
tumbra el señor Arc'hdeacon, juzga y condena al En la más perfecta organización: del mundo, sc- drado de la hipotenusa, ¿Aceptaría usted que se ni a In justicia,' sino que alumbrará el camino al-
arte, sin compasión, como "un juguetito que Dios gún la ciencia, sin arte y sin amor quizá gustaría le pl'obara demostrativamente qué mujer debe us- eanzac1o.
dejó al hombre para que se divierta durante la ";.vir ,11 antiquÍ:;imo Matusalem elogiado por ted amar? GIANG-CHU-VA.r.
infancia de la humanidad", pero indigno del Bemanl Rhaw. Pero, ¡',t lJ.llién otro? Existen, sin embal'go, ciertas reglas de buen (De "Espemilto". Trad, Teój'ilo Ductil.)
mundo científicamente progreSL'lta. .En el campo del corazón,hay pus y posible-
Un elocuente apóstol del progreso, el gran OÍ'tl- mentü encontremos más sufnmiento que gozo,
dor europeo J ean J anté:;;, fué ',.,isto, unos día;; más .dolor que placer. Eso lo dite la filosofía
ántes' de la guerra, vagando maravillado por .el oriental ya de milenios. Sin embargo, los hom-
Museo de Bellas Artes de Bruselas. bres siempre lo cultivaron y eternamente buscan
..De pie ante, el flamante colorido de un fresco el pájaro azul de la felicidad. Hasta el viejo cam~
de Rubens: "Por ElSO soy socialista - dijo - , pesino, próximo a la muerte, goza ,ele los queri;'
a f1ue todos los hombres tengan la dos cabello~ un día acariciadOR y de la inCO'lll-
material e intelectual :para eompren- parahle inflamación de lns lluh;,:; por el 1'0,jo
esas bellElzas. Evidentemente él no ';01 de la tarde. ¿ Le gustaría recomenzar lai vida Acaba de poner en venta la Editorial Claridad.
el señor Arehdeacon. fe Por qué' con la mejor comodidad material ? pro,.gresista;
.I10nH~r"" .existe no sólo 1.111 pensasmiento
seutimiento. Pregú11tese~
pero sin ninguna dase de sentimiento' Dudo.
Cuando el más científico progresist~,tllil. p~i..
En ese tomo estan incluidas todas, las mejores poesías de
~~~~~
lamentar el hecho, d.ente en los oídos el radio-nnriCl'\,lu¡·,le gus~
siempre sólo palabras sabí,as . Y' racio¡,
. , , :,~(, ');'~il': ),~:
" , .. ~ ,~
CLARIDAD
•.¡
,
CLARIDAD
ALVARO )[UNQUE
. '" del anciano Vladimiro
La buena aCClon
UN p EfA E LA CIU AD I
T1'aducida IJar Robet'to M{!1'iani de la versión italiana de AZIl'edo Polledro.
Lo, genel'aClOl1 poética de hoy, estú produ- "Amar, y luego amar, y luego amar"
¡
t.~,
ciendo li11m!> densos de }JoesÍa aetual. Son libros
milc1e pero rnagl1tlllllna. Es ~omo si, uno al l~d,) desganarlos y amargos, turbios de rencor y de "Hay que ser como el sol: lnz que ilumina ~'
El piad?so andano Vladilllil'ovlvra solitario
como conVWl1e a un hombre sumergido en la me- de otro, ymHl0 camino del Cielo, yo. ~ne detUVIese protesta, eOll1o rí.os fe(mndo,~, eHl'gados de limn. ",Con itlénti(~[) amor, rosa y espina."
cerea de la,~ cPIeHtes puertas, y le dIJese al otro:
ditación sobre la salvación (le su alma, pero, eomo Así son los más recientemente alJUrecidos: El Vio- Esta actit11l1 f:l1tillta de cristianismo sus versa:!;,
se preocupa'ha también del alma de su prójimo, -"Hcrmano mí.o: entra tú primero." lín del Diablo, de Gonziilez Tnñón; Lit lIiusct de y haee que su pl'ote::;ta sea algo que flnya' no que
a. qUÍen llamaba hllrmano, hahía levantado su El anciano Vladimil'o puso en la puerta sus dos 1ft .l<.lala Pata, dl~ Olivari y éste, Un Poeta I:m lit se diga. Está cn la intención recóndita, quizás en
sandalia:, v se> durmió conmovic1n.
cabaña a la vera (le un bosque no lejos del pueblo, Ciudad, de Gustavo Riccio. AllIl no nos vemos li- lo subeollsciente del verso, no en la palabra (así
hacia llonde se cneaminaha a menudo, obs(;I'vando De:3llf)rt~'iil(lo"c en alta no elle, por dos v(;{,es oyó bres de los masturbadore;,; del "arte por el arte", pl'ott~stnll Philippe o Dostoievski); pero basta qua
la vida y ayudando, en euanto podía, cnn (Consejuspasos de eall1inHlltes, y un leve. }llUl'lllUllo, Y un los que eon el pretexto de rimar su jardín intc- la husquemos para halIarlr., HolloZllnteéle 21n-
Tuido cen,n de In puerta, y ~(lllTlO gozosamente.
especialmente, pues era €!:,waso de dineros, a su;; 1''ÍOI' o encel'rtu'sü en Sl1 castillo interior, pasan gUiitia.
hermanos en Dios; indneía a los ricos a lIO ahan- y cuando el solde la mañana ree aIlló ecm finÍ- sordos y ciegos por la vida, eiegos y sordos al do- Su amor a las eo~a~ lB hnee mirar compasiv!!o-
.,irno oro Ia.~ parr,des de la dlOza, Vladimiro des-
aonar a los pobres; y todo lo que rl'-eogÍa ro eonse- lor y u la illju"tieia de esta vida de ciudad, tan de- mente a un "buzón de UI! barrio cénh'i(,o" que ~6-
guía distribuÍalo PlItre lo;;; indigentes. pertó, y, sunriendo, levantó:;e y fué hacia la tonante y áspera. j Bienaventurados! Para estos lo traga eartas üomereiall]s, elltálog'os, faeturas;
pucrta.
'rodoR los atardeeeres sentábase el arwiano Vla- bnrgne~es - hurgués, sinónimoc1e perBollalismo, él qui"iera que se lo llevasen al su:lml'hio, porque
c1imiro lt la puerta de ~1l choza, y mirando el sol Las santlalias ya uo estaban en PI sitio donde o sea: egoísmo - , para e~tos burgueses no existe allí . oirá lns dulces palabras de las cartas d"
las había tolocmelo la víspt'l'H. Pero las encontró
hundirse lentamente tras la cre.~ta de la loma enro- pI comuni,;llno social ni el poético.. I'TOllnVía creen amor.
jecida por el oeaso, pensaha: I!n seguida. Una colgaba de un árhol; la otra, con C¡UH ,hay más poesía en el amerengado rosedal de Elogia a los "alba'ñiles italianoB":
la suela para arriba, estaba tirada en el eaInÍno.
-¿ Qué han) 111llñrma en beneficio del prój~mo ~ Palermo que en el terriblemente trágico y tel'dble- "lVIiis lírico;; que el pájaro son estos que yo elogio :
Viejo soy yo, y miserahle; y no tengo fuerzas ni l~n la qnn colgaha del árbol, el~(,ontró de~tro mpnte poético. conventillo cosmopolita del subur- "el nido que eonstruyen no es para su reposo,
dineros para ayudar a mis lwrmanos. ¡ Sltbia bon-un ratóll. En la que estaba en medlOdel cammo,c bio porteño. No han c1pscubiel'to atm la poesía del "el tediO que levantan no es para sus retoños ...
110 había. nn!la dentro, aunque hay que tener pn
harapo. Estos "artistas puros" - iD por qué COll- "¡ Ello;, cantan haciendo las casas ele 'los otros!
dad de la nouhH, il umíname!
cuenta que alguien había eseul'ic1o en su interior. fundir doncellez de muchacha conhel'mafroditis- La protesta surge como eulminaeión de su ím-
y he aquí que una noche, mientras atravesaba mo de vicioso? - no cantarán como lo hace Gon-' petu lírico. Ro; natural que nsí sea. El poeta ciu-
las calles del pueblo para regresar a su eabaña, Con la cabeza baja, víctima de amargos pensa- zález 'l'uñóu, al "enano del bazar", pobre ser ri- dadano, necesariamente, ha Je protestar. La ex.al-
mientos, el viejo llevó a su cabaña los obsequios
el viejo observa que en la puerta ele muchas (jasas dículo que un mel'eaehifle canalla exhibe sin mi- tación plena e~ ('osa ele bucólico, ele hombre feliz
había zapatos, o botaH, o sandalias. del pr.Sjimo, y sileneiosamente e inmóvil, permn.- sericordia, para explotar su deformidad, ante la y libre que eorre y respira en la natumleza. Aqlú,
lleeió sent.ado largas, larg'uÍsimas horas.
Se asombró el viejo y preguntó a uno que pasa- indifel'eneia dp los fifí!;s cl/[/ominaclo8 de Florida. Pll la ciudad, lo ficticio está c1emasiado evidente
ba a su lado: -lo Qué he hecho yo '] - pensaha. - bHabré Doeenas de metarol'ifadol'es habrán pasado ante para que no 110S estrangule el himno en la gar-
-Dime, 11Cl'manO mío: ¿ por f¡né snc(Jde esto ~
tentado a mis lJermanos a eometpl' una mala [le- él sin vt11'lo, con la misma illdiferelwia del bur- ganta. i Hermosa la máquina, sí! ¿ Y el enjambre
¡, Podría yo hacer algo (¡ti! en esta ocasión ~ Gión'? gués, j ellos no son burgueses, son "poetas puros"! humano que a ella se ata '1 fu Cómo elogiar la má-
El interpelado re;¡poIldió, asombrado de la ig- Al anochecer eneontrábase aún sentado en su Ellos tampoco cantarían, como lo IlHce Olival'i, al quina ele escrihir, por ej emplo, y no pensar en
norancia del viejo: silla delante de la puerta de su easa, y sintiendo almaeén donde pierde diez horas de su día, en- la pobrecita dactilógrafa, a la que las dentelladas
--:ioPero acaso no recuerdas, viejo desmemoria-
adelltl'al'~e en su alma la paz lloeturua, pensaba ü8l'rado entre bolsas ele garbanzos ni como lo haee de SIl implacable tic-tac le devoran los pulmones 9
do, que mañana comienza un año nuevo qne dura- todavía, sonriendo piadosamente: Hieeio a la Casa ele departamento o a ~tn(l cS1il'vien- El autor de Un Poeta en Zft Chalad, homhro
rá todo el año hasta el siguiente'! Por eso aquel -¿ Por qué me he entristecído '? El Destino es ta . . i Y es impre.scic1ible, sin embarg'o, que el pue- nuevo, roÍclo por ideas y encenc1ido de ideale~, no
que de'lee festejar .el comienzo del año n costa de
tan vario v caprichoso en su genel'osidacl, que, en blo sepn dónde e,<;tán sus poetas, y se halle cOIl podía dejar de hacernos sentir su protesta, su
los otroR, ha puesto en la, puerta de calle sus vez ele da;me la felicidad que esperaba yo, me dió ellos en estos muchachos que salen del suburhio, protesta en tOllO menor, según su temperamento
sandalias en la esperanza de que el caminante de-otra. ¡, Qn~ quería yo? Yo deseaba ,dar a mis her- a gritar, inarmóuÍCl1mellte, üsta vida que les ha lí rico se la dicta:
posite algÍlll regalito. Y si tú, oh anciano, tienes
manos la ocasión de realizar una buena acción, tOelulo vivir en medio de una sociedad hecha dp El poeta se siente virgiliano, quisiera cantal'
roncho dinero, si~mbralo por todas partes, no lo y, eon eso, ofrecerles una dicha en la fiesta de eotir1iann injustieia y de dolor HllÓniIrlo! i Y es a la naturaleza j pero vive en la ciudad, In calle
rehuses. primero de año. Y he aquí que uno ha puesto un imprescindible quP aprenda a de,,;preeial' a los lo aprisiona, las cuatro paredes de su casa le qui-
El hombre rió y prosiguió su camino; no así rat6n en mi sandalia, y otro escupió t'n mi otra falsos artistas hnrgue::ies, a esos que reproducen tan sol y aire. Empero, su amOl" se sobrepone a
Vladimiro, que se abandonó a amlugas refle- sandalia. Pero... ¡, acaso ambos 110 regresaron a el cliehé literario de la rosa y el lirio, del jardín su protesta:
xiones. sus casa~ riendo alegremente al pensar que yo a lunaclo, del cisne y la góndola! Porque sólo des- "Pero aquí en Buenos Aires, madre Naturaleza,
-He aquÍ que hay muchas sandalias y cudn, la mañana siguiente estaría triste, tristísim()~ ¿No preciando a unos, podrá distinguir la poesía nue- "yo qne te quiero tanto, yo te adoro lo mismo:
una ,de ellas solicÍtame para su dueño un roeo de se habrún 'puesto a saltar, a correr, a gritar de va de estos otros. Los nomhres se multiplican: J o- "te ailOl'o en los trps metros de cielo que a mi patio
alegría. Pero, :. qué puedo ofrecer yo, viejo y alegría, gozando con la idea elP haberme ofpndido' sé S, Talloll, Antonio Gil, GOllzúlez Tuñón, Juan "bajan en l1ueuaclrado desde el séptimo piso."
pohl'e~
~ y ·no debo yo, vit'jo }>obre y débil, sentirme ÍI;- Guijarro, l\:l'istóbulo Echegaray, Olivari, Silverio '" ... , .. ......... .. ,
'
IJargameute meditó el anciano, sentado a la finitamente feliz de haber podido ofre¡¡er a mlE Vásquez, César Tiempo, Amuldo Demos, Santia- 'i Cuantos no sentirán esta tragedia c1e sentirse
puerta de su ca~a, hasta que por fin su semhlante hermanos ,en Dios aunque mús no sea un minuto go Ganduglia, Juan Marengo, Gustavo Riccio ... : robar el sol, el aire y el cielo poi el señor' que
se iluminó de gozo. de alegl'Í:1 sonora en el camino aem;o triste de i El futuro! posee una easa' ele siete }Jisos, }Jara renta!
-Me ha ilu.minado la sabia bondad de la noche. sus vidas'] Gustavo Riecio acab¡t de publicar Un Poeta en Una "tragedia urbana": la, muehncha pantalo-
Ahora mismo pongo mis sandalias en la puerta, Así pensaha el piadoso anciano. le! Ciudad. Es un libro hecho de amor y de pro- nera es al'rollac1a por un automóvil, convertida
v "i algún viandante dejara caer aunque sea el
inás mísem de sus dones, me consideraré feliz, AnoehecÍa. testa. Su virtud próeera es la realidad. t en un guiñapo sangriento:
El viejo Vladimiro, tendiendo ambas manos~. Su amor - el que yo le elogio aquÍ - no es el
plles ofrecer a mi prójimo Ia posibilidad y la "Como al otl'O üía del taller faltase
amor a la hembra, sino el amor a las cosas, a los
oeasiónde realizar una huena acción, es obra hu- bendecía al Cielo. "tuvo una eal'telito la puerta de calle
paisajes urbanos, a los seres y animales que pa-
san. •. El nos explica "cómo se hace un poeta": "con esta" pal!lbl'as: "Hay una vacante."
"Primero amar, y luego N at1a más, El l)()eta es sobrio en palabras, y
A. N. T E F F I
CLARIDAD
n05 toen a sus leetore.s presentir y hacer d proce- "y Dios, que es mús humano (1e lo ereen las.
qlW
[gentes
so de la indiferencia patronaL
Gas[~ ele Ilqwrtctmento8, es tina ele las !lompo-
siciones bien logradas:
"enundo eierre.'i lo~ ojos en la postre,r ".dormirla",
"hará que 110S veamos en la .senda ilOl;Hla. "
La Exposición de José Arato
"como nhora nos vemos por Smpacha y Cornentes .
"Monstruo nacido en la üiudad moderna: (Palahras a l\filouguita.)
"cabeza de palacio, ellerpo d~ conventi.llo;
"tú sabes del dolor más trúgmo y agudo: Una sirvimlÍa:
por Guillermo Facio Hebequer
(¡del que debe c1l1)rirsf.! con ricos atavíos." . _... ...... ...... . ....
. .. ~
anos de su VIda en buscar lo imposible, en ,espe- Que venga, pues, en buena hora una nueva lite- van~dad, y sllbete a comer solo la torta, ya que
mas tItulas: La valIJa" "El 0'11ar"a elel . bt ' t
11<''' "L b ' ' "". 1I su erra.- ,-'
rar las peras que aguardan del olmo. Las obras de ratu~'a•. agitadora y rebelde, que con letras de san- nadIe te sube y has ganado el manjar con el su- "Eol ' n:,
oqmlla", "Las esquinas" liLa J' ira.fa"
"El gat
1m; buscadores de lo imposible, no pasan ele ser gre IlleI~e al lmeblo a la Revolución y a la única do; de tu. frente. Para ayudarte a digerir, yo po- mllrcwla<>'o"
"" o yIa " romanhca" . Han-'
mas que. ensay?s absul'd?s, los que marchan por guel'l'~. Justa y legítima: la guerra antiestaduru. tIna pl'opmarte una pateadura. e1o glosador. Observador sutil Algll • 1
ese ctUnlno est~n extraVIados; .nadie rmda mejor N ecesltam?s, para ello, Ulla legión de artistas jó- ~.oc1l'ía firmar GÓlllez de la' Sernanat cosas ;¡~s
vene'~ y uIseolos que han de realizar la verdadera II fIrmar
,'
y 11 ' 1 '
evarse as; nadl1 perdería Sol el' Ah'
as pOu.na
que aq~ellos pll~tores que hahiendo comprendido
lo senclllo del fm de la pintura - que es satis- función sociológieade la literatura, gritando sus Sóler Dará" es el autor de "Terremotos líricos esh . , "El mure1e . '1 ago " , un cuento lluevo '.. humano1
facer plenamente el fin que se ha ,propuesto por verdades, yendo a la acción· ,en la soñada, hora y ~t~os tembl?res" . No es esto una delación: La za profundo. Un cuento que vale un es ." 'e . '
1ibertarÍa. así, "A t el l' el'l.OI'. omIen-
eHa ~, se declara!l poetas o decoradores. POhClll, nada tIene que ver con ese título, Y el tí- t' ~:. 11 es e sa n' ele la' mbliotecft Nacional
tu.lo, lUula ,con el libro. Ni terremoto ni temblor. ~n",o por costumbre pasarme un pañuelo 01' lo"
R.. A. VAZQUEZ PAZ. LUIS RICARDO Vn:lCON'l'r,. Fll'meza. 1: como estamos de fiestl1, divaguemos' °lJ°"· ,Estl; PI'~C~l1CiÓll la cumplo para trinq T~
otro rato antes de llegar al libro. Vamos a ver: (a el de mI eSpIl'ltu; lo e ne m t'" Ul 1
harme en 1 11 1 e so, l'lface al encon-
++ ••• e o ......... ,. . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . 11 • • • • t,• • • • • • o • o••••••••••• dos puntos tra~eendentales: :" Soy impúdico al ha- , u ca e como '-1n 110mbre h
h~ar de un amIgo 1 lo Creerá el lector en mi since- tomado un libro. La vida no } que. nunca a
rIdad? Es una ecuación con dos ÍncóO'nitas: J uido los ojos de los libros ',' Y t' Ia~ que mll'f1l'la con
POE AS de OLEGARIO VII ANDHADE ,+
mIO ." 1 y o. t"
"T . =,X + '"
y. Reemplazando
p~l' ct1mstad e Y por slllceridac1, tenernos: .Juicio
-1-
a l tI' o ro pnrrafo: "Al llegar
a puer a (e calle dos empleados de la B 'hI' t
c?" se entretenían en darle con un palo ~ u~ 10 e-
Los mejores poémas del célebre autor de Nido de Cóndores y Atlántida nno+ "T. 1. Y o. t." = Amistad +Sinceridad. cmlago que estaba agazapado al borde <de mur-
nasto para uso ele es 't . U un ca-
De~ostrando I1hol'a que ."T. L Y o, t." es igual a
contiene el vol. 56 de "Los Poetas" que fa Editorial Claridad ha (jm~st(j(l, puesto que el hb1'o nos hizo amigos) ten- (~?S ~evantaba
fIestItas con el palo Y
el cana~~~ O~\lt ~o l?S
re emple~
a? '. e o 10 le haCIa
dremo!l: su, sonreí al verlo' yO, para lsn;:tular mi sorpre-
puesto en venta esta semana. =
• •••••••••••••••••••••••••••••••• e ••••••••••••• ~••••••••••••••••••••••••
liT. 1. Y o. t."
Juicio mío =
Amistad .
Sinceridad.
con el murciélago Si ellos segman ensañándose
. empre son dos para ensañar-
CLARIDAD
se con un animalito; porque tÜ miedo - pensé en "JJn~ a(~j'I"d()s snn los djplllma~ de. su incon;'S-
eompañía, produce voluptumiid:.Hl." j Qué lindo!
¡Cuánta eomprensión y honda:1! "
Todo el cuento - siete págmus -- C'it:\ cscnto
.
tmwia", piemn I~l del mono, y yo lo pl€llSO de, el.
Si Sol(~r f1H'ra lln 11Innbre eOllstante --:- lo ha SIdo
!Jualldo (lC'¡,ribió "El homhre y la 1ll.uJor" - per-
E BIE E ME) i~
hermosamellte, sin disdplina, 801p1' Pe; nn lturnIJl'l' c!ería, .~ll jJprstltllllidaü. .La e;;pol~tanelllac~ se. le YO-
IUTÍa. E~n .';ll:~ mH'vio" Ilay una fll~rz~. elednp[l, que No hacemos miÍs qul' dar [llldUS en la llidnd, sahen a dónde van, qué ([Uiel'en, por qué y
ante el cual SH ve pasar la vida, Sus pnlabras
lo hal.:(' vivir a salto~. Yo desconl'Jal'la de UlI Soler sombra. sin rnmbo ni dirección; y los pam qué bregan, y pugnan por er~al: ..ul,l:l hter~: 1i
antirretóriens, pOI' derto - no tit'lWll loenlirlad tunt fundnmentalmente humana y ~o('lahsta, de::> ¡l
fija. Su libro es un cine. Las palabras entran por pulido, :,iu equÍvol;os. Hay que eometel' el'l'l~re-j pasos áe mIOs 11 otros se cruzan. y .entre-
sus ojos v lueO'o de aclararse en dIo;; pupden !:icn-
tarS(1 dO~l~le y ~omo quioran. No es un biógrafo de
1m céite ¡;igl0, dDude todo f~l lllun~!o {)u~ee la'. ('~
lIad ... Lu,,; C!'iI'ritores que no hmpu¡u su pIO:'iU
dan Ulla III'lwba 111' rel1f~ldía y de trascel}dentahs-
fa,wn, ir¡no1'llntes diJl terrl;1/O que IJZsan 11
los Ilcr;ntecimiclltoli {! que pueden dm'
11lgar inconselentemente.
emhal'tlZllda de ]JmCOl1CIo'P!OS seetar1D~, ¿lcogedo:r:a fr.!
y (;orc1ial. "Zancadillas", lIbro de para~olas adml-
rabIes, sitúa a Alvaro Yunque el~ el pl'lmer pla~o ¡
I
sá,batlos hortel'iles, El lo diee en "Los ~nl¡~(~!we;": de 10:3 escritol'e,-; soeiales - y dIgamos tendencw-. I¡
"La retórica nació e11 un halcón; la füosoha en mo. Viendo ,;nh·ir a los humildes,debenan ~ver J. BaZas 8ubirat.
p'onznrse e.sos seÍÍol'f'sque hacen versos de azuca:. sos, que no es una mala palabra -:- de ~lOy en <,
las montañas. El hombre en un balcón es una Ya podemos pegar unas vuelta;; por estas ea- América. Pero Yunque es un esc~'ltor brIllante- ~
No me interro,;:l ,;i lmenn urte social o no. Pero S},
cosa ridícula. Los balwnes del hombre son las
montañas." Claro qlW sí. Es algo espantoso ver que dejen ver alguna integridad ..8s ar:e de estu-
lles tIe Buenos Aires y correr la sorpresa de to-
parnos en cualquier esquina con !lO!l Pedro l~er
mente d('finid~, que JlO :va a producl1" ol:ra. de ar~1 .,!:
pillos el que JtO ,;e i1l3piI'l: ~u la slmpa!.ll1 humana. ¡¡orfIue supec!lta ~os dlCtmlo,,; del sentlll~lO!I~~ j
un señor investigando gerul1dÍos (y ahí se me f'ué mida v su hijo Guillermo, eon Evansto Rosales. y imperio ele la razono E~ un :erebl'~l opt:trlll~t~l, ~ ¡ ti
Diríjanl," cHln" a MussolulI, pero deJen de ~na
Carmen Ferr~wo, con Antonio Rinaldi y Mal'gal'lta pOI' ende un gran corazC?!l eu) os l~tIdo~? ;,;9 e~fuer , 11
uno).. . 't'
1eg'lUllO. N o PUC(1e ".
'·e1' vez n In., ehic¡nilinas de la mal,lznn? y a los J~r
Soler es un humOrIsta
¡Jilles estivales. Quizá les velldl'Ut hwn unas glan- Curio eOIl Fcrru{;io Nosecla, Doña l\1:arta y su~ Za en aeallar con martIllazos de ldeao;. Y conste "1
retórico ni hacor primaveras del estilo. Alg~ltlos, hijos 'Juan .Jeremías, H.aúl y Tito y otros hombres que me refi~ro a~ intelectual, no nI ho;nbre. , , ':1
duln.-i VoronoH. ,
en lugar de pálTafos, hacen mal)otas. Nos CjUleren mií.s de e:os que puede~ transita!' ~lOlgad~m~llte
divertir y nunca han sido ~rágic()s .. Los l~ornlm'.,;
feliees 110 hacen reir a nache. Insplr¡m piedad, o
Hay qne VelH.:f'r el ter('o afán do I~'se a la luna.
.La golondrina, por !'jempln, se ."anso ae las. al,~u-
1'HS y ya sahe volar a ras de tl,e~l'~l. Un paJaIlto
por toda novela, y a qUlene~.;Tose Salas Sutnrat
ha tramitado su cindadanizaelOll.
Salas Snlnrat tiene algo l1e e,;o. PudIendo creal ,11
ulla obra emotiva - no nos detel~gam~s en vano~ ':
reparos ele forma -, (~omo lo eVldenc1811 alg11l1~;~ !
I
rabia. NHcesitamos cerpbro.~ tr:ígi(~()s que emrlle-
hn ,~ompl'etl!1ido una tO;:l1 tan chfletl de compre~l lre mrneionac1o en realidad más nombres ql~e págillas ¡;onmovec1oms de,~' l~asos en l~ s?l1lbra., ",
cen por encontrar el rÍllÍI!ulo Hll sí nÜslll.o. Somos del' para mudta gl~tltH. Gente ltorrihlc quo t,odana hombres v ImlJil'ra prefpriclo un solo persona,le se detuvo más en los anahsls .de eOllclel.lCIa! des-
hombres y no niñas los que varno.~ a rell'I~os. No ('011 una ¡lldif)~i!)('l'l\sia sólirla, c1eeisivamente con- cargándonos }JO!' un arrehato mnCllenta SI~0.g;lSl110ci. .1
eSf:riben eon plUlIHt de ganso. Soler Dar~~s, go-
estamos en U11a ;:;ala, "ino en la ealle. La VIda nos londrina sin rOlllfllltiú,;mo:-" opina: "El ~1Il del texturnela, rdu.wio a las di~quisieionc5 estél:iles y A h~)ga sollozos con sofismas, y cuando q.u~slera11l0S
ha pegado una paliza. No !10i! hacen efedo lo~ hombre es volar. Y vamos, piilidos y al~lClnados, ea¡mz dI', dar - l1/t:0I18cientlJlII~ute como qUIe~e ~1 v¡~r ~1 Margarita sacudida por la llOtH3111 ~le la
dtii;tecitos. Queremos reirnos en el alma, poner autor - lj((.'<OS en I(! sombra, Si, pero perceptIble" muerte de Rinaldi, Salas aguza una parado,J}L.
por a!óortar lo infinito, en la grotesca qmmera de
una luz en la dimensión ele nuestnls al maR, revol- un 1'\)1'(1." Lo malo G,; que sucMle n~go pco:·. Claro
por el oído más sordo y la vista más. nO,jn. Pero Ello no obstante debo hacer la ponderaclO11 ~e
eadas en el elolor callejero. "Cnando te eneuentres esto ei; eaHi crítica aviesa y temo 8nJaularme en la novela - con franqueza clesp?jada d~ sent}-
fine mús .~lleñnJl la.s altura;; edestll1Ie.,! viven . ~n
en la calle no se te ocurra pararte (m la osquina; las metagoges, olvic1andome de lo que tenía que mientas ridículos - porqne es nn 11bro de s.l~lpatra ,1
sótanos. Claro que en eso~ lugares estall tamblen
te verás atado por los cuatro;;; caminos", dice ?O- de¡lir. , humana, que colo(,a a sn autor entre lo~ mllltantes i
103 que no se eontrmlil1en.
ler Darás, y nos demuestra que la calle ha SIdo Me seduc!\ destaear ahora dos aspectos cm'dma- miÍ eficaces e inteligentes del grupo senalado hace
A Cm'litos Chaplin está dedicado el libro. Paril
comprendido por él. Puedo ~mear más ejemplos de les l1e ilUestra literatura, ¡,uya orientación p~1üde pocos pánafos, y porque e~, incliscutibloment:1
sahorear In c1ec1ieatol'Ía es prHciRo haber visto "La verifiearse NJll Eadlidad. Frente a lo~ plLUlllst~s
::;u humorismo dramático: "Después de una gue- 'Quimera del Oro", la mejol: realización (~e Cha- una obra antieipo, Qnsayo, prO!m~sa, que }¡a~e e~
rra, a la hora del crepúsculo, d~bíall pasar 1~'J fIne nos infligen volúmenes sobr~.;;atl1rados de. dI- perar, 110 con desaprensiva estrateg;w anllstosa,
plin, Fuera de Jos cuatro chlsteR que Carhtos. lw· vagaciones erepl1sculal'e3 y se esfucx:zan et~ amba-
organillos pOI' la" casas de las vmdas para SUl- ce para los pihes, la obra es de una. humamc1ad sino con ahineada eertidumbre, el hbro ele ma-
cidarlas de tristeza." "En los crepúsculos de las ral'llO:'; el reposo <:011 muchacha~ maece,nble;; l' ÍlallR, decididamente hueno. ..
dl~sgarrantp, Desfilan ahí todas las paSlOnes, arras-
plal':as, siempre se ve alg;:ín hon~bre sentado CO?,iO ealle"ita,; (le suburhio - lugar común macac1ulIll- Una eareneia casi ab30luta de tranqmhdad Y
trndns por homhre~ muertos de frío, de amor o 7-arlo en la pne:'!ía eiuchulana - debiendo, lton~s.ta
un filtro de la melancolw, o bien, una mendIga muertos. tle hambre. Carlitos se ha rodeado de es~ ele tiempo, me ha forzado a deshilvanar, ?ste co-
que lmsa arrugada de lá.grima. Luego, a esa. hora mente, induir en esa espeeie a jóvenes. ele POSitIVO comentario, sin pretensiones de consagrac~on y de
caravana horrenda, porque sabe que en ella esta valer, que por temperamento, cnmo(hd~d o am-
del crepú;;culo, predica más allá un evangeltsta a el ridículo mús sórdido, más espeluznante. Sabe suficiencia - como algún cegato pocha presu-
un puñado de muertos que se han puesto de pie." biente, no se fatigan en captar la saVIa d: las mir - sino desapasionada expresión de una
que allí no necesita las pirn~tas. Con. un ges~o pasiones y los neontecimientos, si.tl? que fmcan
La palabra creplÍsculo deja aquí de ser el eara- sobrio, acertado, teda lo subltm(1 se Vtene abaJO mínima' parte de las reflexiones que me ha su-
melo chísico, para conquistarse un vértice en los sus anhelos creadores en lo superfICIal detonante, gerido. Y que a Silv.,erioF. Vúsquez le sea leve ...
v salta la }¡jlnridad. El ridículo estú en el deta- en lacáseara pintol'esca, en el ar~lbesco empala-
iing'lllos del dolor. Y lo que nos inquieta, ~l 1lUma!', he. Si supiéramos ver el átomo donde duerme el ISRAEJJ ZEITLIN.
está en esos mueTtos que se ponen de p16 frente go"o j frente a éstos, repito, apremia ~lbicar a los
ridículo de la montaña, bastaría tocarlo para que que, con cualidades artísticas o yo, VIbran .acom-
al evangelista solemne. En "Orgía gatuna" tene- IlUllca más dijéramos -montaña con la boca llena.
mos esto: "y uno, el más torpe y retardado, cayó pasando su ohra al momento umv~rslll, y Sl~ ~m
en el vacío de Ull patio donde se hallaba una vie-
ChapEn está por morirse. Comparto hambre y
eabaña con U11 gigante que tiene (mbeza de oso~
pal"et1ar~e en dogmas concihen un Ideal de frater- El Remanso
ja devota rezando al pie de una palmera. El ga- Sobre la hornilla hav un caldero. La escena es
to viendo esto, salió huyendo ante;:; ele llegar al Río elástico y grande
dolorosa, me dice una" señora que tengo al la:do, y DON QUI.JO'l'E. - O" prevengo: donde yo v~a Que corres murmurando:
su'elo." Eso es reirse del ridículo con verdaderas madruga a las lágrimas preparando el pañuelo.
""anas y con talento. Hablando de una vieja nos oprimidos, aunque sea por vO~I~tros, aunque baJO Orillado ele mimbres
Yo co~prendo que Clmplin prepara la bomba ... el pretexto de la ;.[ueva JustICIa - llennana de
dice: "Su rostro medio <mbierto por un peinado .Luego, tocaní un botón, excedert'i lo grotesoo y se He visto tu remanso,
estrafalario, su sombrero y su vestido de tul des- la vieja, - ahí estaré yo para ayudar a estos
burlará de toao. En efecto. Va, destapa el ealc1e- j Cuenco maravilloso
colorido, daban In impresión de una princesa apo- opl'imido~, romo os ayudé a vosotros en otl'O
ro y saca una bota hervida. La bota e::; el hótón. tiempo. Que se colmá de día,
lillada con los recllerdos de Vargas Vila". Advier- No~ tragamos el llanto y reímos a carcajadas. Me-
to que estas cosas no las elijo. No tengo la pa- RODRIGO. - ... y nosotros os encarcelare- De reflejos arbóreos
nos la soñom que tengo al latIo. Llora. La pobre mos, como lo hil':() el Duqu~. y esmeraldas fluídas!
eiencia de· eso" críticos que hl1sean lo mejorcito no vió el ridículo. Pero ella y yo, miramos luego
Plu·a hacernos el cuento. N~ soy cl'Íti¡,o, ni vende- DON QUI.J01'E. - SOIS vos que os compa- i Cuenco de hechicería
nI hambriento con la misma piedad. Ella es so- rá~teis a los tirmlOs y no y o . , .
dor de laureles. Soy un entusIasta que se propo- lemne. Yo, pal'adójieo. Que ele noche se llena
ne sel' discreto para gozar su entu~iasmo con ,jus- RODIUGO. - (Con energía). Si, somos tIra- Con estrellas partidas
Soler Darás aprendió a volar sin alas de confi- no::;. Sí. somos dictadores. b Véis este sable'? Es
ticia. Los ditiramhos me revientan. tería, y esto alegra a los que antes no cl'eyeron en Por las ramas que tiemblan!
El lihro ostú invadido por las erratas. Soler idéntico al qne usa el noble. Mas, aquél mata en
él, y a los que creyeron. Si algllno se disgusta Hombre de la Eselavitud, y éste, eUllomhre c1~ ~a Río elástico y largo:
Danís las dejó para divertir ~ los. académicos. 1101' su moclesto éxito, péguese un tiro y hará U11 Enséñale a mi alma
Ellos lucharán por el perfecClonanuento ele la Libertad. Será dificil tmnsformtU' vuestro VIeJO
favor a la Humanidad. craneo. Sois un hombre bueno ... A formarse un remanso.
ohra, poniendo· una s aquí, borrando una z allá.
Son muy inteligentes; JOSE SEBASTIAN TALLON LUNACHAnSKY. .JUANA DE IBARBUROU.
ABOTCOV
REP'ERTORIO LITERARIO ALEJO
ron Ulla nueva "máscara de realidad". Y más guientemente universal - , Rnvegnalli anota re-
~Iaina, 17 l1e marzo de 1925. pregunta en uno de HU~ artículos sobre el arte ~
abajo: "También la lectura de este volumen ("E,l servn~ y ob.ieciones. Algunas ob;jeeioues son ,de
novelista") n03 lleva a pensar, por esuo tlü aquí, (,al'úctet· retórieo que 110 mel'eeen ser mencionadas "b Qué sería si todos los hombres de.iasen sus labo--
Querido sohrino José: res y se pusieran a toear el violín o a componer-
por esto de allí, en Piralldello y en Bontempelli." siquiera.
Protesta el artieulista contra el afán analiza- Días pasados recibí tu earta en la cual inqui- versos 1" reo, que por muy hieu qne toquen los
Enrique Picelli divide las obra~ ele ficción en hombres el violín, y por muy excelentes versos·
dos grandes grupo;;, según predomine indiscuti- do!' - que sería el '[Jl'incipal valor de Svevo, se- rías los motivos que mI' indujeron a trocar la vida,
gílll 3Uil entusiastas amigos - y que le aproxima- urbana por la del campo. Esta cuestión, al pare- que eompongan, si es fIue uo desean al fin y al
hlemente la 'person:\llidad del autor o la de sus eabo morirse de hambre, deberán realizar, además
personajes. ría a Frend, a Proust, a J oyee. Pern, f, es verda- I'er, te interesa mucho, pues repetidas veces me
deramente analista Sve'ifo'? se pregunta Raveg- hiciste tales preguntas. Trataré de contestarte de estudio;:; musicales y poéticos, una labor pro-
Dos exeelellteil revi:;tas bibliográficas italianas; nani. En seguida dice que ese afán analizador es dara y sencillamente, evitando el empleo de tér- ductiva; es decir, pensar en la necesidad de 10-
"I libri del giorno" (Tl'eVeil) y "L'Italia che scri- opuesto a la tradición italiana y no la satisface. millOS científicos. gTarse el pan y de ganarlo trabajando la tierra.
ve" (Formiggine). En la primera, Carlos Boselli El entusiasmo de Cremieux se debería al incienso. Para tocIo hombre sensato esto es claro v no re-
Ante todo, he de traer a tu memoria la noticia
tiene a su cargo la seedón (,spañola, que atiende que quema Svevo en el altar ,del freudismo. Svevo. quiere lllayor argumentación. Pero, si por el con-
de que soy un hombre que considera el mayor
eon asiduidad y acierto. sufrió la influencia de James .Joyce, a. quien, co- trario, todos los hombres sin excepeión se dedica-
bien de nuestra vida la independencia y la liber- ran a traba,jos agrícolas, ¡, podría causar ello a la
"Encenó el semhlante en las milllO:>, eOIllO una noció en 1Dl4 pel'sonaIment€, en Trieste, ele donde tad de la personalidad. Por supnesto, en las C011-
es 8ve,'0 y donde James .Joyce terminó "Dedalus". immanidad consecuencias lamentables'] Segura-
flor en el eáliz'~. Miguel Saponal'o. . c1ieiones ele la vida moderna sodal, niúguno de
mente ninguna. Al contrario, todos vivirían con-
Svevo sufrió la influencia de Proust; los perso- nosotros disfruta dichobiell en la forma dehida;
La prOHa ·de Giraucloux obliga nI ledor a una najes ele uno y de otro están enfermos de psico- pero sin embargo, cada cual ha. de tender a crearse
tentos, y estando satisfeehos con la consecución
continuada gimnasia de la imaginacil511, que podría análisis. Lo que Frend llama "agnesia"- --:- per- de los l1rtÍculos ele primera necesidad, podrían
tales condiciones que le den el súmum de libertad aprovechar su;;; ocios, dedicándose a la eiencin 7
('ompararse a Ull refinadísimo deporte sedentario. manente pE'rturbaeión psíquica - se observa e independenc:ia. De antiguo se conoce la máxima
M. DOl'vaJ. igualmente en uno y otro. Para Ravegnalli el arte de que para al canzar tal organización social en
artes u otros trabajos mentales. Sobre este tema.
debe ser simplificación y elarificación; para estos hablaré contigo otra vez más deteuidamente.
Alldré Gide, 1)01' illtermet1io dB un personaje de la cual la humanidad fuera libre por completo, es
"Les fflux-monnayeurs", expone algunas ideas so- psicoanali,¡tas sería inverso el proceso artístico: preeiso que cada uno de nosotros trate de arreglar Según mi modo de ver, la vida en las ciudades
bre el arte ael eseritor: "La invención dBl narra- E'gocentl'ismo, paranoia, palabras interiores - su propia vida, en tal forma que le parezca eomún desmoraliza a los homhres y esteriliza su laborio-
dor como un eontraste con la reh€Jlc1e rBalidad, Tlara emplear el término de Egger. (Antecedente para toda la humanidad. Ahora bien j si deseo la sidad. La mayoría de los habitantes urbanos tien-
que 110 se presta sin lueha n una determinada fi- olvidado por Ravegnani: Dujardin y el monólogo libertad para la humanidad entera, debo ante todo den a ellcontl'ar el trabajo m¡ts fácil y ganar lo
guraeÍón". M. DOl'vnl. interior). Una oportuna cita de Leon Piene\ arreglar mi propia vida, de tal modo que me 8i11- más posible. Ordinariamente se medita' en esta
Quint: "les impressions profemdes SOllt les senIes tiel'O libre en la soei(~dad moderna en la medida fornH~: "Que encorven los demás las espaldas, que
Pirandello y Hosso di San Sewndo son los más l'éalités dn monde exterior". trahaJ en los campesinos como neg"l'OS pam I!rodl1-
divulgados al;tores del teatro llamado el{lsticamell- de lo posi'blc.
El articulista italiano cree que este arte es un Ten también en cuenta que cada uno ele nos- eir ·108 ceTeales, yo elegiré para mí algo' niás
te "de vangnardia". Son los más constantes e in- producto de cleeadell<:ia, porque su origen es evi- fúcil. i Que todos eso" socialistas y anarquistas
teresantes, :r han llegado al espectador universal otros, homhres que profesamos las ideas ele liber-
dentemente eel'ebrn1. . tad, igualdad y fraternidad, tiene la obligación dcmnestTen el perjuicio, la inmoralidad del para-
y despreocupado de prejuieios literarios. Ha te- Allá él ... sitismo, con tal de que viva hien yo, no me preocu-
nido éxito, en una repl'esentación privada. F. T. de propagar estas ideas y que, a nuestro parecer,
Aensa a Svevn por .~u estilo desorientado, por el mejor medio ue efectuar dicha propaganda eon- pan los demás!" He aquí que un hombre adulto,
Marinctti, con su "Ocho ¡:;íntesis encadenadas". Y su ('onstl'ueeión arbitraria, por el desequilibrio, la robusto, capaz ele trabajar, se desvela por procu-
también "Con los o.1os cntol'l1ados", de César Lu- siste en vivir. con arreglo a ella en el ejemplo de
prolijhlad, la falta ·de medida. .. Puntos de vista nuest.ra vida personal. r~r cualquier cosa de poca actividad, como por
doV'ici, "El sol se ha casado", de Mariani dell' An- de un retórico. atrasado. eJemplo: Portero, mozo de restaurant, vigilante,
guillara, y "La fnchadn", de·· Fausto María lVIar- Después de este corto exordio, voy a responder
Son f~sta raza y este país y esta vida los que me a tus preguntas. etcétera. Dicho portero está sentado sobre la silla
ti ni. han producido. Tengo queexpl'esarme como soy. junto a la puerta ele entrada de la casa de siete. u
La "Historia de Cristo' 'ha lihertado n. Papini .James .Jovce. Comenzaré por decirte que a mi modo de ver, o.clllo pisos y contemplando todo el día a los inqui-
de la desesperación filosófiea.· Valentino PÍccoli. . A. N. l'effi, es una eSi,ritora rusa que goza de la mayoría de los habitantes de las ciudades se lmos que pasan delante de él. Al pasar un inqui-
He aquí un nombre Clue acaso resuene en pró- merecida estimación por su fina y dulce ironía oeupan en trabajos improductivos. Todos esos em- lino, ne su~le darle buenas propinas, el portero
ximos años con el retumbo de Freuc1, de Proust, y por su estilo elaro y sutil a un tiempo. Los pleados, oficiales, comerciantes, artistas, músjcos, salta a ~b1"lr la puer.ta, le saluda amablemente y
de Joyce: nalo S 'levo. Bien lo merece, 01)1na Bell- elementos sobre lo;; cuales trabaja son la pequeña dibujantes, escritores, bailarines, chauffeurs, laca- lleva. val'las veces la mano a la visera. Por supues-
.tamín Cremieux, que pregona sus valores y aeusa burguesía, las profesiones liberales y los tipos yos, y muchos otros actores de la ciudad, tienden to, a los tip08 uqe no están en condiciones de darle
a los italianos por la escasa atención prestada a popularf3s. a arregiar S11 V1da cómodamente, evitando el tra- propina, el portero los mira despectivamente ya'
los libros: "Una vi(la" (1893), "Senilidad" (1898) Dil'O de ella Eugenio Liaski: "En el momento bajo corporal y sin producir nada positivo, pre- cualuiera de sus preguntas, o no contesta del todo,
Y "La conciencia de Zeno" (1923). a~~tual, A. N. l'e~!i es líniea ell. su géní'l'O. Su espí- fieren vivir a expensas de los demás qlle trabajan. o rqsponde bl'usca¡nente, tratando de hacerle en-
El triestino Ettore Schmitz - en literatura 1'1hl de obSe1'\'aC1011, exaeto y VIVO, aplicado a todo A mí me daría vergüenza vivir de tal manera; y tender: "has de pagarme por mi amabilidad, y si
Hwlo Svevo - arrancó entusiasmo también a Va- lo que es vulgar y fútil, se Ulle lt una alegríabue- por otra parte ignOTa qué trabajo podría realizar en itc1elantl, :faltas al cumplimiento de ese deber,
lery Larbauel y a .James Joyce. Es decir: la con- na y dulce." en la ciudad sin sentirme parásito del prójimo. hallaré el medio para vengarme de ti y te forzaliÍ,
sagración europea 'licue ,de afuera. Nadie es pro- y Alejall<lro Anfitetl'ov: "En el hUl~()rismo Es por ello que me es imposible evitar la vida en al fiu y al eabo, a dividir tn sneldo conmigo". No
feta en su tierra, a menos de ser político prepo- ruso eontemporáneo, su figura es illc1nc1ablemente el campo, donde puedo trabajar quedando con- puedo recordar sin disgusto la traza servil del
tenteo dueño o director de diarios (} revistas. la más elegante. Su Immol" 'poético sólo entonces forme C011 mi conciencia. portero con qlÜE'!l me encontraba y me saludaba
Pero lo curioso eil que parece que los italianos es efieaz: cualldo está de pies a cabeza vestido· Pueden replicarme y hasta probarlo, qu~ la la- todos los días cuando tuve la desgracia de vivir
se resisten aaceptar integralmente a Svevo, ni si- segú¡i las exigencias ,del buen tono europeo." bor del músico o del artista es tan útil y necesaria en un lujoso hotel de Buenos Aires. A mí me re-
quiera a elarle la trascellc1eneia "europea" que . Hay (lue advertir, sin embargo, que la. nota hi- co.mo. la del agricult.or. No qniero discutir sobre suta difícil comprender, cómo puede el hombre
,quieren Cremieu.'l:, Larbauel y J oyce. larante, la carcajada maritol'llesc!t,está. ausente tlstiltellla y no trataré. de· él por el momento, pues despo.iarse de su diguidad, permitiéndose) no sólo
Un artículo entre absurdo. e interesante, o int.e- de sus cuentos. "Es un humorismo en sordina", c1i- n6 es ese mi propósito. Me limitaré a decir que vivir a expensas de los demás, sino exigir, indebi-
rest'\intea pesar de sus absurdos y anticuados pun- "P. Alfredo PolIedro. qnienes hablan de tal manera me recuerdan siem- damente, dinero por su tarea parasitaria. Y 11 cada
tos de vista; decliea· a este problema José Raveg- pre las. palabras de Tolstoi, quien formula esta paso se tropieza en la ciudad con tal aberrnci6n.
CLARIDAD
CLARIDAD
Cada. cual trata de obtener algo üll su provecho
'explotando a 10il demús. Lo;; oficios mencionado>; VIVIENDO
existen exelm;ivamellte para librar a los ricos tle
l(}s trabajos que uo les agradan, y dan oportU1üdad
de vivir >lÍn plegar una tarea dura y ganar bien
Para CLARIDAD. J. SALAS SUBIRAT
aunque Sf>tl ejf'rciendo una llrofllilión despreeia1Jle, Tengo eomo gran amig'a una mujer singular. Es
lo cual atrae el!. las eiudades a una enorme eanti- maesh:a j maestra en todo el sentido de la palabra,
idolatra a sus niiío3, su eseueb es para ella el
.g dad de homln'p;; que podrían efectuar trabajo mu-
h ,ello mús produetivo. Y pienso que ello está mal. dulce refugio dnnap vive encerrada con sus "al-
mitas blancas", lejos, muy lejos, rle los hombres
A PROPOSITO DEL "CONCERTINO"
h Yo HO quisiera volver a la eiudad pam no en-
eontrarmc a ()[ula paso los vigilantes, los soldadoil,
pesquisas y los demús voluntarios e involuntarios
y sus ruindades.
Ej cree en una escuelita rural! .1!1Uy alej ada de DE HONEGUER
n parásitos y expoliadores del puehlo. Lo que es los centros, desempeñando su fUlSlOll con la voca-
ción, el amor y el desinterés que prel'isa Ulla niña
F aquÍ, en el campo, no me hallo sino con agricul- paní lanzarse a la ventura, eou objeto de ganar
tore;;, con los que me agrada relacionarme. el pan para los suyos, desechando las tcntaeiolles
Sin duda, no dejan ele infiltrarse algunos pal'á- dH la. el uelad.
F.itos entre los ~ampesinos y aldeanos, pero en E,; de un temple poco común: cOlltábame días Con ,motivo del "Coneel'tino" de HOllcgger, pre- A Honegger no se le puede rechazar porque es
primer lugar, elloi'l son escasos por no haber bas- pasados, por earta, que había heeho su habitual sentado por el maestro Ansermet en 10s últimos un artista. Lo demostró con "Pacific (231)", en
tantes personas a las qne se pueda explotar, y en viaje a la ciudad y que había vuelto más contenta (:onciedos de la Orquesta Filarmóniea de la primer término, y luego, con "Pastorale .d'éte" y
l'egundo lugar, que las condiciones de la vida en y feliz que nunca . .Jamás imaginaríais el por qué. Asociación del Profesorado Orquestal, en el teatro "Hey David", "Pacific (231)" originó comenta-
111 campo me permiten vivir aislado de tal gente. Pues, porque había tenido que contestar a una Politeama, se imponen serias consideraciones so- rios pareeidos a los que suscita ahora el "Concer-
Opino tamhién que los llalJitantes ele las ciuda·· de esas personas malvadas y cUl'iosa:'i, respeeto a hre la incapaeic1ac1 crítica en que se haHan algunos tino" para piano y orquesta j pero no se produje-
des Re mantienell con el trabajo dE; los agrieultore:;, su viaje y había teniclo la "osadía" de decirle que ele nuestros intelectuales considerados de van- ron <,on aquella pieza las mismas manifestaciones
lo que no oh:,ta para qne se precien de homhres había estado con su amado, al que iha a ver cada guardia. tle ehatura intelectual que ~on c:;te último.
cultos que perteneCE7n a la casta de ;;uperior des- vez que se alejaba elel pueblito donde e;jerce. ;i Es por ventura colJsa fácil hnc¡,r la, critica üe Recuérdese que "Pacifi" (231)" fué ejecutado
arrollo mental y (~spiritnal. Ellos se imaginan Sé, porque me lo ha contado con la sineeridad una obra mnsielll! La música, especialmente en do.~ veces en la mi'ma aLliclieión, tt::nie11l1o en cuen-
;;eneillamente que ,;n tarea es civilizar, guiar, juz- que la caracteriza, que hace tiempo mantiene re- at!uellas pipza;; sinfónicas que se atienden por ta, ,;egún rezaba el programa,' sn earácter nove-
gar y gobernar la manada inculta de los aldeanos, laciones Íntimas con "Slt homb¡·c" y que vuelve ca- ypz primera, tiene la, condición ele reservar muchas doso. Al oirlo por primera vez, el público pareció.
quienes alimentan y suhsidian con su trabajo a los da vez a su escuela nUls amante de sus niños, que de sus mejores cualidades hasta tanto no se la !lesconcertado: no había entendido bien. Pero la
'hahitantrf; de las cim1ade::l. ElIosafirmall con·or- quizá imagina tan suyos. eonozea bien. Y esto no ocurre sólo a los profanos, fuerza expl'e:'5iva del movimiento sinfónico era tím
gulIo que es Ile(~E7sario instruir a toda esta gente a los que van a los conciertos sin más hagaje que cvic1rllte que no. se produjo ninguna reacción des-
.j
, ;;;emiAalva.ie que eava la tierra y el estiércol; es Como es de suponer, se ha visto muy p(~rsegui su sensibilidad musical; los profesionales, los mis- agradable. :a-Iomentos ,después, "Pacific (231)"
ne(~esal'i() enseñarle, pero ignoran lo qué. da y atacada por su ic1iosinerasia, mas no se [wo- IllOS ejeeutantes, no obtienen jamús, en 'la primera fué aplaudido COll entusiasmo. Esto fué ·el 4 ele
barda v tiene la valentía de afirmar <:ada ve? audii?ión de una obra sinfónica de cierta magni- julio del año pasarlo. El 18 y 26 del mismo mes
No quiero pertenecer a e~ta clase dc hombres: a que se 'lo obligan, que tiene "su hombre", que no tud, una pereepeión aeabada da todos sus valo- y el 9 ele agosto pudimos oirlo de lluevo. Es in-
mi me agrada más cavar la tierra, plantar papas se ha adaptado a los prejuieios ele la ahsurda so- res. y si alguna de estas ohras se aparta con der- rliscmtihle que la quinta audieión tuvo un éxit(}
y ocuparme en las tarea;; del campo, que divertir ciedad, {lue la huhiera sacrificado en su lejano rin- ta lihertad Üe las normas musicales establecidas y tan COlll pleto como la tercera y la euarta, si nO'
eOll mis vel';;OS o tocando el violín en una reunión concito de provincia a ser mártir l1e su amor y mavor.
ya familiares a nuestros oídos, es natural f1ue se
de homhres curtos de la ciudad, quienes pagan ele su naturaleza, y que sólo anhela uua cosa: te- produzca en mayor grado una impresión de sor- Iiollegger es ulla per~ollalidad bien definida.
bien a los qne saben buscar las rimas componiendo ner un hijo suyo y poderlo deeir a los ignorantes, presa en el auditorio. Su ohra realizada le ,da títulos más que suficien-
lOR versos, lJ' mover rápidamente los ded03 sobre sean aristóeratas [) proletaTios, lIeuos de prejui- Si algún dere('ho tiene el arte ante la crítiea es tes para presentarnos el "Concertino", y aun cuan-
las tedas del piano. cios, que la tildan ele "iumoral" o "indecente". el de la defensa. Porque la crítica es un jnieio, do. esta pieza resulte semi incomprensible, no po-
Por ciedto, 110 quiero decir que en las ciudades Yo estoy con ella y aplaudo su actitud, vislum- y todo juez deja ,de serlo si no contempla los demos revelarnos contra su manifestaeióll. Que no
no haya gente que trabaja produetivamentej Imy brando por un lado los aspavientos de las "ele- dos aspeetos de la cuestión: la acusación y la se la aplauda porque 110 se la entiende, está bien;
muchos que trabajan en las fáhricas, no pocos eentes" y "morales" y 1)01' otro el triunfo de la defensa. La defensa del arte reside, ante todo, en pero que se la silbe v se In. considere mala a las
hortelanos y bastantes jardineros. Mas repito que libertad, en la mu,ier sin gazmoñerías y prejuieios. la ateneÍón salla y sincera del crítico. Si la com- primeras aU.c1ieiones,· es una 11.1'bitrnriedad, uno.
el elemento predominante e3 el que no quiere vi- j Cuánto ha!brímnos ganado las mll,i(~r('~, si fue- prensión del crítico es deficiente, tanto peor para. IIlCOllSeCUenc¡t1.
vir comiendo el pan con el sudo)' de Slt frente. ra mayor el número de las valientes que afronta- él y para su crítica, que carecerá de todo valor, Por de pronto, hay en el "Concertino" valores
Bastante tiempo viví yo también en la ciudad ran el problema sin mirar hada atrás y ver eons- pues no hahrá dado a la manifestación artística evidentes: el piano desarrolla un motivo intere-
ejerciendo una profesión libre y ganando más tantemente como el ojo de Jehová, a la sociedad toda la auto'ridad que debe merecerle como cosa santísimo y bello; en algunos momentos el con-
de lo que era preciso para el 1Jienestarj pero con hipócrita qúe nos rodea y nos hace sus víctimas ! a juzgar. La condición esencial del critico es 'la de junto orquestal presenta un colorido intenso y
el tiempo me persuadí que vivir de tal manera permitir que la ohra se haya exteriorizado en bien definido. No puede negarse que Honegger es
era una vergüenza, que era menester cambiar de FLAVIA R,OUS$EL. todos sus aspectos. atrevido, audaz, hasta por veees agresivo, descon-
vida y ante todo dejar de aprovccharse del trabajo Se ha dicho que para hacer crítica es indispen- l'ertante.
ajeno, pensar en mi mantenimiento, procurándome sahle, ante todo, saber amar. Encarar la crítica Atendiéndolo honestamente se impone conside-
yo mismo los artículos de primera necesidad. He eareciendo de esta condición, es deshonesto. )'arlo rmwho Ni ambos aspectos.
ahí una de las cansas principales que me indujeron Toda innovación artística es un riesgo que se Las protestas ele algunas personas se produje-
a ahandonar la eiudacl y a aislarme en un lugar corre ante la incomprensión. Por eso hay tan ron, primero, por predisposición, y luego, porque
apartado.
No quiero en ésta aglomerar los temas que 50-
"LOS POETAS" pocos artistas verdaderos.
Las nuevas tendencias y los tecnicismos nuevos,
ellas sólo pudieron atencler a lo qne hay ,de eo..'1r(l-
ño, novedoso, desconcertante y agresivo en est~
que si bien no son por sí solos la obra maestra, "Concertino". Porque esas pcrsonas poseen una
. meto. a tu considcración, y dejánrlote tiempo para Le ofrece a Vd. {as 11U?jores más de una vez se han presentado al mundo ínti- mentalidad unilatern:l, se hallan orgánicamente
que. reflexiones bien sobl'P. ello, iré preparando mi mamente ligados a la proc1ucción del genio. Y por incapacitadas para la comprensión ,le los varios
segunda. carta, que reeihil':1.s tan pronto reeiba tu;; obras de los mejores poetas./ la mi;;;ma razón que esas tendencias y tecnicismos aCipectos que ofrcce una obra ele esta naturaleza.
impresiones "obre ésta. no alcanzan a constituir por sí mismos la obra de Podría deducirse de esto Hlle sus faeultacles audi-
clásicos y modernos.
Un j'llrl'te nbruzo de tu tío que rrmdlO te quiere. arte que por ellos se exterioriza, no puede recha- tivas no existen para lo armónico, y solamente pue-
zúrselos de plano. Los progresos en <lultura artís- den despertar de su amodorramiento ante lo iH-
ANTONIO Dl4Rl4VENSKY. tica no han sido a la postre más que nuevos modos armónico. Aplaudir el preludio de la "Kovantchi-
de interpretar y sublimizar las pasiones humanas na" no tiene ninguna importancia. No se precisa
t
;
:,
paro nos consta (Iue esa reacción desagradahle tu- fjUB "l realismo prevaleee sobre la fallta~ía y :,>ó~o
vo origen en elementos inteleetuaIes que, no sólo
se atribuyen esa autoridad, sino que la utilizan
para dar noticia y haoH!' crítica de tutB Bn puhli-
eaciones 'que van al público.
, y por si todas esta.<; con;:;ic1eraeiones no fuesen
l1l1 la eseena mu<la el arte retrocede al SIglo XIX,
illtellsifi,~{¡1ll103e día a día y dando de sí el tóxico
lloeesariu para que los espíritus elemeutnle;; vivan
rm un IUlUldo inverosímil e ingenuo, efecto del
vel!eno ingerido en esos espedáculos que califica-
!
:
~1.11.1'.II.".I,.,,"n.'hll.'I.I,.fhJl.II.'I.rl.' por
Un cuento de ambiente portuario
ERNESTO L. CASTRO ;)
I1
suficientes, no podemos olvidar que el "Coneer- mos de irreales; tal como las obras romántieas
tino" de IIonegger es presentado por el maestro habladas. IJ
Ansennet, y él nos ha dado muestras acabadas de
No sucede así, sin embargo, eon las obras tea- Cuallr10 n las eineo y media la estridente C:llll- les señalaba el sitio dónd€ dehían prestar scrVl- • IJI
su gran cultul'[l musical y artística (ver su "Estu-
:
1".1
tra·les inspiraelas en el ambiente ~Cl'eno dD la panilla del reloj rompió el "ileneio ¡Je la pIeza eins, éstos deilapareeían en el interior del elevador. ¡
dio sobré la música Rusa", "La Nación", 24-8-24,
y. las dos conferencias pronunciadas en el teatro
razón y 01 buen gusto, sean estas pwzas el.? c~r~e ,José Vidal, levantándose de la earu:t la_ detuvo y En medio del silencio la voz se oía dura, monocor-I
Cervantes, reproducidas en el mismo diario los
días 22 de septiembre de 1925 y siguielltE~s), de
, modo que una protesta de la naturaleza de la que
puramente arrahalero ode una mAJor y m~ lUCI-
da procedenein social. El hecho es que el uni.
ha tomado lo bello y lo feo y lo amalgn:ma como
eneendió la luz, eléetriea. De pie, en panos meno-
res, :;e tleS})(!l'ezó eOIl UI1 b{)stezo tleseoyuntante al
mismo tiempo f[lW levantaha los brazos en alt~).
de. Vidal acereóse a un grupo de peones que mo- ~
vÍan un planehón de madera, ha,io la vigilancia'
de un ea pataz. Lo,,; hombres se agarmlJall a las par-
I
I¡"',,'
corresponde a la naturaleza de las cosas. Lo bello SentÍa,~e eanSl1rlo. Su mujer, que ahora dorIl.u a te~ sobresalientes del planehón, los músc?los se
, nps ocupa implica uu desconoí'Ímiellto del músico
v lo feo son motivos estéticos indispensables que prot'l111daIlH?Ilte, ,;e había quejado de dolores m- pmíarl tensos como cuerdas y cuando algmcn", en-
y ,del artista, a la vez qUD una ingratitud haeia
el hombre y la Asociadón que nos presentan pro- le haeen palpar y sondear la vida en ~us pro~un tE'rrlO'; impidiéndole clormir. Entre dos bostezos s: tre ellos, daba Ull grito, todos, aunando las f~er- ~, I,~
gramas clásieos de primt~r orelen y nos lmeen eo- einmiento~ m:ts Íntimos. Una ohra de g'enero sallle- puso ~)l pantalón; . eneendil~, el "p,rim;ls i>" f;olo~~ zas, lo ha¡·íall ~:orrer unos metros. Una vez lIsto, :
tes(;o - por ejemplo - es siempre un mGmento ~ohre pI UIla eneerohta y saho afnel~. El }MtIo e~ eomenZal'Oll a pasar en filas, llevando al hombro ,~
Jleee! a la vez 1m; obraR musieales modernas,
usanelo para ello de un tado y una medida (Iignas de vida llevado a escena con el fin de humanizar tah;1 ohseuro, lleno de sombras, emn a ~Ielltns se sacos de eereal c¡ue llescargaha.1l de earro¡:; yn- i r
los propios actos de los que dep~o~an ;la inj~st~eia :1('('n'tÍ a la ('allilla y dejó la cabeza baJO el cho- gones. A execpeión de los grItos que I)l'ofen,an, :~
de todo elogio. COll esto no se pretende {1ue el no ,le agulL fría que tcrmintÍ por disiparle el sue- eontra 105 eahallos, lo>! eaneros, al pretender atra- í
auditorio haga renuneia de sus opiniones perso. o felonía que fluyen de esas pSleologlas escelllCaS
destinadas a formar el armazón de la pieza y ño. Lns emnpanas ele una iglesia vedna tañeron ear los carros en el costado del c!(wador, .ape~~s
nales y de RUS elenlchos a rebelarse contra lo que ('Oll intervalo, los tres euartOfl eh) horno "i ~e oía una palabra. Vidal tenía la obhgaelO11
t,o commlta sus sentimieútos estétieo;:; más o me- hacer resaltar el <:ontraste anímieo en la reaJidad
rl,el eoneepto arti'ltico. Ya en la hahitaei6n Vidal bebió a PC(lU{)ñ(~s de !!ontm' la" bolsas. De esa manera. pasó toda la
nos elf!sl11'rollados. Pero sí, negamos a los espíritus ,oo1'ho;, el líqnido que httrlwaha on la caeerolita, 1';11- mañana, Al mediodía fuése a almorzar a una de
IIp';resivos y apasionado!';, incapaces de imparciali- En los sainetes nuestros, crioHos, hay siempre
un bu fo que llora., . y un serio que ríe. ,. Estas ralldD al mismo tiempo cli;;;traÍdo, las oleografías las fondas próximas al puerto; continuando pOli'
"ad ante lo novedoso, el más mínimo derecho a fijas en In, pared. Una vez listo upag6 la .luz, e.e- la tarde ('on la misma tarea.
¡'¡idamillar sobre 1as blHma~ o mala;;; cualidades figuras son esencialmente ,dolorosas y ~;ompren
rró la puerta suavemente y empezo a cammar S111 Cnall!lo a las cineo aturdido por aquella cuenta
~}le una proclncei6n mu.,ieal que aporta valores f;Íbles únicamente a los que siguen con alma las
Il.Up,vos al arte. ineideneias de los personajes encargados - en mu- hal'f'!' ruido. monótona qnele erispaha los nervios se iba a rilo-
chos casos - a reproducirse en el eterno tinglado En la ('al!p, entre las lívidas tintas del auwue- tira,l' le detuvo la persona alta de guardapolvo
Atribuir a HOl1egger o a Stravinsky, valore.:; t;er, aIgunn~ pen'o;; vaglllll1nilo~ revol VÍHI~ .un ca- blilllCO.
positivos de renovación, un deseo único ele efec- en que por vocaei6n o simplemente por, ,hambre
jÓil d(~ hasura, desparramando los desperchelOs por -Usted va a trabajar esta noche.
tismo desorbitado, es no sólo una inconsecuencia, actúan, ereando su muntlo de francas I'lsas am-
biguas y sollozos reprimidos... Son nllle'stros 1'1 "nclo. Al oír pa,;o" levantaron la ¡,abeza des- -Discúl11eme, no pucüo, tengo mi mujer el)
>lino también una inmoralidad cuya Cliente debe f:onü¡ulo;;, recelosD.s, p;1 m proseguir, viéndole ale- Ierma.
b,lscarse en la careneia dI'! toda cultura musical m~jores personajes, en la acepción honesta del
jal'~e. Vidal e~peró en la esquinll durante un Tato
y en una evidente arbitrariedad pam eonsiderar tOl;cepto. Paria~ sociales. Sus almas vibran' al -Todos me vienen con la mism¡t excusa - le
eonjuro de voces amigas que se pierden a:l caer ¡ta"tn que brillaron en el fondo dc la calle las se- replieó el otro con auitud. - Si no quiere tra·,
valores que pueden no manifestarse de inmediato. iialp~ lumiuo;:as de un tranvía que venía atestado bajar tiene que ir a hablar eOll el gerente.
el telón sobre la última cscena de la noche ...
Porquo Honegger en "Pacific (231)" y Stra- El públieo lns mna ti su manera; por el pllwer de Vl1sajeros. Procuró trepar y hacerse sitio entre -Pero, oiga ...
vinskyen "La Danza Infernal del Rey Katchei" que les brindan sus earieaturas o ::>as tintes vivos los hombres arraeimados que colgaban ele las ag~ -No sé nalla, arréglese eO~l él. . .
(P~íjaro de Fuego) han tenido la mm virtuel de de cruda tmO'edia. Los mua pur el arte. Fuera rraderas; de:'lpués de correr unos metros lo conSI- ViL1al hizo un gesto de rabia, de 1l1lpotellem.
guió. En el interior del eoehe iban las personas
sufrir el vértigo de las notas sonoras; han sabido de esta malli~stacióll, "OH seres que ambulan por -Trabajaré. 1;
abarcar con incomparable maestría una ÍImlens'l el otro "mundo", por el de sus adllliradores, bus- promiscuamente haeilla~las, los cuerpos e;rlmlaban -EntolH,es a las siete de la noche en la lancha ¡
multitud .ele armonías dislocadas y prontas a per- un calor tibio y malolIente. Algunas mUJeres pa- "Bigná", dique cuatro, sección quinta. ¡I
cando inútilmente la conexión espiritual qun se
derse en lo desconocido, en lo caótico; se han radas en el pasfIlo al lado de los asientos ocupaelo;; --Bien. ¡
establece entre público y actores en h~ horas de
enfrentado con lo quc era superior aun a su pro- recogimiento artístiro. por homhres, apenas si prestaban atención en esO. y dando media vuelta empezó a cmninar mal- !
pia medida y han extraído a'e alú hermosns y po- El cansancio mareaba sus huellas en 1Jnos y en
He ahí un motivo real mezcla de llanto y risa otros. Mll6hos, por el traqueteo del vehículo, dor- humorado. 'l.
tentes piezas sinfónk,as, cn que cada motivo force- Volvió a In fonda donde babía almorzado, S fr· .;
capaz de producir el prodigio artístico esperado Ilúan apoyando .la cabeza contra el vidrio de la
jea por escapar al ritmo y a la lógica, en que
si con molde ele apariencia feliz pudiéramos tejer 1sentó en una nlesn cercn; ue una gran parrilla, so.. · I
ventanilla.
las notas Se lJersiguen unas a otrns como furias
la gran tragedia dl! los siglhs dándole ,la SHl1cílla Cuando el eoche llegó a la>! calles Paseo Colón hre .la cual chil'l'iaban achuras y churrascos, Y. es- l~,;':
desataelas y prontas a huir hacia lo inconcebible; peró qne lo atendim·an. A yeees un golpe de VIen-
y amboi'; 111lll conseguido, al ,borde mismo del vér- forma del saüwtr.. in Qué importa qUH los persona- v Estados Unidos, José Vidal elescendió y engro-
jes hablen en crioHo, si sienten bien ~ Aun más: to, reavivando las brasas, hacía que el hum~ inva- .'
tigo sonoro, t'neauzar el todo dentro de la armonía ~ó las largas filas de los que se dirigían a los
~ puede suponer que In figura central sea un coco- ¡l¡ques. diera el local elifundiendo el olor ele la carne asa- 'l;,
y el ritmo, consiguiendo así hermosas creacion€;; da. Vidal una vez scrvic10 ('omió despacio, obse~-"
musical€s en que se produee la estupenda trilogía liche? El odio, In pasión, 'la venganza, ,los celos,
son principios inmutables en la vida humana; y vando a los clientes que eran en su mayorla estJ.- I
de 10 inesperado, de lo audaz y de lo armonioso ElItrnn¡}o a los Elevadores de granqs, caminó baelores. Entre 105 ocupantes de una y otra mesa ]
¡}eutrodel caos. In ignorancia no es un estigma inuato, sino pereza
entre 1m laberinto de filas de holsascon (joreales se cruzaban, casi a gritos, preguntas y re~pue.s- 1J
y {){)l1ste que esta;; ohsermcí¿nes no las hacemos
al público (pueii 110 tendrían razón de ser ante
intelectual. Pm'o de aquí no dednciremos que el
ignorante carezca dt1 Renti~lo humano. Es un sér hasta llegar a un claro, frente a las ,oficinas. Los
empleados iban reuniéndose a me elida que l~ega
tas relaciunadas en' gran parte <3on el traba,}o, s:n
dejar por eso ele comer. Todo's guardaron 811enc1.0
I
ineulto, nada más. Sus pmnOlles pumlen ser ohser-
1llUl protesta. del mismo), sino a los elementos
vadas seriamente por el artista, puesto qlle repre- han y hahlaban mitre sÍ; pero las, ~onversl1;SlOnes euando entró en la fonda un ciego eon una gU1-
intelectuales que han sido los únicos que han sil- sentan una de las tantas ltl'iiitas de su l1{unen ..• se interrumpieron (mando de las oficmas. saho un.a tarra debajo del hrazo, conducido por un ehico
hado el "Col1certino" para piano y orquesta, de persona alta, de guardapolyo blanco, con una lI- que llevaba un vioIÍ.l1,. Despu?s de afinaE los ins-
Altura lIonegger . breta en la mano y ,que empezó a llamar por el trumentos tocaron (hstmtas pIezas y al fmnl reco-
J'. SALAS Su:amAT,
l1ombr~ propio a distintos empleados; después que trieron las mesas.
Montevideo.
CLARIDAD
-Que Dios le dé mil años de felicidad, herma- -j Dígame! 1, Para eso le paga la casa <g -.:. le CLARIDAD
nito - decía el ciego cada vez que sentía eaer llll.! dijo sUl'eústieameute.
moneda en el platillo; y continuaba moviendo los -Señor, .. (In grotc~camellte enul1eiaha las execelencias del do eara eonocída y que lo habhlba en forma
.labios "Como si rezara. -j Que señor lli ocho ('lHll'tO:l! 1fañana se pre- Hstableeimiento : afectuosa.
Una vez que .José Vid al terminó de C(llIal' sali6 ;;;enta f'll el eSÜl'itorio. ¿,:Me comprende'?.. 1Eh! - j Al "Gm'ihaldi" . . . j Pasen. . . señores! ... -,1 Qué desea '] ;íi¡¡,
d~ la· fondlt y caminó despacio por la calle Inge- ¡,Oye'! ... ¡ Veinte mujeres!... j Veinte mujeres en la or- -Vea, amigo, su mujer ha estado bien dUl'anto
mero Huergo hasta; llegar a la de Cangallo por -,sí, pero ... questa!. .. todo el día, pero a eso de las siete de la noche·
donde entró al puerto. A medida qur. se aproxi- -Chói:SSS. •. Nada ... nada, no quiero saber na- 1'e.túa puesta una levita rotosa, sueia, COIl una 8.3 des(O()mpuso. No es nada, ·no se asuste.
maba a los diques las luces de los vapor(~s se lm- da. Mañana arrcs!'lllremos este asunto. gran camelia de trapo' en el oj al. -Si S':l pl.HO mal, ¡, por qué no me avisaron'
cían visibles, destacánclosr. en los flancos los ojos Dirigiéndose aY la e~ealora de gato, se tomó dfJ -¡ Pasen! . .. j Pasen! . .. j El mejor ehop! ... --,~ Adóndr. ~ Además ha sido una cosa tan l'á-c
de buey· iluminados. Cruzó el puente de la exeh~sa, los esenlones y empezó a subir. El euerpo apenas Sus movimientos cran desaeompasados. Las guías ni da . .. ¡ Nadie lo esperaha!
las aguas pasaban por debajo sílfTnciosas, negras ... se (h)~tataba ,'iobre el flanco obscuro del buque. clpl bigote le caían Ineias sobrH la boca. Vidal, . P(~ro, lo qué '? ¡, Qué }Jl1,sa ~ - gritó, asustado, dos-
Al llegar nI final de la escalera, saltó sobre la nI verle el rostro, lo a~or~i6 eon el de !ti mor:'il1 y haeiélldoi'i8 del otro.
euhiertl1. Villal ';0 quedó unos instantes mirando el simil le pareeió tan gl'aeioso que aun después Entró en In pieza de golpe. En eHe momento
para arriha, sin poder precisar (;011 exaeti'tud lo de haber dejado atrús el eafé, creía tenerlo de- una vecina procuraba poner entre los dedos de
La "Biguá" estaba atracada al eo~tado elel va- sueedido; sus ideas inconexas, deformadas, le da- lante de él, 'aIltmeian!lo C01l la misma sonrisa es- la mujer acostada un C;l'Ucifijo. Comprendiendo.
p.or "Oslo", cuya mole so alzaba sobre ella, ma- haü a las cosas un taTúcter distinto. túpida: :11 verdad de golpe, se abrazó al cuerpo ele ella-
cIza, alJsorbente. En lo alto, atado OH la baranda -Estamos listos - le avisó el patrón de la lan- - j Muerta! jMuerta!
del buque hrillaba, borrosa, la luz de Ull farol En la ob¡,¡cnrü!r:¿: de laR arcada,,; se veían algu-
dm aeerdllld()~e con un blok ele reelbos en la. mauo. nos eal'teles luminoso,,; de :fondo eolol'lttlo, que lle- Lo ~acu ron eJe allí. Alguien, al lado le repetía:
que el viento meeÍa. Apenas iluminaba los prime- - Quiere firmarme el eonforme. -1 Hesi,?;llwión!. . . j Hesignación, amigo! ..•
ros tramos de una escalera tle soga. Vidal qne des- vaban instoripciolles: "Cmm de Hospedaje", "Ca-
El (;ogi6 d ltÍ piz que le ofrecían ,reomo un au- ma;; dflsde un pe,;o", "Hotel", "Fonda" y al1'e- j R(,~lgl1ntJInn ! ...
de- hacía do;; horas eOlltaha las hol;;as de la landm Cay6 sentado sobrü una silla y nmequeó 110-
sufriendo In eada vez miÍ,; intensa mortifieadón tómata trazó su nombre; luego, subi6 por la es- eleaor t1e ello;; moveriie :'iombras confusas en ra-
en.hml. Las aguas del t1ique cabrilleaban dehajo ras maniohras. Atl'iÍ~ iba quedando el vocinglerío ran~: •
del sueño, Sillti6 atrnílla su atención por el regu- - j Dios mío! ¡\ Cómo es posihlü que se haya.
lar titileo de la llama. La luz se le pre,;entó vaga, ele sus pies, llenas de reflejos. Una vez que estuvo de la gellt.e y (!l rumor musical de las orquestas.
IllUPl"to '1 Ayer HD más estaha sana, y eontentn. .•.
imprecisa. Durante unos instantes lneltó por mau- [\ 'bordo, se lo acercó el empleado que atendía la Caminaba automátieam!111te, la gente se eOllvertÍa
enrga del buque. ante sus OjDS "ohJ'eeargado~ de sueño en bultos ¿ Por qué ~il() '7. .. i No hay justieia :sohre In tío-:-
·tener los ojos abiertos, pero al final cediendo al 1'1'a! ... Yyyyy ...
-¿Qué te pasó"? nrl!íllimo~; al ... ruzar Ulla calle un automóvil pus6
sueño. los eel'r6. La caheza tuvo unos mOVlIlllen.
ctoi; oscilantes y teTlUinií por eaer sobre el pecho: Antll In pregunta volvi{) a tener conllienciade rozándole (~on el gnanlahul'l'o. Entre lo.; sollozos pemió que qmzas (mando su-
se habílL quedado dormido. la situaci6n, que el ;;lWllO ,había atenuado en parte. -¡ Marmota! j Mire por donde eamina! - gri- pieran en pI empleo la mnorte de su mujer no
- j Eh !. .. ¡Eh!... - gritó alguiell. -Me sorprendió durmiendo. tó pI chofer. lo despedirían; tamhión !le!1¡;;ó 8n los gastos del
- j Qué mal'Hllll! j El ti po ese tc va reventar! y pI, Hin hacor caso del insulto, siguió mar- (~ntierro: tendrítt que comprarse un traje de luto
Despertó f'obl'esaltac1o y miró con azoramiento o mandar a teñir el que tenía puesto. Sus ojos
a los lado,;. Los marineros continuahan ignal que i1 Y eómo fué? ül!:Il,tlo con el mismo puso_
- j Qué sé yo!. .. Mirá... TOItuí mi libreta; me se detuvieron sobre el cuerpo exúnime de su
antes eon sn trabajo; pf\ro de entre 01 grupo salía En la Plaza de Mayo tom6 el tranvía, pag6 el
un rumor de risas reprimirlas. VDy a t1ol'1uir. Tengo un sueño que no me deja mujer.
boleto y c1espué,;, llrrellell:1udose en rl asiento, se
-Patrón 1, CuiÍntas lingas van J e"t¡¡r. '. parado... 1Hasta mañana! durmió. -bEs posible que esté muerta?.. Muerta. - .
El patrón de In lancha saeó del bolsillo una li- --j Hasta mañana! - le contestó el otro. ::\IuPl'ta ...
Dllnni6 un buen rato hasta tiue le despertó Ull Como se le e~eapalm el significado de la ,)a-
breta. ajada, mugrienta y despup~ de un rato, le 1'l1ít1n extraño: era el inspector que golpeaha con
{~onte¡;;tó : Cruzó la lllauehada tf'll!1itla del muolle al vapor labra, la repetía plua poder comprenderla mejor •.
la pinza sobre In agarradera del asiento.
-Treinta y éilleo -- y agregó, por su (·uenta. y caminó en dirección a In salida del puedo. Des- -¡Boleto! -Sí, se ha muerto ...
-1' engn cuidado que no lo vean dormido. pués de pasar el puente, una "hetere'''' saliendo de Volvió a llorar.
las sombras de los galpones se puso n. caminar a Se lo entregó y después, tratando de orientarse, U n u u II u ... u u 11 U U
-Sí. " f;í... - dijo él. mir6 por la ventanilla: se había pasado unas diez
Habría dormido una media hora. A pesar de la par do él. . Cerrábausc1e los IJárpados. Entre las nehulosas
-j Vamos! ... - musitó ill;;iuuante. euadras. BajiÍndose df'l tranvía, desandó el ca- del sueño entn'vi6 la cara aquella que le hacía;
su voluntad el sueño ynlvió nuevamente a lI101es- mino. Apenas ontró en la casa, notó algo anor-
-tarle. Los IJlll'pullos le pe~aban eomo plomo y corno -~Qné'~ recordar la ele la morsa y que sonriendo con ex-
-¿ Venís? .. liIal: en sn habitaeión había luz y sobre las cor- pre8i6n estúpida gxitaba:
poco l\ poeo iban veneienl10 su resisteneia, roaceio- tinas de género recortá:banse sombras humanas.
nó (le una manera brnsen y :'ie pnso n contar laf; -1, A dónde '! - preguntó él, ('011 la illCOH,eien- -¡Veinte mujeres! ¡Veinte mujeres en la or-
ein. del sueño. Cuando abl'iií la puerta, un hombre que estaba 1m questa !. .. ¡ Pasen al "Garibaldi" ... ! j El mejor
lJolsas (¡ue formaban las ling'a~.
-Una. .. do,;;... tre:'i ... - -A dormir. el interior le tomó de un brazo precipitadamente. "ehop"! ...
.-i, A dormirJ ... -j Permítmne, amigo! y al calJO de un rato empezó a roncar: se ha··
Seguía la cuenta hasta anublúrsele los ojos y
entonces levantaba do nuevo la eabeza para disi- -Sí, hombre, sÍ. A dormir. El no opuso reilistencia, se cle,ió llevar; única-
e bÍa c1ol'lnido.
par la,;; sombras del sueño. Faltaba poco para dar Lo había tornado de un hrazo y se apoyaba muy mente trataba de recordar quién em ose hombre Las vecinas entro tanto yestíall a la muerta.
fin a la bodega de la lancha. De arriba llegaba el junto a él, infiltriÍndole el ealol' del cuerpo. De
I'llido de los carreteles del eabrestante al ~nrollar
el !'.able del guinehe. El ganeho descendía hasta
la lancha, trahaban en él la linga y una vez lista
golpe Villal se paró y la miró asombrado.
-¡Qué hay!
-C6mo qué hay. Sonso j Vamos!. .. ¡ -;T üll ! ...
E R N E s T o L e A s T R o'
un peón ai:!Omac1o en la borda. del Imql1e, gritaba: -No, dejame - dijo i y en forma brusca le hi-
-¡Arrea! ... jUp! zo soltar el brazo. - Alldate, uo quioro saber na-
Silbaban las viÍlnlIns del cabrestante, dejando da eon vos.
escapar una nube de vapor, el cable se ponía ten-
id pul r
La bUSf:Onll :;;e cl¡1tllVO a:lombrada di) verso trata-
so, erujía, y por último la enrga se elevaba Hobl'e da en esa forma, y ,después lo grit6 rabiosa:
Revista para todos
el trausatliÍntieo. -1 Idiota! j Borraeho! ... .. los gustos.. ..
-Sioeeete. .. Oooooeho... Nueeeeeeeve ... y S<1 fué en sentido eontrario.
Sentado en el castillete ele popa luchaba obsti- .El hombre sigui6 caminando con el torso incli- Esta en venta el primer número
nadamente contra el sueño, pero era en vano, éste nado hacia adelante y las manos en el bolsillo, por
lo vencía. Amodorrado creyó oir en voz alta:
- j Eh, aiga! j Cuidado!
las calles cercanas al ,Puerto. Pasó bajo las arca- Jueves 5 de Agosto aparecerá el segundo número
da" elel Paseo dl' ,Tuho. Los cafés l'esplandlliCien-
Abrió los Qjos y vió (¡ue a unos pasos de dis- tes de luces, estaban llenos de gente; salía de '. de esta revista de batalla
-taneía estaba el encargado de la ribera que lo mi-
Tuba con expresión maligna.
ello;;; el rumo!' tlonfusd do voces y cristales. De-
lante de la puerta de UIlO, un: hombre gesticulan- 10 centavos en toda la República Comprela \
t
CLARIDAD CLARIDAD
EL TEATRO p E E HIJ
NACIONAL EN CRISIS
Por A. SORICH
No es como para enorgullecernos la situación moral que han tomado por asalto la escena y me-
:actual de 11.uestro teatro. Desde unos años a esta dran 11 costa de la indiferencia elel público, la A continuación traducimos ·un brí- -"Somos extraños el uno para el otro, papá!
parte hemos ido perc1ielldo con l11atemá~ica pun- conveniencia de algunos empre:;arios y la igno- lIunte artículo del periodista, I:!scritor - contestó cabizha,io, poniéndose la gorra de 00-
tualidad los pocos valores que nys acrcdlta~a~,.y rancia de otros. ;1/ cr'Ítico ruso, A. Sorich, bajo el títu- tudiante (:011 el omblema del instituto politécnico.
hemos ido acrecentando la Danbdad de lo muhl, I¡ml clemostracüí¡¡. SlllJesti'va. lo que n08 sirvlJ tlP acúpiti'. "En el comedor, Robre un canapé anticuado, una
lo torpe y lo sbez. . Dm'emos 'lOza petiltcña aclal'rtcüJn, \'iejüeita que 110 comprendía nada de lo que sueo-
y lo peor. 110 eso, sino que en lugar de buscar Lo más típico y característico del teatro adual con el objeto de jacilitm' lit comp?'en- de ti su alrededor, lloraba amargamente. Y sus
es U espeetáeulo que noche anoche se oh'eee a las s-irin de ¡¡idiO artlculo n los lccttwes. bndü,," plateados se sacudían" ..
nuevos caminos y otros horizontes, eada vez cae- puertas de los. teatros de revista (aunque había- El célebre escritor ll¡ún TllrfJuenef/ Nul1t~a llegué a descifrar ese enigma; porque se
mos más en la vanalidad. mos dicho que tenía muy poco digno de comenta- ha escrito una gran novela bajo el mis- movían preci.'ialllcnte los bueles de la vie,iecita y
No es por culpa de la revista. rio). Allí las mujeres que en escena sólo han Ra- mu título, lJ en la c¡¡al d/:'scribe magis- no otros adminículos... Mas, dejemos los buele" ...
bido obtener el aplauso por la helleza de sus tralmente el desmoronamiento de la Tenemos ante nosotros un documento, únieo en
No vamos a suponer ingenuamente que este piernas () el esplendor de su busto, le hacell una familia fcudal 1'1/8a en la priml!1'{[ mi- Sll género: "diario de pared bisemanal, edición ca-
desastre ha sido ocasionado por auge de la re- descamdn tompetellcia a las prostituta~. tad del s(glo XIX. Entre el padre con 'Ha-familiar de los eiudadanos N. N.", los que,
vista. ideas ?'(lllcias que cons'idemba a los viven, segÍlIl In. rlil'eeci6n ci>támpacla en aquel "pe-
Los saineteros de hoy. (( kre]!ostniki" (sILCI!SOreS de la yleba) riódieo" en un puehlo eereano a lVIo~cú.
Es éste un género más cinematográfico que tea-
tral, que resta poco, o muy poco, al tea.tro p~o Salvo los pocos cultores cOllseientes del sainete, corno sn propiá{ad (1 la cual' se podía La.-; eireul1:,;tmwias y 10i; personaje:,; de este eé.
! piamente dicho. Por lo demás, salvo las mcnrslO- que por otra parte !lO hacen sino l'epetirseen cada lIsar como me·rGfUlGÍa (10 tnujiks lJO?' lehre (10emnelltn, ~on dignos !le ;;er conocidoi; por-
nos por el eampo sucio del lenguaje arrabalero, estreno, no hay nada de valor en el género. 'un lJelTo "bull-dog", () 20 muchachas todo,;.
que hacen a veces los revisteros, poco hay en ellas p01' ·un potrillo), Ji el hi,jo "n'ihilista", Personaje núnlPl'() UWl. Un "rabkol"·', el qUH deg-
811 imita desearadarnente a ParJlel'o, sin lograr
que merezca un comentario. compenetrado tIa de cdlllmas ideas o(]- empeña en el "periódico" el papel de instructor
siquiern aeercarse a él. No basta hacer decir a un cidentales, demoaát-icas, 8l!rgen- des-
p("rsolluje "me cadli en die", llam aarle eiuclada- etlIllullista, llnc;; en el mes de mayo último se afi-
No 'valoremos de llcllerdo a las ganancias. ctllf'nencias, discusiones JI un contiíl1u lió a los "pionnel'H". Y desde ese momento histó-
nía ~ubul'bana. roce molesto que lleva, al fin de Cllen-
Más de Ulm vez han repetido los eternos defen- rÍC'n dejó de pedir golosinas a su mamá y cesó en
sores del teatro nUC1ional que una demostración "Amea", "vento", "Iureu".. llicen ahol'l1 hasta tas, a la ?'I/ptltra total. Po)' mrís qne el SIl:'; hostilidades eontra el gato bizco. Observabieu
de S11 estupenda vitalidad podía hallarse en las los futuristas. E;; una "criollac1a". dislowmien!o, la tl·i!erenciación en lo la diseiplina partidista, lo que no le impide sen-
familia SOIl siem}Jl'e 8ignos de la p1'O- tir ('ierta no;;talgin por lpos caramelos rellenos y
cuentas de las sociedades de autores. La comedie! dramática. [/tnda efert'csccncia que SI/cede el! la la~ guinda,.; del jardín vecino.
Si juzgamos C011 ese criterio, no cabe duda que Las obras de Eichelbaum no se rep1'i5an. Gui- sociedad, sin embargo, todas las divl!r- Pel'81maje núnwl'o dos. El hermano mayor, sin
el teatro argentino está lejos de su muerte. Los bourg no e~eribe mús. González PadlCco se ha ,lJC1lcia8 entre el mllndo agonizante y partido, y un iiujeto illconcientf'. Se siente atraí-
autores ganan lo suficiente, de acuerdo con lo retirado a enartele;:; de invierno. González Cll::;tillo el mundo '/luciente (nihilistas, na1'ocl- do frecuentemeilte por el aparador, en el cual ren-
que ponen. Los empresarios ganan mucho mús de no se preo('u pa más de 1a gloria. l\lart.Ínez Cuiti- niki) 1/0 tl/vil'1'on la 'I'I:'S01Wnela, rl'i los liza requisas coronarlas a veces de un franco éxito;
lo que merecen. Y 1m; autores (contratados) están ño hace eomedia;; hlaneas. lVIartínez Paiva escribe ·resultados correspo1ldientes ({ los es- lleva siempre consigo una honda 'que :;;i1''''o para
bien lejos de la mÍ.'ierirt de aquellos lejanos tiem- para cualquiera... Tal (Os la situación del 1 teatro fuer.?1J8 empleados. Pues el pocler pu- fines eon~abid()s. No fuá aceptado al destacamen-
posen que se pagahan 30 y 40 pesos mensuales. dramático. ¡¡tieo pl'rln(l1¡ecía en 1/ualOS de aquella to de "piouuers", por :;e1' propietario de un palo-'
:Elteatro naciorwl en crisis. dasc feudal contra lo cllal ibct dirig:i- mar con nueve palomas de varias clases. Deseo-
Algunos intérpretes i;e refugian en malas tra- da. la lw'¡w. El 'li/Ollstr1l0 (yeso q-ue
Un afán r1e;;medillo de lucro, y una invasión de Jwciendo en absoluto In,:; primeras enseñanzas, pa-
dUt:ciollE'S de obras fuera do la 6rbita de su com- se llaman "nobles" droviane) devoraba
analfahflto;;, han rú'ovot'ntlo la Criiii'l del teatro prensión. Y así tenemos d e,:;pe<:táeulo que ofre- sa sus ocios en la orilla del río. En el l1eriódico
sin lJiedl1d al[luna sus propios hijo., ocupa el empleo de Iolletinista.
nHciona1. een esas te.ntativas de interpretar u Eomard Saw, (Decemllristas, 8. Pero[lskaia, hija ele
Desde hl~(Je varios afios no se prolluce el menor San Seeondo, D'Aullunzio y tantos otros autores, .UIl príncipe). Pel'o la historia arrastra
l'm's()t/-aje número tre8. La hermanita "piollller",
síntoma de reaeeión. -Los escasos bueno;; antores que n buon seguro renUlli'iarÍall n oscrihir si su- impá1!ida sn 11l11rcJw de progreso ha-
elemeuto cuya integridad partidista se relaja ba-
están alejados de esa ,actividad. . pieran cómo van a SN'· lnterpretado;;. cia nuevos horizontes, y la condena de
jo la accióll ele la N e'[!, ejemplo }lriÍetieo del peli-
gTO de de:wiaeiones pequeño-burguesas. Aferrado
Los que producen lo hacen única y exclusiva- ,. Habrá teatro de '¿'anguardia '?
muerte para la clase pctrClsitaria tuvo
que cumplirse. Le! clase productora de
a lo viejo, no permite que la venganza revolueio-
mente l)ara obtener lo necesario para vivir, sin lUtria se cebara en su muñeea proveniente del vie-
preoellpars8 mnyormente en dignificar un poco Entre tanto, In gente llueva vive alejada del todas las r-iquezas, conquista el po(ler
teatro. Y euando alguien, como pasó eon Castel- jo régimen; asimismo se oeupa eIi hordarcruce-
siquiera el despreRtigiado oficio, que aun los acoge. lJ constrllye utla nueva 'vida.
llUOVO, intf1llta prohar sm: fuerzas, hay que ver
.('ita~ en el (·a:minito de la mesa, lo que demuestra
R ArmAMsoN. un apego pequeño-burgllés.H las minucias de la
y finalmente, hay un ejército de onanistas· in- eómo se le echan eneima loo ('HItes ant~ 01 tml10r
telectuales y tipos de la más plebeya eondición de perder el hueso ... ensa; tampoC'o desdeña tUl poco de pintura, para
"El lector, leyendo el título. supondrá ya lUHl cuyo fin uso un cachito de lápiz ele tinta. En el
tragedia ,habitual do "mu'tua incomprensión", de perióc1ico tioue el plU:sto de "spetz" (espoeialista)
E D M u N D o e A p R A R A desacuerdos. No prejuzgue y no... desespere. No
hay tal tragedia. Falta aquí un personaje: la vie-
Cll la seeeión "economía doméstica".
E"tán, por último, el padre y In madre. Eran'
¡
jecita. Recordáis a la viejecita que ::lacude triste- éstos en un tiempo eontrarrevoluciollarim; redo-
mente sus bucles plateados'! (AqUÍ el autor re- mados, mas tuvieron que sometel'se a lo inevita-
produüü un trozo de la novela de TUl'gueneff. N. ble y "cambiaron los jalones"., No fuman mús el
,dc~ '1'.). . opio de la relig'ión y hasta llegaron n ... empeña¡'
Los estías,
cuenlos del natural por Abel ":''''i;., ..El viejo general lleno ele ira, 'levantó
la mano· indieall,do la puerta, y gritó:'
-"Fuera de aquí, inIame. ¡ Tú no eres más mi
sus anillos de compromiso. El padl'e conservó al-.
gunos resabio5 del viejo l'égimell; UIla Dieria ter-
nura hacia el líquido rectificado y una manera pe-
Rodriguez, publicará· en breve la Editorial Claridad. hijo!" culiar de agraviar II la madre de sus interlO<luto-
tlEl . ensombreció. res. La madre conservó otra mala costumbre ..
\ík
CLARIDAD CLARIDAD
pasar In cuchara húmeda por los labios d() los chi- ",; Quién (/,lI/U¡';J Antes do np[ll'ecer la "stenga-
cos, si é~h.Js (~olltetían alguna falta, aullt¡ne ruera
leve.
I!!i raíz tle las faltas meneionada;;; de los padres,
ceta", en nllf,,,tra easa reinaban Ullas costumbre;;
extrañas. Por la~ mañanas había mucho humo en
1:1 (~astl, las parede.~ negras y pI piso sucio. Mas, con
La Pintara de Abraham Vigo
aparecen l'evelaciones sensacionales en la ¡¡pren- la apul'i/:ión del primer número de nuestro perió-
sa. local", a(:u~ando u los blugueses odiosos de in- dico, toclo~ estos dest'll'lleue,c; han cesado. - .An-
La obra de ".Vigo tipne una earac:terística. esen- tortura uno en la búsqueda de las tonalidades mús
fringir las leyes revolucionarias. Los acusados no rora." eial: la rreSeUl'a, la transparencia y la rácil elUO- tlelieadas y pasan unos nlf1ses y el euadro ha per-
partici pan diroetamente on el "periódieo"; ollas y la madre enntesta surni;;l1 que 01 ehupete im- tividad. dido el eolor o ~e ollllegl'eee, como ocurre con los
publican sólo desmentidos. putado a tal ítem del presupuesto, será adquirido Los temas que ha ntneaclo uos ponen en con- aznles.
De modo, que el diario escrito con lúpiz de tin- en la primer ('ohranza. üwto no va directamente eOIl los personajes de Def:Ífi a este respedo el feliz escultor Agustín
ta, ve la luz. Pasarnos por nlto la seecióll exterio- La "piOnllCl''' pl1esta en la pieota por su proce- sus euadl'¡~s, sino eon un e;;iado de ánimo espe- Rigatlolli que no hay otra solución que volver a
res y el artículo político. Hay que reCOJloeer que d(!l' tlntiestatutnrio, promete ellrnendnr;.;e y encan- {'ial. los tiempo:> del taller y componerse uno mismo
en la apl'eeiación de los actos e illtcmeiollfls de zar~e por la. ;;cuda del bien. De todas sus telas, aun de aquellas que- podría- los colores. ~
Briand, de l\tIonzi, Chaulber1ain y Cook, hay eier- El llf't'lnano mayor entrega al tribunal proleta- mos llamar primerizas, f1uye una graeia especial Vigo debería ser df! los primeros que se l)repa.!
ta eonfusión. Jlila;;;, (~omo es sabido, e¡ora)"" humw- rio su honda [oou toda la provisión de piedrecillas. que es d resultado de la mayor silleel'idatl del rn~en el eolor, ya que su obra ha sido vista con
nHm esto En gr.neral nos interesa pref(~rentcmente El padrc hace una solemne prome,~a de no gas- artista rrente al problema pict6rico que se pro- ojos sensuales y finca pura y exclusivamente en el
~a situación intl'rna. Extl'ademos alguno;; tl'OZO~ tul' mú" eobl'anzas en las eervecería;:;, si, en home- pone. enlor.
(to este instruetivo periódieo. naje ti. :';u edad y costl1mhl'es, ~e le asignara una Vigo tiene una visión particular del color y ".En la playa" es un cuadro bueno . .Allí el pi n-
((i J.laclre! Hay qu.e p¡oeot:upal's/'. - E~tt) estlt l'ndálJ. razonable. tiene "golpe de vista". cel de Vigo ha impregnado de rrescura. El aire
mlly mal; Alejanrlríto no tierw eJmpde, y se ve De ahí que esté mús en caráeter en aquellas que e01're es limpio y amplio el horizonte. Hay
obligado a chupar un trapito ¡:011 pan Immede- Hnhréi,-; vi",to en alguna,; revistas cuadros de tHlail que podríamos denominar impresionistas, espueio detrús de las figura:;;. L05 colores de esta
cÍdo y nadie "e preocupa, eomo si C5to fues(~ nor- familia~ l'l'liees, satisfeehas, donde todo flOnríe: que no en las qUl' ha querido pintar hajo mlll tela son limpios, como es clara la idea del autor.
mal. La madre dche esforZarS(l para poner fin a pa(1l'e ,:;everamente aearieiador, madre tierna y te- sugestión rilo;;¡Ófiea. Vigo ganaría muchísimo si trabajara al aire li-
l'sta situación". merosa, hij os traviesos y mualltes ... En llllO de su.~ euadros, el tle mayor tamaño, brp con más frecueneia.
. "Nue8tra "pilllwer". La "piollner" no conoce las Pero resulta que habrá que hacer algunas modifi- ha eOlll pur.,tu un gru po de mujcres que represen- Pero es un homhre inquiet{), nervioso, que da
lcyes de su destacamento, A"aso, en el destaca- eaciones en dicho cuadro. tan ln,~ distintas etapa,; de la vida. En primer la impresit'ln de !lO haher hallado su canlÍno. Sin
mento enseñan n pintarse la" cejas'! Otra falta término ha colocado una criatura - la figura no emhargo, pocos eomo él saben qué destino (iene lo
grave, es pellizearse. A su muñ.eca no la pelliZl~a, a A. SORreR. nos eOllvenee - y esta es la edad candor y de las que pl.asma. -
nosotl'Os, sÍ. Diario de pared. i Ellsúñale las leyes muñecas; luego' haeia la izquierda hay una ado- Las tmbezas de ehiens nos lo presentan en otra
de "!)iOllllPr". - Firmado: Es{;re71a." ("Pra vela".) lescente. Sus ojos son prorundos y soñadore". faz distinta de ~ll compleja psicología artística.
Toda ella sneña. Y esta es la eelad del amor. Lue- Ya aquí el pilltor fija en el lienzo la, psicolOgÍa de
go, a la tlerecha hay una madre COIl su pequeñuelo "iertn,; ehicos ante los en ales alguna vez nos detu-
en el regazo: su primer sueño cumplirlo, Detrús, vimos ~on curiosidad. Esto;" se ve a las clara;;
como una sombra, ('OIllO Hu espeutro, pasa una que ~on dos pilletes. Aquel cara de mosquita muer-
vif;j n. el1l'orva dn. g~, (~nlll() diee el mismo artista] ta es tamhién un diablejo; este otro con su reba-
ANATOLIO LUNACHARSKY
s"
N16 ya no tengo tiempo de hacer versos.
.uns horas sun e;¡casas,
,v toda;.; se. me. van en' el empleo.
. Gi.ialldo dejo de noche 1:1 ofieina,
sólo tengo un deseo:
en el eSl'aparate de mis ojos .
Con euarenta centavos por fortuna
¿,Qué regocijo habré de procurarme
¡.;ino cuadricular líricamellte
ETO I L
lleg'ar a casa la 'empalagosa tinta ciudadana?
para ~alte t~n }.>e50. ('EL BOHEMIO" Se le n siempre en el eafé. Sc reUnetl \'
y que alegrl!l lllmensa ¡ Crueldad burguesa Lle 1m; edificios dEl la e;;peeie, esperando 1ft eaída ae un Mecer.
que impi(1ell a la calle el de;;perezo! Tiempo., felit;r,.; ¡[{lucIlos en qne SI' podía VIVIr un iug'ellllO (ille aea en ellos y pague la eonsUlní·
eUEln(lo al llegar Le veo siendo tln paso Ílmulo de Hodolfo, Channal'il y Co-
en brazos de mamita, t:itÍll.
CnanGo un monstruo mecánico " llille, los simpátit'(b per~onaje~ de In Iwrmo.,a 1lO· QIlC'l'j(;¡¡tlo imitar al bohemio, d bohemio no tra-
r,omo un cacho' do cielo. vela de l\Inrger ...
surea el férreo bigrama ele las vías haja. Annque ... (no te detengas, pluma) ¡¡
ru" sonrisa, hijo mío, eH una goma se precipita el tímido silencio Sin chula alguna 'ille ¡ü nuevo e:;pírihl qlw
'ua borra mis c1eiWell)s, viva rld trahajo ajeno - lo~ padres o un heL
a las alcantarillas aledañas, ha ido l11filtrándm;(' 11n el ('otidiallu tle~(;nvul vi- fjllO lu aguanta. - Para ealificll.l'lo podría
'que me torna nuevo ¡ providencial y :;61ido refugio! mi!mto de las aetividad,;~ del IlOmhr(), ha hedm
corazón. (lil'S'~ a un IJ(wlflgislllO: "vaghemio" ...
que la hohemia desaparezea )l(WO a PO(;o. Pero
,,1 -dí!l: barullero Mientras un viento descarado pUg1la no es por falta tIe soñadores. El bohemio tClJlH nstneia para vivir. Sabía inge-
, .traigo en él una ~onaja. por palpar con sus manos tenlblol'Osas ninJ',~p tIe uJil /lllllW!'aS pn1'n procurariie Ir' ..• <)-
Estos, jo;; ptpl'JlDS se(lientl)~ de horizonte, pxi~
l\i[i corazón: sonll,j a entre tus dedos! Al cuerpo codiciado de las ehicas de enfrente, tirán siempre mi'!lttrns en el l1lUlHlo haya algo ,,:tri'l y en "a~o" de; ti premio hasta... tra~ .
R eenlt está servida. las mujeres que pasan y "Otlstc, '¡II(; hahlo en pretérito porque igno::'!,}
bello que ar1mirnr, miülltras el amor y la hOll!hul
"oy han puesto en la me~a otro cubierto. festejan con profusión de c1ientes hay alg{1ll bohemio - d e In,;; ,],; Marger - T
no tlCilapllreZean por (;ornp]¡;1:n, mientrn,; huya
í ya pued0;; ¡;¡entartp eOll nosotros ... los requiel1ro::! de los buzone::; mártires. sernhradpn;~ ,le it1eal que 110 se eans!'n dl' p;;pm'"ir
ahí. DI'l !J1J!t1'lilio un !H\I]eIl10'i decir lo mismo.
mantel de hoyes nuevo. a todu~ lo.'; \'Íellto.' la ."¡miente llivinn: y así, aun- Rielli[Jrt' 1m triullfado o ;';(' 1m vi"to hien la be·
lVIi corallón quisiera treparse 11 ese tra~vílt que haya ltlll!'rto la bohemia, habrá bohemio" luia elUlIulo mnrehaha apnrejada sino al ?l';'
Il por lo mellO:, al talento. El b(J}wm'io 110 p~
e ir lt pn~eal' la eatre siempre.
as dormido en mi;; brazo;;; H la {mica amiga que ha sabido UlIO ni lo otro, aunque, tal vez :sinceramente, e,
Pasaráu a nuestro lado musitando entre dientes
anUls i1e ew, empapelarlo de romantieismo. un verso, fijos los ojos en el azul del eielo o en lo eontrarilJ.
,liste contando In;; e"trellas: la faz achatada de la luna. Aunque no no~ demos y e" eutolwes \'LUlllt]O é~te habla n boca He:
"bas la manitn, y con un dedo Un árbol fatigado de la Ilolwmin. sin salii, llUlwa, sin eambiar siqu:-
cucnta. Aunqlw 110 tengamo,; que volver la vista
afilahas: tres, cuatro, cinco, num'c ... se apoya en las e~palda" vigorosas ra de enf.!. Rceita Vf)l'ciOS dB Sassone o' de Cal'."
ante un rostro p~tTafnlnl'io, una melena enorme y
el'O hav tantas cstrellas cn el cielo al vigilante que masculla un traje heellO jirone~. Puo;; si ,IIOV lIO vistlm an- y tiene siempre a lUallO !!sta J'l'ut:csitu i:lú:;ifli.'
.lú éürraste los ojos. Las cstrellas su rosario ele frases malolientes . drajos ni usan' melena, llevan n~ul en (,1 alma -CuiÍ.nto diel'n por .~Hlir ae esta eiuda\~':
.,sUtn bajo tu;;; párpados. Mejor: y, como dijera un (,:ieritol' porteño, "son mele- y lHezquilla y an(br ~ill rnrtlllo ¡[¡~ puehlo en
.Los ineautos horteras
1.S contarás en sueños. uullos por ilentro" ... hl" ...
untan de miel sus miradas
\,- ahora pienso, mi niño, que también y las ofrecen al cariño fácil Nuestra bohemia criolla tuvo sus repn;."entull- Pero !lO ~(; va. No l'(~si:itil'ía los primeros
.JDJup.do estrellas aprendí a hacer versos. ü,.'; ilnstl'f'." Beh(éty, Goyeoeehen J\Ienélldez, Flo- y :-in ljlwlla I'l! su eafé, tranquilo, de llr
de las mucamas soñolientas.
RODOLFO TALLON. l'f'llt·io SÚlld]('z, Fernámloz Espiro... Quizás al- ';1' fll1,;¡mta para ir a :'in rasa a
y en un rincón del cielo guno má" f¡lIP no rel,uen1o ahora. Alma~ atormen- eomel'.
efltú. mohinQ el so1 cual si lo hubieran tadas por quemante y ctulée llama interior. Almas- Por eso, en nomhre tIe la l'om:-
El mendigo sacado a puntapiés del horizonte ... púj aro, amiosas de vola1', sedientas ele horizontes de lo~ melenudos ,le antaño, ueben'i"
de aInor, de p()o.~ía y de luna ... Bohemios, locos c:;to,; "bohel1lio~", eOIl toda el ahm,: .
erdona, mendigo. No eres mi hermano. CÉSAR TIEJ\IPO.
bohemios que llevan una constelación de estrellas - i Vayall a trabajar, atorrantes!
o saben los míos tender la mano en el alma, "el coraz611 borradlO lleno de vino y
"lpllra pedir ni para rogar; la cabeza loca llena de versos"... persiguiendo
viril y gallarda la extienden los núo;;;
,>cuando van a herir o van a sembrar.
Regimien(o siempre una forma inaleanzahle y, al huen deeir
EL ~lJIIORDAZ
de Felipe Sassone: "errando, vagando, caminito
¡ l\fendigo! ¡Mendigo! Paliducho y ajado, de la vidn, cllminito de la muerte".
¡ si sembraste trigo hace ya medio siglo que e3tá en esa bandera. lV{ezda de pedante e hip6"rita, ,,1 r,
exige tu pan! Ni ánimos tiene para abrir la boca teneee sipmrm~ a esa clase de tipo
j Y sino, mendigo, y bostezar su abulia. y si he hablado quizás un poquito líl'icamente humano que se distingue por la vacu.
recurre a tu amigo, Los meses pasa dentro ele un armario, de los bohemios, p"rmitidme ahora que' muestre la cerehro o lo que en otros término,; pOlL'.
tu amigo el rufián! sorbiendo aires ele pura naftalina otra faz de la me",lla. Es con e~te propósito que "una monda lisura mental".
En esta casa pobre v sin hablar. con nadie ... me dispuse a lllal hilvanar estos renglones. Merodea en bohemios cenáculos, en el')
,~uando haga falta un cobre, i Si el trnpo bicolor que lo aprisiona No qui~iera que se ma juzgue mal. No se crea café y hasta en simples tertulias fmnilianJs. Er,
han de irlo a busear no dice llunca nac1a! {¡He escriba influenciado por el espíritu práetico nuestTO argot criollo tiene un mote pintoresw,
los que sepan sufrir, y cuando sale, a vcees, de la época. Lo hago triste y ¡;;er('namente~ refle- y Hrertadísimo. U ste,l, ledor amigo, ~ habrá oÍtJo
los que sepan herir, -son de fanfarras, gritos que lo aturden .:donando en lo que veo II diario. Lo hago sobre decir alguna vez hahlanrlo de un tel'eero: "es ,un
los que sepan semhrad y siempre nI frento de hombres disfrazlH1os- ,:;. todo eon un propósito sano. Higiéllieo. envenenado" ...
SILVEInO F. VJ\SQUEZ. se aburre mn" mm. 1,. '" Por eso voy a c1ecir dos pLllabras acerca del y e;; a"í. Envenenado por dentro y VOl' ,fuern,
Ya no tiPIW eSllerallza;;; mas tiene una espe:rflmza: bohemio. destila Sl1 ponzoña en una mirada, en una sonrís'~,
Poeta ú~ aquel a quien la difieultad propia de que unos hombres vali~nh)s se ]¡wanten up3'filía y Este existió en todos los tiempos. Frecuentaha El aire ps veneno que aspira. De veneno se ali·
"1 ::l'te lo da ir1¡ms, y no lo es aquel a quien se las
y le ¡Jen una muerte dIgna de un sol: . quizás los mismos templos báquicos donde Lelián mentn y veneno digiere.
;¡¡bHtrae. Las llamas. vivía sus poemas y se embriagaba con el glauco {Jo deja escapar con sagacidall en sus palabms.
PAUL VALEIW. ARl:s'uónuw J]JTClmGARAY. veneno. Asistía de cerea y a Vece" se eodeaba con Sabe sonreir a tiempo cstricninescarmmte (; l' ~:
ellos en la mesa c10nde MOllteavaro, Charles de en esto se parece a las mujeres cuanclo habb
. Sonssens, Cari'iego, Matm:¡nta, Dai'ío, Roldán des· malicia de la amiga ausente.
granaban su verba o c1erJlb¿haban su rima. Pero a nuestras encautadol'as eompañera"
CLArUDAD,
CLA 'DAD
,t, lns dldiendl' su srxo. Si llO bablnnm mal tmn;;fonnailn en un earamdo, hu;,;ear en la 1'011-
';liS HllPtrügns... y de sus amig'as, no serian tPlIlplaeión dl'l eielo raso, la frn~e e;.;condidfl para
adorables. Cuando la mujer sugiere {é,OIl una ullaenrta de amor.
1"íSft o una hase de múltiple;;; int.>uciones el Si lo hostigiii~a defillir la frase zumbona o
,\ flaeo de mm rival, si no es bOltito por lo aleve, si lo al'l'ineonái" ingeniosamente en el calle-
;:nos es rpspetable. Les. mnpn.ra la misma super-
ficialidad de qne hacen gala. Pero en el hombre
11'/"1 sólo I'S intolerable sino' repugnante.
jón :;in salida du la frnnqlH'za, rnauote¡(l'(\ cobar-
denll'llte como un nllOgado .y üll10darÍt al ausente
1) ,.,alpi¡·l1l'tL al mÍls débil tic los que estún eon él.
NOTl 1 S BIBLIOGIlAFICA~
Sin embargo el ellvelH~nado - lIumémosle así - Porque ntlemás ae cobul'lle es vil.
cree siempre posoer una sutil agndpza de espíritu COll UIla sonrisa, con dos palabras sin sentido
.. 1w1:.s1 'e:;to es poco a YCees se ngrega el dOll pan\ los demás, hiere en el coraz6n al amigo que
11,- 1:-.'1 profecía. Con mm de",faehaü>z que envidia- tUYO la debilitlad de confiarle U11 secreto. MARINETTI. (UN ENSAYO PARA LOS FOS1- AMOR LIBRE Y SEXUALISMO SUI.
ría Moisés o Mahoma, siente siJl(~eramente - quie- Si el mordaz ha leído lt Shopenhauer, VoltaiTC LES DEL FUTURISMO), por J. Salas Subirat. por F. Armand.
TO en'er!o de e:-ita mauera - estar predestinado a y Vargas Vila, o enalqniera tIe ellos indistinta- Editorial Tor. .
K;te libro, llor' todos conc,¡'!ptos intex'.
<'Omo una madmne de l'helws I'ualquiera a conoce.r mente, eil inaguant.able. Porque barnizado de una El libro que Salas Suhirat 1m e~e.ríto sobre 1\1a- bolo .por el grupo "Gener:aeión eonsck.
(J inte ]Jl'etul' el pemamiento de los que le 1'0- seudo eruc1ieión tiene siempre a mano una frase l'Ílletti tiene una pre.·iosa (mnlidad: la dHl buen Vnlenein, está dirigido a~,·, pueblo en U!c:
dea~", sin que ésto,; se hayan dignado elarlo a co- apreudida que aunque no tenga nada que hacer ~entid(,. f'fl que abunda la literatúra poruográfic¡'
,!,,;(lE'r. Y corno es natural, casi siempre hace plan- en la conversaeión, es lanzada eon toda la aut.ori- Es eom(ul que se propongan estos temas perso- IlHH1tt~ imaginativa, en todas partes déln.:'
ehas ridículas. dad de su autor. nas que tienen más (}(' litpratos Cjl1e de hombres y e~p('eialment(j en Espnñn.
Pedidle su~~nión sobre cualquier eosa al ll)Ol'- Como el critictin - tipo que trataremos en' otra nntumlmellte, resuelven pstO!; prohlemas de la ma- A sanmu- en lo posible pI ambiente,., ene.-.
düz. Se eom-éntará con encogerse de hombres y oportunidad - es una Illuestra representativa del nera que llIÚS tonviene a la ret.órica qnc profesan, "U~ ~Sf1.[(~VZ03 10,-; eOlJlr(}~.ente" de este grur.
~onre:'lJqion suficiencia. De cualquier cosa que sea. fracasado, del wlativo; de ese qne, incapaz de despojiindose de toda humnniílad. ·tmal, editando libros eicmtífiros. El que te'
S~.. se'" trata. del sexo opuesto adelantará un - hacer o de erear algo, aspira veneno, lo esparce Con muy hlHm tino Sala:,; Subirat ha enearado n la vista, de F. A.rm:llld, qne no vamos a.-
111!. ". - despeetivo y pondrá el rostro avina- como el tísico sus bacilos y vencido, imponente, la personaiir1ad del creador del futuriBmn - que tUl' por !lO "el' dn nuestnl p:-ipeeializaei6n
Ido. Sin que esto sea un obstáculo para verlo desesperado, lanza su eseupitajo al Sol! ... acaba de fraeasnr eIl nuestro país - ¡¡PSrlf' un ¡'Ulll[llt.~ ('.,te prop6·:;itn en todas sus partes.
,.lquier día de~euidadmnellte, parado, eon las punto de vista muy humano y pOI' esto rná~ iute-
hOs en los bolsillos, eontemplando ávidamente DOl\UNGÓ TORANZO. reiiant(·.
lp~erna5 de una jOVfll1 que sube al tranvía o,
JUDIOS, por Israel Chas de Ohruz.
Rosario 1926. Su inqmrc:ialidad y su serenidad en la crítica
sif'Hlpre ;",vera pero sipmpre ,justa. haeen de esta Israel ehas de Clnuz se inieia COIl unW,
obra una de 1m; más apreciables qne se hayan pu- llmhient¡, judío muy pintoreseo. Es un no'
hlien.lo en nuestro medio sohre esa tan debatida r¡,alista qUA posee buenas ¡,nalidades. A"
eueRtión i1el arte nuevo y de SUs figums prinei- nos equivoquemos insinuándole la conYenie.~
patl'ioti:5IllO hay crueldad, codicia y envidia. En pale,;. eultivar el cuC'uto eorto antes que la no\'" "
",,"_. Patriotismo nombre del patriotismo :iC cometen todos los crí-
menes. Eneñamos al niño H suspender toda noci6n
de justicia cuando ~e trata de su patria. Su patria"
Además, lit daridad (jan que f'xpOl1e su pensa-
mÍ!'llto y la do(~uIIHmtación en que se apoya eOIl-
hien es cil'l'to (lllP, el enento, e& de los génr.'.
tel'arios el mús <lifien!toso, ehas de Chru.:::
eUlllid~liles de ohservador I)(leo I.~onmlles, la;',
tribuypu grandemente a haeprla más provechosa.
i(lmt de patria ha perdido mucho de su viru- es decir, mi grupo efímero ele hombres, es supe- EIl plla nos muestra al Marilletti ele la hora ~e pOlH>1l de manifi""to en "Una vida", en
"> Los clioses, hace ya tiempo, se inclinaron rior al llniveriiO. Hay que sacrificar las vidas y aetual, que os el tipo representativo (lel fanfarrón ll1udmeho" y particularmente en "Judíos". f¡
lopolitismo. Jesús fué mal hebreo, Se en- las conciencias. Por ella el rano se vuelve honroso,. italia.no, "degenerado que en su ansia d(~ ereacio- una nnrraei6n ele inquietante veracidad. ' "
m lo.~ gentiles, y hablaba de paz. Asegll- y el engaño, y el homicidio. N o existe patria ,qne Hes, por dar libertad a las palabras se olvidó Nos vemos constreñidos en estas páginll..->
'. ~1(l (,l'a neeesnrio ser judío para salvarse. no sueñe con el irnpeTiali~mo, ¿, y en qué se dife- de su pnr.hlo que tan necesitado de libertad es- unn somera notieia bibliográfica; ele le ¿UD
:rana así en defensa propia. Vineu- rencia una patria impel'inlista t1e una i"lladrilla de' taha". adelantaríamos al ledor otras muchas cosa:>
"6us, fiadora de ella y obligada a ladrones'! él puede eomprobar igualmente levendo el:
'laelo, su situación era comprometida. En que es m:'Í.s numero;;a ... en cuestión. '. ¡
\legido reeihía más palizas que ningún P ASATIIlMPOS LING"ÜISTIOOS, por don Ricardo
~)llés de cada una, las explieaeiones ('on ¿ Sois e(lIlqui~tadore;;fuera '? Seréi.'i esclavos Monner Sa.ns~
e hacían lJenosas. Durante los siglos cris- denh'? Cnant~, m~s patri?tiea es mm. pntri;t, más RELIGIAO DO AMOR, E DA BELLEZA por:r.
En' Hmenísimo estilo, casi siempre humorístico! ría. Lacerda de Moura.. Brasil. '
"''1 cambio, las naciones europeas no se lleee~Jta del o,JcrrIto y lílas se asemeJa a el. El
dC''l' Rie.1l'elo Manuel' Sans, que a los setenta años
\11 sin solicitar antes de un mismo dios la ejército encarna la patria; es la organiza/Jión de Leyendo este libro ele la valiente autora d,~
es todavía celoso Cel1tillela de nuestro idioma, nos
con la misma confianza. La Providencia la esdavitud de los eueq)os y de las almas. Es da un nuevo libro donde se aclara y discute el sig- mulher e nma degenerada", nos encontramos
lIupre; jugaha de bánquero,no de pun- la e;;clavitnc1 dohle; el cuartel refunde el convento- vamente de frente a un espíritu rebelde, Sill'
nificado de algunos vocablos usuales. en nuestra
ía emancipado de las contingencias del en el presidio. En las patrias muy patrióticas, los 'eonvel'saeiól1 diaria. por una potente intéligeficia. María Lacerdn
l. ciudadanos son rcdutas, dispuestos a matar a su Su autoridad iudiseutida en la materia y el lVIoura es una idealista en el mejor sentido; .1;
,; nuestra arma ~ La l'Ícncia. ,~y qué e,; macIre si el caho lo ordena. Los pobl'estienen p a l a b r a . ; '.
gusto que en desarrollarla pone, hacen de su. li-
a nacional"! Una mentira. La ciencia se patria, pero les falta pAll. Si leH elejan, emigran,. brO una obra útil para enantos se ven necesita- l!n espíritu revolucionario, aus1oso de nup.
tJ¡we p, .. 'In ímanimic1ad y para la unanimidad. hartos. de patriotisIllo y de hambre. Los qne se dos - y en nuestro país son muchos - de corre- hOrIzontes. Ella, como tantos otros que deberÍo
quedan empiezan a pensar que tal vez sus malos gir las expresiones que emplean con impropiedad. conocer, no se propone finalidad má:i concreta
El patriotismo se cree amor y 110 lo es. Es una "e remedian c~()n un pooe de euergía. servir a la verdad. .. '" . .'
ndensión del egoísmo; es una apariencia de amor. ,;, Qué es un oficial que dice que sí ante cien En un hermoso capítulo que titul~ :1:..(t ·171[;.
Sería muy natural amar a los mús próximos, a soldados que dicen que 110 '1 Así hemo;; visto en let hetaira elice.: ". " .La hetaira no es un tipo 1:
'"IüN mús semejantes de nuestros hermanos, a la Barcelona un regimiento negarse a SOl' embareadof VERGELES LIRlOOS, por Alfredo O. Fra.nchi. te: no hago esa injusticia n la mujer. Salvo Cit·
para :Marruecos. Hubo. que regresar al -cuartel. Montevideo.
tierra '. '1111\ nos sustenta y al cielo que nos cobija. pat?lógieos, monstruosos, que afectan a. hombreE'
'I?t!l'Q eso no es patriotismo: es humanidad, El Generalizad, y la guorra habrá eOllcluÍ<1o. 1.. 08 versos de este libro son de corte clásico y de mUJeres y que son del dominio c1e la meelicil,
. I.mor irradia hasta el illfínito, como la luz, mieu- Porque los p:¡,oletarios estarán en contaGto in- un romanticismo qri~ . por fortuna se ha perdido de la higiene y de la sociología criminal, las Ji
i,ras el patriotismo cesadal otro lado ele un monte, tenuwional siemprc; más íntimo, y cuando los go- en la noche de los tiempos. g!l;~ sociales y .mús. partiéularmente la prosf·
,le un río, do una l'aya sohre el papel. El amor biernos se declaren la guerra, los soldados se de- Extraña que haya todaVÍa quién hable de "sua- ClOl!, es una slt.naclOll. a la que es lleva(h
, une ¡ el patriotismo separa. Un patriotismo que clararán la paz. Los mariscales 'tendrún que batirse- ves~uras", "copas impurasl',y qi.lién desee "un mUJer por la organización social."
1!,1 n liara al extranjero, sería' amor; uu amor que solos, lo cual no sel'á.grave para los intereses de penSIl de'perennale.~:flores, lejps del necio delirar Esta sola. eita puede dar una idcalle la t
ÍC:m.e en 'la frontera, no es ínás que odio. la civilización. , . del irll1ndo}'~:!. . ..... ,¡! ( l)rensitin de esta mujer, que es necesario d~
. :opt-Plotimno e;:: odio; hijq ,le1 mi.edo, Rl' 1'1 ''F!1 libl'o,:El11(:'!sí"lec18,.ser~Í';,¡l1'ás malo r' nús (~ar pc;r ser tan escasa eS'c,a v~rtlld entre el gr:
",iaJ. .r,a,: Iud JI\(' ('(1 'i{'lúbl:¡ 'h ememl1o
llal?? 'tÉrJ!MUIIIIII!llUI_r .¡¡!!I! "
CLARlDAD
omo el que nos ocupa deberían m1úOl Desde lo mds profundo, por Torcsu l~. Grossi.
n todos los pUÍi:les. No deberían faltar An[!ustias, por Constantino C. Fragua. .
¡'es ni difundidores de estail ideas, eomo
::esperal' que no falten en nne"tro país.
El esc'/tadrrln de los escopete¡'os, por J. H. Flg'ueroa.
Sombras Vl:vas, por F. Orlando Rossi. .
C1'ítica positiva" por Salomón Wapnir.
Versos a la calle La canción del
~.A LA GUERRA, por Julio Goutaudier. Abrojos, por ;Jlllio Ramón H,uíz.
Pétalos, por Roge1io A. Duro.
Rivadavia estudiante
itlelts qU(~ el autor sostiene en este folleto Yidas perdidas, por Leonidas BarIettH.
Del amor U de ¡(Lvida, por A. Espinosa. Enoetosílahos el 'c,~os l\fuchachuela frívola,cllya carne fresca
~piradas por "n amor a la humanidad, cuan-
se .les dieta el sentic10 común. Crepúsculos Ü(! 01'0, por M. Aleil'a Domíngue7.. que se cantan con guitarra, nido es para el ave que en mis ojos -vaga:
argumentos de l{lle se vale son contundentes El cántaro !f el alfarero, por F. F. de Amador. vaya decir el elogio . hoy, por tu í'lonri~a d111(~e y picaresca -
[,os últimos ¡lvi/a, por Carmen Luna.
sfuerzo por expresarse claramente ha (jonsJ~· , la calle Rívadavia. en 1a que nu. Joven
. , nan f raga,'
COl'azon
¡propósito. A ella le debo el sol
-,---.- que se me pega en la eura, olvidando el viejo libro alucinante,
mISMO, Iiorearlos M. Vergara. cóJ;do<ba. el sol que ya no es de todos este vieJo texto rígido y prosaico,
:lihro tiene un"\~ubtítulo que diee: Nuevo
¡a:fi}os6ñ~o. C1'eíatn~s qUH este afán de 1'e- MATERNIDAD ;y que Dios a todo;, manda.
Ca11e de amplitud campestre
l.mtre (luyas pá:ginas bostecé un instante,
te diré mi canto licencioso y laico.
Já1:Jiil<¡sÓfía haMn terminado con la novísima y larga, larga, muy larga,
í,sé': (falhi,eh:pero Vergal'tt que espera, según Para 100'1'l11' l1e o·tll' hasta mi fría hulwrdilla, >10- Muchachuela alegre: siempre tr. prodigc
dQnd:~ el viento, potro suelto,
. ~l ataquec1e los ¡nsanos, no" demuestra lo litaria y ~H\llOrál~iea, comencé a ¡;ahir los inllu- se arroja enmoen la pampa.
piropDs vulgares, desde mi venÚma ¡.
tl'a;rio. . mül'ahle~ (!.,;en!()ne.'i (ie una lnfiuihl, y tenebrosa y si por las calles, risueño te sigo,
e~düera. Los tacos de m{s decrépitas hotas, con-
.Eres el cauce de un río
tu pOl'11z6n salta CDmo una campana ...
'. '1$9UELA DEL PORVENIR. por Rodolfo vcrsaban (,on los peldaños en el idílico vocabularIo por donde, locas, se lanzan
..J.opiS. de la~ pa 1aR y 1as f·ll~a".' m·t . d'~a. que er'(~l'
..l an o, aseen
a conquistar {~I centavo eomo una campana que, en la hetorodoxa
odolfo Llopis eB un earíñoflo comentador de !l(.'erearme (l Dio;;, pero no senha el d1VlllO (jalor, ~Btas gentes apuradas. ulÍ.'m 1101 Pecado, se pone a bailar... .
~elo Patl'i, que es 11U ap6stol de In moderna sino que el frío acal'ieiáhame con sus est:iletes pel'- No eres caIle de negocios, j Como una earopaDa pequeña y nerviosa!
agogía. Dice Llopis: "La eiieuela, engenetal, ver:'!amente afilado;;. Los esealones¡;e sucedían u. ea,Ue de la demacrada, (Yo. " soy el badajo que la hace sonar!)
tilia cosa muerta. Vive de espaldas a la vida, tras otros eOIHo mis lóhregos recuerdos... Cineo que a partir de Plaza Plores
"~ontaeto con ello. Por eso suncci6n no e.;; fe- días que fnltabn de mi pieza ... Después de ¡¡{lue- surñas y te haces ronlántÍca. Sí algún viejo yorde, con ansias iDlpuras~
". Pntri quiere que' la pSI'lU!la se vivifique. lla tragedia, do mi J'úb111a ,;entimontal, habías:. sigue do tus pierna::; la danza triunfal,
y "c<;ullitan lo.~tiernpos
quc la vida pellrtre en las eln;;es y en los adelltra~lo eil mi coraz6n tal angustia que terní~," eon risas hurlolll1s, ~u loeura curas,
de la cscuela y que "ea ella, la vicln, quien la ilolpdarl y hU."calm la compañía de mis ellmara· . amor en las -ven tanas,
cuchillo en la eintura, mientras lo consume tu fuego sellfH.¡aI. ..
"de la diaria labor." da,;, trasnochando (~on ellos.
'.1 lectura de este libro es recOllwtlllabh! pal'tieu- ... y llegué tl. mi pieza. , la cancióll y la guitarra. Bu mi vida bolwmi:L de alegre estuclia¡1i:<.~
riente a los mae;:¡tl'O~. Pretendí entender una vela pero recordc que En los primero de Mayo te da::;, eon !tl misma naturalidad
había iluminado lo bastante l'omo para merceer Harnean por tus calzadas eon qne dan ln~ eosn;:; su Ofl'\~lldH fragante,
:~:a.BMOTOS LIRWOS y OTROS TEMBLORES, In. virtud de no existir ya. Pobre vela... Fué Ull banderas rojas que gritan Hin que tu alma pierda ¡.;u virginidad
pOr Soler Darás. acpta que para huir de las tinieblas quemó se poeo RUS protestas sin palabras.
'JSlll1é" dü la ledura de e.~tr libro no" quedamos n poco sus propias entrañas... COllestas inge- Y, encendidas de ~nnciones j Oh, mi muchachu€la! Viéndote, com=~;:
ayunas como al (~OJnieIlZ[). Decididamente no nuas divagaciones umordazahn yo la;:; lamcllta(lid~ por qué lloran muchas, su juventud In¡Jt'L.
y enjoyadas de esperanzas,
·¡Uno,.; preparados para ('olllprewlN' (Jsto" a1>- nes de mi pohreza. lVle desnudé y me metí en el j Se les fué contigo, danzando y rien~o,
rdos. entre ... Lancé un grito que fWltigó hOl'l'iblemelltL, croando el futuro
Pi "ileut:io ~epulernC del eao;et'ún. Mi <merpo había, proletarias. y les quO{ló el alma desierta, clesiert;t ..
L. B.
dlOl~ado eontrn algo .muy frio. 1Ib nUlllo~ (\l'i.spn- Hace veinte años que vi-vo
das, trémula~ por rl terror toeúhllll .. palpahan ... en la calle Rivadavia. soy tonto! Ya me pongo triste.
j Mira si
y. Gaspar L. Benavollto O~ un considerablE] poetn, j Dame tu alegría cá,lida y frutal
<rigly humano, muy emotivo. Ha tIo despojarse de ncaridaban ... ¡Si habré salido a la puerta
g;,l<lUa;; expresiolle.~ triviales y dejar de lado algu- - j Sí!' i Sí t •.. es un nifto ... un hebé ... a que el sol me dé en la .cara! y mis diez yoeho prima.veras viste
aS muy trilladas. Pero, como muv hien dice 'Lentamente mG arropé para ir a pre"enUll', la Ya no conozco otro patio con las quince rosas que hay on tu rosal!
~)hmbé;g, . el prologuista, son canciones fresca3, delllllwin, eorre"polldiellte. Creo que mis ojos 'ee,..·
que csta -vereda tan ancha,
tllradas de la armonía de la Naturaleza y del l'rado,; lngrimNlbnn .. . Cuando por las calles te sigo de prisa
,hiloso iníJagro de la .;vida. • -,-Pobre madre ... Yo soy el culpable porque no donde jugué cuando pibe y te "soplo "alguna palabra insinuante,
l?enaVtmto es maestro en In .Patagonia; allí la vine unos días antes.. . No hubiera muerto de con lOil chicos de la cuadra. siempre me contestas, con una sonrisa.:
,t'f,urnleza, lo exeita y 10 inspira. j'l'ío .•. Y arrimado 11 este arholito, - " j No puedo atenderle, porque es estll,li:, d ~c
COl1leneé a desecmc1er la fJiilmlera infinita. .. Los s.entÍ las primeras ráfagas
0& GRACr..é, DE HELICON, por Ricardo M. taco;; de mi;; bota" y los P~(!!l10l1l1:3 reinil"iat'oll eon de inquietud que me traían y no dejas nnnea, j eo.''l1lS de la VIda!,
Lla.nes. mÍl~ bríos su espedral diálogo... .. la..'l mujeres que pasaban ... de darme tus labios, cual frntofragante,
'El autor de este libru mi ya. eonoeido del públieo ' Mi c01'az,~Jl que fi,iempl'll, me tOl'tUl'(.¡' COIl .s~s .bu¿¡~'· Sobre .estas misma:;;' baldosas aunque digas luego, eon voz dolol'ia4:
y~ . sus anteriores producciones: "De las horas fonadas,dlJome Hin, al Oldo, euu ntlllo lrolll~!,"'" dejé caer la mirada - " i No debícl'eerle! i Si era un estl1.di ap i
• ü8adas" y "El hijo muerto". Este es, pues, su -Tu eobul'lle e:;eeptidsltlo, ehoen v e}le deJ1ilio~ cuando a entoldarse de angustia
tereer. libro de poe;;ías. ' tudo unte el H:'lpeetáeulo Illuravilloso' y. divir¡:f' de mi pobre pecho empezaba. Con distintos nombres te eantq¡:;'el poeb.,
lu maternidad... Atel'1'ol'izado la res . con Todo: ensueños y proyectos, que vió, en ti, la eterna fuente ,del Deseo:
LD3ROS PROXIMOS A APARECER devoeión .• , y "ahes. .. la l,nuj el' no es< 1118,. 9 P()~~
En~1'e l08 muel·tos~ llor ElÍn;; Casteluuovo. alegrías y' espeta:nzas, obrerita en Londres, en Par' griseta"
qaf¡cíon~s mínimas, pol'1V(arcos Fing·erit.
altruíslllo, sino ineol1scientenwnte, POl"', E.j3cado. , 1 los matal'OU'lros autoil y ... ¡Dúz ;1) Heü ['video!
~,máM8 4,t. terruño) !l0r E.Pérez Colman. JIilANm;r; K~~t;íBAU¡;L caIIeRivadavia. t ••
Ji.t;'J7¡d ,en lOi¡ labios, por E. M . S.Danero. ;ti' J¡ll
GUSTAVO RICCIO. JWBERT.
'IS f>'a:;jqros que lloran, por H. Pedro Blomberg.
. ó;(¡/icha,y alcohol, VOl' Fausto Burgos. El segundo
tiJ,e,<.H~W'l'P(N'JJ .11,,01' Alfredo R. Bnfano.
POESIAS de Fernandez
111
Splr(J
DESPRECIO DEL MISTERIO
Aunque me' veas así ¡ Oh, Dios! clamó con fervoroso acento,
de hurdo paño vestido, tú que sabes mis íntimos dolores,
llevo en mi ser esconllido tú que ves de mi, pena los horrores
lo que te hace falta a tí. y 1ms regido mi triste pensamiento,
Anoche (mando te vi en estas agrias horas de tormento,
-proletario del sentido- viajadas por fantasmas tentadores,
tanta.' lástima he tenido aylídame, Señor. lVri;; sinsabores
qne de lástima me fuí. te habrán dicho de mi hondo sufrimiento.
Tú, personaje de feria FORca la noche. El huraciin aullaba.
que, en la más negra miseria Trepidante una luz, un Santo Cristo
de talento vivh'ás, en perfil afligel1te recortaba.
sabe opulento mendigo y rasgando el silencio, cruzó escueta,
'Ine l!omparado conmigo ia irónica figura de Mofisto,
,d¡tí¡ de~nudo valgo más. alargando en la sombra su silueta.
OOR CORDIUM DEL MUNDÓ
Oh! noble entraña de sufrir cansada, En la ufanosa brega de la vida
mi ,;¡.ltivo corazón, que otrora, fuerte,. se gastó mi pu.i'anza estérilmente.
ol~u~i~te a los golpes de la suerte Son los rugosos surcos de mi frente'
tll heroica fibra en el dolor templada! las cicatrices de la interna herida.
l'iÍ,que,enmi errante y árida jornada Con la fuerza estruendal de la caída'
triunfar supiste de la misma muerte, que va al despeñadero {ln el torrente,
yh('¡j' insensible, anestesiado, inerte, así, audaz, impetuoso adolescente,
ya ni riges mi vida desquiciada: rodé al abismo de mi fe perdida. í~
'fíen!':;; derecho a descansar. Reposa, Mas no la lucha mi altivez abate.
si t'e ngilté en las diástoles divinas Crecido en lo!'! fragores del combate,
de al: triste existencia borrascosa, sé lidiar la victoria del destino.
quiero hacer tu apoteosis. Entereza Hay en mi vi.ejo escuela de pelea
gaarda almpara arder sobre tus minas el vigor incoercible de la idea
el inc~.~io genial de mi cabeza. y el temple del alfanje damasquino.